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Situación actual de la Investigación en Venezuela Según la Real Academia Española (RAE) INVESTIGAR, “se refiere al acto de llevar a cabo estrategias para descubrir algo”. “Conjunto de actividades de índole intelectual y experimental de carácter sistemático, con la intención de incrementar los conocimientos sobre un determinado asunto”. Con un rigor científico investigación es una serie de procedimientos que se llevan a cabo con el fin de alcanzar nuevos conocimientos fehacientes sobre un hecho o fenómeno que, una vez encontrados nos puedan ayudar a establecer conclusiones y soluciones a circunstancias causadas por ellos. Es un proceso sistemático, organizado y objetivo. Las universidades representan para un país un espacio de reproducción de saberes; aunque también son un punto de discusión, concertación y, sobre todo, entes creadores de nuevos conocimientos; realizan investigación. Hoy en día son bastantes las quejas por parte de investigadores y universidades debido al drástico recorte en los presupuestos que han sufrido en los últimos años y a su vez existe un importante freno producido por la creciente burocratización de la gestión exigida por los organismos financiadores y la alta politización existente. “La situación que atraviesa el país en materia de investigaciones científicas y tecnológicas es trágica”, “Venezuela presenta el retraso de una década en esta área, producto la falta de inversión y de estímulos por parte del Gobierno central hacia las universidades e institutos especializados para el desarrollo de dichas ramas”, Hay una

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Situación actual de la Investigación en Venezuela

Según la Real Academia Española (RAE) INVESTIGAR, “se refiere al acto de llevar a cabo estrategias para descubrir algo”. “Conjunto de actividades de índole intelectual y experimental de carácter sistemático, con la intención de incrementar los conocimientos sobre un determinado asunto”.

Con un rigor científico investigación es una serie de procedimientos que se llevan a cabo con el fin de alcanzar nuevos conocimientos fehacientes sobre un hecho o fenómeno que, una vez encontrados nos puedan ayudar a establecer conclusiones y soluciones a circunstancias causadas por ellos. Es un proceso sistemático, organizado y objetivo.

Las universidades representan para un país un espacio de reproducción de saberes; aunque también son un punto de discusión, concertación y, sobre todo, entes creadores de nuevos conocimientos; realizan investigación.

Hoy en día son bastantes las quejas por parte de investigadores y universidades debido al drástico recorte en los presupuestos que han sufrido en los últimos años y a su vez existe un importante freno producido por la creciente burocratización de la gestión exigida por los organismos financiadores y la alta politización existente.

“La situación que atraviesa el país en materia de investigaciones científicas y tecnológicas es trágica”, “Venezuela presenta el retraso de una década en esta área, producto la falta de inversión y de estímulos por parte del Gobierno central hacia las universidades e institutos especializados para el desarrollo de dichas ramas”, Hay una situación de total abandono de las universidades. Lo más triste es que miembros del Ejecutivo central, quienes estudiaron y egresaron de nuestras casas de estudio, no apoyen a las universidades e institutos científicos y de investigación”. Gioconda San Blas (directora de Ciencia y Tecnología del Gobierno de Miranda)

Una de las políticas erradas que ha llevado adelante el Ejecutivo central ha sido la de no incrementar los sueldos de profesores universitarios quienes imparten enseñanza en reconocidas casas de estudios. Eso ha generado que muchos emigren del país, buscando apoyo y mejores oportunidades. Otra de la causas de la desinversión en el campo de la investigación científica se debe a la modificación de la Ley Orgánica de Ciencia y Tecnología, aprobada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología en 2010, estatuto que prohíbe a empresas privadas contribuir económicamente en los planes y proyectos científicos en universidades e institutos.

Haciendo un poco de historia, en 1990 se conforma en Venezuela el Programa de Promoción a la Investigación (PPI). Un coeficiente variable de investigación y postgrado que fomentaba la investigación científica y tecnológica. Esta además de generar un estatus de respeto y reconocimiento hacia los investigadores venezolanos, estimulaba el crecimiento de la comunidad científica nacional y constituía un estímulo a la productividad científica.

Para respaldar este apoyo y buscando preservar el funcionamiento adecuado de las actividades de investigación, postgrado, biblioteca, extensión, cultura y deportes en las universidades, el 30 de octubre de 1992, el Consejo Nacional de Universidades (CNU) aprobó la Metodología de Puerto La Cruz (MPLC). En ésta se establece un porcentaje mínimo de recursos para estas actividades de la cuota presupuestaria asignada a cada universidad, siendo su aplicación de obligatorio cumplimiento. Según estas normativas, 1,5 por ciento del presupuesto anual destinado a la universidad, debía destinarse al desarrollo de nuevas investigaciones. Aunque en el presupuesto del país se consideraba prioridad la investigación, el desarrollo de esta área en las universidades, en estos años, ha mermado considerablemente ante los cambios de políticas presupuestarias del Gobierno nacional. En marzo de 2009 se ordena la disminución del gasto público en seis por ciento en todos los organismos públicos, se aplica en las universidades y significa, para la mayoría de ellas, la eliminación de la asignación presupuestaria para investigación.

En la actualidad el Gobierno nacional plantea una nueva política presupuestaria para la investigación en el país. Este nuevo sistema establece dos vías para la obtención de recursos de investigación. El primero, consiste en destinar recursos a los “proyectos estratégicos”. Estos son proyectos de gran envergadura que el Gobierno asigna a grupos de investigación, la mayoría universitarios que involucran entes diversos pero privilegiando unidades de investigación adscritas al Gobierno; es decir, universidades intervenidas, comunas, cooperativas, instituciones controladas netamente por el gobierno y finalmente a las universidades autónomas.

La otra vía de financiamiento, es a través del Programa de Estímulo a la Innovación e Investigación (PEII), el cual surge como sustituto del PPI. “Se diferencian, principalmente, debido a que el PPI premiaba a los investigadores productivos, mientras que el PEI premia a los investigadores que tienen una investigación aprobada”. (Alexander Mansutti, Coordinador General de Investigación y Postgrado de la Universidad Nacional Experimental de Guayana, UNEG).

Estas nuevas políticas no sólo benefician a las instituciones simpatizantes de un color político, sino que siguen siendo insuficientes en el desarrollo investigativo. Lo que ha generado que las investigaciones en las universidades autónomas mermen o se mantengan únicamente con recursos auto gestionados por los investigadores.

Caracterizar el denominado Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SNCTI) venezolano en lo que va de siglo XXI no es tarea sencilla, debido, entre otras razones, a temas que en principio son de corte político-ideológico y terminan afectando el ámbito de la CTI. Si se revisan las políticas públicas de los últimos años se encuentran cronológicamente hitos como los siguientes: se creó un Ministerio de Ciencia y Tecnología (1999); se cerró el CONICIT que venía funcionando como órgano rector de las políticas públicas en el país desde el año 1970 y se fundó el FONACIT para que cumpliera con la función operativa del financiamiento de esas actividades. En el año 2001 se promulgó la primera Ley de Ciencia y Tecnología y se creó el Observatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (ONCTI), éste último para realizar estudios que permitieran mejorar la toma de decisiones y el diseño de las políticas públicas. En el año 2004 se publicó el Plan Nacional de Ciencia y Tecnología 2005-2030 y el año siguiente se creó la Misión Ciencia que tenía como premisa impulsar la formación de alto nivel en el campo de la investigación. Ese mismo año se modificó nuevamente la legislación y se publicó la Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación (LOCTI) con un articulado novedoso que impulsó cambios cualitativos en el país. Al publicarse su reglamento y aplicarlo a partir del año 2006, puede considerarse ese momento como el punto de inflexión más importante de la historia reciente del país en cuanto al funcionamiento del SNCTI venezolano. Se logró pasar de una inversión histórica promedio de 0,3% del PIB (por debajo del 1% recomendado para países en vías de desarrollo) a recaudaciones que elevaron el porcentaje de inversión a 2,69% en el año 2008 (igualando a los países de mayor desarrollo mundial). Pero el logro más relevante fue movilizar y acercar a los actores del SNCTI (empresas, centros e institutos de investigación, universidades y gobierno) como nunca antes había sucedido en Venezuela. En diciembre de 2010 en la Asamblea Nacional aprobaron un cambio drástico en la LOCTI que eliminaba la inversión para proyectos internos en las empresas y la asignación por la vía de los aportes a terceros, convirtiendo los recursos en un tributo y centralizando los fondos en el FONACIT. En el caso de Venezuela, el financiamiento histórico provenía del gobierno en más de un 90%. Con la aplicación de la LOCTI, a partir del año 2006 cambió esa tendencia y aumentaron de forma significativa los montos, dinamizando las interacciones de los actores.

Al invertir recursos financieros, lo primero que se debe promover es la formación de personal. En los últimos años se han creado instituciones de educación

superior en Venezuela, pero se han perjudicado presupuestariamente a las universidades experimentales y autónomas, que son las que han formado, en gran medida, a los investigadores.

Después de formar personal de alto nivel para la investigación, hay que conocer el tamaño de la comunidad científica. Venezuela contaba hasta el año 2009 con el Sistema de Promoción del Investigador (SVPI) que dependía del ONCTI; para ese año habían acreditados 6791 investigadores, un 74% menos de lo que estipulan los organismos multilaterales competentes en esa materia para países en vía de desarrollo. Algunos personeros del gobierno indican que existen muchos más investigadores en el país de los que estaban acreditados y, además, que ese programa era voluntario. En el año 2008 se realizó un estudio en el que se cruzaron los datos de los autores venezolanos en el Science Citation Index (SCI) con la base de datos de los investigadores del SVPI, y más del 90% de los artículos tenían como autores a investigadores acreditados en ese programa. El tema de la emigración de científicos y tecnólogos venezolanos es particularmente grave. Existe un éxodo continuo de personal altamente calificado, que además no se está conectando formalmente con sus pares nacionales.

La producción tangible de un país en materia de generación de conocimiento científico-tecnológico se mide, fundamentalmente, en el número total de patentes y artículos científicos por año. En el caso de Venezuela es contradictorio el resultado, al introducir en la ecuación recursos y resultados; a mayor inversión, menor producción. El Sistema Autónomo de Propiedad Intelectual (SAPI) de Venezuela no ha otorgado patentes en los últimos años; y en materia de artículos, en las principales bases de datos del mundo se inició un descenso en los años 2009 y 2010.

La ciencia no debe ser vista como una disciplina aislada donde se le resta importancia a un área por encima de otra, debido a que los resultados no son siempre inmediatos, sino con visión futura y que a menudo escapa a nuestro alcance. La visión simplista de resaltar solo la investigación con aplicabilidad inmediata, afectaría el progreso del conocimiento y de la búsqueda de la verdad en las diversas áreas del saber científico. Una de las principales herramientas utilizadas para transmitir los resultados obtenidos en investigación bien para su utilización directa o para su validación, por otros investigadores o por usuarios directos de estos resultados, son las publicaciones en revistas científicas, de reputación conocida y demostrable mediante arbitraje por expertos en el área en particular.

De este proceso de evaluación surge un índice o impacto de la investigación, es decir, cual es la trascendencia de los resultados obtenidos en un campo en particular. Dicho impacto se refleja claramente en las veces en que un determinado trabajo es citado en la literatura sea nacional o internacional. A pesar

de tener algún sesgo en el caso de auto citas y las citaciones recíprocas, en la actualidad se acepta como una herramienta estándar para evaluar los méritos de una publicación. Si analizamos bajo este parámetro la evolución de las publicaciones en Venezuela (desde 1996 hasta el año 2014, dato obtenido de http://www.scimagojr.com/, que analiza publicaciones en revistas incluidas en diferentes índices, tales como Scielo, SCI, entre otros), se observa con preocupación, que la contribución de Venezuela en América Latina se ha ido mermando progresivamente, y que además es preocupante ver como el porcentaje de citaciones de las publicaciones nacionales en comparación con el resto de Latinoamérica a caído de manera sostenida, como podemos observarlo en la siguiente gráfica elaborada tomando como datos los ranking de Venezuela respecto a Colombia y Cuba y América Latina.

Este hecho en particular nos lleva a reflexionar sobre la calidad y originalidad de las publicaciones en Venezuela en las distintas áreas del saber, sobre todo bajo la lupa de las políticas gubernamentales que lastimosamente dejan a un lado la calidad y la originalidad de la investigación, conceptos que han sido substituidos por la llamada “pertinencia social”. Estas políticas de populismo y conformismo, han repercutido notoriamente en el llamado “ranking” mundial como investigadores.

Entre los principales Institutos de investigación de las Universidades Venezolanas se encuentran:Institutos de investigación de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Institutos de investigación de la Universidad de Los Andes (ULA).Institutos de investigación de la Universidad del Zulia (LUZ). Institutos de investigación Universidad de Carabobo (UC). Institutos de investigación de la Universidad Simón Bolívar (USB).

Institutos de investigación de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB). Decanato de Investigación y Postgrado de la Universidad Metropolitana (UNIMET). Decanato de investigación de la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET). Institutos de investigación de la Universidad Rafael Belloso Chacín (URBE).

Instituciones que realizan investigación en Venezuela, así como tipos de Instituciones a las que pertenecen los Investigadores del PPI y cantidad de Investigadores por Institución:

INSTITUCIONES No. %

Universidades nacionales (UCV, USB, ULA, LUZ, UDO, UC, UCLA, UNELLEZ, UNET, UNEFM, UNESR, UNERMB, UNEG, UNA, UPEL)

15 29,4

Centros de investigación (IVIC, INTEVEP, CIDA, FONAIAP, Inst. Hem.Occ., IDEA) 6 11,8

Institutos Universitarios Tecnológicos (IUT-Caracas, IUT-Valencia) 2 3,9

Ministerios (MEN, MSAS, IVSS, MARN, Fundacite-Z) 5 9,8

Empresas del Estado (CVG) 1 2,0

Hospitales (H.U.Caracas, H.U. Mérida, H.U. Maracaibo, H.C.A.M. Pineda) 4 7,8

Universidades privadas (UCAB, UCTACH, UJMU,UNIMET, URU, USM) 6 11,8

Fundaciones (La Salle, Museo de Ciencia, FUNDACREDESA, FUSAGRI, Audubon, Centro Gumilla)

7 13,7

Centros privados (CMDLT, IBM, IESA,Cons.Ceru) 4 7,8

Universidad extranjera (Univ.Bristol) 1 2,0

TOTAL 51 100,0

“Vivimos en el siglo XXI, es decir en la era del conocimiento y la tecnología, valores que permiten a una sociedad progresar y desarrollarse. Mientras un país no reconozca a la ciencia y la tecnología, sencillamente se quedará estancada en el siglo IXX”, Gioconda San Blas.

“La investigación se debe respetar como tal, una fórmula matemática es igual en socialismo y en capitalismo. Y aún más importante es estar conscientes de que la única forma de desarrollar un país es a través de la investigación; depender del petróleo nos condena al subdesarrollo”. (A. Mansutti)

Referencias:

Situación actual de la investigación en Venezuela: ¿Hacia dónde vamos?. Salmen S, Berrueta L. Avan Biomed 2012; 1: 53-4.

La investigación en Venezuela está cayendo. Boletin BC # 119. Universidad de Carabobo. Alexander Mansutti. Coordinador General de Investigación y Postgrado de la Universidad Nacional Experimental de Guayana (UNEG). Minerva Arzola directora de Investigación y Postgrado Universidad Nacional Experimental Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo).

Situación actual de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación en Venezuela. Michelle López, Iván de la Vega. Archivos Venezolanos de Puericultura y Pediatría. Versión impresa ISSN 0004-0649. v.73. n.4 Caracas dic. 2010.

La Calidad de la Investigación en Venezuela: Elementos para el debate en torno al Programa de Promoción del Investigador. Hebe M. C. Vessuri. 1996. Interciencia 21(2): 98-102.

Vinculación universidad-sector productivo en la Universidad de los Andes caso de la Corporación Parque Tecnológico de Mérida. Genry Vargas Contreras. 2012.

Situación Actual de la Ciencia y la Tecnología en Venezuela, su relación con América Latina

Impacto de los avances tecnológicos en el medio social (mundial y América latina) Leonervis Hernández.