wirikuta
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wirikuta el lugar sagradoTRANSCRIPT
EDITORIAL
Editora: Gómez Carmona Diana Laura
.
Los pobladores
mestizos de Wirikuta
han vivido y viven en
una pobreza
lacerante resultante
del abandono del
altiplano potosino por
parte del Gobierno
Estatal y
Federal, generando
condiciones que
hacen imposible la
supervivencia por la
falta de un dinamismo
económico justo que
ha propiciado uno de
los más altos índices
de migración en
todo el país. Es en
esta situación de
necesidad y carencia
en que una parte de
los habitantes de la
zona expresan una
opinión positiva hacia
la entrada del
proyecto minero,
pues “el
dolor de tener a los
hijos lejos de casa es
muy grande, mejor
que trabajen en la
mina”. Sin
embargo la actividad
minera de First
Majestic Silver y West
Timmins Mining, otra
empresa
canadiense también
presente en la zona,
perjudicarán el
derecho a las escasas
fuentes
de agua, a la salud y
al medio ambiente de
precisamente estas
poblaciones que viven
en
la marginalidad en el
entorno de Wirikuta,
así como su derecho
al desarrollo
sustentable.
A pesar de todo ello,
hasta ahora ha sido la
actividad minera la
única opción de
desarrollo
planteada por las
autoridades para la
zona de Wirikuta.
La resolución de este
conflicto es de
importancia vital por
el precedente que se
puede establecer, en
uno u otro sentido,
para situaciones
similares en nuestro
país en las que
chocan
frontalmente por un
lado intereses
desarrolladores de
poderosos grupos
empresariales,
las necesidades de
una población local
acuciada por altos
índices de pobreza y
el valor
cultural que tiene un
área en cuestión para
un grupo indígena
que la venera como si
de
un templo al aire libre
se tratara. En este
caso que nos ocupa,
se ha organizado un
amplio
movimiento social
nacional e
internacional que
exige la intervención
de las autoridades
competentes para
revisar y revocar las
concesiones
otorgadas a la
empresa minera.
Para finalizar y
cuando escribimos
estas líneas,
alrededor de 200
comuneros Wixaritari
viajan a la Ciudad de
México para exigir al
Presidente de la
República que cancele
las concesiones
mineras y
agroindustriales –
otra de graves
amenazas que
vulneran la integridad
del lugar - otorgadas
en el territorio
sagrado de Wirikuta.
Confiamos en que la
razón y la
cabalidad guíen a las
autoridades
competentes a tomar
una decisión a favor
de un desarrollo
equitativo
sustentable, sano y
limpio que revitalice
el tejido social y
económico de la
zona conservando
íntegro para todos los
mexicanos el enclave
sagrado donde de
acuerdo
a nuestros hermanos
Wixaritari, “nació el
sol”.
LUGAR
La región de Wirikuta en el Desierto Chihuahuense de San Luis Potosí, ha sido escenario
en el último año de un complejo conflicto en el que convergen tres realidades que enfrentan
a los intereses mineros de empresas canadienses, los pobladores mestizos locales y al
pueblo Wixárika (huichol) originario de la Sierra Madre Occidental y reconocido por haber
conservado en gran medida la naturaleza de su costumbre ancestral y continuar practicando sus tradiciones culturales y religiosas.
Wirikuta es uno de los Sitios Sagrados Naturales más importantes de los Wixaritari (pl):
de acuerdo a su cosmovisión, Wirikuta es uno de los cinco puntos cardinales de donde
emanaron los dioses y al que periódicamente se dirigen en peregrinación las distintas comunidades del pueblo Wixárika para recrear el recorrido que hicieron sus antepasados
para dar origen al mundo. Wirikuta, que fue declarada Área Natural Protegida (ANP) en
1994, abarca prácticamente la totalidad de la Sierra de Catorce y se enmarca en la ecorregión del Desierto Chihuahuense. Su declaratoria se debe a la gran riqueza de los valores
bioculturales de la ANP que conjugan una gran diversidad biológica – la mayoría endémica
– y cultural, ya que para el pueblo Wixárika cada piedra, cada manantial y la integridad de
las entrañas de la Sierra de Catorce tiene una historia relacionada con el nacimiento del
mundo. A diferencia de los sitios arqueológicos al uso, Wirikuta está “vivo” y quien le otorga
esa vida es el pueblo Wixárika y viceversa.
En la actualidad Wirikuta ve amenazada su integridad por las por lo menos 22 concesiones
para la explotación de plata y otros metales que ha otorgado el Gobierno Mexicano a la
empresa canadiense First Majestic Silver Corporation. Estas concesiones fueron otorgadas a lo largo de los últimos cien años; sin embargo, y aunque algunas se autorizaron en
años recientes, ninguna fue objeto de consulta, violándose la legislación vigente en México (Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), tal y como ha sido
denunciado por las autoridades de las comunidades tradicionales y agrarias d
el pueblo
Wixárika de los Estados de Jalisco, Nayarit y Durango.
Wixárika
Wixárika de Zacatecas.
Población total 43.929 [1]
Idioma Huichol
Religión Religión basada en los chamanes
Etnias relacionadas Cora, tepehuanes
ACTIVIDADES ECONÓMICAS
El gobierno federal descartó que en Wirikuta haya actividades económicas que atenten contra los sitios sagrados de sus pobladores originarios, los wixárikas.
Al anunciar que no se otorgará ninguna concesión de explotación minera en la zona sagrada y se realizarán estudios para declarar Área Natural Protegida de Competencia de la Federación en
unas 200 mil hectáreas, los secretarios de Gobernación, Alejandro Poiré; de la Reforma Agraria, Abelardo Escobar; de Economía, Bruno Ferrari, y de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Rafael Elvira, destacaron el compromiso con el respeto a los pueblos indígenas.
RECURSOS NATURALES
Nada importa cuando el interés económico
es el único que justifica la explotación de los
recursos naturales, y si esta riqueza se
encuentra asentada en territorios indígenas,
el atropello de sus derechos es la constante.
Esto lo hemos atestiguado en México con el
caso de Wirikuta, sitio sagrado del pueblo
Wixárika o Huichol que en los últimos meses
ha estado en resistencia por las amenazas
de despojo debido a las concesiones que el
gobierno federal otorgó para la explotación
minera a la trasnacional First Magestic
Silver. Tampoco importa que el territorio
esté protegido por la Unesco, como parte de
la Red Mundial de Sitios Sagrados
Naturales. No interesa, sólo es prioritario
justificar que México crece debido a su
capacidad para atraer inversión extranjera,
convencer que estamos a un paso de la
modernidad y que el desarrollo ¡ya llegó!
TRADICIONES
Con el fin de proteger y conservar el territorio
conocido como Wirikuta, el Gobierno de la
República anunció medidas al respecto, entre las
que destaca no otorgar concesión de explotación
minera.
En la región donde habitan los wixárika, ubicada
en Real de Catorce, San Luis Potosí, es una zona
sagrada donde se realizarán los estudios
correspondientes para declarar Área Natural
Protegida de Competencia de la Federación, "un
espacio de aproximadamente 200 mil hectáreas",
se informó a través de un comunicado de prensa.
En el evento llamado "Preservación y Protección
de los Sitios Sagrados de Wirikuta", la
administración de Felipe Calderón reafirmó el
compromiso con los pueblos indígenas de
respetar su cultura, tradiciones, sitios sagrados,
autonomía, así como impulsar su desarrollo con
base en sus valores, que son aporte a la grandeza
nacional."
Una vez más el Pueblo Wixárika ha despertado la conciencia de la sociedad civil y a su voluntad de participar con acciones solidarias. En este caso, es el Aho Colectivo que se ha dedicado en los últimos meses a convocar a artistas de México y de otros países para realizar un festival a gran escala como es el Wirikuta Fest.
El Frente en Defensa de Wirikuta, en este año y medio que se ha sumado
a la ardua construcción de esta defensa iniciada por las comunidades del pueblo wixárika, ha recibido y agradece el apoyo de colectivos de artistas, intelectuales, personas y organizaciones tanto en México como en lugares tan apartados como Canadá, Estados Unidos, Alemania, Italia, Chile, etc.
En esta ocasión el Frente en Defensa de Wirikuta Tamatsima Wahaa quiere agradecer especialmente el esfuerzo que el Aho Colectivo está llevando adelante con el Wirikuta Fest, el cual tiene los objetivos de:
Difundir de manera masiva la problemática del pueblo Wixarika y la lucha por la defensa de su santuario natural protegido: Wirikuta.
Generar fondos para la defensa integral de Wirikuta y para implementar proyectos ecológicos y sustentables en los ejidos de la región, y por medio de estos, fortalecer los proyectos comunitarios y generar opciones laborales diferentes a las que ofrecen las compañías mineras y las agroindustrias en la zona.
CONCLUSIÓN
La reflexión sobre las políticas de conservación
del medio ambiente o el desarrollo sostenible,
lejos de circunscribir el debate a una cuestión
técnica, pone en cuestión las bases del
modelo de sociedad consumista que hemos
construido y despliega un discurso “radical”
a favor de otra concepción del mundo y de las
relaciones humanasLos mexicanos deberíamos
poder plantear qué beneficios esperamos
obtener por nuestros recursos naturales y
poder decidir dónde sí y dónde no y dónde no
extraerlos, y en Wirikuta No. No nos conviene.
Nos arrepentiremos si dañamos este sitio.