textos literarios - no literarios

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monografìa

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El sueo de Chuang TzuUn da, el humilde Chuang Tzu so que era una mariposa. Al despertar de ese sueo, ignoraba si era Tzu que haba soado que era una mariposa o si era una mariposa y estaba soando que era Tzu.

* Podemos controlar lo que soamosCuando una persona es capaz de alterar el contenido del relato onrico se dice que experimenta sueos lcidos. Una psicloga de la Universidad de Harvard, Deirdre Barret, hizo una prueba con sus estudiantes: les pidi que eligieran un problema que no tenan resuelto y que pensaran en l antes de dormir. Despus de una semana, la mitad de los chicos haba tenido sueos vinculados con ese problema y el 25% haba encontrado alguna respuesta sobre la cuestin. As, el mejor modo de controlar nuestros sueos ser elegir nuestros pensamientos antes de dormir.[...]

[...]Romeo:Tuve anoche un sueo.Mercutio:Y yo otro esta noche.Romeo:Y cul fue la enseanza de tu sueo?Mercutio:Ahora entiendo la diferencia que hay entre el sueo y la realidad.Romeo:En la cama fcilmente se suea.Mercutio:Estoy seguro de que te ha visitado la reina Mab, nodriza de las hadas. Es tan menuda como la gema que resplandece en el anillo de un regidor. Su carroza es jalada por caballos ligeros como tomos, y sus rayos son como las patas de las tarntulas; las correas son de gusano de seda, los frenos de rayos de luna; huesos de grillo e hilos de araa forman el ltigo; y un mosquito de oscura levita, dos veces ms pequeo que el insecto que la aguja sutil extrae del dedo de ociosa dama, gua el magnfico equipaje. Una cscara de avellana forma el coche hecho por la ardilla, eterna carpintera de las hadas. En ese carro reflexiona de noche y da por cabezas enamoradas, y les hace concebir intiles deseos, y anda por las cabezas de los cortesanos, y les inspira intiles cortesas. Corre por los dedos de los abogados, y suea con procesos. Recorre los labios de las damas, y suea con besos. Anda por las narices de los pretendientes, y suea que ha alcanzado un empleo. Azota con la punta de un rabo de puerco las orejas del cura, produciendo en ellas sabroso cosquilleo, indicio cierto de beneficio o canonja cercana. Se adhiere al cuello del soldado, y le hace soar que vence a sus enemigos y los degella con su truculento acero toledano, hasta que oyendo los sones del cercano tambor, se despierta sobresaltado, reza un padre nuestro, y vuelve a dormirse. La reina Mab enreda por la noche las crines de los caballos, y enmaraa el pelo de los duendes, e infecta el lecho de la cndida virgen, y despierta en ella por primera vez impuros pensamientos.Romeo:Es suficiente, Mercutio. No contines con esa pltica imprudente.[...]

El sueo

Si el sueo fuera (como dicen) unatregua, un puro reposo de la mente,por qu, si te despiertan bruscamente,sientes que te han robado una fortuna?

Por qu es tan triste madrugar? La horanos despoja de un don inconcebible,tan ntimo que slo es traducibleen un sopor que la vigilia dora

de sueos, que bien pueden ser reflejostruncos de los tesoros de la sombra,de un orbe intemporal que no se nombra

y que el da deforma en sus espejos.Quin sers esta noche en el oscurosueo, del otro lado de su muro?

[...]Querida Kitty:Mis deseos de hablar con alguien se han vuelto tan grandes que de alguna manera muyextraa se me ha ocurrido escoger a Peter para ello. [...]Esta maana me despert a eso de las siete menos cinco y en seguida record con granseguridad lo que haba soado. Estaba sentada en una silla, y frente a m estaba sentadoPeter... Schiff. Estbamos hojeando un libro ilustrado por Mary Bos. Mi sueo era tanntido que an recuerdo en parte las ilustraciones. Pero aquello no era todo, el sueosegua. De repente, los ojos de Peter se cruzaron con los mos, y durante algn tiempo medetuve a mirar esos hermosos ojos de color pardo aterciopelado. Entonces, Peter me dijosusurrando:-De haberlo sabido, habra ido a tu encuentro mucho antes.Me volv bruscamente, porque senta una emocin demasiado grande. Despus sent unamejilla suave y deliciosa rozando la ma, y todo estuvo tan bien, tan bien...En ese momento me despert, mientras segua sintiendo su mejilla contra la ma y susojos mirndome en lo ms profundo de mi corazn, tan profundamente que l habapodido leer all dentro cunto lo haba amado y cunto segua amndolo. Los ojos se mevolvieron a llenar de lgrimas, y me sent muy triste por haberlo perdido, pero al mismotiempo tambin contenta, porque saba con seguridad que Peter segua siendo mi elegido.Es curioso que a veces tenga estos sueos tan ntidos. La primera vez fue cuando, unanoche, vi a mi abuela Oma de forma tan clara, que pude distinguir perfectamente su pielgruesa y suave, como de terciopelo. Luego se me apareci Oma como si fuera mi ngelde la guarda, y luego Hanneli, que me sigue pareciendo el smbolo de la miseria quepasan todos mis amigos y todos los judos; cuando rezo por ella, rezo por todos los judosy por toda esa pobre gente.Y ahora Peter, mi querido Peter, que nunca antes se me ha aparecido tan claramente; nonecesito una foto suya: as lo veo bien, muy bien.Tu Ana[...]