jesus y la ley (jesus quebranta el sábado)

Jesús y la ley

De cómo Jesús quebranta la ley dada a Moisés

Iglesia apostólica casa de Oración - Estudio pactos Nº1

Estudio bíblico realizado por el ministerio "Iglesia apostólica casa de oración", para la honra y gloria de Dios nuestro Padre y de nuestro Señor Jesucristo.

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Jesús y la ley

Cuando leemos el sermón del monte, encontramos un párrafo en donde Jesús nos habla acerca de "la ley", que nos señala de forma clara y precisa, que él "no vino a abrogar la ley sino mas bien a cumplirla". Este pasaje bíblico ha sido por años el versículo favorito de aquellas personas que ven en la ley dada a Moisés una base legal, respecto de aquellos mandamientos, para creer que Jesús fue nada más que un continuador de la ley Mosaica y que por ende el evangelio del Mesías es una continuidad de esta ley, sin embargo, y aunque suene fuerte y duro lo que voy a mencionar, lo cierto es que aquella idea no está ni cerca de los mensajes del Mesías, ni de las palabras de los profetas, ni de las palabras de los apóstoles, ni de las palabras de los salmos y ni aun de la ley que le fue dada a Moisés. Aunque lo que acabo de mencionar es difícil de asimilar, lo cierto es que ésta no es una idea personal antojadiza, sino que es más bien el resumen de toda la esperanza de salvación que Dios ha venido forjando para toda la humanidad desde los días de Adán, y que, antes de determinar una ley para su pueblo, la Torá, lo cierto es que el ministerio de Jesús nuestro Mesías, de bendita memoria, tiene sus raíces en la figura de Noé, un hombre que vivió mucho antes de la figura de Moisés. Tal vez, suene raro lo que estoy mencionando, pero todo esto responde a un patrón de profecías que Dios viene forjando desde los días de aquel hombre que, al igual que nuestro Mesías, surge como un nuevo Adán en el mundo, y esto obviamente es por el hecho de que Noé, el hombre del cual estamos hablando, comenzó su labor para dar término a la primera humanidad ya corrompida, mediante la anunciación del juicio de Dios (algo similar a lo que hizo Cristo en su ministerio), para comenzar una nueva humanidad junto con su familia (algo similar a lo que hará Jesús en su venida), por esta razón, hablo diciendo que, la figura ministerial y profética de nuestro Mesías santo, está fuertemente radicada en la figura de Noé, como un nuevo comienzo de la humanidad, y esto se forjó mucho antes que existiera Moisés. Ahora bien, volviendo al versículo que habíamos mencionado, en donde pareciera ser que Jesús declara su absoluta fidelidad a la ley dada Moisés, lo cierto, es que bajo una mirada estricta y analítica, lo que hace el Mesías, no es respaldar el aspecto legal de la ley Mosaica, sino más bien, confirmar el aspecto profético de esta. ¿Como así? muy simple. Cuando la escritura neo-testamentaria nos habla de la "ley de Moisés" o "la ley", tendemos a pensar inmediatamente en "los mandamientos dados a Moisés", en lugar de pensar en "la Torá" o el "pentateuco", es decir, en lugar de pensar en los cinco primeros libros de nuestras biblias, que es lo que realmente está traducido en aquel versículo, pensamos más bien que aquellos pasajes bíblicos en los que se menciona la ley entregada a Moisés se refieren solo a los mandamientos, Craso error, ya que técnicamente "la ley" a la que se refiere el nuevo testamento, en muchas ocasiones no es más que una mala traducción de "la Torá", es decir, el pentateuco, el cual no es "todo ley", es decir, también existen pasajes y libros de entre ellos que no hablan mandamientos sino que nos cuentan historias, como la de los patriarcas y el pueblo de Israel, o sea, la Torá, no son "todo mandamientos", sino mas bien, es un registro histórico y profético que nos habla acerca del trato de Dios con el hombre desde el inicio de los tiempos. Pero ¿Que tiene que ver esto con lo que dijo Jesús? Sencillo, en aquel versículo que estamos analizando, Jesús declara que él es el cumplimiento de lo escrito en la Torá, en lugar hablar de "los mandamientos dados a Moisés", es decir, se está refiriendo más bien a la parte profética en donde la Torá habla de él, y no de Jesús vino a cumplir los mandamientos dados a Moisés. ¿Increíble? No importa, no me crea a mí, sino


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que créale a la escritura. Y es que, para alguien que realmente ha leído la ley dada a Moisés, sabrá que, lo primero que hace el Mesías santo, de bendita memoria, es quebrantar uno de los mandamientos dados a Moisés, ¿Por qué digo esto? Porque si analizamos las palabras de Jesús en aquel sermón del monte, nos damos cuenta que Jesús está interviniendo algunos de los mandamientos que fueron entregados a Israel por medio de Moisés, por ejemplo, a aquel mandamiento que dice "no mataras", nuestro Mesías, le añade diciendo "no solamente no mataras, sino que cualquiera que diga "fatuo" a su hermano, ya es culpable de juicio". Claramente, nuestro Mesías añade ciertos preceptos a aquel mandamiento, es más, algunos neo-judaizantes como los de "la iglesia adventista del 7mo día", señalan que lo que hace allí Jesús es más bien "perfeccionar la ley que le fue dada a Moisés", lo que obviamente es improbable para cualquier estudioso de las escrituras ya que, si creemos que el Mesías santo, de bendita memoria, vino realmente a perfeccionar la ley dada a Moisés, tendríamos que preguntarnos ¿Acaso la ley dada por el Eterno a Moisés no era lo suficientemente perfecta, que tuvieron que pasar miles de años para que el Mesías viniera a "perfeccionarla"? Claro que no, Jesús no vino a perfeccionar la ley dada a Moisés, entonces, la pregunta es, ¿Por qué nuestro Mesías santo añade estas disposiciones a la ley, acaso ésta ley estaba incompleta o qué? La ley que le fue dada a Moisés, no estaba incompleta ni nada por el estilo, sino que simplemente debemos recordar que el Mesías, no sólo vino a cumplir la parte profética de la Torá, sino también las profecías de los salmos y de los profetas, y que, fueron estas últimas quienes hablaban de un pacto, un nuevo pacto, distinto al anterior, un pacto llamado Jesús, y no llamado "Torá". Razón por la cual, inmediatamente después de señalar que "él no venía a abrogar la ley", simplemente la abroga, pues así lo señalaban las mismas profecías, desde la Torá hasta los profetas. Insisto. Y es que técnicamente, la misma ley de Moisés señalaba que, eso que hizo Jesús, de añadir parámetros a la ley que le fue dada a Moisés, estaba prohibido por el Eterno, tanto añadir como quitar preceptos a la ley que le fue entregada a Israel por medio de Moisés, es decir, al momento de señalar algún precepto dicho en la ley, inmediatamente Jesús no sólo puso un "Pero" a cada uno de estos preceptos sino que también añadía diciendo "Yo os digo", confirmando con ello que nuestro Mesías hizo aquello que la ley dada a Moisés decía que no se debía hacer, pues al decir "Yo os digo", claramente estaba imponiendo sus preceptos por sobre los que estaba en la ley dada a Moisés, es decir, ya no era la Tora diciendo "hagan esto o aquello", sino era Jesús, diciendo" Yo digo que hagan esto o aquello". Antes de leer los pasajes bíblicos del sermón del monte, leeremos el mandamiento especifico de la Torá en donde se prohíbe "añadir a los mandamientos dados a Moisés", y así también "Quitar a los mandamientos dados a Moisés" Deuteronomio 4:1 "Ahora, Yisra'el, escucha las leyes y estatutos que yo les estoy enseñando, para seguirlos, para que vivan; entonces entrarán y tomarán posesión de La Tierra que YAHWEH, el Elohim de sus padres, les está dando. 2 Para obedecer los mitzvot de YAHWEH tu Elohim que yo les estoy dando, no añadan a lo que yo les estoy diciendo, y no le resten" Deuteronomio 12:32 "Cuidarás de hacer todo lo que yo te mando; no añadirás a ello, ni de ello quitarás."

Para contextualizar el pasaje bíblico recién citado, solamente quisiera comentar que este es un recordatorio a Israel y a Moisés, que Dios les hace respecto de las leyes o mandamientos que un día les fueron entregados, es decir, aquello que estaba diciendo Dios, más que una orden de guardar sus mandamientos, era reiterar y recordar los mandamientos a Moisés y a Israel. Ahora


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entonces, leeremos aquellos mandamientos que nuestro Mesías santo citó desde la Torá y les añadió de sus propios preceptos. Mateo 5:21 "Han oído que fue dicho a nuestros padres: 'No asesinarás,'[Ex 20:13; De 5:17] y cualquiera que cometa asesinato será sujeto a juicio. 22 Pero Yo les digo que cualquiera que guarde ira contra su hermano, será sujeto a juicio; que cualquiera que le diga a su hermano: '¡Tu no sirves para nada!' Será responsable ante el Sanhedrín; y cualquiera que diga: ¡'Necio,' incurre en la penalidad de quemarse en el fuego del Guei-Hinnom!" Mateo 5: 27 "Ustedes han oído que fue dicho a nuestros padres: 'No cometan adulterio.'[Ex 20:14; De 5:18 ] 28 Yo les digo que el hombre que tan siquiera mire a una mujer con propósito lujurioso de codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón." Mateo 5:31 "Fue dicho: 'Cualquiera que se divorcie de su mujer tiene que darle un séfer keritut (carta de divorcio).'[De 24:1-4] 32 Pero Yo les digo cualquiera que se divorcie de su mujer, excepto por motivo de inmoralidad sexual, hace de ella una adúltera; y cualquiera que se case con una divorciada, comete adulterio." Mateo 5:33 "De nuevo, han oído que a nuestros padres les fue dicho: 'No rompas tu promesa,' y 'Guarda tus juramentos a YAHWEH.'[Le 19:12; Nu 30:30; De 23:23] 34 Pero Yo les digo que no juren de ninguna manera; ni por 'el cielo,' porque es el trono de YAHWEH; 35 ni'por la tierra,' porque es el estrado de sus pies;" Mateo 5:38 "Ustedes han oído lo que fue dicho a nuestros padres, 'Ojo por ojo y diente por diente.'[Ex 21:24; Le 24:20; De 19:21] 39 Pero Yo les digo que no se resistan contra el que les hace el mal. Al contrario, si alguien te pega en la mejilla derecha, ¡deja que te pegue en la izquierda también!" Mateo 5:43 "Ustedes han oído lo que fue dicho a nuestros padres, 'Ama a tu prójimo[Le 19:18] y odia a tu enemigo.' 44 Pero Yo les digo: ¡Amen a sus enemigos; oren por aquellos que los persiguen!

¿Qué es más importante para los que creen en el Mesías, lo que fue dicho a los israelitas por medio de Moisés, o lo que dijo el Mesías? Si lo que dijo el Mesías, es lo mismo que señaló Dios a Moisés, entonces ¿Por qué el Mesías antepuso e impuso un "pero" a cada uno de los preceptos que mencionó acerca de la ley (suponiendo que él no vino a contradecir las leyes de la Torá)? ¿Me explico? Quiero decir, supongamos que un día, mientras voy caminando, yo dijera algo como, "voy a doblar a la derecha", y luego dijera", "Pero mejor, voy a doblar a la izquierda", quisiera preguntar entonces ¿Para donde iré finalmente? Cualquiera que tenga desarrollada un poco la habilidad de compresión de lectura, podrá darse cuenta que, según lo que dije, entonces finalmente "iré a la izquierda", ya que fue lo último que dije, y además, mencioné un "pero" para confirmar que lo primero que dije queda invalidado, y por ende abrogado. Pues bien, desde este simple análisis de compresión lectora, podemos darnos cuenta que nuestro Mesías, al decir, "pero" antes de cada precepto que mencionaba de la ley dada a Moisés, estaba simplemente abrogando lo dicho en aquella ley para imponer lo dicho por él, razón por la cual, luego de decir aquel "pero", señala diciendo "Yo os digo", lo que nos da a entender que, lo que "fue dicho a los padres", quedaba anulado, o abrogado, ya que lo que valía ahora, era justamente lo que decía el Mesías, y no lo que "fue dicho a los padres". Insisto, al decir "pero... ...Yo os digo", Jesús estaba imponiendo sus preceptos por sobre los de Moisés. Esto no requiere mayor análisis ya que es demasiado evidente.


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Entonces, ¿Por qué el Mesías abroga abiertamente la ley dada a Moisés, señalando ahora sus preceptos, si él mismo dijo que no vino a abrogar la ley? Muy simple, tal como lo mencionamos en un comienzo, cuando nuestro Mesías señala diciendo que "no venía a abrogar la ley", no se refería a los preceptos, sino mas bien, a las profecías de la Torá que hablaban de él, pues ya hemos dicho que la Torá no es "todo ley" sino que en ella también hay escritas historias y profecías, que, tal como lo dijo el Mesías, "hablaban de él". Lucas 24:33 "Se levantaron enseguida, regresaron a Yerushalayim, y encontraron a los Once reunidos con amigos, 34 y les dijeron: "¡Es verdad! ¡El Adón ha resucitado! ¡Shimeon le vio! 35 Entonces los dos contaron lo que había pasado en el camino, y como ellos le reconocieron cuando partió el matzah. 36 Todavía estaban hablando de esto, cuando allí estaba El, ¡de pie entre ellos! 37 Espantados y aterrorizados, creyeron que estaban viendo un fantasma. 38 Pero El dijo: "¿Por qué están tan irritados? ¿Por qué anidan estas dudas en sus corazones? 39 Miren mis manos y mis pies; ¡Soy Yo mismo! Tóquenme y vean; un fantasma no tiene carne y huesos, como pueden ver, Yo sí."[150] 40 Mientras dijo esto, les mostró sus manos y sus pies. 41 Y como todavía no podían creerlo por la alegría, y estaban parados allí asombrados, El les dijo: "¿Tienen algo de comer?" 42 Le dieron un pedazo de pescado asado, 43 el cual El tomó, y se lo comió en presencia de ellos. 44 Yahshúa les dijo: "A esto me refería, cuando todavía estaba con ustedes, y les decía que todo lo que está escrito en la Toráh de Moshe, los Profetas, y los Salmos tenía que ser cumplido." 45 Entonces les abrió la mente para que pudieran entender el Tanaj, 46 diciéndoles: "Aquí está lo que dice: El Mashíaj tiene que sufrir, y ser levantado de entre los muertos en el tercer día; 47 y arrepentimiento en Su Nombre, que lleva a perdón de pecados, tiene que ser proclamado a la gente de todas las naciones, empezando con Yerushalayim"

De acuerdo al texto citado, ¿A que se refería Jesús cuando dijo que todo lo que estaba escrito en la Torá debía cumplirse, a "los mandamientos de la Torá" o a que "el Mesías debía padecer y resucitar" como lo decían las profecías? Según las mismas palabras de Jesús, tanto la Torá, como los salmos y los profetas, señalaban que “el Cristo debía padecer y morir”. No lo digo yo, lo dijo el mismo Jesús. Es decir, cuando Jesús señaló al principio de su ministerio diciendo "he venido a cumplir la Torá y los profetas", ¿A que se refería con ello, a "los mandamientos de la Torá" o "a lo que estaba escrito de él en la Torá"? Ustedes lo leyeron, nuestro Mesías santo habló diciendo que lo que tenía que cumplirse de la Torá, no eran los mandamientos dados a Moisés como muchos ilusos creen, sino que, se refiere a aquellos pasajes bíblicos de ésta, en donde se profetiza acerca del sacrifico del Mesías, por ejemplo, el momento en donde Abraham es ordenado a sacrificar a su hijo, y que luego de ser detenido por al ángel de Dios, le fue profetizado que "Dios se proveería para tal sacrificio"... ..."Dios", nuestro Padre, "se proveería a sí mismo", no dice que le fue prometido un cordero a Abraham, sino que dice claramente que "Dios se proveerá", es decir, allí hay un ejemplo claro, que aparece en la Torá específicamente en el primer libro, el libro de Génesis, en donde se profetiza acerca del sacrificio provisto por Dios, mucho antes de que Moisés sacara a Israel de Egipto y celebraran la pascua sacrificando un cordero, que recordemos, también es un símbolo del sacrificio de nuestro Mesías. Génesis 22:13 Cuando Avraham levantó la vista, su mirada se posó en un carnero que estaba atrapado en la espesura por los cuernos. Así que Avraham fue y tomó el carnero y lo presentó como ofrenda quemada en lugar de su hijo. 22:14 Y Avraham llamó aquel sitio Yahweh Yiréh Yahweh proveerá, de ahí el presente dicho: “En el monte de Yahweh se provee”.


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A ese tipo de profecías, se refería el Mesías cuando señaló diciendo que en la Torá estaba escrito lo que él debía padecer, razón por la que señale diciendo, que Jesús no se refería con ello de "he venido a cumplir la ley y os profetas", a los mandamientos dados a Moisés, sino mas bien a las profecías, pues el mismo lo señala. No lo digo yo, lo dice la escritura, lo dice el mismo Mesías señalando que tanto la Torá, como los salmos y los profetas, estos tres, hablaban de que el Cristo debía padecer y Morir. Ahora bien, luego de que el Mesías, dijo que no venía a abrogar la ley y los profetas, también habló diciendo que, "cualquiera que no cumpliera algunos de estos mandamientos, será llamado muy pequeño en el reino de Dios", frase que, a simple vista pareciera citar de forma clara a los mandamientos dados a Moisés, pero no es así, ¿Por qué? Muy simple. (Insisto, debemos sacarnos de nuestra mentalidad occidental, la idea de que cada vez que las traducciones bíblicas nos hablan de "la ley", o "los mandamientos", esta se refiere a lo dicho por Moisés, ya que no siempre es así). Primero que nada, ya hemos visto como el mismo Mesías abroga lo dicho en los mandamientos dados a Moisés, imponiendo sus preceptos a lo escrito en la Torá (algo que estaba prohibido por las mismas palabras de Dios), por lo tanto debemos preguntarnos: ¿O Jesús se está diciendo a si mismo que él es pequeño en el reino de los cielos (ya que quebrantó el mandamiento dado a Moisés), o se está contradiciendo en sus palabras? Jesús no se contradice en sus palabras, pues el problema aquí no es lo que dijo nuestro Mesías, sino más bien lo que se entiende, o se desentiende, cuando se leen estas palabras, ¿Por qué digo esto? Porque técnicamente, Jesús no se está refiriendo a los mandamientos dados a Moisés, sino mas bien, a los mandamientos que él estaba a punto de señalar, por eso dice "estos mandamientos", en lugar de decir algo como, "los mandamientos de la Torá", ¿Me explico? al decir "estos", Jesús está hablando de aquellos preceptos que estaban siendo presentados en ese momento por él; a los mandamientos que estaban en ese momento con él (el pronombre demostrativo "estos" implica cercanía), pues de lo contrario habría dicho "los mandamientos" como señalando algo lejano, ajeno a él, y que por ende no habian sido dicho por él, por esa razón, Jesús señala diciendo "estos" mandamientos, y no "los" mandamientos. Todo esto lo confirma el mismo Mesías, cuando al final del sermón del monte, señala diciendo que "esto eran la ley y los profetas"... ...¿A que se refería Jesús con esa frase?, se refería simplemente a que, todo lo que él dijo en ese momento eran entonces el resumen de la ley y los profetas, es decir, mientras la misma Tora señala su propio fin como ley (Deuteronomio 31:16-21 / 32:15-21), los profetas por otra parte señalaban diciendo claramente que Jesús, el Mesías, sería el nuevo pacto, es decir, sabemos que Jesús no es la Tora, sabemos que Jesús fue mucho más allá de las leyes de la Torá dado que demostró la autoridad suficiente para imponer sus propios "peros" a lo dicho en la las leyes de la Torá, por lo tanto, el nuevo pacto, Jesús, no tenía nada que ver con la Tora, pues no solo abroga los mandamientos de ésta sino que impone los suyos propios, cumpliendo de esta forma, el fin de la ley Mosaica (según la Torá), y el principio de una nueva ley (según los profetas), es decir, he aquí la forma en que tenía que cumplirse lo dicho "en la ley y los profetas", razón por la cual el mismo Jesús, luego de señalar sus preceptos, dice: "he aquí la ley y los profetas". Mateo 7:12 “De modo que, todo lo que quieran que los hombres hagan por ustedes, así también hagan por ellos, pues en esto consiste la Torah y los Profetas... ... 7:28 Y cuando Yahoshúa terminó estas palabras, las multitudes estaban maravilladas de su enseñanza; 7:29 porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas."


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"He aquí la ley y los profetas", ¿dónde? Precisamente en lo que acaba de hacer y decir Jesús, es decir, esta frase de Jesús que habla acerca de "estos mandamientos" como el resumen de lo escrito en la Torá y en los profetas, no hace más que confirmar que Jesús estaba dictaminando sus propios mandamientos, ¿Por qué digo esto, en lugar de señalar que Jesús estaba resumiendo la ley de Moisés a los israelitas que estaban escuchando sus palabras? Porque aquel resumen de Jesús acerca de la ley, si es que en verdad fuera un resumen de la ley Mosaica, en el fondo, estaría atentando contra la misma ley dada a Moisés, pues insisto, si estas palabra de Jesús fuera un resumen de aquella ley, quisiera preguntar entonces ¿Donde quedan las ordenanzas de los levitas y los sacrificios que ordenaba la ley Mosaica, acaso Jesús los dejó fuera o se le olvido resumirlos también (Digo esto como ejemplo, ya que el Mesías no menciona ninguna de las leyes dichas a los levitas, entre otras tantas que no menciona)? Ya lo señalamos, estaba prohibido añadir o quitar a la ley dada a Moisés, por lo tanto, Jesús no podía simplemente hacer un resumen antojadizo de la ley de Moisés, pues eso era condenado por la Torá, así que, precisamente, el momento de señalar que "en esto se resume la ley y los profetas", no estaba más que poniendo fin a la ley dada a Moisés, para comenzar la suya según lo señalado por las profecías. Insisto, esta es la razón por la cual Jesús habla diciendo "estos mandamientos" y no "los mandamientos", pues se refería a los mandamientos que estaban junto a él y no a los de otra persona, no a otros mandamientos, o sea, lo que nos da a entender entonces que ya no "corría" lo que fue dicho a los padres, sino que ahora estaría en vigencia lo que él estaba a punto de pronunciar. Y es que, aunque parezca insólito, lo cierto es que así estaba profetizado en él antiguo testamento. Isaías 49:8 "Aquí está lo que YAHWEH dice: "En el tiempo que Yo escoja Yo te responderé; en el día de la salvación Yo te ayudaré. Yo te he preservado, y te he nombrado a ser Pacto para las naciones, para restaurar La Tierra y vuelvas a distribuir sus herencias del desierto, 9 para decir a los prisioneros: '¡Salgan!' A aquellos en tinieblas: ¡Muéstrense a ustedes mismos!' Ellos serán apacentados en el camino. Y todas las sendas serán sus pastos. 10 No estarán hambrientos ni sedientos; ni el viento abrasador ni el sol los golpeará; porque, El, el que tiene misericordia de ellos los conducirá, y los guiará a manantiales de agua".

Es decir, según las palabras de esta profecía, el pacto prometido por Dios a Israel, no era una renovación de la antigua ley dada a Moisés, sino que más bien seria el mismo Jesús (dado que esta profecía de Isaías es una profecía mesiánica inspirada en el pacto de Dios con David, de hecho, nos recuerda a la profecía de Isaías 61, la cual también es netamente mesiánica y que es aquella que Jesús leyó cuando se presentó en la sinagoga de Nazaret (Lucas 4:16-19)), así es, él sería el pacto al pueblo, no la ley dada a Moisés. Insisto, por eso dice "Te pondré por pacto", es decir, no le está hablando a una cosa, le está hablando al futuro Mesías según el pacto de Dios con David. En otras palabras, el Mesías sería en sí mismo la ley prometida por el Eterno, por ende, todo lo que él dijera sería ley, pues él era la ley prometida, así que, aunque parezca insólito, lo cierto es que nuestro Mesías, fue dado por pacto al pueblo, por lo tanto la pregunta es ¿Acaso no existía ya un pacto dado por el Eterno, que tuvo que prometer un nuevo pacto, esta vez, declarando a una persona por pacto y no a unas cosas inertes como lo eran unas tablas de piedra? Por esta razón, Jesús impone sus propios preceptos por sobre "aquello que fue dicho a los antiguos", ya él Mesías era aquel pacto prometido, y hace valer esta profecía dicha por Isaías, dictaminando sus preceptos. Y es que, no sólo esta profecía nos habla acerca de Jesús como el pacto viviente de Dios, sino que también hay otras profecías que señalan diciendo que "de Sion saldría la ley", y aunque este punto en sí mismo nos da para otro estudio, tanto o más extenso que éste, solo quisiera aclarar que, para aquellos que no conocen la diferencia entre el monte de Sion y el monte Horeb (Sinaí), el primero está al sur de Jerusalen, por lo menos esa era su ubicación en los tiempos del rey David, y,


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el monte Sinaí se encuentra en el límite de Egipto con Israel es decir, existen unos cientos de kilómetros que separan a ambos montes, por lo tanto, ésta es otra prueba que nos señala que la ley dada a Moisés no era la ley prometida por medio de los profetas, pues, Sion está a cientos de kilómetros del Sinaí, o sea, no son el mismo monte, y si la profecia señalaba que "de Sion saldría la ley", la pregunta que nos queda por hacer es ¿Acaso la ley no había salido ya desde otro monte, en este caso el monte Sinaí, como para que Dios prometiera una ley que saldría de Sion? Por supuesto, estas profecías fueron dichas cuando todos sabían que la ley había venido desde el monte Sinaí, y no del monte de Sion, de hecho, esta profecía atentaba directamente contra la ley dada a Moisés, ya que prometía una ley venida desde otro monte, que no fue el que pisó Moisés. Isaías 2:3 "Muchas naciones irán, y dirán, "¡Vengan, subamos al Monte de YAHWEH, y a la casa del Elohim de Ya'akov! El nos enseñará sus caminos, y nosotros caminaremos en sus sendas." Porque de Tziyon saldrá la Toráh, la palabra de YAHWEH de Yerushalayim."

Jesús puso "peros" a la ley, es decir, abrogó derechamente algunos de los mandamientos dados a Moisés, además, impuso sus propios mandamientos lo que se evidencia al decir, "yo os digo", sin embargo, quisiera preguntar ¿Puede ser que todo este análisis esté basado en un solo evento que vivió nuestro Mesías santo, que fue el "sermón del monte"?, es decir, ¿Fue éste el único momento que Jesús quebrantó la ley dada a Moisés en todo su ministerio registrado en las escrituras? No, pues hubieron otros cuatro eventos muy claros en donde el Mesías quebrantó la ley dada a Moisés (no lo digo yo, lo señala la escritura), pero, antes de pasar a analizar a aquellos eventos, solo quisiera comentar, que hay quienes señalan que lo que hizo Jesús en el monte al imponer sus propios preceptos, no era nada más que la realización de una vieja costumbre que los rabinos de Israel habían desarrollado desde los días del cautiverio de Israel en Babilonia, es decir, unos 400 años antes del ministerio de nuestro Mesías, y que por ende, Jesús no quebrantó la ley dada a Moisés sino que realizó una vieja costumbre conocida desde antaño. Pero la pregunta es, ¿Acaso una tradición de 400 años de antigüedad previa al Mesías, justificaba el quebrantar la ley dada a Moisés imponiendo los preceptos rabínicos por sobre los mandamientos de la Torá? Nada justificaba el hecho de imponer sus propios preceptos por sobre los dichos a Moisés, es decir, muy probablemente Jesús puso por obra una antigua tradición rabínica, pero eso no quiere decir que con aquella tradición no se estaba quebrantando la ley, ni menos por el hecho de que los rabinos tenían aquella practica, por el contrario, da cuenta de que 400 años antes del Mesías (aprox.), aun los maestros de Israel quebrantaban la ley dada a Moisés, independiente de la excusa que tenían para hacerlo, o sea, esa antigua practica, que probablemente, ya se había convertido en una tradición en los días de Jesús, no justificaba un no-quebrantamiento de la ley dada a Moisés, pues el mandamiento era claro "no añadirás nada a esta ley", y éste no consideraba excepciones a la regla, lo que da a entender que, por muy buena que fuera la intención de imponer un nuevo precepto para adaptar la ley dada a Moisés según las nuevas circunstancias que vivía Israel, con esa acción se estaba quebrantando la ley, de hecho, la sola acción de imponer un precepto ya era un quebrantamiento de la ley dada a Moisés, pues así estaba escrito en la Torá.


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Jesús y el día sábado.

Continuando con lo señalado, nuestro Mesías santo, de bendita memoria, no sólo ordenó sus propios preceptos por sobre lo que decía la ley dada a Moisés, sino que además, confrontó y quebrantó otros mandamientos que señalaba la Torá, por supuesto, no lo hizo con maldad o con alguna mala intención, pero si los quebrantó en el sentido que no hizo en estricto rigor lo que la ley señalaba que Israel debía hacer. Sé que esto sonó un tanto confuso, pero a medida que veamos los eventos que rodearon la vida del Mesías nos daremos cuenta que, en más de una oportunidad nuestro Mesías, de bendita memoria quebrantó algunos de los mandamientos dichos en la Torá. El primero de ellos, tal vez el mas conflictivo para los seguidores de la ley dada a Moisés, es el quebrantamiento del día Sábado, o del Shabbat o "día de reposo". Así es, lo que los grupos judaizantes nunca se han atrevido a entender, el quebrantamiento del día de reposo hecho por nuestro Mesías, hecho que se señala en cada una de nuestras biblias, y que veremos a continuación. Mateo 12:1 "Un Shabbat en aquellos tiempos, Yahshúa caminaba por unos campos de trigo. Sus talmidim tenían hambre, así que empezaron a arrancar espigas de grano y a comérselas. 2 Los Perushim le vieron, y le dijeron: "¡Mira! ¡Tus talmidim están violando el Shabbat!" 3 Pero El les dijo: "¿No han leído nunca lo que David y los que estaban con él hicieron cuando tuvieron hambre? 4 Entró en la casa de YAHWEH y se comió el Pan de la Presencia, que era prohibido para él y sus acompañantes, sino solamente es permitido a los kohanim. 5 ¿O no han leído en la Toráh que en Shabbat los kohanim profanan el Shabbat y, sin embargo, no son culpados? 6 ¡Les digo, aquí en este lugar hay algo mayor que el Templo! 7 Si ustedes supieran lo que quiere decir 'Yo quiero misericordia, en vez de sacrificios de animales,' no condenarían al inocente. 8 ¡Porque el Ben Ha Adam es el Adón del Shabbat!" 9 Saliendo de ese lugar fue a la sinagoga. 10 Había allí un hombre con una mano seca. Buscando una razón para acusarlo de algo, ellos le preguntaron: "¿Es permitido sanar en Shabbat?" 11 Pero El contestó: "Si ustedes tienen una oveja que se cae en un pozo en Shabbat, ¿quién de ustedes no la agarra, y la saca? 12 ¡Cuánto mucho más valioso es un hombre que una oveja! Por lo tanto, lo que es permitido en Shabbat es hacer el bien." 13 Entonces le dijo a aquel hombre: "Extiende la mano." El hombre la extendió, y le fue restaurada tan sana como la otra. 14 Pero los Perushim salieron de allí, y empezaron a tramar cómo podrían destruir a Yahshúa. 15 Percatado de esto, se fue del lugar. Mucha gente le siguió y los sanaba a todos, 16 pero les advertía que no lo divulgaran. 17 Esto era para que se cumpliera lo que fue dicho por medio del profeta Yeshayah: 18 "Aquí está mi siervo, a quien he escogido, mi amado, con quien estoy muy complacido; sobre El pondré mi Ruaj, y anunciará justicia a los Gentiles. 19 El no disputará, ni gritará, nadie oirá su voz en las calles; 20 no romperá la caña cascada, ni apagará la mecha que apenas humea hasta que traiga la justicia, por medio de la victoria. 21 En El los gentiles pondrán su esperanza."

Muchos cristianos, por lo general, no entienden lo que leen, ya sea por ignorancia, o bien por no tener la habilidad de la comprensión de lectura. Por desgracia es así, lo que obviamente perjudica o disminuye el entendimiento de lo que se está leyendo, me explico, para poder entender a cabalidad las cosas que dijo nuestro Mesías, así como las cosas que hizo, primero debemos informarnos lo que la misma Torá señalaba respecto del día Sábado, como primera referencia, ya que Jesús no sólo nombra a David sino que habla respecto de los sacerdotes, citando con ello la Torá y por otra parte, el autor, Mateo, nos habla diciendo que todo esto, es porque se tenía que cumplir una profecía dicha por Isaías. Así que, habiendo tantas cosas por desglosar, comenzaremos nuestro análisis, como ya hemos dicho, citando la Torá respecto de los ordenamientos del día de reposo. Éxodo 20:8 "Recuerda el día Shabbat, para apartarlo para Elohim. 9 Tienes seis días para laborar y hacer todo tu trabajo, 10 pero el séptimo día es Shabbat para YWHW tu Elohim. En él, no harás ninguna clase de


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trabajo – ni tú, tu hijo o tu hija, ni tu esclavo o tu esclava, ni tus animales de cría, y ni el extranjero viviendo contigo dentro de las puertas de tu propiedad. 11 Porque en seis días YWHW hizo el cielo y la tierra, el mar y todo en ellos; pero en el séptimo día El descansó. Por esta razón YWHW bendijo el día, Shabbat, y lo apartó para El mismo." Éxodo 35:1 "Moshe reunió a toda la congregación de los hijos de Yisra'el, y les dijo a ellos: "Estas son las cosas que YAHWEH les ha ordenado hacer: 2 En seis días se trabajará, pero el séptimo día será un día Kadosh para ustedes, un Shabbat de completo descanso en honor de YAHWEH. Cualquiera que haga algún tipo de trabajo en él será puesto a muerte. 3 No encenderán un fuego en ninguna de sus casas en Shabbat."" Éxodo 16:22 "En el sexto día ellos recogieron el doble del pan, dos omer por persona; y todos los ancianos de la asamblea vinieron y reportaron a Moshe. 23 El les dijo: "Esto es lo que YAHWEH ha dicho: 'Mañana es Shabbat Kadosh para YAHWEH. Horneen lo que quieran hornear; hiervan lo que quieran hervir; y lo que sobre, apártenlo y guarden para mañana.'" 24 Ellos lo apartaron hasta la mañana, como Moshe había ordenado; y no se pudrió ni tuvo gusanos. 25 Moshe dijo: "Hoy coman eso, porque hoy es Shabbat para YAHWEH – hoy no lo encontrarán en el campo. 26 Recójanlo seis días, pero el séptimo día es Shabbat – en ese día no habrá nada." 27 Sin embargo, en el séptimo día, algunos del pueblo salieron para recoger y no encontraron nada. 28 YAHWEH dijo a Moshe: "¿Hasta cuándo rehusarán observar mis mitzvot y mis enseñanzas? 29 Mira, YAHWEH les ha dado el Shabbat. Por esto El está proporcionando pan para dos días el sexto día. Cada uno de ustedes quédese donde está; nadie saldrá de su lugar el séptimo día." 30 Así que el pueblo descansó en el séptimo día."

Conforme a estos tres pasajes bíblicos que aparecen en la Torá, podemos ver claramente que, no se debía realizar ningún tipo de trabajo en el día sábado, que el día sábado era un día de pleno descanso y que además, ni siquiera se debía recoger comida en aquel día, ya que de lo contrario, la pena del incumplimiento de este mandamiento era la muerte, según lo que señala el segundo pasaje bíblico recién citado. Por lo tanto, en estricto rigor, el solo hecho de salir a buscar comida en sábado era causal de muerte, y que, por desgracia, fue lo que hicieron los discípulos del Mesías según lo leído en el libro de Mateo capitulo 12. Ahora, si por alguna razón, esta evidencia bíblica que nos señala que el quebrantamientos del día sábado era pagado con la muerte, nos parece un tanto exagerada, lo cierto es que, nuevamente, en la misma Torá se evidencia de un caso en el que un israelita comienza a recoger leña en Sabbat y que por ende, el mismo Todopoderoso señala que aquel hombre debía morir, es decir, en la Torá no solo se advierte acerca del sábado y la pena de no guardar este día, sino que además nos muestra el caso de alguien que quebrantó el sábado. Éxodo 15:32 "Mientras los hijos de Yisra'el estaban en el desierto, ellos encontraron un hombre recogiendo leña en Shabbat. 33 Aquellos que lo encontraron recogiendo leña lo trajeron a Moshe, Aharon y toda la congregación. 34 Ellos lo mantuvieron en custodia, porque no había sido decidido qué hacer con él. 35 Entonces YAHWEH dijo a Moshe: "Este hombre tiene que ser puesto a muerte; la congregación completa lo apedreará de muerte fuera del campamento." 36 Así que toda la congregación lo trajo fuera del campamento y lo apedrearon hasta que murió, como YAHWEH había ordenado a Moshe."

Entonces, según la Torá, en Shabbat no se debía buscar alimento, ni recoger cosas, es decir, estaba prohibido hacer aquellas dos cosas que hicieron los discípulos del Mesías, "buscar comida en sábado" y "recoger en sábado". Por lo tanto, la acusación que hicieron los fariseos al Mesías respecto de lo que estaban haciendo sus discípulos, según la misma Torá, era causal de muerte, por lo tanto, la pregunta es: si Jesús vino a cumplir la ley ¿Por qué no hizo que sus discípulos la cumplieran? es mas, también quisiera preguntar ¿Por qué Jesús no hizo que sus discípulos murieran, suponiendo que el vino a hacer lo que decía la Torá, o mejor dicho, todo lo que decía la Torá? La respuesta a estas preguntas están en las mismas palabras de Jesús cuando responde a los


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fariseos diciendo que, David y lo sacerdotes también quebrantaron el Sábado y aun así fueron sin culpa (Mateo 12:4-5). Si analizamos las palabras de Jesús, podemos ver que él en ningún momento se defendió de la acusación de los fariseos ni la negó, es decir, en ningún momento se ve al Mesías diciendo que lo que habían hecho sus discípulos, recoger espigas en día de reposo, no era quebrantar el Sábado, pues según la Tora, esa acción de recoger espigas si significaba quebrantar el Sábado, entonces, ¿Por qué los fariseos buscaron otra oportunidad para acusarle si el mismo Mesías no se defendió de sus acusaciones? Porque técnicamente, a pesar de que nuestro Mesías no se defendió de sus acusaciones, lo que dijo, ponía en evidencia que, hubieron momentos en la historia de Israel en que se perdonó el quebrantamiento del día Sábado, razón por la cual nombra a David y a los sacerdotes como quebrantadores del día sábado, al igual que sus discípulos, pero que, a pesar de ese quebrantamiento, todos ellos fueron sin culpa, ¿Me explico? Quiero decir, en primer lugar que, según las palabra de Jesús, el rey David, los sacerdotes y sus discípulos, fueron quebrantadores del día Sábado, pues al acusar a David y a los sacerdotes, no niega el hecho de que discípulos no lo quebrantaran, sino que confirma aun más el hecho de que, en efecto, estos si estaban quebrantado el Sábado, tal como lo hizo el rey David y lo hacían los sacerdotes, y segundo lugar que, una cosa era quebrantar el Sábado, y otra, era el hecho de no ser inculpado a pesar de haber quebrantado el sábado, en definitiva, el Sábado había sido quebrantado por sus discípulos (ni Jesús lo negó), y también Jesús apeló a la acusación del rey David y de los sacerdotes, en lugar de negar abiertamente el hecho de que sus discípulos no habían quebrantado el Sábado, o sea, Jesús no niega aquel quebrantamiento, sino que confirma aquel quebrantamiento, acusando también al rey David y a los sacerdotes. Respondiendo entonces a la pregunta que hicimos, ¿Por qué razón los fariseos buscaban otra oportunidad para acusar al Mesías y a sus discípulos de haber quebrantado el Sábado? Porque el quebrantamiento que hizo el rey David respecto del día Sábado, precisamente, tenía que ver nuevamente con los alimentos, de hecho, el mismo Mesías lo menciona diciendo que, el rey David quebrantó el día de rasposo por haber comido los "panes de la presencia" (1era Samuel 21:1-6), es decir, había un antecedente, fuera de la Torá, del cual Jesús da testimonio diciendo que este hablaba de un rey que fue perdonado por no haber respetado el Sábado, por lo tanto quisiera preguntar ¿Que tan especial o tan distinto era ese rey David que hizo que la pena de quebrantamiento del día reposo no le afectara, aun cuando el mismo era israelita y por ende también estaba sujeto a la ley que Dios le dio a Moisés? o mejor dicho ¿Por qué Dios no lo inculpó de aquel quebrantamiento cuando en la misma Torá Dios dictamina matar a un hombre por quebrantar el sábado? Por la sencilla razón, de que el rey David fue uno de los prototipos del Mesías, y si consideramos que el Mesías en si mismo era la ley de Dios prometida a Israel, entonces podemos entender aun más el hecho de que, justamente en una profecía mesiánica dicha por el profeta Isaías e inspirada en el pacto de Dios con David, se menciona el hecho de que el mismo Jesús sería la "ley de Dios" o el "pacto prometido al pueblo", es decir, el pacto de Dios con David le excluía de los mandamientos de la Torá, pues él era la prefigura del Mesías rey, así que, con eso se demuestra que el Mesías podía quebrantar el Sábado, al igual que David, pues el era descendiente directo aquel rey, y por lo tanto, si David fue perdonado de haber quebrantado el Sábado, el Mesías también seria perdonado por ello, razón por la cual, ni el Mesías, ni el rey David ni los discípulos del Mesías fueron inculpados por haber quebrantado el día sábado, pues tal como lo dijimos, el Mesías impondría sus propios mandamientos ya que él era la ley. Ahora bien, entendemos lo del rey David, y que el pacto de Dios con él lo hacía tan especial, pero, ¿Por qué el Mesías nombra también a los sacerdotes que quebrantaron el día Sábado?


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Tal como lo dice Jesús, los sacerdotes "quebrantan el sábado", así es, no habla de un quebrantamiento hecho alguna vez por algunos sacerdotes, como refiriéndose a ello en un evento ocurrido tiempo pasado, sino que lo dice en tiempo presente, "quebrantan el sábado", pero, específicamente dice que, según la Torá, que había sido escrita cientos de años antes del Mesías, señalaba que los sacerdotes "quebrantan el sábado", ¿Cómo puede ser eso, si la Tora había sido escrita con anterioridad al Mesías? es decir ¿Acaso el Mesías conjugó mal los tiempos, o bien nos señaló algo que no logramos visualizar? Lo que el Mesías señaló estaba correcto, es decir, los sacerdotes, aun en su tiempo, quebrantaban el sábado, y es que cuando el Mesías acusa a los fariseos de "no haber leído la Torá...", no estaba hablando de algún tipo de evento escrito en la Torá que daba cuenta del un quebrantamiento hecho por un grupo de sacerdotes en la antigüedad, sino que estaba hablando de algo especifico, un mandamiento, que hacía que los sacerdotes hasta los días del Mesías, quebrantaran el sábado y aun así fueran sin culpa, por esto el Mesías habla en tiempo presente diciendo que "en la Torá, los sacerdotes quebrantan el sábado y aun así son sin culpa", es decir, nuestro Mesías no habla de una historia contada en la Tora, ya que no existe ninguna historia así en ella, pero si existe un mandamiento que autoriza a los sacerdotes a quebrantar el sábado sin mencionar ningún tipo de culpa por ello. Dice la Torá a los sacerdotes: Números 28:9 "En Shabbat ofrezcan dos corderos en su primer año y sin defecto, con un galón de harina fina mezclado con aceite de oliva, y su ofrenda de libación. 10 Esta es la ofrenda quemada para todos los Shabbatot, aparte de la ofrenda quemada regular y su ofrenda de libación."

Luego de leer este texto la pregunta es, ¿Cómo es posible que el mismo Dios que haya dado la orden de guardar el sábado, luego le exige a sus sacerdotes que hagan sacrifico en aquel día? Y es que, aunque parezca extraño, lo cierto es que bajo un simple análisis podemos darnos cuanta de la contrariedad de esta ley, es decir, este mandamiento estaba hecho a propósito de esta manera, precisamente para que Israel estuviera bajo pecado y no encontrara una sacerdocio eficaz, y principalmente los sacerdotes, y de ello da cuenta el profeta Ezequiel diciendo que, Dios les había dado mandamientos no buenos, debido a los pecados que Israel cometió desde los días de Moisés. Ezequiel 20:16 "porque rechazaron mis ordenanzas, no caminaron por mis mitzvot y profanaron mis Shabbatot; puesto que fueron tras las imaginaciones de sus corazones.17 No obstante, Yo les perdoné la destrucción completa; Yo no los exterminé del todo en el desierto. 18 "Yo dije a sus hijos en el desierto: "No caminen en las costumbres de sus padres, no observen sus ordenanzas, no se profanen con ídolos. 19 Yo soy YAHWEH su Elohim, caminen en mis mitzvot, guarden mis ordenanzas y háganlas, 20 mantengan mis Shabbatot Kadoshim; y ellos serán una señal entre Yo y ustedes, para que sepan que Yo soy YAHWEH su Elohim." 21 "Ellos me provocaron, y sus hijos también se rebelaron contra mí. Ellos no caminaron en mis mitzvot ni observaron mis ordenanzas, para hacerlos, los cuales, si una persona lo hace, tendrá vida por medio de ellos; y ellos profanaron mis Shabbatot. Entonces Yo dije que derramaría mi furia sobre ellos y disiparía mi ira sobre ellos en el desierto. 22 Pero Yo retiré mi mano para que Mi Nombre no fuera profanado a la vista de las naciones que habían visto cuando Yo los saqué. 23 "También Yo levanté mi mano y juré a ellos en el desierto que los esparciría entre los Goyim y los dispersaría entre los países; 24 porque ellos no habían obedecido mis estatutos sino que habían rechazado mis mitzvot y profanado mis Shabbatot, y sus ojos se habían vuelto hacia los ídolos de sus padres. 25 Yo también les di leyes que no eran buenas y estatutos por los cuales no podían vivir, 26 y Yo los dejé que se profanaran por sus propias ofrendas, en el hecho que ofrecieron a sus hijos primogénitos, para poder llenarlos con repugnancia, para que ellos finalmente se dieran cuenta que Yo soy YAHWEH"


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Sé que para muchos esto es increíble, pero lo que testimonia Ezequiel diciendo que por voluntad de Dios, las ofrendas habían sido profanas delante de él, y que principalmente, Dios declara abiertamente que Él les había dado "mandamientos no buenos", finalmente era verdad, razón por la cual, nuestro Mesías santo señala diciendo que, aun en sus días, los sacerdotes profanaban el día sábado. Obviamente, todo esto tiene una intención más profunda de fondo, es decir, el Eterno no les dio mandamientos malos para que todos perecieran y el no los perdonara, no, sino que simplemente Dios le dio estos mandamientos contradictorios a Israel para que quedara bien en claro que, los sacerdotes que ordenaba la ley, es decir los levitas, y sus ofrendas, no eran del todo agradables para Dios, ya que el mismo lo propuso así, y esto con el fin de dar a entender que, en primer lugar, la ley dada a Moisés encerraba a los hombres bajo maldición ya que ni aun los sacerdotes eran del todo aceptos delante de Dios, y por ende sus ofrendas, es decir, dentro de la ley dada a Moisés, el único acto que justificaba al hombre, como el sacrificio de animales, estaba manchado por un incumplimiento lo que nos da a entender que aun en el acto de pedir perdón según los parámetros de la ley, esta era quebrantada, o sea, era un circulo vicioso de pecado, pues se pecaba incluso al pedir perdón por los pecados (parece que nuestro hermano Pablo no estaba tan equivocado al decir que todos los que están bajo la ley, están también bajo maldición (Gálatas 3:10)). Y en segundo lugar, para dar paso a un sacerdocio aun mas excelente, como lo es el sacerdocio de nuestro Mesías, ya no bajo la orden de Leví, sino bajo la orden de Melquisedec, cuya bendición es instaurada en el rey David, es decir, el rey David además de ser la simiente directa que llevaría al nacimiento del Mesías, era también una sacerdote según la orden de Melquisedec, pues Dios lo había ordenado así en el, razón por la cual, los profetas escribieron, no solo de un pacto viviente, Jesús, sino además dieron testimonio diciendo que este nuevo pacto, pertenecía a otra orden sacerdotal y que por ende era distinto. Insisto, era distinto porque la ley no podía justificar a los hombres ya que aun sus sacerdotes por mandato de Dios quebrantaban la ley dada a Moisés, y como dice aquella ley, si alguno quebranta uno de sus mandamientos, entones, aquel está bajo maldición, lo que significa en pocas palabras que, dios puso bajo maldición a los sacerdotes de Leví al imponerles hacer sacrificios en sábado, pero aun así, Dios no les inculpaba este pecado, pues de que era un pecado lo era, tal como lo dijimos, el tema es que Dios no se los imputaba como tal. Por esta razón, nuestro hermano Bernabé escribe a los hebreos de Jerusalén diciendo. Hebreos 5:1 "Porque todo sumo sacerdote tomado de entre los hombres, es constituido a favor de los hombres en lo que concierne a Dios para que presente ofrendas y sacrificios por los pecados; 5:2 pudiendo ser indulgente con los que son ignorantes y extraviados, puesto que él mismo está sujeto a debilidades; 5:3 y a causa de ellas, debe ofrecer sacrificios por los pecados, tanto por el pueblo como por sí mismo. 5:4 Y ninguno toma para sí el honor, sino el que, como Aarón, es llamado por Dios. 5:5 Así también el Mesías no se glorificó a sí mismo haciéndose Sumo Sacerdote, sino el que le dijo: Mi Hijo eres Tú, Yo te he engendrado hoy. 5:6 Como también dice en otro lugar: Tú eres sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec" Hebreos 7:12 "Porque cambiado el sacerdocio, necesariamente ocurre también un cambio de ley. 7:13 Porque aquel acerca del cual se dicen estas cosas, es de otra tribu, de la cual nadie sirvió al altar. 7:14 Porque es evidente que nuestro Señor surgió de Judá, una tribu sobre la cual nada habló Moisés acerca de sacerdotes. 7:15 Y es aún más evidente, si a semejanza de Melquisedec se levanta otro sacerdote, 7:16 el cual ha sido constituido, no según la ley de un mandamiento carnal, sino según el poder de una vida inmortal. 7:17 Pues se da testimonio: Tú eres Sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec. 7:18 Hay por una parte, la abrogación del mandamiento anterior, a causa de su debilidad e ineficacia, 7:19 porque la ley nada perfeccionó, sino que fue introducción a una mejor esperanza, por medio de la cual nos


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acercamos a Dios. 7:20 Y por cuanto no fue sin juramento, 7:21 porque los otros ciertamente sin juramento fueron hechos sacerdotes, pero Éste, con el juramento del que le dijo: Juró el Señor, y no se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre. 7:22 De igual manera Jesús ha sido constituido garante de un mejor pacto. 7:23 Y los otros sacerdotes llegaron a ser muchos, debido a que por la muerte no podían continuar. 7:24 Pero Éste, a causa de que permanece para siempre, tiene su sacerdocio intransmisible. 7:25 Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por medio de Él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos. 7:26 Porque tal Sumo Sacerdote nos convenía: Santo, inocente, incontaminado, separado de los pecadores, y exaltado por encima de los cielos; 7:27 que no tiene necesidad cada día, como los sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados y después por los del pueblo, porque hizo esto de una vez por todas ofreciéndose a sí mismo. 7:28 Porque la ley constituye sumos sacerdotes a hombres débiles, pero la palabra del juramento, que es después de la ley, constituye al Hijo, el cual es ya hecho perfecto para siempre."

Aquella "mejor esperanza", de la cual habla el versículo 19 del texto recién leído, obviamente se refiere a nuestro Mesías. Por otra parte, desde este punto de vista, ya no parecen tan descabelladas las palabras del apóstol Pablo al señalar que en la ley dada a Moisés nadie podía ser justificado y que esta encerraba todo bajo maldición, digo, es fácil decir que las palabras de Pablo fueron modificadas por los traductores de las escrituras y con ello descartar todo lo que nuestro hermano señaló en contra de aquella ley, sin embargo, debemos considerar que nuestro hermano Pablo en su tiempo daba por hecho que, todas sus cartas serian explicadas a los gentiles por aquellos grupos de judíos que se encontraban en las iglesias de estos, es decir, las palabras del apóstol Pablo no fueron disparatadas, sino mas bien, este no se detenía en explicaciones detalladas de sus ideas, sino que las concretaba simple para que los judíos y maestros explicaran sus palabras a los neófitos, lo cual nos hace entender que este daba por sabidas muchas de sus ideas y que por esa razón no se detenía en detalles, pues aunque estas atentaban directamente contra la ley dada a Moisés, lo cierto es que estaba en lo correcto. Romanos 3:19 "Pero sabemos que cuantas cosas dice la ley, las dice a los que están en la ley, para que toda boca sea cerrada, y todo el mundo quede expuesto al juicio de Dios; 3:20 porque por las obras de la ley ninguna carne será justificada delante de Él, porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado. 3:21 Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y los profetas: 3:22 la justicia divina mediante la fe de Jesús el Mesías, para todos los que creen (porque no hay distinción alguna, 3:23 por cuanto todos pecaron, y están privados de la gloria de Dios), 3:24 siendo justificados por su gracia, sin merecimiento alguno, mediante la redención que tienen en Jesús el Mesías; 3:25 a quien Dios ha propuesto públicamente como sacrificio expiatorio por su sangre a través de la fe, como evidencia de su justicia, a causa de haber pasado por alto, Dios en su paciencia, los pecados pasados, 3:26 con el propósito de demostrar su justicia en el tiempo presente, a fin de que Él siga siendo justo también cuando declara justo al que es de la fe de Jesús. 3:27 ¿Dónde está pues la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿De las obras? No, sino por la ley de la fe. 3:28 Sostenemos entonces que el hombre es declarado justo por la fe, sin las obras de la ley."

Según lo leído, cuando Pablo Y Bernabé hablan de un mejor pacto, de esta ley y justificación que viene por medio del Mesías, están diciendo que, en efecto, la ley dada a Moisés ya no tiene vigencia, sin embargo, antes de que se asusten por lo que digo, lo cierto es que a pesar de esa no-vigencia, el propósito de la ley en la actualidad, es netamente de conocimiento, es decir, de conocimiento de lo bueno y de lo malo. Digo esto, para que no se piense que deberíamos deshacernos de la Tora para siempre dado que ya no esta vigente, pues insisto, como norma legal, la ley dada a Moisés no esta vigente, pero nos sirve de referente para conocimiento.


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En el siguiente pasaje bíblico, nuestro hermano Pablo explica que, así como el pecado entró al mundo por un hombre y que gracias al Mesías aquella transgresión tuvo un remedio, pues concreto el don de la salvación dado por el Eterno, así también en Israel entro la ley dada a Moisés para que todos estuvieran bajo pecado y que todos fueran salvados por el Mesías, confirma el hecho de que todos los que están bajo la ley, están bajo maldición, no solo porque el propósito principal de esta ya se hubo cumplido con la llegada del Mesías, sino que también por el hecho de que existe esta contradicción en los mandamientos de los sacerdotes que ya hemos expuesto. Romanos 5:12 "Por tanto, como el pecado entró en el mundo por medio de un hombre, y por medio del pecado la muerte, así también la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron. 5:13 Porque hasta la ley, había pecado en el mundo, pero si no hay ley, no se toma en cuenta el pecado. 5:14 No obstante, la muerte reinó desde Adam hasta Moisés, aun sobre los que no pecaron en la semejanza del delito de Adam el cual es figura del que había de venir. 5:15 Pero el don no es como la transgresión. Porque si por la transgresión de uno murieron los muchos, mucho más abundó la gracia de Dios para los muchos, y el don por la gracia de un hombre: Jesús el Mesías. 5:16 Pero con el don no sucede como con el juicio trasmitido por medio de aquel uno que pecó; porque ciertamente el juicio surgió de una sola transgresión para condenación; pero el don gratuito vino a causa de muchas transgresiones para justificación. 5:17 Porque si por la transgresión del uno, la muerte reinó por medio del uno, mucho más reinarán en vida por uno, Jesús el Mesías, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia. 5:18 Por tanto, así como por medio de una transgresión vino la culpa a todos los hombres para condenación, así también, por medio de un acto de justicia, vino la gracia a todos los hombres para justificación de vida. 5:19 Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así por la obediencia de uno los muchos serán constituidos justos. 5:20 Así, la ley entró para que el pecado abundara; pero donde el pecado abundó, sobreabundó la gracia; 5:21 para que así como reinó el pecado para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna, mediante Jesús el Mesías, Señor nuestro."

Ahora bien, tal como lo mencionamos, no todo lo que señala nuestro hermano Pablo es una crítica destructiva a la ley dada a Moisés, ya que el mismo declara abiertamente que, la ley en sí misma no es pecado, pero si deja bien en claro que por medio de esta llegaba el pecado, con el fin de que el hombre no fuera justificado por hacer la ley, sino para que fuera justificado en un sacerdocio mas excelente, que fue el sacerdocio de nuestro Mesías y su ley. Romanos 7:1 "¿Ignoráis, hermanos (porque hablo a los que conocen la ley), que la ley se enseñorea del hombre mientras vive? 7:2 Porque la mujer casada está ligada por la ley al marido que vive, pero si el marido muere, queda libre de la ley del marido. 7:3 Así que, mientras viva el marido, se la llamará adúltera si llega a ser de otro varón, pero si muere el marido, es libre de la ley, hasta el punto de no ser adúltera si llega a ser de otro varón. 7:4 Así también vosotros, hermanos míos, se os hizo morir a la ley mediante el cuerpo del Mesías, para que llegarais a ser de otro, del que fue resucitado de entre los muertos, a fin de que diéramos fruto para Dios. 7:5 Porque mientras estábamos en la carne, las pasiones de los pecados eran activadas en nuestros miembros por la ley, a fin de dar fruto para muerte. 7:6 Pero ahora hemos sido libertados de la ley, habiendo muerto a lo que nos ataba; de modo que sirvamos en novedad de espíritu, y no en vejez de letra. 7:7 ¿Qué diremos entonces? ¿La ley es pecado? ¡De ninguna manera! Más bien, no conocí el pecado sino por medio de la ley, y ciertamente no habría conocido la codicia, si la ley no dijera: No codiciarás. 7:8 Y el pecado, aprovechando la ocasión por medio del mandamiento, produjo en mí toda clase de codicia; pero sin la ley el pecado está muerto."

Por todo esto, finalmente nuestro hermano Pablo señala que el fin de la ley es Cristo, es decir, el propósito, la finalidad de ésta, no era perpetuarse ni proyectarse en el tiempo por medio del Mesías, sino mas bien, establecer por medio de su palabra la llegada de este, es decir, una vez que el Mesías llegase, aquella ley ya habría cumplido su propósito, por lo tanto, es lógico pensar,


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confirmado por las profecías, que debería existir otra ley, distinta a la anterior, pues si el propósito de la primera ley era la llegada del Mesías, quisiera preguntar ¿De qué sirve restaurar aquella palabra cuyo propósito ya fue cumplido, acaso debía llegar otro Mesías, como para justificar el levantamiento de otra Tora, o la restauración de esta? Por supuesto que no, no hay otro Mesías, por lo tanto, la ley dada a Moisés llega a su fin con nuestro Mesías, razón por la cual, no solo Pablo lo habla de esta forma sino que también los evangelistas lo confirman diciendo que "la ley y los profetas profetizaban y eran hasta Juan (el bautista)", es decir, no solo profetizaron hasta Juan, la ley y los profetas, sino que también su durabilidad llegaba hasta el Mesías. Romanos 10:4 "Porque el propósito de la ley es el Mesías, para justicia a todo el que cree." Mateo 11:13 "Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan," Lucas 16:16 "La ley y los profetas llegaron hasta Juan. Desde entonces el reino de Dios es proclamado, y cada uno entra en él con violencia."

Ahora bien, ¿todos los israelitas han dejado de ser considerados por Dios, por el hecho de haberse cumplido la Torá? no, Israel sigue siendo considerado por Dios, pero no por merito de guardar la Torá sino por el simple hecho de que Dios hizo una elección, no para salvación y justificación garantizada a todos ellos, sino mas bien por una elección para llamamiento, es decir, fue llamado como instrumento de Dios, pues ya hemos visto como la misma Torá no justifica al hombre, así que, ésta también es la razón por la cual se confirma que todos los que aun están bajo la ley, están bajo maldición, obvio, pues "el fin de la ley es Cristo", quiere decir que habiendo llegado Cristo, junto con sus leyes y su sacerdocio, la ley dada a Moisés ya no puede justificar a los hombres, lo que significa que, no pueden haber dos leyes distintas que justifiquen a los hombres corriendo al mismo tiempo, como lo vimos en el análisis del "sermón del monte", y a diferencia de la Torá, el Eterno señala claramente que Jesús es el amado y en quien se complace, algo que por supuesto no dice de la ley dada a Moisés. Romanos 11:25 "Porque no quiero hermanos que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes acerca de vosotros mismos: que un endurecimiento parcial ha ocurrido a Israel, hasta que entre la plenitud de los gentiles. 11:26 Y así todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sión el Libertador, Que quitará de Jacob la impiedad; 11:27 Y éste será mi pacto con ellos, Cuando quite sus pecados. 11:28 Ciertamente, en cuanto al evangelio, son enemigos por causa de vosotros, pero en cuanto a la elección, son muy amados por causa de los padres. 11:29 Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios. 11:30 Porque así como vosotros en un tiempo fuisteis desobedientes a Dios, pero ahora, en la desobediencia de ellos, habéis alcanzado misericordia; 11:31 así también ahora éstos fueron desobedientes, para que por la misericordia mostrada a vosotros, ellos también alcancen misericordia. 11:32 Porque a todos encerró Dios en desobediencia, para tener misericordia de todos."

Por esto Pablo señala que la ley dada a Moisés era una maldición, pues no justificaba a nadie ya que aun sus sacerdotes, los levitas, eran pecadores delante de Dios ya que incluso al momento de pedir perdón, pecaban. Insisto, esto no es una mala traducción intencional de parte de los traductores de las escrituras, por el contrario, son las palabras reales de nuestro hermano Pablo, y es que, insisto, él no se detenía en explicar con detalle sus ideas ya que daba por hecho que los judíos que habían en las iglesias a las cuales el escribía, le señalarían a los gentiles las explicaciones de sus palabras.


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Gálatas 3:10 "Porque todos los que son de las obras de la ley están bajo maldición. Porque está escrito: Maldito todo el que no permanece en todas las cosas que han sido escritas en el libro de la ley, para hacerlas. 3:11 Y es evidente que por la ley nadie es declarado justo delante de Dios, porque: El justo vivirá por la fe. 3:12 Pero la ley no es por fe, sino: El que las haga, vivirá por ellas. 3:13 El Mesías nos libertó de la maldición de la ley, hecho maldición por nosotros (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero),"

De hecho nuestro hermano Pablo señala que, a pesar de ya no estar bajo la ley dada a Moisés, no debemos incurrir pecado, no porque no existiera ley alguna en el mundo, pues ya hemos declarado que el Mesías impuso sus propios mandamientos, sino que, no debemos caer en pecado por el hecho de que ahora somos renacidos según el bautismo en el nombre de Jesús, digo esto, por si alguien piensa que, al no estar vigentes los mandamientos de la Torá, el mundo entero estaría justificado para vivir eternamente en pecado y por ende en condenación, corrupción y caos, como queriendo decir que si no es por la ley que le fue dada a Moisés todo el mundo estaría perdido. No hermanos, a pesar de no estar en vigencia, los mandamientos que debemos considerar son los impuestos por el Mesías, y nuestra conversión debe ser en él y no en la ley dada a Moisés. Romanos 6:1 "¿Qué pues diremos? ¿Permanezcamos en el pecado para que la gracia abunde? 6:2 ¡De ninguna manera! porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él? 6:3 ¿No sabéis que todos los que fuimos bautizados en Jesús el Mesías, fuimos bautizados en su muerte? 6:4 Por tanto, fuimos sepultados juntamente con Él para muerte por el bautismo, para que así como el Mesías fue resucitado de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida. 6:5 Porque si hemos llegado a ser injertados en la semejanza de su muerte, también lo seremos en la de la resurrección; 6:6 sabiendo esto: que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con Él, a fin de que el cuerpo del pecado fuera desactivado para no servir más al pecado. 6:7 Porque el que murió, ha sido libertado del pecado. 6:8 Y si hemos muerto con el Mesías, creemos que también viviremos con Él; 6:9 sabiendo que el Mesías, habiendo sido resucitado de entre los muertos, ya no muere: la muerte no se enseñorea más de Él. 6:10 Porque en cuanto a que murió, al pecado murió una vez por todas, pero en cuanto a que vive, para Dios vive. 6:11 Así también vosotros, consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Jesús el Mesías. 6:12 No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, para que obedezcáis a sus concupiscencias; 6:13 ni tampoco presentéis vuestros miembros como instrumentos de iniquidad para el pecado, sino presentaos vosotros mismos a Dios como viviendo fuera de los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia. 6:14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros, pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. 6:15 ¿Entonces, qué? ¿Pequemos, pues no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? ¡De ninguna manera! 6:16 ¿Acaso no sabéis que a quien os presentáis como siervos para obedecerle, siervos sois de aquel a quien obedecéis, ya sea del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia?"

Ahora bien, ya hemos demostrado como, desde una análisis que va desde la Torá al nuevo testamento, la ley dada a Moisés fue más bien escrita para encerrarlos a todos bajo pecado, pues aun por orden de Dios, ni los sacerdotes levitas escapaban al quebrantamiento del día sábado, y que, ese fue uno de los argumentos que utilizó Jesús para que el quebrantamiento de sus discípulos no les fuera considerado como pecado, ahora bien, hay una pregunta que es fundamental en este aspecto, y que se nos ha quedado en el tintero, y es: si tanto Jesús como los levitas quebrantaron el sábado y no les fue tomado por pecado, ¿Porque según las palabras de los apóstoles, el sacerdocio de Jesús es mas excelente que el de Leví, llegando a decir incluso que los sacerdotes levitas eran imperfectos a diferencia del Mesías (hebreos 726-28), sabiendo que en ambos sacerdocios fue quebrantado el sábado? Es decir, ¿Cual era entonces la diferencia entre ambos sacerdocios, y porque el de Jesús (Melquisedec) es mejor? muy simple.


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El hecho de que el sacerdocio del Mesías sea más excelente que el sacerdocio levita, se debe, principalmente a que así estaba dicho por el Todopoderoso, es decir, nuestro Padre Eterno determino despreciar el sacerdocio levítico, o mejor dicho, sus ofrendas, y considerar las del sacerdocio dado a su hijo en la orden sacerdotal de Melquisedec, para que todos, judíos y gentiles, quedasen bajo pecado y que por ende la única salvación viniera por el Mesías y no por la ley dada a Moisés. Ahora bien ¿donde está escrito eso, o desde que pasaje bíblico se puede concluir esta idea? Desde las mismas palabras del Mesías, cuando les dijo a los fariseos, "Si supierais que significa misericordia quiero y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes", en el momento en que estos lo acusan de quebrantar el sábado, a él y a sus discípulos. Entonces, según lo dicho por Jesús debemos realmente preguntarnos ¿Qué significa eso de "misericordia quiero, y no sacrificio"? Significa precisamente que el Eterno, en lugar de considerar los sacrificios, que obviamente se hacían por medio de los levitas, él prefería la misericordia, tanto la hecha por Él, como la misericordia que pudieran hacer los hombres, es decir, todo tipo de misericordia, justamente, como la que estaba haciendo Jesús en aquel sábado, en lugar de hacer sacrificios como los demás sacerdotes. Sin embargo, esta idea no nace de Jesús, sino de su ascendiente, el rey David, lo cual confirma nuevamente que, el Eterno respaldaba los actos hechos y dichos por David, según el pacto que Dios hizo con él, en lugar de respaldas los sacrificios sacerdotales. Salmos 40:6 "Sacrificios y ofrendas de grano Tú no quieres; Más bien, Tú has preparado un cuerpo para mí; ofrendas quemadas y ofrendas por el pecado, Tú no demandas. 7 Entonces dije: "¡He aquí, Yo vengo! En el rollo de la Toráh está escrito referente a mí. 8 Hacer tu voluntad, O mi Elohim, es mi alegría;"

Según lo leído, quisiera preguntar ¿Por qué el rey David declara hacer la voluntad de Dios, señalando que el Padre Eterno no demandaba sacrificios, cuando eso era justamente lo que decía la Torá?, es decir, la misma Torá decía que esos sacrificios son los que demandaba Dios, por lo tanto ¿Porque el rey David dice eso lo que Dios desea? El rey David, no se estaba contradiciendo a sí mismo, ni a la palabra de Dios, sino que estaba diciendo abiertamente que la voluntad de Dios era por sobre lo que estaba escrito en la Torá, tal como lo señalaron los apóstoles. Salmos 51:16 "Porque Tú no quieres sacrificios, o yo te los daría; Tú no tienes placer con ofrendas quemadas. 17 Mi sacrificio a Elohim es un ruaj quebrantado; Elohim, Tú no rechazas un corazón contrito y humillado"

Como Dios tenía un pacto con David, muchas de las palabras del rey apuntaban directamente al Mesías santo, así que, estos salmos fueron la inspiración para algunos profetas que, al igual que Isaías, profetizaban acerca del Mesías basados en el pacto de Dios con David y su promesa de levantara un Mesías desde su simiente. Por esta razón además, es inaudito creer que la ley del Mesías era la ley dada a Moisés, pues las profecías no lo indicaban así, ya que desde los días del salmista David, las profecías consideraron una ley según pacto con él rey, y no según el pacto de Dios con Moisés. De hecho, las palabras del profeta Oseas, confirman lo dicho por el apóstol Pablo en relación a la ley dada a Moisés, cuando señala que lo que realmente desea Dios, es el conocimiento, en lugar de los sacrificios, es decir, en lugar del cumplimiento de la ley Mosaica, Dios prefería que esta quedara como fuente de conocimiento en lugar de quedar como una norma, y es más, confirma la idea de Pablo al señalar que al igual que Adán, así también pecó Israel. Oseas 6:6 "Porque fidelidad quiero, y no sacrificios, Conocimiento de Dios, y no holocaustos. Ose 6:7 Ellos, como Adam, quebrantaron mi pacto, Allí me fueron infieles."


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Jeremías 9:24 "más bien, el ostentador que se jacte en esto: que él me entiende y me conoce – que Yo soy YAHWEH, que ejercito la misericordia, justicia y rectitud en La Tierra porque estas cosas son mi placer," dice YAHWEH."

Ahora bien, además de estas palabras, es el profeta Isaías, nuevamente, quien además de hablar profecías inspiradas en el pacto de Dios con David, señala que en el día sábado, lo que no se puede hacer son obras malas, es decir, Isaías además de justificar a los gentiles en el día sábado, y por ende añadir nuevos preceptos a este mandamiento, tal como lo hizo el Mesías, señala también diciendo que lo que estaba prohibido hacer en sábado eran las injusticias contra los extranjeros, dejando la pregunta abierta, ¿Entonces realmente se podían hacer cosas buenas, o bien, tener misericordia en día sábado? Por supuesto que sí, lo que pasa es que eso no lo decía la ley dada a Moisés, pero si lo decían los profetas, razón por la cual hemos señalado que Jesús finalmente quebrantó la ley dada a Moisés, para dejar en claro que ahora, en su ministerio sacerdotal había otro pacto, basado en los salmos y los profetas, tal como el mismo lo señala. Lucas 24:44 "y les dijo: Estas son mis palabras, que os hablé estando aún con vosotros: que tenían que cumplirse todas las cosas que habían sido escritas acerca de mí en la ley de Moisés, y en los profetas, y en los salmos. 24:45 Entonces les abrió la mente para que entendieran las Escrituras, 24:46 y les dijo: Así está escrito, que el Mesías padecería y se levantaría de entre los muertos al tercer día," Isaías 56:2 "¡Cuán bienaventurado es el hombre que hace esto! El hijo de Adam que se aferra a ello, Que guarda el shabbat, para no profanarlo; Que guarda su mano de toda obra mala. 56:3 Y el hijo de tierra extraña que se ha unido a YHVH, no hable diciendo: ¡De seguro YHVH me excluirá de su pueblo! Ni diga el eunuco: ¡Árbol seco soy! 56:4 Porque así dice YHVH: A los eunucos que guardan mis shabbatot, Que escogen lo que me agrada, Y son fieles a mi pacto; 56:5 Les daré cabida en mi Casa, Y dentro de mis muros Un nombre mejor que el de hijos e hijas: Memorial perpetuo que no será cortado. 56:6 Y los extranjeros que se unen a YHVH para servirlo, Para amar el nombre de YHVH y ser sus servidores; Que guardan el shabbat sin profanarlo y son fieles a mi pacto, 56:7 Haré que sean conducidos a mi Santo Monte, Y se alegren en mi Casa de oración. Sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos sobre mi altar, Porque mi Casa será llamada Casa de oración para todos los pueblos."

Según lo leído, quisiera preguntar ¿Por qué Isaías señala diciendo que los sacrificios y las ofrendas si serían aceptos ante el Eterno, contrario a lo que dijeron David y los profetas? Porque el contexto nos está hablando de aquellos que hacen cosas buenas en sábado, insisto, lo que Isaías señala es el hecho de no hacer cosas malas en sábado, dejando espacio a la realización de las cosas buenas que, a diferencia de la ley dada a Moisés, que señalaba que en sábado no se podía hacer nada, ni bueno ni malo, por esta razón, Dios no considera las ofrendas u sacrificios de los levitas, pues el sacerdocio levítico estaba bajo la ley dada a Moisés, y en cambio, si considera los sacrificios señalados por Isaías, ya que Isaías nos habla diciendo que en sábado si se pueden hacer cosas buenas, coincidiendo entonces con el rey David y los profetas cuando señalan que Dios prefería la misericordia en lugar del sacrificio, pues aunque el sacrificio no es un acto de maldad, lo cierto es que tampoco es un acto netamente bueno ya que, técnicamente, quebranta el sábado, y en cambio la misericordia no es un acto de maldad, ni un acto neutral, sino que es netamente bueno. Ahora bien, ¿Por qué Isaías si autoriza los sacrificios y el hecho de hacer cosas buenas en sábado si eso no era lo que decía la Torá? Porque técnicamente los profetas en su ministerio, al ser las prefiguras del Cristo, no estaban sujetos a la ley dada a Moisés, sino que su misión era traer el juicio a Israel por causa de los pecados del pueblo, y por ende, testimoniar que la ley estaba


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siendo quebrantada y anulado el pacto, ante lo cual, se hacía necesario el profetizar otro pacto, distinto al anterior. Pero ese tema, ya es "harina de otro costal", y aunque también nos compete saberlo, de hecho más adelante haremos un estudio al respecto de que fue lo que inspiró a los profetas en sus actos y sus profecías, que por cierto no fue la ley dada a Moisés, lo cierto es que por ahora debemos tomar en cuenta que las palabras de los profetas, y muchas de sus acciones, estaban fuera de los ordenamientos de la ley Mosaica, algo muy similar a lo que pasaba con Jesús, quien, al no ser de la tribu de Leví y aun así ser considerado sacerdote, quedaba entonces bajo otro sacerdocio, el de la orden de Melquisedec, y por ende fuera de la ley dada a Moisés, ya que ésta solo reconocía a los sacerdotes de la tribu de Leví, es decir, la misma ley de Moisés deja fuera al Mesías de aquellas normas y estatutos ¿Cómo entonces el Mesías podría estar bajo la ley dada a Moisés si ésta lo excluía de su ministerio sacerdotal? "Misericordia quiero y no sacrificio", se refiere entonces a que el Eterno considera la misericordia en día sábado en lugar de los sacrificios hechos en este día. Por esta razón, los fariseos, a pesar de ver con sus propios ojos cómo los discípulos de Jesús quebrantaban el sábado, buscaron otra razón para condenar al Mesías, ya que con esas palabras quedaron anulados sus deseos de condenarle, a él y a sus discípulos, pues ellos sabían que sus palabras tenían un respaldo profético. Esta es la razón, además, por la cual los fariseos le pregunta al Mesías "¿Es licito sanar en sábado?", ante lo cual el Mesías los deja en ridículo sabiendo que la repuesta era de hecho un rotundo, si. Es este acto, el que los judíos toman para poder acusarle de quebrantar el sábado, pues insisto, la ley dada a Moisés señalaba estrictamente que en aquel día no se debía hacer nada. Mateo 12:9 Saliendo de ese lugar fue a la sinagoga. 10 Había allí un hombre con una mano seca. Buscando una razón para acusarlo de algo, ellos le preguntaron: "¿Es permitido sanar en Shabbat?" 11 Pero El contestó: "Si ustedes tienen una oveja que se cae en un pozo en Shabbat, ¿quién de ustedes no la agarra, y la saca? 12 ¡Cuánto mucho más valioso es un hombre que una oveja! Por lo tanto, lo que es permitido en Shabbat es hacer el bien." 13 Entonces le dijo a aquel hombre: "Extiende la mano." El hombre la extendió, y le fue restaurada tan sana como la otra. 14 Pero los Perushim salieron de allí, y empezaron a tramar cómo podrían destruir a Yahshúa. 15 Percatado de esto, se fue del lugar. Mucha gente le siguió y los sanaba a todos,

Si bien es cierto, en este evangelio se señala que los fariseos o guardianes de la ley, insistieron en las sanidades que hacia Jesús para tener un argumento con que condenarle, a pesar de lo que señalaban las palabras de los profetas, cuando finalmente lo lograron, la escritura no señala mayormente que con estos actos de sanidades el Mesías estaba quebrantando la ley, sin embargo, en el evangelio de nuestro hermano Juan se señala claramente que, la acusación de los fariseos era precisamente testificar que Jesús había quebrantado el día sábado y no solo eso sino que el mismo escritor, Juan, señala que con aquellas sanidades que nuestro Mesías realizaba el día sábado, estaba quebrantando la ley dada a Moisés, es decir, en este evangelio, Juan en lugar defender al Mesías, confirma lo que habían dicho los fariseos ¿Por qué? Porque técnicamente, en el día sábado solo estaba autorizado el descanso, y los sacrificios de los sacerdotes levitas que, a pesar de ser ordenados por Dios, sus acciones de sacrificar en aquel día igualmente estaban reconocidas como un quebrantamiento de este. Juan 5:15 "El hombre se fue, y le dijo a los Yahudim que fue Yahshúa el que le había sanado; 5:16 y, por cuenta de esto, los Yahudim comenzaron a importunar a Yahshúa, porque El hacía estas cosas en Shabbat. 5:17 Pero El les respondió: "Mi Padre ha trabajado hasta ahora, y Yo también estoy trabajando." 5:18 Esta respuesta hizo que los Yahudim tuvieran más intenciones de matarle; no sólo El violaba el Shabbat, sino que también proclamaba que YAHWEH era su propio Padre, El declaraba igualdad con YAHWEH."


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Queda claro entonces, según lo señalado en este evangelio, que al realizar sanidades Jesús estaba "violando el pacto" abiertamente, eso es innegable, lo cual nos hace entender aun más el sentido de la frase "no he venido a abrogar la ley... ...sino a cumplir", ya que, al ver como Jesús quebrantaba el día sábado, podemos darnos cuenta que lo que Jesús vino a cumplir no fueron los mandamientos escritos en la ley, sino lo que las profecías decían de él en la Torá, tal como lo hemos visto. Ahora bien, es necesario aclarar este punto que nos muestra como la misma escritura da cuenta de un Jesús que quebranta al día sábado, porque, según el evangelio de nuestro hermano Mateo, antes de ejercer la sanidad en aquel día de acuerdo a lo que le habían dicho los fariseos, Jesús emite una frase que hasta el día de muy pocos han sido capaces de entender, que es: "El hijo del hombre, es señor del día de reposo"... ...¿Qué significa esa frase? ¿Que Jesús vino a imponer la sábado como día de reposo, o que es él quien manda al día de reposo? Según la iglesia adventista del séptimo día, ésta frase significa que Jesús confirmó el día de reposo y que aun mas, el mismo se sujetó al día de reposo, lo que obviamente y según lo que hemos visto hasta el momento, es contrario a lo que dice la escritura, pues ya hemos visto como el señor quebrantó el día sábado, por lo tanto, ¿Cómo pueden decir que Jesús no quebrantó el día sábado y además se sujeto a él, si Jesús en lugar de señalar que él es "siervo del día sábado", se consideró a sí mismo "Señor del día sábado"? ¿Me explico? Quiero decir, ¿Acaso alguna vez ha existido un señor que se someta a sus siervos, no es más bien al revés, no es acaso el siervo quien se somete al Señor? Por supuesto, es ridículo pensar que el Señor se someta al siervo, razón por la cual entendemos aun más el porqué Jesús no se sometió al día sábado, pues él es "Señor del sábado" y no "siervo del sábado", es decir, el sábado no lo sometía a él; el sábado no le decía a Jesús que hacer o que "no hacer", por más que este se instituyó en la ley dada a Moisés (digo esto porque el día sábado es mucho más antiguo que la ley dada a Moisés), sino por el contrario, Jesús le decía al sábado que era lo que se podía hacer y qué era lo que no se podía hacer pues el mandaba al día sábado, y no el sábado a él. Ahora bien, ya hemos visto como Jesús quebrantó el sábado, según lo que señala la misma escritura, y también hemos visto como él justifica aquella acción poniéndose en un lugar superior al sábado, pero la pregunta que quisiera hacer, o mejor dicho la reflexión que quiero transmitir a través de este análisis es: una cosa es que Jesús quebrante la ley dada a Moisés, sin embargo ¿Eso significa que el estaba por sobre aquella ley que, recordemos fue impuesta por el Padre? Por supuesto, pues el solo hecho de imponer su criterio y su persona por sobre lo que decía la ley dada a Moisés, no solo era una violación sino un desafío directo a esta, y no por sí solo, sino que además estaba apoyado por la misma Tora, así es, pues el origen del día sábado o bien, el cumplimiento de este día tiene un comienzo que está fuera de la ley Mosaica y que "causalmente" viene desde los días de Noé, es decir, incluso mucho antes de Abraham. SI bien es cierto que, la escritura misma señala que luego de la creación, Dios "descanso el séptimo día", la pregunta que nos queda por hacer es ¿Por qué nuestro Mesías señaló que nuestro Padre aun trabajaba? Juan 5:15 "El hombre se fue, y le dijo a los Yahudim que fue Yahshúa el que le había sanado; 5:16 y, por cuenta de esto, los Yahudim comenzaron a importunar a Yahshúa, porque El hacía estas cosas en Shabbat. 5:17 Pero El les respondió: "Mi Padre ha trabajado hasta ahora, y Yo también estoy trabajando. 5:18 Esta


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respuesta hizo que los Yahudim tuvieran más intenciones de matarle; no sólo El violaba el Shabbat, sino que también proclamaba que YAHWEH era su propio Padre, El declaraba igualdad con YAHWEH.[47] Jua 5:19 Por lo tanto, Yahshúa les dijo esto: "¡Sí, en verdad les digo que el Hijo no puede hacer nada por sí solo, sino sólo lo que ve al Padre hacer; cualquier cosa que el Padre hace, el Hijo también las hace![48] Jua 5:20 Porque el Padre ama al Hijo, y le enseña todo lo que El hace; y le enseñará aún mayores cosas que estas, de modo que ustedes se sorprenderán. Génesis 2:2 "En el sexto día Elohim terminó con sus trabajos los cuales El había hecho, así que El descansó en el séptimo día de todos sus trabajos que El hizo."

Obviamente, esto no es una contradicción de parte de nuestro Mesías, sino que más bien, es una palabra, o bien, un mensaje que nos quiso decir nuestro Mesías respecto de él y del día sábado, de forma indirecta es decir, con esto el Mesías estaba señalando que, técnicamente el sexto día de la creación aun estaba en vigencia, pues, aunque suene difícil de creer lo cierto es que eso es mas lógico de lo que podríamos pensar ¿Por qué? Porque nuestra mente occidental nos encierra en el concepto de que "un día, es igual a 24 horas y nada más", sin embargo, la misma escritura señala que "para el Eterno, un día son como mil años y mil años como un día" es decir, dentro del "tiempo de Dios", mil años aquí en la tierra, vienen a ser como un día para Él. Por lo tanto, si consideramos esta lógica podríamos decir, que "el tiempo para Dios pasa mucho más lento que para los hombres" (por decirlo de alguna forma, ya que a nuestro Padre celestial no le afecta nuestro tiempo, ni nuestra realidad material, pues Él está por sobre todas estas cosas), entonces, desde esta perspectiva podemos encontrar un razonamiento lógico en las palabras de nuestro Mesías, pues si él está diciendo que "Dios aun está trabajando", podemos deducir dos cosas: la primera, es que Dios aun no ha descansado, o bien, aun no ha vivido el "sábado" como lo señala el libro de génesis, y segundo, que esta también es la razón por la cual el capítulo 2 de génesis retoma la historia de la creación desde el día sexto y no desde el día séptimo, ¿Me explico? el capítulo 2 de génesis retoma el relato de la creación desde el día en que fue creado el hombre, es decir, desde el día sexto, dando a entender que el capitulo 1 no es más que una introducción del relato de la creación. Sé que todo esto puede sonar un tanto extraño, ya que son teorías que normalmente no se escuchan en las congregaciones, pero, insisto, todo tiene su lógica, pues tal como hemos visto, desde el capítulo 2 de génesis, el relato de la creación comienza nuevamente desde el día sexto, y aun mas, nunca mas vuelve a mencionar que "Dios descansó", lo que nos da a entender el por qué nuestro Mesías aseguraba que el Padre aun no había descansado, pues técnicamente, desde el segundo capítulo de Génesis el Padre seguía trabajando desde aquel día sexto, pues el día sexto, más que un día compuesto de 24 horas, es más bien un periodo de tiempo en donde Dios trata con el hombre que, una vez formado según la voluntad de Dios, este puede entrar el descanso. Ahora bien, además de entender que, en lo días de Jesús el "Padre aun no había descansado", ¿Que más nos quiso decir nuestro Mesías con esto? Muy simple, pues si el Padre aun no descansaba, además de darnos a entender que "espiritualmente" aun “vivía el día sexto”, también nos da a entender que el descanso, o bien "el verdadero descanso de Dios", aun no había llegado. Así es, el día sábado verdadero aun no había llegado para Dios, y por ende, para los hombres. Eso es lo que quiso decir nuestro Mesías, algo que, ante los ojos de los estudiosos de la ley, era una locura sobre todo considerando el nivel de idolatría que estos tipos le tenían a la ley, lo cual no tenía sentido ya que Israel durante muchos años vivió quebrantando la ley Mosaica, razón por la cual, el mismo evangelio de Juan señala que los fariseos querían matarle, pues si esto que acabo


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de señalar fue extraño y hasta difícil de asimilar para nosotros, cuanto más lo fue para los amantes de la ley de Moisés. Y es que ésta es la razón por la cual Jesús se impone por sobre el día sábado, o por lo menos por sobre el día sábado que mencionaba la ley de Moisés, y no el día sábado que mencionaban los profetas, de hecho los versículo del 19 al 20 señalan que todo lo que hacía Jesús estaba respaldado por el Padre, es decir, Jesús tenia la autoridad suficiente para estar por sobre la ley de Moisés, ya que no sólo lo hacía, sino que el mismo testifica diciendo que todas estas cosas las había aprendido del Padre, por lo que confirma sus palabras al decir que su Padre hasta hoy trabajaba”, es decir, si Jesús no se sometió al día era porque el Padre tampoco lo hacía, y no porque él o el Padre fueran malos, sino porque el mismo Dios señaló diciendo que “él les había dado una ley que no era buena” (Ezequiel 20:25), es decir, lo malo no era lo que hacia el mesías sino que lo malo era aquella ley dada a Moisés. Según Jesús entonces, el verdadero día sábado aun no había llegado, ya que ni él ni el Padre descansaban, pero, ¿Donde podemos encontrar un respaldo bíblico que abale estas palabras? Precisamente, en la figura de Noé, pues Noé significa "consuelo" y "descanso", es decir, si el "consuelo" llegó a los hombres luego de la muerte y resurrección del Mesías santo, también el descanso llegaría luego de su resurrección. Por lo tanto, la figura de Noé es la que profetiza de forma perfecta el cómo llegaría la salvación a toda la humanidad, luego de la caída de Adán, es decir, Noé realiza un acto que es muy similar a la figura del Mesías respecto de una salvación mundial. Está claro, mientras el Mesías estuvo vivo en Israel, antes de ser resucitado, el verdadero día de descanso no había llegado, pues el mismo lo señalo "mi Padre, hasta HOY trabaja", así que técnicamente el día sábado, o la profecía del día sábado se cumplió luego de su resurrección, sin embargo, ¿Que tiene que ver Noé con todo esto? Noé está relacionado en muchos aspectos con el evangelio de Jesús, primero, porque a través de su persona, Dios profetiza la forma en que llegaría el verdadero descanso a la humanidad luego de la caída de Adán, además, Jesús mismo señaló que los días previos a su segunda venida serian similares a los días de Noé, es decir, él mismo se compara con la figura de Noé, y tercero, que la salvación que llegó por medio de Noé es también un referente claro que nos habla de como llegaría el evangelio a las demás naciones, es decir, fue una salvación realizada en un tiempo en que Israel no existía, ni por lo judíos ni los levitas ni aun Abraham, por lo tanto, la salvación que se ejerce en los días de este personaje es una hito mundial. Pero, qué tal si confirmamos todo esto por medio de la palabra de Dios. Primero, nuestro hermano Pablo, señala claramente que el restaurador de la humanidad, o bien, aquel que reconcilió a la humanidad con Dios luego de la caída de Adán, fue Jesús. Romanos 5:12 "Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron. 5:13 Pues antes de la ley, había pecado en el mundo; pero donde no hay ley, no se inculpa de pecado. 5:14 No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es figura del que había de venir. 5:15 Pero el don no fue como la transgresión; porque si por la transgresión de aquel uno murieron los muchos, abundaron mucho más para los muchos la gracia y el don de Dios por la gracia de un hombre, Jesucristo. 5:16 Y con el don no sucede como en el caso de aquel uno que pecó; porque ciertamente el juicio vino a causa de un solo pecado para condenación, pero el don vino a causa de muchas transgresiones para justificación. 5:17 Pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia. 5:18 Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida. 5:19 Porque así como por la


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desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos. 5:20 Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia; 5:21 para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro."

De todo lo que señaló Pablo, los puntos que trataremos son justamente aquellos que nos hablan diciendo que, "así como el pecado entró al mundo por medio de un hombre, Adán, así también la salvación entró por medio de otro, Jesús", lo que obviamente significa que Jesús impuso una nueva esperanza para la humanidad, y no solo en este tiempo sino también cuando su reinado sea establecido aquí en la tierra luego de su segunda venida, es decir, de la misma en que fue restablecida la humanidad en los días de Noé, así también será restablecida la tierra y la humanidad. Es decir, Noé fue la figura de un personaje que trajo descanso a la humanidad luego de que esta hubo caído por causa del pecado de Adán. Por esta razón, Lamec bautiza a su hijo como "Noé", ya que en sus días descansaría la tierra" (Génesis 5:28-29), lo que obviamente nos indica que el verdadero descanso viene a los hombres, por medio de un hombre y no por guardar descanso en día sábado, ¿Me explico? A través de la figura de Noé, la escritura profetiza diciendo que el verdadero descanso de la humanidad viene por medio de un hombre y no por medio de un día y de la misma forma en que la humanidad fue restablecida luego del juicio de Dios en los días de Noé, así también será restablecida en los días del Mesías. Es decir, Jesús no sólo es la ley, sino también es el sábado prometido, el verdadero sábado. En segundo lugar, Jesús mismo se compara con la figura de Noé, al decir que los últimos días previos a su segunda venida, el mundo actuaria de la misma forma. En pocas palabras, si el Mesías se comparó con Noé, entonces debemos entender que la figura profética del evangelio de Jesús en general, está escrita en la historia de salvación que nos cuenta la escritura respecto de Noé en lugar de mencionarnos alguna relación con Moisés. Creo que esto no requiere mayor a análisis. Mateo 24:37 "Pero como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre; 24:38 porque como en aquellos días antes del diluvio, estaban comiendo y bebiendo, casándose y dándose en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, 24:39 y no se dieron cuenta hasta que el diluvio llegó y se los llevó a todos, así también será la venida del Hijo del Hombre."

Y por último, el hecho de que la salvación haya llegado por medio de un hombre, afectando a toda la humanidad, a pesar de que esta cantidad de hombres estaba reducida solo a la familia de Noé, lo cierto es que los animales que fueron salvados, son justamente una representación bíblica de lo que pasaría con los gentiles, es decir, lo que está escrito en la Tora respecto de Noé es una relación de Dios con los gentiles antes de que existiera el pueblo de Israel, por lo tanto, podemos ver como por medio de esta palabra de Dios llegaría el evangelio de la salvación, no solo a Israel, sino que también a los gentiles, pues de eso se trata toda esta historia profética (la de la salvación de la humanidad y la de los animales comparados con gentiles preparada ya desde los días de Noé), y todo esto es afirmado por el apóstol Pedro quien da testimonio de ello diciendo que, "aquella visión que Dios le había dado respecto de los animales, se trataba en el fondo de la llegada del evangelio a los gentiles" (Hechos 10ss), confirmando así, la razón del por qué luego del diluvio, Dios hizo un pacto con Noé y su familia, pero no cualquier pacto, sino uno en el que además fueron incorporados "todos los animales, tanto los que estaban dentro del arca, como los que estaban fuera del arca", señalando de esta forma, que Dios hizo un pacto con todos los ascendientes de las naciones gentiles (pues luego del diluvio, todas las naciones gentiles que aparecen en la humanidad son descendientes de los hijos de Noé), en un tiempo en donde Israel


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aun no existía, ni por ende Moisés, ni la ley que Dios le dio a él y a Israel. Entonces, podemos ver que, en la figura de Noé no solo se esconde la profecía de la segunda venida del Mesías, sino también la prefigura del "cómo y del por qué" llegaría el evangelio de Jesús no solo a Israel, sino también a los gentiles. Y aunque este punto, el del evangelio a los gentiles, es un tema del cual hay que hablar pero que nos daría para otro estudio bíblico, es también un tema importante para este estudio, ya que esta es la razón del porque Isaías en el capítulo 56 de su libro, incorpora la figura de los gentiles al día de Noé, es decir, al "día de reposo", algo que obviamente no estaba considerado dentro de la ley dada a Moisés, es decir, si bien es cierto, que la ley dada a Moisés consideraba la misericordia a los gentiles, es Isaías quien incorpora a estos dentro de las obligaciones del día sábado, haciendo con ello lo mismo que Jesús, es decir, incorporando mandamientos dentro de la ley dada a Moisés lo cual estaba prohibido hacer, y además, confirma, la relación que existe entre Noé, como ejemplo del verdadero descanso según la palabra de Dios, y la figura de los gentiles, es decir, Isaías nos señala no solo hacer misericordia con los débiles (que fue lo que hizo Jesús en día sábado) sino que además, nos confirma de manera indirecta la incorporación a los gentiles dentro del evangelio de Jesús, de la misma forma en que los "animales" fueron incorporados al arca de Noé para ser salvos y con quienes el Eterno, hizo un pacto. Génesis 9:9 "He aquí, Yo mismo establezco mi pacto con vosotros y con vuestra descendencia después de vosotros, 9:10 y con todo ser vivo que está con vosotros: con el ave, con el ganado y con todo animal terrestre que está con vosotros, todos los que salieron del arca, todos los animales de la tierra. 9:11 Estableceré, pues, mi pacto con vosotros: No será aniquilada ya más ninguna carne por las aguas del diluvio, ni habrá ya diluvio para destruir la tierra. 9:12 Y dijo ’Elohim: Esta es la señal del pacto que os doy entre Yo y vosotros, y entre todo ser viviente que está con vosotros, por generaciones perpetuas:"

Insisto, todo esto nos da a entender que, el pacto de Dios con Noé es el que inspira el evangelio del Mesías, y la universalidad de su mensaje, no así, el pacto de Dios con Moisés, pues, todo este análisis confirma el porqué Jesús tuvo misericordia de los mas débiles en el día sábado, no porque la ley Mosaica lo señalara, sino porque los profetas los señalaban (Isaías 56ss), dando a entender con ello, que el verdadero descanso estaba basado en el pacto de Dios con Noé, pues "Noé" quiere decir, "descanso" y "consuelo", y aunque todo esto pueda parecer un tanto incierto, en realidad no lo es, pues el mismo Mesías se auto-declara como el descanso definitivo diciendo: "Yo os haré descansar", lo que nos lleva a la pregunta ¿Acaso no era el día sábado el que hacia descansar a los hombres? Mateo 11:28 "Venid a mí todos los que estáis trabajados y agobiados, y Yo os haré descansar. 11:29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y hallaréis descanso para vuestras almas,"

Es decir, ¿Por qué Jesús se declara como el descanso definitivo, si se supone que para eso había sido incorporado el día sábado en la ley Mosaica? En pocas palabras, el mismo Jesús señala diciendo que, Él es el verdadero sábado, el descanso definitivo, no basado en la ley dada a Moisés que nos habla de un "día de descanso", sino basado en la figura profética de la Torá que nos habla de un hombre, pues así está escrito, cuando el descanso (Noé) de Dios llegó a la humanidad por medio de un hombre y no por medio de un día. Por esta razón, nuestro hermano Bernabé habla diciendo a los hebreos que, "si Josué les hubiera dado el verdadero descanso... ... el rey David no habría profetizado de otro día de descanso", dando a entender con ello que, en efecto, el


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descanso de Dios profetizado en la Tora llegaría por medio de un hombre, en este caso Josué (y no por medio de un "día de descanso"), al pueblo de Dios. Hebreos 3:7 "Por lo cual, así como dice el Espíritu Santo: Hoy, si oís su voz, 3:8 No endurezcáis vuestros corazones Como en la rebelión, en el día de la tentación, en el desierto, 3:9 Donde me tentaron vuestros padres, Poniéndome a prueba, aunque vieron mis obras cuarenta años. 3:10 Por lo cual, estuve airado con aquella generación, Y dije: Siempre se extravían en su corazón, Y no han conocido mis caminos. 3:11 Por tanto juré en mi ira: No entrarán en mi reposo. 3:12 Mirad pues hermanos, no sea que acaso haya en alguno de vosotros un corazón malo de incredulidad como para apartarse del Dios vivo. 3:13 Antes bien, exhortaos los unos a los otros cada día, en tanto se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado. 3:14 Porque hemos llegado a ser partícipes del Mesías con tal que retengamos firme hasta el fin el fundamento, 3:15 en tanto se dice: Hoy, cuando escuchéis su voz, No endurezcáis vuestros corazones, como en la rebelión. 3:16 Porque, ¿quiénes, después de oír, se rebelaron? ¿No fueron todos los que salieron de Egipto por medio de Moisés? 3:17 ¿Y con quiénes estuvo airado cuarenta años? ¿No fue con los que pecaron, cuyos cuerpos cayeron en el desierto? 3:18 ¿Y a quiénes juró que no entrarían en su reposo, sino a los que desobedecieron? 3:19 Y vemos que no pudieron entrar por causa de la incredulidad. 4:1 Temamos por tanto nosotros, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado. 4:2 Porque así como a ellos, también a nosotros se nos ha predicado la buena nueva; pero no les benefició la palabra de la predicación, por no ir acompañada de la fe por parte de los que la habían oído. 4:3 Pero los que hemos creído entramos en el reposo, como ha dicho: Como juré en mi ira, No entrarán en mi reposo, (aunque sus obras fueron acabadas desde la fundación del mundo). 4:4 Porque así dijo en algún lugar respecto al séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día. 4:5 Y otra vez en este lugar: No entrarán en mi reposo. 4:6 Por tanto, puesto que falta que algunos entren en él (y los que antes oyeron las buenas nuevas no entraron a causa de su desobediencia), 4:7 de nuevo fija un día: Hoy, diciendo por medio de David, después de tanto tiempo, como queda dicho antes: Hoy, si oís su voz, No endurezcáis vuestros corazones. 4:8 Porque si Josué los hubiera hecho reposar, no hablaría después de estas cosas acerca de otro día. 4:9 Queda, por tanto, un reposo sabático para el pueblo de Dios. 4:10 Porque el que entró en su reposo, también él reposó de sus obras, como Dios de las suyas.4:11 Procuremos pues entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en el mismo ejemplo de desobediencia."

Es decir, nuevamente la escritura nos señala que el veredero descanso de Dios, proféticamente, siempre ha llegado a la humanidad por medio de un hombre, y no por medio de un día, y que en este caso, en el caso de Josué, el "descanso" significaba llegar a la tierra de Canaán, lo que, a pesar de haberse cumplido aquella llegada de Israel a Canaán, aun así, eso no fue el descanso definitivo de los hombres, ni de Dios, pues, es en los últimos versículos de este texto citado en donde podemos confirmas la razón de todo lo que hemos dicho, es decir, que Dios nuevamente ha levantado la promesa de un descanso, esta vez por medio de Jesús, y que por ende, al haber personas que aun no entran a este descanso, llamado Jesús, Dios tampoco no puede descansar de forma definitiva, confirmando así, todas las palabras de nuestro Mesías quien señala que "nuestro Padre celestial aun trabaja", y que, por lo tanto, el día de reposo que estaba señalado en la ley, fue reemplazado por el verdadero reposo de Dios, Jesús, razón por la cual, nuestro Mesías santo, según todo lo que hemos visto, es considerado a sí mismo, el veredero reposo de Dios, y por ende el Señor del reposo, lo que el mismo se encarga de establecer al momento de quebrantar el reposo señalado en la ley dada a Moisés, para establecer el suyo, inspirado en la salvación que vino por medio de Noé, como ya hemos dicho, ya que "Noé" significa "descanso".


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Por último, todo esto que hemos analizado de las palabras de Jesús según la lectura del capítulo 12 del evangelio de nuestro hermano Mateo, no es nada más que la explicación de la misma intensión de este evangelista al mostrar este episodio de forma tan abierta, pues así como hemos citado al rey David en este estudio, así también lo hizo Mateo, y así como hemos citado al profeta Isaías para apoyar estas ideas de quebrantamiento del día sábado según lo confirma nuestro hermano Juan, así también nuestro hermano y evangelista Mateo cita al profeta Isaías, lo cual no es casualidad ya que muchas de las profecías de Isaías, tal como lo hemos señalado, estaban inspiradas en el pacto de Dios con David, es decir, a pesar de que el nivel de teorías que hemos señalado en este estudio son un tanto diferentes y muchas veces atrevido, lo cierto es, que todo esto está respaldado por la palabra de Dios y da cuenta de las intenciones de las palabras y acciones de Jesús, así como también del por qué los evangelistas realizaba aquellas citas bíblicas. Mateo 12:1 "En aquel tiempo, iba Jesús por los sembrados y sus discípulos tuvieron hambre, y comenzaron a espigar y a comer. 12:2 Al verlo los fariseos, le dijeron: Mira, tus discípulos están haciendo lo que no es lícito hacer en sábado. 12:3 Y Él les dijo: ¿No habéis leído qué hizo David y los que estaban con él cuando tuvo hambre, 12:4 cómo entró en la Casa de Dios y comieron los panes de la proposición, que no le era lícito comer a él ni a los que estaban con él, sino sólo a los sacerdotes? 12:5 ¿O no leísteis en la ley, que en los sábados los sacerdotes en el templo profanan el sábado, y son sin culpa? 12:6 Pues os digo que algo mayor que el templo está aquí. 12:7 Y si hubierais comprendido qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no habríais condenado a los inocentes, 12:8 porque el Hijo del Hombre es Señor del sábado. 12:9 Y pasando de allí, entró en la sinagoga de ellos. 12:10 Y había un hombre que tenía seca una mano, y para poder acusarlo, le preguntaron, diciendo: ¿Es lícito sanar en sábado? 12:11 Y Él les dijo: ¿Qué hombre hay de vosotros que teniendo una oveja, si ésta cae en un hoyo en sábado, no le echará mano y la sacará? 12:12 Pues, ¡cuánto más vale un hombre que una oveja! De manera que es lícito hacer bien en los sábados. 12:13 Y dijo al hombre: Extiende tu mano. Y la extendió y fue restaurada sana como la otra. 12:14 Pero una vez que los fariseos salieron, tuvieron consejo contra Él para que lo destruyeran. 12:15 Y Jesús, sabiéndolo, se apartó de allí, pero muchos lo siguieron, y los sanó a todos. 12:16 Y les advirtió estrictamente que no lo descubrieran, 12:17 para que se cumpliera lo dicho por medio del profeta Isaías, cuando dice: 12:18 He aquí mi Siervo, a quien escogí, Mi Amado, en quien se complació mi alma. Pondré mi Espíritu sobre Él, Y a los gentiles anunciará juicio. 12:19 No contenderá, ni voceará, Ni nadie oirá su voz en las plazas. 12:20 No quebrará la caña cascada, Ni apagará la mecha que humea, Hasta que saque a victoria el juicio. 12:21 Y en su nombre esperarán los gentiles. 12:22 Entonces le fue llevado un endemoniado, ciego y mudo; y lo sanó, de tal manera que el mudo hablaba y veía. 12:23 Y todas las multitudes estaban asombradas, y decían: ¿No será éste el Hijo de David?"

En resumen, Jesús quebranta el día de reposo, según lo que la misma escritura señala (Mateo 12ss - Juan 5:18) para confirmar las palabras dichas por el rey David en los salmos (según lo dicho en la carta a los hebreos), lo dicho por el profeta Isaías en el capítulo 16, y lo dicho en la Torá respecto del verdadero reposo, Noé, pues el mismo Mesías compara su venida con los días de Noé, dando a entender con ello que, así como llego la salvación de la humanidad llegó por medio de un hombre, así también llegaría la salvación de la humanidad por medio de Jesús y por ende la regeneración de ésta luego de la caída de Adán, además de señalar que, así también llegaría el verdadero descanso a la humanidad, ya no por medio de un día, sino por medio de un hombre, razón por la cual Jesús se hace llamar "Señor del sábado", pues mientras exista un señor, el siervo no puede mandar, por lo tanto, si nuestro Señor es quien manda en nuestra vidas y quien tiene todo dominio y potestad, y que además es el verdadero descanso, ya no puede mandarnos un siervo, porque Jesús mismo dijo "nadie puede someterse a dos señores", es decir, nadie puede someterse al descanso dicho en la ley, y al mismo tiempo al descanso que enseñó Jesús, pues, o nos dejamos dominar por el "día sábado" que señalaba la ley dada a Moisés, o nos dejamos dominar por nuestro Señor, quien quebrantó el día sábado y lo sometió a sus preceptos, dando entender con


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ello que el día sábado, señalado en la ley dada a Moisés, ya no mandaba mas, en pocas palabras, es una afrenta a nuestro Señor, someternos al sábado señalado en la ley Mosaica, primero, porque eso significa hacerle caso al "siervo" y no al "Señor", y segundo, porque la salvación y el verdadero descanso están en nuestro Mesías santo y no en guardar un día.

La mujer adultera

Así como el Mesías santo quebrantó el sábado, y también aquel precepto que indicaba no añadir a las palabras de la Torá, ni quitar de ellas, así también Jesús quebrantó otros mandamientos, insisto, no con una intensión de maldad, ya que en algunas ocasiones tuvo misericordia de las personas y que por lo tanto, quebrantó la ley Mosaica por defender a aquellas personas justamente cuando la misma ley dada a Moisés decía que debían morir. Es así entonces, como llegamos a la escena en que le fue llevaba una mujer adultera a sus pies, pues técnicamente, o mejor dicho, legalmente, aquella mujer tenía que morir. Juan 8:1 "y Jesús se fue al monte de los Olivos. 8:2 Y por la mañana volvió al templo, y todo el pueblo vino a él; y sentado él, les enseñaba. 8:3 Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio, 8:4 le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. 8:5 Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices? 8:6 Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía en tierra con el dedo. 8:7 Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella. 8:8 E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra. 8:9 Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio. 8:10 Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? 8:11 Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más."

Cuando señalé que, "aquella mujer debía morir" no fue una ocurrencia mía, sino que simplemente es lo que decía la ley dada a Moisés respecto de aquellos hombre y mujeres que fuesen pillados en adulterio ("indefectiblemente serán muertos", señalaba la ley, no dejando espacio a la misericordia a aquellos que cometieran este pecado), es decir, la ley Mosaica no daba opción a que los adúlteros (tanto al hombre como a la mujer que habían adulterado) y específicamente, aquellos que fueran pillados en adulterio, no podían obtener el perdón de Dios, pues eso estaba estipulado en la ley, de la misma forma en que, tampoco se estipulo perdón para aquellos que recogieran alimentos u otra cosa en día sábado. Levítico 20:10 "Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero y la adúltera indefectiblemente serán muertos."

Ahora bien, así como Jesús defendió a los suyos en el momento en que fueron acusados por los fariseos, con justa razón, de estar quebrantando el sábado, así también nuestro Mesías tuvo motivos bíblicos para defender a aquella mujer a pesar que esta fue pillada en el acto mismo de adulterio, así que, dicho esto, quisiera preguntar: si la ley dada a Moisés señalaba que aquellas personas pilladas en adulterio debía morir, ¿Por qué pues no confirmó la muerte de aquella mujer, cuando el mismo dijo que vino a cumplir la Torá? Tal como lo señalamos, nuestro Mesías vino a cumplir las profecías que hablaban de él en la Torá, no los mandamientos señalados allí, puesto


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que, nuevamente, nos encontramos con otro caso de quebrantamiento de aquellos mandamientos por parte del Mesías. La respuesta a aquella pregunta es muy sencilla, primero, porque ya hemos visto como nuestro Mesías vino a cumplir el sábado según lo dicho por Isaías, y no según lo dicho en la ley Mosaica, es decir, teniendo misericordia de los débiles en lugar de descansar en aquel día, y segundo, porque la trampa que hicieron las fariseos a Jesús, estaba mal hecha, es decir, tal vez un iluso e ignorante de las escrituras hubiera caído en aquella trampa, pero no nuestro Mesías, quien de hecho conocía la ley mucho mejor que estos personajes, ¿Por qué digo esto entonces? Por la sencilla razón de que, si nos fijamos bien, la ley respecto de los adúlteros señala claramente que, ante un caso de adulterio tanto el hombre como la mujer, ambos, debían ser muertos, pues bien, a Jesús fue llevada la mujer, pero ¿Donde estaba el hombre que había adulterado con ella? Obviamente, aquel hombre no podía estar presente en aquella situación, pues si todo este show fue planeado para confrontar a Jesús respecto a la ley, para poder acusarle, seguramente, la mujer pillada en adulterio no era más que una víctima de las circunstancias, es decir, si el hombre que adulteró con aquella mujer, no fue llevado donde Jesús, es porque aquel hombre era parte de todo este engaño que estaban haciendo los fariseos. Aunque suena atrevido lo que estoy diciendo, lo cierto es que es lo más probable, por no decir que esa es la verdad, pues, por esta razón podemos ver que el hombre que había adulterado con aquella mujer no fue llevado donde Jesús, pues claramente se puede apreciar aquel personaje estaba siendo protegido por los fariseos, digo, la mujer no estaba adulterando sola, obvio, por lo tanto, si los fariseos la pillaron en pleno acto de adulterio, ¿Por qué entonces no trajeron también al hombre que estaba adulterando con ella? Porque todo esta situación había sido provocada por ellos, así que, es evidente que uno de estos personajes se prestó para ser parte de aquella situación, o bien, si aquel hombre no era parte del grupo de fariseos, muy probablemente lo compraron de la misma forma en que compraron a Judas. Ahora bien, si Jesús conocía la ley Mosaica, y sabia que todo esta situación era un engaño ¿Por qué no mandó a llamar también el hombre que fue pillado en adulterio? Es decir, si Jesús vino a "cumplir la ley", ¿Por qué no mandó a llamar al hombre adultero para que la ley dada a Moisés fuera cumplida, pues ésta señalaba claramente que, ante el caso de un adulterio, el hombre y la mujer debían morir, indefectiblemente, es decir, sin ninguna opción de perdón? Porque, tal como lo señalaba la escritura, su ley, la ley del Mesías, estaba basada en aquella frase que decía, "misericordia quiero y no sacrificio", según las profecías inspiradas en el pacto de Dios con David, lo cual nos lleva a ver nuevamente, como la doctrina de Jesús responde a aquel pacto, y no al pacto de Dios con Moisés, pues si hubiera respondido a éste último, entonces el Mesías hubiese llamado también el hombre adultero, pues la ley dada a Moisés decía que ambos debían morir, sin opción al perdón. Por último, en relación al análisis de esta escena provocada por los fariseos, podemos ver que esta teoría, en la que hemos señalado que Jesús basó sus preceptos en aquella palabra que decía "misericordia quiero y no sacrificio", es confirmada por el mismo Mesías, pues en esta ocasión no solo lo vemos declarando aquella misericordia hacia la mujer adultera, sino también a los fariseos, pues cuando Jesús les dijo "aquel que esté libre de pecado, que lance entonces la primera piedra", no hacía nada más que darles una oportunidad a ellos mismos de salvar sus propias vidas, pues técnicamente, no fue que ellos se retiraran por una simple cuestión de conciencia, sino que también lo hicieron para salvar sus propias vidas, pues según la ley dada a Moisés, ellos también debían morir por haber levantado falso testimonio sobre su prójimo. Así es, pues al provocar toda esta situación en donde estaban poniendo en riesgo la vida de aquella mujer, a propósito y con el


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único fin de hacer caer al Mesías, la historia hubiese sido muy distinta la historia para ellos si el Jesús hubiera ejercido aquel juicio conforme a la ley dada a Moisés, pues si Él hubiera aprobado la muerte de aquella mujer, y por ende la del hombre con el cual adulteró aquella mujer, tal vez hubiera pasado que, al momento de llamar al hombre adultero, este hubiera acusado a los fariseos diciendo que todo esto era una trampa para hacer caer al Mesías, y que por lo tanto, en ese mismo instante todos los fariseos que habían planificado esto hubieran sido hallados culpables de "levantar falso testimonio contra su prójimo", es decir, además de haber sido muertos por ello en ese momento, hubiera quedado en evidencia la maldad de estos personajes y su credibilidad ante los hombres también hubiese visto afectada, es más, aunque Jesús mismo no hubiese llamado al hombre adultero y hubiera dado muerte a la mujer adultera, en algún momento alguien tendría que recordar esta ley en particular, o las mismas personas que atestiguaron todo esto hubieran comenzado a preguntar dónde estaba también el hombre que adulteró con la mujer y tal vez, hubiesen comenzado a buscarle, lo cual hubiera provocado no solamente la búsqueda de este personaje sino que también, en esta situación hipotética, nuevamente habrían sido perjudicados los fariseos, pues al encontrar a aquel personaje, probablemente este se hubiera defendido diciendo que todo esto era un trampa, tal como lo hemos señalado, o bien, en el caso de no encontrarle, también hubieran sospechado de los fariseos señalando que todo esto no fue nada más que un engaño inventado por ellos, es decir, cualquier cosa que hubiera salido mal, para ellos, ponía en riesgo sus propias vidas. Por estas razones, los fariseos, al escuchar las palabras de Jesús, "aquel que esté libre de pecado, que lance la primera piedra", se retiraron en silencio, pues supieron inmediatamente que el Mesías ya se había dado cuenta de que todo esto no era más que un fraude creado por ellos mismos, un fraude que, para colmo de males, ponía en riesgo sus propias vidas y la credibilidad de este grupo de personas que, paradójicamente, estaban catalogados como "los guardianes de la ley". Por todo esto entonces, Jesús termina diciéndole a la mujer "ni yo te condeno, vete y no peques mas", lo que nos quiere decir que, Jesús si sabía que a pesar de todo este engaño de los fariseos para hacerle caer, aquello que había hecho esa mujer, si era un pecado ante la ley, pero, si el mismo les dio la oportunidad a aquellos hombres de arrepentirse y salvar sus propias vidas, no podía entonces, condenar a aquella mujer que, al igual que los fariseos, también había cometido pecado, es decir, si Jesús hubiera hecho caso de lo que decía la ley dada a Moisés, como algunos creen que hizo, entonces, no solo hubiera muerto la mujer adultera sino todos aquellos fariseos que fueron participes de este engaño, incluso el hombre con el que adulteró aquella mujer el cual nunca fue presentado por los fariseos como culpable, ya que seguramente también había sido comprado por ellos, o bien, era uno de ellos.

La ley de los leprosos.

Otro de los eventos en que vemos al Mesías desafiando abiertamente los mandamientos de la Torá, son aquellos en donde los vemos juntándose con los leprosos y sanándoles, ya que técnicamente las leyes dadas a Moisés respecto de la lepra, no permitían ningún tipo de contacto entre aquellas personas que padecían esta enfermedad y el resto de las personas sanas que habitaban en las ciudades o los pueblos, pues un leproso, al ser descubierta su lepra, era declarado inmundo, y aquel que tocaba a un inmundo, o algo inmundo, era inmediatamente declarado culpable.


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Levítico 13:44 él es un hombre leproso, está impuro. El sacerdote lo declarará impuro: tiene la llaga en su cabeza. 13:45 Los vestidos del leproso que tenga la llaga estarán rasgados y su cabeza desgreñada. Se tapará hasta el bigote y pregonará: ¡Impuro! ¡Impuro! 13:46 Permanecerá impuro todo el tiempo que tenga la llaga. Siendo impuro, morará solo. Su morada estará fuera del campamento. Levítico 5:2 "Si alguien toca cualquier cosa impura, ya sea el cadáver de una fiera inmunda, o el cadáver de ganado inmundo, o el cadáver de un reptil inmundo, aunque no lo sepa, será impuro y culpable. 5:3 O si toca alguna impureza humana, de cualquier impureza con que se contamine, sin darse cuenta y después llega a saberlo, será culpable."

Obviamente, esta ley no requiere mayor análisis ya que, el evangelio de Mateo, un evangelio que por cierto está escrito de esa forma para dar testimonio a los judíos, es decir, este evangelio fue escrito para judíos, para aquellos que conocían la ley Mosaica, es quien nos da el detalle de una de las sanidades que hizo nuestro Mesías, precisamente haciendo aquello que la ley de Moisés señalaba que no se debía hacer, "tocar a un inmundo", en este caso a un leproso. Mateo 8:1 "Cuando descendió del monte, lo siguieron grandes multitudes. 8:2 Y he aquí un leproso, se acercó, y se postraba ante Él diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme. 8:3 Y extendiendo la mano lo tocó diciendo: Quiero, sé limpio. Y al instante fue limpiada su lepra. 8:4 Entonces Jesús le dice: Mira, no lo digas a nadie, solamente ve y muéstrate al sacerdote y presenta la ofrenda que ordenó Moisés, para testimonio a ellos."

Luego de leer este pasaje bíblico, quisiera preguntar ¿Cómo es posible que Jesús tuviera todo el respaldo de nuestro Padre Eterno, al hacer este tipo de actos que, de forma inequívoca desafiaban aquella ley que el mismo Dios altísimo, le dio a Moisés? Es decir, sabemos que nuestro Dios poderoso dio leyes a Moisés con el fin de instruir a su pueblo en ellas, y que, para que las hicieran conforme a su voluntad, Dios declaró muchos castigos y condenas a aquellos que no cumplieran estos preceptos dictaminados por él, es por eso que pregunto ¿Por qué el Todopoderoso seguía apoyando a nuestro Mesías a través de estos milagros, cuando justamente, en aquellas sanidades se quebrantaba la ley Mosaica? Precisamente, para hacer valer los dicho por David y los profetas "Misericordia quiero y no sacrificio", es decir, a través de esta frase se señalaba claramente como Dios privilegió las acciones del Mesías a las leyes de la Torá, razón por la cual nuestro hermano Pablo señala diciendo, “el fin de la ley es Cristo”.

El bautismo de Jesús, la presentación del cordero.

Sé que todo lo que hemos expuesto parece ser un tanto extraño a lo que casi siempre se escucha de Jesús, pues según las doctrinas de las iglesias estadounidenses, que no son las más "reveladas" por Dios, éstas nos señalan que Jesús fue perfecto dado que nunca quebrantó la ley, y que, el sólo hecho de decir que nuestro Mesías quebrantó alguno de los mandamientos, es una blasfemia digna de la hoguera. Nada mas ridículo por cierto, pues el hecho de no entender que Jesús si quebrantó las leyes dichas a Moisés y a Israel, no hace más que introducirnos en la misma idea idolátrica y pagana que muchos cristianos tienen acerca de Jesús como un "Dios hecho hombre", es decir, no hay nada mas idolatra y “baalistico” (no sé si existe esa palabra, pero con ello me refiero a la adoración pagana al dios Baal), que creer que Jesús fue perfecto por no quebrantar la ley, pues con el hecho de alimentar y creer en esa idea, no se hace más que endiosar a Jesús desde una perspectiva pagana, ya que, el mismo Jesús señala diciendo que "no había ninguno bueno,


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sino solo el Padre", y que, aunque lo que hizo Jesús no fue malo, ni hecho con maldad, lo cierto es que aun así lo que hizo estaba fuera de la ley dada a Moisés, pues, el concepto de "perfección" occidental que existe en las iglesias cristianas, respecto del Cristo, es muy contrario al que nos señala la escritura, ya que, mientras la tradición cristiana nos dice que la perfección significa algo así como "no pecar nunca en la vida", la escritura dice claramente que la perfección significa "retener la lengua", o bien "refrenar la lengua del mal", es decir, desde la perspectiva bíblica, Jesús fue prefecto porque no abrió su boca para quejarse contra Dios en el momento de ser crucificado y azotado, y no por el hecho de "hacer la ley en su totalidad" ya que técnicamente, desde antes de comenzar su ministerio, Jesús se hizo partícipe del quebrantamiento de la ley Mosaica. Marcos 10:18 "Y Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno es bueno, sino uno solo: Dios." Santiago 3:2 "Porque todos ofendemos muchas veces; si alguno no ofende de palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo."

Ahora bien, tal como lo señalé en un momento, Jesús se hizo partícipe de un quebrantamiento de la dada a Moisés desde antes de comenzar su ministerio, es decir, desde el momento en que fue bautizado, ¿Por qué digo esto? Porque técnicamente el bautismo en sí, no era una disposición o un precepto señalado en la Tora, y por ende, no correspondía al lavamiento con agua que hacían los sacerdotes levitas, ya que, Jesús no era levita, y respecto de esto mismo, es Pedro (el mismo a quien le fue revelado el simbolismo de "los animales inmundos" como símbolo de los gentiles (Hechos ss), quien nos señala que el bautismo en agua, está relacionado con la historia del diluvio, es decir, el bautismo que ejerció Juan el bautista en Jesús, no estaba de acuerdo a la ley, sino mas bien, de acuerdo a la figura de Noé. 1ª Pedro 3:18 "Porque también el Mesías padeció una vez por los pecados, el Justo por los injustos, para llevaros a Dios; muerto en la carne, pero vivificado en el espíritu; 3:19 en el cual también fue a predicar a los espíritus encarcelados, 3:20 que en un tiempo desobedecieron, cuando esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, mientras se preparaba el arca, en la cual unos pocos, es decir, ocho personas, fueron salvadas a través del agua. 3:21 El bautismo que corresponde a esto ahora os salva (no por remoción de la inmundicia de la carne, sino como respuesta de una buena conciencia hacia Dios) por medio de la resurrección de Jesús el Mesías,"

Sin embargo, a pesar de lo testimoniado por el apóstol Pedro, quien hace esta relación entre el diluvio vivido en los días de Noé y el bautismo que ahora nos salva, lo cierto es, que el bautismo de Jesús, hecho por Juan el bautista, no fue el único de punto de quebrantamiento de la ley Mosaica, ya que técnicamente, toda la figura de Juan el bautista correspondía a alguien que estaba quebrantado aquella ley, es decir, ¿Alguna vez han comparado y han analizado la figura de este personaje, señalado por Jesús como, el "más grande de los profetas", respecto de lo que decia la ley dada a Moisés? Todo en Juan el bautista quebrantaba la ley, y digo esto porque, él era un sacerdote levita y descendiente de Aarón que, en primer lugar, no tenia ropas sacerdotales, no comía las comidas estipuladas en la ley, en lugar de ofrecer incienso en el templo (que era lo que correspondía hacer a los sacerdotes de su clase), andaba bautizando personas fuera de la ciudad, pero, por sobre todo esto, el acto que marcó un quebrantamiento pleno de la ley Mosaica fue justamente el bautismo de Jesús, pues, cuando le bautizó, se le ocurrió presentar a nuestro Mesías como ¡"el cordero que quita el pecado del mundo"! Es decir, además de ser un sacerdote levita sin ropas sacerdotales y que comía lo que la ley no autorizaba a comer, el único sacrificio que presentó ante Dios (el


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bautismo de Jesús presentado como cordero expiatorio), lo hace en un lugar que, no era el tabernáculo, de hecho ni siquiera era el templo de Dios, y en lugar de sacrificarlo, moja al cordero con agua y para colmo, lo presenta delante de todo el pueblo, es decir, hace todo lo que las leyes de los sacrificios ordenados a los levitas no autorizaba a hacer. En resumen:

1. Juan el bautista no vestía ropas sacerdotales: La ley dada a Moisés señalaba que todos los sacerdotes debían vestir una vestidura especial para su gremio, algo que Juan el Bautista parecía ignorar a pesar de tener contacto con les personas que vivían en la ciudad y especialmente con los escribas y fariseos (Éxodo 39ss).

2. Comía lo que la ley no autorizaba a comer: No sólo por el hecho de comer insectos, Juan

quebrantó la ley, sino por el hecho de no comer los panes de la proposición como estaba señalado para los sacerdotes (Éxodo 37:10-16 / Levíticos 24:5-9).

3. No ejercía su ministerio quemando incienso como lo establecía su clase: Juan el bautista

era descendiente directo de Aarón, pues solo ellos podían quemar incienso en el templo (Éxodo 30:7-8 1ª Crónicas 23:23), y como este trabajo especifico se heredaba, entonces señalamos abiertamente que Juan era uno de sus descendiente puesto que al padre de Juan le correspondía esta labor en el templo (Lucas 1:5-10).

4. El único sacrificio que hace, lo hace fuera del tabernáculo, fuera del templo y a la vista

de las personas: La ley dada a Moisés, señalaba que tanto el sacerdote como el pueblo, debían ofrecer un sacrificio para expiación de sus pecados, que fuera presentado en el tabernáculo, dentro del templo, y por ende, no hecho a la vista de las demás personas (Levítico 4:1-21), y específicamente Dios advierte esto a los hijos de Aarón, como lo era Juan el Bautista (Levíticos 17:1-9)

5. En lugar de sacrificar al cordero y quemar sus restos, lo inunda en agua: Las ofrendas

expiatorias tenían como procedimiento, además de matar a la víctima, ser quemadas o bien asadas en algunos casos, pero, en ningún momento se habla de que la victima debía ser sumergida en agua (Éxodo4:29-35 / 5:5-13 / 6:10-30 / 7ss).

Pero, lo mas increíble de todo esto, es ver como el Padre respaldó con su presencia aquel acto que a todas luces quebrantaba la ley que el mismo le dio a Moisés, y no sólo eso, sino que además declaro con su propia voz, que se complacía en su hijo, nuestro Mesías santo, y que en él hallaba complacencia, así es, ¿Acaso el Todopoderoso no vio lo que había hecho Juan y Jesús respecto de los mandamientos de la ley Mosaica, y si es así, por qué entonces respaldó con su poder y su gloria al Mesías en aquel acto y se complació en alguien que estaba siendo participe y cómplice del quebrantamiento de aquella ley? Digo esto, porque técnicamente la figura del Mesías, al no pertenecer a la tribu de Leví, no tenia relación ministerial con la ley dada a Moisés, sino mas bien estaba relacionado con los pactos de Noé, Abraham y David, lo cuales inspiraron muchas de las profecías mesiánicas de los profetas, y, aunque eso lo veremos en otro estudio, nos quedaremos entonces con la lectura bíblica que nos haba del bautismo de Jesús, con el fin de confirmar lo que se ha señalado en este mensaje. Mateo 3:13 "Llega entonces Jesús desde Galilea al Jordán, donde estaba Juan, para ser bautizado por él. 3:14 Pero él trataba de impedírselo diciendo: Soy yo el que necesita ser bautizado por ti, ¿y Tú vienes a mí? 3:15 Pero respondiendo Jesús, le dijo: Deja ahora, porque así nos es conveniente cumplir toda justicia.


Jesús y la ley

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Entonces lo dejó. 3:16 Y Jesús, después que fue bautizado, subió enseguida del agua, y he aquí se abrieron los cielos, y vio al Espíritu de Dios descendiendo como una paloma que venía sobre Él. 3:17 Y he aquí una voz de los cielos que decía: Este es mi Hijo, el amado, en quien me complací."

Que la paz de Dios nuestro Padre y de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.

jesus y la ley (jesus quebranta el sábado)

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