«me entristeció descubrir que femen se guiaba por un modelo patriarcal, pero decidí seguir...

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25 zazpika 24 zazpika Texto: Clàudia Prat Fotografía: Franco Origlia/Getty Images «Me entristeció descubrir que FEMEN se guiaba por un modelo patriarcal, pero decidí seguir filmando» U kraine is not a brothel” (Ucrania no es un burdel) es el documental que mostró a Viktor Svyatski, el hombre que de forma jerárquica y patriarcal organizaba las acciones del grupo. La directora de esta pieza reveladora es Kitty Green, una australiana de 28 años que vivió con FE- MEN durante catorce meses. Ahora, con su ópera prima debajo del brazo, Green ha estado por los festi- vales de documental más reconocidos, desde el Festi- val de Cine de Venecia, el IDFA, el SXSW, el Hot Docs de Toronto o el Documenta Madrid. KITTY GREEN

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25zazpika24 zazpika

Texto: Clàudia PratFotografía: Franco Origlia/Getty Images

«Meentristeciódescubrir

que FEMENse guiaba porun modelopatriarcal,pero decidí

seguirfilmando»

Ukraine is not a brothel” (Ucrania no es unburdel) es el documental que mostró a ViktorSvyatski, el hombre que de forma jerárquicay patriarcal organizaba las acciones del

grupo. La directora de esta pieza reveladora es KittyGreen, una australiana de 28 años que vivió con FE-MEN durante catorce meses. Ahora, con su óperaprima debajo del brazo, Green ha estado por los festi-vales de documental más reconocidos, desde el Festi-val de Cine de Venecia, el IDFA, el SXSW, el Hot Docsde Toronto o el Documenta Madrid.

KITTY GREEN

film feminista, pero explora el feminismo. Es un re-trato de mujeres luchando en un país pobre.

Hay un momento en la película que ellas mismashablan de FEMEN como «marca» y no como movi-miento político. ¿FEMEN es una marca?Sí, es una especie de marca. En el film quería mostraresta contradicción, cuando el movimiento se convierteen una marca, cuando hay dinero..., todas las implica-ciones que conlleva. Y la figura de Viktor... No me gus-taba nada cómo las trataba!

Hay un momento en el documental en el que Vik-tor está muy enfadado porque dijo haber dado di-nero a una chica y que luego la acción «no salióbien». ¿Les pagaban para participar en las acciones? No, no. Solo les pagaba, a veces, el billete de tren. Ellasno lo hacían por dinero, a las acciones acudían las chi-cas que querían ir. Sea por fama, por ideales políticos...pero no era por dinero.

En el documental también salen testimonios dechicas que no entraban en los criterios de bellezade «rubia, guapa y delgada» y que fueron expulsa-das del colectivo. Creo que esto era la locura de Viktor de usar el cuerpoy la sexualidad como arma... Ahora no es así. Siguenusando el cuerpo y la sexualidad, pero de forma másagresiva. Y ahora hay chicas de todo tipo. FEMEN hacambiado.

¿Cree que con esta película empujó al cambio queha habido en FEMEN?

¡Increíble!Sí, en parte supongo que entendió que FEMEN desdeel principio son escándalos. Y también de que es horade pasar página. En realidad, lo que dije era cierto, erasu oportunidad para explicarse.

¿Y ahora, ha desparecido del grupo?Sí, totalmente. Creo que está viviendo en Suiza o enalgún otro sitio... Escapó de Ucrania y ya no trabajamás con las chicas. Ahora es Inna Shevchenko quienlleva el cuartel general en París.

¿Viktor ha visto la película?No, no ha visto la película, y me da miedo que la vea.Bueno, en realidad, imagino que algún día la verápero no tengo ningún contacto con él... Creo que notiene ni mi e-mail. Y yo vivo en Australia, así que...queda lejos.

En el documental hay declaraciones muy fuertes yprofundas, como cuando una de las FEMEN hablade su síndrome de Estocolmo con Viktor.Sí, es increíble lo sinceras que llegaron a ser. En otrasentrevistas, con la prensa, lo tenían todo aprendido,decían lo que tenían que decir. Pero a mí me hablabande cómo se sentían, de sus contradicciones. Hay mo-mentos muy puros e íntimos.

¿Cree que está contribuyendo al feminismo?Nunca me planteé nada de esto. Crecí en Melbourne(Australia), una ciudad progresista. Mi madre y todaslas mujeres que conozco trabajan y hacen su vida. Nosé..., quizás no diría la palabra “contribuir”. No es un

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Es su primera película y ya ha pasado por muchosfestivales.Sí, sí, ¡por demasiados! No, en serio, estoy muy con-tenta, ha sido una pasada. ¡He estado por todo elmundo!

¿Cómo acabó viviendo con FEMEN?Fue como un intercambio; empecé a grabar sus pro-testas y les daba les imágenes que hacía con mi DSLR.A ellas les gustaban porque eran mucho más cine-matográficas que las del resto. Un día les dije quequería hacer una película sobre ellas, pero que notenía dónde quedarme. Pasé con ellas más de un añoen un bloque de viviendas en Kiev, en una cama pe-queñita, y vivía con muy poco dinero. Mi abuela esde un pueblo de Ucrania y había ido hasta allí paragrabar mi historia familiar, pero decidí quedarmemás tiempo.

Filma muchas escenas y entrevistas con FEMENdesnudas ¿Por qué?Cuando convivía con ellas, cada dos por tres teníamosperiodistas en casa. Había mucha atención mediáticay ellas se tenían aprendido lo que iban a decir. Eracomo un teatro, conocían muy bien a los medios decomunicación. Yo quería algo más intimo, más perso-nal. Y vivíamos juntas. Surgió así de natural. Es la vida.

Cuéntenos como fue su viaje a Turquía con ellas.Decía que se preguntaba si era la única «feministaahí».¡Uf!, Turquía fue una de las buenas... estaba ese tío,un empresario de lencería, que lo pagaba todo. A mí

me parecía una contradicción. ¡Es que me parecía in-creíble! Pero, en parte, estuvo bien, las chicas utiliza-ban cualquier excusa para protestar. Aunque tuvieranque ir luego al centro comercial a hacer un poco depromoción...

¿Y usted cómo lo vivía? FEMEN tenía sus flujos y contradicciones... El tema deTurquía, dentro de todo, no fue tan mal; en realidad,a mí me sorprendió y me decepcionó mucho más lafigura de Viktor, descubrir que se guiaban por un mo-delo patriarcal. Me entristecí. Me planteé dejar el do-cumental, pero decidí quedarme y dedicarme a hacerpreguntas.

¿Cómo descubrió la existencia de Viktor?Le veía siempre por ahí. Al principio, no entendía nada.Yo entiendo y hablo ucraniano, pero él hablaba rusocon las chicas. Poco a poco, las chicas confiaron másen mí y empecé a aprender un poco de ruso, tambiénempezaron a dejarme estar cuando planificaban lasacciones.

¿Cómo logró entrevistarle?Me daba todo un poco de miedo. Filmé durante unaño y el último día le dije: «mira, es mi último día, tehe estado filmado en secreto y quiero que salgas en eldocumental y quiero que salgas hablando». Empezó a gritarme: «¡Kitty no puedes hacer esto,

vas a arruinar el movimiento!». Y entonces intentésubirle un poco el ego, le dije: «mira soy tu única opor-tunidad, nadie sabe que existes y yo sé todo lo quehas hecho por FEMEN».

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«Les dije quequería haceruna películasobre FEMENy mealojaron ensu piso, enun bloque deviviendas enKiev. Viví conellas más deun año»

poder... Ahora todo es muy distinto, lograron echar aViktor y comenzar una nueva etapa.

Pero también hay muchas críticas con FEMEN aho-ra. Por ejemplo, con algunas acciones racistas para«liberar a las mujeres musulmanas»...Sí, todo esto no estaba en los inicios de FEMEN. Solotrataban temas ucranianos. Ahora, con el tema de losTopless Jihad... todo esto viene de Francia. Creo quees un tema de FEMEN convirtiéndose en algo inter-nacional. Hay muchas más mujeres, muchas más ra-mas, voces...

Se han publicado rumores en el Estado francés deque uno de los que está financiando FEMEN es elempresario y filántropo judío George Soros... No, no creo, tendría que ver pruebas para creerlo.

Es un poco misterioso todo este tema del dinero yFEMEN.Sí, al principio decían quién les daba dinero. Por ejem-plo, había un editor en Kiev que les financiaba, peroluego dejaron de decir nombres. Para ganar dinero,por ejemplo venden merchandising, las coronas deflores de las acciones... O pintan sus pechos con pin-tura, se pegan un papel y se lo venden a los fans... O lagente les da dinero a través de la web. No creo queeste magnate les esté financiando; además, tienenpoco dinero. El justo para sobrevivir algunas de ellas.Y ahora viven en una casa okupada en París, no esmuy glamuroso.

¿Cómo cree que está cambiando el mundo del docu-mental? Usted lo ha hecho casi todo sola...Sí, una gran parte lo grabé yo sola y lo edité en miportátil. El mundo del documental está cambiandomucho, ¡Es genial! Ahora todo el mundo puede pa-garse una cámara o incluso grabar con el móvil...

¿En qué está trabajando ahora?Estoy trabajando en un nuevo documental sobre de-rechos de la mujer. Aún no puedo contar nada porquehay temas legales de por medio. Pero quiero seguirhaciendo documentales sobre mujeres, y que seansexys e interesantes, que la gente los quiera mirar.

Después de todo este proceso de hacer la película,¿se siente una más de FEMEN?No, no. Me siento una observadora. Además, yo soyaustraliana y ellas ucranianas. Somos muy diferentesculturalmente, no tenemos nada que ver. Pero convivícon ellas y hemos estado muy cercanas. Soy externaal grupo, pero las quiero.

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Creo que cuando haces promesas delante de la cámaray quedan grabadas, te fuerzas a cumplirlas. En el filmempiezan a darse cuenta de que la época de Viktortiene que acabarse y que tienen que organizarse ellas...No creo que yo empujara nada, pero al hacer pregun-tas y hacerlas reflexionar reevaluaron su situación ysus ideas.

Decía que en el estreno, en el Festival de Cine de Ve-necia, se sintieron repudiadas por la prensa.Sí, primero en Venecia fue genial, nos sentíamoscomo estrellas. Estábamos todas juntas de nuevo ehicimos muchas entrevistas. Pero entonces nos di-mos cuenta de que la prensa, en realidad, se queda-

ban con un titular: “Un hombre es el jefe de FEMEN”.A mí me decían que estaba mintiendo... que si traba-jaba para alguien...

En las proyecciones que ha pasado ahora en Hot-Docs, en Toronto, parecía muy orgullosa y compro-metida con FEMEN.¿Sí, te lo parezco? ¿Demasiado?

Bueno, parecía muy contenta cuando hablaba alpúblico sobre lo que hacía FEMEN ahora.No lo sé... Es que cuando filmábamos las entrevistastenía miedo de que no consiguieran organizarse sinViktor. No tenía claro si conseguirían hacerse con el

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«Cuandofilmábamos,

comenzaron a darsecuenta de que la

época de Viktor teníaque acabarse. Ahora

todo es distinto,lograron echar a

Viktor y comenzaruna nueva etapa»