el debate ¿es excesiva la oferta actual de telÉfonos ...€¦ · mercado de los «smartphones» s...

1
THOM Andrés Meixide 16 | OPINIÓN | Jueves, 24 de enero del 2019 | La Voz de Galicia Móviles: democratización tecnológica S in duda, la de los smartphones es una de las grandes revoluciones de la era tecnológica en que vivi- mos. Los llamados teléfonos in- teligentes continúan su camino inexora- ble para convertirse en sustitutos de ca- si todo: la cámara que usamos es la del móvil, escribimos correos en el teléfo- no y podemos, entre otras muchas co- sas, editar textos, pagar lo que compra- mos, ver la tele o imprimir una tarjeta de embarque desde nuestro terminal. En un mundo globalizado, la irrupción de los smartphones se ha traducido en una auténtica batalla de los fabricantes por convertirse en el referente calidad- precio: «Te doy lo mejor al precio más competitivo posible»; o bien —a otro ni- vel— por elevar su terminal de alta ga- ma a la categoría del «más deseado», y arrebatarle esa posición a Apple, por su- puesto. Ese objetivo se mantiene tempo- rada tras temporada, al menos por ahora. Para el consumidor, el debate está en decidir cuál es el móvil que mejor se adapta a lo que necesita. El mercado de los smartphones le brinda tantas op- ciones que a veces no es fácil la criba. La clave está, sencillamente, en infor- marse bien y elegir. A día de hoy tene- mos la suerte de disponer de compara- tivas de todo tipo, análisis e infinidad de datos sobre cada modelo de teléfo- no móvil. Se trata de dedicarle un po- co de tiempo a valorar esa información, sin olvidar la opinión de personas cerca- nas que puedan aportar algún elemen- to más antes de tomar la decisión de la compra. El sector se ha democratizado, y eso debe ser siempre motivo de satis- facción para los consumidores, aunque suponga que proliferen gran variedad de modelos similares, pues las marcas casi siempre se copian las ideas nuevas (doble cámara, pantallas infinitas, hue- lla digital…). En realidad, como comentaba, el pro- blema verdadero es del fabricante, que está obligado a diferenciar su terminal, incorporarle valor añadido, ya sea con alguna característica exclusiva —que le copiarán en poco tiempo— o con pro- mociones, regalos u ofertas especiales. Y todo eso siempre es bueno para el cliente. Comprar un teléfono inteligente con responsabilidad implica analizar dete- nidamente qué necesitamos y comparar las prestaciones y el precio de los termi- nales a nuestro alcance para decidir cuál de ellos nos conviene más. Adquirir un móvil no es como comprar un cartón de leche. Un pequeño esfuerzo informán- donos, indudablemente, nos puede ayu- dar, y mucho, a acertar en la elección. HÉCTOR PARRA Responsable de Márketing de Mobil R EL DEBATE ¿ES EXCESIVA LA OFERTA ACTUAL DE TELÉFONOS INTELIGENTES? La innovación impulsa el mercado de los «smartphones» S i hay un elemento que ha cambiado nuestras vidas en los últimos años, ese ha sido el teléfono móvil. A la gran re- volución que supuso en su día poder hablar con otro interlocutor en cualquier mo- mento y lugar, sin estar limitado por un ca- ble, le siguió un concepto nuevamente dis- ruptor: el smartphone. Este nuevo paso en la telefonía supuso avan- zar más allá de la pura movilidad para dar los primeros pasos en la era de la nueva inteli- gencia. Todo ello fue el pistoletazo de salida de una vertiginosa carrera por abanderar es- te mercado y satisfacer los requerimientos de un consumidor cada vez más exigente, pero también más abrumado por la enorme ofer- ta y el creciente número de marcas. La evolución ha sido imparable. Hoy el te- léfono inteligente no es solo un dispositivo con el que poder hablar, enviar mensajes y hacer fotos, sino que se ha transformado en una ventana, de tan solo unos pocos centíme- tros, que se abre hacia un mundo sin límites. Gracias a avances como la Inteligencia Ar- tificial, el smartphone actúa como una herra- mienta que busca lo que necesitamos, nos guía y traduce lo que otros dicen o nos escriben en distintos idiomas. También nos permite pagar sin necesidad de dinero en efectivo o de una tarjeta física. Igualmente, las nuevas generaciones de smartphones, como son los últimos modelos Huawei P20 Pro y Mate 20 Pro, han propiciado un renacer de la fotogra- fía. Son capaces de reconocernos y a todo lo que nos rodea, e incluso calcular las calorías de lo que comemos, emulando cómo pensa- mos y actuamos. El smartphone refleja el estilo de vida de su usuario. De hecho, cada persona prima fac- tores diferentes a la hora de elegir el dispo- sitivo que más se adapta a sus gustos y nece- sidades: la cámara, el diseño, la facilidad de uso, las funcionalidades… y, por supuesto, la marca como tal. Pero, entre todos estos as- pectos, sin duda la innovación es hoy el as- pecto clave. Precisamente la visión y la capacidad para innovar son factores que han propiciado que Huawei se sitúe en una posición destacada en el mercado de los fabricantes de smartpho- nes. Según los últimos datos de GFK, hemos escalado al segundo puesto con un 24 % de cuota del mercado español. Nos encontramos, pues, en un entorno en el que la tecnología crea nuevas y apa- sionantes posibilidades; posibilidades que, a su vez, son impulsoras de nuevas y sor- prendentes innovaciones que actúan como fuerzas expansivas. Nuestro papel como fa- bricantes es básico en la transformación de este entorno. Solo aquellas compañías ca- paces de innovar y reescribir las reglas de este mercado serán las que seguirán impul- sado el cambio en este sector y marcando las nuevas tendencias en el futuro. CARMEN GONZÁLEZ GENS Vicepresidenta de Ventas en Huawei Technologies O máis caro non é necesariamente mellor N on fai moito que os smartphone romperon a barreira psicolóxi- ca dos mil euros. Desde a che- gada dos iPhone e dos Android os prezos destes dispositivos iniciaron unha escalada incesante: dos 400 ou 500 euros pasamos aos 700, logo aos 900 e xa esta- mos nos mil, un prezo ligado aos trebellos que destacan polo plus de deseño e calida- de. Estes dispositivos premium non están ao alcance de tódolos usuarios, xa non só polo seu prezo, senón tamén polas súas funcio- nalidades, innovacións que un consumidor medio —en moitos casos— non utilizará. Esta estratexia de prezos non é nova. Re- cordemos que Apple usouna para diferen- ciarse e posicionarse dentro do mercado li- gando a súa marca a conceptos como calida- de, exclusividade e innovación. Se o prezo do dispositivo é alto, a percepción do valor que as persoas consumidoras lle outorgan aumenta. O caso dos iPhone é claro: aso- ciamos prezo con exclusividade, somos do- nos dun accesorio tecnolóxico especial, que nos distingue, que nos fai únicos. E esta es- tratexia de prezo tamén inflúe na nosa per- cepción dos demais dispositivos, porque se son máis baratos e, polo tanto, máis asumi- bles, non poden ser tan bos. A cuestión é que posiblemente a maioría dos usuarios non precisamos dispositivos tan caros pero querémolos porque o mer- cado habituounos á posibilidade de ter un Lamborghini cando o que podiamos per- mitirnos era un Seat Panda. Non hai moito as operadoras atraían a novos usuarios, ou tentaban aos que querían marchar, con mó- biles de alta gama que podían saír case gra- tis ou que pagabas en cómodos prazos. Esa era a realidade hai uns anos, todo o mun- do tiña ao alcance da man un smartphone, o que nos levou a habituarnos a un produto cunhas características que talvez non pre- cisabamos ou a un dispositivo que non po- diamos permitirnos. Neste punto é intere- sante advertir que a escalada de prezos pos- terior xiraba arredor da innovación, da ex- clusividade e das funcionalidades punteiras do produto; e, ás veces, esas supostas van- taxes tecnolóxicas do dispositivo non xus- tifican que o smartphone rompa a barreira dos mil euros. Actualmente o mercado é máis hetero- xéneo e os consumidores están mellor pre- parados e informados para elixir un ou ou- tro dispositivo electrónico. Temos acceso a smartphones máis económicos con fun- cionalidades que hai anos nin existían, pe- ro para moitos consumidores resulta difí- cil desbotar a idea de que un produto máis caro é mellor. Como asociación de consumidores, nos últimos tempos detectamos problemáticas relacionadas con estes dispositivos cun rai- zame económico. Non é a primeira vez, e non será a última, que un consumidor soli- cita un crédito rápido para acceder á com- pra dun smartphone, o que acaba derivan- do nunha débeda coa entidade emisora do crédito de difícil pagamento. Por iso anima- mos aos consumidores a reflexionar sobre cuestións como a obsolescencia programa- da, a compra de segunda man de dispositi- vos tecnolóxicos, a reutilización de vellos terminais ou a reparación dos mesmos antes de optar pola compra dun novo smartphone. REBECA SÁNCHEZ Responsable do Departamento de Prensa da Unión de Consumidores de Galicia

Upload: others

Post on 06-Jul-2020

0 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: EL DEBATE ¿ES EXCESIVA LA OFERTA ACTUAL DE TELÉFONOS ...€¦ · mercado de los «smartphones» S i hay un elemento que ha cambiado nuestras vidas en los últimos años, ese ha

THOM Andrés Meixide

16 | OPINIÓN | Jueves, 24 de enero del 2019 | La Voz de Galicia

Móviles: democratización tecnológica

S in duda, la de los smartphones es una de las grandes revoluciones de la era tecnológica en que vivi-mos. Los llamados teléfonos in-

teligentes continúan su camino inexora-ble para convertirse en sustitutos de ca-si todo: la cámara que usamos es la del móvil, escribimos correos en el teléfo-no y podemos, entre otras muchas co-sas, editar textos, pagar lo que compra-mos, ver la tele o imprimir una tarjeta de embarque desde nuestro terminal.

En un mundo globalizado, la irrupción de los smartphones se ha traducido en una auténtica batalla de los fabricantes por convertirse en el referente calidad-precio: «Te doy lo mejor al precio más competitivo posible»; o bien —a otro ni-vel— por elevar su terminal de alta ga-ma a la categoría del «más deseado», y arrebatarle esa posición a Apple, por su-puesto. Ese objetivo se mantiene tempo-rada tras temporada, al menos por ahora.

Para el consumidor, el debate está en decidir cuál es el móvil que mejor se adapta a lo que necesita. El mercado de los smartphones le brinda tantas op-ciones que a veces no es fácil la criba. La clave está, sencillamente, en infor-marse bien y elegir. A día de hoy tene-mos la suerte de disponer de compara-

tivas de todo tipo, análisis e infinidad de datos sobre cada modelo de teléfo-no móvil. Se trata de dedicarle un po-co de tiempo a valorar esa información, sin olvidar la opinión de personas cerca-nas que puedan aportar algún elemen-to más antes de tomar la decisión de la compra. El sector se ha democratizado, y eso debe ser siempre motivo de satis-facción para los consumidores, aunque suponga que proliferen gran variedad de modelos similares, pues las marcas casi siempre se copian las ideas nuevas (doble cámara, pantallas infinitas, hue-lla digital…).

En realidad, como comentaba, el pro-blema verdadero es del fabricante, que está obligado a diferenciar su terminal, incorporarle valor añadido, ya sea con alguna característica exclusiva —que le copiarán en poco tiempo— o con pro-mociones, regalos u ofertas especiales. Y todo eso siempre es bueno para el cliente.

Comprar un teléfono inteligente con responsabilidad implica analizar dete-nidamente qué necesitamos y comparar las prestaciones y el precio de los termi-nales a nuestro alcance para decidir cuál de ellos nos conviene más. Adquirir un móvil no es como comprar un cartón de leche. Un pequeño esfuerzo informán-donos, indudablemente, nos puede ayu-dar, y mucho, a acertar en la elección.

HÉCTOR PARRAResponsable de Márketing de Mobil R

EL DEBATE ¿ES EXCESIVA LA OFERTA ACTUAL DE TELÉFONOS INTELIGENTES?

La innovación impulsa el mercado de los «smartphones»

S i hay un elemento que ha cambiado nuestras vidas en los últimos años, ese ha sido el teléfono móvil. A la gran re-volución que supuso en su día poder

hablar con otro interlocutor en cualquier mo-mento y lugar, sin estar limitado por un ca-ble, le siguió un concepto nuevamente dis-ruptor: el smartphone.

Este nuevo paso en la telefonía supuso avan-zar más allá de la pura movilidad para dar los primeros pasos en la era de la nueva inteli-gencia. Todo ello fue el pistoletazo de salida de una vertiginosa carrera por abanderar es-te mercado y satisfacer los requerimientos de un consumidor cada vez más exigente, pero también más abrumado por la enorme ofer-ta y el creciente número de marcas.

La evolución ha sido imparable. Hoy el te-léfono inteligente no es solo un dispositivo con el que poder hablar, enviar mensajes y hacer fotos, sino que se ha transformado en una ventana, de tan solo unos pocos centíme-tros, que se abre hacia un mundo sin límites.

Gracias a avances como la Inteligencia Ar-tificial, el smartphone actúa como una herra-mienta que busca lo que necesitamos, nos guía y traduce lo que otros dicen o nos escriben en distintos idiomas. También nos permite pagar sin necesidad de dinero en efectivo o de una tarjeta física. Igualmente, las nuevas generaciones de smartphones, como son los

últimos modelos Huawei P20 Pro y Mate 20 Pro, han propiciado un renacer de la fotogra-fía. Son capaces de reconocernos y a todo lo que nos rodea, e incluso calcular las calorías de lo que comemos, emulando cómo pensa-mos y actuamos.

El smartphone refleja el estilo de vida de su usuario. De hecho, cada persona prima fac-tores diferentes a la hora de elegir el dispo-sitivo que más se adapta a sus gustos y nece-sidades: la cámara, el diseño, la facilidad de uso, las funcionalidades… y, por supuesto, la marca como tal. Pero, entre todos estos as-pectos, sin duda la innovación es hoy el as-pecto clave.

Precisamente la visión y la capacidad para innovar son factores que han propiciado que Huawei se sitúe en una posición destacada en el mercado de los fabricantes de smartpho-nes. Según los últimos datos de GFK, hemos escalado al segundo puesto con un 24 % de cuota del mercado español.

Nos encontramos, pues, en un entorno en el que la tecnología crea nuevas y apa-sionantes posibilidades; posibilidades que, a su vez, son impulsoras de nuevas y sor-prendentes innovaciones que actúan como fuerzas expansivas. Nuestro papel como fa-bricantes es básico en la transformación de este entorno. Solo aquellas compañías ca-paces de innovar y reescribir las reglas de este mercado serán las que seguirán impul-sado el cambio en este sector y marcando las nuevas tendencias en el futuro.

CARMEN GONZÁLEZ GENSVicepresidenta de Ventas en Huawei Technologies

O máis caro non é necesariamente mellor

N on fai moito que os smartphone romperon a barreira psicolóxi-ca dos mil euros. Desde a che-gada dos iPhone e dos Android

os prezos destes dispositivos iniciaron unha escalada incesante: dos 400 ou 500 euros pasamos aos 700, logo aos 900 e xa esta-mos nos mil, un prezo ligado aos trebellos que destacan polo plus de deseño e calida-de. Estes dispositivos premium non están ao alcance de tódolos usuarios, xa non só polo seu prezo, senón tamén polas súas funcio-nalidades, innovacións que un consumidor medio —en moitos casos— non utilizará.

Esta estratexia de prezos non é nova. Re-cordemos que Apple usouna para diferen-

ciarse e posicionarse dentro do mercado li-gando a súa marca a conceptos como calida-de, exclusividade e innovación. Se o prezo do dispositivo é alto, a percepción do valor que as persoas consumidoras lle outorgan aumenta. O caso dos iPhone é claro: aso-ciamos prezo con exclusividade, somos do-nos dun accesorio tecnolóxico especial, que nos distingue, que nos fai únicos. E esta es-tratexia de prezo tamén inflúe na nosa per-cepción dos demais dispositivos, porque se son máis baratos e, polo tanto, máis asumi-bles, non poden ser tan bos.

A cuestión é que posiblemente a maioría dos usuarios non precisamos dispositivos tan caros pero querémolos porque o mer-cado habituounos á posibilidade de ter un Lamborghini cando o que podiamos per-mitirnos era un Seat Panda. Non hai moito as operadoras atraían a novos usuarios, ou

tentaban aos que querían marchar, con mó-biles de alta gama que podían saír case gra-tis ou que pagabas en cómodos prazos. Esa era a realidade hai uns anos, todo o mun-do tiña ao alcance da man un smartphone, o que nos levou a habituarnos a un produto cunhas características que talvez non pre-cisabamos ou a un dispositivo que non po-diamos permitirnos. Neste punto é intere-sante advertir que a escalada de prezos pos-terior xiraba arredor da innovación, da ex-clusividade e das funcionalidades punteiras do produto; e, ás veces, esas supostas van-taxes tecnolóxicas do dispositivo non xus-tifican que o smartphone rompa a barreira dos mil euros.

Actualmente o mercado é máis hetero-xéneo e os consumidores están mellor pre-parados e informados para elixir un ou ou-tro dispositivo electrónico. Temos acceso

a smartphones máis económicos con fun-cionalidades que hai anos nin existían, pe-ro para moitos consumidores resulta difí-cil desbotar a idea de que un produto máis caro é mellor.

Como asociación de consumidores, nos últimos tempos detectamos problemáticas relacionadas con estes dispositivos cun rai-zame económico. Non é a primeira vez, e non será a última, que un consumidor soli-cita un crédito rápido para acceder á com-pra dun smartphone, o que acaba derivan-do nunha débeda coa entidade emisora do crédito de difícil pagamento. Por iso anima-mos aos consumidores a reflexionar sobre cuestións como a obsolescencia programa-da, a compra de segunda man de dispositi-vos tecnolóxicos, a reutilización de vellos terminais ou a reparación dos mesmos antes de optar pola compra dun novo smartphone.

REBECA SÁNCHEZResponsable do Departamento de Prensa da Uniónde Consumidores de Galicia