EPIC - Abril 2007pág. nº 4

E-PIC

Hacer llegar la asistenciasanitaria a lugares remotosha sido, históricamente, unade las primeras aplicacionesdadas a los avances en lastelecomunicaciones.

La carrera espacial supusoafrontar nuevos retos, queabrieron el camino para eldesarrollo de nuevas capaci-dades de transmisión deinformación y, con ellas, laaparición de nuevas áreas deconocimiento en salud talescomo la telemetría y la tele-monitorización de constan-tes vitales. Es en estemomento cuando se acuña eltérmino de telemedicina,entendida como el uso de lastecnologías de la informa-ción y las comunicacionespara proporcionar o sopor-tar la asistencia sanitaria,independientemente de lalocalización de los profesio-nales que ofrecen el servicio,los pacientes que lo reciben,la información disponible ylos equipos necesarios).

El impresionante avancede las TIC en las siguientesdécadas, unido al desarrollode unos sistemas informáti-cos de gestión de dicha infor-mación cada vez mas poten-tes, condujo a que las aplica-ciones de telemedicinacomenzasen a implantarseen escenarios reales, dondelos pacientes tenían un difícilacceso a la asistencia médi-ca (catástrofes, escenariosmilitares, zonas geográfica-mente aisladas, barcos y pla-taformas petrolíferas). Laconjunción de diferentes fac-

tores como el abaratamientode los sistemas informáticos,la extensión de las redes decomunicación y la extensiónde la red a toda la poblaciónposibilitó que, en la últimadécada del siglo XX habláse-mos ya de la Sociedad delConocimiento. De formaparalela, el término telemedi-cina fue desplazado por elmás amplio de eSalud. Así, eluso de las TICs en salud yano solo se basaba en ofrecer

acceso a la atención sanita-ria a las poblaciones másremotas, sino en posibilitarnuevos servicios que noestén limitados por factoresde tiempo o espacio.

De este modo comenzarona aparecer experiencias detelemonitorización en tiemporeal, descentralización deservicios (radiología, patolo-gía, consultas especializa-das), programas masivos deeducación y promoción de lasalud a la vez que surgíannuevos sistemas de capacita-ción y formación continuadaprofesional, y redes colabora-tivas de investigación.

Desde que estrenamos elnuevo siglo, se siguen poten-

ciando los factores que posibi-litan que las TIC y la saludsean ya un matrimonio indiso-luble: redes de cable casi ubi-cuas y cada vez más potentes,sistemas inalámbricos, microy nanosensores, hardwarebarato y de gran capacidad, yacceso a Internet para todos yen todas partes.

Esta impresionante reali-dad y su potencial crecimien-to geométrico para las próxi-mas décadas, esta permitien-

do que la medicina reelaboresus enunciados, y los servi-cios sanitarios se organicende nuevos modos.

Así, el paciente -su entornoy sus necesidades- estánpasando a ocupar el centrode los sistemas de salud, lapromoción y educación parala salud comienza a ser laactividad sanitaria más efi-ciente y aparecen experien-cias de hospitales virtuales,basados en la descentraliza-ción física de servicios y eltrabajo en red.

Las aplicaciones basadasen Internet permiten, no soloel acceso a la informaciónpara pacientes y profesiona-les, sino que existan herra-

mientas colaborativas queactúen como comunidadesvirtuales basadas en los mis-mos intereses y comunidades(web 2.0) y, finalmente, quedicha información se articuley personalice, conforme a lasnecesidades y capacidadesde cada usuario (Web 3.0).

Sistemas de asistencia do-miciliaria, plataformas parala gestión de crónicos, dispo-sitivos implantables y vesti-bles, nanosensores, sistemasinalámbricos, web semánti-ca y agentes inteligentes,educación para la salud,inteligencia ambiental, siste-mas de ayuda a la calidadde vida WIMAX, GRIDs,...son todas ellas líneas deinvestigación sobre las queen España trabajan centrospunteros como el InstitutoITACA o la UniversidadPolitécnica de Madrid, conun alto porcentaje de inge-nieros de Telecomunicacióny cuyos frutos se irán intro-duciendo de manera naturaly progresiva en nuestrasvidas los próximos años.

Nuestra situación de privi-legio en el contexto interna-cional nos permite vislum-brar el futuro de las TIC apli-cadas a la salud con granoptimismo y buenas oportu-nidades, tanto de una pers-pectiva de I+D como denegocio. Podemos decir queen España, en salud, el frenono es ya tecnológico, y elfuturo dependerá exclusiva-mente de los centros de deci-sión, tanto políticos, econó-micos y médicos.

Aplicaciones de Telemedicina

El avance de las TIC unido aldesarrollo de los sistemas

informáticos de gestión ha permitidoque las aplicaciones de telemedicinase implanten en escenarios reales

SECCIÓN CENTRAL

Sergio Guillén BarrionuevoDirector TSB-ITACA

Vicente Traver SalcedoCoordinador TSB-ITACA

José Ignacio Basagoiti BilbaoResponsable médico TSB-ITACA