sobre la democracia

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Indiferente a la originalidad de mis ideas, pero celoso de su coherencia, intento trazar aquí un esquema que ordene, con la menor arbitrariedad po- sible, algunos temas dispersos, y ajenos. Amanuense de siglos, sólo compongo un centón[1] reaccionario. Si un propósito didáctico me orientara, habría escuchado sin provecho la dura voz reaccionaria. Su escéptica confianza en la razón nos disuade tanto de las aseveraciones enfáticas, como la de las impertinencias pedagógicas. Para el pensamiento reaccionario, la verdad no es objeto que una mano entregue a otra mano, sino conclusión de un proceso que ninguna impaciencia precipita. La enseñanza reaccionaria no es exposición dialéctica del universo, sino diálogo entre amigos, llamamiento de una libertad despierta a una libertad adormecida. Demasiado consciente de fundarse sobre evidencias circunscritas, sobre

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Sobre La Democracia

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Indiferente a la originalidad de mis ideas, pero celosode su coherencia, intento trazar aqu un esquema queordene, conlamenor arbitrariedadposible, algunostemas dispersos, y ajenos. Amanuense de siglos, slocompongo un centn[1]reaccionario.Si un propsito didctico me orientara, habra escuchadosinpro!echoladura!oz reaccionaria. Suesc"ptica confianza en la razn nos disuade tanto delas ase!eraciones enfticas, como la de las impertinencias pedaggicas. #ara el pensamiento reaccionario, la !erdad no es objeto que una manoentregue a otra mano, sino conclusin de un procesoque ninguna impaciencia precipita. $a ense%anzareaccionaria no es e&posicin dial"ctica deluni!erso,sino dilogo entre amigos, llamamiento de una libertaddespierta a una libertad adormecida.'emasiadoconscientedefundarsesobree!idenciascircunscritas, sobre raciocinios cuya !alidez se confinaen determinados uni!ersos de discurso, sobre uncauteloso acecho a la no!edad de la !ida, elpensamiento reaccionario teme la postiza simetra delos conceptos, los automatismos de la lgica, lafascinacin de las simplificaciones ligeras, la falacia denuestro anhelo de unidad.(stas pginas sistemticas no descuidan sus preceptos. #ara un pensamiento preca!ido, los sistemasno degeneran en retrica de ideas. $ejos deparalizarnos en una complacencia dogmtica, lossistemas nos obligan a una creciente perspicacia. Anteel sistema, donde se objeti!a y se plasma, elpensamientoseasume. Suespontaneidadciegasemudaenconcienciadesus postulados, desuestructura, y de sus fines. )ada sistema sucesi!o !iolasucesi!as inocencias. )ada sistema restaura unameditacin que nos libera.(ste parcial intento es artificio de un pensamientoreaccionario. *oradapasajeradeunhu"spedobstinado. +o inicio catequizacin alguna ni ofrezcorecetariosprcticos. Ambiciono, tansolo, trazar unacur!a lmpida.,areaociosa. $ucidez est"ril. #erolos te&tos reaccionarios no son ms que estelas conminatorias entreescombros.(l dilogo entre democracias burguesas y democraciaspopularescarecedeinter"s, auncuandonocarezca de !ehemencia, ni de armas.,anto capitalismo y comunismo, como sus formashbridas, !ergonzantes olar!adas, tienden, por caminosdistintos, haciaunametasemejante. Suspartidariosproponent"cnicasdismiles, peroacatanlosmismos!alores. $assolucioneslosdi!iden- lasambiciones los hermanan. *"todos ri!ales para laconsecucin de un fin id"ntico. *aquinarias di!ersas alser!icio de igual empe%o.$os idelogos del capitalismonorechazanel idealcomunista- el comunismo no censura el ideal burgu"s.Al in!estigar larealidadsocial del concurrente, paradenunciar sus !icios, o disputar la identificacin e&actade sus hechos, ambos juzgan con criterio anlogo. Siel comunismo se%ala las contradicciones econmicas,la alienacin del hombre, la libertad abstracta, laigualdad legal de las sociedades burguesas, elcapitalismo subraya, paralelamente, la impericia de laeconoma, la absorcin totalitaria del indi!iduo, laescla!itud poltica, el restablecimiento de ladesigualdad real en las sociedades comunistas.Ambosaplicanunmismosistemadenormas, ysulitigioselimitaadebatir lafuncindedeterminadasestructuras jurdicas. #ara el uno la propiedad pri!adaes estorbo, para el otro, estmulo- pero amboscoincidenenladefinicindel bienquelapropiedadestorba o estimula.Aunque insistan ambos sobre la abundancia de bienesmaterialesqueresultardesutriunfo, yauncuandosean ambos augurios de hartazgo, tanto la miseria quedenuncian como la riqueza que encomian slo son lasms ob!ias especies de lo que rechazan oambicionan. Sus tesis econmicas son!ehculodeaspiraciones fabulosas.Ideologas burguesas e ideologas del proletariadoson, endistintosmomentos, yparadistintasclasessociales, portaestandartes ri!ales de una mismaesperanza. ,odas se proclaman !oz impersonalde lamisma promesa. (l capitalismo no se estima ideologaburguesasinoconstruccindelaraznhumana- elcomunismo no se declara ideologa de clase sinoporque afirma que el proletariado es delegado .nico delahumanidad. Si el comunismodenuncialaestafaburguesa, y el capitalismo el enga%o comunista,ambos son mutantes histricos del principiodemocrtico- ambos ansanunasociedaddondeelhombre se halle, en fin, se%or de su destino./escatar alhombre de la a!aricia de la tierra, de laslacras de su sangre, de las ser!idumbres sociales essu com.n propsito. $a democracia espera la redencindel hombre, yrei!indicaparael hombrelafuncin redentora.0encer nuestro atroz infortunio es el ms naturalanhelodel hombre, peroserairrisorioqueel animalmenesteroso, a quien todo oprime y amenaza, confiaraen su solainteligenciapara sojuzgar lamajestaddeluni!erso si no se atribuyese una dignidad mayor y unorigenmsalto. $ademocracianoesprocedimientoelectoral, como lo imaginan catlicos cndidos- nir"gimen poltico como lo pens la burguesahegemnica del siglo 1I1- ni estructura social como loense%a la doctrina norteamericana- ni organizacineconmica como lo e&ige la tesis comunista.2uienes presenciaron la!iolencia irreligiosa de lascon!ulsiones democrticas creyeron obser!ar unasuble!acin profana contra la alienacin sagrada. Auncuando la animosidad popular slo estalleespordicamente en tumultos feroces o burlescos, unacrticasa%udadel fenmenoreligiosoyunlaicismomilitante acompa%an, sorda y subrepticiamente, lahistoria democrtica. Sus propsitos e&plcitos parecensubordinarseauna!oluntadmshonda3a!ecesoculta, a !eces p.blica, callada a !eces, a !ecesestridente3 de secularizar la sociedad y el mundo. Sufer!or irreligioso, ysurecatolaico, proyectanlimpiarlas almas de todo e&cremento mstico.Sin embargo, otros obser!adores de sus instantescrticos o de sus formas e&tremas han repetidamentese%aladosucoloracinreligiosa. (l dogmatismodesus doctrinas, supropagacininfecciosa, laconsagracinfanticaqueinspira, laconfianzafebril quedespierta han sugerido paralelos inquietantes. $asociologadelasre!olucionesdemocrticasresucitacategoras elaboradas por la historia de las religiones4profeta, misin, secta. *etforas curiosamentenecesarias.(l aspectoreligiosodel fenmenodemocrticosuelee&plicarse de dos maneras distintas4 para la sociologaburguesa, lassemejanzasresultandel sacudimientoque tumultos sociales propagan en los estratosemoti!os en donde estiman que la religin se origina-paralasociologacomunista, lasimilitudconfirmaelcarcter social delas actitudes religiosas. All todaemocinintensaasumeformasreligiosas- aqu todareligin es disfraz de fines sociales.$a sociologa burguesa no alcanza la penetracin delas tesis mar&istas. $as !agas genealogas con que sesatisfacenosecomparanalaidentificacinprecisaque el mar&ismo define. (l rigor del sistema mar&ista lopreca!edeequ!ocos- espejodela!erdad, podradecirse que basta in!ertirlo para no errar. $asfilosofasdelahistoria, msquesntesisambiciosas sonherramientas del conocimientohistrico.)adafilosofaseproponedefinir larelacinentreelhombre y sus actos.(l problemadelafilosofadelahistoriaesdeunageneralidadabsolutaporquetodoobjetodelaconcienciaesactoanteriormentealadefinicindesuestatutometafsico, queesactotambi"n. $amaneradedefinir larelacinentre el hombrey sus actosdetermina toda e&plicacin del uni!erso.$as definiciones filosficas de la relacin concreta sonteoras de la moti!acin humana. $as teorasinterrogan los hechos para despertarlos de su inerciainsignificati!a, y penetran, como ne&os inteligibles, ensumasaamorfa. +ingunateoraesfalsaporquelarelacinconcretaesestructuracomplejayrica- perocada una, aisladamente, sacrifica la espesa tramahistricaa una ordenacin arbitrariay descarnada.#ara e!itar falsificaciones patentes, el historiadoremplea, simultnea o sucesi!amente, las di!ersasteoras propuestas4 urgencia del instinto,determinacin "tnica, condicionamiento geogrfico,necesidad econmica, progresin intelectual, propsitoa&iolgico, resolucin caprichosa- pero a.n si el tactode la imaginacin lo protege de las torpezassistemticas, laincoherenciadesuprocedimientololimita a una yu&taposicin casual de factores. $asdi!ersas teoras no forman sendos sistemas cerrados,ni su agrupacin accidental sobrepasa aciertosespordicos y fortuitos.,oda situacin histrica encierra la totalidad demoti!aciones posibles 5con una predominancia alternada6, ylasconcretasconfiguracionesdemoti!osdependendeunprincipiogeneral quelasordena.Acualquiertipodemoti!acinaquepreferencialmentepertenezca, y en cualquier configuracin en donde sesit.e, todo acto cualquiera se halla orientado por unaopcin religiosa pre!ia.,anto los encadenamientos lineales de actos de igualespecie, como los !nculos entre agrupaciones deactos heterog"neos, son funcin de su camporeligioso. (l indi!iduo ignora usualmente la opcinprimigeniaquelodetermina- peroel rumbodesusinstintos, la preeminencia de tal o cual carcter "tnico,lapre!alenciadedi!ersasinfluenciasgeogrficas, la!igencia de determinada necesidad econmica, lapreponderacin de ciertas conclusiones especulati!as,la !alidez de unos u otros fines, la primaca de!oliciones distintas, son efectos de una opcin radicalante el ser, de una postura bsica ante 'ios.,odoactoseinscribeenunamultitudsimultneadeconte&tos-pero un conte&toun!oco,inmoto y .ltimolos circunscribe a todos. 7na nocin de 'ios, e&plcitao tcita, es el conte&to final que los ordena.$a relacin entre el hombre y sus actos es una relacinmediatizada. $a relacin entre elhombre y sus actoses relacin entre definiciones de 'ios y actos delhombre. (l indi!iduo histrico es su opcin religiosa.+inguna situacin concreta es analizable sin residuoso dilucidable coherentemente mientras no sedetermine el tipo de fallo teolgico que la estructura. (lanlisis religioso que permite dibujar las articulacionesde la historia, la disposicin interna de los hechos, y elorden aut"ntico de la persona es de carcter emprico,y no presupone, ni para definirlo, ni para aplicarlo, unafe cualquiera. Sin presumir la objeti!idad de lae&periencia religiosa, constatando tan solo su realidadfenomenal, el anlisis la asume, metdicamente, comofactor determinante de toda condicin concreta.Slo el anlisis religioso, al sondar un hecho democrtico cualquiera, nos esclarece la naturaleza delfenmenoynospermiteatribur alademocraciasudimensin e&acta. #rocediendo de distinta maneranuncalogramosestablecer sudefinicingen"tica, nimostrar lacoherenciadesus formas, ni relatar suhistoria.$a democracia es una religin antropotesta. Suprincipio es una opcin de carcter religioso, un actopor el cual el hombre asume al hombre como 'ios.Su doctrina es una teologa del hombredios- suprcticaeslarealizacindel principioencomportamientos, en instituciones y en obras.$a di!inidad que la democracia atribuye al hombre noes figura de retrica, imagen po"tica, hip"rboleinocente, enfin, sinodefinicinteolgicaestricta. $ademocracia nos proclama con elocuencia, y usando deunl"&ico!ago, laeminentedignidaddel hombre, lanobleza de su destino o de su origen, su predominiointelectual sobre el uni!erso de la materia y delinstinto. $a antropologa democrtica trata de un ser aquien con!ienen los atributos clsicos de 'ios.$as religiones antropotestas forman un grupohomog"neodeactitudesreligiosasquenoeslcitoconfundir con las teologas pantestas. (l dios delpantesmoesel uni!ersomismocomo!uelodeungran pjaro celeste- para el antropotesmo el uni!ersoes estorbo o herramienta del dios humano.(l antropotesmo, antelamiseriaactual denuestracondicin, defineladi!inidaddel hombrecomounarealidadpasada, ocomounarealidadfutura. (nsupresente de infortunio el hombre es un dios cado o undios naciente. (l antropotesmo plantea un primerdilema al dios bifronte.$ascosmogonasrficasylassectasgnsticassonantropotesmos retrospecti!os- la moderna religindemocrticaesantropotesmofuturista.Aquellassondoctrina de una catstrofe csmica, de un diosdesmembrado, de una luz cauti!a- "sta es doctrina deuna teogona dolorosa.(l antropotesmo retrospecti!o es un dualismosombro- el antropotesmo futurista, un monismojubiloso. $a doctrina dualista ense%a la absorcin delhombre en la materia pra!a[2]y el retorno penoso a suesplendor pret"rito- la doctrina monista anuncia lagerminacindesugloria. 'iosprisioneroenlatorpeinercia de su carne, o dios que la materia le!anta comosu grito de !ictoria. (l hombre es !estigio de sucondicin perdida, o arcilla de su condicin futura.Antropotesmos dualistas y antropotesmo monista sonanomismos "ticos. Ambos se compactan en secta deelegidos. Ambos son insurrecciones metafsicas.$a doctrina democrtica es una superestructuraideolgica, pacientemente adaptada a sus postuladosreligiosos. Su antropologa tendenciosa se prolonga enapolog"ticamilitante. Si launadefineal hombredemanera compatible con su di!inidad postulada, la otra,para corroborar el mito, define al uni!erso de maneracompatibleconesaartificiosadefinicindel hombre.$a doctrina no tiene finalidad especulati!a. ,oda tesisdemocrtica es argumento de litigante, y no !eredictode juez.7na bre!e definicin mue!e su mquina doctrinal.)on el fin de cumplir su propsito teolgico, laantropologa democrtica define al hombre como!oluntad.#ara que elhombre sea dios, es forzoso atribuirle la!oluntadcomoesencia, reconocer enla!oluntadelprincipioylamateriamismadesuser. $a!oluntadesencial, enefecto, essuficienciapura. $a!oluntadesencial es atributo tautolgico de la autonomaabsoluta. Si la esencia de un ser no es su !oluntad elser no es causa de s mismo sino efecto del ser quedetermina su esencia. Si la esencia humana e&cede la!oluntaddel hombreesee&cedentelosujetaauna!oluntad e&terna. (l hombre democrtico no tienenaturaleza sino historia4 !oluntad in!iolable que sua!entura terrestre disfraza pero no altera.Si la !oluntad es su esencia el hombre es libertad puraporque la libertad es determinacin autnoma.0oluntadesencial, el hombreesesencial libertad. (lhombredemocrticonoeslibertadcondicionada, libertadqueunanaturalezahumanasupedita, sinolibertadtotal. Slosusactoslibressonactosdesuesencia, yloqueaminorasulibertadlocorroe. (lhombre no puede someterse sin dimitir. Su libertad noprescribe porque una esencia no prescribe.)omosulibertadnoesconcesindeuna!oluntadajena sino acto analtico de su esencia la autonomade la !oluntad es irrestricta, y su soberana, perfecta.Slo la !olicin gratuita es legtima, porque slo ella essoberana.Siendosoberana, la!oluntades id"nticaentodos.Accidentes que noalteranlaesencia nos distinguen.$a diferencia entre los hombres no afecta la naturalezadela!oluntadenninguno, yunadesigualdadreal!iolara la identidad de esencia que los funda.,odoslos hombres son iguales a pesar de su !ariedadaparente.#ara la antropologa democrtica los hombres son!oluntades libres, soberanas e iguales.'espu"s de asentar su definicin antropolgica ladoctrina procede a elaborar las cuatro tesis ideolgicasde su apolog"tica.$aprimera, y la ms ob!ia, delas ideologas democrticas es el atesmo pat"tico.$a democracia no es atea porque haya comprobado lairrealidad de 'ios sino porque necesita rigurosamenteque 'ios no e&ista. $a con!iccin de nuestra di!inidadimplica la negacin de su e&istencia. Si 'ios e&istieseel hombre sera su criatura. Si 'ios e&istiese el hombreno podra palpar su di!inidad presunta. (l 'iostrascendente anula nuestra in.tilrebelda. (latesmodemocrtico es teologa de un dios inmanente.#ara confirmar nuestra di!inidad problemtica elatesmo ense%a que los otros dioses son in!entos delhombre4 hijosdel terrorodel sue%o- smbolosdelasociedadodenuestrasracesobscenas- mitosquecumplen la alienacin suprema. $a democracia afirmaque la carro%a de la libertad humana es cuna de losenjambres sagrados.$a idea del progreso es la teodicea[3]delantropotesmo futurista, la teodicea del dios quedespierta desde la insignificancia del abismo. (lprogreso es la justificacin de la condicin actualdelhombre y de sus ulteriores teofanas.(l ser que reprime, con ritos precarios, el murmullo desuanimalidadrecalcitrantenocreeensudi!inidadoculta sino imagina que la materia primiti!a es mquina productora de dioses. Si un proceso deperfeccionamiento ine!itable no suplanta la reiteracindel tiempo, si lo complejo no pro!iene de lo simple, silo inferior no engendra los t"rminos superiores de lasseries, si la razn no emerge de una neutralidadpret"rita, si la noche no es preparacin e!ang"lica a laluz, si el bien no es faz del mal arrepentido, el hombreno es dios. +o bastan las recetas que almacena paraque su inteligencia presienta, en el clculo decomportamientos e&ternos, premisas de suomnisciencia futura. +o basta la le!e impronta de susgestos sobre la corteza de la tierra para presumir quela astucia de sus manos le prepara una omnipotenciadi!ina. (l progresoes dogmaquerequiereunafepre!ia.#aragarantizar al hombrequetransformarel uni!ersoylograrlabrarloalamedidadesuanhelolademocraciaense%aquenuestroesfuerzodemi.rgicoprolongael mpetuquesole!antalamateria. 2ueelmotor del progreso sea una dial"ctica interna, unpasajedelahomogeneidadprimiti!aaunaheterogeneidadcreciente, unaseriedeemergenciassucesi!as, o el empe%o atre!ido de un aborto de lanecesidad, ladoctrinasuponequeundemiurgoausente, desdesuine&istenciaprimera, elaborael alimento de su epifana futura.$a teora de los !alores es la ms espinosa empresade la ideologa democrtica. Atesmo y progreso slopidenunaretricaenfticaporquelae&istenciade'ios no es ob!ia, porque un simple ademn hacia elfuturo confirma la fe de un progresista !acilante-mientrasquelapresenciade!aloreseshechoqueanula los postulados democrticos con insolenciatranquila.Si placer y dolor ya muestran una independenciainquietante, 8qu" subsiste de nuestra di!inidadproclamada sila !erdad nos ata a una naturaleza delas cosas, si el bien obliga como un llamamientoirresistible, si la belleza e&iste en la pulpa del objeto9Si el hombre no es el supremo hacedor de los !aloresel hombreesun!iajerotaciturnoentremisterios, elhombre atra!iesa los dominios de un incgnitomonarca.Seg.nladoctrinademocrticael !aloresunestadosubjeti!oquecompruebalaconcordanciaentreuna!oluntad y un hecho. $a objeti!idad del !alor esfuncin de su generalidad emprica, y su carcternormati!o pro!iene de su referencia !ital.0alor es loque la !oluntad reconoce como suyo.$a reduccin del!alor a su esquema bsico procedeconastuciasdi!ersas. )iertasteorasprefierenunareduccin directa, y ense%an que !alor es meramentelo que elhombre declara serlo. #ero las teoras msusuales eligen rutas menos ob!ias. $a funcinbiolgica, o la forma social, suplantan la !oluntaddesnuda y representan su manifestacin concreta.#lacerydoloraparecencomosntomasdeuna!idaque se cumple o que fracasa- el bien es el signo de unfeliz funcionamiento biolgico o de un acto propicio a lasuper!i!encia social- la belleza es indicio de unaposible satisfaccin de instintos, de una e&altacinposible de la !ida, o e&presin aut"ntica de unindi!iduo, reflejo aut"ntico de una sociedad- !erdad, enfin, es el arbitrio que facilita el apoderamiento delmundo. :ticas utilitarias o sociales, est"ticasnaturalistas o e&presionistas, epistemologaspragmticas o instrumentales intentan reducir el!alora su esquema prepuesto y no son ms que artefactosideolgicos.$a.ltimatesisdelaapolog"ticademocrticaeseldeterminismo uni!ersal. #ara afianzar sus profecas, ladoctrina necesita un uni!erso rgido. $a accineficaz requiere un comportamiento pre!isible, y laindeterminacin casual suprime la certeza del propsito. )omo el hombre no sera soberano sino en ununi!ersoregidoporunanecesidadciega, ladoctrinarefiere a circunstancias e&ternas los atributos delhombre. Si el mundo, la sociedad y el indi!iduo no son,enefecto, reductiblesamerasconstantescasuales,a.n el empe%o ms tenaz, ms inteligente y msmetdico puede fracasar ante la naturalezainescrutable de las cosas, antelainsospechablehistoriadelassociedades, antelasimpre!isiblesdecisiones de la conciencia humana. $a libertad totaldelhombre pide un uni!erso escla!izado. $a soberana dela !oluntad humana slo puede regentar cad!eres decosas.)omoundeterminismouni!ersal arrastralalibertadmisma que lo proclama, la doctrina recurre, paraesqui!ar la contradiccin que la anula, a una acrobaciametafsica que transporta al hombre, desde supasi!idaddeobjeto, hastaunalibertaddediosrepentino.Al realizarse en comportamientos, en instituciones y enobras, el principiodemocrticoprocedeconse!eracoherencia. $a aparente confusin de sus fenmenospatentiza la e&traordinaria constancia de la causa. (ncircunstancias di!ersas los rumbos son distintos paraque el propsito permanezca intacto.'os formas sucesi!as del principio inspiran la prcticademocrtica4 el principiocomo!oluntadsoberanaocomo !oluntad aut"ntica.+o concediendo legitimidad sino a la !oluntad gratuita,la democracia indi!idualista y liberal traduce, en normainapelable, los equilibrios momentneos de !oluntadesafrontadas en un m.ltiple mercado electoral. (lcorrecto funcionamiento del mercado supone uncampo raso e&purgado de resabios "ticos,escamondadodeprestigiospret"ritos, limpiodelosdespojos del pasado. $a!alidez de las decisionespolticas y de las decisiones econmicas es funcin dela presin que ejerce la !oluntad mayoritaria. $asreglas "ticas y los !alores est"ticos resultan del mismoequilibrio de fuerzas. $os mecanismos automticos delmercado determinan las normas, las leyes y losprecios.#ara la democracia indi!idualista y liberal la !olicin eslibre de obligaciones internas pero sin derecho deapelar a instancias superiores contra las normaspopulares, contralaley formalmentepromulgadaocontra el precio personalmente establecido. (ldemcrataindi!idualistanopuededeclarar queunanorma es falsa sino que anhela otra- ni que una ley noesjustasinoquequiereotra- ni queunprecioesabsurdo sino que otro le con!iene. $a justicia, en unademocracia indi!idualista y liberal, es lo que e&iste encualquier momento. Su estructura normati!a esconfiguracin de !oluntades, su estructura jurdicasuma de decisiones positi!as, y su estructuraeconmica conjunto de actos realizados.$ademocraciaindi!idualistasuprimetodainstitucinque suponga un compromiso irre!ocable, unacontinuidad rebelde a la deleznable trama de los das.(l demcrata rechaza el peso del pasado y no aceptael riesgodel futuro. Su!oluntadpretendeborrar lahistoria pret"rita y labrar sin trabas la historia !enidera.Incapazdelealtadaunaempresaremitidapor losa%ossupresentenoseapoyasobreel espesor deltiempo- sus das aspiran a la discontinuidad de un relojsiniestro.$a sociedad regida por la primera forma delprincipiodemocrticoinclinahacialaanarquatericadelaeconoma capitalista y del sufragio uni!ersal. (l principio re!iste su segunda forma cuando el uso dela libertad amenaza los postulados democrticos. #erola transformacin de la democracia liberal eindi!idualistaendemocraciacolecti!aydespticanoquebranta el propsito democrtico ni adultera losfines prometidos. $a primera forma contiene y lle!a lasegundacomounaprolongacinhistricaposibleycomo una consecuencia terica necesaria.(n efecto- si todos los hombres son !oluntades libres,soberanas e iguales ninguna !oluntad puede sojuzgarlegtimamentealasotras- perocomola!oluntadnopuede tener ms objeto legtimo que su propiaesencia, como toda !oluntad que no tenga su esenciapor objetoseniegay seanula, cualquier !oluntadindi!idual que no tenga por objeto su libertad, susoberana y su igualdad peca contra su esenciaaut"ntica, y puede ser legtimamente obligada por una!oluntad recta a obedecerseasmisma.+oimportaque la rebelda contra su propia esencia sea acto deuna sola !oluntad, de una multitud de !oluntades, de lacuasi totalidad de !oluntades e&istentes en un instanteprecisoodelatotalidadmismaporqueladoctrinademocrtica necesariamente postula, frente a las!oluntades per!ertidas e insurrectas, una !oluntad general probaconsigomisma, leal asuesencia, cuyalegitimidadpuedeserrepresentadaporunasola!oluntad recta. *ayora, partido minoritario o indi!iduo, lalegitimidad democrtica no depende de un mecanismoelectoral sino de la pureza del propsito.$a democracia colecti!ista y desptica somete las!oluntades apstatas a la direccin autocrtica decualquier nacin, clase social, partido o indi!iduo queencarne la !oluntad recta. #ara la democraciacolecti!istay desptica, larealizacindel propsitodemocrtico prima sobre toda consideracincualquiera. ,odo es lcito para fundar una igualdad realque permita una libertad aut"ntica donde la soberanadel hombresecoronaconlaposesindel uni!erso.$as fuerzas sociales deben ser encauzadas condecisin inquebrantable hacia la meta apocalptica,barriendo a quien estorbe, liquidando a quien resista.$aconfianza ensupropsitocorrompe aldemcrataautoritario, queescla!izaennombredelalibertadyespera el ad!enimiento de un dios en el en!ilecimientodel hombre.$arealizacinprcticadel principiodemocrticoreclama, en fin, una utilizacin fren"tica de la t"cnica yuna implacable e&plotacin industrial del planeta.$at"cnica no es productodemocrtico,pero elcultode la t"cnica, la !eneracin de sus obras, la fe en sutriunfo escatolgico, son consecuencias necesarias dela religin democrtica. $a t"cnica es la herramienta desuambicinprofunda, el actoposesoriodel hombresobre el uni!erso sometido. (l demcrata espera quelat"cnicaloredimadel pecado, del infortunio, delaburrimiento y de la muerte. $a t"cnica es el !erbo delhombredios.$a humanidad democrtica acumula in!entos t"cnicoscon manos febriles. #oco le importa que el desarrollot"cnico la en!ilezca o amenace su !ida. 7n dios queforja sus armas desde%a las mutilaciones del hombre.'emoniosydiosesnacenlejosdelamiradadeloshombres, y su infancia se aletarga en moradassubterrneas. $a religin democrtica anida en lascriptas medie!ales, en la sombra h.meda donde bullenlas lar!as de te&tos her"ticos.$a predicacin clandestina de mitos dualistas no callabajo el despotismo de los emperadores ortodo&os. $osanatemas conciliares, las sentencias de los prefectosimperiales, los tumultos de la piedad popular, sofocantemporariamente la !oz nefanda, pero sus ecosresucitanen!illorriosmonta%eses, encon!entculosde ciudades fronterizas y entre las legiones delimperio.'esustierrasdee&iliolae!angelizacindualistasepropaga, lejos de la !igilante burocracia bizantina,hacia los la&os se%oros de ;ccidente. $as aguas de laturbiariadasumergensedesepiscopalesybatenelgranito del trono pontificio.$asombratutelar ysangrientadel tercer Inocenciorestaura la unidad quebrada, pero en tierras apartadasydistantes, en)alabria, sobreel /hin, entretelaresflamencos, una nue!a religin ha nacido.$a moderna religin democrtica se plasma cuando eldualismo bogomilo[5]y ctaro[6]se combina y fusionacon el mesianismo apocalptico. (n los parajes de sunocturna confluencia una sombra ambigua se le!anta.$a esperanza mesinica que el cristianismo cumple, ya su !ez renue!a, irrita reiteradamente la febrilpaciencia del hombre.(ninmensosaposentosdeadobeybitumen[7], crneos glabros, inclinados ante elmonarca que apresalas manos sagradas, entonan himnos de !ictoria queun salmista plagia para la uncin de reyezuelos. $asadulacionesirrisoriassetransmutanbajolallamadaprof"tica y el ungido terrestre prefigura al ungidodi!ino. )uandoal templodestrudoslosucedeuntemplo profano los temas mesinicos esparcen suintacta !irulencia. $a impotencia poltica azuza laesperanza mesinica.*ondado de sus e&crecencias carnales, el mesianismotransmite a la Iglesia, sin embargo, el germen de susterribles a!ideces. *uchedumbres esperan eldescensodelaciudadcelesteylaprimeraencarnacin del#aracleto[8]anuncia, entre profetisas desnudas, las cosechas ijadel orgullohumano, todoloqueinflamael orgulloenciendelafuliginosaantorcha. Supropagacinnorequieresinoque elorgullo fulgure porque una nube fugaz !ela elsol inteligible. #ero el orgullo mismo crea las tinieblasdonde slo su propia luz resplandece.,odacon!ersinacaeceenlasrecmarasdel alma,donde la libertad se rinde a las instigaciones delorgullo. +adae&istequenopuedaseducirnos- una!irtud que se deslumbra a s misma, un !icio que sedesfigura a sus propios ojos. ?asta que un solo temanos adule para que acatemos la doctrina entera.)uandohemossucumbidoalaser!il insidia, el desorden aparente de nuestros actos obedece a unapresin que lo orienta.)omo la doctrina democrtica puede e&hibir encualquier instantey encualquier indi!iduolasumantegra de sus consecuencias tericas, su historia nopresenta un desen!ol!imiento doctrinal sino unaprogresi!a posesin del mundo.$a democracia registra su bautismo sobre la fazescarnecida de Bonifacio VIII. (l gesto procazen!uel!eenlap.rpuradesuinsulto, comoenunsudario pontificio, el Sacro Imperio[11]agonizante y lasombra indiferente de los grandes papas medie!ales.$oslegistascesreos[12]resucitanpararestaurar lapotestad tribunicia. (l estado moderno ha nacido.$a proclamacin de la soberana delestado necesita!arios siglos pero las reformas polticas y losseparatismos religiosos que la preparan son sucesosque una firme !oluntad usurpa o elabora. $os estadosnacionales son retorta del estado soberano. Antes de decretar la soberana del hombre, la empresademocrtica deslinda el recinto donde la promulgacinparezca lcita. (n el laberinto jurdico del estadomedie!al la predicacin tropieza contra la libertadpatrimonial de algunos, contra las usurpacionessancionadasdeotros, contralosfuerosnaturalesdetodos. #ero el estado que se estima solo juez de susactos e instancia final de sus pleitos, que no acata sinola norma que su !oluntad adopta y cuyo inter"s es lasuprema ley, puede constituirse en dios secularizado.Alproclamar la soberana delestado, Bodin concedeal hombre el derecho de concertar su destino. (lestado soberano es la primera !ictoria democrtica.(l estadosoberanoes unproyectojurdicoqueelabsolutismo monrquico realiza- y los legistas del reyde @rancia no son los ser!idores de una raza sino deuna idea.(lmonarcacombatelospoderes feudales,los fueros pro!inciales, los pri!ilegios eclesisticos 3para que nada restrinja su soberana3porque elestado debe abolir todo derecho que pretendaprecederlo, toda libertad que pretenda limitarlo. $ajurisdiccin monrquica in!ade las jurisdiccionesse%oriales- la autoridad p.blica suprime la autonomacomunal- el reformismo estatal reemplaza la lentamutacindelascostumbres- yel despotismolegislati!o suplanta estructuras contractuales y pactadas. (labsolutismo ener!a las fuerzas sociales y fabrica unaburocracia centralista que, al usurpar la funcinpoltica, transforma los s.bditos del rey en sier!os delestado.$a soberana del estado moderno se plasma enpluralismodeestadossoberanosencuyoinestableequilibrio incuba la !irulencia nacionalista que coronasendos centralismos sofocantes con imperialismostruculentos.)omo todo episodio democrtico suscita, en sus msfer!ientes propulsores,unespasmodeangustia antela pretensin que se desenmascara, cada forma de ladoctrina comporta una copia negati!a que parece, tansolo, su imagen descolorida y plida, pero que es, en!erdad, un reflejo reaccionario ante el abismo. Amedida que las super!i!encias medie!ales see&tinguen, lahistoriadelademocraciasereducealconflicto entre su principio puro y sus recelosreaccionarios, lar!ados en supositicias[13]alternati!asdemocrticas.A lasoberanadel estado contesta el derechodi!inode los reyes, que no es formulacin religiosa delabsolutismo poltico sino la ms eficaz maneradoctrinalde negarlo. #roclamarel derecho di!ino delmonarca es desmentir su soberana y repudiar lairrecusable !alidez de sus actos. Sobre el monarca dederecho di!ino imperan, jurdicamente, con la religinquelounge, el derechonatural queloprecedeylamoral que lo conmina.(l cadalso del trgico (nero alzara una imagenmeramente pat"tica si hubiesen asesinado tan solo undelegado impotente del despotismo monrquico, perolaimposibilidadderatificar uncisma, !iolentandosuconciencia, lle!a al?orbn flcido y tonto [Luis XVI],entre el silencio de cien mil personas, y bajo el redoblede tambores, hasta el ms noble de sus tronos.$a segunda etapa de la in!asin democrtica se iniciacuandoel hombrereclama, enel marcodel estadosoberano, la soberana que la doctrina le concede.,odare!olucindemocrticaconsolidaal estado. (lpueblo re!olucionario no se alza contra el estadoomnipotente sino contra sus posesores momentneos.(l pueblo no protesta contra la soberana que lo oprime sino contra sus detentadores en!idiados. (l pueblorei!indica la libertad de ser su propio tirano.Al proclamar la soberana popular, /ousseau anticipasu realizacin plenaria pero forja la herramientajurdica de las codicias burguesas.(l herederodelassoberanasestatales, el monarcapululantedelas sociedades allanadas, seprecipitasobreun mundocedidoalaa!idez desuapetitoutilitario. $atesisdelasoberanapopular trozalosligamentos a&iolgicos de la acti!idad econmica paraque suceda a la b.squeda de un sustento congruo elafn de una riqueza ilimitada. $a e&pansin burguesaagarrota el planeta en la red de sus trajinesinsaciables.$a era democrtica presenta un incomparable desarrollo econmico porque el !alor econmico esparcialmente d.ctila los postuladosdemocrticos.(l!alor econmico tolera una indefinida dilatacincaprichosa y su n.cleo slido se e&pande en elsticasconfiguraciones arbitrarias. (l hombre no es soberano,tampoco, delos!aloreseconmicos- perolaposiblealternancia de todos, y el carcter artificial de muchos,permiten que el hombre presuma, ante ellos, unasoberana que elresto del uni!erso le niega. (l!aloreconmico es el menos absurdo emblema de nuestrasoberana quim"rica.7n notorio predominio de la funcin econmicacaracteriza la sociedad burguesa, donde la economadetermina la estructura, fija la meta y mide losprestigios. (l poder econmicoenlasociedadburguesa no acompa%a meramente, y da lustre, al podersocial, sinolocrea- el demcratanoconcibequelariqueza, en sociedades distintas, resulte de los moti!osque fundan la jerarqua social.$a !eneracin de la riqueza es fenmeno democrtico.(l dinero es el .nico !alor uni!ersal que el demcratapuroacataporquesimbolizauntrozodenaturalezaser!ible y porque su adquisicin es asignable alsoloesfuerzo humano. (l culto del trabajo con que elhombre se adula a s mismo es el motor de laeconoma capitalista- y el desd"n de la riquezahereditaria, de la autoridad tradicionalde un nombre,de los dones gratuitos de la inteligencia o la belleza,e&presael puritanismoquecondena, conorgullo, loque el esfuerzo del hombre no se otorga[14].$a tesis de la soberana popular entrega la direccindel estado al poder econmico. $a clase portadora dela esperanza democrtica encabeza, ine!itablemente,suagresin contra el mundo. (l sufragio uni!ersalelige, ensuscomicios, losms!ehementesdefensoresdelasaspiracionespopulares- perolosparlamentarioselegidosgobiernan, conlaburguesaqueabsorbe los talentos, para la burguesa que multiplicala riqueza.$osmandatarios burgueses del sufragioprohjanelestadolaicoparaqueningunaintromisina&iolgicaperturbe sus combinaciones. 2uien tolera que unreparo religioso inquiete la prosperidad de un negocio,que un argumento "tico suprima un adelanto t"cnico,que un moti!o est"tico modifique un proyecto poltico,hierelasensibilidadburguesaytraicionalaempresademocrtica.$a tesis de la soberana popular entrega, a cadahombre, la soberana determinacin de su destino.Soberano, el hombrenodependesinodesucaprichosa!oluntad. ,otalmentelibre, el solofindesusactos es la e&presin inequ!oca de su ser. $a rapi%aeconmica culmina en un indi!idualismo mezquino, porel cual laindiferencia"ticaseprolongaenanarquaintelectual. $afealdaddeunaci!ilizacinsinestilopatentiza el triunfo de la soberana promulgada, comosi una!ulgaridadimp.dicafueseel trofeoapetecidoporlasfaenasdemocrticas.[16](nlasllamasdelaproclamacin inepta, el indi!iduo arroja, como ropajeshipcritas, los ritos que lo amparan, las con!encionesque lo abrigan, los gestos tradicionales que lo educan.(n cada hombre liberado, un simio adormecidobosteza y se le!anta.$a aprensin reaccionaria, que pro!oca cada episodiodemocrtico, in!enta la teora de los derechos delhombre y el constitucionalismo poltico para alambrar ycontener las intemperancias de la soberana popular.$as consecuencias de la tesis espantan a quienes laproclaman y les sugiere remediar su error apelando aimprescriptibles derechos del hombre. (l proyectore!elasuorigenreaccionarioapesardesuendebleargumentacinmetafsicaporquesubstraeral pueblosoberano una fraccin de su poder presunto, pormedio de una declaracin solemne de principios o deuna constitucin ta&ati!a de derechos, es una felonacontra los postulados democrticos.(l liberalismo poltico hereda el ingrato deber desofrenar las pretensiones que parcialmente comparte.$a confusin intelectual que lo caracteriza y la lealtaddi!idida que lo ener!a le impiden acogerse a su francaestirpe reaccionaria, y lo designan, como !ctimaestupefacta e inerme, a la !iolencia democrtica. #eroel liberalismomantu!o, apesardesuincompetenciaterica, !estigios de sagacidad poltica.$aterceraetapadelaconquistademocrticaeselestablecimiento de una sociedad comunista.(l esquemaclsicodel *anifiestonorequiererectificacin alguna4laburguesaprocrea elproletariadoque la suprime.$a sociedad comunista surge del proceso que engendra un proletariado militante, una agrupacin socialpul!erizadaenindi!iduossolitariosyunaeconomacuya integracin creciente necesita una autoridadcoordinada y desptica- pero tanto elproceso mismocomo su triunfo poltico resultan del propsito religiosoque lo sustenta. (lcomunismo no es una conclusindial"ctica, sino un proyecto deliberado.(n la sociedad comunista la doctrina democrticadesenmascara su ambicin. Su meta no es la felicidadhumilde de la humanidad actual sino la creacin de unhombre cuya soberana asuma la gestin del uni!erso.(l hombre comunista es un dios que pisa el pol!o de latierra.#ero eldemiurgo humano sacrifica la libertad posibledel hombre en aras de su libertad total. Si laindocilidad de la carne irrita su bene!olencia di!ina, yreclama una pedagoga sangrienta, el mito que loembriaga le certifica la inocencia del terror. Sinembargo, un entusiasmo pueril lo protege, a.n, de lasabyecciones postreras.(l propsito democrtico e&tingue, lentamente, lasluminariasdeuncultoinmemorial. (nlasoledaddelhombre, ritos obscenos se preparan.(ltedio in!ade eluni!erso donde elhombre no hallasinolainsignificanciadelapiedrainerteoel reflejoreiterado de su cara lerda. Al comprobar la !anidad desu empe%o, elhombre se refugia en la guarida atrozde los dioses heridos. $a crueldad solaza su agona.(l hombre ol!ida su impotencia y remeda la omnipotencia di!ina ante el dolor in.til de otro hombre aquien tortura.(n el uni!erso del dios muerto y del dios abortado, elespacio, atnito, sospechaquesuoquedadserozacon la lisa seda de unas alas.)ontra la insurreccin suprema una total rebelda nosle!anta. (l rechazo integral de la doctrina democrticaes el reducto final, y e&iguo, de la libertad humana. (nnuestro tiempo la rebelda es reaccionaria o no es msque una farsa hipcrita y fcil.[1] m. ;bra literaria, en !erso o prosa, compuesta consentenciasye&presionesdeautoresdi!ersos. 5/ealAcademia de la $engua6.[2] Adjeti!o4 #er!erso, mal!ado y de da%adascostumbres. 5/eal Academia de la $engua6.[3] ,eodicea es el tratado o estudio o discursoAnaturalBsobredios4 loqueel hombre, sinnadaqueconsidere re!elacin o palabra !enida de AfueraB,puede decir sobre el ser o los seres superiores.[4] 'eterminismo significa rigidez, in!ariabilidad,funcionamientomecnicoperfectamentegobernable,leyes inmutables operantes en las cosas. Sin esto elhombre no sera AreyB, no podra gobernar, su!oluntad libre sera como una burla.[5] (sta curiosa palabra significa amigo de 'ios y esde procedencia esla!a. Cmez '!ila se refiere a lasideas dualistas nacidas en ?ulgaria en la mente de unsacerdote que as mismo se llam de ese modo.[6] $osctarosfueronunosherejesdel cristianismoque, por criticar la estructura de la Iglesia y el ejerciciodel poder de los eclesisticos, y llamndose a smismo puros 5eso significa el nombre6 terminaronadoptando una fe distinta de la cristiana, maniquea.[7] ?et.n.[8] (l (spritu Santo, llamado as por ser abogado.[9] Dliasta o milenarista es quien mantiene la creenciaenunreinadopolticode=esucristoquedurarmila%os 5de all ambos nombres6.[10] Soteriologa es, en teologa, el estudio de lasal!acin operada por =esucristo, segunda persona dela Santsima ,rinidad encarnada como hombreperfecto. >ipstasis es la palabra griega para persona.7nin hiposttica es la que ocurri en =esucristo, unasolapersona5laSegundadelaSantsima,rinidad6pero con dos naturalezas.[11] SacroImperioRomano-Germnico sellamel Imperio cristiano que AsiguiB al ImperioCarolingio, que fue, a su !ez, el intento de restablecerel antiguo Imperio /omano cristiano.[12] $os conocedores y redactores de las leyesimperiales del )"sar.[13] Supuestas o fingidas.[14] (l puritanismo, aunque debera aceptar sus tesisfundacional protestantedelacondicinactual comose%al de predestinacin o condenacin, rinde un cultoespantosoal esfuerzo, al trabajo, alaobradelaspropias manos4 una especie de adoracin al yocreador de la propia gloria.[15] 2uien no !ea aqu ellogro institucionaly hechocultura de la tentacin satnica y de su consecuentecontrol del mundo, tan notorio incluso sin comprenderesta odiosa causa, o es un demcrata establecido enel poder, o es un rico a!ariento gozoso con su riquezao su insaciable sed de ellas, o ya se ha credo un diosy no quiere que lo destronen del ;limpo en el que seha instalado, imaginati!amente, claro, pero con efectosbien reales.[16] Se entiende as la defensa cerril del propio gustopara conser!ar la propia eleccin4 tan solo AbuenaB porser propia, sin autoridad concedida a nadie distinta delyo soberano.