los primeros pobladores - universidad popular autónoma de ... · mesoamérica en 1943, para...

18
Los primeros pobladores Los contactos de los primeros pobladores se dieron en un marco en el que la geografía y la cultura estaban relacionadas íntimamente. El continente Americano fue recorrido poco a poco a través de miles de años, por grupos de individuos que arribaron hasta el sur del continente. Si bien no se ha establecido una fecha sobre la cual estén de acuerdo los científicos respecto del arribo de los primeros pobladores a América, se puede indicar que estos ya efectuaban actividades de caza y recolección hacia 5,000 a. C. Todo el continente americano se pobló, pero no en todos sus rincones se dio un desarrollo cultural. Para esto fueron esenciales dos elementos: la domesticación de los granos y un medio óptimo en que las tierras y el clima favorecieran a los hombres. En América, los pueblos que reunieron estas características erigieron civilizaciones y conformaron una unidad geográfica y cultural conocida como América nuclear, zona que a su vez se divide en tres regiones: 1.- La zona circuncaribe, que comprendía las culturas de las Antillas litoral continental que bordea al mar Caribe-, parte de lo que hoy es Nicaragua y las costas colombianas. 2.- La zona andina, conformada por las culturas de los actuales Perú, Ecuador, Bolivia, Colombia y Venezuela. 3.- Mesoamérica.

Upload: volien

Post on 21-Sep-2018

218 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Los primeros pobladores

Los contactos de los primeros

pobladores se dieron en un marco

en el que la geografía y la cultura

estaban relacionadas íntimamente.

El continente Americano fue

recorrido poco a poco a través de

miles de años, por grupos de

individuos que arribaron hasta el sur

del continente. Si bien no se ha

establecido una fecha sobre la cual

estén de acuerdo los científicos

respecto del arribo de los primeros pobladores a América, se puede indicar que estos ya

efectuaban actividades de caza y recolección hacia 5,000 a. C. Todo el continente

americano se pobló, pero no en todos sus rincones se dio un desarrollo cultural. Para esto

fueron esenciales dos elementos: la domesticación de los granos y un medio óptimo en

que las tierras y el clima favorecieran a los hombres. En América, los pueblos que reunieron

estas características erigieron civilizaciones y conformaron una unidad geográfica y

cultural conocida como América nuclear, zona que a su vez se divide en tres regiones:

1.- La zona circuncaribe, que comprendía las culturas de las Antillas –litoral continental

que bordea al mar Caribe-, parte de lo que hoy es Nicaragua y las costas colombianas.

2.- La zona andina, conformada por las culturas de los actuales Perú, Ecuador, Bolivia,

Colombia y Venezuela.

3.- Mesoamérica.

Mesoamérica, Áridoamérica y Oasisamérica, son conceptos utilizados por los

investigadores para definir regiones de América cuyos pueblos comparten características

geográficas y culturales; sus límites son flexibles, dependiendo de la época o el periodo

histórico; además de que diluyen, pues unas áreas influyen sobre las otras. Al norte (Árido

América) y sur de la América nuclear hubo culturas marginales, que aunque

concentraban diversos pueblos, no tuvieron un desarrollo tan importante.

Árido América también es identificada por otros autores como la gran Chichimeca y el

Norte de México en donde la producción cultural de los pueblos que la habitaron fue

escasa en comparación con Mesoamérica. Los pobladores de Árido América ocuparon

un territorio menos variado y exuberante.

La falta de lluvia y de grandes corrientes fluviales no propiciaba la agricultura, salvo la

de temporal o de subsistencia. Dedicaban una parte de su tiempo a estas formas de

agricultura menor, pero su mayor actividad era la cacería y la recolección de plantas y de

frutos silvestres. No desarrollaron grandes centros de población, como en el caso de

Mesoamérica, ya que conseguían su sustento tras largas travesías, al hacer pocos

intercambios con otras tribus, se veían obligados a mudarse constantemente en busca de

mejores alimentos y vivienda.

Oasisamérica es un término derivado de la conjunción de oasis y América. Se trata de

un territorio agreste, marcado por la presencia de montañas rocosas y la sierra madre

Occidental. Al oriente y al poniente de estas enormes cordilleras se extienden las grandes

planicies áridas de los desiertos de Sonora, Chihuahua y Arizona. Oasisamérica cubría una

parte la superficie de los actuales estados mexicanos de Chihuahua y Sonora, así como de

Arizona, UTAH, Nuevo México, Colorado, Nevada y California en los Estados Unidos. Esta

región es rica en yacimientos de turquesa, uno de los materiales suntuarios más apreciados

por las altas culturas de Mesoamérica. Esto permitió el establecimiento de relaciones de

intercambio entre estas dos grandes áreas culturales.

Las culturas que propiamente definen a Oasisamérica, la Anasazi, la Mogollon, la

Hohokam y la Paquime, iniciaron su desarrollo a finales del arcaico, hace unos dos mil

años, a partir de las culturas del desierto.

Los Oasisaméricanos fueron agricultores, aunque las condiciones climatológicas no les

permitían una agricultura muy eficiente y por ello tenían que recurrir a la caza y a la

recolección para complementar su subsistencia.

Mesoamérica limitaba al norte con los estados

actuales de San Luis Potosí, Zacatecas, Durango,

Coahuila, Nuevo León y Sonora, además de que

penetraba al sur de Texas, Arizona y Colorado. Paul

Kirchhoff fue el primero en utilizar el concepto de

Mesoamérica en 1943, para designar un vasto espacio

geográfico-cultural. En este territorio de desarrollo un

modelo de civilización que integro una serie de

elementos comunes entre las diversas regiones

culturales de México: Occidente, Norte, Golfo,

Altiplano Central, Oaxaca y el Mayan, esta última región abarco hasta la actual

Centroamérica. Alrededor del 2,500 a. C., el proceso de sedentarización se acelera en el

área mesoamericana, inician intercambios comerciales y la organización social transita de

un sistema igualitario a uno de estratificación, según aptitudes.

En esta área se desenvolvieron culturas con una estructura económica, política y social

organizada; En estas regiones aparecieron culturas que compartían elementos materiales

y espirituales. Ejemplo son la práctica de la agricultura como base de la subsistencia; el

uso de la coat, el maíz como principal cultivo, complementado con frijol, chile y calabaza.

La construcción de pirámides escalonadas, la talla de piedra para escritura o

simbología; los inicios de la escritura; dos calendarios para medir tiempo: Uno ritual o

religioso de 260 días y otro civil o solar de 365. Celebraciones religiosas con sacrificios

humanos.

Los estudiosos del México prehispánico han clasificado a las culturas mesoamericanas,

conforme a su antigüedad en tres periodos u horizontes culturales: El Preclásico, El Clásico

y El Posclásico.

Horizonte Preclásico:

Las grandes civilizaciones

mesoamericanas tuvieron su

auge en el horizonte Preclásico

que abarca aproximadamente

desde el 1500 a.C. cuando

comenzaron a desarrollarse las

primeras aldeas agrícolas,

hasta el año 200 d.C., Durante

este periodo la vida en

Mesoamérica se hace

dependiente al cultivo de

plantas domesticadas cada

vez en mayor numero, la

recolección y la caza son

complemento importante; El cambio en el género de vida permite considerables

aumentos en la población, acompañados de cambios en la organización social que se ve

reflejados en los restos arqueológicos. En este periodo fue un fenómeno común en toda el

área mesoamericana la unión de grupos de aldeas bajo el control de una de ellas

convertida en centro ceremonial. La organización política, los conceptos religiosos y las

relaciones de unas regiones con otras se modifican con relación al pasado. El rasgo más

característico este periodo es la formación de unidades político-territoriales más amplias, la

aldea donde reside este hombre poderoso crece más que otras y se convierte en centro

ceremonial o capital. Periodo en el cual se consolido una de las grandes civilizaciones de

Mesoamérica: La Olmeca.

Horizonte Clásico:

Esta gran época va desde el principio de nuestra era hasta el año 900 d.C. y marca el

florecimiento máximo de

Mesoamérica. Se trata de una

etapa de expansión y

florecimiento de varias culturas,

bien diferenciadas entre sí, que

intercambiaron ideas,

comerciaron y fueron foco de

reunión de gente con distinto

origen. En el clásico algunos

lugares tomaron características

urbanas y surgió una clara

estratificación social entre la

minoría en el poder y el resto de

la población; la ciudad se convirtió en la gran concentradora y distribuidora de la riqueza,

mientras que el campo proveía al sustento alimenticio. Las grandes capitales se vincularon

entre sí a través de una red de circulación comercial que fue dirigida por los

teotihuacanos, el comercio a larga distancia fue el factor más importante que logro

brindar unidad a Mesoamérica durante el clásico. Todas las ciudades mesoamericanas del

Clásico se construyeron siguiendo un modelo cósmico, en estrecha relación con los

movimientos de los astros en el horizonte; durante el Clásico es importante el desarrollo de

la religión, que mantuvo algunas de sus características hasta la conquista. Las divinidades

que alcanzaron mayor importancia son las relacionadas con la lluvia, el fuego, la tierra y el

tiempo. En este periodo la casta sacerdotal tenían el control del conocimiento

astronómico, de la voluntad de los dioses, las matemáticas, la historia y el arte. El pueblo

más poderoso del clásico fue Teotihuacán, siguiéndole en importancia el Maya. El mayor

cambio que marco el periodo clásico fue la importancia que adquirieron las ciudades

frente al campo.

Horizonte Posclásico:

El periodo posclásico comprende desde el

año 900 d.C. hasta la caída de Tenochtitlán en

manos de los españoles en 1521 d.C. este

periodo se caracteriza por la invasión de grupos

semi nómadas que provenían del norte, de la

vasta extensión de Árido América, tal vez

atraídos por la riqueza de las ciudades

mesoamericanas.

La desaparición de las culturas del horizonte clásico no significo el fin de las

civilizaciones mesoamericanas, si no un cambio en el proceso de su evolución hacia una

nueva etapa, conocida como Posclásico. Una de las principales características de este

periodo fue la incursión de grupos culturalmente menos desarrollados en los lugares desde

los que se había ejercido el pode hegemónico. El reacomodo de los pueblos, las

constantes migraciones y el cambio de dominio en las distintas regiones fueron factores

que, con el tiempo, poco a poco se conjuntaron para dar nacimiento y consolidar los

nuevos señoríos, que en algunos casos constituyeron auténticos imperios.

Una característica distintiva del horizonte Posclásico fue la introducción de la

metalurgia, que estuvo limitada al trabajo en oro, plata y, a veces, cobre. Con estos

materiales se elaboraron objetos suntuarios dedicados al culto religioso o al adorno de los

nobles. El comercio era una actividad fundamental que, además de permitir el

intercambio de productos y materias primas, facilitaba el contacto cultural. En algunos

aspectos la organización política, social y económica adopto formas más complejas que

en las etapas anteriores, mientras continuaba la creación de sobresalientes centros

urbanos. En esa época florecieron grupos como los

Toltecas y los Mexicas.

Los Olmecas

Entre los años 800 y 200 a.C. surgió la cultura Olmeca o

cultura madre mesoamericana en la costa del golfo de

México, que fue la más importante de la época

influenciando a otros grupos ya asentados en

Mesoamérica. Los principales centros olmecas en La venta, Tres Zapotes, El Trapiche, San

Lorenzo y los Tuxtlas, dan testimonio de la grandeza que alcanzo esta civilización.

Esta civilización fue la primera en desarrollar un sistema de escritura jeroglífica para su

lenguaje. Los olmecas son también los iniciadores del juego de pelota, actividad popular

también entre otras culturas de la región con fines recreativos y ceremoniales. La

posibilidad de considerar al mundo olmeca como el inicio de la civilización se deriva

principalmente de su extraordinaria escultura. Cabezas colosales, altares, estelas y otras

numerosas piezas que no solo expresan una gran calidad estética, sino también un

adelanto técnico sorprendente; no se puede negar que al contemplar estas figuras y

cabezas se tiene la impresión de encontrarse frente a una raza no representada en

ninguna otra parte de Mesoamérica.

En la religión el culto principal era el del jaguar;

hasta los altares mismos son jaguares. En la

escultura en piedra lo más frecuente es el jaguar

humanizado, un hombre-jaguar o niño-jaguar; se

adoraban dioses antropomorfos.

La sociedad de los Olmecas es una sociedad

patriarcal, es decir, el hombre es quien se

preocupa de todos los problemas que pudieran estar afectando a la civilización, y el

hombre es quien controla y maneja a la familia.

Su organización política era teocrática, es decir, todo

giraba en torno a algún Dios.

Su comercio se basaba en el intercambio de mercancías

con los diferentes grupos mesoamericanos. Cultivaban el

maíz, el frijol, la calabaza, también fueron cazadores y que se

dedicaban a la pesca como también a la captura de

mariscos.

Los Zapotecas

Desde épocas muy remotas, hacia el año 800 a.C., durante el horizonte preclásico, los

zapotecos se establecieron en

los valles centrales del actual

estado de Oaxaca. Así, mientras

Teotihuacán florecía en el

centro de México y las ciudades

Mayas en el sureste, Monte

Albán, centro ceremonial

construido en lo alto de un

cerro, era la ciudad más

importante de la región Oaxaqueña.

Los Zapotecas desarrollaron una agricultura muy variada que a principios del periodo

clásico daba sustento a numerosas aldeas. Para tener buenas cosechas rendían culto al

sol, la lluvia, la tierra y el maíz.

Los Zapotecos alcanzaron un elevado nivel cultural y

fueron, junto con los Mayas, el único pueblo de la época

que desarrollo un sistema completo de escritura. Por medio

de glifos y otros símbolos grabados en piedra o pintados en

los edificios y tumbas, combinan la representación de ideas

y sonidos. Viven actualmente en el estado de Oaxaca, aun

cuando hay pequeños grupos en Veracruz, Guerrero y

Chiapas.

En cuanto al aspecto religioso decir que el pueblo Zapoteca como la mayor parte de

las civilizaciones antiguas era politeísta.

La sociedad zapoteca estaba dividida en estamentos: existía la clase gobernante, de

régimen teocrático, y el pueblo, conformado por comerciantes, artesanos y campesinos.

Monte Alban dominó los valles hasta finales del periodo Clásico y, al igual que otras

ciudades mesoamericanas, entre los años 700 y 800 a.C. termino su esplendor; pese a ello,

la cultura Zapoteca continuo en los valles de Oaxaca.

Los Teotihuacanos

En el noreste del valle de México,

algunos grupos se instalaron en el valle

de Teotihuacán para formar algunas

aldeas agrícolas, aprovechando los

manantiales y las tierras fértiles del

lugar, la cultura Teotihuacana es una

civilización precolombina de

Mesoamérica que se desarrollo entre

los siglos I a.C. hasta el siglo VIII d.C.

aproximadamente. El termino Teotihuacán significa “lugar donde los dioses han nacido”

en idioma náhuatl, esto refleja la creencia Azteca de que los dioses crearon todo universo

en este sitio.

La ciudad de Teotihuacán fue uno de los centros religiosos más importantes de

Mesoamérica, El área de las ruinas abarca 20 km y en ella se han encontrado templos,

palacios y grandes plazas.

Una avenida central de 40 m de ancho y

2.5 km de largo recorre la ciudad en sentido

norte-sur. Esta avenida se llama Calzada de

los muertos porque se pensaba, de forma

errónea, que estaba rodeada por tumbas. En

el extremo norte de la calzada de los muertos

esta la pirámide de la luna; al fondo del patio

central de la ciudadela se encuentra el

templo de Quetzalcóatl, es una pirámide

escalonada, con relieves que representan

serpientes y al Dios de la lluvia Tláloc. El edificio más grande de Teotihuacán es, sin lugar a

dudas, la pirámide del sol. Mide 225 metros por cada lado y tiene una altura de 65 metros,

equivalente a un edificio de más de 25 pisos; es una de las obras de arquitectura

prehispánicas más grande de toda Mesoamérica. La fuerza de la organización

Teotihuacana era la religión. Alrededor del centro ceremonial vivía la gente, la gente del

pueblo se dedicaba, fundamentalmente a la agricultura; cultivaba maíz, frijol, chile y

calabaza. Los Teotihuacanos practicaron los sacrificios humanos y animales, según los

hallazgos arqueológicos encontrados en las pirámides de Teotihuacán.

La religión era similar a los de otras culturas precolombinas, fue politeísta, lo que

significaba la existencia de varios dioses. La política al igual que la religión era regida por

los líderes religiosos, es decir, que tuvieron un gobierno teocrático. Aunque los arqueólogos

pueden documentar el abandono real de la ciudad de Teotihuacán, hay pocas

evidencias que permitan saber el motivo de su abandono en el siglo VIII d.C.

Los Mayas

La civilización Maya se estableció durante el periodo pre-clásico (2000 a.C. a 250 d.C.),

de acuerdo con la cronología de

Mesoamérica, muchas ciudades

Mayas alcanzaron su mayor

desarrollo durante el periodo

clásico (250 d.C. a 900 d.C.) y

continuaron hasta la llegada de los

españoles. Los mayas durante su

apogeo fue una de las ciudades más densamente pobladas y culturalmente dinámicas

del mundo. Al igual que los demás pueblos Mesoamericanos, el pueblo Maya era

agricultor; su principal cultivo fue el maíz, el cual era tan importante que estaba

relacionado con sus creencias religiosas, pues pensaban

que los dioses habían hecho a los hombre con masa.

La gente vivía en chozas hechas con troncos de árbol,

palma y barro.

Los artesanos y agricultores pagaban tributo a sus

gobernantes y desempeñaban tareas productivas. La

sociedad estaba dividida en grupos sociales, la pintura

mural sobre todo en Bonampak, revela sus costumbres, que

consistía en erigir estelas. La mayor parte del comercio se

realizo por medio del trueque.

La religión era panteísta, ya que adoraban a la naturaleza y los fenómenos

atmosféricos, y politeísta ya que adoraban a varios dioses. Cada ciudad-estado fue

gobernado por un jefe Maya, que conto con la asistencia de una junta que incluía a los

principales jefes y sacerdotes. Sus conocimientos astronómicos y matemáticos les

permitieron hacer cálculos sobre los ciclos de Venus, e incluso predecir los eclipses. Entre

sus aportaciones existen multitud de textos, en relieves de los templos y en escaleras

jeroglíficas.

Los Mixtecos

La cultura Mixteca fue un pueblo de

Mesoamérica que habitaron los estados de

Oaxaca, Guerrero y Puebla; la zona se

divide en dos regiones, conocidas con los

nombres de Mixteca alta y baja.

Constituyen la primera las serranías, y la

segunda las llanuras contiguas a la costa.

La civilización Mixteca floreció en el sur de

México entre los siglos (XV-II a.C.) Y llego a

su fin a inicios del siglo XVI d.C. cuando los

españoles llegaron a América. Los Mixtecos,

en sus memorias históricas, referían su linaje y descendencia por medio de pinturas y

caracteres jeroglíficos, en corteza de arboles y pieles curtidas, se asegura que en esas

escrituras consignaban las creación del mundo, el diluvio, la

genealogía y la biografía de sus mayores y patriarcas.

Los Mixtecos fueron los artesanos más famosos del México

pre-colombino, sus trabajos en piedra y en diferentes metales

nunca fueron superados en la región; esta maestría creativa se

encuentra plasmada en obras de todo tipo y realizadas con

diferentes materiales: figuras y herramientas de obsidiana y

cristal de roca, cerámica policroma, decorada con un sinfín

de motivos geométricos, simbólicos y religiosos; grabados en

hueso y madera con representaciones de escenas semejantes

a las de los códices, adornos en jade, concha y turquesa.

Los Mixtecos establecieron su propio centro religioso; la tumba mixteca más rica, por sus

obras de arte lapidario y por los objetos de oro, concha, coral, etc., es una antigua tumba

zapoteca conocida como tumba 7 de Monte Albán, donde se enterró a un señor o

personaje mixteca, que probablemente habitaba en la ciudad, misma que en Posclásico

siguió teniendo su carácter sagrado aun para los

propios Mixtecas.

Mitla, que había sido un centro ceremonial

Zapoteco, se convirtió en la ciudad mixteca más

importante. Los Mixtecos se organizaron

políticamente en reinos independientes

gobernados por una elite hereditaria. El rey

Mixteca era el gobernador supremo y jefe del

ejército Mixteca. Esta sociedad era estratificada y jerarquizada, en la cima de la pirámide

social se encontraba el gobernador, luego seguían los comerciantes, artesanos,

campesinos siervos y esclavos.

Los Totonacos

La cultura Totonaca inicia en el año 400

d.C. y termina en el año 1519 d.C. en la

actualidad sus descendientes residen en los

estado mexicanos de Veracruz, Puebla e

Hidalgo. Su época de apogeo tuvo lugar

durante el periodo clásico tardío, etapa en

la cual se construyó el centro ceremonial

del

Tajín

, el

cual significa “trueno o rayo”. El Tajín tenía una

extensión de 1.221 hectáreas y estaba emplazada

en una zona lluviosa y selvática.

La cultura Totonaca recibió gran influencia de los

Teotihuacanos, sobre todo en lo que a religión se refiere. Otro de los centros arqueológicos

importantes de la región fue Zempoala que significa en Náhuatl “veinte, o lugar de

veinte”, la teoría que más adeptos tiene para explicar el significado de este nombre es

que en el lugar se desarrollaban actividades comerciales cada veinte días.

La cultura Totonaca sobresale por su cerámica

variada, escultura en piedra, arquitectura colosal y

por su avanzada percepción urbanística; dentro del

apartado cultura, los Totonacas se destacaron

especialmente en la escultura. Esta puede

apreciarse en los frisos de la pirámide, en columnas

de templo y en los relieves que decoran el lugar

donde se practicaba el juego de pelota. Una

artesanía muy característica de estos es la conocida

como “caritas sonrientes”, los yugos y las palmas.

La religión de este pueblo, como la del resto de Mesoamérica, estaba formada por un

gran número de deidades relacionadas con los elementos que les eran propicios en la

vida.

En la política era un gobierno teocrático, sociedades, pueblos que viven para sus

dioses. Los Totonacos tenían una sociedad dividida en clases, se encontraban los

caciques, los nobles, señores y sacerdotes.

Cultivaban el maíz, la calabaza, el chile, jitomate, etc. Con la ayuda de implementos y

piedra. Durante la época de la conquista española los Totonacos se aliaron a las fuerzas

de Hernán Cortes para luchar contra los mexicas y así liberarse de su yugo.

Los Toltecas

Los Toltecas (el nombre viene del lengua náhuatl

y significa “maestros constructores”) fueron un

pueblo que vivió entre 900 d.C. y 1200 d.C.,

descendientes de los Teotihuacanos se asentaron en

el actual estado de Hidalgo donde establecieron

una gran ciudad llamada Tullan, hoy llamada Tula.

Ellos influyeron en el arte y la arquitectura en toda Mesoamérica, tuvieron un enlace

especial con la cultura Azteca que son considerados sucesores de los toltecas.

Construyeron vastos monumentos; levantaron enormes túmulos para guardar los restos

de sus héroes e imponentes pirámides para sustentar los templos de sus dioses. Amantes de

lo grandioso, esculpieron para algunos de sus templos estatuas gigantescas.

Su religión fue panteísta ya que adoraban a las fuerzas de la naturaleza a saber, cielo,

agua y la tierra; Tenían un sistema de creencias dualista.

En Tula la función política estaba ligada a la

religión y el centro urbano era sede del gobierno

y de la religión; rendían un exagerado culto a

sus dioses. Eran no solo inteligentes, sino también

se sujetaban a principios morales. Tenían

establecida la monogamia; castigaban

duramente el adulterio; no eran nada flexibles

para los demás delitos.

Los Toltecas extendieron su influencia mediante la guerra y el comercio, tomaron de

otras culturas formas distintas de trabajar la tierra y de construir casas, obtuvieron riquezas y

dominaron territorios. Al igual que en Teotihuacán se trabajaba la obsidiana y la cerámica.

Hacia el año 1200 d.C. su fuerza fue destruida por nuevos grupos de invasores.

Los Huastecos

Los Huastecos como cultura

claramente definida, comenzaron a

tener importancia después de los años

750 a 800 d.C. y adquirieron especial

relevancia en el periodo posclásico

Mesoamericano. En términos

geográficos actuales, los antiguos

Huastecos ocuparon el norte de

Veracruz, el oriente de Hidalgo, noreste

de Puebla, sureste de San Luis Potosí, y una pequeña porción de Tamaulipas.

Se sabe que la lengua Huasteca pertenece al tronco Maya, pero quedo separado de

él en época remota.

La religión Huasteca fue politeísta, con culto especial a las

fuerzas de la naturaleza, pero en el Posclásico recibió fuertes

influencias Toltecas y Mexicas. Por lo general, los dioses

Huastecos llevaban un gorro cónico, y así la adoración de

Quetzalcóatl como dios del viento es precisamente Huasteca;

otra deidad Huasteca importante fue Tlazolteotl (Ixcuina),

diosa de la siembra del algodón, típico producto Huasteco,

que fue adaptado al náhuatl por los Toltecas con el nombre

de Cuiname.

Entre las manifestaciones artísticas destaca, por lo demás,

la cerámica de color crema con decoración en guinda y negro; a veces representa

figuras antropomorfas, las figuritas de arcilla; tal vez el trabajo artesanal en que mas

destacaron los Huastecos fue el de la concha, ya que transformaron y crearon

magistralmente todo tipo de adornos y objetos suntuarios con este material. La alfarería

tiene la característica de ser muy creativa, tanto ollas como vasijas tienden a adoptar

formas humanas o de animales.

La agricultura, principalmente el cultivo del maíz, fue la base de la economía

fundamental de los Huastecos. El sistema de gobierno respondía al esquema del

cacicazgo, y los distintos grupos integrantes vivían relativamente aislados en las sierras en

que se habían asentado. Fueron un pueblo belicoso, como demuestran la tenaz

resistencia que opusieron a Hernán Cortes en las proximidades del rio Panuco. Coincidían

con otros pueblos amerindios (en particular, los indios de las praderas de América del

norte) en la costumbre de guardar el cuero cabelludo de sus enemigos como trofeo de

guerra.

Los Purépechas

Los Tarascos o Purépechas deriva de una mezcla de grupos chichimecas, nahuas y pre

tarascos que habitaron las riberas e islas del lago de Patzcuaro. Situada cronológicamente

en el horizonte Posclásico (900 d.C.).

Los Purépechas establecieron su señorío en

Tzintzuntzan, Ihuatzio y Patzcuaro. En cuanto a su

cultura material este pueblo destaco por el empleo

de instrumentos agrícolas de cobre.

Su religión estaba dividida en tres grandes dioses:

dioses mayores, dioses mediadores y los dioses

menores, este pueblo concebía que su origen era

divino, los Purépechas introdujeron el culto solar, y

ellos, junto con los Toltecas-Chichimecas, lo extendieron al resto de occidente, centrando

su adoración en el sol, el universo estaba dividido en tres planos: el cielo, la tierra y el

mundo subterráneo.

Para los Purépechas, el Poniente tenia gran importancia por ser el origen del hombre.

La sociedad Purépecha era fuertemente centralizada y jerarquizada: en la cúspide se

encontraba el máximo gobernante. Seguía el sacerdote mayor a cargo del culto y juez

principal en asuntos religiosos. Más abajo existía una nobleza menor que comprendía a los

acompañantes y sirvientes del máximo gobernante, después venia la gente común y los

esclavos.

Tuvieron una economía mixta

basada en la agricultura, caza, pesca,

y recolección. Los tributos y el comercio

suplieron la deficiencia de materias

primas. Cultivaron el maíz, frijol, chile,

tabaco, algodón, calabaza y otras

especies. También fueron buenos

pescadores, empleaban canoas, redes,

anzuelos de cobre, por medio de los

cuales obtenían charales, truchas y pescado blanco.

El arte Purépecha, visto como conjunto, es alegre y lleno de exuberante alegría de vivir.

Aprendieron a configurar el cuerpo en todas las dimensiones, se esfuerzan en representar

al hombre y el animal en toda su movilidad, por captar las torsiones, vueltas,

intersecciones, por crear dinamismo. Para el arte Purépecha la vida es interesante, no

enigmática.

Los aztecas

La cultura Azteca (llamados

también los Mexicas), floreció en los

siglos XIV y XVI d.C., en el territorio

correspondiente del actual país de

México. Los aztecas se desarrollaron en

la región cultural de Mesoamérica

desde los años 1325 d.C. Hasta el año

1521 d.C., fecha de la conquista de

México por parte del conquistador

español Hernán Cortes, quienes derrotaron a los Aztecas y destruyeron su civilización.

Edificaron la ciudad de Tenochtitlán la cual recibió este nombre por ser Tenoch el caudillo

de los fundadores. Tenochtitlán alcanzo día a día una vida más floreciente.

Se organizaron en diferentes clases sociales, tales

como nobles, sacerdotes, guerreros, comerciantes,

agricultores y esclavos.

La religión que demandaba sacrificios humanos

en gran escala, particularmente al dios de la guerra

Huitzilopochtli; para los Aztecas, los dioses eran los

compañeros permanentes del hombre. Los

sacerdotes pertenecían a las clases superiores,

estudiaban en sus propias escuelas, llamadas

Calmecac. Allí aprendían escritura y astrología,

practicaban la penitencia e interpretaban cantos

rituales. Los templos estaban bien dotados y tenían bajo su jurisdicción asilos y hospitales.

De manera general, la creencia más difundida es la de la pareja “sol-tierra”, en la que el

sol dio calor a la tierra y la fecundo. La tecnología avanzada, como la utilización de

chinampas (islas artificiales construidas en los lagos para la agricultura) y la vasta red de

comercio y sistema de administración tributaria. El

cero como concepto matemático apareció mil

años antes en América central que en Europa

Occidental, y también antes que en Egipto o en la

India.

El desarrollo de técnicas agrícolas les permitió en

un primer momento obtener productos básicos, pero

los tributos provenientes de pueblos sometidos eran

los que sustentaban a la clase dirigente, sacerdotal

y militar y permitir el desarrollo urbano de la

metrópoli; los territorios sometidos enviaban a Tenochtitlán maíz, frijol, chile, tabaco, cacao

y otros alimentos. También mantas, pieles, plumas, trajes de guerreros, armas y joyas de

oro, jade, papel y turquesa.