Entendiendo la muerte y el sufrimiento humano By Eliud Gamez

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ENTENDIENDO LA MUERTE Y EL SUFRIMIENTO HUMANO

¿Por qué Dios permitió que mi esposo muriera? Ore por él. ¿Por qué Dios no

contestó mi oración? ¿Por qué tomó Dios a mi hijo a quien amaba? ¿Por qué

Dios fue tan? ¿Cómo podría un Dios amoroso hacer tal cosa? ¿Por qué Dios

permite el sufrimiento? INCLUSO DUDO QUE EXISTA Dios

¿POR QUÉ?

He escuchado este tipo de preguntas muchas veces. Alguien se enferma y

muere, y el ser querido superviviente va en un "Odio INCONTROLABLE

CONTRA Dios!

No tenemos derecho a enfadarnos con Dios cuando algún ser querido muere,

pero cuando Dios nos mete al horno de aflicción y nos pone esa tribulación

puede ser que sintamos enfado o molestia contra Dios por haber permitido

que permitiera que un ser querido falleciera.

NO ESTAMOS PREDESTINADOS

1.- Primero debemos dejar claro algunas cosas. La vida en la tierra no está

predestinada

El destino predestinado se aplica a la idea de que Dios conoce desde

la eternidad el destino del universo y de cada persona. San Agustín, en

la Iglesia católica, y Calvino, en el protestantismo son autores especialmente

vinculados a esta falsa doctrina.

b. Segundo, Dios no hizo que nuestros seres queridos enfermaran, ni Dios

mata a personas como un acto directo. (Aunque Dios castiga a sus hijos

cuando pecan de varias maneras.

Heb. 12:6 Porque el Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que recibe

por hijo

Entendiendo la muerte y el sufrimiento humano By Eliud Gamez

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El hecho es que algunas cosas malas suceden por casualidad, otras por el

pecado de otro o por nuestro propio pecado o descuido.

EJEMPLOS DE PORQUE SUCEDEN LAS COSAS

a. Cuando el paracaídas de un zambullidor no se abre, nos damos cuenta de

que las cosas mecánicas no siempre funcionan de la manera que deberían y, a

veces como resultado, mueren las personas.

b. Cuando una persona habla en un teléfono celular mientras conduce, y se

topa con la parte trasera de un camión aparcado, nos damos cuenta de que

nuestro descuido puede matarnos.

c. Cuando una persona inocente es fusilada por un ladrón de banco, nos damos

cuenta de que el pecado de otro puede matarnos.

d. Cuando por casualidad, entramos en contacto con una enfermedad

contagiosa, nos damos cuenta de que tales encuentros pueden matarnos.

Cuando fumamos un paquete de cigarrillos por día y morimos de cáncer de

pulmón a los 35 años, hemos cometido una forma de suicidio, en la que nadie

tiene la culpa sino nosotros mismos.

Cuando la gente pregunta, "¿Por qué Dios permitiría que mi esposo

muriera de una enfermedad a los 40?"

Están haciendo la pregunta equivocada.

La verdadera pregunta es: "¿Por qué Dios creó el cuerpo humano con el

potencial de enfermarse en primer lugar?"

LA GENTE MUERE DE ENFERMEDAD, PORQUE DIOS NOS

CREÓ ASÍ AL PRINCIPIO. Todos los hombres realmente no sabemos cómo vamos a morir. Dios lo sabe,

pero eso no significa que él esté escogiendo específicamente a usted o a su

familia. Todos los hombres están en la misma situación

Todo hombre que come un veneno mortal muere, pero no todo el que es

picado por una abeja muere. Así que la verdadera pregunta no es por qué

morimos, sino por qué Dios permitió incluso enfermarse como una función del

cuerpo humano!

¿SE PREOCUPA DIOS CUANDO ESTAMOS ENFERMOS O

CUANDO NOS AFLIGIMOS POR LA PÉRDIDA DE UN SER

QUERIDO?

Entendiendo la muerte y el sufrimiento humano By Eliud Gamez

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Si estamos afligidos ahora, ¿Culparemos a Dios de los que nos pasa y

pensaremos que ni siquiera le importa?

Recordemos que Dios originalmente proveyó un hogar perfecto de la vida

eterna en el paraíso en el Jardín del Edén y el pecado del HOMBRE lo sacó

de él.

¿Has pecado alguna vez? Jesús, por otra parte, nunca pecó, sino que murió

por nuestros pecados. Dios dio a su único hijo en la muerte, para que

tengamos vida!

Lo que vemos en este mundo no es la eternidad sino un estado temporal de

cosas.

Cuando Esteban fue apedreado hasta la muerte en Hechos 7:56 por el futuro

apóstol Pablo, él clamó a Jesús, no para sí mismo, sino para los que estaban

pecando contra él.

Note, sin embargo, que Esteban vio a Jesús sentado a la derecha del Padre.

Normalmente, Jesús se sentaría en su trono, pero al igual que nosotros, él

estaba tirado "a los pies de Jesucristo" el cual estaba preocupado por

Esteban. Nos está permitido llorar pero no culpemos a Dios de los que nos

pase, vivimos en un mundo donde a veces las cosas suceden.

PERO ¿QUÉ PASA CON SUS ORACIONES? Usted oró a Dios para que sanara a su amado familiar de Cáncer pero él

murió!

Primero démonos cuenta de que TODOS los ministerios de sanación en la

televisión son falsificaciones y fraudes y no representan el cristianismo.

DIOS RESPONDE NUESTRAS ORACIONES CON: UN SI O CON UN

NO.

¿POR QUÉ ENTONCES NOS ENFADAMOS O ALTERCAMOS CON DIOS

DICE: "NO, NO RESPONDERÉ A TU ORACIÓN... TU SER QUERIDO

MORIRÁ?"

Nosotros podremos tener suficiente fe y que hagamos unas oraciones

perfectas, pero a veces Dios dice NO!

Otras veces Dios puede extender la vida, pero tarde o temprano,

NOSOTROS TODOS DEBEMOS MORIR.

Entendiendo la muerte y el sufrimiento humano By Eliud Gamez

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¿ESTÁS USTED ORANDO POR TENER LA VIDA ETERNA? Ezequías estaba muy enfermo en 2Reyes 20:1 y oró para mejorar. Dios le

respondió:

Ordena tu casa, porque morirás, y no vivirás.

Sin embargo Ezequías oro de nuevo y en 2Reyes 20:6 esta vez Dios

respondió: "añadiré quince años a tu vida". Dios aún respondió NO, pero dio

una extensión de vida al enfermo.

¿Cómo sabemos que Dios no respondió a nuestra oración dándole a nuestro

ser querido unos cuantos meses más, de otra manera sin nuestra oración, no

lo hubiéramos conseguido!

2Reyes 20:1 En aquellos días Ezequías cayó enfermo de muerte. Y vino a él el

profeta Isaías hijo de Amoz, y le dijo: Jehová dice así: Ordena tu casa,

porque morirás, y no vivirás.

2Reyes 20:6 Y añadiré a tus días quince años, y te libraré a ti y a esta

ciudad de mano del rey de Asiria; y ampararé esta ciudad por amor a mí

mismo, y por amor a David mi siervo.

DIOS NOS AMA Y NOS CUIDA, PERO TODOS DEBEMOS MORIR.

Fijemos nuestras esperanzas en lo que está arriba, no en la tierra. 2 Cor. 4:

16-18

2Cor. 4:16 Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre

exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día.

2Cor. 4:17 Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un

cada vez más excelente y eterno peso de gloria; 2Cor. 4:18 no mirando

nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se

ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.