sistema semiotico

7/24/2019 Sistema Semiotico

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SISTEMA SEMIOTICO

La inteligencia del ser humano se defne por su capacidad de abstraccin, por

la habilidad de estudiar un enmeno dado y elaborar una explicacin del

mismo, por su an de establecer los principios y razones que gobiernan el

comportamiento de los hombres, los planetas o los signos. Dice Sabato que

!ntender es relacionar, encontrar la unidad ba"o la di#ersidad. $n acto de

inteligencia es darse cuenta de que la ca%da de una manzana y el mo#imiento

de la Luna, que no cae, estn regidos por la misma ley.&$no y el uni#erso,

'()*.

+mpulsado por la necesidad de explicar las cosas, el ser humano elabora

teor%as o leyendas que amparadas por el prestigio de la lgica y el racionalismo

o por la autoridad de lo secreto y lo esotrico, pretenden dar cuenta de las

cosas. -ero el hecho del conocimiento no se realiza como conocimiento en s%, sino se hace comunicacin, y es en su an de transmitir dicha inormacin que

el hombre se #e obligado a construir sistemas que sir#an de medio o conducto

de comunicacin. !s la lucha ancestral del hombre por el conocimiento, la

respuesta a las preguntas y las zozobras de su existencia y su fnitud, la

respuesta a su inmensidad meta%sica y su bre#e contingencia. anto la ciencia

como la literatura son abstracciones, son teor%as sobre el hombre y su destino,

sobre su origen remoto y su por qu indescirable. !laboraciones tericas que

de una manera u otra satisacen las angustias y reser#as del ser que las

concibe, y de aquellos que las proesan.

/hora bien, este proceso mental preestablece la existencia de un marco dereerencia y de un instrumental anal%tico, pero no implica un proceso de

semiosis. 0o es sino hasta el momento que este enmeno se hace

comunicacin que entra en el dominio de la semitica. !l resultado de la

inteligencia con#ertido en acto de comunicacin, o cualquier instancia de

comunicacin que se proponga, establece una triple relacin entre el emisor

del mensa"e, el cdigo y el receptor, dentro de un sistema de reerencia que

puede proponerse en la orma de un Diccionario o de una !nciclopedia &!co

'1)23 445'26*. !n un principio, nuestra atencin se centraba en la relacin

entre el emisor y el cdigo, lo que en el campo de la flolog%a se planteaba

como la relacin entre el autor y la obra. -or otro lado, la in#estigacin cr%ticatradicionalmente se ha concentrado en el estudio de los cdigos, partiendo de

la premisa que es ah% donde reside la sustancia de la signifcacin, y que todo

intento de descodifcacin debe restringirse al material textual. 7inalmente se

ha puesto nasis en los procesos de actualizacin del mensa"e semitico,

tratando de responder a la pregunta 8cmo entendemos9 La b:squeda

ontolgica del hombre y la persecusin de su signifcacin se engasta, y a la

#ez, genera, un sistema semitico de presencias y dierencias, de relaciones


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metaricas y meton%micas, de amalgamientos smicos, de ormas y

contenidos, modos discursi#os que a su #ez pro#ocan la in#encin de otras

#ariaciones y modalidades. !ste con"unto de tensiones es la totalidad de

uni#erso semitico. !s en este ni#el ms ele#ado de la semiosis que se instala

el discurso literario como enmeno de comunicacin, y es desde esta

perspecti#a donde con#iene al cr%tico literario desarrollar su traba"o. !sundamental para la comprensin y anlisis del discurso literario la expl%cita

presentacin del sistema semitico propio a la obra, de los cdigos por medio

de los cuales ;uye el contenido, y de la posicin que el sistema que rige la obra

ocupa dentro del sistema semitico general. )3 E'526*.


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5 K


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/ continuacin, se puede presentar un diagrama del campo de tensiones del

signo altas torres limitndonos a los cuatro campos de reerencia que hemos

nombrado de la siguiente manera3

/L/S Q!S

+n5tensin #isual

+n5tensin enomenolgica

+n5tensin arquitectnica

+n5tensin sociolgica

La presentacin del campo in5tensional de altas torres en la orma anterior

tiene el incon#eniente que puede suscitar el error de concebir el proceso de

semiosis en orma lineal, en relacin de causa y eecto, lo que es errneoC

adems de establecer un orden espec%fco en el cual el proceso de

amalgamiento se lle#a a eecto. $na representacin del tipo del diagrama '

parecer%a establecer me"or la representacin de lo que en realidad ocurre. !ste

diagrama, aunque ms apropiado que el anterior, no representa la realidad del

proceso semitico que lo ha generado dentro del sistema particular al cualpertenece. La limitacin que impone la relacin bidimensional no toma en

cuenta la dimensin de proundidad, dimensin sin duda importante en el

proceso de amalgamiento semitico. -or e"emplo3 no podemos presentar la

relacin en la cual la impresin #isual y la impresin enomenolgica se

encuentran en relacin a altas torres.

Si la razn y el conocimiento cient%fco estn representados en nuestro sistema

por altas torres, 8tiene la mentalidad intuiti#a que estar a su #ez

representada por un signo que se oponga al anterior9 0o necesariamente. Las

oposiciones binarias planteadas por el estructuralismo requer%an, en #irtud de

su naturaleza dialctica, la presencia de la otra entidad. !n el planteamiento de

la semitica no es requisito imprescindible la existencia dentro del sistema de

la otra parte de la oposicinC sta puede no maniestarse de ninguna manera

en la representacin lineal, o no existir en absoluto dentro del sistema, aunque


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siempre podr%a trazarse la existencia de la misma a puntos situados en la

perieria del sistema, dentro de $5Sistema o sistema semitico general.

Sabato ha hablado much%simo del conocimiento intuiti#o y su teor%a se

encuentra diseminada a lo largo de toda su obra. Junto con la importancia que

tericamente le ha dado al tema, ha desarrollado una maniestacin semitica

dentro de la representacin lineal. !n oposicin a la mentalidad racional se

encuentra la mentalidad irracional, el pensamiento intuiti#o y les raiRons du

coeur, las cuales estn representadas por dos elementos tel:ricos3 el agua y

la tierra, o su combinacin "usta3 el barro. !s con esta amilia de signifcantes

que el sistema #a a expresar el otro extremo de la oposicin.

-ensamiento racional 5555555T -ensamiento irracional

razn 5555555T pasin

altas torres 5555555T barro

!l agua y la tierra, tanto en su orma aleatoria barro, como separadas por su

cuenta, representan en nuestro sistema los azares de la mentalidad intuiti#a.

!s ese continente donde domina la con"etura, compuesto de agua y tierra, de

barro. !se mundo hacia el cual se a#entura el autor al de"ar la ciencia por elarte, el mundo en el que Juan -ablo


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altas torres 555555555T barro

razn 555555555T pasin

ciencia 555555555T arte

Valga entonces para nuestro anlisis lo anteriormente expuesto, y habiendo

defnido el principio epistemolgico que se encuentra en la base de este

sistema, pasemos a analizar el cdigo empleado en otros ni#eles del mismo.

-ero antes de pasar al estudio de otros signos del sistema, puntualicemos la

relacin de este signo en el con"unto del discurso sabatiano.

(.(.'. Faniestaciones del signo /ltas torres.

!l signo altas torres ocurre por primera #ez en el discurso de '124 con lasimplicaciones arriba seOaladas, pero la dualidad que hemos apuntado inorma

toda la obra de Sabato. Uien sea ba"o la orma del signo altas torres o bien

ba"o alguno de sus representmenes, el signo en cuestin establece las

relaciones de oposicin entre el mundo ideal y pristino de la ciencia, y el

mundo con#ulsionado y contradictorio del arte.

$no de los grandes signos del discurso de '12) es el cuadro Faternidad. La

importancia de este cuadro en la estructura del discurso es undamental, y se

puede probar que la relacin que guarda la #entanita del cuadro con respecto

al resto del con"unto, se relaciona en sus ex5tensiones, con el cdigo de las

altas torres. Lyday &'1>)* reconoce discretamente la importancia del cuadro

y comenta one begins to onder i perhaps an important Iey to the no#el is

not embodied in this painting and in the name gi#en it.&(6*. Lo mismo seOala

Qberhelman &'1=63 21* sin adelantar ninguna hiptesis. !l anlisis de Lyday,

sin embargo, enoca el aspecto psicolgico del signo concluyendo en que

*. Dellepiane &'1>)a* y la gran

mayor%a de los cr%ticos obser#an la simbolog%a del cuadro agregando un tipo de

comentarios tales como ...la #entanita representa el canal del nacimiento, la

paz, la seguridad. La mu"er del cuadro era su madre...&''45''>*. De esta

manera se e"emplifca una posible lectura del discurso, pero no sus relaciones

semiticas.

Fe parece posible postular una relacin en cuanto a la impresin #isual que

pro#oca el signo altas torres y la posicin de la #entanita en el cuadro3 -ero

arriba, a izquierda, a tra#s de una #entanita...&!l t:nel, '>*. La relacin

espacial que se percibe ante los dos representmenes es similar3 por un lado

tenemos al su"eto que contempla las altas torres dentro de una composicin

#isual 5en este caso el horizonte %sico es el horizonte percepti#o5C por el otro


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tenemos al obser#ador ante una #entanita dentro de un cuadro 5donde la parte

central del cuadro es el horizonte percepti#o5. La imagen #isual de las altas

torres se reedita en el cuadro Faternidad representando dos mundos, dos

ormas de sentir y pensar. La escena pequeOa y remota donde una mu"er mira

como esperando algo, est tan separada del mundo de las madres que miran

"ugar al niOo, como las altas torres lo estn del continente donde domina elazar y la con"etura. !sa dicotom%a, esa tremenda separacin que puede mediar

entre dos existencias simultneas y continuas, ser un cdigo undamental en

el discurso sabatiano. La relacin entre las altas torres y la distribucin del

cuadro Faternidad es un e"emplo de la sutil red de relaciones que se

establece en la construccin de un mensa"e esttico y la riqueza de la cadena

de interpretantes.


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mundo en crisis y de una humanidad escindida por el etichismo de la ciencia.

Las #eintiuna torres eran los #rtices de una muralla poligonal, hacia la que

me acerqu en "ornadas crecientemente agotadoras. N a medida en que la

distancia disminu%a su altura era ms pasmosa.&2E=*. 7ernando tiene que

circundar la muralla y encontrar la puerta para entrar en lo que ser su

comienzo y su fn. orres y t:neles, quizs los dos cdigos ms importantes ysugerentes del S5sistema, se encuentran en esta escena re#eladora y

sugerente.

!sta misma oposicin de s%mbolos se encuentra en /baddn el exterminador y

en gran medida determina el desarrollo del discurso. /s% lo plantea el Dr.

Schnitzler en la nota que le pas a Sabato en La Uiela3 Las torres gticas y la

torre !iYel &adma"orem hominis gloriem* buscan simblicamente la #ertical,

huyen de la tierra emenina, horizontal por excelencia. ambin es horizontal la

cama, s%mbolo del sexo.&26(*. -odemos #er que el con"unto de signifcaciones

que se asocian con estos dos s%mbolos son en extremo #ariadas y ricas. / todo

lo largo del texto hay un constante deslizamiento de uno al otro lado del camposemntico, siguiendo un parmetro similar al que hemos #isto en las obras

anteriores. Los e"emplos son numerosos. !n una pequeOa escena que #iene de

Sobre hroes y tumbas, como una pesadilla o una alucinacin que sure Sabato

en que /le"andra destruye a 7ernando, ba"o el t%tulo de !LL/ S! *. La oposicin se hace patente otra #ez en el

apartado titulado, S/L+Q /


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negocios dudosos, nos dice el narrador3 Se encamin hacia su casa, pero le

era difcultoso3 ten%a que a#anzar sobre una cinaga, con una carga de plomo y

estiercol, con otogra%as de primera comunin y "irones de bandera

argentina.&=>*. Lo mismo se aplica a Sabato, a sus arrebatos de orgullo y sus

enormes depresiones que lo obligaban a escribir, N ahora, una #ez ms,

comenzaba a internarse en el tido laberinto de incestos y cr%menes, laberintoque iba hundindose paulatinamente en el pantano del que cre%a haber salido

por obra de los inocentes exorcismos de costureras y plomeros.&E=*. Q por

e"emplo. /l otro d%a se le#ant como si se hubiera baOado en un transparente

r%o de montaOa despus de haber chapoteado durante siglos en un pantano

plagado de serpientes.&E(*.

La oposicin altas torres pantano atra#iesa como hemos #isto toda la obra

de !rnesto Sabato, y orma el e"e axiolgico central en torno al cual se

estructura la obra. -or un lado las bellas y gra#es torres que empez a #er en

-ar%s, cuando despus de haber robado un tratado de clculo infnitesimal en

Bibert, ue testigo a la demostracin de un teorema.&'(2*. N por el otro, elbarro blando y la cinaga en que . lo oblig a meter las manos en su segundo

encuentro en Uuenos /ires.&()(*.


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hematic Symbol, except that its intended interpretant represents the Dicent

Symbol as being, in respect to hat it signifes, really aYected by its Qb"ect, so

that the existance o las hich it calls to mind must be actually connected

ith the indicated Qb"ect.&'1)43 ('*.

-or medio del anlisis de estos tres ni#eles se llega a una reconstruccin

bastante completa de los signos constituti#os del S5sistema. De ah% en

adelante, cualquier in#estigacin semitica en el seno del S5sistema, tendr

que insertarse en el marco semitico aqu% descrito.

(.E. )*. Na

que sern esos temas que persiguen al escritor, los que #erdaderamente

deber desarrollar, para los que #erdaderamente estaba destinado. -orque


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como dice en su carta a P$!+DQ N !FQQ F$


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Uarragn. 7inalmente, podemos mencionar a los que representan a los poderes

del mal, el mundo de los


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explicacin a todos los actos de la #ida&'2*.


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lle#aron a cometer el crimen3 odos saben que mat a Far%a +ribarne Xunter.

-ero nadie sabe cmo la conoc%, qu relaciones hubo exactamente entre

nosotros y cmo ui hacindome a la idea de matarla. ratar de relatar todo

imparcialmente porque, aunque sur% mucho por su culpa, no tengo la necia

pretensin de ser perecto.&'>*. /mbos narradores, como se puede #er,

presentan una serie de caracter%sticas en com:n, de muchas manerasrepresentan o encarnan al hombre racional del que habla Sabato, el hombre

cosifcado por la ciencia y la razn, di#orciado de sus emociones y sus

pasiones.

7ernando Vidal Qlmos sin embargo comparte ciertas caracter%sticas con

!rnesto Sabato, persona"e de /baddn el exterminador, persona"e que pongo

al centro de este e"e. / pesar de su culto por la lgica y la razn, 7ernando

acepta la existencia de los poderes sobrenaturales, de la magia y el

espiritismo. Su lucha contra las potencias del mal se basa prec%samente en

esta certeza. 0umerosas de las teor%as presentadas por 7ernando en el

+norme aparecen luego en boca de Sabato en /baddn. !l me"or e"emplo deesto es quizs su teor%a sobre el sueOo y la separacin del alma y el cuerpo

durante el sueOo, expuesta por 7ernando en el +norme&E6> y ss.* y por

!rnesto Sabato en /baddn &'2E y ss.*. Qtro e"emplo importante es la teor%a

sobre el demonio y su dominio de la ierra. !sta teor%a presentada por

7ernando en el cap%tulo +++ del +norme, se encuentra tambin en /baddn

presentada por el proesor /lberto J. Bandulo y luego corroborada por Sabato

&E()5E2'*. Qtras caracter%sticas comunes a ambos persona"es son sus obias

por las ratas, los murcilagos, las serpientes, los sapos y otros animales de

sangre r%a, su constante preocupacin por el mal y la indagacin del mundo de

las tinieblas, los


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a la muerte.&'4*. !s ese aspecto del ser humano el que #a a encarnar

persona"es como Uruno Uassn y Fart%n del


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!n fn, slo le altaba el toro alado&>>*, dice el persona"e !rnesto Sabato. !l

Dr. Schnitzler tambin representa muchas de las obsesiones de Sabato.

7%sicamente parece condensar todos los rasgos que Sabato asocia con el mal.

Su cabeza obtenida mediande el cruzamiento de un p"aro y un ratn&E((*C

la astuta sonrisa de un p"aro que perteneciera a la masoner%a&E(2*C y el

parecido con Xermann Xesse, la misma cara de criminal asctico retenido alborde del asesinato por la floso%a, la literatura y probablemente cierta

in#encible, aunque secreta, responsabilidad proesional.&E(E*. N claro tambin

su inters sobre los


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La otra dimensin de los antasmas de Sabato es los temas y

preocupaciones propiamente dichos, que de una manera u otra recurren a lo

largo de su obra. odos los cr%ticos concuerdan en que la principal preocupacin

de Sabato es el ser humano, el hombre concreto en su inmediatez humana y

su aspiracin meta%sica. !sta posicin en realidad la toma la cr%tica de la obra

del mismo Sabato para quien3 0o hay otra manera de alcanzar la eternidadque ahondando en el instante, ni otra orma de llegar a la uni#ersalidad que a

tra#s de la propia circunstancia3 el hoy y el aqu%.&!l escritor, >2*. !sta

preocupacin de Sabato por el hombre concreto inorma toda su obra y gu%a

su pensamiento, es el $no que se presenta en $no y el uni#erso, o el ser

humano que se encarna en Juan -ablo


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e#idente la relacin que se establece entre $no y el uni#erso y las obras

restantes, relaciones que no son slo temticas sino estructurales y estil%sticas.

Sabato, como hemos dicho antes, se sit:a a medio camino entre ambos y por

eso su discurso 5no el gnero ensay%stico como afrma -ollmann &'1)4*5 se

encuentra permeado por el razonamiento cient%fco, el anlisis pseudo5ob"eti#o

de la realidad &tal es el caso de


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presenta en sus pginas y aecta de manera determinante el desarrollo de las

obras.

!l incesto es un subproducto del con;icto apuntado anteriormente, y

desempeOa tambin un papel primordial. La pasin de 7ernando por su madre

por e"emplo, que luego se #a a duplicar en la relacin que hay, no del todo

clara, entre 7ernando y /le"andra. La relacin incestuosa entre 0acho y

/gustina +zaguirre. Qtra relacin tambin dudosa es la que se da entre Far%a

+ribarne Xunter y Xunter, primo de /llende. 0o queda claro qu relacin de

parentesco existe entre ellos o si en realidad manten%an relaciones amorosas,

pero de cualquier manera es otro caso a considerar. !l incesto y las relaciones

sexuales simblicas son elementos de gran importancia en la obra de !rnesto

Sabato. Puizs el caso ms interesante es la relacin que se da entre Sabato y

Soledad en /baddn &2') y ss.*.

Qtro moti#o de gran importancia es el que tiene que #er con la zoolog%a,

especialmente p"aros, murcilagos, ratas y culebras, que en el S5sistemauncionan como s%mbolos del mal.


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(.2. !l S5sistema

Desde la afrmacin de -eirce sabemos que toda obra de arte puede ser

estudiada como sistema de signos, como un campo de tensiones donde cada

signo #a estableciendo un n:mero de interpretaciones, donde el nombre de un

persona"e como ZFart%nZ representa una serie de rasgos que por procesos de

amalgamiento se #an aglutinando en torno a este signo. La explicacin del

proceso de semiosis que se establece en la actualizacin de un mensa"e

esttico debe partir de la expl%cita presentacin de los principales signos del

sistema, para poder pasar a su insercin general en un modelo semitico de

interpretacin.

!n este cap%tulo he tratado de seOalar algunos de los representmenes ms

importantes en el S5sistema, con el inters de demostrar que stos se

manifestan a todo lo largo del discurso sabatiano, contradiciendo la dierencia

postulada entre ensayo y no#ela. / pesar de lo limitado del anlisis me parece

que los elementos apuntados son sufciente para ormar una idea de loselementos del sistema semitico que gobierna el discurso sabatiano. /

continuacin, pasar a estudiar la escritura en su uncin de signo &2.6.*, el

discurso como macrosigno estructurado en base a un modelo retrico &4.6.*, y

la lectura como respuesta semitica al mensa"e &>.6.*. -ero antes me interesa

demostrar la in;uencia que el discurso cr%tico ha tenido sobre el discurso

literario.

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