25N Día Internacional contra la Violencia de Género

Cuentos y poemas para pensar

Si te controla,

Te insulta

Te humilla

Te grita…

Es maltrato.

Cuentos y poemas

Otro año más, el Instituto Ruíz de Alda colabora para visibilizar y

erradicar el problema social de la Violencia a la Mujer. A través de

la magia de estos cuentos* y poemas os invitamos a identificar

relaciones tóxicas y comportamientos que pueden conducir al

maltrato físico y/o psicologíco. Pretendemos que nuestros jóvenes

puedan reconocer las relaciones amorosas que se basan en la

igualdad y rechacen las que buscan el control y la sumisión.

Os invitamos a leer estos textos con mirada crítica, a debatir con el

alumnado roles y conductas de los personajes femeninos y

masculinos y a pensar en la perspectiva de futuro de una relación

de pareja que no se sustente en la igualdad de derechos y el

respeto entre las dos personas.

* Jorge Bukay (“Cuentos para pensar”). La selección de textos y la adaptación ha sido realizada por Pilar Borraz Rozas.

Indice

Amor Eterno………………………………………… 3

Las Víctimas………………………………………… 5

Sobre la pareja……………………………………… 6

La mirada del amor ………………………………… 7

Quiero ………………………………………………. 8

La Cadena de Oro …………………………………. 9

¿Qué es el amor?………………………………….. 11

Soy autodependiente ………………………………… 12

AMOR ETERNO

Cuenta una vieja leyenda de los indios Sioux que una vez llegaron hasta la tienda del brujo de la tribu dos jóvenes tomados de la mano: Toro Bravo y Nube Alta, los dos jóvenes más hermosos de la tribu. -Nos amamos –dijo el joven. -Y nos vamos a casar -dijo ella. -Y nos queremos tanto que tenemos miedo. Queremos un hechizo, un conjuro, un amuleto. Algo que garantice que podremos estar siempre juntos. Que nos asegure estar juntos uno al lado del otro hasta la muerte. - Por favor:- ¿hay algo que podamos hacer?

El viejo brujo, tenía fama de sabio, los miró y se emocionó de verlos tan jóvenes, tan enamorados, tan anhelantes esperando su palabra. -Hay algo... –Habló el viejo después de una larga pausa-. Pero no sé si podréis…. Conseguirlo es una tarea muy difícil y arriesgada… -¡No importa¡- dijeron los dos jóvenes-. Haremos lo que nos pidas para poder estar siempre unidos. -Bien… -dijo pensativo el brujo-. Y le preguntó a Nube Alta: ¿Ves el monte al norte de nuestra aldea? Pues deberás subir hasta la cima, tendrás que escalarlo sola y sin más armas que una red y tus manos. Cuando llegues a lo más alto, deberás cazar el halcón más hermoso y vigoroso del monte. Si lo atrapas, debes traerlo aquí, vivo, el tercer día después de la luna llena. ¿Has comprendido? La joven asintió en silencio. -Y tú, Toro Bravo - deberás partir en dirección contraria y escalar la Montaña del Trueno; cuando llegues a la cima, encontrarás la más brava de todas las águilas y, solamente con tus manos y una red, debes atraparla, sin heridas, y traerla viva, el mismo día en que vendrá Nube Alta con el halcón... ¡Salir ahora mismo! Los jóvenes se miraron con ternura y salieron a cumplir la misión encomendada, ella hacia el norte, él hacia el sur... El día establecido, llegaron ante el brujo, con bolsas de tela que contenían las aves. El viejo les pidió que, con mucho cuidado las sacaran de las bolsas. Lo hicieron y le enseñaron las aves cazadas. Eran los más hermosos ejemplares, sin duda los mejores de su especie.

- ¿Volaban alto? -preguntó el brujo. - Sí, sí, muy alto. Hicimos todo tal y como lo pediste... ¿Y ahora…? –Preguntaron impacientes los enamorados: - ¿los mataremos y beberemos su sangre?, ¿Los cocinaremos y comeremos su apreciada carne? - -No -dijo el viejo-. Los dejaremos vivir: Cojan las aves y átenlas entre sí por las patas con estas tiras de cuero... Cuando las hayan anudado, lo más fuertemente que puedan, suéltenlas y que vuelen unidas para siempre, igual que ustedes quieren hacerlo. Los dos jóvenes hicieron lo que el viejo brujo les pedía y soltaron los pájaros después de atarlos juntos.

El águila y el halcón intentaron levantar vuelo pero no podían y solo

consiguieron revolcarse en el suelo. Unos minutos después, irritadas por la

incapacidad de emprender el vuelo, las aves arremetieron a picotazos una

contra la otra hasta herirse.

Entonces el brujo habló: “Este es el conjuro que me habéis pedido... Son

ustedes como un águila y un halcón; si se atan el uno al otro, aunque lo

hagan por amor, no sólo vivirán arrastrándose, sino que además, tarde o

temprano, empezarán a lastimarse uno al otro. Si quieren que el amor

entre ustedes perdure, vuelen juntos pero jamás atados”.

LAS VÍCTIMAS

Cuando mi madre se divorció de ti, nos alegramos.

Aguantó y aguantó, en silencio, durante todos esos años, y entonces

te echó, de repente, y sus hijos, lo aplaudieron.

Tiempo después te despidieron del trabajo

y nos reímos pícaramente igual que la gente se sonreía

cuando el helicóptero de Nixon despegó de la Casa Blanca por última vez.

Sentimos un cosquilleo al imaginar cómo te quitaran la oficina,

también a tus secretarias, tus almuerzos con tres whiskies dobles.

¿Te harían devolver también los trajes, aquellos esqueletos oscuros

colgados en tu armario y tus zapatos con las punteras negras?

Ella nos había enseñado a aceptarlo, a odiarte y a aguantarnos,

hasta que removimos su conciencia para aniquilarte, padre.

Ahora, me cruzo con vagabundos en las puertas, cuerpos

como babosas blancas que resplandecen a través de los jirones

de su traje de barro compacto, las aletas

inmundas de sus manos, el fuego

sumergido de sus ojos, barcos hundidos con sus faroles encendidos,

y me pregunto quién les aguantó y aguantó en silencio,

Hasta que lo habían cedido todo,

y nada les quedó ya sino esto.

Sharon Olds

SOBRE LA PAREJA

Dejad que haya espacios en esa unión vuestra.

Y dejad que los vientos de los cielos dancen entre vosotros.

Amaos el uno al otro, pero no hagáis que el amor sea una ligadura:

dejad que sea cual un mar que se mueve entre las orillas de vuestras

almas.

Llenaos mutuamente la copa, pero no bebáis solamente de una.

Compartid vuestros panes, pero sin comer de la misma rebanada.

Cantad y bailad juntos y estad alegres, pero dejad que cada uno se sienta

aparte,

así como las cuerdas de un laúd se hallan separadas aunque vibren con la

misma música.

Entregaos el corazón, pero sin que por ello dejéis de vigilarlo

pues sólo la mano de la Vida puede contener vuestros corazones.

Y estad unidos, aunque no demasiado juntos:

porque las columnas del templo se halla separadas,

y el roble y el ciprés no crecen uno bajo la sombra del otro.

Kahlil Gibran

LA MIRADA DEL AMOR

El rey estaba tan intensamente enamorado de

Sabrina, una joven de familia humilde, que la había

hecho su esposa. Una tarde, mientras el rey estaba

de cacería, llegó el mensaje de que la madre de

Sabrina estaba enferma. A pesar de que el rey

había prohibido usar su carruaje personal (a quién

lo hiciera se le cortaba la cabeza), Sabrina cogió el

carruaje y corrió junto a su madre.

A su regreso, el rey fue informado de la desobediencia de Sabrina.

-¿No es maravillosa?-dijo- Esto es verdaderamente amor filial. No le

importó perder su vida para ir a cuidar a su madre!! Es maravillosa! ¡La

mejor reina que pude elegir¡

Cierto día, mientras Sabrina estaba sentada en el jardín comiendo unas

ricas manzanas, llegó el rey, lo saludó y siguió comiendo.

-¡Parecen ricas!-dijo el rey.

-Lo son- dijo Sabrina y alargando la mano le cedió a su amado la última

manzana ya mordida.

-¡Cuánto me ama!-comentó después el rey a sus ministros-, Renunció a su

propio placer, para darme la última manzana. ¿no es generosa? ¡La mejor

de la reinas¡

Pasaron algunos años y el amor y la pasión hacia Sabrina desaparecieron

del corazón del rey, y a todos les decía:

-Nunca se portó como una reina…¿Acaso no desafió mi poder usando mi

carruaje personal a pesar de estar prohibido? … Recuerdo que un día, fue

tan desconsiderada que me dio a comer una fruta mordida…¿Cómo pude

estar tan ciego?. Nunca fue merecedora de mi amor. Era una egoísta....

QUIERO

Quiero que me oigas, sin juzgarme.

Quiero que opines, sin aconsejarme.

Quiero que confíes en mi, sin exigirme.

Quiero que me ayudes, sin intentar decidir por mi

Quiero que me cuides, sin anularme.

Quiero que me mires, sin proyectar tus cosas en mi.

Quiero que me abraces, sin asfixiarme.

Quiero que me animes, sin empujarme.

Quiero que me sostengas, sin que me impidas andar.

Quiero que me protejas, sin mentiras.

Quiero que te acerques, sin invadirme.

Quiero que conozcas las cosas mías que más te disgusten,

que las aceptes y no pretendas cambiarlas.

Quiero que sepas, que hoy,

hoy puedes contar conmigo.

Sin condiciones.

LA CADENA DE ORO

Dos hermosos jóvenes que se hicieron novios desde pequeños. Vivían en

un pueblecito de leñadores. Él era alto, esbelto y musculoso. Ella era

rubia, de pelo muy, muy largo, tanto que le llegaba hasta la cintura; tenía

los ojos celestes y era hermosa.

Un día, cuando ella tuvo dieciocho y él veintitrés, el pueblo entero ayudó a

que se casaran y les regalaron una cabaña, con una parcela de árboles

para que pudieran trabajar como leñadores.

Y vivieron allí durante todos los días de un

invierno, un verano, una primavera y un

otoño, disfrutando mucho de estar juntos.

Cuando el día del primer aniversario se

acercaba, ella sintió que debía hacer algo

para demostrarle a él su profundo amor.

Pensó hacerle un regalo que significara ESE AMOR y fue al pueblo para

comprarlo. Pero después de caminar durante horas por las calles no

encontraba nada que fuera tan importante y que ella pudiera comprar con

las pocas monedas que tenía.

Al pasar por una joyería, vio una hermosa cadena de oro. Entonces

recordó que había un solo objeto material que él adoraba verdaderamente,

que lo consideraba valioso: Era un reloj de oro que su abuelo le había

regalado antes de morir. Desde pequeño él guardaba ese reloj en un

estuche que dejaba siempre al lado de su cama. Todas las noches sacaba

aquel reloj, lo lustraba, le daba un poquito de cuerda, se quedaba

escuchándolo hasta que la cuerda se terminaba, lo volvía a lustrar, lo

acariciaba un rato y lo guardaba nuevamente en el estuche.

Ella pensó: "Que maravilloso regalo sería esta cadena de oro para aquel

reloj” y entró a preguntar cuánto valía, pero era mucho más dinero del

que ella había imaginado, mucho más de lo tenía. Hubiera tenido que

esperar tres aniversarios más para poder comprárselo. Pero ella no podía

esperar tanto.

Salió del pueblo triste, pensando qué hacer para conseguir el dinero. Y

pensó y pensó, hasta que, al pasar por la peluquería, un cartel decía: "Se

compra pelo natural". Y como ella tenía ese pelo rubio tan largo, que no se

había cortado desde que tenía diez años, entró a preguntar: Le ofrecieron

tanto dinero por su pelo que podía comprar la cadena de oro y una caja

donde guardar la cadena y el reloj. No dudó. Le dijo a la peluquera:

- Si dentro de tres días regreso para venderle mi pelo, ¿usted me lo

compraría?- Seguro que sí - fue la respuesta.

- Entonces en tres días estaré aquí.

Fue a la joyería, dejó reservada la cadena de

oro y volvió a su casa.

Llegó el día del aniversario y se abrazaron

más fuerte que de costumbre. Luego, él se

fue a trabajar y ella bajó al pueblo.

Se hizo cortar el pelo bien corto y, con el

dinero, fue a la joyería. Compró la cadena de

oro y la caja de madera para guardarla.

Llegó a casa y esperó a su amado. Cuando él llegaba iluminaba la casa, pero esta vez bajó las luces, puso sólo dos velas y se colocó un pañuelo en la cabeza. Sabía que él también amaba su pelo y no quería que se diera cuenta de que se lo había cortado. Él llegó. Se abrazaron y se dijeron lo mucho

que se querían. Entonces, ella sacó la caja

de madera con la cadena de oro para el reloj.

Y él fue hasta el armario y sacó de allí una

caja que le había traído mientras ella no estaba:

La caja contenía dos enormes pasadores

para el pelo que él le había comprado...

vendiendo el reloj de oro del abuelo.

El amor no está en nosotros para sufrir o sacrificarse por el otro, sino para

disfrutar de su existencia.

¿QUÉ ES EL AMOR?

Cuando uno se enamora en realidad no ve al otro en su totalidad, sino que

el otro es como una pantalla donde proyectamos sus aspectos idealizados.

La construcción del amor empieza cuando puedo ver al que tengo

enfrente, cuando descubro que el otro es un sujeto real, con luces y

sombras. Entonces el amor reemplaza al enamoramiento.

Amar a alguien es el desafío de

deshacer nuestras proyecciones para

relacionarnos verdaderamente con el

otro. Hablamos del amor en el sentido

de "que nos importa el bienestar del

otro y no pretendemos lastimarlo".

El amor es el bienestar que invade cuerpo y alma y se afianza

cuando puedo ver al otro sin querer cambiarlo.

El placer de estar con alguien que se ocupa de que estemos bien, que

percibe lo que necesitamos y disfruta al dárnoslo, eso hace al amor.

Una pareja es más que una decisión, es algo que ocurre cuando nos

sentimos unidos a otro de una manera diferente; también hace falta que

esa persona sea capaz de nutrirnos, que sea una ayuda en nuestro

crecimiento personal. El verdadero amor existe cuando amamos por lo que

sabemos que esa persona puede llegar a ser, no solo por lo que es.

"El enamoramiento es más bien una relación en la cual la otra

persona no es en realidad reconocida como verdaderamente otra,

sino más bien sentida e interpretada como si fuera un doble de uno

mismo, y dotada de rasgos que corresponden a la imagen idealizada

de lo que uno quisiera ser. En el enamoramiento hay un yo me amo al

verme reflejado en ti"

Enamorarse es amar las coincidencias, y amar es enamorarse de las

diferencias.

SOY AUTODEPENDIENTE

Mi primo, tenía cuatro años. Yo tenía doce...Estábamos en el comedor de

la casa de mi abuela. Mi primo vino corriendo y se llevó la mesa por

delante. Cayó sentado en el suelo llorando, se había dado un golpe fuerte

y un gran chichón le apareció en la frente. Mi primo lloraba cuando mi tía

corrió a abrazarlo y mientras me pedía que trajera hielo le decía:

-“Pobrecito, mala la mesa que te pegó,

toma, toma, y toma… mesa mala...”,

decía mi tía mientras le daba

golpecitos a la mesa invitando a mi

pobre primo a que la imitara...

Y yo los veía y pensaba: “¿por qué le pega a la mesa? ¿La

responsabilidad no es de mi primo, que es un torpe, un atolondrado que

no mira por dónde camina…?” . No, según mi tía, la culpa es de la mesa.

La mesa es mala.

Mientras yo intentaba entender el mensaje oculto de las malas intenciones

de los objetos, en este caso de la “mesa mala”, mi tía insistía para que mi

primo le pegara a la mesa...Lo que yo aprendí entonces es que tú nunca

eres responsable de lo que te pasa, que la culpa siempre la tienen los

demás, tu no, es el otro el que tiene que apartarse de tu camino para que

tú no te golpees...

Hoy, he tenido que recorrer un largo camino para “desaprender” el

mensaje de mi tía, porque:

Es mi responsabilidad apartarme de lo que me hace daño. Es mi

responsabilidad defenderme de los que insultan y lastiman.

Soy responsable de lo que me

pasa porque en algo he

colaborado para que suceda.

Yo no puedo controlar la

actitud de los que me rodean,

pero puedo controlar la mía.

Con mis limitaciones, con mis

equivocaciones. Tendré que

ser libre aunque a otro no le

guste.

Y si no vas a quererme así como soy; y si en la noche más larga y más fría

del invierno me vas a dejar y te vas a ir... cierra la puerta, porque entra

viento. Te digo: cierra la puerta porque yo me quedo. Y esta va a ser mi

decisión y me transforma en difícilmente manejable. Porque los

autodependientes son inmanejables. Ser autodependiente significa un

paso adelante, una manera diferente de vivir el mundo.

Si eres autodependiente, es probable que algunas personas de las que

están a tu lado...no quieran quedarse: Habrá que prepararse para festejar

la llegada de otros.

¿Cómo detectar…?

IES Ruíz de Alda. San Javier. Región de Murcia. Noviembre 2017.