trastornos esfinterianos

2
TRASTORNOS ESFINTERIANOS En la adquisición de la limpieza y del control urinario o anal intervienen tres factores: neurofisiológico, cultural, y de relación La neurofisiología esfinteriana se caracteriza por el paso de un comportamiento reflejo automático a una conducta voluntaria y controlada. El contexto cultural es un factor imprescindible en el aprendizaje de la limpieza. Según las culturas, este aprendizaje se desenvuelve en un marco más o menos rígido, lo que implica someter al niño a presiones severas, moderadas o leves. El último factor es el de relación. Más allá de la maduración neurofisiológica y la presión cultural esta la relación madre-hijo, la cual cuenta con un lugar privilegiado y protegido en nuestra sociedad. La adquisición del control esfinteriano se realiza después del placer experimentado con la expulsión, más tarde con la retención y luego con el dualismo retención-expulsión. El nuevo dominio sobre el cuerpo proporciona al niño un gran placer reforzado por la satisfacción materna. I. ENURESIS Se define como la emisión activa, completa y no controlada de orina transcurrida ya la edad de madurez fisiológica, habitualmente adquirida en los 3-4 años. La enuresis secundaria se caracteriza por la existencia de un periodo anterior de control transitorio. La enuresis primaria sucede directamente al periodo de no control fisiológico. El diagnóstico diferencial es fácil hacerlo: Las afecciones urológicas, infecciosas, irritativas o malformativas van acompañadas de otros signos tales como micciones muy frecuentes, difíciles o dolorosas. Las afecciones neurológicas son evidentes debido a los trastornos que las acompañan, sean de origen infeccioso o malformativas. La epilepsia nocturna puede ser más difícil de reconocer si el único indicio es la emisión de orina. Los factores etiológicos descritos más usualmente son: Factor hereditario: se explica por la relativa frecuencia de enuresis en la historia familiar, sin que haya podido probar una transmisión genética precisa. Mecánica vesical del enurético: la capacidad vesical y la presión intravesical no parecen diferenciarse de las del niño normal. Sueño del enurético: es corriente que el niño enurético tenga sueños “mojados”: juegos dentro del agua, inundaciones o que sueñe que orina. Factores psicológicos: No hay más que ver la frecuencia con que aparece o desaparece coincidiendo con un episodio relevante en la vida del niño: separación familiar, nacimiento de un hermano, ingreso en la escuela, emociones de cualquier naturaleza, etc. Se puede asociar a las siguientes psicopatologías:

Upload: ana272

Post on 07-Dec-2014

115 views

Category:

Documents


7 download

TRANSCRIPT

Page 1: Trastornos esfinterianos

TRASTORNOS ESFINTERIANOS

En la adquisición de la limpieza y del control urinario o anal intervienen tres factores: neurofisiológico, cultural, y de relación

La neurofisiología esfinteriana se caracteriza por el paso de un comportamiento reflejo automático a una conducta voluntaria y controlada.

El contexto cultural es un factor imprescindible en el aprendizaje de la limpieza. Según las culturas, este aprendizaje se desenvuelve en un marco más o menos rígido, lo que implica someter al niño a presiones severas, moderadas o leves.

El último factor es el de relación. Más allá de la maduración neurofisiológica y la presión cultural esta la relación madre-hijo, la cual cuenta con un lugar privilegiado y protegido en nuestra sociedad. La adquisición del control esfinteriano se realiza después del placer experimentado con la expulsión, más tarde con la retención y luego con el dualismo retención-expulsión. El nuevo dominio sobre el cuerpo proporciona al niño un gran placer reforzado por la satisfacción materna.

I. ENURESIS

Se define como la emisión activa, completa y no controlada de orina transcurrida ya la edad de madurez fisiológica, habitualmente adquirida en los 3-4 años. La enuresis secundaria se caracteriza por la existencia de un periodo anterior de control transitorio. La enuresis primaria sucede directamente al periodo de no control fisiológico.

El diagnóstico diferencial es fácil hacerlo: Las afecciones urológicas, infecciosas, irritativas o malformativas van

acompañadas de otros signos tales como micciones muy frecuentes, difíciles o dolorosas.

Las afecciones neurológicas son evidentes debido a los trastornos que las acompañan, sean de origen infeccioso o malformativas.

La epilepsia nocturna puede ser más difícil de reconocer si el único indicio es la emisión de orina.

Los factores etiológicos descritos más usualmente son: Factor hereditario: se explica por la relativa frecuencia de enuresis en la

historia familiar, sin que haya podido probar una transmisión genética precisa.

Mecánica vesical del enurético: la capacidad vesical y la presión intravesical no parecen diferenciarse de las del niño normal.

Sueño del enurético: es corriente que el niño enurético tenga sueños “mojados”: juegos dentro del agua, inundaciones o que sueñe que orina.

Factores psicológicos: No hay más que ver la frecuencia con que aparece o desaparece coincidiendo con un episodio relevante en la vida del niño: separación familiar, nacimiento de un hermano, ingreso en la escuela, emociones de cualquier naturaleza, etc.

Se puede asociar a las siguientes psicopatologías: Retraso mental: es tanto más frecuente cuanto más profunda es la debilidad.

Dicha asociación subraya la importancia de la maduración neurofisiológica. Psicosis: Síntoma frecuente en el seno de una perturbación más amplia. Neurosis: la dimensión simbólica de la enuresis es aquí particularmente

significativa y ayuda a su comprensión.

II. ENCOPRESIS

Page 2: Trastornos esfinterianos

Es la defecación en los pantalones por parte del niño que ha sobrepasado la edad habitual en la adquisición del control esfinteriano (2-3 años). Distingamos entre la encopresis primaria (sin fase anterior de control) y la segundaria (después de una fase más o menos larga de control)