prologo - piostros

2
Durante las últimas décadas, España ha experimentado una profunda transformación de sus estructuras económicas, políticas, sociales y culturales. Unos cambios que se han puesto especialmente de manifiesto en el mundo rural, donde en las primeras décadas del siglo XX aún se conservaba la pureza de ritos y fiestas de orígenes en ocasiones remotos. Salvo contadas excepciones, el proceso de globalización y uniformidad cultural ha desvirtuado gran parte de nuestras tradiciones. De ahí la importancia de un libro como éste, en el que Pedro de la Fuente Serrano plasma lo esencial del pasado y del presente de dos fiestas fundamentales para Pedroche: Los Piostros y La función de los soldados. Recuerdo que hace algunos años, en medio de una conversación intrascendente, alguien comentó: “como decía el alcalde de Obejo, quien quiera justicia que venga pronto, que me voy a arar”. Esta antigua expresión pretendía mostrar cómo en poblaciones pequeñas las élites económicas, sociales y políticas del lugar estaban tan alejadas del estamento nobiliario que trabajaban labrando los campos con sus manos. Pero los alcaldes –dos por cada población- hace ya más de dos siglos que dejaron de actuar como jueces. Este dicho, por lo tanto, se había transmitido de generación en generación durante un mínimo de 200 años, encontrándose a fines del siglo XX condenado a su pérdida definitiva. Porque en la actualidad estamos perdiendo la memoria de forma cada vez más acelerada. Dichos, fiestas, ritos y tradiciones son cada vez más ajenos a nuestra vida cotidiana, hasta llegar a resultar incomprensibles. Como incomprensible es hoy imaginar a un alcalde actuando como juez. De ahí la importancia de que personas como Pedro de la Fuente se decidan a dejar plasmada por escrito no sólo la historia, sino también la situación real de unas fiestas tradicionales aún bien conservadas y muy cercanas a los pedrocheños. No resulta fácil precisar los orígenes remotos de fiestas antiguas y complejas como Los Piostros de Pedroche. Ligada al culto a Nuestra Señora de Piedrasantas, resulta inevitable relacionar la estampa que ofrece la llegada de los caballos a la ermita con las periódicas reuniones que, desde el siglo XV, realizaban en este lugar los representantes de los concejos de las villas de la comarca. Sin embargo, no se detiene mucho el autor en estos orígenes casi míticos de la fiesta. Acertadamente en mi opinión, el libro se centra en su evolución durante el siglo XX. Con la ayuda de antiguas crónicas periodísticas, Pedro de la Fuente recupera la memoria de una fiesta que, en lo esencial, no ha sufrido cambios profundos durante el último siglo. Trabajando bien estos mimbres, Pedro teje un tupido recorrido por los últimos cien años de la

Upload: carpio-duenas-juan-bautista

Post on 21-Jan-2016

221 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: prologo - Piostros

Durante las últimas décadas, España ha experimentado una profunda transformación de sus

estructuras económicas, políticas, sociales y culturales. Unos cambios que se han puesto

especialmente de manifiesto en el mundo rural, donde en las primeras décadas del siglo XX

aún se conservaba la pureza de ritos y fiestas de orígenes en ocasiones remotos. Salvo

contadas excepciones, el proceso de globalización y uniformidad cultural ha desvirtuado gran

parte de nuestras tradiciones. De ahí la importancia de un libro como éste, en el que Pedro de

la Fuente Serrano plasma lo esencial del pasado y del presente de dos fiestas fundamentales

para Pedroche: Los Piostros y La función de los soldados.

Recuerdo que hace algunos años, en medio de una conversación intrascendente, alguien

comentó: “como decía el alcalde de Obejo, quien quiera justicia que venga pronto, que me voy

a arar”. Esta antigua expresión pretendía mostrar cómo en poblaciones pequeñas las élites

económicas, sociales y políticas del lugar estaban tan alejadas del estamento nobiliario que

trabajaban labrando los campos con sus manos. Pero los alcaldes –dos por cada población-

hace ya más de dos siglos que dejaron de actuar como jueces. Este dicho, por lo tanto, se había

transmitido de generación en generación durante un mínimo de 200 años, encontrándose a

fines del siglo XX condenado a su pérdida definitiva.

Porque en la actualidad estamos perdiendo la memoria de forma cada vez más acelerada.

Dichos, fiestas, ritos y tradiciones son cada vez más ajenos a nuestra vida cotidiana, hasta

llegar a resultar incomprensibles. Como incomprensible es hoy imaginar a un alcalde actuando

como juez. De ahí la importancia de que personas como Pedro de la Fuente se decidan a dejar

plasmada por escrito no sólo la historia, sino también la situación real de unas fiestas

tradicionales aún bien conservadas y muy cercanas a los pedrocheños.

No resulta fácil precisar los orígenes remotos de fiestas antiguas y complejas como Los Piostros

de Pedroche. Ligada al culto a Nuestra Señora de Piedrasantas, resulta inevitable relacionar la

estampa que ofrece la llegada de los caballos a la ermita con las periódicas reuniones que,

desde el siglo XV, realizaban en este lugar los representantes de los concejos de las villas de la

comarca. Sin embargo, no se detiene mucho el autor en estos orígenes casi míticos de la fiesta.

Acertadamente en mi opinión, el libro se centra en su evolución durante el siglo XX.

Con la ayuda de antiguas crónicas periodísticas, Pedro de la Fuente recupera la memoria de

una fiesta que, en lo esencial, no ha sufrido cambios profundos durante el último siglo.

Trabajando bien estos mimbres, Pedro teje un tupido recorrido por los últimos cien años de la

Page 2: prologo - Piostros

fiesta y, lo que me parece aún más destacable, nos ofrece una imagen viva de su realidad

actual. Una imagen que muy pronto, quizá ya cuando el lector esté enfrascado en la lectura de

este libro, posiblemente sea historia.

La misma metodología utiliza el autor para describir una fiesta nacida posiblemente a

comienzos del siglo XX: la llamada Función de los soldados. A pesar de tener un origen más

reciente, esta fiesta está profundamente arraigada en la tradición pedrocheña. El análisis de

diferentes escritos y artículos de prensa sirve a Pedro de la Fuente de hilo argumental para

explicar la fiesta, su evolución a lo largo del siglo XX y su situación en la actualidad.

Quizá un poco condicionado por mi formación como historiador, creo que el valor más

importante de esta obra es documental. Porque la panorámica general que nos ofrece sobre

estas dos tradiciones pedrocheñas nos permitirá, en el futuro, tener una referencia clara sobre

las claves rituales que contienen. Y no es un tema menor, ya que el conocimiento de la fiesta

es fundamental para llegar a apreciarla, y por lo tanto a conservarla. Conocíamos la gran

importancia del Patrimonio Histórico Monumental de Pedroche. Ahora podemos catalogar

correctamente Los Piostros y La función de los soldados como elementos integrantes de

nuestro Patrimonio Inmaterial.

Pedro no es historiador, ni folclorista, ni antropólogo. Pero quizá sea la persona que más

tiempo ha dedicado a conocer y difundir los Piostros y las tradiciones de Pedroche. Con su

trabajo en el Ayuntamiento, a través de distintas páginas de internet y ahora con esta obra.

Este libro nos ayudará a conocer mejor ambas fiestas. Además, es un magnífico instrumento

para garantizar su conservación. Pero por encima de todo nos hará disfrutar con su lectura y

valorar más nuestras tradiciones. De Pedroche y de Los Pedroches.

Juan Bautista Carpio Dueñas