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11tIINISTERIO DE AGRICULTURAaBCC10N DE D[]BLICACIONBB, PRBN8A Y PRODAOANDA

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HOJAS DIVULCADORAS^A1^70 XXXVII NOVIEMBRE, 1 945 II N U M íi 9.

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SERVICIO Df FOMfflTO Df LR PRODDCCIOfl Df PIBRiflS MEDICIIIflIfS, ,^

EL EU^LTIVO DEL RUIBARBOPor Ma:^unr. M^vuEÑO Box.

Ingeniero Agrónomo.

11ur conocida ^del vulgo es una planta de tallo er^;alqo,sencillu, con hojas aago carnosas, en forma de rejón e in-

,

c

1'ista de una parcela de ruibarbo en e] campo de experiencias del Sen•icio.(Foto S. F, P. P. M.)

flores,c^e^nci^a poco densa y blanqu^ecina: es lavulgar acedera o vinagrera, nom^bres de^bidosal sabor ácido que el oxalato potásico comuni-

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . _ . . . . .Eetse Ho.t^s oe remiten gratis a quíen las pida a le Seccióa dePublicaciones, Prenea y Propaganda, del Minieterio de Agricultura

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ca a.sus úrg•aiio., f'oliarca, ^copnestibles. P•róximos pa^rientes de esiaespeci.e, pert,e^necientes, ,desde luego, a la misma familia, exist^nuna serie de vegetales con :propiedades medicin^ales,, tales que lapemsicaria, cuyas hojas se utilizan ^como vuln^erarias; da sanguin^-ria mayor o hi^erba ^de ^las cal^entu^ras; la bistorta, cuyo nombre alu-de ^a la •doble torsión ^de su rizoma, muy astri^ngente; la pimien•t.ade agua, utilizada en medi^cina vete^inaria; l^a ^hienba de la paci^en••cia, de raíce^ tónicas y, sobre ío^do, ^el ruibarbo, por sn^^s propied^i-.des .laxantes.

Con este mismo nornbre suelen designarse no ^scílo los verda-

deros ruibarbos, ^correspondientes a las especies botánicas Rheum

officinal.c Baillon y Rhn,urrt palmutum L., vari^ed.ad tanguticum,

mas también o^tras (Rii. rhaponticum L., Rh. undulatum L., ^etc.),

^que deben llamarse rapóntico^s, con los que suelen falsificarse e

hibridarse las anteriores. Por e^l lim^bo de sus hojas radicales se

dif^erencian unos ^de otros, pues en tanto que lo^s ruibarbos verda-,deros le tienen bendido, c.^ entero on lo^s ^rapóntico^^s. l^:^n. cuan.to

a la diiferenciac•ión de sus rizomas tal como aparecen en el comer-

cio, más adelante la indicaremos.

Los que interesan desde el punto de vista medi^cinal, .dada suriqueza en principios activos, son los verdaderos ruil.^arbos, ori-rinarios de la ^China. Pero como ^en ruropa ^se vien^en ^cultivandolos rapónt.icos con fines alimenticios, des^de el siglo xvrr, ^dada lafacili^da^d de ^hib^r.idación de las ^dis^tintas especies de Rheum, se p^re-sum^e que los o^btenidos en nuestro iContinente no son de raza com-pletam^ente pura, sino producto de la, hibridación de las especicsde uno y ot.ro grupo. E1 tínico ejemplar que ha servido de .basepar.a su aclirnatación en España tiene las característi^cas d^e hí-brido, pero, como veremos a continuación, ^el gran ^desarrollo ve-betativo adquirido, su rendimiento, el aspecto de los rizomas ^- sua^ctividad han hecho aconsejable su propagación, para la cual ^elServicio de I'omento de la P^roducción de Plantas Medicinales su-rninistra gratuitamente dichos rizomas a quien lo solicite para te-rreno y clima adecuados.

Caracteres botánicos.-Los ve^rdad^eros ruibarbos poseen un ri-zoma muy ^desarrollado, re^cubierto ^superio^rmente por los restosde los tallos y pecí^olas foliares correspondientes a ^los brotes deaños anterior^es. Hojas alternas, sencillas, muy grandes, con ner-

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^^iaci^o^n^es ^^alniin^rvi^s, ,con el Lordt^ hei^dic^ci;^ pecí^alos. m^^ís o ^^^i^^-lios ensr^ucha^ios ei^i lr^. base y con e^stípul^is ^ti+^^rnbcanosati ^^^1^6a-

^ta^ entr^^ ^í, que t^^ lu que se ^l^e^noniiii^ ocr^^a. I^'lores blau^.^uF^ci-

iiti^, lieriutií'r^^dita,. ^lispues^t^s f^n cimas, ^lue forina^i ^^ii ^-^^z ^^s-

Detallo de un sE^millero de ruibarbo. (Foto S'. F. P. P. M.)

^^i^,^,i;. C^11iz ^ic ^c^i^ ^^^^l^^lu:. lrc, ^^xl^^i^un; ^^ lr^^^ inf^^ruu^. ^1^^ In^

^^n^,^ 1^^. ^in; n^^^dio^ esl,íri ^ná^ dt:-a.rrollac^os. ^- rodcaii ^^r^i• ^in^i

^^<<<^le, a l^^n ^^,ian7l^r^^^, ^^i^^^ui^slu^ ^^^^ ^^1^^^ ^^i^rli^•^ilo^ trí^n+^r^^s, ^Jl^

lu^ cual^s cl csleriiu ^e ^1^^5^d^^^1^'^i, l^nr 1^^ ^lu^^ ^^E^^llltan, eii ^i^f;il, uu^^-

V"^` t°^(iUll^ll'V'>, CIC ÍI^iLfl1CIl^OS il^l'ti]Ii1C^flti ^' iU1^Pl'i1S U^'Rll'^ V' V't'PF<i-

lil^^^: ^^ ^1^^ ^^Ira ]^arl^^. ti lin j^i^(ilu. ^^nn^li^>>í^l^^ jiur tr^^: ^^^ir^^f^l^^;^1^11('1'^^Iti \ f•^^II('Pt'^('1'll^('^ ('ll 1111 11V'i1PlU UIIII(1(•II^i11', C-0II ^l'I'ti 1'Sfl-

lu,, f^^rnii^i^i^^lu5 h^^r ol^r^^s t^^il^to^ e^li^r ► ta5 c^as^ si^iil^l^lo^ ^' Ciaj^il^^-

^u^. l^ru(n rii ^i^^ueni^^. trí,''ono t- ^'^^ ► ^ lrF^; zilr^t^is ui^^nrl^r^uiu^,i^. ,^n-

^'^liiti, C^LII' till'^'PI1 C^t' ]111'(;10 (^f' ^Ú1^('Illl[Ii1C] Ĉlll; ^' ^lPll('t'^^1'IL ^^I' ^^^^ >I'-

^^^ilu^ inl^^^r^ius j^^rrsislente^.

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Clima.-tiegeta ^bien en nuestro país en toda clase de climas,^i •bien óon prefere_ncia en los tem^pladas y fríos continentalos deinfluencia atlántica, en situaciones expuestas al Norte y protegi-das del viento, co,u una altitud superior a los 640 metros sobre elnivel de1 mar.

Terreno.-En terrenos fuertememte estercolados, el desarrolloaéreo de la planta es grande, pe^ro su^s órganos. subterráneos ad-^quieren excesiva tendenc•ia a la ramificación, una textura espon-,josa y olar poco intenso. Su v^egetación en tierras fuertes es pre-caria, y sus órganos subterr^áneos quedan cortos y delgados. ^Porúltimo, en suelo^s bastante calizos prospera regularmente, aunqueíos rizomas "son irregulares y de color más desvaido que en terre-nos ^can menos eal. En resumen, el ruibarbo precisa suelas lige-^ros, profundos, con algo de materia orgánica y ealiza, frescos,permea^bles y, más bí^en, ^sombre^ados.

Propagaci6n.-Se multiplica por semilla o par trozos ^de rizu-ma, que es un tallo subterráneo, que na debe confundirse con las^raíces. Como ya hemos indicado que las especies cultivadas enEuropa son prabablemente bastardas de plantas espantáneas. asiá-ticas, la reproducción sexual, es decir, por semilla, ofrece el 1^e-Jigro de que aparezcan tipos originarias u atros nuevas, ^que des-harían la uniformidad de la plantación y producirían variacionesen la cantidad y compasición de los principios a.ctivos. No obstan-te, puede ser necesario en ciertos casos'recurrir a la multip^lica-ción ^por simiente, por lo cual vamos a indicar los dos procedi-.m^.entos.

Multi^licc^ciórz por rizomas.-Para e^fectuar e.ste medio de pro-pagación, al recolectar los rizomas durante el otoiio, se escogeránlos mejores. Una vez bien limpios de tierra, se dividirán en tantostrozas como ,yemas vigorosas posean, es ^decir, de cinco a sie.te,por término medio, en ej^emplares b'ien desarrollados. Para cbn-servar bien estas pedazos durante ^el invierno, se dispond^rán ers-iratificados en arena, si se cuenta con un local cerrado con^e-niente. En caso contrario, se hará una excavación de uno^s 50 cen-tímetros en suelo más bien ^seco; se colocará ^en c^l fondo una capaharizontal ^de renuevos y se recubrirá con unos 10 centíme^tros detierra; después otra nueva ^s^erie de rizomas, y así hasta tres-a cua-tro capas. Llegado el momento más aconsejable^ para la planta-

-s-

ciún, que es en i'ebrero o marzo, se d©senterraráu aqu^ellos renue-

^^os ^• se llecarán al terreno previamente labrado ^- abonado, e-omo

despu(s^ se dir^í. E1 marco de plantación será de í a 4.2^^ met:ro5 encuadro, ^bien recubiertos lo^ trozos d^e rizoma^s ^ camprimida la

tierra a su alred^d^or.Neso i^ pod.^'r ^^r»zirlntivo de las se^^t.i.llas.-Ta 1lemos dicho q>i^^

Planta de ruíbarbo al principío de su sep;undu afio. (Foto S. F'. P. P. rL)

lus f'rutos del ruibarbo son aqueííios, por lo cua^l pose^^n una sola^e^niilla. ^l^íil de ellos pesan, por término meldio, trece t;^ramos; en

con^ecuencia, un ^ramo contie^ne uno^s ^5 aquenio:;.

f^, máxima g•eríninación logra^da en nuestro labo^rai.orio f'ué(l^e <i`^ por 100, eu un p^lazo de ducc díats, con ,^ranos t^. ]a oscuri-(lad ,y- a una iemperat>íra alred^^dor de lo^s 25 ^rados ^'en^í^ra.dos.

Respectu a^]a duración de este poder ^ermin^íi^-o, ^e ol^seí^^ó >mrir^^c^enco l^ento dr'sde t^] rnismo aña ^dc la re^colec^ci^ín. eon un 8^i

pi^r 1^^O^a lo^s tres ni^escs de é^sta, hasta ún 35 por 200 el ^cuarto año.T'rt^pn.ra-^^iór^' rl^el semillero:--^La sienibra dehe réalizarse ^^n s°^-

millf^ro de canra caliente. ^ 1?ste :se preparárá'^en ca,jonera, cu:l^ieriocon .cristalera o, eii su d^efecto, con^ zarzos ,li^echos de paja^ de^^^cé-real. ^Se dispondrá una capa dc est.iércol fresco d^c^ caballo de unos^^-:'i0 centímetros, colocado en estratos súce^ivainente regados ypisados; ^d^espués :5e recuhrir^i con una ^capa ^de mcntillo de ho,ja,:^ l,a, que se dará un ^esp^esor ^de 40 centí^metros.

,^ie^,^Gra.-La época más adecuada es en el mes dc marzo, ^,a^-l^ínrl^^se por metro cuadrado de semillero^ unos 20 ^^ramos de aque-i,ius. l:a nascencia s^c^ produce a los ^quince días, aproximadamen-ir. :5^^ darún los rie;os y escardas ne^cesarias para tener ^el semi-llero en ^buenas condiciones ^de ^hurnedad y limpio d^e. malas hicrbas.

I^n^^ic,ado.-En sept.iembre conviene ha^cer un repicado sobrec^r,^s hi^en la^bradas y pt^epa^radas co^n una mezcla de mantillo ^-ti^^rra., a l,artes i^uales. Se di^sponen los pies a 50 centtmeta•os en^;i.iadru, y ŝe^ tendrá siempre da plantación limpia, con la tie^rrabien mullida ^- con adecuada humedad.

l^;sia pr^^ícti^•a ^d^el repicado es mu^y convenientc, pues esiimul,icl ^lesaarrollo del ^sisiema ^radi^cal, con ^la c^nsi,guicnic reduccibnrlr^ fall^7:^ ^e^n el trasplante ^d^efini^tivo. Adem^ís, se ^ha. ^comprobadorlu^, c«n esta p^rácli^ca se ^lo^ran rizo^ma^s y^raíce^s nal:,iformes, li^sas^- l^ocu ramifi^adas, como ^convi^ene ^para obl^cner una. dro^ga liiuhia^- ^lr^ calid^ad.

Lnl,or^>s ^^repctrcrlorius y^r^bona^^lo.-^l terreno ^donde se va}-ana l^unr^r la^s plan^titas pracedentes.de la ^e^ra ^de repicado o, m,^joi•

ai,^i, ]„s trozos de rizoma. 5e..^dar^í: una. ^bucna la^^hor tan prnntoc^^mo s^e le^^ante la co:-<<cha anieriar. ^Caso ^de que el ^,uelo preci:eun ^^^stercolado, debe r^^alizarsc ^+ste lo^ m^ás tarde ^en enero, pues sila incorporación es recienle, las plau#as adyuieren una ^perjndiciali^^cudciicia a la ^ramiFi^cación ^de sus ^ raí^ce^s. ,

:12ediant^^ una ^bina, señui^da ^del correspondicnl^e rastrilla^lo, afin^^s de fehrero, pue^le incorporarse f^l a.hono mineral, cuya 1'ór-u^ula..,iepe^nde de las circunsta:ncia^s que concu^rran ^en cada ca:,o. Atítulo ^de orientación, pueden ^darse, para una ^ti^erra franca. ]assi^uientes ^cifras, e^presadas en ]^ilo^^ramos t^or ^rea: 3.50 de su-perf'o^fato de cal 1e/^18; 2 de sal potásica, •1.^:^ d,^ ^^ulfato amb-

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nico. Si el LerrFn^^ e; ► r ► t ► }- l^^^l ►^r ►^ en ^^^►.liza, cuncien^^ iui e ►► cala^a^^

dur^^ ►► te ^el inviernu a^r< ► zí^u .de 1:^ a. `^0 Icil^^ĥ rr ► mo^ 1^ ►►^r ^ír ►^ai.

Cuicla ►l^o,e dir^'a^rtte lu ve^^tución.-t^ los ^^einte o veiniicineo

díAS ^de enf ►^rrtid^us lo:, 1r^izu^ ^lc riu ►► u^ts, ^^^^micnr^lu a sur^;i^r ;u^

ru.jo^^ hr^^l ►^;, ^le du ► ed ►^ ^sr^li^n i^l ] ► ri^u^r ^ ► ñ ►^ ►►► ias scis ^hoja^. i7t ► ,,

ln^^ru ^E^ j^i^^^r^i ►^n ^inranl^^ ^>1 in^^irrnn. Lr ► s ^I^in^ ► ^ ►► ► i ►1r ^1^)^^^n ► l^^ ►►

Un ejemplar ^Ic ruibarbo en plena Iloración. (Foto S. I^. P. F. 1VI.)

tl^' ^il^ ^CRL'i1CfCP1^^ICiLS lÍ('^ illl(li iiti^ C(11110 ^Oti )'ICbOS^ CiLtiU (lf', tl^U^'_ C^

lerrenu n^^ j ► o^^e^i 1^^1 i'r^^;cur^ ► 5n^ficicu(e par^ ► ]^r ► ^ticin^dir ► I^^ rllus-

^'.11 ('ili_i11^0 iL ('^^('iil'11'<15, j(^1^O tiE', ^)I'C'CISc`l^ll UI1^ O C^^OB, jllll'^ ill ^il1E`-

lanlar la vc^^;et^ciú ► i, ^► ^l^jtti^ ►^e ►► lal ^lesa ►^^rullo las lio^j^s, qnc iui^^i-

^l^eu el brolc de in^ ► las hicrbas alrededo^r de la^s j^lant^; ^de rui^Uarl^o.

F.n utoño, al ii ► ici^ ► rsc luti j ► rin ►►^rus frí ► ^s, ^e a^^ur^car^í► n ésta5 con-

^-enicn^temenie, coi ► al^j ►^to de ^r ► ^sgu^i.r^.iar ]a ^^enta princi^^2l ^^l^e la

ucc^i^íu cle la5 hc1 ►► cl^^s.^

La hrul.aci^ii ^e i ►► ici,i el s^^^undo año ^t t'iirt^s ► ic. fel ► r^^ro^. ^e^-

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perimentando un gran desarrollo las ooht^ o diez hojas nacidas.A.unque algunas plantas ^emiten inflorescencias ya en eat^e año,.es en el tercero cuando la floración es completa, dura.nte el mesd^e mayo. Exoep4.o en el ^caso de que se desee ^o^btener semilla, eáconveniente cortar los tallos florales, práctica ^que redunda en be-neficio del rendimiento ^de la planta,ción.

Cultivos asociados.-Conviene advertir que ^el ^ruibarbo a,dmiteperfectamente la asociación de plantas de hu^eria durarite los dosprimeros añas, con lo cual no sólo s^e obtiene un nuevo ingreso,sino ^qu^e las iás frecuentes e intensas Pabores que e1 cultivo hor-tícola precisa favorecen tam^bién la ve^geta;ción de esta po.ligonáoea_

Momento adecuado para la recoleccidn. - Una plantación ^derui^barbo pro^duce ^buenos rizomas ^hasta l^as ocho años, y aun más;pe,ro como no conviene acupar la tierra durante tanto tiempo, 1aé.poca óp{.ima, para com^pagina^r la máxima ri^queza en principiosactivas con el mayor renrlimiento cuantitativo y la mínima per-manencia en P1 su^elo, es el cuarto año de vegetación en el terrenodefinitivo.

No o^bstante esta aspiración, circunstancias de orden económi-

co pue^den abligar,; en casos determinados, a rea!lizar la recolec-

^^ión el terc^er año, lo que puede admitirse, ya que no aconsejarse.En cambio, es práctica totalment^e reohazable desenterrar los rizo^

mas el segundo o primer año, por ser pequeños, de escasa acti,

vidad farmacológica, consistencis hlanda y conservación difícil.Además, camo las d,os primeros años caben cultivos intercalares

entre sus líneas, el valar de las carrespondientes casechas ño hace

anerosa la ocupación del terreno por e^l ruibarbo, más que el ^il-

timo, o los das últimos años, según ^ue la reoolección se efec-túe en el i^e^rcero o el cuarto. En cuante a épaca del año, la más

adecuada es el atoñq.

Forma de efectuar la recolección.--En primer lugar, y pazra, te-ner una orientar.ión respecto a los límites a donde llegan log ór-ganos subterráneos par oo^seohar, s.e hará un su.rco paralPlo a lalínea de plantación, a unos 25 cerntímetros de ésta. ^Gonocida deesta manera la profundidad media d^e rizomas y raíees, se efectúaa hecho el desenterra^do.

Una vez sacados, se sacuden y frotan unos con otros, para lisn-piarlos de ^la tierra a^dherida. N^a es. convenienie lavarlo^s con agua,

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1>0l• lo cual ya considerarlios antes los rizomas lisos y redondoscomo más convenient©s, al limpiarse con más facilidad. E;fectuada^esta limpieza, se separan de los mencionados órganos las insercio-

nes foliares, lo^ brotos ^• las raíces. Estas, a su vez, se cortan par subase para aislarlas ent^re sí; las d^elgadas se desechan, y las gruesas

se utilizan también como droga (especialm^ente si son de ]a. espe-

Detalle de un ramo fructffero d^e rulbarbo. (Foto S, F. P. P. MJ,

e•i^^ ltli. ^ul^^iuJum, ^•arieda^d G^c^igicli•currln^, a diFereneitl de Iri ^ner-^•^ulcía de uri^;en ^^^hinu, i'arma^d^l sólo por ri•r^amas. Los hrote^s ^^i-

nuro:^os, unido ^cada uno a un trozo de éstos, se destinan a la inul-t,i ^^licació ►► .

<'r^i.^l^r^(os g^osterior^•.^•.-1're^^ia tnla primerti ^d^esecaciún realiz^^-^la cotl prefercncia eii ull lo^cal cu^bierto^ o. si no es po^sible, al aire

librc, cn sitio sombreadu, adquieren lo^s rizolna^s y raí^ces ,^rues^^^

una consi^f^encia tal que se desprend,e- fácilmente su corteza, ope-l^+lción quc sc pucde h1^er a mano o con un cucllillo paco corfan-

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te, siempre con cuidado de no^ lastimar los tejidos sub^-acentes..Cuando dichos órganos son ^de peco diámétro, en vez de pelarse,.s^c raspan con el cuchillo. ,

Una vez mondados, los carnosos rizomas se cortan transvr^r-

salmente en trozo^s ^de unos ocho centímetros de espesor, que tie-

n^en un intenso color ^amarillo. Se desecharán los de consisterr-

sia esponjosa„ deteriora,dos o débilmente coloreados. Cuandc^

se trata ^de ejemplares voluminoso^s-se cita el ^caso de uno del^rosor del brazo-, se acostumbra a hendirlos en dos o tres se^•-

ciones longitudinales, que ^después se cortan del modo airi,es iu-

^iicado.

Desecacicín.-Así preparados ]os rizomas y raíces, ^s^e procede

a su deseca^ción definitiva, que les vuelve rugosos. Para ello, se dis-^^unen los t^rozo^s en zarzo•s ai^slados del suelo y colo^cados en un lu-

cal cubierto y s•e^co. Aunque el tiempo^ qu^e dura est.a desecaciúu

depende, camo es nátural, de la humedad ambiente, •puede calcu-

larse por término medio unos sesenta a s^etenta ^días. E^s p^rácticrr

corriente ^en ciertas zonas productoras perforar las rodajas ^• eu-

;^•arzarlas en una cuerda, ^que después se cuelga; de este modo la

^lesecación ^es más uniforme v menor el espacio o:cupado, si ^hier ►resulta más cost.osa la operación.

En el caso de tener que preparar grandes cantidades de rir^^-

rna^s, la lenti#,ud de l^a desecación .natu^ra^l^ impli^ca el riesgo de en-

mohecimiento, por lo ^cual ^es aconseja^bl,e la artificial, a una tem-

lreratura que no pase ^le los^ 30 grados centígrados.

Características de la droga^La mereancía, tal como se c^-l^ende en el comercio, tiene un o^lor aromático caracferístico ^- sa-

bor amarg,o, astringente. A1 masticarse, cruje entre los dien#es, lror

contener gruesos cristales ^de ^oxalato cálcico. v_ tiñe la sali^-a deama^rillo. En cambio, los rapónti^co^s no ^cru,jen ^- tienen un ^5a^bor

n^c•nos fuerte que lo^s ^ruibarbos verdaderos.

Las rodajas de éstos tienen un color amarillo anaranjado, y

su superficie s^ue'le estar recubierta de un polvillo amarillento. La

I'ractura ^es irre^ulah, gr.anulo^sa. Desprovistas ^^c• corteza estas ro-daja^s, 1a parte externa leiiosa pre^^enta finas y abundantes estría5

r•adiadas; después vienen las características esírellas-muy abun-

dantes en la ^droga ^china, mucho menor en la eu^ro^pea y ausentes

en los rapóntico^s-, fo^rmadas ^de un cerco oscuro, de un par ctc

- II -

milímetros de diámetro, y muc;hos radios delgados, amarillo-ro-sado^s.

La diferenciación entre los verdaderos ruibarbos y los rapón-ticos no e^ra fácil para el profano con las cara^cterísticas anatómi-cas de los^ rizomas, aun en la época en que ^el muibarbo cnino era elúnico oficial. Pero admitidos ya en algunas farmacopeas los rui-barbos europeos, ésto^s no presentan tan claramente como los chi^nos las clásicas estrellas de ^su sección transversal, por lo cual suc,nnfusión con los rapónticos es nl'as fácil, y para identificarloshay que recurrir a procedimientos que no están al alcance ^dela^;ricultor (fluorescencia a 1a luz ultravio^leta, reacción colorimétri-ca de las antraiquinonas, ^etc.).

Rendimie^zto.-E1 rendimiento medio de rizomas ^- raíces enfresco puede cifrarse ^en unos 420 kilogramos por área, que que-dan reducidos con la desecación a unos 40 lzilo,gramois de droga.1{^1 kilogramo de la de procedencia europea ^se cotiza alrededorde las 45-90 pesetas (septiem^bre 49^r5).

Riqtcezn en principios nctivos.-aLa calidad del rizoma de rui-barbo viene determinada en función de la cantidad de unas sus-tancias que posee, denominadas antraquinonas, y que en ^la plan-tación oht^enida en España po^r no^sotro^s existían en la proporcióndel 3,5 por 100, porcentaje algo inferior al ^de la droga china, perosuperior a los de muchas procedencias europeas.

^Icr,ide^ztes y c^zfermed^zdes.-El ruibarbo ofreae en nuestro paísuna sanida^d e^celente. En los cinco años de ĉultivo de esta plantasólo se ha podido apreciar algún ataque de pulgón a las hojas.

Como ya h^emos indi^cado en otras ocasiones, se emplea.n contra

esta plaga productos nicotinadas. Una fórmula es disolver en ^100

litros de agua 500 gramos ^de jabón ^b^lando y 50 gramos ^de nico-tina, de una riqueza del 95-98 por 400, ó 150 de ^sulfato de nico-

tina del 40 por 100. Para s,u preparacián se disuelve ^1 ja^bón ^enseis litro^s de agua ^caliente, y luego se diluye todo en 90 litror

de agua. La nicotina, o^el sulfato, ^se ^disuelv^e en los. cuatro litrosrestantes, que se añaden sobre la disolución ,jabonosa, agita^ndocontinuamente.

Tam,bién se encuentran ^productos ya preparados. en el comer-cio, que ^basta diluirle^s en el aaua en la proporción indicada ^enlos envase's, y:que suel^e ser del 4 por 100. F.1 empleo de ^polvos ni-

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cotinadas es igualmente aconsejabl.e en este caso, dada la rugosi-da^d de las hojas del ruibarbo.

Cuando la droga se almacena en sitios húmedos, es atacatiapor ^un ^hongo; Penicillium crus^taceum {^L.) Fr. Eiste mo^ho recubrelos t^rozos ^de rizoma de una pátina verduzca má^s o m^eno^s ^difusao salpicada por to^da la droga. Se elimiila este hongo medianteun enérgico cepilla^do y lavado ^con alcóhol. ^Como^ con esta ope-ración s^e os^curece el color, suele ^Idulterarse mediante espolvurea-do co^n polvo de Tui^barbo piara que ^recobTe el primitivo, pero, noobstante esto, se puede ,a^,preciar el ataque por ^el olor a moho y 1aconsisi.encia esponjosa d^e la masa. Los rizomas así tratados sonmenas activos^, ^por lo cual ^sufren una fuert.e depreciación. ^Esta esla razón par la ^que ^hemos aconsejado anteriormente ^q^ue sea con-s^er^^ado el Tui^barbo en locales v ambientes secos.

ULTIMA8 O^BRAB DE LA BECCION DE PUBLICACION^E8, PRENgA

Y PRaPAGA,NDA

LOS FLEOS, EXCEZENTES PLANTAS PRATENSESPOR EL INGENIERO AGRONOMO D. RAMON BLANCO

Editado por la Seccíón de Publicaciones, Prensa y Prop aganda del Miniateriode Agricultura, Dicha obra gublica interesantea monograffae de plantas, príncl-palmente prateneea.

CLIMAS DE ESPAÑA

POR EL INGENIERO AGRONOMO D. JOSE M.• SOROA

Obra utilisima para e1 agricultor, toda vez que se ofrece la descrlpci0a clima-tológica de España, que tanta ínfluencia ejerce sobre las produccionea de Soray fauna de las diversae regíonea del pais.

PLANTAS TINTOREAS, TANIFERAS Y CAUCHIFERAS

POR D. JOAQUIN MAS-GUINDAL Y ASCENSION MAS-GUINDALEn este interesantiaimo trabajo se hace un detallado estudío de lae ple.ntas

Untóreas, taniFeras y cauchfferas, deade los puntos de víata botánico, qufmicoanalitico e índuatrial y de sus variadas aplíca,ciones.

CONFERENCIAS PRONUNGIADAS EN LA EMISION RADIO AGRICOLA

Se han recopilado en ua tomo las conferencias pronunciadsa en lae e^mieioneaRadio Agricola, durante el aSo 1944, en las que ae ofrecen al lector por ^pecislietaeea la materia, los más interesantes temae relacionadoa con la Agrícultura, Ga-naderla e induatrlas derlvadae.

GRAFIGAS UGUINA' MELENDEZ VALDES, ĵ ' MADRfD