Pautas para una exposición oral

• No temas al miedo escénico; es lo que se siente frente a un grupo de desconocidos al que se quiere impresionar. Se pasa al poco de empezar, sobre todo si llevas claro tu discurso.

las causas de la fobia al

hablar en público son:

• Miedo a cometer algún

error

• Miedo a olvidar algo

• Miedo a las burlas

10 Pasos para superar la fobia a hablar en público.

• Aprovecha situaciones menores

• Conoce tu tema

• Elabora tu presentación

• Prepara un bosquejo

• Practica tu presentación

• Familiarízate con el auditorio

• Relaciónate con el público

• Relaja la tensión

• Concéntrate en tu exposición

• Busca cara amistosas

1 Gánate al auditorio desde el primer momento.

• Si quieres tener éxito, debes llamar la atención de tu audiencia desde el comienzo.

cuenta una anécdota o vivencia personal interesante,

aporta algún dato reciente o impactante,

o plantea un problema, para que tu público reflexione sobre él, provocando así un diálogo inesperado.

De este modo generarás las expectativas sobre las que desarrollarás después tus propios razonamientos.

2 Recurre a algún medio visual.

• Un proyector

• El material gráfico siempre crea impacto, y ayuda a la comprensión.

• Pero sin pasarte, pues podrías saturar de imágenes al público.

• Recuerda que a él va dirigida tu

presentación, y no a tu propio deleite

o lucimiento personal.

• poco texto en cada diapositiva y

más presencia de símbolos, iconos,

diagramas, fotografías, etc. Que

ilustren gráficamente tu discurso.

3 Ten en cuenta el tipo de público.

• Adapta a él tu lenguaje. Frente a públicos diferentes, estilos distintos.

• Es fundamental a la hora de captar la atención de la audiencia.

• Tampoco aquí has de buscar la exhibición, sino la transmisión eficaz de las ideas, aun a costa de tu elocuencia y de tu apabullante erudición.

¿por qué es necesario y prácticamente fundamental

tener buen aire para hablar ante los demás?.• Primeramente, lo más claro y contundente es lo

siguiente: si no tienes aire sencillamente no podrás hablar. Si no hay aire, tampoco habrá voz.

• La falta de aire te hará verte nervioso o nerviosa ante lo demás. La falta de aire suele ser un indicativo de nervios.

• Si tienes como plan tomar aire solo cuando hayas terminado tu idea, es posible que lo último de esa idea solo sea escuchada por quienes están en la primer fila o en su defecto, más cerca de ti. Lo último de esa oración será poco escuchada

• El sentir la falta aire tiende a producir una mayor velocidad al hablar, lo cual resulta en una menor comprensión por parte de la audiencia.

• La falta de aire bien puede provocar un aumento en la ansiedad.

técnicas para saber administrar el aire al hablar en público.

• 01. Regular la Velocidad al Hablar:

• Una buena manera de poseer un mayor control sobre el aire, es hablar de forma moderada. Cuando se presenta algún tema en público, la velocidad con que se habla suele ser más lenta, a diferencia cuando se habla con una persona.

• Si hablas más despacio podrás darte cuenta como administrar el aire llega a ser algo más fácil, y pero no solo esto, sino también la comprensión y captación de tu mensaje será mejor. Por lo tanto, para tener un mejor control del aire, comienza por enfocarte en hablar más despacio.

• 2. Haz Pausas al Hablar:

• Al hacer tu presentación

¿consideras las pausas como momentos incómodos y en tu mente aparentan ser instantes eternos?

• Realmente si es una pausa involuntaria bien podría llegar a ser un momento muy incómodo, pero por otro lado, hacer pautas intencionalmente es una excelente técnica para llamar la atención del público, pero no solamente ello, sino que también te permitirá tomar aire con toda tranquilidad.

3. Respira con Diafragma:

• Respirar con el diafragma es un poco diferente a respirar únicamente utilizando los pulmones. Cuando respiras con el diafragma, al momento de inhalar tu estómago se llena de aire, y al momento de exhalar el volumen del estómago desciende.

• Para desarrollar este tipo de respiración haz el siguiente ejercicio:

En tu cama y bocarriba, coloca tu manos sobre tu estomago, ahora inhala aire pero guardándolo en estómago, con tus manos podrás notar como es la parte alta del estómago la cual aumenta su volumen. Mantén el aire durante un instante y luego comienza a exhalar lentamente, todo esto es con propósito de acostumbrarnos a una respiración diafragmática, y con ello una respiración normal y natural al hablar en público.

4 Mira a la asamblea.

•

• Sí, a todos, no sólo a una o dos personas, que hasta podrías llegar a intimidarlas con tu mirada.

• Tampoco vale mirar continuamente al techo o a las paredes de la sala: estás hablando a personas, no a un recinto. La solución pasa por que tus ojos recorran de vez en cuando toda la sala y no expliciten 'preferencias' subjetivas.

5. Si te quedas en blanco, recapitula.

• Te bloqueas y no sabes cómo seguir (aunque, si vas bien preparado, eso es más difícil que suceda).

• Respira hondo, y, con el pretexto de que así se entenderá mejor lo ya expuesto y lo que aún queda por decir, comienza a hacer un resumen de lo dicho hasta ese momento. Verás cómo, llegado al punto amnésico, recuperarás el hilo perdido y podrás proseguir tranquilamente tu exposición.

6. Si no sabes algo, sírvete del público como aliado.

• Es una forma de ganar tiempo y de evitar que te pillen en la duda o en la ignorancia, y, de paso, propicias la reflexión compartida, que tanto anima y enriquece el debate.

Recuerda que tu cuerpo también comunica. • La expresión corporal es

tanto o más importante que la oral. Evita posturas cerradas, como cruzar los brazos, quedarte estático como una esfinge o plantarte inmóvil en un punto del estrado

• Pero, ¡cuidado!, tampoco caigas en una motricidad excesiva que aturda a los asistentes.

La conclusión, muy breve.

• Conclusión no es resumen, sino remate, es algo conciso que dé sentido a toda la charla o que se derive de ella. Por consiguiente, no es este el momento de divagar o aportar ideas nuevas que se te acaben de ocurrir.

• Ah, y no lo olvides: la conclusión perfecta es la que provoca preguntas.