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MAYO 25 DE 2005
LA ECONOMIA COMO PARTICIPACION POLITICA: Una propuesta para profundizar
NABOR ERAZO DELGADO
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FORO CIUDADANO SOBRE CULTURA POLITICA PARTICIPATIVA CEDAL –ALCALDIA DE CARTAGENA
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LA ECONOMIA COMO PARTICIPACION POLITICA
Una propuesta para profundizar
Ponencia presentada por :
NABOR ERAZO DELGADO
FORO CIUDADANO SOBRE CULTURA POLITICA PARTICIPATIVACEDAL –ALCALDIA DE CARTAGENA
MAYO 25 DE 2005
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CONTENIDO
1. El proceso productivo esencia de la economía y origen del Estado .............. 4
2. Las decisiones políticas como intencionalidades de intereses económicos
antes que beneficios para la sociedad civil. .................................................................. 5
3. Los modelos de desarrollo en América Latina y su tránsito hacia la
globalización .............................................................................................................................. 6
5. Diagnóstico de los factores productivos de la economía globalizada............. 9
6 Diagnóstico del sistema económico colombiano .................................................... 14
7. Aproximación hacia una propuesta de participación política desde la
economía................................................................................................................................... 18
8. Referencias Bibliográficas.............................................................................................. 22
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LA ECONOMIA COMO PARTICIPACION POLITICA1
Por Nabor Erazo Delgado2
Abordar la economía como participación política desde la sociedad civil,
constituye un atrevimiento conceptual, por cuanto la exclusión social que
padece la sociedad civil en el Estado Social de Derecho es consecuencia
de los efectos del sistema económico regido bajo los designios del
mercado y del capital, donde la competitividad y concentración de la
riqueza constituyen factores determinantes de su racionalidad económica.
Sin embargo, es conveniente poner a consideración algunas disertaciones
epistemológicas de interpretación coyuntural de la economía globalizada y
su incidencia en las economías de piases menos adelantados en el cual se
inscribe Colombia con toda su problemática económica, política, social y
cultural. La posición que aquí presentamos constituye un referente
teórico para generar conciencia y comprender las causas y consecuencias
de un modelo neoliberal impuesto, generador de pobreza e inequidad
social y es aquí donde la participación y la búsqueda de reconocimiento
para buscar alternativas viables de desarrollo sustentable, de
mejoramiento de la calidad de vida y de una economía más social y
humana aún son posibles, siempre y cuando generemos una conciencia
social para generar procesos sinérgicos alternativos al paternalismo del
Estado benefactor.
1 Ponencia presentada al Foro ciudadano sobre cultura política participativa celebrado en Cartagena
el día 25 de mayo del 2005.2 Economista Universidad de Nariño, con postgrado en Administración Pública, ESAP-Bogotá, Gerentede FORBES TRADE, Profesor de Tiempo Completo Facultad de Ciencias Económicas y Admintrativasde UNIMINUTO, Director Aseguramiento de la Calidad FCEA-UNIMINUTO, Catedrático UniversidadExternado de Colombia.. Exdecano de Negocios Internacionales Fundación Universitaria Latina deColombia.
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1. El proceso productivo esencia de la economía y origen del Estado
Comprender la fenomenología de lo económico, su incidencia directa e
indirecta en el devenir histórico hasta la consolidación de la sociedad
globalizada con unas características muy particulares en lo económico,
político, social y cultural para cada país, bloques económicos y demás
realidades supranacionales, solo es posible si se reconoce que la acción
del ser humano sobre la naturaleza que le rodea, ha estado marcada por
la permanente búsqueda de satisfactores y bienes económicos -tangibles
e intangibles- para satisfacer las necesidades fundamentales presentes y
futuras, individuales como societales.
Resolver el problema de supervivencia en los primeros estadios de
desarrollo de la humanidad significó un reto que demandó grandes
esfuerzos por la precariedad de medios e instrumentos que permitieran
optimizar y superar su dominio sobre una naturaleza inclemente. Gracias
a la capacidad de raciocinio del ser humano, la práctica cotidiana, su
adaptabilidad e inventiva conllevaron a crear medios e instrumentos
mediante los cuales el proceso productivo resultó ser más eficiente al
generar excedentes económicos que superaron ampliamente las
demandas societales. Sin embargo, un mayor dominio sobre la naturaleza
implicó la especialización del trabajo, la división del trabajo y por
supuesto la diferenciación social, creando la necesidad de un ente capaz
de cohesionar la naciente sociedad: la aparición del Estado como garante
del direccionamiento económico, político y cultural para una sociedad
dividida en clases sociales –visibles e invisibles- y con roles muy
diferenciados. Queda así demostrado que el proceso productivo, esencia
de la economía, ha constituido históricamente la base determinante sobre
la cual se ha erigido el Estado como poder supremo, donde las decisiones
políticas siempre han tenido una intencionalidad económica que afecta la
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sociedad, su cultura y grado de desarrollo para determinada época
histórica de la humanidad. Sin embargo, tradicionalmente la
representatividad de los intereses de la sociedad civil no han sido
decisivos a la hora de generar políticas públicas encaminadas hacia la
generación del bienestar social.
2. Las decisiones políticas como intencionalidades de intereseseconómicos antes que beneficios para la sociedad civil.
El proceso productivo de bienes y servicios como sistema sinérgico en la
sociedad globalizada se encuentra gobernada por relaciones mercantiles,
donde el fetichismo del dinero y los mercados financieros permean la
política, la cultura y el desarrollo socio-económico de la sociedad de
consumo. La cultura mercantil ha invadido todas las esferas de la vida
social y espiritual, la economía no real o sistema financiero nacional e
internacional rigen los destinos de países, naciones, organizaciones,
familias y personas. Las relaciones sociales se miden en términos de
relaciones mercantiles (CUEVAS, 2001). Los agregados financieros
superan ampliamente la economía real, lo cual genera actitudes
especulativas con graves consecuencias cíclicas y recesivas con efectos
nefastos para la sociedad civil de países no desarrollados.
Históricamente desde los inicios del capitalismo mercantil hasta nuestros
días, las decisiones políticas de los diferentes agentes económicos
siempre han estado asociadas a racionalidades de índole económicas, de
primacía del interés individual en vez del colectivo, de la rentabilidad, el
lucro y la ganancia antes que los beneficios sociales y solidarios para la
sociedad civil.
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Con el descubrimiento de América y la conquista de amplios territorios
por parte de los nacientes estados-nación europeos, su avasallamiento
mercantil constituyeron decisiones políticas fundamentadas en intereses
estrictamente económicos antes que la representatividad de la sociedad
civil
La primera guerra mundial también obedeció a un reacomodamiento
geopolítico de mercados entre potencias colonizadoras con intereses
económicos definidos. Igual motivación condujo la segunda guerra
mundial y la posterior tensión mundial entre potencias, la llamada “guerra
fría” como una medición de fuerzas de confrontación entre dos sistemas
económicos contrapuestos. Nuevamente el ámbito económico resalta
como condicionante de decisiones geopolíticas estratégicas, aún a costa
de incurrir en altos costos sociales para la sociedad civil.
La tendencia a la conformación de bloques económicos, acuerdos
bilaterales y multilaterales entre países, sus decisiones políticas también
están asociadas a intereses estrictamente económicos. En conclusión, las
decisiones políticas de cualquier agente económico –excepto la sociedad
civil- en la mayoría de los casos contiene un transfondo de racionalidad
eminentemente económica.
3. Los modelos de desarrollo en América Latina y su tránsito hacia laglobalización
La ciencia económica como hija predilecta del capitalismo, desde sus
inicios estuvo fundamentada en principios del laissez faire o liberalismo
económico donde el mercado y la iniciativa privada constituían las fuerzas
motrices de la acumulación del capital y el desarrollo económico. El
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Estado estaba destinado a cumplir un papel de gendarme y garante de la
propiedad privada y demás derechos jurídico-políticos de la sociedad civil.
Con la crisis del capitalismo de los años treintas –la gran depresión- y con
ello el juicio a la veracidad del modelo neoclásico, nace un nuevo
paradigma de política económica: el intervensionismo de Estado derivado
del planteamiento de la Teoría General de la Ocupación y el Dinero de
John Maynard Keynes.
El nuevo rol del Estado como agente económico para solventar las
imperfecciones del mercado y la iniciativa privada, cobra vigencia nuevas
estrategias de política económica: el gasto público y la política fiscal
constituirán hacia futuro la esencia del modelo intervensionista de Estado
en la economía.
La aplicación del keynesianismo en América Latina generó un proceso de
desarrollismo hasta el exceso de generar un agigantamiento del Estado,
el incremento del déficit fiscal, la deuda externa y un aparato estatal
burocratizado, ineficiente y parasitario. Sin embargo, el modelo
estructuralista planteado desde la concepción de la CEPAL produjo una
fenómeno de reivindicación social, especialmente en el aspecto agrario y
en la concepción de un tratamiento más justo dado el intercambio
desigual entre centro-periferia en materia de comercio internacional. La
sustitución de importaciones y el proteccionismo con fines de
industrialización endógena, constituyeron una utopía más que no
surtieron el efecto de liberación de la dependencia de Estados Unidos.
Ante la inoperancia del modelo keynesiano y Cepalino para encausar el
desarrollo de países latinoamericanos, sumadas la crisis del petróleo de
las años setentas, la proliferación de dictaduras como alternativa a las
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débiles democracias de un Estado Social de Derecho, estaban las
condiciones para implementar un nuevo paradigma económico donde el
mercado, la propiedad e iniciativa privada y el dinero junto al
debilitamiento del Estado, constituían las premisas para configurar el
modelo monetarista de la Escuela de Chicago, el cual aunado a la
apertura económica y el cumplimiento de los postulados del consenso de
Washigton confluyeron para la estructuración del modelo neoliberal
avalado por los organismos financieros multilaterales –FMI, Banco
Mundial- como condición para el otorgamiento de créditos e ingerencia en
la política económica de países con graves consecuencias de inequidad
social, incremento de la pobreza y concentración de la riqueza
4. La globalización y el deterioro del papel del Estado Social de Derecho.
Asistimos a un fenómeno nunca antes visto: la globalización como nuevo
paradigma que pretende dar explicación a la inteconexión y dependencia
de mercados entre bloques económicos, países, y su afectación a
comunidades, familias e individuos en el contexto mundial. “ el proceso
de globalización económica es una de las fuerzas más poderosas que
están operando en el mundo contemporáneo. Este proceso esta llevando
a una integración creciente de los mercados de bienes, servicios, trabajo,
inversiones y tecnología y ha venido transformando la vida de las
naciones tanto de aquellas que deciden insertase con la economía
mundial como en aquellas que queda marginadas” (Pizano, 2004). Si bien
se concibe la globalización como un fenómeno predominantemente
económico, en la práctica éste determina relaciones de interdependiente
en lo político, social y cultural.
Sectores productivos estratégicos se han configurado por la aplicación de
la ciencia y la tecnología (microelectrónica, informática, robótica,
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nanotecnología, biotecnología, genética, TICS, etc), donde la innovación y
desarrollo de nuevos productos, servicios y mercados, han generado un
novedoso espacio productivo a escala mundial con evidentes
repercusiones para economías no desarrolladas.
Las nuevas tecnologías de la Información y comunicación (TICS), a través
de las redes integradas de ordenadores, fibra óptica y satélites, han
favorecieron la expansión de los mercados, en especial de los financieros
y bursátiles, hasta desembocado en un mercado global en tiempo real
donde se realizan cientos de transacciones financieras, configurando
nuevas oportunidades de realizar negocios a través del ciberespacio. El
paso de una economia-mundo articulada sobre la base de los
intercambios realizados por las economías nacionales a una economia-
mundo-globalizada, en la que los mercados globales marcan las pautas,
ha reducido los márgenes de actuación del Estado social de derecho para
dar respuesta a las demandas creciente una sociedad civil cada vez más
empobrecida y excluida de los beneficios de la globalización.
5. Diagnóstico de los factores productivos de la economía globalizada.
Concebir el proceso productivo como esencia y objeto de la economía,
como un sistema sinérgico de factores, analizar cada uno de sus
componentes bajo principios de distinción, conjunción e implicación para
luego deducir la caracterización la economía globalizada y su incidencia en
los ámbitos económicos, políticos, culturales y sociales, constituye un
propósito de análisis.
La naturaleza sigue siendo el factor esencial del mundo de la vida, fuente
de recursos renovables y no renovables, ecosistema universal fuente de
vida y condición existencial de la humanidad. Sin embargo, la dominación
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del ser humano hasta un punto de sobreexplotación de sus recursos
hacen peligrar el desarrollo sostenible para futuras generaciones. Las
economías industrializadas son las responsables de la mayor
contaminación de planeta, de la generación del efecto invernadero, de la
degradación del medio ambiente y de atentar contra su biodiversidad y
recursos naturales de países no desarrollados que al carecer han sido las
economías industrializadas. El monopolio sobre el mayor consumo de
energía de dicho ecosistema universal está representado por las
economías industrializadas potencias que hoy detentan el poder
económico en el mundo, con graves perjuicios para el aparato productivo
de la mayoría de países no desarrollados que carecen de capital humano,
de ciencia y tecnología para encausar el desarrollo sostenible y
sustentable hacia la superación de la pobreza y exclusión social de gran
parte de la sociedad civil.
El capital como factor interviniente en el proceso productivo no solo lo
constituye la infraestructura física del mundo artificial sino también el
sistema financiero y sus derivados que fluyen y confluyen en el mercado
de capitales y centros financieros mundiales al vaivén de perspectivas
expeculativas, de corrientes de capitales golondrina cuyas burbujas
financieras generan crisis orbitales que hacen tambalear las frágiles
economías de países subdesarrollados y en vías de desarrollo. La
magnificencia del dinero y las finanzas internacionales han dinamizado la
tercerización de la economía en casi todos los países del mundo
desarrollado y no desarrollado en contraste con el crecimiento del sector
real de la economía. Pero el capital también hace su manifestación en el
mundo de los artefactos representado en las grandes megaciudades,
empresas multinacionales y transnacionales, emporios financieros,
megaconstruciones y medios de transporte, todos representan una
muestra de la concentración y acumulación capitalista cuya reproducción
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y crecimiento solo es posible mediante la apertura de mercados de países
no desarrollados, proveedores de recursos naturales y materias primas
con grave deterioro de los términos de intercambio los cuales repercuten
en una sociedad cada vez más excluyente.
El tercer factor del proceso productivo en la economía globalizada está
representado por la tecnología, una derivación de la conjugación
simbiótica entre ciencia, investigación y desarrollo aplicado, proceso que
obedece a una constante minimización de costos vía incremento de la
productividad por la incorporación de aplicaciones mecánicas, robóticas,
cibernéticas y de ingeniería tecnológica a los procesos de producción de
bienes y servicios.
Ciencia y tecnología patrimonio exclusivo y estratégico de economías
industrializadas, constituye el binomio mediante el cual perpetúan su
poder hegemónico en el panorama mundial. El acceso a la tecnología
para países del tercer mundo es un imposible, pues constituimos tan solo
mercados para consumir productos y servicios tecnológicos pero no las
invenciones científicas para aprovechar la biodiversidad y recursos
naturales que permitieran alcanzar un nivel de desarrollo capaz de
contribuir a la superación de la pobreza y menguar la exclusión social de
la mayoría de su población.
Si bien los avances tecnológicos han contribuido a una mayor dominación
del ser humano sobre la naturaleza, los peligros derivados de su
incorporación que atentan contra las leyes naturales, lo hacen más
vulnerable hasta el punto de arriesgar su propia existencia sobre la faz de
la tierra. Fenómenos como la radiación de desechos tóxicos y los peligros
de la energía nuclear, la biotecnología y los productos trangénicos, el
genoma humano y la manipulación irresposable, el efecto invernadero, los
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piratas informáticos y la fragilidas de los sistemas,etc. son ejemplos para
reflexionar y repensar los posibles efectos entrópicos que puede originar
la misma naturaleza.
El trabajo como capacidad racional y potencialidad del ser humano para
proveerse de bienes y servicios y satisfacer sus necesidades
fundamentales presentes y futuras, constituye una condición de
existencia material y espiritual y por lo tanto, a diferencia de la
naturaleza, el capital y la tecnología, no es un factor o recurso desde una
perspectiva social valorativa, sino que es el creador de los demás factores
descritos, pues todos encierran trabajo plasmado, acumulado como
producto social. “El trabajo constituye mucho más que un factor de
producción: propicia creatividad, moviliza energías sociales, preserva la
identidad de la comunidad, despliega solidaridad, y utiliza la experiencia
organizacional y el saber popular para satisfacer necesidades individuales
y colectivas” (Max Neef: 1995).
La subestimación del trabajo en comparación con el capital y la tecnología
en el capitalismo y la economía globalizada, constituye la causa del
desempleo o aniquilamiento de las potencialidades humanas como
creadoras de riqueza y bienestar social. Aquí radica la pérdida de la razón
de ser de la economía como ciencia social capaz de garantizar el
mejoramiento de la calidad de vida de la población y no como medio para
ahondar la inequidad social, la concentración de la riqueza consecuencia
del mercado donde la racionalidad competitiva excluye al trabajo como
fuente y fin de lo económico. Además, una gran proporción de quienes
viven en una pobreza extrema se encuentran en países económica y
socialmente excluidos. “En 2002 la Conferencia de las Naciones Unidas
sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) estimó que el 81 por ciento de la
población de los países menos adelantados (PMA) vivía con menos de 2
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dólares al día y un 50 por ciento con menos de 1 dólar al día . En los
últimos decenios ha aumentado exponencialmente la desigualdad en
muchos países y entre los más ricos y los más pobres en el mundo” (OIT,
2003).
Las consecuencias, el alto desempleo, la agudización de la pobreza y el
marginamiento de varios sectores de la población económicamente activa
de las partes, incluso de países industrializados. Crecimiento económico y
concentración Vs. crecimiento de la pobreza y exclusión social constituyen
la contradicción del nuevo milenio.
Por último, como elemento articulador de todo proceso productivo lo
constituye la empresa u organización como actualmente lo definen las
teorías administrativas. La gestión organizacional y sus procesos
administrativos –planeación, organización, dirección y control- son los
encargados de combinar con eficiencia, eficacia y productividad de los
diferentes recursos para transformarlos en bienes y servicios orientados
hacia un mercado competitivo, nacional e internacional para lo cual se
implementan modelos administrativos y estrategias de mercadeo y
publicidad capaces de optimizar recursos o factores productivos y
garantizar una alta rentabilidad del capital fijo y financiero superior a la
del ciclo contable precedente, para bien de los socios y un desarrollo
organizacional creciente sin cumplimiento de la responsabilidad social y el
desarrollo sostenible para futuras generaciones. La minimización de
costos y maximización de utilidades como estrategia empresarial casi
siempre recae sobre el trabajo en todas sus modalidades y jerarquías
organizacionales. Si bien los modelos administrativos -benchmarking,
calidad total, reingeniería, etc- son aplicables a grandes empresas
generalmente multinacionales, más no constituyen panaceas aplicables a
mipymes y pymes de contextos socioeconómicos, políticos y culturales
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totalmente diferentes. He aquí otra de las causas de la vulnerabilidad
empresarial y con ello la desaceleración de la economía el incremento del
desempleo y agudización de la pobreza.
La descripción del proceso productivo como eje transversal en la historia
de la humanidad y su contextualización en el mundo globalizado han
dejado vislumbrar la interdependencia y explicación de la economía como
un fenómeno excluyente de participación si no es como demandantes de
bienes y servicios en el contexto del mercado.
6 Diagnóstico del sistema económico colombiano
Para comprender el estado actual de nuestro país, se hace necesario
recurrir a una analogía cognitiva “un enfoque tipo bañera aplicado a la
macroeconomía” (POOL, 1993) con el animo de ofrecer una comprensión
más académica del funcionamiento de un sistema de economía donde el
Estado y el mercado inciden directamente en el direccionamiento
económico y las políticas monetaria y fiscal constituyen los principales
instrumentos para garantizar una estabilidad macroeconómico y de
crecimiento.
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Si bien Colombia ha tenido un crecimiento aceptable del PIB, esto no ha
repercutido en un mejoramiento de la calidad de vida de los colombianos,
antes por el contrario, la pobreza ha aumentado, “entre 1997 y el 2003 la
pobreza ha tenido un notable aumento, la población de pobres subió de
55% a 60%. Para luchar contra la pobreza no basta con crecer es
necesario, además, que el crecimiento sea sostenible y sobre todo,
incluyente” (CID, 2004)
¿Por qué no crecemos? simplemente porque no tenemos capacidad de
ahorro y no tenemos capacidad de ahorro porque los sueldos y salarios de
los colombianos que tienen empleo son bajos y prácticamente son
absorbidos por la sociedad de consumo sin dejar un margen
representativo para ahorrar y capitalizar.
El ahorro es la fuente que alimenta la inversión, pero en una economía de
mercado como la colombiana donde la tasa de interés constituye una
variable incidente en el direccionamiento macroeconómico como elemento
dinamizador de la política monetaria, a veces no surte efecto por la
manipulación del sistema financiero que como gremio económico
contestatario del gobierno incide para una política monetaria expansiva o
restrictiva. Además, la tasa de intermediación por crédito de corto plazo y
de consumo constituye una de las más altas de la subregión, la cual
afecta la inversión, el crecimiento económico y la generación de empleo.
Por otra parte, la fuga de capitales nacionales e internacionales –capitales
golondrina- por motivos de inseguridad social, violencia o perspectiva
desfavorable del manejo macroeconómico, también inciden grandemente
en el crecimiento sostenido de nuestra economía.
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Completando en análisis del sistema económico colombiano, el Estado
como agente interventor a través del gasto público y su política fiscal, no
ha generado una incidencia significativa en el crecimiento de la deuda
externa e interna, el pero del servicio de la deuda y la no austeridad de
los gastos de funcionamiento, han deteriorado su papel como garante de
bienestar social en un Estado social de derecho. Las políticas
macroeconómicas implementadas no obedecen al mejoramiento de la
calidad de vida de su población sino al cumplimiento de los designios de
organismos financieros multilaterales –FIM y Banco Mundial-, aún a costa
del deterioro de la inversión social, como ente benefactor y garante de
una mayor equidad social en cumplimiento de su papel de Estado Social
de Derecho.
Considero que la principal contradicción que vuelve complejo el manejo
económico por parte de las autoridades económicas radica en un estado
interventor propuesto por la Reforma constitucional de 1991 y un sistema
de economía neoliberal donde el mercado nacional e internacional irrumpe
con vehemencia como garante de la iniciativa privada, del interés
particular, de la búsqueda de ganancia sin importar el crecimiento de la
pobreza y la exclusión social. “Hay un creciente reconocimiento de la
crisis general de la sociedad colombiana, manifiesta en problemas como
la exclusión social, la precariedad del Estado, la pérdida de credibilidad en
la política y en los partidos políticos, la incapacidad del modelo de
desarrollo para superar los problemas de pobreza y desigualdad, la
fragmentación y desarticulación de la sociedad, el marcado deterioro de la
convivencia ciudadana, la debilidad del sistema de justicia, seguridad y
defensa, la creciente corrupción administrativa, la impunidad
generalizada, las prácticas clientelistas, las múltiples violencias, la
existencia y degradación del conflicto armado, el crimen organizado y el
narcotráfico, que impiden la construcción colectiva de un proyecto común
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de nación y de democracia, que trascienda los intereses particulares de
personas y grupos sociales”.
La deuda externa e interna como resultado del crónico déficit fiscal y de
balanza de pagos, agobia cada vez más a los colombianos, el crecimiento
es permanente la cual demuestra que la única manera de saldar es la
sobreexplotación de los recursos naturales y nuestra biodiversidad
comprometiendo el desarrollo sostenible de las futuras generaciones.
La apertura económica, ALCA y el TLC no constituyen acciones que van a
mejorar la situación de los colombianos ni mucho menos a reducir la
pobreza, sino antes por el contrario conlleva una dependencia más
cercada en lo económico, político, social y cultural.
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7. Aproximación hacia una propuesta de participación política desde laeconomía
Si bien la mayoría de países menos adelantados -incluido Colombia- están
sobrediagnosticados, las soluciones a la crisis económica, política, social
y cultural pasan de ser intensiones propositivas cuya aplicación práctica y
efectiva no se avizora en el inmediato futuro. Las causas de la crisis no
dependen exclusivamente de variables endógenas, sino también
exógenas, dada inserción y dependencia del país del mundo globalizado,
por lo tanto, las soluciones deben partir de reinvindicaciones económicas
internacionales, pues en última instancia, lo económico es determinante
en las demás manifestaciones superestructurales de la sociedad y del
Estado.
Imaginarios políticos
- Los organismos multilaterales de crédito- F.M.I y Banco Mundial-
deben flexibilizar su ingerencia en materia de política económica,
especialmente cuando atenta contra el deterioro de la calidad de vida
de la población y mengua el cumplimiento cabal del Estado Social de
Derecho.
- Reconocimiento por parte de las economías industrializadas de dar un
tratamiento de precio justo a los recursos de países menos
adelantados a través de la OMC.
- Las multinacionales deben contribuir hacer partícipes a los países
donde tienen sus filiales de procesos tecnológicos orientados a
aprovechar la biomasa desaprovechada por procesos productivos
ineficientes a fin de generar proyectos comunitarios sustentables para
la generación empleo y garantizar ingresos autosufiecientes.
- El aparato productivo internacional debe ser consciente sus productos
manufacturados tendrán demanda en la medida en que no se deteriore
el nivel de ingreso de las personas.
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- La incorporación de nuevas tecnologías que optimizan los procesos
productivos en detrimento de la fuerza laboral, deben ser incorporados
con criterio de responsabilidad social y democratización de sus
beneficios en pro del bienestar social de los trabajadores.
- Los países desarrollados junto con los organismos multilaterales y
empresas multinacionales deben acatar los compromisos de los foros
mundiales sobre protección del medio ambiente, el tratamiento justo y
su contribución económica para superar la pobreza e inequidad social
de la mayoría de países del tercer mundo.
- Las economías desarrolladas deben ser concientes que la fetichización
del dinero como medida de crecimiento y acumulación sólo genera
especulación del sector no real, la tercerización de la economía y su
efecto descompensado sobre el sector real.
A nivel del Estado Social de Derecho a fin de asegurar un estado de
bienestar, de aseguramiento de la calidad de su población sin exclusiones
en todas sus manifestaciones y orientar el aparato productivo hacia una
economía social de mercado, se propone:
- Una manejo de macroeconómico sostenible, sin deteriorar la
capacidad adquisitiva de los colombianos ni recurrir a medidas
económicas antipopulares como imposición de las recetas de los
organismos internacionales de crédito.
- No privilegiar intereses de gremios económicos a la hora de realizar
reformas tributarias y aplicación de políticas fiscales, debe preservar la
equidad y justicia social en cumplimiento de su función distributiva que
contribuya a evitar la generación de imperfecciones de mercado.
- Generar procesos de participación institucionalizada al momento de
realizar negociaciones bilaterales y multilaterales que atenten contra
los intereses privados y ciudadanos
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Por su parte el sector empresarial debe enfocarse hacia el cumplimiento
de una responsabilidad social para fortalecer una economía social de
mercado que garantice el mejoramiento de la calidad de vida de
empleados, clientes y demás entes de relacionamiento en cumplimiento
de su objeto social.
- Generar legitimidad social a través del cumplimiento de una ética
social en el mercado nacional e internacional.
- Generación de riqueza para un mercado social teniendo como límite el
exagerado enriquecimiento a costa de prácticas desleales que atenten
contra la calidad de vida de sus beneficiarios.
- Implementar procesos de tecnologías limpias para evitar el deterioro
del medio ambiente y la extinción de recursos que pongan en peligro
el desarrollo sustentable y sostenible para futuras generaciones.
- Implementar una democracia social participativa al interior de la
organización en la toma de decisiones gerenciales o de tipo
administrativo para encausar un direccioamiento estratégico sano y
responsable socialmente.
Desde el ámbito de la sociedad civil se propone:
- Generar procesos autogestionarios de producción colectiva, tales como
asociaciones mutuales de trabajo asociado, empresas de economía
solidaria que brinden beneficios sociales en términos de una mayor
cohesión social, valores éticos, ciudadanos y participativos.
- Fortalecimiento del tejido social a través de una mayor responsabilidad
social con en los ámbitos familiar, empresarial, comunitarios o vecinal.
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- Fomentar la cultura organizativa y la capacidad de gestión para
solventar problemas sin recurrir al Estado como ente paternalista de
beneficencia.
Las anteriores propuestas constituyen una aproximación de
participación de los diferentes agentes económicos y no económicos
hacia la construcción de una sociedad más justa e igualitaria.
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8. Referencias Bibliográficas
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CIEDLA.
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