mÚsica y lenguaje, hermanos · 2018-02-20 · mienzo y desarrollo de la historia y la necesidad de...

Discurso del acadmico honorario electo

EXCMO. SR. D. JOAQUN ACHCARRO ARISQUETA

ledo en el Acto de su Recepcin Pblica e l da 18 de febrero de 2018

y contestacin del

EXCMO. SR. D. JOS LUIS GARCA DEL BUSTO ARREGUI

M A D R I D - M M X V I I I

R E A L A C A D E M I A D E B E L L A S A RT E S D E S A N F E R NA N D O

MSICA Y LENGUAJE, HERMANOS




y contestacin del



R E A L A C A D E M I A D E B E L L A S A RT E S D E S A N F E R NA N D O




y contestacin del



R E A L A C A D E M I A D E B E L L A S A R T E S D E S A N F E R NA N D O

MSICA Y LENGUAJE, HERMANOS

Fotografa: www.achucarro.com

D I S C U R S O


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Seoras y seores acadmicos:

Pocas cosas hay en esta vida que sean ms fciles y satisfactorias que dar las gracias, cuando proceden no de un formalismo convencio-nal, sino de una urgencia interior.

As pues: gracias, acadmicos, por el honor que me habis hecho con vuestro voto unnime. Gracias a Toms Marco, a Rafael Moneo y a Jos Luis Garca del Busto, que juntos propusieron mi nombre. Gra-cias tambin a Joaqun Soriano por su laudatio, y a Teresa Berganza y Toms Marco, por haberse prestado a acompaarme en la solemne entrada hasta este estrado.

Estoy a punto de hacer lo que llevo haciendo ya bastantes aos: intentar dar msica lo mejor que me sea posible, a travs de esa ma-ravilla del ingenio humano que San Francisco de Ass llamara Il Nos-tro Fratello Pianoforte, con el cual voy a poder manifestar mi agrade-cimiento. Y, puesto que en estos das se cumplen los cien aos de la muerte de Debussy, es lgico dar un tributo a su msica que, junto con la de Ravel, dio un vuelco a la manera de entender la emocin musical, haciendo pedazos las reglas de la armona tradicional.

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La arqueloga nos dice que, ms que indicios, hay pruebas casi con-cluyentes de que en el largo calendario de la evolucin, el lenguaje y la msica, con su inevitable compaera la danza, surgieron contempo-rneamente en el lento desarrollo de la inteligencia del Homo Sapiens.

Luego vinieron muy poco a poco: la medicin del tiempo, el co-mienzo y desarrollo de la historia y la necesidad de clasificar y ordenar los acontecimientos.

Podemos pensar que la historia del arte es un intento de reunir y clasificar en grupos formas distintas de hacer, estableciendo al mismo tiempo una especie de ficheros temporales. En los siglos en los que ha ido desarrollndose lo que llamamos nuestra msica, ha habido pe-rodos como de crecimiento natural y otros en los que de pronto sucede algo, como un terremoto o una erupcin volcnica, que cambia totalmente el paisaje: gregoriano, barroco, clasicismo, romanticismo, impresionismo, etc.

Necesitamos que exista esa clasificacin, pero el peligro que en-cierra es el de etiquetar, encajonar, cuadricular por perodos, que casi parecen compartimentos estancos, a algo que es comn en todos ellos: las emociones, sensaciones, estados de nimo que son parte comn de los humanos de todas las pocas que habitamos el planeta. Personas como nosotros que en todas las pocas han sentido las emociones co-munes de alegra, tristeza, ansiedad, furia, odio, ternura, amor, irona, humor, triunfo, derrota, etc. y que los artistas en nuestro caso msi-cos han intentado expresar.

Pero el clasificar temporalmente el arte de la msica hace que hoy pueda parecer iconoclasta, por ejemplo, el reconocer una identidad emocional entre el Preludio en mi bemol menor de Bach yuna Mazurca de Chopin, o incluso Scriabin. O que se tenga el atrevimiento de llamar a Beethoven romntico o incluso impresionista. Porque si pensamos en el segundo tiempo de su Sexta Sinfona, con el ruiseor, la perdiz y

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el cuc que aparecen antes de la Tempestad, y que naturalmente pro-vocaron las reglamentarias crticas, o si pensamos en que el significa-do de la palabra Empfindungen (sensaciones), usada por l mismo en el primer movimiento, puede alargarse hasta impresiones, por qu no podemos llamarle impresionista? Y por qu no a Liszt, cuyos Juegos de agua de la Villa d Este son el antecedente directo de los Juegos de Ravel y de los Reflejos de Debussy?

Porque la palabra impresionismo an no se haba inventado, que dira Juan Ramn Jimnez. Esa palabra, de uso corriente hoy, fue apli-cada como algo despectivo, con la intencin de ridiculizar una nueva manera de pintar en la que, resumiendo mucho, la luz era un elemento esencial. La denominacin de impresionista la motiv un clebre cuadro de Monet (Impression, soleil levant), ttulo que dio origen al trmino al utilizarlo con carcter sarcstico Louis Leroy en su negati-va crtica de la exposicin celebrada en Pars en la primavera de 1874, en la que esta obra se expona junto a otras de Renoir, Degas, Czanne, Morissot y otros.

No es, pues, de extraar, que el ttulo de impresionistas que les fue aplicado a Debussy y Ravel no les gustase nada. Pero el hecho es que la innovacin que introdujeron fue el equivalente al terremoto antes alu-dido y que provoc que el honrado aficionado a la msica y asistente a conciertos y estrenos, se encontrara de pronto como un viajero que, al cruzar una frontera, descubre un pas cuya lengua no comprende y tiene que aprender, y que tiene costumbres muy distintas a las que l conoce.

Me parece innegable que el uso que hicieron de las posibilidades sonoras del teclado y del pedal equivale a un descubrimiento. Fueron sonoridades nuevas y, claro est, atacadas, denostadas, ridiculizadas. Pero lo maravilloso es que estaban ah ya, dentro de las posibilida-des de los pianos modernos.

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Como Amrica o el Polo norte estaban ah antes de su descubri-miento. Y no podemos menos que pensar en Bcquer y las notas que dorman en las cuerdas del arpa*. Y, ms an, en el Mundo de las Ideas de Platn y que La Teora de la Relatividad estaba ah para que Eins-tein la descubriera.

Muchas gracias.

Cunta nota dorma en sus cuerdas,como el pjaro duerme en las ramas, esperando la mano de nieveque sepa arrancarlas!1

* [G.A. Bcquer: Estrofa de El arpa olvidada].

C O N T E S T A C I N


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Seoras y seores acadmicos, seoras y seores:

En Joaqun Achcarro admiramos tanto su cualidad musical como su calidad humana. Por eso, es para m un gran honor y, ms an, una inmensa alegra participar en la recepcin como acadmico honorario de tan gran artista contestando a la primera parte de su discurso de in-greso. Primera parte, s, porque su discurso se va a completar despus de mis palabras con una segunda parte en la que Joaqun Ach carro desplegar su elocuencia hablndonos desde el piano. Nos regala un recital cuyo atractivo me obliga a ser breve.

La primera actuacin pblica notable de la que guarda memoria el gran pianista Joaqun Achcarro, nuestro nuevo acadmico honorario, se remonta al 20 de mayo de 1946, cuando toc el Concierto en re menor, K. 466 de Mozart en la sesin conmemorativa de las bodas de oro de la Sociedad Filarmnica de Bilbao. Tena 13 aos. En 1949 vino a Madrid para estudiar virtuosismo con el catedrtico y miembro numerario de esta Academia Jos Cubiles. En 1950, el joven Achcarro se present como concertista con orquesta en Madrid, tocando el mismo Concierto de Mozart con la Orquesta de Cmara que diriga Atalfo Argenta. Ese

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mismo ao viajara a Siena para estudiar en la clebre Accademia Chi-giana con Guido Agosti: pronto destac, y el maestro Paul van Kempen lo eligi para ser solista del Concierto de Grieg. Joaqun llegara a ser ms adelante sucesor de su maestro Agosti como prestigiado profesor en los cursos internacionales de Siena, donde, por otra parte, asisti a clases de direccin impartidas por Celibidache y Franco Ferrara, y donde trab gran amistad con Zubin Metha, a partir de que tocaran juntos la Rapsodia sobre un tema de Paganini de Rachmaninov. Sigui estudiando con Agosti en Roma, con Gieseking en Saarbrcken y con Magaloff en Suiza. En 1957 acude a Viena a las clases de Bruno Seidl-hofer, y all comienza a practicar lo que l mismo ha descrito como es-tudiar como es debido, es decir, nunca menos de seis horas diarias. El lanzamiento de su carrera internacional se produjo en Inglaterra, primero con su triunfo, en 1959, en el Concurso de Liverpool y, al ao siguiente, con su debut en Londres tocando con la London Symphony en el Royal Festival Hall. En el mismo 1960 toc en Italia, en Trieste, el Concierto de Schumann, acompaado por otro joven talento en el inicio de su carrera: Claudio Abbado. En 1969, Achcarro debut en Estados Unidos junto a la Filarmnica de Los ngeles, invitado por su director titular, su amigo Zubin Mehta, pero no sera ste quien dirigie-ra la Rapsodia sobre un tema de Paganini que toc Joaqun Achcarro en aquella ocasin, sino otro brillante msico espaol, Rafael Frhbeck de Burgos: el xito de ambos fue clamoroso, y los dos se convirtieron en asiduos visitantes en las temporadas de la gran orquesta americana. En todo caso, Achcarro ya no dejara de acudir cada ao a Estados Uni-dos, y ms an desde finales de los aos ochenta, cuando fue nombrado profesor de su especialidad en la Universidad de Dallas, lo que lleva consigo residir all una parte de cada curso.

Pero hasta aqu llega lo que ha empezado siendo una especie de curriculum profesional del maestro Achcarro. Su carrera compren-

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de algo ms de tres mil conciertos dados en ms de sesenta pases de todo el mundo, recitales a solo o conciertos con orquesta y, en stos, ha actuado junto a ms de doscientas orquestas: como se entiende f-cilmente, hacer tan solo un pequeo resumen del repertorio que ha interpretado e interpreta (al que luego, siquiera brevemente, tendr que referirme), de los teatros y auditorios en los que ha sido aclamado, de las orquestas y directores con los que ha colaborado, de los premios y distinciones que ha recibido, convertira esta intervencin en una aburrida y abrumadora profusin de datos que, por una parte, son co-nocidos por muchos de ustedes y, por otra, los encontrarn resumidos en el curriculum vitae del maestro que se incluye en la publicacin que podrn recoger a la salida de este acto. Trataba simplemente de refe-rirme a sus comienzos para resaltar que quien hoy recibe los honores de investidura como acadmico honorario es un artista en plena forma como inmediatamente mostrar, pero que lleva a sus espaldas una carrera de setenta aos, setenta, dando conciertos de piano.

Por cierto, nuestro gran pianista nunca ha cancelado un concier-to, lo cual ha supuesto tocar alguna vez con fiebre de treinta y nueve grados, o empleando solo nueve dedos cuando, como consecuencia de una cada, se rompi los ligamentos del otro. Ni siquiera cuando le operaron del tendn de Aquiles: pidi al mdico que le cambiaran el yeso por fibra de vidrio ms ligera y se fue de gira con la maleta y las muletas. Alguna vivencia personal puedo contar al respecto: a finales de enero de 1997, ejerca yo la crtica musical en ABC y asist con esa misin a un recital de Achcarro en el Auditorio Nacional. El maestro sali a escena con el dedo anular de la mano izquierda ven-dado y protegido y se dirigi al pblico mostrndolo y contando, con el buen humor que le caracteriza, que haba desodo los consejos del mdico porque en su larga carrera jams haba cancelado un concier-to y no estaba dispuesto a romper la racha. Pero, por otra parte, nos

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tranquiliz con el siguiente comentario: adems, he venido porque creo que voy a poder estar a la altura de lo que ustedes y yo esperamos de m. Lo estuvo, por supuesto, pese a que el programa no era preci-samente ligero, pues, adems de piezas de Bach y de Mompou, inclua dos Gavotas y las Piezas op. 118 de Brahms, as como los Valses nobles y sentimentales y la imponente Gaspard de la nuit de Ravel. Tras varias salidas para recibir aplausos y bravos, Joaqun se sent ante el piano. No nos lo podamos creer, pensando en su lesin y despus de haber tocado semejante programa con el Scarbo raveliano como final, pero se dispona a dar una propina. Y ofreci uno de sus guios al pbli-co amigo: para aumentar nuestra zozobra, anunci el Preludio para la mano izquierda de Scriabin y, poniendo en posicin de reposo la mano izquierda lesionada, lo toc con la derecha Y, ms cerca en el tiempo, a finales del pasado mes de noviembre le omos con la Orquesta Nacio-nal tocando, tres das seguidos, los dos Conciertos para piano y orques-ta de Ravel, obras muy exigentes de las que Achcarro hizo versiones modlicas pese a que actu aquejado de un fuerte dolor de citica. Me-ras ancdotas, claro, porque la buena salud que ha procurado cui-dndose y haciendo ejercicio, incluso practicando algn deporte ha sido una gran aliada para posibilitar tan impresionante actividad sin haber suspendido ninguna de sus actuaciones anunciadas.

El repertorio interpretado por Joaqun Achcarro en sus con-ciertos cubre, adems de lo fundamental escrito en el clasicismo, en el romanticismo y en el siglo XX para piano solo, ms de cincuenta conciertos para piano y orquesta, entre ellos una docena de los Con-ciertos de Mozart, los cinco Conciertos, el Triple Concierto y la Fantasa coral de Beethoven, los dos Conciertos de Chopin, el de Schumann, los dos de Brahms, el primero de Chaikovsky, el de Grieg (el compo-sitor noruego con quien, por cierto, Joaqun tiene un lejano parentes-co), las Variaciones sinfnicas de Cesar Franck, el segundo Concierto

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de Saint-Sans, los cuatro de Rachmaninov (ms la Rapsodia sobre un tema de Paganini), los tres de Bartk, el de Gershwin (ms la Rapsodia in blue), los dos de Ravel, el Concierto fantstico de Albniz, las Noches en los jardines de Espaa y el Concerto de Falla, la Rapsodia Sinfnica de Turina, la Rapsodia portuguesa de Ernesto Halffter, el Concierto de Rodrigo (del que hizo una revisin notable, con la anuencia del com-positor), el Concierto vasco de Escudero, el Espacio sagrado de Toms Marco, un abanico formidable.

Mucho ms difcil, naturalmente, es resumir el ocano musical del repertorio para piano solo que el maestro Achcarro ha trabajado y difundido por los cinco continentes en sus constantes actuaciones. Desde Bach hasta los grandes nombres del siglo XX, no hay ningn compositor occidental con aportacin trascendente al piano sobre el que Joaqun Achcarro no haya dicho algo personal e interesante. Pero permtanme que subraye el siguiente hecho: puesto que Joaqun es un intrprete en verdad grande, nos parece lo ms natural que en cualquier pas del mundo se le reciba, incluso se le requiera para orle su Beethoven, su Chopin, su Schumann, su Brahms, su Grieg, su Scria-bin, su Rachmaninov, su Debussy, su Ravel, su Gershwin pero bien sabe l, as como otros excelentes profesionales del mbito musical y concertstico que se encuentran en esta sala, lo complicado que es al-canzar esto que encontramos natural, porque, siendo el extraordinario pianista que demostraba ser cuando hace ms de cincuenta aos co-menzaba a entrar en los circuitos concertsticos internacionales ms selectos, sin duda tuvo que defenderse de (tuvo que luchar contra) la tendencia a etiquetar de programadores, gerentes y crticos, tradu-cida en su disposicin a escuchar a un joven virtuoso espaol tocando Albniz, Granados o Falla, y a mostrar reticencias, en cambio, ante su voluntad de tocar Beethoven, Chopin o Brahms. En esta carrera de obstculos que es la concertstica, tocar maravillosamente bien es con-

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dicin necesaria para ser reconocido, pero no suficiente. Felizmente, Achcarro no tard demasiado en alcanzar ese estatus privilegiado de concertista espaol a la vez que universal y, ms an, seguro estoy de que lleva aos eligiendo dnde tocar y yendo all a tocar lo que le da la gana, pues nadie duda de que lo que Achcarro les va a ofrecer es, primero, msica de la mayor calidad y, segundo, obras que han pa-sado recientemente por el laboratorio y que en ese momento tiene en sazn.

Citando una frase suya hemos apuntado antes a una de las carac-tersticas de la carrera de Joaqun Achcarro: su dedicacin continua, ininterrumpida e intensa al estudio. Joaqun prepara cada interpreta-cin de una obra como si fuera la primera vez que va a abordarla, cons-ciente de que una partitura, si de verdad es msica importante, nunca te habr desvelado por completo sus secretos o, lo que es lo mismo, siempre guardar matices y sutilezas nuevas que estaban ah, desde el principio, esperando pacientemente a que te enteraras de su exis-tencia, las aprehendieras, las aprendieras y, finalmente, las dieras a los dems. Este proceso que llevan a cabo los intrpretes trascendentales tiene algo de investigacin que no siempre es entendido y, menos an, reconocido, pero que es. S amigos, Joaqun Achcarro es un investiga-dor vocacional. Hablando por telfono con Emma Emma Jimnez, excelente pianista que es su esposa, su imprescindible compaera y colaboradora, su alter ego, ella me coment que Joaqun haba vuelto a casa el da anterior, tras una larga jornada dedicada al estudio, di-ciendo: Vengo agotado, pero muy contento. He descubierto algunas cosas. En la primavera de 2016 tuve la dicha de contar con l para cul-minar una serie de programas sobre pianistas espaoles que me haba encargado mi antigua casa, Radio Clsica, de RNE. Se trataba de hacer un programa de una hora, con entrevista ilustrada con varias interpre-taciones en vivo, intercaladas entre la charla. Joaqun apareci en el

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estudio aquella tarde como siempre: puntual y cordialsimo; y, como siempre, tras un abrazo se puso a hablar como si hubiramos pasado juntos toda la maana, con esa rara capacidad que muestran los via-jeros impenitentes para reanudar la conversacin en el punto en que haba quedado la anterior, como si no hubieran pasado meses de por medio. Y, tras comparar algunas ediciones del Homenaje a Debussy de Falla, con diferencias notables entre ellas, entr en lo que ms le urga contar en ese momento:

Jos Luis, he descubierto un silencio de semicorchea en uno de los Intermezzi op. 117 de Brahms que voy a tocar, me dijo con ese entusiasmo juvenil que es otra de sus caractersticas. Era el segundo Intermezzo, en si bemol menor.

Pero, Joaqun, llevas muchos aos tocando esa obra y, por lo tanto, haciendo ese silencio.

S, pero lo he descubierto no hace mucho. A fuerza de rumiar la interpretacin me he dado cuenta de su significado y llegu a sentir miedo, porque es un momento angustioso, casi aterrador: es un Brahms que se sabe en el ltimo tramo de su vida Ese silencio es un instante de tomar aliento, un suspiro antes de llevar la msica a un final emo-cionante que expresa resignacin

No es sta horas, das, aos buscando la postura de un inves-tigador?

Su intenso trabajo de estudio trae como consecuencia, como es-cribi Enrique Franco, el alumbrar interpretaciones que parecern luego espontneas. Por otra parte, ese intenso trabajo de estudio y de bsqueda consigue que quienes hemos seguido su carrera hayamos podido observar y admirar la evolucin de sus interpretaciones, nunca iguales, siempre ganando en hondura y esencialidad. No cabra encon-trar mejor ilustracin para explicar lo que es una work in progress que una escucha de las versiones que Joaqun Achcarro ha ido ofrecien-

do a lo largo de su trayectoria del Cuarto Concierto de Beethoven, por citar lo que considero uno de los hitos de su carrera.

He mencionado antes su dedicacin a la enseanza, ejercida es-pecialmente en los ltimos treinta aos en Dallas, con regularidad y con notabilsimos frutos: en el libro sobre Joaqun Achcarro que pu-blic Luciano Gonzlez Sarmiento en 2002, aparece una abundante relacin de alumnos del maestro Achcarro, de las ms diversas na-cionalidades, que han resultado ganadores de concursos y premios in-ternacionales de primera categora, relacin que, por supuesto, ha cre-cido considerablemente en los 16 aos transcurridos desde que aquel libro se edit y que no es ms que un indicio, porque su enseanza no consiste en fabricar concursantes brillantes. Como todos los gran-des maestros que en el mundo han sido, Joaqun Achcarro disfruta dando clases y es consciente de cunto se aprende cuando se ensea. Y buena parte del prestigio alcanzado por Achcarro como maestro estriba en que, ms que a tocar el piano (por supuesto, l solo trabaja con pianistas hechos), lo que ensea a sus alumnos es msica, es el camino para ahondar en las interpretaciones, en pos de los contenidos musicales y expresivos ms emocionantes y verdaderos que residen en cada partitura y hacen de ella una obra de arte. Por eso Enrique Fran-co, en el prlogo al libro antes citado, escribi que Joaqun Achcarro era Profesor internacional en la defensa de la verdad, tan importante e imprescindible en la prctica musical como si se tratara de una for-ma peculiar de tica.

Es trascendental la reflexin acerca de qu pianismo se est ha-ciendo en nuestros das y qu pianismo buscamos, porque todos los que nos dedicamos a la msica conocemos bien el apabullante nivel de virtuosismo que caracteriza a los jvenes intrpretes que destacan hoy da en los concursos y en las tribunas concertsticas y, aun reconocien-do que es admirable observarlo, no podemos sino estar absolutamente

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de acuerdo con Joaqun Achcarro cuando apunta: Pero qu pocas veces aparece esa especie de escalofro que te produce el inicio de un Estudio de Chopin tocado por Rubinstein!. Y eso que echamos en fal-ta es lo que busca sin cesar Joaqun Achcarro, pero no solo para sus discpulos, claro, sino fundamentalmente para s mismo: el modelado del sonido adecuado para cada interpretacin; la perfeccin tcnica como medio, no como fin; la limpia ejecucin como procedimiento para dar con la verdad musical y hacerla aflorar, para sentir su profun-do contenido y comunicarlo a los oyentes, a quienes hay que emocio-nar, ms que deslumbrar. Esto, exactamente esto, es lo que el pianista y acadmico Joaqun Soriano destac de la trayectoria artstica de su ilustre colega y tocayo en la laudatio de Joaqun Achcarro que, como he recordado al principio de esta solemne Sesin, llev a cabo ante el Pleno de la Academia apoyando la idoneidad de su candidatura. Y esto mismo es lo que, con otras palabras, expresa el propio Achcarro cuando advierte a sus alumnos que el concierto no es una exhibicin, sino un espacio cultural.

Seoras y Seores, amigos, dispongmonos a disfrutar, una vez ms con l, de la magia de la msica.

Excmo. Sr. D. Joaqun Achcarro Arisqueta, maestro Achcarro, querido Joaqun: bienvenido a esta Casa.

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P r o g r a m a

Claude DEBUSSY: 2 Preludios - Voiles (del Livre I) - Brouillards (del Livre II)

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Claude DEBUSSY: Soire dans Grenade (de Estampes)Manuel de FALLA: Homenaje a Debussy

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Maurice RAVEL: Alborada del gracioso (de Miroirs)

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N o t a s a l p r o g r a m a

He aqu la segunda parte del discurso de ingreso del maestro Joaqun Achcarro en la Real Academia de Bellas Artes de San Fer-nando, institucin que hoy le acoge en calidad de acadmico honora-rio. Tras sus palabras, va a seguir hablndonos, pero ahora con su otro lenguaje, el de la msica, medio de comunicacin universal con el que ha recorrido el mundo hacindose entender, emocionando a las gen-tes, comunicndose con ellas para hacerles partcipes de la belleza.

El piano de Claude Debussy ha sido uno de los captulos siempre presentes en el trabajo de Joaqun Achcarro y, cuando comienza el ao 2018, cuando estamos hoy a cinco semanas de que se cumpla exactamen-te el centenario de la muerte del gran compositor francs, resulta lgi-co que nuestro nuevo acadmico honorario haya pensado en su msica como eje vertebrador del recital pianstico con el que, por as decirlo, va a completar su discurso de ingreso. Tendremos, pues, msica de Debussy, pero acompaada bien acompaada por obras de dos de sus colegas ms prximos en el tiempo, en el espacio y en el sentir esttico: Manuel de Falla de quien escucharemos precisamente un tributo a la memoria de Debussy en forma de homenaje pstumo y Maurice Ravel.

Claude Debussy (1862-1918): dos Preludios y Soire dans GrenadeLos veinticuatro Preludios compuestos por el buen pianista y ex-

cepcional compositor que fue Claude Debussy se agruparon en dos Libros y constituyen una de las aportaciones esenciales al pianismo del siglo XX: proponen una nueva sonoridad, una nueva concepcin del piano que explota al mximo sus posibilidades tmbricas (de color sonoro) y evocadoras. El Libro I fue compuesto en poco ms de dos meses, entre diciembre de 1909 y febrero de 1910, mientras que las

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piezas del Libro II se escalonaron a lo largo de tres aos, de 1910 a 1912. Los poticos y sugerentes ttulos de cada uno de los Preludios figuran en la partitura al final de la pieza, no en el encabezamiento, y adems entre parntesis, gestos con los que Debussy quiso hacer no-tar que no se trata de msica descriptiva en la que los ttulos deban condicionar al intrprete, sino de msica imaginativa, evocadora de aquello que el compositor indica al final de la partitura... Son veinti-cuatro pequeas obras maestras que encierran todos los elementos de la singular personalidad musical del maestro francs.

En Voiles (Velas), segunda pieza del Libro I, Debussy utiliza la es-cala de tonos enteros en la apacible evocacin de veleros dibujndose sobre el plano azul del mar que nos evoca la primera seccin de la pieza, mientras que en la segunda seccin, en la que Debussy utiliza una escala pentatnica, cabra encontrar la evocacin de las velas ms hinchadas por un viento que sopla con ms fuerza. Concluye la obra con la vuelta a la primera seccin, en versin muy abreviada.

Bouillards (Nieblas) es el primer nmero del Libro II de los Prelu-dios debussystas. Si Joaqun Achcarro se ha referido en su discurso a que la msica de Debussy hizo pedazos las reglas de la armona tra-dicional, Brouillards funciona como perfecto ejemplo de ello. El com-positor moldea el sonido, que se torna inmaterial y vagaroso como la niebla, buscando cascadas y conglomerados de notas que encuen-tran su orden, su lgica, su sentido, no en la satisfaccin de norma al-guna, sino en la riqueza y elocuencia de su expresividad.

Las Estampes de Claude Debussy son un trptico pianstico que data de julio de 1903 y que nuestro compatriota Ricardo Vies el me-jor pianista abierto a la msica contempornea que trabajaba en Pars en aquellos aos estren en enero del ao siguiente. La segunda de estas Estampas, titulada Soire dans Grenade, es una de las pginas en las que Claude Debussy se acerc a lo espaol sin conocer realmente

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este pas y, desde luego, sin haber pisado Andaluca. En esta deliciosa Tarde (o Atardecer) en Granada que, segn anota en la partitura, debe interpretarse en ritmo indolentemente gracioso, Debussy lleva a cabo su personal recreacin de la habanera, como hicieron Bizet, Cha-brier, Saint-Sans, Lalo, Ravel y tantos otros compositores franceses de los siglos XIX y XX cuando quisieron apuntar hacia Espaa, una tendencia a la que sin duda contribuy el enorme xito que el msico alavs Sebastin de Iradier haba obtenido con sus habaneras en los salones de Pars en los aos centrales del siglo romntico.

Manuel de Falla (1876-1946): Homenaje a DebussyA la bella Soire dans Grenade de Claude Debussy aludira Falla en la

obra guitarrstica que, precisamente como Homenaje a Debussy, com-puso en memoria de su amigo y admirado colega francs. En efecto, tras la muerte de Debussy en marzo de 1918, la Revue Musicale parisina se dirigi a importantes compositores del momento (Bartk, Ravel, Falla y Stravinsky entre ellos) para solicitarles alguna aportacin con vistas a una publicacin monogrfica en memoria del gran maestro fallecido. ste es el origen del Homenaje pour le tombeau de Claude Debussy que Falla escribi en agosto de 1920 y que envi a la Revue Musicale en la versin guitarrstica que haba escrito para de paso satisfacer la in-sistente demanda que vena hacindole Miguel Llobet de una pieza para guitarra. Pero Falla la escribi tambin para piano y hasta, tiempo des-pus, la orquestara para incluirla en su tarda Suite Homenajes.

En su Homenaje a Debussy, Manuel de Falla parte del ritmo de ha-banera, tan caro a Debussy, y traza una msica austera, esencial, honda y hermosa, de curso seco y aristado, descarnada de armona, en la que en vano buscaramos un toque de color o alguna concesin al tpico espaolista. El tono elegaco domina, como consecuencia de una efu-sividad contenida y ahogada en lamento. En un momento dado, Falla

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cita un pasaje de la Soire dans Grenade del maestro recordado para evidenciar el carcter de homenaje.

Maurice Ravel (1875-1937): Alborada del graciosoEn el lbum pianstico de Ravel titulado Miroirs (Espejos) se integran

cinco obras maestras, cada una de ellas de valor autctono. Nuestro Ri-cardo Vies estren los Miroirs en enero de 1906. Para Marguerite Long, la gran intrprete y estudiosa del piano de Ravel, el cuarto de estos es-pejos, la Alborada del gracioso, es la cima de la coleccin. sta es una de las muchas pginas ravelianas que aluden a Espaa y tambin una de las que gozan de similar predicamento en dos versiones: la original pia-nstica y la orquestal que se dio a conocer en 1919. La pieza se titula ori-ginalmente as, en castellano. Conocedor de la cultura espaola, Ravel emple el trmino gracioso en el sentido del caracterstico personaje teatral de nuestro Siglo de Oro: una especie de bufn. En cuanto a la msica, ah estn las claras evocaciones sonoras de rasgueos de guitarra, o la gracia inconfundible del cantar de la copla que se sita en el centro de la composicin, entre las dos apariciones de la seccin principal, ca-racterizada sta por su aire de danza.

La Alborada del gracioso es msica de enorme exigencia para el pia-nista y tambin para el piano: como detalle curioso, sintomtico de los admirables niveles de autoexigencia y rigor que adornan la perso-nalidad del maestro Achcarro, cuento al lector que, cuando acord-bamos el programa a interpretar en esta solemne sesin, el maestro condicion la inclusin en el programa de la Alborada del gracioso al resultado de una consulta con el experto tcnico que afina y mantiene el instrumento de la Academia, para asegurarse de que las caracters-ticas mecnicas de nuestro piano son adecuadas para la problemtica ejecucin de los pasajes en notas repetidas de breve duracin.

Jos Luis Garca del Busto

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N O TA S S O B R E J O A Q U N A C H C A R R O

La revista francesa DIAPASON, en su nmero de octubre de 2015, incluy una grabacin de Joaqun Achcarro entre Les 100 plus beaux disques de piano de tout les temps, junto a pianistas como Ra-chmaninov, Horowitz, Rubinstein, Cortot, Richter, Gould, Brendel, Argerich o Pollini.

La impecable y modlica carrera artstica de Joaqun Achcarro, descrito por el Chicago Sun Times como The Consummate Artist, le ha valido la ms alta reputacin nacional e internacional.

Achcarro mantiene una ininterrumpida actividad concertstica in-ternacional que le ha llevado a 61 pases, actuando en salas como Avery Fisher Hall, Berlin Philharmonie, Carnegie Hall, Concertgebouw, Ken-nedy Center, Musikverein, Royal Albert Hall, Festival Hall, Barbican, Salle Gaveau, Salle Pleyel, Teatro alla Scala, Suntory Hall, Sydney Opera House, Teatro Coln, etc., tanto en recitales como de solista con ms de doscientas orquestas diferentes que incluyen la Berliner Philharmoni-ker, Chicago Symphony, New York Philharmonic, Los Angeles Philhar-monic, Montreal Symphony, London Philharmonic, London Symphony, Philharmonia, Royal Philharmonic, BBC Symphony, La Scala di Mila-no, Santa Cecilia de Roma, Sydney Symphony, Orchestre de Montreal, National de France, Yomiuri Nippon Symphony, Tokyo Philharmonic, Tokyo Symphony, RIAS Berlin, Tonknstler Wien, Nacional de Chile, de Mexico, de Colombia, de Venezuela y por supuesto todas las orques-tas de Espaa, junto a ms de 400 directores entre los que figuran Clau-dio Abbado, Sir Adrian Boult, Riccardo Chailly, Sir Colin Davis, Zubin Mehta, Sir Yehudi Menuhin, Seiji Ozawa o Sir Simon Rattle.

En 2000 fu nombrado Artist for Peace por la UNESCO, en Pars, en reconocimiento a su extraordinaria labor artstica. La Interna-

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tional Astronomical Union (IAU) acord nombrar al miniplanet 22191 con el nombre Joaqun Achcarro en homenaje a su trayectoria ar-tstica universal.

Es Accademico ad Honorem de la Accademia Chigiana de Siena (Italia) y en Espaa Achcarro ha recibido los ms altos honores en las Artes: Medalla de Oro a las Bellas Artes, Premio Nacional de Msica y Gran Cruz del Mrito Civil.

En 2004 fue nombrado Hijo Predilecto de la Villa de Bilbao, su ciu-dad natal. Est en posesin de la Medalla de Honor de la Fundacin Sabino Arana.

Entre sus grabaciones destacan dos DVDs: el Concierto n 2 de Bra-hms, con la London Symphony Orchestra y Sir Colin Davis (Opus Arte) fue aclamado por la crtica, recibi 5 stars en todas ellas y fue nmero 1 en la lista de bestsellers del gigante www. Amazon.com. El segundo lleva por ttulo Falla and Friends (Euroarts) y en l Achcarro interpreta las Noches en los Jardines de Espaa de Falla junto con la Orquesta Filar-mnica de Berlin y Sir Simon Rattle, grabadas en el Philharmonie Hall de Berln. Fue recibido tambin con entusiasmo por crtica y pblico.

SONY ha reeditado sus famosas Goyescas de Granados (Premio Choc de Classica en Francia). Igualmente, su CD de Schumann pu-blicado en Pars (La Dolce Volta) ha sido premiado con el Choc de Classica, el Diapason y el Maestro Pianiste.

Atendiendo la peticin del compositor, Achcarro reescribi y grab para SONY su revisin del Concierto para piano de Joaqun Rodrigo. Tambin ha recibido premios por sus grabaciones de Falla, Granados, Ravel y Brahms para BMG-RCA, Claves y Ensayo. Otras grabaciones incluyen msica de Schumann, Schubert, Chopin, Bee-thoven, Debussy, Bartk, Rachmaninov, Scriabin, Turina y Herrmann.

Desde Agosto 1989 Joaqun Achcarro es titular de la Ctedra Joel Estes Tate Chair de la Southern Methodist University en Dallas

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(USA), y combina sus perodos de enseanza con su apretada agenda de conciertos.

Ha desarrollado, adems, incontables clases magistrales y cursos en centros del mayor prestigio como los Conservatorios Superiores de Pars, Turn, Shangai o Lima; Escuelas Superiores de Msica, Aca-demias y Festivales de Ginebra, Manchester, Dartington, Nueva York, Verbier, Universidades de Nashville, Houston, Fort Worth, Manila, Santander, Portland, San Jos, Bari y en cursos internacionales de Duszniky (Polonia), Beijing, Tokyo, Npoles, Pisa, Guadalajara (Mxi-co), entre otros muchos.

El maestro Achcarro ha sido requerido a participar como Jurado en numerosos concursos internacionales de piano celebrados en Ita-lia, Suiza, Espaa, Francia y Estados Unidos.

Entre las abundantes distinciones que ha acumulado a lo largo de su carrera, adems de las ya mencionadas figuran, en Espaa, Comen-dador de Nmero de la Orden de Isabel la Catlica, Ilustre de Vizcaya, Vasco Universal, Medallas de Oro del Palau de Valencia, del Festival de Granada y de las Sociedades Filarmnicas de Oviedo y Bilbao; Socio de Honor de la Sociedad Coral de Bilbao y de las Sociedades Filarm-nicas de Las Palmas y Pamplona; Acadmico Correspondiente de la Academia de Bellas Artes de Cdiz, as como de la Real Academia de Bellas Artes de Nuestra Seora de las Angustias de Granada.

Fuera de Espaa, Joaqun Achcarro ha sido distinguido con la Medalla Harriet Cohen (Londres), Premio de la Tribuna de Crticos de Radio France, Husped distinguido de la Ciudad de Oaxaca, Perso-naje del Ao de la Ciudad de Dallas

En 2008, un grupo de personas e instituciones de Dallas cre la JOAQUN ACHCARRO FOUNDATION para perpetuar su legado artstico y docente ayudando a jvenes pianistas alumnos suyos, en el comienzo de sus carreras.

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El 18 de febrero de 2018 ingres como acadmico honorario en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y el solemne acto de su investidura como doctor honoris causa por la Universidad Autno-ma est previsto para el 17 de mayo de 2018.

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O RQ U ESTAS CON LAS QUE JOAQUN AC H CA R RO H A C O L A B O R A D O C O M O S O L I S T A E N L A

I N T E R P R E T A C I N D E C O N C I E R T O S(Ordenadas alfabticamente por pases y regiones geogrficas)

Alabama Symphony OrchestraAlburquerque PhilharmonicBaltimore Symphony OrchestraBloomington Symphony OrchestraBoise Philharmonic OrchestraBuffalo Philharmonic OrchestraCalifornia Symphony OrchestraChautauqua Symphony OrchestraChicago Symphony OrchestraCincinnati Symphony OrchestraCorpus Christi SymphonyDallas Symphony OrchestraDelaware Symphony OrchestraEdmonton Symphony OrchestraFlorida Chamber OrchestraFlorida West Coast OrchestraFort Worth Symphony OrchestraIrving SymphonyLaredo Philharmonic OrchestraLos Angeles Philharmonic OrchestraLouisiana Philharmonic OrchestraMississippi Symphony OrchestraMontreal Symphony OrchestraNew Mexico Symphony OrchestraNew York Philharmonic OrchestraPacific Symphony

Philharmonic Orchestra of FloridaSacramento Symphony OrchestraShreveport Symphony OrchestraSouth Florida Symphony OrchestraSoutheastern Ohio Symphony Or-

chestraThe Phoenix Symphony OrchestraToledo Symphony OrchestraVancouver Symphony OrchestraYakima Philharmonic OrchestraYork Symphony Orchestra

BBC Northern OrchestraBBC Philharmonic Orchestra (Man-

chester)BBC Scottish OrchestraBBC Welsh OrchestraBedford Symphony OrchestraBournemouth SinfoniettaBournemouth Symphony OrchestraCity of Birmingham OrchestraEast Anglia OrchestraEnglish Chamber OrchestraGuildford Philharmonic OrchestraLondon Philharmonic OrchestraLondon Symphony Orchestra

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Manchester Hall OrchestraNational Symphony Orchestra

of IrelandNew Philharmonia OrchestraNorthern Chamber OrchestraNorwich Philharmonic OrchestraPerth Symphony OrchestraRadio Telefis Eireann OrchestraRoyal Liverpool Philharmonic

OrchestraRoyal Philharmonic OrchestraScottish Chamber OrchestraScottish National OrchestraUlster Symphony Orchestra

Maggio Musicale FiorentinoOrchestra Citt di VicenzaOrchestra da Camera di PadovaOrchestra dei Solisti VenetiOrchestra dellAccademia Chigiana

(Siena)Orchestra della RAI (Milano)Orchestra della RAI (Torino)Orchestra dellArena di VeronaOrchestra di BariOrchestra di CagliariOrchestra di TriesteOrchestra Filarmonica della Scala

(Milano)Orchestra Santa Cecilia (Roma)Orchestra Scarlatti (Napoli)Orchestra Sinfonica di LecceOrchestra Sinfonica di San Remo

Orchestra Sinfonica Teatro La Fenice (Venezia)

Anhaltische Philharmonie DessauBadisches Staatstheater KarlsruheBerliner Philarmoniker Berliner SymphonikerDeutsche Kammerakademie NeussDsseldorf SymphonikerHamburger SymphonikerOrchester des Pfalztheaters Kaiser-

slauternOrkester der Beethovenhalle BonnOrkester der Stadt HagenOst Berlin Komische OperPhilarmonia HungaricaRadio-Symphonie Orkester BerlinRemscheider SymphonikerSddeutscher Rundfunk StuttgartTonknstler Orkester (Wien)Westflisches Symphonieorkester

RecklinghausenWrttembergische Philharmonie

ReutlingenWrttembergisches Staatsorchester

Stuttgart

Collegium Musicum dAquitaineOrchestre Colonne de ParisOrchestre dAuvergneOrchestre de Bordeaux-AquitaineOrchestre de Chambre National de

Toulouse

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Orchestre de la Radiodifusion Fran-aise

Orchestre des Concerts LamoureuxOrchestre National de FranceOrchestre National du Capitole de

ToulouseOrchestre Regional de Cannes

BRT Filharmonisch Orkest (Brussel)Het Gelders Orkest ArnhemKoninklijk Filharmonisch Orkest

(Antwerpen)Limburg Symphonie OrkestOrchestre de Saint-GallenOrchestre Symphonique de RTL

(Luxembourg)Radio Filharmonisch OrkestRotterdams Filharmonisch Orkest

Aalborg SymphonieorkesterAarhus SymphonieorkesterBergen HarmonieHelsingin Kaupunginorkesteri

(Helsinki)Helsinki PhilharmonicIceland Symphony OrchestraJyvskyla SinfoniaMoss OrchestreNorwegian Radio OrchestraOdense SymphonieorkesterSonderjyllands Symfonieorkester

(Sondeborg)Stavanger Symphony Orchestra

Arad State PhilharmonicAthens Symphony OrchestraBudapest Philharmonic OrchestraCzech Virtuosi Chamber OrchestraHungarian National OrchestraKrakow Philharmonic OrchestraLithuanian Symphony OrchestraOrchestre Philharmonique Novo-

sibirskPloiesti State PhilharmonicPraha Symphony Chamber OrchestraRaanana Symphoniette Orchestra

(Israel)Rumanian National OrchestraRumanian Radio Television Sym-

phony OrchestraRusse Philharmonic OrchestraSatu Mare State PhilharmonicSibiu State PhilharmonicSoloists of Czech Philharmonic Or-

chestraThessaloniki OrchestraWarsaw National OrchestraWarsaw Symphony

Collegium Instrumentale de ValenciaOrquesta Btica de SevillaOrquesta Cmara AsturiasOrquesta Castilla y LenOrquesta Clsica de MadridOrquesta Clsica Santa CeciliaOrquesta de Cmara ArriagaOrquesta de Granada

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Orquesta de MlagaOrquesta de ValenciaOrquesta Filarmnica de Gran

CanariaOrquesta Nacional de EspaaOrquesta Palma de MallorcaOrquesta Pablo Sarasate de PamplonaOrquesta Reina SofaOrquesta Sinfnica de BalearesOrquesta Sinfnica de BarcelonaOrquesta Sinfnica de BilbaoOrquesta Sinfnica de EuskadiOrquesta Sinfnica de GaliciaOrquesta Sinfnica de la RTVEOrquesta Sinfnica de MadridOrquesta Sinfnica de TenerifeOrquesta Sinfnica del Principado

de AsturiasOrquesta Solistas de CataluaOrquestra Gulbenkian (Lisboa)Orquestra Sinfnica del Gran Tea-

tre del LiceuOrquestra Sinfnica del VallsReal Orquesta Sinfnica SevillaReal Filarmonica de GaliciaJoven Orquesta de Leioa

Orquesta Antioqua de MedellnOrquesta Filarmnica Ciudad de

MxicoOrquesta Filarmnica de BogotOrquesta Filarmnica de Buenos AiresOrquesta Filarmnica del Valle (Cali)

Orquesta Filarmnica Municipal de Santiago de Chile

Orquesta Pro MusicaOrquesta Sinfnica de ColombiaOrquesta Sinfnica de GuadalajaraOrquesta Sinfnica de MineriaOrquesta Sinfnica de XalapaOrquesta Sinfnica del Estado de

MxicoOrquesta Sinfnica del SodreOrquesta Sinfnica Municipal de

CaracasOrquesta Sinfnica Juvenil de PerOrquesta Sinfnica Nacional de Cos-

ta RicaOrquesta Sinfnica Nacional de

MxicoOrquesta Sinfnica National de San-

to DomingoOrquesta Universidad de CaracasOrquestra de la Radio de Sao PauloOrquestra Sinfnica de Porto Ale-

greOrquestra Sinfnica Municipal de

Sao PauloOrquestra Sinfnica do Estado de

Sao PauloSinfnica Brasileira de Rio de Ja-

neiro

Cape Town Symphony OrchestraHiroshima Symphony OrchestraHong Kong Symphony Orchestra

37

Manila Symphony OrchestraNatal Philharmonic Orchestra (Dur-

ban)National Symphony Orchestra (Jo-

hannesburg)Singapore Symphony Orchestra

Sydney Symphony OrchestraTaipei Symphony OrchestraTokyo PhilharmonicWest Australian Symphony OrchestraYomiuri Nippon Symphony Or-

chestra

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D I R E C T O R E S C O N L O S Q U E H A C O L A B O R A D O J O A Q U N A C H C A R R O E N L A I N T E R P R E TA C I N

D E C O N C I E R T O S PA R A P I A N O Y O R Q U E S T A

Abbado, ClaudioAhronovitch, YuriAkiyama, KazuyoshiAlbrecht, George Alcntara, TheoAlfonso, ArmandoAlonso, OdnAmaducci, BrunoAmigo, JessAndersen, KarstenAndreescu, HoriaAnissimov, AlexanderAprea, BrunoArmbarri, JessArean, JosArgenta, AtalfoArwell Hughes, OwainAtherton, DavidAtzmon, MosheAuriacombe, LouisAzevedo, Sergio

Badea, ChristianBaker, Robert HartBall, ChristopherBamert, MatthiasBatiz, EnriqueBaud-Bovy, Samuel

Bavier, Antoine DeBeek, Arie VanBelardi, ArmandoBello Portu, JavierBender, PhilippeBenzi, RobertoBergel, ErichBergmann, RuneBerglund, PaavoBernart, Massimo deBernett, DietfriedBertini, GaryBiava, LuisBillard, SebastienBiscardi, MassimoBjaland, LeifBlech, SimonBocchino, AlceuBolet, AlbertoBoncompagni, ElioBorejko, AndreiBoult, Sir AdrianBragado, MaxBrooks, JamesBrotons, SalvadorBrott, BorisBrnniman, BadurBrown, Gerald

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Buenagu, JosBugaj, Tomasz

Caball, JosepCalcraft, RaymondCaldern, PedroCalleya, OctavCampbell, IanCapolongo, PaulCarewe, JohnCaridis, MiltiadesCarneiro, JoanaCasadesus, Jean C.Ceccato, AldoCollado, JosChailly, RiccardoChmura, GabrielChoo, HueyClitheroy, CrossleyColomer, EdmonComissiona, SergiuConta, IosifCorti, FrancescoCouraud, MarcelCree, EdgarCreswell, BrookeCsillery, Bela DeCullells, AgustnCurry, William

Davis, Sir ColinDawson, JulianDe Priest, JamesDe Waart, Edo

Decker, Franz PaulDelibozov, TzankoDeutsch, MarjorieDazmuoz, EduardoDiemecke, EnriqueDomarkas, JuozasDownes, EdwardDutoit, Charles

Elenescu, EmmanuelEncinar, Jos RamnErdelyi, MiklsEscudero, Francisco

Farina, CarloFazor, TerrenceFederowski, BernardFerrer, RafaelFistoulari, AnatoleFjeldstatFladmoe, ArvidFletcher, RichardFlorencio, Jos MaraFlores, Jose G.Frster, L.Fster, HrstFranco Gil, Jos MFremaux, Louis DeFrhbeck de Burgos, RafaelFrst, Janos

Galduf, ManuelGallois, PatrickGamba, Rumon

41

Garcia Asensio, EnriqueGarca Navarro, L. AntonioGarcia VigilGelderGelmetti, GianluigiGerhardt, CharlesGibson, Sir AlexanderGiordano, JohnGiuranna, BrunoGols, MaralGmez Martnez, M. ngelGraf, HansGroves, Sir CharlesGell, JavierGuidarini, MarcoGuilbert, AndrGunzenhauser, StephenGutirrez de la Puente

Hager, LeopoldHalffter, CristbalHalffter, PedroHandley, VernonHart-Bedoya, MiguelHauschild, Wolf-DieterHeras-Casado, PabloHenderson, SkitchHerbig, GuntherHerrera de la Fuente, LuisHopkins, JohnHrtnagel, GeorgHoulihan, RobertHudson, DerekHurst, George

Huss, Hugo Jan Van

Inbal, EliahuIturbi, JosIzquierdo, Juan PabloIzquierdo, Luis

Jagust, MladenJekowsky, BarryJoo, ArpadJord, EnriqueJurowsky, Vladimir

Kalmar, CarlosKamu, OkkoKarabtchevski, IsaacKhakidze, DjansugKogan, PavelKohlpicke, John H.Komatsu, ChoseiKomlos, PabloKotael, BohumilKrenz, JanKrivine, EmmanuelKuhn, GustavKulenovic, VladimirKulka, JanosKntsch

Lauret, BenitoLa Vecchia, FrancescoLeaper, AdrianLee, EverettLehnard, Ondrej

42

Len, JaimeLen Villaverde, A.Leppard, RaymondLeskovic, BogoLetvin, CarolLimantour, JoseLitton, AndrewLloyd Jones, DavidLpez Cobos, JessLoughran, JamesLockington, DavidLorenzo de Reizbal, MargaritaLovett, TerenceLozano, FernandoL, Jia

Maag, PeterMac Kerras, CharlesMacal, ZdenekMadey, BoguslawMalaval, JulioMander, FrancescoMannino, FrancoManolovMar, Norman DelMarino, AmerigoMrkl, JunMartinez-Izquierdo, ErnestMartinotti, BrunoMas, SalvadorMata, EduardoMatacic, Lovro VonMazzola, EnriqueMcGinnis, Donald E.

Mechkat, FahradMehta, ZubinMena, Juan JosMenges, HerbertMenuhin, YehudiMester, GeorgeMetters, ColinMichael, HermanMichelsen, ErikMiedel, RainerMikaelsen, OddvarMikhailidis, SolonMinczuk, RobertoMilnes, DavidMora, JordiMoreau, MichelMorgenstern, SheldonMorris, WynnMuiz Toca, AngelMuoz, Bruno

Nayderov, AlipidNart, OganNeuhold, GntherNice, CarterNobarro, MalcolmNoseda, Gianandrea

Ono, KazujiOterloo, Wilhelm Vantvos, GaborOzawa, SeijiPaleschi, CarloParidis, Andreas

43

PavonPearce, ColmanPehlivanian, GeorgePerez Busquier, GerardoPrez, Vctor PabloPetrenko, VasilyPiantini, CarlosPikkulas, EmmanuelPrfano, PedroPolivnick, PaulPonkin, VladimirPons, JosepPortal, EduardoPosada, AlejandroPosada, MariomirPriestmann, BrianPrieto, Carlos MiguelPritchard, Sir JohnProtasi, Juan

Rahbari, AlexanderRasilainen, AriRattle, Sir SimonRemartnez, LuisRiazuelo, CarlosRickenbacher, Carl A.Ridley, AnthonyRieu, AndreRignold, HugoRivellesRobinson, StanfordRobinson, StuartRodilla, Jos MiguelRodo

Ros Marb, AntoniRosen, AlbertRose, MichelRousi, ThomasRubio, JorgeRuiz Laorden, UrbanoRumpf, Alexander

Sabat, PabloSabina, SantiagoSacchani, RicoSanderling, ThomasSantimoteoSatanowski, RobertSchapirra, EliakunSchermerhorn, KennethSchmidt, ErichSchmidt, OleSchmidt, UrySchumann, LauraSchurmann, GerhardSchwartz, RudolfScimone, ClaudioSeaman, ChristopherSedares, JamesSegal, UriSegerstam, LeifSerebrier, JosSerov, EdwardSeverini, TizianoShambadal, LiorShao, EnSilvestri, ConstantinSimoniades, Alexandrs

44

Skrovaczewski, StanislavSoler, CristbalSoudant, HubertSmith, MarkSoustrot, MarcSouza LimaSpiteri, VicenteSpurny, VojtechSteinberg, PinchasStieffel, WernerStirn, DanielSuitner, OtmarSuk, JanosSunshine, AdrianSsskind, WalterSutej, VjekoslavSuttie, Alan

Takeda, YoshimiTang, MuhaiTchakarov, EmilThomson, BrydenToldr, EduardoToro, Vctor HugoTortelier, Jean PaulTraub, YaromTrevio, RobertTzipine, George

Valds, MaximianoVan Zweden, Jaap

Vandernoot, AndrVanderzand, CharlesVnk, OsmoVarga, GilbertVargas, Carlos EnriqueVasary, TamasVaughan, DenisVentura, FabrizioVillaverde, Agustn LenVoorberg, MarinusVronsky, Petr

Wakasugi, HiroshiWall, B.Wallenstein, AlfredWalter, AlfredWatanabe, AkeoWebb, JulianWeldon, GeorgeWeller, WalterWillis, AlastairWilson, Keri-LynnWolff, HaroldWoll, BjrnYepes, Ignacio

Zaliouk, YuvalZdravkovitch, GikaZomerdyk, HeinZuccarini, MarcoZumalave, Maximino

45

Este discurso se termin de imprimir en Madrid, en

los talleres grficos de la Imprenta Taravilla,

el 31 de enero de 2018

Depsito legal: M-4259-2018

mÚsica y lenguaje, hermanos · 2018-02-20 · mienzo y desarrollo de la historia y la necesidad de...

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