William Soto Santiago

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www.manaescondido.com El Mensaje del Evangelio del Reino

EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFÍCIL 15 de Dios algo, cuando ellos lo necesitaron, y son comparados con ovejas, que entrarán a la vida eterna en el juicio final, donde se dictará la sentencia, y la sentencia para ellos será vida eterna, y para los cabritos será el lago de fuego donde la muerte segunda, que es el lago de fuego, los destruirá.

Ahora, vean que en el camino al Trono que es difícil, es duro y difícil, habrá quienes nos darán la mano, y serán de ayuda para todos nosotros. Cristo enviará esas ayudas; y el mismo Espíritu Santo nos ayudará, nos fortalecerá, para seguir adelante todos los días de nuestra vida en el camino que lleva al Trono, el cual es duro y difícil. Pero con la ayuda de Cristo caminaremos todos los días de nuestra vida y llegaremos al Trono, y reinaremos con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad.

Bueno, que Dios les continúe bendiciendo a todos, que Dios les guarde, y hasta mañana, Dios mediante, en la actividad de la mañana y también en la actividad de la tarde, en donde esperamos grandes bendiciones de parte de nuestro amado Señor Jesucristo.

Para mañana ya Miguel nos dio los temas, que son: para la mañana “El Hijo de Prosperidad,” y para la tarde o la noche “El Intérprete de los Sueños.” Así que Miguel les confirmará de nuevo, bien, los temas. Estos son los que tengo aquí, pero Miguel les confirmará de nuevo los temas y los horarios de las actividades de mañana. Con nosotros nuevamente el Rvdo. Miguel Bermúdez Marín para continuar y finalizar nuestra parte en esta ocasión.

Que Dios les bendiga y les guarde y pasen todos muy buenas noches.

“EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFICIL.”

Este mensaje predicado por nuestro amado hermano William Soto Santiago

es distribuido completamente Gratis

“Y el Espíritu y la esposa dicen ven, y el que oye, diga: ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del

agua de la vida gratuitamente.” Apoc. 22:17

14 WILLIAM SOTO SANTIAGO pequeñitos que estarán llevando su cruz siguiendo a Cristo.

Habrá personas que ayudarán a los que estarán en el camino al Trono, y por eso es que surgen también dificultades para también Dios ahí enviar a alguien, el cual tiene su nombre escrito en el Libro de la Vida y confirmar ese nombre ahí, para que permanezca ahí, y no sea borrado, y en el juicio final aparezca ahí ese nombre y lo que hizo a favor de uno de los escogidos de Dios, de uno de los que estaba caminando en el camino al Trono, que es duro y difícil. Y al ver a esos hijos de Dios caminando en ese camino con alguna dificultad, con alguna necesidad, vienen y le dan la mano, y le dan una ayudita; esos le están ayudando a cargar la cruz ahí. Cristo no despreció que aquel hombre viniera a ayudarle a cargar la cruz. Miren, ese fue un hombre bendecido por Dios y tendrá un galardón muy grande en el Reino de Dios.

Si Miguel está por aquí vamos a pedirle una ayudita por aquí. Fue un varón de Sirene, Simón el sireneo, y tuvo un hijo. ¿Cómo se llamó ese hijo? Rufo y Alejandro, y fueron creyentes, y fueron ayudantes de San Pablo. ¡Miren cómo Dios lo bendijo! El que ayudó a cargar la Cruz de Cristo ahora tiene dos hijos que están ayudando a San Pablo en su ministerio. Sigue la bendición para la descendencia de ese que ayudó a Jesús cargando Su Cruz. Y de seguro esas personas que ayudarán a los escogidos van a pedir por sus familiares, y van a pedir que los escogidos oren por sus familiares, para que Dios los salve, para que Dios se acuerde de ellos, y haga en favor de ellos algo, y se va a extender hacia sus familiares también la bendición. ¿Ven? Así que comprendan que bajo esas dificultades siempre habrá personas que Dios enviará para que nos ayuden en diferentes momentos, y tendrán ellos una bendición también de parte de Dios; porque cualquiera que diere un vaso de agua fría a uno de estos mis pequeñitos, no perderán su recompensa.

Y en el juicio de San Mateo, capítulo 25, el juicio de las naciones, vean, las ovejas estarán a la diestra y los cabritos a la izquierda; los cabritos son los que no hicieron nada en favor de los escogidos de Dios, de esos pequeñitos, y los que estarán a la derecha son las ovejas que hicieron a favor de los escogidos

EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFICIL

Por William Soto Santiago Sábado, 8 de agosto de 1998

Monterrey, México

Muy buenas noches, amados amigos y hermanos presentes; es para mí un privilegio muy grande estar con ustedes en esta ocasión para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios y Su Programa correspondiente para este tiempo final, bajo el tema: “EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFICIL.”

Estaremos hablando en esta noche y viendo los diferentes aspectos de ese camino, en donde, para algunas personas, se hace demasiado duro; pero para los que están conscientes de que Cristo dijo que sería difícil, no se hace tan duro, porque claman a Cristo por Su ayuda y El los ayuda, los fortalece, y permanecen en ese camino. Y Cristo dijo: “El que perseverare hasta el fin, éste será salvo.” Por lo tanto, continúan hacia adelante aún con todas las dificultades que encuentren en el camino.

Leemos en San Mateo, capítulo 10, verso 16 en adelante, 16 al 42, donde dice (el resto, del 1 al 15, después lo pueden leer en sus hogares). Ahora, dice:

“He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas.

Y guardaos de los hombres, porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán;

y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles.

Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar.

Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.

El hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres, y los harán morir.

4 WILLIAM SOTO SANTIAGO

Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.

Cuando os persigan en esta ciudad, huid a la otra; porque de cierto os digo, que no acabaréis de recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo de Hombre.

El discípulo no es más que su maestro, ni el siervo más que su señor.

Bástale al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Beelzebú, ¿cuánto más a los de su casa?

Así que, no los temáis; porque nada hay encubierto, que no haya de ser manifestado; ni oculto, que no haya de saberse.

Lo que os digo en tinieblas, decidlo en la luz; y lo que oís al oído, proclamadlo desde las azoteas.

Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.

¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre.

Pues aun vuestros cabellos están todos contados. Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos

pajarillos. A cualquiera, pues, que me confiese delante de los

hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos.

Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.

No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada.

Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre serán los de su casa.

El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí;

y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.

El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida

EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFÍCIL 13 único camino que lleva al Trono. No hay otro camino; es el camino, que es Cristo en nuestra edad, como fue en cada edad de Su Iglesia gentil.

Y ahora, ¿dónde están los que están caminando en el camino al Trono, que es duro y difícil? Pues aquí estamos un grupo aquí en Monterrey, un grupo aquí en el Auditorio Moisés y en diferentes lugares de la República Mexicana también hay personas que están caminando en el camino al Trono, que es duro y difícil, y también toda la América Latina y el Caribe. Ese es el camino en el cual yo camino en este Día Postrero. ¿Y ustedes? (La congregación responde: ¡Amén! - Editor) También.

Siempre caminemos hacia adelante en el camino al Trono, que nos lleva al glorioso Reino Milenial para sentarnos con Cristo y reinar como Reyes y Sacerdotes en ese glorioso Reino de nuestro amado Señor Jesucristo; es el Reino de Dios que será establecido en la Tierra y gobernará sobre todas las naciones. Y con Cristo como Rey nosotros gobernaremos como Reyes y Sacerdotes sobre la raza humana que vivirá en este planeta Tierra.

De la raza humana, vean ustedes, habrá el nivel que serán Reyes y Sacerdotes y estarán con cuerpos eternos en el glorioso Reino Milenial. Esos son los que habrán caminado en el camino al Trono, que en el tiempo en que les tocó vivir fue duro y difícil. Tiene sus partes duras y difíciles, pero es el camino en donde hay gozo y alegría y salvación para todos los hijos e hijas de Dios.

Que las bendiciones de Jesucristo, el Angel del Pacto, sean derramadas sobre todos ustedes que caminan en el camino al Trono, y les fortalezca y les ayude; y si en algún momento necesitan una ayuda para continuar con la carga de la cruz que les ha tocado llevar siguiendo a Cristo, que así como hubo un hombre que ayudó a llevar la Cruz de Cristo, que El envíe a alguien en algunos momentos difíciles para que les den una manito, una ayudita, les sean de ayuda, aunque sea para darles un vaso de agua fría, y ellos recibirán la recompensa hasta por un vaso de agua fresca o fría que le den a uno de estos

12 WILLIAM SOTO SANTIAGO

El camino de Cristo ha estado manifestado de edad en edad, ha estado manifestado en cada edad, para los escogidos de Dios, los cuales han entrado en el camino de Cristo por medio de la Puerta, que es Cristo, y han sufrido en las diferentes edades persecuciones, hasta han llegado hasta el martirio, pero con gozo han reconocido que ha sido un privilegio morir por Cristo, como Cristo murió por todos nosotros, por amor, para nuestra salvación.

“EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFICIL.” Pero con la ayuda de Cristo, con la ayuda del Espíritu Santo, caminaremos ese camino y llegaremos al Trono, y reinaremos con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad. Y entonces diremos que verdaderamente mejor es el fin del negocio que el principio.

Al principio hay muchas dificultades, es duro, pero al final, vean ustedes, la gloria de Dios es manifestada y nos coloca en Tronos para reinar con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad, y nos coloca en cuerpos eternos, glorificados, como el del Señor Jesucristo. Y eso es para todos los que estarán caminando en el camino al Trono, que es duro y difícil.

Ha sido para mí un privilegio muy grande estar con ustedes dándoles testimonio del camino al Trono, el cual en este tiempo en el cual vivimos se camina acá en la Edad de la Piedra Angular, como se caminó en cada edad de la Iglesia gentil junto al mensajero de cada edad de la Iglesia gentil, donde estuvo Jesucristo manifestado en cada ángel mensajero. Vean cómo Cristo acompañó a Su Iglesia en cada edad, manifestado en el mensajero de cada edad; ahí los siete espíritus de Dios recorriendo toda la Tierra y acompañando a Su Iglesia, la cual camina en el camino estrecho, el camino que lleva a la vida eterna, el camino que nos lleva al Trono, para reinar con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad. Y lleva a la Iglesia como Cuerpo Místico de creyentes, y a cada miembro del Cuerpo Místico de creyentes como individuo.

Ahora, hemos visto dónde nosotros estamos en este Día Postrero caminando en el camino difícil y duro que lleva al Trono. Pero no importa que sea duro, que sea difícil, ese es el

EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFÍCIL 5 por causa de mí, la hallará.

El que a vosotros recibe, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió.

El que recibe a un profeta por cuanto es profeta, recompensa de profeta recibirá; y el que recibe a un justo por cuanto es justo, recompensa de justo recibirá.

Y cualquiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no perderá su recompensa.”

“EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFICIL.” El Camino al Trono, pues, Cristo ha dicho que el que

venciere se sentará con El en Su Trono, y tanto en el libro del profeta Daniel como en el libro del

Apocalipsis, capítulo 20, dice que hubo tronos que fueron preparados, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar, y dice que reinaron con Cristo o que reinarán con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad.

O sea, que en el Reino de Cristo habrá tronos que serán ocupados por aquellos que recibirán facultad para juzgar, y se sentarán en tronos; y esos son los miembros de la Iglesia del Señor Jesucristo, los cuales han estado caminando en ese camino duro y difícil en su trayectoria por esta vida terrenal; los cuales al escuchar la predicación del Evangelio han recibido a Cristo como Su Salvador, y han lavado sus pecados en la Sangre de Cristo, y han recibido Su Espíritu Santo, y han entrado en el camino de la vida eterna, que es un camino con una puerta angosta; y esa puerta es Cristo, y ese camino es angosto. Y Cristo hablando de ese camino, vean ustedes, en el mismo libro de San Mateo o Evangelio según San Mateo, en el capítulo 7, verso 13 y 14, dijo:

“Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.”

Y ahora, esa Puerta es Cristo y ese Camino es Cristo; y caminando en el camino de Cristo, en el camino cristiano,

6 WILLIAM SOTO SANTIAGO vamos por el camino de la vida eterna, que nos llevará al Trono, y nos sentaremos en tronos y reinaremos con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad. Ese es el único camino que lleva a la vida eterna y nos lleva al Trono, para sentarnos en Tronos, en el Reino Milenial, y reinar con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad.

San Lucas también nos habló de este camino, y lo que él habla es lo mismo que habló San Mateo, pero tiene más explicaciones ahí en su pasaje; y vamos a ver estas explicaciones en San Lucas, capítulo 13, verso 22 en adelante. Dice:

“Pasaba Jesús por ciudades y aldeas, enseñando, y encaminándose a Jerusalén.

Y alguien le dijo: Señor, ¿son pocos los que se salvan? Y él les dijo:

Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.

Después que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor, Señor, ábrenos, él respondiendo os dirá: No sé de dónde sois.”

Ahora, vean que este camino, el camino de la vida eterna, al cual se entra por medio de la puerta, que es Cristo, es angosto. Ese camino será cerrado porque esa puerta será cerrada cuando el Padre de Familia se levante y cierre la puerta. Y cuando Cristo se levante del Trono de Intercesión en el Cielo, cerrará esa puerta, y nadie más podrá entrar por esa puerta al camino cristiano o del cristianismo, al camino de la dispensación que lleva a los hijos e hijas de Dios al Trono, para reinar con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad, pues ya se habrá completado el número de los que se sentarán en esos Tronos. Por lo tanto, nadie más podrá entrar para formar parte de ese Cuerpo

Místico de creyentes en el Señor Jesucristo, que es formado o que forma la Iglesia del Señor Jesucristo, que son los nacidos de nuevo del Agua y del Espíritu, que han creído en Cristo como nuestro Salvador y han lavado sus pecados en la

EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFÍCIL 11 Tierra, las dificultades y lo duro que es caminar en ese camino, no es comparable con la Gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse al ser transformados nuestros cuerpos y tener el cuerpo eterno. Las pruebas, dificultades, luchas, tentaciones, problemas y todas estas cosas, son mientras estemos en este cuerpo mortal, corruptible y temporal; pero ya en el nuevo cuerpo cualquier problema que se presente será menos que la picada de una abeja que haya picado ya a otra persona. ¿Y qué significa eso? Que una abeja que ya picó a otra persona, le dejó el aguijón y trata de picarlo a usted y no puede, porque ya no tiene ese aguijón o ponzoña, como le llaman, para picar a otra persona; solamente lo que hace es bulla, alboroto, pero no puede hacer nada contra usted. Así serán los problemas que puedan presentarse cuando ya estemos nosotros transformados: serán como picada de abeja sin aguijón; así que no les harán ningún daño a los escogidos estando en el cuerpo eterno.

Mientras estamos en este cuerpo terrenal pues algún rasguño pueden producir las pruebas, los problemas y dificultades, por las cuales pasamos estando en estos cuerpos terrenales; pero somos más que vencedores en Cristo Jesús Señor nuestro. El nos da siempre la victoria.

Y aunque para algunos las pruebas y dificultades lleguen hasta la muerte en su cuerpo físico, y sean personas que mueran por Cristo, habrán muerto como mártires; y eso es un privilegio que no toda persona tiene, mártires de Jesucristo, y tendrán una gran recompensa de parte de Cristo. Dios les dará el galardón a los profetas, a los mártires, y a los que temen el Nombre del Señor.

Ahora, podemos ver que ya Cristo nos anunció que en ese camino estrecho tendríamos dificultades, dijo que era un camino duro; pero ese es el camino que lleva a la vida eterna. El enseña que el Hijo del Hombre vendrá con Sus Angeles, y entonces pagará a cada uno según sea su obra (San Mateo 16, verso 27). Y en Apocalipsis, capítulo 22, verso 12, da testimonio de lo mismo, diciendo:

“He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.”

10 WILLIAM SOTO SANTIAGO bendición de ser confesados delante del Padre celestial como verdaderos creyentes en Cristo que murieron por Cristo; así que será un momento terrible para esas personas que negaron a Cristo. Pero para los que le confesaron, aunque vivieron momentos duros, momentos difíciles, fueron perseguidos, fueron maltratados, fueron criticados, como criticaron a Cristo, que le dijeron: “Beelzebú, el príncipe de los demonios,” también si al Padre de familia le dijeron así, ¿qué no dirían a los de la Casa del Padre de la familia?, o sea, los miembros de la Iglesia de Jesucristo; o sea, los trataría en la misma forma.

Ahora, esas son persecuciones, son cosas difíciles, son pruebas que contiene la cruz que les toca vivir y llevar a cada hijo e hija de Dios. Y dice San Pablo en Romanos, capítulo 8, versos 17 en adelante, dice:

“Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados.

Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse.

Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios (o sea, la manifestación de los hijos de Dios glorificados, con cuerpos eternos, cuerpos glorificados, cuerpos iguales al cuerpo glorificado de nuestro amado Señor Jesucristo).”

Y nosotros tendremos un cuerpo físico, inmortal, incorruptible y glorificado, como el de nuestro amado Señor Jesucristo; y también un cuerpo teofánico eterno como el de nuestro Señor Jesucristo.

Y así es como llegaremos al Trono y nos sentaremos con El, y reinaremos con Cristo por mil años (y luego ¿se acabó todo ahí? No) y por toda la eternidad.

Esto es para todos aquellos que en el tiempo que les ha tocado vivir en este planeta Tierra, han entrado por la puerta estrecha, que es Cristo, y han caminado en el camino angosto, el camino al Trono, que es duro y difícil.

Pero miren, los sufrimientos que pasamos aquí en la

EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFÍCIL 7 Sangre de Cristo, en la edad que les ha tocado vivir.

Ahora podemos ver que llegará el tiempo en que esa puerta se cerrará. También fue expresado este misterio de esa puerta que será cerrada, en la parábola de las diez vírgenes, cuando se oyó un clamor a media noche que dijo: “He aquí, viene el esposo, salid a recibirle.” Y todas las vírgenes despertaron y tomaron sus lámparas, y las prudentes encendieron sus lámparas, y las insensatas pidieron aceite a las prudentes, y decían: “Nuestras lámparas se apagan, dadnos de vuestro aceite.”

El aceite representa al Espíritu Santo, que se recibe cuando la persona cree en Cristo como nuestro Salvador y lava sus pecados en la Sangre de Cristo; y encontramos que hubo personas que creyeron en Jesucristo como nuestro Salvador, pero no continuaron hacia adelante para recibir el Espíritu de Cristo, y por esa causa, aunque son cristianos profesantes, no tienen el Espíritu Santo, no tienen aceite en sus lámparas; y en el Día Postrero tratarán de entrar con Cristo, con el Esposo, a las Bodas, y no podrán por no tener aceite en sus lámparas.

Pero las prudentes, que son los creyentes en Cristo que han lavado sus pecados en la Sangre de Cristo y han recibido Su Espíritu Santo, entrarán con Cristo a las Bodas, y se cerrará la puerta; y se unirán con Cristo, y ahí recibirán la transformación de sus cuerpos, los que estamos vivos, y los muertos en Cristo la resurrección en cuerpos eternos; pero ya la puerta estará cerrada, porque Cristo levantándose del Trono del Padre cerrará esa puerta y ya nadie más podrá entrar por esa puerta.

Luego se abrirá plenamente a la Dispensación del Reino, y ya ahí el Programa que estará llevándose a cabo, ya será revelado, dado a conocer, a los seres humanos. Pero ya por medio de la predicación del Evangelio de la Gracia, por medio de la predicación del Evangelio presentando la Primera Venida de Cristo y Su Obra de Redención en la Cruz del Calvario, no funcionará para los seres humanos; porque ya habrá terminado esa dispensación y la puerta de la Primera Venida de Cristo estará cerrada, y nadie más podrá entrar por ella; pues ya habrán entrado hasta los últimos escogidos de Dios escritos en

8 WILLIAM SOTO SANTIAGO el Libro de la Vida del Cordero desde antes de la fundación del mundo.

Por eso es que para este tiempo están siendo llamados y juntados todos los escogidos de Dios del Día Postrero, y están entrando por la Puerta, y caminando en el camino estrecho que los lleva a la vida eterna y al Trono para reinar con Cristo por mil años y luego por toda la eternidad. Pero ese camino, recuerden, es un camino duro y difícil, para lo cual Cristo dijo que tomemos Su Cruz y lo sigamos; y cada persona tiene su propia cruz también. El dijo, en la lectura que tuvimos al principio: “y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.”

Cada persona tiene y tendrá sus propios problemas y dificultades, y tendrá problemas y dificultades para caminar en el camino de Dios. Problemas como el trabajo, como su familia... le pueden hacer la guerra; si solamente usted es el que cree y el resto de su familia no cree, lo pueden criticar, le pueden hacer una lucha en la cual traten de que los días en que usted va para las actividades le pongan cosas que hacer o le hagan alguna cosa que usted no pueda ir a las actividades; o lo inviten para algún sitio su papá, o su mamá, o sus hermanos, o le traigan una visita que tenga usted que atender; o le surjan un sinnúmero de problemas, los cuales sean problemas reales y que sean parte de su cruz.

Quizás no viva tan cerca del lugar de reunión, tenga que tomar un autobús o dos o tres, y así por el estilo pueda tener un sinnúmero de problemas. Puede ser que no tenga auto propio y tenga que usar los medios de transporte público; y así por el estilo puede tener un sinnúmero de problemas, de dificultades para servir a Dios.

Pero el que mira la meta divina, y mira que Dios tiene un Trono preparado para él, para sentarlo en ese Trono y reinar con Cristo, no le presta atención a esos problemas; son insignificantes esos problemas, comparados con lo que Dios tiene para él en el glorioso Reino Milenial, en donde estaremos con Cristo reinando como Reyes y Sacerdotes por toda la eternidad.

EL CAMINO AL TRONO ES DURO Y DIFÍCIL 9 Puede ser también que los problemas, las dificultades,

vengan como situaciones a la nación en que vive, o problemas que el gobierno tire en contra de los creyentes en Cristo, como sucedió en los tiempos de los apóstoles, que los gobiernos tiraban persecuciones, y la religión hebrea también en contra de los creyentes en Jesucristo; pero Cristo les advirtió que tendrían problemas, persecuciones y a algunos los matarían, serían mártires; pero murieron felices por Cristo nuestro Salvador, el cual murió por todos nosotros. El murió por todos nosotros, y ahora muchos de los escogidos morirían por uno: o sea, por Cristo, por amor a Cristo y Su Programa, y por servirle a Cristo de todo corazón. Cristo dijo: “El que me negaré, yo también le negaré delante de mi Padre; pero el que me confesare, yo le confesaré delante de mi Padre.”

Los que comenzaron a caminar en ese camino, y cuando vinieron esas dificultades, porque el camino es duro, y negaron a Cristo, tienen no una sorpresa, sino una realidad a la cual tendrán que enfrentarse, porque ya Cristo se lo había advertido a todos: “el que me negare delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre celestial.” No podrán ir con excusas: “No, es que yo tenía que proteger mi familia.” Lo que estaba protegiendo era su piel, de que no lo mataran.

Ahora, El dijo, Cristo dijo: “El que ganare su vida (dice)... El que halla su vida...” O sea, que evita que lo maten, y sigue viviendo, cuando le llega el tiempo de morir (pues siempre se muere), se murió un poquito después del tiempo en que podía morir por causa de Cristo; pero es mejor morir unos años antes de los años que el ser humano puede vivir, y morir por Cristo, y no vivir 70, 80, 100 años o 110 años, y morir no por la causa de Cristo.

Ahora, muchos murieron, siendo personas jóvenes todavía, por la causa de Cristo; y Cristo dijo: “Yo le confesaré delante de mi Padre celestial.” Otros que iban a ser matados, quizás en una edad temprana, de 20 a 40 años, negaron a Cristo cuando los tomaron presos y los hicieron renegar de Cristo, y se les alargó su vida terrenal por 20 ó 50 años más, y pudieron vivir quizás 60 ó 90 años; pero vivieron esos años y murieron sin la