madame d'aulnoy - el pajaro azul

8/18/2019 Madame d'Aulnoy - El Pajaro Azul

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Madame D'Aulnoy

EL PÁJARO AZUL1

Érase una vez un rey muy poderoso, cuyosdominios se extendían en todas direcciones másallá del horizonte, poseedor, además, de riquezasque sobrepasaban todo lo imaginable

!ste soberano tenía una esposa que por desgraciamuri", llenándole de gran desconsuelo su#allecimiento $eme%ante pena #ue motivo de queel rey se encerrase ocho días enteros en un peque&o gabinete, en donde se golpeaba la cabezacontra los muros, de tan a#ligido como se hallabao cual hizo que se temiera por su vida( paraevitar males mayores se pusieron entoncescolchones entre los tapices y los muros, de suerteque si )l se golpeaba no se hiciese ning*n da&o

Ante la situaci"n creada, todos sus s*bditosresolvieron ir a verle para decirle que podíanmitigar tanta tristeza Así pues prepararondiscursos graves y serios los unos, los otrosagradables y hasta divertidos, pero ello no hizoninguna impresi"n en su espíritu pues el reyapenas escuchaba lo que para su bien le decían

+inalmente se present" ante el soberano una damacubierta de velos negros, con una capa, y el tristehábito de los duelos, y llorando y sollozando tan#uerte y alto, que el rey se qued" muy sorprendido

a dama le di%o entonces que no venía como losdemás a disminuir su dolor, sino a aumentarlo, porque nada era más %usto que llorar a una buena

esposa, ya que ella, que había tenido el me%or detodos los maridos, no de%aría de verter lágrimasmientras tuviera dos o%os en el rostro, y paracon#irmarlo, redobl" sus lamentos dedesesperaci"n, a lo que el rey, siguiendo sue%emplo, la imit"

1 !n AA -.//01 !l serial in#antil 2 2ardona 3amio !diciones

4arcelona5 !spa&a -trad 2oncepci"n 2ardona 3amio1 Disponible enhttp566777ccgedicionescom6

Debido a que ambos eran viudos el monarcasimpatiz" prontamente con ella y se entretuvocontándole las bellas cualidades de su queridadi#unta mientras que la dama le re#ería las de suamado esposo, y hablaron tanto y tanto que ya nosupieron de que más hablar sobre su dolor 8cuando la astuta viuda vio que el tema estabaagotado, levant" un poco sus velos y el a#ligidosoberano recre" la mirada contemplando a aquella pobre mu%er inconsolable de sonrosado cutis, queabría una y otra vez con la mayor inocencia, susgrandes y hermosos o%os azules orlados de largas pesta&as negras !l rey la contemplaba con muchaatenci"n y poco a poco empez" a hablar menos desu esposa #allecida hasta que al #inal de%" demencionarla Momento que la viuda aprovech"

para con#iarle que ella deseaba llorar siempre a sumarido, a lo que el rey le pidi" no hiciese eternaesa pena

!n resumen, el monarca hallábase tandeslumbrado que contra%o matrimonio con ella y elnegro luto se cambi" en verde y en color de rosa, pues está visto que es necesario muy a menudoconocer la debilidad de las personas para entrar ensu coraz"n consiguiendo todo lo que se desea

!l rey tenía s"lo una hi%a de su primer matrimonio,que pasaba por ser la octava maravilla del mundo$e llamaba +lorine, porque se parecía a +lora, ladiosa de la primavera, pues así era de lozana, %oven y bella A la princesa no le gustaban lostra%es magní#icos ya que pre#ería las ropassencillas, desde&ando los broches de pedrería por las guirnaldas de #lores que hacían un e#ectoadmirable cuando adornaban sus hermosos

cabellos

+lorine tenía quince a&os en esa )poca en la que su padre volvi" a casarse

a nueva esposa envi" a por su hi%a, nada bella nigraciosa, que había sido educada por su madrina elhada $oussio !l hada se había es#orzado en

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educarla pero sin conseguir ning*n resultado,aunque no por ello la había de%ado de querer pues para eso era su madrina A la muchacha se lallamaba 2erdita porque su rostro poseía las pecasde una cerda( sus cabellos negros eran tangrasientos y tan sucios que nadie los podía tocar, ysu cutis amarillento destilaba aceite

a reina quería a su hi%a con locura y hablaba sincesar de lo encantadora que era 2erdita( como+lorine la aventa%aba en todo, la soberanadesesperábase, entonces, se dedic" a hablarle malde ella a su padre el rey, y no había día en que2erdita y su madre no le hiciesen alguna mala pasada a +lorine

a princesa, que era dulce y espiritual, callaba sin

denunciar tales #echorías

.

!l rey le di%o un día a su esposa que +lorine y2erdita eran ya lo bastante mayores para casarse, yque pronto un príncipe vendría a la corte y )l teníaque darle a una de las dos por esposa

98o quiero :replic" la reina9, que mi hi%a sea la primera en casarse( ella es mayor que la vuestra, y

como es mucho más encantadora, no hay punto decomparaci"n

!l monarca, al que no le gustaban las disputas, di%oa su esposa que lo de%aba todo en sus manos

;oco tiempo despu)s les lleg" la noticia de que elrey 2harmant iba a ir a visitarles


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!l rey 2harmant recel" de los motivos que asíhacían hablar a la reina, pero como no estaba encondici"n de contradecirla, dedic" toda suadmiraci"n a +lorine, y así pasaron las horasrápidamente

Desesperada la reina, y 2erdita inconsolable de no

haber sido la pre#erida, prorrumpieron en grandeslamentaciones, obligando al vie%o monarca aconsentir, que, durante la estancia del rey2harmant, se encerrase a +lorine en una torredonde nadie pudiese verla 8 así se hizo, en e#ecto(tan pronto como la princesa volvi" a susaposentos, cuatro hombres enmascarados lallevaron a lo alto del torre"n de%ándola allídesolada pues comprendi" que lo habían hecho porque el %oven rey demostr" pre#erirla, atracci"nque la ella compartía, y bien hubiera deseado ser su esposa

2omo el rey visitante ignoraba el atropello al queestaba siendo sometida +lorine, esperaba a su vezcon impaciencia la hora de volverla a ver

@abría querido hablar de la princesa con aquellosque el soberano del país del que era hu)sped dehonor le había puesto para su servicio, mas, por

orden de la reina s"lo le contaron cosasdesagradables5 que era coqueta, inestable,malhumorada, que atormentaba a sus amigos y asus dom)sticas, que era muy sucia, y sobre todoavariciosa, ya que le gustaba más vestirse comouna pobre pastora que gastarse el dinero que ledaba el rey su padre para que se comprase ricastelas bordadas en plata

Ante seme%antes detalles, 2harmant su#ría y

sentíase preso de una c"lera que apenas podíamoderar

9o :se decía9, es imposible que el 2ielo haya puesto un alma tan mal hecha dentro de una obrade arte de la naturaleza 2onvengo en que ella noestaba bien vestida y arreglada cuando la he visto, pero su verg=enza demuestra que no halláseacostumbrada a presentarse de tal guisa

B2"mo puede ser malvada con ese aire demodestia y dulzura que seduceC !so no puede pasarme desapercibido, más razonable es pensar que la reina la describe así por celos maternales,ya que la princesa 2erdita es tan #ea y tonta que noresulta nada raro que tenga envidia de la más per#ecta de todas las criaturas

Mientras pensaba de tal #orma, los cortesanos quele rodeaban adivinaron por su expresi"n que no lehabía gustado nada el que le hablaran mal de+lorine, y hubo uno más listo que los demás quien,cambiando de tono y de lengua%e para conocer lossentimientos del %oven, se puso a decir maravillasde la princesa !scuchándole, )l se despert" comode un pro#undo sue&o, resplandeciendo la alegríaen su rostro, y reanud" la conversaci"n, pues alamor se le oculta di#ícilmente ya que aparece entodo, en los labios del enamorado, en sus o%os, enel sonido de su voz( cuando se ama, el silencio, laconversaci"n, la dicha y la tristeza, todo habla dela persona ausente

a reina, con la impaciencia de saber si el rey2harmant estaba enamorado de +lorine, envi" a

buscar a aquellos que había mandado paraindisponer a su hi%astra con el apuesto pretendiente, y se pas" el resto de la nocheinterrogándoles, y todo cuanto le con#iaron sirvi" para con#irmar sus sospechas5 el rey amaba a+lorine

;ero, mientras tanto Bqu) puedo deciros de lamelancolía de esta pobre princesa, prisionera en lahorrible torre en donde la había arro%ado los

hombres enmascaradosC

9!staría menos triste :se decía ella9, si mehubiesen metido aquí antes de conocer a tan gentilrey pues el recuerdo que de )l conservo no puedeservir sino para aumentar mis su#rimientos odudo que es para impedirme el verle, que la reiname trata tan cruelmente >Ay de mí, que la belleza


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con que el 2ielo me ha agraciado, le costará cara ami tranquilidad?

+lorine lloraba tan amargamente que su propiaenemiga hubiese tenido piedad de ella de haber sido testigo de aquel dolor

Así pas" la nochea reina, que pretendía conquistar al rey 2harmantcon todas sus muestras de atenci"n, le envi" tra%esde una riqueza y magni#icencia sin par, hechos a lamoda del país, y la Erden de los 2aballeros delAmor que ella había obligado a instituir a sumarido el rey, el día de sus bodas

$e trataba de un coraz"n de oro esmaltado en color #uego y rodeado de muchas #lechas, en el que seinscribieron estas palabras5 Fna sola me haherido Aparte, la reina había mandado tallar para2harmant un coraz"n de rubí, tan grande como unhuevo de avestruz y en el que cada #lecha era deun solo diamante largo como el dedo, y la cadenade donde este coraz"n pendía estaba hecha de perlas en la cual, la más peque&a pesaba una libra(en #in, que desde que el mundo era mundo, nuncahabíase contemplado cosa seme%ante

!l %oven rey, viendo esto, se qued" tan sorprendidoque permaneci" alg*n tiempo sin poder hablar !nel mismo momento se le present" un libro en elque las ho%as eran de vitela adornadas conminiaturas admirables, las tapas de oro, cargadasde pedrerías y los estatutos de la Erden de los2aballeros del Amor estaban escritos en un estilomuy tierno y galante $e le di%o entonces al rey quela princesa que )l había visto le rogaba que #uese

su caballero y que ella le enviaba ese presente Alescuchar seme%antes palabras el %oven monarcacrey" de buena #e que se trataba de aquella a quienamaba

9>2"mo? :exclam"9 Ba bella princesa +lorine, piensa en mí de una manera tan generosaC

9$e&or :le contestaron9, os equivocáis de nombre(nosotros venimos de parte de la amable 2erdita

9B!s 2erdita quien me quiere por su caballeroC : quiso saber el rey con aire #río y serio9 $iento no poder aceptar seme%ante honor( un soberano no esdemasiado due&o de sí mismo para aceptar cuantoshomena%es quisiera Ebrando como caballero, yodesearía corresponder en la misma medida, por lotanto pre#iero no recibir la gracia que ella medispensa, para no ser indigno

8 devolvi" los corazones, la cadena y el libro en elmismo cesto, retornándoselo a la reina, quiencrey" morir de c"lera %unto con su hi%a por la#orma despectiva con que el rey extran%erorecibiera un #avor tan particular

!n el sal"n del trono, el %oven rey había esperadoencontrar a +lorine, ya que, para verla, la busc"

con la mirada por todas partes, y cualquiera queentrase por la puerta le hacía volver la cabeza bruscamente( por esta raz"n su ma%estad, el %oven2harmant, aparecía inquieto y triste a maliciosareina madre adivinando muy bien que pasaba por su alma, #ingi" ignorar lo que sucedía y todo se leiba en hablarle de diversiones, respondi)ndole )ldistraídamente, hasta que al #inal no pudo más y le pregunt" en d"nde se hallaba la princesa +lorine

9$e&or :respondi" orgullosamente la reina9, el reysu padre ha decidi" que +lorine no salga de susaposentos hasta que ni hi%a 2erdita no se hayacasado

9B8 por que motivo :replic" el %oven rey9, puedetenerse prisionera a tan hermosa doncellaC

9o ignoro :di%o la reina9, pero cuando lo sepadeber)is dispensarme de contároslo

!l rey 2harmant se en#ad" muchísimo ycontempl" a 2erdita con o%os atravesados,sospechando que a causa de aquel peque&omonstruo se le robaba el placer de ver a la princesa !ntonces abandon" prontamente el sal"n, porque la presencia de la reina le en#urecía

2uando volvi" a sus habitaciones, le di%o a un %oven príncipe que le había acompa&ado, y en el


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que tenía puesta toda su con#ianza, que sobornasea una de las damas de la princesa, a #in de que )l pudiese hablar con ella unos momentos

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!l mensa%ero encontr" a varias damas dispuestas a

hablar, y particularmente una, quien le asegur" queaquella misma noche +lorine estaría asomada auna peque&a ventana ba%a que daba sobre el %ardín,y que a trav)s de la cual se podrían hablar, aunquele rog" tomase grandes precauciones para quenadie le siguiera

9;ues :a&adi"9, el rey y la reina son tan severos,que me harían morir si descubriesen que yo he#avorecido la pasi"n de vuestra ma%estad

!l rey 2harmante, satis#echo de haber conseguidosus prop"sitos, le prometi" todo lo que ellaquisiera, y corri" a avisar al padre de +lorine, paraanunciarle que pronto marcharía ;ero a lamalvada con#idente le #alt" tiempo para ir aadvertir a la reina de lo que sucedía y esperar sus"rdenes a reina pens" que era preciso enviar a suhi%a a la ventanita y la instruy" bien, al e#ecto paraque obrase como debía de hacerlo aunque 2erdita

#uese tonta rematadaa noche estaba tan negra que le hubiera sidoimposible al rey 2harmant apercibirse de la trampaque se le tendía, máxime cuando no estaba siquiera prevenido, de suerte que se aproxim" a la ventanacon transportes de indecible alegría

!l %oven rey le di%o a 2erdita aquello que le habríadicho a +lorine para persuadirla de su pasi"n2erdita, aprovechando la coyuntura, le con#i" que

ella era la más desgraciada persona de este mundoal tener una madrastra tan cruel y que habría desu#rir hasta que su hi%a se casase 2harmant leasegur" que si le aceptaba por esposo, sentiríase#eliz de compartir con ella su corona y su coraz"n,y sacándose la sorti%a del dedo, se la puso en el de2erdita, a&adiendo que era una prenda eterna de su#e, y que la princesa no tenía más que elegir el

momento de partir 2erdita respondi" lo me%or que pudo( )l se daba cuenta de que ella no decía nadaque valiese la pena, mas lo achac" a que el miedode verse sorprendida por la reina le quitaba elexpresarse con mayor desenvoltura +inalmente2harmant la de%" con la condici"n de que volvieseal día siguiente a la misma hora, promesa que ellahizo del todo muy convencida

;or su parte la reina, habiendo sabido delventuroso encuentro, se las prometi" muy #elices

2oncertada la cita, el rey #ue a buscar a quiensuponía era +lorine, con una silla voladora quearrastraban unas ranas aladas, pues un amigohechicero le había hecho este presente

a noche estaba muy oscura, 2erdita sali"misteriosamente por una puertecilla, y el rey, quela esperaba, la recibi" en sus brazos %urándole cienveces una #idelidad eterna ;ero como )l no estabadispuesto a via%ar mucho tiempo en su sillavoladora sin casarse con la princesa a quienamaba, le pregunt" si quería que se celebrasen yalas bodas !ntonces 2erdita repuso que tenía por madrina a un hada que se llamaba $oussio y queestaban invitados a ir a su palacio 2omo el rey no

sabía el camino, tuvo que rogarles a las ranasvoladoras que les condu%eran a la mansi"n delhada, cosa que )stas, al conocer el mapa generaldel universo, les llevaron a su destino en pocotiempo

!l palacio se encontraba tan iluminado, que apenasllegar, el rey se habría dado cuenta de su error si la princesa no hubiera estado cuidadosamentecubierta por sus velos 2erdita pidi" ver a su

madrina, y, en un aparte, le cont" como habíaenga&ado a 2harmant suplicándole que loapaciguase

9>Ay, hi%a mía :exclam" el hada9, la cosa no serátan #ácil( )l ama demasiado a +lorine( estoy seguraque va a ser muy di#ícil?


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Mientras tanto el rey las esperaba en una sala endonde los muros eran de diamante, tan claros ylimpios que pudo ver a trav)s suyo a $oussio y a2erdita, hablando %untas !l rey crey" so&ar

9B2"mo :se di%o9, he sido traicionadoC, Blosdemonios han traído a esta enemiga de nuestro

#elicidadC, Bviene ella a obstaculizar nuestromatrimonioC B8 d"nde está mi querida +lorineque no aparece por ning*n sitioC( >tal vez su padre puede haberla hecho seguir?

Así pensaba el %oven rey mil cosas quecomenzaban a llenarle de desolaci"n, pero en esoel hada y su ahi%ada entraron en la sala y $oussiole di%o en tono decidido5

9Gey 2harmant, he aquí a la princesa 2erdita aquien vos hab)is dado vuestra palabra( siendo miahi%ada deseo que os cas)is con ella enseguida

9B8oC :grit" )l encolerizado9, >yo no me casar)con este peque&o monstruo? os me cre)is de unnatural bien d"cil, cuando me hac)is tales proposiciones( sabed que yo no le he prometidonada( si ella ha dicho lo contrario, ella ha

9o acab)is :interrumpi" $oussio9, y no seáis tan

atrevido como para #altar a vuestra palabra

92onsiento :replic" el rey9 en respetaros ya quesois un hada, siempre que vos me devolváis a mi princesa

9B!s que acaso yo no lo soy, per%uroC :protest"2erdita ense&ándole su sorti%a9 BA qui)n has dadoeste anillo en prenda de tu palabraC B2on qui)nhas hablado desde la ventanita, si no es conmigoC

9BAsí pues :repuso )l9, he sido decepcionado yenga&adoC o, no, no estoy dispuesto a tolerar más burlas >amos, vamos, mis ranas, quiero partir a toda prisa?

9>Eh? :di%o $oussio9, eso no está en vuestro poder si yo no consiento

!l hada le toc" con su varita y los pies del rey dequedaron soldados al pavimento, como si hubieransido clavados

H

9>Aun cuando me lapidaseis :exclam" el rey9, aun

cuando me desollarais, yo no sería de ninguna otraque no #uese +lorine? !stoy resuelto, entonces pod)is hacer uso de vuestro poder en cuantodese)is

$oussio emple" la dulzura, las amenazas, las promesas, los ruegos 2erdita llor", grit", gimi",se en#ad", se apacigu" !l rey no decía ni una palabra, contemplándolas a las dos conindignaci"n y sin responder a toda aquella

palabreríaAsí pasaron veinte días y veinte noches sin queellas cesasen de hablar, sin comer, sin dormir, sinasearse ;or #in $oussio, ya #atigada, le di%o al rey5

94ien, vos sois de una terquedad que no quiereentender razones( elegid, o estar siete a&os en penitencia por haber dado vuestra palabra sintenerla, o casaros con mi ahi%ada

!l rey 2harmant, que había guardado un pro#undosilencio, di%o de repente5

9@aced conmigo lo que queráis, porque ya estoyharto de tanta necedad

9>ecio sois vos :exclam" 2erdita encolerizada9,que hab)is venido a mi país para no decirme sinoin%urias y #altar a vuestra palabra( si #uerais unhombre de honor, Bos portaríais asíC?

9@e aquí unos reproches divertidos :di%o el rey entono risue&o9 ed si estoy equivocado al no tomar por esposa a una persona tan agradable como vos

9>;ues +lorine no lo será nunca, no, no y no? : chill" $oussio encolerizada9 >8 t* no tienes sinoque salir volando por esa ventana ya que serásdurante siete a&os un ;á%aro Azul?


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!n ese mismo momento el rey cambi" de #igura5sus brazos se cubrieron de plumas convirti)ndoseen alas, sus piernas y sus pies se trans#ormaron ennegros y menudos, le crecieron u&as curvas, sucuerpo empeque&eci" cubri)ndose todo el de #inas plumas de color azul celeste, sus o%os se hicieronredondos y brillantes como soles, su nariz no #uemás que un pico de mar#il, creci" sobre su cabezauna cresta blanca que #orm" una corona, y cuandoquiso hablar cant"

Al comprender el estado en el que se hallaba,lanzando un grito doloroso, ech" a volar para huir del #unesto palacio de $oussio

;reso de la melancolía, #ue de rama en rama biensobre los mirtos, bien sobre los cipreses :pues no

eligi" sino los árboles consagrados al amor o a latristeza9, mientras cantaba apenado su mala#ortuna y la de +lorine

9B!n que lugar la han ocultado sus enemigosC : lamentábase9 B!n qu) víctima se ha convertidoBa barbarie de la reina le permite todavíarespirarC BD"nde la encontrar)C B!stoycondenado a pasar siete a&os sin ellaC ;uede ser que durante ese tiempo +lorine se case con otro, y

yo perder) para siempre la esperanza que sostienemi vida

Iales diversos pensamientos a#ligían al ;á%aroAzul hasta el punto de que quería de%arse morir

;or otro lado, el hada $oussio devolvi" a 2erdita asu madre, que estaba inquieta respecto a como podían haber ido las cosas Mas cuando )sta vio asu hi%a y ella le cont" cuanto había sucedido, la

soberana se en#ureci" de manera terrible, cayendosu regia c"lera sobre la pobre +lorine

9!s preciso :di%o la reina9, que ella se arrepientamás de una vez de haber enamorado a 2harmant

2erdita y su madre subieron a la torre, vestida lamuchacha con los más suntuosos ropa%es, ademáslucía una corona de diamantes en la cabeza y lastres hi%as de los más ricos nobles del estado

llevaban la cola de su manto real, y, por si #uera poco, mostraba en su dedo la sorti%a del rey2harmant, que +lorine advirti" el día que amboshablaron por primera vez

a pobre princesa se vio desagradablementesorprendida al contemplar a 2erdita adornada con

tan pomposa aparatosidad

9@e aquí a mi hi%a que viene a traeros los regalosde su boda :le in#orm" la reina95 el rey 2harmantse ha casado con ella pues la ama con locura ynunca ha estado más contento

Acto seguido se pusieron delante de ella telas deoro y de plata, pedrerías, enca%es, cintas, que ibandentro de grandes cestas de #iligrana de oro

Mientras le presentaba todas estas cosas, 2erditano cesaba de hacer brillar el anillo del rey, desuerte que la princesa +lorine no podía dudar de sudesgracia

!lla entonces exclam" desesperada, que ale%arande su vista todos esos #unestos presentes( pues noquería sino vestirse de negro o bien deseaba prontamente morir $e desmay" y la cruel reina,satis#echa de haber conseguido sus prop"sitos, no

permiti" que se la socorriese, de%ándola sola en elmás deplorable estado, y #ue a contarlemalignamente al rey, que su hi%a +lorine estabahaciendo tantas extravagancias que era precisotenerla bien vigilada y no de%arla salir del torre"n,a lo que el monarca repuso que hiciese lo quequisiera que por su parte nada tenía que ob%etar

J

2uando la princesa volvi" de aquel

desvanecimiento re#lexion" sobre los mane%os delos que se le hacía víctima, en el malvadotratamiento que recibía de su indigna madrastra yla esperanza que había perdido para siempre decasarse con el rey 2harmant( su dolor #ue tan vivoque llor" toda la noche, en seme%ante estado se #uea la ventana, donde se lament" amargamente


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2uando el día se anunci", +lorine cerr" la ventana pero sigui" llorando

a noche siguiente volvi" a abrir la ventanalanzando pro#undos suspiros entre sollozos,derramando un torrente de lágrimas( de nuevo, alamanecer, se recluy" en su aposento, cerrando otra

vez la ventana

Mientras tanto el rey 2harmant, o me%or dicho, el bello ;á%aro Azul, no cesaba de revolotear en tornoal palacio ya que sospechaba que su querida princesa se hallaba prisionera, y, si ella se que%abatan tristemente no eran menores suslamentaciones

$e acercaba cuanto podía a las ventanas, para

mirar dentro de las habitaciones, pero el temor deque 2erdita le descubriese sospechando que #uese)l, le impedía realizar aquello que pretendía llevar a cabo

9;ues me va la vida :se decía a sí mismo9, si estasmalvadas me descubren, querrán vengarse !s preciso que yo me ale%e para no verme expuesto a peligro alguno

!stas razones le obligaron a tomar grandes

precauciones, y normalmente cantaba s"lo por lanoche

!l ;á%aro Azul había visto, delante de la ventanaen donde se asomaba +lorine, un cipr)s de prodigiosa altura, y allí se #ue a colocar, entoncesescuch" a una persona que se lamentaba5

9B$u#rir) todavía mucho tiempoC :se que%aba9, Blamuerte no vendrá a liberarmeC Kuienes la temen

desean verla le%os( yo la anhelo y la cruel huye demí >Ah, bárbara reina?, Bqu) te he hecho yo paraque me retengas dentro de un a#rentosocautiverioC Bo tienes otros lugares en dondeencerrarmeC( no haces más que convertirme entestigo de la #elicidad que tu indigna hi%a dis#rutacon el rey 2harmant

!l ;á%aro Azul no había perdido una palabra deestas recriminaciones quedándose muysorprendido y esper" el día con impaciencia paraver a la dama a#ligida, pero antes de quedespuntase, ella había cerrado la ventanaretirándose

!l pá%aro, curioso, no #alt" a su cita la siguientenoche en la que brillaba el claro de luna, entoncesvio a una muchacha en la ventana de la torre, quecomenzaba a lamentarse5

9>+ortuna :clamaba ella9, t* que me o#recías unreino, t* que me habías entregado el amor de mi padre, Bqu) te he hecho yo para arro%arme de ungolpe en los más amargos su#rimientosC, Bdebo, amis pocos a&os, empezar a conocer tu

inconstanciaC? >Getorna si es posible( te pidocomo *nico #avor acabar con mi #atal destino?

!l ;á%aro Azul escuchaba y cuanto más escuchabamás persuadíase de que era su amable princesa laque se lamentaba

9Adorable +lorine :le di%o9, maravilla de nuestrosdías, Bpor qu) deseáis concluir tan prontamente losvuestrosC( los males que os ensombrecen no son

irremediables9>Eh? :exclam" ella9, Bqui)n me habla de unamanera tan consoladoraC

9Fn rey desgraciado :repuso el pá%aro9, que osama y que no amará a nadie más que a vos

9Fn rey que me ama : repiti" la princesa9, Bseráesta una trampa que me tiende mi enemigaC,aunque, en el #ondo, Bqu) iba a ganar con esoC $i

lo que ella busca es descubrir mis sentimientos, de buen grado se los revelar)

9o, mi princesa :respondi" 2harmant9 el amanteque os habla no es capaz de traicionaros

Acabando de decir estas palabras, )l vol" hasta laventana +lorine tuvo de repente mucho miedo deun pá%aro tan extraordinario que hablaba lo mismoque si #uese un hombre aunque conservase el


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peque&o tono de voz de un ruise&or, pero la belleza de su pluma%e y lo que le di%o, latranquilizaron

9BMe ha sido permitido veros otra vez, princesamíaC :exclam" )l9 B;uedo yo experimentar un placer seme%ante sin morir de gozoC ;ero, >ay de

mí?, que esta #elicidad se ensombrece por vuestrocautiverio y el estado en el cual la malvada$oussio me ha convertido por siete a&os

9B8 qui)n sois vos pá%aro encantadorC :quisosaber +lorine acariciándole

9os hab)is pronunciad mi nombre :di%o el rey9 y,sin embargo no me reconoc)is

9>2"mo, el más grande rey del mundo, el rey2harmant :exclam" la princesa9, es este peque&o pá%aro?

9>Ay de mí? :repiti" )l9, bella +lorine, no es másque la verdad y si cualquier cosa puedeconsolarme es que yo haya pre#erido esta pena aaquella de renunciar a la pasi"n que siento por vos

9B;or míC :se sorprendi" +lorine9 >o pretendáisenga&arme pues yo s) que os hab)is casado con

2erdita? @e reconocido vuestra sorti%a en sudedo, yo la he visto ornada de relucientesdiamantes tal como vos se la hab)is dado Mihermanastra vino a insultarme en mi triste prisi"n,luciendo rica corona y cubierta con un manto realque vos le habíais regalado mientras yo permanecía cargada de cadenas

2opyright del dibu%o5 !strella 2ardona 3amioL

9Bos hab)is visto a 2erdita con tanto boatoC :lainterrumpi" el rey9( Bsu madre y ella han osadocontaros que tales %oyas eran regalo míoC >Eh2ielos?, Bes posible que yo escuche estas mentirastan ultra%antes y que no me pueda vengar comodeseoC $abed que ambas han querido

embaucarme, pues utilizando vuestro nombre mehan enga&ado para que huyese con la #ea 2erdita, pero, en cuanto he descubierto mi error, he queridoabandonarla, pre#iriendo ser ;á%aro Azul siete a&osseguidos antes que #altar a la #idelidad que osdebo

+lorine sentíase tan dichosa al escuchar hablar a suamado rey 2harmant, que ya ni se acordaba delin#ortunio de su prisi"n, entonces, Bqu) no le diríaella para consolarle de su desventura y para persuadirle de que no haría menos que )l habíahecho por ellaC

!l día amaneci", la mayoría de los o#iciales habíansido ya relevados y el ;á%aro Azul y la princesaconversaban todavía, hasta que se separaron con

mucha tristeza luego de haberse prometido quetodas las noches se entretendrían así

a alegría de haberse encontrado era tan grandeque no existen t)rminos capaces de expresarla(cada uno por su lado daba gracias al amor y a la#ortuna, aunque +lorine no de%ase de estar inquieta por el ;á%aro Azul

9BKui)n le protegerá de los cazadores :se decía9, o

de las garras de las águilas, o de cualquier buitrehambriento que puede devorarlo con tanto apetito,como si nunca hubiera sido un gran reyC >Ehcielos?, Bqu) sería de mí si sus plumas ligeras y#inas, llevadas por el viento, vinieran a ni prisi"n para anunciarme el desastre que temoC

!stos pensamientos la hicieron cerrar los o%os, pues, cuando se ama, las aprensiones seme%anverdaderas y aquello que uno creyera imposible en

otro tiempo se torna real en este, de suerte que pas" la %ornada llorando hasta que lleg" la hora devolver a la ventana

!l ;á%aro maravilloso, oculto entre las ramas de unárbol, había estado todo el día ocupado pensandoen su bella princesa


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9>Ku) contento estoy :re#lexionaba9, al haber vuelto a encontrarla, cuán atractiva es, y comoaprecio las bondades con que ella me distingue?

!l enamorado rey empezaba a contar todos losminutos de la larga penitencia que impedían su boda con +lorine y %amás se ha deseado el #in de

una condena con mayor pasi"n

2omo )l quería hacer ob%eto a su amada de todaslas galanterías de las que era capaz, vol" hasta lacapital de su reino, #ue a su propio palacio,entrando en su gabinete por el cristal de unaventana que estaba roto, y cogi" unos pendientesde diamantes, tan per#ectos y tan bellos que nohabía en el mundo otros que se le aseme%aran,llevándoselos por la noche a +lorine con el ruego

de que se los pusiera

92onsentir) :di%o ella9, si vos venís durante el día, porque, mientras os hable por la noche no me los pondr)

!l ;á%aro le prometi" que vendría al torre"n a lahora que ella quisiese, entonces +lorine se puso los pendientes y la noche transcurri" hablando, comohabían pasado las otras

A la ma&ana siguiente el ;á%aro Azul retorn" a sureino, #ue a su palacio, entr" en su gabinete por elagu%ero en el vidrio de la ventana y le llev" losmás ricos brazaletes que nunca se hubieran visto pues estaban tallados en miles de #acetas y en unasola esmeralda

9BAcaso pensáis :le amonest" la princesa9, quemis sentimientos hacia vos tengan necesidad de ser cultivados por medio de presentesC >Ku) mal me

conoc)is, se&or?

9o, se&ora :replic" )l9, yo no creo que las bagatelas que os o#rezco sean necesarias paraconservar vuestra ternura, pero la mía estaríaherida si descuidase alguna ocasi"n dedemostraros mis atenciones, así, cuando no mehalle a vuestro lado, estas peque&as %oyas meharán presente en vuestro recuerdo

+lorine le dio mil gracias a las que )l respondi"con otras tantas de igual intensidad

A la siguiente noche, el ;á%aro enamorado no #alt"en llevar a su bella un relo% de un tama&orazonable, que estaba dentro de una perla( laexcelencia del traba%o sobrepasaba cualquier cosa

imaginable

9!s in*til que me regal)is un relo% :di%o ellaamablemente9, pues cuando vos permanec)isale%ado de mí, las horas me parecen interminablesy cuando vos estáis a mi lado, ellas se deslizancomo un sue&o, por tanto, no puedo estimar su %usta mesura

9>Ay de mí, princesa mía? :exclam" el ;á%aro

Azul9, yo tengo la misma opini"n que vos9$) que vos su#rís por conservar mi amor :replic"ella9, mas creo que hab)is llevado la amistad y laestima demasiado le%os, mi pobre enamorado

2ada amanecer, el ;á%aro volaba hasta el #olla%e delos árboles, en donde las #rutas le servían dealimento Algunas veces todavía cantaba y su vozmaravillaba a los caminantes, ellos la escuchabany no veían a nadie suponiendo entonces que

quienes cantaban eran espíritus

!sta opini"n se extendi", tanto, que nadie osabaentrar en el bosque( se contaban mil aventuras#abulosas que no habían sucedido y el terror general hizo la seguridad particular del ;á%aroAzul

o pasaba día, ning*n día, sin que )l llevara un presente a +lorine( tan pronto era un collar de perlas, o sorti%as de las más rutilantes y me%or traba%adas, broches de diamantes, agu%as, ramos de pedrería que imitaban el color de las #lores, librosagradables, medallas, en #in, que +lorine ibaamasando riquezas maravillosas con las que ella seadornaba por las noches para complacer al rey, y


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durante el día, no teniendo lugar me%or, lasocultaba deba%o de la pa%a que le servía de %erg"n

Dos a&os transcurrieron de esta manera sin que+lorine se que%ara una sola vez de su cautividadB8 por qu) se iba a que%ar y de qu)C( ella tenía el placer de hablar toda la noche con aquel a quien

amaba, siempre dici)ndose cosas bonitas Aunqueno veía a nadie y el ;á%aro se pasaba el día en el bosque, nunca de%aban de tener mil novedades quecontarse( los temas eran inagotables ya que en sucoraz"n había abundante argumentos para eldiálogo

!n tanto todo esto acontecía, la malvada reinacausante de del cruel encarcelamiento de +lorine,realizaba es#uerzos in*tiles por casar a 2erdita,

pues enviaba emba%adas para proponer, a todos los príncipes de quienes tenía noticia, la mano de suhi%a, pero en cuanto ellos llegaban a palacio y laveían, despedíanse bruscamente

9$i se tratase de la princesa +lorine, esa o#ertasería acogida con alegría :a#irmaban loscandidatos9, pero 2erdita puede quedarse solterasin que nadie se preocupe por eso

Al oír tales palabras, madre e hi%a, montaban enc"lera contra la inocente princesa a quien ambasatormentaban

9>2"mo, a pesar de su prisi"n, esta arrogantecriatura constituye un obstáculo para nosotras? :selamentaban9 o se puede perdonar los malosmomentos que nos hace vivir( +lorine debemantener correspondencia secreta con los paísesextran%eros, convirtámosla es una criminal de

estado, es preciso convencer a todos para que se lacrea una traidora

Ambas terminaron su conciliábulo muy tarde( eraya más de media noche cuando madre e hi%aresolvieron subir al torre"n para interrogarla

+lorine estaba con el ;á%aro Azul en la ventana,engalanada con pedrerías, peinados sus hermososcabellos con un cuidado que no era el normal en

las personas a#ligidas, su habitaci"n y su lecho sehallaban cubiertos de #lores y unas barras deincienso que acababa de encender, expandían un per#ume delicioso a reina escuch" en la puerta ycrey" oír cantar una melodía a dos voces pues+lorine poseía una voz celestial, y el peque&oconcierto concluy" entre suspiros

9>Ah, 2erdita, hi%a mía, en verdad hemos sidotraicionadas? :exclam" la reina abriendo bruscamente la puerta e irrumpiendo en la celda

BKu) hizo +lorine al ver aquelloC, pues cerrar rápidamente la ventana, para dar tiempo a la huídadel ;á%aro Geal ya que le preocupaba más lasalvaci"n del rey 2harmant que la suya propia, sinembargo, )l no se sinti" con ánimos de huída( sus

o%os perspicaces habían descubierto el peligro alque la princesa se hallaba expuesta @abía visto ala reina y a 2erdita, sinti)ndose muy a#ligido de nohallarse en estado de de#ender a su amada

Madre e hi%a se aproximaron a +lorine, como#urias que la quisieran devorar

9>8a sabemos de vuestras intrigas contra el estado :exclam" la reina9( no pens)is que vuestro rango

os salve del castigo que merec)is?9B8 con qui)n conspiro yo, se&oraC :replic"+lorine9Bo sois vos mi carcelera desde hace dosa&osC B@e visto acaso a otras personas que nosean aquellas que vos me hab)is enviadoC

Mientras ella hablaba, la reina y su hi%a laexaminaban con gran sorpresa pues lasdeslumbraban su admirable belleza y suextraordinaria aderezo

9B8 de d"nde vienen, se&ora, 9quiso saber lareina9, estas pedrerías que brillan más que el solCBos vais a hacer creer que existen minas dentrode este torre"nC

9as he encontrado :repuso +lorine9, eso es todolo que s)


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a madrastra la observ" atentamente para penetrar hasta el #ondo de su coraz"n y ver que sucedía

9osotros no somos vuestras inocentes víctimas : di%o la reina9 aunque vos creáis que nos pod)isenga&ar( sabemos princesa, todo lo que hac)isdesde la ma&ana hasta la noche $e os han dado

todas estas %oyas para obligaros a vender el reinode vuestro padre

9BAcaso me hallo en disposici"n de hacerloC : pregunt" ella con una sonrisa desde&osa95 Bunain#ortunada princesa que languidece entre lascadenas desde hace largo tiempo puede hacer mucho en un complot de esa naturalezaC

9B8 por qu), entonces :replic" la reina9, estáis vos

peinada con tanto esmero, vuestra habitaci"n llenacon el olor del incienso, y vuestra persona tanmagní#ica que no tendríais par en medio de lacorteC

9Iengo bastante en donde elegir :di%o la princesa9,entonces, no es nada extraordinario que meconceda algunos momentos para arreglarme y que pase tantos otros llorando mis desgracias( no creoque esto pueda reprochárseme

9>aya, vaya :di%o la reina9 conque la inocentecriatura no tiene trato alguno con el enemigo?

N

8 ella misma se puso a buscar por todas partes,revolviendo hasta en la pa%a en la cual, como erade esperarse, encontr" una gran cantidad dediamantes, de perlas, de rubíes, de esmeraldas ytopacios, cuya procedencia ignoraba

a reina había resuelto colocar en cualquier sitio papeles que incriminasen a su hi%astra la princesay, cuando nadie la miraba quiso esconderlos en lachimenea, mas por #ortuna el ;á%aro Azul estabaahí arriba escondido, y desde allí, con su vista delince podía verlo todo y tambi)n escuchar cuantohablaban

9>igila, +lorine,, he aquí a tu enemiga que quierehacerte aparecer como traidora? :exclam"

Aquella voz inesperada, espant" tanto a la reinaque no se atrevi" a llevar a cabo su plan

92omprobad se&ora 9di%o la princesa9, como los

espíritus del aire me son #avorables9o que yo creo :contest" la reina llena de c"lera9,es que los demonios se interesan por vos, mas a pesar de ello vuestro padre sabrá hacer %usticia

9>Kuisiera el 2ielo :exclam" +lorine9 no temer más que a la #uria de mi padre? a vuestra,se&ora, es mucho más terrible

a reina la de%", trastornada por cuanto acababa de

ver y escuchar, procediendo a pedir conse%o sobrelo que podía hacer en contra de la princesa( se ledi%o que si cualquier hada o hechicero la tenía ba%osu protecci"n, el verdadero secreto para irritarlosconsistiría en ocasionarle nuevos su#rimientos 8que ello serviría para descubrir sus intrigas areina estuvo de acuerdo y envi" a dormir en elcalabozo de +lorine a una muchacha contrahechaque tenía la orden de decirle a la prisionera que lahabían puesto a su servicio, pero, Bc"mo poder

creerlaC

a princesa la mir" como a una espía y no pudosentir sino un violento dolor en su coraz"n

9>o hablar) más con este ;á%aro que me es tanquerido? :se decía9 Él me ayudaba a soportar missu#rimientos, yo consolaba los suyos, nuestraternura nos bastaba BKu) hará )l, qu) har) yoC

8 pensando todas estas cosas, ella derramabaabundantes lágrimas

Iampoco osaba acercarse a la ventana cuando leoía revolotear alrededor aunque estaba deseosa deabrirla, pero no lo hacía para no exponer la vida desu amado

+lorine se pas" un mes entero sin abrir la ventanacon la consiguiente desesperaci"n del ;á%aro Azul


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que no cesaba de lamentarse, Bc"mo vivir sin ver asu princesaB( )l no había experimentado nunca losmales de la ausencia ni tampoco los de lametamor#osis, pero despu)s de darle muchasvueltas a la cabeza, no encontraba nada que leconsolase, y buscaba, pues, in*tilmente remediostanto para la una como para la otra, pero resultabain*til, ya que nada podía mitigar su dolor

a espía de +lorine, que velaba día y noche,despu)s de un mes, se rindi" al sue&o quedándose pro#undamente dormida a princesa se apercibi"y abriendo diligentemente su peque&a ventana, pronunci" estas palabras

9>;á%aro Azul, color del tiempo, acude a mí almomento?

!l ;á%aro las escuch" tan claramente que vol"raudo hacia la ventana

>Ku) alegría la de verse con la de cosas que setenían que decir? !l amor y las protestas de#idelidad se renovaron mil y mil veces, la princesallor" inconteniblemente y su enamorado hizo todolo posible para consolarla

!n #in, que lleg" el amanecer y tuvieron que

separarse( sin que la carcelera se despertase, ellosse despidieron

;ero como a la siguiente noche todavía estabadurmiendo la espía, +lorine corri" a su ventana,exclamando igual que la primera vez5

9>;á%aro Azul, color del tiempo, acude a mí almomento?

8 el ;á%aro volvi", pasando ambos la velada comola anterior maravillados de que la espía durmiesetanto, entonces pensaron que así sería siempre, y,en e#ecto, la tercera noche transcurri" #eliz, pero ala siguiente, la durmiente, habiendo oído alg*nrumor, #ingiendo dormir, estuvo atenta a lo que sedecía, despu)s espi" a hurtadillas y vio al claro deluna al más bello pá%aro del universo que lehablaba a la princesa, que la acariciaba con su

pata, que la besaba dulcemente, y escuchandomuchas cosas de su conversaci"n qued"se at"nita5 pues el ;á%aro conversaba cual un enamoradogalán, respondi)ndole la bella +lorine con sumaternura

Al llegar la aurora ambos se despidieron y, como

si tuvieran el presentimiento de su pr"ximadesgracia se ale%aron con una pena extrema a princesa se arro%" sobre el lecho ba&ada enlágrimas y el rey volvi" a acomodarse en la ramadel árbol

a carcelera de +lorine corri" a las habitaciones dela reina para contarle todo cuanto había escuchadoy visto a reina mand" a por 2erdita y susconse%eros y ellos deliberaron largo tiempo hasta

convenir que el ;á%aro Azul era el rey 2harmant

9>Ku) a#renta:exclam" la soberana9, 2erdita, quea#renta? !sta insolente princesa a quien yo creíatan a#ligida, gozando tranquilamente de lasagradables conversaciones con nuestro ingrato>Ah, me vengará de una manera tan sangrante quese hablará de ello?

2erdita le rog" de no perder siquiera un instante y

como ella estaba más interesada en el asunto quela propia reina, se moría de impaciencia pensandotodo aquello que haría por llenar de desolaci"n alos enamorados

a reina devolvi" la espía al torre"n, ordenándoleno delatar ni sospecha, ni curiosidad y de parecer más dormida que de ordinario a espía acost"setemprano y se puso a roncar a más y me%or, y la pobre princesa, enga&ada, abriendo la ventana,

exclam"59>;á%aro Azul, color del tiempo, acude a mí almomento?

Mas ella le llam" toda la noche in*tilmente( )l noapareci" por ning*n sitio BKu) había sucedidoC, pues que la malvada reina había hecho cortar elcipr)s y cuando )ste se derrumb" abatido y el pá%aro enredado entre las ramas, cay" con el árbol


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que le servía de re#ugio, los esbirros se ensa&aroncon la pobre ave hasta el punto que el rey2harmant, muy mal herido, a duras penas pudoesconderse de%ando como huella un largo reguerode sangre

!n una circunstancia seme%ante, Bqu) hubiera

podido hacer la bella princesa para consolar al;á%aro GealC

$in duda alguna la pobre se habría muerto de laimpresi"n vi)ndole en un estado tan deplorable

!n cuanto a )l, no quería salvarse, persuadido deque había sido +lorine quien le había hecho unamala pasada

9>Ah, bárbara? :gemía dolorosamente9, Bes asícomo pagas la pasi"n más pura y más tierna queexistirá %amásC B$i deseabas mi muerte, por qu) nome la dabas t* mismaC ;ues viniendo de tu manome hubiera sido placentera >8o, que marchaba areunirme contigo lleno de amor y de con#ianza, yoque su#ría por ti en silencio y t* me hassacri#icado, la más cruel de las mu%eres?

>a reina era nuestra enemiga com*n y te hasreconciliado con ella a mis expensas !res t*,

+lorine, t*, quien me apu&alas, t* has empu%ado lamano de 2erdita conduci)ndola hasta mi pecho?

Ian #unestas ideas le dominaron hasta el punto quedese" morir

;ero aquel amigo suyo hechicero, que había vistoregresar a sus dominios el carrua%e tirado por lasranas voladoras, sin que el rey estuviese en suinterior, empez" a preocuparse preguntándose que

es lo que podía haberle sucedido, por lo tanto,recorri" ocho veces toda la Iierra para buscarlo,sin que le #uera posible encontrarle

Dando estaba la novena vuelta, cuando pas" por el bosque en el cual se hallaba el ;á%aro Azul y, derepente, tuvo un presentimiento, entonces grit"cinco veces con todas sus #uerzas5

9>Gey 2harmant, rey 2harmant, Bd"nde estáisC?

!l rey reconoci" la voz de su me%or amigo

9Acercaos :le di%o9, y en este árbol ver)is aldesgraciado rey que vos amáis, ahogado en su propia sangre

!l mago, completamente sorprendido, miraba en

todas direcciones sin ver nada98o soy el ;á%aro Azul :susurr" el rey con una vozd)bil que languidecía por momentos

Al escuchar estas palabras el hechicerorápidamente le hallOo re#ugiado en su peque&onido Etro que no hubiese sido )l se habríaasombrado mucho, pero no el hechicero y comodominaba el arte de la nigromancia, le bastaron pocas palabras para detener la sangre que seescapaba del cuerpo del ;á%aro Azul, y con hierbasque encontr" por el bosque, sobre las cuales recit"un par de con%uros, pudo curar al rey tan per#ectamente que lo de%" como si nunca hubieraestado herido

PP

!l mago le rog" entonces le contase que le habíasucedido para verse en seme%ante estado y le diera

noticia de qui)n le hiriese de #orma tan cruel

!l %oven rey satis#izo su curiosidad explicándoleque era +lorine la persona que revelase el misteriode sus visitas secretas, y que, para hacer las pacescon la Geina había consentido que derribaran elcipr)s permitiendo así que le hiriesen de tan perversa manera 2harmant se lament" mil veces por la in#idelidad de la princesa y le asegur" queme%or se hubiera estimado morir, antes de haber

conocido la maldad de su coraz"n

$u amigo al oírle, se en#ado contra ella y con todaslas mu%eres aconse%ándole al rey que la olvidase

9>Ku) desgracia sería la vuestra :le aconse%"9, sivos #uerais capaz de amar por más tiempo a estaingrata? Despu)s de lo que ella os ha hecho, hayque temerla


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!l ;á%aro Azul no pudo estar de acuerdo( todavíaamaba demasiado a +lorine, y el hechicero, queconocía sus sentimientos a pesar del cuidado queel rey se tomaba para ocultarlos, le di%o cona#abilidad que el tiempo lo pondría todo en su sitiovi)ndose las cosas mucho más claras

!l pá%aro real se convenci", suplicando a su buenamigo que le llevase consigo instalándole en una %aula en donde pudiera estar a cubierto de lasgarras de los gatos y de toda arma mortal

9;ero :re#lexion" el mago9, Bcontinuareis voscinco a&os todavía en este estado tan deplorable y poco conveniente para vuestros asuntos y vuestradignidadC ;ensad que los monarcas enemigos oscreen muerto y pretenden invadiros el reino, lo

cual signi#ica que pod)is perderlo antes de haber recobrado vuestro primitivo aspecto

9Bo podría :replic" el rey9, regresar a mi palacioy gobernar como he hecho siempreC

9>Eh :exclamo su amigo9, la cosa es di#ícil?, porque quien ha obedecido a un hombre no querráobedecer a un ave( si os respetaban siendo rey alestar rodeado de grandeza y de #asto, os

arrancarían todas las plumas en vi)ndoosconvertido en un peque&o pá%aro

9>Ah, debilidad humana, que te deslumbras por un brillante exterior? :exclam" el rey9, aunque eso nosigni#ique nada para el m)rito y la virtud, cuándecepcionante eres? 4ien :continu"9, seamos#il"so#os, despreciemos aquello que no podemosobtener, así las cosas no serán tan malas

98o no me rindo a*n :di%o el mago9( espero

encontrar algunos recursos que puedan ayudarnos

Mientras tanto, la triste +lorine se pasaba los díasy las noches en la ventana, repitiendo sin cesar5

9>;á%aro Azul, color del tiempo, ven a mi almomento?

a presencia de su espía no le impedíamani#estarse, pues su desespero era tal, que la princesa no comía nada

9B!n que os hab)is convertido, rey 2harmantC : clamaba ella9 Buestros comunes enemigos os hanhecho sentir los crueles e#ectos de su ira, hab)is

sido sacri#icado a su #urorC >Ay de mí, ay de mí?,Bya no estáis, no debo ya volveros a ver, o es que,cansado de mis desgracias, me hab)is abandonadoa la dureza de un destino aciagoC

>2uántas lágrimas, cuantos sollozos, acompa&aronestos sentidos lamentos? >2"mo se convirtieron eninterminables las horas debido a la ausencia deenamorado tan amable y querido? a princesa,abatida, en#erma, delgada y cambiada, podía

apenas sostenerse en pie pues estaba persuadidaque algo muy #unesto le había ocurrido al rey2harmant

a reina y 2erdita triun#aban( la venganza lassatis#acía más que las había apenado el rechazo del %oven monarca B;ero, en el #ondo, de que o#ensase tratabaC !l rey 2harmant no había queridocasarse con un peque&o monstruo al que tenía milmotivos de odiar

Mientras tanto, el padre de +lorine, que ya eravie%o, cay" en#ermo #alleciendo a #ortuna de lamalvada reina y de su hi%a cambi" de cara, pues#ueron contempladas como #avoritas que habíanabusado de su #avor y el pueblo, amotinado, corri"a palacio pidiendo por la princesa +lorine a la quereconocía como soberana a reina, irritada, quisotratar el asunto desde las alturas, así pues apareci"en el balc"n amenazando al pueblo, pero no le

vali" de nada ya que la sedici"n se convirti" engeneral

$e echaron aba%o las puertas de sus aposentos endonde se la encontr" matándola allí mismo a pedradas


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!n cuanto a 2erdita huy" a casa de su madrina elhada $oussio ya que corría igual peligro que sumadre

P.

os grandes del reino se reunieron en asamblea

con prontitud, y subieron al torre"n donde la princesa estaba gravemente en#erma !lla ignorabala muerte de su padre y el suplicio de su enemiga,así que, cuando escuch" tanto ruido no dud" por un momento que venían a prenderla para matarla, pero no tuvo miedo, la vida le era odiosa desdeque ella había perdido al ;á%aro Azul $inembargo, los cortesanos se arrodillaron a sus piesexplicándole el cambio que acababa de tener susuerte, noticias que conmovieron a la princesa

!ntonces la condu%eron a su palacio y lacoronaron os cuidados con que #ue tratada suen#ermedad y el deseo que tenía de ir a buscar al;á%aro Azul, contribuyeron mucho a restablecerlay le dieron pronto #uerzas para nombrar un conse%oque gobernase el reino durante su ausencia,despu)s ella cogi" abundantes %oyas partiendo unanoche sola sin que nadie supiera a dondemarchaba

!l mago que llevaba los asuntos del rey 2harmantno tenía bastante poder para destruir aquello que$oussio había hecho y por esta causa decidi" ir asu encuentro para proponerle alg*n trato por medio del cual ella devolviese al rey a su estadonatural !l mago cogi" a las ranas y vol" al palaciodel hada, que conversaba en esos momentos con2erdita

De un hechicero a un hada existe escasa

di#erencia5 ambos se conocían desde hacía H// oJ// a&os y en ese espacio de tiempo habían tenidomiles de ocasiones de ser amigos y enemigos !llale recibi" muy amablemente5

9BKu) quiere mi compadreC :le pregunt" -es asícomo los magos se nombran entre ellos19B@ayalguna cosa que pueda hacer por vosC

9$í, mi comadre :di%o el mago99, vos pod)issatis#acer una petici"n mía, se trata del me%or demis amigos, de un rey que vos hab)is convertidoen in#ortunado

9>Ah, ya os entiendo compadre9exclam" $oussio9,lo siento mucho pero no puedo concederle esa

gracia si )l no contrae matrimonio con mi ahi%adaque es así de hermosa, seg*n podr)is apreciar

!l mago pre#iri" no hablar ya que la encontrabamuy #ea, sin embargo no podía marcharse sinarreglar cualquier trato con el hada, porque el reyhabía corrido mil riesgos desde que estabaen%aulado

-!l pestillo que cerraba la portezuela de la %aula se

había roto, la %aula cay" y su ma%estad emplumadasu#ri" mucho por esta caída( el gato Minet, seencontraba en la habitaci"n cuando este accidentetuvo lugar y le dio un golpe con las garras en unode los o%os haci)ndole pensar que se iba a quedar tuerto !n otra ocasi"n se olvidaron de darle de beber, y para colmo de males un monito brib"n,que se había escapado, le cogi" por las plumas atrav)s de los barrotes de su %aula y poco #alt" paraque lo desplumara, aunque lo peor de todo es que

)l estaba a punto de perder el reino( sus herederoshacían a diario nuevas #echorías para conseguir que muriese1

!n #in, el mago acord" con su comadre $oussioque ella llevaría a 2erdita al palacio del rey2harmant en donde permanecería algunos meses,durante los cuales )l habría de tomar la resoluci"nde casarse con ella, en el bien entendido de que elhada le habría devuelto su #igura humana,

trans#ormándole de nuevo en ;á%aro Azul si nocumplía con su palabra

!l hada visti" a 2erdita con ropa%es de oro y plata,haci)ndola montar detrás de ella sobre un drag"n yasí ambas marcharon al reino de 2harmant endonde )ste ya estaba con su #iel amigo el bru%o


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!n tres golpes de varita el rey se vio de nuevocomo había sido, hermoso, amable y magní#ico, pero aceptaba por bien dado el tiempo que habíaestado sometido al hechizo aunque al s"lo pensamiento de contraer matrimonio con 2erdita,temblaba

$u amigo el mago le hizo cuantos razonamientos pudo para consolarle, mas todas ellos noconseguían otra cosa que una mediocre impresi"nen su espíritu 8 el rey estaba menos ocupado engobernar su reino que buscando los medios que prorrogasen el t)rmino dado por $oussio paracasarse con 2erdita

Mientras tanto, la reina +lorine, dis#razada ba%o lasropas de una campesina, con los cabellos

desgre&ados y revueltos, que ocultaban su rostro,un sombrero de pa%a sobre la cabeza, y una bolsa ala espalda, comenz" su via%e, a veces a pie, a vecesa caballo, a veces por mar, a veces por tierra( ellahacía todas las pesquisas posibles, pero nosabiendo d"nde debía dirigir sus pasos, temíasiempre ir por un lado mientras su amado reyestaba en el otro

Fn día que se había detenido al borde de una

#uente donde el agua plateada saltaba sobre los peque&os gui%arros, tuvo el deseo de re#rescarselos pies $entándose encima del c)sped su%et" susrubios cabellos con una cinta y puso los pies en elarroyuelo recordando a Diana en su ba&o alretorno de una cacería

;as" entonces por el lugar una vie%ecita todaencorvada que caminaba apoyándose sobre ungrueso bast"n( la anciana se detuvo y le di%o

9BKu) hac)is aquí, bella ni&a, tan solaC

9Mi buena madre :di%o la reina9, yo no de%o deestar acompa&ada pues vienen conmigo las penas,las inquietudes y las decepciones

8 al pronunciar estas palabras sus o%os se llenaronde lágrimas

P

9>2"mo, tan %oven y lloráis? :di%o la buena mu%er99>Ah, hi%a mía, no os a#li%áis más? Decidme que ossucede, y espero que pueda consolaros

a reina, de muy buen grado, le relat" sus

tribulaciones, la conducta del hada $oussio en todoel asunto y como ella había ido en busca del ;á%aroAzul

a vie%ecita irgui"se, cambi" s*bitamente derostro, re%uveneciendo, embelleci", sus vestidos setrans#ormaron en soberbio atuendo, y mirando a lareina con una graciosa sonrisa le di%o5

9Qncomparable +lorine, el rey que buscáis no es yaun pá%aro( mi hermana $oussio le ha devuelto a lanormalidad y )l se halla en su reino, no os a#li%áis pues todo se arreglará con#orme a vuestros deseos@e aquí cuatro huevos, vos les romper)is cada vezque tengáis una necesidad encontrando la ayudaque os sea precisa

8 al concluir de decir esto, desapareci" +lorine sesentía muy consolada por lo que acababa deescuchar( meti" los huevos en su saco y encamin"sus pasos hacia el reino de 2harmant

Despu)s de haber caminado ocho días y ochonoches sin detenerse, lleg" al pie de una monta&a prodigiosa por su altura, toda de mar#il y tan rectaque nadie podía escalarla sin caerse +lorine hizomil tentativas in*tiles, resbal", se #atig", y,desesperada ante un obstáculo tan inaccesible,ech"se al pie de la monta&a resuelta a de%arsemorir, cuando se acord" de los huevos mágicosque le había dado el hada

9eamos :se di%o9, si ella no se ha burlado de mí prometi)ndome socorros caso de necesitarlos

;ero en cuanto hubo roto el primero, se encontr"con cuatro peque&os gar#ios de oro que procedi" autilizar, poni)ndose dos en los zapatos y cogiendoen sus manos los restantes, de esta manera pudosubir la monta&a de mar#il sin #atigas pues los


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gar#ios le impedían que resbalase 2uando estuvoen la cima, de nuevo tuvo problemas paradescender( todo el valle era un gigantesco espe%ode hielo

Allí había más de seiscientas mil mu%eres que secontemplaban con placer extremo pues este espe%o

tenía bien sus dos leguas de largo por seis deancho, y cada una se veía como quería ser( la pelirro%a parecía rubia, la casta&a tenía los cabellosnegros, la vie%a creía ser %oven, la %oven noenve%ecía( en #in, que todos los de#ectos sehallaban bien ocultos, tanto que por ello venían delos cuatro puntos cardinales a contemplarse en elmágico espe%o 8 era como para morirse de risa alver las muecas y la tonterías que las muy presumidas hacían

!sta circunstancia no atraía menos a los hombres,ya que el espe%o les gustaba tambi)n por la mismaraz"n( a unos les concedía hermosos cabellos, aotros me%or talla, el aire marcial a unos, mayor apostura a otros as mu%eres, ante sus burlas, nose chanceaban menos, de suerte que la monta&a sellenaba así de mil ecos di#erentes

adie había llegado %amás a la cima y cuando

vieron a +lorine, las damas lanzaron grandesexclamaciones de desesperaci"n5

9BD"nde va esta mal avisadaC :murmuraban9 $induda que tiene el su#iciente ánimo para caminar sobre nuestro hielo, y al primer paso lo romperátodo

8 murmurando levantaban una algarabíaespantosa

a reina no sabía como hacer, pues veía un enorme peligro descendiendo por allí( quebr" otro huevo,del cual salieron dos palomos y una carroza, quecrecieron al mismo tiempo hasta alcanzar eltama&o apropiado que permitiese un buenacomodo Despu)s los palomos descendierondulcemente %unto a la reina +lorine sin que pasaranada malo

!lla les di%o5

9Mis peque&os amigos, si quer)is conducirme allugar en donde 2harmant tiene su corte, no ser)una ingrata con vosotros

os obedientes palomos no se detuvieron ni un día

ni un noche hasta que llegaron a las puertas de laciudad +lorine ba%" dándoles a cada uno de ellosun tierno beso más estimable que una corona

>Eh?, c"mo le batía el coraz"n entrando en laciudad $e ocult" el rostro para no ser conocida y#ue preguntando a las gentes en d"nde podía ver alrey, y algunos se lo tomaron a risa

P0

9Ber al reyC :le di%eron9 B!so es lo que tu quieresmuchacha, d)%ate de bobadas que no tienes o%os lo bastante buenos para ver al rey

a reina no respondi" nada y se ale%" d"cilmente preguntando todavía a aquellos que tropezabad"nde podría ir para ver al rey

9$u ma%estad vendrá ma&ana al templo con la princesa 2erdita :le di%eron9, pues por #in ha

consentido en casarse con ella>2ielos, que nueva, 2erdita, la indigna 2erdita a punto de casarse con el rey?

+lorine pens" en morir, quedándose sin #uerzas ni para hablar ni para caminar, entonces se re#ugi" ba%o una puerta, y tom" asiento sobre las piedras bien oculta entre sus cabellos y ba%o el sombrerode pa%a que llevaba

9>Qn#ortunada de mí? :gemía9, he venido aquí paraaumentar el triun#o de mi rival convirti)ndome entestigo de su victoria? >+ue por causa suya que el;á%ar" Azul de%" de venirme a ver >@a sido por ese peque&o monstruo que )l me ha in#ligido la máscruel de todas las in#idelidades mientras queabismada en el dolor yo me inquietaba por laconservaci"n de su vida? !l trato ha cambiado y seha acordado menos de mí que si no me hubiera


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visto %amás( me ha de%ado entristecida por tanlarga ausencia, sin preocuparse en absoluto

2uando se tiene mucha pena, es raro poseer buenapetito( la reina busc" donde alo%arse y se acost"sin cenar $e levant" con el día y corri" al templo,en donde pudo introducirse escapando de la

vigilancia de los soldados io el trono del rey ytambi)n el de 2erdita la #utura reina >Ku) dolor para una persona tan tierna y delicada como+lorine? $e aproximo al trono de su rival yqued"se de pie, apoyada en una columna demármol !l rey apareci" el primero, más bello ymás amable que nunca 2erdita enseguida,ricamente vestida y tan #ea que daba miedo,entonces, mirando a la reina +lorine, #runci" elce&o dici)ndole5

9BKui)n eres t*, que te acercas a mí hasta llegar alas gradas de mi trono de oroC

9Me llamo Mie $ouillon :respondi" lainterpelada9( vengo de le%os para venderos mismercaderías :y abriendo el saco que llevabaextra%o los brazaletes de esmeraldas que el rey2harmant le había regalado

9>Eh? :di%o 2erdita9, he aquí unas bonitas piedrasde cristal, Blas vendes por cinco c)ntimosC

9!nse&adlas a los expertos, se&ora :replic" lareina9 y despu)s haremos nuestra transacci"n

2erdita, que amaba al rey más tiernamente que enuna tal persona como ella era posible, encantadacon la ocasi"n que se le presentaba de hablarle,avanz" hasta su trono mostrándole los brazaletes ysolicitando su parecer

A la vista de los brazaletes, )l se dio cuenta de queeran aquellos que había dado a +lorine( palideci",suspir" quedándose largo tiempo sin responder( al#inal, temiendo que se hubieran apercibido de suestado y de los pensamientos que venían a sumente, hizo un es#uerzo para replicar5

9!stos brazaletes valen, creo, tanto como mi reino,yo suponía que no había un par igual en el mundo pero he aquí la muestra

2erdita, con semblante avinagrado se acerc" a lareina para preguntarle cuanto quería por los brazaletes

9o habría dinero para pagarlos, se&ora :repuso+lorine9, vale más proponeros otras condiciones$i vos me permitís dormir una noche en elgabinete de los !cos que está en el palacio del rey,os dar) mis esmeraldas

Ian extra&a petici"n tiene que ver con quemientras el rey 2harmant, estuvo convertido en;á%aro Azul, le había contado a la princesa que

ba%o sus aposentos existía un gabinete llamado delos !cos, tan ingeniosamente construido, que todolo que se decía muy ba%o era oído por el reycuando el estaba acostado en sus habitaciones, y,como +lorine quería reprocharle su in#idelidad, nohabía podido imaginar me%or medio

9Me parece bien, Mie $ouillon :di%o 2erditari)ndose como una loca y mostrando sus dientesque parecían los colmillos de un %abalí

!l rey no quiso saber de d"nde venían los brazaletes, menos por indi#erencia hacia quien los presentaba, -bien que ella no despertaba lacuriosidad1, que por el ale%amiento invencible quesentía por 2erdita

$e condu%o a +lorine al gabinete por orden de2erdita y ella comenz" con sus lamentos yrecriminaciones5

9>a desgracia de la que yo quería dudar no se hadesvanecido, cruel ;á%aro Azul :suspiraba ella9( t*me has olvidado ya que amas a mi indigna rival?Bos brazaletes que recogí de tu mano in#iel nohan podido traerte mi recuerdo tan ale%ado de ti?

!ntonces los sollozos interrumpieron sus palabras,y cuando ella tuvo bastantes #uerzas para hablar se


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sigui" lamentando todavía y así continu" hasta quelleg" la aurora

PH

os criados la habían escuchado gemir y suspirar toda la noche y se lo contaron a 2erdita que le

pregunt" por seme%ante alboroto a reina le di%oque dormía tan bien que ordinariamente so&abaque a menudo hablaba muy alto

A todo esto, el rey no la había podido escuchar por una extra&a #atalidad que es la siguiente5 despu)sde haberse enamorado de +lorine, ya no podíadormir y cuando se metía en la cama paradescansar algo, tomábase un somní#ero

a reina pas" una parte del día sumida en lainquietud

9$i )l me ha escuchado :se decía9, Bpuede haber indi#erencia más cruelC 8 si )l no me haescuchado, Bqu) he de hacer para conseguirloC

8a no sabía que ense&arle a 2erdita pues las piedras preciosas son todas las mismas y eranecesaria otra cosa que atra%ese la curiosidad y elinter)s de 2erdita, entonces +lorine recurri" a los

huevos mágicos rompiendo uno, tan pronto lohizo, surgi" una peque&a carroza de acero pulido yguarnecida de oro( tiraban de ella seis ratonesverdes, conducidos por un ratoncillo color de rosa,y el postill"n, que tambi)n pertenecía a #amiliaratonil, era de color gris @abía dentro de lacarroza cuatro marionetas de lo más encantador yque en nada se parecían a las vulgares de las#erias, y estas marionetas hacían cosassorprendentes, en particular dos peque&as

bailarinas egipcias que danzabanmaravillosamente

a reina +lorine se qued" deslumbrada antetama&a nueva obra de las artes mágicas y nada di%ohasta el atardecer que era el momento en el cual2erdita iba de paseo +lorine se #ue a una alameda,haciendo galopar a los ratones que tiraban de lacarroza cargada con las marionetas !sta novedad

asombr" mucho a 2erdita quien exclam" dos otres veces5

9>Mie $ouillon, Mie $ouillon, Bpor cuánto mevenderías la carroza con su tiro ratonilC

9;reguntadles a las gentes de letras y a los sabios

de este reino :di%o +lorine9, lo que una maravillatal puede valer, y yo aceptar) la opini"n del másavisado

2erdita, que era extremista en todo, replic"5

9>De%a ya de importunarme con tu presencia ydime lo que vale todo eso?

9Dormir otra vez en el gabinete de los !cos : repuso ella9, es todo lo que os pido

9>4ah, pobre tonta :replic" 2erdita9, te concedoese absurdo deseo? :y volvi)ndose hacia susdamas9 @e aquí una boba criatura :di%o9, que nosabe sacar venta%a de lo que o#rece

ino la noche +lorine di%o todo cuanto ella pudoimaginar de enternecedor, y lo habl" tambi)nin*tilmente, porque el rey no de%aba nunca detomarse su somní#ero nocturno os ayudas de

cámara se decían entre ellos59$in duda que esa campesina está loca, Bqu) es loque parlotea cada noche tan apasionadamenteC

!lla esperaba impaciente el día para comprobar ele#ecto que habían hecho sus discursos

92"mo :decíase9, el rey se ha vuelto sordo a misruegos, Bno escucha a su querida +lorineC >!stadebilidad mía de amarle todavía bien se merece los

desprecios que )l me hace?

;ero ella razonaba in*tilmente, pues no podíacurarse de su amor por 2harmant

8a no le quedaba más que un huevo en la bolsa,del que pudiese esperar ayuda( lo rompi" saliendode su interior un pastel de #iambre con seis pá%aros, cocidos y muy bien aderezados, que eran bardos y cantaban maravillosamente bien, decían


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la buenaventura y sabían de medicina me%or quecualquier doctor

a reina +lorine se qued" encantada al ver cosa tanadmirable y #ue con su nuevo presente a laantecámara de 2erdita

PJMientras +lorine esperaba a que su rivalapareciese, uno de los ayudas de cámara del rey seaproxim" a ella y le di%o5

9Mie $ouillon, ten)is que saber que si el rey no setomase un somní#ero para poder dormir, leaturdiríais con toda seguridad ya que vosdescansáis de una manera sorprendente cadanoche

Al oírle, +lorine ya no se sorprendi" de que )l nola hubiese escuchado, y buscando dentro de su bolsa, di%o5

9$i vos no le dais al rey el somní#ero esta noche,caso de que yo duerma en el gabinete, todas estas perlas y todos estos diamantes, serán para vos

!l ayuda de cámara aceptando, le dio su palabra

Al comparecer 2erdita instantes despu)s, +lorinese acerc" a su rival mostrándole entonces el pastelde #iambre que llevaba en las manos y #ingi"com)rselo

9BKu) estás haciendo, Mie $ouillonC :le pregunt"2erdita

9$e&ora :replic" +lorine9, tengo el capricho decomerme a los astr"logos, a los m*sicos y a los

m)dicos

!n ese momento todos los pá%aros se pusieron acantar más melodiosamente que los ruise&ores,exclamando luego5

9>Dadnos vuestras blancas manos y os diremos la buena ventura?

Fn pato, que dominaba el con%unto, habl" más altoque los otros5

9>2an, can, can, yo soy m)dico, yo curo todos losmales y toda suerte de locura, hasta la del mal deamores

2erdita, deslumbrada #rente a tantas maravillas,exclam"5

9>$orprendente pastel? >8o lo quiero, Mie$ouillon? BKu) me pides a cambioC

9!l precio de siempre :repuso ella9, dormir en elgabinete de los !cos, nada más

9De acuerdo :di%o 2erdita generosamente, ya quese había puesto de buen humor ante su

adquisici"n9, y toma esta moneda de oro además

+lorine estaba contenta como nunca lo habíaestado, ya que en esta ocasi"n esperaba que el reyla escuchase, y se retir" dándole las gracias

2uando descendi" la noche, se hizo conducir algabinete, deseando con toda su alma que el ayudade cámara cumpliese su palabra y que en lugar dedarle el somní#ero al rey le diese cualquier otra

cosa que pudiera mantenerle despierto2uando crey" que todos dormían, comenz" denuevo con sus lamentaciones

9A cuantos peligros me he expuesto :decía9, para buscarte mientras que t* me huyes y pretendescasarte con 2erdita

BKu) te he hecho pues para que olvidases tus %uramentosC >Acu)rdate de tu metamor#osis, de

mis bondades, de nuestras tiernas conversaciones?

8 ella se las repetía todas, con una memoria que probaba que nada le era más querido que eserecuerdo

!l rey, desvelado, escuchaba distintamente la vozde +lorine y todas sus palabras, sin embargo no podía comprender de d"nde venían, pero sucoraz"n, lleno de ternura, le traía vivamente la


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imagen de su incomparable princesa cuyaseparaci"n sentía con el mismo dolor que el de lasarmas que le habían herido sobre el cipr)s

2harmant se puso a hablar en voz alta lo mismoque ella había hecho

9>Ah, princesa :se lament"9, demasiado cruel paraun enamorado que os adoraba? B2"mo es posibleque me hayáis sacri#icado a nuestros comunesenemigosC

+lorine escuch" cuanto )l decía y no tard" enresponderle que si )l quería conversar con Mie$ouillon, se aclararían todos los misterios en losque no había podido penetrar hasta entonces Anteestas palabras, el rey, impaciente, llam" a uno de

sus ayudas de cámara y le pregunt" si podíaencontrar a Mie $uillon y traerla, a lo que el otrorespondi" que nada más #ácil porque ella dormíaaba%o, en el gabinete de los !cos

PL

!l rey no sabía que imaginar( Bpodía creerse queuna gran reina como +lorine #uese dis#razada de#regatriz y que esa criatura tuviese la voz de lareina y supiera secretos tan particulares, a menos

que #uera ella mismaC

!n esta incertidumbre )l se levant" visti)ndose con precipitaci"n, y descendi" hasta el gabinete de los!cos, del cual la reina había quitado la llave, peroel rey tenía una que abría todas las puertas de palacio

Él la encontr" con una ligera ropa de ta#etán blanco que llevaba deba%o de sus andra%osas ropas(

sus hermosos cabellos cubríanle las espaldas y permanecía acostada sobre el lecho mientras unalámpara un poco ale%ada iluminaba discretamentela escena

!l rey entr" bruscamente y su amor #ue másimportante que su resentimiento, pues en cuanto lareconoci" #ue a echarse a sus pies, llenándole de

lágrimas las manos mientras pensaba que iba amorir de dicha, de dolor y de mil remembranzasdi#erentes que le pasaron a un tiempo por lacabeza

a reina, igualmente, no se hallaba menos turbada,su coraz"n no latía casi pudiendo ella apenas

suspirar Mir" entonces al rey #i%amente sin decirlenada y cuando tuvo #uerzas para hablar tampoco lehizo reproches( el placer de verle le hizo olvidar los motivos de que%a que creía tener

!n #in, ambos se explicaron, se %usti#icaron, y suternura despert"

!n estos momentos, el mago, que amaba al rey,lleg" con un hada #amosa que era precisamente la

que la había dado los cuatro huevos a +lorineDespu)s de los primeros saludos, el hechicero y elhada declararon que sus poderes se habían unido a#avor del rey y de la reina, $oussio no podía yanada contra ellos, y así su matrimonio no seretrasaría más

8a puede #igurarse la #elicidad de estos %"venesenamorados5 desde que se hizo de día, corri" lanueva por el entero palacio, y todos estaban

encantados de ver a +lorineas noticias llegaron hasta 2erdita lo que la hizocorrer a ver al rey y >cuál no sería su sorpresa alencontrarse con su bella rival? !n el momento queella quiso abrir la boca para in%uriarla, el mago y elhada aparecieron meta#ormoseándola en cerda a#in de que le quedara al menos una parte de sunombre y de su natural gordura !lla huy"arrastrándose hasta llegar al corral en donde las

risotadas que escuch" acabaron de desesperarla!l rey 2harmant y la reina +lorine, liberados deuna persona tan odiosa, no pensaron más que enlas #iestas de sus bodas que tuvieron lugar congran magni#icencia, sin que nadie pusiera en dudasu derecho a la #elicidad despu)s de haber vividotan grandes desventuras

madame d'aulnoy - el pajaro azul

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