"E I 1.0 de jul io de1983 actuam o s

por primera vez con elnombre co n que ahora nosco noce n. Se presentarontres co njunto s -inclu idosnosotros- en un fest ivalen el co leg io Miguel LeónPrado. Salimos ter ceros. eincluso no s querían cobrarla en trada pa ra pod er ver elresto del espectáculo . Entod o caso. cuando llegam o s a e nsaya r . n o screíamos la mu ert e, porqu e éra mos de verdad , COIca nciones desconocida 'pero propias. El resto s ókhacia versiones de tipofamosos. Recuerdo q •actuamos abriendoespectáculo."

En esa noche de invi erno . Los Prisioneros dabarel primer paso de una aventura que co nt inúa lati endo.En el repert ori o qu e in­terp reta ron hab ia t res te­mas que luego serian hits:" ¿Quién ma tó a Mari lyn?" ." Pa ra m ar" y " La t i no­américa es un pueblo alsur de Estados Unidos" .Nadie alcanzó a atisbar laimportancia que esas trescan ciones tendrian en elfuturo de la música popu ­lar en nues tro país.

Cuatro años antes. tre sado lescen tes muy delqa­dos y más bien retraidosentraban a c ursar su pri ­mer año de Enseñanza Me·d ia en e l Liceo N. o 6.Andrés Bello . de San Mi·guel . la comuna máspoblada de l pa ís.

" En ese tiempo éramosbien creativos . y no lo di goen tono de broma -señalaJorge González- . En tran­do al liceo. ya hac íamoscanciones e historietas. enlas que escribíamos cosasde la edad. En ese sentido,nunca fuimos unos ti posque nos gus tara pres umirde maduros. tr atando deser qui en era el más con ­qui st ador , quie n era el que

lOS PR\S\ONEROS

El so n ido lo han pcrfec ciuuudo. 7\! t"jort." ('q uipo, ~

má, t.· \.J>crit· nc ia. Si n \ irruovivmus . han 11("g: ;.u lo alodo!'l lado... co n 'u I11t 'll !'iaj t" .

VERDADERA

Hace ocho años, tres adolescentes dela comuna de San Miguelcomenzaban a esbozar un fenómenoen el que participa toda la juventudchilena. Sus nombres: Miguel Tapia,Claudio Narea y Jorge González.

HISTORIA

LA

2

1982. Las Vi nc h ucas era n el ú ni co g r upo que hahía e n el Liceo N ." 6 .Ensayaba n e n el g inl nasio para sus act uaciones. En las f iestas no los dej aba n toca r sus

ca nciones y tenían q u e h acer las de T' he Po lice .

fumaba más o al que legustara más el alcohol. Derepente . el resto de loscompañeros no nos dabamucha bo la , pero eso nonos importaba."

"LOSPAPAFUENTES"

Va en ese momento co­menzaban a defin ir lo quese r i a n sus principiosint ransables. aunque aún

o existia ningún trabaj ode tipo musi cal. Tampocoeran un trio inseparab le .ya que Jor ge era bastanteamigo de ambos, pero porseparado. Al poco tiempo.la historia comenzó a ca­mina r más rápido . cuandotodos se sintieron parte deuna especie de secta vi­venc ial llamada " Los Pa­patuen tes " , la que estabaco nst itu ida alrededor de lafigura de un compañeroevangé lice.

" El rep rese ntaba quizásel modelo op uesto a lo que

habitua lmente el igen loscabros chicos co mo lide­res , quienes po r lo generaloptan por el tipo más pin ­toso, el que tiene más pla­ta o el que es más prepo­tente . Creo que de esa for­ma reflejábamos la inten­ción de ser siempre hones­tos y no cae r en los vicios."

Roque, Mic he l, Jor ge,Patit o. Claudia y Miguelformaban esta parti cu larcof rad ia, que se destaca ­ba por una sue rte de inde­seada inquiet ud intelec­tua l, un rótulo al que LosPris ioneros siempre le hanmost rado muc ha repul­sión .

" En verdad éramos ti­pos bastante mo lestos pa­ra todos . en especial paralos profesores, pues noscarac terizábamos po r te­ner siempre una opi niónfirme sobre muchos as un­tos. En particular Jorge,quien siempre fue bastan-

te agresi vo para most rarsus arg ume ntos y teni en ­do ade más la ca racteristi ­ca de ser un tipo co n fac ili ­dad para hab lar . Algu nosprotes, incluso, le reco ­mendaban que estudiaraDere cho", recuerda Mi ­guel.

Va en 1980, Jor ge y Mi­guel - " Va era Lennon y élM c C art ney", señala ,sonriendo, el voca li sta delgrupo- comenzaron a tra ­bajar en sus pr imeras can ­ciones, bajo el nombre deLas Vinchucas, especia li ­zándose en as untos rela­c ionados co n el amor juve­nil y ot ras temáticas li cea­nas , algo livianas pa ra elrumbo que tomar ian conposterioridad .

De manera simu ltánea ,Jorge también participabaen un proyecto conocidocomo Los Pseudop ill os.confo rmado por Cla ud ia ylos her ma nos Rodri go y Al ·

:-\

Cómo 10'So da Ste­reo. 1I ( 'I Ja ­

ron el Es­tad io Chi­le y qued óKen teafuera . Elconciertomás g-ran­de fue enConcep­ción. enIe brero.Ci ncuen­la m ilpersonasen laFE R BIO.

4

varo Belt rán. unos vecinosque vivían Justo frente a sucasa .

" Luego de un tiempo.los chiquillos me invitarona entrar a Las Vinchucas- recuerda Cla udio- . ypoco después ing resa Al­va ro Bel t rán . quie n secomp ró s u primer agui ta rra eléc t rica . Fue unimpo r t a nte apo r te anuestro desarr oll o co mogrupo. en tod os los sent i­dos. Despu és de eso seprodujo el desbande. yaqu e en 1983 la ma yoriaentró a la universidad y to­do lo que era música co­menzó a morirse."

La experiencia en el Li­ceo N.o 6. sin embargo. ha­bia producido poderososefectos en las posicionesde todos los " Papafuen­tes". qu ie nes. indepen­diente de los inte reses mu­sica les de t res de susmiembros . co n ti nua ba nsiendo un conglomeradobast ant e co mpac to .

" No creía mos en las mo­tos. la ropa taqu illera y eleng rupirse a las niñas. co­mo soña ban la mayoría denu e str o s c omp añ er o s.qui enes no se daban cuen­ta de que esas cos as noformaban parte de su real i­dad . También es taba el

hecho de que aceptába­mos ser niños cuando losdemás se creian mayoresa los dieciséis años. cues­t ión que nos acarreó la in­co mp rensión de muc hosco mpañeros de cu rso y deliceo."

LA UNIVERSIDAD

De los seis. c inco resut ­tan estar ent re los prime ­ros puntajes de su cursoen la PAA . Casi sin propo­nérsel o . volvían a de­mo strar que de alguna ma­nera eran esp ecia les enmedio de un ambiente quepar a el los resu lt aba basotant e depresivo. aunque

nunca reconocen habercaido en "la de los gravespensadores " .

" Oye. cachetonéate conel puntaje - dice Cla ud ia.señalando a Jo rge, a mod ode broma- o Es te tipo.aqul como lo ves, tan sen­cillo y de rostro tan sería.fue el alumno Que al finalobtuvo los mejores resul­tados en la Prueba de Apti­tud. Incluso tenia suficien­te para entrar en cualquiercarrera. El segundo fueMichel . Quien se metió a ln ­geniería ; tercero fu i yo-entré a Ingeniería en laUSACH-. y cuarto se ubi­có el Roque. Quien ahoraestá en cuarto año de Me­dicina. En Quinto se colóun tipo de apellido Carras­co . Que no era del grupo. ysexto resultó nuestro liderPapa fuentes ."

" Entré a la Facultad deArtes. en donde conocí aun montón de tipos . genteQue ahora es muy famosa .co m o Igor Rodríguez .Carlos Fonseca. RobertRodriguez . Ma u r i c i oGuerrero. Pablo Ugarte. y atodos los integrantes de laBanda 69, y muchos otrosQue ahora es tán relaciona­dos con el pop. Pero , ojo .Que yo fui el Que llegó conese tipo de m úsica , ya Quetodos eran jazzistas o roe ­keros . salvo Robert Rodri­guez -vocalista de la Ban ­da 69- . a Quien le ousta­ban Los Beatles y la rn úsi­ca popular de las radios " .aclara González.

Ahí también conoció aCarlos Fonseca, con Quienentabló inmedíata arnis­tad, luego de Que ambosdescubrieran Que cono­cían y tenían varios gustosen común. aunque siemprecon una acentuaciónmucho más pop en el casode Gon zál ez. Entonces co­me nzó a tej er se la ca rrerade éxi to que ca da dia pa re­ce acrecentarse. Sus g ran ­des amigos, sin embargo.

Cario>Fo nsecaVe lasco.

lA VOZ DEL MANAGER"Tiene25 años. usa el pelo como

los Soda Stereo y a veces nonos comunicamos como es debido. Sinél, de todas maneras, no estaríamosdonde estamos en la actualidad. yQuizás todos seríamos tipos absoluta­mente anónimos. Es la persona que masha hecho por la música chilena en los úl­timos años."

Las palabras de Jorge Gonzálezdescriben desde un punto de vista muypersonal a Carlos Alberto Fonseca Ve­lasco. De aspecto bastante diferente asus representados, fue él quien les abriótodas las posibilidades de triunfar comolos " padres del pop" , una paternidadque en gran medida le corresponde.

Nacido en Lima y con gran parte de suvida transcurrida en Buenos Aires. tieneestudios de música e ingeniería comer­cial . dos carreras que finalmente noco mpletó . y desde siempre su aflción hasido lo primero .

" Siempre me han gustado una rnf iru­dad de grupos. pero en general creo queen lo musical prefiero la creatividad a unbuen sonido o una puesta en escenaespectacular . como parece ser la normaen mucha gente -Indica Carlos Fonse­ca- oPienso que eso me movió en el ca­so de Los Prisioneros. pues me di cuen­ta de que lo de ellos era muy diferente.estaba con los tiempos y mostraba unapropuesta absolu tamente personal deJorge. a quien considero. lejos. el tipomás inteligente del pop chileno. En elfondo. estimo que Los Pri s ioneros foroman un sólido bloque, Que drtlcilrneruepueda romper algun factor externo. puescomparten valores . lugares y una formatotal de enfocar sus vidas. "

vivran paralelamente suspropias experiencias.

" Yo quedé en el sequn­do semestre de Ingenieriaen la USACH, y como teniaque esperar para ce rnen­zar a estudiar, me me tí atrabajar a Ch ile Fil ms -re·cuerda Claud io- . Ah í ga·naba algo de pl ata laván­do les lo s au tos a los art is ­tas, aunque no me hiceami go de ninguno, salvode un co mpañero de traba­jo que se l la ma Vicente. Elfue testi go de mi matr im o­ni o y diría que es una mu ybuena pe rson a y si em prese ha portado bien conmi­go."

" Yo no qu edé en la uni­versidad . au nque no mefue ma l en la pr ueba -se­ñala Migu el- . La verdades q ue la cuestión econó­mica estaba pésima en mifamilia y ent ré a trabajarde júnior a una linea aérea.en donde ganaba seis milpesos mensuales. Po r lo

general , me quedaba conlo justo para movilizarme yel resto era para la casa.Después de esta laborentré a trabajar a Fusión."

Lo cierto es que Jorge yClaudio duraron bastantepoco en la universidad,ambos decepcionados porsus carreras . Para el pri ­mero fue d ifíc il tener qu esoportar una formac ióndemasiado rig ida en lo mu ­sical , aunque el fa ctor quepesó más en def in it ivafueron su s concepto s dife­rente s acerc a de un tvers l­da d y el " est ilo" que rodea­ba a los estudiante s de laFacu ltad de Artes de laCh ile.

" Duré bi en poco y c reoqu e lo mejor fue conocer aRober t y a Carlos. En ver­dad. falté bastante a c la­ses . porque no me dec idíaa ret ir arme y por eso no selo d ij e a mi familia . A l fi na l

me decidl y les conté todo.Después me metl a traba­jar a Fusión."

Ya en esa época, el roda­je musical se habia ini­ciado, pues Carlos Fonse­ca ingresó a la " f iebre pri­sionera " luego de que Jor ­ge le prestara un c asetegrabado artesanalmente,en el que estaban conten i­das algunas de sus can­ciones. Al comienzo, la in ­ten ción del ahora managerera sólo escribir algo acer­ca de lo que escu chara, enuna proye ct ada rev ist a" new wave" . La aud ic ió n,sin embargo, le s igni ficóembarcarse en un viaj e alqu e nadie le vio , du rantemu ch o t iempo, algún des­tino c ie rto .

" Ahí, Carlos come t ió lalocura de co nve ncer a supapá ac erca de nu es tr as

6

Con zále». Na rea "Tapia pl an ean a l¡.,'Una:,

inc ursiones a rra vés de la cord itlera ,

La era de los reci la les masivos en eh i le, v congrupos chilenos. la inauguraron indisculible~ente

los muchachos de San Miguel.

posibilidades musicales-cuenta Jorge- . Final­mente consiguió el dinerosuficiente para quecompráramos instrumen­tos -hasta entonces na­bia sobrevivido con unabateria de 'oc tava mano' ytodo lo demás prestado,tocando en un par de opor­tunidades en colegios deSan Miguel- y financiar­nos una grabación. "

Sus primeras ac -tuaciones con su flamantey hasta entonces inexper­to representante les signi­ficaron una serie de sinsa­bores. Eran rechazadospor vastos sectores delpúblico que habitualmenteasistía a los recitales, yenmás de una oportunidad ladiscusión superaba los li­mites aceptados , paraconvertirse en un gruesointercambio de epítetosentre la platea y los hetero-

do xos artistas. Malos ba­lances -a la altura del ve·rano de 1984- estuvierona punto de quebrar las ilu ­siones de todos aquellosque junto a Los Prisione­ros recorrían la costacentral en un viejo klein­bús que prestaba un amigode Carlos .

Rara vez les pagaban , ycuando alcanzaban a ga­nar algo, apenas superabalos milo dos mil pesos, ycon esas tremendas ga­nancias se sentían másque felices .

JUGUETES DEL SNOBISMO

Los buenos tiempos co ­menzaron a llegar cuandoel grupo logró una acep­table cantidad de seguido­res entre algunos san ­tiaguinos . Era un públicocompuesto por intelec­tuales, gente vinculada alas escuelas de arte y todo

aquel que se s intiera" avant garde" . Eran el ju ­guete de los s n ob s .qu ienes veian en ellosmuchisima más elabora­ción que la que Los Pri­sioneros admitían poseer.De esa época son sus pri ­meras fotografías. su as­pecto de dureza y las imá­genes de Marilyn.

" Tocábamos en las fa­cu ltades en que habla algode ambiente para es­cuchar música. Cobrabanbastante poco los organi·zadores y por lo generalera para reunir fondos pa­ra algo que al final nuncasabiamos de qué se trata­ba. La mayor parte de lasocasiones, la entrada cosotaba algo así como cuaren­ta o cincuenta pesos. Engeneral, se trata de tiposcon bastantes años, y lamayoria de las niñas queiban tenian más de veinte ,

i

8

En el esru­dio. las ideasse concretan

en son ido."El próximo

álbum va aser en onda

hreak-daurv" .bromea Gon­z ález , a pro-

pósito de laonda recno

del" Palean­do piedras".

pero ya era un avan ce . po r-que antes jamás se ve ía auna mu jer en un recita l derock ."

Precisamente con estesector de público fue conquien sostuvieron sus pri ­meros altercados . puesmientras ellos intentabanmostrar " Mari lyn" o " Lavoz de los 80" . los enarde­cidos "heavys" o " pesa'dos" pedian a gritos algúnéxito de Led Zeppelin oBlack Sabbath . La res­puesta desde el escenariono demoraba ni un sequn­do : " Muévanse. tarados . Ji­pis de pacotilla . borrachosy marihuaneros". matiza­dos con otros términos al­go más irreproductbles.

Muchos reaccionabanViolentamente . pero otrosaplaudian a rabiar. en unaespecie de espontánea de­mostración de entendi ­miento y de natural " meaculpa" . Así comenzaban aganar sus primeras ba­tallas para llegar a la ju­ventud chilena y mostrarle

su parti cu lar manera deenfrentar la vida . Los Pri­sioneros . desde un primerInstante. estaban por unaexistencia cas i monacal :no fuman . no beben. usanropa totalmente austera-sin letreros. palmeras ocolores chillones- y semanejan en t érminos derespeto a sus padres y aInstituciones tan tradi ­cronales como el matrimo­nio.

Su propuesta estaba re­jos. sin embargo . decomprometerse con algúnmovimiento -reliQioso ode otro tipo- o Mas biennacía de una serie de difu­sos estímulos culturalesque ellos mismos nopueden precisar . pero quede alguna manera enrien­den como las " del chilenomedio".

" Los chilenos no son bo­tados a divos ni tampocoson tipos que se las den dealgo -dice Jorge Gonz á­lez- . Tampoco somospersonas que andemos na-

mando la atención por laropa que usemos. Som osuna mezcla de rebeldía yde querer cons ervarmuchas cosas buenas quetiene nuestra cultura. Pen­samos que en ese sentidolos chilenos normales so­mos mucho menos deca­dentes que los europeos.por ejemplo ."

Con esta fuerte basepersonal y siempre tratan­do de ser coherentes ." aunque nunca dejamosde reconocer que tenemosalgunas contradicciones " .su nombre empieza acorrer en todas direc­ciones.

" Ahí comenzó a variarnuestro público también yaparecieron los primerosrostros de gente joven .público al que nosotros pri ­vilegiamos en todo lo quehacemos". recuerda Mi·guel.--------

EL DEBUT DISCOGRAFICO

Fusión -o mejor dicho.Carlos Fonseca-> decide

editar en forma casi suici­da el primer casete del gru ·po, "La voz de los 80", enforma totalmente indepen­diente. Con distribuciónpropia y las ventas Quelogran en la d ísquerta al·canzan la " fr io lera" deochocientas copias. Conese respaldo acuden hastael sello EMI para Que se na ­ga cargo de la fabricacióny distribución del álbum.Es entonces y no antescuando todos empiezan aver un mayor futuro en LosPrisioneros. Ya estaban en1985 -a seis años de ha ­berse conocido- y todoauguraba Que las cosasmejorarían.

En 1985 comienzan arepletar los pequeños lo ­cales en Que se presentany su disco editado, hace yaun año, comenzaba a ad ­quirir masividad gracias alapoyo de la EMI. Los rec iotales . por primera vez, otre­cen algunas garantias encuanto a sonido y signifi ·can alq ún ingreso para losescuálidos bolsillos de Fu ­sión, Que habia soportadoya varios meses de gastosimproductivos. Desde fi·nes de 1985 hasta el vera­no de 1986 comienza a des­atarse, sin embargo, elvendaval de ventas y éxi­tos discográficos , Queluego se acrecentaria conla mayor parte del casetela " La voz de los 80" .

" Ese fue un casete Quegrabamos sin tener ninqu­na experiencia , tanto no­sotros como los técnicos-señala Miguel Tapia- .Nadie entendía bien laidea de sonido Que envol­via el pop y por eso piensoQue muchas cancionesQue están ahi podrian na­ber rendido más: pero paraser un verdadero experi­mento, pensamos Que es­tuvo bien, aunque ahora loveamos todo desde otraperspectiva ."

El rest o de la historia co -

mienza a ser conocido. Laedición de " Pateando ple ­dras" está presente en lamemoria de la mayor partede los jóvenes chilenos.

" Es Quizás el trabajoQue nos ha causado mayororgullo, pues tiene un soni­do Que es competitivo, pe­ro Que al mismo tiempotiene una identidad -indioca Claudia Narea-. Nosuena a grupo extranjero.sino Que tiene un sonidoQue para mi se acerca a loQue debe ser un grupo chi­lena."

Disco de Doble Platinopor esta producción y Dís­ca de Platino por " La vozde los 80" . En total, más de75.000 copias vendidasconst ituyen el aval a esterelato Que parece sacadode la ficción criolla .

" No so t ro s fuimos losprimeros. incluso bastante

El "Cana r io" Na rea , enplen a im provisación en lafiesta del colegio,

antes Que muchos argenti·nos -recuerda Jorge- .En esa época, Charly Gar­cía todavía parecia " j ip i" yusaba el pelo largo. Sólolos Virus habian empezadoa hacer música diferente,pero en todas partes -aligual Que nosotros- eranrechazados. Ellos ernpeza­ron. eso sí, como el año1980 o por ahi, más o rne­nos, pero obviamente te­nemas nuestras diteren­cias ."

Las intenciones. a estasalturas de su carrera. sonmostrar su trabajo a todoel publico iberoamericano,meta Que han cumplido enlos ultimas meses, ya par­cialmente, gracias a suparticipación en el "Mon­tevideo Rack" y a su pr óxi­ma aparición en el festival" Chateau Rack", en laciudad de Córdoba, Arqen­tina.

9

lOS Pl\S\OMEROS

VIDEOS:

LA PANTALLAPRISIONERA

Junto al videista Daniel de la Vega, eltrio de San Miguel ha hecho dos clipspara los temas "La voz de los 80" y"Muevan las industrias".

E n mat er ia aud iovt­sual, Los Prisioneros

no se han quedado. Ya pa­ra su primera obra gra ba·ron un video-cllp co n " Lavoz de los 80" . Con el " Pa­teando piedras " hicieronotro tanto, a partir del te ­ma "Muevan las i n­dustrias" . El director deambas producciones fueDaniel de la Vega.

"El primer trabajo teniaun objetivo claro, que eramostrar a Los PrisionerosSe los presentó en la cat ley en sus actividades nab í­tuales. Aparte de eso , ' Lavoz de los 80' tiene un rit omo diferente que el " Muevan las industrias" ; po reso es que el montaje teniaque ser diferente en cad acaso. El primero tiene 10:planos y el segundo, 170."

Daniel se acercó un díaa Los Prisioneros a ofre­cer les su proyec to audiovi­sual. A ellos les pareció se­rio -habían recibido va

Las indusrr ias vacías los ay u daron a obten e r las imágenes desu seg u ndo video-cl ip. En la rel e est uvie ron en el primer

lu ga r del ra nking de fi nes del año pasado en un prog rama de música .

\0

Claudio Na­~ea y Daniel

e I.a Vega.[1 ,;,I.limo lescreo Imáge­nes para sumúsica . Unpoco por pre­sen rar los yotro porrepresentarla fuerza delos lemas.

El QUE V\MO DE EURoPA

oon\e\ ele \0 VegG~

, ,'V I fue a mi casa el verano pasado. Se~ presentó en torma sencilla Y yo lo

hallé simpátiCO y le diie Que estábamos dis-

puestoS a trabajar con él."A pesar de Quedesde Quecomenzaron a en-cantar a la intelectualidad de santiago y. porlo mismo . muchOS realizadores " un­derground" les otrecieron sus serviCioS comocineastas o videistas. lOS prisioneroS opta­ron linalmente por ponerse en manos de Da­niel de la Vega. un ¡oven de veintidÓs añoS.con estudioS de dirección de totOg

ralia•Quien

les presentó un proyecto de trabaio a largoplazO. Que ya en parte se ha cumplido con sustreS primeras prodUcciones." l a verdad es Queyo estaba en Europa y lle-gué hace poco más de oos añoS _recuerdaDaniel de la Vega- oEscuché a l OS Prisione­roS al poco tiempo de haber l legadO e inme­diatamente me interesó su mus

ica.Estoy co

n­

torme

con lo Que se ha conseguido . aunquesiempre tenemos diticultades con tos videoSen la televiSión . porque habitualmente tos edi 'tan de la manera e)(acta en Que más me mo-les

ta. pero está también el heChO de Que han

sido bien recibidos atuera yeSO nOs tiene más

QuesatistechOS."

rias prores- puestas s irnil

Ey aceptaron I a-n el cl" . .....-~:..----------------

los 80" rp de " La voz dtividad:t~~~~tn en las ac~da uno : en ca uales de ca ­do . tomando els~. cornien-cando en la etro, y to-sector t ' calle en unCentral. D~o Esta c ión-.1Uestra a e ese. modo seen una face~~a Integrantena. muy huma-

Jorge Gte se u onzález: " En

~~~~h~~~~~!;i~~.e~~~o~~teral , que int:

so menos Ii­

en buena form~la mostrarcanc ión . Las o que es lalas hicimos e grabacionesabando nad n una fábricaFranklin y e;un

de.1

barriotextil en f . a industriaTambién s:nclonamientodo. de fútbolgrabó un part i:cion. El vide¿7 una pobla­do en tres días"ue produc i-

- .¿Consideras .un video coro? que resultó

-Yo diríamente barat~U$ fue total -eras a que I~ todo gra­que trabajar e s personasy con nosotron co n Dan ielpo r un a cuestSólO hi c ierontad e interés a: tí snt

dearn is -

_ ¿Qué d' ICO.cuenlras en Ilerencia ende los 80" Ire el clip de " Lo VO·

duslrias"l el de " Muevan la~- El prime

profundo y dr o

no es tansas qu e el ..~ce menos co­dustrias" A uevan las in­merciales pmbas son co ­canción . ero hay unamás tont~~~~f frentón es

_ ¿Qué otro a 01ra .en esto de lo . s planes lienenro? Imagen Prisione-

- Daniel est éun .largOmetr/ haciendoquron secret le , con unreferirá al o , pero no sevamos a a~;upo , si no quete de la peli~ar como par­hizo un d ula. Ademásnoso tros ocu menta l so brella ma " P muy bonito SPop" n sioneros R' e. oc k-

11

12

001Nombre: Jo rge GonzárezRlosNacimiento ' 6 de diciembrede 964lugar: Santiago de ChileEstatura : 1 72 me tro

002Nombre: Claudia NareaGuajardoNacimiento: 13 de Julio de

965lugar: Santiago de ChileEstatura: 1 68 metro.

003Nombre completo: MiguelOrlando Tapia Mendoza.Nacimiento: 9 de mayo de

964lugar: Sant iago de Ch ileEstatura: 1,73 me t ro

Peso: 55 kilos .Color de ojos: verdes .Color de pelo: castañoPasatiempo ' crearhistorietaslectura novelaslatinoamericanas GarciaMarouez Manue RalasTarnbrér li bros demisten ce W LovacraflAutore ae EuropaCentra l y Oriental Ahora

Peso 5" kilos

Color de ojos ' cate c laro

Color de pelo: negro

Pasatiempo a Igua oueJorge dibu ja histor ietas

Lectura ' lati noamericanosrustona ca temporaneapouciates y de gangsters

El dogma de Cristo de

Pasatiempo : estudiar por sucuenta. GeoíoqiaPeso: 60 kilosColor de ojos: caté oscuroColor de pelo: castañooscurolectura : no mucho.alemanes ael SiglopasadoDepones ' ninguno Jamashe practicado deporte nien el coree.oPlato favorito : la carne

leo un ibro de cuentoscolombianosDepones. ahora ningunocuando ctuco atoo deIutboiPlato tavorito ' tall ari nesGustos musicales . ", e s u ~ &Iv'ary Chams Blg AUdiODynarnue KortatuSiniestro Tota l La PollaRécords GabineteCauqan Los Ingleses qUE

Erlcr FrommDepones ' sa lvo e, tutbo ininguno

Plato tavorito ' ninguno enespec ial Pescado no

Gustos musicales: GOlpesBaJOS New Oraer PIL.Kraftwerk La PollaRecords y en e fondoespañoles e Ingleses

preparada de diversasarmas

Gustos musicales: TheSm ns Aztee Carne-aSemen Up SttanqlersBauhaus v de os crvrer-oEmOCIOnes Cland sunasy Banda 69

Instrumentas: batenaelect rónica panderospercusión gene ral corosy segundas voces

funda ron el punk '1 newwave.

Instrumentos: balo '1tec ladosPelícula: La mosca '1

Laberinto

Bebidas ' cuarou .eramenos laSobrenombre de colegio :ninguno salvo 'ChocheFuturo : Derech o

Instrumentas: quuarra ytec ladosPelículas: " La ley de lacaue y 'La nararuamecánicaBebidas: me da IgualFuturo: estud iar m úsica ySI se acaba el chiste serprog ramador de radioSobrenombre de colegio:

Canario"

CornoosrctónPelículas: La naranjamecánica' ftlmes deterror '1 de crencra-trccrón

Bebidas: Coca-Cola fria conhieloFuturo: lleg ar a serco ntado r audi to r o algoaslSobrenombre en el colegio :" Barn Bam' como el de

Los Pícapteoras'

13

Muchos los acusan de serresentidos, desequilibradosy demasiado negativos ensus juicios. Sus matrimonioshan probado, en pane, elcariño que sienten por laspersonas y cosas queconstituyen su vida.

lOS Pl\S\ONtROS

ATRAPADOS

EL AMOR

POR

Cupido capturó a dos Prisioneros. Este añose casaron. y sólo Miguel Tapia es el quequeda -paradojalmeme- libre.

14

Jacqueline Fressard resultó ser el a lmagem ela para Jorge. Como roda la carrera delgr u po , la boda no pudo evitar co n ve rt irse en polémica .

N i siquiera su s cereomonias rn a t r i rno ­

niales estuvieron exentasde polémicas, especiar­mente en el caso del voca­lista Jorge González. Másallá de este hecho, que pa­rece representar la siste­mática controvers ia deLos Prisioneros -que enla ocas ión resultó ser clr­cunstancial- , ambos rn ú­sicos mostraron en esosmomentos sus facetasmás humanas, un aspectodesconocido hasta parasus fans más furibundos .

SUPERANDOLAS DISTANCIAS

Desde siempre se carac­terizó por tener un trato abosolutamente personal conla prensa. El último enfrenotamiento serio que tuvocon ella fue a ra íz de su re·ciente boda con Jacqu e­line Fressard .

" Yo quería que mi casa­miento fuera algo privado.y no sólo era la unión delcorazón de Jacquel ine y elmio , sino con los denuestros papás también .Yo sabía que para el p úbli­co i b a a ser d if ícilcomprender todo est o, pe­ro - aunque pa rece tí t u lode canc ió n barata- elamor es así. No t iene nadade malo que yo me enarno­rara de una persona conuna famil ia que vive tan le­jos de la mía" , argumentaJorge Gon zález.

" Noso t ros veniamos demedios sociales distintos,de comunas diferentes-dice Jacqueline, estu­diante de Arte , 24 años- oTeniamos hasta un acentodistinto al hablar y unaeducación que tiene pocoque ver . Pero en el fondo,los sentimien tos eran losmismos."

La ceremonia fue en laigl es ia Recoleta Domin icay entonces hubo un pro ble­ma con un reportero gráfi ·

co , que provoc ó una durareacc ión por part e de laprensa. Más tarde , Jorgese d isculpar ia por el malrat o.

" Los líos del casamien­to fueron causados ,desgrac iadamente, por va ­rios factores. De part ida ,habia muchas pubuca­c lones que hablaban queyo estaba traic ionandomis ideales. Eso no va aser nunca. Yo me siento or ogulloso, más que por losdiscos vendidos , los pre­mios ganados o el cariñode la gente, por jamás ha­ber mentido, por mostrarlesiempre nuestra verdad ala ge nte. Yo tenia razonespara que no sacaran fot os.Unos pocos per iodistasentendieron, pe ro otrosno."

Ah ora viven en un a casadel sector Parque O'H iq­gi ns que no t iene teléfono.

La polémica de su casa­miento se trasladó mástarde a la ausencia de LosPrisioneros del show delFest ival de Viña del Mar y-terminado éste- tod oslos conflic tos se d is ol ­vieron co n el fenómenosuperventas del g rupo .Con su vida estabil izada,Jorge Gon zález no t ienemás que pensar en su tutu­ro art ístico. el cual se vemuy promisorio. En cuan toa lo personal , Jorge no duoda de que su matrimonioserá un gran apoyo para él.

" Ahora tenemos suf í­ciente para vivir . Con Ja c­queline vamos a enfrentarlas buenas y las regulares,porque nun ca van a serma las si es que estamosjuntos."

Aunque él mismo se hadefini do al~una vez co moun " bocón' y " un tipo me­d io ani mal, que pierde el

15

control con mucha facili ·dad" . reconoce. por otrolado, que también es unapersona sensible. quesufre y se emociona concosas que la mayor partede la gente comparte.

NOSOLO ERA UNA FAN

El 26 de enero de 1986.Los Prisioneros estabanactuando en la discoteque" Yacht ing", de Cartagena.Term inó el recital yClaudio Narea fue a sen­tarse por ahí para desean­sar un poco. mientras suscompañeros se encarga­ban de desarmar losequipos . El fenómeno

" mania" aún no se man í­festa ba como tal y ésa erauna presentación más pa­ra el t rio de Prisioneros.

Pero para Cla udio no lofue . En ese momento .mientras se reponía de to ­car su guitarra. se le acer­có una muchacha : eraClaudia Carvajal. quien te­nia dieciséis años. Le dijo:"¿ Estás aburrido...T" , yempezaron a charlar poralgún rato. A Claudio le ha­bia llamado la atención yadurante el concierto y en­tonces. al conversar conella . se dio cuenta de queno era como las otras chi ­caso porque no le pidió unautógrafo y en cambio

quiso saber su di recciónpara escribirle.

Pronto estaban enamo­rados el uno del otro , y ya .durante este verano. deci­dieron que deseaban ca ­sarse y lo hicieron apenasunas semanas después deJorge y Jacqueline.

" Fue una ceremoniasencilla -recuerdaClaudia- . Estabannuestros papás y sólo al­gunos familiares y amigos.Claudio llegó sin corbata ,y como no le gustan paranada. tuvo que ponerseigual una para dejar con ­formes a los del RegistroCivil. Discut ió, pero al finaltuvo que conseguirla pres-

Ctaudia y Claudio se decidieron por fin en en ero deeste año. Ahora coc in an juntos sus tallar-ines y quizásya ha yan logrado evitar que se les queme la cebolla .

16

EN LOS OJOS

CONcar iño de nosot ros, de lafamilia de ella y de to dossus ami gos."

MIGUEL TAPIA

Es el menor de siete"her­manos. En una familia nu­merosa, él siempre ha sidoel " m imado" de sus her ­manos mayores, qu ieneslo cu idan con un cariñoúnico, al igua l qu e suspadres, don Ju lio Tap ia ydoña Marina Mendoza. Enplena Pob lac ión San Mi­guel , la casa dond e vive Mi­guel Tapia no tiene la másmínima dif eren c ia con elrest o de las que componenese popular co njunto habi­raci onal .

Tod os recon ocen qu edesde mu y chico, Mi gu eldemostraba tener cie rt ainquietud musica l y unapreferenci a marcada poralguno s músicos famososa esas alt uras, como Ad a­mo y Los Beatl es , aunquenunca se interesó en toca run instrumento, sa lvo labatería .

" Rec uerdo qu e una vezfuimos a la casa de un ami­go que tenía una, pero co­mo no estaba armada, Mi­guelito se quedó con lasganas de poder tocarla" ,recuerda su hermanoCarlos .

Precisamente una desus hermanas -Marina­fue quien le regaló su pri ­mera bateria , una difícilmezcla de componentescon bastante uso. peroque en todo caso sirvió pa­ra darle los primeros rudi­mentos de cómo trabajarfrente al Instrumento.

" Tenia algunos ahorrosy con eso se la compré,porq ue él estaba muy entu ­siasmado -recuerda Ma­rina-. Ahora, por supues­to qu e no me arrep iento dehaberl o hec ho , cua ndo veolo fel iz que es fo rma ndoparte de Los Prision eros."

nozco haberle hecho laguerra en lo que era el qru­po -recuerda Victor Na·rea-. No le veía ningunaperspectiva y lo único queapostaba era que se trata­ba de una pérdida de tiem­po y que la música era algomuy pasajero."

Su reciente matrimoniofue algo que también sacu­d ió en gran medida la tran­quu tdad que se había con ­segu ido con el fenómenode su grupo. Ctauo io . encierto modo, aparecía ca ­sándose de manera algoinesperada,

" Yo, en todo caso, estoyfeliz, porque Claudia esmuy bue na chica -señalaSilvia Guajardo-. Es c ie r­to que los dos so n mu y ió­venes, pero cuenta n co n el

cuales Claudio es el rna ­yor.

En este caso , la mamájugó un papel fundamen­tal , pues siempre se encar­gó de darle todo su apoyoa Claudio, a pesar de losmomentos difíciles que tu­vieron que sobrepasar enmás de una ocasión.

..Al comienzo lo tomabasólo como un pasatiempo,pero luego me di cuenta deque la cosa iba para más-cuenta la mamá deClaudio- . Me interesabaque le fuera bien en la uni ­versidad, pero prefería queél se realizara en lo que leInteresa de manera rea l.Por eso aho ra me en­cuent ro feli z cuando veo eléx ito qu e ti enen ."

" Yo, en cam bi o, reco-

CLAUDIO HAREA

Aunque ahora su spadres están en Con cep­c ión, ellos dieron, hace al ­gunas semanas, un testi ­monio acerca de lo que hasido la meteórica carrerade su hijo como integrantede Los Pri s io nero s. Elm a t r im on io compuestopor Víct or Narea - em·pleado en un a agencia deseguros- y Si lvia Guajar­do - dueña de casa ­tiene tres hijos, de los

respetuosos de su fam iliay bastante cari ñosos. Ade­más tuvieron la suerte detener un grupo de am igosmuy buenos en el liceo, loque les sirvió mucho en suformación persona l."

ñanza Bás ica- . Todos,por supuesto, orgullososde que Jorge sea una f igu­ra.

" Siempre le tuve fe a lacapaci dad de Jorge, aun­que debo reconocer que alcom ienzo no entendíamucho lo que si gni f icabasu música - recuerda elseñor González- . Perodespués me di cuenta deque habla bastantes cosasen las letras, sobre todo, yahí me percaté de que real ­mente tenía futuro lo queestaba haciendo con Mi·guel y Claudio."

" Eso es lo más desta­cable de ellos -agrega laseñora Ida - . Sie mpre ha nsido muy unidos y con unaidea c lara respecto amuchas cosas. Son niños

Ni siquiera el éxito y laincontrarrestable fama que

siempre acarrea les ha hechovariar su forma de ser.

Unidos, simples y con unconstante sentido del humor.

Sus padres lo confirman y sólotienen temor de una cosa: que

todo se acabe y ellos notengan un futuro definido.

EL CARINO

E n el fondo de un pasa ­je, bastante esc ond í­

do y polvoriento, está lacasa de la familia Gonz á­lez Ríos. Hace algunosaños era só lo una másdentro del sencillo vec in­dario de la Novena Aveni·da , en el padarero 16 deOchagavía , en el lim iteentre las comunas de SanMiguel y La Cisterna, ub iocadas en el sector sur deSantiaqo.

Ah l vive la familia de Jor­ge Gon zález, compuestapor un papá del mismonombre -vendedor .viaje­ro- , la mamá , Ida-dueña de casa- , y sushermanos Marco -veinteaños, estudiante de DibujoPublic itario - y Verónica-nueve años, en Ense-

18 19

lOS PR\S\ONEROS

PlATINOPARA LOSHEROES

Con las ven­tas de su pri­mer casete seequiparoncompleta­me nte. Dostecl ados. un aba te ría elec­trónica y unag u itarrault ramo­derna . Ya noquieren se­g u ir en eso ,a ho raquierenusarlos bien .

Con mucho empeñoy poca plata, el triode San Miguelempezó escuchandola radioselectivamente. Asiconocieron a losmúsicos ingleses queluego serian la basepara crearse unestilo propio , "madein Chile".

J o rge González t uvouna infa ncia un pocosolitaria y una adores­

cencia muy alegre. La ju­vent ud aún no lo ha aba n­donado y su presente estálleno de aplausos. Es elque más habla y escribe delos tres. Líder indiscutidodel grupo más popular deChile . sus composicionesson alabadas por moros ycristianos relacionadoscon las esferas del pop o

" Yo terminé haciendolas canciones. porque erael que mejor escribía . peroen realidad los tres pensa­mas casi lo mismo encuanto al quehacer artls­tico. Nosotros empezamosescuchando un programaque salía los domingos enla radio Concierto. el quese llamaba ' Pop Británico'.Era de una hora. y cas i na­die lo pescaba. pero ahíaparecieron grupos comolos crasn , The Police o Du­ran Duran como tres ocu atro años antes de queacá se hic ieran famosos."

Así fue como se con tac­taro n co n las que seria nlas influenc ias más po de­rosas en la mús ica queluego co mpondrían.

" En música reconozcola influencia de los Clash,Specials o Stranglers. per o

Co n Disco de Dob le Platino (40 mil copias) po r su " Pa tea ndo pi edras" ,el fenómeno no se detiene y ti ende incluso a a umen ta r , Co nseg u ir a lgoasí en seis meses (a pa reció en octubre de 1986 ) es absolutam ente nuevo

para el mercad o na cional.

co mo let rista no recon oz­co inf luencias."

Poco después de la edi­ción de " La voz de los 80" ,González dec laraba ace r­ca de la música de Los Pri­sioneros: " Creo que est a­mos en el momento prec i­so en que se puede dec irque para un grupo ha llega­do la hora de crearse un es­tilo propio. Eso en lo musi­cal. En lo de las letras, creoque no se me acaban lasideas tan fácilmente y queme quedan muchas portrasladar a canciones" .

En el " Pateando pie ­dras" , el sonido se moder­nizó claramente. La incor­poración de suculentosteclados tentó a los máspopulares , y el gusto de lostres por bandas tecno co­mo los Depeche Mode,Softcell o los Graftwerk sereflejó de súbito. Pero lasletras mantuvieron y man ­tienen aún una identidad

propi a: " Son las cosas queco nversamos entre los tresy que yo paso al papel " .

Comenzaron en el año1983 tocando en fie sta s deco legio y en las un iversida ­des . Su est ilo de ac tuaciónfue agresivo desde un co­mienzo.

" No -decía Gonzálezen aquella época- , ésteno es el públ ico al quequeremos llegar, no so­mos un grupo para elites,queremos ser tan popula­res como el 'Po llo' Fuentesen la nueva ola, que pasennuestras canciones por laradio. Nuestro púb li co es­tá en las comunas , lo quepasa es que es necesarioque primero nos conozcanlos intelectuales para queluego podamos llegar a lagente que queremos."

En sus primeras ac­tuaciones se caracteriza­ron por desafiar al públicoentre canción y canción.

Tem as co mo " Pintamo­na s" , " Nunca quedas malcon nadi e" so lian ir prece­didos de una que ot raimprec ac ión fuerte per onunca grosera.

" Quédate con tu barrioBellavista" , decian en elCafé del Cerro, o " esto vapara los barbones con cha­leco artesa" , en algúncampus universitario.

Su postura crítica fue ,desde un comienzo y a pe­sar de la dureza de sus pa­labras, la que mayor popu­laridad les atrajo, aunentre los intelectuales.Más tarde, cuando poco apoco fueron ingresando almedio masivo, Los Pri ­sioneros - "un grupo en laedad del no ", según un im ­portante suplemento do ­minical- las empren ­dieron contra el movimien­to new wave que comenzóa gestarse a partir del año1984 e impulsado -para-

La aventuradel sello

Talvez fue como la parti ­da de una gran amistadentre un sello y el rnovl­miento del pop chileno.Más que ninguna otracompañia . la EMI ha inver­t ido recursos y tiempo enlos grupos nacionales. Elcaso de Los Prisionerosfue quizás el punto de par­tida para una exitosa poll ­tica discográfica.

"Ellos fueron los queabrieron la puerta para to odos los grupos que ahoratienen algún nombre -in·dica Julio Sáenz, gerentegeneral de la EMI- . Nosparece también dest a ­cable el trabajo de su rna­nager, Carlos Fonseca,quien ha acertado en lospuntos esenciales de sucarrera."

dojalmente- en gran par­te por la misma música alfin y al cabo moderna, quecreaban los tres amigos deSan Miguel.

Con lo que ganaron porlas ventas de su primer ca­sete, "La voz de los 80"(Disco de Platino), Tapia.González y Narea invir­tieron en equipos de ins­trumentos -dos tecladosCasio, una batería Sirn­mons y una guitarra Fen ·der-, con los que dieronotro colorido al sonido Pri·sionero que se conocíahasta " La voz de los 80"." Muevan las industrias"fue el primer single que lle­gó a las radios de su se·gundo álbum . Luegovendrían -yen no más detres meses- "El baile delos que sobran" , " Po r quéno se van" , " Exijo ser unhéroe", " Quieren dinero" ." Una mujer que no llame laatención" y " Po r qué los ri­cos" , que se convertiríanen los favoritos de un gran

sector de la juventud cnile­na .

El sonido simple pero ala vez penetrante de lasmáquinas estuvo presenteen esta segunda produc­ción y la identificación rna­siva llegó esta vez muchomás rápido que con el pri­merálbum.

Desde los circuitos eli­tistas del undergroundsantiaguino a las primerasplanas de los diarios conrecitales de cincuenta milpersonas, Los Prisionerosno cejaron un instante enese objetivo que ya desdeesa actuación en el Cafédel Cerro, donde lanzaban"La voz de los 80" . coníe­sacan sin ambages: " Nues­tra música es bailable .queremos que la toquen enlas fiestas y que escuchenlas letras en la radio. No hayque ser muy cabezones pa­ra entenderlas y tampoco esuna cosa tan tonta como pa­ra que la gente se aburra.."

"Es un casete muy boni­to , en el cual ciframos to odas nuestras esperanzas-señala Gon zále z- . Elnivel de calídad del sonidoes bastante superior al an oterior. porque todos sa obíamos más de grabacióny todo eso. incluyendo anuestro ingen iero de soni ­do. Alejandro Lyon, quiencaptó la inten ción denuestra música perfecta­mente. "

En el álbum, Los Pri ­sioneros abordan una se·rie de tematicas . que inclu­so los hac ían aparecer me­nos comerciales que lasde su primer álbum y conuna estructura musical al ­go. más compleja, pero [a­mas al extremo de que re·negaran de su credo en lasimplicidad . Las imágenesde Jorge González. ade­más, son mucho más po é­ticas y menos directas quelas de su primer álbum.salvo un par de temas -al

A pesar de sólo ser "el mejor guitarrista que hay en su casa", Claudio Nareademuestra un buen manejo de la palabra "vanguardia" en su instrumento.

Aún está madurando su evolución musical.

más puro estilo " Clash"-,en los que la letra se ponealgo gruesa_

" A mi no me parece líci­to forzar la inspiración y te ­ner que romperse la cabe­za para que alguna can ­ción salga muy poética ninada parecido, las cosassalen mucho mejor cuan­Jo son naturales y no se re­.urre a moldes preestable­.idos. En realidad, no soyin tipo que esté en contrale la poesía, pero si enent ra de su excesiva inte-

I sctuauzac tón."

" Jorge hizo todo en ele equndo elepé, salvo losrreglos, por supuesto, en

10 S que Claudia y yo apor­Tamos el toque sonoro deLos Prisioneros. De inme­d i a t o me gustaronMuevan las industrias ' y'El baile de los que so­bran ', me acuerdo que Jor­ge nos mostraba las letras,en parte. v nos esbozó ateo

de la música durante unviaje de regreso de Antofa­gasta, adonde habíamosido por primera vez."

En la realización , sin em ­bargo, pusieron todo el ba ­gaje que habian acumula­do escuchando a gruposeuropeos de primera línea,especialmente en los cul ­tares del tecno. De ahi losarreglos cercanos a losHeaven 17 y especialmen­te a los Depeche Mode,grupo del que no tienen elmás minimo temor en reco­nocer su influencia.

" No somos imitadoresni nada parecido, pero nosgustan mucho sus ideasde arreglo, especialmenteen lo referido a usar con in ­teligencia los teclados ,aprovechar los timbres ydarle dinámica a la compo­sición -señala Gonzá­lez - . Pero nunca hemosimitado sus canciones.porque lo nuestro es

mucho más personal. Enlas letras no tenemos nadaque ver , porque ellos sonharto más frivolos que no ­sotros. "

Muchos de los méritosde " Pateando Piedras"tienen que ver con el apoyode Claudia y Miguel a la la ­bor creativa de Jorge. Am­bos aportan sus ideas fres­cas acerca de cómo colo­car sus respectivos instru­mentos en las composi ­ciones dellider, y él mismose encarga de resaltar suscapac idades a la hora dehaber un recuento :

" Sé que hay mucha gen ­te que dice que Los Pri­sioneros soy yo , pero no sedan cuenta de que Migueles el mejor baterista deChile . Talvez no tenga latécnica salvaje de StewartCopeland, pero es real ­mente preciso y es origi ­nal, algo que pesa más quetodos los años de conser­vatorio juntos. Además, es

Miguel Tapia: ¿Quién mató a Maril}'n ? se preguntó él un día. y compu I

el t wist más revival del repertorio prisionero. Es su única composici ' I

hasta a hor: .

un baterista moderno quesabe usar perfectamenteuna batería electrónica oprogramable, por ejemplo.Respecto a Claudio, tam­bién he escuchado más deuna critica. Con él sucedealgo parecido. Todos se tl ­jan si es una 'bala' con susdedos o si toca igual a estetipo o este otro , sin perca­tarse de que es el guitarris­ta de estilo más vanguar­dista en Chile. Conoce lamúsica pop al revés y al de -

recho y es el más inquieto,musicalmente, de Los Pri­sioneros . Ojalá hubieraveinte Claudio Narea enlos grupos chilenos. "

No se detienen a la horade calificar. Antes y ahora,con o sin respaldo de lagente, siempre tuvieronuna opinión concluyente,exacta y sin términos me­dios para todo lo que real­mente les importara.

" No es que seamos so ­berbios, sino que estamos

seguros de lo que hac J'

mos. El medio es tenpobre, que sólo bastat aque alguien les cantara alos temas evidentes pal aque triunfara. Eso fue loque hicimos nosotro saunque todavía nos darnoscuenta de que alqunoscontinúan cantando estu­pideces y todos los idolatran como dioses. Por úl·timo, si fueran divertidosseria mejor, pero ni si·quiera para eso les da."