los seÑores de la tierra: transformaciones económicas, productivas y discursivas en el mundo del...

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Tomás Palmisano LOS SEÑORES DE LA TIERRA Transformaciones económicas, productivas y discursivas en el mundo del agronegocio bonaerense Tesis para optar por el título de Doctor en Ciencias Sociales Facultad de Ciencias Sociales Universidad de Buenos Aires Director: Miguel Teubal Buenos Aires 2014

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Tesis de doctorado de Tomás Palmisano

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  • Toms Palmisano

    LOS SEORES DE LA TIERRA

    Transformaciones econmicas, productivas y discursivas en el

    mundo del agronegocio bonaerense

    Tesis para optar por el ttulo de Doctor en Ciencias Sociales

    Facultad de Ciencias Sociales

    Universidad de Buenos Aires

    Director: Miguel Teubal

    Buenos Aires

    2014

  • 2

  • 3

    Resumen

    En los ltimos aos, los cambios en el mundo rural argentino han sido profundos, y la

    regin pampeana se figura como el escenario arquetpico de nuevas dinmicas

    productivas. En este contexto, se enmarca la presente tesis preguntndose acerca de las

    tendencias que dieron origen y permitieron la consolidacin del modelo productivo

    hegemnico en el agro pampeano conocido como agronegocio.

    Si bien estas transformaciones han sido abordadas desde mltiples perspectivas,

    consideramos que lo novedoso de nuestro aporte es enmarcarse en un paradigma terico-

    metodolgico que articula las variables economtricas tradicionales con aquellas que

    corresponden al orden de lo enunciado. Bajo esta aproximacin entendemos al

    agronegocio como una configuracin especfica de la mquina social capitalista en el

    mundo rural, que a su vez se relaciona con tendencias ms amplias condensadas en el

    concepto de modelo extractivo.

    A partir de ello, nos enfocamos en dos conjuntos amplios de dispositivos

    estrechamente articulados que dan forma a esta configuracin productiva y social. Por un

    lado, atendemos el nivel de las cantidades o intensidades medibles en superficies,

    toneladas, explotaciones. Para su abordaje consideramos tanto estadsticas pblicas y

    privadas, como los datos de propiedad de la tierra provenientes de los catastros

    municipales de 10 partidos de la provincia de Buenos Aires. Por el otro, trabajamos en el

    registro de lo enunciado en una heterognea serie de fuentes que incluye: artculos

    periodsticos provenientes, principalmente, de los suplementos semanales del sector

    agropecuario de Clarn y La Nacin; publicidades de compaas del sector de insumos;

    publicaciones corporativas emitidas por asociaciones de productores o empresarios

    destacados; y documentos oficiales que condensan polticas pblicas especficas para el

    sector. A todo esto se sum una revisin bibliogrfica que intent ser lo ms exhaustiva

    posible.

    Del abordaje de este cuantioso caudal de datos, atravesado por los lineamientos

    tericos, surgieron una serie de ejes analticos en torno a los cuales se desarroll el

    anlisis. El primero de ellos se concentra en los actores. All se destaca la importancia del

    Estado como macro-actor en la construccin del contra-andamiaje que permiti la

    dilucin de una estructura social particular, y en paralelo dio espacio al ascenso de actores

    productivos novedosos, representados en el empresario emprendedor/innovador. El

    segundo eje versa sobre la socavacin de los saberes prcticos y el triunfo de la tecnologa

    de punta como nico conocimiento vlido. El tercer lugar lo ocupan las reflexiones en

    torno a la tensin entre una agricultura productora de alimentos y un modelo concentrado

    en los commodities. Finalmente, el cuarto eje aborda la problemtica de la tierra, tanto en

    trminos de la concentracin de su propiedad y tenencia, como as tambin la instancia

    de su mercantilizacin.

    En sntesis, esta investigacin reconstruye las principales tendencias del

    agronegocio pampeano en las ltimas dcadas, focalizndose en la imbricacin entre los

    procesos de concentracin, integracin y exclusin, y la generalizacin de ciertas

    consignas que los sostuvieron, explicaron e incluso anticiparon.

  • 4

  • 5

    Abstract

    In the last years the Argentinean rural world has had deeply changes, and the Pampeana

    region is shown as the archetypal scenery of the new productive dynamic. In this context

    it is framed the present thesis making enquiries into the tendencies that gave it origin and

    allowed the consolidation of this hegemonic productive model in the Pampeano agro

    known as agribusiness.

    As well these transformations have been studied from multiples perspectives we

    consider that our innovating contribution is framed into a theory-methodological

    paradigm that joins the traditional econometrics variables with those which are

    concerning to the order of utterances. We understand the agribusiness as a specific

    configuration in the capitalist social machine in the rural world, that at the same time, it

    connects with large tendencies giving the concept of extractive model.

    Starting from this, we focus on two large groups of dispositive closely joined

    giving this productive and social configuration. On one side, we consider the level of

    quantities or intensities measure in surface, tons, exploitations. As a beginning, we

    consider either public and private statistics or the data of land property from the public

    register of ten districts of the Buenos Aires province (Argentina). On the other side, we

    work in the register of the utterance using a heterogonous series of sources like: journalist

    articles mainly from the agriculture and cattle weekly supplements from Clarn and La

    Nacin; companies publicities of the inputs area; corporate issues published by important

    associations of producers or managers; and officials documents of public policy specific

    of the sector. It was also done a bibliography revision which was intended to be as

    exhaustive as possible.

    Using these huge amounts of data, and the theoretical lines, it emerged a series of

    analytical axis where the analysis was developed. The first of them, the actors are

    concentrated on. There it is emphasized the importance of the State as a macro-actor in

    the construction of the contra-platform that allowed to the dilution to a particular social

    structure, and at the same time, the promotion of innovating productive actors,

    represented in the enterprising/innovator manager. The second axis was about the

    excavating of the practical cognition and the triumph of the technology as the only valid

    knowledge. In the third place are the reflexions because of the tension between and

    agriculture and cattle producer of food and a model concentrated in the commodities.

    Finally, the fourth axis is about the land problems either in terms of the properties

    concentration and possession or its commodification.

    In conclusion, this investigation rebuilds the main tendencies in the Pampeano

    agribusiness in the last decades, focus on the imbrication between the concentration

    process, integration and exclusion, and the generalization of some consigns that

    supported, explained and also anticipated.

  • 6

  • 7

    ndice

    Resumen .......................................................................................................................... 3

    Abstract ........................................................................................................................... 5

    Agradecimientos ........................................................................................................... 11

    Listado de siglas y abreviaturas .................................................................................. 13

    Introduccin .................................................................................................................. 15

    Captulo 1 ...................................................................................................................... 25

    1. Introduccin .......................................................................................................... 26

    2. Debates en torno a la conceptualizacin del agronegocio ................................. 27

    3. El agronegocio como modalidad del extractivismo ............................................. 36

    3.1. El embate neoliberal y la centralidad de los recursos naturales ................ 42

    3.2. Extractivismo en el siglo XXI ........................................................................ 48

    4. La integracin de los paradigmas: una economa poltica de los contenidos y la

    expresin .................................................................................................................... 50

    4.1. El giro lingstico y el giro acontecimental: dos paradigmas

    contrapuestos? ....................................................................................................... 55

    4.2. La influencia de lo social desde la perspectiva del giro lingstico ............ 58

    4.3. La conformacin de los regmenes de signos: consignas, lugares comunes y

    lugares especiales ................................................................................................... 61

    5. A modo de recapitulacin ..................................................................................... 65

    Captulo 2 ...................................................................................................................... 67

    1. El diacronismo como problema: consideraciones sobre las fuentes ................. 68

    1.1. Los registros, estadsticas y datos oficiales................................................... 69

    1.2. Los medios grficos de comunicacin masiva.............................................. 70

    1.3. La publicidad grfica ..................................................................................... 78

    1.4. Los documentos pblicos: la poltica en los papeles ................................... 84

    1.5. Documentos corporativos .............................................................................. 86

    Captulo 3 ...................................................................................................................... 89

    1. Introduccin .......................................................................................................... 90

    2. De las caractersticas del modelo extractivo contemporneo y su traduccin al

    mbito agropecuario ................................................................................................. 90

    Captulo 4 .................................................................................................................... 123

    1. Introduccin ........................................................................................................ 124

    2. El cambio del contexto productivo durante los albores de la dcada de 1990: el

    Decreto de Desregulacin ....................................................................................... 125

    3. De la heterogeneidad social al emprendedor exitoso ....................................... 139

  • 8

    4. La crisis de 2001/2002. El fin de una etapa para el agronegocio, y el comienzo

    de otra? .................................................................................................................... 145

    5. El oscuro saldo en el tejido social agrario de los aos 90s ............................. 155

    6. El fortalecimiento de los actores del agronegocio tras la post devaluacin.

    Algunos casos testigo .............................................................................................. 162

    7. La Segunda Discriminacin de las Pampas y los derechos de exportacin como

    problema .................................................................................................................. 171

    8.1. De los actores productivos a los sujetos polticos. El paro agrario de 2008 175

    8.2. El paro agrario de 2008 como plataforma poltica fallida ........................... 184

    9. Reflexiones finales ............................................................................................... 190

    Captulo 5 .................................................................................................................... 193

    1. Introduccin ........................................................................................................ 194

    2. Del conocimiento prctico como supersticin .................................................. 194

    3. La revolucin transgnica .................................................................................. 202

    4. La tecnologa de punta como herramienta de presin poltica y econmica: la

    devaluacin y el caso del Sistema de Regala Extendida ..................................... 211

    5. La biotecnologa como poltica de Estado ......................................................... 219

    6. Recapitulacin ..................................................................................................... 227

    Captulo 6 .................................................................................................................... 229

    1. Introduccin ........................................................................................................ 230

    2. Entre los alimentos y los commodities: el problema de los frutos de la tierra 230

    3. Commodities, Specialities y orgnicos: la breve paradoja, el triunfo de la

    indiferenciacin y los especuladores ..................................................................... 235

    4. El problema del hambre en el supermercado del mundo ............................... 249

    5. El mito de la abundancia .................................................................................... 257

    6. El acceso a la alimentacin a partir de las polticas pblicas ......................... 264

    7. Reflexiones finales ............................................................................................... 266

    Captulo 7 .................................................................................................................... 269

    1. Introduccin ........................................................................................................ 270

    2. El problema de la tierra en la dcada de los 90s ............................................. 270

    3. Los dueos de la tierra. Un anlisis sobre las dinmicas de la propiedad de la

    tierra en algunos partidos de la provincia de Buenos Aires. .............................. 274

    4. Renta y precio de la tierra .................................................................................. 294

    5. La farsa de la desterritorializacin: los pooles de siembra ............................. 300

    6. La transmutacin de tierra en mercanca. Sus implicancias .......................... 308

    7. Reflexiones finales ............................................................................................... 312

    Conclusiones generales ............................................................................................... 315

    Bibliografa .................................................................................................................. 325

  • 9

    Bibliografa General ............................................................................................... 326

    Legislaciones y otros documentos pblicos .......................................................... 350

    Artculos periodsticos y otras fuentes .................................................................. 351

    Anexos .......................................................................................................................... 373

    Anexo I ..................................................................................................................... 374

    Cuadros ................................................................................................................ 374

    Grficos ................................................................................................................ 400

    Otros recursos ...................................................................................................... 402

    Anexo II ................................................................................................................... 405

  • 10

  • 11

    Agradecimientos

    A mis padres, por ensearme a ponerle amor y pasin al camino que uno elige recorrer.

    A mis hermanos, Gabriel y Sofa, por su amor y paciencia incondicional.

    A mis abuelos, que son mi historia cercana y lejana.

    A mi director Miguel Teubal, por su enorme generosidad y acertados consejos.

    A Norma Giarracca, por cobijarme bajo el ala de un colectivo maravilloso como el GER-

    GEMSAL y la ctedra de Sociologa Rural.

    A mi amigo Gustavo, quien por segunda vez ofici de certero lector y crtico de los

    borradores de esta tesis.

    A Juli, por convertirse repentinamente en lectora incisiva y, ms importante an, en puntal

    fundamental para no desbarrancar en los momentos zozobra.

    A Emilio, un hermano de la vida y, con l, a todos los amigos verdaderos que me rodean.

    A Martina, por su paciencia al acompaarme, y padecerme, en una parte muy importante

    de todo este proceso. Nunca sern suficientes mis expresiones de gratitud y cario.

    A todos ellos, y a quienes injustamente omito, pertenecen las ideas que pudieran resultarle

    atractivas o interesantes al lector pues creo que detrs de quien escribe siempre hay manes

    que susurran al odo, grandes maestros que con su nombre conjuran proteccin, y

    entraables amigos que mueven la mano cuando los ojos se entrecierran, los dedos se

    acalambran y la voluntad se resquebraja. Eximo a ellos de cualquier error o inexactitud,

    los cuales, huelga decir, me pertenecen completamente.

  • 12

  • 13

    Listado de siglas y abreviaturas

    Administracin de Alimentos y Drogas de los Estados Unidos Food and Grugs

    Administration (FDA)

    Asociacin Argentina de Consorcios Regionales de Experimentacin Agrcola

    (AACREA)

    Asociacin Argentina de Productores en Siembra Directa (AAPRESID)

    Asociacin Argentina de Proteccin de las Obtenciones Vegetales (ArPOV)

    Asociacin Cadena de la Soja Argentina (ACSOJA)

    Asociacin de Cmaras de Tecnologa Agropecuaria (ACTA)

    Asociacin de Semilleros Argentinos (ASA)

    Cmara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes (CASAFE)

    Censo Nacional Agropecuario (CNA)

    Comisin Nacional Asesora de Biotecnologa Agropecuaria (CONABIA)

    Confederacin Intercooperativa Agropecuaria (CONINAGRO)

    Confederaciones Rurales Argentinas (CRA)

    Conferencia de las Naciones Unidas sobre comercio y desarrollo (UNCTAD)

    Consejo Argentino para la Informacin y el Desarrollo de la Biotecnologa (ArgenBio)

    Consejo Nacional de Investigaciones Cientficas y Tcnicas (CONICET)

    Consorcios Regionales de Experimentacin Agrcola (CREA)

    Explotaciones Agropecuarias (EAP).

    Federacin Agraria Argentina (FAA)

    Federacin Argentina de Contratistas de Mquinas Agrcolas (FACMA)

    Fondo Monetario Internacional (FMI)

    Instituto Argentino de Sanidad y Calidad Vegetal (IASCAV)

    Instituto Interamericano de Cooperacin para la Agricultura (IICA)

    Instituto Nacional de Estadstica y Censos de la Repblica Argentina (INDEC)

    Instituto Nacional de Semillas (INASE)

    Instituto Nacional de Tecnologa Agropecuaria (INTA)

    Junta Nacional de Carnes (JNC)

    Ministerio de Agricultura, Ganadera y Pesca de la Nacin (MAGyP)

    Organismos Genticamente Modificados (OGM/GMO)

    Organizacin de las Naciones Unidades (ONU)

    Organizacin de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentacin (FAO)

    Organizacin Mundial del Comercio (OMC)

  • 14

    Secretara de Agricultura, Ganadera, Pesca y Alimentacin (SAGPyA)

    Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA)

    Sociedad Rural Argentina (SRA)

    Unin Europea (UE)

    Dlar estadounidense (US$)

    Habitante (hab)

    Hectrea (ha)

    Kilocaloras (kcal)

    Kilogramo (kg)

    Toneladas (tn)

  • 15

    Introduccin

    Es el alpiste de mijo lisonjero que dejan los das cuando pasan,

    es la venganza del campo sembrado por la soja de las dcadas,

    que no soporta tal gratitud a la hora de la pereza mental.

    Cucurto, 2008: 132

  • 16

    En los ltimos aos, los cambios en el mundo rural argentino han sido enormes y la regin

    pampeana ha sido presentada como el territorio paradigmtico de estas transformaciones.

    Numerosos trabajos (Barsky y Gelman, 2001 y 2009; Barsky y Pucciarelli, 1997;

    Basualdo, 2013; Basualdo y Khavisse, 1993; Bisang et al., 2008; CIEA, 2004; Cloquell,

    2007; Domnguez y Sabatino, 2005 y 2006; Giarracca y Teubal, 2005, 2006 y 2010; Gras

    y Hernndez, 2008 y 2009; Iigo Carrera, 2007; Lattuada y Neiman, 2005; Rodrguez,

    2008; Sili, 2005; Villulla y Fernndez, 2010; etc.) abordaron esta problemtica desde

    mltiples perspectivas.

    La mayora de estos estudios concuerdan en que a partir de mediados de la dcada

    del 70, comienza a despuntar una reestructuracin de la produccin primaria que ir

    acentundose con el correr de los aos. La desregulacin de la economa destruy de un

    plumazo los controles estatales creados a partir de 1930 y la lgica del mercado se impuso

    casi sin matices. Son los tiempos de la agriculturizacin y los agronegocios: la

    introduccin de nuevas semillas hbridas intensifican el uso de la tierra; el aumento de la

    participacin de las empresas transnacionales en la venta de insumos, tecnologa y

    comercializacin; y posteriormente en 1996, la liberalizacin del uso de semillas

    genticamente modificadas (transgnicas) son pilares fundamentales de este modelo.

    En este marco, se incrementa progresivamente la importancia del trabajo

    inmaterial concentrado en el sector servicios, dando lugar a la aparicin de operarios y

    contratistas que manejan una serie de saberes tcnicos y recursos especializados;

    ingenieros cuyas tareas analticas y simblicas ayudan a enfrentar las contingencias

    diarias que surgen en el marco de la produccin agropecuaria; grandes empresas

    transnacionales que obtienen enormes ganancias producto del desarrollo de semillas

    genticamente modificadas; y dems agentes que se combinan con los tradicionales

    peones, arrendatarios, propietarios y habitantes de los miles de pequeos pueblos

    desperdigados por toda la campaa.

    En esta escueta descripcin del panorama falta incluir un actor fundamental

    encarnado en el sector financiero, el cual en conexin con grandes empresas o

    fideicomisos, comienza a invertir grandes cantidades de dinero en la agricultura. Con un

    panorama internacional ms que prometedor frente al constante aumento del precio de los

    commodities, la participacin del capital financiero tiende a incrementarse

    paulatinamente en paralelo a la importancia de la semilla emblemtica del modelo: la

    soja.

    Para entender estas modificaciones, consideramos indispensable circunscribirlas

    dentro de un esquema econmico caracterizado como modelo de agronegocios que, como

  • 17

    veremos representa la traduccin en el mundo rural del modelo extractivo (Giarracca y

    Teubal, 2012). En este punto, nos interesan las transformaciones que operan en los

    mundos rurales que dan pie a la consolidacin del agronegocio, considerando tanto las

    variables economtricas tradicionales como aquellas que corresponden al orden de lo

    enunciado. La imbricacin de ambos derroteros analticos se presenta indispensable si

    consideramos que el espacio de la produccin econmica no se circunscribe a los factores

    economtricos (cantidades producidas, superficies implantadas, trabajadores contratados,

    etc.), sino que tambin se configura a partir de una serie de regmenes de signos (Deleuze

    y Guattari, 2009 y 2010; Lazzarato, 2006) que afectan el ordenamiento de los hechos.

    En definitiva proponemos que el agronegocio, en tanto manifestacin de un orden

    dominante de la sociedad, se condensa en una serie de dispositivos que son tanto de

    carcter semitico como productivo/corporal. Bajo esta perspectiva los mecanismos

    sociales, culturales e ideolgicos no son un reflejo de las relaciones que se establecen en

    el plano de lo econmico sino parte indispensable del conjunto social al que representan.

    As, la commoditizacin de los alimentos, la propiedad y la gestin productiva de la tierra,

    el sujeto emprendedor, las polticas pblicas, y quiz el concepto mismo de mercado,

    operan de manera superpuesta en una disputa de representaciones, imgenes y sentidos

    que atraviesan a toda la sociedad.

    En este derrotero, entendemos al agronegocio como una configuracin especfica

    de la mquina social capitalista en el mundo rural, concretamente en su vertiente

    pampeana, que se manifiesta a partir de dos conjuntos amplios de dispositivos

    estrechamente articulados. Por un lado, tendremos el nivel de las cantidades o

    intensidades medibles en superficies, toneladas, explotaciones. Para su abordaje hemos

    considerado, en primer lugar, las estadsticas pblicas y privadas. Algunos de los datos

    fueron extrados de los cuadros y grficos provistos por las agencias correspondientes,

    pero otros han sido reelaborados a la luz de los cortes territoriales y/o temporales que la

    presente investigacin requiso. Quiz el ejemplo ms cabal de esto ltimo sean los

    cuadros correspondientes al suministro alimentario de varios productos de la canasta

    alimentaria argentina agrupados a partir de la informacin provista por FAO1. El segundo

    recurso cuantitativo de este trabajo fueron dos versiones de las bases de datos catastrales

    de diez partidos de la provincia de Buenos Aires, una correspondiente a los primeros aos

    de la dcada de 1990, y la otra de comienzos de la dcada de 2010. Su anlisis requiri

    de un primer proceso de adaptacin y depuracin que arroj un corpus total superior a las

    1 Un primer ensayo de esta tcnica fue utilizada en Teubal y Palmisano, 2013.

  • 18

    42.000 partidas catastrales superiores a 25 hectreas. Las mismas fueron posteriormente

    agrupadas en varios cuadros que nos permitieron trabajar en torno a las mutaciones en la

    estructura de propiedad rural entre los aos sealados.

    En el nivel de los regmenes de signos, se consideraron una multiplicidad de

    fuentes a fin de poder detectar las estabilidades y variaciones de las consignas difundidas.

    El primer corpus, por ser el ms numeroso, est representado por los artculos de diarios

    provenientes de los suplementos semanales del sector agropecuario de Clarn y La

    Nacin2. Frente a la imposibilidad de examinar analticamente ms de 20 aos de material

    periodstico optamos por centrarnos en el perodo de un ao que rode a acontecimientos

    relevantes para nuestra investigacin. Estos hitos fueron: el Decreto 2284 de 1991 de

    Desregulacin Econmica; la Resolucin 167 de 1996 de la Secretara de Agricultura,

    Pesca y Alimentacin que autoriz la produccin y comercializacin de la soja

    transgnica RR (resistente al glifosato); la crisis econmica, social y poltica

    desencadenada en diciembre de 2001; el conflicto entre la Argentina y la empresa

    Monsanto en torno al cobro de regalas por la soja RR que tuvo lugar entre 2004 y 2006;

    el paro agrario de 2008. Este recorte por acontecimientos relevantes arroj

    aproximadamente 1.700 artculos periodsticos de diversa ndole, los cuales no slo

    versaban sobre el hito del perodo sino tambin sobre los ejes analticos que sealaremos

    ms adelante. Sobre ellos realizamos un anlisis de contenido a fin de rastrear las

    consignas y ncleos de sentido, y a un nmero ms acotado de documentos aplicamos

    tcnicas de anlisis del discurso a fin de reconstruir diversas posiciones de enunciacin

    que consideramos relevantes.

    De este trabajo de interpretacin naci la inquietud de utilizar como fuente de

    expresin de las posturas empresarias, algunas publicidades surgidas en los momentos

    cruciales antes sealados. Con ellas realizamos un trabajo de semitica de la imagen a

    partir del clsico textos de Roland Barthes (1986). Con el mismo objetivo analizamos

    algunos documentos corporativos, entrevistas y escritos firmados por actores colectivos

    agrarios o empresarios particulares identificados como referentes o lderes del sector.

    Finalmente, abordamos algunos documentos oficiales que oficiaron como huella

    de polticas pblicas especficas para el sector. Nos referimos a los mencionados Decreto

    de Desregulacin y la Resolucin de autorizacin de comercializacin de la soja RR,

    como as tambin al documento donde se plasman los objetivos del Plan Estratgico

    Agroalimentario 2010-2020. Sobre estas fuentes tambin se combinaron tcnicas de

    2 Si bien el corpus est basado fundamentalmente en estas fuentes tambin recurrimos a otras publicaciones

    especializadas del sector tales como Chacra y Super Campo.

  • 19

    anlisis del discurso y de contenido a fin de explorar las resistencias y articulaciones con

    las consignas difundidas por los actores corporativos.

    Toda esta labor metodolgica se combin con una revisin bibliogrfica que

    intent ser lo ms exhaustiva que estuvo a nuestro alcance y, al igual que todo el trabajo

    detallado anteriormente, se centr en algunos ejes analticos: la tierra como lugar de la

    produccin; los hombres que la habitan y la trabajan; los conocimientos y saberes en

    disputa; y el fruto de la produccin agropecuaria. Las estadsticas, la numeracin y la

    ordenacin fueron cruzadas con las operaciones y relaciones inmanentes entre enunciados

    y cuerpos que definen los regmenes de signos y marcan la relacin entre el contenido y

    la expresin. El intento de este trabajo fue moverse en estos intersticios para dar cuenta

    de la imbricacin entre lo dicho y lo hecho, la cantidad y la cualidad, en el devenir de la

    construccin de ciertas consignas (que desagregaremos en lugares comunes, especiales y

    mximas) que ordenan, justifican y sostienen los hechos que atraviesan una sociedad.

    Para afrontar este problema de investigacin proponemos, en el captulo 1, realizar

    una reflexin terica que nos permita conectar adecuadamente las variables que

    tradicionalmente relacionan los anlisis econmicos con aquellas ligadas al mbito de lo

    discursivo. Como parte de esta tarea desarrollaremos algunos de los ncleos conceptuales

    ms relevantes, comenzando por el trmino mismo de agronegocio. Tanto el nacimiento

    terico en EE.UU., a mediados de los 50s, como las perspectivas crticas que lo abordan,

    sern reconstruidas a la luz de los procesos que tuvieron lugar en Argentina para

    circunscribir sus alcances a la realidad nacional. Luego enmarcaremos la lgica del

    agronegocio y sus consecuencias dentro de los procesos propios del neoliberalismo,

    especficamente en el modelo extractivo que toma forma acabada a partir de 1970. As

    delinearemos las tendencias ms generales del modelo neoliberal, sus traducciones en los

    mundos rurales y las transformaciones recientes que han puesto en discusin la

    continuidad del propio paradigma.

    Los dos bloques conceptuales anteriores (agronegocio y extractivismo) sern

    ampliados y complejizados a partir de la introduccin de un tercer conjunto de reflexiones

    que problematizan las posibles interacciones entre los mbitos discursivos y las

    transformaciones productivas. Si bien se notar un profundo cambio en la escala de

    abstraccin y los derroteros tericos, su introduccin es plenamente justificable si

    queremos dar cuenta de la profundidad de las transformaciones acaecidas en el mundo

    rural de nuestro pas. El inters estar puesto tanto en los regmenes de signos que

    intervienen en el agronegocio, como en los cuerpos que fluyen en la produccin afectando

    lo enunciable y los lugares de la enunciacin. En este sentido, la produccin no se

  • 20

    circunscribe a lo cuantitativo, aunque ello sea una faceta muy importante de la misma,

    sino que est atravesada por la cultura e interaccin que marca una experiencia profunda

    del mundo.

    En el segundo captulo, examinaremos algunos de los desafos epistemolgicos y

    metodolgicos que propone nuestra perspectiva, principalmente centrndonos en la

    cuestin de la diacrona, en tanto el modelo del agronegocio ha tenido diversos derroteros

    y puntos nodales a lo largo de las ltimas dcadas. Considerando a las diversas fuentes

    como huellas de los acontecimientos, reflexionaremos sobre de sus particularidades tanto

    para construir el nivel cuantitativo como el cualitativo. Para el primer grupo, nuestro

    abordaje ser bastante tradicional pues remitir a las formas estadsticas propuestas por

    las instituciones pblicas y privadas, y medios periodsticos como as tambin a la

    reconstruccin de la estructura de propiedad a partir de los catastros municipales. Para el

    caso de la reconstruccin de los regmenes de signos del agronegocio, en tanto instancia

    de lo dicho, proponemos reconstruir sus lugares comunes, especies y consignas. Para ello

    recurriremos a medios periodsticos, publicidades, documentos corporativos e

    instrumentos pblicos como instancias que recogen y replican determinadas posturas y

    diagnsticos sobre el sector. Como se ver oportunamente la estrategia para abordarlos

    implicar una combinacin de anlisis del discurso y anlisis de contenido.

    El captulo 3 puede considerarse como una puesta en contexto tanto emprica

    como conceptual pues justifica la inclusin del agronegocio en la rbita de los modelos

    extractivos, buscando particularidades que los acerquen pero tambin tensiones que lo

    problematizan. En este sentido se justifica pormenorizadamente la idea de que el

    agronegocio es la manifestacin del extractivismo para los mundos rurales. Para ello se

    desagrega la definicin de modelo extractivo propuesta por Giarracca y Teubal (2012)

    para rastrear sus componentes en la dinmica agropecuaria de los ltimos aos. De esta

    manera, no slo fortaleceremos el argumento precedente sino que tambin construiremos

    un panorama contextual para comprender ms acabadamente los procesos analticos de

    los apartados siguientes. Por tanto, este apartado tendr la funcin argumentativa de

    mediar entre la reflexin terica de ms largo alcance y el anlisis general del amplio

    entramado donde ubicaremos al agronegocio.

    A partir de este punto se desarrolla el anlisis propiamente dicho con un

    ordenamiento que se centra en lo que consideramos los ncleos de sentido y las

    transformaciones ms importantes del proceso. En este marco, el captulo 4 se centrar

    en la mutacin de los actores, tanto desde el punto de vista productivo como en lo

    referente a las articulaciones y posicionamientos pblicos desde la dcada de 1990. El

  • 21

    anlisis no se acotar a los agentes productivos sino que considerar el rol fundamental

    de las acciones del Estado encarnadas en las polticas pblicas, en tanto suelen afectar

    profundamente los arreglos institucionales ms slidos en los que se da la produccin

    agropecuaria.

    Abordar esta temtica en su totalidad significara una tesis en s misma por lo que

    nos circunscribiremos a examinar los derroteros y transformaciones agenciales en el

    marco de distintos hitos que consideramos centrales para el agronegocio. El primero de

    ellos ser el Decreto 2.284 de 1991 de Desregulacin Econmica. Consideramos que, en

    tanto huella del accionar del Estado, el mencionado documento condens la conjugacin

    del decir y el hacer neoliberal para los mundos rurales de Argentina. Sus alcances dan

    cuenta de la performatividad de una poltica pblica cuando se articula a otras medidas y

    consignas que se despliegan en espacios pblicos no estatales.

    Desde otras perspectivas, pero tan importante como el hito de la desregulacin,

    fueron las polticas monetarias y fiscales que impulsan el cambio de contexto

    macroeconmico a partir de la crisis de 2001/2002. Es por ello que tambin trabajaremos

    sus influencias sobre las derivas del agronegocio, poniendo nfasis en las tensiones entre

    el rgimen de signos y las consignas consolidadas en la dcada de 1990 y los avatares de

    un Estado que cambia su posicin con respecto a la figura del mercado.

    Con estos hitos de contexto reconstruiremos el proceso de crecimiento y

    consolidacin del modelo mayoritario de sujeto rural encarnado en el empresario agrario

    emprendedor/innovador/lder. Considerando las iteraciones de los medios especializados

    y la aparicin de los casos testigo, rastrearemos el proceso de fortalecimiento e

    institucionalizacin pblica del actor preferible del agronegocio. En simultneo,

    vincularemos su ascenso con las transformaciones en la estructura productiva

    considerando las dinmicas de concentracin del capital con la transmutacin de la

    produccin familiar pampeana.

    El apartado concluir con un breve anlisis del conflicto agrario del 2008 pues

    implic una circunstancia en la que los agentes agrarios tradicionales y los de nuevo cuo

    desplegaron sus consignas de manera ms abierta dando cuenta de la profundidad de las

    transformaciones de las ltimas dcadas. En el marco de la disputa y la polarizacin

    podremos vislumbrar algunas de las tensiones y adaptaciones del agro contemporneo

    que trascienden la mera discusin en torno a los derechos de exportacin.

    El quinto captulo est dedicado a la reflexin en torno a los saberes y,

    especialmente, a la primaca del conocimiento cientfico como plataforma para la

    expansin de actores socioeconmicos hasta el momento marginales, tales como las

  • 22

    empresas de insumos. Nuestro objetivo all ser reconstruir el proceso de consolidacin

    de una ciencia agropecuaria concentrada en los avances tcnicos al servicio de la

    acumulacin. De acuerdo con nuestra circunscripcin temporal nos centraremos en

    algunos temas puntuales. Entre ellos se destaca la crtica desplegada entre finales de los

    80s y comienzos de los 90s en torno a las tcnicas agrcolas tradicionales y la

    instauracin del paradigma de la siembra directa como solucin. Este conjunto de tcnicas

    y maquinarias se condensa en un paquete tecnolgico que se completa en 1996 con la

    liberacin de la soja transgnica, y posteriormente con el maz y el algodn genticamente

    modificados. Si bien este paradigma de conocimiento tuvo una notable expansin a lo

    largo de los aos, no estuvo exento de tensiones. Es por ello que nos interesa trabajar

    sobre las tensiones que se generaron frente a acontecimientos que afectaron alguna de las

    variables del sector. Las coyunturas crticas econmicas nacionales e internacionales y

    los conflictos abiertos sern de nuestro especial inters junto con la posicin del Estado,

    principalmente del Gobierno Nacional, en torno a la biotecnologa.

    El captulo 6 tratar sobre la transmutacin de los alimentos en commodities como

    parte de un proceso semitico-poltico que se robustece durante la dcada de 1990 y

    transforma no slo la forma de nombrar los frutos de la tierra sino tambin sus cualidades

    y alcances. Para ello tambin se cubrirn varios caminos haciendo siempre hincapi en

    los avatares propios del agronegocio. En primer lugar, versar sobre las influencias de los

    procesos globales de formacin de precios de los alimentos y sus efectos sobre la

    produccin local de granos y oleaginosas. En segundo lugar, repasaremos el debate que

    se dio en Argentina en torno a la matriz agraria a comienzos de la dcada de 1990. En

    este punto nos interesa resaltar cmo se consolid la salida de la intensificacin sojera en

    contraste con otras opciones como la agricultura orgnica que, si bien representaban

    posturas minoritarias, tuvieron cierto auge. En tercer trmino, y tras la consolidacin de

    la opcin de los commodities, analizaremos la influencia de los actores financieros

    nacionales y globales en el marco de una actividad altamente conectada y dependiente de

    ciertos centros burstiles. Como contraste frente a los puntos anteriores, nos abocaremos

    a la temtica alimentaria propiamente dicha. Para ello comenzaremos con su

    problematizacin durante la crisis de 2001/2002 que oblig a los exgetas del

    agronegocio a abordar la paradoja del hambre en el pas con mayor produccin

    alimentaria per cpita del mundo. All nos concentraremos no slo en las estrategias

    argumentativas sino tambin en las polticas privadas de combate contra el hambre y las

    dificultades que ellas encontraron. As tendremos el contexto para abordar el mito segn

    el cual el crecimiento de la produccin agropecuaria supone automticamente la

  • 23

    abundancia de alimentos. Esta consigna ser contrastada con los datos histricos de

    suministro alimentario aportados por la FAO y las estrategias no mercantiles de acceso a

    los alimentos, principalmente desde las polticas pblicas de produccin para el

    autoconsumo y asistencia alimentaria.

    Finalmente, en el sptimo captulo se trabajar sobre la problemtica de la tierra

    en cuanto sustrato principal sobre el que se desarrolla la actividad agropecuaria. Aqu se

    abordarn los procesos de concentracin de la tierra, discutiendo con las aproximaciones

    que subestiman a este factor tanto desde el punto de vista productivo como explicativo.

    Para abordar el tema en el perodo analizado, tendremos en cuenta los avatares del

    endeudamiento hipotecario vinculado estrechamente con el paradigma tecnolgico

    analizado anteriormente. Con ello consideraremos las diversas opiniones de los

    operadores inmobiliarios a lo largo de los 90s atentos a detectar algunas tendencias en

    torno a la redistribucin de la tierra al interior de la regin pampeana. Posteriormente,

    cuantificaremos estas dinmicas a partir del anlisis de las partidas catastrales de 10

    partidos de la provincia de Buenos Aires. Aun sabiendo que la cantidad de distritos no es

    suficiente para emitir opiniones concluyentes, nos servir para discutir con el lugar

    especial del agronegocio segn el cual la propiedad ha diluido su importancia. Tras este

    abordaje cuantitativo propondremos la reconstruccin de las trayectorias productivas de

    algunas de las grandes empresas paradigmticas del agronegocio, centrndonos en el rol

    de la propiedad de la tierra en las mismas. Estrechamente vinculado a lo anterior, haremos

    un somero anlisis del comportamiento de los precios en el mercado de tierras. Teniendo

    en cuenta el aumento en el volumen y precio de los arrendamientos y ventas tras la

    devaluacin de 2002, repasaremos algunas de las tendencias diferenciales de las zonas

    productivas de la regin pampeana. Para concluir con dicho apartado, nos centraremos en

    las implicancias del avance de la mercantilizacin de la tierra en un contexto de

    arrinconamiento de las prcticas chacareras.

    En sntesis, el desafo de las prximas pginas ser por tanto dar cuenta de las

    transformaciones agrarias en la regin pampeana que definen al agronegocio como una

    configuracin especfica de la mquina social capitalista en el mundo rural. Su abordaje

    lo haremos a partir del doble registro de las variables cuantitativas y cualitativas,

    demostrando su inescindible articulacin. Finalmente, los anlisis se concentrarn

    principalmente en las dinmicas concernientes a la regin pampeana y se har hincapi

    en ciertos acontecimientos acaecidos desde comienzos de la dcada de 1990 que pusieron

    en relieve las tendencias latentes y manifiestas en el mundo rural de la regin.

  • 24

  • 25

    Captulo 1

    Fundamentacin terica.

    Las derivas del agronegocio y sus nexos con el

    extractivismo

    Amrica acta por exterminios, liquidaciones internas (no slo

    de los indios, sino tambin de los granjeros, etc.). Y por sucesivas

    oleadas externas de inmigraciones. El flujo del capital produce

    un inmenso canal, una cuantificacin de poder, con cuantos inmediatos, en el que cada cual se aprovecha a su manera de la

    circulacin del flujo-dinero [] El capitalismo universal y en s no existe, el capitalismo est en la encrucijada de todo tipo de

    formaciones, siempre es por naturaleza neocapitalismo;

    desgraciadamente inventa una versin oriental y otra occidental,

    y la transformacin de ambas.

    Deleuze y Guattari, 2010: 24

  • 26

    1. Introduccin

    En el presente captulo desarrollaremos algunos de los ncleos conceptuales ms

    relevantes para nuestra investigacin comenzando por el agronegocio. La gnesis

    norteamericana del trmino de mediados de la dcada de 1950 ser abordada desde una

    perspectiva crtica que rescata varias lecturas nacidas de anlisis tericos y de casos

    surgidos en las ltimas dcadas. Si bien tendremos en cuenta otros aportes, nos

    centraremos en aquellas nociones de agronegocio circunscriptas a la Argentina haciendo

    hincapi en las variables destacadas al momento de operacionalizar y definir el concepto.

    En segundo lugar, consideraremos la lgica del agronegocio y sus consecuencias

    como la manifestacin en los mundos rurales de los procesos propios del neoliberalismo

    cuya faceta ms amplia, al referirnos a los recursos naturales, puede ser condensada en el

    concepto de extractivismo o modelo extractivo. Es por ello que desplegaremos algunas

    definiciones de dicho proceso centrndonos en las etapas que confluyen hacia nuestros

    das3. Con ello podremos delinear las particularidades e influencias de este modelo en las

    lgicas productivas agrarias contemporneas, dando lugar a otro camino explicativo del

    agronegocio.

    En el tercer bloque del captulo problematizaremos los posibles abordajes e

    interacciones entre los mbitos discursivos y las transformaciones productivas. Si bien

    cambiaremos el grado de abstraccin y los derroteros tericos desarrollados hasta ese

    momento, consideramos de vital importancia su tratamiento para un correcto abordaje del

    problema de investigacin. As cubriremos distintas perspectivas que nos permitirn

    aprehender desde diversos puntos una problemtica tan compleja como la del

    agronegocio.

    En sntesis, en los dos primeros bloques conceptuales (agronegocio y

    extractivismo) definiremos y rastrearemos abordajes y propuestas analticas que

    encontramos fructferas para nuestra investigacin. En el tercer bloque, se produce un

    giro temtico y argumentativo a fin de poner en relieve la instancia de lo discursivo y su

    rol insoslayable en cualquier configuracin productiva. Justamente, la interaccin entre

    los elementos del captulo busca poner en relieve la necesidad de la integracin de

    mltiples perspectivas para dar cuenta de una de las transformaciones ms profundas

    acaecidas en el mundo rural de nuestro pas.

    3 El concepto de extractivismo y sus distintas acepciones sern retomadas en el captulo 3 donde

    desplegaremos, a modo de contextualizacin, los argumentos en torno al carcter extractivo del

    agronegocio.

  • 27

    2. Debates en torno a la conceptualizacin del agronegocio

    Existe una vasta bibliografa que busca definir a grandes rasgos las caractersticas del

    agronegocio. Consideramos que uno de los esfuerzos crticos ms interesantes al respecto

    es la compilacin realizada por Bernardo Manano Fernandes (2008) que presenta ms

    de 15 trabajos de diversos autores que problematizan la matriz agraria contempornea y

    su relacin con los actores subalternos. En este compendio, Manano Fernandes y Welch

    (2008) rastrean la gnesis del concepto hallndola hacia finales de la dcada de 1950 en

    un trabajo de Davis y Goldberg. Segn esa formulacin primigenia, el agronegocio

    incluye todas las operaciones vinculadas a los insumos agropecuarios, la produccin

    primaria propiamente dicha, el almacenamiento, procesamiento y distribucin de las

    mercancas agrcolas (farm commodities) como as tambin las redes de financiamiento

    que la involucran (Davis y Goldberg citado en Conforte y Stablein, 2008: 2). A simple

    vista esta concepcin parecera bastante neutral y no diferira demasiado de la forma en

    la que se concibe la produccin agropecuaria en trminos globales. En cierto sentido,

    podra pensarse que los autores intentan universalizar las condiciones y relaciones de

    produccin imperantes del capitalismo agrario ms vanguardista, que slo representa una

    parte acotada del sector, y mostrar su expansin como el curso natural del desarrollo en

    la agricultura4. Si el concepto de agronegocio abarca esencialmente las mismas funciones

    que aquello que entendemos como agricultura desde hace siglos Por qu cambiar su

    nombre? Qu se esconde tras el bautismo?

    La respuesta la aporta uno de los autores casi dos dcadas despus cuando expande

    la conceptualizacin en la nocin de Agribusiness Commodity System5 que incluye all

    firms and institutions involved in the manufacture and distribution of farm supplies;

    production operations on the farm; and the storage, processing, and distribution of a given

    commodity and the items made from it (Goldberg, citado en Conforte y Stablein, 2008:

    2). Justamente para la dcada de 1970 pareca haberse extendido el consenso en torno al

    concepto de agronegocio (o agribusiness en la literatura anglosajona) bajo este mirada

    neutralizada que incluye a amplios sectores del mundo rural pero dentro de

    determinados parmetros. Tal lo demuestra otra definicin clsica que entiende a los

    4 Los autores dicen literalmente thus agribusiness essentially encompasses today the functions which the term agriculture denoted 150 years ago (Davis y Goldberg citado en Conforte y Stablein, 2008: 2). 5 El pasaje del trmino al castellano es bastante complejo, al punto tal que incluso los sistemas automticos

    de traduccin tienden a mantener su versin anglosajona.

  • 28

    agronegocios como los espacios que involucran a todos aquellos individuos u

    organizaciones que se ocupan de la produccin, procesamiento, transporte, acopio,

    financiamiento, regulacin y comercializacin de las fibras y alimentos mundiales

    (Austin, 1974, citado en Teubal, 1999: 103). En este sistema se imbrican tanto las

    organizaciones operativas (productores, procesadoras, acopiadores, etc.), instituciones

    de soporte (proveedores de insumos, organismos financieros, cientficos, etc.) y

    mecanismos de coordinacin (organismos estatales, gremiales, agencias

    multinacionales, ONG, etc.), orientadas a la produccin agraria regidas bajo la escala de

    lo global y atravesadas por profundas asimetras que intentan ocultarse bajo el paradigma

    de las redes. En definitiva lo que subyace a esta nocin es la perspectiva mercatilizadora

    de la agricultura y la primaca de un proceso en el cual la heterogeneidad estructural

    agraria se ampla hacia los eslabones vinculados a la transformacin y el comercio, donde

    las empresas ms concentradas tienen el peso mayor. En palabras de Manano Fernandes

    y Welch:

    O movimento desse complexo e suas polticas formam um modelo de

    desenvolvimento econmico controlado por corporaes transnacionais, que

    trabalham com um o mais commodities e atuam em diversos outros setores da

    economia. Compreendemos que essa condio confere s transnacionais do

    agronegcio um poder extraordinrio que possibilita a manipulao dos processos

    em todos os sistemas do complexo (2008: 48).

    Tras el concepto de redes productivas, agrarias o de agronegocios que proponen

    intercambios simtricos de flujos de informacin, conocimientos, estrategias de negocios,

    etc., se solapa la dominacin ejercida por grandes empresas agroindustriales

    transnacionales que definen las pautas de funcionamiento del sistema en su globalidad

    (Giarracca y Teubal, 2008: 159).

    Lo que opera justamente es un desplazamiento del rol de la agricultura como

    productora de alimentos o de materias primas hacia una dinmica ordenada por los

    commodities. En definitiva, podra pensarse al agronegocio como una lgica en torno a la

    cual se organizan determinados segmentos de la produccin agropecuaria y que influyen

    en diversos grados al resto del sector. Su dinmica expansiva busca ampliar las fronteras

    y subsumir otras realidades territoriales y productivas a su propio despliegue en un

    proceso que alterna el arrinconamiento con la expulsin. Sin embargo, junto a esta lgica

    convive otro tipo de estrategias productivas que forman parte del heterogneo mundo

    rural y se contraponen en cuanto a la forma de relacionarse con la tierra, la tecnologa, el

    destino de la produccin, la utilizacin de la mano de obra, etc. (Giarracca y Palmisano,

  • 29

    2013). En este sentido podra imaginarse un continuum multivariable en el cual se ubican

    las diversas lgicas productivas, sociales y simblicas que refieren a formas mutuamente

    excluyentes de apropiacin territorial. En esta lnea se ubicaran al menos tres tipos

    ideales6 de lgicas: la del agronegocio, la chacarera y la campesina/indgena. Estas

    circunscripciones buscan condensar la complejidad social resultante de las

    transformaciones en los mundos rurales y las heterogeneidades que se despliegan

    construyendo una tipologa que sirva como referencia para ubicar las diversas lgicas

    productivas que subyacen en las diferentes producciones y regiones. La metodologa

    elegida implica

    una seleccin, abstraccin, combinacin y (a veces) acentuacin planeada e

    intencional de un conjunto de criterios con referentes empricos que sirve de base

    para la comparacin de casos empricos. As, la construccin tipolgica supone en

    primer lugar aludir, construir y explicitar un marco conceptual que explica por qu

    se seleccionan algunos criterios y no otros, cmo se vinculan los distintos criterios,

    cul es el conjunto de relaciones que dan lugar a un tipo y no a otro (Aparicio y Gras,

    1999: 154).

    Los tres tipos ideales propuestos se ubican a lo largo de un continuum que admite diversas

    transiciones y agrupamientos temporarios y considera al menos cuatro variables para

    definir la cercana de las producciones y estrategias a uno u otro ncleo conceptual.

    Sintticamente, la lgica chacarera respondera a la definicin ya clsica

    propuesta por Archetti y Stlen (1975) segn la cual los colonos/chacareros tienen una

    relacin patrimonial con la tierra que es concebida como el lugar de la herencia familiar

    y la expresin del trabajo de las distintas generaciones. Esta concepcin est

    estrechamente vinculada con el peso de la mano de obra familiar en la explotacin, pues

    es la posibilidad de emplear a sus miembros lo que refuerza no slo el vnculo con la

    tierra sino tambin lo que determina la tecnologa que se emplear. En este sentido, la

    incorporacin de tcnicas o artefactos "modernos" depender de que sus implicancias no

    6En este punto nos remitimos a la nocin de Max Weber (2006) que define al tipo ideal como una

    construccin terico-metodolgica de carcter utpico en tanto circunscribe un conjunto ordenado y no

    contradictorio de conexiones conceptuales obtenidas a partir del realce conceptual de ciertos elementos de

    la realidad: uno o varios puntos de vista; heterogneos fenmenos singulares, difusos y discretos;

    fenmenos que encajan en aquellos puntos de vista; etc. En palabras del autor, la relacin entre el tipo ideal

    y los hechos empricamente dados de la vida consiste exclusivamente en esto: all donde en la realidad se comprueba o se supone que en algn grado operan de hecho conexiones del tipo abstractamente

    representado en aquella construccin [] podemos ilustrar y volver comprensible pragmticamente la especificacin de tal conexin en un tipo ideal (Weber, 2006: 79). El aporte de esta herramienta metodolgica se encuentra por tanto en la posibilidad de confrontar este ncleo conceptual con ciertas variables registradas en lo emprico y de esta manera proponer una determinada lectura de la vasta

    heterogeneidad que conforma lo social. Sin embargo, es importante dejar en claro que el carcter ideal del

    objeto analtico no evita ni ocluye las consecuencias nefastas que pueda generar la propia lgica en los

    cuerpos e identidades de los actores involucrados.

  • 30

    atenten contra la participacin y control productivo ejercido por la familia. Finalmente,

    su proceso de acumulacin relativa le permite dedicarse a producciones orientadas al

    mercado interno con exportacin de excedentes.

    En lo que respecta a la lgica campesina/indgena, la relacin con la tierra

    adquiere un carcter territorial en el sentido ms pleno y diverso de la palabra: como

    jurisdiccin; como espacio geogrfico; como hbitat o conjunto sistmico de recursos

    esenciales para la existencia colectiva; como biodiversidad y los conocimientos

    ancestrales conectados a ella; y como espacialidad socialmente construida vinculada a la

    identidad colectiva (Toledo Llancaqueo, 2005). Este sentido fuerte del territorio incluye

    un reconocimiento de las relaciones sociales y de poder que atraviesan los espacios y al

    fijar fronteras deviene en una arena de conflictualidad con otras formas de apropiacin

    del espacio (Manano Fernandes, 2005). La familia y la comunidad son casi los nicos

    sujetos que aportan fuerza de trabajo para la produccin cotidiana de alimentos orientados

    al autoconsumo o los mercados locales y regionales. En trminos generales, suele haber

    un aprovechamiento, e incluso una recuperacin, de los saberes tradicionales y por lo

    tanto un uso reducido de tecnologa externa, principalmente en lo que respecta a insumos

    y herramientas.

    En ltimo lugar, la lgica del agronegocio que aqu nos ocupa tiene, a grandes

    rasgos, las caractersticas opuestas al tipo anterior. La relacin con la tierra es meramente

    mercantil y en su expansin perfecciona y ampla el mercado de tierras tanto para la

    compra como para el arrendamiento. La utilizacin de tecnologas de punta est

    completamente generalizada en producciones que se orientan abrumadoramente al

    mercado externo o a consumidores de alto poder adquisitivo. La produccin est en

    manos de trabajadores asalariados, ya sea que se encuentren directamente vinculados a la

    explotacin o que sean contratistas7 que realizan las labores culturales.

    En el siguiente grfico proponemos una visin de este continuum que si bien

    simplifica ciertas variables que, como se ver ms adelante, podran considerarse como

    inconmensurables, sirve para clarificar los alcances del modelo analtico propuesto.

    7 En la literatura sobre el tema el concepto de contratista suele tener un doble sentido. Por un lado, incluye

    a prestadores de servicios agrcolas que realizan las labores culturales (roturacin, siembra, fumigacin,

    cosecha, etc.) para diversos productores; por el otro, a aquellos dueos de maquinarias que adems tienen

    tierras (propias o arrendadas) en produccin. En este caso nos referimos a la primera nocin.

  • 31

    Grfico 1: El continuum del sector agrario.

    Ms all de esta primera definicin es necesario ahondar un poco ms en las implicancias

    del agronegocio, pues no slo debe entenderse en el marco de esta propuesta

    metodolgica sino que su horizonte de referencias puede ampliarse para incorporarlo en

    un esquema analtico mayor. Un camino para enriquecer una conceptualizacin crtica

    del agronegocio puede transitarse estableciendo una comparacin con el modelo agrario

    precedente, tal y como proponen Giarracca y Teubal (2008). Los autores contraponen el

    modelo del agronegocio al modelo agroindustrial que tiene su cenit en Argentina en

    paralelo al esquema de Industrializacin por Sustitucin de Importaciones (ISI). Durante

    este perodo el sector agrario muestra una apropiacin desigual del excedente por parte

    de los distintos agentes de la economa nacional (industrias, agricultores, distribuidores,

    etc.) y entre los actores agrarios. Sin embargo, se desplegaron una serie de mecanismos

    sociopolticos que permitieron la integracin de vastos sectores sociales, tanto en el

    campo como en las zonas urbanas, que se expandan a la par de la industria nacional.

    Asimismo, es importante remarcar que este proceso inclusivo no estuvo exento de

    tensiones y dinmicas de explotacin muy marcadas, como en el caso de las comunidades

    indgenas que fueron utilizadas como mano de obra en las agroindustrias de todo el pas.

    A partir de 1946, con la creacin del Instituto Argentino de Promocin del

    Intercambio, se consolidaron las polticas de control de cambios y regulacin del

    comercio exterior que distribuan los ingresos de las exportaciones entre los sectores

    internos. Sin embargo, esta experiencia fue breve y durante la mayor parte del perodo las

    exportaciones fueron controladas por un pequeo grupo de empresas transnacionales, con

    la excepcin de la Asociacin de Cooperativas Argentinas. En contraste, en el comercio

    interno primaban las empresas pequeas y medianas junto a una enorme mirada de

    cooperativas locales. Una situacin similar presentaba la cadena agroalimentaria, donde

    el procesamiento y fabricacin de alimentos se distribua entre grandes, medianas y

    pequeas empresas de origen nacional, junto a grandes frigorficos de capitales varios y

    mataderos locales de carcter pblico. En la regin pampeana el grueso de la

    agroindustria se orientaba al mercado externo e interno, este ltimo muy favorecido por

    las polticas de distribucin de los ingresos y suba real de los salarios que ampliaba y

    mejoraba el acceso a la alimentacin de vastas capas sociales. Este factor impulsaba

    Lgica

    campesina/indgena

    Lgica

    chacarera

    Lgica del

    agronegocio

  • 32

    tambin el despliegue de las mltiples producciones regionales, tales como el azcar, el

    vino, la yerba mate, etc. En este contexto tambin se dictaron una serie de medidas que

    dieron mayor estabilidad a los arrendatarios y trabajadores rurales (entre los que se

    destacan el Estatuto del Pen Rural de 1944 y la Ley 13.246 de Arrendamientos Rurales

    y Aparceras Rurales de 1948), impulsando incluso el acceso a la tierra de muchos

    chacareros y pequeos productores que desde finales del siglo XIX trabajaban en parcelas

    alquiladas. A su vez, con la creacin del Instituto Nacional de Tecnologa Agropecuaria

    en 1956 se consolid la difusin de tecnologa para las diversas escalas de produccin,

    haciendo hincapi en los requerimientos internos.

    Finalmente, las diversas juntas reguladoras (muchas de ellas creadas en la dcada

    de 1930 en respuesta a la crisis mundial que sucedi al crack del 29) mantenan la

    estabilidad de varias actividades econmicas a travs de la fijacin de precios sostn,

    siendo el sector agrcola uno de los ms beneficiados con estas polticas.

    Frente a esta situacin, Giarracca y Teubal contraponen en el mencionado artculo

    una lgica/modelo diferente instaurado a partir de las dcada de 1970 a raz de la profunda

    transformacin de las condiciones polticas y los arreglos institucionales que delineaban

    los esquemas de desarrollo de los aos anteriores. Sin lugar a dudas el punto de inflexin

    fue la ltima y ms violenta dictadura militar que se instaur en Argentina en 1976. A

    partir de all se desplegaron mecanismos de disciplinamiento social que incluyeron la

    represin y desaparicin de personas como poltica de debilitamiento de los sectores

    populares en pos de la reconcentracin de poder en torno a los actores poltico-

    econmicos que impulsaban el modelo neoliberal. Al terrorismo de Estado se sum la

    violencia econmica surgida tanto de las distintas medidas regresivas aplicadas por el

    gobierno de facto, como tambin de la articulacin entre los golpes econmicos de los

    primeros aos de democracia y las polticas pblicas, que con el argumento de la

    estabilizacin, deterioraban cada vez ms las condiciones de vida de la sociedad. En este

    contexto, la apertura de la economa al mercado mundial, el sobredimensionamiento del

    sector financiero y el aumento de la deuda externa se impusieron como axiomas del

    modelo econmico. En paralelo, las polticas de ajuste estructural combinaron las

    privatizaciones de los bienes y espacios pblicos con la flexibilizacin del mercado

    laboral.

    En los mundos rurales, el primer hito tecnolgico del perodo puede rastrearse

    hacia mediados del siglo XX, cuando comienza a difundirse la Revolucin Verde que

    implic la introduccin y masificacin de las semillas hbridas, principalmente de maz,

    trigo y arroz, el deterioro de la diversificacin productiva y el incremento del uso de

  • 33

    insumos comerciales (fertilizantes qumicos, plaguicidas, etc.). En nuestro pas, este

    proceso de carcter global comenz algunos aos despus e implic la creciente

    transnacionalizacin de la industria de insumos y los desarrollos cientficos a la par de

    una mayor dependencia tecnolgica por parte de los productores directos. De esta manera,

    las grandes empresas adquirieron mayor autonoma y capacidad de decisin sobre qu,

    cmo y con qu producir.

    Asimismo, el requerimiento de maquinaria moderna para desarrollar las nuevas

    formas de produccin, que en el caso de la Argentina se encarna en el trinomio semilla

    transgnica8/glifosato/siembra directa, llevaron al fuerte endeudamiento de los actores

    agrarios, al punto tal que hacia la segunda mitad de los 90s haba ms de 12 millones de

    hectreas hipotecadas en los bancos (Teubal, 2006: 19). En paralelo, se desarm todo el

    andamiaje institucional que desde la dcada de 1930 mantena cierta estabilidad en los

    esquemas econmicos a travs de subsidios, precios sostn y dems. El Decreto de

    desregulacin econmica nmero 2284 de 1991 elimin la mayora de las juntas

    reguladores e institutos nacionales vinculados a los diversos cultivos del pas afectando

    notablemente la produccin de alimentos bsicos que se encontraron a merced de los

    mercados mundiales.

    Esta transformacin de las condiciones poltico-institucionales permiti que los

    complejos agroalimentarios se extendieran, desplegando procesos de concentracin

    horizontal y vertical, a la vez que las escalas de produccin de los diversos cultivos se

    incrementaban a la par de la desaparicin de explotaciones agropecuarias. Adems, el

    incremento de la demanda de ciertos commodities agrarios, principalmente la soja,

    impuls un avance de la frontera agropecuaria que desplaz a comunidades campesinas,

    indgenas y productores chacareros y se extendi a ecosistemas ricos en biodiversidad

    como las yungas y los montes nativos9.

    8 Como veremos ms adelante, la soja transgnica fue liberada en Argentina en el ao 1996 y rpidamente

    se convirti en la variedad que domina casi exclusivamente la produccin de soja, la cual cubre ms del

    50% superficie sembrada en el pas. 9 Por su parte, la historiadora Noem Girbal-Blacha (2013) entiende al agronegocio como una forma de

    produccin propia del capitalismo moderno asentada en un modelo de explotacin que es poco racional e

    inequitativo. En trminos de factores productivos, lo caracteriza como capital intensivo (alta tecnificacin,

    alta demanda de insumos) y de escasa demanda de mano de obra y controlado por pocas empresas, muchas

    de ellas de capital extranjero. Al privilegiar el negocio y la rentabilidad potenciadas por las lgicas

    financieras y los adelantos biotecnolgicos quedan en segundo plano los impactos ambientales, culturales

    y sociales. Desde su perspectiva, estas transformaciones han hecho que el centro del debate historiogrfico

    en torno a la cuestin agraria se centre en la relacin/tensin: Agro-Conocimiento-Tecnologa- Marginalidad (Girbal-Blacha, 2013: 115). Por otro lado, tambin es destacable la definicin crtica de agronegocios desarrollada por Taddei (2013)

    que se centra en las transformaciones territoriales del extractivismo sojero. El autor retoma la definicin de

    agronegocios de la FAO y la ampla haciendo nfasis en la creciente gravitacin de los fondos financieros

    en las empresas del sector agroalimentario; la tendencia a la concentracin del capital; la

  • 34

    Compartiendo varios puntos con esta perspectiva, Gras (2012) afirma que el

    modelo del agribusiness o agronegocio se caracteriza por un mayor peso de las empresas

    industrializadoras y proveedoras de insumos y la creciente capacidad del capital

    agroindustrial para definir el tipo y la forma de produccin a partir de nuevos esquemas

    como la agricultura de contrato. Asimismo, la autora seala otra serie de elementos

    vinculados a la agricultura globalizada:

    a) modalidades novedosas de tenencia de la tierra y de arreglos financieros,

    comerciales y de organizacin para la produccin; b) incremento de la concentracin

    y transnacionalizacin del sector proveedor de insumos y de las empresas

    comercializadoras; c) intensificacin en el uso de los distintos factores de la

    produccin junto con cambios tecnolgicos en la calidad de los insumos e

    innovaciones genticas; d) importancia de las lgicas de valorizacin financiera - a

    diferencia de las formas de creacin de valor clsicas - y sus consecuencias en

    trminos del aumento de la velocidad de rotacin del capital; e) procesos de

    regionalizacin de las grandes empresas productoras que incluyen la participacin

    de capitales no agrarios, nacionales y extranjeros; f) aumento de la concentracin de

    la tierra, proceso acompaado por un incremento de su extranjerizacin; g)

    ampliacin de la lgica del mercado en la asignacin de recursos y polticas pblicas

    que favorecen la expansin del agronegocio en detrimento de las polticas de apoyo

    a la agricultura familiar y campesina (Gras, 2012: 6).

    Si tanto los planteos de Teubal y Giarracca como los de Gras dan cuenta principalmente

    de las transformaciones en las condiciones y caractersticas estructurales que definen al

    agronegocio, otros trabajos han hecho nfasis en los cambios de ndole cualitativa que

    afectaron a los actores sociales rurales. Desde esta perspectiva, Valeria Hernndez (2009)

    propone reconstruir la definicin de agronegocios a partir de los aportes clsicos nacidos

    en Estados Unidos (vase Conforte y Stablein, 2008) y con ellos problematizar los

    desplazamientos subjetivos que sufrieron los chacareros para incorporarse al mundo de

    los agronegocios. Segn la autora, la traduccin argentina del modelo propuesto en

    Estados Unidos hizo especial nfasis en la organizacin reticular de la produccin como

    as tambin de los marcados procesos de integracin a lo largo de las cadenas

    agroalimentarias que requirieron la transformacin de los sujetos agrarios y su insercin

    en el mundo del management moderno. Adems, la innovacin se convirti en un valor

    que designaba una necesidad de cambio productivo hacia un modelo mejor en lnea con

    los postulados de eficiencia productiva, organizacin en redes, perfil empresarial, etc. que

    el mismo modelo propona.

    transnacionalizacin mercado de insumos y la creciente dependencia de los agricultores a las firmas

    proveedoras de insumos; la incorporacin de maquinaria moderna que increment la productividad; el

    contexto de aumento de precio de los commodities que hizo rentable la produccin en nuevas zonas y

    permiti la ampliacin de la frontera agropecuaria; entre otras (Taddei, 2013: 161 a 163).

  • 35

    Segn Hernndez, el deslizamiento subjetivo que sufrieron los chacareros en su

    devenir como empresarios del agronegocio (agribusinessman) tuvo cinco modalidades10.

    En primer lugar, pasar de la explotacin a la empresa innovadora implic reemplazar

    el horizonte de referencias condensado en el mundo chacarero por una ruralidad

    globalizada que tuviera en cuenta variables econmicas que trasciendan la mera

    produccin agraria. Principalmente se refiere al manejo de los distintos mecanismos

    financieros que fueron construyndose desde la dcada de 1970 pero que recin

    adquirieron importancia hacia los 90s. En segundo lugar, cambiar la gestin familiar al

    management moderno implic el abandono de la familia como institucin organizativa

    de la produccin para pasar a estructuras de carcter ms formal que atenen la influencia

    de los vnculos extra-econmicos en las decisiones empresariales. En tercer lugar, el

    paradigma de los agronegocios implic el pasaje de lo agrario a lo transectorial: el

    contratismo, la red de redes, los hbridos. Para Hernndez, el avance del agronegocio

    gener una mirada de trayectorias sobre los agentes agrarios, algunas colectivas como el

    ascenso de nuevas corporaciones agrarias tales como AACREA, AAPRESID, ACSOJA,

    ACTA, ArgenBio, etc.11 y otras de carcter ms individual. En este proceso surgen

    algunos actores de carcter novedoso como el caso del agribusinessman, mientras otros

    adquieren importancia en paralelo a la concentracin de la gestin de la tierra. ste es el

    caso de los rentistas, en cuanto dueos de diversas porciones de tierra que por diversas

    razones (principalmente de escala) salen de la produccin y arriendan sus campos, pero

    tambin de los contratistas, que realizan las labores agrcolas. Del mismo modo se

    destacan los caminos de quienes perdieron su espacio en el mundo rural. Algunos se

    convirtieron en pequeos y medianos comerciantes, otros pasaron por procesos de

    exclusin que los arroj a la pobreza, la marginalidad o incluso al suicidio. En cuarto

    lugar, se destaca el pasaje de la propiedad familiar al territorio virtual: los sin tierra de

    la pampa. Esto implica que la tierra

    pasa a tener un estatus totalmente subordinado en la dinmica de la ruralidad

    globalizada en la medida en que, desde el punto de vista econmico, el valor final

    del negocio se calcula sobre la base de la suma de transacciones realizadas en cada

    una de las unidades del sistema (Hernndez, 2009: 53).

    10 En un trabajo anterior Giarracca et al. (2005) dan cuenta de los cambios en trminos productivos (acceso

    y uso de la tierra, tecnologa, mano de obra, etc.) que acompaa la transformacin de colonos a sojeros en

    el sur de Santa Fe. 11 Las mencionadas siglas refieren a: Asociacin Argentina de Consorcios Regionales de Experimentacin

    Agrcola; Asociacin Argentina de Productores en Siembra Directa; Asociacin Cadena de la Soja

    Argentina; Asociacin de Cmaras de Tecnologa Agropecuaria; Consejo Argentino para la Informacin y

    el Desarrollo de la Biotecnologa.

  • 36

    En quinto y ltimo lugar, se subraya el desplazamiento del saber formal o heredado a las

    competencias. Frente al rol central que adquiere el mercado mundial, los productores

    deben saber responder a tiempo a su volatilidad, lo que requiere de una alta capacidad de

    incorporacin de innovaciones que se contraponen a la construccin del saber

    consuetudinario que se adquiere por la experiencia de trabajo. En este contexto los foros

    de productores vinculados al agronegocio se convierten en la fuente privilegiada de

    conocimiento prctico para poder cumplir con una produccin que tiene al mbito global

    como horizonte.

    Con una propuesta ampliamente anclada en problemticas de ndole cualitativo,

    Hernndez destaca que estos desplazamientos subjetivos que afectan a los actores cuentan

    con una serie de mecanismos que se convierten en las fuentes del capital social del

    agronegocio: las voces del experto (el cientfico), de la experiencia (el empresario) y del

    traductor social (el periodista) colaboraron para darle densidad a la economa poltica del

    agribusiness world (2009: 62).

    Considerar la conjuncin de los cambios estructurales y tambin aquellos de

    ndole subjetivo, sumados a los procesos excluyentes mencionados por varios autores,

    nos permite caracterizar a la lgica del agronegocio y sus consecuencias como la

    manifestacin en los mundos rurales de los procesos propios del neoliberalismo cuya

    faceta ms amplia, al referirnos a los recursos naturales, puede ser condensada en el

    concepto de extractivismo. Por lo tanto la pregunta debera ampliarse e intentar dejar en

    claro qu se entiende por extractivismo o modelo extractivo, y cules son las

    particularidades de este sistema en las lgicas productivas agrarias contemporneas,

    dando lugar a otro camino explicativo de la lgica del agronegocio. Ese ser el objetivo

    del prximo apartado.

    3. El agronegocio como modalidad del extractivismo

    Podramos considerar al agronegocio como la versin agraria del modelo extractivo que

    se imbrica en la matriz productiva de diversos pases con fortaleza e intensidad variable.

    Por ello, para poder entender qu es el agronegocio es importante antes delinear lo que

    comprendemos por modelo extractivo y as encontrar las lneas de traduccin de esta

    matriz general hacia el sector rural.

    Hacia finales del tomo I de El Capital, Marx (2006) intenta reconstruir el punto

    de partida del modo de produccin capitalista rastreando el origen de las grandes masas

  • 37

    de capital que pusieron en funcionamiento su maquinaria. Este proceso es denominado

    acumulacin originaria y explica la escisin entre el productor y los medios de

    produccin. En Inglaterra esta dinmica tiene como punta de lanza la expropiacin de la

    tierra a los campesinos, las tierras comunales y la apropiacin fraudulenta de bienes

    fiscales y eclesisticos. Esta expropiacin permiti la concentracin de capital en menos

    manos y el despojo de millones de personas que fueron empujadas salvajemente a la

    miseria y a integrarse a un mercado de trabajo que no poda absorberlos. As, los salarios

    de subsistencia y la superexplotacin asentada en la existencia de un enorme ejrcito

    industrial de reserva fueron el segundo factor de la acumulacin originaria que se nutri

    de la sangre y la vida de las personas que alimentaban los modernos establecimientos de

    la Revolucin Industrial. Si bien la esclavitud infantil y la trata de personas se

    desarrollaron al calor de los centros fabriles, fue ms all de las fronteras de los pases

    centrales donde las particularidades del despojo omitieron las premisas del trabajador

    libre de toda atadura que fund el capitalismo en Europa. Tal es as que el tercer gran

    pilar de la acumulacin originaria puede ubicarse en

    el descubrimiento de las comarcas aurferas en Amrica, el exterminio, esclavizacin

    y soterramiento en las minas de la poblacin aborigen, la conquista y saqueo de las

    Indias Orientales, la transformacin de frica en un coto reservado para la caza

    comercial de pieles-negras, caracterizan los albores de la era de produccin

    capitalista. Estos procesos idlicos constituyen factores fundamentales de la

    acumulacin originaria (Marx, 2006: 939, Tomo I, Vol. 3. El destacado es del autor).

    Podra afirmarse que el factor comn que atraviesa a estos pilares y de alguna manera

    funda/refunda al capitalismo, es la desterritorializacin del capital y el trabajo y la

    reterritorializacin bajo los nuevos espacios capitalistas12. Los campesinos liberados de

    la tierra se distribuyeron entre el limbo de la pobreza y la mendicidad y el espacio de

    explotacin erigido en la fbrica y el mercado. Pero tambin operaron en los mrgenes

    procesos de saqueo, matanza y refuncionalizacin de relaciones no capitalistas bajo la

    gida del mercado mundial y las necesidades de las metrpolis.

    12 La desterritorializacin puede definirse como un desenraizamiento que se desdobla en el plano de la produccin (la fbrica global), de la tecnologa (medios de comunicacin) y de la cultura (imaginarios

    colectivos transnacionales) (Ortiz citado en Herner, 2009: 169). En palabras de Deleuze y Guattari este momento fundante implic para el trabajador libre, desterritorializacin del suelo por privatizacin; descodificacin de los instrumentos de produccin por apropiacin; privacin de los medios de consumo

    por disolucin de la familia y de la corporacin; descodificacin, por ltimo, del trabajador en provecho

    del propio trabajo o de la mquina y, para el capital, desterritorializacin de la riqueza por abstraccin monetaria; descodificacin de los flujos de produccin por capital mercantil; descodificacin de los Estados

    por capital financiero y las deudas pblicas; descodificacin de los medios de produccin por la formacin

    del capital industrial, etc. (Deleuze y Guattari, 2009: 232).

  • 38

    Si bien esta acumulacin originaria se encuentra en el perodo primigenio del

    capitalismo, su lgica parece replicarse hasta nuestros das. De alguna manera, cada una

    de las respuestas del modo de produccin capitalista a sus crisis peridicas ha tenido

    entre sus componentes una nueva apropiacin territorial y el desarrollo mercantil sobre

    nuevos espacios. En este sentido el avance sobre nuevos territorios para conectarlos a la

    dinmica del mercado mundial no necesariamente estuvo acompaado por el impulso de

    las condiciones de libertad civil que tenan la mayora de los trabajadores de los pases

    centrales. Sin embargo, esto no empaa el carcter capitalista de un modo de produccin

    que desde sus inicios pivotea entre las modernas relaciones de explotacin en los pases

    centrales y las prcticas depredatorias en la periferia. Son al fin y al cabo dos caras de la

    misma moneda13.

    Como sealamos en otro trabajo (Teubal y Palmisano, 2012), Amrica Latina no

    fue ajena a esta dinmica y varios perodos de su historia estuvieron marcados por los

    avances del capitalismo depredatorio y las mltiples convulsiones que gener. En

    trminos generales se puede ubicar el primer paso de este proceso en la conquista misma

    y el establecimiento de los diversos regmenes coloniales centrados en la explotacin de

    recursos minerales. Tal como plantea Moore (2010), la expoliacin colonial estuvo

    asentada principalmente en la expansin geogrfica para la produccin y el intercambio

    de commodities y el despojo, la persecucin y el exterminio sistemtico de las poblaciones

    originarias14. All perdieron sus posesiones, su forma de vida, su cultura y, en muchos

    casos, su vida misma. Desde el comienzo se trat de un proceso marcado por la bsqueda

    y el saqueo del oro y la plata primero en forma de objetos, y tras el agotamiento de los

    artefactos, se avanz sobre los yacimientos nativos, como en el caso de Potos y

    Zacatecas.

    En esta configuracin de la economa mundial o economa mundo, el oro y la plata

    eran requeridos por Europa para hacer frente a su demanda de joyas y especies

    provenientes de Oriente15. Pero en paralelo, tambin se sum la produccin y exportacin

    de algunos alimentos, al punto tal que el azcar se constituir a lo largo de siglos como

    uno de los principales commodities destinados a Europa. As, la esclavitud sigui al

    13 Para Polanyi el proceso colonial combinado con el mercado agudizan la subordinacin de los sectores

    subalternos de la periferia: en el contexto de un proceso de colonizacin es cuando el mercado hace estragos ms severos que en economas que no son coloniales. Sea que el colonizador requiere tierra para

    obtener la riqueza enterrada en ella, o porque simplemente se desea limitar la capacidad del nativo para

    producir un excedentes de alimentos o materias primas [] lo importante es que el proceso colonial, se empea en primer trmino en destrozar el sistema social y cultural de la vida nativa (Polanyi, 1957:178). 14 Para un anlisis pormenorizado de este proceso vase Oliva de Coll, 1991. 15 Vase Vilar, 1979 y Wallerstein, 1979.

  • 39

    azcar. A medida que fue trasladndose el cultivo del azcar, se transform la

    composicin tnica de la clase esclava (Wallerstein, 1979: 88 y 89). La provisin de

    esclavos de frica para la produccin azucarera americana dur varios siglos, empujando

    hacia la muerte a sus trabajadores, quienes emigraban forzosamente o se escapaban de la

    salvaje explotacin, a la vez que produjo un marcado deterioro ecolgico de los suelos y

    la brutal reduccin de la poblacin nativa (Wallerstein, 1979: 89). Como contrapartida,

    los nuevos territorios coloniales presentaban condiciones ecolgicas favorables para la

    produccin, mano de obra muy barata y una riqueza mineral muy grande. Desde los

    inicios, la presencia colonial produjo profundas dislocaciones en la organizacin social

    indgena que afect y se apropi de las jerarquas para ponerlas al servicio de la

    maquinaria de dominacin imperial. Como respuesta se desencadenaron rebeliones, entre

    las que se destacan las acciones lideradas por Tupac Amaru y Tupac Katari hacia finales

    del siglo XVIII, que combinaron el rechazo a la intensificacin de la opresin con

    una propuesta de orden social basada en el reconocimiento de las diferencias; en la

    posibilidad de una civilidad compartida y una autoridad legtima. Ese nuevo orden

    social no implicaba necesariamente la expulsin o el exterminio, ms bien adopt la

    imagen de una restitucin o reconstitucin (Rivera Cusicanqui, 2010: 14).

    Un segundo perodo de la desposesin en Amrica Latina se da a partir de las guerras de

    independencia, la consolidacin del liberalismo en el siglo XIX y la explosin de las

    economas primario-exportadoras vinculadas a la economa mundial. Aqu la tierra pasa

    a ocupar el centro d