feminizacion de la pobreza - proyde · da al autoconsumo, de manera que su trabajo genera pocos...

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LA MUJER AFRICANA Ella es Luz Eterna Lleva adentro el futuro La fortaleza emana de su alma Es una mujer Mujer africana Una mujer Eres una diosa Tu conocimiento y sabiduría Parecen ocultos en el misterio Y en tu presencia Veo la gloria de la Humanidad… Eres una mujer Mujer africana Una mujer Entonces sigo sus huellas Y escucho sus palabras Y miro a esa mujer africana Y empiezo a comprender Mujer Ella es la luz eterna Chiwoniso Maraire Zimbabwe www.africacuestiondevida.org Datos extraídos de: - OXFAM INTERMON, UNESCO - El papel de la mujer en el desarrollo de África. CeALCI- Fundación Carolina. - Informe sobre Desarrollo Humano 2014 (PNUD) ¿POR QUÉ LA POBREZA TIENE ROSTRO DE MUJER ? Las estadísticas regionales reflejan la feminización de la pobreza en África. Las mujeres tienen menores ingresos, mas necesida- des sin atender, ocupan empleos peor remunera- dos y se sitúan, en mayor medida que los hombres, en la parte informal de la economía. Tomar medidas específicas para garantizar la educa- ción de las niñas y la alfabe- tización de las mujeres, sobre todo en áreas rurales, para lograr el objetivo de Educación para Todos”. Concienciar que la educación de las hijas es tan importante como la de los hijos. Lograr la educación formal de todas las niñas y alfabetización universal de las mujeres sigue siendo un reto mundial. Mejorar la seguridad econó- mica y el empleo remunera- do de las mujeres con su incorporación al sector formal de la economía. En 21 países africanos, se han adoptado leyes garantizan- do la equidad de acceso a los puestos laborales y a los beneficios de protec- ción social aunque su efectiva implementación aún deje mucho que desear. Es importante que la voz de las mujeres se escuche y que sus necesidades y sus opinio- nes tengan influencia en las decisiones. En Ghana y Burki- na Faso, las mujeres tienen cada vez una mayor influen- cia en la toma de decisiones comunitarias: son ellas las que deciden cuándo excavar nuevos pozos. El nivel de representación de las mujeres en los parlamentos en África Subsahariana aumentó de un 13% a un 20% entre 2000 y 2012. El papel de las mujeres en la resolución de conflictos y construcción de paz es clave en muchos países africanos. Algunos de los avances más importantes con respecto a los dere- chos de las mujeres en el África Subsahariana se han dado precisamente cuando, al emerger de situaciones de crisis y conflic- to armado, se han reescrito las reglas del juego político, propiciando una oportunidad para incre- mentar la participación de las mujeres en la política y la administración pública. ¿CÓMO SE PUEDE CAMBIAR ESTA SITUACIÓN? ¿CÓMO SE PUEDE CAMBIAR ESTA SITUACIÓN?

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Page 1: Feminizacion de la pobreza - Proyde · da al autoconsumo, de manera que su trabajo genera pocos ingresos económi-cos y por lo tanto tiene escaso efecto en su empodera-miento y autonomía

LA MUJER AFRICANA

Ella es Luz EternaLleva adentro el futuro

La fortaleza emana de su alma

Es una mujerMujer africana

Una mujerEres una diosa

Tu conocimiento y sabiduríaParecen ocultos en el misterio

Y en tu presenciaVeo la gloria de la Humanidad…

Eres una mujerMujer africana

Una mujer

Entonces sigo sus huellasY escucho sus palabras

Y miro a esa mujer africanaY empiezo a comprender

MujerElla es la luz eterna

Chiwoniso MaraireZimbabwe

www.africacuestiondevida.org

Datos extraídos de:- OXFAM INTERMON, UNESCO- El papel de la mujer en el desarrollo de África.

CeALCI- Fundación Carolina.- Informe sobre Desarrollo Humano 2014 (PNUD) ¿POR QUÉ

LA POBREZA TIENE ROSTRO DE

MUJER?

Las estadísticas regionales reflejan la feminización de la pobreza en África. Las mujeres tienen menores ingresos, mas necesida-des sin atender, ocupan empleos peor remunera-dos y se sitúan, en mayor medida que los hombres, en la parte informal de la economía.

Tomar medidas específicas para garantizar la educa-ción de las niñas y la alfabe-tización de las mujeres, sobre todo en áreas rurales, para lograr el objetivo de “Educación para Todos”. Concienciar que la educación de las hijas es tan importante como la de los hijos. Lograr la educación formal de todas las niñas y alfabetización universal de las mujeres sigue siendo un reto mundial.

Mejorar la seguridad econó-mica y el empleo remunera-do de las mujeres con su incorporación al sector formal de la economía. En 21 países africanos, se han adoptado leyes garantizan-do la equidad de acceso a

los puestos laborales y a los beneficios de protec-ción social aunque su efectiva implementación aún deje mucho que desear.

Es importante que la voz de las mujeres se escuche y que sus necesidades y sus opinio-nes tengan influencia en las decisiones. En Ghana y Burki-na Faso, las mujeres tienen cada vez una mayor influen-cia en la toma de decisiones comunitarias: son ellas las que deciden cuándo excavar nuevos pozos. El nivel de representación de las mujeres en los parlamentos en África Subsahariana aumentó de un 13% a un 20% entre 2000 y 2012.

El papel de las mujeres en la resolución de conflictos y construcción de paz es clave en muchos países africanos. Algunos de los avances más importantes con respecto a los dere-chos de las mujeres en el

África Subsahariana se han dado precisamente cuando, al emerger de situaciones de crisis y conflic-to armado, se han reescrito las reglas del juego político, propiciando una oportunidad para incre-mentar la participación de las mujeres en la política y la administración pública.

¿CÓMO SE PUEDE CAMBIAR ESTA SITUACIÓN?¿CÓMO SE PUEDE CAMBIAR ESTA SITUACIÓN?

Page 2: Feminizacion de la pobreza - Proyde · da al autoconsumo, de manera que su trabajo genera pocos ingresos económi-cos y por lo tanto tiene escaso efecto en su empodera-miento y autonomía

En África Subsahariana el analfabetismo femenino dobla al masculino, además de que el índice de abandonos es más elevado. Las familias incorporan a las niñas a las tareas de atención doméstica desde edades muy jóvenes, especial-mente el acarreo de agua y leña.

En África las mujeres son las responsables de transportar sobre sus cabezas y espal-das el 90% del agua que consume la población. En países como Chad o Etiopía, las mujeres dedican una media de cinco horas diarias a ir a buscar agua y cargan

unos 50 litros (10litros en caso de las niñas) atravesando terrenos donde se exponen constantemente a acciden-tes, ataques de animales salvajes e incluso violaciones.

El cuidado del ganado es otra de las responsabilidades que las mujeres tienen asumidas como propias, sin ser propietarias ni recibir remuneración por ello.

Las mujeres son el 60% de la fuerza laboral dentro del sector agrícola según la FAO. En sociedades dependientes de la producción agrícola nacional, las mujeres tienen un papel clave en el desarrollo económico local y la seguridad alimentaria pero, al no ser propietarias, carecen de reconocimiento ni visibilidad.

Las mujeres son el motor de desarrollo de sus familias, desde alimentar a sus familias y educar a sus hijos, cuidar el ganado, proporcionar leña y agua para la comunidad, hasta cuidar de los ancianos y enfermos.

El 84% de las mujeres se dedican al comercio trans-fronterizo informal, lo que les aporta sustento, además de seguridad alimenticia y alguna renta/ingresos.

La cantidad de horas que dedican al de mantenimiento del hogar, alimen-tación, higiene y cuidado de los miembros de la familia limita sus posibilidades de alfabetización, educación y acceso a un empleo remunerado. Esto restringe su tiempo de ocio a los primeros años de su infancia.

Según la FAO, la mujer rural de escasos recursos puede trabajar entre 16 y 18 horas al día entre los trabajos en el campo y las tareas domésticas. El 95% de la producción de las mujeres no es vendida, sino destina-da al autoconsumo, de

manera que su trabajo genera pocos ingresos económi-cos y por lo tanto tiene escaso efecto en su empodera-miento y autonomía.

En el sector formal del empleo (por ejemplo, los funcionarios) las mujeres desempeñan los trabajos de peor remuneración.

En 2013, la mayoría de las muer-tes maternas se produjo en África Subsahariana (62%). Numerosas mujeres mueren durante el parto cuando no son asistidas por falta de dinero para pagar los honorarios y el transporte hasta los hospitales.

La OMS detectó que el 50% de las mujeres en Tanzania y el 71% de las mujeres rurales de Etiopía dieron muestras de haber sufrido palizas u otras formas de violencia a manos de sus maridos o de sus parejas. Entre 16 y 47% de las niñas

que acuden a educación primaria y secundaria informan sobre casos de acoso sexual o agresión por parte de sus compañeros masculinos de clase o por parte de los profesores.

A pesar de que las mujeres africanas son piezas clave en todos los aspectos de la realidad social, económica y cultural de sus países, su participación en el desarrollo ha permanecido ampliamente invisible. Muchas de las leyes que tienen mayor impacto en la vida de las mujeres, están sujetas al domi-nio de las costumbres y las normas religiosas.

Las mujeres ocupan los últimos lugares a pesar de llevar el peso de la subsis-tencia de su familia y comu-nidad. Suelen comer las últimas y en el suelo, en lugar de en la mesa como los hombres.

Tienen poco peso en la vida de la comunidad. A la hora de la toma de decisiones, se quedan en un segundo plano y no ostentan cargos.

Las mujeres caminan a diario kilómetros para recolectar ramas de árbo-les. Las necesitan para cocinar, alumbrar y calen-tar sus hogares. El tiempo que dedican a recolectar se lo quitan a su educa-ción y formación. Una gran mayoría de niñas y jóvenes dejan de asistir a la escuela, ya que emplean mucho tiempo en ir por leña, mientras sus hermanos no tienen esa obligada tarea.

Las mujeres se responsabi-lizan de los cuidados requeridos por los miembros de la familia y de la comuni-dad. Son las principales cuidadoras de los enfermos y de las personas mayores.

Las mujeres africanas produ-cen el 80% de los alimentos (FAO) y se encargan de la alimentación de la familia.

Las mujeres son agentes centrales del desarrollo, representan cerca del 40% de la fuerza laboral aunque permanece invisible en las estadísticas oficiales al no

estar remunerado. El 80% de los trabajos que desem-peñan, son no remunerados.

La mayoría de agricultores son mujeres pero al no ser propietarias, no tienen acceso a los créditos bancarios. Trabajan la tierra a través de la propiedad de su esposo o un familiar varón y, en el caso de fallecimiento, se encuentran con que no pueden heredar la tierra en la que han trabajado durante años.