eln, notas para una historia de sus ideas politicas

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El propósito de este trabajo es contribuir desde la investigación histórica al conocimiento del ELN, como protagonista de los conflictos sociales y políticos y como actor de la Violencia en nuestro país. Corresponde a una primera etapa de la investigación que he dado en denominar "arqueológica"; en ella se busca, esencialmente, construir el PERSONAJE HISTORICO desde la perspectiva de lo que ha sido su propio desenvolvimiento social y político a lo largo de los últimos cincuenta años de la historia de Colombia.

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UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Facultad de Ciencias Humanas Departamento de Historia DOCTORADO

E.L.N.EJERCITO DE LIBERACION NACIONALNOTAS PARA UNA HISTORIA DE LA IDEAS POLITICAS

(1958-2007)

CARLOS MEDINA GALLEGODocente-Investigador Universidad Nacional de Colombia

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La historia critica de una organizacin revolucionaria, es el espejo en el que se ven reflejadas sus contradicciones Manuel Prez MartnezComandante del ELN

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ContenidoPresentacin

Primera ParteANTECEDENTES, SURGIMIENTO Y CONSOLIDACIN DEL ELN (1958-1966) 1. Contexto histrico en que aparece el ELN: Violencia y Frente Nacional. 2. De la violencia poltica tradicional a la violencia poltica revolucionaria. 3. Situacin internacional: el impacto de la revolucin cubana y la nueva izquierda latinoamericana. 4. La brigada Jos Antonio Galn: el camino juvenil de la lucha revolucionaria. 5. La zona de implantacin del primer grupo guerrillero. 6. Los contactos, las relaciones y el trabajo con la poblacin civil. 7. Sobre el acumulado existente de la guerrilla liberal y el movimiento social. 8. Los integrantes de la primera marcha. 9. La primera marcha guerrillera o el nacimiento del Ejrcito de Liberacin Nacional -ELN-: 4 de Julio de 1964 10. Los primeros meses de la guerrilla: entre las dificultades y el compromiso. 11. La toma y el manifiesto de Simacota. 12. El ELN despus de Simacota. 13. Los principios programticos del ELN. 14. Camilo Torres Restrepo: del Frente Unido al ELN. 15. Camilo: vida y muerte en las guerrillas del ELN. 16. El Frente Camilo Torres Restrepo, primera poca. 17. El Frente Camilo Torres: de la toma de Vijagual al final de la primera etapa. 18. Fundamentos poltico - ideolgicos que guiaron la primera etapa del ELN.5

Segunda parteINFLUENCIA DE MASAS, AUGE MILITAR Y CONTRADICCIONES INTERNAS (1966 - 1973) 1. El ELN y su influencia en el movimiento de masas. 2. Contradicciones internas que dieron origen a los fusilamientos de Vctor Medina Morn, Julio Cesar Cortes y Heliodoro Ochoa. El camino de las contradicciones El asesinato de Jos Ayala. El juicio a Vctor Medina, Julio Cesar Cortes y Heliodoro Ochoa 3. Desarrollo y auge militar: la contradiccin sigue madurando. 4. Aparece la retencin econmica: el secuestro como fuente de recursos para desarrollar la lucha guerrillera. 5. Los primeros encuentros con las FARC. 6. las relaciones con la base campesina. 7. Las ejecuciones de Aguilera, Arenas y Afanador: el segundo captulo de la contradiccin. El caso de Juan de Dios Aguilera. el caso de Jaime Arenas Reyes. el caso de Salvador Afanador. 8. Consejos de guerra adelantados al ELN entre 1968 y 1973. El consejo de guerra del siglo. El consejo de guerra del Socorro. o antecedentes y desarrollo 9. Una "triada" de curas espaoles llega a la guerrilla. 10. Las asambleas guerrilleras. La asamblea de "campo concentracin", 1970. La asamblea de " campo lnea ", 1973. 11. Algunos elementos de reflexin para concluir esta segunda etapa. Aspectos poltico - ideolgicos. Aspectos organizativos. Aspectos militares

Tercera

parte

LA OPERACION ANORI EL ELN. HERIDO DE MUERTE. 1 Antecedentes de la operacin Anor Contexto en el que se desarrolla la lucha del ELN. La situacin del ELN, antes de anor. Movimiento y dinmica interna de los grupos a las puertas de operativos de Anor.

los6

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5 6 7 8

Los operativos militares de Anor en el contexto de la lucha contra - insurgente Latinoamericana. Los operativos de Anor visto por los ojos del ELN El desarrollo de la operacin Anor y la dinmica interna de la columna guerrillera de los Vsquez Castao. La vida en el interior de la columna guerrillera de los hermanos Vsquez, durante la operacin Anor. Anor: una lectura desde la oficialidad del ejrcito y desde la estructura guerrillera. La asamblea del Anacoreto: evaluacin y responsabilidades de Anor. La situacin del ELN despus de Anor. El juicio y fusilamiento de " Los Bertulfos. Anor: una leccin de lucha contrainsurgente para la guerrilla colombiana. Cuarta parte LA CRISIS INTERNA: EL ELN. AGONIZA. (1974 -1978) 1. Contexto socio - econmico en el que se desarrolla la crisis 2. Resurge el conflicto interno: divisiones, crisis poltica y deserciones. 2.1 Fabio Vsquez Castao: sale del pas hacia cuba. 3. Desarrollo y operaciones militares durante el perodo de crisis 4. Replanteamiento: la crisis toca fondo 4.1 Antecedentes y desarrollo. 5. El ELN en el fondo de la crisis. El febrerazo: el Anor urbano 6. Algunas reflexiones de esta etapa a manera de conclusin. Quinta parte ELN: REESTRUCTURACIN ORGNICA Y POLTICA (1978- 1983)

En el camino de superar la crisis 1. Una Direccin Nacional Provisional (DNP) para las tareas de reconstruccin orgnica y poltica 2. Los avances de la organizacin durante la etapa de la DNP 3. Contradicciones y dificultades internas en el camino de superar la crisis 4. La Cuarta Reunin de Responsables y la creacin de la Direccin Nacional (DN) del ELN 5. Reunin Nacional Mrtires y Hroes de Anor: antecedentes y desarrollo. Antecedentes de la Reunin Nacional (RN) Sobre el desarrollo de la Reunin Nacional 6. Un balance crtico de la historia del ELN como fundamento de la nueva poca Elementos crticos para la comprensin de cada etapa Primera etapa: surgimiento de la organizacin7

Aciertos o reveces tcticos. Desarrollo cuantitativo y cualitativo de la organizacin Planos internos en que se puede medir esta etapa En el plano ideolgico En el plano poltico En el plano orgnico Segunda etapa: hegemona ideolgica pequeo-burguesa y desviacin vanguardista Aciertos o reveces tcticos Desarrollo o estancamiento cualitativo y cuantitativo Planos internos en que se puede medir esta etapa En el plano ideolgico en el tratamiento de las contradicciones internas la confrontacin entre la teora y la prctica el sacrificio como consecuencia de las limitaciones tericas. en el plano poltico de la guerra de cuadros a la guerra de masas En el plano organizativo Tercera etapa: crisis poltica, organizativa e ideolgica Primer perodo de la crisis Segundo perodo de la crisis En el plano ideolgico En el plano poltico En el plano organizativo 3. En busca de la definicin de una estrategia revolucionaria 4. Sobre el contexto internacional en que se produce la fase de reconstruccin del ELN El estado de las crisis del capitalismo y el desarrollo del socialismo Situacin poltica latinoamericana Significado histrico de Cuba y Nicaragua en la construccin de la lnea poltica del ELN 5. Sobre la caracterizacin del estado y la lucha de clases 6. La estrategia revolucionaria del ELN como estrategia de poder 6.1 Sobre la construccin de una Fuerza Social Revolucionaria (FSR) 7. Sobre el modelo de guerra, el carcter estratgico de la guerrilla rural 8. Sobre la Unidad Revolucionaria 9. Limitaciones para formular la tctica del periodo en la fase de reconstruccin orgnica y poltica 10. Sobre las tendencias organizativas del movimiento revolucionario 11. Enunciados polticos que guan el proceso de reconstruccin de la organizacin y superacin de la crisis 12. Sobre los nuevos criterios de militancia 13. Una Nueva Direccin Nacional 14. Inconformidad, contradicciones y rupturas en el camino de superacin de la crisis El sector Lus Carlos Crdenas, las resistencias al proceso de centralizacin8

La retencin de Jaime Betancur Cuartas, hermano del presidente Belisario Betancur: conflictos y rupturas El proceso de discusin poltica con el sector 16 de Marzo, ms all de la retencin 15. Balance general del periodo de reconstruccin orgnica y poltica Sexta parte EL LARGO CAMINO HACIA LA PRIMERA ASAMBLEA NACIONAL, CAMILO TORRES RESTREPO Y LOS PROCESOS UNITARIOS DE LA IZQUIERDA ARMADA. (1984-1986) La Asamblea Nacional y el origen y desarrollo de la Coordinadora Nacional Guerrillera (CNG). 1. ELN y su percepcin de la coyuntura poltica entre 1984- 1987 2. El ELN en los procesos de unidad de la insurgencia los antecedentes y la trilateral. la coordinadora nacional guerrillera CNG. acciones y contradicciones internas en las organizaciones La posicin del ELN frente al Genocidio del Palacio de justicia. Tacuey y la expulsin del Frente Ricardo Franco de la CNG. La ejecucin de Ricardo Lara Parada 2. Primera asamblea nacional comandante Camilo Torres Restrepo Sobre la composicin de la asamblea nacional. Funcionamiento de la asamblea. Sobre las conclusiones de la Asamblea Nacional Camilo Torres Restrepo Las lneas generales de conduccin poltica La formacin social o el pas imaginado Sobre la estructura de clases de la sociedad colombiana Sobre la caracterizacin del momento histrico y los periodos del proceso revolucionario Puntos programticos generales del ELN. Sobre la estrategia de Guerra Popular Prolongada y las etapas previsibles de la guerra.

4. La unidad del movimiento revolucionario de vanguardia La unidad en el marco de la Coordinadora Nacional Guerrillera y la propuesta de Asamblea Nacional Popular. Primera asamblea de direcciones de la CNG, Comandante lvaro Fayad. El carcter de la CNG y sus instancias de organizacin La propuesta poltica de la CNG9

La plataforma de la CNG. El plan de trabajo de la CNG El estado de las fuerzas de la CNG. Declaracin poltica final de la Asamblea de Direcciones de la CNG. La insurgencia, los movimientos sociales y los procesos de unidad

5. ELN: petrleo y soberana Sptima parte LA UNIN CAMILISTA-EJRCITO DE LIBERACIN NACIONAL (UC-ELN) Y EL SURGIMIENTO DE LA COORDINADORA GUERRILLERA SIMN BOLVAR (CGSB) (1987-1989) 1. Mir-Patria Libre: Una historia de procesos unitarios Antecedentes y origen Desarrollo organizativo y poltico. El Mir - Patria Libre y el proyecto de poder popular. Hacia la fusin con el ELN 2. Surge la Unin Camilista-Ejrcito de Liberacin Nacional (UC-ELN) El acta de unidad y declaracin poltica Los fundamentos ideolgicos de la UC-ELN Propsitos y puntos bsicos de programa de la UC-ELN Estrategia y tctica de la lucha de la UC-ELN Una discusin necesaria: la relacin entre marxistas y cristianos Sobre la lnea organizativa. Puntos de discusin Un balance general de la fusin 3. crticas y disidencias 4. La Coordinadora Guerrillera Simn Bolvar (CGSB) en la bsqueda de los caminos de la solucin poltica Antecedentes Surgimiento de la Coordinadora Guerrillera Simn Bolvar (CGSB) Hacia Caracas y Tlaxcala, en los intentos de la Negociacin Global Doce propuestas para construir una estrategia de paz

5. Sobre el II congreso de la UC-ELN Primer Pleno de la Direccin Nacional de la UC-ELN: por la unidad, CHE 20 aos: propuesta de solucin poltica del conflicto Una mirada a la situacin nacional e internacional para definir la tctica Guerra sucia y poltica contrainsurgente durante la administracin Barco10

Contra la guerra sucia: mandato nacional por un gobierno popular, democrtico y revolucionario El II pleno de la direccin nacional de la UC-ELN Daro Ramrez Cardona y Hroes de Mayo Sobre la propuesta poltica para la coyuntura Elementos para una poltica petrolera. Una propuesta de Humanizacin de la Guerra Octava parte II CONGRESO DE LA UC-ELN Y EL RESURGIMIENTO DE LOS CONFLICTOS INTERNOS (1989-1991)

En el camino del congreso La situacin interna de la UC-ELN en el momento del pre-Congreso. 2. El militante opina La Direccin del Frente Domingo Lain Opina. Sobre la concepcin ideolgica y el carcter de la revolucin. Sobre la estrategia militar Sobre le carcter de la organizacin y el proceso de unidad Sobre la caracterizacin del periodo. Sobre la propuesta poltica y la organizacin poltica de masas Democracia interna y la cuestin econmica. Decisiones del FDL en relacin con las contradicciones internas. 3. Por una tctica para Arauca: la DN responde al FDL. Contexto en el que se producen las contradicciones con el FDL y puntos de tensin Arauca: desarrollo petrolero y guerra Rectificacin estratgica y cambios de mentalidad Una nueva tctica. Vida y soberana Para un tratamiento correcto a las contradicciones internas con el Frente Domingo Lan Coyuntura poltica en la que se desarrolla el II CONGRESO y la situacin de la organizacin 4. II Congreso: Poder Popular y Nuevo Gobierno Sobre la formacin social y la estructura de clase en Colombia Sobre el programa Sobre la situacin de Amrica Latina y las contradicciones del mundo socialista. Sobre la tctica. Posicin frente al narcotrfico11

1.

Posicin frente a la negociacin Sobre el cristianismo revolucionario Las conclusiones del congreso, despus del congreso. 5. Ajustes tcticos y contradicciones internas: proyecto experimental de eleccin de algunos alcaldes 6. Consulta interna sobre la constituyente y la negociacin La solucin al conflicto social interno Propuesta de solucin poltica al conflicto interno: La rectificacin del trabajo poltico-organizativo. 7. Ajustes a la poltica petrolera 8. El Congreso y la lucha ideolgica 9. La unidad con la Corriente Internacionalista 10.Orgenes de las contradicciones y desprendimientos con el parche y la Corriente de Renovacin Socialista La Cueva Del Oso, El Parche y La Corriente de Renovacin Socialista El parche como antecedente del proceso con la corriente Dnde estn las diferencias? Vanguardia y poder popular Periodo, rgimen poltico y lucha democrtica. Dos visiones de lo urbano. Primaca de la lucha poltica. El conservadurismo en lo militar. Sobre la unidad y la vanguardia colectiva Sobre la lucha terica y el papel de la cultura Sobre la estrategia Sobre los dilogos de caracas. La CRS y el movimiento poltico de masas La CRS y los elementos y rasgos bsicos de la nueva El recrudecimiento de las contradicciones y las posiciones internas La conai y la problemtica interna en especfico.

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Novena parte EN EL CAMINO HACIA EL III CONGRESO DE LA UC-ELN (1992- 1996)

1.2. 3.

Los pre-supuestos para andar la dcada de los noventa. Un contexto poltico para el anlisis. III Congreso: Comandante Edgar Amilkar Grimaldos Barn. 3.1 contexto general. 3.2 una nueva lectura del momento histrico. Sobre la nueva situacin mundial: contrarrevolucin mundial y resistencia Sobre la nueva situacin nacional: neoliberalismo y narcorepblica Sobre la crisis de la CGSB: la desmovilizacin de la insurgencia. Sobre la situacin del movimiento de masas. Sobre guerra integral y paramilitarismo. Sobre la crisis de rgimen. El resultado general del balance del momento histrico Sobre la estrategia revolucionaria Sobre la tctica para el periodo Sobre el programa

4. Tesis sobre el socialismo. 4.1. El capitalismo no es el fin de la historia. 4.2. El socialismo una necesidad histrica. 4.3. Los desafos para el marxismo hoy 4.4. Formaciones sociales en Amrica Latina. 4.5. El socialismo y la unidad latinoamericana. 4.6. El significado del socialismo en Colombia. 4.7. Relacin estado sociedad. 4.8. El poder popular. 4.9. Nuevas relaciones de produccin. 4.10. Nuestro modelo de desarrollo socialista. 4.11. La realidad del mercado en la construccin del socialismo. 4.12. Sistema financiero en la nueva economa. 4.13. El aprovechamiento de los recursos naturales en funcin de nuestro desarrollo. 4.14. Las polticas agrarias. 4.15. Planificacin de la economa. 4.16. Superacin de la burocracia. 4.17. El nuevo estado y el nuevo gobierno. 4.18. Las fuerzas armadas populares. 4.19. Nuestra democracia. 4.20. La nueva constitucin de la nacin.13

4.2.1 la consolidacin del poder popular y la hegemona de la clase obrera. 4.22. Nuestro humanismo. 5. A manera de sntesis general Dcima parte LA SOLUCIN POLTICA AL CONFLICTO SOCIAL Y ARMADO, EL PROCESO DE PAZ Y EL IV CONGRESO DEL ELN (1996- 2007) Presentacin 1. Sobre la solucin poltica del conflicto social y armado. El estado (gobierno) y la solucin poltica negociada. El ELN y la solucin poltica

2. Itinerario de un proceso de paz El ELN en la administracin Samper: una propuesta urgente para Colombia: la convencin nacional. Los encuentros del palacio de Viana, Puerta Del Cielo Y Ri Verde: el ELN en bsqueda de la sociedad civil. La administracin Pastrana: el ELN: un proceso de paz residual Itinerario del proceso de paz durante la administracin Pastrana El proceso de paz durante la administracin del presidente lvaro Uribe Vlez. Un nuevo contexto poltico La poltica de defensa y seguridad democrtica o Cinco objetivos estratgicos. Una primera percepcin del ELN sobre el gobierno de lvaro Uribe Vlez Cinco obstculos en la puerta de entrada a un proceso de paz. IV CONGRESO DEL ELN. Comandantes Manuel Prez Martnez y Oscar Santos. POR UN NUEVO GOBIERNO DE NACIN, PAZ Y EQUIDAD. 1. El ELN la globalizacin y la situacin internacional a comienzos del siglo XXI. 2. El ELN la reeleccin del presidente lvaro Uribe Vlez y la coyuntura nacional 3. Tres males estructurales de la sociedad colombiana Terrorismo de Estado Corrupcin e impunidad El narcotrfico, otro obstculo para la paz. A MANERA DE EPILOGO El mundo de los aos sesenta14

La fundacin, La primera crisis, El auge, La segunda crisis La situacin actual.

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E.L.N.Elementos para una historia de las ideas polticas del Ejrcito de Liberacin NacionalEl propsito de este trabajo es contribuir desde la investigacin histrica al conocimiento del ELN, como protagonista de los conflictos sociales y polticos y como actor de la Violencia en nuestro pas. Corresponde a una primera etapa de la investigacin que he dado en denominar " arqueolgica " ; en ella se busca, esencialmente, construir el PERSONAJE HISTORICO desde la perspectiva de lo que ha sido su propio desenvolvimiento social y poltico a lo largo de los ltimos cincuenta aos de la historia de Colombia . Metodolgicamente, el trabajo puede ser considerado como una HISTORIA DE UIDA, entendida esta como el resultado de investigar en profundidad y extensin el recorrido biogrfico de uno o varios sujetos articulados e interactuando en torno a un actor social en el que se ven representados y a travs del cual se expresan. El texto constituye un trabajo sistemtico de organizacin cuidadosa de fuentes y de construccin argumentada de discurso en el que se respetan en lo posible las formas del ver y del sentir del personaje objeto de investigacin. La importancia del documento reside en el hecho en que nos aproxima desde un punto de vista particular a una realidad histrica especfica, cuyo conocimiento acadmico es precario; nos proporciona una buena cantidad de informacin histrica y etnogrfica, til para la reconstruccin y estudio de los procesos polticos y sociales de nuestro pas que tienen que ver con la historia reciente, pero sobretodo, con la visin particular que de ella, tiene uno de los actores del conflicto actual: El E.L.N. La riqueza de este tipo de trabajo est definida por su potencial capacidad informativa, la cual est directamente relacionada con la ignorancia previa que el investigador y la comunidad cientfica tienen sobre el problema (Bertoux, 1980).16

Si bien lo informativo constituye parte esencial del trabajo del historiador, ste no se reduce a la labor descriptiva nicamente, en el discurso va emergiendo una construccin crtica e interpretativa de lo que el conjunto de documentos y testimonios van afirmando, pero ac, la voz del investigador, en lo posible, trata de no suplantar la versin que, acerca de su propia vida, va dando el actor del conflicto pues sta explica en gran medida sus comportamientos y acciones, los que slo son entendibles o la luz de sus propias representaciones simblicas. El texto entonces se estructura con base en la descripcin de hechos y acontecimientos especficos, la interpretacin explicativa y la accin analtica de fenmenos y problemas que sern posteriormente, objeto de otro nivel de reflexin cientfica. Ahora bien, an cuando el discurso tiene el sello personal que le imprime el investigador en la parte formal, es elaborado y desarrollado desde el conjunto de smbolos, significados y sentidos que el personaje tiene sobre s mismo y sobre el universo que lo rodea. Esto tiene gran importancia para el conocimiento del actor en la medida en que nos permite aprehender ciertos procesos colectivos que son compartidos en atribucin de significados por otros individuos e inclusive por comunidades menores, lo que resulta imprescindible para el tratamiento actual de los conflictos. Fueron distintas las fuentes que se utilizaron para la elaboracin de este texto final; en un primer momento se recurri a las pocas publicaciones que existen sobre esta organizacin, en particular, a los trabajos de Jaime Arenas, "La guerrilla por dentro"; El guerrillero y el Poltico una resea biografica de Ricardo Lara Parada resultante de las conversaciones con Oscar Castao; Una entrevista hecha a este mismo personaje por la REVISTA TROPICOS; las entrevistas hechas a Fabio Vsquez Castao, publicadas en 1967, por la REVISTA SUCESOS; los trabajos periodsticos de Marta Harnecker, "Unidad que multiplica" y Mara Lpez Vigil, " Camilo Camina en Colombia". Estos trabajos, publicados en los ltimos 25 aos, son los que permiten conocer en alguna medida el ELN en el periodo que se aborda en esta investigacin. Los cuatro primeros tienen como particularidad el hecho de ser la versin del ELN dada por su dirigencia o exmilitantes de la organizacin que ocuparon importantes cargos de responsabilidad y que luego desertaron de la misma. Los dos ltimos son una versin del periodismo investigativo realizado por autores extranjeros cuya apropiacin del fenmeno se reduce exclusivamente a la informacin proporcionada por los personajes entrevistados, dirigentes todos del ELN. Igualmente, se hizo uso de informacin que hace referencia al actor en trabajos cuyo objeto de estudio es otro , por ejemplo, las biografias de Camilo Torrres Restrepo. En el desarrollo de la investigacin fue publicado por el autor de la misma , el libro El ELN: Una Historia contada a dos voces , en el que se colocan a consideracin de la comunidad acadmica y la opinin publica en general dos entrevistas, realizadas y procesadas por el investigador, a los responsables poltico y militar de la17

organizacin guerrillera MANUEL PEREZ MARTINEZ y NICOLS RODRIGUEZ BAUTISTA. Estas entrevistas fueron publicada como TESTIMONIO HISTORICO, entendido ste como una forma particular del relato en el que el entrevistado se refiere, a travs de sus vivencias personales, a algn suceso o proceso histrico del cual fue testigo o protagonista, sin que el eje de narracin sea necesariamente su propia evolucin en el transcurrir del tiempo y de los hechos. Esa publicacin se decide en la medida que el autor del presente trabajo, habiendo utilizado fragmentos de las entrevistas, siente que existe en ellas un gran esfuerzo investigativo y un valioso material etnogrfico que puede servir a los investigadores acadmicos y al proceso poltico colombiano Desde luego ese texto, producto del proceso de investigacin, es fuente de esta HISTORIA DE VIDA y se constituye por l mismo en un importante recurso documental . No obstante, en relacin con ste trabajo existe una gran distancia en cuanto que el discurso all expuesto tiene un sello personal , es elaborado desde un conjunto de significaciones que el personaje tiene sobre s mismo y sobre el universo que lo rodea, es por decirlo de una manera precisa, su particular forma de ver, describir , interpretar y analizar los hechos. Este trabajo, concebido como una HISTORIA DE VIDA , no se nutre de una sola fuente , sino, como ya ha sido definida anteriormente, recurre a mltiples recursos documentales, con el objeto de aumentar la riqueza descriptiva y analtica del objeto de reflexin. Durante la elaboracin de este informe final, el libro comienza a ser citado a partir de su aparicin, antes, son citadas las entrevistas. Con base en estas fuentes y en el marco de una concepcin metodolgica en la que el autor le posibilita al actor se exprese desde su propio universo de representaciones, y asume ante l un distanciamiento critico, se fue estructurando este trabajo. Sin embargo, la base documental fundamental la constituye el archivo personal que el autor del trabajo fue levantando a lo largo de 20 aos de recuperacin sistemtica de los documentos que sta organizacin edita para circulacin amplia (peridicos, comunicados, revistas) y documentos internos (circulares, documentos de discusin y formacin poltica correspondencia con otras organizaciones. entre otros); a este material se suma un importante trabajo de campo en el que se realizaron setenta y cinco entrevistas a miembros de la Direccin de la organizacin y de la base, habitantes de zonas de influencia, dirigentes gremiales y sindicales, presos polticos y disidentes; de igual forma se hizo una revisin sistemtica de prensa nacional y regional encaminada a mirar la particular percepcin que este medio tiene del actor y de su accionar desde el momento en que aparece pblicamente. En lo posible se recurri a todas las fuentes que podan contribuir a estructurar el argumento de este trabajo desde la perspectiva ac sealada.18

Ahora bien, es inevitable que el investigador se convierta en el principal autor de esta historia, cuando es precisamente l quien orden el texto de acuerdo a cortes temporales o temticos, titula, subtitula, formatea, divide, recorta y en fin le da a la versin final la apariencia que sta asume al presentarse. Conforme a esto es necesario precisar algunas cosas sobre la relacin entre el autor y el personaje de esta historia de vida que permita aumentar el nivel de comprensin del texto final: Primero, el personaje ( ELN) esta constitudo por unidades de sentido, palabras y frases dichas por l, textos y discursos a travs de los cuales se comunica y se representa. Segundo, el autor se ha preocupado porque el personaje adems de protagonizar el relato, lo narre y exprese su propio punto de vista, lo que no implica que como interlocutor no introduzca la reflexin crtica del mismo y convoque al cuestionamiento permanente. Tercero, el relato se estructura sobre episodios y acontecimientos que de alguna manera tienen mayor relevancia para la propia representacin del actor ; sin embargo, el autor se ha preocupado por convocar a la memoria aquellos acontecimientos que el personaje desplaza o se refiere a ellos en forma mnima, pues constituyen hechos traumatizantes de su propio existencia. Cuarto, el autor, tomando en consideracin las lgicas de la fuente documental, define las caractersticas del desarrollo cronolgico del discurso, la profundidad de la argumentacin, la importancia de los personajes, el sentido de sus acciones, entre otras mltiples posibilidades de la construccin del discurso histrico. Quinto, el texto escrito oblig a estructurar algunas unidades narrativas que favorecen la comprensin del discurso histrico, su lectura y posibilidades interpretativas y analticas: por esta razn se tomaron en consideracin al menos cinco elementos constructores: las secuencias, los hitos, las etapas, los motivos y las causalidades, todos interactuando en la configuracin global del discurso. Las secuencias son divisiones en el interior del texto que poseen un alto grado de variabilidad e impredecibilidad en los que no siempre se distinguen claramente los puntos de partida y final. El concepto de secuencia nos resulta relevante y til porque la evolucin de la narracin casi nunca sigue un orden lineal ni cronolgico, sino, que en ella abundan las superposiciones, las proyecciones y los cambios sbitos de nfasis. A pesar de esto, es necesario distinguirlos y ello es viable a travs de los cortes que se van haciendo en la narracin. Los hitos son ciertos sucesos externos (Revolucin Cubana, por ejemplo) o internos (La muerte de Camilo, Anor..) presentados por el personaje como cruciales en el desarrollo de su propia existencia. Los hitos pueden definirse como los momentos claves de la vida relatada que poseen en el interior del relato capacidad explicativa o19

referencial ; para que un hito sea tal, es necesario que aparezca revestido de un carcter extraordinario y generador de nuevas circunstancias; es decir, hechos hasta cierto punto dramticos a los cuales el personaje les otorga capacidad explicativa, explcita o implcitamente. Los etapas son los fragmentos temporales con que es presentado el relato. Estas no siempre corresponden al esquema de clasificacin cronolgica usualmente utilizado. Suelen ser variables la cantidad de aos y de texto que se les dedica. Cada etapa, como podr verse en este trabajo, contiene o va asociado a un referente histrico o anclaje. Los motivos son afirmaciones directas o indirectas que tienden a explicar conductas del propio personaje o de otros del relato histrico; son supuestos del porqu de las conductas y de los actos y acciones desarrollados. La Causalidad, es un encadenador que relaciona, une y explica tanto los sucesos como los etapas y los hitos. Existen diferentes rdenes de causalidad que en el relato se sobreponen y enuncian sin mayores rupturas de continuidad. Las causalidades ms recurrentes son las de tipo histrico, psicolgico, natural y mtico. La causalidad de tipo histrico se produce cuando el autor siguiendo la lgica argumental del personaje, hace nfasis en los acontecimientos referidos o en el contexto en que ellos se dieron. As, los sucesos son producto de otros sucesos precedentes y dan origen, a su vez, a sucesos posteriores. La causalidad de tipo psicolgico alude a rasgos de carcter de algunos de los personajes intervinientes. En este caso las etapas quedan encadenadas de modo altamente personalizado, es decir, los hechos suceden ms por efecto de cmo son los individuos que participan en ellos, que por aspectos sociales, estructurales o exteriores a los caractersticas de los involucrados. Los protagonistas materializan determinados conductas por sus rasgos personales, de modo que la accin aparece como prefigurada en su interioridad y no como factores determinantes externos ( la poca de Fabio Vsquez). La causalidad de tipo natural es, en algn sentido la casi no causalidad: los hechos sucedieron porque tenan que suceder. El devenir se ve como natural, en el sentido en que corresponde no a una lgica de los hechos ni de los personas, sino de la naturaleza de la vida. La causalidad de tipo mtico alude, principalmente, a referencias que estn fuera del dominio de lo estrictamente humano, en este terreno son frecuentes las alusiones religiosas y mgicas. En el estudio del ELN, como en el de toda organizacin de esta naturaleza, son importantes, entre otros, el mito generador, el mito del hroe, el20

mito paradisiaco.. que expresan y explican la lgica de las representaciones simblicas desde donde se justifica el compromiso a travs del cual se desarrolla la existencia histrica de la organizacin. (Estas tipificaciones han sido recreadas de los trabajos Carlos Pia 1988, sobre el testimonio histrico). El uso de este tipo de metodologa de investigacin posibilita la confrontacin y contrastacin de puntos de vista en los que se comienza a dilucidar la realidad del movimiento guerrillero, superando las lecturas poltizadas y romanticas que han carcterizado este tipo de estudio. Para ello, ha sido necesario agotar los ms variados recursos documentales y las fuentes de informacin ms diversas, pero igualmente arriesgar periodizaciones que estn en estrecha relacin con la informacin proporcionada por las fuentes y con los estudios tericos existentes al respeto. El tratamiento de la lucha armada como objeto de estudio requiere indiscutiblemente de un marco conceptual que le otorgue al problema un status de cientificidad que lo distancie de implicaciones meramente polticas. En este sentido, todo el estudio esta atravesado por una estructura de anlisis terico, sin que por sta pierda la importancia poltica que se deriva de ser conocimiento social. Por ahora, me permito traer a relacin tres enfoques a travs de los cuales se puede observar de una manera ms compleja el problema de la lucha armada en su especificidad de guerra irregular, para el periodo abordado en este trabajo (19631978). El primer enfoque lo constituye la teora del partisano de Carl Schmitt,, en particular los cuatro criterios que definen las caractersticas de la modalidad de la lucha partisana ; el segundo enfoque , la propuesta de periodizacin que seala el profesor Peter Waldmann en la evolucin de la lucha guerrillera y , por ltimo, la consideracin de algunos aspectos tericos formulados por el socilogo e investigador Eduardo Pizarro en su documento, Bases para una sociologa de la guerrilla en Colombia. Estas tres perspectivas de anlisis resultan tiles para las reflexiones de este trabajo. La teora del partisano de Carl Schmitt, se ha constituido en un interesante instrumento de estudio y anlisis para guiar la reflexin de la guerra irregular en los paises de America Latina donde sta se desarrolla. Nacida del estudio de la lucha de los partisanos espaoles de 1808 , Schmitt, construye una propuesta terica en la que define cuatro criterios esenciales de la guerra no convencional que permiten identificarla en un contexto histrico determinado: irregularidad, movilidad, intensidad del engagement poltico ( compromiso poltico) y carcter telrico. El primero de estos criterios tiene que ver con el desprendimiento de las leyes regulares de la guerra y la adopcin de una estratega de lucha no convencional dada las condiciones de desventaja en que el partisano se encuentra frente al21

enemigo. En lo esencial su carcter IRREGULAR est dado por dos elementos sobre los cuales erige sus prcticas de confrontacin militar: La sorpresa y la mimetizacin. El segundo criterio, esta definido por una ACENTUADA MOVILIDAD que se expresa en permanentes desplazamientos, rapidez en el accionar, cambios bruscos en los ataques y retiradas tcticas. La lucha del partisano encuentra en este criterio su estructura de organizacin y accin militar que disuelve las normas clasicas de la guerra y la estructura tradicional de un ejercito regular. El tercer criterio lo constituye la intensidad de su COMPROMISO POLITICO. El partisano, est guiado por una concepcin poltica que legitima su accin militar; Schmitt seala que es precisamente el carcter poltico el que revaloriza el sentido originario de la palabra partisano la que proviene de partido, en sentido estrecho y , grupo o movimiento poltico, en sentido ms amplio. El cuarto criterio lo define el CARCTER TELRICO de la lucha partisana; ste limta la enemistad a un espacio, pese a su movilidad tctica y se expresa como una actitud predominantemente defensiva; en este sentido, le es indispensable mantener una relacin estrecha con la poblacin, el territorio y las condiciones geograficas del espacio en que se desarrolla su confrontacin armada. Como el lector se podr dar cuenta , estos cuatro criterios esenciales de la lucha partisana se desarrollan con toda intensidad en el actor objeto de investigacin durante la tapa de estudio. Pero, adems dos conceptos que suelen acompaar la lucha de los partisanos y que han carcterizado al movimiento insurgente en el pais son los de resistencia y clandestinidad. Este ltimo evidencia la perspectiva irregular de la accin partisana, la que fu considerado por esta razn ilegal durante mucho tiempo, negandole al partisano su condicin de combatiente y ubicandolo en condicin de delincuente. Sin embargo, dado el crecimiento y desarrollo de la lucha irregular, el Derecho Internacional Humanitario ha ido dandole cobertura legal al partisano al considerarlo miiembros de un movimiento de resistencia organizada. El profesor Peter Waldmann sugiere una propuesta metodolgica para abordar el estudio de la evolucin del movimiento guerrillero conforme a una periodizacin que toma en consideracin tres etapas: surguimiento, expansin y exito. En relacin con el SURGUIMIENTO , seala que ste puede producirse en cualquier momento y bajo cualquier circunstancia, que no existe una regla que pueda ser aplicable y que explique la razones de origen. Puede surgir, dice, en un momento de crisis o prosperidad econmica, de tranquilidad o conflicto social, dentro de un rgimen civil o militar, por efecto de acontecimiento internos o de la influencias internacionales. Desde sta perspectiva lo que esta sealando Waldmann es la necesidad de abordar cada movimiento en el marco de su propio contexto histrico de genesis para determinar en l su causalidad y su intensionalidad especfica.22

Desde el punto de vista de la EXPANSIN, Waldmann seala tres condiciones que le son favorables al movimiento guerrillero para asumir esta etapa: la primera tiene que ver con la composicin social de su base guerrillera, la que ubica bsicamente, al momento de su origen, en el excedente de intelectuales insatisfechos producidos por las universidades latinoamericanas. Waldmann seala que las clases medias nuevas, en especial los intelectuales, asumen durante esta poca una forma de protesta distinta a la de las clases bajas, por cuanto que mientras las clases pobres se vuelven agresivas por razones de defensa, para sobreviri y conservar lo poco que tienen, los grupos intelectuales de las clases medias emplean la fuerza con fines altruistas cuyo propsito centra es un supuesto mundo mejor. Los jovenes intelectuales recurren al empleo de la fuerza solo cuando tienen la impresin de que los otros medios de influir en las decisiones polticas se han agotado. La segunda condicin que favorece la expansin del movimiento guerrillero se deriva de lo anteriormente expuesto, es el efecto de la restriccin, cuando no el cierre de la vas de participacin poltica; todo rgimen que por su inmovilidad y los lmites que impone el acceso al proceso poltico, causa la impresin de excluir toda alternativa y de no admitir ningn cambio, corre el riesgo de ser atacado por la juventud rebelde, afirma Waldmann. La tercrera condicin tiene que ver con el carcter logstico de la lucha armada y se refiere a la existencia de un territorio y/o una posibilidad que le permita a los insurgentes escapar a la represin. Waldmann seala que la guerrilla siempre a logrado mantenerse gracias a la posibilidad de retirarse a refugios territoriales donde el brazo armado del Estado no la pueda alcanzar; argumenta, que la guerrilla urbana no ha tenido exito, entre otras razones , porque en la ciudad no se puede atacar al enemigo, sin poner en peligro otros grupos de la poblacin y su propia seguridad. En relacin con la etapa de EXITO , Waldmann afirma que el movimiento insurgente solo puede salir victorioso en circunstancias muy especficas: primero, que se trate de un pas pequeo y no demasiado desarrollado, donde la eficacia y la potencia de las Fuerzas Armadas sea limitada; segundo, que se produzca una escisin de las clases medias y de la burguesia de manera que una fraccin reformista se ponga al lado y los apoye y, finalmente, que el prestigio y la legitimidad del rgimen haya decaido tanto, que la mayora del pueblo le quite su apoyo y que los insurgentes sean capaces de aprovechar la situacin, presentandose como unica alternativa poltica viable. Si bien los planteamiento de Waldmann resultan importantes como referentes a tomar en consideracin, en cuanto que constituyen el resultado del estudio y anlisis de hechos histricos concretos, su debilidad e inconsistencia radica en la pretencin generalizadora de los mismos. Es evidente que los planteamientos resultan utiles a pesar de que puedan parecer ingenuos en su concepcin general.23

El sociologo-investigador Eduardo Pizarro Leongomez, en su esfuerzo por erigir las bases de una sociologia de la guerrilla en Colombia, nos propone para el estudio del movimiento insurgente en nuestro pas , una periodizacin que se estructura sobre una serie de consideraciones de carcter histrico y sociolgico. En relacin con lo histrico, Pizarro, nos propone reconocer el carcter y la condicin hostorica de las organizaciones armadas con sus consiguientes transformaciones y cambios fundamentales, de lo que se deriva la necesidad de una periodizacin que refleje esa condicin y los cambios que en ellas se producen. En el sentido socilgico, Pizarro, nos invita a establecer una diferencia entre lo que l considera Grupos de la primera generacin (FARC, ELN y EPL) y los Grupos Insurgentes de la Segunda Generacin ( M-19, Quintn Lame, Patria Lbre, PRT). Igualmente, Pizarro , propon para el estudio de la guerrilla Colombiana tres etapas a saber : etapa de emergencia y consolidacin (1962-1973); etapa de crisis y disgregacin(1973-1980) y, una ltima etapa de recomposicin y auge a partir de 1980. Al abordar la primera etapa, Pizarro, seala la tradicin de lucha armada guerrillera que existe en Colombia y considera que sta es una diferencia fundamental con otros pases de America Latina, En este sentido afirma, que en buena medida la consolidacin de los grupos guerrilleros en el pas, va a estar determinada por la experiencia temprana de esa modalidad de accin poltica y, de la influencia de la Revolucin Cubana que rego el mito guerrillero, el que encontro el terreno abonado para su germinacin en nuestro pas. Para Pizarro, los grupos armados en Colombia, exceptuando las FARC, cuya tradicin militar seala anterior a Revolucin Cubana, nacieron embuidos de una mentalidad foquista, que nublo un anlisis objetivo de sus posibilidades de lucha dentro de una lectura, ms precisa y menos romntica, de las condiciones histricas en las que emergieron. Pizarro, al igual que Waldmann, seala las limitaciones impuestas por la composicin de clase de los ncleos guerrilleros iniciales , cuyos intereses hacan que los niveles potenciales de su representacin fuesen reducidos, salvo en determinadas capas de la poblacin movilizadas en gracia a una adhesin ideolgica ( estudiantes, empleados, capas medias) y en zonas rurales en las cuales , por su presencia, la guerrilla poda contar con un apoyo local, el resto de la poblacin escapaba a su influencia, afirma Pizarro. La segunda etapa es caracterizada por Pizarro como de desagregacin y crisis. Esta etapa se expresa a travs de una permanente confrontacin en el interior de las organizaciones insurgentes en relacin con intereses polticos, recursos de poder, prcticas de guerra, responsabilidades en hechos ocurridos ; pero igualmente24

, por el desarrollo de cercos de aniquilamiento militar exitosos por parte del ejrcito y , tal vez , lo ms significativo, por la incapacidad de la guerrilla de articularse a las luchas sociales. La tesis sobre la que Pizarro explica sta etapa es la de la reconstruccin del movimiento social frente a un creciente declinar del movimiento insurgente ; segn l, en la dcada del sesenta, la debilidad de los actores sociales en nombre de los cuales deca actuar la guerrilla, haba permitido su sustitucin por las vanguardias armadas , pero, una vez estas organizaciones se reconstruyeron , comenzaron a actuar directamente, para alcanzar sus reivindicaciones organizando sus canales de participacin y resolucin de sus conflictos. Para Pizarro, la operacin Anor simboliza la etapa de crisis y desagregacin. La tercera etapa de reactivacin y auge , se inicia en la Administracin Turbay Ayala , como consecuencia del intento de sta de aniquilar el movimiento popular y, la nueva experiencia internacional del triunfo sandinista que revivio el mito guerrillero. Para Pizarro, sta etapa esta signada por la emergencia de los grupos guerrilleros de la segunda generacin( M-19, Quintin Lame , PRT), cuyos mtodos , perspectivas y lenguaje conduciran a una renovacin del movimiento insurgente la que coincidira con la emergencia del movimiento social como un actor con presencia nacional. La caracterstica que Pizarro le atribuye a esta tercera etapa como fundamental es el transito de la guerrilla predominantemente militar haca formas insurgentes ms partisanas y societales y, los intentos de unidad del movimiento amado, inicialmente en la Coordinadora Nacional Guerrillera y luego en la Coordinadora Guerrillera Simn Bolivar, en el transito de tendencias militaristas haca expresiones ms polticas de la accin militar. Pizarro como Waldmann, partiendo de realidades histricas especficas busca generalizaciones que si bien en su conjunto pueden parecer en un primer momento acertadas, al abordar en concreto cada actor armado obliga, como para el caso del ELN, a proponer periodizaciones que se ajusten a su propio desenvolvimiento histrico. En el marco de estos referentes globales es que pretendemos valorar esta HISTORIA DE VIDA del ELN, la que resulta supremamente til para el estudio de los conflictos sociales y polticos en nuestro pas en los ltimos treinta aos. He querido trabajar un proyecto de periodizacin para esta historia que se estructura sobre la base de la conceptualizacin enunciada arriba, desarrollado de tal forma, que a la vez que toma en consideracin la vida interna de la organizacin, se preocupa por articular a la misma los acontecimientos histricos que estn sucediendo en el mundo y repercuten en la historia del pas.25

Esta periodizacin compromete para este volumen 10 etapas a saber: 1. ANTECEDENTES Y SURGIMIENTO DE LA ORGANlZAClON (1958-1966) Esta etapa toma en consideracin el momento histrico que atraviesa el pas al aparecer el ELN; la situacin internacional, en particular la Revolucin Cubana; la creacin de la brigada Jos Antonio Galn, las relaciones, contactos y trabajo con la poblacin civil en la zona de ubicacin del primer foco guerrillero; la primera marcha el 4 de Julio de 1964 y los meses iniciales de vida guerrillera; la Toma y el manifiesto de Simacota el 7 de enero de 1965; los principios programticos que definieron la lnea poltica del ELN en el momento de su surgimiento; las primeras acciones militares; la aparicin de Camilo Torres Restrepo y el Frente Unido; la incorporacin de Camilo a la guerrilla y su muerte en combate; los proyectos de crecimiento orgnico y los fundamentos polticos y militares que guiarn la primera etapa. 2. AUGE MILITAR Y CONTRADICCIONES INTERNAS (1966-1973) En esta etapa se reflexiona sobre la incidencia del ELN en las organizaciones gremiales existentes en la poca, en particular la Federacin Universitaria Nacional (FUN), la Asociacin Universitaria de Santander (EUDESA), La Unin Sindical Obrera (USO), La Asociacin Nacional de Usurarios Campesinos (ANUC) y el grupo de curas Golconda. Se toma en consideracin los nfasis en las prcticas militares y las contradicciones surgidas en el interior del ELN que dieron origen a los fusilamientos de Vctor Medina Morn, Julio Cesar Corts, Heliodoro Ochoa, Juan de Dios Aguilera, para citar solo algunas de las ejecuciones que se llevaron a cabo durante este perodo ; se toma tambin como objeto de reflexin las relaciones del ELN con la base campesina y con otros organizaciones poltico-militares en el campo, las asambleas guerrilleras y algunos de los ms nombrados consejos verbales de guerra. 3. LA OPERACION ANORl (1973) He querido abordar la operacin Anor como una etapa de la vida del ELN, con el objeto de estudiar la especificidad de este hecho, que es considerado como la accin militar envolvente de mayor capacidad de aniquilamiento desarrollado por el ejrcito en un perodo en que empezaba a poner en prctica nuevos tcticas de lucha contrainsurgente. Trato en esta parte la situacin del ELN entes de Anor, el estado del ejrcito y la contraguerrilla; el desarrollo de la operacin y sus respectivos resultados, al igual que la situacin de la base campesina durante este perodo.

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4. CRISIS INTERNA (1974-1978) En esta parte se reflexiona sobre la situacin en que queda la organizacin despus de Anor, las divisiones que se producen en su interior, la formacin de frentes rurales y grupos urbanos, la salida de Fabio Vsquez Castao del pas, el relevo de mando, el surgimiento del grupo de replanteamiento, los esfuerzos de reestructuracin orgnica y poltica, las acciones militares, la articulacin al movimiento de masas y a los conflictos sociales y polticos que caracterizaron el gobierno de Alfonso Lpez Michelsen. 5. EN EL CAMINO DE SUPERAR LA CRISIS (1978-1983) El periodo de la historia del ELN que va de 1978 a 1983 es muy importante para la organizacin en la medida en que durante esa etapa se produce su REFUNDAMIENTO En esta parte abordaremos los procesos a travs de los cuales mediante distintos sistemas de coordinacin y definicin poltica se busca superar la crisis en que se encuentra la organizacin a finales de la dcada del setenta. Inicialmente tomaremos en consideracin la superacin de las dificultades de conduccin que llevaron al nombramiento de una Direccin Nacional provisional DNP, camino de la conformacin de una Direccin Nacional (DN) permanente lo ms representativa posible, as como la realizacin de los eventos y las acciones preparatorias que le permitieron al ELN sortear sus debates internos y reconstruir su lnea poltico organizativa. Abordaremos el balance crtico de que hace en el periodo a la historia de la organizacin, as como la formulacin de sus nuevos referentes ideolgicos y polticos que han de orientar su accionar durante la dcada siguiente. 6. EL LARGO CAMINO HACIA LA PRIMERA ASAMBLEA NACIONAL, CAMILO TORRES RESTREPO, Y LOS PROCESOS UNITARIOS DE LA IZQUIERDA ARMADA. (1984-1986) La historia del ELN en el periodo comprendido entre 1984 y 1987 se desarrolla en relacin a dos ejes centrales: la preparacin y realizacin de la Primera Asamblea Nacional de la organizacin y el impulso a los procesos unitarios de la izquierda armada, que en este periodo darn origen a la Coordinadora Nacional Guerrillera (CNG). 7. LA UNIN CAMILISTA-EJERCITO DE LIBERACIN NACIONAL (UC-ELN) Y EL SURGIMIENTO DE LA COORDINADORA GUERRILLERA SIMN BOLVAR (CGSB) (1987-1989)27

En este capitulo abordaremos los procesos unitarios que desde la trilateral y al interior de la CNG posibilitaron la fusin entre ELN y el MIR - Patria Libre que di origen a la Unin Camilista - Ejercito de Liberacin Nacional (UC-ELN) el 8 de junio de 1987; tomaremos en consideracin la propuesta poltica resultante de ese proceso de unidad, las dinmicas del mismo y sus contradicciones. Igualmente, abordaremos el proceso mediante el cual la CNG, se transforma en la Coordinadora Guerrillera Simn Bolvar con la articulacin de las FARC. 8. II CONGRESO DE LA UC-ELN Y EL RESURGIMIENTO DE LOS CONFLICTOS INTERNOS. (1989-1991) En esta parte abordaremos como objeto de reflexin la dinamica y los procesos que condujeron a la realizacin del II Congreso Nacional de la UC-ELN, a finales de 1989, evento en el que se ajusta y define la lnea poltica de la organizacin, se concreta la tctica en la concepcin de PODER POPULAR Y NUEVO GOBIERNO y se busca saldar las discusiones que el proceso de unidad haba dejado pendiente. Se resalta, la percepcin que tiene la UC-ELN de las transformaciones que se estn produciendo en el pas y el mundo, el estado en que se encuentra como organizacin armada, su proceso interno, sus contradicciones y sus nuevos conflictos. En el propsito de hacer la historia de las ideas polticas, este capitulo, har particular seguimiento y nfasis en las transformaciones que se producen en la construccin de sus imaginarios poltico-ideolgicos conforme a lo planteado en las Conclusiones del Congreso y a las discusiones y confrontaciones que suscitan las mismas en distintas estructuras de la organizacin. 9. EN EL CAMINO HACIA EL III CONGRESO DE LA UC-ELN (1992- 1996) La Reunin Nacional de la UC-ELN de Agosto de 1991 haba orientado al COCE para que iniciara los preparativos que condujeran a la realizacin del III Congreso de la Organizacin en el que se deban evaluar la nueva situacin histrica y revisar y ajustar los fundamentos estratgicos y tcticos de tal manera que respondieran adecuadamente a las nuevas realidades mundiales y nacionales. Igualmente, deba revisar la situacin interna de la organizacin, saldar las discusiones pendientes resultantes de la fragmentacin producida por la CRS y establecer los criterios de unificacin interna que la proyectaran haca el futuro. Para este periodo la UC-ELN centra su preocupacin en el desarrollo de una concepcin integral de la guerra donde la lucha armada es solo uno de los medios de su materializacin. El nuevo enfoque de la guerra convoca esfuerzos de tipo econmico, social, cultural, ideolgico y militar como un todo interactuante y creativo. La mayora de los esfuerzos de la UC-ELN a partir del II Congreso28

estaban destinados a desarrollar un modelo de guerra inscrito en la estrategia de poder popular que deba construir simultneamente un modelo de acumulacin de poder que se eriga sobre una nueva institucionalidad, una nueva economa, una nueva cultura, un nuevo gobierno, una nueva nacin. Observar este proceso de construccin poltica es el propsito de este capitulo. 10. LA SOLUCIN POLTICA AL CONFLICTO SOCIAL Y ARMADO, EL PROCESO DE PAZ Y EL IV CONGRESO DEL ELN (1996- 2007) En esta ltima parte abordaremos tres aspectos que tienen que ver directamente con la vida del ELN en los ltimos diez aos: en un primer momento haremos referencia desde una perspectiva amplia a la concepcin de lo que gobierno e insurgencia entiende por solucin poltica del conflicto social y armado en el marco de una perspectiva histrica que se remonta a la administracin Betancourt y se extiende hasta el gobierno Uribe. En un segundo momento, tomaremos en consideracin el itinerario seguido por el proceso del ELN en las administraciones de los presidentes Samper, Pastrana y Uribe y, por ltimo, ser objeto de reflexin el IV Congreso del ELN desarrollado durante la segunda mitad del 2006. En general el trabajo se constituye en una historia del ELN, construida desde "adentro", a travs de documentos de la organizacin y entrevistas a sus dirigentes; nos permite conocer pasajes de la historia de una organizacin cuyas prcticas han dado origen a una forma especfica de pensar y comportarse frente a la realidad social y poltica del pas; en l se expresan puntos de vista, se definen posiciones, se hacen propuestas y bosquejan idearios cuya validez est dada por ser fundamento del accionar de quienes tienen la responsabilidad de definir los derroteros de la organizacin; nos pone en contacto con una informacin supremamente valiosa para entender los determinantes del comportamiento del ELN, y el peso que su experiencia histrica tiene sobre los mismos; el relato nos brinda la posibilidad de estudiar la lgica de sus contradicciones internas, los formas especficas de superar sus crisis, los elementos unificadores que identifican, le dan cuerpo y continuidad a esta organizacin; nos permite mirar la evolucin de su pensamiento poltico, las continuidades y discontinuidades de su discurso ideolgico y su postura frente a la crisis de las ideologas y los paradigmas. En sntesis, ste es un discurso descriptivo, analtico y explicativo de lo que ha sido la historia de] ELN, en el periodo de 1958 a 2007, vista a travs de sus propios argumentos, los que fueron mediados por una metodologa de trabajo cuyo objetivo esencial consisti en la construccin de un actor social y poltico del conflicto colombiano desde sus propios imaginarios polticos

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PRIMERA PARTEANTECEDENTES, SURGIMIENTO Y CONSOLIDACION DEL ELN (1958-1966)1. CONTEXTO HISTORICO EN QUE APARECE EL ELN: Violencia1 y Frente Nacional El perodo de la Violencia comprendido entre 1946-1958, constituye uno de los ms importantes procesos socio-polticos del presente siglo y de imprescindible conocimiento para comprender la dinmica de las estructuras y los procesos socio econmicos y socio - polticos colombianos en la segunda mitad del siglo XX. Los recientes estudios historiogrficos sobre este perodo de la historia del pas, buscan superar afanosamente el enfoque tradicional con que se ha reflexionado la violencia, para ver ms all de la confrontacin bipartidista - por el manejo hegemnico del poder estatal - las formas de participacin de los distintos sectores sociales, los mecanismos de acumulacin extraeconmica, los especificidades regionales y culturales en las zonas en que los conflictos se expresaron con mayor intensidad, las estrategias de organizacin y resistencia suprainstitucional a la represin estatal, entre otras muy variadas lecturas.21 Para el estudio de la violencia puede consultarse entre otros los siguientes trabajos, en orden de edicin, que se encuentran debidamente referenciado en la bibliografa: Camilo Torres Restrepo, La violencia y los cambios socio-culturales en las reas rurales colombianas(1963); Germn Guzmn Campos y otros, La Violencia en Colombia (1962-1964). Gonzalo Snchez La Violencia y sus efectos en el sistema poltico colombiano(1976) y Las Ligas Campesinas en Colombia (1977); Fernando Urrea, Consideraciones sobre el tema de la Violencia (1977); Mario Arrubla y otros, Colombia hoy (1978), Alfredo Molano, Amnista y violencia (1978);Santiago Arboz, Historia del Frente Nacional(1977); Jaime Arocha, La violencia en el Quindio(1979); Paul Oquist, Violencia , conflicto y poltica en Colombia(1978); Dario Fajardo, Violencia y desarrollo (1979) y La Violencia 1946-1964: Su desarrollo y su impacto (1981); Gonzalo Snchez B. y Donny Meertens, Bandoleros, Gamonales y Campesinos: El caso de la Violencia en Colombia(l983) ;Carlos Miguel Ortiz Sarmiento, Estado y subversin en Colombia (1985); Gonzalo Snchez y Ricardo Pearanda (compiladores) Pasado y presente de la Violencia en Colombia (1986); Daniel Pecaut, Orden y Violencia, 1930-1954 (1987). Existe un gran nmero de publicaciones sobre historia regional de la Violencia algunas de las cuales se anuncian en la bibliografa de este trabajo.

2 A este respecto puede verse el trabajo introducctorio que hace Gonzalo Snchez al libro de Pasado y presente de la violencia en Colombia, titulado "Los estudios sobre la violencia, balance y perspectivas" (1986). Al igual que otros balances presentados a los cuatro Simposios de la Violencia en Colombia, realizados por la UPTC en la ciudad de Chiquinquir entre 1982 y 1990, que se encuentran en el archivo de dicha Universidad y en las memorias publicadas.

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No obstante, lo ms recurrente en la memoria del comn de la gente y en particular de quienes tuvieron que soportar las acciones de la violencia poltica en las distintos regiones en que sta se expres en forma ms cruda, son las acciones de terror de civiles y funcionarios oficiales que motivados por el sectarismo poltico llenaron de cadveres y arrasaron gran parte del territorio nacional. El asesinato sistemtico, la tortura, la violencia sexual, la mutilacin, la manipulacin brutal de los cadveres, el boleteo, la intimidacin mediante el incendio, la matanza de ganado, lo destruccin de sementeras, el despojo de propiedades, el abandono y la venta precipitada de fincas y parcelas, con la consiguiente acumulacin de propiedades y riquezas en manos de quienes pudieron instrumentalizar la criminalidad colocndola al servicio de su propio beneficio, fueron entre otras algunas de los expresiones de violencia durante este perodo. La Violencia institucional y parainstitucional fue el mecanismo a travs del cual se adelantaron los campaas de control social y poltico, que buscaron homogeneizar ideolgica y polticamente a la poblacin; en las operaciones de "pacificacin" adelantadas por la polica y el ejrcito en pueblos y veredas fueron ejecutados centenares de personas, al tiempo que bajo la proteccin y la complicidad de los autoridades y jefes polticos locales, regionales y nacionales, grupos parainstitucionales, organizados como cuadrillas y "pjaros", realizaron operaciones de aniquilamiento, limpieza y sometimiento de las disidencias polticas. El norte del Valle, el Viejo Caldas y el Tolima fueron escenarios de esta modalidad de agresin, siendo precisamente en estas regiones del occidente colombiano en las que apareci el tristemente clebre Len Mara Lozano, "El Condor". No sobra resaltar que no fueron los nicas regiones en donde esto sucedi, Boyac y los Santanderes fueron igualmente escenarios de estas prcticas criminales de homogeneizacin poltica.3 La muerte de Jorge Elicer Gaitn el 9 de abril de 1948, gener un estallido violento del conflicto social y poltico que no respet ningn estrato social; el terrorismo poltico afect a todas las clases a distinto nivel dependiendo de los posibilidades sociales, econmicas y polticas que tuviese cada cual, para resistir la ofensiva de la barbarie sectaria de los partidos. Cuando se hizo imposible la situacin y los mecanismos para frenar desde la sociedad civil la ola de violencia que azotaba el territorio nacional no funcionaron suficientemente, se recurri a la lucha armada en la forma de guerrillas, como estrategia central de resistencia poltica.43 Para ilustrar estos casos puede verse los trabajos de: Jaime Arocha, La violencia en el Quindio (1979); Carlos Miguel Ortiz Sarmiento, Estado y subversin en Colombia(1985); Dario Betancurt y Martha Garcia. Matones y cuadrilleros (1990); para el caso de Boyac, Javier Guerrero, Los aos del olvido ( 1991);Medfilo Medina, La resistencia campesina en el sur del Tolima (1986); entre otros muchos trabajos que ilustran esta situacin en distintas regiones.

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A este respecto puede verse los trabajos de Daniel Pecaut, Algunas reflexiones sobre el fenmeno de la violencia en los aos 1945-1953

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Resulta importante para el objeto de este trabajo presentar a nivel general el contexto, los caractersticas y regiones en que se da este tipo de resistencia poltica durante el perodo de la violencia, en la medida en que de ella se nutre el proceso posterior.

2. De la violencia poltica tradicional a la violencia poltica

revolucionaria

Con la aparicin de la guerrilla liberal la violencia adquiri el carcter de una guerra civil en la que la poblacin campesina en armas, dirigida regionalmente por el partido, se enfrentaba al terrorismo de Estado agenciado por el gobierno de Laureano Gmez y Roberto Urdaneta Arbelez. Los grupos guerrilleros se establecieron en regiones que por sus caractersticas geogrficas, sociales y polticas les permitan subsistir y adelantar la lucha de resistencia con grandes posibilidades de xito. Se tuvo en consideracin al determinar los lugares de ubicacin de la guerrilla liberal, que las condiciones topogrficas fueran favorables para el desarrollo de ese tipo de lucha, que existiese un relativo aislamiento de los centros de poder, que los habitantes de la regin estuviesen unidos por un cierto grado de identificacin poltica y que, en alguna medida, los propietarios de grandes extensiones fuesen tolerantes con la presencia de grupos armados en sus territorios. Las guerrillas se consolidaron, siguiendo estos parmetros, en tres tipos de reas: - En las zonas de colonizacin reciente del Sumapaz y el sur del Tolima, en donde estaba an latente el conflicto agrario por titulacin de tierras y exista una base campesina politizada en otras pocas por el Partido Socialista, el Partido Comunista Y la UNIR de Gaitn. - En las Zonas de frontera abierta y colonizacin inicial dinamizada por el propio proceso de violencia: Los LLanos Orientales, El Magdalena Medio, El Ro Sin y el Ro San Jorge. - En el Sureste Antioqueo y otras reas en donde la estructura agraria ya estaba consolidada. La principal caracterstica de estas regiones consista en ser, desde el punto de vista logstico, despensas alimentarias en capacidad de sostener durante largo tiempo grupos de hombres armados relativamente grandes.(1976), y Orden y violencia, Capitulo V, (1987); J. Henderson, Cuando Colombia se desangro, (1984); R. Pineda Giraldo, El impacto de la violencia en el Tolima: El caso de El Lbano (1960); Gonzalo Snchez, Los das de la revolucin, Gaitanismo y 9 de Abril en Provincia(1983); Paul Oquist, Violencia, Conflicto y Poltica en Colombia (1978).

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Los Guerrilleros liberales estuvieron dirigidos por hombres que fueron convirtindose en smbolos de la lucha armado y en leyendas y mitos en sus regiones de origen, valga sealar entre la extensa lista que nos presenta Gonzalo Snchez en el trabajo citado, los casos de Guadalupe Salcedo, en los Llanos Orientales; Juan de la Cruz Varela, en la regin del Sumapaz; El Capitn Juan de Jess Franco, en el suroeste antioqueo; Julio Guerra, en el sur de Crdoba; Rafael Rangel, en la zona Santandereana del Carare-Opn; Sal Fajardo, en el noroeste de Cundinamarca; Jess Mara Oviedo, en el sur del Tolima, entre otros.5 En la medida en que la lucha armada fue desarrollndose por los grupos guerrilleros liberales comenzaron a aparecer normas y cdigos de comportamiento que pronto se transformaron en leyes que guiaban los acciones guerrilleras y la dinmica de vida y convivencia en los regiones que operaban: "cdigos que obligaban el respeto de nios, mujeres y ancianos, y leyes que prohiban expresamente la prctica de sistema de torturas y tierra arrasada a sus adversarios. Reglamentaba el uso de las expropiaciones o de su producto, subordinando los apetitos individuales a las necesidades colectivas de resistencia. Tenan tribunales propios: realizaban casamiento ente sus jefes y, en algunas zonas , las de mayor control, definan prioridades de produccin y de distribucin para la poblacin civil".6 No obstante la obediencia que los grupos guerrilleros guardaban a la direccin del partido liberal, dos situaciones fueron creando las condiciones para que stos fueran constituyndose en cuerpos autnomos con posibilidades de acumular fuerza capaz de llevarlos ms all de la resistencia o recuperacin del poder poltico para los liberales, al logro de transformaciones sociales y econmicos de beneficio general: La primera, la relacin indirecta que manejaba la direccin del partido con los jefes de la guerrilla que cre una separacin entre el mando militar y el mando poltico, dando posibilidades para que al crecer la autonoma guerrillera, se gestara un proyecto poltico de mayor alcance social que el ofrecido por el partido liberal; la segunda, la composicin social de la guerrilla que una multiplicidad de intereses, necesidades y experiencias polticas y sociales: " Era una guerra, afirma Gonzalo Snchez, dirigida en buena parte por los campesinos atados a las lealtades partidistas, pero tambin por campesinos que haban luchado independientemente por la tierra en dcadas anteriores, por lderes populares que haban tenido experiencia revolucionaria como la del 9 de Abril en calidad de alcaldes, miembros de juntas, de milicias, por policas desertores o destituidos, por luchadores rasos que se haban ganado el respeto y la admiracin en el curso mismo del combate; por emigrantes, por arrieros y, eventualmente, aunque en mnima parte, por trabajadores de obras pblicas y obreros con alguna experiencia sindical urbana. En suma, por5 Snchez Gonzalo. "Violencia, guerrillas y estructura agraria", en Nueva Historia de Colombia NHC. Santa Fe de Bogot, Edit. Planeta, 1989, Volumen II, Pg. 145.

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Idem, pg. 145.

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cuadros representativos de una Colombia distinta a la del siglo XIX en la cual la guerra tenda inevitablemente a hacerse popular. 7 A diferencia de las guerrillas del sur del Tolima dispersas, atomizadas en permanente confrontacin, las guerrillas del Llano crecan numricamente y se cualificaban polticamente hasta alcanzar niveles de autonoma que las llev a confrontar la direccin del partido liberal y a tomar la iniciativa en la gestacin de un proceso que habra de constituirse en un fenmeno claramente revolucionario. En Agosto de 1952, se realiza en Viot la "Conferencia de Boyac"' a la que asisten representantes de los frentes guerrilleros ms importantes del pas; esta asamblea se convierte en "La Primera Conferencia Nacional del Movimiento Popular de Liberacin Nacional" ; durante las deliberaciones se crea una Comisin Nacional Coordinadora, con el objeto de que se encargue de impulsar los tareas acordadas por la conferencia. Este evento reviste gran importancia en la medido en que expres la autonoma poltica alcanzada por el movimiento guerrillero. No obstante, el hecho ms sobresaliente lo constituye la prctica legislativa que comienza a impulsarse a travs de la estructuracin de leyes orgnicas que determinan los parmetros de comportamiento de la vida cvica y militar en un proceso que ya se concibe como revolucionario.8 La primera ley del Llano se proclama el 11 Septiembre de 1952, en ella se organiza la aplicacin de la justicia, se enuncian las funciones que deben cumplir los jefes civiles y militares, los comisarios y los agentes de orden pblico; se determinan los delitos contra la revolucin; se consagran los garantas individuales; se instituyen las prcticas de trabajo comunitario; se imponen lmites y condiciones al uso de la tierra; se establecen granjas y colonias por cuenta propia de la revolucin para el sostenimiento del ejrcito campesino; se reglamenta el desarrollo de la ganadera y el impulso a los hatos. La expedicin de esta ley muestra claramente el proceso de cualificacin ideolgica que se viene operando en el movimiento guerrillero del Llano.9 Durante los primeros meses de 1953 se producen importantes avances en lo poltico y organizativo de la guerrilla liberal Llanera. Durante este perodo se redact bajo la7

dem, pg. 142.

8 Sobre el desarrollo de las guerrillas del Llano puede verse el trabajo de E. Franco Isaza, Las guerrillas del Llano, (1955); Paul Oquist, Violencia, conflicto y poltica... Cap V. ; G. Sierra Ochoa, Las guerrillas de los Llanos Orientales,(1954); J. Vzquez Santos, Guerrilleros Buenos das (1954); Gonzalo Snchez y D. Meertens, Bandoleros, Gamonales y Campesinos (1983); Reinaldo Barbosa, Los Centauros de Llano(1993).

A este respecto puede verse los trabajos de E. Franco lsaza y Reinaldo Barbosa anteriormente citados y el trabajo monogrfico de Justo Casas Aguilar, titulado: TULIO BAUTISTA: Alma de la Resistencia Popular en el llano (1949-1952).Publicado por la Universidad Pedaggica y Tecnolgica de Colombia,(1992).

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concepcin del abogado Jos Alvear Restrepo, "El ms notable idelogo de la resistencia llanera" como se le ha denominado por alguno de los autores citados, la segunda Ley del Llano conocida como "La Ley que organiza la revolucin en los Llanos Orientales de Colombia", la que deba ser sancionado el 18 de Junio de 1953 por una Asamblea Guerrillera. La importancia de este documento de 224 artculos consiste en el hecho de concebir la revolucin como un movimiento popular de liberacin encaminado a conseguir la instauracin de un gobierno democrtico popular. Para ello establece un ordenamiento jerrquico para la conduccin del proceso: define los criterios polticos, econmicos y judiciales a travs de los cuales se ha de guiar la sociedad durante la lucha revolucionaria; se trazan las lneas generales de una economa de guerra, en lo concerniente al trabajo, la propiedad, la produccin y la distribucin; se regulan las relaciones entre las fuerzas armadas revolucionarias y la poblacin no combatiente; se establece un criterio educativo segn el cual se subordinan las armas a la poltico y se concibe la instruccin revolucionaria como parte de las labores cotidianas; se legisla sobre el matrimonio civil, la legitimidad de todos los hijos, la igualdad de la mujer ante el hombre, la proteccin de la poblacin indgena contra los abusos de los terratenientes y colonos, el respeto a la vida, honra y bienes de los conservadores en tierras invadidas, la prohibicin de la prctica de tierra arrasada. La dirigencia del Movimiento revolucionario Llanero tena clara conciencia de que la consolidacin y el desarrollo de su proyecto dependa del desarrollo nacional del movimiento revolucionario y de su posibilidad efectiva de articulacin en un solo proyecto; es en este sentido que se determina que una de las funciones asignadas al estado mayor consiste en : "dirigir las relaciones del Llano con las dems guerrillas y grupos revolucionarios tanto de Colombia como de otros pases, y procurar la unin y la cooperacin con ellos en todo lo posible".10 Despus de la Asamblea de Junio de 1953, los cosas comenzaron a definirse por distintos caminos; mientras el movimiento guerrillero consideraba necesario elevar el proyecto de la segunda ley del Llano a la categora de programa de la revolucin nacional y entregar la conduccin militar de la lucha revolucionaria a la jefatura de Guadalupe Salcedo, sectores polticos de los partidos liberal y conservador en estrecha unin con los gremios econmicos (terratenientes, ganaderos, comerciantes e industriales), profundamente conmocionados por el impacto demoledor de la violencia en el que se estaban consumiendo no solamente las propiedades de los medianos y pequeos campesinos, sino tambin los bienes de algunos sectores de las clases dominantes que sentan que la conmocin social amenazaba con sacudir de raz las estructuras del orden tradicional, se dieron a la tarea de madurar y colocar en marcha una salida de emergencia en la que un golpe militar se convertira en esperanza de salvacin para los colombianos y el comienzo de un proceso de pacificacin que terminara, supuestamente, con el bienestar10

Gonzalo Snchez, "Violencia,Guerrillas y .." en NHC, Volumen II , pags., 148-149.

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general y la concordia entre los ciudadanos. El 13 de Junio de 1953, se produce el golpe que coloca en el poder al general Gustavo Rojas Pinilla. 11 Tres hechos permitieron que madurara en la mentalidad de la clase poltica la necesidad de colocar un militar en el poder a travs de lo que posteriormente se llamara un "golpe de opinin", primero, las transformaciones que se venan produciendo en las estructuras de propiedad agraria como consecuencia de las dinmicas de expropiacin, venta forzada y abandono de la tierra que produjeron concentracin de riqueza, empobrecimiento prematuro y migracin, a la vez que transformaron, fortaleciendo, prcticas laborales que en condiciones normales se haban sostenido como relaciones marginales o complementarias: "Tierras baratas y salarios rurales altos, como precio de la inseguridad, constituan un binomio que sin lugar a dudas deban desalentar tanto a los terratenientes como a los inversionistas de mentalidad capitalista "12; Segundo, la separacin de hecho entre la direccin nacional del Partido Liberal y el Movimiento Guerrillero que vea que sus intereses cada vez entraban ms en contradiccin con los de sus jefes en la capital, quienes se negaban a encabezar la revuelta, pero se disponan en lo posible a beneficiarse de ello; y tercero, el crecimiento cuantitativo y cualitativo del movimiento guerrillero y su evolucin cada vez mayor, de una tctica de autodefensa a una ofensiva enmarcada en un proyecto poltico de mayor alcance ofrecido por los liberales e incluso por los comunistas, que se fue formando como resultado natural de la maduracin de la lucha guerrillera. En sntesis con el ascenso de Rojas al poder se trataba de ponerle freno a un proceso en el que se haba ido gestando una nueva Nacin, un nuevo pas y un nuevo Estado distinto al que los intereses de las clases dominantes encontraban como legtimo. Con el lema de "Paz, Justicia y Libertad", Rojas inicia el proceso de reconstruccin del pas recibido en medio de una crisis social y poltica profunda, cercado por la violencia generalizada, el terror y la anarqua absoluta por un lado, y por el otro, por una bien estructurada insurgencia armada que creca a pasos acelerados. En estas condiciones la tarea inmediata del gobierno militar no fue otra que la de entrar a controlar el terror y la anarqua existente, desarticular la guerrilla en crecimiento y reconstruir las zonas afectadas por la violencia. El discurso de la reconciliacin se puso de moda al son del lema del gobierno y "La patria por encima de los partidos".11 dem, pags, 150-151. Para el estudio del perodo del gobierno militar de Rojas Pinilla a nivel general puede consultarse los trabajos de Gonzalo Snchez, LA VIOLENCIA: de Rojas al Frente Nacional ,en NHC, Vol II; Carlos H, Urn, Rojas o la manipulacin del poder(1983);Alfredo Molano, Amnista y violencia (1978); Marco Palacios, El Populismo en Colombia (1971).

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Gonzalo Snchez,"Violencia, Guerrillas y .." en NHC, Volumen II , pg. 150.

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Los directorios polticos, los gremios, la iglesia y la prensa se colocaron al servicio de la labor emprendida por el general Rojas Pinilla y pronto comenz a sentirse una atmsfera distinta que llenaba de esperanza a sectores sociales que haban sido duramente golpeados por la violencia. Una estrategia predominantemente poltica emple Rojas para conseguir el objetivo de desarmar y desmovilizar el movimiento guerrillero liberal; Primero, ofreci una amnista general e incondicional, con promesas precisas de garantas para quienes depusieran las armas; segundo, orden la suspensin de las operaciones militares en las zonas de dominio y presencia guerrillera ; tercero, les reconoci a los insurgentes su condicin de fuerzas rebeldes y beligerantes en capacidad de negociar con el gobierno. Esta estrategia la acompa con una amplia labor de propaganda a travs de la distribucin masiva de hojas volantes, lanzadas desde aviones y helicpteros en las zonas donde estaban los principales frentes guerrilleros. El gobierno militar logr desmovilizar en cuestin de meses las guerrillas en el Tolima, el territorio Vsquez, Santander, Antioquia y los Llanos Orientales, quedando solamente algunos grupos en regiones de influencia comunista, particularmente en el Sumapaz y el Sur del Tolima, que comenzaron a desplazarse hacia zonas de defensa estratgica y apoyo logstico consistente, donde lograron refugiarse por algunos aos hasta que se transformaran en guerrilla revolucionaria de concepcin comunista. La desmovilizacin no estuvo exenta de los forcejeos de la negociacin, las presiones militares, el incumplimiento y los engaos. Los frentes guerrilleros ms organizados colocaron a disposicin del gobierno un pliego de peticiones en el que se reivindicaban garantas elementales como el derecho a la vida y la integridad fsica; el desarme de los grupos paramilitares de contraguerrilla; el reconocimiento de las condiciones polticas del guerrillero; la libertad para los presos polticos; el levantamiento del estado de sitio; garantas para unas elecciones libres; libertades polticas y sindicales; libertad de expresin hablada y escrita. En lo econmico, a travs de la negociacin se buscaba obtener crditos estatales para la reconstruccin y el uso productivo de la tierra; indemnizaciones para las regiones que haban sufrido la accin destructora de las tropas oficiales; restitucin de las propiedades usurpadas a sus antiguos dueos y distribucin de tierras a los campesinos con base en el principio de "la tierra para el que la trabaja".13 Pasada la primera etapa del gobierno del General Rojas, su administracin comenz a tomar el mismo camino de la poca del sectarismo poltico partidista producindose el resurgimiento de bandas criminales auspiciadas por gamonales,13 Para mayor ilustracin de este pasaje de la historia del pas puede leerse a Gonzalo Snchez, "LA VIOLENCIA: de Rojas..." en NHC , Volumen II pags l53-178 y del mismo autor, Races histricas de la amnista o las etapas de la guerra en Colombia", en, Revista de Extensin Cultural, U.N. Sede Medelln, Nm. 15. 1983.

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jefes polticos y los mismos organismos de seguridad del estado (Sic), para hostigar campesinos, asesinar amnistiados y guerrilleros desmovilizados generando en estos un sentimiento de frustracin e impotencia frente a lo que consideraban una traicin del gobierno militar, en la que haban cado a travs de la trampa de la amnista general. Pronto, los exguerrilleros conformaron nuevamente grupos que se pusieron al servicio de propietarios y jefes polticos liberales con el fin de confrontar la accin criminal del resurgimiento de los "pjaros". La violencia no se agenci solamente en forma efectiva y en la aplicacin de lo que desde entonces podra llamarse "Justicia Privada"; el gobierno al lado de los terratenientes inici una cruzada de pacificacin contra una de las zonas que haba servido de refugio a quienes se haban marginado cautelosamente de los beneficios de la amnista y estaban bajo la influencia del Partido Comunista:"Cuatro de abril de 1955, el SUMAPAZ es declarado 'zona de operaciones militares' y desde entonces 'pacificacin' volvi o ser sinnimo de arrasamiento, ametrallamiento y BOMBARDEO. Por lo menos seis batallones y al rededor de un tercio del total de efectivos del ejrcito participaron en la accin ..los primeros resultados demostraron que el gobierno, los militares y los terratenientes haban subvalorado la capacidad de resistencia campesina y la operacin que se pensaba iba a ser de das a semanas, se convirti en una larga guerra de dos aos, en los cuales muchos haban muerto, pero tambin, miles haban logrado evadir el cerco. Unos con Juan de la Cruz Varela se refugiaron en el alto de Sumapaz, otros huyeron hacia Marquetalia. La invasin militar, lo nico que consigui fue trasladar geogrficamente el problema, a un costo poltico incalculado".14

Al hacer un balance sobre la administracin de Rojas Pinilla se puede fcilmente identificar dos momentos: El primero, se caracteriz por el incremento de los recursos del Estado como consecuencia de dos factores: Una activa economa exportadora favorecida por la bonanza cafetera, y segundo la imposicin de nuevas cargas tributarias a la poblacin. Estos dos hechos le permitieron a Rojas contar con presupuesto suficiente para impulsar proyectos de inters nacional entre los que cabe destacar el reordenamiento de la produccin de hidrocarburos y el fortalecimiento de la empresa siderrgica de Paz del Ro, la inversin en la actividad agrcola mediante la compra de maquinaria y fertilizantes, la construccin de distritos de riego que favorecieron a los productores de caa de azcar, arroz y algodn; la financiacin de importantes obras de infraestructura tales como la construccin de centros hidroelctricos, el ferrocarril del Atlntico, el aeropuerto internacional El Dorado y las instalaciones de la televisin nacional. Esta poca fue de crecientes expectativas populares con respecto a los planes de pacificacin; una bien organizada campaa publicitaria unida a acciones de bienestar social a travs de la oficina de Rehabilitacin y Socorro dependiente del Servicio14

Gonzalo Snchez, "LA VIOLENCIA: de Rojas..." en NHC , Volumen II, pg. 167.

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Nacional de Asistencia Social (SENDAS) dirigido por la hija del general, Mara Eugenia Rojas de Moreno, aliment este perodo. No obstante, la imposibilidad de satisfacer la infinidad de demandas surgidas en el proceso de reconstruccin econmica y social del pas, debido a que las dimensiones de los problemas heredados de la Violencia superaban desmesuradamente las polticas y los recursos estatales, fue creando falsas expectativas que pronto comenzaron a perderse en el horizonte de la credibilidad popular. Es durante los dos primeros aos de gobierno que el general Rojas, en medio de las limitaciones anteriormente sealadas, genera la simpata en los sectores populares que habr de canalizar posteriormente hacia la creacin de la tercera fuerza poltica, cuando los sectores que lo colocaron en el poder comienzan a retirarle su apoyo. El segundo momento de la administracin Rojas se caracteriza por la disminucin de los recursos presupuestales provenientes de la economa exportadora, y por el crecimiento del movimiento de oposicin al gobierno que se agudiza a partir de que Rojas proclama la idea de hacer efectiva la creacin del Movimiento de Accin Nacional, MAN, el 13 de junio de 1956, al cumplirse el tercer aniversario del Golpe de Opinin . A partir de ese momento, el gobierno del general comienza a derrumbarse, presionado por la alianza de las fuerzas polticas tradicionales, la iglesia y los gremios econmicos quienes convocan a un paro nacional contra su gobierno que lo obliga a dimitir el 10 de mayo de 1957 ; para ese tiempo Laureano Gmez y Alberto Lleras Camargo, como representantes de los dos partidos tradicionales, haban madurado en Benidorm (Espaa) un proceso de transicin hacia el pacto del Frente Nacional.15 El proceso de conciliacin Liberal-Conservadora, resultante de los pactos de Benidorm y Sitges, logra alcanzar legitimidad a travs de un plebiscito el 7 de diciembre de 1957 y, posteriormente, legalidad mediante un acuerdo constitucional en el que se establece la frmula de la paridad y la alternacin en la conduccin del Estado, generndose all un proceso de exclusin de toda fuerza poltica ajena a los partidos tradicionales, lo que dara origen, implcitamente, a una nueva forma de confrontacin social y poltica que caracterizara los aos venideros. Lejos de solucionar los problemas estructurales de orden social y poltico la dictadura de Rojas y los primeros gobiernos del Frente Nacional redefinieron el carcter de la violencia; un proceso de reestructuracin de las formas violentas de expresin social comenz a gestarse en el trnsito de la guerrilla liberal al bandolerismo social y poltico y de ste a la lucha armada revolucionaria.

A este respecto puede verse los siguientes trabajos: Gonzalo Snchez, "La Violencia: De Rojas Al Frente Nacional" en NHC. Volumen II, Pags 153-178; Carlos H, Uran, Rojas o la Manipulacin del Poder, Bogot, Valencia Edit. 1983 y en particular el trabajo de Gabriel Silva Lujn, "El origen del Frente Nacional y El Gobierno de la Junta Militar", en NHC, Volumen II, Pgs 179-210.

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Un excelente trabajo historiogrfico de Gonzalo Snchez y Donny Meertens ilustra este proceso histrico: Asumiendo como eje central de sus reflexiones el fenmeno del bandolerismo, los autores buscan dar explicacin al conjunto de relaciones en torno al cual giran los aspectos econmicos, sociales y polticos de la violencia; conciben el bandolerismo como una manifestacin social y poltica que contribuye a explicar la compleja red de relaciones que se establecieron entre los campesinos y los gamonales, y entre stos y el Estado, en un perodo de la historia en que la confrontacin social y poltica se caracteriz por el empleo de mecanismos violentos. Snchez y Meertens consideran que el bandolerismo no puede ser entendido aisladamente, ni en relacin esttica entre los campesinos y las clases dominantes, ni como un exabrupto del proceso histrico en nuestro pas; piensan, que ante todo, lo que reflej el bandolerismo es la fragmentacin del movimiento social como resultado del xito que tuvieron las clases dominantes en su tctica de desorganizacin de las clases populares, que ante una serie de luchas, pero tambin de derrotas sucumben ante el doble juego de la amnista y la represin. En esta medida el bandolerismo surge como mecanismo de resistencia frente al aniquilamiento de la organizacin campesina de la que estuvo acompaada la contraofensiva de las clases dominantes ; es por esto que los autores en mencin se preocupan por demostrar cmo el bandolerismo nace de las ruinas de un fuerte y bien estructurado movimiento campesino y cmo por razones de su origen cuenta durante largo tiempo con el apoyo de la poblacin trabajadora rural. El trabajo de Snchez y Meertens es particularmente significativo en la medida en que, de alguna manera, explica el desarrollo de ese perodo de la historia colombiana en que la violencia poltica evoluciona a travs de esos particulares manifestaciones de organizacin hacia la violencia revolucionaria que tomar forma y se desarrollar a partir de finales de la dcada del cincuenta y comienzos del sesenta. Buscando construir una tipologa que d razn de los procesos que caracterizan en su multiplicidad y dispersin al bandolerismo, toman el camino de la reflexin en el contexto histrico en que est evolucionando la violencia, extraen de all los ejes centrales del surgimiento y transformacin del fenmeno y los rasgos que les permiten determinar niveles de diferenciacin interna en el marco de claras variaciones cualitativas: primero el paso del bandolerismo poltico al bandolerismo social, ilustrado con las historias de Tefilo Rojas (Chispas) y Efran Gonzlez; segundo, la evolucin de algunos hacia comportamientos verdaderamente revolucionarios, caso Roberto Gonzlez (Pedro Brincos), quien expres ciertamente su simpata por los grupos revolucionarios que proclaman la lucha armada (MOEC); El bandolerismo tardo, un remedo rural de los "pjaros" que operaron como cuadrillas en los que se pueden destacar los casos de Gustavo Espitia Valderrama ("El Mosco") y Conrado Salazar Garca (" Zarpazo"); cuarto, el mito campesino del bandolero como hroe invisible, protector de labriegos, vengador de injusticias, cuyo caso representativo sera el mtico "Capitn Venganza". quien, como lo afirman Snchez y Meertens, lleg a representar la irrupcin de un nuevo poder campesino;41

por ltimo, los que se inclinan por desarrollar la lucha revolucionaria y dan origen a la nueva guerrilla, muchos de ellos viejos guerrilleros liberales que se transformaron polticamente en los procesos de pacificacin.16 En este proceso de transformacin de la naturaleza poltica de la violencia se configuran nuevos actores del conflicto y se redefinen los razones del mismo:" Muchos de los combatientes de la violencia cambiaron de filas transformadas en el proceso mismo de su lucha y alimentos por el soplo revolucionario que invada a Amrica Latina en la poca de la revolucin cubana, se multiplicaron los frentes y las siglas que les daban nombre, penetraron nuevas capas sociales (empleados, profesionales y estudiantes); en todos ellos gravitaba, en alguna forma, el sectarismo de las guerras pasadas. Cargaban la herencia traumtica de la violencia, pero se haban inscrito definitivamente en otra historia, en una historia todava inconclusa".17

La violencia tomaba a partir de entonces una nueva perspectiva, ya no era la confrontacin entre los fuerzas polticas que haban llevado su sectarismo al extremo de la guerra civil, sino que se produjo una transformacin ideolgica y poltica que reorient la confrontacin, ordenando las fuerzas segn la dinmica de la luc