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SITUACION SOCIAL DE LIMA
Al hablar de la situación social limeña tenemos que hablar de varios factores que
la afectan. Entre esos factores están: la historia, la religión, la educación, el
entorno ambiental, la economía, la política, la herencia cultural, la influencia
externa de otros pueblos o sociedades, los medios de comunicación, el proceso
de globalización, el estilo de vida, la salud y fortaleza física mental y espiritual, y
quizás muchos otros factores más.
En este análisis que podría ser muy extenso debido a la cantidad de factores que
intervienen, voy a centrarme en uno específicamente.
Para poder describir la situación social limeña, tenemos que hablar
necesariamente de un tema aparentemente poco reconocido públicamente, pero
sí experimentado de forma vivencial en la población, y me refiero al racismo y la
segregación racial. Este factor es importante para poder comprender la situación
de la sociedad limeña y no sólo realizar una descripción de ella.
Como parámetros de medición de la situación social limeña se utilizan
normalmente el nivel económico, el nivel cultural y el nivel educativo
ESTADO SOCIOECONÓMICO DE LA SOCIEDAD LIMEÑA
Lima es una gran ciudad donde los diferentes niveles socioeconómicos se dividen
entre los extremos más pudientes y los de escasos recursos, y así tenemos los
llamados niveles A, B, C, D, y E. Siendo el nivel A el de mayores recursos y el E el
otro extremo. Esta forma de categorizar ha reemplazado a la forma tradicional,
que estaba dividida entre empresarios, profesionales, obreros y autónomos (o
independientes). En otras palabras, se puede ser profesional pero de categoría B
o C, según el poder adquisitivo o económico que tenga la persona. Así existe por
ejemplo en el emporio de Gamarra, algún comerciante con un gran poder
adquisitivo, pero no tiene el nivel educativo de un profesional. Aunque el nivel
económico da la posibilidad de adquirir un nivel educativo y cultural también
superior.
En este apartado solo quiero mencionar algunos datos para que nos hagamos una
idea de cómo están divididos los diferentes estratos sociales.
Población de Lima en el 2007, Lima Metropolitana contaba con más de 8,5
millones de habitantes, que representa el 30% de la población peruana, y esto la
convierte en la ciudad más poblada del país.
Lima concentra la mayor parte de la actividad económica: el 57% de la industria, el
62% del comercio, el 46% de la PEA y el 53% del PIB.
En Lima existen 2´200,000 de hogares, de los cuales el 5.2% pertenece al nivel A.
Luego vienen B y C, que podríamos llamar la clase media, que juntos suman el
50% de los hogares. Los niveles D y E representan el 44.8% de donde el E es el
13.8%.
El 5.2% de hogares del nivel A obtiene el 28.7% del total del PBI, mientras que
44% de los niveles D y E obtiene el 21.2% del total. Aquí observamos una enorme
desigualdad de ingresos de los hogares, y esta característica negativa ha sido
mencionada, cada vez con más insistencia, por los organismos internacionales y
nacionales.
Niveles % de Ingresos % de beneficios PBI
A 5.2% 28.7 %
B y C 50 % 51.1 %
D y E 44.8 % 21.2 %
SITUACIÓN SOCIAL DE DISCRIMINACIÓN RACIAL, ÉTNICA Y DE
GÉNERO EN OTROS PAÍSES
Tenemos algunos ejemplos, como el de Sudáfrica, donde hasta hoy en día
persisten y podríamos decir, se mantienen o se aseguran la persistencia del
racismo, la discriminación étnica y la intolerancia, por motivos de poder y dominio.
Otro ejemplo es el de Rwanda y el de la antigua Yugoslavia. Lugares todos ellos
donde se ha desarrollado el odio y la diferencia racial, étnica, social, de género y
religiosa, y vemos nuevamente la constante de mantener el poder y dominio, y por
lo tanto las fuertes diferencias sociales.
Tenemos también otro caso, el de los Estados Unidos. En este país se desarrolló
una larga lucha para defender los derechos de las personas, por ser personas y
no por el color de su piel, o por su origen étnico, o por su creencia religiosa, o por
su género.
Martin Luther King, en un discurso defendía que se trataba de derechos políticos y
de ciudadanía, ya que los negros también formaban parte de la nación. Lo que
Luther King quería resaltar era que la ley y no la costumbre o tradición era lo que
podía sustentar y defender estos derechos de ser uno mismo, y de que no te
molesten y te nieguen beneficios comunes solo por el color de tu piel. (En este
contexto, a los negros se les negaba el derecho a la educación, la atención
sanitaria y otros beneficios por ser negros).
NUESTRO CONTEXTO PERUANO Y LIMEÑO
En nuestro país (y en el mundo entero) y en nuestra capital en particular (donde se
concentra la mayor parte de poder y producción económica, sin tomar en cuenta
las mineras cuyos réditos de explotación van a parar a la capital) persisten hasta
hoy el racismo y la discriminación étnica y de género, como una herencia -
solapada y no tan solapada- desde la conquista y el colonialismo.
En nuestro contexto limeño, el racismo y la segregación racial se manifiestan de
manera sutil en el sentido de que si por ejemplo estas solicitando un beneficio que
la ley otorga a todos por igual, ese beneficio lo recibirá primero una persona cuya
piel sea blanca (o blanqueada) antes que un mestizo o negro o de piel más
oscura. Esto lo vemos en la vida diaria, cuando por ejemplo en la cola que
hacemos para obtener un servicio, alguien se la salta y nadie le dice nada si es
blanco. O en el trato diferente que reciben un blanco y uno de piel más oscura.
Pero unido a esto también está el nivel adquisitivo que la persona pueda tener,
como dice un dicho popular: el dinero no tiene color. Pero aún a pesar de tener
dinero, existe ese racismo “solapado”, por ejemplo cuando preguntamos a la gente
qué piensan cuando ven a un negro con dinero, dicen que es narcotraficante. La
gente relaciona lo blanco con bueno, bonito, honrado, y lo negro con sucio,
desordenado, no fiable, ruin, etc.
Estos ejemplos van en consonancia con lo que dijo el antropólogo brasileño,
Roberto da Matta, lo que pasa es que las costumbres pasan a ser las que
mandan. Y un dicho popular afirma esto: “para los amigos, todo; para los
enemigos, ¡la ley!”. O este otro dicho de la época colonial: “la ley se obedece pero
no se cumple” (en otras palabras, la ley la obedecen los que ocupan un estrato
socioeconómico inferior o racialmente no son blancos, pero no se cumplen los
beneficios que debieran recibir).
Recientemente, la relatora de la ONU, Shahinina, visitó nuestro país (en el mes de
Mayo pasado) e hizo unas interesantes declaraciones (transcribo el párrafo
publicado en varios medios de comunicación):Shahinian sostuvo que "en las
zonas urbanas, la servidumbre doméstica sigue siendo mayormente invisible y las
víctimas son predominantemente niñas y jóvenes que migran a las ciudades, no
conocen sus derechos y se sienten incapaces de denunciar el abuso y la
explotación que sufren y que, en muchos casos incluyen la violencia física,
sicológica y sexual".
Vemos que el legado colonialista sigue vigente en nuestra sociedad a través de
sus costumbres, tradiciones, y cultura. Y esto trae a mi memoria la historia de
Atahualpa; era necesario justificar la ya planificada conquista y usurpación del
imperio incaico, y el método usado fue simple, pero profundo en sus implicancias y
repercusiones aún actuales; se le dio la Biblia al Inca (que por cierto en aquel
entonces estaba prohibido leerla, y se castigaba con la hoguera a los que lo
hacían, razón por la cual millones huyeron al Norte de América en busca de
libertad y de una nueva vida próspera; pero parece ser que en este momento
histórico no era “pecado” o motivo de ajusticiamiento darle la Biblia a un ingenuo
ignorante) y como recordamos el Inca arrojó dicha Biblia al suelo (tomemos en
cuenta que seguramente el Inca fue visto o considerado como un “blanco” con
cultura, educación y formación en la religión imperante suficiente para saber lo que
era una Biblia); y esto desencadenó el sistema inventado de justicia “divina”, y los
beneficios fueron enormes, hasta hoy en día.
Hoy el problema de las graves y extremas diferencias sociales, no difiere mucho.
Tenemos otros “libros” o instrumentos que ofrecer a los que consideramos
inferiores por su raza, coloro etnia. En los Estados Unidos, por ejemplo, el grupo
de migrantes que iban, no en busca de la libertad, si no en busca del
enriquecimiento sin moral de ningún tipo, engañaban a los indios americanos para
apoderarse de sus territorios y para exterminarlos. Hoy en día existen las llamadas
“reservas federales” donde a los indios americanos se les ofrece todo tipo de
“esparcimientos” baratos para mantenerlos en esas reservas, como son el alcohol
en abundancia, prostíbulos, casas de juego y casinos donde gastan el poco dinero
que el estado les proporciona. Así, esos indios no tienen necesidad de pensar, ni
tampoco pueden (la investigación y estudio de los efectos del alcohol en el lóbulo
frontal del cerebro nos ha dado a conocer los enormes daños que se infligen al
desarrollo intelectual y percepción de la realidad mediante el consumo de alcohol),
estos indios americanos no necesitan trabajar, ni tampoco reclamar sus derechos
como personas, ya les han dado determinados derechos porque son “indios”.
Volviendo a nuestro caso en Lima, el asunto se centra en comprender la herencia
colonialista que se ha desarrollado en nuestra sociedad, y el desarrollo de los
derechos legales de igualdad y justicia social. Necesitamos comprender, que la ley
frena ciertas costumbres o las refuerza. Pero en la práctica cotidiana, parece ser
que la costumbre es más fuerte que la ley.
Hay unos derechos garantizados por la Constitución o la ley, pero también existen
privilegios sociales que se aplican a ciertos grupos y se niegan a otros.
Por ejemplo, sin ir más lejos, en cierta ocasión en las oficinas de una embajada,
estaba realizando mi cola de espera, y observé como otros compatriotas, no
blancos, nacionalizados (del país de la embajada) eran maltratados (o tratados
con desprecio y altaneramente), mientras que otros de porte altivo, pero blancos,
eran tratados exquisitamente. El funcionario era también nacionalizado del país de
la embajada, o sea era peruana de nacimiento.
QUÉ ES LA SEGREGACIÓN RACIAL Y EL RACISMO
La discriminación racial es un concepto que suele identificarse con el de racismo y
que lo abarca, aunque se trata de conceptos que no coinciden exactamente, la
discriminación racial un acto fundado en una ideología racista.
El racismo es una ideología (basada en la superioridad de unas razas o etnias
sobre otras) que ha plagado nuestro mundo moderno, de forma especial en
nuestro siglo. Es una ideología que trata de encontrar y reforzar manifestaciones
de diferencias biológicas y visuales para justificar las desigualdades
socioeconómicas. En este aspecto, la raza y la práctica de la segregación racial
son una creación social, y no una consecuencia natural. Y a lo largo de la historia
desde los siglos XIX y XX vemos que fueron los instrumentos que justificaron la
esclavitud, la discriminación y la dominación. Y estos hechos históricos nos
muestran la prueba del éxito de esta ideología creada por un determinado grupo
social.
POR QUÉ EXISTEN LOS EXTREMOS DE POBREZA
Del colonialismo heredamos el espíritu de supremacía y de dominio de los
blancos, donde los subordinados trabajan más de lo debido y son pagados
injustamente, los patrones descansan y despilfarran todo lo que con tanto
sacrificio e injusticia adquirieron, porque se lo merecen ya que son blancos o
descendientes de europeos, y por lo tanto superiores (según ellos claro está).El
modelo anglo-sajón, es distinto, el patrón trabaja codo a codo con sus
subordinados, y vela por el interés de ellos, aunque parece ser que este modelo
también se está perdiendo debido al proceso de la globalización, donde lo
importante son los mercados y el máximo beneficio, sin importar las personas, y
mucho menos su condición, y ello lo hemos visto y lo vemos con más claridad
desde el comienzo de la actual crisis económica mundial.
El modelo colonialista es el que siguen muchos de los “criollos”, o mestizos que
han alcanzado cierto status. Esta creación social de la discriminación hace que no
se aliente a ningún subordinado a progresar, y si alguno llega a superarse, actúa
siguiendo el mismo esquema de sus antiguos patronos, un esquema de injusticia y
de abuso de derechos.
Vemos que la raza está íntimamente ligada a la clase, al género y al status social.
Y de esta idea podríamos deducir o suponer que el racismo en la sociedad de hoy,
y como antes, es un problema relacionado particularmente con el poder y el status
(y no con la biología).
A este hay que añadir la jerarquía enraizada en las diferencias raciales y sociales
y una altísima conciencia de las apariencias físicas y sociales. Por eso
encontramos a veces conceptos dispares o contradictorios sobre la discriminación
racial, y es además debido a la forma como se vivencia esta discriminación,
dependiendo del grupo social al que se pertenezca.
CONCLUSIONES
En el Perú, la cuestión racial está íntimamente ligada al status, lo que a su vez se
basa en la idea que el dinero “blanquea”. Con el anterior análisis he querido
establecer no sólo que existe en nuestra sociedad limeña el racismo, la
discriminación étnica y de género, como herencia colonial, si no como factor de las
graves diferencias sociales. Existe parece ser, como el instrumento para mantener
unos privilegios para un grupo de élite, y con ello mantener un status continuo de
poder y dominio. En nuestra sociedad el asunto racial tiene mucha importancia en
la estructuración de la jerarquía social de la nación. Y existe una diferencia del
acceso que tienen a los privilegios yal status los diversos grupos sociales. En otras
palabras, si eres blanco o “blanqueado” tendrás mejores oportunidades a ocupar
un status en la sociedad, si no lo eres, te será más difícil o imposible. Recordemos
que siempre ha existido a lo largo de la historia humana las jerarquías, la
intolerancia a lo diferente y los prejuicios.
Nuestra sociedad tiene hoy que enfrentar nuevos retos con la gigantesca marea
de la globalización, donde los medios de comunicación permiten no solo trasmitir
conocimiento y valores de otras culturas y pueblos, sino también las lacras, vicios
y defectos de otras sociedades, y más que de otras sociedades, de otros grupos
de poder que intentan crear mercado y mayor beneficio a costa de la pérdida de
valores universales, a costa de la pérdida de principios morales, a costa de la
pérdida aún de salud física, mental y espiritual. En suma, no es la política o los
cambios en las tradiciones o costumbres sociales lo que va a ejercer una
influencia fuertemente positiva en el cambio de la situación social limeña y por
extensión peruana (aunque esto frena en parte la injusticia y la prepotencia); solo
un cambio desde dentro de la naturaleza humana, el corazón, podrá vencer la raíz
de todos los males humanos, el egoísmo y el orgullo. Y así podríamos alcanzar el
ideal de una sociedad justa.