soÑemosjuntos · 2014-02-19 · para renunciar a mí y entregarte mi vida mi vida. aunque...

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“María lo ha hecho todo entre nosotros.” Juntos no 7 OCTUBRE 2013

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“Maríalo ha hecho todo entre nosotros.”

SOÑEMOS Juntosno 7 OCTUBRE 2013

Soñemos Juntos

Saludos a todos amigos y amigas:

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Confianza, amor, compromiso…

¿Verdad que encuentras relación entre estas palabras? No importa el orden en que las coloques, siempre tendrán sentido y siempre serán parte de una historia que vale la pena contar…, o vivir.

En este mes de octubre, mes del rosario, mes mariano, nuestra revista te invita a profundizar en estos valores, de la mano de nuestra Buena Madre.

La confianza del Padre Champagnat en Ella es algo que enternece y a la vez motiva. ¡Es que Ella lo sigue haciendo todo entre nosotros! Vivamos imitando sus virtudes, confiando en su recurso.

El amor profundiza la confianza; la vuelve incondicional y capaz de llenar el corazón. Los Maristas de ayer y de hoy nos dan testimonio de ello. Te pre-sentaremos algunas situaciones interesantes.

Finalmente, el compromiso. Es el amor asumido en sus consecuencias. No dejes de leer la noticia de la profesión religiosa del nuevo Hermano Mario Pentón.

Que en este mes en que nos recordamos la devoción del rezo del rosario, no falten en tus intenciones crecer en estos valores vocacionales. Quien se adentra en el misterio, confía…, confiando descubre el amor…, amando se compromete.

¡Quien se compromete en el Amor y con el Amor dará cada paso confiado, como María, como Marcelino!

Buena lectura y profundización…

París, 27 de mayo de 1838

Monseñor:

Con verdadero placer y una especial diligencia aprovecho un momento de descanso para responder a su amable carta.

Como usted ve, me encuentro en París, desde el 18 del mes de enero persiguiendo la autorización de los Hermanos, que aún no tengo, pero que espero cada día.

Seguimos recibiendo muchos novicios. Actualmente, somos doscientos veinticinco o veintiséis. Tenemos ya 38 ó 39 escuelas y 70 peticiones. Estamos en vísperas de abrir un segundo noviciado. Es posible que lo hagamos en el departamento del Var.

El Sr. Matricon sigue conmigo, estoy muy contento, se hace apreciar por los hermanos, tiene un excelente criterio. Tengo también al Sr. Besson

“Amor a María”

Carta de Marcelino a Monseñor Pompallier, Vicario Apostólico de Oceanía.

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que sigue siendo un muchacho estupendo. El hermano Francisco es mi brazo dere-cho; en mi ausencia, lleva la casa como si yo estuviera presente. Todos lo aceptan sin ninguna dificultad.

María muestra muy visiblemente su pro-tección a favor del Hermitage. ¡Cuánta fuerza tiene el santo nombre de María! ¡Qué felices somos por habernos adornado con él! Hace ya mucho tiempo que no se hablaría de nuestra Sociedad si no fuera por ese santo nombre, por ese nombre mi-lagroso María es todo el recurso de nues-tra Sociedad.

Hemos terminado la capilla. Es muy bonita. Aún nos es muchísimo más querida al haber sido bendecida por el primer misionero y el primer Obispo de la Sociedad…

Hemos iniciado este año la obra de la Grange – Payre (primer seminario del Instituto). Empieza a prosperar; tenemos ya un cierto número de alumnos. María, sí, sólo María es nuestra prosperidad, sin María no somos nada y con María lo te-nemos todo, porque María tiene siempre a su adorable hijo o en sus brazos o en su corazón.3

María tiene para mí sabor de inicio familiar, de origen marista. Mis primeros formadores en el Seminario me inculcaron el amor a María como identidad del camino que comenzaba, como identidad marista. Desde enton-ces uní el nombre de María a la que ha hecho todo entre nosotros, en expresión de Marcelino. Me gusta relacionar el nombre de María al agua fresca del Gier, a la estrella de la noche del “Acordaos”, al pan caliente de La Valla. María me resuena a silencio y armonía del valle del Hermitage. Es el cariño y afecto de Champag-nat. El candor de los niños de las primeras escuelas. La roca fuerte sobre la que se asienta la nueva casa. El suave despertar de la primera comunidad marista can-tando la Salve.

En mi vida he unido también María con la poesía. Porque poesía es Dios. Porque poesía es María, rostro materno de Dios. María me sabe a canción, a nuevo día, a flor del campo. Es rocío y aurora, aire de amanecer. ¡Cuán-tas veces escuché unas hermosas canciones referidas a María, llenas de vida, de afecto y poesía! El autor, Pequerul, llamaba a María: miel silvestre, flor de harina, queso blanco, pan crujiente, cielo abierto… Por eso el mes de mayo como mes de María me inspiraba y me alegraba. En tiempos pasados ese mes se abría a la Hn

o. Javier Espinosa

“Mi vocación marista tiene mucho

de mirada cariñosa de María”.

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vida, podía gustar el rocío de la mañana, el perfume de la primavera, las flores de los almendros y cerezos. El mayo florido era para mí todo un símbolo de la ternura de María, de su hermosura, de su mi-rada limpia, de sus ojos claros. Y así me ha gustado contemplarla.Pasados los años, seguí viéndola como sonrisa, corazón, delica-deza. La contemplé en su corazón de Madre, en su sensibilidad de mujer. Fue presencia femenina que me señalaba el camino de la interioridad, de la contemplación, la fecundidad, la ternura, la trans-parencia. Se hizo presente María como Mujer, referencia de ma-durez afectiva, de honestidad en las relaciones, de limpieza en in-tenciones. Intuí que un corazón limpio, al estilo de María, no deja de amar. Pero ama sin manipular, ama sin poseer, ama en Jesús.

A lo largo de mi vida el pasaje de la Anunciación ha sido fuente de inspiración ante decisiones y proyectos. Descubrí a María de la Anunciación, la que escucha al Señor, la que se interroga y pregunta. La que discierne. Mujer creyente ante la incertidumbre del momento. Virgen fiel ante la zozobra y la indecisión. Madre feliz y plenamente fecunda. Hace más de 20 años que llevo siempre conmigo una fo-tografía de una estatua de María, tallada en Costa de Marfil, en ac-titud de escuchar al Señor. Fue regalo del H. Charles Howard. Me recuerda a María de la Anunciación y a su peregrinar en la fe. Fe que sabe a sonrisa y a miel, así como a lágrimas y a cruz. A hogar de Nazaret como a camino del calvario. A soledad como a mañana de resurrección. Y me ha ayudado en mi camino de creyente.5

Mi acercamiento a María se ha convertido muchas veces en petición insistente y filial de algo tan hermoso que descubro en Ella como es la sencillez, la gratuidad, el ocultamiento, su silencio profundo, su presencia discreta… Me invita a apreciar las cosas simples de la vida, a no necesitar cosas especiales ni grandiosas, a huir de triun-falismos y protagonismos, a vivir con paz la “minoridad” actual, a hacer el bien sin ruido, a dar sentido a lo inútil, a lo pobre, a lo sim-ple y a lo frágil. Es María, la de todos los días, la del cotidiano, la de las cosas sencillas, que me ha motivado a disfrutar del gesto y del detalle, del silencio y la contemplación.

Me ha gustado también ver a María siempre en camino, como la Mujer de los pies llenos de polvo, en expresión de un autor. Es María que inspira, que motiva a caminar, que hace soñar. Es María, la peregrina, la que busca posada. Es María, fiel a su misión de dar a Dios a los hombres, cuando visita a Isabel. Por eso que el amor a María ha sido para mí invitación a la esperanza. He sentido que con María se puede crear, soñar e imaginar. La actitud mariana de tener la seguridad de la fidelidad de Dios, en momentos decisivos de mi vida me ha ayudado a estar abierto a la novedad y al futuro.

María, siempre en camino nos motiva a caminar.

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Ninguno de los párrafos lleva esta sangría al inicio. Habría que quitárselo o colocarlo a los demás.

Marcelino y María

La vida de Marcelino Champagnat estuvo mar-cada por un profundo amor a María. Su vida nos habla de una relación filial que se afianzó en el encuentro cotidiano. Desde su infancia la presencia de María fue significativa, tanto su tía como su madre le transmitieron esta tierna devoción y confianza ella. Fue de esta manera como la descubre como camino para ir a Jesús.

En su vida podemos percibir “las huellas de esta relación” que le hicieron fundar un Institu-

Reflexiona y comparte. Este es el espíritu de esta sec-ción de la revista, donde se te proponen algunas actividades para profundizar y que puedas hacer tuyo de una forma más personal el contenido que se te presenta. No olvides de compartir con todos tu reflexión usando nuestras redes sociales o por e-mail.

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Subir un poco más el texto de abajo porque queda muy bajo y se ve muy presionado. Así dará espacio al número de página.
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Mejor:correo electrónico.
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Creo que hay un espacio de más.
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Devoción y eonfianza en ella.

to de religiosos educadores que vivieran y transmitieran esta misma devoción. El nombre de María dio color y un aroma especial a la fa-milia que fundó.

¿y tú?

Tómate un tiempo, recuerda, escúchate... pregúntate. ¿cuál es tu experiencia de relación con María?

Para responder puedes hacer memoria de personas, acontecimien-tos, experiencias significativas, el colegio, tu familia, hermanos, ami-gos... todo lo que te hable y te recuerde “las huellas de María en tu vida”. Puedes escribirlas a continuación y compartirlas con todos nosotros utilizando nuestras redes sociales o e-mail...

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correo electrónico

5o razones con María

Puedes encontrar 50 razones para el encuentro con María a través del rezo del Santo Rosario. Y tú, ¿rezas el rosa-rio a María? ¿qué te mueve a hacerlo? Compartelo con nosotros

Buena Madre - kairoi

Esta canción ha marcado la sensibilidad mariana de mu-chos hermanos maristas y la forma de dirigirnos a ella en la oración a través de una can-ción. Te invitamos a escuchar-la, hacerla tuya y orar con ella.

Para ver y compartir...

http://www.youtube.com/watch?v=CAsMtCq27uo

http://www.youtube.com/watch?v=QoIemJT-9NU

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Mejor "descubrir" en vez de encontrar, para que lleve al encentro.

Te invitamos a orar con esta canción de Son by Four que nos ayuda a profundizar en la fe y las actitudes de María. Ora con ella y compartenos tu reflexión y oración.

La fe de MaríaQue hubiese pasado si ella hubiese dicho que no, o ignoradoO dilatado, el anuncio de tu ángel de amor

En cambio creyó, en tu palabraY se hizo tu esclava, en un acto perfecto y de feY hoy, quiero ser como ella y amarte aunque duelan, las espinas y el camino de la cruz.

Dame la fe Señor, La fe de MaríaPara decirte sí, un sí sin medidasDame la fe Señor, la fe de MaríaPara renunciar a mí y entregarte mi vida mi vida.

Aunque traspasaron con una espada su corazónY su alma lloro, el dolor de tus heridasA los pies del madero se quedó

Y por creer, ella es Reina y SeñoraY tú nos incorporas a tu eterna familia de amorY yo en tu amor quiero permanecer postrado a tus piesEs lo único que un día Llevaré.

Dame la fe Señor, La fe de MaríaPara decirte sí, un sí sin medidasDame la fe Señor, la fe de MaríaPara renunciar a mí y entregarte mi vida mi vida.

Para orar y compartir...

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compártenos (con tilde)

En muchas ocasiones Marcelino Cham-pagnat acudió a María en situaciones difíciles y también para agradecer su presencia. La imagen de la Buena Madre nos recuerda y hace viva la ma-nera como él se relacionaba con ella y el espíritu que anidaba en su vida. Contemplando la imagen de la Buena Madre, escribe ahora una oración, un poema, una canción... lo que te inspire la imagen. ¡Únete y adéntrate en el corazón de Marcelino y en el tuyo! ¡Acude siem-pre a la Buena Madre con confianza!

No olvides compartirlo con todos...

“Una tierna y filial devoción a Nuestra Buena Madre les anime en todo tiempo y circustancia.”

(San Marcelino Champagnat)

Para orar y compartir...11

Para ti, Buena Madre...

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NOTICIAS de familiaProfesión Religiosa del Hno. Mario JoséLa Habana (Cuba)“Dios elige a algunos hombres y los llama individualmente para llevarlos al desierto y hablarles al corazón. A quienes lo escuchan, los separa y, mediante su Espírtu, los convierte constantemente y acrecienta en ellos el amor para encomendarles una misión”.

(Consitutciones Maristas N° 11).La mañana del 12 de septiembre, festividad del Santo nombre de María, nuestro Hno. Mario Pentón Martínez profesó públicamente su consagración a Dios en el Instituto de los Hermanos Maristas de la Enseñanza para el servicio del Reino de Dios.

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En la Eucaristía lo acompañamos a nombre de los Hermanos de la Provincia de América Central y de todo el Instituto, el Hno. Provincial Hipólito Pérez, los Hermanos de Cuba y familiares de la Perla del Sur.Mario ha hecho un itinerario de acompañamiento y discernimiento en la comunidad de Cienfuegos como aspirante y postulante. Un año más de postulantado en la Habana y dos como novicio, acom-pañando por los Hermanos de la comunidad y de manera más par-ticular por el Hno. Jesús Bayo Mayor, maestro de novicios.

Pedimos al Señor que nos siga conservando en su camino con más radicalidad según el espíritu del Sermón de la Montaña. Rogamos a nuestro recurso ordinario, a nuestra Buena Madre, como la llamaba cariñosamente Marcelino Champagnat, nos siga enviando jóvenes para la Iglesia y pueblo de Cuba.

“Todo a Jesús por María”. “Todo a María para Jesús”.

Hno. Héctor Ávalos Gil

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María,

música de Dios