Significa confiar en l, creer que nada es imposible para l y que l puede suplir todas nuestras necesidades.

No solo reparte recompensas de ndole espiritual, sino tambin bendiciones tangibles, visibles y materiales, de esas que se miden en pesos, dlares y euros. Es Dios del Cielo y tambin del mundo terrenal. Trasciende ambos mundos, manda y vive en ambos, domina y crea en ambos, y tiene poder para pagarnos en ambas monedas.

Debemos aprender a confiar en que nos dar todo lo que nos haga falta, no solo lo espiritual felicidad, una meta en la vida, paz interior, sino tambin lo material.No tiene reparo alguno en sacarse del bolsillo dinero contante y sonante y entregrnoslo, siempre y cuando tengamos fe para recibirlo. Para l eso no es nada.

Hay que tener en cuenta que Su influencia se extiende a todo y que puede llevar a cabo milagros no solo en la esfera espiritual, sino tambin en el terreno fsico.

Delitate asimismo en el Seor, y l te conceder las peticiones de tu corazn (Salmo 37:4).

Buscad primeramente el reino de Dios y Su justicia, y todas estas cosas os sern aadidas (Mateo 6:33).

Dad, y se os dar (Lucas 6:38).

Nada bueno niega a los que andan en integridad (Salmo 84:11).

Dependen de que cumplamos cierta estipulacin, que en casi todos los casos consiste en obedecer Sus dos grandes mandamientos:

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