modelos septuplos en la biblia

Los ModelosSéptuplos Bàsicos

de la Biblia

Eldred Linden

Buddy Cobb

SIETE CORRELACIONES ENTRE LOS MODELOS SEPTUPLOS BASICOS

En la Biblia hay una serie de de relatos que pueden dividirse en siete partes, los cuales revelan mucho acerca de los propósitos y plan redentor de Dios con respecto a nosotros. De entre ellos hemos escogido los siguientes para su estudio en este libro: En la Biblia hay una serie de relatos que pueden dividirse en siete partes, los cuales revelan mucho acerca de los propósi tos y plan redentor de Dios con respecto a nosotros. De entre ellos hemos escogido los siguientes para su estudio en este libro:

1. Los siete días de la creación 2. Los siete elementos del mobiliario del Tabernáculo 3. Las siete fiestas del Señor 4. Las siete cartas a las siete Iglesias 5. Los siete pasos del vencedor

Al escribir este libro, la carga del Espíritu es que vea mos que, a pesar de las diferencias entre cada metáfo ra de los modelos séptuplos, el mensaje es el mismo. Ya que el siete es el número de perfección, vemos en cada uno de estos básicos modelos séptuplos, parte de la perfección del propósito de Dios para nosotros. Es más, cuando vemos que la aplicación del mensaje de estos modelos séptuplos básicos es el mismo, aun-que la metáfora es distinta, los propósitos de Dios en cuanto a nosotros aún se revelan más perfectamente. Las verdades básicas y su aplicación en cada uno de los modelos séptuplos pueden considerarse tanto co-mo: (1) una secuencia, o como (2) un paralelismo.

1. En la secuencia vemos como el Señor revela sus propósitos perfectos con respecto a nosotros a través de varios modelos séptuplos, aún digamos, a través de siete. Esto se mantiene a través de las metáforas de

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los siete días de creación, los siete elementos del mobi liario del Tabernáculo, o las siete fiestas del Señor, etc.

2. En cuanto a un paralelismo vemos que aunque la metáfora en cada uno de estos modelos básicos de sie te partes es distinta (Los días de la creación, el mobilia rio del Tabernáculo, las fiestas del Señor, etc.), el estu-dio comparativo de cada día, mueble, o fiesta, etc., en paralelo, demuestra que Dios está básicamente hablan do lo mismo. (Por ejemplo, se hallan verdades y aplica ciones similares en cada uno de los “primeros”, sean días, muebles, o fiestas, etc. Asimismo, existen verda-des y aplicaciones similares en cuanto a los según-dos”, sean días, muebles o fiestas, etc.) Mientras que los misterios de los propósitos de Dios se mantienen escondidos de aquellos cuyos “ojos es-tán cerrados”, parecería para aquellos que “con el cora zón entiendan y se conviertan,” (Mt.13:15) el Señor es- tá diciendo, “Si no veis mi amor y mi propósito para ti por medio de una metáfora, te daré otra. Si no puedes comprender algún aspecto del modelo, te daré otro ti-po. Si aún a través de ese tipo no entiendes todo, te da ré otra analogía. Si esa analogía aún te deja dudas, te daré otra parábola”. Correlacionando estos modelos séptuplos, se hallan los siguientes cuatro niveles de aplicación:

1. Un pensamiento básico 2. Unos períodos progresivos (días milenarios)3. Pasos progresivos del hombre de la nueva creación, desde la salvación inicial hasta su madurez o perfec ción. 4. Unos reposos progresivos.

Para poder enfatizar estos cuatro niveles de aplica-ción en los estudios séptuplos ya mencionados, prime-ramente daremos una breve sinopsis, de su correla-ción y paralelismo. Se alienta al lector a mantener en

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mente estos diferentes niveles de aplicación, al leer losestudios más detallados a continuación. Al ser Génesis la simiente o libros clave de la Biblia, el relato de los Siete Días de la Creación es la simiente o relato clave. Sabemos que “para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.” (2ªP.3:8) El Sal.90:4 dice: “Porque mil años delante de tus ojos son como el día de ayer, que pasó.” Para nuestra con-veniencia, en estos estudios nos referiremos a estos “días”, como “días de la creación” de “la semana de la creación de Dios”. Desde los días de Adán, casi seis mil años, o seis días milenarios de la historia humana han pasado. Esta es la historia de la caída de la crea-ción de Dios por medio del pecado de Adán. Es tam-bién la historia de la obra REDENTORA de Dios por me-dio de Cristo Jesús, el postrer Adán. En estos estudios nos referiremos a estos períodos de mil años como “Días redentores” del “La semana redentora de Dios”. En estos estudios queremos ver: (1) Que lo que Dios hizo en cada día de la semana de la creación, es un ti-po de lo que El haría en cada día milenario de su se-mana redentora. (En otras palabras, la semana de la creación de Dios según se lee en los capítulos 1 y 2 de Génesis, es una profecía en forma de simiente de lo que Dios haría en ésta, su semana redentora, según el capítulo 3 de Génesis hasta el capítulo 22 Apocalipsis. Por supuesto, que la Biblia también hace breves refe-rencias a una eternidad pasada y una eternidad futura. Luego queremos ver: (2) Que los “días” progresivos de la creación de Dios y semanas redentoras son ambos tipos del hombre de la nueva creación que El está manifestando a través de siete pasos progresivos. (Lo que Dios ha estado haciendo históricamente entre ju- díos y gentiles en estos seis días milenarios es crear “de los dos un solo y nuevo hombre”. (Ef.2:15).

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Estos dos niveles de aplicación (que son los últimos dos de los enumerados anteriormente), se hallan incor porados en los siete días de la creación y los demás re latos séptuplos. Así es que estudios comparativos y pa ralelos se harán según la siguiente secuencia séptu-pla: I Los siete días de la semana de la creación II Los siete días de la semana redentora III Los siete pasos del hombre de la nueva creación IV Los siete elementos del mobiliario del Tabernáculo V Las siete fiestas del Señor VI Las siete cartas a las siete iglesias VII Los siete pasos del vencedor

UNA CORRELACIÓN SINOPTICA DE LOS MODELOS SEPTUPLOS BÁSICOS

EL PRIMER PASO O “DIA”

1. PENSAMIENTO BASICO; Una simiente o cubierta de luz y vida.

2. PERIODO PROGRESIVO: Primer día milenario de la semana redentora, desde Adán (4003AC) hasta la desaparición de Enoc (3016 AC)

3. PASOS PROGRESIVOS: El primer paso del hombre de la nueva creación. La

justificación por la fe

4. REPOSO PROGRESIVO: Un reposo en nuestro andar con Dios; del temor de nuestra salvación.

I LA SEMANA DE LA CREACION

Ge.1:3-5 División entre la luz y las tinieblas. El propósi-to de dividir la luz de las tinieblas era obtener una cu-bierta de luz llamada “día” aparte de la cubierta de tinie

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blas que ya existía. La razón por la cual las tinieblas es taban “sobre la fa del abismo” anterior a este período,Era porque Lucifer, “querubín grande, protector” había caído. (Ez. 28:14) II LA SEMANA REDENTORA

Desde Adán (4003 AC) hasta la desaparición de Enoc (3016) siempre que Adán y Eva caminasen con Dios estaban cubiertos por luz. Al desobedecer, rompieron su comunión con Dios. (1ªJn.1:7) Así en el comienzo del primer día milenario de esta semana redentora, Dios, de nuevo, separó “la luz de las tinieblas”. Al dejar la cubierta de luz y vida de Dios, ellos se adentraron bajo la cubierta de oscuridad del pecado, la enferme-dad, el dolor y la muerte. Adán y Eva procuraron cubrir se con hojas de higuera, que nos hablan de nuestras buenas obras. Durante el período, el hombre mediante la línea de Caín continuó haciendo esto. Sin embargo Dios había sacrificado animales que apunta al cordero pascual y proveyó pieles para cubrirlos. Abel, Set y aquellos de fe caminaron en luz progresiva. Al final de este período Enoc caminó con Dios y salió de la cubier ta de oscuridad del pecado enfermedad, el dolor y la muerte, y entró bajo una cubierta de la luz y vida eterna de Dios.

III. EL PRIMER PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION

Justificación por la fe. La perfección en tipo de las siete generaciones que fueron justificadas por la fe en el pri-mer día milenario de la semana redentora nos habla de un hombre de muchos miembros de la nueva crea-ción que caminará por fe “hasta que el día sea per-fecto”. (Pr. 4:18). No sólo estábamos EN (cubierta por) tinieblas, sino que ERAMOS tinieblas. “Porque en otro tiempo erais ti nieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como

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hijos de luz.” (Ef.5:8) Ge.1:5 dice: “Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche.” En el primer paso del hombre de la nueva creación, Dios esta está sepa-rando y llamando la luz y las tinieblas por su nombre. La Luz es espíritu y las tinieblas son la carne. IV. EL ALTAR DE BRONCE

(Éxodo 27:1-8)

El altar de bronce era de madera de acacia, eviden-temente cubierta por dentro y por fuera con bronce. Al momento del sacrificio la sangre de los animales ofreci dos también lo cubría. Simbólicamente el altar bronce está cubierto por cuatro cuernos. Los cuernos de un animal nos hablan del poder y de la fuerza que lo cu-bre. Al entregar el animal la cubierta de su propia fuer-za y poder, los cuernos vienen a ser el canal de luz y vi da de Dios para su pueblo. Simbólicamente el altar de bronce también estaba cubierto por la luz del fuego que lo cubría, y la luz del sol reflejada sobre el bronce que lo cubría. Se confeccionaron planchas de bronce para cubrir el altar, de los incensarios de bronce de Coré y aquellos que se rebelaron con él. (Nm.16:36-40) “... en recuerdo para los hijos de Israel, de que ningún extraño que no sea de la DESCENDENCIA (simiente) de Aarón se acerque para ofrecer incienso delante de Jehová...“ Así como con otros elementos del mobiliario, el altar de bronce estaba cubierto cuando se transportaba. (Nm.4:13-14) Sin embargo, parecía tener otras cubiertas, y es el único mueble cubierto con “UN PAÑO DE PUR

PURA”. Esto nos habla de la SIMIENTE REAL aquellos que reinarán y regirán con El. Reinar con El Reinar con El es cubrir con su luz y vida.

V. LA FIESTA DE LA PASCUA

Inmediatamente antes de guardar la primera fiesta, los egipcios habían sido cubiertos por oscuridad y muerte

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al fallecer sus primogénitos. Por otra parte, los israelí-tas habían sido cubiertos con luz, y ahora estaban cu-biertos por vida. Hay una clara relación entre la sangre y la luz. “La vida de toda carne está en la sangre...” (Lv.17:14) También, sin luz, no hay vida. Así es que tanto la sangre como la luz son diferentes y verdade-ras expresiones de vida. Así como en la cubierta de luz, el ángel vería la cubierta de sangre sobre los dinte les de las puertas, y pasaría. La primera Pascua seña-laba a Jesús, “la luz del mundo… el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo” El cumplió la Fiesta de la Pascua casi 1500 años después para que los pecados de todo aquél que acepta su provisión pudie-ra ser cubierto. También, para que finalmente su vida llenase toda la tierra, y su luz la cubriera plenamente.

VI. PRIMERA CARTA — LA IGLESIA DE EFESO

Ap. 2:1 “Escribe al ángel de la iglesia en Efeso: El que tiene; las siete estrellas en su diestra, el que anda en medio de los siete candeleros de oro, dice esto:”El primer día milenario comenzó con Adán y finalizó con Enoc quien fue el séptimo desde Adán. Efeso significa “deseada o anhelada”. Inicialmente, el único deseo de Adán era caminar aquél “que anda en medio de los sie te candeleros de oro”. “En medio” habla de centro; una estrecha relación de involucramiento; la fuente de fuerza y vida. El origen de la cubierta de un árbol es una pequeña SIMIENTE. El origen de la luz de las siete lám paras del candelero era un carbón encendido. Si permi timos que la simiente y la luz de la Palabra sean nues-tro origen y centro, la vida y la luz de Dios nos cubrirán y envolverán completamente. Vemos en Gn.2:9 que “el árbol de vida estaba en medio del huerto”. La metáfora de la luz del candelero y “el árbol de vida” también ha-blan de una cubierta de luz y vida.

VII PRIMER PASO DEL VENCEDOR

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Ap.2:7. “Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.” Toda parte del árbol tiene un propósito particular. Co-memos del fruto. Generalmente la SIMIENTE está en el fruto. En el primer paso de nuestra experiencia de sal-vación, comenzamos a participar del Espíritu de la Pa-labra, en vez de alimentamos del árbol de nuestro co-nocimiento del bien y del mal. Toda semilla produce se gún su género. La simiente de nuestra salvación es “la palabra de fe”. En el paso del vencedor, somos “justifi-cados por la fe”, y por lo tanto cubiertos por la justicia de Cristo que nos es imputada.

EL SEGUNDO PASO O “DIA”.

1. PENSAMIENTO BASICO:

Separación - sufriendo mediante la persecución

2. PERIODO PROGRESIVO:

Segundo día milenario y semana redentora, desde Enoc (3016AC) hasta Abraham (1995AC)

3. PASOS PROGRESIVOS:

Segundo paso del hombre de la nueva creación Bautismo del Espíritu Santo

4. REPOSO PROGRESIVO:

Reposar del temor de falsas doctrinas, sabiendo que Dios quita a los malos o a la maldad

1. LA SEMANA DE LA CREACIÓN

Gn.1:6-8. Creación de un firmamento en medio de las aguas para dividir (separar) las aguas de ABAJO de las aguas de ARRIBA. “Luego dijo Dios: Haya expansión (firmamento-mar-gen) en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión (firmamento), y sepa-ró (dividió) las aguas que estaban DEBAJO de la expan

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sión (firmamento) de las aguas que estaban SOBRE la expansión (firmamento). Y fue así.”

II. LA SEMANA REDENTORA

Desde la desaparición de Enoc (3016) hasta Abraham (1995AC) (Básicamente los 950 años de la vida de Noe 2947 a 1997AC) Durante el segundo día milenario de la semana redentora, Dios hizo lo mismo que había hecho durante el día segundo de la semana de la crea- ción. Mediante Noe y el diluvio El “SEPARO las aguas que estaban DEBAJO de la expansión de las aguas que estaban SOBRE la expansión”. Las aguas que estaban SOBRE la expansión son un tipo de aquellos que fueron salvos por medio del diluvio. Las aguas DEBAJO de la expansión, son un tipo de los pecadores que perecie ron mediante el diluvio. En Ap.17:15 uno de los siete ángeles dijo a Juan, “Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.” Por lo tanto, cuando Dios SEPARÓ “pueblos, muchedum-bres, naciones y lenguas” en la torre de Babel más ade lante en el segundo día milenario, vemos que de nue-vo El SEPARA “las que estaban DEBAJO de la expansión de las aguas que estaban SOBRE la expansión.”

III. SEGUNDO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION. El bautismo del Espíritu Santo

Gn.1:6. Dios dice que la expansión o los cielos en no-sotros nos SEPARARAN. Lo que determina si estamos en luz o en tinieblas son los cielos, el Espíritu o unción. SE

PARA. El segundo paso habla del bautismo del Espíritu Santo, creación del firmamento o unción que PROGRESI-

VAMENTE NOS SEPARA de la esfera mas BAJA de la esfera más ALTA.

IV. EL LAVACRO DE BRONCE

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Éxodo 30:17-21 El lavacro estaba hecho de bronce, pero no se dan medidas específicas. En verdades previas y las que a continuación se dan, los detalles son esenciales. En la verdad de SEPARACION Y SANTIFICAClÓN, los detalles de medidas imponen un legalismo, en vez de una verdade ra santidad que viene mediante “el lavacro del agua (espíritu) de la Palabra. ”Es significativo que se hace re ferencia al lavacro de bronce juntamente con “su ba-se”. También que “Aarón y sus hijos son tipo del ministerio quíntuple del espíritu de Ef.4:11, así como tam-bién lo son los cinco dedos de la mano. El ministerio de Dios debe ser santo, y el andar del Pueblo de Dios debe ser santo. Mientras que el altar de bronce habla de la provisión de Dios para CUBRIR y lavar nuestros pecados, el lava cro de bronce habla de la provisión para que nuestro andar sea un andar SEPARADO, y de santificación conti-nua. En Jn.13. Jesús lavó los pies de sus discípulos. Pedro no quería que Jesús lavase sus pies. El lavar-nos los pies los unos a los otros espiritualmente nos se para y santifica mediante el sufrimiento. Nuestro orgu-llo sufre tanto al ministrar como al ser ministrados de esta forma.

V. LA FIESTA DE LOS PANES SIN LEVADURA

Éx.12:15-20. Lv.23:6-8, Dt.16:3-4. En la segunda fies-ta, Dios pidió que su pueblo hiciera lo que El hizo el se gundo día de esta Semana Redentora. Había de SEPA

RAR toda levadura, toda maldad, no sólo del pan, sino también de la casa. Después de justificarnos mediante la fe y la obediencia, Dios quiere santificar y separar- nos hacia su voluntad y propósitos de la misma mane-ra. La levadura obra paulatinamente en la masa hasta que toda la masa se halla influenciada. Es un símbolo adecuado para el pecado, la enfermedad, las falsas

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doctrinas y prácticas corruptas. La Escritura da una se-rie de ejemplos de levadura y su significado.

VI. SEGUNDA CARTA - LA IGLESIA DE ESMIRNA

Ap.2:8. “Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna. “Esmirna significa “mirra”, que nos habla de SUFRIMI-

ENTO. Uno de los consejos dados a Esmirna en el ver-so l0 dice: “No temas en nada lo que vas a padecer.” El segundo día milenario de esta Semana Redento- ra, desde los días de Enoc hasta Abraham, es básica-mente los 950 años de la vida de Noé. (2947-1997AC) En He.11:7 leemos: “Por la fe Noé, cuando fue adverti do por Dios acerca de cosas que aún no se veían, CON

TEMOR preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.” Este no era el temor de las cosas que tuviera que sufrir, sino un temor reveren-te que tenía para el Señor. Al también ser movidos por este temor reverente o respeto, no temiendo lo que el hombre pudiera hacernos, seremos como Noé SEPARA-

DOS hacia un nivel más alto de la voluntad de Dios y sus propósitos. Aunque la iglesia en Esmirna, como Noé, sufrió mu-chas cosas, el Señor podía decir, “Yo conozco tus obras… y tu tribulación… y la blasfemia de los que se dicen ser judíos, y no lo son, sino sinagoga de Sata-nás.” Las obras de Noé fueron que “preparó el arca en que su casa se salvase”. Noé no fue salvo de la tribula ción, sino que fue salvo mediante la tribulación. La blas femia que Noé padeció fueron las muchas palabras de menosprecio que la gente decía ridiculizándole. Después de que la tribulación y la blasfemia que ex perimentó habían concluido, Noé edificó un altar y ofre ció sacrificios al Señor Gn.8:21 dice: “Y el Señor perci- bió olor grato”. Del pacto que el Señor hizo con Noé po demos ver que fue un olor de vida. “Y Bendijo Dios a Noé y sus hijos, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, y

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llenad la tierra. EL TEMOR y el miedo de vosotros esta-rán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos...“ Puesto que Noé no temió las cosas que había de sufrir, sino que únicamente temió al Señor, Dios le dio dominio sobre toda la creación.

VII. EL SEGUNDO PASO DEL VENCEDOR

Ap.2:11.”El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no SUFRIRÁ daño de la SEGUNDA MUERTE” En Ap.20:14, “la segunda muerte” se nos define. “Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la segunda muerte.” Vemos que “la segunda muerte” es la muerte que debe ser TEMIDA, pues es una muerte espiritual, SUFRIR LA SEPARAClÓN de Dios por to-da la eternidad.

TERCER PASO O “DIA”


Pan — sustento


Tercer día milenario de la Semana Redentora, desde Abraham (1995AC) hasta Salomón (990AC)


Tercer paso del hombre de la nueva creación Tierraseca o el desierto de la prueba; donde se manifiestan la simiente y el fruto de la carne.


Reposo del temor al sufrimiento y muerte naturales

I. LA SEMANA DE LA CREACIÓN

Gn.1:9-13. Tierra seca y vegetación Verso 9 -“... descú brase lo seco” (Verso 11) “Produzca la tierra hierba ver de, hierba que dé semilla; árbol de fruto que de fruto

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según su género, que su semilla esté en él, sobre la tie rra.”


Desde Abraham (1995AC) hasta Salomón (990AC).

Durante el tercer día milenario de esta Semana Re-dentora, de nuevo Dios hizo aparecer la tierra seca y produjo el fruto del campo. El hizo esto al levantar a Is rael y tratar con la simiente natural de Abraham. Esto fue mediante mucha “tierra seca” o experiencias del de sierto, tanto naturales como espirituales. El Sal.80:8-11 dice: “Hiciste venir una vid de Egipto; echaste las nacio nes, y la plantaste. Limpiaste sitio delante de ella, e hi-ciste arraigar sus raíces, y llenó la tierra. Los montes fueron cubiertos de su sombra, y con sus sarmientos los cedros de Dios. Extendió sus vástagos hasta el mar, y hasta el río sus renuevos.” Este es un cuadro de Israel desde que Dios llamó a Abraham hasta que Israel, bajo Salomón, tuvo dominio desde el Mar Medi-terráneo hasta el Río Eufrates.

III TERCER PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION

Tierra seca - experiencias del desierto donde se trata la carne (su simiente y su fruto). Gn.1:9. “…y descúbrase lo seco” Esta es nuestra ex peiencia después de recibir el Bautismo del Espíritu Santo. Después de que el Espíritu de Dios desciende sobre nosotros somos “llevados por el Espíritu al desierto, para ser TENTADOS por el diablo.” (Mt.4:1) El ver so 12 dice: ‘Produjo, pues, la tierra hierba verde” ¿Qué es la hierba? La carne y sus riquezas. (Is.40:6-8. Stg.1: 11-12 dice: “Porque cuando sale el sol con calor abra- sador (pruebas), la hierba se seca, su flor se cae y pe- rece su hermosa apariencia; así también se marchita- rá el rico en todas sus empresas Bienaventurado el va-rón que SOPORTA LA TENTACION; porque cuando haya re- sistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios

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ha prometido a los que le aman” El verso 12 continúa, “hierba que da semilla según su naturaleza.” La hierba produce semilla. Aprendemos que “todo lo que el hom-bre sembrare, eso también segará. Porque el que siem bra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vi-da eterna.” (Gá.6:7-8) IV MESA DEL PAN DE LA PROPOSICION

Éxodo 25:23-30, Levítico 24:5-9 Al comienzo del tercer día milenario de esta Semana Redentora Abraham anduvo por el desierto espiritual de Egipto. Mas tarde - hermanos de José lo vendieron a Egipto, e Israel y sus familias fueron allí para com-prar pan y sustento durante el tiempo de hambre en Canaán. Aún cuando Israel fue liberado del desierto es piritual de Egipto, Egipto permanecía en él de manera que tuvo que andar por un desierto físico durante cua-renta años. “Y hablaron contra Dios diciendo: ¿Podrá poner mesa en el desierto?” (Sal.78:19) Dios no sólo proveyó pan natural para Israel en el desierto, sino que también les “preparó mesa” para sustentarle en todas sus necesidades. Cuando finalmente entró en Canaán, aún continuó errando en una esfera espiritual de rebe-lión y pecado. No obstante, porque había ofrecido Abra ham a Isaac delante del Señor al comienzo de este tercer día milenario, al final de él Dios levantó las doce tri bus la PLENITUD del orden y gloria bajo el gobierno de Salomón Todo lo cual se hallaba representado en la mesa del pan de la proposición en el desierto, con sus doce panes.

V. LA FIESTA DE LAS GAVILLAS DE LOS PRIMEROS FRUTOS

Levítico 23:10-14

El tercer día de la semana de la creación produjo ve getación como una promesa de una forma de vida más

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alta y como medio para sustentarla o mantenerla. Asi-mismo, la gavilla de los primeros frutos de la cosecha de la cebada era una promesa de la PLENITUD de las co sechas venideras -trigo y otras cosechas diferentes- y un medio de sustento hasta que viniesen. Durante el tercer día de esta Semana Redentora, Dios produjo los primeros frutos de la cosecha median te la simiente natural de Abraham. Isaac como primicia fue “mecido delante del Señor”. Esto no solamente era una promesa del resto de las cosechas de grano (la si-miente natural de Abraham), sino también de la venide ra cosecha de frutos (la plenitud de la simiente espi-ritual de Abraham).

VI. TERCERA CARTA — IGLESIA EN PERGAMO

Ap.2:12 dice: “Y escribe al ángel de la iglesia en Pér gamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: Yo conozco tus obras, y donde moras, donde es- tá el trono de Satanás. Pérgamo significa “muchas ve-ces casado o totalmente casada”. En vez de estar “to-talmente casada” con Dios, las obras y la morada de Is rael durante gran parte del tercer día milenario fueron fornicación, adulterio e idolatría, tanto natural como espiritual. Abraham descendió al “trono de Satanás”, Egipto, y a pesar de todas las promesas de Dios, moró allí du-rante el tiempo de hambre. Más adelante, Israel, la esposa de Dios, también moró en Egipto durante casi la mitad de este período. “El trono de Satanás”, es decir, Egipto, hablando espiritualmente, está sentado a la me sa de Satanás. Significa ser alimentado o entrar en uni ón con sus pensamientos de rebeldía y adulterio. Cuan do Dios liberó a su esposa después de cuatrocientos años de falsos amores y amantes, a su corazón adulte ro le fue difícil sentarse a SU MESA en el desierto. Aun-que Dios rápidamente pudo sacarla de su morada en Egipto, se pasó el resto de este período sacando a

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Egipto de dentro de ella. A pesar de sus caminos, Dios le mostró amor y provisión y la llevó al summum de poder y gloria al final de este período. Simbólicamente, esto se manifestó mediante el poder y la gloria concedi dos a Salomón. El hecho de que Salomón tuviera mu-chas esposas extrañas -esposas que no estaban “total mente casadas” con él también fue tipo de la relaciónexistente entre Israel y Dios.

VII. EL TERCER PASO DEL VENCEDOR

Ap. 2:17 “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu di-ce a iglesias. Al que venciere, daré a comer del MANA

ESCONDIDO” El tercer paso de nuestro viaje progresivo hacia la perfección, es comer del MANA ESCONDIDO del Espíritu de la Palabra. Esto se alcanza por medio del Bautismo del Espíritu Santo, cuando comenzamos a ver las verdades espirituales detrás de la letra de la pa labra. 2ªCo.3:6 dice: “porque la letra mata, mas el espì ritu vivifica.” Al alimentarnos en el espíritu, la revela-ción del Cuerpo de Cristo se convierte en más que una buena doctrina. “El pan que partimos, ¿no es la comu-nión del Cuerpo de Cristo? Siendo uno solo el pan, nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo pues to-dos participamos de aquel mismo pan.”(1ªCo.10:16,17)

CUARTO PASO O “DIA”


Luces celestiales — especialmente estrellas


Cuarto día milenario de la Semana Redentora, desde Salomón (990AC) hasta Cristo (Día de Pentecostés)


Orden espiritual -especialmente en las estrellas por la noche, que nos habla del orden de los hijos de Dios en la oscuridad de este mundo y durante la noche de

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tribulación.


Reposo en el orden y la obra del Espíritu Santo

I. LA SEMANA DE LA CREACION.

Gn.1:14-19. -Creó Dios el sol, la luna y las estrellas.

II. LA SEMANA REDENTORA Desde Salomón (990AC) hasta Cristo (Día de Pentecostés) Al final del cuarto día milenario de esta semana Re-dentora, Dios nuevamente dio al mundo tres grandes luces -la trinidad en Jesús. “Pues en él habita corporal-mente la plenitud de la Deidad.” (Col.2:9). En Ap.12:1 leemos: “Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del SOL, con la LUNA debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce ESTRE

LLAS.” La relación de la mujer con respecto al sol, la luna y las estrellas, puede considerarse simbólicamente en dos esferas básicas; (1) La relación femenina de Cristo con respecto a Dios, o Cristo siendo el canal por el cual la vida de Dios se manifiesta. (2) Nuestra rela- ción femenina con respecto a Cristo, o siendo nosotros el canal por el cual la vida de Cristo se manifiesta.

III. CUARTO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACIÓN”

Moviéndonos en el orden divino.

“En la expansión del cielo” que obra en nosotros, de-be haber un orden divino. Todo lo relacionado al cuarto día de creación apunta hacia un orden divino. “... para SEPARAR el día de la noche sirvan de SEÑALES para las ESTACIONES, para DIAS Y AÑOS, la lumbrera mayor para que SEÑOREASE en el día, y la lumbrera menor para que SEÑOREASE en la noche;... Y las PUSO Dios en la expan sión de los cielos... para SEÑOREAR en el día y en la no-che, y para SEPARAR la luz de las tinieblas: Y vio Dios

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que en BUENO.” Dios produce el hombre de la nueva creación en un orden, puesto que El mismo está en orden y eso es bueno. El orden de los cuerpos celestes es tan perfecto que el hombre se guía en la navegación mediante estos. Un marinero en la noche tormentosa más oscura, tan sólo tiene que vislumbrar alguna ESTRELLA para estable cer un rumbo que le lleve hasta un lugar de refugio, al- gún puerto seguro. Esto es un tipo del Orden de los Hi-jos de Dios en la oscuridad de este mundo y en la noche de tribulación.

IV. EL CANDELERO DE OROÉxodo 25:31-40 En Ap.1:13 vemos: “en medio de los siete candele ros, uno semejante al Hijo del Hombre,...” Observando el tipo del candelero de oro, el brazo central “en me-dio”, es la CUARTA lámpara empezando por la izquierda Jesús vino al final del CUARTO día milenario de esta Se mana Redentora. El candelero de oro también esta “en medio” si observamos que es el CUARTO objeto de los siete elementos del mobiliario del Tabernáculo. El modelo de la colocación de los siete elementos del mobi liario es el modelo de una cruz. Todos los elementos están en línea recta, excepto la mesa del pan de la pro posición y el candelero de oro. Si visualizamos el Cuer po de Cristo sobre esa cruz, la mesa está a la izquier-da y el candelero a la derecha. Al seguir leyendo Ap.1:16 dice: “Tenía en su DIESTRA SIETE ESTRELLAS “-las siete luces del candelero de oro.

V. LA FIESTA DE PENTECOSTES: LA FIESTA DE LAS SEMANAS; DE LA COSECHA; DE LOS PRIMEROS FRUTOS

Éx. 23:16; Lv.23:15-21; Dt. 16:9-12; Hch.2:1. Hemos visto que Jesús resucitó de los muertos en la Fiesta de las gavillas de los Primeros Frutos. Entonces, se ofre- ció una sola “ofrenda” (un pan) “de harina fina mezcla-da con aceite”. Esto nos habla del Señor y de aquellos

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que resucitaron con él. (1ªCo.15:20: Mt.27:52,53; Ef. 4:8) “... se presentó vivo con muchas pruebas indubita-bles, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablán doles acerca del reino de Dios.” (Hch.1:3) Parte de es- to, como podemos ver en los subsiguientes versos, fue “no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la pro-mesa del Padre, la cual les dijo, oísteis de mí. Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros se-réis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no mu-chos días.” Fueron diez días después, un total de 50 días después de la resurrección de Jesús, “Cuando lle- gó el día de Pentecostés,” y “fueron todos llenos del Es píritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.” (Hch.2:1,4) Puesto que había un periodo de 50 días desde que los primeros frutos eran mecidos en sus gavillas hasta que se producía la primera cosecha (de grano), asimismo hubo un período similar desde la resurrección de Je-sús hasta la cosecha de la Era de la Iglesia, cuando fueron segadas 3000 almas. (Hch.2:41) Al comienzo del cuarto día milenario de esta Sema-na Redentora, los profetas tales como Joel e Isaías pro fetizaron acerca de Pentecostés (Jl.2.2 Is.28:10-12) El final del cuarto día milenario trajo su cumplimiento.Dios había prometido una simiente a Abraham, no tan sólo “como la arena del mar”; sino también “como LAS ESTRE-

LLAS de los cielos”. En Pentecostés “el NUEVO grano fue ofrecido. (Lv.23:16) La ofrenda mecida de primicias constaba de “un pan”. La ofrenda mecida de Pentecos tés constaba de “dos panes”. (Verso 17) La primera re presentaba a “Cristo las primicias”; la segúnda “los que son de Cristo en su venida”. (1ªCo.15:23) desde el Día de Pentecostés, Cristo “el ungido” ha estado viniendo. Los “dos panes” ofrecidos en Pentecostés representa-ban la formación del Cuerpo de Cristo en su Cuerpo. Al comienzo del tercer día milenario de esta Semana

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Redentora, Isaac fue mecido como una promesa del cumplimiento de la promesa natural. De la misma ma-nera, al final del cuarto día milenario, Jesús fue mecido como una promesa del cumplimiento de la promesa espiritual, “como LAS ESTRELLAS del cielo”.

VI. CUARTA CARTA — IGLESIA EN TIATIRA

Ap.2:18. “Y escribe al ángel de la iglesia en Tiatira. Tiatira significa “hembra dominante”. Puesto que Is-rael no estaba “totalmente casada” con Dios en el ter-cer día milenario de esta Semana Redentora, el espíri- tu de la “hembra dominante” se manifestó en el cuarto día milenario. En el verso 19, el Hijo de Dios elogia a la iglesia en Tiatira por varias cosas. Luego, en el verso 20 conti-núa diciendo: “pero tengo unas pocas cosas contra ti: que toleras que esa mujer Jezabel...“ Jezabel significa “soltera o sin cohabitación” Siendo que el pueblo de Di os no estaba casado con Dios, durante el cuarto día mi lenario de esta Semana Redentora, no podían ni aún vi vir juntos o cohabitar. Al comienzo de este período a partir de la muerte de Salomón, y sucediéndole su in-sensato hijo Roboam, las diez tribus del norte de Isra-el se sublevaron. Durante 259 años Israel estaba cons- tituido por dos reinos con reyes distintos. Durante apro ximadamente ochenta años de este período estuvieron en guerra el uno contra el otro. El Hijo de Dios continúa diciendo en los versos 21-22, “Y le he dado tiempo para que se arrepienta, pero no quiere arrepentirse de su fornicación. He aquí, yo la arrojo en CAMA, y en GRAN TRIBULACION a los que con ella adulteran, si no se arrepienten de las obras de ella.” Tanto “cama” como “gran tribulación” nos hablan de la oscuridad de la noche, cuando los hijos de Dios resplandecerán como las ESTRELLAS. A causa de que Dios ama a su pueblo, El desea es-tar casado con él y hallar su habitación con él, a pesar

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de sus caminos. Con este fin, El permitió que la nación Jerusalén, y el templo, fueran restaurados bajo Esdras y Nehemías. Al final del cuarto día milenario, El les en- vió a su propio hijo. “A los suyos vino, y los suyos no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre (naturaleza) les dio potestad de ser hechos hijos de Dios”. (Jn.1:11,12) En el cuarto paso del vencedor veremos el resultado de que los hi-jos de Dios resplandezcan como ESTRELLAS, en la noche de tribulación.

VII. CUARTO PASO DEL VENCEDOR

Ap.2:26-8. “Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones, y las regirá con vara de hierro, y serán quebradas como vaso de alfarero; como yo también la he recibido de mi Padre; y le daré la ESTRELLA DE LA MAÑANA.” En el cuarto paso del vencedor, las primera parte de la promesa es que El nos dará “poder sobre las naciones”. La segunda parte es el alcance y manifestación de ese poder. “Y las regirá con vara de hierro”. La ter-cera parte de la promesa es: “Y le daré LA ESTRELLA DE

LA MAÑANA”. “LA ESTRELLA DE LA MAÑANA” es la que trae el nuevo día después de la noche de tribulación. Esto nos es dado por Cristo, y al mismo tiempo queda de nuestra parte apropiarnos de la plenitud de su vida y naturaleza de resurrección. Ap.22:16 dice: “Yo SOY la raíz y el linaje de David, LA ESTRELLA resplandeciente de LA MAÑANA”.

QUINTO PASO O “DIA”


Una vida más alta en el Espíritu. (Simbólicamente de agua a aire).


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Quinto día milenario de la Semana Redentora, desde Cristo (Día de Pentecostés) hasta la Edad Oscura (1000 DC)


Esferas más altas en el Espíritu


Reposo de nosotros mismo; reposo en su Palabra

I. LA SEMANA DE LA CREACIÓN

Gn.1:20-23. -Dios creó los peces y las aves. El verso 20 dice: “Dijo Dios: Produzcan las aguas SE

RES VIVIENTES, y aves que vuelen SOBRE LA TIERRA, en la abierta expansión de los cielos,”.


Desde Cristo (Día de Pentecostés) hasta la Edad Oscura (año 1000 DC) En el Día de Pentecostés, al comienzo del quinto día milenario de esta Semana Redentora, Dios de nuevo creó los peces y las aves. Agua el aire, el medio am-biente de los peces y las aves, ambos nos hablan de la vida del Espíritu. El ave nos habla del creyente levan-tandose, creciendo y maduro en el Espíritu. Ez.47:9 di ce: ‘Y toda alma VIVIENTE que nadare por dondequiera que entraren estos dos ríos, vivirá; y habrá muchísi-mos peces por haber entrado allí estas aguas...” El Día de Pentecostés Pedro pescó 3000. Existe una gran diferencia entre la vida vegetal y la animal. La vida vegetal es un nivel mas bajo y es esta-cionario. La vida animal es un nivel más alto y se mue-ve. (Hch.17:28, 2ªCo.3:17 Sal.55:6) En el Antiguo Tes tamento, los creyentes eran como las plantas del ter-cer día, pero los creyentes del Nuevo Testamento “se alzan con alas como de águilas”.

III. QUINTO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION

Esferas más altas en el Espíritu.

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Dios primeramente creo los peces y luego las aves. Dios quiere que progresemos en nuestra experiencia espiritual al entrar en la vida del Espíritu. Esto se con-trapone al nivel anímico o emocional’’ cuando nos ele-vamos en gran éxtasis o nos sumimos en profundo de- sespero. Es la diferencia entre ser un termostato espiri tual o un termómetro espiritual. El segundo registra cambios y efectos o consecuencias de situaciones a su alrededor. El primero cambia y afecta esas mismas situaciones.

IV. EL ALTAR DE ORO DEL INCIENSO

Éx. 30:1-10; Éx. 3O:34-38

Lo primero que observamos en el relato acerca del Altar de Oro (verso 1) es que su fin era “quemar incienso”. Mediante el fuego, el incienso, en tipo, pierde sus cualidades físicas y visibles y viene a ser espiritual e in visible. La savia, o la esencia de la vida del arbusto o árbol (gálbano y estacte), forman una gomorresina al entrar en contacto con el AIRE. Los moluscos son toma dos de su hábitat en el MAR ROJO. Estas tres especies nos hablan de espíritu, alma y cuerpo. Por medio del fuego son levantados JUNTAMENTE a un nivel de vida más alto representado en el AIRE.

V. LA FIESTA DE LAS TROMPETAS

Lv.23:24,25

La trompeta es un instrumento de viento o AIRE. El quinto día milenario de esta Semana Redentora fue anunciado con una experiencia celestial; “...estaban todos unánimes juntos.” Esto fue acompañado por un so nido celestial; “Y de repente vino del cielo un estruen do como de un VIENTO recio que soplaba. “UN SONIDO DE

TROMPETA” La trompeta dio un sonido cierto. Un hom bre como Pedro que estaba incierto en cuanto a su postura delante del Señor, se hizo osado y con autori-

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dad. Se ha escrito más la palabra del Espíritu de Dios en esos Setenta años, que en ningún otro periodo similar.

VI. QUINTA CARTA - IGLESIA EN SARDIS

Desde el día de Pentecostés hasta la Edad Oscura (I000 DC)

Ap.3:1. “Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: El que tiene los siete espíritus de Dios, y las siete estre-llas, dice esto: Yo conozco tus obras, que tienes nom-bre de que vives, y estás muerto.” Aquellos en la iglesia en Sardis no experimentaban la vida de la naturaleza que profesaban. Del mismo mo do, al comienzo del quinto día milenario, la iglesia en el Día de Pentecostés había experimentado el poder vivifi cador de la vida de resurrección de Cristo para produ-cir su naturaleza. Pero pronto, aunque la Iglesia primiti-va tenía un nombre de que vivía, lo que vino a ser la Iglesia estaba muerto. Cuando Constantino se hizo úni co gobernante del denominado Santo Imperio Romano en el año 303 DC. El cristianismo se hizo popular. Pero por causa de que la vida y la naturaleza de Cristo no continuó manifestándose, la muerte progresivamente se manifestó durante el quinto día milenario. Aunque vi vían estaban muertos. Hubo tal muerte y oscuridad que aún la historia secular hace referencia a este perio do como la Edad Oscura.

VII. EL QUINTO PASO DEL VENCEDOR

Ap.3:5. “El que venciere será vestido de vestiduras blancas, y no borraré su nombre del libro de la VIDA, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles.” Al seguir venciendo, somos “vestidos de vestiduras blancas”. Estas “vestiduras blancas” no son la justicia que nos fue imputada cuando conocimos y aceptamos

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a Jesús como Salvador, puesto que este es el quinto paso de nuestro viaje. Esta es la verdadera justicia de dios. “...porque han llegado las BODAS del Cordero y su esposa se ha preparado. Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.” (Ap.19:7,8) Esta es la perfecta justicia en la cual Jesús anduvo durante sus tres años y medio de ministerio. Hay un principio plasmado en el Antiguo Testamen-to, de que sólo dos de un mismo género pueden entrar en unión. Es por esto que era una abominación que un hombre se juntase con una bestia. (Lv.20:15) Ni aún podían los judíos casarse con gentes de otras nacio-nes. Hablando espiritualmente, Cristo, como verdadero judío no puede unirse con nosotros mientras que per- manecemos en la naturaleza de bestia, ni mientras no circuncidemos otras naciones de nuestro corazón. Pa-ra poder entrar en unión con nosotros, el Señor tiene que comenzar a tratarnos donde estamos, perdidos y sin remedio. Primeramente, El cubre nuestros pecados con su Sangre e imputa su justicia. Luego con el “lava-cro del AGUA por la palabra”. El continúa santificando y limpiándonos. (Ef.5:26) “Luego nosotros los que VIVI-

MOS, los que hayamos quedado, seremos arrebatados. …para recibir al Señor en el AIRE, y así estaremos siempre con el Señor.” (1ª Ts. 4:17).

SEXTO PASO O “DIA”

1. PENSAMIENTO BÁSICO:

La naturaleza de bestia sacrificada, el resultado es un Hombre Perfecto con un nuevo nombre y una nue-va naturaleza.


Sexto día milenario de la Semana Redentora, desde la Edad Oscura (1000 DC) hasta nuestros días (2000 DC).

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Plenitud del hombre perfecto


Reposo de división; reposo en unión con El.

1. SEMANA DE LA CREACION

Gn. 1:24-31

Dios creó las bestias y el hombre.

II. SEMANA REDENTORA

Desde la edad Oscura (1000 DC) hasta nuestros días (2000 DC).

Las bestias tipifican a los gentiles. En Hch.10 Pedro tuvo una visión a la SEXTA HORA. Vio “el cielo abierto, y que descendía algo semejante a un gran lienzo, que atado de las cuatro puntas era bajado a la tierra;...“El Señor usó esta visión para enviar a Pedro a la casa de Cornelio un centurión gentil. También para mostrar a la iglesia que El “no hace acepción de personas”. Pedro continúa diciendo en el verso 35, “sino que en toda na-ción se agrada del que le teme y hace justicia”. Aun- que los judíos abrieron la puerta a los gentiles en el quinto día de esta Semana Redentora, el sexto día es la “plenitud de los gentiles”. La última parte de la creación de Dios fue el hom-bre. Lo último que Dios hizo antes de reposar, fue ha-cer a Eva, tipo de la Esposa de Cristo. Nuevamente, durante el sexto día de esta Semana Redentora, mien tras Adán duerme, Dios está tomando una esposa de entre judíos y gentiles. Cuando venga la “plenitud de los

gentiles” cuando Eva la esposa esté completa, Dios qui-tará el “espíritu de estupor” que reposa sobre Adán. (Ro.11:8,25).

III. SEXTO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION

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Plenitud del hombre perfecto.

El sexto paso y día pertenece al hombre. No al hombre natural, sino al Cristo. Comienza con la naturaleza de bestia (Gn.1:24,25), y concluye con el hombre “a imagen de Dios. (Versos 26,27). ¿De que se alimentan las bestias? Gn.1:30 dice,”Y a TODA BESTIA de la tierra, y a todas las aves de los cie-los, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay VIDA, TODA PLANTA VERDE les será para COMER. Y fue así.” Este es un tipo de donde nosotros los gentiles, tipifica-dos en las bestias, obtenemos nuestro sustento espiritual. Nos alimentamos del trato de Dios con el Israel natu-ral las hierbas o la vida vegetal del tercer día milenario de esta Semana Redentora. La primera Parte del capitulo 10 de 1ªCo., hace mención de muchos de los tra-tos de Dios con el Israel natural. Y el verso 11 dice: “Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestamos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos.” Lo creado en la última parte del día quinto (aves) y la primera parte del día sexto (bestias) es para sacrificar. Los sacrificios se hacían de aves y bestias, pero no pe ces. En Gn.15, cuando Dios hizo su pacto con Abra-ham, le mandó sacrificar un becerro, una cabra, un car nero, una tórtola y una paloma.” Las “bestias” nos ha-blan de la carne mientras que “las aves” nos hablan de una naturaleza anímica y emocional. Ambos deben ma nifestarse en plenitud y ser sacrificados, antes de que la “imagen de Dios” sea revelada. (2ªCo. 3:18; 1ªJn.3: 2,3; 1ª Co. 11:7) El verso 31 dice: “Y vio Dios todo lo que había he-cho, y he aquí que era bueno en gran manera.” Si “no hay bueno sino Dios’, entonces lo que es “BUENO EN

GRAN MANERA” es DIOS EN GRAN MANERA. Gn.2:1 dice, “Fue ron, pues, acabados los cielos y la tierra”. Jesús dijo,“consumado es”.

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IV. EL PROPICIATORIO (El asiento de la misericordia)

Éxodo 25:17-22 El propiciatorio era en verdad la tapadera o cubierta del Arca del Pacto. “En los dos extremos del propiciato rio” había dos querubines labrados a martillo. Los querubines y el propiciatorio tipifican:

1. La naturaleza y manifestación del Dios trino.

2. La plenitud de esa naturaleza manifestada por me-dio de Cristo y su Cuerpo.

Para comprender como los querubines representa-ban la plenitud del hombre Cristo Jesús, necesitamos comparar los cuatro “rostros” de Cristo en los cuatro evangelios, con los cuatro rostros de los cuatro seres vivientes de Ez.1. También con las cuatro ruedas y cua tro querubines de Ez.10, como también con las cuatro bestias de Ap.4:7.

Muestran a Jesús como:

EVANGELIOS MATEO MARCOS LUCAS JUAN

Rey El siervo que sufre

Hombre Hijo de Dios

Ez.1:5,6,10 León Buey Hombre ÁguilaEz.10:14 León Querubín Hombre ÁguilaAp. 4:7 León Becerro Hombre Águila

Está claro que existe una similitud en los cuatro rostros de Cristo en los evangelios y en las visiones de Eze-quiel y Juan en Apocalipsis, excepto en lo que confiere a Marcos. El becerro puede considerarse como un buey joven pero ¿cómo relacionamos el querubín? En Ez.1:3 Ezequiel dice que tuvo las visiones “junto al río Quebar”. En Ez.10:22 dice, “Y la semejanza de sus ros tros ERA LA DE LOS ROSTROS que vi junto al río Quebar, SU MISMA APARIENCIA y su ser.” En otras palabras, el

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buey y el querubín nos hablan de lo mismo Un servicio santo. En Dt.25:4 Dios ordenó, “No pondrá bozal al buey cuando trillare”. Tanto Pablo como Timoteo mediante esta analogía hablan de los que ministran la Palabra. La Palabra más comúnmente usada para “ministrar” en el Nuevo Testamento es la palabra “diakoneo -ejercer como diácono, servir”. Ministrar es servir. La vida del becerro o buey, es de dar su vida en servicio. Primera-mente sirve bajo el yugo, luego es ofrecido sobre el Altar de Bronce. Luego mediante su sangre, su vida lle ga hasta el Lugar Santísimo, para cubrir el propiciato-rio, así como los querubines. Al ser sacrificada la naturaleza de bestia, el siervo que sufre se manifiesta en la naturaleza del hombre perfecto, el Hijo de Dios, y el Rey. Aleluya.

V. LA FIESTA DEL DIA DE EXPIACION

Lv.23:27-32; Lv.16

¿Cómo es que Dios nos cambia de BESTIA a HOMBRE? ¿Cómo es que nos vuelve de nuestra tradición e idola- tría, de la Edad Oscura de la tarde del sexto día a la plenitud del hombre? El tiene un Día de Expiación para nosotros. Donde “AFLIGIREMOS nuestras almas, y ofrece remos ofrenda ENCENDIDA al Señor”. (Lv.23:27) Mt.3:11 dice: “...él os bautizará en Espíritu Santo (Pentecos- tés) y FUEGO (Expiación)”.

VI. SEXTA CARTA -- IGLESIA EN FILADELFIA

Ap.3:7. “Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Es-to dice el Santo, el verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre.” Filadelfia significa “amor fraternal”. El que habla es aquél que tiene “la llave de David”, y “el que abre y ninguno cierra”. “La llave de la casa de David”, se refiere

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a la restauración del “tabernáculo de David que estaba caído”. (Am.9:11) Básicamente está relacionado con gobierno, o reinado por medio de la alabanza y la ado- ración espiritual. (Sal.48:1,2; Sal.137) En 2ª S.6 se nos relata cómo el arca fue traída de la casa de Obededom y fue puesta “en medio de una tienda que David le ha-bía levantado”. (Verso 17) El relato nos cuenta que Da-vid usó su llave para adorar al Señor con gran voz e instrumentos, así como también con danza y saltos. El arca también fue traída con sacrificios. El verso 13 di-ce: “Y cuando los que llevaban el arca de Dios habían andado SEIS PASOS, él sacrificó un buey y un carnero engordado”. Seis es número de carne o de la mente carnal. Mical, la hija de Saúl, despreció a David en su corazón, de manera que “nunca tuvo hijos hasta el día de su muerte.” David y aquellos que usaron su “llave” al traer el Ar- ca son un tipo de los que usando la misma llave ten-drán “una puerta abierta” que ningún hombre cerrará al final del SEXTO DIA. La puerta por la que pasaremos ES EL VELO DE NUESTRA CARNE.

VII. EL SEXTO PASO DEL VENCEDOR Ap.3:12. “Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí y escribi- ré sobre él, el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciu dad de mi Dios, la nueva Jerusalén. La cual desciende del cielo de mi Dios, y mi nombre nuevo” En nuestra trayectoria a la perfección, venimos a ser parte del templo, morada de Dios. “Ef.2:20-22 dice, que somos “edificados sobre el fundamento de los Apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del án- gulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.”

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En el sexto paso del vencedor, hemos crecido hasta ser el templo del Señor de tal manera que se nos tipifica como “una columna en el templo de mi Dios”, y “nun ca más saldrá”. Esto significa, primeramente, que esta-mos tan establecidos en el Espíritu que ni salimos ni entramos de la presencia de Dios. También significa que tenemos la fuerza de Dios para sostener a otros miembros en su templo. La última parte de la promesa en el sexto paso es “escribiré…MI NOMBRE NUEVO.” Muy pocas personas se dan cuenta que Jesús ahora tiene un NOMBRE NUEVO. Esto no quiere decir que su nombre no es más Jesús. Sino que habla de una naturaleza. Cuando Jesús es-tuvo sobre la tierra, El tenía una naturaleza o carácter que era diferente a su actual naturaleza y carácter. El era perfecto, en cuanto que era perfectamente sin pe-cado, pero no perfecto en el sentido de que aún podía ser tentado. He.2:10 y 5:8-9 nos muestran que fue perfeccionado por lo que padeció. Por medio de su muer te, sepultura y resurrección El entró en una NUEVA NATU

RALEZA, donde nada podía serle una tentación ya más. Cuando la Escritura dice, “escribiré sobre él... mi NOM-

BRE NUEVO,” significa que “le daré LA NATURALEZA DE RE-

SURRECCION DE CRISTO.” Ro.6:5 dice: “Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrec ción.” Aleluya.

SEPTIMO PASO O “DIA”

1. PENSAMIENTO BÁSICO:

Reposo o unión mediante la integridad o corporeidad.

2. PERÍODO PROGRESIVO:

Séptimo día milenario de la Semana Redentora, desde nuestros días (2000DC) hasta el final del Reino mile-nario (3000DC)

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Gobernando y reinando con Cristo.


Reposo en plenitud

1. LA SEMANA DE LA CREACION

Gn. 2:2 Dios culminó su obra creadora y reposo.


Desde nuestros días (2000DC) hasta el final del Reino Milenario (30001 DC)

En el séptimo día milenario de esta semana redentora, Dios concluirá su obra REDENTORA, y REPOSARA.

III. SEPTIMO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACIÓN

Por la fe entraremos plenamente en el reposo, habiendo cesado completamente de nuestra labor. He.4:1-11. Aleluya.

IV. EL ARCA DEL PACTO

El Arca estaba hecha de madera de acacia y oro puro, puro era el único elemento del mobiliario que estaba re cubierto por dentro y por fuera. Cuando no viajaban, las barras podían ser quitadas de cada uno de los elementos del mobiliario, excepto del Arca. Otros elemen-tos del mobiliario necesitaban la ayuda del hombre pa-ra poder trasladarse. Pero el Arca estaba preparada pa ra trasladarse sin ayuda del hombre. La gloria de Dios no se asienta fácilmente, y es la primera en alzarse cuando se peca contra ella, cuando es contristada o apagada. La verdad de la perfección y la gloria de Dios -siendo glorificado en y por medio de su pueblo- fue lo primero que desapareció en la iglesia primitiva. La ver-dad del altar de bronce -justificación por la fe- fue lo últi mo que se perdió en la iglesia en su totalidad. Aunque la verdad del paso inicial de esta “tan gran salvación”

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la verdad de la gloria y la perfección de Dios en su pue blo, es: lo ‘ultimo que se ha de restaurar. Los tabernáculos de Moisés y David, fueron tiendas. El Arca con sus barras en su lugar, en ambos taber- náculos, mostraba que ni el Arca ni el pueblo de Dios habían entrado en el reposo plenamente. Cuando el Ar ca fue colocada en el templo de Salomón, las barras fueron quitadas. (1ªR.8:8) Esto significa; para Israel, que el andar por el desierto y el viaje a la Tierra Prome tida había terminado.Dios al darles la tierra en posesi-ón, había entrado en reposo con ellos. Así será cuan-do Dios posea la tierra plenamente -pues nosotros so-mos La tierra. Al entrar en una unión corporal, tanto El como nosotros entraremos en el reposo completo y eterno. Aleluya.V LA FIESTA DE LOS TABERNACULOS

Éx.23:16; Lv.23:34-44; Dt.16:13-15; 1ªR.8; 2ªCro.5-7; Esd.3; Neh.8; Hag.2:1-9; Jn.7.

La Fiesta de los Tabernáculos es la séptima de las Sie te Fiestas del Señor. En este estudio consideraremos esta séptima fiesta bajo este aspecto séptuplo en su secuencia y aplicación:

1. La Fiesta de SU VENIDA

Dios sólo puede morar en nosotros y nosotros en El, a medida que se APARECE a nosotros y por medio de no-sotros.

2. La Fiesta de las ENRAMADAS

Israel tomo las ramas de diferentes árboles - frutales, palmeras, árboles frondosos y sauces, se hizo ENRAMA-

DAS para morar juntos. Nosotros somos las ramas. Ca da miembro del Cuerpo de Cristo es una rama distinta. Al ser cortados de nuestro origen y recursos terrena les, hallaremos en nuestra rama hermana, la plenitud de la naturaleza de Cristo.

3. La Fiesta de LA GLORIA

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El hallar a Dios en su creación, que en verdad es hallar nos a nosotros mismos en su Nueva creación, ES LA GLORIA.

4. La Fiesta de LA COSECHA

La plenitud de la gloria sólo puede manifestarse en la plenitud de LA COSECHA.

5. La Fiesta del GOZO

Todo esto trae gran GOZO a Dios y a nosotros.

6. La Fiesta del REPOSO

El resultado es reposo perfecto. Existen siete tipos distintos de “sábados” (reposos).

7. La Fiesta de LA RESTAURACIÓN

El cumplimiento absoluto de los Tabernáculos es la “restitución (RESTAURACION) de todas las cosas, de que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo.” (Hch. 3:21)

VI. SEPTIMA CARTA - IGLESIA EN LAODICEA

Ap.3:14. “Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: ”Laodicea significa “pueblo de juicio o gobierno del pue blo”. Sólo aquellos que están dispuestos a ser juzgados y gobernados por Dios, estarán preparados para juzgar y gobernar con El. Los versos 15 y 16 dicen “Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente, ¡Ojala fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitare de mi boca.” La noche del fuego de tribulación separará lo frío de lo caliente. Mediante la tribulación, muchos que han di-cho, “soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad,” hallarán que son “desventurados, mi serables, pobres, ciegos y desnudos.” El oro nos habla de la naturaleza de Dios. Únicamen te por medio del fuego de la tribulación podremos obte-ner la plenitud de la naturaleza de Dios. El verso 18 dice: “Yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en

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fuego, para que seas rico.” Además “vestiduras blan-cas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez.” Estas “vestiduras blancas” es la ver-dadera justicia de Dios, que ya hemos considerado en el Quinto Paso del Vencedor. Si en el séptimo día milenario sólo tenemos la justicia imputada por aceptar la obra expiatoria de Jesús, la vergüenza de nuestra des-nudez será descubierta. No es que no seremos salvos ni estaremos cubiertos, sino que para ese tiempo ten-dremos que habernos apropiado de nuestra salvación y cubierta en plenitud. Si no vemos esto, se nos exhor ta: “unge tus ojos con colirio, para que veas”.

VII. SEPTIMO PASO DEL VENCEDOR Ap.3:21 “Al que venciere, le daré que se siente conmi-go mi trono, así corno yo he vencido, y me he sentado con mi Padre su trono.” El séptimo paso del vencedor, es SENTARNOS con Je- sús en, trono, así como El SE HA SENTADO con su Padre, en su trono. Para comprender lo que significa “EN mi trono”, necesitamos entender Ef.1:20. Esta Escritura di ce que Dios “resucitándole (a Jesús) de los muertos y sentándole a su diestra EN los lugares celestiales.” Dios es Espíritu omnipresente que llena todo este uni- verso, por tanto no podía estar limitado a un trono físi- co de ningún tamaño o forma. El concepto de Jesús sentado EN el trono de su Padre, y a la diestra de su Padre, impone que Jesús ha sido levantado a un lu-gar espiritual de co-igualdad y gobierno juntamente con Dios. De la misma manera, al sentarnos nosotros con Jesús EN Su trono, denota que hemos sido levantados a un lugar espiritual de gobierno juntamente con El. En Jn.17 Jesús ora, y podéis estar seguros que su oración será contestada, pues El sólo oraba según la voluntad del Padre. Comenzando con el verso 21, Je-sús dice: “Para que TODOS sean UNO” (Observad la Cali

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dad absoluta de esta petición; no hay relatividad algu na en su expresión) “COMO TU PADRE, EN mi, y YO EN ti, que también ellos sean uno EN NOSOTROS...“ (También observaremos que la misma perfección absoluta de uni dad e igualdad que expresa la frase “EN mi trono” es expresada en “COMO tú, Padre, EN mi, y YO EN ti, que también ellos sean uno EN NOSOTROS.”) La gloria que Tú me diste, yo les he dado, para que s uno, ASI COMO

NOSOTROS SOMOS UNO. YO EN ellos, y tu EN mí, para que sean perfectos en unidad…”. Después de todo lo dicho en el Séptima Paso del Vencedor Ap.3:21, hay un versículo más en el capítulo: “El que tiene oídos, OIGA Lo que el Espíritu dice A LAS IGLESIAS”.

“¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopodero so reina! SU ESPOSA SE HA PREPARADO”. (Ap.19:6 y 7)

LOS SIETE DIAS DE LA CREACION

ANTES DE LOS SIETE DIAS O PASOS DE LA CREACION

Gn.1:1 dice: “En el principio creó Dios….” Tenemos un nuevo comienzo. “De modo que si alguno está en Cris-to, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas (2ªCo.5:17) “El primer hom-bre es de la tierra terrenal, el segundo es el Señor del cielo.” (1ªCo.15:47) “Porque él conoce nuestra condi-ción; se acuerda de que somos polvo.” (Sal.103:14) pri mer hombre fue creado del polvo. El hombre de la nueva creación es luz. La luz únicamente se manifiesta por los rayos de sol que alcanzan a las partículas de polvo. La luz es polvo vestido con el sol. Es por esto, que aunque los rayos del sol viajan millones de años luz a través del espacio no se manifiestan como “luz” hasta llegar a la atmósfera de la tierra. “En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres’’. (Jn.1:4). Gn.1:2 continúa diciendo: “Y la tierra estaba desor denada y vacía.” Esta, nuestra tierra, también estaba “desordenada (en inglés dice sin forma ni expresión), y

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vacía (carente/falta) y las tinieblas estaban sobre la faz de (nuestro) abismo”. Ro.10:6-10 hallamos que Cristo descendió al infierno y ascendió a los cielos. También descendió en nosotros. Pues somos el ABISMO y éra-mos los MUERTOS del versículo siete. En el siguiente ver so leemos, “Cerca de ti esta la palabra, en tu boca y en tu corazón.” David se dio cuenta que él era un abismo. Sal.42:7 dice: “Un abismo llama a otro abismo a la voz de tus cascadas.” Hay una expresión intensa y profun da de anhelo y deseo de Dios en todas las estrofas de este Salmo. “Como el ciervo brama... mi alma tiene sed… fueron mis lagrimas mi pan…” En la última parte de Gn.1:2 dice: “... y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.” Aguas (plu-ral) especialmente aguas turbulentas, generalmente nos hablan del estado de perdición del hombre. (Is.17; 12-13; Ap.17:15).

PRIMER DIA

LA SEMANA DE LA CREACIÓN – Gn. 1:3-5- Separación entré la luz y las tinieblas.

El propósito de separar la luz de las tinieblas era con el fin de que hubiese una cubierta de luz llamada “día” además de la cubierta ya existente de oscuridad. La ra zón por la cual había tinieblas “sobre la faz del abismo” anteriormente a este período, fue porque Lucifer, “El querubín protector” (en inglés dice “el querubín quien cubre) había caído. (Ez. 28:14).

LA SEMANA REDENTORA- Adán (4003AC) hasta la desaparición de Enoc (3016AC)

1ª Jn.1:7 dice: “...pero si andamos en luz, como él está en, luz, tenemos comunión unos con otros y la sangre de Jesucristo, su Hijo, nos limpia de todo pecado.” Siempre que Adán y Eva anduviesen con Dios, anda- ban bajo la cubierta de la Luz de Dios. Siempre que an

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duviesen en la Luz, eran libres de la oscuridad del pe cado, la enfermedad, el dolor y la muerte. Al comienzo del primer día milenario de esta Semana Redentora, desobedecieron a Dios, así que, su comunión fue rota. Dios tuvo que dividir “entre la luz y las tinieblas”, así que dejaron la cubierta de la Luz de Dios en el Huerto del Edén. Al dejar la cubierta de luz, entraron bajo la cubierta de tinieblas, del pecado, la enfermedad, el dolor y la muererte. Adán procuró cubrirse con hojas de higuera, que nos hablan de nuestras propias obras. Durante el primer día de esta Semana Redentora, el hombre, a través de la línea de Caín, continúo haciendo lo mismo. No obstante, Dios hizo una cubierta de pieles de animales para cubrir a Adán y Eva, señalando en tipo la sangre del Cordero Pascual que cubre. Desde Adán hasta Enoc hubieron siete generaciones de hombres que anduvieron por le en la luz de esta provisión. Al fi-nal del primer día Enoc “caminó con Dios” y se salió de la cubierta de oscuridad de este mundo, y volvió a la cubierta eterna de la luz y la vida de Dios.

PRIMER PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACIÓN -

Justificación por la fe.

La perfección típica de siete generaciones que fueron justificadas por la fe en el primer día milenario de esta Semana Redentora nos habla del hombre de muchos miembros de la nueva creación, quien andará por fe “hasta que el día sea perfecto”. “La senda de los Jus-tos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto.” (Pr.4:18). La mente natural no comprende la bondad y gracia de nuestro Dios. No sólo estábamos cubiertos de las ti-nieblas, sino que ERAMOS tinieblas. “Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de Luz.” (Ef.5:8) El “nos llamó de las tinieblas a su luz admirable” no sólo para alabarle sino

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para “mostrar las virtudes de aquél” o ser esa alabanza (virtud). (1ªP.2:9). Gn.1:4 dice: “Y vio Dios que la luz era BUENA.” Jesús dijo al joven rico, ¿Porqué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo Dios.” Cuando Dios vio la luz, se vio a sí mismo, su propia naturaleza manifestándose. Seis veces dice en Génesis, en el capitulo uno: “Y vio Dios que era bueno (Dios).” Pero en el último verso dice: “Y vio Dios todo lo que había he-cho, y he aquí que era bueno en gran manera.” En el séptimo paso del hombre de la nueva creación, Dios está produciendo la perfección de su naturaleza. Aleluya’ En el primer día del hombre de la nueva creación, Dios comienza “separando entre la luz y las tinieblas”. La luz no tiene comunión, con Las tinieblas (2ªCo.6:14) Dios desea más que comunión, El quiere unión. Gn.1:5 dice: “Y llamó Dios a la luz día, y a las tinieblas llamó Noche.” En el primer día del hombre de la nueva creación, Dios está separando y llamando la luz y las tinieblas por lo que son: La luz es espíritu, las ti-nieblas son la mente carnal o las obras de la carne. Nos aceptamos la cubierta del Espíritu de Dios mien-tras que El se mueve “sobre la faz de las aguas” nues-tras.

SEGUNDO DIALA SEMANA DE LA CREACION – Gn.1:6-8 - Creación de un firmamento en medio de las aguas, para dividir (sepa rar) las aguas DEBAJO del firmamento DE las aguas SOBRE el firmamento. “Y dijo Dios, haya expansión (firmamento) era medio (le las aguas, y separe (divida) las aguas de las aguas” “E hizo Dios la expansión y separó (dividió) las aguas que estaban DEBAJO de la expansión DE las aguas que estaban SOBRE expansión; y fue así.”

LA SEMANA DE LA REDENCION Desde la desaparición de Enoc (3016AC) hasta Abraham (1995AC). (Básica-

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mente los 950 años de la vida de Noé – (2947 a 1997 AC).

Durante el segundo día milenario de esta Semana Re-dentora Dios hizo lo mismo que había hecho el según do día de su semana de creación. Mediante Noé y el di luvio El “separó las aguas que estaban DEBAJO de la ex pansión DE las aguas SOBRE la expansión.” las aguas SOBRE la expansión” son un tipo de aquellos que fueron salvos por medio del diluvio. “Las aguas DEBAJO de la expansión” Son tipo de los pecadores que perecieron por medio del diluvio. Dios separó los malos o la maldad de los justos. Casi toda analogía en la Escritura y de la vida diariamuestra a Dios separando los malos o la maldad de los justos o la justicia. En otras palabras, los malos son llevados y los justos permanecen. La levadura es sepa rada del pan o de la casa. Al limpiar una casa la sucie- dad es separada, la casa permanece. La cizaña es se-parada del trigo, así también el tamo o la paja del trigo. Los desperdicios o excrementos son separados del cuerpo humano. Tiramos el agua de la bañera pero no el bebé. En Ap.17:15 uno de los siete ángeles dijo Juan: “Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres y naciones y lenguas.” Por lo tanto, cuando Dios separó “Pueblos, muchedumbres y naciones y lenguas” en la Torre de Babel entrado se-gúndo día milenario, vemos que de nuevo El estaba se parando las aguas DEBAJO de la expansión DE las aguas SOBRE la expansión”

SEGUNDO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION –

El bautismo del Espíritu Santo.

A partir de Gn.1:6 vemos que el firmamento o lo celes-tial nos separará. Lo que determina si estamos en luz o en tinieblas son los cielos -el Espíritu o la unción. ¡SE-

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PARA! El primer día del hombre de la nueva creación ha bla del Nuevo Nacimiento “Sea la luz”. El segundo día nos habla del bautismo del Espíritu Santo- la creación del firmamento o de la unción, que progresivamente se para las esferas mas BAJAS de las esferas más ALTAS.

TERCER DIA

LA SEMANA DE LA CREACION - Gn.1:9 -13 Tierra seca vegetación.

El verso 9 dice: “...descúbrase lo seco”. El verso 11 añade: “Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla en él, sobre la tierra.” LA SEMANA REDENTORA - Desde Abraham (1995AC) Salomón (990AC) Durante el tercer día milenario de esta Semana Re-dentora, nuevamente Dios hizo aparecer la tierra seca y produjo la tierra su fruto. El hizo esto al levantar Isra el y traer con la simiente natural de Abraham. Esto fue por medio de muchas “tierras secas’’ o experiencias del desierto, tanto naturales como espirituales. Sal.80: 8-11 dice: ‘‘Hiciste venir una vid de Egipto; echaste las naciones, y la plantaste. Limpiaste sitio delante de ella, e hiciste arraigar sus raíces, y llenó la tierra. Los mon-tes fueron cubiertos de su sombra, y con sus sarmientos los cedros de Dios. Extendió sus vástagos hasta el mar, y hasta río sus renuevos.” Este es un cuadro de Israel desde que Dios llamo a Abraham hasta que Isra-el bajo Salomón tuvo dominio desde el Mar Mediterrá-neo hasta el Río Eufrates. Israel era plantío del Señor. Is.5:7 dice: “Ciertamen- te la viña de Jehová de los ejércitos es la casa de Isra- el, y los hombres de Juda planta deliciosa suya.” El ver so 1 hace referencia a ella Como “una viña en una la-dera fértil”, pero no produjo su fruto para Dios. La des-cripción de la viña en la parábola del labrador malvado

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en Mt.21:33 es casi exactamente igual a la de Isaías en Is.5:2. En la parábola Jesús dijo, “El reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que produzca los frutos de él.” Esto, por supuesto, refiere a la simiente espiritual de Abraham. El Israel natural y los creyentes del Antiguo Testa-mento eran como plantas. El tipo natural indicaba una vida limitada y pasajera Era hermosa a los ojos de Dios, pero solo un tipo de un pueblo espiritual que PER-

MANECERÍA en planos más altos. (Jn.15). TERCER PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION

“tierra seca”- experiencias en el desierto, donde la ca- ne (su simiente y su fruto) es tratada.

Gn.1:9 dice: “descúbrase lo seco.” Esta es la experiencia que pasamos después del bautismo del Espíritu Santo. Después el Espíritu de Dios desciende sobre no sotros, como Jesús somos guiados por el Espíritu a un lugar desierto ser TENTADO por el diablo”. (Mt.4:1) El verso 10 dice: “y vio Dios que era bueno’’ Dios ve que nuestras tentaciones y pruebas en el desierto son bue nas. También conoce lo que se lleva a cabo en nosotros por medio ellas. El verso 12 establece que: “Produjo, pues, la tierra hierva, verde,” ¿Qué es hierba? La carne y sus riquezas. Is.40:6-8 dice “Voz que decía; Da voces. Y yo res pondí: ¿Qué tengo que decir a voces? Que toda carne es hierba, y toda su gloria como la flor del campo. La hierba se seca, y la flor se marchita, porque el viento de Jehová sopló en ella; ciertamente como hierba es el pueblo. Secase la hierba marchitase la flor; mas la pa-labra del Dios nuestro permanece par siempre.” Stg.1: 11-12 dice: “Porque cuando sale el sol con calor abra-sador (pruebas) la hierba se seca, su flor se cae, y pe-rece su hermosa apariencia; así también se marchita-rá el rico en todas empresas. Bienaventurado el varón que SOPORTA LA TENTACION; porque cuando haya resis-

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tido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.” El verso 12 añade: “hierba que de semilla según su genero” La hierba produce semilla. Aprendernos que “todo lo que el hombre sembrare, esto también segará. Porque el que siembra a la carne, de la carne segará corrupción, más el que siembra para el Espíritu segará vida eterna.” (Gá. 6:7-8)

CUARTO DIA

LA SEMANA DE LA CREACION – Gn.1:14-19 - Dios creo el sol, la luna y las estrellas. LA SEMANA REDENTORA - Salomón (990AC) hasta Cristo (día de Pentecostés) Al final del cuarto día milenario de esta semana de re-dención Dios nuevamente dio al mundo tres grandes lu ces - la trinidad Jesús. “Pues en él habita corporalmente la plenitud de la Deidad (Col.2:9). En Ap.12:1 lee-mos: “Y apareció una gran señal en cielos, una mujer vestida del SOL, con la LUNA bajo sus pies, y una coro na de doce ESTRELLAS sobre su cabeza.” La relación entre la mujer, el sol, la luna y las estre-llas simbólicamente puede considerarse en dos esfe-ras básicas:

1. La relación de mujer de Cristo para con Dios, o sea Cristo el canal por el cual la vida de Dios es manifestada.

Sol: DIOS EL PADRE -“Sol y escudo es nuestro Dios” (Sal.84:11) Vea también 1ªJn.1:5 y Mt.27:45-46.

Luna: JESUS- Fundamento de la mujer iglesia. “Pues nin gún hombre puede poner otro fundamento que el que está puesto, que es Jesucristo.”

Estrellas: ESPIRITU SANTO La plenitud del orden espiritual

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2. Nuestra relación de mujer para con Cristo, o noso-tros siendo el canal por el cual la vida de Cristo es manifestada.

Sol: JESUS (Ap.1:16)

Luna: LA IGLESIA, no teniendo su propia luz, sino reflejan do su gloria.

Estrellas: Tipo de los HIJOS DE DIOS moviéndose en or den, y alumbrando las tinieblas de este mun do. (Fil.2:13-15)

Dios prometió a Abraham que su “simiente sería comolas ESTRELLAS del ciclo (espiritual) y como la arena del mar (simiente natural).” (Gen.22:17) 1ªCo.15:41 dice: “Una es la gloria del SOL, otra la gloria LUNA y otra la gloria de las ESTRELLAS: Pues una estrella es diferente a otra en gloria.” Las estrellas difieren en gloria: asimis mo difieren los creyentes unos de otros.

CUARTO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACIÓN

Moviéndose en el orden divino.

“En la expansión de los cielos” la unción obrando en nosotros, debe haber un orden divino. Todo lo concer-niente al cuarto día de la creación denota un orden divi no: “SEPARAR el día de la noche…. de SEÑALES para las ESTACIONES, para DIAS y AÑOS…la lumbrera mayor para que SENOREASE en el día, y la lumbrera menor para que SEÑOREASE en la noche;...Y las puso Dios en la expan sión de los cielos…para SEÑOREAR EN el día y en la no-che, para SEPARAR La luz de las tinieblas. Y Vio Dios que era BUENO.” Dios produce el hombre de la nueva creación en un orden, porque El se ve a si mismo en orden y es bueno. El orden en los cuerpos celestes es tan perfecto que el hombre navega por medio de ellos. Un marinero en la noche oscura más tormentosa sólo necesita vislum-

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brar una ESTRELLA para establecer un rumbo que lo lleve a la seguridad del puerto. Esto es tipo del orden de los hijos de Dios en la oscuridad de este mundo y en la noche de tribulación.

QUINTO DIA

SEMANA DE LA CREACION – Gn. 1:20-23 - Dios creó los peces y las aves.

El verso 20 dice: “Y dijo Dios, Produzcan las aguas SE-

RES VIVIENTES, y aves que VUELEN SOBRE LA TIERRA, en la abierta ansión de los cielos.” SEMANA REDENTORA - Desde Cristo (Día de Pentecos-tés) hasta la Edad Oscura (1000 DC)

En el día de Pentecostés al comienzo del quinto día mi lenario de esta Semana Redentora, Dios nuevamente creó los peces y las aves. El agua y el aire (el medio ambiente de peces y aves) ambos nos hablan de vida en el Espíritu. Los peces nos hablan de los creyentes nacidos del Espíritu. Las aves nos hablan de creyentes que se remontan, crecen y se maduran en el Espíritu. Ez.47:9 dice: “Y toda alma viviente que nadare por don dequiera que entraren estos dos ríos vivirá; y habrá mu chísimos peces por haber entrado allá estas aguas.” El Día de Pentecostés Pedro - pescó 3.000. Existe una gran diferencia entre la vida vegetal y la vida animal. La vida vegetal es un nivel más bajo y es-tacionario. La vida animal es un nivel más alto y se MUE

VE. (Hch.17:2; 2ªCo.3:17; Sal.15:6) En el Antiguo Tes-tamento los creyentes eran corno plantas del tercer día. Los creyentes del Nuevo Testamento” se remonta-rán con alas como de águila.”

EL QUINTO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA – CREACION

Esferas más altas en el Espíritu. Dios primeramente creó los peces luego las aves. Dios quiere que progresemos en nuestra experiencia

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espiritual al entrar en la vida del Espíritu. Esto se con-trapone al nivel anímico y emocional, donde no nos ele vamos en gran éxtasis o nos sumimos en profundo de- sespero. Es la diferencia entre ser un termostato espiri tual o un termómetro espiritual. El termómetro registra los cambios y consecuencias de la situación que nos circunda. El termostato cambia y afecta esas mismas situaciones.

SEXTO DIA

LA SEMANA DE LA CREACIÓN – Gn.1:24-31 Dios creó las bestias y el hombre.

LA SEMANA REDENTORA - Desde la Edad Oscura (1000 DC) hasta nuestros días (2000DC)

Las bestias simbolizan a los gentiles. En el capítulo 10 de los Hechos vemos que Pedro tuvo una visión a la HORA SEXTA. Vio “que descendía algo semejante a un gran lienzo, que atado de las cuatro puntas era bajado a la tierra;...“ El Señor se valió de esta visión primeramente para enviar a Pedro a casa de Cornelio el centu rión gentil, después para mostrar a la iglesia que El “no hace acepción de personas.” Pedro dice además en el verso 35: “sino que EN TODA NACION se agrada del que le teme y hace justicia.”Aunque los judíos abrieron la puerta a los gentiles el quinto día, el sexto día viene: a ser la “plenitud de los gentiles”. La última parte de la creación de Dios fue el hombre. Lo último que hizo Dios antes de reposar, fue ha-cer a Eva, tipo de la esposa de Cristo. Una vez más, durante el sexto día milenario de la Semana Redento- ra, mientras Adán duerme, Dios está tomando esposa de entre judíos y gentiles. Cuando “venga la plenitud de los gentiles”, cuando Eva la esposa esté completa, Dios quitará el “espíritu de estupor” que reposa sobre Adán. (Ro. 11:8 y 25).

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SEXTO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION – La plenitud del hombre perfecto.

El sexto paso y día pertenecen al hombre, no al hom-bre natural, sino al hombre Cristo. Comienza con la naturaleza de bestia (Gn.1:24-25) y concluye con el hombre creado “a imagen de Dios”. (Versos 26 y 27) ¿De que se alimentan las bestias? Gn.1:30 dice: “Y a TODA

BESTIA de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay VIDA,

TODA PLANTA VERDE les será para COMER. Y FUE ASI.” Esto es tipo de dónde nosotros los gentiles, simbolizados en las bestias, obtenemos nuestro alimento espiritual. Nos alimentamos del trato de Dios con el Israel espiritual - la vida vegetal del tercer día. La primera parte del ca-pítulo 10 de 1ª Co. hace referencia a muchos de los tra tos de Dios con el Israel natural. Así es que el verso 11 dice: “Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros.” Luego, como para enfatizar de que esta palabra es aplicable a los que vivimos al final de este sexto día milenario, el versículo concluye diciendo: “a quienes han al canzado los fines de los siglos’’. Lo último creado, antes del hombre (aves y bestias) fueron creados para ser sacrifi cados. Los sacrificios consistían en aves y bestias, pe-ro no peces. En Gn.15, cuando Dios hizo su pacto con Abraham, le ordeno sacrificar un becerro, una cabra, un carnero, una tórtola y una paloma. “Las bestias” nos hablan de la carne, mientras que “las aves” nos hablan de la naturaleza anímica emocional. Ambas deben ma-nifestarse en plenitud y ser sacrificadas antes que “la imagen de Dios” pueda ser vista. (2ªCo.3:18; 1ªJn.3:1-2; 1ªCo.11:7). El verso 31 dice:”Y vió Dios todo lo que había hecho,y he aquí que era BUENO EN GRAN MANERA.” Si no hay “ninguno bueno sino uno, esto es Dios,” entonces lo que es “bueno en gran manera” es DIOS EN GRAN MANE-

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RA. Gn.2:1 dice: “Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra.” Jesús dijo, “Consumado es”

SEPTIMO DÍA

LA SEMANA DE LA CREACION -. Gn. 2:2 - Dios concluyo su obra creadora y reposó.

LA SEMANA REDENTORA, Desde nuestros días (2000 DC) hasta el final del Reino del Milenio (3000DC) En el sép timo día milenario de esta semana, Dios terminará su obra REDENTORA y reposará.

EL SEPTIMO PASO DEL HOMBRE DE LA NUEVA CREACION

Por fe entraremos plenamente al reposo, habiendo ce-sado (le nuestras obras. (He. 4:1-11) Aleluya.

LOS SIETE ELEMENTOS DEL MOBILIARIODEL TABERNACULO

Un tabernáculo es una morada. En Ap. 21:3 Juan “oyó un gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.” Cuando Israel viajaba por el desierto el taber- náculo era una tienda de dos compartimentos rodea-dos por unas cortinas. Más adelante cuando poseye-ron la Tierra Prometida este tabernáculo fue reempla- zado por el templo que Salomón edificó en Jerusalén. Hasta la venida de Jesús, el templo en Jerusalén fue el templo de Dios. Mediante la obra de su sangre y su es- píritu, somos limpiados preparados como el Cuerpo de Cristo, para ser el templo de Dios Ef.2:21-22 dice: “en quien (Jesucristo) todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.” Acabamos de leer en el estudio anterior como Jesús dijo, “Consumado es”. Esto significó que su obra redentora en la cruz ha bía terminado. Como una prueba visible y simbólica,

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“el velo del templo se rompió de arriba abajo.” Ahora “por medio de él los unos y los otros (judíos y gentiles) tenemos entrada por un mismo espíritu al Padre.” (Ef. 2:18). Así vemos que el templo en Jerusalén también fue un sustituto temporal y simbólico. Nosotros somos el tabernáculo de Ap. 21:3 y el tem plo de Ef.2:20. Somos la “morada de Dios en el Espí- ritu”, siendo el tabernáculo de Moisés y el templo de Je rusalén sólo tipos y sombras, sustitutos y profecías. Pa ra que el hombre pudiese ver más allá de lo físico y vi-sible. Dios permitió que estos aspectos del tabernáculo y del templo fuesen destruidos.

LA REVELACION DE LA CRUZ SE OBSERVA EN LA SITUA- CION DEL TABERNACULO CON RESPECTO A LAS DOCE TRI BUS DE ISRAEL El Tabernáculo estaba “en medio”del campamento.(Nm.2:17 “Luego irá el tabernáculo de reunión con el campamento de los levitas, EN MEDIO DE LOS CAMPAMEN-

TOS en el orden en que acampan; así marchará cada uno junto a su bandera.” En el capítulo 2 de Números hallamos la ubicación de cada una de las tribus y su numeración:

ESTE Judá, Isacar y Zabulón 186.400OESTE Efraín, Manasés y Benjamín 108.100SUR Rubén, Simeón y Gad 151.450NORTE Dan, Aser y Neftalí 157.600

Vemos que las tres tribus más numerosas acampaban al este, representando la parte más larga de la cruz. Las tres tribus menos numerosas acampaban al oeste, representando la parte más corta de la cruz. Luego las tres tribus acampadas al norte y al sur tienen una me- dia, casi idéntica, representando los dos brazos de la cruz. Por lo tanto el campamento de Israel “en medio” del cual se hallaba el tabernáculo da un mensaje sim- bólico de la cruz.

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LA REVELACION DE LA CRUZ SE VE AUN MAS EN LA SITUA CION DE LOS SIETE ELEMENTOS DEL MOBILIARIO DEL TABERNACULO

El Atrio de Afuera del Tabernáculo tenía su entrada al extremo este llamada la puerta. La trayectoria de los sacerdotes con la sangre el Día de Expiación era de Este a Oeste, atravesando las tres áreas del taber-náculo con sus SIETE ELEMENTOS DE MOBILIARIO. Al entrar al Atrio de Afuera por la puerta, el primer ele-mento era:1. EL ALTAR DE BRONCE. Aquí se quemaron las ofrendas. 2. EL LÁVACRO DE BRONCE. Se hallaba situado directamen te enfrente. Aquí los sacerdotes se lavaban antes de entrar al Lugar Santo.

Al entrar al Lugar Santo estaba:3. LA MESA DEL PAN DE LA PROPOSICION a la derecha o norte, y 4. EL CANDELERO DE ORO a la izquierda o sur. La ubicaci ón de estos dos elementos formaban los brazos de la cruz, ya que todos los demás elementos estaban colo-cados en línea recta de este a oeste. 5. EL ALTAR DE ORO DEL INCIENSO se hallaba frente al velo, y más allá del velo en el Lugar Santísimo estaba 6. EL PROPICIATORIO que cubría 7. EL ARCA DEL PACTO.

EL PRIMER ELEMENTO DEL MOBILIARIO DEL TABERNÁCULO EL ALTAR DE BRONCE

(Éxodo 27:1-8)

El Altar de Bronce era de madera de acacia, evidente-mente cubierto por dentro y por fuera con bronce. El bronce en las Escrituras, indica Juicio contra el peca-do. EL BRONCE POR DENTRO simboliza el ESPIRITU SANTO

que mora dentro, “El espíritu de juicio” (Is.4:4) vino a convencer al mundo de pecado, justicia y juicio. (Jn. 16:8-11) LA MADERA EN MEDIO simboliza el madero, la

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cruz, sobre el cual EL HIJO, el centro de la Deidad, fue crucificado por nosotros. (Is.53; Mi.5:1-2) BRONCE POR

FUERA nos habla del PADRE quien es juez de todos. Así como el Altar de Bronce es una cubierta triple, de la misma manera la Deidad es una cubierta completa y corporal de luz y vida. La SIMIENTE de pecado en la na-turaleza del hombre debe ser juzgada. La cubierta del “espíritu de juicio” mediante la convicción es para traer nos a la cubierta de la sangre del Cordero. La vida de la SIMIENTE PERFECTA. Por medio de la obra sacrificado-ra del Hijo, somos traídos a la cubierta plena del Padre El Altar de Bronce estaba simbólicamente cubierto por la luz del fuego que lo cubría y la luz del sol que se reflejaba sobre el bronce. El Altar de Bronce era el ori-gen del fuego y la luz para los tres elementos de mobi-liario en el Lugar Santo. El fuego del Calvario, que Je-sús, siendo la simiente perfecta pasó, es el origen de la progresiva luz y vida de Dios que nos cubren. El Altar de Bronce estaba también simbólicamente cubier to por cuatro cuernos. Los cuernos de un animal nos hablan del poder y de la fuerza que le cubren. El ani-mal a ser sacrificado podía voluntariamente entregar sus cuernos, o por el contrario ser sujetado por sus cuernos a los cuernos del altar. Al entregar el animal la cubierta de su propia fuerza y poder, los cuernos se convertían en el canal de la vida y la luz de Dios a su pueblo. Básicamente los cuernos se utilizaban en do formas:

1. Por los sacerdotes como trompetas, que simbólica- mente nos habla de la palabra de Dios que DA VIDA y es inspirada por el Espíritu.

2. a.Vasijas humanas ungidas con aceite podían andar bajo la cubierta de la LUZ y VIDA de Dios. b. El candelero lleno de aceite simbolicamente daba la cubierta de la luz de Dios en el Lugar Santo, es te recinto, con una área de 2.000 codos cúbicos,

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representa la Era de la Iglesia desde el Día de Pentecostés. El Altar de Bronce, así también los otros mobiliarios, era cubierto cuando se transportaba. (Nm4:13-14) Sin embargo, parece ser que tenía más cubiertas y era el único cubierto por un “paño púrpura”. El color púrpura se produce al mezclar rojo y azul - unción y la muerte al yo. Las planchas que lo cubrían eran primeramente colocadas. Sobre estas se colocaba el paño de púrpu-ra cinco vasijas, luego la piel de tejón cubriéndolo todo. Las pieles de tejón escondían lo que simbólicamente nos habla de la SIMIENTE REAL que reinará y regirá con EL. Reinar con El es cubrir con su luz y vida.

EL SEGUNDO ELEMENTO DEL MOBILIARIO DEL TABERNACULO EL LAVACRO DE BRONCE

(Éxodo 30:17-21)

El lavacro era de bronce, pero no se nos dan medidas especificas. En verdades anteriores y posteriores, los detalles son esenciales. En la verdad de SEPARACION Y

SANTIFICACION, los detalles en cuanto a medidas, da lu-gar a legalismo en vez de verdadera santidad que vie ne mediante “el lavamiento del agua (espíritu) de la palabra”. Es significativo que el Lavacro de Bronce se menciona juntamente con “SU pie”. El pie expresa el an dar. Nuestro andar debe ser como SU ANDAR. Es tam-bién significativo que “Aarón y sus hijos lavarán sus MA

NOS y sus PIES allí”. “Aarón y sus hijos”, son tipo del mi nisterio quíntuple del espíritu que se menciona en Ef. 4:I1, como también lo son los cinco dedos de las ma-nos. EL MINISTERIO de Dios debe ser santo, y el ANDAR

del pueblo de Dios también debe ser santo. Ya que el Altar de Bronce habla de la provisión de Dios que CUBRE y limpia nuestros pecados, el Lavacro de Bronce habla de la provisión para un andar de SE-

PARACION, de continua limpieza. En Jn. 13, Jesús lavó los pies de sus discípulos y dijo, “Si yo, vuestro Señor

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y Maestro, he lavado vuestros pies; vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros”. Pedro no quiso que Jesús le lavase los pies, pero Jesús dijo, “El que está lavado, (por la sangre) no necesita sino lavar se los pies.” Simbólicamente al lavar los pies de algu-no, la mano (ministerio espiritual) de la persona que la-va, y el pie (el andar de la persona que es lavada) es-tán ambos en el agua y están siendo limpiados, y el mi nisterio es limpiado a medida que nuestro andar es lim piado. El lavarnos los pies unos a los otros espiritualmente nos SEPARA y SANTIFICA mediante el SUFRIMIENTO. Nuestro orgullo sufre tanto al ministrar como al ser mi-nistrado de esta manera. Tanto el lavacro como el pie o sostén eran de bron ce sólido. (Ex.38:8) “También hizo la fuente de bronce y su base de bronce, de los espejos (o espejos de bron ce) de las mujeres que velaban (se reunían por grupos) a la puerta del tabernáculo de reunión.” La carne lucha contra la santificación y la santidad. Los espejos eran todo ellos de bronce. Hay una ana logía y un contraste definido en el propósito y uso de los espejos de bronce y el Altar de Bronce. Ambos eran espejos - aquello que nos manifiesta nuestra con- dición. Un espejo de mano es un instrumento de vani-dad y orgullo. Simbólicamente una persona puede con-trolar su apariencia y condición bajo su propia respon- sabilidad. Cuán diferente es, a aquella persona que so metiéndose a otra, permite que sus pies sean lavados. Una persona con un espejo en sus manos puede senci llamente limpiarse ella misma, o usar mucho maquillaje y adornos para aparentar lo contrario a su verdadera condición. Los sacerdotes se acercaban al Lavacro de Bronce en la presencia de otros sacerdotes. Al ser se-parado y santificado para su ministerio, sufría una falta de provisión para su orgullo en cuanto a adornos. De hecho, la provisión básica del Lavacro de Bronce, ni

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aún era para su cabeza. Era simple y específica. Su reflejo sobre el bronce y sobre el agua le juzgaba, y éste último tenía como fin limpiar sus manos (ministe-rio) y sus pies (andar). “Esposos (naturales y espirituales) amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó la iglesia y se entregó por ella; para santificarla, habiéndola purificado en el la vamiento del agua por la palabra, a fin de presentárse-la a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese man cha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.” (Ef. 5:25-27). “Pero sed hacedores de la palabra y no tan solamen te oidores, engañándoos a vosotros mismos. Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mis-mo y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad y perse vera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la palabra éste será bienaventurado en lo que ha-ce.” (Stg.1:22-25).

EL TERCER ELEMENTO DEL MOBILIARIO DEL TABERNACULO LA MESA DEL PAN DE LA PROPOSICION

(Éxodo 25:23-10; Levítico 24:5-9)

La Mesa del Pan de la Proposición es el primer elemen to del mobiliario al norte o sea a la derecha, al entraren el Lugar Santo. Puesto que La Mesa del pan de la Pro- posición nos habla de la PROVISIÓN del Señor, es signifi-cativo que todo lo relacionado con ella es doble o tiene dos partes. La mesa en si era de oro. Tenía una cornisa doble. (Ex.25:24-25) Tendría “una moldura alrededor”, y lue-go “harás a la moldura cornisa de oro alrededor”. Los doce panes de la proposición sobre la mesa se-

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rían “de dos décimas de efa” (Lv.24:5), que era la doble por ción que cada Israelita recogía en el sexto día. Éx.16:22 dice: “En el sexto día recogieron DOBLE POR-

CION de comida, dos gomeres para cada uno.” El último versículo del capítulo explica que “un gomer es la décima parte de un efa”. Siendo un gomer la déci ma parte, dos gomeres son dos décimas de un efa. Lv.24:6 nos muestra que estos doce panes de doble porción eran colocados “en dos hileras (pilas), seis en cada hilera.” Luego cada una de estas dos hileras de panes de doble porción eran coronadas con una doble corona. El verso 7 añade: “Pondrás también sobre cada hilera incienso puro...ofrenda encendida a, Jehová.” En Ex.25:29 Moises recibio el mandamiento de hacer platos, cucharas, cubiertas y tazones de oro puro. Es- tos eran para utilizarse en el servicio a la Mesa del Pan de la Proposición. Muchos estudiosos consideran que las cucharas eran platillos pequeños y llanos en los que se colocaba el incienso sobre las dos hileras. Sea que consideremos que el incienso era colocado en las cucharas o directamente sobre las dos hileras de pa-nes, está claro que ambas hileras tenían una doble co-rona. (Incienso sobre cucharas o incienso ardiendo con fuego) El Lugar Santo, con sus 2000 codos cúbicos, nos ha bla de los últimos 2000 años desde el día de Pentecos tés. La Escritura hace referencia a estos dos días milenarios como los “últimos días”. (Hch.2:16,17) Al profeti-zar del derramamiento del Espíritu, tanto al comienzo como al final de “los últimos días” (comienzo del quinto día y final del sexto día milenario), Joel usa la analogía de “la lluvia temprana y la lluvia tardía”. (Jl.2:23) La pro visión de la doble porción del Espíritu. La manera en que Aaron el Sumo Sacerdote estaba vestido y ungido para ministrar ante la Mesa del Pan del la Proposición y les demás elementos del mobilia

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rio del Lugar Santo, también nos habla de la provision de la doble unción. Después de su resurrección, Jesús dijo a sus discípulos, “He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis INVESTIDOS de poder desde lo alto.” (Lc.24:49) La palabra “investidos” proviene del Griego “enduo - entrar, ser vestidos con” - una alusión al momento en que los sacerdotes eran vestidos a la puerta del tabernáculo. (Ex.29) Aaron y sus hijos primeramente eran lavados con agua luego las vestiduras de Sumo Sacerdote eran colocados so-bre Aaron. Los versos 6 y 7 nos dicen que Moises pon-dría “sobre la mitra…la DIADEMA santa” y tomaría “el aceite de la unción y lo derramaría sobre su cabeza.” Ex.28:36 identifica la DIADEMA sobre la mitra como una plancha de oro puro sobre la cual estaban gravadas las palabras “Santidad a Jehová” mientras que Lv. 21:12 menciona el aceite de la unción como la “CONSA-

GRACION (o diadema en la versión inglesa) por el aceite de la unción.” Así es que en el Lugar Santo, no sólo vemos al Su- mo Sacerdote CORONADO DOS VECES, sino que lo vemos ministrando ante una mesa de DOS materiales que tiene una DOBLE CORONA sobre la cual hay DOS hileras de pan de DOBLE porción, las cuales también tienen DOS CORONAS.

En el Antiguo Testamento, los reyes también eran coronados dos veces - primero, con el aceite de la un-ción y luego, con la corona de la realeza. Jesús fe pri-meramente coronado con una “corona de espinos” en su servicio como un sacerdote, antes de ser “coronado con gloria y honra”. Mediante el bautismo del Santo Espíritu somos vestidos con vestiduras sacerdotales. Al acercarnos a la Mesa del Pan de la Proposición somos coronados dos veces, y a través de la palabra del Espíritu, progresiva-

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mente, vemos la provision de doble corona: “Si sufrí- mos, tamién reinaremos con él.” (2ªTi.2:12) El Antiguo Testamento era sombra, y el sacerdocio leví tico era un orden temporal. “Jesús es hecho fiador de un mejor pacto ...un sacerdocio inmutable... según el orden de Melquisedec.” Este Melquisedec es “Rey de Salem” y “sacerdote del Dios altísimo”. (He.7 y 8) Me-diante la provisión de su Cuerpo, “el pan que descen- dió del cielo”, El nos ha hecho “reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.” (Ap.1:6).

EL CUARTO ELEMENTO DEL MOBILIARIO DEL TABERNACULO EL CANDELERO DE ORO

(Exodo 25:32-40)

El Candelero de oro no era un candelero con velas sino una lámpara de pie que tenía siete lamparas encen- didas. Las velas se autoconsumen mientras que las lámparas lucen mediante un abastecimiento continuo de aceite. El Candelero de Oro con siete luces nos habla de la perfección de Cristo por medio de su Cuerpo. Así corno la única luz dentro de los 2000 codos cúbi-cos del Lugar Santo era el Candelero, la unica luz du-rante los últimos 2000 años de la Era de la Iglesia, ha sido mediante el Cuerpo de Cristo. Esto es, mediante el aceite del Espiritu Santo que fue derramado el Día de Pentecostés. El Candelero estaba forjado de una sóla pieza de oro. Había un brazo central y seis brazos laterales, tres a cada lado. Es significativo que la Escritura menciona “SU pie” (Ex.25:31 La palabra traducida como “pie” en la lengua Hebrea es “varek - muslo”, y generalmente sólo se usa en relación a seres vivos. Jesús es el pie central en medio del Candelero. Nosotros salimos de su costado, así como Eva salió del costado de Adán. Simbólicamente fue cuando Dios permitió que su hijo durmiera un sueño profundo en el Calvario. Cuando la

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lanza del soldado atravesó el costado de Jesús, del cual salió sangre y agua. Esto nos habla de su sangre y espíritu derramados para sacar a su esposa de den tro de El. En Ap.1:13 vemos “en medio de los siete candeleros, a uno semejante al hijo del Hombre...“Observando el Candelero de Oro simbólico, el pie central “en me-dio” es la cuarta luz empezando desde la izquierda. Je-sús vino al final del cuarto día milenario de esta Sema-na Redentora. El Candelero de Oro también está “en medio” en el sentido en que es el cuarto elemento del mobiliario del esquema del tabernácuIo. Profundizando más en el capítulo uno de Apocalip- sis, nos ayudará si visualizamos el Cuerpo de Cristo en la cruz según la posición de cada elemento del mo-biliario. Los pies y las piernas estarían en el atrio de Afuera, el torso estaría en el Lugar Santo, la cabeza en el lugar Santimo. La verdad representada en el Altar de Oro, la ofrenda completa de nuestro ser, se observa en que El estaba “ceñido por el pecho con un cinto de oro”. Jesús le dijo a Pedro: “Cuando era más jóven, te ceñías, e ibas donde querías; mas cuando ya seas vie- jo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras. Esto dijo, dando a entender con que muerte había de glorificar a Dios.” (Jn.21:18,19) El verso 14 añade: “Su cabeza y sus cabellos como lana blanca, como nieve” la nube de gloria sobre el Propicia torio en el Lugar Santísimo. “Sus ojos como llama de fuego” -los dos querubines que cubrían el Propiciato-rio. “Y sus pies semejantes al bronce bruñido”- el Altar de Bronce. “Tenía en su diestra SIETE ESTRELLAS” - las SIETE LAMPARAS DEL CANDELERO DE ORO.

Sobre el pie y los seis brazos del Candelero de Oro había emblemas o diseños trifásicos de copas (capullos), flores, y manzanas. (Almendras en hebreo) El len guaje usado para la ornamentación del Candelero es similar al lenguaje usado para describir la Vara de Aa-

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ron que reverdeció. (Nm.17:8) En estos dos cuadros proféticos, hay una revelacion de: (1) La Deidad, (2) Nuestro estado de redención perfecta, (3) Querernos ver más aún, que también Hay una correlación entre el diseño del Candelero y la Vara de Aaron en los tres tipos principa les de luces celestes: el SOL, la LUNA y las ESTRELLAS.

VARA DE AARON EL CANDELERO SIMBOLISMO

”arrojado renuevos”

“copas” (capullos) Origen-PADRE

”echando flores” “flores” Manifestación-HIJO”produciendo almendras”

“manzanas” (almen dras en hebreo)

Fruto-ESPIRITU SANTO

1- Revelación de la Deidad: a. Copa (capullo redondeado, sin abrir) - tipo del PADRE,

el origen o principio de todas las cosas.b. Flor - tipo del HIJO. Hay etapas progresivas en la ma nifestación de su hermosura y fragrancia. Primera- mente la hermosura al abrir, con su aroma. Sin embargo, la plenitud de esa fragrancia sólo es revelada al ser estrujada.c. Manzana (almendra en el lenguaje original) - tipo del ESPIRITU SANTO quien procede del Padre y produce el fruto en el Pueblo de Dios.

2- Revelación de nuestro estado perfecto y redimido: a. Copa - ESPIRITU. Es lo que primeramente se levanta (es vivificado), pero que no se ve. b. Flor - ALMA. Así corno la flor se abre, manifestando la vida que estaba escondida en el capullo. Así tam- bién, el alma mediante la voluntad, la mente y las emociones, revelará la vida del hombre del espíritu.c. Almendra - CUERPO. En casi toda la naturaleza, la se milla se halla en el fruto o madurez. “Mas si el espíri- tu de aquél que levantó a Cristo de los muertos tam- bién vivificará VUESTROS CUERPOS MORTALES por su Espíritu que mora en vosotros.” (Ro.8:11) “..y a cada

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semilla su propio cuerpo…se siembra cuerpo natural (animal); resucitará cuerpo espiritual. Hay cuerpo animal, y hay cuerpo espiritual.” (1ª Co.15:38 y 44)

3. Correlación entre el diseño triple del Candelero y la vara Aaron y los tres tipos principales de CUERPOS CELESTES.

CUERPOS CELESTES

CANDELERO VARA DE AARON

DEIDAD NUESTRO ESTADO PERFECCIONADO

Sol Capullos Origen-PADRE EspírituLuna Flor Manifestación HIJO AlmaEstrellas Almendra Fruto-ESPÍRITU

SANTOCuerpo

a. El SOL como el capullo habla del Padre, el origen de toda vida. También habla de nuestro espiritu cuando es vivificado. b. Así la LUNA refleja la luz del sol, la flor manifiesta la vida del capullo. Así como la luz de la LUNA va en au mento en distintas etapas, también el capullo se abre en tamaño y hermosura. Esto nos habla del Hijo que madu dura, quien progresivamente manifiesta más de la natu raleza del Padre. También habla del alma, (voluntad men te y emociones) que progresivamente manifiesta más de la naturaleza del espíritu vivificado. c. Contrario a la luna, las ESTRELLAS tienen su propia fuente de luz. El fruto (almendras) asimismo, general-mente tiene su semilla, o la habilidad de reproducirse Esto habla del poder vivificador y del fruto del fruto del

Espiritu Santo. Así es que en nuestros cuerpos se halla el poder del Espíritu Santo. El diseño triple de la copa, flor y almendra, se halla cuatro veces sobre el pìe sumando un total de doce partes del diseño. Se halla tres veces en cada brazo suman-do un total de nueve partes del diseño en cada brazo. Doce denota plenitud, y nueve nos habla de la manifestación del Espíritu Santo. Dios nos da esto últi- mo para producir lo primero. Si contamos cada parte

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del diseño sobre el pie y lo brazos hacia la izquierda te nemos un total de treinta y nueve partes (Tres veces tres en cada brazo igual a nueve; por tres brazos igual veintisiete. Tres por cuatro en el pie igual a doce. Vein- tisiete más doce igual a treinta y nueve.) Hay treinta y nueve libros en el Antiguo Testamento o antes de que Jesús viniese. Hacia la derecha del pie central, en total del diseño triple en los tres brazos, suman otros veinte- siete etc. Hay veintisiete libros en el Nuevo Testamen-to o desde que Jesús vino. El aceite del Espiritu Santo fluye por las setenta y seis partes libros para manifestar la perfección de su luz y vida por medio de noso-tros.

EL QUINTO ELEMENTO DEL MOBILIARIO DEL TABERNACULO EL ALTAR DE ORO DEL INCIENSO

(Exodo 30:1-10 y 34-38)Lo primero que observamos en la descripción del Altar de Oro (verso1) es que su finalidad era “quemar incien so”. A causa del fuego el incienso tipicamente pierde sus cualidades físicas y visibles y se convierte en espiritual e invisible. La savia, o la esencia de vida del arbusto o árbol (gálbano y estacte), forman una gomorrecina al entrar en contacto con el AIRE. El molusco es to mado de su medio ambiente en el MAR ROJO (agua). Todos estos mediante el fuego son levantados JUNTA-

MEN TE a un nivel de VIDA más alto representado en el AIRE. EL incienso tres especies: Gálbano uña (Onycha en inglés) y estacte. (Ex.30:34) Nos hablan de la ofrenda de nuestro ser: espíritu, alma y cuerpo.

1. ESPIRITU- Galbano. Una gomorrecina amarga de un ar busto arborreo que era utilizado para espantar insec-tos, piojos y reptiles. Así también ocurre con nuestro espíritu regenerado.

2. ALMA- Uña. Un molusco que provenía del Mar Rojo.

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Recibia su fragrancia de los alimentos que ingería. Así debe ser con nuestra voluntad, mente y emociones. (Mt.4:4) El molusco tenía que molerse. Nuestra alma es cubierta por el cuerpo. Jesús dijo: “Mi ALMA está muy triste, AUN HASTA LA MUERTE.”

3. CUERPO- Estacte. Savia fragante de la gormorrecina de un árbol que tenía que ser finamente molida. “Sacri- ficio y ofrenda no quisiste, mas me preparaste CUERPO.

Entonces dije: He aqui que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, como en el rollo del libro está escrito de mí... En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del CUERPO de Jesucristo hecha una vez para siempre.” (He.10:5, 7 y 10). Estas especies cran molidas muy finamente. A éstas se les agregaba incienso puro que simboliza las oracio nes, intercesiones y sufrimientos de Jesús. El incienso era aquella parte de la composición que le permitía AS-

CENDER EN EL AIRE cuando era quemado en el fuego sobre el Altar de Oro. Todo tenía que mezclarse con sal. Hay mucha sal en el Mar Rojo y puede cristalizarse me diante el contacto con el aire. El Altar de Oro del Incien so estaba construido de madera de acacia cubierto con oro puro. (Ex.30:3) “...su CUBIERTA sus PAREDES en derredor”. (En Hebreo cubierta es “gag”- techo o pi-náculo; y paredes es “qir” o sea muro.) El lenguage uti lizado de techo o pináculo; por cubierta, y paredes, hace alusión a un edificio. Específicamente hace alusión al templo cuyo techo tenía un PINACULO - “como un pe-queño alero”. Recordemos que en la tentatación el dia-blo llevó a Jesús y lo puso sobre “el pinaculo del tem-plo”. Un alero es aquella parte extendida y como sus- pendida en el aíre. “En quien (Jesucristo) todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois jun tamente edificados para morada de Dios en el Espí- ritu.” (Ef.2:21-22)

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EL SEXTO ELEMENTO DEL MOBILIARIO DEL TABERNÁCULO EL PROPICIATORIO

(Exodo 25:17-22)

El propiciatorio era en realidad la tapa o cubierta del Ar ca del Pacto. La palabra en Hebreo es “kapporeth- una tapa, un lugar de cubierta (pecado). En griego es “hi- lasterion un lugar de propiciación apaciguamiento.” He. 9:5 traduce esta palabra “Propiciatorio” (en ingles “Asi- ento de la Misericordia”) y Ro.3:25 “Propiciatorio”. La Escritura en Romanos nos dice que el Propiciatorio es “(Cristo Jesús) a quien Dios puso como PROPICIACION

por medio de la fe en su sangre.” El perímetro del Propiciatorio, o la cubierta del Arca, era ocho codos. Para que Israel tuviera un nuevo principio cada año en el Día de la Expiacion, la sangre del becerro sacrificado era rociada aquí. La reja “en medio” del primer elemento del mobiliario, el Altar de Bron ce, era de la misma altura que el Propiciatorio que cubría el último elemento del mobiliario, el Arca. La sangre convertía el trono de juicio en un trono de misericordia. Dios es todo juicio y misericordia. Cuando Is- rael quebrantaba la ley, encendian la ira de Dios. Ira di vina es la santidad de Dios en acción contra el pecado. El pecado debe ser juzgado, y las demandas de un Dios Santo deben ser apaciguadas. “La paga del pecado es muerte”. La sangre derramada en el Altar de Bronce y rociada sobre el Propiciatorio muestra que el juicio de Dios había sido ejecutado. La ira de Dios se había apaciguado; ahora estaba dispuesta su miseri-cordia. “A los dos extremos del Propiciatorio habían dos querubines, labrados a martillo sobre el Propiciatorio. Los querubines cubrían el Propiciatorio con sus alas, sus rostros se enfrentaban y miraban hacia el Propi-

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ciatorio. Los querubines y el Propiciatorio simbolizan:

1. La naturaleza y manifestación del Dios trino.2. La plenitud de esta misma naturaleza manifestada mediante Cristo y su cuerpo. LA NATURALEZA Y MANIFESTACION DEL DIOS TRINO

La Escritura ya ha identificado el Propiciatorio como el Hijo - la figura central de la trinidad. El Propiciatorio ro-ciado con sangre estaba “en medio”. Los querubines y el Propiciatorio eran hechos de un mismo bloque de oro. En ninguna parte de la Biblia se mencionan estos querubines como angeles. Los angeles no tenían parte en el Propiciatotio polque no son UNO con Jesús. Por tanto no son angeles que anhelan mirar las cosas per-tenecientes a nuestra salvación. (1ªP.1:12) Los querubines se mencionan como “querubines de gloria”. (He. 9:5) Unicamente el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son UNO en el plan de redención. Así el Padre y el Espí ritu Santo contemplan con satisfacción el Propiciatorio, con la sangre rociada y la obra completada de reden-ción.

LA PLENlTUD DE LA NATURALEZA MANIFESTADA MEDIANTE CRISTO Y SU CUERPO

He.10:11-12 nos relata como los sacerdotes estaban “día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pe cados; pero Cristo, habiendo ofrecido UNA VEZ PARA SI-

EMPRE UN SOLO SACRIFICIO por los pecados, SE HA SENTA

DO a la diestra de Dios.” Ese “un solo sacrificio” y el “sentarse” es el trono de la misericordia. El verso 14 añade “porque con una sola ofrenda hizo perfectos PA-

RA SIEMPRE a los santificados.” Mediante ese sólo sacrificio perfeccionándonos para siempre, la oración de Je sús ha sido contestada. “Para que todos sean uno; co-

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mo tú, oh Padre, en mi, y yo en ti, que también ellos sean uno con nosotros;....La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad...“ Jn.17:21-23). Los querubines representaban la plenitud del hom-bre Cristo Jesús. Para comprenderlo necesitamos com parar los cuatro “rostros” de Cristo en los cuatro Evan gelios, con los cuatro rostros de los cuatros seres vivientes en Ez.1 y también con las cuatro ruedas y los cuatro querubines de Ez.10 y las cuatro bestias de Ap. 4:7.

EVANGELIOS MATEO MARCOS LUCAS JUANEl modelo del Tabernáculo en Israel

Todo el campamento

Atrio de afuera

Lugar Santo Lugar Santísimo

Rodeando al Rey

Servicio y Sacrificio

Relato escrito del Espìritu San to en Hechos

Comunión

Muestran a Jesús como:

Rey Siervo Sufriente

Hombre perfecto

Hijo de Dios

Ez.1:5,6,10 León Buey Hombre AguilaEz.10:14 León Querubìn Hombre AguilaAp.4:7 Leòn Becerro Hombre Aguila

Es claramente visible que existe una similitud entre los cuatro rostros de Cristo en los Evangelios y las visiones de Ezequiel y Juan en Apocalipsis, excepto lo anotado bajo Marcos. El becerro puede considerarse como un buey joven, ¿pero como encuadramos al que rubín? En Ez.1:3 el profeta dice que tuvo la visión “junto al río Quebar”. En Ez.10:22 dice: “Y la semejan

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za de sus rostros ERA LA DE LOS ROSTROS que vi junto al río Quebar.”En otras palabras el buey y el querubín nos hablan de lo mismo - un servicio santo. En Dt.25:4 Dios ordena, “No pondrán bozal al buey que trilla.” Tanto Pablo como Timoteo usan esta analo gía, para hablar de los que ministran la palabra. La pa labra comunmente traducida como “ministro” en el Nue vo Testamento es “diakoneo actua como diácono, servir.” Ministrar es servir. La vida del becerro o buey es una vida de servicio y sacrificio. Primeramente sirve bajo el yugo y luego es sacrificado sobre el Altar de Bronce. Mediante su sangre, la vida de servicio y sacrificio atraviesa todo el Ta bernáculo hasta el Lugar Santisimo para cubrir el Propi ciatorio, así como lo cubren los querubines. (1) Al ser sacrificada la naturaleza de bestia (Marcos), nos mani- festamos en la naturaleza de (2) un hombre perfecto (Lucas), (3) el Hijo de Dios (Juan), y (4) el Rey (Mateo). Aleluya.

EL SEPTIMO ELEMENTO DEL MOBILIARIO DEL TABERNACULO EL ARCA DEL PACTO

(Exodo 25:10-16)

Es importante observar que Dios comienza con el sépti mo elemento, El Arca del Pacto, Dios comienza consi-go mismo. “En el principio creó Dios...“ (Gn.1:1) Dios comienza consigo mismo, donde debe comenzar. Dios morando en la eternidad se hizo “carne y MORO (griego - habitó en tienda o en taberniculo) entre nosotros”. (Jn.1:14) Dios comienza con su Trono y prosigue hacia el hombre y el lugar del sacrificio - El Altar de Bronce. Este es opuesto al acercamiento que hace el hombre hacia Dios. El hombre debe comenzar en el Altar de Bronce antes de poder acercarse al Arca de su Gloria. Esto verdaderamente es la gracia de Dios. A menos que Dios primeramente se acerque al hombre, este no tiene ninguna vía de acceso a Dios.

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Existen 185 referencias directas en el Antiguo Testa- mento a este importante elemento del mobiliario. Es el único elemento que estuvo en tres tabernáculos o san- tuarios distintos. (1) el Tabernáculo de Moises, (2) el Tabernáculo de David (1ºCr.6:1); y (3) el Templo de Sa lomón (1ªR.8:1.6). El tipo básico que vemos en el Arca en si misma y en cómo y dónde era guardada es Dios morando en medio de su pueblo, y ellos y El llegando a un reposo completo. El Arca era hecha de madera de acacia y oro puro, pero es el único elemento que se hallaba cubierta por dentro y por fuera de oro. El Propiciatorio que era su ta pa o cubierta era de oro puro. Esto, primeramente, nos habla de la naturaleza de Dios. El oro por fuera nos ha bla de Dios el Padre, quien es sobre todo. La madera en medio nos habla del Hijo, la figura central de la Dei dad. Oro por dentro nos habla del Espíritu Santo que mora dentro. Estando cubierta por dentro y por fuera con oro también nos habla del Señor Jesucristo. “Pues en El mora corporalmente la plenitud de la deidad.” (Col.2:9) También habla de nosotros como miembros de su cuerpo, cuando seamos plenamente “conformes a la imagen de su Hijo.” (Ro.8:29) Cuando no viajaban, las barras eran quitadas de ca-da elemento del mobiliario, pero no eran quitadas del Arca. Otros elementos del mobiliario requerían la ayuda del hombre para ser removidas. El Arca estaba pre-parada para moverse sin ayuda del hombre. La Gloria de Dios es la que menos se asienta y es la primera en moverese cuando se peca contra ella es apagada o contristada. La verdad acerca de la perfección y la Glo ria de Dios -Dios glorificado en y por medio de su pue blo- fue lo primero que desapareció en la Iglesia primiti va. La verdad del Altar de Bronce -justificación por fe- fue lo último que la Iglesia perdió. Aunque la verdad del paso inicial de esta “tan gran salvación” fue lo últi-

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mo en perderse, también fue lo primero en restaurarse. De manera semejante la verdad de la gloria y perfec- ción de Dios en su pueblo es lo último que se restau rará. Los tabernáculos de Moises y David fueron tiendas. El Arca con sus barras colocadas en su lugar en am-bos tabernáculos mostraba que ni el Arca ni el pueblo de Dios habia entrado plenamente en el réposo. Cuan- do el Arca fue colocada en el Templo de Salomón, las ba rras fueron quitadas. (1ªR.8:8) Esto significó para Israel que su vagar por el desierto y sus jornadas a la Tierra Prometida había concluído. Dios, al darles pose-sión de la tierra, había entrado a su reposo en ellos. Así acontecerá cuando Dios plenamente posea la tie-rra -la cual somos nosotros. Al entrar en una unión cor poral, tanto El como nosotros entraremos en el reposo completo y eterno. Aleluya.

PASADO CONMEMORATIVO PROFETICO

PERIODO DEL A. T.

INICIAL - Natural o físico CRISTO - como cabeza (perido del N.T.)

LA PASCUA Proteccion y libera- ción de la esclavitud de Egipto

MUERTE DE CRISTO“..nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.” 1ªCo.5:7. “..Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras.” 1ªCo. 15:3

PANES SIN LEVADURA

Echados de Egipto con panes sin levadura hacia el mar rojo

SEPULTURA DE CRISTO “Y que fue sepultado….confor me a las escrituras” 1ª Co. 15:4

PRIMICIAS Librados del Mar Rojo

RESURRECCIÓN DE CRISTO “…y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras” 1ª Co. 15:4

MOISES “subió” Ex. 24:13

IGLESIA PRIMITIVA“…subieron al aposento alto”

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PENTECOSTÉS Monte Sinaí Dios es-cribió sobre tablas de piedra Ex. 19:16 y 18 “y sonido de bocina muy fuerte”

“porque Jehová había descendido sobre él en fuego” “y todo el monte se estremecía en gran manera” Ex. 32:28 Murieron 3.000

Hch.1:13 Por medio del Espíri tu El escribe: sobre tablas de carne del corazón” 2ª Co.3:3 Hch. 2:2-4“y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espí-ritu les daba que hablasen” “y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asen tandose sobre cada uno

de ellos” “Y de repente vino del cielo un estruendo como de un vien to recio que soplba” Hch.3:41

3000 fueron salvos

TROMPETAS EL NUEVO TESTAMENTO NO HACE MENCIÓN

DIA DE LA EXPIACION

TABERNACULOS Dios les trae a reposo en la Tierra Pro- metida

PROFETICO SECUNDARIO- Espiritual o en el Espíritu PERSONAL - como miembro de su

Cuerpo (los últimos días)

DISPENSACIONALLa iglesia entera

NUESTRA JUSTIFICACION “Así que celebremos la fiesta...“ 1 Co.5:8 “Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios me diante nuestro Señor Jesucristo” Ro. 5:1

1517LuteranosDe nuestros pecados

NUESTRA SANTIFICACION (Simbolizada en el bautismo en agua)” ¿0 no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? Ro. 6:3

1524Menonitas y Bautistas La vieja naturaleza sepultada

COMO DIOS NOS PERFECCIONA EN SANTIDAD- “Porque la ley del Espì-

ritu de vida en Cristo Jesús me ha

1738Metodistas – Nazarenos La solución de Dios para vencer la naturaleza de pecado.

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librado de la ley del pecado y la muerte” Ro. 8:2 NUESTRO BAUTISMO EN EL ESPIRI TU SANTO-”Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel des pués de aquellos días, dice el Se-ñor, PONDRE MIS LEYES EN SUS CORAZONES, Y EN SUS MENTES LAS ESCRIBIRE, y seré su Dios y ellos serán mi pueblo. Porque en lengua de tartamudos, y en extra- ña lengua hablará a este pueblo, a los cuales él dijo: Este es el reposo; dad reposo al cansado; y este es el refrigerio; mas no quisieron

oir.” Is.28:11-12

1902 -1906 Derramamiento pentecostal. Poder para ser testigos de la nueva vida

NI EN LA HISTORIA DE LA IGLESIA DES DE ENTONCES, HA HABIDO UN CUMPLIMIENTO PLENO DE LAS TRES PARTES DE ESTE GRAN POS-

TRER PERIODO FESTIVO. Sin embargo, en los últimos años, “todo aquel que tiene oidos para oir”, ha estado respondiendo al sonido de la trompeta. Según los “tiempos y sazones” significa que las otras par tes del tabernáculo DEBEN CUMPLIR- SE EN LAS TRES FORMAS PROFETICAS,

PRONTA Y RAPIDA- MENTE GLORIA.

LAS SIETE FIESTAS DEL SEÑOR

Es interesante observar en Lv.23, que antes de hablar el Señor directamente acerca de las fiestas que Israel había de guardar, El dice, “...Las fiestas solemnes de Jehová.” (Verso 2) De nuevo en el verso 4: “Estas son las fiestas solemnes DE JEHOVA, las convocaciones santas, a las cuales convocaréis en sus tiempos”. Sie- te fiestas fueron convocadas durante los tres períodos festivos. A continuación se observará un breve resu-men con referencias:

I LA FIESTA DE LA PASCUA O LA FIESTA DE LOS PANES SIN LEVADURA

1 La Pascua (Ex.12:1-18; Lv.23:4-5; Dt.16:1-3). 2 Los panes sin levadura (Ex.12:17-20; 23:15; Lv.

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23:6-8). 3 Las primicias (Lv.23:10-14)

II 4. LA FIESTA DE PENTECOSTES O LA FIESTA DE LA SEMA- NAS, DE LA SIEGA O DE LOS PRIMEROS FRUTOS (Ex.23:16; Le. 23:15-21; Dt. 16:9-12; Hch. 2:1)

III. LA FIESTA DE LOS TABERNACULOS, LA FIESTA DE LAS ENRA MADAS O LA FIESTA DE LA RECOLECCION

5. Las trompetas Lv.23:24-25. 6. El día de la expiación Lv.16:23; 27-32. 7. La Fiesta de los Tabernáculos Ex.23:16; Lv.23:34 Dt 16:13-15.

Estas no eran fiestas según el entendimiento moderno de la palabra, sino “convocaciones santas”, para que “se presentara todo varón delante de Jehová el Señor.” (Ex.23:17) Esta era la situación según leemos en Hch., capítulo 2. “Cuando llegó el día (fiesta) de Pentecos-tés... judios, varones piadosos, de todas las naciones bajo el cielo” se hallaban en Jerusalén para participar. Ellos habían sido dispersados - alrededor del año 700 AC las diez tribus del norte habían sido llevados a Babi lonia. Se congregaban tres veces al año con gran sacri ficio personal de su parte Es muy importante que separnos “los tiempos y las sazones” Algunos piensan que es “el tiempo y la sa-zón” para que Jesús vuelva a la tierra, pero Hch.3:21 dice: “a quien de cierto es necesario que el cielo reciba (re-tenga) hasta LOS TIEMPOS de la restauración (resti- tución) DE TODAS LAS COSAS, de que habló Dios por bo-ca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo.” Aquello que ha sido escrito sobre las fiestas del Señor en Exodo, Levítico y Deuteronomio, etc., es gran parte de lo que los profetas hablaron ¿Cuantas personas reconocieron a Jesús cuando vino por primer vez? ¿Cuantos AHORA reconocen el hijo varón de Dios?

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Los fariseos en los días de Jesús, como muchos cris tianos hoy día, conocían la letra de la palabra. (Mt.23: 5) “...Pues ensanchan sus filacterias,” (ellos escríbian escrituras que habían sido memorizadas y las usaban como bandas sobre sus frentes), pero no conocieron la hora de su visitación. Conocimiento mental no es sufi-ciente sólo constituye una banda alrededor de la cabe-za. El problema con los seminarios es que básicamen- te enseñan lo que Dios ha dicho en el pasado. “…no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale (no salió) de la boca de Jehová vivirá el hombre.” Jesús llamó a los fariseos y saduceos “hipócritas”, porque podian discernir “el aspecto del cielo” mas no podian discernir “las señales de los tiempos”. (Mt.16:1-3) Jesús lloró sobre Jerusalén porque no conoció “el tiempo de su visitación”. (Lc.19:44) Porque algunos en la iglesia primitiva vendieron sus propiedades y pusie-ron el importe obtenido a los pies de los apóstoles. Ellos reconocieron “los tiempos y las sazones’ y “la hora de su visitación”. Cuando Dios les habló para que lo hicieran, no razonaron. La profesía de Jesús fue cumplida treinta y siete años después cuando Tito y sus ejércitos completamente destruyeron Jerusalén. Sea-mos como aquellos a quienes Pablo escribió: “Pero acerca de los tiempos y de las ocasiones, no tenéis ne cesidad, hermanos, de que yo os escriba.” (1ªTs.5:1) El grueso de lo que Dios esta haciendo hoy está ocul to en el Antiguo Testamento pero está siendo revelado en el Nuevo. El Antiguo Testamento es el Nuevo Testa mento encubierto. El Nuevo Testamento es el Antiguo Testamento revelado. Las fiestas del Señor son el ca-lendario de los tiempos de Dios encubiertos. Estas fies tas eran “santas convocaciones” y revelaban un progre sivo desarrollo agrícola. Las tres partes de la Pascua se desarrollaban durante la primavera cuando se cose-

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chaba la cebada. Nos hablan de nuestra (1) justifica ción, (2) santificación y (3) perfección en santidad por medio del poder de resurrección de su Espíritu. Pente-costés se celebraba cincuenta días, después, al Princi- pio del verano, cuando se cosechaba el trigo. La fiesta de los Tabernáculos se celebraba casi cuatro meses después en la culminación de la recogida de distintos frutos, como son lo higos, uvas, y aceitunas. Una de las razones por la cual es tan importante co- nocer “los tiempos y las ocasiones”, es que uno sólo sabe qué cosecha esperar si uno sabe qué estación es. También debemos saber qué cosecha Dios espera, según la estación que es. Tomemos como ejemplo, un granjero que, según las estaciones, espera recoger no sólo cebada, ni aun cebada y trigo, sino también todo otro fruto que la tierra pueda dar. ¿Podría descansar o podría estar satisfecho si sólo recogiera cebada, o aún cosechara únicamente cebada y trigo? Por supuesto que no. Es que Dios reposa plenamente, o es que está totalmente satisfecho en sólo recibir su cosecha de echada mediante nuestra justificación por la fe. O es que su reposo y satisfacción está cumplido en recibir su cosecha de trigo por medio de nuestro bautismo en el Espíritu Santo. Por supuesto que no. Aunque la cosecha de algunos frutos significa la preservación de vida, sin embargo no satisface ni realiza plenamente. Aunque la provisión de cada fruto trae reposo, es la provisión acumulada de todos los frutos lo que progresi sivamente hace que el granjero entre en completo repo so. Por lo tanto Dios también desea recibir la plenitud del FRUTO recogido, por medio de lo cual tanto El como nosotros entraremos en el prfecto reposo y satisfacci- ón. Esto significa permanecer o morar juntamente. ”Pemaneced en mí, yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en

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la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí”. (Jn.15:4) Todas las fiestas contienen, como mínimo, dos as-pectos: El pasado o conmemorativo, y lo profetico.

I. EL PASADO, o CONMEMORATIVO- señalando a lo que Dios hizo. Cuando Dios hace algo deja una señal o conme- morativa. 1. La Pascua - protección y liberacim de la esclavitud de Egipto. 2. Pentecostés - cincuenta días después. Dios dio la ley en el Monte Sinaí.3. Tabernáculos - posesión de la Tierra Prometida.

II. PROFETICO -señalando hacia aquello que Dios dijo que haría. 1. Cumplimiento profetico INICIAL- En el período del Nuevo Testamento. En Cristo la cabeza, en la iglesia primitiva.2. Cumplimiento profético SECUNDARIO-En nosotros per- sonalmente, como miembros de su Cuerpo.3. Cumplimiento profetico DISPENSACIONAL- En los últi- mos días. En la iglesia entera.

Las primeras cuatro fiestas de los dos primeros perío- dos festivos han hallado su cumplimiento en estas tres formas. (Vea el cuadro en las próxirnas páginas.) No existe en el Nuevo Testamento, ni en la historia de la iglesia, ningún cumplimiento pleno de los tres aspectos en el último y gran período festivo. No obstante, durante los últimos años, aquellos “que tienen oidos para oir”, han estado respondiendo al sonido de la trompeta. Si reconocemos “los tiempos y las ocasiones” nos dare mos cuenta que esto significa que los demás aspectos de la fiesta de los Tabernáculos deben ser cumplidos en las tres etapas proféticas, MUY PRONTO Y RAPIDAMEN-TE.

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LA PRIMERA FIESTA DEL SEÑOR LA FIESTA DE LA PASCUA

(Ex.12:1-14; Lv. 23:5; Dt.16:1-2)

Ex.12:2 dice: “Este mes os será principio de los meses; para vosotros será éste el primero en los meses del año.”

La primera fiesta de la Pascua, fue un cambio tan completo y dramático para Israel, que Dios instituyó su cele bración con un calendario nuevo. Inmediatamente antes de la celebración de la primera fiesta, los egipcios habían sido cubiertos con tinieblas y luego muerte, al ser quitados sus primogénitos. Los israelitas, por otra parte, habían sido cubiertos con luz. Ahora al ser cubiertos por la sangre, el ángel de la muerte PASARÍA, y serían cubiertos por la vida. El calendario agrícola de Israel comenzaba en Tishri (aproximadamente octubre) cuando, después de reco-ger todas las cosechas, Israel esperaba las lluvias tem pranas o primeras que prepararían la tierra para el nue vo año de siembra. Las lluvias continuaban con distintos grados de intensidad durante los meses de invier- no. Esto culminaba alrededor del mes de Nisan (aproxi madamente abril) con la lluvia tardía o de la siega, que prepararía las cosechas para su siega. En vez de servir a Faraón por medio de los crueles capataces, ahora servirían al Señor. Sin embargo, en- contrarían que un andar de fe no es una vida fácil. En vez de ajos y cebollas, con los cuales podían contar, ahora tendría que depender del Señor para su susten- to. Primeramente, tenían que creer que Dios haría llo-ver maná del cielo diariamente, y les daría agua de la roca durante todo su trayecto en el desierto Luego, al poseer la Tierra Prometida, que les daría la lluvia nece saría a su tiempo. (Dt.11:11-47) En Egipto, las cose-chas se regaban mediante el sistema de irrigación del Nilo, de manera, que aún en tiempos de relativa ham-

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bre en la tierra, siempre había una franja suficientemen te productiva a lo largo del río. Que diferente es depen-der totalmente de Dios para nuestra justificación, en vez de sacar las aguas de Egipto con nuestro propio esfuerzo. El calendario agrícola de Israel comenzaba y termi- naba con las LLUVIAS. Ya que Dios comenzaba a segar sus cosechas (por medio de siete experiencias espri- tuales progresivas, tipificadas en las siete fiestas), El dió a Israel un calendario nuevo que comenzaba y ter- minba con COSECHAS. El final del antiguo era el comien-zo del nuevo. El tipo de esta verdad puede observarse fácilmente si contamos desde octubre a abril, el perío- do del anterior calendario agrícola, basado en LLUVIAS. Son siete meses. Luego si contamos desde el mes de abril hasta octubre, el período del nuevo calendario sa-grado, basado en las COSECHAS, también son siete me-ses. Siete es el número de la perfección. “Justificados por la fe” (Ro.5:1) es el primero de los siete pasos a la perfección. “Las cosas viejas pasaron, he aquí, TODAS

SON HECHAS NUEVAS.” (2ª Co.5:17) El verso 3 dice: “... En el diez de este mes tómese ca-da uno un cordero...“ Este es el mismo día que aquel en que el Cordero de Dios se presentó a sí mismo para ser inspeccionado. “... un cordero por familia”. En Hch.16:30 el carcelero de Filipo preguntó a Pablo y a Silas, “... Señores, ¿que debo hacer para ser salvo?” Y ellos dijeron: “... Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.” En el Cordero no sólo tenemos una provisión para los de nuestra casa o familia natural, sino también para toda nuestra casa espiritu, alma y cuerpo - “Y el mismo Dios de paz os santifique por completo, y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensíble para la venida de nuestro Señor Jesúscristo” (1ª Tes.5:23)

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El verso 4 especifica que sería escogido “...confor-me al comer de cada hombre...“ Ef.2:8 dice: “Porque por gracia soís salvos por medio de la fe”. Algunos sienten que su pecado es demasiado grande pero 2ª Co.9:8 añade: “Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros TODA gracia, a fin de que, teniendo SIEMPRE en TODAS las cosas TODO lo suficiente, abun-déis para TODA BUENA OBRA.” El verso 5 dice: “El animal será sin defecto...“ Todo cordero pascual apuntaba a Jesús, “el Cordero de Dios que quita pecado del mundo.” Su vida era tan pura y resplandeciente, que el también vino como “la luz del mundo”. El curnplió la fiesta de Pascua casi 1500 años después para que los pecados de todo aquel que reci-biera su provisión fueran cubiertos. También, para que finalmente su vida llenase toda la tierra, y su luz la cu-briese en su totalidad. Jesús anduvo la senda, no sólo hacia, sino de la cruz, en tan perfecta fe y obediencia, que su vida y naturaleza no fueron contaminadas. El verso 6 dice a continuación: “Y lo guardaréis hasta día catorce de este mes.” El cordero simbólico era es-cogido el décimo día y luego guardado por cuatro días para seguridad de que era sin mancha ni defecto. Diez es el número de la prueba por medio de la Palabra de Dios. Una prueba es dada para demostrar que la subs- tancia efectiva (la Palabra de Dios) ha obrado en la per sona y que ahora está preparada para sibir a un nivel más alto. Cuatro nos habla de creación, catorce de sal-vación. “El Cordero de Dios que quita el pecado del mundo (creación)” pasó todas las pruebas. “...porque no hay otro nombre (naturaleza) bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser SALVOS.” (Hch. 4:12) Cuando Jesús se presentó para ser inspeccionado, “la gente que iba delante y la que iba detrás..“ Mt.21:9, realmente no sabian el propósito de su venida, aunque aclamaban: “¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el

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que viene en el nombre del Señor!” Puesto que en el próximo verso preguntan: “¿Quien es este?” Un estu-dio de las Escrituras demuestra que Jesús fue inspec-cionado por siete clases de gente en los cuatro días si-guientes. Son un tipo de las siete clases de gente (no siempre halladas exteriormente) que deben inspeccio-nar al Hijo de Dios dentro de nosotros, antes de que po damos identificarnos plenamente con El en su muerte.

1. Herodianos (Mt.22:16)

Un partido político judio que creía en las doctrinas de Herodes el Grande. Ellos se adherían a la sumisión al régimen romano y a la libertad de religion, tanto las paganas, como la Judaica si esto ayudaba a sus fines po líticos y objetivos seculares. Jesús dijo “Dad al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios”.

2. Saduceos (Mt. 22:33)

Negaban lo sobrenatural – Es aquello en nosotros que dice “si no lo veo y no lo entiendo, no lo creeré.”

3. Fariseos (Mt. 22:34)

Confesaban lo sobrenatural, pero negaban su aplica- ción personal y presente o con motivos errados. Es aquello en nosotros que puede creer en el poder de Dios para ayer, mañana o para otros.

4. Abogado (Mt. 22:35)

El Abogado era uno de los Fariseos. Es aquello que dice creer en la palabra del espíritu, pero no la confiesa, “...que Jesucristo HA VENIDO en carne”. Le gusta argu- mentar sobre cada punto coma de la letra de la Pala-bra.

5. Anas (Jn. 18:13)

El anterior Sumo Sacerdote. Es la religiosidad del ego,

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que apoya su autoridad en base a experiencias pesa-das

6. Caifas (Juan 18:13)

El Sumo Sacerdote en el juicio de Jesús. Es el hombre religioso interior, y el sistema religioso exterior.

7. Pilato (Jn. 18:28-38)

El Gobernador romano. Es la naturaleza de bestia en nosotros el sistema de bestia en el mundo.

Ninguna de estas siete clases de gente halló falta en Jesús. Pilato halló a Jesús “sin delito” tres veces. (Jn. 18:38; 19:4 y 19:6). Es por eso que Jesús fue sacrifi-cado como el Cordero Pascual. Pilato dijo: “...Tomadle vosotros, y crucificadle; PORQUE YO NO HALLO DELITO EN EL.”

LA SEGUNDA FIESTA DEL SEÑOR LA FIESTA DE LOS PANES SIN LEVADURA(Ex. 23:15-20; Le. 23:6-8; Dt. 16:3.4)

La fiesta de los panes sin levadura seguía a continua- ción de la primera parte de la Pascua. Se celebraba du rante Nisan, el primer mes del nuevo calendario, duran te siete dìas, desde el quince hasta el veintiuno. Quin ce nos habla de reposo espiritual. La décima quinta vez que nombre NOEMI se halla en el libro de Rut, ella dijo a Rut, “Hija mia” ¿no he de buscar hogar (REPOSO) para ti, para que te vaya bién? (Rt.3:1) El REPOSO viene por medio de Booz, el pariente que redime La palabra “pariente” se encuentra quince veces en el libro de Rut. Veintiuno nos habla de degradación - los frutos de la naturaleza de pecado. En Mt.23 hallamos veintiuna características que describen a los Fariseos. En 2ª Ti. 3:2-5, Pablo nos advierte de veintiuna cosas que los hombres harían en los últimos tiempos. Espiritualmen-te la fiesta de los panes sin levadura es la perfecta pro visión para librarnos de la NATURALEZA DE PECADO para

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que entremos en el REPOSO. La naturaleza de pecado no sólo implica no alcanzar “el premio del supremo lla-mamiento de Dios en Cristo Jesús,” sino ademas mani festar un comportamiento engañoso e hipócrita acerca del mismo. La levadura es aquel elemento que obra consisten- temente en masa hasta que toda ella se halla afectada por su influencia. Es símbolo adecuado para el peca-do, la enfermedad, la falsa doctrina, y practicas corrup tas. Durante siete días sólo se comia panes sin levadu ra, queriendo manifestar que todo aquello que ejercía una influencia inadeceuada o contaminada era aparta-do. (Ex.12:15) También el primer día de esta fiesta, to-da levadura era quitada de todo hogar israelita. Las mu jeres de Israel barrían, y aun minuciosamente busca- ban en todas sus CASAS, con velas, por si alguna miga- ja de pan con levadura se hubiera escapado. Sof.1:12 hace alusión a esto: “Acontecerá en aquel tiempo que yo escudriñare a Jerusalén con linterna, y castigaré a los hombres que reposan tranquilos como el vino asen tado, los cuales dicen en su corazón: Jehová ni hará bien ni hara mal. “ Esta es la actitud de aquellos que pi ensan que la justificación mediante la fe es lo único ne-cesario. Estos se apropian de la provisión de la Pas-cua, que trata con la culpa del pecado. Pero por medio de la fiesta de los panes sin levadura, Dios quiere que seamos separados del pecado. Esto se lleva a cabo qui tando toda levadura de todas las habitaciones de nues tra CASA – espiritu, alma y cuerpo.

LA ESCRITURA DA UNA SERIE DE EJEMPLOS DE LEVADURA, Y SUS SIGNIFICADOS:

1 La levadura de los Saduceos (Mr.16:1-12; Hch.23:8) La doctrina de los Saduceos - Incredulidad de lo sobrenatural. Negban la resurrección, y la existencia de ángeles y espíritus. Este tipo de doctrina, sin duda, pro ducirá angustia. “Si en esta vida solamente esperamos

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en Cristo, somos los más dignos de conmiseracion de todos los hombres”. (1ªCo.15:19) Los Saduceos fueron los antecesores de los que en estos últimos días, ten-drán “apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella...” Estas son las últimas dos cosas que Pablo men-ciona entre las veintiuna, contra las cuales advierte en 2ª Ti. 3:2-5

2 La levadura de los Fariseos (Mr. 23; Lc.12:1) No haciendo lo que dicen hacer. Hipocresía. Los Fa- riseos eran muy ortodoxos en su doctrina hasta tal pun to que Jesus aconsejo a sus discipulos que hicieran lo que ellos decían, pero no “imitaran sus obras”. En Mt. 23, donde Jesús menciona veintiuna caracteristicas de los Fariseos, descubrimos cuales son sus OBRAS - porqué deberíamos guardarnos de su doctrina. (1) ‘‘Di-cen y no hacen” (verso 3), y (2) “obran para ser vistos de los hombres” (verso 5). El Fariseo en nosotros pue-de ser bastante ortodoxo en exponer verbalmente el poder en la sangre de Jesús, la resurrección, sanida-des, milagros, etc., pero lo aplican a un futuro lejano o a un pasado distante. Aun más, el espíritu del Fariseo condenará a los que quieren andar ahora en esto. Es entonces que la levadura comienza sutilmente, a infil-trarse, y la teología ortodoxa se vuelve malicia e iniqui-dad. Y si aparentan andar en ello ahóra, es sólo “para ser visto de los hombres”

3. La levadura de Herodes (Mr.6:14-28; 8:15) Mundana y transigente 1ªTs.5:22 nos exhorta a “abs- tenernos de toda apariencia de maldad”, y Stg.1:8 di-ce: “Un hombre de doble ánimo es inconstante en to-dos sus caminos.”

4. La levadura de Corinto (1ª Co. 5) Sensualidad - las obras de la carne. La iglesia de los Corintios tenía muchos miembros que estaban justifica dos mediante la Pascua pero aún vivían en pecado.

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Tenían muchos dones espirituales, pero también había incesto y borracheras durante la communión. Mediante la Pascua nuestro espíritu se convierte en una nueva criatura, pero espiritus malos aún pueden ejercer su in fluencia a nivel del alma. Hay también muchas obras de la carne que no pueden ser echadas fuera. Tene-mos que caminar nuestra fiesta de los panes sin levadura. “Así que celebremos la fiesta, no con la vieja leva dura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.” (1ª Co. 5:8)

5. La levadura de Galacia (Gá. 5:1-9) Legalismo - Aquí Pablo compara la influencia persua siva y corrupta del Judaísmo en los Gálatas con la leva dura. “Estaba cerca la fiesta de los panes sin levadura, que se llama la pascua... Y (Jesús) les dijo: Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca.” (Lc.22:1,15) Jesús guardaba la vieja ceremonia para establecer la nueva. “quita lo primero, para establecer esto último.” (He.10:9) “Y tomó pan (sin levadura) y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. De iqual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi san-gre, que por vosotros se derrama.” (Lc.22:19,20). En 1ª Co.11, comenzando con el verso 20, el apóstol Pablo habla acerca de la cena del Señor. El contexto (versos 18 y 19) habla de DIVISIONES y HEREJIAS que se manifestaban en medio. Este es el resultado de “la malicia y maldad” mencionados en el capítulo 5. La trage-dia de comer y beber “indignamente” es beber conde- nación para nosotros. (verso 29) El próximo verso demuestra que esto da como resultado, debilidad, enfermedad y adormecimiento. La gloria de “discernir el cu-

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erpo del Señor”, es juzgarnos a nosotros mismos, para que no seamos juzgados. “Limpiaos pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois;...” (1ª Co.5:7) El cunplimiento de los tres aspectos de la pascua en Cristo, fueron (1) su muerte - la Pascua; (2) su sepultu ra - los Panes sin levadura; y (3) su resurrección -Las Primicias. “¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados su muerte?” (Ro. 6:3)

LA TERCERA FIESTA DEL SEÑOR LA FIESTA DE LAS PRIMICIAS

(Lv. 23:10-14)

Lv.23:10 dice: “Cuando hayáis entrado en la tierra…” Lo primero que vemos en las Escrituras concerniente a esta fiesta es que no puede ser celebrada en Egipto, pues no hay cosecha espiritual ahí. Como ya hemos di cho, todas las, fiestas eran fiestas de siega y de repo-so. La celebración de las distintas fiestas, indicaba la cosecha natural de diferentes granos y frutos. Con la provision progresiva de sucesivas cosechas, el Israel natural podía paulatinamente entrar en mayor reposo. Todo esto indica que nosotros (Dios con nosotros) entramos en un reposo completo. Es al “entrar en la tie-rra”. La tierra nos habla de nosotros, y de la simiente incorruptible de la Palabra de Dios. Para poseer completamente la tierra, la simiente debe primeramente po seernos a nosotros en plenitud. Cada fiesta y cada cosecha no eran solo una prome sa de las fiestas y cosechas que vendrían a continua-ciòn, sino que eran un medio de sustento hasta que lle gasen. La Fiesta de las Primicias durante la siega de la cebada (la provisión de las verdades fundamentales de la salvación mediante la muerte, sepultura y resurrec- ción de Jesús) era una promesa de la siega de la ceba da que vendría (de todos aquellos que se apropiarían

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de esa provisi6n). “...Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.” (1ªCo.15:23) La siega completa de la cebada, era además una promesa de la plenitud de las cosechas que vendrían: trigo (Pentecos tés), y distintos frutos (Tabernáculos). La Gavilla de las Primicias es la culminación de la Pascua. La primera. Pascua para Israel fue su protec- ción y liberación de la esclavitud de Egipto el día cator ce del primer mes de su nuevo calendario. El cumpli-miento inicial de ésto, es, “Que Cristo murió por nuestros pecados, CONFORME A LAS ESCRITURAS.” (1ªCo.15:3). Esto quiere decir que el tubo que cumplir este tipo, in-cluyendo muerte, sepultura y resurrección. El verso 11 agrega, que debían “mecer la gavilla delante de Jehová.... EL DIA SIGUIENTE DEL DIA DE REPOSO la mecerá”. Ha habido mucha controversia con respecto a la fecha de esta fiesta porque el día de reposo al que hace referencia, no está claramente especificado. Varios días de reposo se hallan involucrados, tanto en el contexto de la Escritura como en el pasar del tiempo. Anteriormente en los versos 7 y 8, la Escritura de-clara que en los días primero y séptimo de la Fiesta de los Panes sin Levadura, “ningún trabajo de siervos ha-réis”. Ambos días son “días de reposo” especiales. También habían días de reposo normales y semana-les. Los Fariseos interpretaban este día de reposo como el primer día de los Panes sin Levadura, de modo que “el día siguiente” sería el día dieciseis de Nisan. El Qumran, que era una comunidad poco conocida de los días Jesús, pensaban que “el día de reposo” mencionado era el septimo día de los Panes sin Levadura. Los Saduceos mantenían que “el día siguiente al día de reposo” debia ser interpretado literalmente y por lo tanto sería domingo. Para ellos Pentecostés (que se

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celebraba siete días después), siempre caía en domingo. Algunos no se inclinan a la interpretación de los Sa- duceos porque significa que el día de Pentecostés seria movible (no un día fijo), mientras que las fechas de las demás fiestas eran fijas. Sin embargo, yo he considerado que el Señor podría haber permitido ésto, como una característica del Espíritu Santo. Jn.3:8 dice que, “El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; más ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu.” Puede ser que esto tal vez pueda aplicarse a la fecha de Pentecostés, que no se sabe “de donde viene, ni a dónde va”. El punto esencial que debemos comprender es que Pen- tecostés era cincuenta días después de mecer las ga-villas de las primicias. En este sentido la interpretación de los Saduceos parecería correcta. En el año en que Jesús fue crucificado, el día déci mo cuatro de Nisan fue el cuarto día de la semana, es-to es miércoles. (Y ya que “la tarde y la mañana” ha-cen un día, “Miércoles” sería de las 6 de la tarde del dìa martes hasta las 6 de la tarde del miércoles. Para los judíos “la noche” era desde las 6 de la tarde hasta las 6 de la mañana, y el día era desde las 6 de la ma- ñana hasta las 6 de la tarde). El día décimo quinto ca- yó en el quinto día de la semana, o sea “Jueves” que era desde las 6 de la tarde del miércoles hasta las 6 de la tarde del jueves. Este era el primer día de los Panes sin Levadura, de manera que era un “día de reposo” es pecial, o lo que a veces se llama “un día destacado”. El día decimo sexto cayó el sexto día de la semana, esto es “Viernes”, que era desde las 6 de la tarde del jueves, hasta las 6 de la tarde del viernes. El día décimo séptimo cayó el séptimo día de la semana, esto es sa-bado, que era desde las 6 de la tarde del viernes hasta las 6 de la tarde del sabado. El primer día de la sema-

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na que llamanos “Domingo”, comenzaba a las 6 de la tarde del sábado. Algunos tipos y sombras de la muerte, sepultura y re surrección de Jesús indican que murió el día catorce del primer mes del calendario nuevo. Otros enfatisan que fue sepultado por “tres días y tres noches”, aún otros indican que resucitó el día décimo séptimo. Al considerar la variedad de tipos y sombras en conjunto, se obtiene el siguiente cuadro compuesto:

1. El Arca resposó el séptimo mes, el día décimo sépti- mo del mes sobre el monte Ararat. (Gn.8:4) Esto fue como novecientos años antes que el Señor instituyera las fiestas de Israel, y como ya hemos considerado cambiase el mes séptimo en el mes primero, y vice versa.2. Isaac, el primogénito natural de Abraham fue llevado por tres días, en una peregrinación para que Dios “se proveyese un cordero para el holocausto”. (Gn.22:4,8) Isaac como la primicia natural fue “mecido ante el Se-ñor”, no sólo como una promesa del resto de la cose-cha de grano que seguiría (la simiente natural de Abra- ham), sino también como la cosecha de los frutos (la plenitud de la simiente espiritual de Abraham).3. Israel dejo Egipto el día catorce del primer mes del calendario nuevo, para efectuar un viaje de tres “días” por el desierto, “para ofrecer sacrificios a Jehová”. (Ex. 3:18; 12:2, 6,29-31) Es evidente que al tercer día, esto es el décimo séptimo, que cruzaron el Mar Rojo para entrar en el desierto.4. Jesús dió “la señal del profeta Jonás. Porque COMO

estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, ASI estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches.” (Mt.12:39,40) “...y estuvo Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches.” (Jon.1:17).

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Al comienzo de este estudio, vimos que Israel úni- camente podia celebrar la fiesta cuando hubiera “entra do a la tierra”. Nosotros “en tramos a la tierra” posicio- nalmente cuando cruzamos el Mar Rojo, y experimentalmente cuando cruzamos el Jordán. Al aceptar la pro visión de la muerte, sepultura, y resurrección de Jesús representados en las tres partes de la Pascua, posicio- nalmente “entramos a la tierra” Al negarnos a nosotros mismos y tomar nuestra cruz, siguindole El diariamen-te, “entramos a la tierra” en experiencia. Aunque el via je les llevó cuarenta años, Israel cruzó el Jordán hacia Canaán en el mismo período del año en que cruzó el Mar Rojo saliendo de Egipto Aunque el viaje habrá lle-vado al Cuerpo de Cristo cuarenta jubileos (2000 años) cruzamos el Jordán en el mismo periodo del año, ha-blando espiritualmente, en que Jesús cruzó el Mar Rojo. La secuencia de hechos y fechas en que Israel no sólo cruzó el Mar Rojo al salir de Egipto, sino cruzó el Jordán para poseer su tierra, tiene particular significado cuando se comparan con la última mitad de la semana de Pasión de Cristo. Ya hemos considerado las fechas en que Israel salió de Egipto y probablemente cruzó el Mar Rojo. Ahora comparemos los hechos y las fechas del cruce del Jordan con la muerte, sepultura y resurreccíón de Cristo.

ISRAEL CRUZANDO EL JORDAN:

“Y el pueblo subió deñ Jordan el día diez del mes pri mero, y acamparon en Gilgal, al lado oriental de Jeri- có.” (Jos. 4:19) “Y los hijos de Israel acamparon en Gilgal, y celebra ron la pascua a los catorce días del mes, por la tarde, en los llanos de Jericó. Al otro día de la pascua (Fiesta de los Panes sin Levadura el día quince) comieron del fruto de la tierra, los panes sin levadura, y en el mismo día espigas nuevas tostadas. Y el maná cesó el día si-

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guiente (dieciseis) desde que comenzaron a comer del fruto de la tierra; y los hijos de Israel nunca más tuvieron mana, sino que comieron de los frutos de la tierra de Canaán aquel año. (Vida y naturaleza de resurrec- ción desde el día diecisiete en adelante). (Jos.5:10-12)

MUERTE, SEPULTURA Y RESURRECCION DE JESÚS:

“El siguiente día, grandes multitudes que habían venido a la fiesta, al oir que Jesús venia a Jerusalén, toma ron ramas de palmera y salieron a recibirle, y clamaban: ¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor, el Rey de Israel! (Jn.12:12,13) La entrada triun- fal fue el décimo día del primer mes. “Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí…“(Miércoles, el dia catorce) “Y José de Arimatea) quitándolo, lo envolvió (el cuer po de Jesús) en una sábana y lo puso en un sepulcro abierto en una peña, en el cual aún no se había puesto a nadie. Era día de la preparación (Miércoles el día catorce - la Pascua), y estaba por comenzar el día de reposo (el primer día de los panes sin levadura - Jueves, el décimo quinto día). Y las mujeres que habían venido con él desde Galilea, siguieron también, y vieron el se-pulcro, y cómo fue puesto su cuerpo. (Antes de las 6 de la tarde, el miércoles, día catorce). Y vueltas, prepararon especias aromáticas y unguentos; (Viernes el decimo sexto dia) y descansaron el día de resposo, (día de re-poso normal, el Sábado ese año fue el decimo septimo día), conforme al mandamiento. El primer día de la se-mana (Domingo el décimo octavo día), muy de mañana, vinieron al sepulcro, trayendo las especies aromáticas que HABIAN preparado (viernes, el decimo sexto dia), y algu nas otras mujeres con ellas.” (Lc.23:33 y 53 hasta 24:1) Mucho significado espiritual y simbólico se pierde porque contamos el tiempo y observamos los días se- gún el sistema romano. Ellos nombraron los días de la

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semana para honrar cuerpos celestiales que ellos adoraban. MARTES, en honor al dios de la guerra. VIERNES

en honor de la diosa Venus. LUNES en honor de la luna. JUEVES en honor al dios Jupiter. Desde la antiguedad, las civilizaciones paganas cele braban un festival de primavera por las mismas fechas del año en que ya casi 3500 años antes Dios en su tra to con el Israel natural instituyó la Pascua. (Pascua, Pa nes sin Levadura, la Gavilla de Primicias) Los Asirios adoraban su diosa Istah algunas veces pronunciado “Estah” de donde piuviene la palabra inglesa “Easter” que significa “Pascua”. La consideraban la diosa ma-dre de los cielos, consorte de Baal, tanto madre como esposa de Nimrod, endiosado. La adoraban como la fuente de toda vida y fertilidad. A medida que la iglesia primitiva, durante el Imperio Romano, progresivamente fue perdiendo la verdad y la revelación que había tenido durante la primera centu-ria, se vió poco a poco más involucrado en prácticas paganas. La iglesia romana “cristianizó” muchas cele-braciones, como la “Pascua”, para obtener conversos. Los romanos paganos ya tenían “cultos al alba” para adorar al sol, especialmente el primer día de la semana más cercano al festival de la primavera o de la fertilidad. De manera que bajo la cubierta de la resurreción del Señor, el sol, y la reina Istah han sido adorados. Al- gunos puede ser que se pregunten porqué la palabra “Easter” (pascua en inglés) se halla en la versión autori zada de la Biblia. (Hch.12:4) La palabra griega “pas- cha” del hebreo “pesach”, se traduce correctamente “pascua”, las demás veintiocho veces que se utiliza en el Nuevo Testamento. En la Versión Revisada está correctamente traducido como “pascua”, en la cita men- cionada. ¿De dónde provino el “viernes santo”? Para poder celebrar la Pascua el Domingo, los padres de la iglesia

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tuvieron que suponer que la resurrección de Jesús se llevó a cabo el primer día de la semana. Por supuesto, que la Palabra en ninguna manera apo ya ésto. El ángel no dijo a las mujeres que de mañana temprano fueran a la tumba: “Está resucitando”, sino “Ha resucitado”. Puesto que Jesús resucitó al tercer día (o como dicen algunas Escrituras, “después de tres días”) ellos han supuesto que debe de haber sido cruci ficado y sepultado el Viernes. Al dar “la señal del Profeta Jonás”. Jesús mismo nos dijo cuanto tiempo estaría sepultado. “Tres días y tres noches” es obviamente setenta y dos horas. Aunque una persona razone que existen tres días entre Vier-nes y Domingo, NO HAY FORMA DE DESCUBRIR TRES NOCHES.

Si Jesús fue sepultado a las 6 de la tarde, o sea el FINAL del cuarto día que llamamos miércoles, luego per maneciendo “tres días y tres noches en el corazón de la tierra”. El hubiera resucitado a las 6 de la tarde o al final del séptimo día que llamamos sábado, que tam-bién es el final de la semana tipo. Puesto que la Palabra es espíritu, nos habla en mu-chos niveles. Dn.9:27 dice; “Y por OTRA SEMANA confir-mará el pacto con muchos; A LA MITAD DE LAS SEMANA

hará cesar el sacrificio y la ofrenda...“ Primeramente, la “semana” podría considerarse “Una” de las “setenta se manas” mencionadas en el verso 24. “Una semana” también puede entenderse como una semana milenaria, estando nosotros ahora al final del sexto día milenario. El cuarto día (esto es Miércoles en la semana ti-po) es la mitad de la semana - hay tres días antes y después. Jesús vino y sufrió al final del cuarto día milenario de esta semana milenaria. “A la mitad...de la semana milenaria. El hizo “cesar el sacrificio y la ofren-da.” Si fue crucificado el miercoles, entonces también hizo lo mísmo “a la mitad” de la semana normal.

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El tiempo - CUANTO DURÓ la sepultura y resurrección de Jesús - es muy importante, porque la señal de Jo-nás tenía que ser cumplida. El tiempo - CUANDO, y cuan to tiempo fue sepultado Jesús, hasta su resurrección - es muy importante, porque la señal debe ser cumplida en su Cuerpo. Desde el Día de Pentecostés - el comienzo del quin- to día milenario - la Iglesia como su Cuerpo, ha estado “en el corazún de la tierra”. Durante los últimos 2000 años del quinto y sexto días milenarios (que también son los primeros dos días de tres), Cristo por medio de su Cuerpo ha estado echando fuera demonios y ha-ciendo sanidades. (Lc.13:33) “El tercer día (seré perfec cionado) termino mi obra. Sin embargo, es necesario que hoy y mañana y pasado mañana sigo mi camino.. .“ Así como Jesús fue sepultado y perfeccionado duran te los últimos tres días y noches de la semana simbo- lica asimismo. Su Cuerpo es sepultado “en el corazón de la tierra” para ser perfecionado en los últimos tres noches y días de la semana milenaria. Después del mi lenio, “Y muy de mañana, el primer día de la semana vieron a un joven SENTADO AL LADO DERECHO, cubierto de una larga ropa blanca,” una vez más anunciará a la mujer (creación) que viene “al sepulcro, ya salido el sol “(el hijo de muchos miembros)... ha resucitado, no está aquí; mirad el lugar en donde le pusieron. PERO ID, DECID...” Aleluya.

LA CUARTA FIESTA DEL SENOR LA FIESTA DE PENTECOSTES o LA FIESTA DE LAS

SEMANAS o LA FIESTA DE LA SIEGA o LA FIESTA DE LAS PRIMICIAS

(Ex. 23:16; Lv. 23:15-21; Dt.16:9-12; Hch.2:1)

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Pentecostés es la palabra griega para “cincuenta”. Lv. 23:15 y 16 nos dicen porque “pentecostés – cincuenta” fue el nombre principal de la fiesta: “...Y contaréis des-de el día que sigue al día de reposo...siete semanas cumplidas serán.” Pentecostés es un mayor reposo – después de una SEMANA DE DIAS de reposo. Es por ésto que también se le llama la “la fiesta de las Sema-nas”.(Dt.16:9,10) Además de ser llamada la Fiesta de las Semanas, la Fiesta de Pentecostés también era la fiesta de Siega (Ex.23:16, y la Fiesta de las Primicias. (Nm.28:26) En Israel el GRANO era segado entre el me-ver de las Gavillas de las Primicias, y cincuenta días mas tarde en Pentecostés, la Fiesta de la Siega o de las Primicias. (Primeramente venía la cosecha de la ce bada, y el último grano era el trigo.) Puesto que el me-cer de las Gavillas de Primicias nos habla de la cebada y las otras cosechas de GRANO que vendrian, Pentecos tés, siendo la Fiesta de las pimicias, nos habla de la plenitud del FRUTO que vendría. Ya hemos visto que Jesús resucitó de los muertos en la Fiesta de las Gavillas de Primicias. Entonces se ofrecía una sola ofrenda “de harina fina mezclada con aceite” esto nos habla del Señor y de los que resucita-ron con El (1ª Co.15: 20; Mt.27:52,53, Ef.4:8). ”..se pre senta vivo con muchas pruebas indubitables, apare- ciendoseles durante cuarenta días y hablándoles acer ca del reino de Dios.” (Hch.1:3) Parte de ésto, como ve mos en los próximos versículos, era que “no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Pa-dre, la cual, les dijo, oísteis de mí. Porque Juan cierta-mente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días.” Fueron diez días después (haciendo un total de cincuenta después de la resurrección de Jesús). “Cuando llegó el día de Pentecostés...” que “...fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras

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lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.” (Hch.2:1,4) Puesto que había un período de cincuenta días desde el mecer de las Gavillas de Primicias hasta la primera cosecha (grano); asimismo hubo un período de tiempo semejante desde la resurrección de Jesús, hasta la primera cosecha de la Era de la Iglesia cuan-do 3000 almas fueron segadas. (Hch.2:41) Vemos en Lv.23:16 que la Fiesta de Pentecostés re quería una ofrenda de “...nuevo grano a Jehová.” El Se ñor había venido a los discípulos en una manera nue-va. Ellos habían “recibido” el Espíritu del Señor antes (Jn.20:22), de manera que fueron “vivificados (recibieron vida) juntamente con El”. Ahora le conocieron de manera nueva - como él que bautiza en el Espíritu San to. El verso 17 continúa diciendo que esta ofrenda se-ría de “dos panes”. Dos es el número de testimonio - el testimonio es que el uno, habla o manifiesta, al otro. Ya que ambos hablan o testifican la misma cosa, son uno. Mt.18:16 dice, “... para que en boca de dos o tres testigos conste toda palabra.” Hch.1:8 dice, “pero reci-biréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis TESTIGOS...” La palabra griega traducida “testigos“ es “martus”, de donde proviene nuestra palabra “martir”. El proposito del poder del Es-píritu Santo no es sólo para HACER grandes señales y milagros, sino para “SER TESTIGOS”, o SER esa señal y milagro. Es el poder testificado en el Cuerpo al derra-mar nuestras vidas hasta la muerte (no necesariamen-te fisicas), así Cristo nuestra Cabeza tenía el mismo testimonio que su Padre. Cuando el testimonio doble de la Cabeza y del Cuerpo sean exactamente iguales, seremos uno en experiencia, y la creación habrá teni-nido una palabra sobre la que pueda ser establecida. Los “dos panes de la ofrenda mecida” eran “de dos décimas de efa”. Una décima parte a un diezmo, nos habla de las primicias. Por medio del bautismo del Es-

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píritu Santo recibimos “las primicias del Espíritu” (Ro. 8:23), “que es las arras de nuestra herencia”. (Ef.1:14) “Dos décimas de efa” nuevamente representa el testimonio doble, o porción doble. Es la cantidad de maná que el Pueblo de Israel juntaba el sexto día. Ex.16:22 dice: “En el sexto día recogieron DOBLE porción de comida, DOS GOMERES PARA CADA UNO…” El verso 36 expli-ca que “...un gomer es la décima parte de un, efa”. Dos gomeres serían entonces, “dos décimas de efa”. Los “dos panes para ofrenda mecida, que serán de dos décimas de efa”, eran hechos de “flor de harina”. La harina finamente molida nos habla del camino de la cruz por el cual nos guía el Epíritu. El testimonio o do-ble porción de aquellps profundos tratos es igual en AB-

MOS PANES. Como fue con El, será con nosotros. La can tidad y el tipo de harina – finamente molida era tam bién igual en CADA PAN. “Porque por un solo Espíritu fui mos todos bautizados en un cuerpo sean judíos o grie-gos (dos en uno), sean esclavos o libres (de nuevo, dos en uno); y a todos se nos dio a beber de un mismo espiritu.” (1ª Co.12:13). Cuando seamos realmente llenos del Espìritu, co-menzaremos a experimentar la lucha en la carne. El propósito del bautismo (sepultura) EN el Espíritu Santo, es de despojarnos del hombre de la carne. El día de Pentecostés habían 120 discípulos reunidos, y el núme mero 12 habla del “fin de toda carne”. Leemos en Gn. 6:3: “Y dijo Jehová, no contendera mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años.” Los “dos panes” tenían que ser cocidos “con levadura”. Desde después del Día de Pentecostés hasta ahora, el Cuerpo de Cristo nunca se ha visto verdaderamente libre de la carnálidad y división. Dios sabia exactamente lo que la Iglesia en su conjunto sería a tra vés de su larga historia e hizo un tipo que la reflejase.

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Un ejemplo de levaduras miembros individuales es que despues del Bautismo del Espìritu Santo uno se hace más susceptible a fuerzas espirituales. Es por esto que el Bautismo en Fuego. Aunque el calor hará que la in-fluencia de la levadura se manifieste, el fuego anulará su efecto.

LA QUINTA FIESTA DEL SEÑOR LA FIESTA DE LAS TROMPETAS

(Lv. 23:24,25)

La Fiesta de las Trompetas era en realidad la primera parte de los Tabernáculos. Comenzaba el primer día del séptimo mes del nuevo calendario. (Sagrado) El dé cimo día del mismo mes era el Día de la Expiación. La plenitud de los Tabernáculos era consecuentemente celebrada, al morar Israel en enramadas durante siete días, desde el quince al día veintiuno Las Fiestas de las Tompetas y de la Expiación eran en verdad la pre- paración para la gran Fiesta de los Tabernáculos en la que culminaban todas las fiestas de Israel. Ya se ha hecho breve referencia a los dos calendarios de Israel en la primera parte de este estudio, bajo lo dicho en la Fiesta de la Pascua. En la primera parte del cap.10 de Nm., hallamos que Jehová habló a Moi- ses, diciendo: Hazte DOS TROMPETAS DE PLATA; de obra de martillo las harás...“ La voz del Espiritu de Dios por medio de nosotros, como miembros del Cuerpo de Cris to, habiendonos apropiado de su proposito redentor, debería ser igual a la provision de ellos por medio de Cristo nuestra cabeza. Somos de una sola pieza. “Por-que así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miem-bros – pero todos los miembros del cuerpo, siendo mu-chos, son un solo cuerpo, así también Cristo. Porque por un solo Espiritu fuimos todos bautizados en un Cu-erpo... y a to dos se nos dio a beber de UN MISMO ESPI-

RITU.” (1ª Co. 12:12,13) En Nm.10:10 hallamos que en-tre los propósitos hacer sonar la trompeta estaba la ce-

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lebración o convocación de la fiesta. “Y en el día de vuestra alegría, y en vuestras solemnidades, y en los principios de vuestros meses, tocareis las trompetas… Un mayor entendimiento de los dos calendarios de Is-rael, es un requisito para comprender el uso de las dos trompetas.

Los dos calendarios que Israel guardaba eran:

1. EL AGRÍCOLA o CIVIL - Que comenzaba aproximadamente en lo que denominamos octubre

2. EL SAGRADO - Que comenzaba con la Pascua, aproxi- madamete en lo que llamamos abril. Estos calendarios estaban basados en las lluvias y cosechas. Es necesario lo primero para tener lo segundo. Lo postrero era provocado por el primero. Ambos calen darios son ciclos de siete meses dentro de los doce meses del año. (Siete es el número de perfección y do ce nos habla de la plenitud de los propósitos de Dios, que se desarrollan por medio del orden divino.) Sin em bargo, el PRIMER mes de un ciclo es el ÚLTIMO mes del otro ciclo, y viceversa. En Ap.1:10-11 Juan dice: “Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detras de mí una gran voz COMO DE TROMPETA, que decía; Yo soy el Alfa y la Omega, el PRIMERO y el ULTIMO...“ Jesús dijo, así los primeros serán postreros, y los postreros, primeros...“ (Mt. 20:16) En Israel los meses de verano son muy calurosos y secos. El período de siete meses (generalmente invier- no) desde octubre hasta abril era el periodo de lluvias. Contrariamente, el período de siete meses (general-mente verano), desde abril hasta octubre era el perio-do de la siega. Bajo el antiguo calendario agrícola-civil, depués de los meses calurosos y secos del verano, Is-rael esperaba las lluvias que comenzaban en octubre, comenzando así el año agrícola. Estas primeras lluvias que preparaban la tierra para ser sembrada, eran de-

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nominadas las lluvias tempranas o de sementera. Las úlltimas lluvias que venian en abril, tenían que mante-ner las cosechas durante los meses de calor hasta la seiga. Eran denominadas las lluvias tardías, o lluvias de siega. Era en el tiempo de las lluvias tardías que Dios implanto la Pascua, y dio a Israel un nuevo calen-dario sagrado cuando dijo: “Este mes os será principio de meses; para vosotros será éste el primero en los meses del año.” (Ex.12:4). La trompeta y la lluvia ambos estaban relacionados con el AIRE y ambos nos hablan, como así también el AIRE, de niveles más altos en el Espiritu. Sólo a medida que la voz de trompeta de Dios SUENA por el AIRE (el Es píritu Santo), pueden los “hijos de desobedienccia” SA-

LIR de debajo del “Principe de la potestad del AIRE (el espíritu de este mundo presente)”. (Ef.2:2) Sólo al CA-

ER la lluvia de los niveles más altos del AIRE (El Espíritu Santo), puede la simiente en la tierra CRECER a madu-rez. La metafora de la trompeta enfatiza la VOZ del Es-píritu, mientras que la de la lluvia enfatiza sus caracte-rísticas de DESCENDER, PERMANECER, REAVIVAR SUSTENTAR

Y MADURAR. Consideremos ambas analogías, mediante el principio de que “los postreros serán primeros, y los primeros postreros”, por medio del tipo del síptimo mes convirtiendose en primero, y viceversa.

LA TROMPETA

Vimos en Ap.1:10 y 11, que Juan estaba primera-mente “en Espíritu” y luego (en último lugar) oyó “una gran voz, como de trompeta”. Sin embargo, en Ap. 4:1 y 2 el orden es invertido.

Primeramente oye la trompeta, y luego (en último lu-gar). Se halla “en el Espíritu”. Si no estamos en el Espí ritu, no oiremos la Trompeta -la voz del Espíritu de Dios. Por otra parte, si no oimos la trompeta - la voz

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del Espíritu de Dios - no permaneceremos en el Espíritu. Se ha dicho mucho acerca de la “última trompeta”. 1ªCo.15:51,52). En Apocalipsis capítulos ocho hasta el once, se mencionan siete trompetas. ¿Hemos dicho la primera trompeta? Si oimos la última, seremos prime-ros; pero si ni aún oimos la primera, ciertamente sere-mos ultimos. Sólo vivimos a medida que oimos la Palabra que PROCEDE de Dios. (Dt.8:3; Mt. 4:4) LA LLUVIA TEMPRANA Y TARDIA El profeta Joel habla en términos semejantes en el capítulo 2:23: “Vosotros también, hijos de Sion, alegra-os y gozaos en Jehová vuestro Dios; porque os ha da-do la primera lluvia a su tiempo, hará descender sobre vosotros lluvia temprana (primera lluvia en octubre pa-ra la siembra en el primer mes del calendario agrícola-civil y tardía (última lluvia en abril para la siega en el primer mes del calendario sacro), COMO AL PRINCIPIO”.

(Dice la versión inglesa. “EN EL PRIMER MES”). Como ya hemos visto, esto es posible, puesto que el “primer mes” del calendario agrícola-civil, es el séptimo mes del calendiamio sacro. Sin embargo, “el primer mes” del ca lendario sacro, es también el septimo mes del calenda rio agrícola-civil. La trompeta es un instrumento de viento o aíre. El quinto día milenario de esta semana redentora fue inau gurada con una experiencia celestial - “estaban TODOS

unánimes juntos”, acompañado con un sonido celestial “Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio” - UN SONIDO DE TROMPETA. La trompeta dió mi sonido certero. Un hombre como Pedro que estaba inseguro de su postura delante del Señor, se volvió va liente y lleno de autoridad. Mayor porción de la Palabra del Espíritu de Dios fue escrita en esos setenta años,que en ningún otro periodo similar. Cuando sonaban las trompetas en la Fiesta de las trompetas esto indicaba dos cosas:

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1. El primer mes del calendario agrícola-civil - La siega había sido completada y había pasado. En la parábola de la cizaña, Jesús dijo, “la siega es el fin del siglo. (Griego “aion”- era) Mt.13:39.

2. El séptimo mes, o final del año sagrado (religioso).Cuando sonaba la trompeta el primer día del primer mes del calendario sagrado -era la Pascua- un nuevo comienzo. También era el final de las lluvias. Cuando la trompeta sonaba en la Fiesta de las Trompetas, el primer día del séptimo mes, era un anticipo del Día de la Expiación, seguido por la Fiesta de los Tabernácu-los. También era casi el final de la plenitud de la siega, sin embargo era un nuevo comienzo. El final de la era de la Iglesia, o de los propósitos redentores de Dios co mo hoy los distinguimos, durante esta Semana Milena-ria será el principio de un nuevo y aún más glorioso trato de Dios.

LA SEXTA FIESTA DEL SEÑOR LA FIESTA DEL DIA DE LA EXPIACION

(Lv. 23:27-32; Lv.16)

Hemos visto cómo las tres partes de la Pascua (la Pascua, los Panes sin Levadura, y las Primicias) fueron exactamente y perfectamente cumplidas, en la mu-erte, sepultura y resurrección de Cristo. También como la Fiesta de Pentecostés fue cumplida cincuenta días después, cuando el Epiritu Santo fue derramado, se-gún recuenta Hch.2. Está claro desde el punto de vista de la Escritura e históricamente que estas fiestas se ha llan cumplidas en los creyentes individuales, como tam bién en la iglesia como un conjunto. (Vea el cuadro). Asimismo, las tres partes de los Tabernáculos (las Trompetas, el Día de la Expiación y los TaberncuIos) deben ser plenamente y perfectamente cumplidas. La Fiesta de las Trompetas ya ha pasado a la historia. Comenzaron a sonar de forma forma particular en

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1948. Podernos ver esto (1) tanto naturalmente y (2) espiritualmente:

1. En ese año, Israel fue proclamado nuevamente un Estado autónomo. Desde entonces la trompeta ha esta do sonando para todos los Judíos, para que regresen a su tierra.

2. En ese mismo año, un grupo de cristianos en Cana- da sintieron ayunar y esperar en el Señor de una ma-nera especial. Estaban hartos de la muerte y religiosi-dad de la iglesia Pentecostal. Comenzaron a oir la trompeta del Espíritu de Dios hablando acera de una restauración -de que el Cuerpo de Cristo se uniría por medio del orden de Dios de ministerios y dones espiri-tuales (Ef.4; 1ªCo.12), en alabanza y adoración. Desde entonces la trompeta ha estado sonando para todo ju-dío espiritual para que regrese a su tierra. La obra del Espíritu desde entonces– los ministerios de sanidad y milagros de los años cincuenta, el mover carismático de los años sesenta y este presente mover del Espiri-tu- ha tenido este objetivo.

¿Que es nuestra “tierra”? La perfección de Dios, que significa estar absolutamente libre de la naturaleza de pecado (Expiación), y por tanto nuevamente en com-pleta unión con El (Tabernáculos). El Día de la Expia ción se celebraba decimo día del septimo mes del calendario sagrado. El decimo día del primer mes, Israel había tomado “un cordero según las familias de los padres, un cordero por familia”. (Ex.12:3) Después de ser cuidadosamente inspeccionado y guardado duran-te cuatro días para asegurarse de que era sin defecto se mataba para hacer expiación. A causa de la sangre que cubría postes y el dintel de las puertas, el ángel de la muerte PASARÍA. Así ocurre con nosotros al apropiar nos de la muerte y sepultura de Jesús, nuestro Corde ro Pascual. Ahora, siete meses más tarde, la provisión

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de Dios para perfeccionar a Su pueblo, se simboliza en la realidad la erradicación de sus pecados. Hay muchas escrituras que hablan de la experiencia de la perfección que Dios tiene para nosotros. Lv. l6:29,30; Mt.5:48; Jn.17:21-23; Ro.6:4-7,11; 8:2; Gá. 5:24 1ªJn.3:3, 6, 7 y 9. Este último versículo dice: “To- do aquel que es nacido de Dios, no pràctica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no pue de pecar, porque es nacido de Dios.” Puesto que nues tra experiencia parece ser tan contraria a la realidad de la Palabra de Dios, tratamos de excusarnos o probar, que Dios de alguna manera no quiso decir lo que dijo. La única explicación escritural es que no hemos “naci-do de nuevo” en la plena expresión de la experiencia de regeneración Aunque nuestro nuevo nacimiento por el Espíritu es una experiencia genuina, no ha desarro llado su madurez. Hemos sido reproducidos según la semejanza de Dios como son la simiente producida por una flor o el huevo producido por un pájaro. Esa se milla o ese huevo, contienen potencialmente todos los atributos y características de la flor y el pájaro que los produjo. No obstante, cada uno tiene que desarrollarse a la plena expresión de aquello que le dió a luz. Así, debemos permitir que la plenitud de la naturaleza de Cristo se desarrolle en nosotros. Levítico, capítulo 16 nos da muchos detalles de lo que ocurrió el Día de la Expiación. Primeramente el Sumo Sacerdote debía lavar su carne con agua. Enton ces era ungido y vestido con sus santas vestiduras de lino. (Verso 4) Aunque hemos sido lavados en la sangre del Cordero, debemos continuar el lavacro “por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo”. No podemos vestir nada que tipifi-que el esfuerzo humano, pues la primera parte del verso en Tit.3:5 dice: “...no por obras de justicia que no sotros hubiéramos hecho, sino por su MISERICORDIA,

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nos salvó…” La justicia que es por la fe, y su misericor-dia, nos han traido todo el camino hasta traspasar el velo y llegar al PROPICIATORIO. La experiecia del Día de la Expiación, es el próximo gran acontecimiento para toda la iglesia. El Sumo Sacerdote ofrecía “...un becerro para expia ción, y un carnero para holocausto.” El primero era ofre cido para hacer “reconciliación por sí y por su casa”. (Versos 3 y 6) El becerro era el Sacrificio más costoso y el sacerdote tenía que ofrecerlo por sí mismo. Es una ofrenda por el pecado y también un holocausto -una completa dedicación a Dios. (Vea también Lv.4:3-12) En Ro.12:1 el apostol Pablo nos exhorta: “Así que, hermanos, os ruego por las MISERICORDIAS de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.” Des- pués de hacer expiación por sí y por su casa, Aaron tomaba del pueblo de Israel, dos machos cabrios. (Lv.16:5-10,15) Eran presentados al Señor a la puerta del tabernáculo y echando suerte, uno era escogido para el Señor, y el otro para Azazel. El macho cabrío de Jehová era ofrecido como ofrenda por el pecado. Aaron ponía sus manos sobre la cabeza de Azazel, y lo enviaba al desierto. Los otros sacerdotes que normalmente ministraban en el Lugar Santo tenían que salir al Atrio de Afuera. (Lv.16:17) Era entonces que el Altar de Oro era llevado trás el velo. En las demás citas se halla delante del ve lo, pero en He.9:3,4 se halla con el arca detrás del velo. El contexto de esta escritura (verso 7) es que el Sumo Sacerdote iba detras del velo el Día de la Expia ción. Un incensiario con carbones encendidos del Altar de Bronce era llevado hasta el Altar del lncienso. El Su mo Sacerdote entonces entraba con sus manos llenas de incienso, que colocaba sobre el fuego, creando una nube de incienso. (versos 12 y 13) Sólo a medida que

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la nube de incienso cubría el Propiciatorio podía aplicarse la sangre. El Viaje del Sumo Sacerdote desde el Altar de Bron- ce hasta el Propiciatorio (que es nuestro viaje en Cris to) transcurría de Este a Oeste. Primeramente tomaba la sangre del becerro y rociaba “...el propiciatorio al lado oriental”. (verso 14) El Sal.103:12 dice: “Cuanto es-tá lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones.” La sangre del macho cabrío del Señor también era rociada sobre el Propiciatorio (verso 15), y sobre los cuernos del Altar del Incienso. (Ex. 30:10) Despues del hablar del mobiliario de los Lugares Santos, el capitulo 9 de He. continúa diciendo que Cris to es el “mejor sacrificio”, y “el mediador de un mejor pacto”. Para que nuestros pecados Sean quitados, no tenemos que esperar cada año el Día de la Expiación, “…pero ahora, en la consumación de los siglos, se pre sento una vez para siempre por el sacrificio de si mismo para quitar de en medio el pecado.” (Verso 26) Así como ha habido una experiencia individual e his-tórica en las otras cinco fiestas, el Día de la Expiación también ha de ser cumplida.

LA SEPTIMA FIESTA DEL SEÑOR LA FIESTA DE LOS TABERNÁCULOS

(Ex.23:16; Lv.23:34-44: Dt.16:13.15; 1ªR.8; IICr.5-7; Esd.3; Neh.8: Hag. 2:1-9; Jn.7)

1. LOS TABERNÀCULOS - LA FIESTA DE SU VENIDA

En el cap. 7 de Jn., encontramos la historia de cuan-do Jesús apareció en la Fiesta de los Tabernáculos. Este episodio tiene significante importancia para la igle sia, pues es un tipo de su venida final de esta era. Los hermanos de Jesús querían que él se revelase durante la fiesta, pero vemos en el verso 10 que el fue “como en secreto”. La Escritura no enseña un arrebatamiento

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en secreto, ni que seremos llevados secretamente. Sin embargo, enseña una manifestación secreta de El mis mo -secreta porque tantos de sus hermanos ahora, co-mo entonces, no “creen” realmente en El. Ha habido mucha controversia acerca de la venida del Señor. Mucha de la cual ha sido debida a la inter-pretación carnal de las escrituras relativas a ella. Ha habido un énfasis general sobre los aspectos finales y futuros, sin la revelación de su venida en y por medio de su Cuerpo, mientras tanto. El debe manifestarse EN

un pueblo, antes de poder venir PARA un pueblo. En la lengua griega hay dos palabras esenciales que se traduce como “venida”: “parousia - estar al lado, presencia”, y “erchomai -venir”. La primera se traduce como “venida veinte veces, la última sólo seis veces. La ma-yor parte de la Escritura sobre “la venida del Señor” uti liza la palabra “parousia estar al lado, presencia”. 1ªJn. 3:2 dice: “Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha MANIFESTADO lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando El se MANIFIESTE, seremos seme jantes a él, porque le veremos como El ES.” Muchas personas, como los discípulos en el camino a Emaús, esperan ver a Jesús tal cual ERA. Aunque El VINO a ello, él no se MANIFESTO a ellos mientras hablaba con ellos, y caminaron juntos casi siete millas. De hecho, aunque El VINO y entró en la casa a invitación de ellos y participó de su alimento, aún no se “manifestó”, a ellos. Así fue cuando Jesús visito la Fiesta de Taber- náculos “como en secreto”. Al enseñar en el templo los últimos dias de la fiesta, él había VENIDO a todos ellos, pero sólo se MANIFESTO a los creyeron en El. Finalmente se “manifesto” a los de Emaús, al “partir el pan” (la Palabra del ESPIRITU) Lc.24:35 Y así, “En el último y gran de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mi y be ba. El que cree en mí, como dice la Escritura de su in-

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terior correrán ríos de agua viva. Esto dijo del ESPIRITU…” (Jn. 7:37-39)

2. LOS TABERNÁCULOS - LA FIESTA DE LAS ENRAMADAS

En Lv.23:39-42 vemos que los Israelitas celebraban la Fiesta de los Tabernáculos morando siete días en enramadas en las calles de Jerusalén. Estas viviendas temporales eran hechas de ramas de cuatro clases de árboles. (Verso 40)

a. “ramas con fruto de árbol hermoso”

“hermoso” -Hebreo “hadar”- honor, hermosura, ma- jestad. Algunos interpretan que estos son árboles fruta les o ramas cargadas profusamente, y así lo traducen. Sept - “fruto maduro de árboles”. Peshitta - “frutos de hermosos árboles, citron”. Berkeley - “el producto de hermosos árboles”. El fruto y jugo del fruto sobre las ra mas de las enramadas simbolizan un sustento pasa-jero, mientras estamos en este tabernáculo terrenal. (La mayoría de los frutos tienen fibras carnosas junto con su jugo.)

b. “ramas de palmeras”

La palmera nos habla de que toda necesidad será satisfecha y de la victoria completa. En realidad, bebida y comida, es todo lo que necesitamos, además del vestido. Mt.6:25 nos dice: “no os afanés” por estas co-sas. 1ªTi.6:8 dice: “Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto.” Es interesante observar que no se menciona la vivienda. No es que Dios no tenga interés en nuestro lugar de morada. El quiere asegurarse que es en El. No hay nada malo en tener un vivienda pasajera ni en tener alguna otra cosa, siem pre que ninguna de estas cosas pasajeras nos posean. La evidencia de que de este mundo “nos posee”, es cuando no lo consideramos un sacrificio el darlo todo. He visto en algunas partes del mundo, que la palmera puede proveer todo lo necesario para un modo de vida

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sencillo: alimento, bebida vestido, vivienda, y aún trans porte -en forma de canoas. En los días del Nuevo Testamento y de las primeras civilizaciones, la palmera era señal de victoria y alaban za. Cuando Jesús entró en Jerusalén, cuatro días an-tes de su crucifixión, “...tomaron ramas de palmera y salieron a recibirle, y clamaban: ¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor, el Rey de Israel! (Jn.12:13) Ap.7:9 habla de “una gran multitud… vesti dos de ropas blancas, y con palmas en las manos”. Salieron de “la gran tribulación” y alaban a Dios y al Cordero.

c. “ramas de árboles frondosos”

Arboles frondosos y vigorosos, nos hablan de vida, salud y fuerza que provienen del Señor. “... y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones.” (Ap.22:2) Un árbol frondoso también permite que uno sea fortalecido al reposar bajo su sombra.

d. “sauces de los arroyos” Hemos de ser flexibles como el sauce, doblegables y dóciles ante el agua del arroyo. Los brotes del sauce son tiernos y crecen rápidamente. Es interesante considerar el paralelo entre los cuatro tipos de árboles utilizados en los Tabernáculos para construir las enramadas y las cuatro características del hombre que se deleita meditar en la ley de Jéhová “día y noche”. (Sal.1:2 y 3) “Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas (sauces arroyo), que da su fruto en su tiempo (ramas con fruto de árboles hermosos), y su hoja no cae (ramas de árboles frondosos) y todo lo que hace, prosperara, (ramas de palmeras).”

3. LOS TABERNÁCULOS - LA FIESTA DE GLORIA

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En Ex.40:17 hallamos que el Tabernáculo de Moises fue eregido justo para guardar la segunda Pascua. El verso 35 dice: “Y no podía Moisés entrar en el taber-náculo de reunión, porque la nube estaba sobre él, y la GLORIA de Jehová lo llenaba.” Por otra parte, la dedica-ción del templo de Solomón fue en “...la fiesta solemne del mes séptimo.” (Tabernáculos), pero igualmente “... los sacerdotes no podían estar allí para ministrar, por causa de la nube; porque la GLORIA de Jehová habia llenado la casa de Dios.” (2ª Cron. 5:3,14). Mediante la Pascua comenzamos nuestro viaje espí ritual hasta llegar a ser llenos de la gloria de Dios. Sig- nifica seguir la nube “de gloria en gloria” hasta que la glo-ria de Dios nos cubra plenamente. Tanto el Tabernácu-lo como el templo, aunque gloriosos, eran sólo tipos y sombras del verdadero templo que somos nosotros. “...juntamente edificados para morada de Dios en el Es piritu.” (Ef.2:22) Dios hablo por medio del profeta Ha-geo: “La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera. . .“ (Hag.2:9)

4. LOS TABERNÁCULOS - LA FIESTA DE LA COSECHA

Ex.23:16 se refiere a los Tabernáculos como “...la fi-esta de la cosecha a la salida del año, cuando hayas recogido los frutos de labores del campo.” Ya hemos visto al principio de estos estudios como las fiestas re-velaban las estaciones progresivas del año agricola de Israel. La Pascua - la cosecha de la cebada en la pri-mavera; Pentecostés –la cosecha del trigo cincuenta días más tarde al principio del verano; los Tabernácu-los – cuatro meses más tarde, después de las cose-chas frutos del verano, representa la RECOGIDA de TO-

DAS las cosechas. Al culminar todas estas cósechas en Israel, los graneros y los lagares rebosaban. Esto indica TREMENDA COSECHA que el Señor de la siega espera recoger de su campo (el mundo) al culminar este siglo.

5. LOS TABERNACULOS - LA FIESTA DEL GOZO

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Dt.16:13 dice: “La fiesta solemne de los tabernácu los harás por siete días, cuando hayas hecho la cosecha de tu era y de tu lagar”. En este contexto, continúa diciendo en el próximo versículo, y te ALEGRARAS en tus fiestas solemnes. Jl.2:24 promete que “las eras se lle- narán de trigo, y los lagares rebosarán de vino y aceite.” trigo nos habla de la Palabra, el vino del GOZO, y el aceite del Espíritu Santo. La Palabra nos trae la fortale za y la vida de GOZO, que deberá ser aceite para otros. Trigo, uvas y aceitunas eran recogidos en ese orden. Habrá abundancia de estos tres en la gran cosecha. En los días de Nehemías, “...hallaron escrito en la ley que Jehová había mandado por mano de Moisés, que habitasen los hijos de Israel en tabernáculos en la fiesta solemne del mes séptimo”. Ellos guardaron la tiesta “y hubo ALEGRIA MUY GRANDE”. (Neh. 8:14-17). Después de la dedicación del templo en la Fiesta de los Tabernaculos, Salomón “...envió al pueblo a sus ho gares, ALEGRES Y GOZOSOS de corazón por los benefi-cios os que Jehová había hecho...” (2ª Cron.7:9,10)

6. LOS TABERNÁCULOS - LA FIESTA DEL REPOSO

Dios mostró a israel mediante todos los días de repo so que El dió, fueran días de reposo normales, días fes tivos, o días de reposo especiales, que El quería que su pueblo progresivamente entrase en completo y per-fecto reposo. Para enfatizar esta verdad, encontramos, en tipo, en la Palabra de Dios SIETE tipos básicos de REPOSO:

1. Días de reposo especiales, como por ejemplo primer y el último día de la Fiesta de los Panes sin Levadura, que ya hemos mencionado. (Lv. 23:7,8)

2. El día de reposo normal que consistía en una sema-na de DIAS. (Ex. 20:8-11)

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3. La Fiesta de Pentecostés, que también era llamada la Fiesta de las Semanas, porque era celebrada el día después de una semana de SEMANAS. (Lv. 23:15, 16)

4. Una semana de MESES: Al celebrar la Pascua en el séptimo mes del calendario agrícola-civil; y los Tabernáculos en el séptimo mes del calendario sagra-do. Puesto que la Pascua y los Tabernáculos ambos consistían de tres partes, el séptimo mes de ambos calendarios tenía más días de reposo que ningún otro mes.

5. Una semana de AÑOS “Seis años sembrarás tu tierra, y recogerás su cosecha; mas el séptimo año la dejarás libre. (Reposarás)” (Ex.23:10,11)

6. El año despues de SIETE semanas de AÑOS - el año del Jubileo. (Lv. 25:9, 10)

7. El septimo dia de la Semana Milenaria. (Ap.20:2-7) 7. LOS TABERNÁCULOS- LA FIESTA DE LA RESTAURACIÓN

Hemos visto como la dedicación del templo de Sa-lomón en la Fiesta de los Tabernáculos es un tipo de la gloria de la iglesia. De manera similar, la restauración del templo bajo Esdras y Nehemias es un tipo de la RESTAURACIÓN DE LA IGLESIA EN ESTOS ULTIMOS, DIAS. En los primeros dos capítulos de Esdras, tenemos la lista de aquellos que regresan de Babilonia para partici par en la restauración. Lo primero que vemos en el capitulo 3 es que “…Cuando llegó el mes séptimo...se jun tó el pueblo como UN SOLO HOMBRE en Jerusalén. “La participación en orden, de cada miembro del Cuerpo de Cristo como “un sólo hombre” es una de las claves de la restauración.

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“Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo. Por-que por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo...” (1ª Co. 12:12,13) Continuamos leyendo en el capitulo tres de Esdras, que “Celebraron asimismo la fiesta solemne de los ta-bernáculos, como está escrito. Desde el primer día del mes séptimo comenzaron a ofrecer holocaustos a Je-hová; pero los cimientos del templo de Jehová no se habian echado todavia.” (versos 4, 6) Sabemos que el fundamento es Jesucristo, “Porque nadie puede poner otro fundamento que el está puesto, el cual es Jesucris to”. (1ªCo.3:11) Sin embargo, tambien vemos en las Es crituras que Dios usa ministerios apostolicos, para poner los fundamentos. El apóstol Pablo dice en el verso anterior: “…yo puse el fundamento y otro edifica encima.” Otra clave para la restauracion, es que el fundamen to sea puesto por los ministerios de apostoles, profe-tas, evangelistas, pastores y maestros. (Ef.4:11) Son especialmente los ministerios de apostoles profetas, los que constituyen el fundamento. Siguiendo en Es- dras, capítulo 3, al colocarse los fundamentos, dice, en el verso 11: “...y todo el pueblo aclamaba con gran júbi lo, alabando a Jehová porque a echaban los cimientos de la casa de Jehová.” “La llave de la casa de David” (Is.22:22) es otro as-pecto importante de la restauración del “taberncuIo de David caído”. (Am.9:11; Hch.15:16) Básicamente, esto está relacionado con el gobierno, el regir por medio de la alabanza y adoración espiritual. La primera parte de Esd.3:11 citada anteriormente, dice, “Y cantaban ala-bando y dando gracias a Jehová.” Cuando David trajo el Arca, él levantó el Tabernácu- lo de David en Sion. Sion habla de la iglesia (He.12:22,

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23) alabando y adorando. (Sal.48:1,2; Sal.137) El Tabernáculo de Moisés puso los pasos fundamentales del acercamiento del hombre a la presencia de Dios. Se caracterizaba por su ceremonia y ritos como tantas iglesias de hoy celebran. Contrariamente el Tabernácu lo de David, que carecía de forma, se caracterizaba por el acercamiento a la presencia del Señor mediante gran gozo. La alabanza y la adoración allí eran acom- pañadas con cánticos y aclamaciones, palmas y ma-nos extendidas danza. Todo esto era acompañado con muchos instrumentos distintos. De manera que el Se- ñor está restaurando la verdadera adoración a su igle-sia. (Jn.4:23, 1ªCo.14:15, 26; Ef.5:18, 19; Col. 3:16) Nehemias también habla (escribiendo sobre el mis-mo tema que hemos considerado en Esdras) de como “se juntó todo el pueblo como un solo hombre...“ (Neh. 8:1) No obstante, agrega: “...en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas...” La puerta de la Agu-as era la única puerta que no necesitaba restauración. Esto nos habla del espíritu de la Palabra, que nunca pasará. Sin embargo, el entendimiento de esto necesi-ta ser restaurado y aún revelado en mayor medida. Continuamos leyendo, “Y el sacerdote Esdras trajo la ley delante de la congregación, así de hombre como de mujeres y de todos los que podian entender, el primer dia del mes séptimo. Y leyó en el libro delante de la plaza, que esta delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el medio día, en presencia de hombres y mujeres y de todos los que podían entender; y los oí- dos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley.” (versos 2 y 3) “El primer día del mes séptimo” era por supuesto la Fiesta de las Trompetas. Hoy tam- bién, los que tienen “oidos para oir”, la voz de trompeta del Espíritu, oyen “con entendimiento.” Ese día el Señor dio, junto con Esdras y Nehemias, hombres de entre los Levitas que “hacían entender al

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pueblo la ley” (verso 7) Y así ocurre hoy, por medio de ministerios ungidos. Como resultado, “el pueblo estaba atento en su lugar.”

Durante los últimos 450 años, desde los días de Mar tín Lutero, Dios ha estado restaurando verdad a la igle-sia. Aquellos de nosotros que vivimos al final de esta era, tenemos el privilegio, por la gracia de Dios, de te-ner mucho entendimiento. ¿Pero qué de aquellos “que no tienen nada preparado?”(Verso 10) La única mane-ra en que podemos enviar “porciones” a ellos es co-miendo “grosuras” y bebiendo “vino, dulce.” Ya hemos visto en la última parte de Nehemias, capítulo 8 (bajo la epígrafe Los Tabernáculos - La Fies ta del Gozo) que hallaron que debían habitar los hijos de Israel en tabernáculos en la fiesta solomne del mes séptimo. Así tomaron ramas de diferentes árboles fron dosos y sauces, y edificaron enramadas para morar juntos. Nosotros somos las ramas - y cada miembro del Cuerpo de Cristo es una rama diferente. El Señor está restaurando la vida corporal, que es la única vida del Cuerpo. Debemos estar dispuestos a dejar nuestras moradas permanentes de individualismo y tradi-ción. Solo al ser cortados de nuestra fuente y recursos terrenales hallaremos en las ramas de nuestros herma nos la plenitud de la naturaleza de Cristo.

LAS SIETE CARTAS A LAS SIETE IGLESIAS (Ap.2:1-6)

En Ap.1:10, Juan dice: “Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor.” El “día del Señor” es básicamente la culminación de la semana del Señor. 2ª P.3:8 nos dice: “...que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.” Mr.2:27 dice: “...El día de repo so fue hecho por causa del hombre, y no el hombre por causa del día de reposo.” Todos los días de repo-so, incluyendo el reposo milenario, fueron hechos para

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nosotros, el hombre del Espíritu -el hombre “en el Es-píritu.” Jesús siguió diciendo en el verso 28: “Por tanto, el Hijo del Hombre es Señor aun del día de reposo. ”Cómo estaremos “en el Espíritu en el día del Señor”, o ¿cómo reinaremos con Cristo en el día de reposo milenario? Al estar “en el Espíritu”, y al entrar en el re-poso en situaciones de menor envergadura, somos Se ñor de esos días de reposo. Al continuar “en el Espí ritu” y reposando en situaciones mayores, también seremos Señor de estos días de reposo. Así, al permanecer “en el Espíritu”, reposando en El durante la Tri-bulación, seremos Señor con El en el Día de Reposo Milenario. Pr.4:18 dice: “Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el dia es perfecto.” Sin embargo para los impíos será un “día de tinieblas y de oscuridad, día nube y de sombra...” (Jl.2:2) Mientras que unos no pueden Ver la luz de Dios, para otros es tan clara que hasta la pueden OIR. Sal.19:1-3 dice: “Los cielos declaran la gloria de Dios... un día (tiempo de luz) emite palabra a otro día… no hay lenguaje, ni palabras, ni es oída su voz...” Al con-trario, unos no pueden ni OIR la voz del Espiritu, mientras que otros aún la VEN. Ap.1:12 dice que Juan se volvio “PARA VER la voz” que le hablaba. La voz del Espíritu es “el Alfa y la Omega, el primero y el último,” - realmente sin principio ni fin. A Juan se le dijo que escribiese en un libro y lo enviase” a las siete iglesias que están en Asia: a Efeso, Esmirna, Perga- mo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea. (verso 11) Hallamos las siete cartas a estas siete iglesias, en los capítulos dos y tres. Cada una de las siete cartas está escrita a una iglesia en particular. No obstante, en cada caso, parte del mensaje es: “El que tene oído, oi ga lo que el Espíritu dice a las iglesias” (plural) La “igle sia -griego- ekklesia”, los llamados, consite en aquellos

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de todos los tiempos que han tenido oídos para oir. Son aquellos que continuamente salen - del diablo, de las obras de la carne y del mundo – los vencedores. Siete veces con estos siete mensajes a las siete iglesias, el Espíritu dice: “AL QUE VENCIERE... ”

LA PRIMERA CARTA - IGLESIA DE EFESO (Ap. 2:1-6)

Caída de Adán (4003AC) hasta la trasposición de Enoc (3016AC) Ap.2:1

“Escribe al ángel de la iglesia en Efeso: El que tiene las siete estrellas en su diestra, el que anda en medio de los siete candeleros de oro, dice esto: Este primer día milenario comenzó con Adán y con-cluyó con Enoc, quien fue el séptimo desde Adán. Efe so significa “codiciable o el propósito”. Al principio, el único propòsito de Adán fue andar con el que andaba “en medio de los siete candeleros”. “Medio” nos habla de centro; una cercana relación de involucramiento; el origen fuerza y de la vida. Vemos en Gn. 2:9 que “el árbol de la vida estaba en medio del huerto”. Adán sólo tenía un propósito - que Dios fuese el origen de su vida y el centro de su actividad. Cuando Eva vió que el árbol del conocimiento del bien y del mal era “árbol codiciable para alcanzar sabiduría” ella tomo y dio asimismo a su esposo. Por desobediencia perdieron su propósito. Dios no le prohibió a Adán, antes de la caida, que to mase del fruto del árbol. El árbol de la vida era su vida. Dios no quería que Adán y Eva participaran del árbol de la vida en su naturaleza caida. Hubieran tenido una muerte eterna - su redención no hubiera sido posible. Fue la misericordia de Dios que los echó del huerto, po niendo “querubines, y una espada encendida que se re volvía por todos lados, para guardar el camino del árbol la vida.” En Ap.2:2 y 3 Efeso es alabada por diez cosas. Diez es el número de prueba por medio de la ley y los man-

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damientos de Dios. El propósito de la prueba es de-mostrar que la esencia básica (la palabra de Dios) ha obrado en nosotros y que estamos preparados para pa sar a un nivel más alto. Como la iglesia en Efeso, Adan y Eva pasaron la prueba en todas las áreas excepto dejaron su, “primer amor”. (Ap.2:4) Adán y Eva ya no tenían sólo un propósito y deseo. Su pecado fue que no dieron en el blanco. Al responder a la pregunta, “¿Cuál es gran madamiento?” Jesús respondió: “Ama-rás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el pimero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amaras a tu projimo como a ti mismo.” (Mt.22:36-39) Si no da-mos en el blanco, entonces realmente no importa cuán cerca hemos dado. Para nosotros, como para Adán y Eva, “el blanco” es “el premio del supremo llamamiento de Dios en Cris to Jesús.” (Fil.3:14) Hay sólo una fuente y cubierta de amor, vida y luz, “el árbol en medio del huerto”. No po-demos participar del árbol de la vida -el Espíritu de Dios, y del arbol del conocimiento del bien y del mal- la mente natural, al mismo tiempo. El cuerpo sólo puede estar “lleno de luz” o “lleno de tinieblas”. “Por lo tanto si la luz que en ti hay es tinieblas, cuan grande no son esas tinieblas”. Ningún hombre puede servir a dos se-ñores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o es timará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas. (Mt.6:22-24) Puesto que Adán dejó “su primer amor”-su ojo no era bueno- se halló fuera del huerto o del cuerpo de luz. El dejó el origen y la cubierta de la plenitud de luz y vida, a cambio de la oscuridad del pecado, la enfermedad, la tristeza y la muerte. Ni aún pudo vivir un ‘día”. Leemos en Gn.2:17: “pues el día que comieres de él CIERTAMENTE MORIRAS”. Espiritualmente murió inmediatamente. La plena mani- festación es esa muerte fue a la edad de 930 años–

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setenta años antes del día milenario. Setenta es el nú-mero del hombre justo. Adán no alcanzó esa justicia, ni tampoco la alcanza la naturaleza adámica. Por medio del derramiento de la sangre, Dios hizo provisón para que la descendencia de Adán fuera tras puesta por medio de la fé, como Enoc lo fue, al final del primer “día”. “Por la fé Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes de que fuese traspuesto, tuvo testimonio de ha ber agradado a Dios.” (Tan sólo tenia un deseo, una meta) “Pero sin fé es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.” (He. 11:5-6) El debe ser nuestro “PRIMER (y ULTIMO, nuestro UNICO) amor”. Y todo nuestro DESEO debe ser fijado en El. El Espíritu de Dios habló a los de Efeso, como El ha ce a todos los de la descendencia caida de Adán: “Re-cuerda, por tanto de donde has caido, y arrepiéntete,.. ..pues, sino vendré pronto a ti y quitaré tu candelero de su lugar...“ (Ap.2:5)

LA SEGUNDA CARTA - LA IGLESIA EN ESMIRNA (Ap. 2:8-10)

Enos (3016AC) hasta Abraham (1995AC) Ap.2:8-10 “Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna”: Esmirna significa “mirra” que nos habla de sufrimiento. Una de las cosas escritas a Esmirna figura en el verso 10: “no temas en nada lo que vas a padecer.” El segundo día milenario de esta Semana Redento ra, desde el tiempo de Enoc hasta Abraham, es básica mente los 950 años que vivió Noé. (2947 - 1997AC) En el libro de He.11:7 leemos, “por la fé Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aun no se ve-ían con TEMOR preparó el arca en que su casa se salva se y por esa fé condenó al mundo, y fue hecho here-dero de la justicia que viene por la fé.” Esto no fue un

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temor de las cosas que tendria que sufrir, sino un temor reve-rente, o respeto, no temiendo lo que el hombre nos pueda hacer, sino temiendo desagradar al Señor. El Sal.56:3 y 4 dice: “En el día que temo, yo en ti confío. En Dios alabaré su Palabra, en Dios he confiado; no temeré ¿Que pueda hacerme el hombre?.

El hombre sufría “a causa de la tierra que Jehová mal dijo” (Gn.5:29) La tierra que el hombre labraba no era fructífera de por sí. La primera parte de este versículo dice: “y llamó (Lamec) su nombre Noé, diciendo éste nos aliviará de nuestras obras y del trabajo de nuestras manos...“ El nombre de Noé -descanso, reposo- es lo opuesto al sufrimiento. La naturaleza simbolizada en su nombre es el antidoto. Dios sufría, porque la tierra que El labró (el hombre) no producía fruto voluntariamente, “y le dolió en su co-razón”. “Y vió Jehavá que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pen-samientos del corazón de ellos era de continuo sola-mente el mal.” (Gn.6:5-6) El verso 8 continúa diciendo: “pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehova”. Noé recibió gracia como nosotros, no solo para ser salvo, sino para padecer. Es una caracterìstica de la gracia, que solo se recibe cuan do, y en la medida en que se necesita. Es una caracte- rística del temor que su mayor tormento es la anticipa ción de las cosas que podamos padecer. Aunque de hecho, no sufrimos literalmente aquello que anticipaba mos, en el tormento de la espera hemos sufrido de he-cho más, ya que la gracia nunca es dada para lo que no se requiere de nosotros. El Sal.37:7 nos aconseja “a guadar silencio ante Jehová (reposar)”. Ya que Noé significa reposo y el arca habla del Cuepo del Señor, podemos ver esa exhortación como una paráfrasis de “Noe en el arca”. Vemos del contexto la Escritura que ese tipo de reposo involucra (verso 1) “no te impacten-

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tes” (verso 3) “confía”, (verso 4) “deléitate”, (verso 5) “encomienda”. Aunque la iglesia en Esmirna, como Noé padeció mu chas cosas el Señor pudo decir “Yo conozco tus obras y tu tribulación….y la blasfemia de los que dicen ser judios, y no lo son sino sinagoga de Satanás” Las obras de Noé fueron “que él preparó un arca para la salvación de su casa”. Noé no fue salvo de la tribula- ción, sino que fue salvo a través de ella. La blasfemia que Noé padeció fue las muchas cosas que despreciti-vamente la gente seguramente dijo para ridiculizar. Es- tas cosas son dichas por los que “dicen ser judios, y no lo son”. “Sino que es judío el que lo es en lo interior... en espíritu, no en letra; la alabanza del cual no viene de los hombres, sino de Dios.” (Ro.2:29) Los que bus-can la alabanza de los hombres, más que la de Dios, temen al en vez de a Dios. Aunque los contemporáne-os de Noé no hayan negado la existencia de Dios, negaron su existencia en ellos, no haciendo su voluntad. Estos son de “la sinagoga de Satanas”. Dice en Gn.6:22, y 7:5, “Y Noé lo hizo, conforme a todo lo que Dios le mandó.” Después que la tribulación y la blasfemia que había experimentado, hubo acábado, Noé edificó un altar y ofreció sacrificios a Jehová. Gn.8:21 dice: “y percibió Jehová olor grato (amplificado “un olor de reposo”). Del pacto que Dios hizo con Noé también podemos ver que fue un olor de vida. En algunos paises del Oriente (tal como India donde yo crecí), se quema mirra cuando la gente muere para disipar el olor o pestilencia de la muerte. “Palabra fiel es esta: si somos muertos con El, también viviremos con El; si SUFRIMOS, también REI-

NAREMOS con El; si le negaremos, El también nos ne-gará ” (2ª Ti. 2:11-12) Y Dios bendijo a Noé y a sus hijos, y le dijo, más vo-sotros fructificad, y multiplicaos, procread abundante-

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mente en la tierra, y el TEMOR y el MIEDO de vosotros es tarán sobre todo, animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos. “Porque Noe no temió las cosas que te-nia que padecer, sino solamente temió a Jehová, Dios le dió dominio sobre toda la creación”

LA TERCERA CARTA — LA IGLESIA DE PERGAMO (Ap. 2:1-16)

Abraham (1995AC) hasta Salomón (990AC)

El tercer día milenario de esta Semana Redentora, es desde Abraham hasta Salomón. Abraham es el padre del Israel natural, y el reinado de Salomón marca la na ción en la cumbre de su poder y gloria. Es el periodo en el que Dios está tratando con el Israel natural de una forma particular -como su esposa. Si esta expre- sión nos parece extraña, tened en Cuenta que Dios muestra las realidades espirituales e invisibles a través de las cosas naturales y visibles que perecen. (Ro. 1:20) “Mas lo espiritual no es primero, sino lo animal; luego lo espiritual.” (1ªCo.15:46) En pocas palabras, todo el propósito de Dios es reproducir y manifestar su vida y naturaleza. A medida que esto se cumple en lo natural, en el reino visible a través (le las relaciones fa-miliares correctas, estas analogías se usan en las Es-crituras de manera extensa. Tanto entre las relaciones familiares correctas comoincorrectas, Israel es referido como: un hombre que puede tener hijos y herederos -Jer.49:1; el hijo de Dios - Ex.4:23; - la hija de Dios Sal.45:10; un muchacho – Os.11:1; un hombre que puede “casarse con la hija de un Dios extraño”, -Mal.2:11; viudas y huérfanos Lm.1:1 y 5:3; una ramera, una prostituta - Ez.16:28; una virgen -Jer.31:21; y una esposa - Is. 54:1-5; etc., etc. Cuando hablamos de Dios tratando con Israel como su esposa durante el tercer día milenario, simplemente expresa-mos como Dios tambien lo hace que durante ese perio do ella era el canal a través del cual Dios quiso mani-

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festar su vida, naturaleza y propósito. Ap.2:12 y 13 dice: “Y escribe a la iglesia en Pérga- mo: el que tiene la espada aguda de dos filos dice es-to: yo conozco obras, y donde moras, donde está el tro no de Satanás...” Pérgamo significa “muchas veces ca-sada -totalmente casada”. Sus obras eran su fornica-ción y adulterio, tanto natural como espiritual. Muchas de las lamentaciones de los profetas, especialmente Jeremias, Ezequiel y Oseas, es a causa de sus fornica ciones. Al comienzo de este tercer día milenario, Abra-ham descendió al “trono de Satanás”, Egipto, y a pesar de todas las promesas de Dios, moró allí durante el tiempo del hambre. Más tarde ISRAEL, LA ESPOSA DE

Dios, también moró en Egipto durante casi la mitad de este período. “El trono de Satanás, o hablando espiri-tualmente, Egipto, es sentarse a la mesa de Satanás. Significa ser alimentado o entrar en unión con sus pensamientos de rebelión y adulterio. (Adulteración o mezcla a cualquier nivel Cuando Dios liberó a su esposa trás 400 años de falsos amores y amantes, su corazón adúltero tuvo dificultad en sentarse a su mesa en el de sierto. Aunque Dios pudo sacarla rápidamente de su lu gar de morada en Egipto, El ocupó el resto de este pe-ríodo, tratando de sacar a Egipto de dentro del ella. El verso 13 continúa diciendo: “...pero retienes mi nombre y no has negado mi fe, ni aún en los días en que Antifas, mi testigo fiel, fue muerto entre vosotros donde mora Satanás.” hay un libro llamado “Los He-chos de Antifas” que, si veráz, le hace a él obispo de Pergamo. Declara que fue muerto al ser metido en un becerro de bronce ardiendo. Quien quiera que fue, es un tipo de los que no habían negado la fe, y del nombre (naturaleza) de Dios. Durante el tercer día milena-rio Israel, como la esposa de Dios, no sólo fue adulte-ra, sino también idolatra. Hizo que muchos de sus hijos pasaran por el fuego, al adorar a Moloc y otros falsos

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dioses. Sin embargo entre el tiempo de Abraham y Sa- lomón, Dios tuvo unos pocos que no negaron la fe y retuvieron su nombre. “Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los retienen la doctrina de Balaam... “(verso 14) Balaam vivió durante este período. “La doctrina de Ba- laam” es aquella en que podemos servir a Dios y a las riquezas el espìritu adultero en un doble animo. (El reme-dio para esto es “la espada afilala de dos filos”, del ver-so 12) Balaam no pudo maldecir a Israel a quien Dios había bendecido. Sin embargo, enseñó a Balac que si él daba sus más hermosas mujeres a los varones de Israel y les hiciera cometer adulterio e idolatría, Dios mismo los maldecirá. (Nm. 25:1-9). El verso 15 dice: “Y también tienes a los que retienen la doctrina de los Nicolaitas, la que yo aborrezco.” Se supone que los Nicolaitas fuerón una secta de ag-nostas que practicaban y enseñaban doctrinas impuras e inmorales, tales como la comunidad de esposas, que el cometer adulterio y fornicación no era pecaminoso, y que el comer carnes ofrecidas a ídolos era licito. Nico-laus (quien era el lider de la secta) significa “el que go-bierna sobre el pueblo”. Esta doctrina ha llegado a ser considerada por algunos como el gobierno de los que se llaman religiosos, sobre los laicos. El espíritu que in volucra todo esto en realidad, es supuestamente actu- ar o gobernar en el nombre de Dios, pero no realmente en su naturaleza. En la primera carta a Efeso, Dios dice, “pero tienes esto, que aborreces las obras de los Ni colaitas, las cuales yo también aborrezco.” En la última parte de este día milenario Israel retenía, “la doctrina de los Nicolaitas”, al ser gobernada por Saúl en lugar de por Dios. En vez de estar “plenamente casada” con Dios, Isra- el cometió adulterio, fornicación e idolatría durante to-do este tercer día milenario. No obstante, al final de es

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te periodo Dios había traído a Israel, como su esposa, a la cima de su poder y gloria en el tipo de Salomón y el templo. A pesar de la sabiduría, honor y gloria que Dios derramó sobre Salomón, no sólamente tuvo mu-chas esposas, sino muchas esposas extrañas.

LA CUARTA CARTA - IGLESIA DE TIATIRA (Ap. 2:18-25)

Salomón (990AC) hasta Cristo

Ap. 2:18 - “Y escribe al ángel de la iglesia en Tiatira:…” Tiatira significa “hembra dominante”. Puesto que Israel no estaba “totalmente casada” con Dios en el tercer año milenario de esta Semana Redentora, el espiritu de la “hem-

bra dominante” se manifestó en el cuarto día milenario. En el verso 19, el hijo de Dios pondera a la iglesia en Tiatira por varias cosas. Después, en el verso 20 continúa diciendo: “pero tengo unas pocas cosas con-tra ti: que toleras que esa mujer Jezabel...“ Jezabel sig nifica “soltera o sin cohabitación.”

Ya que el pueblo de Dios no estaba casado con Dios, durante el cuarto día milenario de esta Semana Redentora, no podían ni siquiera vivir juntos o cohabi-tar. Al comienzo de este período, a partir de la muerte de Salomón y la sucesión de su necio hijo Roboam, las diez tribus del norte de Israel se sublevaron. Durante 259 años Israel tuvo dos reinos con reyes distintos. Du rante unos 80 de éste período, estuvieron en guerra el uno con el otro. Aún cuando el pueblo de Dios no podía vivir junto – cohabitar- El continuó tratando con ellos y hablándoles a través de profetas, tales como Elías, Eliseo, Amós, Oseas, Joel, Miqueas e Isaías. A pesar de ésto, Israel se hizo tan idólatra, que Dios permitió que fueran con- quistados por los Asirios y llevados allí alrededor del año 700AD. Jamás se volvió a oir de ellos y se les lla-ma “las diez tribus de la dispersión.”

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El reino del Sur de Judá, se quedó sólo durante un período de 135 años con profetas tales como, Jeremí- as, Nahum, Habacuc y Sofonías. Pero Judá, en el es-pirtu de Jezabel, continuó cometiendo idolatría y adulte rio, y en el año 556AC Dios permitió que fuera llevado a la cautividad de Babilonia durante 70 años. El hijo de Dios continúa diciendo en los versos 21 y 22: “Y le he dado tiempo para que se arrepienta, pero no quiere arrepentirse de su fornicación. He aquí, yo la arrojo en cama, y en gran tribulación a los que con ella adulteran, si no se arrepienten de las obras ella.” Tanto “una cama” como “gran tribulación”, hablan de la oscuri dad de la noche cuando los hijos de Dios resplandecerán como ESTRELLAS” Puesto que Dios ama a su pueblo, El quiere casarse con ellos y hallar su lugar de morada con ellos, a pesar de sus caminos. Con este fin permitió que la nación, Jerusalén y el templo fieran restaurados bajo Esdras y Nehemías. Al final del cuarto día milenario Él le envió a su propio Hijo. “A los suyo vino, y los suyos no le reci-bieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que cre en en su nombre (naturaleza) les dió potestad de ser hechos hijos de Dios.” (Jn.1:11-12) Mas tarde veremos en el cuarto paso del vencedor, el resultado del resplandecer como estrellas de los hijos de Dios en medio de la noche tribulación.

LA QUINTA CARTA — IGLESIA DE SARDIS (Ap. 3:1-5)

Cristo (Día de Pentecostés hasta la Era Oscura (año 1000DC) Ap.3:1 -“Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: el que tiene los siete espíritus de Dios, y las siete estrellas, dice esto: yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives y estas muerto.” El quinto día milenario de esta Semana Redentora, es desde el día de Pentecostés, hasta mediados de la Edad Oscura. (año 1000DC). Con esto en mente, con-

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sideremos el mensaje a Sardis. “yo conozco tus obras, que tienes nombre (naturaleza) de que vives, y estas muerto” - en dos niveles:

1. EL PROPOSITO DE PENTECOSTES O DE LA UNCIÓN. En Pentecostés, la iglesia primitiva recibió el nombre o naturaleza de Cristo -“El ungido”- lo que significa que murieron. (Ya que la vida de resurrección está en pro-porción al morir, es importante que nuestra identifica-ción con su muerte, sea en el mismo grado en que nos gustaría identificarnos con su resurrección). Esto fue para que la iglesia pudiera experimentalmente, llegar a ser el Cuerpo de Cristo -esto es experimentar lo mismo que la Cabeza. Jesús fue ungido “en su cabeza.” (Mt. 26:7) En otra ocasión se “ungió los pies de Jesús.” (Jn 12:3) El contexto de ambas ocasiones dice que fueron para su sepultura. La primera habla de Jesús como la cabeza, la segunda habla de nosotros como miembros de su Cuerpo- especialmente aquellos de nosotros que nos manifestemos en El, al final de esta era. (En un na cimiento normal la cabeza sale primero, y los pies al fi-nal de todo.) Los pies también hablan de los que cami-nan cada verdad y conquistan todo enemigo, incluyen-do a la muerte. (1ªCo.15:25-26) En Pentecostés, los que recibieron el bautismo del Espíritu Santo fueron ungidos para la muerte. El bautis mo es sepultura e implica muerte. ¡El bautismo del Es-píritu Santo es muerte al espíritu del hombre natural! Podemos ver esta unción por muerte y sepultura, tanto en lo natural como en lo espiritual:

a. Natural- Pentecostés acabó en una persecución en la que muchos llegaron a ser mártires.

b. Espiritual - Hch.1:8 “Pero recibiréis poder cuando ha ya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me se- réis testigos...“ La palabra traducida “testigos” en el griego es “martus”, de donde proviene la palabra

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“mártir”. Habla del testimonio que era un discipulo, a medida que en cada situación ponía su vida, al hacer exactamente lo que hacía su maestro. Cuando la gente veía a un discípulo, veía uno que hacía exac tamente lo que hacía su maestro -tenían un testigo perfecto. Sardis significa “los rojos- aquellos que escapan”. Por medio del bautismo del Espíritu Santo te nemos, como Sardis, el nombre de que vivimos y sin embargo estamos muertos. ”Los rojos aquellos que escapan”. Por medio del bautismo del Espíritu Santo tenemos, como Sardis, el nombre de que vivimos y sin embargo estamos muertos. “Los rojos” habla de la muerte al yo -o del martirio. Por medio de nuestra Fiesta de Pentecostés somos ungidos para poner nuestras vidas, pero debemos seguir adelante a la Fiesta de los Tabernáculos, para estar entre “los que escapan”. Es muy importante que, habiendo re cibido el nombre o naturaleza de Cristo -“el ungido”, permitamos que la plenitud de esta naturaleza se manifieste.

2. EL PROPOSITO DE PENTECOSTES NO SE APROPIO DU- RANTE LA MAYOR PARTE DEL QUINTO DIA MILENARIO.

Los de la iglesia de Sardis no estaban experimentan- do la vida de la naturaleza que profesaban. De la mis-ma manera al comienzo de este quinto día milenario la iglesia, en el Día de Pentecostés, había experimentado el poder vivificante de la vida de resurrección de Cris-to, para manifestar su naturaleza. Pero muy rápida-mente, aún cuando la iglesia primitiva tenía un nombre de que vivía, aquella que vino a ser la iglesia estaba muerta. Cuando Constantino se convirtió en el único soberano del denominado Santo Imperio Romano, en el año 313 de nuestra era, el Cristianismo adquirió po-pularidad. Puesto que la naturaleza y vida de Cristo no continuó manifestándose, la muerte se manifestó pro-

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gresivamente durante el quinto día milenario. ¡Aún vivi- endo estaban muertos! Hubo tal muerte y oscuridad que aún los historiadores seculares hacen referencia a este período como la Edad Oscura.

LA SEXTA CARTA — IGLESIA DE FILADELFIA (Ap. 3:1-11)

Edad Oscura (año 1000 DC) hasta la actualidad (año 2000DC) Ap.3:7 - “Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Es-to dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre.” Filadelfia significa “amor de hermanos -amor frater-nal”. El que habla a la iglesia de Filadelfia es “el que tie ne la llave de David”. A mediados del sexto día milenario de esta Semana Redentora, pequeño David, “ama-do” de Jehová, comenzó a manifestarse con Martin Lu-tero y con las verdades de la justificación por la fe y del sacerdocio de los creyentes. Goliat -“exiliado, despoja-do” comenzó a ser vencido “en el nombre (naturaleza) del Señor”. En relato de la creación, en Gn.1, cada “día” constaba “la tarde y la mañama”. En otras pala-bras, la primera mitad del período era “noche” y la últi-ma mitad era “dia”. En este sentido los primeros 500 años de este sexto día redentor fueron la noche. Con los Reformadores, comenzando en la primera parte del siglo 16, la luz del sexto día milenario comenzó a ama-necer. Hubo más luz a través de la restauración del bautismo en agua, por medio de los Anabautistas, Bau tistas y Menonitas. Luego en el siglo 18, la luz de la santificación y de la obra más profunda del Espíritu Santo aumentó, a través de Wesley y los grupos de Santidad. Más tarde, “el que abre y ninguno cierra” hizo “que el amor fraternal” se manifestase a cada nación y tribu en el gran empuje misionero del siglo 19. Este fué el período de hombres como Hudson, Taylor, William Ca-

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rey y David Livingston, etc. Desde que comenzó el si-glo “la llave de David” que abre, se ha evidenciado pro-gresivamente. “La llave de la casa de David” habla de la restauración del “tabernáculo caido de David”. (Am. 9:11) Básicamente, esto tiene que ver con el gobierno o reinado a través de la alabanza y adoración espiri-tual. (Sal.48:1-2; Sal.137) El tabernáculo de Moisés es tableció los pasos fundamentales del acercamiento del hombre al presencia del Señor con gran gozo. La alabanza y adoración estaban allí con canto y júbilo, con el batir de palmas y el levantar de manos y con danza. Todo esto se acompañaba con muchos tipos de instru-mentos. Así, fue cuando David usó su “llave” para traer el arca desde la casa de Obed-Edom, al tabernáculo que había levantado para ella en Jerusalén. (II Sam. 6) El arca también fue traída con sacrificios El verso 13 dice: “Y cuando los que llevaban el arca de Dios ha-bían andado SEIS PASOS él sacrificó un buey y un carne-ro engordado”. Seis es el número de la carne o de la mente carnal. Mical la hija de Saúl despreció a David en su corazón, así “nunca tuvo hijos hasta el día de su muerte”. Así como David y los que trajeron el arca a tabernáculo hicieron sacrificios cuando “Habían anda-do SEIS PASOS”, hay los que harán sacrificios al final de este SEXTO DÍA. A lo largo de los siglos, el Señor sigue dando “la llave de la casa de David” para restaurar “el tabernáculo caido de David”. Sin embargo, muchos co-mo Mical en su propia autojusticias y religiosidad si-guen tirando la llave. La “llave” fue restaurada por me-dio de Esdras y Nehemías en tiempo de la reedifica-ción de los muros de Jerusalén y del templo. Esd.3:10-11, cuentan como los sacerdotes y levitas alababan a Jehová porque se echaban los cimientos de la casa de Jehová.” Durante el reinado de Ezequías, “Senaquerib rey de Asiria, subió contra todas las ciudades fortificadas de

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Judá, y las tomó... y salió a el Eliaquim, hijo de Hilcias, mayordomo” y otros (Is.36:1-3), para escuchar las de- safiantes palabras de Rabsaces, a quien Senaquerib había enviado en contra de Jerusalén “con un gran ejercito”. Isaías profetizó (37:33): (Senaquerib) “no en-trará en esta ciudad... porque yo amparare a esta ciu-dad para salvarla por amor a mí mismo y por amor de David mi siervo.” Vemos como Jehová “abre y ningun hombre cierra”, puesto que el resto del capitulo nos di-ce como el ángel del Señor aniquiló a espada 185.000 hombres de los asirios, y los propios hijos de Senaque-rib le mataron mientras adoraba a su dios. Previamen- te, Isaías había profetizado (Is.22:20-22), “en aquel día llamare a mi siervo Eliaquim, hijo de Hilcias, y lo vesti- ré de tus vestiduras, y lo ceñiré de tu talabarte, y entre-garé en sus manos tu potestad…y pondré la llave de la casa de David sobre tu hombro; y abrirá y nadie cerrará; cerrara y nadie abrirá.” Vemos la profecía de Isaías acerca de Eliaquim, el hijo de Hilcías, parcialmente cumplida en Jesús. En el Sal.22:22 David dice: “Anunciaré tu nombre (naturale-za) a mis hermanos en medio de la congregacion te alabaré”. En He.2:12 esta escritura se cita en relacion con Jesús, “en medio de la congregación (su Cuerpo) te alabaré”. Lc.10:21 dice: “En aquella misma hora Je-sús se regocijó en el espíritu, y dijo: yo te alabo, oh Pa- dre, Señor del cielo y de la tierra porque escondiste es-tas cosas de los sabios y entendidos, y las has revelado a los niños. Sí, Padre, porque así te agradó” A través del derramamiento del Espíritu Santo el Día de Pentecostés, la profecía de Isaías acerca de Eliaquim, el hijo de Hilcias, fue cumplida en mayor grado en el Cuerpo de Cristo. “Comían juntos con alegría y senci-llez de corazón, alabando a Dios y teniendo favor con todo el pueblo”. (Hch.2:46-47) Entonces los judaizan-tes trataban de llevarse “la llave de David” y hacer que el tabernáculo de David cayera. Trás mucha disención,

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Jacobo respondió díciendo: “Varones hermanos, oíd-me: Simón ha contado como Dios visitó por primera vez a los Gentiles (se abrió una puerta que ningún hombre podía cerrar), para tomar de ellos pueblo para su nombre. Y con esto concuerdan las palabras de los profetas, como está escrito: despues de esto volveré y ree dificare el tabernáculo de David, que está caido; y repara- ré sus ruinas, y lo volveré a reparar” Durante la Edad Oscura el tabernáculo de David ca-yó otra vez. Aún cuando el Señor comenzó a restau-rarlo una vez más con los Reformadores, “La Llave de David” no se ha utilizado siempre. Esto ha permane-cido verdad desde el comienzo de este siglo 20 cuan-do el tabernáculo de David fue de nuevo restaurado por medio del gran derramamiento Pentecostal. Las iglesias Pentecostales que habían sido abiertas por me dio de esta llave, a través del formalismo y la religio-sidad, han tratado de cerrar la puerta del “tabernácuIo de David”. Sin embargo, por medio de diferentes movi-mientos del Espíritu hasta el día de hoy, “la llave de David ha sido dada “para reedificar el tabernáculo de David”. Al final de este sexto día milenario, a través de este presente mover del Espíritu, Dios está abriendo una puerta “y ningún hombre cierra”. El vers 8 dice más, “yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar”. El ver-so 9 continua diciendo, “He aquí, yo entrego de la sinagoga de Satanás a los que se dicen ser judios y no lo son, sino que mienten; he aquí, yo haré que vengan y se postren a tus pies, y reconozcan que yo te he amado”. El verso 10 dice que nos guardará “de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra”. Al llegar al final de este sexto día milenario, hay un sentido en el que la

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noche de tribulación delante de nosotros es la primera parte del séptimo día del reino milenario de Cristo. Verso 11: “He aquí, yo vengo PRONTO…”

LA SEPTIMA CARTA - IGLESIA DE LAODICEA (Ap. 3:14-20)

Desde nuestros dias (año 2000DC) hasta el final del reino milenario (año 3000 DC)

Ap.3:14 - “Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea:” Laodicea significa “pueblo de juicio o reinado del pueblo”. ¡So lo los están dispuestos a ser juzgados y gobernados por Dios estarán preprados para juzgar y gobernar con El! Los versos 15 y 16 dicen “Yo conozco tus obras, que ni eres frio ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! pero por cuanto eres tibio, y no frio o caliente, te vomitaré de mi boca” Mencionamos en la sexta carta que puesto que “la tarde y la mañana” son un día, en un sentido, la Noche de Tribulación que delante de nosotros es la primera parte del séptimo día milenario rienado de Cristo. ¡Es la noche del fuego de tríbularión que separará lo frio de lo caliente! Por medio de la tribulación muchos que han dicho, “yo soy rico, y me he enriquecido, y de nin-guna cosa tengo necesidad” hallarán que son “desventurados, miserables, pobres, ciegos y desnudos”. El oro nos habla de la naturaleza de Dios. Sólo a tra vés del fuego de la tribulación podremos obtener la ple nitud de la naturaleza de Dios. El verso18 dice: “por tanto, yo te aconsejo que de mi compres oro refinado en fuego, para que seas rico”. También “vestiduras blancas”, para vestirte, y que no se descubra la ver-güenza desnudez”. Estas “vestiduras blancas” son la verdadera justicia de Dios. Si en el séptimo día aún contamos con sólo la justicia imputada por nuestra aceptación de la obra expiatoria de Jesús, la vergüen- za de nuestra desnudez aparecerá. No es que no vaya mos a ser salvos al estar cubiertos, sino que para en-

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tonces nos deberíamos haber apropiado de nuestra salvación y cubierta más plenamente. Si no podemos ver esto, se nos exhorta: “Unge tus ojos con colirio, para que

veas”.

LOS SIETE PASOS DEL VENCEDOR

EL PRIMER PASO DEL VENCEDOR

Ap.2:7-“El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice alas iglesias. Al que venciere, le dare a comer del árbol de la

vida...” Este es el primer paso de nuestra experiencia de sal vación al empezar a participar de la Palabra del Espiri-tu, en vez de alimentarnos del árbol de nuestro conoci-miento del bien y del mal. Somos “justificados por la fe” y “la fe viene por el oir, y el oir por la palabra de Dios”. (Ro.5:1; 10:17) Por supuesto que debemos seguir ali-mentandonos del árbol de la vida -el Espíritu de la Pa-labra, y que “el justo por la fe, vivirá; y si retrocediere, no agradara mi alma” (He.10:38) Ap.2:7 añade: “…el cual está en medio del paraiso de Dios.” El mensaje a la iglesia de Efeso comienza dicien do: “…el que anda en medio de los siete candeleros, dice esto”. “En medio” tiene que ver con comienzo, orí- gen y centro y está, por lo tanto, sumamente relaciona-do con el primer paso del vecedor en nuestra experiencia inicial de salvación. No obstante, si queremos la ple nitud de la luz o vida, no podemos separar los brazos del candelero o del árbol de la caña principal o tronco “en medio”. Otra analogía de Cristo “en medio” y sin embargo, llenándonos, es la vid y los pámpanos. (Jn. 15) Primeramente aparece la vid que es el origen y centro de la vida. A medida que los pámpanos salen, la vid o tronco se queda “en el medio”. Sin la vid, los pámpanos no tendrían vida. Sin embargo, sin los pám panos, la vid no seria una verdadera vid, y ciertamente no podría manifestar su fruto.

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Cuán importante es, entonces, permanecer en El, para seguir participando del árbol de la vida. ¡Está “en medio” de nosotros! Ro.10:8-9 dice: “Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la pala bra de fe que predicamos: que si confesares con tu bo-ca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.” Pr. 15:3 y 4 dice: “Los ojos de Jehová están en todo lugar, mirando a (el árbol del conocimiento de) los malos y a los buenos. La lengua apacible es árbol de vida; más la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu.” Pr.18:21 expresa: “La muerte y la vida están en poder de la lengua.”

EL SEGUNDO PASO DEL VENCEDOR

Ap.2:11 - “El que tiene oido oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de la segunda

muerte”. En Ap.20:14 se nos define “la segunda muerte”: “Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda”. Vemos que “la muerte se gunda” es la muerte que debemos temer, pues es la muerte espiritual - ¡Sufrir la separación de Dios por toda la eternidad!

Ap.21:7 dice: “El que venciere heredara todas las cosas, y yo seré su Dios, y el será mi Hijo.” En el verso siguien te enumera Ial distintas clases de personas que “ten- drán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.” ¡El primer grupo de la lista son “los cobardes temerosos”! La primera parte del capítulo 20 de Apocalipsis na-rra como ataremos a Satanás al final de esta era, “para que no engañase más a las naciones; hasta que fue-sen cumplidos mil años” (verso 3) Consideraremos es-to mas adelante en el cuarto paso del vencedor. Los versos 5 y 6 continúan diciendo: “Pero los otros muer-tos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil

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años. Esta es la primera resurrección Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección la

segunda muerte no tiene potestad sobre estos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con El mil años” Si hubo algo que el apostol Pablo temia, era que no pudiera alcanzar la resurrección de los muertos, la primera re-surrección o la resurrección de los justos. Para alcanzar aquello para lo cual él (y no nosotros) había sido al canzado, el de buena gana “sufrió la perdida de todas las co-

sas”, y las tuvo “por basura”. Leamos con mayor detalle lo que dice en su carta a los Filipenses, cap. 3:7-15. “Pero cuantas cosas eran para mi ganancia las he estimado como péridida por amor de Cristo. Y cierta-mente, aún estimo todas cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, y ser llamado en El, no teniendo mi propia justicia que es por la ley, sino la que es por fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe; a fin de conocerle y el poder de resurreción y la partici pación de sus

padecimientos, llegando a ser semejantes a El en su muerte, si en alguna manera llegase a la resurrección entre los

muertos. (La primera resurrección) No que lo haya alcan zado ya ni que ya sea perfecto, sino que prosigo por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. Hermanos, yo mismo no pretendo ha berlo ya alcanzado: pero una cosa hago, olvidando cierta-mente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. ASI QUE TODOS los que somos perfectos esto mismo sintamos”.

EL TERCER PASO DEL VENCEDOR

Ap.2:17 - “El que tiene oido oiga lo que el Espíritu dice a iglesias. Al que venciere daré a comer del MANA ES-

CONDIDO,” daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita

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escrito un nombre nuevo el cual ninguno conoce sino aquél que lo recibe.” El tercer paso de nuestro viaje progresivo a la perfec ción es comer del “maná escondido” del Espíritu de la Palabra. Esto se lleva a cabo, por medio del bautismo del Espíritu Santo cuando comenzamos a ver las verda des espirituales detrás de la letra de la Palabra. 2ª Co. 3:6 dice: “Porque la letra mata, más el Espíritu vivifica.” Hablando del misterio de “aquellas cosas que Dios ha preparado para aquellos que le aman”, 1ª Co.2:10 di-ce: “Pero Dios nos las revelo a nosotros por el Espíritu; porque el

Espiritu todo lo escudriña, aún lo profundo de Dios.” El verso 12 añade: “Y nosotros no hemos recibido el es-píritu del mundo, sino el espíritu que proviene de Dios; para que sepamos lo que Dios nos ha concedido.” ”...Y le daré una piedra blanca, y en la piedrecita es-crito un nombre nuevo” Estas piedras eran conocidas por los antiguos como piedras de victoria. En tiempos antiguos tambien significaban perdón y eran usadas co mo la evidencia del mismo. Los jueces tenian piedras blancas y negras. Si al criminal le daban una piedra ne gra, era condenado; si le daban una blanca, era perdo nado. A los vencedores el los juegos publicos, también les daban piedras blancas con sus nombres en las que se les concedía el ser mantenidos el resto de sus vidas por el tesoro público. Al comemzar a participar del “maná escondido”, el Espíritu Santo nos concede una consciencia interna de nuestra posición con Dios por medio de la sangre de Jesús. Recibimos la “piedra blanca” con la revelación de que Dios, a través de la obra de su Hijo, nos ve to-talmente perfectos, sin pecado.No sólamente somos juzgados “inocentes”, sino que un “nuevo nombre, es escrito en nosotros. Nos damos cuenta que recibir la vi da de Cristo es también recibir su nombre o naturaleza. La revelación del Cuerpo de Cristo llega a ser algo

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más que una buena doctrina. Vemos que Cristo es un cuerpo de muchos miembros, del cual Jesús es la ca-beza. Vemos que a través de El “somos más que ven-cedores” y que corporalmente somos el Cristo de Dios. El “nuevo nombre” es un nombre “que ningún hombre conoce excepto aquel que lo recibe” puesto que sólo los que han crecido en el espíritu pueden recibir ese nombre para sí.

EL CUARTO PASO DEL VENCEDOR

Ap.2:26-28 -“Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones, y las regirá con vara de hierro, y serán quebradas como vaso de al farero; como yo tamién la he recibido de mi Padre; y le daré LA ESTRELLA DE LA MANAÑA. En el cuarto paso del vencedor, la primera parte de la promesa es que El nos dará “poder sobre las nacio-nes”. La segunda parte es el alcance y manifestación de ese poder. “Y las regirá con vara de hierro”. La ter-cera parte es la promesa de “la estrella de la mañana”. Primeramente consideremos la última parte de la promesa, “le daré la estrella de la mañana”, como una clave para entender mejor como tendremos “poder sobre las naciones” para “regirlas con vara de

hierro” Ya hemos mencionado como la promesa de Dios a Abraham no era sólo de una simiente natural, “como las arenas del mar”, sino de una simiente espiritual “co

mo las estrellas de los cielos”. Puesto que la luna nos habla de la iglesia, así las estrellas hablan de los hijos Dios moviéndose en el orden y poder del Espíritu, especialmente brillar en la oscuridad de la Noche de Tribula-ción. Dios hizo “la lumbrera menor (la luna) para que señorease

en la noche, hizo tambien las estrellas. Y las puso Dios en la expansión de los cielos. “(Gn.1:16,17) Hay por supues-to, muchos espíritus que no se mueven en orden de Dios. Judas se refiere a ellos como “estrellas errantes, para las cuales está reservada eternamente la oscuri-

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dad de las tinieblas” (verso 13) A causa de la rebelión en contra del orden de Dios, han caído y caerán de los cielos. Porque no tiene poder sobre mismos, nunca “tendrán poder sobre las naciones”. Mt.24:29,30 dice: “E inmediatemente después de la tribulación de aque-llos días el sol se oscurecerá, y la luna no dará su res-plandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo...“ Satanás y sus espíritus demoniacos, así como los que le siguen son considerados como estrellas que caen

de los cielos, y son aniquiladas. “El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran estrella... Y el nom bre de la estrella es Ajenjo (amarga – imbebile). Y la tercera parte de las aguas se convirtio en ajenjo; y muchos hombres murieron a causa esas aguas, porque se hicieron AMARGAS. (Asegurese de regir con vara de hierro sobre esa nación interna, en particular. De otra forma esa nación te impedirá tener “poder sobre las naciones” de afuera.) Y el cuarto ángel tocó la trompeta, y fue herida la tercera parte del sol, y la tercera parte de la luna, y la tercera parte de las estrellas, para que se oscureciese la tercera parte de ellos, y no hubiese luz en la tercera narte del día, y asimismo de la noche”. (Ap.8:10-12) Dios quiere que bebamos de la plenitud de las aguas dulces del Espíritu, para que andemos en la plenitud de su orden y poder. A medida que llegamos al final de la era, el contraste es más vívido entre aquellos que tienen el espíritu de Cristo (el ungido) y los que tienen el espíritu del Anti cristo. Con respecto a los que tienen el espíritu de Cris to, Dn.12:1-3 dice: “En aquel tiempo se levantará Mi-guel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, la cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen

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escritos en el libro. Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna y otros para verguenza y confusión perpetua. Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.” En cuanto a los que tienen el espíritu del Anti-cristo, Jl.3:15 nos di-ce: “El sol y la luna se oscurecerán, y las estrellas retraeran su resplandor.” Mientras que algunas estrellas resplandecerán “a

perpetua eternidad”, otras “retraeran su resplandor”. En la primera parte de Ap, cap. 20, leemos de un angel que desciende del cielo, “con la llave del abismo, y una gran cadena en la mano. Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años; y lo arrojó al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase más a las naciones, hasta que fuesen cumplidos los mil años...“ Es obvio que quien quiera que sea este ángel, “tiene poder sobre las

naciones.” “El Hijo del Hombre” de Ap.1:13 se manifiesta en el verso 16 “teniendo en su diestra siete estrellas.” El ver so 20 continúa diciendo: “El misterio de las siete estrellas que has visto en mi diestra, y de los siete candele ros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las sie te iglesias, y los siete candeleros que has visto son las siete iglesias.” Después de esto, todas las cartas a las siete iglesias se dirigen: “AL ANGEL de la iglesia en…” Resulta claro de la comparación de ésta y otras es-crituras que estos ángeles no son criaturas con largas vestiduras blancas, con aperturas que permiten la pro-yección de alas. Son los Hijos de Dios que andan en perfecto orden y entrega al Espíritu de Dios. “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, es-tos son Hijos de Dios.” (Ro.8:14) Nunca seremos el Hi-jo de la diestra, y “regiremos todas las naciones con va ra de hierro”, hasta que seamos como “siete estrellas en su mano derecha”. La única forma en que Satanás y todos sus espiritus demoniacos serán atados, será a medida que los Hijos

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de Dios se manifiesten en la ple-nitud de gloria y poder del espiritu vivificante del pos-trer Adán. “Pues una estrella es diferente de otra

en gloria”. (1ªCo.41-45) Esto se simboliza más detalla- damenté en “una gran señal que apareció en el cielo: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies y sobre su cabeza una corona de doce estrellas.” (12 es el número de la plenitud del gobierno que se produ-ce a través del orden divino.) Ella es la que “dió a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones.” (Ap.12:1-5) La última parte de la promesa del cuarto paso del vencedor es, “y le dare’ la ESTRELLA DE LA MANAÑA.” La “es trella de la mañana” es la que trae el nuevo día, trás la noche de tribulación. Estó es cuando Cristo nos dé y nosotros nós apropiemos de la plenitud de la vida y naturaleza de resurrección. Ap. 22:16 dice: “Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente DE LA MANAÑA”! Ap. 2:29 nos desaría concluyendo el cuarto paso del vencedor con: “El que tiene oídos oiga lo que el espíri-tu dice a las iglesias.”

EL QUINTO PASO DEL VENCEDOR

Ap.3:5 - “El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no

borraré su nombre DEL LIBRO DE LA VIDA, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles.” A medida que continuamos venciendo, somos “vesti dos con vestiduras blancas”. Estas “vestiduras blan-cas” no son la justicia que nos fue imputada cuando co nocimos y aceptamos a Jesús como Salvador, ¡ya que este es el quinto paso de nuestro viaje! Esta es la ver-dadera justicia de Dios, “porque han llegado las bodas

del Cordero y su esposa se ha preparado. Y a ella se la ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplande-ciente; porque el lino fino es las acciones justas de los

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santos.” (Ap.19:7-8) Esta es la perfecta justicia en la que Jesús anduvo durante sus tres años y medio de ministerio. Hay un principio establecido en el Antiguo Testamen to que dice que sólo dos de una especie pueden entrar en unión. Es por esto que era una abominación para un hombre yacer con una bestia. (Lv.20:15) Ni los judí os se debían casar con los de otras naciones Espiritual-mente hablando, Cristo como verdadero judío, no pue-de entrar en unión con nosotros mientras aun estemos en la naturaleza de la bestia, o hasta que las otras naciones hayan sido

circuncidadas de nuestro corazón. Para entrar en unión con nosotros, el Señor tiene que comenzar sus tratos con nosotros desde donde estamos completamente perdi-dos y acabados. En primer lugar, El cubre nuestros pe-cados con su sangre, imputándonos su justicia. Des-pués “con el lavacro de AGUA por medio de la palabra”, con-tinúa santificándonos y limpiándonos. (Ef.5:26) “Luego nosotros los que VIVIMOS, los que hayamos quedado, seremos arrebatados..., para recibir Señor en el AIRE.” (1 Tes. 4:17)

EL SEXTO PASO DEL VENCEDOR

Ap.3:12- “Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escri- biré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo En nuestro viaje a la perfección, venimos a ser parte del templo, la morada de Dios. Ef.2:20-22 dice: “Edifi- cados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.” En el sexto paso del vencedor, hemos llegado a ser el templo del Señor en tal forma,

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que somos simbolizados como “columnas en el templo de mi Dios”, y “nunca más saldrá de allí”. Esto significa primeramente, que estamos tan establecidos en el es-píritu que ni entramos ni salimos de la presencia de Dios. También significa que tendremos la fuerza de Dios para sostener a otros miembros de su templo. En este punto de nuestro viaje, también dice: “Y es- cribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén...“ Por toda la es critura, cuando habla “del nombre de Dios”, esta ha-blando de su naturaleza y personalidad. Asi que cuando dice: “escribiré sobre él el nombre de mi Dios, signi-fica que el nos darà su mima naturaleza y personalidad. Al decir que el escribirá sobre nosotros “el nom-bre de la ciudad de Dios, la nueva Jrusalén, significa que El también nos dará la naturaleza y personalidad de esa ciudad. En Ap.21:9 uno de los siete àngeles dice a Juan, “Ven aca yo te mostraré la desposada la esposa del Cordero”. Ya señalamos en el quinto paso del vence-dor, que Dios solamente puede entrar en unión con aquello que es como El es. Por lo tanto, comenzó impu tandonos la justicia de Cristo. En ese contexto, vimos que la esposa del Cordero “que se ha Preparado” ha-bla de recibir la justicia de Dios. Pero retrocediendo a Ap.21, el ángel, al mostrar a Juan “la desposada, la es-posa el Cordero”, de hecho mostró: (verso10); “La gran ciudad santa Jerusalén, que descendia del cielo de Dios”. Asi, vemos que la “nueva Jerusalén” es otra me- táfora de “la desposada, la esposa del Cordero”, y que las dos representan el cuerpo de Cristo en perfección. (La diferencia bàsica entre estas dos analogías es que la primera representa al pueblo de Dios viivendo juntos en el orden del gobierno de Dios, mientras que la se-gúnda representa el canal por medio del cual la vida y naturaleza de Cristo se reproduce).

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La última parte de la promesa en el sexto paso del vencedor es “y escribiré sobre él mi nombre”. Muy pocas personas se dan cuenta de que Jesús ahora tiene un nuevo nombre: Esto no quiere decir que su nombre ya no sea más Jesús. No obstante, como ya hemos se ñalado, un nombre habla de la naturaleza, estamos di-ciendo que tiene una nueva naturaleza. Cuando Jesús estuvo en la tierra, tuvo una naturaleza o personalidad diferente a su naturaleza o personalidad actual. En aquel tiempo él era perfecto en cuanto era perfecta-mente sin pecado; pero no estaba perfeccionado en cuanto que aún podía ser tentado. He.2:10 y 5:8 mues tran que él fue perfeccionado por las cosas que pade-ció. Por medio de su muerte, sepultura y resurrección entró en una nueva naturaleza donde nada jamás podría serle tentación. Cuando la Escritura dice: “y escribiré sobre él mi nuevo nombre” quiere decir, “y le daré una naturaleza de resu-

rrección de Cristo”. Ro.6:5 dice: “Porque si fuimos plan-tados juntamente con El en la semejanza de su muer-te, así también lo seremos en la de su resurrección”. ¡Aleluya!.

EL SEPTIMO PASO DEL VENCEDOR

Ap.3:21- “Al que vencieré, le daré que SE SIENTE CONMI-

GO en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono”. El séptimo paso del vencedor es sentarse con Jesús en su trono, aún como El se ha sentado con su Padre en su trono. Para entender lo que “En mi trono” signifi-ca, necesitamos comprender Ef.1:20. Esta Escritura dice que Dios “resucitándole (a Jesús) de los muertos y sentándole a su diestra EN los lugares celestiales” Dios es un Espìritu Omnipresente que llena el Univer-so y por lo tanto, no podría limitarse a un trono físico de ningún tamaño o forma. La idea de Jesús sentado. EN el trono de su Padre y a la diestra de su Padre, sig-nifica que Jesús ha sido levantado a un lugar espiritual

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de igualdad y reinado con Dios. En la misma forma el que nosotros nos sentemos con Jesús EN su trono sig-nifica que hemos sido levantados a un lugar espiritual de reinado juntamente con El. Que este es nuestro lla-mado es lo que claramente nos enseña la Palabra de Dios. Por supesto, sólo cumpliremos nuestro llamado en la misma forma que él lo hizo. Ro.8:16y 17 dice: “El Espìritu mismo da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios. Y si hijos también herederos; he-rederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con El para que juntamente con El seamos glorificados”. Así que cuando vemos a Jesús sentado en el trono de su Padre y a nosotros en su trono, en realidad tam-bién nos estamos viendo a nosotros mismos sentados en el trono del Padre. Habiendo sido levantados a una coigualdad con Dios es el último paso de nuestro cami-nar a la perfección. Si encontramos que es difícil ceer en este último paso desde donde nos hallamos, no de-bemos por eso tropezar. Simplemente andemos donde estamos y si seguimos caminando en el espìritu, llega-remos a él. Sin embargo, para darnos ánimo en nues-tro camino, consideremos que llegar a ser iguales a Dios es la clara enseñanza de la Palabra de Dios. En Jn.17 Jesús hizo una oración que podemos estar seguros será contestada, porque El tan sólo oraba con forme a la voluntad del Padre. Comenzando con el ver-so 21 Jesús oró: “Para que todos sean uno” (fijaos en lo absoluto de este ruego; no hay relatividad alguna) “Como tu oh Padre, En mí, y yo En ti, que TAMBIÉN ELLOS sean

uno con NOSOTROS…” (Observamos que la misma iden-tificación total y perfecta de la unidad en la igualdad, que como se refleja al decir: “EN mi trono”, es también expresada en, “COMO tú oh Padre, En mí, y yo EN ti, que tam bién ellos sean uno EN NOSOTROS”.) “La gloria que me diste, yo les he dado para que sean uno ASI COMO NOSO-

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TROS SOMOS UNO. YO EN ELLOS, y TU TU EN MÍ para que sean perfectos en unidad…” Después de todo lo que se ha dicho en el séptimo paso del encedor en Ap.3:21 hay un versículo más en el capítulo: “EL QUE TIENE OIDO OIGA, lo que el Espìritu dice a la Iglesias”. “ALELUYA, PORQUE EL SEÑOR NUESTRO DIOS TODO PODEROSO REINA….Y SU ESPOSA SE HA

PREPARADO”. (Ap.19:6 y 7).

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modelos septuplos en la biblia

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