stern, d. (1991). el mundo interpersonal del infante. cap. 5 el sentido de un sí mismo nuclear el...

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Stern, D. (1991). El mundo interpersonal del infante. Cap. 5: El sentido de un sí mismo nuclear: El sí mismo con el otro. (pp.129- 156). BA: Paidós. Sentido de sí mismo con el otro el sentido de interactuar con otro es de relevancia, aunque tal persona no se encuentre presente. El autor cuestiona el cómo podemos aprender la interacción con otro que influye en el sí mismo. Parte por Winnicot y Mahler, quienes establecen que el infante no diferencia el sí mismo del otro, siendo el infante totalmente social. El autor difiere en esto, ya que habría en la formación temprana de un sentido de un sí mismo nuclear en el infante. Considerando la experiencia de estar con el otro como un proceso activo de integración. Para abordar el sí mismo social se tomará en primera instancia la naturaleza del sí mismo con el otro social como acontecimiento objetivo. Pensemos que el infante realiza unas actividades en que dos otros las unen, sin esto no sucedería la actividad de ambos. Con esto se establece que objetivamente, el sentimiento generado de la interacción o un juego, es una creación mutua con un nosotros o un fenómeno si miso/otro. Es decir, para el infante el otro es el regulador del sí mismo. En tales procesos lo que está involucrado es la regulación de la activación del infante, es decir, un otro que regula la activación del sí mismo la cual se puede traducir mediante los siguientes ejemplos: intensidad del afecto, seguridad de apego y en general, todas las experiencias que regulan sentimientos de apego, proximidad física y seguridad son experiencias creadas en reciprocidad y tomadas en cuenta bajo el ámbito social. Esto se daría con un otro real o imaginario (por ejemplo una almohada). Teóricos del apego establecen la importancia de los otros en la regulación de la seguridad, como en la relación progenitor/hijo, sin embargo esto no es la totalidad de tal relación. A la vez, la relación con el otro (progenitor) regularía el afecto experimentado por el infante. Otro punto de relevancia, es la regulación en el aspecto cognitivo del infante con el mundo. Como

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Stern, D. (1991). El mundo interpersonal del infante. Cap. 5: El sentido de un s mismo nuclear: El s mismo con el otro. (pp.129-156). BA: Paids. Sentido de s mismo con el otro el sentido de interactuar con otro es de relevancia, aunque tal persona no se encuentre presente. El autor cuestiona el cmo podemos aprender la interaccin con otro que influye en el s mismo. Parte por Winnicot y Mahler, quienes establecen que el infante no diferencia el s mismo del otro, siendo el infante totalmente social. El autor difiere en esto, ya que habra en la formacin temprana de un sentido de un s mismo nuclear en el infante. Considerando la experiencia de estar con el otro como un proceso activo de integracin. Para abordar el s mismo social se tomar en primera instancia la naturaleza del s mismo con el otro social como acontecimiento objetivo. Pensemos que el infante realiza unas actividades en que dos otros las unen, sin esto no sucedera la actividad de ambos. Con esto se establece que objetivamente, el sentimiento generado de la interaccin o un juego, es una creacin mutua con un nosotros o un fenmeno si miso/otro. Es decir, para el infante el otro es el regulador del s mismo. En tales procesos lo que est involucrado es la regulacin de la activacin del infante, es decir, un otro que regula la activacin del s mismo la cual se puede traducir mediante los siguientes ejemplos: intensidad del afecto, seguridad de apego y en general, todas las experiencias que regulan sentimientos de apego, proximidad fsica y seguridad son experiencias creadas en reciprocidad y tomadas en cuenta bajo el mbito social. Esto se dara con un otro real o imaginario (por ejemplo una almohada). Tericos del apego establecen la importancia de los otros en la regulacin de la seguridad, como en la relacin progenitor/hijo, sin embargo esto no es la totalidad de tal relacin. A la vez, la relacin con el otro (progenitor) regulara el afecto experimentado por el infante. Otro punto de relevancia, es la regulacin en el aspecto cognitivo del infante con el mundo. Como tambin la regulacin en el aspecto somtico del infante. Tales aspectos han sido de importancia para el psicoanlisis, ya que en base a esto, se explican los cambios libidinales y el modelo energtico. Este modo de estar con aporta a un sentimiento prximo de una fusin total. Con esto, se concluye que los estados de conciencia y actividad del infante son en ltima instancia estados socialmente negociables tomando su forma con la mediacin de otros reguladores del s mismo. Esto correspondera a una accin social de los otros reguladores del s mismo como un hecho objetivo profundo. En cuanto al s mismo con el otro como experiencia subjetiva, el infante registrara como experiencia subjetiva su experiencia objetiva con otros reguladores del s mismo. En este mbito, el psicoanlisis a trazado dos distinciones en las fusiones primarias las cuales corresponden a experiencias de faltas de limite sintindose uno como parte de otro por una incapacidad madurativa. En cuanto a la fusin secundaria corresponderan a experiencias de prdida de los propios lmites perceptuales y subjetivos, tales experiencias secundarias reecondiciones de la fusin primaria. La postura del autor difiere con estas, ya que las experiencias sociales no seran fusiones primarias o secundarias, sino que seran la experiencia real de estar con alguien, sufriendo los sentimientos cambios importantes. El cambio de experiencia del s mismo correspondera al s mismo nuclear y al otro nuclear, pero ambos no se fusionan. Se toma el ejemplo de los juegos, en que el infante experimenta una variedad de juegos con los progenitores, l bebe es capaz de distinguir tal actividad de los padres pertenecientes a ellos como nuclear, surgiendo en el pequeo un estado general de sentimiento con independencia en la forma de juego de los padres, es decir el infante no tendra dificultades en sentir quin es quin y qu pertenece a quin. Incluso en las conductas imitativas, no se podra hablar de fusin o disolucin del s mismo/otro, ya que es improbable que en tales condiciones se obstruyan indicios diferenciadores. En cuanto al aspecto del s mismo en las interacciones que involucran regulacin de seguridad o transformaciones del estado del infante, tales interacciones no estaran facultadas para provocar alteraciones afectivas. Con esto se establece que las conductas del progenitor y el infante son complementarias, mantenindose el s mismo y el otro intactos, por lo cual no se producira una confusin en el nivel de relacionamiento nuclear. Por otra parte, el autor establece que la experiencia alterada del s mismo y la regulacin del otro que ayud a alterar la experiencia del s mismo del infante, la experiencia del s mismo de este siempre corresponderan a l. El sentimiento de estar seguro solo le pertenece al s mismo. El autor establece que, si se llegase a producir un cambio en la experiencia del s mismo y del papel del regulador, no sera parte de elementos fusionados sino que estn simplemente relacionados. La experiencia vivida y el episodio recordado contienen distintos atributos de la experiencia en relaciones recprocas, convirtindose estos en episodios especficos para la memoria pasando a ser episodios generalizados, para luego ser parte una experiencia interactiva que contiene representaciones de interacciones generalizadas (RIG). Diferentes relaciones con un mismo otro regulador del s mismo tendr su propio RIG distintivo, en consecuencia el infante vuelve a experimentar distintos modos de estar con otro regulador del s mismo, lo cual influye en funciones reguladoras como del mbito biolgico al psquico, pasando por lo fisiolgico. En base a esto, surgira el concepto de compaero evocado que contiene la experiencia subjetiva de estar con otro regulador del s mismo histrico. Este compaero evocado estar con un otro regulador del s mismo, que puede ocurrir dentro o fuera de los consciente. Este compaero surge en la representacin de interacciones generalizadas (RIG) como un ejemplar activo de sucesos que estn en el recuerdo. Con esto se explicara la aparicin de una representacin abstracta. Esta experiencia interactiva se compara con la experiencia que ocurre al mismo tiempo con el compaero evocado. As la RIG ser actualizada con el paso del tiempo. El compaero evocado agregara otra dimensin a la experiencia, convirtindose en un recuerdo activo durante episodios histricamente similares que involucran la presencia de otro regulador del s mismo. Diferencias en RIG, compaero evocado y modelo de gua de apego: RIG es el bloque clsico en el que se construyen modelos gua, es decir es el montaje de interacciones en una representacin amplia de una persona en ciertas condiciones. En segundo lugar, RIG corporiza las expectativas en las que resultan alteraciones creadas recprocamente en la experiencia del s mismo, es decir no tienen que ver solo con el apego. Por ltimo, el modelo gua se toma bajo el prisma cognitivo. Compaero evocado como RIG se enmarca en una memoria episdica adecuada a la naturaleza afectiva de estar con otros, estando ms cerca de la vividez de la experiencia subjetiva. El compaero evocado cumple una doble funcin: representa la historia pasada de un tipo de interaccin con un otro y orienta creando del pasado expectativas respecto al presente y futuro. RIG y Compaero Evocado difieren de los objetos s mismo y fusiones ya que la presencia de un compaero evocado no agrieta la integridad del sentido nuclear del s mismo y del otro. Los compaeros evocados no desaparecen, sino que subsisten en estado de latencia. El compaero evocado opera en la interaccin real con otro como tambin en ausencia de otros. Con esto ayudara a evaluar la experiencia y estabilizando y regulando la experiencia del s mismo. As se asemeja a un modelo gua. Con esto se establece que al haber RIG en presencia de otro, el infante solo necesitara la memoria de reconocimiento para traer a la mente al compaero evocado, ya que el episodio real est ocurriendo frente al infante. Para que el infante pueda estar en un episodio vivido con otro pero en ausencia de este, necesita recurrir a la memoria evocativa, lo que hace suponer que el bebe tendra recuerdos constantes de interacciones previas. La vida del infante sera en su mayora social, como tambin estara bajo experiencias sociales. Con esto se establece que el pequeo al estar continuamente con compaeros reales y evocados, el infante podra sentirse confiado y seguro del mundo que explora. Tal experiencia se toma como un acto constructivo y no como periodos de regresin. La madre con su historia y con los mismos episodios interactivos observables con el pequeo, influyen en la experiencia subjetiva de la observacin en curso. Es decir, habra un puente entre el mundo subjetivo del pequeo y la madre.