Escuela Nacional de Antropología e Historia HISTORIADel Positivismo a la Escuela de los AnnalesProf. Antonio Rousset BonillaCarlos Eduardo Salinas Bautista

El Método Histórico Aplicado a las Ciencias Sociales | Charles Seignobos

En esta obra Seignobos, hace referencia del método usado por las ciencias de la naturaleza, en cuanto como determinan y agrupan hechos en un sistema científico. Una observación directa con el objeto de estudio por medio de una experiencia empírica. Estas proposiciones son validas para las ciencias duras, que exigen un método preciso que parta de una hipótesis y lleve inevitablemente a la comprobación de tal en una tesis o ley. A la historia también se le ha pretendido convertirla en una ciencia estrictamente rígida y que pueda proveer la verdad del pasado.

Pero Seignobos se dirá - ¡oh sorpresa!-, el pasado no se puede estudiar como a un objeto directo, no se le puede analizar en un laboratorio como un animal estudiado por un biólogo, el pasado ya no existe, desde aquí ya se cae la pretensión de hacer de la historia objetiva. La historia se convirtió en subjetiva desde el momento en que su objeto de estudio ya no existe, pero tiene esperanzas cuando observa que el pasado humano dejó huellas de lo que hizo, rastros que demuestran que en algún tiempo paso algo importante, éstos si pueden ser observados con lupa, pero de una forma diferente y especial a partir de una especie de hermenéutica que el historiador impondrá en su materia de estudio.

Los documentos son esas huellas que el hombre deja con el paso del tiempo, son las muestras de un tiempo determinado, de un contexto especial y de una sociedad particular. Es importante señalar, que los documentos no lo dicen todo, por eso quien los estudia va a compara un documento con otro para reflexionar y poder concebir, cuál puede ser la esencia humana plasmada en aquel papel, qué era lo que pensaba en esa época y cuáles eran sus próceres. Puede llegar a comprender una evolución que parte del pasado y que permite ver sus impactos en el presente. Los datos recogidos después de ser analizados, se les puede ordenar a modo de darles una secuencia y asimismo construir un método.

Cuando uno mira una fuente, se entiende que quien lo escribió plasmó ahí su espíritu, su pensamiento, eso lo que se debe de comprender, porque gran parte de los historiadores “positivistas”, sólo recogen datos y datos sin criticarlos, sin reflexionarlos. Crea bultos de información que sirven solamente para ser vendidos a cualquier público que se quiere entretener con motivo de morbo y curiosidad. La historia no es esto, es la reflexión de lo que es en realidad el hombre, se mira en un espejo, porque se da cuenta de lo que es, lo que no es y de lo que es capaz de ser y hacer.

Para Seignobos esto es un serio problema, porque cómo invitar a la gente a que no tome la información a la ligera y la acepte sin dudar de ella. El problema es que las masas les da pereza indagar sobre lo que le dicen, lo cree todo a sabiendas de que lo engañen y lo manipulen. Muchos mexicanos no dudamos de lo que dicen las estadísticas del INEGI o las encuestas electorales, nos vamos con la finta y la final nos impone lo que nos dicen sin que podamos hacer algo al respecto.

La crítica tiene que cobrar sentido, no sólo en el ámbito científico, sino en todas las personas, para que puedan llegar a una cierta verdad. Que no se dejen llevar, porque las fuentes de información tengan una presentación intachable, haya una variedad grande de números y de estadísticas, obras que provengan de personajes que según tienen una autoridad o un estatus privilegiado dentro de la sociedad y tratar de eliminar la pereza de nosotros, ya que no nos permite profundizar en la información que estamos revisando.

Si se pretende hacer una crítica digna, primeramente no hay que tomar la información como totalmente verdadera, checar que las afirmaciones que se dan tengan las suficientes pruebas claras. Nosotros vamos a personificar a un juez que pretende resolver una problemática, decidiendo que es lo evidente y que es lo falaz.

Se fragmenta el documento en elementos y conceptos puros, se reconocerán aquí las palabras clave de una frase inmersa entre juicios, metáforas, que lleva al autor a llegar a afirmar ciertas cuestiones. Nos damos cuenta al sumergirnos en el documento, la esencia del autor, su honestidad, en qué contexto se encuentra viviendo. De dónde proviene y como se formó la obra, además de concebir las metas que planteaba al publicar dicha obra, a qué público iba dirigido. En qué factores hace más énfasis su discurso, sus creencias, qué afirma rotundamente, es lo que debe de ser criticado, porque es cuando más se tiende a mentir.

Finalmente se nota sus simpatías y antipatías, si defiende una postura, la ataca o quiere crear una nueva. Que corrientes artísticas e ideales persigue, sus hábitos literarios y cuáles son las fuentes que el mismo cita. La fuente nos lleva a estudiar y busca más fuentes.