2.••

y EL

EX-FISCAL 1.° DEL CIROUITO. , .

DE MEDELLIN,

N1EDELLtN.

"

:BRBVE EXPLIOAOION.- .• -

En la noche del dos de diciembre delaño ele 1878 tuvolugar .en la fracción de. Aguacatalla ejecucion del hecho crimi-noso de caracteres mas.alarmantes de que se tiene noticia ennuestras crónicas judiciales. .

Profundamente afectada la sociedad por él desconciertoque en ella ostableoia ese crimen inaudito, .sus representantes3brieron campaña en averiguación de sus autores, á fin de in-flighles <tIjustisimo castigo á que se habían hecho acreedores.

Miembro entonces del Ministerio público, tocóme acom-]iañlu muchas voces á los empleados en la investigacion, tareaquegesmnpcflé ,c0!lla buena Tolun~a9: que siempre tuve en to-dos los actos de mt corta carrera pública. .' .., No es á mi á quien corresponde decir si durante el perío-

do de mi vida oficial la sociedad tuvo que arrepentirse por ha-berme conflado una mísion.nnportante eJ1.SUSdestinos, 6 13iacer-'té siquiera á llenar medianamente mis oompromisoe. A mí mebasta la tranquilidad de mi conciencia, en la cual halloque na--da omití para cumplir el juramento que presté al constituirmesn represcntn,nte.' . . ,.

,. La urgencia de un viaje me obligó, ya avanzada la averi-

guacion, á. separarme de ella,)' fné pocos dias dcspues de mi re-greso cuando el sumado se radicó en el Juzgado 1.o del Circúitoen lo crlrniual, donde yo llevaba la voz del Ministerio público.. . Imbuido en la misma creencia general que había entón-ces del perfecto ese1arecimiento d~)los autores de esa matanza,creencia fundada en actos y versiones un tanto ligeros de perso- .nas eonoced.orae de la marcha del proceso, emprendí su estnd-iecon IR" esperrmza de que eneontral'hf"ell él datos bastantes paraseñalar á los responsables ele tan grave delito. N o otra cosa ha-cia nacer en mí esa esperanza, pues <1ue la participacion que tu-ve en el principio de la investigación noera bastante, ni con mu-cho, para lisonjearme con la idea de llegar ti un resultado sa-tisfactorio para la sociedad. ..' ~. . La inmensa magnitud de ese terrible acontecimiento, laprofunda impresión producida por él en todos los COTaZOlleShonrados, la 'ansiedad con que toda clase de 1:leI'S011assegni.aILel curso.de la, instruccion, y sobre todo el puntual cumplilllien-ro de un deber sagrado, hicieron que le consagrara á ese asnn-to todo mi tiempo, todas.mis fuerzas y todas las luces de mi Ji.mitadu inteligencia.

IV.Cruel y penoso fué mi desengaño. pe ocho sindicados,

"siete de los cuales habian sido-aprehendidos desde hacia alga-. nos meses, solo encontré uno que fuera claramente culpable,tanto ante la conciencia como ante la ley, y otro que, legalmen-te, debía ser enjuiciado, pero á quien la conciencia de to~o hom-.bre sensato é imparcial vacilará 'Siempre en coudenar. De losotros, unos aparecían completamente inculpables, y contra 108~~n~asá duras penas,.y obrando con unarara severidad, po~iajiedlrse la convocatoria de un .Jurado 'de acusacion. Exceptúo,sin embargo, á uno que evidentemente no tuvo .participaoiondirecta en los sucesos.. pero á quien estimé culpable por no ha-her dado cuentaá la autoridad de ciertos hechos -de que tuvonotlciaántos 'de perpetrarse 'el delito. . : .

. .Envano f!lé que repitiérá la lectura íntegra del proceso,y, por muchas ocasiones la, de las piezas mas im portantes -deél. Siempre obtuve el mismo resultado. -A mi vista no apare-Cía claramente sino un solo malhechor, Contra otros dos debíacae!', en "ini o'pirrion, el peso de la léy;, "bien que su cúlpabíltdad]10 estuviera fuera' de toda duda en él fuero de la conolencia; fen cuanto á los demás, nada de importante encontraba en la ac-tuaoíon, ..' . . . ."' .. Como representante de la sociedad en tan gmve negocio;creí de mi deber estudiarlo en el punto dé VIsta mas estricta.mente severo, y fué así como púde llegar á pedir la convocato,Ha de un Jurado de acusacíon contra-dos. sindicados .. Pero exa-, ., . .minado el.asunto desde otro punto de vista sé hubiera llegadotal vez á un sobreseimiento absoluto respecto ele ellos.

Pero hay mas aún: conociendo la fuerte prevencion quehabía contra todos ó la mayor parte de los sindicados, y sabien-do que muchas personas cÚJian que. el mérito de la actuacionera muy diverso del que yo le encontraba, y temiendo que es-tuviese equivocado en mis apreciaciones, (> que al ménos eIla:Sno hubieran sido presentadas con la fnerza y en la forma conve .

.ciJ.ientes~consulté con tres amigos'niios, personas de claro talen~to, de 'notoriainstruocion en la materia. y.de una honradez á to-:da prueba, y todos ellos creyeron unánimemento que los datosque arrojaba el sumario no autorizaban para una calificacionmas severa que la que yo habia hecho. ..' . No fal tó, sin embargo, quien censurara mi cond ucta,llegando hasta calificarme dedifensor de los insignes 'oTi'ln'ÍJ-minalá de Aauaccda] (y .por ello se díó al Estado UH rumbo-so pésame), y haciéndome á la vez otros cargos de menor im-

_portancia.De estos últimos pude defenderme desde entónces,con en!3rgía por la prensa y bajo mi firma, pero -respecto' del:primero,ellllas grav.e de. tod<?s~in d.uda, tuve .queIirnitaí-mea ofrecer la publícacion de mi Vista fiscal Iuego que elpzoce-

. so dejara de ,ser reservado. . '. .

ge 'me censuró de una manera sangrienta, tergiverSandOpara ello la significaeion de las palabras que empleé en mitenunci;:t, sin cop.océrserne, sin conocer mi trabajo, sin conocerel e~pediente. Por fortuna; me siento con la-voluntad suficien-te p~i'::.tperdonar á mis detractores, si' bien es cierto me pare-ce mficil conseg]..ür que se borre, de mi alma el recuerdo de lainjusticia con que se llretendtó empa.ñar una frente que hastahoy, gracias á Dios, he conservado limpia . .Yo no tengo noti-chi, de que en el 6rdeI.\..nátural de los acontecimientos huma-ROShaya habido hombre tan generoso que al perdop. de .lasofeJilsa,shaya podido ~gregarel olvido'cómpleto de ellas. .. ' y hasta el eobardé y alevoso anónimo salido p.e·lagln"ensa~clegr?-dadas.del señor B~lcá~ar, no 8ie~lpre respetuosast1~la ajena reputaClOl1, 11a'ven~doa deseIPpenar la tarea, poco~,lil.vidiablepor cierto; -de hacer coro 'á los 'ÓljnSÓres. ~' ' ," L~ opol'tunida~ d: la publicacion ha Ilegado ~l fin. Hoypuedo Wesep:a,l' a! p'!.lbl~c()el resultado del penoSU;lIm?trab~.:10 que eJecqte ento~~ei?¡-y r.m~guntar con entera c()llfiaJl~~ ~.toda persona recta e ImparcIal que lo lea: iencuentra.l1sted ltlllllna frase; una pal,abra siquiera, que sentara bieJ.1en un defen-801'de l<,>sgl'aJ}des.malheCl~r~s de tan atroz i1ehto~ . '. '

. SI hay alguien q~e resóonda de una manera añrmatíva~'-~!3{tpregunt~ habrá, ~t:?conveuir for1.Osamente en q'Q.eh,oydíaq,mene,socnpan el prImer-lugar entre los defensores de tanOdiosos criminales, son el Procurador Gener{tl y el Ti'ibunal Su-.pel'io:r del Estado; pOl'q~leno liay duda que la calificaciOn del,Il\umai'~ohecha por' eso\3alt?s Yl'esp,etab~es empleados es mu-eho monos severa que la 'lila. ." , R;azo.nsobrada tenian los probos.~bog~do$ con -q1l;ienesconsulte nn exposlclon,cmmdo me manifestaron que -SI poralgo necaQ~:n mis .ap:r_e,Qiacio~esera por la severidad 'de que enellas 11acia uso contra algunos de los índtcíados.

. Hasta ahora, habla descansado tranquilo en el testimo-nío de mi conciencia, y ele hoy en adelante puedo agregar á élla aprobacion explícita,de mi conducta por los primeros fun-cionarios p.el Ministerio público y del Poder judicial del Es-'tado. Por grande que fuera mi ampicion, eso me bastaría paracolmarla. Deber mio es consignar aquí el homenaje sincero demi profundo reconocimien.to p.or los conceptos favorables conque me han distinguido; acaso inmerecidos de mi parte.

D.eb? tám:bIen tributar en este lugar mis mas fervientesagradeCImIentos a los amigos que tan bondadosamente me han.a.yudado en esta ocasion con sus indicaciones y sus 'consejos.A ellos ..d~~o en gran parte el disfrutar hoy de la calma y dela trangmhdad mas perfectas. '. '

Siento positivamente que las nolubles dimensiones de, '

,'Vf;,

los' autos del Tribunal ~uperior y del Jnez J. o del Crimen y 10.costoso de las impresiones entre nosotros, me impidan el poderpublicar Íntegramente estas importan,tes piezas, Mas ya que esono es hacedero, he procurado reunir en los documentos' queforman el folleto las opiniones generales sobre el mérito del su -c .

rnarío y las que sirvieron de fundamento al Poder judicial pa-ra discrepar de los conceptos del Ministerio público en los pun-tos en que no estuvíeron' de acuerdo. .

1ft;) resta deci:r'una,palabra á Ios'qus aún insistan en/creerque obré precipitada é imprudentemente al presentar mi renun-cia, no obstante los podel'osoi3 motivos que obraron en mi ání-mo, y de que he hablado en las dos publicaciones que hice so-

:bre el particular, y es esta: cuando ustedes le dediq uen á un!legocio el trabajo y el cuidado que le consagré yo- al suinarío-de Aguacatal, yrecojan por toda recompensa una censura -dequienes'ménos pudiera esperarse en ningun tiempo, compren-derán que el propio decoro y la dignidad personal misma exí-'glan imperiosamente, allnénos desde cierto punto de vista, unamedida, que por mis circunstancÜtsparticularese~tabamuy de

. acuerdo con mis-intereses p~rsonal~s. Nada era, pues, mas na-tural que hacer Io que yo hics; y CIertamente ~o tengo motivo,alguno para arrepenürms de ello. .' . .~ Por lo denias, creo que la=present~ubl~caciony Ias que"había hecho .ántes en el número 215 de ' l1Iemldo, y en hojasuelta, convencerén á los miembros de mi familia, á mis ami-gos, y,en-general,á las personaS-SEnsatas, de que nada hay enmi cond11cta, en lo relativo al asunto que motiva estas líneasJfque merezca censura-de ninguna clase., -- ..,

Medellín, agosto 10 de 1874.

.JUAN DE D. 1VIEJÍA.

EXPOSICION PISCA.L. -

SE~OR JUEIol•

.En la mañana. deltres de diciembre del liño pasado circuló en {lsta,ciudad ell'ull1or de que en una casa de la fraccion de Aguacat-al se ha":Ilaban los cadáveres de varios individuos quehabian sido asesinados enla noche anterior,' ' : . .

. . Al principio se oia la 'especie de una.manera- tan vaga, se refería., ,con circunstancias tan contradictorias y S6 discrepaba tánto en cuanto alnúmero de muertos y orígen-del suceso, que la poblacíon, halagada con'la esperanza de que todo-fuera-una farsa; casi no hacia caso de lo que sedecía. . . :

. Pero á medida 'que el día avanzaba, el, rumor iba tomandocuerpo, los detalles se concretaban, casi se fijaba ya el número de, Isavíctimas, y esto.. unido al movimiento de las autoridades .á.. cuyocono-:

.cimiento habia llegado la {atar nueva, contribuia á que la sociedad fueseapercibiéndose de la' realidad y tomando la actitud" severa é imponente .que el caso exigia. . .. ' '. " . '. . . " '

Eran las diez al.' la mañana y ya varios empleados y particulares'hablan emprendido marcha para el lugar que se señalaba como teatrode la sangrie!1ta .catástrofe. . '.' . . - ..

. .Á. ésahora los empleados deja fracción y muchos de-los vecinos,á quienes heria mas directamente el golpe, y que estaban por Jo mismomejor infói'm~dos de lo acaecido, se encontraban ya en la casa donde se

\' había verificado el acontecimiento. . . . " " .-, ' " .. ..... - ~

- . . No .sorí para' descritos, que apénas se sienten y comprenden, 'la'cmoCion,la sorpresa yel espanto de que estaba poseido cada uno delosque, al acercarse- á 'aq uella infeliz morada, iban ya en la persuacion deque en ella habia ocurrido algo extraordinario y terrible que sus ojos nohubieran querido ver ni aun ~'u medio del sueño mas fatigoso y desespe-,rante, .

Cuando las primeras autoridades llegaron á la casa habla ocurri-do una escena conmovedora, que habrib helado de espánto y agitado do-lorosamente el corazon del mas insensible de los hombres. U no de 108vecinos, el que primero penetro en aquel recinto ilesgraciado en la ma-ñana de ese día, observ6 q uepor una de las ventanas se asomaba lloran- ,do á' gritos un niña dé ~énos de CU1ítto~ños de eda,d, y hacia esfuerz?s .para Rahr;' El temor natural de ser él qUIen descorria un velo que debisoóuservarse ileso miéntras llegaba la autoridad, 00 fué bastante para deo'tenerlo en presencia de las lágrimas del niño y su trist,fsithá situacion t- 1

-2-el espectáculo de esa criatura inocente, que habia sufrido allí-lo que po-cos han sufrido en el mundo, no le permitió deliberacion alguna, y esevecino, que en aquellos momentos era guiado poi' un sentimiento tan no.ble y elévado, se lanza á la puerta á favorecer al niño. Al entrcabrh-la,una escena mas terrible sepresenta ante sus ojos, y en ese instante el'niño salta de la ventana, y corriendo y saltando por encima de los ca-dáveres llega' y lo abraza de las piernas como 'para impedirle que lo de-jeallí. (. .... .' - .

. Luego observa quejunto á uno de los cadáveres se encuentra sen-tado otro niño como de un año de edad, y entónces dando un paso há-cia adentro torna al niño y lo saca de aquel lugar. Esto mismo se hacecon otro más que se hallaba en la; cuna en la única alcoba de. la casa,

A aquella familia desgraciada la sobrevivieron esos tres niños, úni-cos séres que respetó el crí~en, sin, dud~. p,?r !a imposibilidad natural enque se' hallaban de revelarlo; que a no. ser asi, ellos habrian aumentadoindudablemente el"número de las víctimas. . . '., . '. .,. .';'.... .A.n·tesque las autoridadea, llegó 'tambienun sacerdote, el qne;

guiado por la santa mision que desempeña sobre la tierra, y creyendoque podía haber quien necesitase allí de los últimos consuelos del ('ri~-t.iano, entra en la casa, acompañado de unas pocas personas. Solo unade las víctimas pudorecibir sus auxilios, .,' .. '. .. . ,,.. .. .Fué eutónces cuando'se,presentóante los ojos de Jos espectadores

uno de los cuadros mas conmovedores y pavorosos de qnese tiene noti-cia enla historiade nuestras calamidades sociales; En el área redueidsde aquella pobre' vivienda, se-veían seis cadáveres horrorosnmente ·he.:ridos; empapados en su propia sangro, de la que se veian charcas y man-chas' por todas, partes; y colocados cuatro de ellos' formando casi un gru-pO;c uno en lit puerta de la alcoba y el otro en ésta. Eran los cadáveres de'los moradores de la casa, de los cuales habia dos hombres. y cuatro muje-res.' Inmediatamente fueron -recouocidos 'por' sus nombres: Meliton Es-cebar, su hijoSiufóriano, Virginia .Alvarez, mujer de aquel, .Jnana Eche-verri, madre de Virginia, Mariana Marulanda;. cocinera, yTeresa Pená-gos, sirvienta, De ellos, Sinforiano tenia: abrazado por el cuello it Meliton,como' en simulacro' de lucha. .... .: . '.' '.' . =,'

. .' En mediodel terror producido poraquella escena inaudita sedi6 .principio á algunas diligencias de recon.ocimiento de los cad-áveres y de la'casa, .Estas, que dieron por resultado la falta de una-estribera cuyas acio- .neshabian.sido cortadas, el exárnenverbalde los vecinos yrelacionados,q,u~ echaban ménos algunos pocos objetos .que ántes habianvis~o en lacasa y la .existencia de una mancha ele'sangre en la parter.ex tertor de lapuerta, que .allí,.se decia haber .sido.hecha conuno de .los cadáveres al'tiempo desaoarlo,' no obstante que fué vista por la mañana cuan-edo.nadie habia penetrado en la casa, no fueron datos bastantes para que8l' diese' comocierta la intervencion de una mano extraña en ,e'se trágico ,. .suceso. , . .:'. ,Fué tal el desconqierto producido por la primer~ impresión y tal el

deseo de que lo OCUIT~dofuese el efecto de una Inmensa desgracia yno la ,obra atrevida de jin gran cfímen,. que, haciendo á un lado. aquellos datos

.ii!j.portan~es, todos generalmente se halagaban con ·la· esperanza de queuno delosi miembros de la familia asesinada, Meliton, á quien se consids-raba-como 10Qo,al cual se atribuía monomanía homicida, fuese el autor de

'tántas 'def'gracias. Á la objecion natural que sé hacia de ser también '~1loco una .de las víctimas, se daban explicaciones masó ménos especiosas,pero nunca !3atisfa:ctorias. .,. " ' , .

Es lo cierto que de una manera imprudente fué acogida y genera1i., :r.áda,esa versión, la cual muy pocos acallaban, comprendiendo sú grave.'dad, pues, producia nada méuos que la pérdida del'entusiasmo dé las gen.tes, que á causa de los sücesos, estaban dispuestas á trabajar incansable-monteen la averiguacion de los, autores dehecho: tan escandaloso, . .". Comoálas tres de la tarde se dióla órden de marcha y 10s;Qadáve.

rosfueron conducidos e'n,humildes parihuelas hasta esta ciudad. Desde'. -ántes de partir se habia visto á multitud de personasrodeando los cadáve-

res en la casa que se edificaba,' donde habian sido colocados, y entre ellasmuchas mujeres vecinas de las víctimas, llorando sin cesar es'a tremendadesgraei:t: El llanto, las' exclamaciones de dolor y las oraciones que' aque-llas gentes piadosas balbucian fueron mucho-mayores en los momentos dela desped idu, y causaban por cierto una profunda impresiono ¡Y cómo no!'aquella 'familia, entre la cual se contaba la señora Echeverri, que en elejercicio de su profesion de médica habia hecho grandes bienes á; sus veci-

.nos, era altamente estimada de éstos. La sencillez de sus costumbres, la,perfectaatntonía en la casa y 'eónsus relacionados, los auxilios que recí-procamente se prestaban; todo hacia que los 'habitantes eireunveoinoses-tuviesen acostumbrados á vivir con ella como en familia, en medio de laconfianza y' de la intimidadmas grandes.' Esa separacion repentina y concaractéres tan dolorosos, tan alarmantes, debióafectar hondamente eloorazon 'de todos aquéllos que laconocian de cerea y la consideraban co-'IDO familia propia; ~ Ó.,-,-" '~, . ' , " '

En el tránsito se veia pintada en el semblante de todos lit 'mismaemoción de que estaban poseídoa.loa conductores y séquito de las vícti-mas. De muchas de las casas por donde se s~guia salian per:sonas Iloran-'do á ver pasar los cadá veres 1-.á iúformarse de la causa de lo ocurrido.·Lacomitiva aumentaba oonstantcniente.siu q1.Úlen ninguna'parte se-no-tara signo alguno de alegría: todos, unos tras otros, marchaban en silen- ,ció, la cabeza inclinada sobre él pee1ro,·sobrecogído's de terror en 'presen-cia de las consideraciones dolorosas que dospertaba la vista de tanta dés-gracia. ¡.Jamas se vió cortejo fúnebré-maahumilde que aquel y que sin em-bar:go Ilarnara tanto la atencion pública!' . ..., ..

Al llegar á la ciudadla poblacion en masa acudió 'á la calle de la.entrada á presenciar esa terrible y conmovedora realidad, dé que horas án-tes dudaba. La indignacion, el temor, la tristeza, la alarnia, la constor-nacion, se veian en aquel inmenso concurso; que salia como 'por instinto á.ser testigo ocular de los efectos del crímen ,mas terrible de que se tiene

.noticia en nuestros anales judiciales. . . ,

Tal como la agitaeion alarmante que produce el eco desapasioiede un toque de guerra, fué la súbita oonmocion que experimentó la socie-.dad cuando se hubo apercibido del peligro que .la ameriazaba. Los dere-chos. indi','i.i;¡fj,l~smas preciosos estaban á merced de los criminales, y -erapreCISOque cada cual se armase en su defensa .. Como en tiempo de cam-pana, no se hacia otra cosa que andar en solicitud de protección contra.un enemigo á quien no se veía, y que sin embargo se pre~entaba en todAS

-4 ...-,;, -

- ---partes, Era talla gravedad. de la catástrofe, que. pudo conmover honda-, mente á toda la sociedad. _ ,_ , _. - - - ,

Algo como una 'impresioneléctrica recibia todo aquel á quien se..comunicaba la fatal noticia. La penosa impresion, elmalestar indefinibleque produjo se propagaban á medida de su circalscion, haciendo nacer entodos los espíritus un. gérinen fecundo de desconfianza, en todos los co- I

razones un pdncipio de inquietud y' de zozobra. - _ _' Desde entonces se haobservado'unanotabl¿ variacion en las cos-. tumbres que se rozan con la vida privada. Esa visible intranquilidad quetodos experimentámos en aquellos días, que nos hacia desconfiar de todoy aumentar-las seguridades que guardaban nuestro hogar, no era exclu- _sivamente nuestra. De un momento á otro se coarunieó á todo el Estado,y aun hoy mismo, -á pesar del trascurso del tiempo y del resultado de la

.investigacion, esa situacionalarmante no ha desaparecido del todo. Los-eampesínos, y especialmente las mujeres, no esperan ya la llegada de la-noche con la. calma y la serenidad de espíritu que ántes, La amenazano se habia dirigido únicamente contra los propietarios; bastaba la existon-.cía de unas pocas monedas, y las hay en la mas humilde vivienda, paraque.los moradores de ésta se creyesen en un peligro inminente. __,-, - _No 'como ántes, que sin recelo alguno se daba entrada franca áquien golpeaba, á nuestras.pllertas durante Ia noche" se ha procedido des-pues de aquella aciaga fecha. En la actualidad, aun despues de persua-dirse. de la identidad y honradez del que hace un llamamiento nocturno,_se teme, se vacila; y-no uno sino muchos casos ha habido.en que una per-sona haya sido rechazada de los SIlY:OSy obligada á.pedir hospedaje enotra parte, porque éstos se han creido expuestos, ~1permit.ir la entrada ásuahabitaciones en horas avanzadas de 'la noche. -. - " ..-

. - - q()mo~n1amitaQ. delmlsmo dla tres se presentó en esta ciudad unode, los deudos de la familia asesinada á dar los pasos conducentes á la in-humacion de los cadáveres. Algo extraño, 'que no eran la tristeza é, im-presion que produoeuna calamidad doméstica, se veía en su semblante,cuando ello fué la causa de que en a1_gunosgerminaran sospechas contra.él, sospechas que adquirían fuerza en vista de sus antecedentes poco hon-rosos. , ". _. _

. -- '; Esto, 'el rechazo por la mavor parte de las personas dé criterio deia explicaoíon del suceso haciendo figurar al loco Meliton como autor de-él y la, indignacion pública, fueron -bastantes para que al siguiente dia sef(.ontinuase con perseverancia, en la averiguaoion minuciosa-del origen delacontecimiento. _ . _ _ .

La- ansiedad general, la alarmaqus se difundió, la inseguridadenque se creian las familias que habitaban en los campos, las cuales empe-zaban ya á abandonar sus habitaciones, y la horrible realidad del hechomismo, exigian unainvestigacion esmeraday escrupulosa, Era preciso sa--ber á todo trance la causa de la muerte de la señora Eclleverri y de su fa-omília, por difícil que esto pareciera. SI al fin de la instruocion se venia ~conocer qué.no habia,intervenido mano extraña en el trágico fin de aque-lla familia, la sociedad descansaria concretándose á lamentarlo. - Si l?orelcontrario, una planta osada había penetr-ado en aquel hogar, pisotea~-

.1;1010 ~. dostruyé!ldolo,de};lja conocerseal asesino para descargar sobre-él~ .~ - - . .

el P!3so formidablede la ley. y de la opinion. 1,:1 vindicta pú bliea neeesi-taba, exigiu.impericsamente una satisfaccion yera indispensable- traba-jar activamente pa¡:a dársela. De otro modo, la segUl'idlld individual, la.familia, la propiedad se veian crudamente amenazadas. Yanoera posi-ble continuar viviendo esa vida tranquila, de' confianza, de familia con 1,08

amigos; relacionados y deudos,qne es uno de los caractéres distintivos delos hijo§. de 'Antioquia. ,.' '. ... .. '.' .. " . , .. .'-

. A pesar del conCUTSOde fu ncion arios y. de la acuciosidad. empleadaen, laaveriguáoion, riada pudo hacerse :11 diasiguieríte: la autoridad seenc,on~raba completamente á OSC1Fasy no sabia por dónde i'irií)eipiar pa-radirigir :lainvestigacion.á un buen fin. Aquella familia no tenia enorni-gas conocidos .y sus recursos pecuniarios )10 parooiu quc pudieran servirde estímulo para la ejecucion.de tan atroz matanza. Esta, se [uzgaba, de-bió de ser efecto de un plan hábilmente coordinado, y .ejecutado;lmes,que los asesinos no dejaron huella alguna por donde se les pudiese segllcÍr.. ' ., . .

. ~ .. .

En ·¡¡,quellos. días .no se hablaba de otra cosa que del crimen deAgua0a.t:al.:.era el tema obligado de todas las conversaciones y, digo más,el pensamiento que dominaba á todos los que tenian noticia de él. "

Muchos individuos eonoccdóres de un negocio de ganados en ..quela señora Echeverri habia.sido estafada en tiempos pasados, empezaronít hablar de él y á lanzar sus sospechas contra Iosostafadores .. L;¡, autori-dad Se apercibió del rumor y creyó ele su .deber exigir de-estos una expli-cacion de su conducta. Lásiudagatorias se recibieroriy.y de ellas, y 'deIasdeclaraciones qu~ hubo ,que obtener en verificacion de las citas que,aque-Has.hicieron, se vino' á admitir cama un hecho suinocencia.. "

. • Los examinados se indignaron é hicieron solemnes protestas, puesse avergonzaban de queseles considerase capacesde ejecutar ese hecho.No fueron lá autoridad, ni los particulares los rosponsublesde.eseexá-

, men igno.Illinioso en verdad: fu~ron .losantecedentee de esos individuos, los que lo hicieron preciso, lo qu~ habrá venido á probarles hasta .dóndeconducen al hombre los procedimientos indelicados; y cuánto vale ante la-sociedad una conductainmaculada: verdad bien dolorosa por cierto; pumeHos. ,',., . .", , " , ,., .

.' ,No faltó álgun otro á quien; por r!lzones seoundarlas.huboque reei-birle indagatoria, pero :el resultado fué el mismo que con lós anteriores,, .

" ., En la tarde del dia cinco fueron halladas en un .cereo -vecino de la ca-

.vsa d{\ la señora Echeverri, éinmediato á la de Manuel A. Escobar, variaspiezas de vestido de la casa de aquella, segun mas tarde seaveriguóJa

,-identidad. ' . 'Con este hallazgo desapareció por completo la idea que babia aún

en algunos de que el loco hubiera sido el autor del acontecimiento. Losesfuerzos se redoblaron, p~ese:ra urgente llegar á-descubrir á los autores

. de aquel. " ' . '.'Alguna sospecha manifestada por álguien que habia observado á.

Escobar e~dia tres cuando preparaba la inhumacion, el punto donde fuéhallada la ropa y una version suya que expresó en la declaración que rin-dió como vecino, y que parecía un tanto inverosímil, hicieron que la aten-don de los empleados se fijase en él 'y se procediese iÍ. un exámen mas de-teui~to de 111 complicidadque.se le imputaba en el asunto. :.

'-'-8-slno con 1:1espada de la ley.que exige unn repnrrioionpms, la sociedad ul-trujudn, debe proceder ú.,ta .. Si el ng¡'esoí' no vacila, ménos debe vacilarla sociedad para castigarlo; si atine! hiere 'con alevosía y crueldud.ln socie-dad' debe herirlo con toda la severidadpóslble, .. . .'. 'I,a ooncieircia pública. reclamaba im periosamente una' víctima. ex- 'piatoria de loe sucesoa de bIJoehe del dos de diciembre: en presencia de .oríjnenes tan abominables COIllOaquellos,' ella no podia permanecer jndi-ferente, .Altcrado el equilibrio de las familias, rotos los lazos que las Ii.gnn entre: sí, era necesario proceder inmediatamente al restablecimiento'no aquel y de estos: y para cÜil"<'Jui,rlo debió acudirse en solicitud de unremedio, si no análogo al mal causado, porq ue esto ,era imposible, al ménos ,'qL!efuera CJ mejor; que se pudiese obtener, '. , . _

'; Va, pllcs-,acercándose.la horade presentar ante la sociedad el pro.'."duetodo los esfuerzos colectivos empleados por sus representantes e11 .rlcs~gra do de ¡a,~grandes. ofensas que se le irrogaron .. Si ese trabajo de •.he oonside- ,e l;ompleto, y .de consiguiente. la sociedad se declara ám-.'p)i:¡Tl1Cntf-~ ~echa, ya llegará el caso 'de que así se decida. Pero si pordesgracia .ciosidud de la investignoion ha sido impotente para ev.i-denoiurj t« .a.circuustanciss de.! sangrientodrama; si la,mano.del críoJl}cn ha si .spoderosa para herir tí la justicia' que ésta ,parapesó'u-hrirlo y, e 1'10, 'la sociedad se convencerá de que por, suS'agentes' noSe)l:! omi tedio alguno para obtener losresultados que se apetecian;y contiuu .ese futaf'estado de alarma qne producen .las situaclonesanorruule, grandes conmociones' del órden establecido pOI' 'ella.

, " :.YI. 'ligO noticia de que haya ocurrido un caso en que Jos en.cargados del' público se hayanentregado con mas decision enerogínyvol. tí la averiguaoion de nn crímen, .que cuando ,se cometióeldeque ~ste .voluminoso.expediente, y téngase en-cuenta qne es..tejo tí pesa .enorme foliatura, no representa la mitad deltrabajo e~-pleado en. '. '. . ..: .. ., . '

Vi nstantes al teatro de los hechos, allanamientos practica-dos durar ohas noches en parajes retirudos.tdonda se creía que po-dría, enooi , algo que sirvierapara encaminar la averiguacion, 'exá.men, verb: crito: de las personas en todas .partes y tí todas horas ·deldía y de 1: e, rondas multiplicadas en todos los puntos donde se-rna-nifestabu specha, comisiones á poblaciones retiradasde la ciudad,&, hé aqll idea siquiera de todo lo' 'lIle entónces se hizo, y 'lile por.cierto mei i olvidarse en honra de .sus autores y de los vecinos delbarrio dOI verificó la catástrofe.. .• j. ', ..

. . PnJ fa'á'relaciona!' la--'situación { el ,número, de las heridasque se hall sn loscadáveres, " . ., .. . ,.

. ' t: Esti 0810.8 tÓUlO de la luminosa eXposiói~n m'éili<.:o-l'egal. ~~Lilüstr.ac1o· . Ir;l\fanuel Vicente de LaRochs, áquien, en su nobilísi-m-a-prófes be lal~ausa de laju:stieia grandes 'é importantes serví-cíos. .' . .,' - , .

. Es ve¡ [ue 'él no presenció la esoenanivié los cadáveres, perl>' ensu'cltada ~ ~ió~ l'el.tcio.ná,losre~on?cim.ient~s.d.e.los, que lC?hiele-ron'):'. COOl.' ~sligeras'discrepancias ]e estos, {t S1Ulmres,sea 'dicho de .r)aBO;~!;,pl reconocer sus Importantes tr'abuJo,s en el asunto. Suexpósicion ~; pneR, ~6n~id('rnrs;J como 12,síntesis de lasde aquellos, '

-9-'- .

. 'SrSF0Elá.NO ESCOllAR. Era este \1U jóven como de veinte años,l'O~18to y bien musculado., Su cadáver tenia tres heridas: "Ulla en labnrbilla hácia el lado izquierdo, hecha e~ concepto del declarante (doc- .t.or do I.Ja Rache) con el gavilan del hacha; otra en la coja derecha, queravó el hlH'S~J,producida con el 'mismo instrumento cortante; y 'otJ:atr;"vasal, sobre lnpromineuciad el occipital, parte la mns dura del hué-so, he6cta coatusa y conuriuutiva, dadá por el ojo del mismo instru-mento". '. .

VIRGINIA ÁLYAREZ. -Era esta una seño'ra que revelaba tener cor-ca de ounrenta aI1os~Ensu cndáverhabia cinco heridas:' "dos sobre-lalínea media antero-posterior del cráneo, hechas con instrumento' cor-'t~ntc y: sin fractura, corno 'por ol,-filo Je mi largo l:Ulchete,'peinilla?rielera] otras dos detras de la caueza sobro las rC'glOlles temporc-ooci-pitales, hechas con.el filo do una hnchn; runa quinta, .: con enfisema,·cansada por el golpe dado con violencia por el ojo de una hacha". - .

MARIANA M AIWI,!'-NDA. Era esta una mulata que podia tener trein-ta ycinco años. Había en su cadáver tres heridas' graves: "primera,en la sien .izqnierda cerca del ojo; segundn, sobre la' regiou mastoidea'del mismo lado; y la tercera, sobre la corona". En las piernas tenia tresescarificaciones de poeu si[tlJificacion\ ..~,

JHELlT-ON ESCOBAR. En], este un hombre de cabello .gris, denta-ama completamente gastada, yporlia tener cincuenta años. En su ca-dáver había las siguümtes heridas: primera; fracturas del húmero iz-quierdo; segunda, herida contundente y fractura de la protúberanciamedia del hueso occipital; tercera, una heri du colocada en la parte me-dia C1euna línea que dkigiéndose de la raíz de la oreja fuese á terminaren la parte media do la clu vículajcuart.a, várias heridas contusas en laespalda" de las manos y pr{)d\lcid¡¡sprobaQlemet~te por frotamiento 6apretones fuertes; quiata, una herida en la parte posterior y derechadel occipital. '., ..'

'l4cRESA I'ENAGOS. Era esta una jóven.jnulata clara, como de-diezy Beis .a1-10Sy de constitucion rae¡uítica, Se veían en su cadáver las si~guientf$heridHs: una sobre el ojoizquierdo, en ángulo.y con fractura-del hueso; dos sobre la reglon fronto-purictal COl{ instraimeuto cortantey sin fracturn; ot ra sobre la l'egion. temporal, éon frnctura .del hueso ; y()tr~ sobre 'Ia parte superior déla reglan occipitul, con fractura COI1l;}ü,nutrva. ", . . ..... .

. JUANA ECHEVERRI. Era estauna señora que por.su aspecto pre-sentaba' tonel' de cincuenta, y cinco y], sesenta años do cdnd., Se enoonbra-ron en su cadáver estas heridas: una en el brazo derecho, que dividiócarnes y huesos ; otra que cortó desde la j)Ju:tc' alta de la cabeza, al ladoderecho, hasta el"ala de la nariz; otra que empezó desde nn lado del ojoderecho hasta la parte frontal do la anterior herida; r otra en la sien de-rcchq, que fué la mellar de todas. . .' '.

. De 108 tres. uiñosque sobrevivieron á la matanza, uno de ellos,:Manuel A., hijo de MariaJ13>MaTulnnda, resultó tambieu con una heri.da.teas vcnhl e~¡la parte postenor de la cabeza, como causada, al p~¡'e(:erl

2

, .!COnínstmayor d

-~10-~o cortante, Su enfermedad á- cama de esa herida fué~y menor de treinta dias(58 y 59 c. LO, 5 Y 10 o. 5.°).

:El ~sible aseverar el modo como se cumplieron los hechos-que dier!i ! resultado el acontecimiento que DOSocupa. El sitio delcrimen, . ide la noche en que debió perpetrarse, la d esupa.ricion Ómuerte <1 erSOD:ISde aquella familia, la carencia absoluta de testigosy de da e 10 expliquen satisfactoriamente, y el misterio, en _fin,9.ue cubi ;el lúgubre suceso, impiden el que se pueda hacer unaasever;iC riejante , '

E lso, pues, ocurrir á conjeturas que, fundadas en la Iocali-.dad,'siti" s heridas de los cadáveres, colocacion en que queduronéstos, c~ ires de la familia de la señora Eeheverri, rastros ó hue- .Ilas que , delito, &., &., se acerquen mas ó ménos á la realidad delos he che . _ _

. .F~ _') en el minucioso exámen que en el teatro de los hechoshizo el, ilnstraao profesor Manuel V. de La Rache, 10 mismo fJ He en lanaturaleza y sit uacion de las heridas, cree como mas verosímil que hmatanza se haya ejecutado por individuos de los cuajes alguno 6 algu-nos eran .bienconocedores de la casa y de las costumbres de la familia,- En Su concepto el priuei pa] de los asesinos se hallaba acostadocon la víctima primera que debió ser inmolada

Cautelosamente quitó el regaton que .sen·iade tranca á la pllenta y luego dió principio ásu obra. Los ayesy gemidos naturales de laprimera víctima al recibir el golpB mortal, y el ruido producido po~' elarma homicida despiertan á la. rpadre de esa víctirna.que Se presenta hu-yendo en la puer ta de la entrada, y al salir, otro asesino le da dos mache-tazos, la rechaza;' y entónces el matador de la primera víctima le da pordetrás en la cabeza, dos hachazos con el filo del instrumento .. _ Otro asesino penetra ent.óuces, empuja á esa mujer hácia dentro])Ma-certar la puerta.' Se le empapan en sangre las manos y- al sacu-dirlas .rnancha la parte inferior é interior de dicha puerta, Cerrada es-ta y adentro ya los tres asesinos,.continuan su tarea. Primero inmolan 4Mariana, á quien-conducen hácia el centro de la-sala, y aquel de los asesi-nos en cuyas manos estaba el hacha le da tres hachazos mi la cabeza, yel del machete le hiere las piernas con él. Este mismoascsino coge en se-guida á Meliton por el cuello y una mano, y el otro matador le-da tresgolpe~ con-el ojo de su hacha .. Luego pasan' al lugar donde se encuen-tra Teresa lá idiotai.el delmachete le da tres machetazos y el del hacha'un golpe en .la cima de la cabeza con el filo de ese instrumento: se la.arrastra hácia la sala y....allí se le da un nuevo golpe sobre un lado de lacabeza, . . ,_ .....

A eontinuacion siguen a la pieza donde estaba doña Juana -;Unode los asesinos lleva la luz. Se la encuentra arrodillada, y el asesino' q~lelleva el hacha descarga sobre ella cuatro hachazos.; - :Qespues registran los tres asesinos las heridas de Sinforiano, sa-quean.Ias c¡tjas, -y 'por último arrastran el cadáver 'de este y Io colocan

'f;nsimulacro de lucha con Meliton, poniendo el hacha, instrumento ~a;,,t~qor,n? rnul1éjos, : . -.

i-ii-".4, ' ,. . ~

-Abren tal vez la ventanilla de la alcoba, ajustan lá puerta de l:i.. . .' .oasrta, y varten.· , . _.. Miéntras pasa la escena dos espías se hallan al lado de afuera daIa.casa, situados allí para dar el alerta é impedir el tránsito por la vereda;pública, de las personas que á esas horas pudieran pasar por ella. '

. ~ En el público se 'oyeron varias conjeturas, entre ellas esta:. En horas avanzadas de lanoche los asesiríos se presentan en la

casa de la señora Eoheverri. Con el pretexto de solicitar medicinas, in-vacando el parentesco corí -la familia asesinada, 6 COIl otro semejante, se .hacen 'abrir la puerta .. La primera persona que se presenta es.Virginia,y apénas la ven descargan sobre ella dos golpes mortales. El ruido-de.estosy las Iamentacionos alarman á sris deudos: pero los asesinos penetran.rápidamente hasta la cama de Sinforiano, á quien no le dan tiempo d'~incorporarse, y allí le asestan el primer golpe. Hallándose ya exánime}no es precisa la presencia de todos los asesinos para acabarlo de matar;estos se dividen en los momentos en que los demas moradores de la casase han levantados unos se dirigen áMeliton, otros á Mariana, para impe-dirles la resistencia y agredirlos.' Miéntras tanto Sinforiano ha muerto,y los que acaban de matarlo van á. aumentar el número de los otros y reu-nidos inmolan á Meliton, luego á Mariana, en seguida á Teresa y por úl-timo á dona Juana, á,quienes sacrifican rápidamente. Pasan despues {~lª colocacion de los cadáveres, P?niendo á Sinfo~'iano 5unto á lVleIiton~con un brazo sobre el cuello de este, como en actitud de lucha.

Proceden entónces al saqueo, y huyen,. ' .. De estas conjeturas, que son las mas admitidas, yo me adhiero, en'lo esencial de los hechos, á la primera. La existencia en la mañana deltres de cuatro' . almohadas en la carría de Sinforiano, da á entender qU(lUno de los asesinos se acostó con él. ,

. Cuando ya todos, dorrnian aquel se 'levanta cautelosamente, hie-re á, su compañero, y ese primer golpe que le asesta al favor de la luz'qne los mártes se acostumbraba dejar en la 9as=1es el aviso ,que da á suscómplioés, qué aguardan en el exterior para acudir á la consumaciondel horrible atentado; -. - .." La familia se apercibe cíe 16 qtiesuoede y algunos 'de sus miem-oros. tratan ele conservarse por medio de la fuga; pero en esos momen-tos .ya'es imposible: los domas asesinos se encuentran enla puerta y allícontinúan la obra. principiada ¡ior el primero. Pasan luego al interior ynaturalmente se dirigen á las personas de mas vitalidad 'para sacrificar-las en primer término., ~. ..

El hacha misma de la casa, es el principal instrumento matador:probablementelos demas victimarios están arrnudosdo machetes 6 de pe-sados garrotes, que contribuyen con el hacha á consumar el feroz exter-minio de aquella familia. .. " .

. Terminada la obra, los asesinos proceden á ejecutar su principaldesignio, Del dinero que había en la casa, de las alhajas de valor que en-cuentran y de las mejores piezas de vestido de las víctimas, se, apode-ran; y luego se retiran. " .. " ~. . ,Es esta la versión que he creído mas natural.por prestarse mejor á

la explicaci?ll. de los hechos averiguados en el proceso y á. la naturalesadel acontecimiento, ...

,,-12-E~}el sumario Ele sindica de este gravísimo cIelito' á Danje1,'y )J~-

nuel A. Escobar, Francisco Parra (blancój.. Francisco .Parra (negro),}~varisto, Santiago y Emigelio Galeano, Son hermanos entre sí los sindi-cados que llevan un mismo apellido. . '

DANIEl, ESCOBAR es un jó.venque no ha cumplido aúu veinte y, U11 años, de constitucion robusta y fuerte. . . . ' .

Este sugeto tenia un conoeimionto íntimo ele las costumbres dol,a familia Echeverri, á la cual lo unian los lazos de la amistad y de- la.sangre. .Con frecuencia se. le veia en aquella casa, -como si hubiera sidoúno de-sus miembros. . .. " .'. Su concl{lCta .anterior lo exhibe corno un jóvon de malos prece-:dentes.. Pruénbaulo muy bien las bajas relaciones que tenia en 81.1 vecin-dario, 'elmal concepto que ele él se han formado las, personas respeta-bles de aquelbarrio y algul1[~sextracciones furtivas y estafas de que ha-blan varios testigos. .' '. ,- .

. El} sus ideas ha dadoá comprender perfectamente que es el [óvoumaé corronrpidó de que se tiene noticav Discípulo fiel de los partidarios<le]'se:ris_na1isn~o,enél han calado completamSl}-te los funestos principiosdo' aquella funesta. escuela. Nada lo valen los esfuerzos honrados paraadquirir los medios de eubsistencia, ni las relaciones de familia, ni lo sa-grado.de 'la vida humana, hi ningunn de. tantas otras oonsidoracionesque detienen en su carrera criminal á los mas srrandes malhechores. En• .."':> -presencia de sus miras egoistas y satisfuceionos personales todo es nadapara él. ¿Qnéle impoi-tan ~¡;,vida y los sufrimioutoa de los doma>., contal que c~msiga gozar del producto elel trabajo honrado clOBUSsemejan-'te~?-NiLda nbsolutamente.v Para laadquisicion de un goce; los medios loson enterarnente insignificantes. Con la sonrisa en, los lubios y acaso sinungrit.o eii su conciencia, ya encalleoida, hiere con tina crueldad nero-niana á quien se oponga á la satisfaccion de sus deseos. . ' .

. . La ausencia en sli alrua de los:principios morales y religiosos, que'forman la base.de las virtudes sociales/lo han conducido naturalmente'{t, 'ser un oomun'istapráctioo. Rechazando abiertamente el órden estable-cido lJor Dios en la sociedad con relación {t In riqueza, se cree autoriza-

.'<lopara apoderarse de las economías producidas por el trabajo de los.. '. . , .domas. ' ,· Corno .un fruto natural de su propia corrupción, se ha atrevido ácreer á los demas'hornbres cortados por su misura medida, Ell su insen-satez ha llegado á pensar que,en presentándose la oportunidad no hay,quien no se upodere tia lo aj eu ''J,. como él lo hada. '. '. .· Como Tropmnn ó Laoenairo, y guiado por su codicia, no vacilaris'en 'tronchar el hilo de muchas' existencias para apoderarse de una suma'miserable. Cómo Federico Benoit, ha habido quien lo snponga capaz doasesinar á supropia madre, como aquel lo hizo' con la suya, si ella re ser-yía de estorbo para el logro ele sus planes. - .· Tal es, dibujado á granc1es pinceladas, ~l principal de los héroesde esa trágica jornada, cuya cónd neta aparece en tela de [ucio, ":' MANUEL A; ESCOBAR figura en el expediente como un hombre tam-.bien de malacouduotn; pero uo con laHid~af' depravadas y la corrupciónde su hermano, ' '.'

-D'. .Corao éste.es pariente allegado de las Víotimns, Cllyll easaIrecuen-taba, pero no con la misma asid uidad que aquel. '_ Es conocido genei'almpnte como estafador, y sus artificios y em-bustes ~pare~e .que lo han llevado, á obte.n~l' .pOI' el halago y la sorpresa,eoncesrones injustas en sufavor yen perJulclO de sus parieutcs allegados,

, de deudos cuva edad y circunstancias estaba obligado á respetar, Es ade-'mas jugndor, codicioso é indelicado en sus compromisos, ' .:

,FRANCISCO PARRA (blanco) es reputado l>~,¡mhiencomohombre demala conducta. Amigo de disputas y peleas, de costumbres licenciosas,no puede presentarse en ninguna parte como modelo de honradez.

El mismo dia en qnc fuó aprehendido habla sido condenado pql'nn jurado; quc se reunió á conocer de su conducía en una r¡na y heridascon uno ele sus vecinos, ',' , ., - . ,.

, FltANCISGO' PARHA (negl'o) es conocido asimismo con el apodo dézonzo, acaso por lo tardío de su cxprcsicn y su limitada inteligencia.

. Su condiicta anterior no lo condeua ; pues realmente <.;S tenido POl"un hombre pacífico y laborioso. . ' . '. '

Ev AHISTQ GAÍ.EANO. Á este 213le conoce en su vecindario con elapodo de el boóo. . " ,, ,Siguiendo de cerca las manifestaciones ele la inteligencia (l~ esto

,hombre yobservándolo con atenciou escrupulosa, llega UIlO algunas OC~t-

éiones (t creer que so tuvo razón al darle ese apodo humillante, y otras sepersuado ele lo' coutrurio.Obsérvauso en él poca consistencia en las ideas,'falta á voces de memoria Y.ánimo seguro para ocultar la verdad en mu-chos casos. Proviene de aquí sin duda la notable contrediecion on rqueincurre en sus reluciones ]JQrgraves qllC sean, estas .. Indudablemente OHcapaz de coordinar ideéis, de discurrir sobre los sucesos, y comprende per-fectumento, al ménos en las acciones notables, cuáles de estas repruebanla moral y la ley, y cuáles son' permitidas, ', , ", Pero la fisonomía mus .singular: que en él se encuentra y que 10

caracteriza completamente, es un conocimiento perfecto-de todo aquellosobre que se le'interroga, Por mas extraño que sea el hecho que se quie-ra averigunr.cou él y á. pesar de las eii-cunstancias que hagan notoria su ,,ignorancia con relación ácse hecho, jamas contesta que' no lo sabe, CO'-mo si hubiera estado presente, trata de referirlo con todos sus detalles ylo.explica á su modo prestándole toda la na turalidad, posible para que elhecho aparezca como cierto- ,', '

Parece ser hombre poco aficionado al trabajo; y su conducta pOi'lo mismo no puede ser sntiefactoria, . _ ' .

Los peritos que 10 reconocieron 10 consideran elefacultades obtu-, sas, pero que tiene conciencia y malicia de lo que hace. N o ha faltadoquien '10 repute como un pillo. En presencia DE ESrO es preciso conveniren que las manifestaciones de en inteligencia, su conocimiento de los hom-bres, sus deberes para con la sociedad y para con Dios; y el desarrollo desu conciencia, le pormiton pensar, aunque no con la suficiente retlexiorr,sobre la gravedad de un juicio ó aseveraoion' qno comprometa de por vi.~la.s.a l~bertttd J ~u porvenir y los delaspersonas á quienesIigueen talJUIOW o, aseveracwll.. "

, S.\NTIAGO y :E,¡,ul1mo GALE_\XO pueden exhibirse en uu mismo'molde, .

.:--14-Corno .10s J'ltrrM y' Evaristo Galeano, estos dos sugetos peiietiú.;

een á las últimas capas de la"sociedad. De alcances intelectuales limita-dos, descuidada su educacion moral y religiosa en la infancia, son hom-bres de poco discernimiento y de escasas manifestaciones de inteligenciay religion. , ' .. De la conducta del primero nada sea:firma; de la delsegundo sedice, que es mala.

<-' , ..

.Alfin, despues de mi trabajo constante- 'en numerosas indagato-tias, Daniel vino á presentar su confesion., . , .' .

_ .Prin.cipi~pol' repetir lo que l~abia dicho en sus instrlJcti.v~s yen.su declaración jurada sobre lo.que hIZOen la tarde, del dos de dioiernbre,dia en que lo hemos visto desde temprano en la casa de las víctimas;Salió á la oracion acompañado de Sinforiano y cuando se separó de éste,.en frente de la casa de Manuel A. Escobar, se dirigió al Saladito, dondeDímas Bolívar, con quien tenia relaciones amorosas. Por respeto á· losvecinos de esta no se atrevió á tocar, y entórices se acordó de que teniaque' comprar. al siguiente dia unos goznes y un pañolon, y resolvió rogre-sal' á.la casa. de Sinforianoá que le pagase unos tres pesos que le 'debia.Serian las-diez y media cuando llegó á esta: golpeó la puerta y.salió Vil'"ginia en traje de dormir y enoüelta en una cobija á abrirle. ' Penetró enla casa y halló á Sinforiano sentado en 'un tabllrete,quien lo invitó para

, que se sentara, á lo que accedió. L~legO, dirigiéndose á Sinforiano, le exi--gió el pago de los tres pesos, y como éste manifestase repugnancia paraverificarlo, se cruzaron algunas palabras poco meditadas, y al fin Sinfo-riano sacó los tres pesos' y se los arrojó, de los cuales le cayó uno eh laruanai. por esto Daniel §e enfadó y le devolvió, tiráudóselo, el peso quehabía quedado en la ruana: Entónces Sinforiano se levantó y le dió migolpe, golpe que Daniel le contestó con otro, del cual lo recostó en lacama, En esos momentos, se le abocó Meliton, que estaba sentado-en la~01"Íma,_á quien derribó de un golpe; y en segqic1ª se vió atacado por es-tos, Mariana, la cocinera, con un regaton; y Virginia, que le arrojó unpocillo con frisoiee á café. En el ataque que le hicieron retrocedió hasta'Ja puerta, donde encontró junto á la punta de la tarima el hacha, Fné en-tónces cuando dió el primer golpe á Sinforiano, del cual lo arrojó sobre lacama. Miéntras esto sucedia 'Iá vela, se babia apctg.ado y cerrado la puer-.ta; y.él.aiguió, despueede dar un golpe á Meliton en el brazo, dirigiendo-golpes á diestra y siniestra hasta que. dió con todos en tierra. .' -" . Como se ve, el sindicado: pretende hacerse aparecer como víctima-de nn ataque en que sevió precisado á.defenderse, - Elr el propósito sin.duda de separar de su causa la grandeodiosidad que trae consigo, ha ape-Jada' á una farsa que no puede aceptarse, Si así fuera, jio habría en elmismo expediente datos abundantes para destruir la modificación que leagrega haciéndose :figurar como .agredido. '". Pues bien, esa confe!lion, que conforme al artículo 1673 del Códigojudicial, forma plena prueba contra él; no puede admitirse con la eireuns-tanela 6. modifioacion que le agrega, porque tal circunstancia ó modifica-·.cion es indudablemente falsa, como vamos á ver. Y la, admisión de la

. prueha; en cuanto que lo ~eñ~,l:tcorno homicida" y rech ti "1 o de la circuns-

taneia que lo favorece, es enteramante legal (articulo '1678 del citadoCódigo). '. " l~oSe sabe ya, y es unhecho evidentemente comprobado, aun con

la misma confosion del sindicado, .si bien en ella niega algunos detalles,que éste el viérncs de la semana anterior ála del suceso invitó á Francia-co Bonet para que fuesen á la casa de la señora J llana Echeverri y á ladel señor Luis María Londoño á- robar en ellas, despues de asesinará SUBmoradores,·

, Quien se encuentro, en disposiciones de ejecutar un hecho' como es-tc, y deepues aparece asesinada una de las familias escogidas para vícti ..mas, y saqueada su casa, tiene en contra suya lafortísima presuncion deque el hecho se ejecutó como lo había pensado. Seria un rarísimo' fenóme- .IlC? que, habida consideración á los antecedentes, él se hubiera visto pre-'oisado á defenderse de-esa familia; y mas raro aún, que despues de sacri-ficarla en uso de su defensa, hubiese tenido valor para apoderarse de lo .que babia en la casa; . " ..-

2.°, Es enteramente inverosímil, aunque no físicamente imposible,el que un hombre, por esforzado que sea, pueda sólo exterminar- á una fa-milia, en la. cual hay miembros fuertes y robustos. ¿Cómo es que mién-tras se encuentra sacrificando á unos no huyen los otros, pudiendo hacer-lo? ¿Cómo'es'que.en esa lucha de muerte trabada entre un matador}' seisvíctimas; aquel tiene tiempo para sacrificarlas á todas, sin que éstas ha,yan podido inferirle la mas leve lesion?; '. ., 3,0 Pasando abara á razones 'derivadas de su propia confeaionenla cual se notan muchísimas cont.radicciones, y admitiendo como ciertoque en la noche del dos el sindicado hubiese venido hasta Saladito á vi,.sitar á su manceba.ien cuya casa' no entró por respeto á sus vecinos: y ad-.mitiendo tambien como una verdad el que en esa noche pensó en comprar-para esta mí pañolon, que desde el domingo anterior habia comprado; estañibien inverosímil que al llegar á la casa de la senara Echeverri salie-se la senara Virginia en traje de dormir y envuelta 'enuna cobija á abrir.le la .puel'ta, cobija que debió hallarse junto al cadáver y que no se encon-tró, rilas bien que Sinforiano ó Meliton, que se h¡1l1aban sentados elprí-mero en úntaburete y el segundo en l~ tarima¡," 4,o. Peca, asimismo, contra las reglas de la lógica la version de quedespués de haberse armado con el hacha y hallándose junto á la puertahubiera podido arrojar desde allí con el primer golpe de hacha á Sinfo-riano hasta hacerlo caer sobre la cama que se encuentra al costado opues-to al de la puerta. La situacion de las manchas de sangre, que se halla.ban háeia el rincon de la cama y en la pared 'contigua, manifiestan cla-

. ramente que si el hecho fuera cierto las manchas se habrían hallado há-cia la orilla de la cama y eí golpe se habría recibido estando lp. víctimay el victimario junto á ella; . .

5.o Segun su propia confesion,en el momento en que di6 el primer.haehazo, la señora Virgi~üa le habia tirado con un pocillo lleno de frísolea.6 ele café, y.Ia vela que esta llevaba se apagó, Sobre lo primero es preciso_potar que el pocillo con frísoles ó con café seencontró al día sigaiente en la

casa del crímen; y ni los fríso!es ni el café estaban esparcidos por el pa,, vimento, ni el.pooíllo despedaaado, coato parece natural que !lp~}ecil;'

" - . . .....

·-10-nI. ~()bn' lo sc(cnnr1f) debe tenerseen CHeDí:'· atto d(íl'lr'¡¡E'¡; de cerrada 1<1PN(·-rUty ap::¡ga~ia la vela, en aquella· casu no I~oc1ja1)~'1l8trar in, luz sufí-ciento para que él pudiese saber'el órden ('u.qne les causó In,muerto á aque ...llas pcrSOlH1S. Y sin embargo en la confesion rendida ante el sefior Pro-fect'o-del Departamento estnblece el órden riguroso en que murieron á susgolpes esos individuos, sin aCOn~a1'8C de Cjue en 8U anterior había dichoque despues de cumplidos los hechos que menciono, los golpes 108 habiadirigido á todos en general hasta que <lió con Ellos en tierra ;

6.o Refiere tam bien que cuando se. retiró In última vez de aquellacasa quedaron vivos Sinforiano, la sonora Virginia y Teresa. N o es acep-table esto en un individuo que se proponia alejar toda sospecha en con-tra suya, Puede admitirse (Fío áTeresa, bien porque le pareciese ·que que-

, daba muerta 6 porque SIL estado deidiotismo lu constituía en imposibi-lidadde revelar alguna cosa contra fl, la dejase con vida al retirarse ; pe-ro hacer lo mismo 'con Sinforiano y con la señora Virginia, que aun supo-niendo que no pudiesen hablar, CON un solosigno le habrian descubierto,es admitir casi una imposibilidad de sentido e0111un;

7.9 En su confesión señala. como único .instrumento matador el ha-cha deIn O"lS:1';y, sin mnbargo la na~ur:11eza y dimensiones de algunas deh~heddas halladas en los cadáveres, hacen creer qrle acaso un macheteú otro instrumento semejante contribuyó á lñ consumacion del sacrificioj

8.o En la parte externa de la Jmerta se hallaronel dia del sucesoBeis salpioaduras de sangre en direccion oblicua hácia abajo y una man-cha casi oval de regular tamaño, producida indudablemente por una ca-beza herida. Así lo persuaden su.forma y el hecho de haberse encontra-do en 011:1 un cabello cortado que estaba pegado.é incorporado á la s:;mgl'e.

- Tales salpicaduras y mancha dan derecho para sostener: 1.0 Que duran-t'üla-matanza la puerta se encontró abierta, al mónos en algunos momen-tos, y no cerradacomo lo dice el sindicado; 2.0 Que las salpicaduras fue-ron con toda probabilidad hechas al recibir la víctimalas heridas quele-izfirióotro asesino del lado de afuera.como lo observa el doctor do La Ro-che; y 3.0 Que la mancha no fué producida por un golpe con el pié del

.-eíudicado, como lo afirma; .. . . ....'. .

9.o Refiere tambien que los pantalones ensangrentados qne .Be lohallaron en.su C:¡"'!:J, eldía del allanamiento, no los tenia puestos en la no-cke del suceso; y sin embargo en la tarde de ese dia hubo testigo 'que ca-si asegure haberlo visto conunóssemejantes ; f

. .··10. Finalmente, 1·despuesde observar que no hago ~érito de 'al-'. gunas ooutradicciones 'de poca gravedad en que incurro el sindicndo y.que·prueban l~.fa1ta deverdad en su relacion, se ocurro una consideracionde mucho peso, que enrni concepto evidencia que él tuvo compañeros en

. .aquella noéhe ;' y es ésta, si, como él dice, niugun otro tuvo participacíonen la matanza; si solo él se apropió los objetos que faltaron en la casa y'ahora está 'diciendo la verdad, naturalmente pa.ra, exhibir una prueba ro-'tunda dé. que así pasaTon las cosas, ha debido presentar todos esos obje-tos. Y sin embargo de que.despues de la confesion hizo una entrega for-mal de los que habia ocultado, faltan aún 'algunos que los deudos de la

.señora cEchevenihan echado ménos y, que. no se ,sabe dónde ostan, Exa-,- o . . d . Ios i . 1 li d 1 J·nlJnenSe 1"1no GOn et.ericrou os ín veut.a rios y as . lSt:cHil .. t:. 'ir qllC "e <>l<M

{lela casa.el dia tres, de. lo que allí quadó.dolo.qno presentó !JIsindicado,'1 h '1 t,' ',. (' -1 ,-" • 11' 1 .UD o que .d1Lu ,í2.JVt1Tl.3vQ -;;-a~e::!oYIÜ)'J:" en (;H0n no E:...:nauara a 111flyorparte,(~~)1..-''''Y1~ri"'flt;' V efectos r-n vn falta h"1 '''1-0-',',.-1(:1\)'-\í q~~'-0.A Arcila (Z()~ e ~0j"-,. •. _";":¡';,J :f:~..l. __ L<G"'\ J •..•~ ,J ••.•• -I.

J~ e •••. ·<--11 t~.c." 1 <-~!.. •.•~.~..!.'-.''-,..•.~,. ~.:>. . ~(to .r.J. 'V ••

~..•.• • ...•-1· ". --., , .~\[,;,,,"1"<')('.() 01 "'-1'r."'-~(\""Á.,()1-'";(l,.n "r, ene flf,·;"q crictoa v 'l'l'j~"~otros (le la casa~""""~J,,~•...ee ,,¡~J. _v.::..•.J..'_,.u:. u. J.:-~.,-"t> •..,.~: '-:1 ~'-"._ .J~'_ . .JJ''L, \ '.' .' '_,'lo. ••L.Ju 'l! ,-o ,; ,;,)1..10,

, . .' . ~ .ouvaexistcncineu ella Y~~1-cliooucdc aseverarhoy, fJ~oncuentrau en poderJr ~..~ . •

.de)o~ compaiieros ct.~.i~~l:H:~1.".. . _ '. ¡ _ , '

b. ,1,,'1 'o ·1:':·..,.....1r'1.oo : ....¡ .• Ir (} f'h";·c.. (' ~ n. ~, 1 f'\.:'" ~ A J_. j:",+-,,",~n~....s, c,C\.I.l.l.\~,- ••.,"',V<.-~11 os.er ..~,tO'JqÜv en •.1D...CT'a [t. S~.J10.la .n.na oa-·guina Ah:arc?, en SU deelaracion de folios 33 y 34 e, 2.°, de los cuales muypocos figuran en losinventazios y listas citados? , '-;' ,-~

- . .• . - 7••Con las consideraciones precedentes creo haber demostrado de una.

manera perentoria' que la confosiou hecha por Daniel Escoliar presentados caraetércn importantes. Es el primero aquel .eri que Be reconoce. au-tor do In;muerte de las psrs01cas de la-familia de la senora Echevcrri: en.oste aspecto ella forma' una prueba completa contra 61,una-vez quopor otra parto está bien comprobúdo 01 c11CCr.podel delito. Es él segundoel en quo u!jTeg¡1algunos circunstancias 6 modificaciones-eseuclales quet.iendeu, '8:110 á disculpar su conducta, al ménos á atenuarla de una ma-nera.not.able. Desde este ,punto do vista; ella debe ser desestimada corn-..pletamente, pues CIl,O COl! razones evidentes se ha justificado la falsedadde Ias (';rCmn~1:ancias ó modificaciones aludidas.. '

: .Enes razones excluyenla verosimilitud cloque el hecho Be hayaejecutado de 12. maucra como-él lo.refiere; y traen ::1,1 áuimo.ademas.elcon-vcncimionto de quc hubo.quien tornara 'part.ioipacion cou él en-la matanza.

~ De aquí snrp:e,nec2s;¡,riaruente.la idea de-que las personas de la fa-milia de la señora EcheTe'rri'l11urieron no en un combate leal en que lasfuerzas contendcras so.manifestaran con igualdad de 'parte de los com-_b:1~i€n'Lcs,no {,virtud de un ataque. promovido por ellas y que diera porconsecuencia .el triunfo' de los agredidos: Sus costumbres pacíficae, susbuenas relaciones con losvecinos, la carencia de enemigos conocidos, lit .hora en Que debieron.morir, la naturaleza }' situacion de las heridas conque apm:C'.;k~·qn,el robo manifiesto ejecutadó en la casa ila í'álta, de le-sienes ó heridas de aquellos con quienes se entendieron en losmomentosanteriores u.Ía muerte, son datos terribles, que acusan á loshomieidas.co-mo reos de as_csii1_a~?para robar.' . '. ' ..

. - ... . .

· .. Se ha hecho del dominio pú blico laconfesion de Daniel Escobar.con todos sus detalles, Hasta ahora no tengo noticia de que haya quien.Ia acepte de la manera como la hahecho ; y esto se explica perfectamen-te, pO,rq?-eel simple sentido cornuu es bastante para rechazarla como in-

~Ver0S1!:'1~1·.. ,..... . . .' • ., Ya he onumeradq los prineipnlosargumentosquo traen al ánimo elcon vencimiento pleno de que las cosas no pasaron como él las refiere. Deesos mismos argnulCptos es lícito inferir que Escobar tuvo compañeros ~~,para la ejeeucion del atentado: De otro modo; seria preciso convenir en·que-el hecho, suponiendo autor único á Escobar, se consumó en oposicion(¡. reglaade lógica tan claras que.lo hacen casi imposible. . . .· Á pesaiv.pues, de que se conviene en lafalsedad de las circrmstan-~iaiJ COn'1\\': el sindicado modifica su cQllfesioIl iá pesar de que el serirído. . a

c',oniI111 in.lica que t.UYO 'compañeros ele cjecucion; ha llamado la atenciortde todos el que un hombre de los feroces instintos de Daniel Escobar, encnyo dcpravndo corazun 110 se concede que pueda existir un solo rasgo~l¿ generosidad, haya sostenido y sostenga con émpeño ser el Único au-tor de nquolla horrible carnicería. ,

-Ex plicando los moti vos que pudieron impelerlo á ocultar el númeroy nombres de sus cómplices.se hacen suposiciones variadas.mas ó ménosaceptabks, peTOqne persuaden de que sí hubo-móvil que lo guiase á ello.r • COlnÍJI;cn<.1ieniló,como debió comprender, que se hallaba' perdido,pues que la autoridad estaba en poscsion de datos importantísimos-con-tr·:I. 61, y de los cuales estriba enterado éste; supuso naturalmente que SIlconfesion eruya insignificante, y quisoacaso, rindiéndola, obtener algun.frj.to de eLla. , ., .' .

Lo primero quoacaso pensó filé separar delcrímen la grande odio,sidad que le es caractérlstica, y se hizo aparecer como agredido. Yo ten-go cómplices, se diria en seguida, pero desde el momento que los señale,Tni presencia con ellos on la casa de las víctimas se tendrá como un mo-·tivo para que '110 Redé ·crédito ú la agl'eRion de que fui objeto.

" . ¿Habria entro los victimarios personas á quienes él no creeria de-her comproutetor, por alguna razón? ¿Contaria con que con la impunidad'de sus compañeros; conseguida-con su sacrificio, estos se verinn colocados'en e1 deber de procumr su libertad mas tarde? Si 'era una cuadril la orgu-:nizada ¿no es natural quo pensase en que vivirla llenode recursos sumí-.nistrados p0r ella, hasta tanto que obtuviesesu libertad? ¿Seria guiado

" -por la vanidad, el deseo de hacerse célebre, y querría disfrutar sólo de esa'horrible celebridad sin que nadie tuviese parricipacion en ella? -

.

,. He hablado ya-de h confesion -de Daniel Escobar;' paso Ü ocupar-.¡)le de la rendida por Evaristo Gale:1no;,' ., Corno, se huhrú visto, es éste un hombre rato y una de las figllta~-mns irnport antes cld .proccso, ya-por su carácter moral indefinible, ya por,la. serie. numerosa tIc contradicciones en que incurre, ya por las falseda- .des que 'afirma, y ya, el! fin, por 'la manera singular corno vino á incorpo-

'tarse en la áveriguaCion.· '" . 'Obsérvese que desde que rindió su oonfesion ante el !wñor- Pre-:

fecto del Departamento se reconoce delincuente .. Esa misma confcsion la.Í'e:pite·en.t?das las ind:!gatorias, y solainc~t~ en la ~ue en los últimos d~assele recibió, PQr el señor Inspector de policía del Estado, recoge susp~"

'l:!:bl'as y expresa no haber estado -en el teatro de los hechos ni tomado par--tícipaci'on: alguna enellos. '. ." . '. . ,

,Si esa confesion lo señala como autor principal del acouteoiruierí-'t<;l' 6 si solosirve para aplicarle la peña á que se hace acreedor el .,delin--cuenté demenor categoría, bien porque se le considere como cómplice,.auxiliador' 6. encubridor de los delitos, no es cuestion que deba tratarse.....- , í-aqui, ' ,,".. ' . , .. ,- . - '.P¡;:ra los efectos legales basta saber que se ha confesado reo de undelito acroz, ,qlle no hay pru-eba :¡lguna que destruya esa confesion y que

'.:Ji\, {ütím:i. :i:stiverflcion que nace, en que trata de .amtlar lo' que ánteB ha bia'dicho, nada.vale contra eHa. confesion, • . , -

--lU". .- .. -

. ..A. 6110 hiere direetnmente la doctrina delsrí.iculo 1,il75.del Có-digo judicial, que dice: "~;iun individuo, ya sea en S11 doclnracion ind},:gatuna Q cuando riude su confesio n siuj nrame 11¡0, eoaccion, 1w.lago (, ¡¡lIJ<:Oliaza, eoufiesn algun hecho que le perjudique, so estará ít estn-couf'eaion.21unque despues niegue lo que confesó. , , ." .'

Es verdad que en sus iudegatorias él ha incurrido en contradiccio-nes notables, ya culpando Íii uno" individuos, ya {¡ otros, ya hablando dosindicados q\l~ no »xisr.cn, ya tergi n'l'sllllllo los hl'dIOS, ya haciendo' aso-veraciones notoriamente falsas. ESUI;l circuustaucias Huidas á su carác-ter de sindicado prueban que RU test ituo nio es inaeeptnhle en lo que ge.refiere á terceros, á quienes en manera nig'nna puede comprotuetér conMI dicho. . . .- Si la aseveración contradict.oria de un testigo á quien no puede.

t achárselo hIta de imparcialidády que por otra parte reune las condicio-11"'; de idoneidad apetecibles, no hueef«, "eg:ull el nrt.íeulo 1,699 del CÓ-.digo judicial, por mas honorahle que haya sido el testigo, con mayor rn-.!I:''') debe ser rechazada la de aquel que se eneul'lllrfl. en ignaldad de Cil'·-eun~ullleia!l y·que CIl vez de testigo fíglll':t ('0t'110 sindicado,

El carácter {~~I~el'ialy casi miste rioso <1<¡ este hornlir«, en quien seencuentra, coruo se ha visto, mía mezcla «oufusa de hechos que hacen nu-posible la delineacion exacta dc'su modo dé' ser, ha llevarlo no uua sinomuchas veces á mi alma la sospecha de. que .élnó tu vo una intervencion-direeta en la -ejeeucion de] crimen, y que su cngr;¡namic'ntoell 1:'1 suma-rio, donde ha desempeñadoun J!3 pel de primer órden, sirviendo unan "é.-ces de medio de averiguacion y otras de elemento de oscuridad y confu--siou, no ha sidosino -efecto de un designio providencial para evitar laimpunidad. . .

. Es. por estas consideraciones por lo que en la onurneraoion de losindicios que comprometen á los sindicados en este asunto, y que se ·ver-á.'111a8 adelante, hago abstención de su dicho contra.ellos, Ó alménoe noIeconcedo importal!cia., .' . . ,'.

Si sus afirmaciones tienen algun valor moral contra aquelloe-por •.que ~efiera hechos 'verosímiles que coinei~1:1l1-con loscomprobadony qneden 11. entender de algún modo su culpabilidad, es usunto éste de qu~pa''Iloá hablar. . . , .. ..,.. •. Mi intervencion personal enJas primeras averiguaciones del aeon-tecimiento y la marcha que éllas siguieron ontónces.ino fueron bastantesi. hacerme sospechar.gran cosa sobre este punto. -. .:. La manera 'excepcional COIl que se efectuó el hallazgo de las pie- .-za-sde vestido, hecho por él el cinco de diciembre, me inclinó á suponerlecomplicidad, peroél por sí 8010 nada decia contra los demas sindicados,:á. algunos de los cuales apénas vino á mencionar el' nueve de dicho mes.

El viaje efectuado el día diez por la noche á recoger las piezas quedecía le habian dado los asesinos enla nc che delcrímen, habría sido unaprueba ele gran peso contra estos, si aquellas hubieran sidohalladas, TIa.existencia de lo que pUl' él Ypor lostestigos se llamó nielo, yde ]3,S ramas

,-q.uele-habian servido para ocultarlas, deja en el.ánimo laduda de.si todooaquello era una de tantas inexactitudes como ha r6fel'idq,6 si, CUm(;)'I<ll,j~,

.Jas piezas se las había l~e.vadoalguno"sup(jl3ioioD,· per cierto.•:PP09 ,a.QCi'~.·table.:

,

1 1 '1 '¡ .ie l '\o '1 . 'J. ,: .a mauif: -stneion t;<I,:J.taL:H.J-t ue os c.::HJ¡et.o-g ronnt ..(~~.)entre ,tOS cna-•

.lcs onumeró UIJa:,! almendras do O~'<J,una, ,·,¡triiJél'fl V picz'::,~q d:; vestuariooue realmente hubia en 1<"1: '('<':';fl (1'.:~ 1,) "'0';-;11~~11::fI}~"-'\-'!~'¡'l':viene ,h °1)~{)hJúr 61 '-' J,. •...,n. ••. v ,. .•." '-"'•. ~•.•._L~' ,~. ~••..• ~._ •• -,~J.--:" '.0_ ••. _",~ .•., •••.• _? 'i "_'_ ,(t. ".' ,

que l:i~~.habiavisto ~ntt'~ en ella, 6 qr~een efecto presenció BU oxtr~~(;~~n,:Ó ·que'"r;uQ.o oir h.iblar sobre su p{~r(~lda. , .. .. . 1

.Pero todo est o no ü,-,])(' ~iglli:'(';\éi(l!! mal"l':lc1:¡contra los sindica-~o~, pnes debe no olvidarse C;U(-l cuando rlndi;) ~~1.c{)nfl';-;iun p~llt(/e.1~tl.ñ(Jr

Pl:cfecto~le~ Depnrcumeut oiro hizo ÍI]cnlJJaelon [,d.glln~á .D[u~~i~l,I¡~sc¿ba!:?el' mas COl11 prometido ..(h~todos, q q(l de ~lH en na:~~lan tcfuó «uando vin» ':í.sindicar ~ U1U:::'Ült!S individuos ÚJp,.:1t;;ncsno Re .t·ol1P~C"Yq~l~solo dcspuesde esto es (inando se 1m lljado en los ~:¡twilUY se eucucui.ran deteuídos ácausa del sumario.

, ' .~:8' llegado-el caso d~ l)l'pgnnt~lr: ¿'eq.nlJ~u~.J~'4nL',e!~~~e.ueU.elp08·t'e

cometieron en la noche del dos de diciem bre eu la casa dg la sonora Jua-" , . . . . ',' '.' , ." . '

na Eeheverl'iR., ,'",,1~ l '[7' 17 7 . _. 1 » '! ·0:'(' ;J 1 IV}'.. J:!.sS cua «r: ;.(J, (te 'Ina .necrioree, dice e..articuto ¿¡ i V. .ce , ve e ]go IH~'"

1, " '0' . d·na, 'tods, reumon o asooraeion (!{j t roso.mas T)O::-'}'80nn~;r:na.l\COTI1UlUt inspa-.ra cometer; ~:a jnntas, ya f·e.parn(~al"l)en~epero yip comun h.{·uB,:rdo, ..~'{lgU.ll.1 l' 'd l' 1 'l' - , úbl.ue tto.o e rtos cont.ra as pcrsouaeooontra as pl:Dplk;li.'~H~:s,~a:9:.p.~'L1-ca,s.,ó.privaaas/'·· ~'. . .." .. ' ~.- '(', '.~.:'. : "

. "" '1 . 1 1 oo' n' 1-] ,..J. . "¡:jI, como iemos vist o, nnv qu 0 n(:TD.J ~1r .quc .;&../ ame .t,f:C'O :lar no, ;0,1-.jo verdad en S\l' c(ijlfgf;iol1 y que los ltt"C:hí¡8 debieron ,ejcc'llt.fll::'e I{Ormasd d ,'. '1 o 1 . i . ". . d"' . e os'perS0nne., J.1a'.Jlu~1 C.O!,1~lCí.)l'fH·1('!~1a ..'{la c,rcuptf-~:u!('~nsque ro r-p,r.onel acontecimiento, es ,prc(;i~<)Á~,()lICbi\, (;ne df~PP el .momout O,.queenaquelln noche debieron {)1JrD.l'IjltU~.dc do:..;por-onas en lo ac.'::t'<.:i~lH1-lé:\t-:.l8'tuvieron que hacerlo oe corc un ~:1-Cll~:rJ~y.y,pr8~ri9Bel.J.{l~..if~:ÜP~"})l't,mciIi ... 11 (,,., 1 ' ' ,.ta.elQn p.a.J;a.....evur ..11electo la. Qrnp~;f:'p,~-:~·!·1....;cL?qu~ t,e":éony~};ga.en -ef)~P,

-preciso.cs convenir tambisn e,li la ,S'xis\e¡¡ci~\do 11~lacu,a(h,tll¡~'de, illalhé·chcires.. ,,':': , ': " ' r t Ó, "D.',

,",~. .Si 2;8í no fuera habrin Tl,erlF,!,.i~1li,c1 ;de' df<rcj~i'.r.('1711"10 ,qLH> los ddin·:cuentes quedebieron h;1J,ht3-'F~en.hl e:H'~~(}C..I;l :~cD_G:'aiTu~':n;~~,-:h~v:€l'rifl·dos de diciembre- opor la 11oche, 'oSP,l'('lUliGPP 8)l i.n~lra'1-3" ('.o~:i"ion ¡J ti ,grs'visirnos delitos en horas avaneadás <le la nocl.e, (te una manera ,lp¡(~l:¡¡-

• . .J-. ,~.. • .•

...mente.pasuo.t .. ' ">;~ ~.. I·· .. !- .::-~'I·';'· /" . ,.•,,~,.' ~ '.1 "1;'. " ., e . ,;r' .'0;.•• i: . .

• j'j:,. ~ , •. ~¡-,,\lOO.J~.•p:u,eJ~!,ne~,es~TI[\EJJ~:~JB un fl.' t;V~a0r~lJ~;de rri'~l)~('~.c!~.".<.l~~deque se de como .ovidonte.la e'bucl:i'i'CjlC¡¡lfi.O tre¡; pC:p';O!l:\,'¡PQl: lp_,mén,us

,eh la COP'8tl1l41ciol1 ¡le'<;seltechohorrorc-o.. : .:.', " ,':, .', " .e .. 1 . .1 l' l 1 ,. Q' •~ i', '._ ,. ometl_(~rnn&etaln·~lQlTtfn:ltr)s..uéll,t9~¡C.C! lprlil~·~T'~o.,c.:p~~~re~If~,~"·ciasdeaseainato corno persouasf'uoron.sncrificadas. '¡'.' .: h"" ~ .:;',,' t".·.~·o' -: ;', Comet.iéseiguuhnento el d,ditoodf.i: horidu» ~L\.lflo h.~rsQWI,f,~tin..n~í'ío.~.~'·~".~'; :..:-" .j .'" .,,' .. ' ..' . ,' .. '.~)~~.,".' I'~" .:::." -': ;.~r' ".:~~',..~'._.Y,.~ú1:thn,n.·rg~:i:lte)h.llbo la conrision.dol delito d~ r~.1:w.:~~,Vrnl~·!<m'7!f."c"~~to.s..dc·,aq~·"Gel~a·eusal'_.; ~,.;. ,. r », .•••. ¡•.•.."J "'I'~~';"'r--

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, -' l' . , 1[ '1 l' 1 ' ",' fU119bTtdtnO éXtl·(H1~t·eH. ~teleC1~(';lon (le (:1' ~~~otras, lllP{fhl:1.6 ti (,,1:CO,,0c'U-!\~.•tlo hubla (\:')~i.3l:¿an:eid(,.eoluplet:·qn<;.\nte eSBrumor, y se tcuian ya _datossi no contra lo:. ,Jin0.ic:lúo!":l nl m6nUA do 'hc-hos que evj-denciabanel.r?-1)(" v otro- en ,f", de t t "Cl,t,~;'''l'0'611"''',1 (¡uc ~.1"1(]"0ÍJCl t"Ul""U 1'])""0"-k .r, -J •• ,,' ~.•.•.. , ~!;..d ~••~ (.",.-v"- "",,' 'l,..., .• , '4. ••~._•. '-'*->-" Y b'-~ . L ,f# .L

t:.1nc!a -P~;p\'(':;.·d,.~~ol~:lrad:J'veril1inad~Jd indiciados, sí sl.e ¿L1~i··j17en:ú-_!a <:xli~b~:"cion de todos -l03 c1:=ttós qua. debieron tenerse en CU8nt~, al averlgual~SEJ~lhecho v t.uscirt'nn~uiuei~ú'4 - --

'1. '" • ".2<:i·o.aunque 11o em prcn~.3 .esa t-area., que hoy seria Í"9,li.til, ~o eg...tal·B. p\)i' dC111ng pn¡~':qll~;~~sicuicru un rcsúmeu c:~ todo aquello .1fO:pqrtJD,n--te <'i1íj hay en li .aetüncion y que deba. tenerse presente pá[c1 emitir uu-juicio 6 resol 1'(>1' las cuestiones qne entraua el expediente ... '. :".,,"

-~''- 'J °1' 7 e J " .1" 1• o • _ !~~lhu'e á .<.)H_I:J:l~;~~,~~'l' ~,~~ . 3.o.~.~ ,e.;pa~1(;10~rCD,;::;Ia~,por 913 p~...rrtoe agl·lm.enson'~ J...•T!.18l~l~rrl:~;isne», ~Jose ~~la.rl:~.\T illa V. Y J orgc LH~&lJ.\xnngo, it la cu-vl aco~11pn1j::tr(.}n un cr0~ris d\ll terreno. dende se efectuóel hallazac el" Iarona -:-'1·1·...r-..:r'¡-'-i"'+O r\Qln,Q'lA";-- ('Ii') sus inm ...\A·"I""···';O~;ñR com-v . t.A.'j. , •.••..•t.~ 1'l,.•• (..!I l""'~i.l{) ...••.JTc:l~K,L ':-1\t .•.•."-( ••_~oJ ••.\','--'''' l.,'''- •.•••.~~1.tau.l !1~~~." •.••

prendiendo t:H!,!'(1 <.'~t~~¡~~s('n~'8H fle la SCJ.loTP. Echcyel'ri y do J\Iánüel A.~.n..cebar; V un cuadro ód-talle ,hJ interior de aquella, con la indicaéirin dola S'ittUleÍolj de lo'~'muebles, J:;: La importrmcia deese e'i'ó~~lliR__Y¡dcl.é~1t<1I'Ó.vino á -dhnriin"nil'. d~\sd< qn8 se COU1Dl'oh6 "quoGaleano mintió EhJ()que 'dijo rvlativo nl D:tlia~~;c!~'Il oy yó ..!{p ~een6-uc.::ti'o otl"fl-·s1gnin/úló.ihu.aue '1'" (~I" lP"':¡;l'OP Ia I-)",'Y~:'lic'I';11 eut re ~~,;(1(.1 Ins t.~~'·'·••(Í citadas (i""ll'!''j...'a·· .~'i v ~c. _':1 --"'\..1,1. "'~' .ce •.•... .I.•.•._~ .(,~ \.._.' "--,., ••••••• ~.,,' v •.".J,;t.J V ,~,--,-•.~•..•\:I L_ !tj.

.' . Constun á ln~J'f0¡i0~~52; 5ü~C, 1.0,5 á 15; so á.3·~,C~{L~;lQs·rccó..nocirnientos pr·a~t:.(.'·n.dos en las lH'1~idY~8¿le los cadáveresy en 01 niño :Thía,..uucl f\ 1\1-0"1]'0,,,'0 " .. ' ,. -'¡ •

:..<.0 _. J....-, a,.¡. J.-~J.l\'q·o . ~ . . .

.. Se detnl'la en el1os1á manera eomofnerm1 hall:.J:f!.os los cauáy'crl:ileú la mañana del t~~C;J,dcIos, cunles nr¡t)~solo ha'bin., ~j.lomovido, Omito.esa '1,Un)(ll'tante -elcsr.:rh)(,10n; I){)rtQlC el cuadro cue se i6oni~)aíHtal·sunl-it ..

•.•• " _J.' .1 • ..•. ~ ".J.

rlo 1'11 l"c;.C'n1.p!nza, muy t~~Cü. . .' .'. . ."' '. '. . o'""' •. -

. A los fullos lG,.17, 2!(7 á 279, C~~"ó~,~seh~nalaconstanciade unreeqno('ir!?jr:;;ütü p'1i~·).~)ti{'}lClpen la' casa del aconteeitñi¿)":nto' él dia trés,'pórIo« pe,'itos P~',;torRumí rez r Alojandro Ga'Vil'i~l,y otro mas tarde por 193mismos ·",1\'"J''''1''1,)'140J'''' . , - ,,' -'_ l' .1.'._( __ l~_, '-- (~. .

So r-ncuont ¡'BU á f,l liog 3N, C. 3,0, y':3'7, e: 5.°;105: <."el'tificac1l)8 de 'los8e~on3::¡Jef{:fl\íui1H:ip:ili dl'l distrito é In~~r:Dctor:de"polie1a"-delE~t{i;d(),.so ..,brela e"'¡s! eucia de 'Uúú,,'ó' álrñohitc1a'>J ei{l:t éámiÍ ele 5in'.foi'iano en' la má-·ñal~a._at~rtrc~do':clieiebuub.:." ',~ '. '.=, _.~ -,

- El análisis <piírn'it!.b de las- 'm:Ül,Cn:"i3 ·hnUida~1.·eil ~n;lgiIUa8'-pieza~"doJoB vestidos de los "ih,¡i.C:Hlos «on las cOI1clni11'one!d.quo tlegaron 10í;¡pe-rito", ~Jencucnt.ta Ú folios 307 y 308, C. 3,~ Do esas conclueionea hagomención e"pel'ial al o(,n})arme do cada uno- 'do los sindicados yde lasPruebas cae: los' cúti.i':1l'OL':cten. ,,'.'1- ••

~ ~ .. Lnsopiniouus y conjeturas do los mismos p~l'itog que practicarou.el ,a.n6.1isisquj~üco, qllOpueden .resumiree \'en la exietencin 'de un crimencomplexo, ejecuturlo por m:13 de un individuo .con preraeditnoion y coumalicia", 80 veuá folios 34'(.:1 ?49, ;00..3.° . '. ' . ;,' -

De' foj~~ 3J.O á 3-12' del mismo cu:úlemo8e-hallat3} sxposicion.mé-dico lega¡~e¡ªo,?tor Manuel V.de,La_l~oeho. á que me he referido ántes,

.. . Ln diiigBUúÍílo de inspcccicn practicada con.Evnristo Galeano en~~~~la.oa~f,l·1cL {~'Ü~1€ncon ~l. ?1'j('t9.' de -CluF-.:~?~i\láse~~,.p~nto.donde es-- . . -

.... '- -

-bball enterrados los galltes de que habia hablado en una desus decla-raciones, inspeccion en _que no pudo hacer ese señalamiento, puesex-pres'6 no haberse fijado en el punto en que los había enterrado Francia-eo Pana, se halla {L folios 203 del mencionado cuaderno .. En esa misma.diligencia se dice: "Se .hallaron solamente colgados en una vara. en elcostado norte de la casa, unos trapos que, segun se informó al iufrascri-to (Inspector de policía de Aguacatal), se hallaban mojados y juntos en

"la orilla de la alberca ó poceta del agua, el dia que se descubrió el suce-so, y que parece que alguno los colocó allí para que se secaran." ,

. Lo relativo al -recollocimiento practicado el día seis de diciern-bro del punto donde fueron halladas las piezas de vestuario por Eva-l'isto Galeano en la tarde del cinco, se encuentra al folio 288 del mismocuaderno. '

Al folio 224 de éste !lO ve la lista de los efectos que se sacaron deIa casa de las víctimas el dia tres. En los folios 20 á 22,34 á 36, 46 &' delcuaderno 1.° se halla la constancia' de los que' encontró Evaristo Galea-no, Iomlamc qne la prueba sobre identidad de ellos efectos . ..il los fo-lios 201 y 202 del cuaderno 3.° se vé el inventario de 108 efectos halla.dos en la casa el dia del suceso, La constancia de los que debla haberen ella ántes del crÍmen está á folios 33 y 34, cuaderno 2.0,y 87 á 9'!,Clla,-derno 3.° I..•ado los que echaron ménos en vista de ese inventario MarcoA. Arcila y la &efióra Ana J'oaquinaÁlvarce, se halla á folios 202, ~06y 280, cuaderno 3.° I..•os.objetos que entregó Daniel Escobar despnes de·la- confesion, estan enumerados y avaluados.de folios 106 á 108 del cua-derno 2.° Y finalmente los' ql1Q~~e pasaron con el sumario al J)llzgado

_constan en los folios 214 y 215 del cunderno 4.° - , --_ . _'Todo lo que se relaciona con las costum hl es de la familia asesinada, '.y quefué preciso conocer, se.encueut.ra á folios 6 y 7, cuaderno 1.°,4,10,33,34,55, cuaderno 2.°; 876.94, '287,cuaderno 3.° y 8 Y 18, cuaderno 4.0.. . Fué preciso saber tambien el grado de fortuna de la farnilia de

la senara Eohcverri y las opiniones que sobre el particular eran mas ad--, mitídas, En consecueucía se vino (L conocer que en la casa hahia efectos_',y alhajas de algunvalor, q ue pocos dius ántos del suceso se le habia -vis-, to dinero á uno de sus miembros, que el mismo dia dos dijo la idiota.Teres~ en la vecindad que "eu la casa habian quedado cont.ando plata"esa tarde, que 'era muy general Ia fama ele riqueza de la 'señora. Echeve-

. -rri y de que sé habia encontrado un, entierro. Las constancias sobre es-,to pueden verse, entre otros folios, en lossignientes: 3,8, 10,11, 15,:l3Y p4;, cuaderno 2.°, B-7á 94, 208 Y :rOl, cuaderno 3.°

-' De fojas 352 á 354 del cuaderno 3.0, hay co~staneia .'le que en tel .'tránsito de la casa 'de la señora Echeverri áeste ciudad.iel dia tres de di.

: .ciembre, ninguno de los conductores de los cadáveres se impregnó con.la sangre que estos arrojaban. ' , - .

. Do algunas otras diligencias y hechos.áveriguarlospudiera ha--X.Cl' :nieilcion,· pel'o, como líe dicho arriba, creoesto-inútil •

• . --'---.' .' Túvose al pririeipio grandeesperanza dpqne'el niñoManuel _~;"'E8co-bar, 'UUO 'do 10'8 tres 'úllico-ilqu~'~n aquella-noche'quedin'o1U -eou ,•••¡~,

-,-9~, .dn, hiciera irn portnntes revelaciones que pudieras -sert ir paro. la 11ven-g.uacion de 1:t verdad. - -

. - _De'sgmciadamcnta BUS relncioues son incongruentes "1 contradic-torias, de donde ha venido ~ resultar qnc su testimonio nadaómuy po-co puede servir para indicar á los héroes fat!di(J9s~de aquella horrero-!la jornada. , _ . , ~

Copio en segl1ioa la parte respectiva .de las declaraciones de .laapersonas que con él se han entendido, pam que se juzgue del mérito deBUS asert(l~,' . ' . .

_La señora Ana Joaquina Álvarez dice: "que"la declarante sí ha con-versado con el niño dicho, al cual le preguntó si .~;eiban para la monta-ñ:t y que él le contestó afirmativamente, pero que no había estribos pOI'-que 'los hubiim cortado de la silla; que cntónees la expoheute le interro-gC> qnc'coll '1ué y qnién los habia cortado y 61 le hnbia dicho, queunhombre' con nn cuchillo y que se los habla llevado para la man~a; queaderuns le preguntó, §i eso habia sido con vela 6 en el oscuro y él le di-jo que en 'el oscuro; .que no le ha querido hacer otras .pregu11taspor-qne comprende que 110le gusta que se le haga ninguna pregunta, y pordejar á ver si despnesre'cuerda mejor los hechos" (33 y &1,cuaderno 2.°).

__La- señorita Jiíana .Iosefa Meza refiere lo siguiente: "El juévcs-de la semana pasadá( 4 de diciembre) estuve en la casa dc la señora Ger-t!'iídis1\Iolina, donde se encuentra el niño Manuel Salvador, hijo de la se-ñora _Vüginia, al cual le hice varias preguntas y 61 me contestó que'Ginia. (Sil mnuiá}, era la que habia abierto la puerta esa noche, y le pr~'gunté quién habia, ido á ,s~\ casa es~ 1100hey me dijo qne..treshon~bres.Luego le pregunte que SI loan vestidos de blanco y me dIJO que no, quede negro, Le preg'mté. que si habían abierto la. caja y él me dijo que ya.Foriano habia muerto y entónces dieron unos golpes en la caja. En se-guilla le preguuté quién habia colocado á Sinforiano sobre su papáy .élme dijo q"e Foriano se habia caldo de la cama y se había arrimado Íi.Ton 6 BU papá (no recuerdo como me-dijo). Á.ntes le había preguntadosi habían encenclido vela y contestó nega.tivamente; Le pregunté si la.plata de Ginia se la hablan llevado y me dijo que sí. Le pregunté si ha-.bian matado á su hermano con cuchillo y dijo que n6, que con una hi-.chs, Le pregunté si Ginia y Foriano gritaban YJespondió afirmati-.vameute, Lé pregunté después por .Oita (doña J'uane) y me contestéextremeeiélldose que no le hablara de eso que despues me contaría; 'yaunque le hice algunas otras prc'guntas en el mismo sentido no pudeobtener-oontest.acion. Pregnntada para que exprese lo que juzg6 acerca.del grado de facultades y crédito qne pueda darse á la relacion del-ni-ño Mannel Salvador, expuso: el niño me pareció de inteligencia. peroobservé qne· en presencia de otras personas referia algunos hechos deuna manera distinta de C0ll.IO me los babia referid(> á mi; por lo quejuzgo, que no es de gran crédito su relacionf.'siendo, sin embargo, de ad-vert ir qne al nino se le molestó con muchas pregun.tas,- y que al fin, talvez de aburrido, impresionado como estaba, no ·sabia..!o que eontesca-bao Debo agregar que también le pregunté qnién le di6 el golpe que te--nia en el brazo yme.concesc6 que Foriano. Tambicn le pregunté si esosRoñares eran negros r me contestó que nó, (iue orau blancos" (36 J 3';ouaderno 2.°).

, . ,. - '.

l\Err:1' Antoilía:Mejítl; que fué quien l'€erh¡ó í1 dos de loeniño/l',ClUlllQOfueron, sncadoa de. la casa, refiere "que euand o la que d¡;t-lill'[l'

',cogi6 el niño :rJ'alluel Salvador por el brazo ~ste lé pidió que no le last.i-mara y habiéndolo pre;;nlltado qué knia,'coutest6: Sinforiano qae me<!ip con la hacha; que r1ic:iloniño estaba: desnudo, con lit:';'espaldas He-DUS de sangre y U) ny frio" ('17, cuaderno :3,O)~ 'o

: ,Gortr'ldis TIloli;la dice: "que el niño mayor, Ilamado.Manuc-l Sal:vúdor, es hijo de I\IelitOD y que mm cuando la"exponente le ha i,u"¡:ldomuchoj.con el oariño.mas g'i'an(lc, para "qU(T le cuente algo. de lo ocurri-do, la noche .dcl auceso, solo contesta: ,q ue Sinforiauo le pegó, pe'ro des'pues.do manifestar lllolt'ftia por la pregunta que se.Io hace, y que mn-chas veces dice-que no le pregunte eso Ó 'lIle 110 le hable, qué el niñitoen cuestionmaniflesta tenerle horror á la casa Yllo quiere venir á ella'por .ningun pretexto. qnc la tt'stigo atribuyo todo 'esto, ¡1que el niñitocorno .que está muy enfermo" (2'79 y 280, cuaderno 3.°). ,. ',.' El diez y seis do diciembre se introdujo en una de las piezas do.'\a cárcelde esta ciudad con aJgmios de 811S parieiJtes y,en presencia devarios ompleados, al nifio cit.ndo. "~.ncesivanlente·.He hizo oritru r en el l» áDanier:Escob~.ll',.á quien el niñoreconoció por 8\1', nombl'p:á N:lli1.w1AEscobar, á quien también. reconoció IInnqne no porr-u 1tonibl'c 'y d.-l cualJué acariciado con ménos embarazo que por Dai1Í'oJ: á EV:Jristo 'Galea~no, á-cuyavista el niñito se inmutó y come-uzo á Hornrdcmostrando en;:todojnarcada inquietud: :1 F'raucisco Farra (blanco), con el cual tam-biense manifestó esquivo sin uircvorso á , mirarlo ni á pasar donde a.;Pe -Daniel-y Manuel A. ~s()obar so dejó acaaicinr y aun permitió que locargasen; 'ulmqne tnmbien estuvo ,eRqllivo con ellos; Preguntado en ,,,'e-,vúida sobrecnjil dolos dos Escobares habia nú¡t¡¡¡]o á Sinfioriano, Virogiqi:l. y.lu Sf~loi'a: J uana 'Eohavon-i, 'dijo en, 'I'OZ bl1j¡l que Daniel 110.lia-pía sido, ,s.éñ:;l1:mdo desnues á :lUann~ Antonio?" (1 Q3;.cuaderno 3:°): ,

Paso Y:1-iÍ, relacionar la nnturalozado las ¡5rúe15usque exhibe el:siH11a~¡o contra cada uno de lóg'sinc1iAc1oR, Estas so red ucen {¡, confesic--nefl re,nelicIas'p:oralgimos de ellos y á indicios derivados de' exposir-io-"u'es de te~tiº'cis, do hechos averiguados enla instruccion y de asevera-'cienes en' l~s"indagatorias. ' : ' , ,. :" ". ' ',', '". POl: r~gl:i gener::1, la naturaloza de la prueba fundadaen '1&cO]1'-lesiou es-concluyente contri>, el confesante; pues Tal'OiI son los ejemplos.en q\~e un hombre B8 ha reconcido cnlpnble i1l' nn dl'lito siendo inocente.., No aucede ]0 propio respecto d~ los indicios. Por' su uaturalezn,'qs~aprueba es.súmameutodélk-ada' y es preciso por lo mismo obrar conmucho tino al calificurla él] un caso dado, ' ' .s , '.' '" "

.:' 'Pa;'; ll!~~-or'c1a;'il1ac1 procurnré formar sh cargo it ca,hllllo deJos ~indicados,so.¡)al'adamente; Con las apreciaciones que 'eatime necesa-,iillS respecto de los hechos comprobados. '. ,. .

,.DANIEL 'ESCúJ3AR, TAl,culpabilidad de esto individuo .está plena-

~.•\~ute evidénciada.con BUSconfesiones y con la entreg!l qnc hizo do loso,l-¡; r-t.os ([11° oxt rxjo tlr, 1·'1 casa le UQ0-"l-0 t1¡·1 suceso . " .'lJ'''''' '. '-- 1".."Ll ", .. "~'. ~~ •••, _''\.\ ,\1 •.. _,' ".~_ """"~h'_~

,

...c-~5-.' !'sto m. t:Ti~Qla tarea ds entrar ti analiear los indicios tt ne e-XTtl-

.t~mcontra él, concretándome únicamente á enumerar los principales !lÍl1necesidad de comentarios. '.' "

1.0 El dia dos de diciembre' estuvo desde temprano en la elll!a'le la señora Echeverri, hasta la oración, en que sefué clO'n Sinforianon.donde Joaquin Me~a á solicitar Ull peon.y una' best ia que aquel nec6~sltaba.para Jos trabajos de la caes que edifleabaDe donde l\Iczicl palla-ron·f\.l~ casa de Ma~lllel A. Escobar á. t.rataraobre el m¡nIll~,asuuvo yaoerca de un negocIo reservado, que parece IH~runa excavaciou practl-cada-en la casa del doctor Victoriano Meza: ,. . 2.0 Al separarse de Sinforiauo y de 'Mauuel A. Escobar dice hilobcrse dirigirlo al Saladito donde su concubina, de cuya puerta se devol-vié, pues' no quiso tocar en ella porque 11·0 lo oyeran l08 VeCÜW8j' .

. . ;3.0 De esta casa siguió, por las playas del río, para la Imya,.en 19.cual ta~mjJocoquiso tocar po rq ue á su madre· dizque no la gusta que letoquen después de las ocho (serian las diez) y decidió pernoctar dondeAgI\8~~n :M:OJ:;l, á donde llegó como á media noche, y por primera. VQZ

durmió en aquella caRaj. '4.° En la mañana del tres se VÍ!10 para esta ciudad, donde dice

haber sabido el suceso, y re~"csó ¡)OCO i1espues' para AguaéataJ. En eltránaito di6 alcance á Dím;tS Bolívar y á Dolóres Velásques, en presencia~e las 'cuales hizo ostentacion de tener diuero.iy aun regaló un peBo ~ laprirnera. 1.•1\ Veláspue:z., que conocia sus eílCllSOSrecursos, extrañé esto;. 5.0 Llegó en seguida adonde Bárbara Molina, á quien ltrc1ijo qn~

8e estaba muriendo, y al hablarle ésta sobre la muerte de Meliton Eseo-bar observó que no hada caso, y le pareció p~eocupadocon algo q~le lemolestaba; . ,- , . . ' .' ,.; , '. 6.0 Si~llÍ6 de ~}ial l.ngar del suceso, donde ,hizo notar, cuando 118

..vestia el cadáver deSmforlano, la-falta de unos pantalone3 de éste: to-m6 participauion en el arreglo de las parihuelas, ayud6 á conducir los ca-dáveres, segun dice, y luego intervino en los preparativos de la inhu-maciou hasta que nevaron aquellos al cementerio; .

. 7.0 En el mismo día eú--esta ciudád se le vieron mil'adas, hisemanifestaciones y <lió paliOS,..que Infundieron sospechas en algunos con-tra él; .' ' . '.

. 8.0 El viernes, cinco do diciembre, regaló á. :pimas Bolívar un PIL-1\01011 de ~erino con. ml\pcha~ d6,1'~~gre. Ese pañolou lo h:J:b~~compra-

.do el domingo antertor a Froilano VIlla, y Be observó elle día que no te-. nia manchaade ninguna. especie; . . . ',.

9.°' Son numerosas y notables las fals.edades y oontradiccioues 6Rque incurre al hablar sobre el pañolón en referencia: ya dice flue lo re:gal6 el mismo dis de la compra: ya que no 16 observó ninguna coila I~Bolívar sobre las manchas,-siondo esto inexacto: ya que en la Prefec-tura fué donde vió esas manohas por primera vez &; como numerosas' la.versiones contradictorias sobre el motivo que lo 'movió á no ir.á BU ca-

- ea en la noche del dos ; ' . .10.' Al explicar la procedencia de varias sumas que se vieroa en 'BU

poder en los p~ilUerol! di as de la :;,-,-eriguacion, se ve en. mil oo?ilict08faoela á afirmllCIOne8 que oontradloe con algunas manlfestacíenes qneán~habla hecho; . '

Il~ ,--"'G-~

. "J J .~ri' . ¡it,. c.n.~rifuüJ'~n hallados tinos p~l1t!ll~l1cfli~ngrtn~rCl~!¡'.dO~td, (ha nueve du elicicmbro. 1!:n los momentos delhallazgo Re lévió pall'decer cambiar c1e colores, silbar, recostarse.eoutra la. pared; encoger-unal>ierh~ y tratar ele esqui vui' las miradas de todos; . .:. .~, ..

. 12. El· mismo (11aal ser examinado en el teatro de Ios hechosáobro la procedenciu de la sangre de esos pantalones, principió pOI' atri- 'l'nil:la; {~"':R' hel'i(~a ca.u.sn,~hm~ una pierna dos meses ál?te's, y ~o~Í1?Ia

-exhibieion de la l;'''''¡;¡'IZ diese a entender la fulsodud de esa.explioaeion,sin exigencia de nadie y compren-liendo que' aquella: se desechaba por,los circulJstantes, atriIJll,¡:6 fa sanrrro á la hemorragia nasal: sus contra.diooiones y la situación' 'de algu!l~srnandlas fueron bastantes para noadmitir tampoco esta cxplicac.iol];, '.' ., . , .: ,

13. 'En ese mismo cxámon inmuTe en otras 'contradicciones no'.tnbles, al ser ptegnntac10 sobre otros puntos de que ya habiáhablado;

'. " 14. Mas tarde confiesa ser suyos ,los pantalonos.Tds quealaierlir-selos se observa que le sirven, y aunque niega haberlos tenido' ''pí.lestú!fen la tarde 'deldos, hay teRtigo qne 'casi asegura 16 contrarfó.; , .' .. '

'15. Al ser conducido '<.leltentro de los .heohos se le 0Y9 de.eir:· "~ihubiera'sido para irme ya lo hubierahecho, pues hartio tiempo, me halldado" ' , .. , '. '. ,':" .: , '. .- '.. - . . .' ....., " • ie. ;t:.as.manch~s .el?l pafío!0n l de los pa'qtalones.fwiroll declárá'-'ans de saJlgre en el análisis qnmnco ti qne fueron sometIdas;. ,., ~

, . ,.17. En la cárcel de esta ciudad preguntó 1111 día al señor Iúspec-jor: de policía del Estado sobre el ne,r¡oGio de ,Aguctdatal, y éste le dij oque todo estaba desoubierto. En seguida 16 interrog6sobI:e el motivo desu inc,:.nminicMion, y poco despues le ngreg'ó.' aludiendoá ella: "si es-porq,tle confiese, no hay 11i riesgo"; . '" " ..' ,.'-" ' ..

.; . '18. Fh alm'cn te, se lleg6 á comprobar 'de' una lii~ri-e~'a,e.vid?ntoque en ~~I.tárdcdel veintiocho denoviembra invitó á'FI'~ncis'c9 BiYI1t'f¡' ..fiará que en Iá noche de ese clia'fneran á una de Iasoasas dtila 'señÓl:~;J'uaila Éche"'e1'¡;i6 Luis Mái'ÍaLoncloño á robar, .mntnndo primero á 'ésotos y á sus familias. Para ello fOl'IPc6, ,el plan y' dijo ti .Bonettcdo 10- que.

, debian hacerpara llevarlo á efecto. : ' ., " I, '. " ", . . ,. '

- No enumero otros indicios. de menor -significacion,' por temoi.'dú·:aparecer demasiado difuso; pues, como se comprende, aun esta relaeíonés' in útil. < •• ',,' :,' ." - '

•, .

• -~_ ... ..' ....:.~1•• ', .•...-.••..:'O"~ ,;=- ","'" . - ..

•. . EVARrt;TO \:hr.EANo.ComO"he diohósn otra' parte,' Evrtl;isto GlÍ;~leano ha confesado su parricípacíon en los' heclros. Es' ésid; ~pues,bas.:~a<ilteante la lej pura, dar por cierta, sucul pabilidad. :" Pero flimgue esto sea así, es preciso fórrnar ~iquie'ra:Üll<t'sínté!iilfde los' h,echos ptoDados:dollrelaciOll á él yde lo que ha ditíBó -t,ÍfÍ sü!;!éx•.:••••.. •• o' ,_ _ _ • _ , • • '. '. ••• , _ •• '. ~ .'. ~,.

p'()S1('lO.~f!S: . ~. .' . " .'. " , ".,,' ., .' , ' . ,. - '1. ;\Su iñcorporacion en 'el sumario la hac€i COI1l1lia'::ts~vefáéionfMb-::'Fhé'ól qüiorí halló "las :pieZatf de vest'nado"de hi'c'a's:i7dl;H~rBéño;1'~ lj;94.~Y?lTi, ~'.l~~e\el~co.nt~·aban:jrlllto .á la, de' MmiU(~l',iY:' '~~¿'obat',~éu'eI(l~rco qUl'J d1V1de'los terrenos dé Ángell,biidoño y-Joa1'j,um Rave(Mg ~h!.9Ó;diadema 3.°). .. ..... -- .:" ,"'" '.

, '~EstÓ'se e>jd'encla con las declaraciones de JO'áquit¡:, GÓ¡liei': y ..Jn:m:-,Francisco .Alvaroz, qne pasaron la tardo del hall a7:go por e'$é''rtf¡it~'

•

stn ~b.~Gry'al'nada (3;},a? C\;a;1m:I101.0, JO::;cuaderno 3h. de~l.'pomll"ceuo :Mollllf\ y <1f)1\lanucl nfal'll1.A ngcl, que lo oncont r.n-on dOlHte se h¡¡"Haba l:i topa (30, 35,;1ü, cuaderno 2.°); del niño 1\'l-:lrtiuiuno Escobar, á.quien llamó para mostrársnl« (21 y 22,l'narlcl'llo 2."); de HO$CIHla Oehoa,'áquieii confesó h»berla hallado (71, cuaderno 2.'\; Y de Hafael Onrcín, ÍL .quien cita como compañero dé.r oaquiu G6mez enel hallazgo de la.ropu,

.. quo no pasó porese punto nqucll., t arde (45, elll\c1l.'nlO 2.~); .','.' 2.0 r'o!' lo quo I{osench Ochoa-observó la tarile lIdmismo diacinco,

pues vió que .Galonuo abandonó ls vía que 10 conducin á su casa, . des-v iáudose húciu la de .1:1 sefíora Eehevcrri por la orilla de, un cerco, ,·por'donde no h:¡¡y ~'anlÍno,ví;!'por donde se halló. In ropa, In testigo sospe-chó que Galeano era uuodcIos asesinos 6 qua sabia el nombre do estos("il., cundcruo 2.0). . -.

_ '. 'Segull las observaciones que h izo Manuel María Állg('l, el corn-pañero de N epomúeeno Molinu, cuando hallaron á Galenno junto Ú 11\ropa" Si t?",tígO-.D",' gura ql:e «ru necesario aproximarse al cerco panlverla (35 y :3U, cuademo 2.")., . '.' '- ,. , f Contrarian estas opiuionesIas d6 los -peritos qne l"( conocieronel punto el dia seis y las de los que levantaron el p]:W(l de aquella loca-lidad; IJUCt. unos "i otros estan de acuerdo él afirmar que la ropa esta-ba mal e¡3cpÍ,¡üidn,y 110 era 'difícil verla del camino quepasu por allícerea (78 y lO, 288,eúirderno il,o); . . . ".

" 3.° .Ant es de vérsele iigtíhlrotra vez en el sumario r despueadel hallazgo l!t; la ropa, estuvo haciendo varias reluciones sobre el auce-!;loá a.lguilOs "crnpleudos de Aguacatal, las cuales por extravagantes y.cont.r adictoriae no so creyeron. l1igl)aS de fe ni se consideró necesariodarles asilo enla instruccion. Una de-ellas, quc le oí yo, consistia en ha-cer fignrar á Hermeucgildo :Upegni y á nueve llegrós de Belén cómo au-'tares del hecho; . ",, .

. ' 1:.0 I.Jegll el nueve de diciembre, dia en qne hace al seíior Pre-fecto del. Depnrt.amento varias confesiones, ", ,

.. En el .respectivo certificado' expedido por dicho empleado constaq ue Gale:1llQ expresó ClU!Jla noche del SIlCCf'O 1\lanuel A. Escobar y Fran-eiseo Parra- habían ido á la casa de la 'señora Echeverri: aseguró primeroque Parra era el que babia teca do á la puert a,y luego que Escobar, á ~o•.licitar unas medicinas, y una H'Z queles fué abierta. ésta por In señoraVil'gillia, le dil'l'oú 'un' garrotazoj en segllida á Slnforiano.xlespues á do-ña Ju:ma,.á con tiu uucion á la cocinera y por último á Teresa. No meu-cionó á Meliton, Luego les dieron á todos con el hacha; y á él (Galea,n o}, lo dojui-on de espía. De Daniel dijo que no habia estado allí, perola coutostacion que dió á este respecto lc.plú;eció·sospechosa al señor.Pr·efectQ.La rojeahallada por él el dia cinco dizque se In. mandó Ma.·nuclA, con un niño para que la escondiera, 10 que hizo (1 á 5, C. ~.O)•., . ~. , ' - . . ....,

'. . En la indagatoria que rindió en ese mismo -,dia señala. eomo asésinosáM<Jnuel Á. y Daniel Escobar, áJosé María T\estrepo,á.RaK'l.clGa.vil'ia,á. ..José .María,: Rafael.y ManuelJ' ararnillo, á Manuel Tórres, á.Franóiaco. .Estrada, a Francisco Parra y tí Pedro Pablo Escobar, qu« ;Jann~l.lv,e,di-,«e. Habla de haber encontrado á cuatro de estos esa noche cuando iba por-ltu0e,taha\l~s-6,o.o.lid9 Paoho :Ruíz¡ :y scñala'"á DanielEscobar como ~tq,UQ.. .

-~n~-'0,. , ,

¡••ir: lWlt6 á todes.dieiendo que ~8te entró con trel; máJ,prete:it&ndo buscarunas uie dieinas. R elaciona los objetos que Re extrajeron, entre ellos do.sortijas, 1IllR estribera, varias piezas de vestido y la mitad de la pllltl~que doña Juana tenia en la caja y en una alcancía (109 á 112, C. 3.°).

En la del dis siguiente dice que Daniel entró á la casa acom-pafillo'1o de Franciseo Parra y de José 1YIul'ía J'aramillo: habla del vestidoque llevó Danid,'l'cñalundo como los pantalones que tenia puestos losque le fueron hallados en el-allunuuiiento : indicando una de las cachipo-rrcs que fueron encontradasen el mismo allanamiento, dice que Daniella Ilevóesa noche, pero qua filé con un uerraquillo de la misma casa de laseñora Eche verri con lo que dió el primer golpe: describe el vestido docada uno de 'los asesinos: refiere que al día siguiente cuando traian los ea-dáveres ae le acercó Manuel A. Escobar á decirle que no cargara.pnes {;1buscaba quien lo reemplazara: cuenta que por la noche al 'regreso se en:centró con Manuel A. y con Daniel Escobnry éste lo mandó á colocar l~ropa de que se ha hecho mérito, á la orilla del terrenóde Manuel A., :f Ili.

renglon seguido aclara que fué éste quien se la, mandó con un niño para.que la 'ocultara, En seguida manifiesta que á él le dieron dos camisaa,"tila ruana y un sombrero- 108 que ocultó en un cerco abajo de la casa .deJoaquin Meza. 'Durante la declaracion y estando presentes los dOBsindi- .~d"g que llevan el nombre de Francisco Parra, '8enaló al conocido conel apodo de negro, diciendo ser ese unode los asesinos . .Á continuacion

. dic("que la sangre que se halló en SU8 vestidos provino de la que arrojó'doi'i'a Juana aquella. noche, }JUesen ella se le impregnaron; Finalmente,comí) en la indagatoria del nueve.hsbia dado á entender que no presencióla disoeraiou de les asesinos, ya en ésta sabe como se efectuó (113 IÍ11" l' '3 0) . . ..4, v. . . ~.". , -, . . .

" En la de ~iez y aeis de diciembre dice que los trapos eneangrenta--dos .que se hallarOlf donde Santiago Galeano 108 recibió- de Daniel "paraecharlos á ho[¡(w", pero que los llevó para su casa y su hermano Santia-go los recogió. Manífiesta que en Aguacatal no confesó lo que sabia por_la'mala cara <¡.uele.~icieronJ)aniel y"!'lanuél A. ~efiere que FranciscoParra (negro] le dIJO que los eompaneros le hablan pagadoplata'; queFI"IUlciBeoParra (blanco), agrega, y Santiago Galeano no fueron de 108del asesinato, pero 'que Emigdio Galeano sí (191 Y 192, C. 3.°). .

En'la dCI veintinueve de diciembre repite que él no sirvió sino comoespía, Culpa en ésta 'á Manuel .1\. y .Daniel Escobar, .á Francisco 1':1"ITa (blanco) y úEmigdio Oaleano. Interrogado sobr,e las contradiccionesén que incurre -respecto de los asesinos, las explica' con el 'compuesto que~izqu~' hicieron Munuel A. y Daniel rara. que no dijera que habían sidoeUos smo otros, lo cual,. expresa, .le dijeron- cuando estaban en la casa del~ señora Eeheverri.; L.~ego entr~ á repetir .he.chos que pabia aseguradoántü{l y cn los cuales incide en vanas contradicciones (76'a 80, C. 4.°). ..'.-: '. E,ñ la ~clveill;ticuatro' de enero eOD1,Prom.ete.á Manuel A: y Da-. _.

me! Escobar, a F ranCI8COParra (blanco) y a Emigdio Galeano: de estos,solo Daniel y.ParJ:a. dizque entraron y él se q?edó de espía en lapuertade 'trancas .:Dice que el órdcn en que mataron a las personas de la casa fuóéste: la señora "virginia, 'Sinforiano, Melitou;Manal1a la cocinera, 'I'ere-:~ \it Criada'ydóña ,haua. ldnllifie~a que al retirarse dt.lqMUa cua.:

uftl~ 11l>l'Üh~6.13iiUhermeno '~¡Hlti!lgo,y ttl pssarnn portillo sebaj'Ó; re:ventáudose las naricesr '!.ue hizo esta manifestaciou á Damiana Gómes,la mujer oj} Santiago, para que ella, al ver la sangre de sus vestidos, nofuera á creer que habia estado 'dolld~doña Juana, En esa mismainda-gatori~ vuelve á rep{,~i\ mucho de 10 que habia dicho-péro oontradicieu-do variaa de SUB versionea (152 á 155, C. 4.°). . . . . ~

En la. del teece d" febrero da una intervenciou marcada en lit rna-. ..

tsnea {¡, Daniel Escobar, quien, dice, lo dejó de espía. Primero manifics-ta haber visto·en el corredor de la casa á Manuel A. Escobar, á FranciscoParra (no dice cuál) y é. Emigdio Gsleano, y luego expresa que eatos noestuvieron allí. Al fin refiere que él no estuvo en aquella casa, que supu-so-que aquellos habían id:o.3.el!a,.y de Daniel dijo que había sido el ma-tador porque lo oyó decir {¡, Benedicto y Maria Luisa 'I'órres -(111 á 112;e '10)- . .' .. -." . '

'. En el recol1qcimiento practicado por lOA profesores. Posada, i)o~..esds AraRgo y de La Roche, dijo que los pantalones hallados en.la casade Daniel Escobar eran de Sinforiano, pero que aquel se los habia pucs~to la noche del crimen (179,C. -3.°). .

'. Segun el ccrtiflcado del .Tefe Municipal, el mismo día de ese reco-nocimiento dijo que los asesinos hr~biaJl salido de la casa caminando porsobre unos gantes, Eara no dejar rastros de sang:rc, hasta una r)oceta,.d0v.-4k se lavaron los pIes, y luego enterraron los dichos gantes (183, C. 3.°). -

. . Cuando fué necesario levantar el plano del punto ó terreno don·.de Galeane halló la: ropa el día cinco, los pei'itos tuvioronocasion de ob-servar que Galeano mcnt.ia sin emburazo alguno, ó que se contradecia no-,tablernente, al referir el modo como se efectuó el hallazgo. J~1Zgarori·.sudeclaración desconcertada cn lo general, y c¡u'O revelaba maliciay cornpli-cidad 6 torpeza en el declarauto. ABlmís1110la juzgaron fingida en mucha.parte, principalmente -cuando se trató de recibirlo juramento (78 y 791.-C. 3.°). .' . . -' . .'.. . Á virtud de lo que dijo en la indagatoria del diez de diciembre re-

ferente á las piezas de vestido que dizque lo dieron los asesinos y que ocul-:tó abajo de la casa de Joaquín Meza, me trasladé en 14 noche de eso diaá conseguirlas, pues él, á pesar de las frecuentes excitaciones que se le.hi- -éieron.para que evitase un trabajo inútil, manifestó que era cierto el he-cho y que entregaría 1~8piezas .. De Aguacatal me fuí con los señoresInspector de policía del Estado y Secretario del Jefe Municipal, dcspucsque dispusimos que. varios gendarmes condujeran á Galeano por una ví~miéntras nosotros tomamos por otra propia para bestias, y nos dirigimosal teatro del crimen. Allí encontramos la comisión y so nos dijo que Ga- .leano despues de haber prometido señalar el punto donde decia haberocultado la ropa, llegó á éste, y no se halló sino una especie de nido y mus,ramas, con que de antemano manifestó haberla ocultado. Reconvenido-Galeano por el resultado dijo gueera que se hablan llevado. laspiczas •.p~ro que ep otro punto babia ocultado unas sáb~llas. Inútilmente fueronb'úscadas estas, pucs tampoco se hallaron (20 a 23 y 25, C. 5.°). Al re-~'esar, se me dijo que habiavuelto á dar Intorvencion á Hermenegildopogui, señalándolo como uno de los. asesinos.' ". .'. . .

. En su indagatoria del siete. dijo haber dormido 01.d09 dondeNe- . _troeaoMoliua (38) C.l."}. Resalía Gonzál(V7.1o oontradice sobre Et'S .

--~,Q--

te punto, expresando que el tres como á horas de alrnorzar l'lubl¡j cO\l JIy~e dijo que nada sabia del suceso (20, C. 2.°). Damiana Gómez dice que~yaristo durmió en su casa esa noche: al dia siguiente lo vió una manchade sangre en la camisa y Galeano le dijo que era que habia arrojado porIas-narlces (~l; C. 1.0, 156, O. 4.°). Santiago Galeano, hermano de Eva-risto, 'dice que éste no durmióen su casa aquella noche (181 á 183, O. 3.0);J\iaría del Rosario Gaíeano, prima deEvaristo, Tomasa Ruiz y liIaría del -llosario Galeano, sobrina del mismo, oyeron hasta las nueve ó diez ele;tquella noche á Evaristo en casa de Santiago (16 & 18, C. 5.0) ... . ' Benedicto y :María Luisa Tórres contradicen á Evaristo sobre I~(ljta que les hace en la-indagatoria de trece ele febrero, pues que ellos no1,edijeron qU()Daniel Escobar era el autor de la matanza en casa de la se.:r¡~ra Echever~i (118 y 120,0 ..2.°). ' '. .. Mariana Vasco dice-que en la direccion de In casa-de Snntiago{iálE:ano (donde vivia Evaristo), fué por donde oyó ladrar el perro en lanoche del dos (69, 0.2.°). , ~ . '.: . 'Los peritos que. lo reconocieron expresan que sus facultados in-

, telectuales son obtusas, }lera que tielleeonciellcia y malicia (350, O. 3.").4, este tonor Epitlleio HestrerlO,. que presenció un incidente de Evaristo'~Q~una mujer, lo considera pillo y no bobo (350, C. 3.°).

" , .

MAimEL A. ESCOBAR.-La actuacion contiene contra este indivi,duo lo siguiente: . '. . ' . " .'" " 1.0 De las' declaraciones de OoncliPcion GOllzálé>\ (70, C. ,1.0), J ca-quin Rave (56, 0."2. O);:María AnLüni:i l\:l:éjía (77, U. 2.°), Nicolas Gómestí")4, G. 2.°), JH::muel ~:reza (138 y 139, O. 4.0),Bernnrdino Hóyos {82, O:2.°); Luis ,Oastilla (n, O. 4.°), Meliton Hodríguez (84, C. 2.°, J 03 á 105~€l,3. 0)-;doctor Tomas Uribe (7'0, C. ;3.°), Emigdi(} Mnñoz (70 á 72, O. 3.°.),.:bms -Iaramillo P: (80, O. 3.°), Pedro Lotero (88, 0.,2.°), Lázaro Toro Z.(12, O. 4.~), Rafael V6lez 1\1. (8 Y 9, C. 4:'), Jasó l\¡igueJ Córdoba (91,e; 4.°), .Estéban Urihe (143 y 144, O. 4.°), Adriano U ribe (23 y 24, O.4.°), Alejandro Oalléjas (82 á 84, Q. 3.·), generar José María Caballero

, (84 á.- 86, O. 3.°), doctor Marceliano Vélez (162, O. 3.°), doctor Herma,negildo Botero (171, C. 3.°), Y sen ora l\lercédes.lvfátqllez de R. (26 Y 27,C. 5.°), se deduce que los testigos.unos en el teatro de 10,8 hechos, otros enésta ciudad y otros en .difcrentss puntos 'observaron en el. sindicado du-rantelosprirrierós días qne siguieron Ít In ejeeucion del hecho, unos quepareQíll, estar asustado rnas liion que lleno de pesar; otros, indicando gran-de inquietud, oficiosidad, sobresalto, temor de ser 101! cadáveres, turba-ción y terror como provenientes de algun remordirniento ; otros, grandeagitacion' y afan manifiesto por 1:1 pronta inhumaeion de los cadáveres,e~í'térmiI1.0s que ofr~cia á lo~ sepultureros pagarles ?oblc suma de la queganab.an, p'orque la inhumacion tuviese lugar la mlsmuT\oche fIel tr~s;ofros, 50rp!eSa~lJma, 'des,figriracion en e.l/ostro con ~a1'c~s de ana ep10fCI0J;! pro~un,d~ y COl11Ot1'u,~ando de evadir la contestacion a, las pregunt~,q~,e,Be l~hac~~n; otros, miradas cama sospechosas con su hermano Da?n'i'el cuanclose -hallaban estos el; f,rente de los cadáveres.deseo ~veheple~., ,t~qe '4.al!ar~~",eI1 todas .partes, aJ ?zg,ar 1)01's~s movimientos, mq,llletl"Y"Ea!aorlls querovelabaii sorpresa y no cOngop, voz.como forza,d~.yd.

,

§'f' ' ,", ,~'- --.;., .Mllt~da 6."iavez. pol~UMagitacion interior; otros, temblor vi~¡b1~)ciéq?4seexonéaba atribuyéúdolo al frio, manera sospechosa como refiere. elsu .•

'9<'SOY suspension repentina de lit relación, manifestacion de temor de qtiele .hicicsen caer en las repreguntas ; otros, estado notable de abatimientoy sorpresa, }a que auinentó al saber que la autoridad dizque había descu-bierto a losasesinos.en términos de que á pesar de su conocida facilidadpara la Iormacion de cuentasno pudo formular-una ; otrosúna ligera son"risa y temblor convulsivo en los labios.casi imperceptible, cuando Seprac-ticaba una inspeecion en el teatro de los hechos, momento en que se ~ex~éusaba siempre, al expresaráus conjeturas, dando por razón el no habervisto el suceso.' .... .. . .' Llaman sobre este punto la atención las exposiciones de los seño-res doctor Tomas Uribe, Lázaro Toro Z., Rafael Vélez IVI.y José MiguelCórdoba. Seg\u~ ellas', la expresion de la flsonomía de Escobar, sus mo-vimientos sospechosoa.su agitación, su temblor, su sorpresa; hicieron quéel -primero llegase tÍ concebir una sospecha contra él y que los últimos lo

, considerasen como 'uno de los asesinos.· ..... '. . .. . .', .

Para la apreoiaeion de estos datós debe procederse con suma c!Íü:;tela no sea-que ellos nos lleven á una conclusion falsa." . .. .

".Es preciso tener en cuenta la notable gravedad del aéontecimien-~o,'la profunda impresion que produjo, el interes genm:al- dé la. comuni-dad Im,lWerignarlo, las relaciones de' familia del sindicado con las v.ícti-.más, -el earáctermaa () ménos irñpresionáble de éste, la. oonilsion que sóle encargo el día de la inhumación de los cadáveres. y la eníocion naÚl",ral de qué debía estar poseido 'en' el caso de que no fuera criminal, .~

, Jamas se había visto entro nosotros un suceso de mas gravedadJI ql~e produjese mayor alarma que el que nos ocupa, Guiados por elins~tinto. Me la seguridad, los asociados tomaban una participacion d~recta en.Iil!. averiguacion : á todos nos interesaba altamente llegar á descubrir Ói loacriminales, y.en ese honrado propósito cada cual préstabael contingelit-ede sus servicios; y!!! con averiguaciones privadas; ya con observacionesconsecuti vas de todo y en todas partes y ya con indicaciones importan-tes.;:' , ..._ ,

. La situacion, pues, no era normal, Ella se resentia de un.gi:an:desAeqüiHhr'io .produeido por la catástrofe. Los asociados, que' se véian ame-nasados en 811 vida y en su hogar, no era posible que procediesen con licalma y serenidad de espíritu propias para la formaclon de los juiciok.'Puede decirse que habia una prevencion.honrada contra los malhechoresen el ánimo de todos, que nos llevaba á apoderarnos de todo aquello que,aunqu~ insignificante en la realidad; pudiera conducirnos al fin qué sa~deseaba, Los sentidos estaban -enfermos y no era difíoil que ellos nos pro". .... . ..sentasenIas sensaciones de una manera diferente de como las hu!netámOIfrecibido en otra situacion, pues que sin apercibirnos de ello, nos encon .•.tl"aba]nos prevenidos contra los asesinos. .. -

, . IDlsindicado era pariente de algunasdé las v~etinlafl.Esa c1icÚ1'I'r:i-raneÍa hacia' que en él, si es que no ésculpable, se n'tanifiestasen llÍs emo-ciones é impresiones qü.,éle \Jl;o"dújera el suceso, . ya. en su' cal'áciCt a·é,a~?ciado,ya ~nei ~~l?~dente~e!ás ví6'tim~tl;~H~bria,~lgu~.oqt'~.C?,n;

. fumhtra eeas unpresioues naturalces que Sé ven en el stmJ:.¡htnt~ de'qulé4~

, t.••'} ,""-t---.g I}--'. >

. ha sufrido un descalabro en sn!!deudosycon la!! qne brota llt eoneien-,€lía {da fisonomía del delincuente? ¿scrít, por otra parte, f6.cil establecer!a línea que separa las unas de las otras? .- ,Hay mas aún: contra un j6.ven de honrosos precedentes, que no

'ienia parentesco ningurio con las víctimas, hubo quienes manifestaransospechas, porque 111 interrogarlo sobre el suceso notaron en él una tur-baeion creciente, yá pesar de esto, ese jóven se halla en completa li·bertad, pues nada .ae ha probado contra él. I

•• '.: 'CoJÍlodatos que, contrarianlos que examino se encuentran 10.qU~ se deriv~n de las decl:\racione~ de :María J o~efa Botero (76, C. 2.°),Rosenda Ochoa (199,- C. 3.°), Mana de los Dolores Montoya (219, é.3.~), MauuolMeza (138 á 1,39, C. 4.°); Julio Restrepo (134 á 136, C. 4.°),Presbítero J osé María Górnez Ángel (149 l\ 151, C. 4.°), Florentino Ra-"e (69, C. 1.0), Julian R. Gallo (17; (J. 4.°), Franoisco Botero Arango(106, C. 4.°), Y Francisco Ruda (223, C. 3.°), De estos hubo quiene81enotaran movimientos naturales de sentimiento por-el suceso, como elllanto; las exclamaciones compasivas, la desesperacion en presencia del<?a.ca~cido, el deseo vehen~e~te de penetrar en la ca~a: ~tr08 le observa-

, _fon t.ríetezapor- el ucoutecírníento y anhelo porque VIVIera la boba paraque. diera cuenta de los asesinos, manifestacion casi constante de que elIócono era el autor del suceso, enojándose cuando s~ le contrariaba, y

, áu~,iric1iferenciac\1lpable. Otro que, habia presenciado sus afanes, in-quietud,' desasosiego, turbacion, califica esto como efeeto de la emo-eioudel suceso,' de la fatiga producida por el cansancio. Hubo, en fin,otros que no sabian á qué atribuir las impresiones que le.observaban, y_~o faltó quien lo hallase sereno 'en, su semblante, . ...'" .Nodébe olvidarse tampoco al hacerIs calificacion de los dat09aludidos, que el sindicado habia recibido órden del señor Alcalde del-disürito-para' proceder á la "inhu maeion (le los cadáveres el mismo diªtres: Ademas, Genaro Calléjas (120, C. 2.°) declara haberle intimado deórden deaquel' bajo un apremio qu~ la efectuara ese mismo día, ':' _;.- • - . Como una prueba dé la delicadeza de estos datos debe tenerse'presente que de -testigos que le velan 'unos mismos movimientos al sin- ,.dicado, ~mos los califican como signos de culpabilidad y otros comoefecto-de laemociou. del 81!CeSO,del oansanoia. eá, .. . .- Las anteriores razones me llevan naturalmente á esta conolusionsla turbaciou, la inquietud, el desasosiego, la intranquilidad.la agitaci~!l,el'~rfan,,&.que se obsarvaron en .xlanuel A. Escobar en los primeros diasde la averiguacion.son indudablemente un elemento de poca significacionpara juzgar de su culpabilidad. Ellos sirven para formular una sospecha,pero no creó ,que puedan elevarse á la categoría de indicio; , .'.' " 2.° En Sil declaracion jurada' del cuatro de diciembre habló deuaa-rnula 6 macho amarillo, que encontró amarrado en. el corredor de lacasa, de .BelisarioUribe el dos de diciembre por la tarde. La bestia es-

-taba ensillada y aunqne 110vió al' jinete supuso que era Hermenegildo'Upegui., Expresa haber tenido una corazonada ytemió que éste, que ha- ,1;ll.a teni.l(i negocios con su tia Juana, fuera para donde ella á transar al-.guna cuestiou y que era fácil tuvieran algun disgusto. • '.~. ., -',Cuando aldia siguiente llegaron á su noticia 108 primeros rumo ~,

r~¡¡aerÍJnceio~hizo poco caso, concretándose ¡i decir, al saber qll.{} ni) ....•.... ... " . - -. -- .

...:......a8-~~•

~l'lllhbl1 abierto la puerta en Ji! cnsade Iu ,'\l'ñor!1:Echevel'rí y QUl5 uní Ifqvei:l á un hombre ea la f;alaeom{) con zr.marrosó pintado.iqueeraque es-tub andorru idus, ó qllt:habia nl:-:llll hU("lJcd en ella, qne se había acosta-do ~~11Z~inl~llToS 6 qJ1Ú~l'~'litollse hnbia muerto. Supuso t ambien que po-dia habtTsP'~n\'~lit!HcHlü con las drogas que t<.:úia allí la señora Echevc-rri ; y manifi-sta no huhersc acordado ele 1;1 .cornzonads, del día anterior.

. . Es IIn h'cho cierto la oxist encia de la mula en ln turde dnl dos ('ll .

la casa de Bvlisnrio Uríbe. ,A~¡ lo atestigt,:m Dímas Bolív:ar,DolúrcsVe.lásquez y Pastor Hamíré'z (+0, C, 2.0, 4, C. 5.°),. .-

El siud icarlo refirió e·l hallnzgo de la l;pstia, tal como 10 relacionaen el sumario, á vs'riaa persona:,;, 'y de allí de,\n"ia· ~()si)('cha-" contraHer-Il,!enegildo U ¡Jt'glli, d,:, qu ien dijo.que ese día dos habia perdido el plei-to qne tenia con la seuoru Evhel erri, versión que, nnnqlle falsa, era basotante g"r¡(~ral en los prim eros dins do In avoriguaciou. .

, Pon) Jo que hal l.rina.l oIa at.cncjon y qne hace pensar que trata-hri ,le qlle las sospechaa f'e, fij,,;;cn en Upeglli, acaso con la mira de ale:jarln8 de sí, si cm qne Re con- ideraba eilpab!e, ~~ lo qne refirió á Ale-j~n!t'o O:dléjl~, al gcner'nl Jesé M,tl'Í:i Cub.illero yá Rufael A. Restrepo,A los do:,; primeros les dijo .qneá la. oraeion. de la rroche <lel crimen ha-!Ji:1 nisto uri Eo.nbr« en una mula .nn.uilla, que trató de ocultarse en unaca.<itaelista:/te (!IJ})'W u nr: 'c/t'"drct de la de las ví,ctimas,por cuyo motivono l" conoció (81 á !:lB,O: 3,°); Al últimoIe refirió haber visto el már-tes pOI' Úr,noch» ouaud» iba para su casa á Hermeneqildo . UjJeg;ti enun mac-ho Ó mula.baya y que él! el cañaoeral elelos tejares del difunto )lfa.nuel Posada SiJ ocuttá p(;r lo q'u'C eoepechá qtte Upegui asesinaba á sutil1e80"no(J¡e{16,_C.4.0). '," .

. Aunque E;~e()bar en 8US indagatorjas niega haber referido los he- .. Ch0~ (le la manera como los refieren Iostr-stigos, y aunque hay quienes lo,reputan ('xag(,l'n<!o en SIiS relaciones, ello es la verdad que esa sustan~.ciul ad ul tor.u-ion lince :,;up,'nl'l' en él un iuteresmarcado en que la aten-.cion se fija rara en UIJl'gui señalándolo como sospechoso. De consiguien>te uo l'S avent.uru.lo contar est o como un indicio, aunque,lIo se~.J:lJve;,.

"3. o Hdiel'e,l\fa da Jo"ef,~LOllc1uñ..-,-d'e 08"<1> -que d matrcs qe di-cicmbre viniendo de l!:nvigaooj aIlte~de Ins cinco de lu mañana, se en:centró como doscuadru« antt.'s. dQ llegar á la vía que conduce para laéa~a d« la señora .Iuanu EdltV~1'ri, con"51'e,shombres, que no oonoció rque mus a-Ielnntehalló la- cubiert.a de )1l) machete, un- t!iJrrlr,q'fillQ,.unabotella, v mus adel:i:nte aún 1I1la cova ,(1e cachü'(J.2 C.:2.0}., .. .::':

Don.h- esta muje-r 8<; presentó Manuel :1'\. Escqbarel mismo díaqne hnbin rendid» Sil de~-la,l'f\'~ion('nand~):elIa,l'Pgresaba rara Enviga-d.., á f'1l1,]Í('ar!t, con marr-ado empano le dijese-lo que habia declarado,pUI':,;'leint,'rf's:lba rnucho. 1 a, ;L0l1,QOllQ: §cle' excusó Q!Hl1a reserva quese la habinohligado á guar.lar ; pero "Escobar con trino cariñoso y comocon muestras ¡le desesperacion'[ le 'repitió la exigeneia pidiéndole, una ll'-cecita ó nn-pruuer principito, A pesarde la negativa <lela Londoño, Es-cobar insistió p¡:egnnfi'\ndti!Ejsi la b.ibian interrogado sobre algun blan-·COi .pero ella nadrr quiso deoide',. No .recuerda bien la Londoñosi Esco-,bar le ofreció lli1garle PQrqU<;l le .revelare ·8Udeclaracion. Pero es lo cier-to que é~te,despueR .queel.maei.lo de .la J~0~doñ9 lo reconvino P9r, suimpertinencia, se reticóoomo avergonzado (72 y' 7,:1,0.,2.°)'-

. - .

-84-- 'lte'éobar en BU indsgatorla de diez de febrero expresa !l~r dert() .

trae le preguntó á la Londoño lo que habia declarado; pero niega haber-le instado con s6.plica: dice asimismo ser falso que le hubiera preguntadosi á ella le habiari interrogado sobre algun blanco, lo mismo qlle habertratado de'comprarle el secreto de su .deolaracion ofreciéudole dinero(108 á 1JO, C. 2.°). . .

Yo !lO encuentro qué llame la atencion sobre este punto sino lasnogutivus-que se notan en su iudagatorla y el de;¡eo de saber si le ha-bian preguntado á la Londoño sobre algnn blanco, . , ,

El interés mároado de saber el contenido de la declaracion de és-ta no es un signo cierto de culpabilidad.: En esos dias era muy comun eldeseo que todos manifestaban de saber lo que "e averiguaba. Es precisotambien tenerpresente que esa mujer fué tralda de. noche para ser ex a':minada y que, BU declnracion se creia muy importante' pOI' los hallazgosa'e que hablaba. . . .'. Lo que para mí debe considerarse una sospecha, son Ias ncgati- '

vas de que he hecho mérito y el deseo' de saber si le hablan preguntado{; aquella de algun blanco; , .

·i.O El dia cinco de diciembre se vi6 !i. Escobar haclsu-Io variascompras, á-pesar de ser muy-pobre. Rafael A. Restrspo le vendió eua-troandullos de tabaco,devolviéndole de un condor (13, C. 4.°, 29, C. 5.°).Tomas Villa le vendió medio almud de maíz.devolviéndole <le otro con-dal' (13" C. 4.°; 31, C. 5.°). Cruz María González lo vió que compró.maiz .

.6 frfsoles con otro condor; ántes había dicho que el vendedor no fué To-mas Villa y ahora vacila (13·y 14, C. 4;°, 34, C. 5.").

. En su indagatoria de nueve de abril dice que ese dia (el cinco]trajo de su casa un real y en la Dirección del presidio le pagal'on diez ysiete pesos y unos centavos, no habieúdo tenido otra suma en Sil po~ler.Agrega que pal'a el pagó que se le, hizo recibió primero un candor delDirector del presidio para cambiarlo y despues se ,le completó la suma.Cree haber cambiado el condor donde Rafael A. Restrepo, oosa que é!;\~e,nicga.; no .recuerda haberle comprado cuatro andullos <le tabaco, pues esedia no compró síno 'dósaon~leTt:nn0n..Yélt'z, aserción que é-te oonfirma.

. En vil>.i'ltde lo declarado por Gonzále7; no es posible aflrrnar siese día oompró con tres condores ó solamente con lo" dos que, meneio-:

. nan Hestrepo y Villa. PeTO en el SI!?1H>stode que filé solo con estos dosy: dando eomo un hecho qne cambié en otra parte quedonde Restrepoelcondor que' -reeibió del Director del presidio, siemprees ver.Ia.I que

. hubo en-su poder mas de los diez y !liete pesos y centavos .que confiesaIraber tenido. ¿De d6nde hubo esa mayor-suma? La falta de explieacionsatisfactoria sobre esto es un dato contra-él, que debe tenerse en cuenta,, .Alejandro Calléjas dlee .ser cierto el pago de los diez y siete pe~

S08, y centavos; " .' .• ... - 5.0. En-tres allanamientos practicados en su.casa, el Lo el seis, el'

2'.,0 el siete.y el 3.° el trece de diciembre, se hallaron sucesivamente eu elano .unas gotas ó ,pringues de sangré en la pareddel fr~lIte, sobre la: ba-randa-del eorredorvy uuas manchas en el suelo del mismo; en el otro

. u:nasmanel1as dudosas en restos de pantalonesjy en el otro unos panta-IO'neBeonsmanchasque p~recian ser de sangre ('17,.157 y 158) C:3.0)li, .13,~1j)y .~'l"C..5.~}., . . ... '

--!ll>.~Explirl1nllo la procedencia de aquellas dijo Ít .Adrian« U ribe qU«l

l_a,¡le la baranda proveuia 'del gana(lo q ue curaba y la del terron (en elRile/O) de 1111:1 muchachita que tenia enferma 'con evacuacionde sangre(\2;) y ~4, e, 4,°); Y en su indagatoria de quin-e de cuero da la mismak'x¡oli(':lcion sobre las de la baranda y di vaga sobre las del suelo y b pa-red, d'jeieHll(!_qne jJl'OV!eU(m, ó de-los mismos bueyes 6 de heridas que !lOcausan los mnos (l2G a 133, C. 4,°). '. . .. Este punto lo considero de tan escasa sigificacion, que apénas.

merece ser mencionado.. 'Yo tuve oeasion de ver las manchas halladas en el allanamiento

•del sej", y si es cierto que á primera vista me llamaron la atencion, unexámen detenido de ellas me hizo pensar que eran viejas, pues' su colorno t"lIia. ];1 vileza de la sangre recientemente arrojada, y aun respecto

. de algúnas llegué á dudar de su naturaleza,. De la,; manchas dudosas de los restos de pantalones, nada puedoafirmarse sobre su naturaleza; probablemente ellas no fucron.reconóci-das, «orno no. lo fueron las de los pantalones hallados en el allanamien-to d('l trece, I'especto de las .cuales el señor Prefecto del Departamento,á quien manifesté mi extrañeza porque no figuraban en el reeonocimien-'to de lo!' peritos, me dijo qne se babia comprendido que eran de madera 'y po de sangre, razón por la cual no se hicieron reconocer; - ,

G.O Elviérnes ('ÍllCO de diciembre fueron hatladasvarias piezssde vestuario de propiedad de la casa de la señorn Echeveni, en el' lími-te de los terrenos de Ángell\faría Londoño y .Jonquin Rave, frente ála ('asa dl' JHanilel A, Escobar, y como nna cuadra distante de ella. Esehallázgo fné hecho pOI' Evaristo Galeano, '. .' . .

. 'En algurfos puntos relacionados con él existen ccntradiccionee depoca irn port;:JIlciaentre Esco bar y algunos miern bros de su familia,' y deestos mitre sí, lo mismo que algunas aseveraciones inexactas de parte delos mismos; pel'o las creo de tan escasa significadon,que jllZg0 inútil enu-rnerarlas. . .

. 8010 eJéiste ladecluraoion de l\iiJágrog Correa, cocinera. de la-ca-sa (le ES00h:l1', en qne diceqne el día seis de diciembre po~ la mañana enuna conversación entro Francisco Parra (blanco) y eleindioado, acerca ....de esas piezus de vestuario, Parra le manifestó á Escobar qlle iba á de-nunciar elhecho del hallazgo á 'la autoridad, y éste EleOpil80 diciéndole

. que.á ·ninguno de los dos le convenía dar ,cse. denuncio POLo vivir ám1;>b8cerca del plinto donde estaba la ropa, y podía suponerse que la hab1811colooa.to allí (25 y 79, C. 2.°). . ..' . '.

. En sus indagatorias de veintisiete de diciembrey diez de febre-ro, especialmeute en ésta niega haberse opuesto a que. Parra diera eldenuncio, pues aseguraser falsaesa afírmaoion (63 á 68. O. 4.° loa i110, C.J.O). . .' ..

A J'ulian R. Gallo le manifestó Escobar que habian sospechadocontrl1 érCOII motivo de un atado -de topa qne habiarí encontrado cer-~ desu casa: que las' sospechas eran legítimas,' pero que una -vez qne

~RS autoridades 110 habían descubierto otra cosa que lo coraprometieralil~habian convencido de su inculpabilidad (17, C. 4.0).' . .. .,- El hecho por. .sí.soIQ-dB ·bah"·l'SG ;haH~clo,la ropa in-n:to á 'su 'Caga.

• • '10' '~~ . '. •')lO tll~I'!,~J~&~n'hl('Q~¡"¡:ol-a0011-;'f;A ('..-,. n1'1li00p :,q.(\a't '~11l~y~, Q.'0-'tg.*gJ~¡E!J~~J:~':\.\!rr

se--& }".....

confesó haberla colocado en ese C0}'('0, pnnto que indicó, g'egun me 'di-jo el señor Inspector de .policia del Estad\), Sol" hay que lo comprometa

. la negativa que haccen su bd:a.gatOl'ia de lo que dijo á Francisco I.':1-, rra en presencia de :'IIilágrJs Correa. Pero, como ~e ve, os muy escaso' el.valor dsrivado.de ese dato; . .'

, 7." 'Ála oracion del dia dos de diciembre el sindicado est.uvo en. .compañía de su hermano Daniel y dp Sinfori.uio E,1colJar. Los dos últi-mos habían ido adonde aquel con el objeto de.que le cedir-se á Sinforianoun p€on~pl\ra que le ayudase en los trabajos de la casa al día ~igniente.

Antes de reunirse, fué Francisco Parra (\,lanco), quien le avisó'que Daniel lo llamaba. En la reunion se habló sobre el' n-unto. que hemencionado; y adenias, dice Daniel, trataron de un l1C'g~)cio reservadoqne pa,.re~ehaber sido-In. excnvacion practicada en una casa d~l-doctOl'Vtctoriario Meza. . . ,

Francisco Parra filó esa noche, dice, á In casa dei sindicada conelobjeto de arreglar unos ¡¡"íos ó aparejos por,pncargo que le había he-choel doctor Pascasio Uribe'(119 y 120, 1<)2Y 13:\ C.3.0); miéutras,que Escobar dice 'que Parra no fué sino á llevarle una novena (146 á'150, C. 3.°, ·63 á 68,0 ..4.°).", . .

. ,El mismo ESCDbar·dice qne -Parra fué el dia sig!liente su compa-ñero en-todos lo- preparativos pal':1 la inhumacion de 1", cadávercs.; 'lile-á pesar de que tanto él como 'Parra' hnbian »id» IlO!l1hr;lc10~par:l 'condu--cir los cadáveres, Parra resultó acoru pniián.Io!o, sin rc-cor.Ia r si tUG qneéste sele ofreció 6 él lo invitó para que :'ü viniese cou él (153 á 153, C.3'.°); y p,arra asegura que Escobar lo llamó expresumeute para que loacompañase en dicha- correría. .

. Del contenido do este número no hay r.e alguna signÍnCfl9~on sÍ-·DOlacoutradiccion que existe entre Pana y E~colJal' sobre el objotp delviaje delprimeroá la. casa del segundo; pero como se ve noes de gran-de' importancia. eS!1contradiccion. .'. . .

. El haberse hallado It.I:l1lUE'l A, Y Daniel E~('obm' y' Francisco Fa-'~a .~Raquellas puntasen dicha noche, ~pria significativo si. Sinfori.mo-Escobar :Tl'ohabiera estado con los dos primeros y si hubiera constanciade que después de laseparacion de éste, aquellos sehubieran reuni.lo allí. "' , .'IUlJJillO ~ en otro punto .. ' A la circunstancia de-haber tenido el sindicado Eseobar á Fran-clce Parra de compañero el día tres, q ue algunos han ereido rmportan-te, no le.encuentro significacion alguna: . . .

. . ~." Algunos testigos hablan de .relaciOlH's hechas por el sindicado-despue.s'del aeontecimiento, en que les hacia entender que la familia ase-.sinada habia tenido buen.ts c4!iuodiclades, consistieudoést.ns, ya en ga,na-dos que' se habiau vendido-por los deudos en los dias anteriores al suce-so, ya'enJa existenoia de alhaj:¡", de oro y objetos que no S3 oneontra-roneIj4:1 casa, ya taúibicn en valores y eudinero dé pro pied:1~1de Sin-ioriaJl:o,· Y: 'P'l'Oitllcto -de venta- dá O',lil:ld)s de la senora Echeverri (31 á 86,e ...ct:. '" .. tk"i 8 -y O, C. 4.°) ... . ~. :En.su declnraoion del doce ele diciembre y enla in:.lag,ttol'ia deveintisiete del mismo mes, hnblu de haber sabido, porque Sintoriu DO Es-cobar yMarcoA, Areila se lo. ilijeron, que estos habían compra dovein-ticínoo terneros.. parte de ellos á crédito; de los CU:Ü0~, SllpO -despues

, . 1

''hablan vendido algnnoll en Rionégro: habla de escssa oxistenela e!3-'m~.álico y a" haber conocido pocas alhajas de oro en la casa de la señora[1;chl'verri: kabb asimismo de haber referii 1,)á uno de los t~8tig()s (á Ale-undro Calléj.»] lo qneég¡te dijo sobre venta ,le terrenos, pero,modiñ-»mdo la relacion haei6ndola aparecer. mas verosímil que como eltesti-sola reliri6 (:22 á 3~, O. LO, 63 á 68, O. 8.°). ,ElIla indagatoria del nue-re ,le abril niega haber hecho la relación que hace uno de los -testigos(Rafael Vélez M.), pues dice ser la primera vez que oye hablar sobre lo_lue dijo éste (30 y 31,0. 5.°). ' .: ,

De lo que reiiel'l~n los testigos citados es lícito deducir: éque elsindicado mentia con frecuencia, "in objeto a.parentp y haciendo relacio-ues inverosímiles que á nada conducían, 6 que los testigos olvidaronacaso aIgUlIa parte de eltas. .. ,

. Pero en todo caso no se alcanza á compl;eñder qué objeto tuvie-1":1. él ea mira al desfigurar tanto unosheches l\uya verdad no podia apa-rajarle re"'ponsahili,lad alguna. Si lo hacia por dar á comprendor que enla casa de la seuorn Echeverri habla estímulo para ejecutar un robo, eSMImunife-taciones tenian para él el incouvenierite de qlH', al haber sospe--chas que-le B3üahsen como sindicado, obraban tumbien contra, él; ~,

, 9.° Luis María Loudoño refiere que coruo.un mes ántes del acon-tecimié'lIto filó {i Sil cas" Manuel A. 'Escobar 'á solicitar de él que le rin-'diera una declaraciouen un pleito que sl'gnia con otros: En la couver-sacion qUé'tu vieron, -Escobar le -preguntó si estaba rjco (70 y n, O. 4.°).

Tend riu alg-una signiHc.aci<Jné'stp. pn>gunta si constase que .en elplan pa~a que fué in vitado Fnwcisco Bonet por Daniel Escobar se con-taba con-el,>inc1ica,lo, y qne ese plauhabia sido combinado mucho án-tes del veintiocho de noviem hre. '_ Pero .al faltar psa eonstancia, tal pregunta no creo que deba con-'siderarse COUlO sospechosa; - .., -,

10; María Josefa [tudá i'efiere haber visto á la oración del dos de-dieicnrbre, ya oscuro, dos hombres de bayeton que seguian por la via queconduce de la casa de Manuel A. Escobar y otros vecinos á la. de la Se"ñora Echeverri (.70, C; 2.°). ''P'. . . ,_ . Ninguna importancia tiene esta ·declaracion, puca se "abe que :ála hora en referencia el sindicado se encontraba 00n Sinforiano y Daniel.Escobar.

'I'ales son los datos de significacion quehe hallado en ell!lumario'contra Manuel A. Escobar. Después de meditar mucho sobre su valor hellegado á convencerme de que tienen el mérito bastante F••ra no permitirun sobreseimiento absoluto, 1" que apénas puede fundarse en ellos la con-vocatoria de un Jurado de acusacion.· . .

. -FRANCISc'O PARRA (Manco). Hay en el sumario contra este indi-

viduo lp siguiente:. ' ., 1.0 En la tarde del dos de diciembre, como á la oracíon, sepre •

•senté! en la casa de Manuel A. Escobar, á donde fué, dice, á arreglar unosavías ó' aparejos de prden del doctor Paseasío Uribe, Despuea que diéaviso á Manuel A. de que Daniel lo llamaba del lado del terreno de Joa-

, -

,~u:in Ráve, permanecié un momento en la casa y se retiró: para la snya,donde durmió (119 y 120, 182 Y iaa, C. 3.oJ. :No está de :jcuerdo ('o~-Manuel A. Escobar Robre el objeto del wiaje á la casa de ést«, pnc~ Es-cobar dice que n: fué sino á llevarle un-a novena (1-'16. á 150, C. -3,o, ü3 á

-6'8, C. 4,°), El doctor Pascasio TIribo dice ser cierto que recomendó el. arreglo de los al' :"s á Parra (4, e, 5.'). " \

Hay, como so ve, dos cosas que Ilaman la ateneion en este punto:l.a La re un ion de Parra yEscobar .aquella tarde, la cual seria pe signi-ficacion si despues que Escobni- volvió de donde lo llamó Daniel, '.\'2 hu.

'. hiera, reunido de nuevo con Parra; y 2.' La falta de armonía entre ~ste- y Escobar (Ylal'luel A) sobre el objeto del viaje del primero á la casa delsegundo. Esta falta de armonía hace-concebir una so-pe-ha coutru él i

2.o El tres, POl:la mañana, se fué al trabajo en cornpañíá de Gabriel· Montoya y permaueeiú en él como_hasta las once, hora en que una de,sus hijasdizque le.dijo ser exacto elaconte-imi-nr¿ l'TI la casa de la se-ñora Echeverri, qne ya había llegado á su noticia porqne Re lo contó Mor-cédes Bonet, y se retiró (134 á 137, C. 3.'): Sobre el particular debe ob-

""sl,'r:varse; l.°o.Que Parra dijo que lo hablan llamado.con motivo del RI1Ce-so, yno hay quien afirme haber visto al. que lo llamó; 2.0 QUl' éSEl"dia se

-Ie vió con un vestidoIimpio, distinto del que t~nia el 111&1't8S; 3.0 Que. cuando en su 'presencia Mercedes Bonet refc-ria ti; otros el suceso, ois-r-· vó que Parra'prestaba mucha ateucion á lo que e-lla dccia,páo la í cstigo "· no snpo á qué atribuirla atencion de Parra: si al Rustí> que ella tenia, áque estnviera mnlicioso ó á que' no oyera bien lo q ue decia ; .4.o QU(' cuan-do Ia misma Bonet habló un poco iespues y le ciíllt() lo ocurri.lo, diciéu,dale qu.eera;~ siete ll)8 muertos, le .oontestó Parra,· "que «iete 1'" nodiasuceder (:5"'8el:)". Decluraciones dl' Wenceslao Barriént.os (I, C. 4,°), Hen-

'. rique Ochos (11, Q. 4.'), Gerardo Pérez (16, C. 4.°). N icolas Bonet ('2,C. 4.°) , José ]Haría Galeano (l4, C. 4.'), .Mercéde~ Bonet (33 y 35, C. 'l.- )} .

· Gabriel .Montoya \ 1~ Y 1.5, U. 5.°). •. 0_.. o_ 'Induce 'á pensar contra él y ti. considerar COm() una fleciond« su

· parte para retirarse del trabijo, el hecho .le que nadie haya. visto al queél dijo que lo llwnó. El vestido nuevo, 6 rna- bien limpio, con que e-«-dinfúé al trabajo seria Un dato de -ignifloacion, si no constuso que 'el da'

· anterior 1'e vino para esta ciudad, y es natural pensur que no trabaja e- TIel- mismo vestido queu-a para salir, La at.eucion que observó en l'l ~It'r-

· cédes Bonet viene á probar ó qn-e realmente era culpnbl«, y. así se expli-'· ca su fisonoÍnÍ:1lilalit"iosa, () que no 11) era, y entóncos unda mas i.atural _que oir con curiosidad la relaoíon que ~Ila huein. La tacha de la cifrn deque habla la enisma Bonet vendria á ser ún.indieio gnlye si él la hubio-se hecho de. una manera rotunda, como si hubiera dicho /10 SGn siete, pe.'ro en los términos en que la hizo deja en el ánirn.. 1:< duda. ele si s,a_hiaalgo de lo ocurrido la noche anterior !'ll la casa di? la señora -Echeverri,Ó si fué que le pareció muy grande el, número ele muertos.

· .... For-IQ visto 1'e comprenderá, -que la siguificacion de los datos .áque alude este número es muy poca; - . ... - .

~ I -.

3.°' Del punto donde trabajaba se fU8 renlmonte al Ingnr ,le loshechos; donde .tomó parte -en el aseo·ele lo" c;¡,¡'J.(\veres,y lueW> se di6.2'.j, '" , .. ., 4' -a e- A l' h .. -a este CH!Ctud. lItVtt~:Ü,O, ..Ul<;'·(",_pc·r:"H:ill::,·:-l .' . __l.t0~o,#aT,¡p:~ra CP.H:'.l•.....[~yu.~ta.,;·

~-' , ,

se-en losprepnrativos de fa irihumaciori de aquellos, Escobar manifiestan» recordar si lo 'invitó ó si él se le agl'egJ., Hnbo realmente quien lo vie-ra en esae faenas en e~taoiudad (indaga:torias 119 y lZo, 134 á 13~, e,'3.°, 107 á l13, C. ,:1:.°, Meliton Hoilrígnez, y su señora.Meroédes Márque!!idoR., 103 á 105, C. 3.°, Z6 y Z7, C. 5.°). . '

La intervencion de Parra en ese asunto viene á probar tanto que• no prueba nada; porque, ó .lo hucia por alejar sospechasópodia ejecu-

tarlo' pO,i~un sentimiento de caridu.l: ,, 4.0 .María Josefa Lon.loño de Ossa, como se ha visto en Iarela-.

cion qne hice dé lo qne apan'ce contra Manuel A. Escobar, habla rendi-'do una decl.rracion importante, Ella refiere que Parra se le acercó en 'l« plaza de esta ciu.lad el cinco de diciel~)l'c á que le dijese lo que ha-'bia declarado; 1)('1'0 exc .t-ándosele con la reserv a que se le había man-.da.lo guarda¡', l'arra a:;wg6: "Vea ii 'Josefa, fué que me mandó elIns •. . . ." y no terminó la fcase, Insistíendo en su negativa la Londono aquel;le dijo que 1'0 mandaban adonde ella á que le diese una. lucecita ó una co-sita de lo qne declaró para no tener que ir hasta Belen á preguntarle áuna mujer, pero qlle á no decirle tenlri« que hacer el viajo. .La Loado-ño le rl'pitiú qne no le decia, y Parra pensó unmomento, le hizo una úl-tima exigencia y se retiró (7Z y 73, C. z.·f ' ,. . ,

José Ala'ría Arangó confi rma la aseveracion de la Londoño, agre- .gand» que.Parra deciá que á él podia contarle porque era' empleado (80 y ,81, C.Z.), , _ " -', . , . fl, Etl "U indagatoria de once de febrero Parra, confiesa la conversa>

cion con la Lon.loño, suprimiendo ó negando la parte en que consta eldeseovehemente ele saber 10 qué ella habia declarado, y niegat ambicu 'algunas delas preguntas qu« menciona la Londoño, Dice que el muchoiutercs que tvnia ea la averiguacion fuá el móvil para interrogurla (110

-Íl.lll,C.Z.o).' ,-'. .Ya he calificado esta!' declaraciones al hablar de Manuel A. Es-

cobar, y como los datos contra uno.y otro deri vados de ella, son unos mis-mo:>,me refiero á 'esa calificacion; , . "

5.V En un allanamiento practicado en su casa de hábitaclon fue-;ron hallado>' UII "Silabario enciclopédico" y dos. zur\'iagas¡'al parecerde verl'(ujuillu": el primero, tiene mauuscritoel nombre de Sinforiano Es-coba~ " '.. , '

_,.' Explicando la procedencia de estos objetos dice en las indagatoriasde doce de diciembre y diez y seis de febrero, qua el libro proviene dead-judicacion, como premio, á sus hijos eu la escuela 6 porque él lo ha com-prado, y que el nombre en él de Sinforiai,» E<cubw: pue-Ie explicarse ácausu de 1111préstaiuo ásu corna.lrc. Lu.-iaua Arango, para~qllc una hijade ésta lo llvvase á .a escueta qae tenia,1a'señol'á VH'ginia .Alvarez (137y Li8, C. 3.°, 114, C. z~r).. . , ,

Luciana Arango y su hija María de los Do161'es Montoya dicenser cierto el pl~ést:.l[lI(), y cxpresun ql1e pudo muy berr Sinforiano Eaco-,bar en la casa de la senuru Echel'erri escribir su nombre en el libro. LaMontoya .'"ee¡,noee el libro (8'y 15, U. 5.0).

Habiéndoselo puesto á la 'vistauno de Ios 'palos ó zurriagas diceen la indagatoria de ocho de enero qllo no es- SUY!l y que, acaso suprimo,Ftlmcisoo~arra 'lo-llevó á s\\cas:l.tlO'7 ~ 113;e. ,4.°). ' .

_.,---':lV-- _.

.E~te reconoce 6 describe el palo diciendo ser (le JHAn}ar:l,mH!(1,.que se lo prestó para la custodia de.la ('a~a de la señora I<;('1JevelTi,en108 dias del hecho, y que se 10 llevó 6. la ca~a del «indicado, de donde lo'trajo la autoridad, Juan Jaramillo conf rma e'~a rl;llacion'(ll y ,13, C. 5,°).

- Ningnn carg •.', pum!, puede derivarse de eS08 halla7:go", en \'ÍSt:1ae lo que meneiono ; -,. 6.° E,l veintitres de diciembre se practicó un reconocimiento en

rueda de presos en la cárcel 'de esta ciudad por Francisco B()I]{'t~el ('\lal

dié por 'resultado que éste señalaraá Daniel Escoliar di"iendo ser el in'dividuo que dias ántes le habíahecho una invitaciou para robar unas «a-aas y asesinar á sus moradores, .. -

. José Herrón, 1ll)0 de 10l> detenidos en la cárcel, mnuifiestn que esemismo dia oyó que Franeisco Parra .(.bIa11l'0) le dijo á Fraucisco Parra(negro) estas palabras: "ahora si e-tamos en peligro /Ie q ue ¡lOS eojall".Herron ag:rega que desde la hora del reconooimieuto ha observado á Pa-rra mas triste que án!,es (55, 'C. 4.°), ., _ "" - 'Santiago Ortiz-citado por Herron como qlle pudo haber oido esaspalabras, }.W.JIlB oyó, per~ ,sí le habló sobre el particular un 'deteuido queno sabe 6 no recuerda qmeTl es ,56, U. 4.°).

, Segun se me ha iuf'ormndo P'''' el señor Prefecto .cl-elDpp:ntamcn.te>, cuando Herron rindió -su testimonio se dudó un tanto de su relacionen atención á lacalidad del testigo. "

, Para formar un jnició mas acert ado sobre este punto creí -conve-niente solicitar ll'!:práctica de alguuas amplia-ionés.y ellas dieron pnr re-sultado: 1.0 Que el sindicado no estaba 6se dia incomunicado y se ha-Ilaba _por lo mismo eTI'capacidad dI' hablar c-on su hermano, por lo qne})O es imposible que Herron oyese lo que estos conversaba»; 2.° Qnerealmente Herron es hombre-do mulos .prccedent es, púes ha 'sido presidia-rio yactualmente se le sind ic-a como ludron (:31, '32,34 Y 3i5, C. 5.°), " ~ .Tu.nto Francisco Parra (blnúco) uorno Francisco Parra (negro)

niegan el aserto de H"ITon (31 á 34, C, 5,°). . ._ Si eltestigo citado fuel:a 1111hombre de hilen os precedentes RU ,

aseveracion .tendria. gran mérito contra el sindicado. Pero no sncedien-do esto es permitido duda)' de lo q ne dice, a unque esa duda se ,op"ng¡:¡'al principio general de que 108 testimouios falsos no ~e producen ,el] materia criminal contra los acusados, '

, 'Pero es 10 cierto que el cargo aparece-hecho, y que nimq ue levepor la circunstancia aludida, debe tenerse en «uentn; "; ' ,-¡

7,.° El señor Prefecto del Depnrtumento cert.ifleur. que "TIun nlla-namientopractieado en la casa' de .:'Ilanue! A. ESi'obIF, Parrase acercóá éste, que se hal!a ha sentarlo en un corredor r]pella, y {'lIando crci.m queno babia quien los viera hablaron algo reservado, iuterrog au.lo Pn.rnl áEscobar de una manera sospechosa, Robre el crimen de Agnal'atal, segunle pareció al sefior Prefec-to, y revelando 'susto, particularmente al sersorprendido (42 Y 43, C. 5,°). ' ' ,.',' .

En su indagatoria de ocho 'de enero Parra r-xpresuno recordar elincidente, agregal"10 quesi acaso le dijo alguna ('O~:lá Esco bar fué sen'cilrá y sin relacionarla con el acontecirnient« ( 07 á 113, C, 4.").-, ,,'E8 imposible fijar el verdadero vaiol'de 'este dato, el cual se.ave-:

riguaria si se supiera qué hablaron aquellos, Pero alcarecer .de e¡¡¡tacir-"

-41-~l1nstflnein:hay que apelar lÍ la opinion fo'rmada por el certificnuto al ob-.servar los hechos, y ésta es de importancia, si bien su mérito' esl:t suje-tú ít aumentar 6 disminuir seguR lo que Parra y Escobar conversaran,"cosa 'imposible de averiguarse. En todo caso, no parece aventurado fun-dar en él unn sospecha; " . .

. 8.° Mariana Vasco dice qne en la noche del dos de diciem bre, ya '.avanzadala noche, oyó por dos veces ladrar el porro de su casa: una, laprimera, en la direccion de la propiedad de la señora Echeverri, y la otraen sentido contrarie: comprendió que el perro ernbesti a á alguna per r .

sona; pues sabe cuándo .lndru con' animales y cuándo con gente .. ~gl·ega.(lue por donde oyó ladrar el perro pueden transitar fácilmente, en viapara donde la señora Echeverri, entre Otl'OS Francisco Parra (31, 32 Y(¡!J, C. 2.°). . . ,

Sen de muy poca solidez estos hechos para que en ellos pueda"llfirmarse un indicio contra el sindicado: sirven cuando más para pres-tar asidero á una sospecha;

. 9.° En la indagatoria de once de diciembre dice Parra haberdormido en su casa en la noche deldos de 'dicho mes, y cita á FranciscoParra (su primo hermano) como que duerme aNí, pero no. afirma queesa noche lo hubiera hecho (132 á 133, C. 3.°).... .

:€ste manifiesta que realmento-dunnió donde el sindicado aqueolla noche: que éstese acosté como á 1:11',' ocho ó nueve, y no sintió que selevantara hasta el dia siguiente (11, C. 5.°).' '. .

Gabriel Montoya estuvo el tres por la mañaua donde el sindica-do y por su fisonomía comprendió que acababa de levantarse: de allí sí-guíeron al trabajo sin notar e11él sobresalto, temor ó.algo diferente' del[lento que le habia visto el día primero qne trabajó con él (15, C. 4.0}.

.

Como se ve, tienen .ménos importanoia estos dates que los queenumeré centra Manuel A. Escobar, pero, como aquellos, impiden tamobien un sobreseimiento absoluto, y BJ~rápreciso someterlos al criterio deun Jurado de. aousacion, . . .

-

,EMIGDIOGALE.A.NO.'En el sumario existan contra este Individuo. ..

los siguientes datos: ~ , '1..0 Pocos dias despues dél sucesor Galeanq habló con Martin

\ Ochoa.en pr-esencia de Francisca Barriéntos.y con HenriqueOchoa y Juan'de la.Cruz Ossa: á estos les manifestó serios temores de que Evaristo lodenunciara, como 10 habia hecho Sa con Santiago, y deseaba que aquel,á, quien hace figurar como bobo, enmudeciera instantáneamente para que~1Olos denunciara á todos: les expresó ademas que pará él los Escobares110 tenían parte en el.acontecimiento (75, 76, 80, 82, C~ 1.0, 116, C. 4.°).

Explicando esos. temores en su indagatoria de veintiuno de 'ene-ro.manlfíesta que realmente hizo las aseveraciones referidas y que se fun,daba para temer lo que Evarísto pudiera decir, en que éste ya babia de-nunciado á 'otros que él creía inocentes (146 á'149, C.4, 0).. '

La fuerza de este dato es ninguna. La explicacion que da el sin-dicado, si bien puede ser urdida :por la malicia, t.ienetodas las trazas de13uaturalidada habilla couslderacion al caráote» que hemos visto en Eva-

risto GaleallO. Pero en todo caso, es verdad (lne no hay en los sutes conqué contra-locir esa explicacion; . . '...

2. o José Maria 'I'órres refiere C1,UC oyó {¡, Eini,O'dío Galeauo mani-. ,.fcstnudo en uva conversar-ion que el miércoles tres de dioiembre, cuandola autoridad se cucont.raba en el teatro de los hechos, había ó debia ha-ber allí individuos <1elos asesinos de aquella familia (79, C. 1.,0).

En la indag;ltorLl que he citado dice "que el motivo que tUYOP:l-ra haeer esa asevcrnciou [ué R(,rque le refirieron qne 'eunndo estaban la-vando los' cuerpos lloraban Bemgl'e)' y que él ha 'oido decir qne cuandomatan alguno y está el asesino presento, siempre sucede eso"., . - Yana encuentro inverosim ilit.nd en la ex plicacion q ne da el sin-:

dicado, Acaso sea esa una de tantas .creencias erróneas qlJe tienen lasg.,ntes del bajo pueblo y que consideran como verdades de que difícil-

. mente se 'desprenden. ". . .' . '.., Pero por mas cierta que sea la existencia de estas preocupaciones,

ellas no impiden el pensar que el sindicado haya podido aprovecharse '<le una de ellas pnra explicaresas palabrns, qne acasodijo guiado P?r el

"conocimiento que tu viera del modo como pasaron los hechos en la nochedel- dos de diciembre; .-

3.o En su declaracion oel nueve de· diciembre dice queHerrnene-gilc1o' Upegui le manifestó varias veces q no si dona J'uana Echeverri le _ganaba el pleito qne con ella tenia, ella ,era la que salia pordi eudo, sindecirle por qué (300, C. 3,°). Yen la del veintinno de enero .dice qne To-nías Smiin es el responsable delsuceso.porque no quiso denunciar á Fran-cisco Parra respecto de un robo que le hizo; y qne él sospecha que Pa-rra sea uno de los asesinos, porque en un allanamiento dizque se le en-contró un libró de la casa de la s8ñ~H'a Eohoverri' (146 á· 149, C. 4.°).

. N o le encuentro importancia álguna á este dato, á no ser que con.la primera version se admita que quería-alejar sospechas y- extraviar lainvestigacion. Mas sus palabras sobce este punto no son bien ter'minan-tes, y acaso hay ligereza en pensa.r aquello. Sé comprenderá; asimismo,.que lo que habla de Tomas Sanin y de Francisco Parra nada v.ieneá'pro·'·bar contra él; .. . , - \l

r 4.° Cerea de la casa. de Mnrlnnn Vasco hay n11(1. vereda que coudu- 'coá la de Emigdio Galeano. De suerte que el dato fundado en haber .oidoladrar el perro en aquella noche, comprende tambien á éste (21i, C. 3.°).

- '. ' . .' , . . -

Ya he' dicho mi opinion sobro la Vaguedad de este dato ;.. 5.° Ensu indagatoria de.diez y seisde diciembre manifiesta 'ha-

ber dormido en su casa en la noche del dos de dicho mes, acompañado de"su familia, de su nuera Francisca Burriéntosv desu sobrina :M:aría dela Cí'UZ Tórres. Al dia siguiente se fué muy teinprano para 01 monte, dodonde regresó por la tarde (194, C. 3.°). En la del treinta y uno de 'di-ciembre refiere esto mismo y agreO'a que Lázaro Tát>ias lo.acompañó enel viaje al monte (87 á 90, b. 4.°).° . .. , " , . ,.

- . . .l' Francisca Bnrriéntos dice que en lunoche-del dos cuando se aoos-tó, como á las diez, no habia aentido-que.Galoano- se hubiera lovautado;piles á las ocho lo ha bia visto ya encama. La testigo se levantó como .una.,hora ántes do n.ma.nocer y tuvo .neoesidad de entrar enla pieza donde dojelata su suegro, y allí lo' vi6 en su cama. Ea seguida 'extrañó que Ga,le~-'

, ,

b,-,,!:i)-

no Be levantaramas tarde que de costumbre, y lilCgO lo vió qÜ9 se fuápara el monte con sus dos hijas menores (7, C. 5.°). ., ':María de la Cruz Tórres contradice su aseverarían, pues: no clur-

mió aquella noche en la casa de Galeano, si bien es cierto' dormía enella. con frecuencia (lZ, C. 5-,°). .

. _ Lázuro Tápias e{)ntl'~uliec tambien su usevern: ion, pues dice queno acompañó. ¡Í, Galeuno, pero qne ésto uí lle:,;6 :11 monte aquel diu nocodespués que el testigo (9, C. 5:'). ~ - •

. 1..l3 coartada.jsegun DD ve, "no eRtá: probada. Es desechable por fn~"t,a de imparcialidad el tcstimonio de Francisca l}aráéntos, quienlo apu-ya en su aserciou.v El de Tápina prueba c¡ne se vió con él en el monte eltres, pero nó que In acompañara en él viaje, corno aquel lo dice. El dol\:íaría de la' Cruz Tórres no le aprovecha, sin que pueda afirmarse queGaleano haya tenido ánimo firme de mentir en esta parte, pU(l~ lnTó-rres acostumbra dormir en su cása .

. En 'resúmen: nada hay que merezca ser considerado como indicioy fiue justifique siquiera la reunion de un Jurado de acusacion contra GIl-leauo, '

SANTIÁGO GÁLEá.NÓ. Exhibe el sumario contra esto individuo lo.". ~--,81g'&lente: '. , ' . .- '. , 1.. En el allanamiento practicado en su casa el dia nueve d/iJ di"ciembre fueron hallados unos trapos ensangrentados, Allí se hallarentambien unos despojos de res enteramente frescos '(44, C. 2.°). Ese mis-mo dia cuando fué aprehendido estaba con unos pantalones con Inun-chas como de sangre.' De estas dice en s-uinc1ag:itoria del doce del pro-pio mes, "que provienen de sangre de res" de un menudo comprado III

ocho de dicienrbre, y de cabuya" (181 ,á 162, C. 3.°) ... En el análisis químico practicado por los profesores de medicina, .

estos dijeron ser de sangre las-manchas de los trapos, pero no se pudofijar-su naturaleza (307 á 308, C. 3.-). ' .

Nada vale este primer dato;' La existencia en sucasa de los.des-pojos deres menciouados y el no habersepodido fijar la natumleza de.la saugre hallada en los trapos, S~l11circunstancias que nadacpermiten aae-venir contra él. .Nótese que en los trapos estan indudablemente compren.~didos lospa ntalones, púes que estos frieron 'tam bien pasados á los peri-tos para el análisis químico, segun me lo informó el, señor Prefecto delDepartamento, y acaso por hallarse sumamente raidos no se hizo rnen-cion expresa de ellos; , _' .

2.o' Mnriana Vasco dice que ,por el punto donde ladró su perro enla noche del dos de diciembre hay paso fácil para Santiago Galeano ir

de su casa ála de la señora Echeverri (69, C. 2.°)'.. Ya he expresado mi opinion sobre la vaguedad de este dato; .3.o Ensu indagatoria 'del doce de diciembre dice que en la noche

del dos de d)c110mes durmió en su casa, y que áates de acostarse estu-vieron de visita erí" ella Toruasa Ruíz ylUaría del Rosario Galcano, ~tlprima. Agrega, que Evaristo Galeano no durmió ensu casa aquella no-che (181 y 182, O. 3.°). ' ,

-44~Damiaua G6mez, su mujer, confirma su rolacion en ouanfo 6.Í1a:.

, ber dormido en la casa, pero no habla de que hubiera tenido visita, y locontradice en lo relati YO á Evaristo, pues dice que éste durmió dicha no"che allí (156, C. 4.°). . '. .' . '

'I'omasa RuÍz 10 contradice tambien, pues aseguraque fué -en la('a8ft de In: testigo donde Galeano estuvo en la noche referida como' has-ta la mitad de ella ('18, C. '1.).° El! otradeclaracion rendida últimarnen-te, fija las nueve de la noche como la hora en que Galetmo y su mujer"se rotirnron de su casa (18, C. 5.''). . '. . , .

.El contenido de esta última declaraeiou es el mismo de la de Ma-, ría del Hosario Galsnno, compañera de habit.acion de Ia Ruíz (-16, C. 5.°).

Benedicto 'I'órres dice haber oido á' Santiago conversando en sueasa pomo hastaIas diez ó las once de la noche' del dos (79; C. 1.0).. Se observará que acerca de este punto los datos no aparecen conclaridad: Estan de acuerdo el sindicado y sumujer en que el-primerodurmió en su casa, pero no en cuanto á la visita, 6:11 ménos la Gómez.no habla de ella, ni respecto á haber dormido Evaristo allí esa noche,Tampoco hay acuerdo entre aquel y la Ruíz y la Galeano, pues éstas enlugar de ir udonde el sindicado y su mujer, recibieron ii. estos de visitaen tal' noche. Pero á pesar-de la falta de armonía que se nota, sí parecelícito' deducir, que bien ensu casa Ó 09 la de la Ruíz y la Galeano, estu-vo el sindicado 6 se le .vió hasta'Ias nueve, diez Ú oncede aquella noche,á; ménos que los testigos hayan aseverado una falsedad, imputaeion quepor cierto no es permitida. .

, . . ~ .

. Con estos levísimos datos, que jamas, podrán formar un'íudicío, nopuede adoptarse procedimiento alguno" contra el sindicado,

. ',' FRANCÍSCOPARRA (negro). Con relucian 6. este individuo hay en.-la actuacion lo siguienté: ., .

, 'l.~ El punto por donde Mariana Vasco oJ6 .ladrar elperro enlanoche del de;!!de diciembre es aparente para <;\1 tránsito de la casa de Pa-rra á la de la señora Echeverri (69, C. 2.°), ' "

Es conocida mi opinion sobre el valor de este dato; .2.0.Á fa pregunta que se le hizo en la indagatoria rendida en la

tarde del -onqe de diciembre, de si sabia "cuál fué 'elhombre que énasocio de otros entró en la casa de la señora Juana Echeverri en la no-che del ~ártes dos del presente mes y dió muerte á ésta y á otrasperso-nas de su familia", dijo: "qne eso solamente Dios lo puede decir". Pre- .~lintado en seguida: "¿Por qué cree usted que soloDios puede contestara la pregunta anterior?", contestó: "que esa pregunta no puede desatar".llÍoel testigo" '(12{5Ú 128 C. 3.°). "

No me parec.e que esas contestaciones, que acaso tienen su expli-eacion en el apocamiento de. sus :facultades intelectuales, puedan consi-derarse como signo de culpabilidad; , . ..' .- . 3.° En la indagatoria á que he aludido-dice que en.Ja noche del

'dos durmió, en su casa con su familia y que al siguientedja, corno en losanteriores, estuvo trabajando en un cerco con Antonio Ángel, VicenteSánchez, José María 'I'órrcs y otros, .

-4[)--i, r llan:raramillo, :M:arü¡iGrajáles y ttician~ Betrto <iirienhaber "lB;

to á Pana en su casa en la noche del dos, como hasta las siete (81 y 82;C: 1.0). Vicente Sánchez, Antonio Ángel; J"osé J\iaríá TÓ'lTesy Sinforia-no Restrepo confirman la aseveración de Parra, agregando no haber-no-tado en él cosa alguna que les hiciera concebir sospechas deque tuvieraalguna participación-en el suceso (9:, ~O, 12 y 14, C. 5.°). '. •, Con estos Jatos no se prueba la coartada, pero ellos tarnpoeosír-

ven para indicar culpabilidad en el sindicado. 'Si algo prueban es en su.favor. '

. ---, ,

Según se ve, tampoco hay en los datos ~ que me. he referido cosaalguna que comprometa al sindicado, . _ .

- ,

: ' . La lectura del expediente me ha hecho comprender que FrancísooBonet debe responder de su conducta poi: las graves omisiones que tUYO

relacionadas con este asunto. ,., . ' ," "Son encubridores, dice el artícule 123 del C. penal. •• .Los quésabiendo que vaá' cometerse un delito, y pudiendo avisarlo, no lo avisaná las autoridades públicas con 1a opcrtuuidadsuflciente, .para que pl1&',dan impedirlo, siempre que por tal emisión se neve á efecto el delito"., Fundado en esta..dq'ctrina -yen los hechos comprobados 'con re-Iacion á Ballet, creí de mi deber sohcitari-a -deteneion de este individuo;la que onortunamentese verificó. , - - --'. ,-, Él es responsable ante la sdeiedad por no haber impedido que so-bre el Estado caYQselá deshonra que tl'ae consigo la comision de JIn crí·men comoelsin ejemplo .de que tratan estos autos. ",' " ,

, Si ante la conciencia puede ser irresponsableen atencion á 1::0- ra-son que ulegá de no-haber denunciado el hecho por carecer de testigospara .c:nÍlprob~rlo, y ac~so por temor.de lasconsecüencias'qu~ '~n pasosemejante pudiera .apareJarle, es cuesticn que corresponde decidir a losJueces .de hecho. '. , ' Para los efectos dei enjuiciamiento basta saber qüe:tantoen su de-

elaraoion jurada eornoen la indagatoria há confesado e.1convite que· le'hizo Daniel Escobar para la perpetracion del crimen, los inedias -de quepensaban valerse pata ejecJitarlo,al propio tiempo que ,s\ú)mision en He-:v'arlo al conocimiento de la autoridad (47 á 52,IC, 4.°; 39 Y 49 C. 5°.).

•, '-~~',

. , pienso presentar despues de esta vista, si tuviere tiempo para ello,un resúmen dé los datos principales que contiene.el sumario contra Da--Hiel y Manuel A. Escobar, Francisco Parra (blanco) y Evaristo Galeano,y de los cuales me he servido para calificer la conducta de estcs indi-viduos.' '

Ese rssúmen no 'forma parte de esta exposieiou, sino que' debeconsiderarse úníeamente como un auxiliar de ella.

.Los datos que él ooatiene respecto de Daniel Escobar, los M sen-mulado con prescindencia.complete de sus confesiones, las cuales me ,ha- 'brian evitado este trabajo., ' - " ' " ,

De Santiago y Emigdio Galeano y de Francisco Parra (negro) nofOTll?O resúmen, porque él se encuentra en el estudió que he hecho en f>'~ta Y18ta <.:011relaeion {té ellos;', ' '

,-4tJ-Fíñalmenté, se observará que seré poco metódico ~n la orden",

eion de esos datos. Débese esto á que no les considero, como he dicho;otra importancia qus la eleauxiliar "J «xámen ele la conducta de cada sin-dicado, .' "

. El conocirnionüo personal que yo tenia de la marcha de la inves-tigacion, me.obligó á hacer el estudio de 108 diversos cuadernos qne for-man el sumario en un órden distinto del de su numeracion. Heoonsidera-do como cuaderno 1.0 el instruido por el señor Inspector de púlida deAguacatal, como 2.0 el formado por el señor Inspector de. policía del Es-tado, GOfioa.O el marcado con el número LO 'de los qne confeccionó elseñor Prefecto .elel Departamento, como 4.o el 2.0 de estos y como 5.0 elformado en los dias en que el sumario ha estado á mi conocimiento.. ". Pero á pesar de esto he tropezado con grandes inconvenientes al

hacer ,el exámen de los hechos, pues el 'hilo de la investigacion de pron-to desaparece en un cuaderno y son precisos muchos esfuerzos para Bao;ber -dóndc continúa, Esto no debe extrañarse en un proceso en ,qtic 10B .

'empleados que lo formaron hiciero-n perfectamente' bien al olvidarse del¡¡':forma con tal de que la verdad fuera descubierta,. .

Por todo.lo mqme8to pido á 'usted:, _ ..: 1;°,Qn!;1enjuieie9.--Daniul-Esc6oar y á Evaristo Galen,no pUl" el

B0xtmplo-Ci\31itode homicidio perpetrado en laa personas de M-eliton. ySinforianoEscobar, J uana Eohevérri, Virginia .Alvarez, ,Mari::ma Maru-l!.in,daY'.Teresa Penágos;, por el delito .ds heriJas .inferidus al niño Ma-:nuel A. Marulanda ; Y por el robo ejecutado en la casa de laseñora Eche.verri 'eh la 'noche del dos de diciern bre último; .

2.o Que enjuicie á Francisoo Borret como. encubridor de los deli-Li:tos'(k,quetmt~ el número anterior;"~ . "3 .•~ Que sobresea Gondeelaratoria de ser llegado el caso de con-vocal' Jurado de acusación, contra Daniel Eseobar y Evaristo Galeanopor el-delito de cuadrillu de malheohores ; .' - .. " ..,4.0 Que sobresea con igualdeclaratoria contra Francisoo Boneteomo.:encubridor del delito á qne se refiere el número -anterior;'~. . 5;0 Que mande reunir Jurado de- acusacion contra Manuel A. Es.cobar y Francisco Parra {blanco ) por los delitos de que tratan los nú-mero's 1 OOy " o. -' '. . -. • tJ. " _ _ ,

, . 0.o, Que sobresea de una manera absoluta por lo que hace rela-cion á Emigdio y ~antiagoGaleauo y á Francisco Parrn \ negro); Y _, .. , 7.0. Que respecto de aquellos indi vid nos qne, como Hermeuegildo(Jpegui, Benigno Zapata, .Tu~n Francisco Upegni, Daniel )Horáles, fue--ron considerados como indiciados en un principio, lo mismo que varios~tl'08 á-quienes, sindicó Evaristo Galeano, Y de los cuales se averiguóparticularmente que algunos ni se" sabe siquiera que existan, sobreseatambiendc un modoabsolnto. . .

I<i!l>~"• '

He concluido mi tarea, sellar Juez.Deeut.re la oscuridad que reina en este misterioso proceso he-pro-

curado desentrañar todo aquello que pudiera dar ~lguualuz, llegando á.. . .

-4;7-. .

111S conclusioues qne preceden, las cuales desgraciadamente estan muyiójoti de dejar satisfechos los fueros de la justicia ylas santas aspiracio-nes de uuasociedad que tan hondamente ha sido conmovida por el ho-rrendo crimen de Aguacatal. ." .

. . Una pro fiu u]:¡, tristeza se apodera del espíritu en vista de! resul-tadoobtenido y de la.'cruel incertidumbre en que-vamos á quedar, de si

- irán ro expiar eu delito todos los malhechores Q permanecerán impunes al.gunos de ellos entre nosotros acechando la ocasion propicia para cebar-.. , ~ .seen nueras victrmae, .'. .. , Á pesar ele que un estudio atento y meditado de este voluminoso

sumario me lo ha .hecho conocer bastante á fondo, y de que me creo enposcaion de todos los datos' principales que él contiene, no me hago por

. esto ilusiones ni me halago con la idea de haber acertado. Son muchas ygrnvísimas las cuest ioncs que entraña y muy. limitada mi iñtelig~mcia pa-. , ,_ra aprecIal'las. . ... Latarea qué me ha tocado. cumplir es muy superior á mis fuer-zas y solo el deber me hn obligndo-á afrontar la eituacion, desempeñan-do el delicado papel de ser el .primero que descorre el velo para presen-tar ú la sociedad el resultado poco satisfactorio de los aunados yrepeti-dos esfuerzos hechos en solioit.ud de la verdad, ocasionundo ruuehas de:cepoiones en todos aquellos que descansaban en la conviccion de que es.taban perfectamente descubiertos los criminales. - ../ '

. Por fortuna mis opiniones van á ser revisadas por funcionarios elereconoeidas~dotes'inteléetuales y alüarnentc interesados cn el triunfo dela justicia. A ~lIos toca rectificar los errores en que haya podido 'incurrirpor mi insuficiencia. Si así sucediere veré con satisfaceion el que inteligen-cias superiores traigan mayor luz á la. cuestion y procuren un éxito masfeliz á la causa dc la justicia. Si, por el contrario, mis opiniones fuerenconfirmadas, quedaré contento dé mis esfuerzos, ya quena del éxito obte-ciclo. . . -

N o debemos desmayar, sin embargo; pues, si bien es cierto quepor estar agotados ]08 mecliosde investigacion, vamos á quedar .por

, ahnra agobiados con la penosa. idea de que hemos sido impotentes par:tdescubrir á todos los asesinos, debemos confiar en que la Providencia, qlH)

premia loaesfuerzos nobles y honrados y no quiere la impunidad del cri-men, nos moetrará alfin á aquellos, si así conviene á 8U8 altos designio.»Á nosotros nos basta la seguridad de que por 'parte de los fuucionari..spúblicos y de los particulares no se ha omitido mé.dio qne pudiera condu-cirnos al descubrimiento de la verdad, obrando todos con el intcres y ladecision que las cirounstanciaa y la naturaleza del negocio exigian,

. -,

Medelliu, abril 22 de 1874.

Señor Juez.

JUAN DE D. l\IEJÍA.

AUTODEL JUEZ D~- LA PRIMERA INSTANCIA.

. . .. .'

Juzgado 1.· del Orímen;-Kedellin, mayo quince ile mil ocliocientoe se-tenta y cttat'ro.· r

VIJ.S'710S -....•...... ~ ' - .- -' . •.. ..... .. . ... . .. .". . . .. .... . . ..- ~ .- .••••• o •• • ••••••••••••••••••••••••••••••••••••• - •••••••••••• ' ••••••. .. ., ." ••••••• 1 ••••• o •••••••••••••••••••••••••••••••• - •••••••••• l· •••••• -

, 'Hasta aquí el Juzgado está perfectamente de acuerdo con el se-ñor Fiscal en todas las apreciaciones hechas por él, tanto acercti de la ría-turaleza de los delitos como de la culpabilidad de 'los sindicados de quese ha hecho mcncion ; solamente con relacion al reo Francisco Bonet, di-siente de las :eonc1usiones á que dicho -empleado llegó, para solicitar suenjuiciamiento como encubridor de los delitos de homicidio, robo, heri-das y cuadrilla de malhechores. . -.'

El artículo 123 del Código penal dice': "Son encubridores ...•• •. .•••••••••• " •••••••••• lO ••••••• •••••• ••••••••••••••••••••••••• o •••

. . " "Los que sabiendo que va á com.eterse, un delito, y pudiendo av i-sarlo, 'no lo avisan á las autoridades públicas con la oportunidad suficién-te para que puedan impedirlo, siempre quepor t?itlomision se lleve á efee-to el delito." . ' . '

Francisco Bonet en su indagatoria confiesa 'que Daniel Escobarlo invitó para que fueran á cometer los delitos de homicidio y robo enlas casas de los señores .Juana Echevel'1'i y Luis Maria Londoño, el vein-tinueve de noviembre de mil ochocientos setenta y tres, es decir, cuatrodiás ánres del acontecimiento que ha. motivado este proceso; y aunqueexpresa haber aceptado la invitación, es un hecho que é-ldesistió volun-tariamente de su propósito, y I,1neste caso no es justiciable conforme alartículo 9.· del Código penal., . -. -_ " Para este Juzgado es evidente que el sindicado Bonet no debe ca-lificarse {!.eencubridor de los delitos de qlle se trata, porque' esos delitos.no se cometieron precisamente en la fecha para que fué invitado, y por-que no se puede sostener razonablemente que por .la o~im en que M-i.'currió fué por lo que se llevaron á efec,to tales delitos, corno lo requiereel artículo 123 ya citado.. -" /. La explicacion que da Bonet de no haber puesto en cOltocimiénto

de la autoridad la illvitaeion que le hizo Escobar, porque no tenia conquien' comprobarla, es muy plausible, y nada inverosímil el temorque élmanifestaba á este respecto, atendiendo á las ideas que preocupan gene-ralmente á los que no tiene~l ningun conocimiento del derecho. .. . _Sí él hubiera dado el aviso, es probable que nada habria podido'hacer la autoridad, puesto que hasta entóllces no se había eometidonin-gUIl hecho punible, ni se habia manifestado con actos exteriores la va-

'1

-50-~ "... ", - .1' •

luntad Ó el desigJ.lio de {~9~lieter1o.Por consiguiente rio era posible pY'(!;caver el crimen por mOl1ioseficaces, bajo el supuesto de que la autori-'dad hubiese dado crédito: á la ascveracion de Bonet, desnudn, como de-bia presentarla, ,elecomproban'tes' yno siendo él persona bien reputada.

, No .se desprende del sumario' ningIÍn hecho, ningun dato que sir-va para demostrar que por la om.ision del ineli,v:iauo cuya conducta seannlizu, fuó por' lo que se cometió el delito ; y -fnlta por consiguiente llllOde los requisitos esenciales para que tal omision sea punible. ' ,, Fíjese bien la consideraoion en este punto, así Como en el hech'e

de que el acontecimiento no se verificó sino un dia distinto al para que. l!;~bia sido invitado Bonet, y vendrá al ánimo el conveneimicnto de quela disposieion penal últiniamente citada, no le es en I'igor aplicable,

' , Téngase presente, adenias, que la especie ele conjrir'acion dé qúése acusa al ,sindicado, pudo fleg';ll' á ser punible, ó quepor lo ménosas'ílo creyera Bonet, yen este caso la garantía deiio estar' obligado á dar tes-t iuronio contra shnismo lo pouia á cubierto 'ele- la saucion elel artículo123 del Código penal, " ". ' Las al1teri~res' consideraciones son: bastantes para que el Juzg:1~

do se abstenga ele enjuicia¡' ú' Banet,. y someta el punto, que por 16mé-nos es lHUY dudoso, ála couciencia de mi Jurado, que obra CQ.una esfe-ra ménos limitada, ' '. ,, '. ,

, ' .

Por tanto, a(ll11ini.str:tndo justicia en nombre del Estado y por au-'toridacl de la,ley,. y de Muerdo mi lo principal de los hechos' COI!el die- .támen del seuor Fiscal, se fal la:

Declárase con lugar áformaoion de cansa contra .Dauíel Escobar'-y Evaristo Galeano, por seis delitos ele,homieidio, ejecutados con circuns-taucias de asesinato cn 13Jpersonas de Meliton y Sinforiano Escobar, J ua-na Eoheverri, Virginia Al varez, Mariana Marulandn Y.. Teresa Penágos,

, .. . Etijui'ciase á los mismos reos 1:101' el delito de heridus {erVetradden la 'persona del niño Manuel Á-\ntonioMarulauda, y por el de 1'0'1.0 eje"-entado 'en la casa. de' la sellara Eclievorri.: ' '. , .. 'I'odos estos hechos tuvieron lugar en' la fracción de Aguacatal

de este distrito, en la noche del dos de diciembre de mil ochocientos se"ten ta ,y tres. '. .', " " ,. Sígase el juicio por vfa de Jurados: Íos enjuiciados continuarán re-ducidos á prision, sin gozar del beneficio de' excarcelacion con' fiariza.

" 'Sobreséese en el procedimiento y se declara que es el caso-de cono'vocar' Jurudo de acusacion: .' .

-1. d c'ontra1Hanuel Antonio Es-cobar y Frarioisco Parra (blancó) _por los delitos de homicidio, robo y, heridas, -por que se lfaen.jtiiciadodi.:rectamente á, Daniel Escobar:. y' á J~val'isto Galeano;' '

'2. o. Contra Fruncisoo Bónet por los mismos delitos; .. '3.d Contra Daniel ~scobar, EvaTisto Galeauo; Manuel ANtonio'

Es.cobar; Francisco Parra (blanco) y Francisco Ballet, por el delito de"cuadrilla de malhechores. , .

Sobreséese cn el procedimiento e011declaratoria de no ,sel"el caso.de 'oonvocm- Jui'ado dc acusacioii. resneoto de 1015 sinc1icaüos Franciseo".' , -Parra (IWg'TO)·Ellli srdlo v Saut.iuuo Gulcano.' '-<.. ) .:!l. ~l- b.~ .~

·-M~. . Póngase en libertad íi los sindicados respecto de los pt{i:;iesse 3d.bresee absolutamente. .).. .. ' _---

Póngase igualmente en li'bC1'tacláManuel Allto,¡-ü-'O-'Escobar', Fral.l-'cisco Parra (blanco) y I.'ráncisc!,>-J3onet si dieren fianza de excarcelacioucon arreglo al artículo 104;3-~{élCódigo j udicial,

- Notifíquese y coú~últese con el Superior Tribunal.. .

ISIDRO l\i. JHOR'ÁL:ES•..l?iJlix JlIoana, Secretario;

."

laANCO DE LA REPUBLlCArnaU.IOTECA LUIS-ANGEL ARANGO

CATALOGACION

.EXPOSICIOll• •

DEL PROOURADOR GENERAL DEL ESTADO.

Señor lTllagl8tr••do.

'I'ócame ya tras largo estudio y ahincadas meditaciones, expone-ros mi diótámcn en el proceso formado porconsccucnciu de los espanto-sos delitos que tuvieron lugar en la fraccion ele ~gua~atal,de esta·ca-

,pital, en la fatídica noche del dos al tres de diciembre del ano próximopasado..' .' .'. .

. 'Brotan 16.gl'}maslos ojos y tristeza el alma á poco que el {mimose.detenga en la contomplacion de esas tremendasescenas de sangre, latro-cinio y muerte, que si han de repetirse entre nosotros por conseeúenciadel triunfo de perversas.máximns, de las complicidades de la opinion &-de la audacia del bandidismo, harán de la existencia misma ele la socie-dad un problema y de la vida un tormeuto., .

Lanaturaleza del presente trab:-ljo ylos límites á que me he pro-puesto reducirlo, no permiten que me ocupe extensamente en la enume-ración de las.causas de que provienen, á mi modo de ver, el malestar qu.enos aqueja y la funesta fecundidad del crímcn. Baste observar que ellasdependen en gran parte de la miseria, de la falta de educaoion, de la au-sencia de principios religiosos, y, mas que todo, de las ,falsas Y.peligrosasdoctrinas que por desgracia. van cundiendo en el país, y segtll1 las cua-les los delincuentes son víctimas de la enfermedad de su espíritu p de laviolencia de sus pasiones, los motivos de los actos humanos son cuestio-nes de organismo, y los malhechores, desgraciados que delinquen á su pe-sar, por culpa de la i}ociec1ady por ignorancia. Oomo;;e nota á primeruvista, el efecto de esa propaganda de contrasentidos no podrá ser otro.que el de erigir on dogma el fatalismo y la impunidad de los criminales, .abolir la libertad, reducir la moral á un tratado de patología y hundir lospueblos en que.talos ideas encuentren sacerdotes y culto; en los desórde-nes y la nada. . I

'. . Grave es por su naturaleza la eausa que me toca examinar ahora,]H1esla enormidad de los hechos ejecutados demanda, por una parto, se-vero Y ejemplar castigo, y por otra, la cuantía y la extensión de las pe··nas que en su caso deben imponerse, inspiran vacilacion y dudas.

Domas de esto: los elementos de conviccion que el proceso entra.í'íá no se desprenden en su mayor parte ele'esas pruebas claras y directasque hacen nacer la mayor certidumbre posible en los negocios humanos,sino de datos conjeturales Yde sospeQhas ó presunciones falaces muchasveces y de difícil cómputo. N o es imposible así que los Magistrados se"engañen ó qne su celo los seduzca, y es por todo esto por lo que el actualasunto asume una tan temerosa solemnidad. .

Precedido lo que antecede, entro á ocuparme en la tarea que en elpresente negocio me cumple llenar, y euyo mejor desernpeño.procurarésin prevenciones de ninguna clase y con la mente en Dios.

-c-04-Justo CR reconocer que para ello me servirá de mucho la exposi.

eion que el .señorFiscaf 1.o ele este Circúito presento al señor Juez 1.0 delmismo el veiut.idos de abril último, documento notable p0r mas de un tÍ-tulo, y especialmsnts por sus dotes ele pacieirte investigacion, de exce-lentecriterio y de suelto y elegante estilo. '

1, .

En los recuentos estadísticos del Estado de Antioquia correspon-client"R á la administracion de justicia, no se registra ejemplo alguno eleotro crfmen tan satáuicamenteconcebido y con tanta barbarie ejecuta-do, como el muy complexo qne se llevó á efecto en lafraccion de Agua-catal e111a para ¡;¡l'mpre mcmornblo noche del dos de diciembre de 1873.

. La conmovcdmn y detallada descripcion de tan luctuoso aconte-cimiento 'apurcco en la citada pieza oficial de veint id os de abril próximopasado, y por lo mismo es inútil repetirla., ..

, Consta ele ellu que en una pcquena casa del Aguacatal, edifica-da en sirio llgreste y algo distante del camino público que conduce á los

, distritos del SUI', aparecieron el dia tres del memorado diciembre seis 'ca-dáveres horriblemente heridos, y colocados en diferentes posiciones en lasala y en la alcoba de.esa p,equ!"ua vivienda, " " ' ,

Tres niños sobrevivieron á tan atroz matanzn, lastimado uno y con-tU80S los otros, y debióse sin ·duda su salvncion, siquier al azar, ó siquierá sus pOCOR años. Empero: todos ellos recibieron en esta funesta noche subautismo de sangre. " .

1.0s mencionados cadáveres eran los siguientes:, .. 1.o El de la senara J uana Echcverri, de cincuenta y cinco á sesen •. ta años dé edad, matrona veuerablo por sus estimabilfsimns, prendas y he.nefactora de la comarca; . '

2. o El de Meliton Escobar, de cincuenta años, infeliz enajenadoá quie;n,sorprendió.la muerte en el sl}eiío de su inteligencia; . ,

3. o :EldCl)a señora Virginia Alvarez, esposa de Meliton é hija dedona J llana, de cuarenta años, institutora de la juventud .en una escuda'rural, de modestas virtudes, y que ofrocin cl melan oólieo espectáculo deun cuerpo vivo unido á nn cadáver moral; , '

4. °El del jóy~n Sinforiano Escobar, hijo. de Meliton y de Virgi:.nía, de veinte años, robusto, de carácter y cualidades enérgicas y con-sagrado siempre á una vida de trabajo, honradez y sacrificios; pues que ,en las condiciones mas humildes hay tambien héroes de probidad y dehonor como en los consejos de los pueblos y á la cabeza de las armadns;

5.o El de Mariana ~Iarulanda, de treinta y cinco anos y sirvientede la familia; y . ' '

6. o El de Teresa Penágos, de diez y seis años, de constitucion ra-quítica, idiota ó por lo ménos imbécil.

- Tal es el cuadro' fiel de las personas á quienes privó de su existen-cia la aleve' mano del crímen.. ' ,

, Los pormenores de la conel neta del delinouento en la ejecucion de' S\1S hechos crirninosos deben pesarse mucho en los asuntos judiciales, por-'que ó acrecen: el tamaño del mal causado, Ó pueden ser indicios segurosde la perversion moral ele esos eternos euemigos del sosiego público y dé:la P~\z,de las familias.

~ñf)-N.o es rln1 caso cxnminar ahora la cnestion (1('si los hechos 0('1 r10il

(\0 diciembre último fu oran obra de un solo agente, {> el combinado pbnde mneh?s agresores. Esta grave faz del asunto será atendida en su lu-'gn,r propIO, . .

Bást,n,mé constituir por hoy la mny marcada circunstancia de quaDaniel Escobar; 6 héroe exclusivo 6 jefe oc esa horda de ván(1al08 quetantos infortupios produjo y tantas quejas ha hecho exhalar, era renibL,do eO)1entero nhnudouó, yen son de amistad y parentesco, en-la desven-turada' ff),mi¡i¡tde sus víctimas., '.

Fué así como pudo realizar su snbjetivaela resolucion de extermi-nio y rapilü~ -auxiliado por la mas madura y consolidada malicia, y conpórfido abuso de lit l?osieiony del indiscreto poder que en la casa tenia.

. La alarma que inspiran los diversos delitos es una pena positiva'qne consiste en la Hpr~11:~llsionde sufrir el mismo mal de qué se ha vistoalgun ejemplo, Dicho sóntimiento es suscept ible de recibir diforoutce grn-:dos, y aunque vario y elástico porque su más y su mónos dependen del-soxo, dc la imaginac.ion y elel tl3DlPCramento, -algunas veces sigue pro-porciones bastante constantes,' que :es posible dctel'miljl:\l:: El d~sarl'ollode serntjantc tésis me Ilevaria 11111Ylójos, siendo' suficiente reconocer porlo pronto que el moti vo que impulsa á los malvados y el carácter que des-pliegan en 1;1comision de sus inicuos pl¡u1es, FWnpor lo cornu nÍns cau-sas generadoras ele ese estallo ds social cles;lliellto que siempre producenlos ?rímenes estimnlad~s ,rOl' Ye)lcmpliltespasiones, ó cumplidos con acce-sorios de esmerada sevrcia.. El senor Fiscal de primera instancia hizo en su razonada oxposi-

cion, 11naJlilltuni ~xacta del terror y. de .Ias zo:"obras qne el ~ncesb deA,gua.catal derramo en todo el Estado. Innecesario es, por lo mismo, quepie detenga en ello. . . '

Si esa tremenda catástrofe vino á dernostrarnos, por un lado, queexisten en nuestro país malhechóres ondurecidos que acarician el torpe,nuhelo d~socavar los fundamentos de toda sociedad bien orga~lizada, n0Sha hecho acoger, por otro, la dulce segurid¡J.d de ql1e la accion enérgicltde-los poderes públicos y el imperio incout.rustuble de la opinion, ihlr~l\siempre eficaz apoyo en \l! Eli>tudo ;:tI órdcu público y á los derechos P¡lr-t.iculares, .'- . .".. I. Cierto esquecuando ,1;1alarma llega á un alto gmdo y dura ruu- .'

cho tiempo, su efecto no se limita á las faenltades pasivas sino, que atacalas energías mas íntimas, y hace caer á la sociedad en el mas funesto ma-rasmo. Empero: pant une tan letal fenGmcno brote en 1:;( vida de los PUg-blos, se necesita que, el mal producido por los erímenes sea grave, que losescándalos se hagan habiturues, que los gohierr, )S carezcan de fuerza re-presiva, y, sobre todo, qqe el extr~tVío de la conciencia pública ofrezca álos pérversos, Q criminal protocoion ó culpablo indiferencia.

Por fortnna no nos encontramos ni IlOShnlhu-ómoa nnnca en tanaciago estado, y tal cosa pud ieron VOl' 108 que prc5cuv¡wnJllTa ontrauu "8\Y'-

lemne á esta capital de los sindicados del crímcn de <luetratarnos, el nue-ve de diciembre próximo pasado. . -,

La probabilidad de la rcpeticion de actos iguales estaba O1itodas. Ias.mentes, la idea de que se habian organizado misteriosas cuadrillas p,l,_;ra hacerles á los lwo:pietario~ una guerra sin cuartel, ni tregua, era casi

--1'56-, -

g'ünerahnente aceptada, el odio contra esas desventurados hombros hu"llia en todos los pechos y huhin sido, imposible hacer calar la creencia deque no existia prueba completa de la culpabilidad de todos los detenidos.

Á despecho de las precauciones _cnel'dameüte tomadas para evi-, tal' agolpamientos de pueblo, la entrada de los sospechados se llevó á ei.ma por entre una apiñadJl, multitud de personas de toda clase, condieiony estado, No se dió lugar en .tan serio compromiso á ninguna de esas ex-plosiones rápidas é incontenibles del sentimiento público cuando está po-derosarneute afectado, taa frecuentes aun en pueblos mas cultos que elnuestro, y que de seguro provienen del divorcio de la opiniou y de la.ley,ó de desconflanzude] sistema legal, ó de azuzados desbordes. '

Es, 'señor Magistrado, que tenemos plena fe en nuestra legal'y.pausada administracion de justicia, que la legislacion á quo estamos su-jetos y las costumbres públicas son al"mónicas, y. que hemos comprendi-do, una vez por todas, que esos castigos impuestos bajo la forma de ve-redictos populares, tienen mucho -dedesarreglado, bárbaro y brutal en SIlejercicio, y toman como .tipo lit venganza, comó medio Ladesproporoiony pOI' resultado la anarquía .

. Si no ~:ll'eo,c6motantos otros, que el cr ímen de Aguacatal pusoá prueba el órden público y la efectividad de los derechos sociales¡ por-que esos aislados y tremendos casos son rnt-ísirnos y aparecen de vez encuando, no j nzgo tampoco que amenguó en lo' mínimo el buen créditoy la honra del Estado. En todos los tiempos y en todos los pueblos de.la tierra, cultos ó bárbaros, ha habido y 'habrá siempre buenos y malosl¡.ombres, y.se han cometido y continuarán ejecutándose delitos de-igue-rancia y de refinamiQnto, sin qüe ni la historia ni la filosofía hayan pre-tendido nunca estigmatizar á ninguua nacion civilizada, por esas emer-gencias transitorias en el órden de Iahunranidrid ..

, Al contrario, las tristesescenas del dos de diciembre de 1873, su-mjniatrnror¡ la más evidente prueba de lit vitalidad de los poderes públl-'cos, del tesón de las autoridades en el cumplimiento de sus deberes, y eleIa sensuta cordura ge las masas, puesto que todos, sin distincion de ban-dos ni parcialidades, han tomado decidido empeno en el descubrimien-••to de esos nefandos hechos y en ,la penalidad de sus autores. .. ,Nada ha .sufrido, pues, el Estado por consecueneia de esos, dolo-

rosos aeontecjmientos, y sigue sereno en las viasque han de conducidoá su mayor -bienandanza. ' ., Avanzaré algo mús.,

TI, Bastante se gana en [a investigacion de los delitos y de los delin-

cuentes, 'cuando llega á descubrirse el móvil que ha impulsado la con-ducta de tos criminales. Desde dicho punto de vista me permito Iss si-.guientes reflexionos. . .

- ---:rnn:-ITL--i,.,., .••.hi,l{.¡mfl,. fmnilia de la señora EchevclTi no tenia enemi-gos conocido.s, y Il~)era posible siquiera q11efuera odiada, en vista eles~¡suct?S degenial candad y de los beneficios que. esparcin en el punto de 1311resld,"lJCut. ' . ,

. .

. . Benévola y afable con todos, cnltivando'relaciones dignas y eh su ~dest.ino de ser la providencia de los desg¡'aciaelos .y ele los eufcrnaos, ~e~,

-57~!rahia captado.el aprecio público, y las simpatías yel afecto de todos los'<fue la trataban. '_ ,

De consiguiente no fué la venganza la_que armó el brazo de SU!!miserables victimarios. ,

'La señora dóña Juana era uriaanciana casi caduca, y se acercabaya á la paz del s~:püloro, . _ .

'Virgjn~a .Alvarez ostentaba con sus cuarenta años una belleza.marchita, virtudes manifiestas, y las coronas de esposa y de madre.

Mariaua Marulanda y Teresa Penágos pertenecian á la. mas reba-.jada condicion social, y de todo punto se hallaban desprovistas de atrae-'rivos personales. ' , . - .

Tampoco fué, pues, el amor, ese indócil conjunto de desordena-das pasiones, lo que <1i6engendro al crÍmen. _- .' _

I,a casa de que trato había logrado adquirir una fortuna algo bol •.gada, á fuer de incansables fatigas, economía y cordura, y en los diasinmediatamente nrrtorioros al trágico suceso que la privó de, su colecti-va existencia recibió Jonclos provenientes do venta de g¡¡nado., El señor' Marco A. Arcila, nieto de doña J llana, era compañero

de Sinforiauo Escobar en varias especulacionos lucrativas, yen esa épo-ca hizo algn¿üts ganancias pecuniarias en laca~'l'ólter:l del Estado. Tales'sumas fueron depositadas en 1-,1 morada de la señora Echeven-i, y de ese,llocho era sabedor Daniel Escobar, como consta de las pláticas que tuvo-eon Francisco Bonet él veintiocho elenoviembre que precedió al aeontc-'cimiento. " ,

Se ve tambien del informativo que varias prendas de vestido y'otros objetos de IlSO fueron descubiortos .ol cinco, de diciembre últimofuern dc la casa violadn, y que Daniel Esc.obar entreg6 un poco mas taro.de las alhajas de qne se había apoderado tortÍceramente.

, De las premisas que acabo de exponer fluyo por sí sola la amar-ga conviceion, de que únicamente á la vil é infame codicia se debieronlos actos de salvaje carnicería acontecidos en la casa do la sellara Eche-verri en el Aguacat;tl, cuyos deplorables efectos alumbró el sol-del tres dediciembre en aquella hoy desierta y helada vi vicnds, ' .

Onandoel motivo que da pábulo al, crimen es general; frecuente.y poderoso y no se reprime con medidas certeras, las violencias se suee- --den con vertiginosa rapidez, la alarma cunde en proporciones gigantes- 'cas y la vida misma de la sociedad peligra. . .

En efecto: en toda poblacion es mucho mas gran.Io el número delos proletarios que el elelas personas acomodadas, y si en ella, y por cul-pa de las instituciones, 6 del egoísmo de los padres de familia, b'é care- ,ce de nociones religiosas" de leyes fuertes y do costumbres puras, es'mo-ralmente imposible que los buenos dejen de ser presa de las maquinacio-nes de los mal vados. ' u

y si á esta cansa de conflictos, natural en cierto modo, porque esvivaz la aspiraeion á convertir en propiedad el producto de las fatigasajenas, se añade la quo nace de las extrañas' nociones con que la prensacontemporánea lisonjea las masas populares, sosteniendo que el antago-nismo entre el trabajo y el capital es la fuente ele la esclavitud moral,material y política de los trabajadores, y la precision ele estubleoer el co-m.uualismo como regla de org-¡tnizacion comnn, no puede preverse siquia-

. , '8

-58-fa -á clónr1'l-irémos ít pamr merced 'al influjo 'de eROSoxtrnv iados prhH'¡~pios, si es que los gohiernos y los hombres de arraigo y de buena voluu-tad no lee dan palabra de alto. .' . .. Me he extendido mucho mas de lo que en esta parte queria, y pOI'ello habréis de excnsarme. - .

Los delitos del dos de diciembre tantas veces dicho norlnsquieia-zon al Estado de su normal situacion. Sabéis m~lYbien que la !111H'r!lay elpeligro se prosout an juutos unas veces y sépurados otras, yque se puedevivir con inquietud en el caso de un trastorno imaginario, y con oalrxaea el' de una conspiración verdadera pero ignorada.

IIIDesde que se tuvo en Medollin la primer noticia .infortnc de los

hechos acaecidos en Aguacatal en la noche mencionada dd dos al tresde diciornbre, pudo notarse, el decidido intores con <l'Ú3 los funciona riosencargados diréctameute de la sognricbd pública, desde los del l\!tO Go-bierno hasta los inferiores, procedieron á cutahlar én el terreno mismodel suceso, las mas activas pesquisas <1irigicl:1s,á descubrir los delitos co-rnet.idos y sus illU'lec1i':itosrc~ponsablcs. Su cond uctn omisa en tan Iúg u-bre asunto habría cedido, sin duda, en desdoro del Estado. .

Justo es que yo tribute en, esta l.arte el homenaje q'flOse debe áIos señores Prefecto del Departamento del Centro, .J.'j¡lfe·Municipal ele es, '.11edistrito, Inspector de; Policía- del Estado y de la citada cornnrcu, .rnez2. Q de lo priminal en el Circúito, Fiscales 1.0 y 2.o_del mismo y a¡ cuerpoentero de gendarmes, por 'el ardoroso Y creciente celo con que CHm plie-

. ¡'PIl 'en esta vez, como siempre, SIW delicadas é importantes funciones.Cierto es que 1::1 fisonomía de la causa ofrece en su conjunto algun

hacinamiento de diligencias repetidas, 6 inútiles ó estorbosas, efecto in-declinable ele lu falta de un sistema genera¡ previamente aceptado, y doIa nat.aralezu ele tCi'Ü9 trabajo-tejido en colaboracion, 'N ada quieren de,cir, empero, esos pocos Iunaros en prcsencin del próspero resultado quo'Vino á justificar la táctica ele tales 0111pleados, á darle desem barazo á laaccion de la justicia y á restituir la calma á los espíritus .inquietos, .

Las informaciones sumarias tu rieron qne ser hoterogóneas en S11principio, y lucharon con dificultades.reales. En efecto: el plan bien con,certado de los asesinos hizo que nose encontrasen hnellas, rastros ni se-

_ñales exteriores del crirnon, la fam ilia de la, señora Echcvorri notellia.malquerientes y la honradez de tojos los habitantes del Agu,acatal era.presentada como modelo. . , .

- -Atribuiase cou bastante gel1el'alid~\d dicho infortnnio al señorMeliton Escobar, deudo de la casa, loco, y quien en tíeml'.9s nn terioreshabia dado evidentes muestras de monomanía homicida. A. pesar de IQabsurdo de semejante hipótesis se la admitió, con todo, mornentánea y ..fácilmeute, porque se deseaba encontrar el orígcn de tamañas cala mida"des mas bien IOn.una desgraci» fatal que en concepciones criminales,

N o obstante los expresados obstáculos, y gracias á la activid adde'Ios directores do iustruccion, marchó ésta hábilmente conducida des".dy sus -prirneros pasos, constituyó los .liechos esenciales del procedi-miento, y ha logrado reco gert.od as las pruebas sobro que se funda el~uJode quince de m~yo últ imo, proferido por el soñorTucz 1," de ~Q,. ;.' .

-60-el robo, en el del valor moral y legal de los derechos violados, ss forzo-so que admitamos la necesaria consecuencia de que entre los érímeuQÍide qnevengo hablando figura en primer término, y con carácter de prin- .cipal, el de la muerte violenta duda á las personas q ue habitaban la ca-sa de fa señora Echeverri. Segnn las <¡reencias y los sentimientos delgénero humano y el instinto mismo de los séres animados, la vida es un •dón mas precioso que la propieslad, y la obligacíon de respetarla, la masseria de las prescripciones religiosas y sociales; . .

2.0 El de heridas.para robar, ejecutadas en la persona del niñolIhnuel A: Marulanda, y cuya prueba se ve en los folios anteriormenteexpuestos; y. ,

3. o El de robo de algunos efectos de aquella habitacion. '.Constan del informativo la preexistencia y consiguiente falta •.le

varias cosas. perteneeientes á la familia de la' señora Echeverri, el in-ventario del dinero y de las alhajas' que después se echaron, ménos, 'y.noticias seguras de lo que h'aIl6 en un cerco Evaristo Galeano, y de la"!prendas entregadas'un poco dcspues por Daniel Escobar. Y no han pa-recido todavía los 'efectos uno enumera como perdidos la señora AnaJoaquirra Álvarez, en su de~laracion ele fojas ;33y 34, C. '2.o .

. Se sabia, ademas, que la señora Echeverriestaba regularmenteacomodada, que eu esos di as se le vió dinero á uno de sus deudos y queen la tarde misma del suceso,' y segun la idiota Teresa, "habian quedadoen la casa contando plata". Todo esto se patentiza en la exposiciou fis-cal de veintidos de abril último, á sus fojas 68. .

Los P.9cos datos que exhibe el expediente acerca de 'lci qn8 'en, breve manifestaré, permiten juzgar que los enunciados dclitoafueroa

cometidos en euadrilla. Con todo: como esa faz del asunto 'es la mas gra-ve de todas las que él ofrece, y como de ella fluyen cuestiones de la masalta sígniflcacion, es indispensable que se la discuta aparte Y con. el me-jor acierto posible. . .. V

. .

Debo, pues, examinar si la terrible tragedia del dos de diciembre-del año nutezior fué resultad6-<1eriitá-qüe de un solo agresor, ó de dos 6

.<1P, ruuchos más ~'oIlllmado8 al efecto. ' . .'. .

Daniel Escobar es un j6ven q;ue apénns' va á cumplir veintiunaños, perteneciente á la escuela.sensual y á la del comnni smo práctico,de' corazon y espírjtu corrompidos, de instintos de h,ienu y qus por laaudacia y el frío y despiadado cálculo de que dió muestras en el crimende que se traca, ha logrado elevarse á la talla de los mas insigries malhe-

. chores.•- -

. Este monstruo de maldad confesóal fin y paladinamente su dolí-t,e, cuando se vió acosado por las espléndidas pruebas qne en su contraobran, pretendiendo haber sido suúnico agente y exornando el heeho···con circuusta¡¡cias inadmisibles, y, sobre todo, eon la de que.se vio aco-'metido de golpe por las víctimas. Quiso excluir, sin duda, por medio: de'tales inepcias, 'el grave cargo de dolo ó malicia, 6 favorecer á sus cóm-,plices ó procurar simpatías al porvenir de su causa., . . , •. .. Pues bien: esa confesion, que conforme al artículo 1673 del Códi-gojuc1icial forma prueba contra él, no puede acogerse cuanto á; la e:rccep~. ' . -

.:-81-"eionque -cóntieae ai ésta no se j~lstifica, Y,e~tónces le caerá de lleno lal"e~la Mlal'tíci1lo 1678 del mencionado CÓdIgO -

- Por lo que hace á. las inexactitudes en que incurre Escobar en BUconoceueia dicha, y á las legales y l6gicas apreciaciones á que ellasse pr0",bm, no tengo que hacer otra Calla qué referirme al dictámen fis-cal de la l.a instancia, como Sé ve -de fojas 59 á 62 del C. número 5.°-_ ¿H)lbo imposibilidad física para que Daniel Escobar diera muer-

te, sin compañeros, á seis lJCr~{)nasde la. familia de In:señora Echeverrif¿Se opone ese .heeho á históricos, iguales 6 semejantes acontecimientos,éálo que es ~acedero eJ?-elcurso oi'éllmwi~de 1<!.lll1L'iralez??AnaU~aré.ffl-ntola.fioluc!on afirmativa corno-la negativa, con presenCIa de los da-.--tes recogidos en: el proceso. - - - - - --

Tomo p0r punpo de partida las aseveracionas de que no hay cri-terio riguroso de' lo imposible, y de que en las materias jurídicas di.oha palabra no significa sino lo improbable en sumo grado. Iros qU,eI>OS-tengan otra eosa no harán mas que enaltecer' su infalibilidad y su pro-funda ciencia, .

r • 'Dable le ha sido, con todo,' á la razón humana ayudada pOlOla,experiencia y los prog!esos de la civilizacion, establecer los diferentesgl':tdos de vcrosimilicud rqea., fundan el pr6 ó cl contra de los hechos~tleexami11a, de cualquiera naturaleza que Cp.all, y con mayor 6 menorcerteza moral. _ '

Sentadas las antecedentes premisas paso á hacer visible .que se-gnn las circunstancias esclarecidas en el sumario, á, Daniel Escobar pu-do no sérle muy -difícil el asesinato de la señora Echeverri y de las de-111118 personas que á sus manos perecieron .en la lamentable noche deldos he diciembre último. ' "

, VelÍmos P9r qué.' ,"'.Se encuentra-la. vivienda que ocupó dicha señora en una monta-

ñ,ita aislada, sin otras habitaciones cercanas y algo 'distante 'de los puno-otos Y caminos á donde afluye mayor número de génte~~Sus dimensio-nes no pasan de seis y medio metros de longitud por cuatro de latitud.

_ Escobar, como pr6ximo pariente de la casa y amigo íntimo de~ill{órianó Y de sus otros deudos, i por ser - recibido entre los mismoscon- intimidad y fe, tuvo las ocasiones mas propicias para idear su plan,prever los inconvenientes Y disponerse con tiempo á dominarlos. Don,freouenéia pasa~a algunas noches en aquel apacible hogar, y se presume-que aéíacouteció en la del suceso, por haberse encontrado en la maña- .na del tres de diciembre euat.ro almohadas en la cama de Sinforiano.V éanse á este prop6sito los certificados constantes en los folios 304 delC. 3~· y.37 del 5°. . .

El arma con que se consumó el sacrificio y <'luepertenecia á lafamilia, fué de peso, contundente y cortante, segun dicen los prácticosreconocedores y lo demuestran sus terribles consecuencias. No se en-sontró en el teatro de .la escena mas que el hacha de la casa, ensangren-1I'ada, y aunque sea positivo que los peritos digan que varias 'de las he-ridas- ele los cadáveres se les eausaron con instrumentos afilados, debatenerse en cuenta, que las hachas son á la vez de esta clase, y que pro-ducen diferentes efectos segun la fuerzá con que caigan y los movimien-.tos de las personas contra quienes se dirijan. N ótese tIue las 'declara- '

, ,

~ti9--(}iol1esde los peritos no contienen en esta parte la- apetecible DJez:t.,, En -los asesinatos que so cometen por .venganza no son raras it.ienen explicacion, las lesiones atroces que á las víctimas se infie:cllpuesto qué los' agresores son movidos por motivos poderosos y estricta-mento personales. No es comun tal' fenómeno en los que se realizan conmiras de latrocinio, porque en esos casos el odio no conduce al ;¡gente.

, Si pues Daniel Esco bar no abrigaba respecto de la familia de laseñora Ech~ve~'l'i, sino sentimientos de g,ratitud,' ÍL fuer d~plS dí-trias yestrechas i'elnciones con esa casa, ra2011 ñay parar presunnr que los ac-cesorios de insólita crueldad COlLQJlo-ataviósu crimen, se debieron á'la;ch'cul1sf~ilCia de h:1~el'-4'.vrrf(f6-queharbérs,ela~ sól~ contra bas~arnt_e~.J.)~r-_

-¡¡onas, y a la urgencia de poner pronto, término a ln:aGatásn-Of-e. '.' .En gracia apénas de los argumentos explanados, pues omito al

. gunos más por 1;¡0 hacerme .demasiado difuso, 'Venga quién quiera quejuzgue las cosas sin prevenciones científicas ni de ninguna otra. clase,y diga si existe imposibilidad intrínseca para que el atroz drama del.dos de diciembre haya podido pasar delmoc1o siguiente:' .

'. Daniel Esco bar estu va casi todo el expresado dia en la habitaciónde la señora Echeverri y se retiró cerca de la hora de oraciones;'

. 'Vuelve allí ~lllPO?O ~ntrada._ Ia_ll~,-se-entret~ie?e con sus'pl'l.-rientes en conversaciones ll1tlJU"l5J~sc_acuesta con sutraí clonado amigo,scgnn su habitual co~tmuIJfe; '. . - . .

. Espía.el- sueño -de esas 'desventuradas personas y cuando notaque ~8profundo, C03a que le es fácil porque á virtud de lo reducido delrecinto se acostaban formando casi grupos cercanos, se levanta con cau- .teloso tiento, toma en sus manos de leñador una hacha dela oasa.Ia diri- .ge violentamente contra el único sér que en esos fnstantes suprcmospo-dia opouerletcmible resistencia, y úntos de que la familia, sc--de-cuenta .del peligro ·.que la amenazacel honrado Sinforiano 'y_taI:"'éz su infeliz pa- .dre, estan sacrificados; y' j.__- .- _ .,'. .

Despiertas ya las 'mujeres.de las cunles una es anciana.otra imbé-cil y todas COD<ll'dcs,estupefactas ante. el espectáculo que á su vista tie-nen y con sus fuerzas. físicas deprimidas y las morales aniquiladas, nooponen resistencia ó 1:1 presentan débil. Fácil le es entónces al asesino'despedazarlas con reci-os golpes dados en campo estrecho, recoger el .dinero, las alhajas 'J los demas objetos de su ambición, y marcharseébrio de sangre, á dórníir con bestial calma en un cortij o cercano.

. El drama 'desdé su irrioiacion hasta el desenlace pudo ocupar po-cos momentos. _

-- ---'. -~fdle-liJ.úítadoá exponer ernísTa parte una de las hipótesis que(Te la- actual gravísima causa se deducen, y que no se opone al curso de.Ios ..acontecimientos humanos. JI\ada aseguro ni niego tocante á ella,aunque sí Ia estimo e~ extremo .plausible, . .' . . ..

De fojas 310 á 342 del C. número .3.0 aparece la exposicion mé-r:dice-legal del señor doctor Manuel Vicente de La Rache, documentonotable por muchoa aspectos, y que en todos sus puntos respira la ciencia,y los buenos deseos de su autor. La causa del órden, lit de la justicia y la.de la jndustria del país deben mucho al señor doctor do La Rache. . .. . . J;~lpensamiento dominante en dicho trabajo consiste eusuponer,

la coexistencia de varios cómplices en la' ejecución del delito, y su l1lé~;

':"-133---:, ,todo no es' el sencillo Y lógico de examinar los efectos para subir á suC,tU~~",sino en dar por sentada ésta para descender en, seguida á los pri-raeros. Semoj ante táctica es falaz las mas de las 'veces, y conduce á con-clusiones erróneas.. ;; ".

Desde luego que ninguna de las dos analizadas hipótesis desean-sa sobre pruebas directas; pero la qne me ha tocado exponer corno pro~pia, se"eucn-elltI:a .mas 'en armonía con las circunetancias.de lugar, tiem-

.po, personas y cosas que rodearon al tétrico crimen del dos de diciembre.. Couforme al artículo 1751 del. Códigojuc1icial, "las declaracio-

nes ele los facul tat.ivos, ,peritos 6 reconocedores sobrelos hechos que es-tan sujetos á los sentidos, y sobre los que segun ,Sil arte, profesion úoficio expongan con seguridad corno consecuencia de aquellos hechos,Iormauuua prueba testimonial; pero lo que digan segun lo que presu-man, 110 formará, lilas que una prueba de indicios jnas Ó ménos grave S~"gun fuere mayor ó menor la pericia de. los que declaren y el grado decert.iduuibro Clanque depongan". . ',', . . . El testimonio elel ilustrado prefesordc que acabo 'ele hablar esla sístesis de todos los reeonoeirnienbos praot.icaclos en la causa; y pro-duce completa certidumbre respecto de las heridas hechas á los miem-bros de la familia Eeheverri, de su situacion y de sus mortales resul-taJos. .

, Porio que hace á los demas a:atosdel proceso; esto es, ~ todosaquellos cuya prueba. no está sujeta á reglas 'especificas, es, necesario

-admitir las ordinarias y reconocer, al propio tiempo, que las declaracio-iies del estimable doctor de La Roche no operan la conviceion de lo q~ equiso demostrar; y que su odio al crím.cn, ó tal vez preocupaciones deescuela, pudieron encaminarlo á consecuencias, bizarras. . .. .

¿Dable le será {~la. ciencia 'médica descubrir por medio de especu~ladones abstractas y de preooncebidos sistemas, el, número dé los asesi-nos de la scñoraEcheverri y de sus deudos, los diálogos que tuvieron, elórden succsi \'0, en que fueron desapareciendo las personas inmoladas; y;en una palabra, hasta las mas Ínfimas peripecias de esa sangrienta esce-na?- Si se reflexiona que todo eso 'pasó sin testigos en el silencio de la RO-che, y que esas cosas son de las que entran ijar los sentidos y no deman-dan para su conocimiento especiales estudios, parece que la coritestaciónnegati va {. tal pregunta cae por su propio peso. .., . Lo que importa, pues, en los negocios áe esta clase es agrupar to~

das las circunstancias, deslindarlas, referir cada Una de ellas á su verda-dero orígen y establecer sus vínculos con el punto.que se ventile. Ciertoes que se conocen las causas por los efectos, pero es.ouaudo se justifiqueqlte estos no han podido nacer sino de la fuente á que se' atribuyen.

Lo .anted icho me autoriza para sostener que el aparato conjetu-ral del señor <lactar La Hache condnce, á lo sumo, á dejar presumir qualos hechos pal pífantes elel dosd.e (~i~iembre pudieror; pasar del modo co-rno lo expresa; mas nunca, que infaliblemente sucedieron de tal modo, y€J.uelloda version contraria queda excluida. - .

- Obran, con todo, en el sumario algunas particularidades.segun lascuales puede. sospceharsequoDaniel: Escobar ,.,í tuvo socios en la perpe-traeiou de sus infames clelitos. -

Son estas :•

. 'Se 'sabe ya, y es un hecho palpablementecomprobndo por la con-fosion de Esco bar, que el viérnes veintiocho de noviembre últ imo. in vi.taba éste con nhindo á Francisco Bonet para que fuesen á robar en la, ca"sa deja señora Echeverri y en la del señor Luis María Londoño, deta-llándole los planes del ataque, la licitud del acto y la necesidad de darmuerte á esas dos familias. Luego necesitaba auxilio-para sus perversas'maniobras. .

Si fuera cierto, como dice él, que ninguna otra persona tornó par-.te en la matanza y apropiaeion de las cosas robadas, y no habiendo de-yuel to sino unas pocas; cabe preguntar ¿d6ndeexisten las que so han echa-do ménos, y de 'las cunleshablan jdarcoAntouio Aroila al folio 202 deltercer cuaderno y Ana Joaquina .Alvarez á los.33 y 3~ del segundo? Pro-bablemente en poder de sus colaJoradores., . ' .• . Q Debe .advertirse, sin embargo, que no está del todo bien justifica-da laprccxistenoia inmediatamente anterior de esos efectns,y que es po-sible que Escobar haya entregado solo algunas de tales prendas reserván-dose las otras, Con las especies metálicas: ,. '. EL testimonio del niño Man uel Salvador Escobar, uno de los tres'que en esa noche de horrores quedaron con vida, y de cuyas revelacio-nes nos prometiamos quo brotaría la verdad de los hechos, vino desgra-

,ciadamente á defraudar tales esperanzas por sus numerosas contradiccio-nes, contrasentidos é imaginarios recuerdos, (Acerca dedicho punto léa-se el dictamen fiscal de primera instancia en sus fojas de la 68 á la 70;-cuaderno 5.°). , .

Puede serqne ese inocente niño sea el medio reservado por la pro-videncia, para -que mas tarde se descubran las causas, incidentes 'Y esce-nas del tenebroso Suceso en que figuró como, espectador. .

En Ia casa de la señora Echeverri aparecieron varios objetos yagastados y que parece servían en otro tiempo para la fabricación de mo-'neja. Nada ha podido adelantarse acerca de esto, y he llegaclo á, sospe-eh ¡a' que la existencia allí- eleesos materiales y utensilios, esté ligada conalgun hecho grave que haga relacion 'y haya dado orígen al delito deque se. trata; pero mis sospechas no pasan de simples inducciones.

Evaristo Galeano es un hombre de grotesca y repugnante catadu-ra, de carácter moral indefinible y qne tal 'Vez se escapó á su formaeion,

'. si así decirse puede, cuando apénas habia empezado á entrar en ella .el'elemento de las facultades inteleetuales. . , . .

. . Las innúmeras y notables contradicciones 'de.Galeano con todo elséquito de' sus evidentes errores, son cosas que refiere fi€lmente el' señor'Fiscal de la La instancia en su citada vista, y seria tedioso repetirlas;'Baste observar 'que divaga siempre, que no 'se fija ni sostiene en nada,que confesó su complicidad en el crimen en la primera de sus indagato-

.rias y la uiega despues, que empieza comprometiendo á..personas desco-nocidas ó 'ausentes, y aun á dos de sus hermanos., y acaba por señalar áDaniel como héroe de la jornada, en unionde otros, despues que lo viódetenido ó preso (Fojas de la 63 á la!65, y ele la 73 á la 76, cuaderno 3.°)... ' '. .N.o obstante esto, las palabras y la conducta de dicho hombre sonla base ae casi todo el sumario, :r el punto céntrico á donde convergell

. - . -

,

~65~·lag cuestiones priudpales etc! <lebate.V eám:os si el lns sUlllini"stran dato!;'Bólidos contra 108 demas sindicados, y, sobre todo, si sirven para demos- 'ti'ar el hecho de la cuadrilla, que es lo qne por ahora se encuentra en tela<1eexámen. ' . ,..-

-El artículo 1699 del Código judicial dice así: "No hará fe el di-cho del testigo que se contradiga not.alrlemcutc ft sí mismo .en cuanto al

, modo, litga,r, tiempo y dornas circunstancias del hecho". -Segun esta dis-:posicioneriuatla empeqen, pueS', las' declaraciones de Galeauo contra sussupuestos compañeros. " .'.. , . Puede ser que se las estime en el caso de poderle producir con-vicciones morales al Jurado de' calificaciou, ya que' la ley nada determi-ña-aeerce de la plenitud, cantidad y suficiencia de las pruebas-que ante'él. se aduzcan, y' quelo deja todo' á su criterio. Consideraré el asunto pOI'este lad O; ., .', '',' ,. Grave es por' su d'elicac1'anaturuleza la teoría de lasafeccion ea de'la mentc, acerca de In; cual noostan en perfecto acuerdo los autores qua'le han dedicado su estudio y sus vigilias. - , , ', . Convienen los más, .e~ ai, en comprender bajo dicho título no so-.l-arnente los desórderrés claros de las facultades intelectuales, que' cons-titllyen la locura' propiamente dicha, mas tambien la imperfeccion y ls•.ausencia de tales facultades, que caracterizan la imbecilidad y' el idio-tismo. .', 'Por muy visible que sea el tipo de cada una (le ellas, es fovsoso'reconocer que clesde' el delirio limitado hasta el mas general, y desde elpxirner punto de la atonía de la razon hasta la demencia completa, exis-(e uua multitud de vat-iaciones ó grados intermediarios de difícil apre-cio: y .de mas' difícil prueba .. " ,: .Presentan á veces esa confusa mezcla de razon y de delirio que se'denomina locura; razouante, !=l ue tanto·tacto requienq:J.a'l'a'su exacta de-termiuacion y que no siempre. permiten se deslinden bien el juicio y-Ia;insania, :el desórden y el.genio, ' . ,

.. ..' N o me dotondré mucho en esta materia, ora porque mayores di-vngseiones serian' poco propias' de escritos corno el presente, ,y ora por-'que carezco de las nociones necesarias para discutirla á fondo .

. r Lá,enajenacion- mental se justifica en los negocios criminales porel testimorrio.de expertos, por cuanto es 'un asunto que requiere conocí-mientas espeCÍficos. Con nodo ; no son'de rechazarse las pruebas que di-manen ¿te otras fuentes, y mucho mas si provienen deverflonas que ha-yan vivido' en intimidad conla de la cuestión, 6 que la hayan tratadodesde su infaneia.' Los Jueces' que desoyen las últimas de esas pruebas semanejan con imprudencia, y los que se atienen á' las primeras, tomándo-lal>.corno una inapelable decisión, sacrifican su-deber y obran como ciegos.

, Tanto mas preciso es esto en los países en que, como el nuescro,la justicia penal se administra, por medió del J urado, pues á éste debenpresentárselo todos Losdatos que sea posible'l'ecoger,. de cualquiera ela-

,!le qlle sean.,. . " '

Parciendo del principio de que ~spor el conjunto de los hsohos:y. de. las eircunstauciae como los Magistrados deben formar sus juicios'sobre la momlidad de los que se digan atacados de locura, fijémonos ya'en, saber si Evaristo Galeano sufre perturbacion en sus facultades. men-:O'

~(j6-•

tales, ó si al eontrnrio, b,ne cOlicicllcia de sus actos y conoce las relacio-11es entre el bien y él mal. .

Cuando las -facultades animales y vitales se ejercen en nosotros li-bremente, las domas obran tam bien sin entrabas y decimos que estamos'cuerdos, '/l.parecc así' para todo individuo una cierta manera de ser' dstodo punto análoga á la de los' otros, pu 3S las anomalías aparentes qlleen ocasiones resultan nacen de la divo] si lad de educacion, de posicion so.ejal ú ele fortuna.

Empero: si dicha analogía desaparece de-una manera inexplica.blo, ó si una persona dada no recibe de los objetos comunes las mismaspercepciones que los dern ns horn bres, si no asocia las mismas ideásque es-tos 6 solo admite las qne tenazmente le incrustan sus parientes y ami.!70s; y si sus creencias son desmentidas por. ~a opiniou general, .sosteue-~lOSentóncos que, en esa persona está suprimida la concieucia.vq u~ nocom preud«, por lo mismo, ni los mot ivos ni las consecueucias de sus ac-cioues, y que SIl ¡,feccion]Jertenece á la, imbecilidad, al delirio ó á cual.quiera de las otras especies de esa gran familia. . ,

Corno desde. que curnenzaron las primeras diligencias, del infor-mativo se decia de pública voz que Evaristo Gnlcano no disfl"lltaha delcabal desarrollo de sus fueultados intelectualeasa le hizo reconocer por

Jos ilustrados médico-legistas señores doctores Manuel Uríbe .Á.ugel;:{\tr-rellano y Anc1res l"osada y Antonio J. Naranjo. El éxito de la consultaconsta á los folios 349 y 350 del C: número 3.0 . , ..

... - .Dijeron allí los expresados sefiores que "Galeano es un hombrecuyas facultaCle&.iutelectua.les son muy obtusas, pero' que sí tiene 'COl¡~ciencia y malicia de lo que dice".. . ... . .

. . Hespeto mucho esta consulta corno que parte de profesores muyversados en la ciencia médica, y en la que se ocupa en el análisis delpensamiento -ydcl alma. Se me dispensará, con todo, que ·le dirija. al"gunas objeciones. . '.:. ..

-. Siun entendimiento muy obtuso está separado de otro que no loel! tanto·apénas.por mÜI linea impe.rceptible, y ¡,Í cabalmente esa graví-sima imperfeceion .es lo que cC!t1stituye la imbecilidad propiamente di-cha, . no s~ cómo es que se sostiene en la pieza que Con timidez· decri-mino, que los que se ellC)lentran en tal estado tienen .oonoienein de los'rr¡o,tivos de sus actos, y conocen el necesario enlacee"ntre el delito ysus castigos. .'. . ..'.".. . .. En la compar}lcioll que se haga entre dos hombres inteligentes,verbi-gracia, puede haber mas ó ménos; pera en la que se emprenda en-tre cualquiera de estos y otro que ostente sus facultades moralesinui/.obt'ttsas,habrá de reconocerse iudeclinablementsL, profunda diferencia.que -existn entre lucordura normal y alguna de.las afecciones de la men-te que la ciencia. desoribe.. .. ..' . :." .. ,. Mas todavíar. del sumario y deIas ampliaciones últimas ·que 'es-

·timé conveuiento hacer practicar, consta de una madera plena y por eltestimonio <fe personas que conOl"Cllá Galeano desde mucho -t.iempo'at.ras, ó que han vivido con él eníntimo contaeto, ya que carece de sen-tido cornun, y ya que en toda la fracción de su morada se le t.ilda de 'bo-bo. Se sabe queen el lenguaje de nuestro pueblo dicha palabra es .sinó-nima ele la de imbécU. . ... _ . . .

,

T;a triF¡te aituncion de Evavisto se deduce del hecho mismo en- . . ' '

que pretende haber tenido pal,te. En efecto: ¿habrá áJguien, que no es-té acometidoPQr la, mas lleplorable insania, que se cO-U1prometá á pres-tar ayuda palón;el asesinato de. seis parsonas con.la perspectiva de tenerque pasar toda su vida en un. presidio, y solo con el aliciente de ganarunos pocos peso:!, Ó una estl'ibera,-ó dos tercios de rnaíz,ó baratijas así'?La contcstaciOILafirmativa á tal pregunta cquivaldria iÍ tanto como Ú.lIcq¡tar él absurdo, ó ú. sostener que Iiuy acciones sin motivos, Ó que elc.ora:b011humano tiene sentimientos inútiles.y si es que concurre al Jurado de onlificacion, Pon su caso, sumi-n1strará en las audiencias, argumentos. ctd -honiiuen. sobre este. punto;que aquel tribunalacogerá- e1l10 .que valgan. . '

. . Me he detenido mas tiempo del que pens¡1ba invertir en el exá-men do la presente tésis, porque la gradúo la clave del asunto, y porqnelos errores ctr la apreciacion de las' circunstancias que_cOllsti~uyell la 10-curacen todas BlIS forrnasyeon particularmente terribles. en los juicioscriminales. ' .

Pero sea de esto lo que sea, y téngase á Everisto Galeano .comoenajenado 6 siquier como bobo, abrigo casi QvideJiciiJ.de quena coope-ró de ningun modo á la ejecucion del delito del-dos de diciembre tantasveces-,dicho - - . ,

. . ",Me fundo im lo qt~e paso á exponer.- .El plan para la consumacion de ese feroz hecho fué hábilmel1ta

combinado; .sieudo podo mismo increíble que un hombre de la vivezaytana de Daniel Escobar, se hubiera valido para darle cima delministe-ríodel _apocado Galeano. Ningunas garantías daba éste, ofrecia el cons-tante peligro de revelaciones indiscretas y habria sido preciso ser . tanll~enguado como él para contar con su apoY9· . ..

Se 'dirá, empero, que Evaristo pudo encontral:se casualmente enel :teatro del drama á virtud de sus costumbres vagai:\lundas, probadasen el sumario, y que para comprometerlo al silencio se hizo forzoso -exi-gir:y ~btelleI: ~u concurso criminal. ¿Y no se presentaba oonio nredio masé,xped1to la pronta mue-rte <le ese hombre deItan microsc6pióa valía?·ÓAl bandido que en esa noche de horrores pudo aoallar las VOGesde la&angn;, de1a.gl'atitud y de l:¡.a:rp.istad, le. importaba algo tU(h, víctimaniás después de".las €JIUi .Ya había inmolado, sobre todo cuando 81' inte-res lo démandaba y cuando 'sabia qU:~'las ~i:ll1ibas,no !loiI.aél;~dora;;? .-

.Verdad es que cuando llega la catástrofe. de toa,:> crnnen, el de-lirio y la embriaguez qlle agitan al delincuente hacen que no conserveen todo el juego de 'su razonvde donde provienen sin duda esas inadver-tencios y faltas que mas tarde-lo -persiguen ante la just.icia humanavyque hicieron decir á los'ailtigl1os: . Q~tOS Vt~ltperdere Jiepiter, démentat~Nótese, sin embargo, que Daniel-Escobár ha -dado muestras de estoicacalma en todo .el curso del informati vo, que ~as emociones que se le 'hanBórprendido nacen de miedo y no de remordimiento, y que aun supo-nién-dole d~seuidos en lacomision de sus infames actos; no es presumi~

. ble los, llevara hasta el-punto de .respetar la existencia del que pudieraperderlo. ' . . .

. Obran, además, -::i,lgunos datos en el informativo, sep:U1l"1oscua-.lcs puede creerse que GaleaRo durrnié el dos ele dicierhhre último en la

.' " _ _ 1. ,

r:n8!'i de EiU hC'l'lU:JIJO Santiago, en la cual vivia habitualmente éil,' er,'oitiempos, La prueba no es completa porque procede del testimonio dé'personas (o1Q familia, pero sobre ella: sí pueden basarse algunas, presun-'eioncs (Véanse á este fln los ¿~ocumentQs eonstantt:!s á fójas 61 C. 1.0,;151 C. 4.3 y 16 ,á 18 del 5.°). Aun cuando Santiago GaleaIoio contradice'semejante asercion, es mayor el uíúrrrero doIos que la sostienen: J uan da'la Cruz Ovsa hace ap'artlCCr á Damiana Gómez com'ocont"ra'dicha con-sigo misma, mas lo qU,e dice csce tes'tigo no lo asevera ningun otro.

Cierto es que algunas ¡Je las narraéiones (lel cuitado Ev--aI'istdcoincidan con algunos hochos reales deIn causa, lo que permite oreer'que sí ertuvc en el lugar del' aeol~tecim'iento, Refi'exiónesc' en esta parte:qúe pudo saberlo 'desde ántes ~, causa de la entra'cl'l\ que' tenia en la ca-'sa de la señora Echevcrá, ó haberlo, oido 'decl'r de8pues en razon dolpoco sigito que en la secuela del sumario se tuvo. Véahse á este respec-'to las declaraciollesde los mas do los funeionarios encarga"dos d'e serna-jante tarea,' las cuajes corren en el cuaderno de I¡rs-amp'li'a.cioiles veri-' 'ficadas á mi eJtcitacioll. Dice[l esos señores que con motivo' deJa magní-'tudde Ios-héohos, del litan por 'el descub"imiento de' sus áu'tores y de'Ia curiosidad tan poderosa'lll;ente c1üspe:rtada; no pudo lo~r~rse que lostestigos, los peritos y los in:teresMos gual'darall.' silerroio' sobre lo qu:eBe les preguntaba, ni impedirse q [10 con versaran' en público 'ácei'iJa de'las noticias que acrquirian, Galeano estaba de plautouen la casa' lt' donede afl.uia, la mayor conc'U\'l'elwiai de personas,.. . - . , .

'-;', ~Pe' he referido 'á' Ios e"stribos de ra-monturn de Sinfol'iano E'SC'oc-.bar, y llamo vuestra atencioll'líácia ras almen'drisr~e oro y las piezas detopa que d:e~a:IY¡H'ecieronde la' casa de I'a señora Echeveú'i; que es á,lolq ue se c.6rftrae Evaristo en varias de' sus' 'd'ec!'m;aciones" ,

- Me lisonjeo dehabéi.' hec&o' \~isi:bleha:sta a1qu1í:quo el cuerpo de~delito de cUádrilladernalhechorcs' no resulta directamente establecido'en él i'ri.t:ormati vo, porque de'¡:iondi'end'o su existenci:;t-d'e la mancomuni-'dad de mas d~ dos delincuentes para cometoi- uno óvariQS hechos cri-:millosos, talindi.'cliLJab-le 'cÍl'cunstan-6ia' no' so' vé comprobada.' Queda'destruido el valor moral y legal .de las rlecl'a,ra-ciOll,a,rde-Evaristo Galea-'no, quc.'s¿ria:n llis que podt:ian narré verós'imHitud' á dicho cíú'go grava;'V por' lo que 'hace á Jos indicios que existe)1' contra oñros sindicados, in.clepéndieiJteJÍieilte de Dauiel Escobar y. Evaristo Galeano; en: breve me'ócuparédé. éil0S." , , ' " ,.•• ' • - -' t, '. ' .' . . ", ~ "'. l _ > • • •

. ,,'Si el' Tribuna¡ SuperiOl: del Estadó: 6 el Jurado de .acü.saéion" eli~.ll'caso, de,~\lrn1Ínaren' el enj lliciam'iehto: de Manuel k. Escobar 1,'Frau-ciscó Parra ~álias bla-noo), ó de alguno de éllos, y, á m'érito' de los datos'que IOR' afectan, qu'ec1aráu eobstituielos por ende tanto el',nú.,nel'o de'cuadrillCl~osque para la: ()ali-ficacion: de este delito l:eqUiei..e:él' eódigo',.Como ,su doloso concierfo. , ',': '- " J ~ '.. •

. ' , De otra manera ,seria necesario, aceptan 'eHiñ.l>tlsjblé' fuh'6meno,da'que tres, 6 mas ,malhechores pueden. concebir. sepal;adañiellte'üri>-pensa~'nüento'Cl'illlilJ¡ll -de una misma, clase, afrontar Jos pl:opios,medios¡: ensé'ontrarse a la vez en un punto dado y realizar el hecho con iguales ar~'Mas,. '¡'al cosa seria. la, mas casual, de las, casualídades iínaginables.'

FaBO, á otTa GQel,a;" , '. ,,

-,/30-..-VI

Jtl mal del delito cohRiael'n~lo .en' sí mismo con.s~Ülly"Cla moral! •.dad del Ilcto;y las condiciones dé malicia, lihcrtad é illti:1igcncia COIl

Bue aquel .!'~f¡ay!). ,cn~nplido~ forman la .inomliclad del agente. .. Expnest,\s en los números antorrores todos los'argHmentos ,qne

;i;;ecombinan cO}1!2J..c.rímende Agn:lcatal y sus comprobantes, <1ehoocu-l)armc en seguida en los que conciernen á sus inmediatos re¡.;ponsables.'. El informativo ¡;jnc}ic¡t como autores, oónrplicesó encubridoresd.eese de~or~e p.eeJlOJt los señores.Dnniel '1 Manuel A. ~~cobar,Ev;-¡'rrsto, Emigdio y Santiago Galcano, Francisco PaITa' (alIas blanco),Francisco Parra (álias negr.o 6 tambien zonzo) .y Francisco Bonet. ..

y como qriiera qne el auto de quince. de niayo {Mimo pronuncia-,do porel señor .Iuez l/'de,lo erirniunl. eÍ1eRtp Circúifo, eucausa dircc-tameute á Daniel Escobar y á Evaristo Galeano por 10:0, hechos de ho-micidio, robo y heridas ejecutarlos en Ilf casa c13la senora Eohevcrri, y:que tal providencia r¡.pfue apelada por los procesados,' es evidente quo-en esa parte no mo toca ejercer fuucioucs dé ningun género ..

Poro sí debo hacerlo cuanto á los .expuestos' Daniel y E\'Misto1)()1' lo que.vrespectaé la iroputation (le G1Ul\)¡;IICl'osque sé 'les hace; ytambieli en lo .quo resulta contra los c1e!11aSsind icados, y pOl' ~a totali-Jhd de los capítulos que han sido la; materia del exá~llen.. .' -- . 1'01' fortuna para mí, el seuor FiscalJ. o de este Circúito con don-só' en su valiente dictárnen de' vaiutidos ele abril 'próximo ra~at1o, ,laspruebas de toda clase que; los autos -arrojan pqlltr;'í Daniel }1~s'cobary;l'~Yar,istoGaleano, corno puede verse .de las fojas 70 vuol ta á la, 7,2, Y deésta ála 76 del 5.° C. Hepl'O(}UZCocon gl1stotan notables documentos ..

_ y como c1c1)Qcontraerme ya á los .iüd icios que fluyen de la 'cau-.sa á cargo de los restantes sindicados, y dicho nsu IIto .es .de Il1arcacl~:importancia, habréis do permitirme qne lo considere in extenso y eú uú-ínero distinto, ' .' .

VII·La imputación crinrinosa és la declarat.ori:t' del poder competen,

t,p qlle afirma la culpabilidad de,unind~yiduo, corno autor rosponsublc.d~ uu hecho que la ley proliibe, - . .. .'.. Segun el artículo 1638 del Góc1igo judioial, "p~ra que ¡fude~la,

re conlugar-al scguirnientode ea11sa se necesita que haya plena pruebade lu existencia del delito, y porIo ménosun testigo idóneo ó grayellindicios contra alguno ó 111gul1o¡;;". .' . .. .. . .. ...

Conforme al 1039 e1el expuesto Código, en su segunda parte,~'se convocará. Jurado de acusacion cuando no existiendo la prueba neocesarla para dar lugar á formacion de causa, hay por lo ménos uno Qmas indicios contra determinados individuos de ser re:spons!).blel:ldel de-~ito, esté ó no plenq.mente comprobado el cuerpo de éste)!.'. : Corno los elementos 9.0 eoqyipcion que ,el sumario exhibe cont ralos últimos cinco sindicados de que sé trató mas airiba, y e:¡¡..cluyéndo,~ á ;Fra~,cis\lo Bonet, ~ quien pie.nso~lQdic~r~Gun capítl\ lo <t¡:¡podal,,pro,

. vienen ,de conjeturas; presuncionee 6 argumel}tos, 'es forzoso qU,ediga.plgllna cosa acerca de semejante matenia, .. '

S;ompi'endeis tanto 'corno io qlle prlH~bª,.f! iI!qir.ec~~s 6 cinml1l.h

"';')- I t. --

tnncia](',9 son lns que se infieren de uno ó varios hechos GH'-"al)ri('{¡n{lo~'ciUIrledi'ltamC'llt\' ::\1prineip:¡i nos permiten concluir qt1~\&'~tc.'lla existido,ó 'que illgnna jJ('1'80na lo h" ejccutndo. Se fundan, pues, en deduccionestan v.ai'i:~dascome sujctns á error.' .... ~

' Hay eircunst.arH·,ias gl1e :l1lment.:'m la probabilidad del punto quese inquiere y se denominan corroboratioae, y otras que la diúuilJuycny llevan el uom hro t1e,illjirJ)f.Clti él ((S, IJa grande util idad de estas co nsidc-:rileiones es 'la de ofrecer u 11' criterio seguro respecto de la fuerza de u !1;-\ ,

prueba dada. ' , ' '" ' " ' ' '.El valor, pues, de tales merlios de, eomprobaeion depende de ,~li

1Iíllneró.'ó importaneia, de surecíproeo cnlaee, de su, varicdud y de suooherencia mas 6. méuos ,íntima con las cuestioiJes que se examinen. " -, ' Acerca d~ todo esto véase lo' que dispone el parágrafo 6.°, título',. L' b ' , ° dIe' el' " J - " ¡ ,'!>., 1 1'03. (' ,o .lgo JnCllc,a.- ,';,,', , 'C.', :

, N o es' posible segnir tÍ ICJii crimjl).aliata~ ,en la nomenolatura , d,olas señales y acciones que cons{ituyen los indicios, ni enIas reglas con-cernientos á su graduacion, porque no 'es fácil' subdividir y clasifioarIoqneJe suyq es indivisible, nicomporior unaosealn regulurpara apreciar-los en abstracto. CoiJsic1érese qué no púec1ene~stimane bien sirro en ca-da 'caso particular, que toman diferentes f'órmas segun las circunstaüccias yquo las corn binacionos de éstas son infinitas. Así" pues, 110 pne:den dictarse preceptos infalibles relativamente á estaelase éle pruebas.' _. ,Con todo: para valuarlasd« la manera ménos slljet:¡. á 'Íncqnv,e-nientes, aconsejan laciencia y l:.í.práctica el empleo de 1013 siguientesmedios: , ; , ',..,

,1.", AdmitÍrlas todas y no desechar l1ingnl1a,'p0l'que si produeenefecto son útiles, y de no, inocentes; , ' "'2.°' Proceder 'con ánimo recto al deslinde ele los diversos hechosprobatorios, estudiar su naturaleza intrínseca, , referir cada uno de ellosá la causa de donde dimane, y cuando hubiere pluralidaddo éstas fijar.se en la qne positivamente lohaya prodncido; ','

, ·3.,° Prestar ~~stenida atencion á las 'suposiciones iufirmativnsque puedan aplicarse á cada uno ele tales hechos, esto es, detenerse' enel exárnen de las circunstancias accesorias que por-disminuir 6 aumon-tal' su fuerza, ó justifican ó C!-~stJ.'ny.en,.) hacen mas ó méuos probable .eLpunto que- se discute; "

4.° N o debe prescindirso de alguna d,!) tales 'prnebas en razon de ,su,debilidad ó porque no sean concluyentes; ni concluir' de antemanoque su reunion será ineficaz por la insuficjencia separada de sus parteselMnentales' y'." "',' , , '"", ,

-, " 5.9 .Sobre todo, y mas que todo. Es necesario ir del hecho-áIa in.ieneiony'no de ésta á aquel, para no confundir los efectos con las -cau-sas, y porque si se pre"uponell arbitrariamente el delito' 6 laoriminali-dad del agente, hacedero es agrupar al 'rededorda cualquiera ele est.as:}¡ipótésis 'ünamultitud -de datos' secundarios de engañosa apariencia,queproducirán gr'an resnltado,sobre losespíritus irreflexivos, y funestasoonsecuenoird. Tal procedimiento está condenado por la justiéiay por la,lOgica., -", ,'~', . ' , ," , • i; ,;;:" ,

.Aplioando dichas maximlls,ysin ideas preestablecidas, m(l:he de-iicado con t.esonal iúá~nriuucioso estudio de todos y cada unoxdc los'

~1·--~.¡ --., l' , ., , 1 1 . a' 1 1 r: f17)(WIOS que contra la ln.nYOY1~ 1 e ossm leal l1é1 se venen c. GX¡W.ü!C:L0,

y jfa q\~e :iI;énas obran j ustificaciones directas á cargo de Duúil'1 Esco-bar y Evaristo Galeauo. . '.. . ,

Respecto de las conoconcias de estos, do.su mérito legal y de Iasrazones que hay en contra -Ie la del último en vistu del estado do SIlS fa-eultades intelectuales, se dijo Y:L lo suficiente. Cunforrue Ú la jmisprudcn-c,a dl! algunos.pueblosuose tiene p(~r proeha completa la sonfcsio n ju-dicial del acusado, sino miando cqnst.a el hecho (kl delito y existe algu·11,asemiplena probanza por cuenta deaquel. La ox poriencin ha venido iÍcomprobar l~ sabiduría. de semejante Inst.it.ucion.cpues se han presenta-do dolorosísimos casos en que los hombres se han c.uupromcti.lo {¡, sí mis-mos, mintiendo, é inspirados por jactancias torpes, 6 por sent.imicntos pa-tl'i6ticos,ú. por odio á l,a vida; <.. por mentecatez,ú.pol' f:U1~\tislllOreligio-8Q,J)0! ítico ó filosófico. . . '.' .. .."" Conviene, observar que en 01 informat.ivo se notan algunos datos,

que menoscaban. bastante la importancia d,e los que contra 108 sindica-dos entraña el proocso, . .

. Son los siguientes:Daniel El'cobar ha. sostenido constantemente en todas lag partes-

d¡lI'sur..¡a'rÍo que con él se han rozado, y con especia lid ad en su-confesionjurídica, que f.lé_el.exclllsivoautor do todos los delitos cjl'olltados en-lanoche del dos de diciembre de 1873. Cierto es que le añadió á la cit:ldi¡'coufcsion pnrticularidades falsas;, pero .lo priuoipal de ella algun ef('<:(oproduce y puede hacer presumir, al rnéuos, qlle en semejante punto ma- .nif'estó la verdad. Sin.tales emhustestal vez el auto calificativo se habria.dictado <le otro modo, puesto que si~ ellos se concederia mayor vfrnn-quczaá las palabras del sindicado. .

. . .' , .. .. El número: ,cle cómplices pllPsto en cotejo con las ganancias del

érímén, es 'otra circunstancia que viene-á quitar ¡~lgo atfuerza á 1(18 ele-mentos probatorios de la causa, N ótese sino que e1'veintiocho de noviem-bre pasado el terrible, Daniel exigía el concurso de" otra .persoua para larealización de sus 'inicuos planés, recalcando mucho sobre el propósito.oc que en ellos no Iiabiun de intervenir mas de dos,

_Si atendéirios á que la fortuna de la señora Eoheverri era media-na, y & que pór lo misnio uo podia sufrir muchas repurticiones, sin de-gr3()arsa, habrémos de C9~1venir en que el cálculo de Eseobar era hábily lógico, Un número do campaneros mayor que el qU!3 él-previó, si es·que no quiso cometer el hecho porsi solo despues ele la negativa de Bo-net, "COlllüno deja de ser verosímil, habria venido ~ implicar una grandesproporción entre la ventaja tangible del hecho y los peligros de -Iaempresa, y á convertirun crimen de épica maldad, en una hazaña de tor-pes. El cuento del tesoro hallado áutés por esa señora, estaba en esosdías en ,completo descrédito, : e

. Hecha la enumeraeion de las circunstancias que neutralizan la con-sistencia de-todo el conjunto de losindicios del sumario, me detendré deahora para adelante en la suma-y .criterio ele los qnc detalladamente figu-ran á cargo de miela uno de los sindicados. Tomo por base los razonadí-simos.couceptos del señor FisóalL? de esteOircúite, que tanto me han

. servido ('TI el.presente trabajo. Empiezo por el 8enOJ.' . ..

,~7~~-MANUEIL A. ESCOBAR.

Segun las revelaoionos del informativo este hombro es de mala~

-eonducta, aunque no tan deprav:it'la como la de su .cínico 'hermano Da-niel, codicioso, jugador é indelicado. ' ,

Su iiicorpor-rcion en la cnuss fué debida á lo extraño ele Sil conduo-:ta en los dias críticesdel suceso del Aguacatal, en 10s cúales dió eviden-tes muestras de inquietud y zozobra, y1Í varios otros pormenores quet.arnbion le son adversos. Sábcso qne en muchos casos, y el actual expe-diente es un ejemplo de ello, el hecho 'Principal, esto es, el delito, ó su.autor ó cómplices. no pueden probnbilizarso de otro ruodoquo por el con-.eurso de otros muchos hechos queconstitnyaa todos juntos una .cadenatestimonial. '. '. '. .' ", . '. .)\ie haria interrninnlrlo SI hnhient de seguir paso á'paRo al seno'r.Fiscnlrilud ido, en el dctallede eacl;t lino de los incidcntesqno dan cuer,')J? 'al primero de los indi~i?s expl;'1'I~ac1oscontra 'Escobar, .en 'su citada,

'V,l.sta. Consta en sl la de fojas 77 lt '0 vuelta, el tenor general de lacon-.ducta ele este snget(l tanto en el teatro del acontecimiento.y ;tq.ufmismo,el din tres .Je diciembre que siguió al crimen, como en todos 1.0sposterio-

.-res hast<t Sil detención legal.. Se ven allí mismo los testimonios y 'con tra-testimonios referentes á su ti.u:bacion.sentimÍontos, pasos, y, en una 'p:t~labra, á todo lo que de cerca '6 de léjos contribuye á, determinar sus ab.-ciones en aquella aciaga época. Pudiera conterttarmo con reproducir elexpresado documento ; pero me creo obligado á-decir pocas coéas.oti' elparticu lar. . ..', " ':'" . " i,', '

. " ,J'.as conjeturas que se desprenden del juego de la fisonomía ydo las',emociones elelos sindicados, ~o'ljuzgadas como equívocas por los crimina-Iistas, ósea fuertes Ó elébiles scgun.lns personas y las circuustancinsópuosmuchas veces ti~mbb el inocente al concebir que puedan abrigarse sos-pechas que 16 comprometan, al paso que los v~rdaderos.criminales exhi-ben un contiuento 'ele insensibili<la.d y calma hip6crita1J.· Re'cuérdesequeen este mismo asunto el honnJ"lísimo jóvon V-alentiú Restrcpo fijól'a,j mi-r:idfis ele-Ios funcionarios -y de la sociedad, y estuvo próximo á que-sodictaran mcdi dns severas en.su contra, por su terror, desasosiego y alar-ma al ser int.errogado en un taller industrial acerca de los pormenoresdel delito que se iuquiria, , ,',' .

~,y sucede á la par que muchas veces cuando se tr;itrí del descubrí-miento de crímenes graves, algunas-personas bien intencionadasen cier-~o-scasos, imprudentes Ó malignas en otros, aelmiten y esparcen ccnti'adctorrn mados individuos juicios desfavorables, que si bien pueden ,serrectos no es dií'ícil qne en OCaSiOl)eSse funden' en apariencias fútiles Q'1:.-),a1'interpretadas'. Tales rumores van aumentando á medida que el ecode.las'prini.el'as palabras se repite, y eutónees los que SOnsu objeto' se turban'Y temen, no {t virtud de. su, pnrticipacion en un 'hechoal que SOl~é-:X,!,r~~ROS, sino porque preven los males que pueden avenirlas, 6 de la justiciaengañada ó ele la- efervescencia de la opinion. '. '.'.' " .", , .En los delitos que se creen cometidos por delincuentes solidarios,discuten estos no solo la manera de llevarlos á efecto y tódas las ,cues.:t.iones cardinales.finas tambien el sistema de defensa para el evento ~queselesd~cdr~ .

.~7i3-j\fIÓ'l'a 'hien: segun eI testimonio explícito del señor Jnlio Restf&!

~~,y el de otras ·peI'Soll:.t8 más, Manuel A. Escobar tuvo decidido 'empo-~ en que se le prestaseu socorros iumediatos á la. idiota, que en 1M pri'Órúeras horas de la. mañana del tres de diciembre no habia muet-to iaún,.é'dn el fin, deciu, de que .pudiese explicar los sucesos de la noche anterior.¿Habria procedido así en el caso de que las revelaciones de esa infeliz.hubieran podido -eomprometerlo? Consta tambien de la' misma fuente'.que se incomodaba cuando algunas personas sostenian la posibilidad deque el loco Meliton .hubicrn sido el autor de la catástrofe, contrastaudode tal modo con la conducta de su hormuno, quien adrnitia la verosimili-·

..tud de; semejante hipótesis. Deja presumir tal circunstaucia.que no hubotal vez, rnnueomunidad de diferentes individuos en el mas horrible de.los acoutecinrientoe de que nos habla .nnostra historia, .' -.', .

Convengo en que· los' feuómenos pasivos del miedo son indicios·,qne .respecto de un -delito dado comprometen mas ó móuos á las perso-.nas en quienes resulten, porq uo la tranquilidad es el patrimonio ele la iuo-cencín. y JJorqli:e ele ellos se deduce la existencia ele una oonciencia.críxminati va. ., ~, ", .

Con todo: talosfcnómsnos no son mas.que una probabilidad aeu-rsadora,-y para estimnrla e11.su justo "valor es menester que 'se conozcaretodosIos hechos infi rrnat.ivos que la .acompnñan y las circunstancias enque pueda ha berse visto colocado el individuo contra quien seproduzoan,

.. . Acerca del punto que examinamos, se ve que- muchos tcstrigo~'.atribuyen las emociones experimentadas por Manuel A. Escobaren. los,·días. del-crimen deldos de diciembre, al sentimiento que-naturalmentedebió producirle el homicidio ele personas con quienes estába ligado ·porvínculos del mas estrecho parent esuo, • '.

Pudo ser tambienque esos signos de palidez, susto y .1013 demasque se dice aparecieron en esa ópoca en el sindicado, hubieran proveni-

'40.; no ,de motivos personales sino porcple de cualquier modo conociera.q~le su hermano Daniel era el inmediato responsable del crímen. Calma'puritana hnbrin necesitado, uada menos, J)l1rallO conmoverse hondamen .•te á p'-e~enoia de la casi. íub ul osa magnitud del hecho, del deshonor <le-fl;'l fnmilia y. de l.ns enormes penas que desde entónces -amena7.aban á Sil;desventurado deudo. El artículo 129 de nuestro.Cód igo penal exime de-todo .comproinisoá los eu('ubriclore¡;"de sus-ascendientes Ó dcsceud ientcsen línea n'cttt, ó parientes dentro del enarto .gra'c1o civil dcconsuguini-

. dad ósegundo de aHlljdad. . . ..... -:':. Concluyo, pnes, por ahora, ele lá misma manera que el.señor Fís .•.

cal L o de este Circúito, estó es, que el susto, la intranquilidad y el desa-sosieg0 que el indiciado Escobar manifestó en los primeros días de la av o-riguacion sumaria, dan orígen cuando más iÍ ligeras sospechas contra él,

.peoro que ele ninguu modo pueden elevarse á lá· categoríu de indicios.. ~. , ,". "'- .---,,¡I' - •• • • •

_ A fojas 79 y SO de Ios autos trata el expresado funcionario dél se-.gundo ele los aJ'gumE!ntos que dan pié para que se jnzgne á Manuel A.:Escobar comprendido en el cargo tremendo del asesinato de la senoraEcheverri y cinco personas más. . ' .o· . . ElY efecto: -en su declaracion de cuatro do dioiembro habló de una .mula. ó macho amarillo qne estaba amarrado en el corredor de una casa,.-

o 10

~ ,--'1'1-

· Y SUp11S0que ese auimal pértonecia al SeDOl'Hermen e:gil;to '{;¡wgüf. } ••.r.a-do-que por estar la mencionada casa en direcciou Ú la de sn tía J'ua üa;creyó -queU pegui iría adonde ésta á transar algun« cuestion, pues ha ¡Ji antenido negocios comunes, y tuvo, por lo mismo, corazonadas de qUl' pu~dieran tener algun disgusto. . . .

En sus conversaciones con los señores general J'osé :;\Í3rÍa Caba-· IlerorAlejaiidrc 'Calléjas y Bafad A..Restrcpo, .refirió dichohecho dodiferente manera, pues á los dos' primeros les/dijo con las palabras quecopio ; "que á la oracion de la noche del crimen babia visto un hombreen una mula amarrilla que trat6 -de ocultarse en una casita distante corno.una cuadra de la de las víctimas, por cuyo motivo no lo conoció". Al úl-timo le hizo la manifestacion siguiente: "qrw vió el márres po!' la nodw,'cuando iba para su casa, á Herruenegildo Upegui en un macho ó mulabaya, y que en el cañaveral de los tejares del difunto Manuel Posada seocultó, por lo que supuso que Upegni asesinaba á su tia esa noche".e ,'. El sindicado niega haber hecho esas relaciones de la manera co-

, molos testigos lo deponen. .~' Otras -veces manifestó la creencia de que tal vez la señora .Eeho-

verri habria rúuerto envenenada cnsualrnou te eón alguna de lus (1rog,gque COlla médica manejaba, siendo 1I!1:tcircunstancia que en cierto m o-

-do lo favorece, .la de-que en la mañana del tres de diciembre envió á sushijas pequeñas ála escuela qlle dirigia su prima Virginia. Dígolo a!'lí"por:que pormalvadc que sea un hombre es easi imposible-qucTleguo á esepunto de insensibilidad moral. " ' - .,.. ' _ .Sin embargo de ello, y como quiera que esta conducta del"sindi-cado sí autoriza la conjetura ele que pretendia radicar sobre otro Bospe-chas d,e mal carácter; f01ZOs(1es convenir en que dicho procedimientoconstitulria' en su contra nn indicio de alg\ma gravedad, si una razon deotro órden no viniera' á desvirtuarlo. Es ésta;' ,.. " Expresé un pOGOántes la posibilidad de que Manuel Antonio su-piera que el agente único 6 principal de la tragedia del dos de' diciembreera su hermano Daniel. De tal modo viene de snyo la fuerte considera-

· eion de que aun cuando no es excusable la táctica con que queria corn-prometer en el suceso al senor Upegni, no 10 guiaban al entnblarla mo-tivos que le fueran estrictamente Íntimos. . . .

Porahorraros cunsauciosoguiré oxponiendo con brevedud los res .•.· tantes indicios queenel informativo obran contruóste y los.demas sin-

dicados, y con razón tanto mayor ~manto qne el señor Fiscal de la 1:" in:.;.;"-tanda los ha expuesto con la debida exactitud, .:

,h " •

Con la-deelaracionde :MarÍa Josefa Londoño de Ossa corriente á· .:(pjaa 12 del 2.°0., se prueba lo que con los mismos términos usados por

la testigo pasg á exponer: "que ella venia de, Envigado el dis, tres de di-,ciembre ántes de las cinco de la mañana, y se encontró como dos cuñodras ántes de llegar ií la via que conduce á la casa.de la señora 'Echeverricon tres hombres que 110conoció; que mas adelante halló la cubierta deun.machete,: uriverraq uillo y una botella, y mas adelante una coca, decacho". Muy bien. . .' ,"." '. CtúlIlab dicha persona regresaba para su pueblo despnes de haberrendido su test imonio, so Icpresentó I~Ia.mHllAntonio JT lesuplicaba coa

. .

~lut,h() -cmp"ño le tllj<.'¡:;l;10 quo h.ibia ilee1al'it(lo,nnesle intcrcsabn sabet'~lo. Á. las excusas de, la Londoño auadi:l' RH)obaf miovas exigencias, pi-{li~ndole ceu. tono cariñoso unas veces, 'y desespcmdo otras, que le diesesrquiera 'una, tucecitu (¡ un primer principito .. Lo preguntt'JSa, adcruas, sil:v hahian interrogado acerca de algun blanco, y como el marido de la

.'deponentelo reconvino por sus pesadeces, so retiró como con vergüenza,':,' 'Escobal' contradice en, su indagatoria ele fojas 103 á la 11O delC;' número 2.°) lo c1~Iris súplicas y lo relati vo al blanco, y también que hu-biers-tratado de comprarle á la Ossa 91'secreto de su dedaraciou. '.

Tales negativas son las que dan algun cnc1'po al indicio, Batán-\lol':e,-'sineJi:lhargo, que no aparece bieú establecido, l)UCS' el proceso brin-da-dates ltara jUílgfU.' qno el mnrido de la I..onbofiu no oyó toda la con';versacion de ésta con .Escobar.,._, . Ei;\muy,plansibl~,1Í;-lavez, la creciente cUl'iosi:(lad'qnc eLsindica~

do.tenia de conocer todo el tenor de las .palabras de la deelarantci,puc~.to. ,que ,¿ll.}l,ciuelLósdias todos seguiamos paso lÍo paso los progresos de lit. d . 'In, il.gacloll .." .' . ". . . . , ",;".' ,Jfamp,oco son signos de culpabilidad á 9argo de nadie las .averi-

g'taciones,de:M:anncf A. sobre sido algan modo resultaba comprometi-do en.Ia diligencJa algun blanco, pnes evidentemente su hermano Danielpertenece á esta razH.. .' . . '. , . , '. •. . '.'

, . "Mónos habla contra 61 el hallazgo de los tres hombres de que tra-tó la Londoño, tanto porqllo ella misma dice. no haberles conocido, cuan-to' porque t).e l:ts''í)ostr'.Jras ampliaciones ooasta que la casa de 'la señoraJuana .Echeverri se encuentra en una diroccion distinta de la qué con-

.duce á las de los Escobares, y que del pllll to donde fueron vistos esos tres'hombres Be puede 'ir á la de Iaprimera, aunque el camino no es el .mas

- - ",' "recto. ,'.' , , . .. . .' ..---'.. . . -

.','.~ '. .- ~ ¡;' .' -':, . . . - - ' .• t: . ':El señor F'iscal que ha: intervenido' en estu sumario gradúa como

. indicio.de alguna gl':n-edad, el q (le nace del hecho de que Manuel A. tn-'vp.en s,n p~)(jleralgllnas ,moued(1.s de oro el viói'nes cinco de diciembre"é\ll\lil.do§U esta<1o.de pobreza anterior es notorio. ' . '

. No le doy, lIingnha importancia á semejante indicio, porque en-'·{',nentrohienexplicada la conducta de Escobar en lo relativo al manejo "de. intereses, de,,?pues del acontecimiento de que se trata. . _ ,- ,. . Está,pei'Í'ectH.meute acreditado que en la citada fecha tnvo en su

. 'poder dos cóndores que le entreg6 el Director del presidio del Estado,.a¡¡Í:uno de ellos para ql.le verificase su onmbio 'por piezas de plata, y otro(m pago de ,cierta,slllna de pesos que lo debia, . ,, .' Pues- bien: en las distintas transacciones qne el sindicado celebró6espuesde haber tomado' esas pocas cantidades, FO aparece que hubierahecho figUl:ar mas monedas qne las dos que un poco {lI~tesle fueron dadas .. ' k.RafaelA, Restrcpole compró unos andullos de tabacocon unode losdi~hos oondores, recibiendo lo que 'de élsobraba, Restrepo dice-qne fno'lehízo cambio alguno; pero es porque no observa qne la venta ensí no es otra cosa, pues el valor-del tabaco es insignificante, comparado'con el de la moneda de oro con que se lo pagó.. .

. N atural es suponer qne ejecutó estas operaciones para facilitar la

-76-. ,

redüccion do la méncionada pieza, Yf}Uü al ~ntr~;gar'1elo que se Jo .debía,se le imputó lo que de la misrnn había gastado.' , .· Aparece algo mas tarde, Escobar, comprando un poco do maíz ííTornas Villa en la plaza principal (le esta ciudad, y con el otro de los con.<101'esde la cuenta. Fué éste, si:'}duda, el qne recibió C:l pago, y lo q IIqle restaba del negocio es seguro que se le c1ióen dinero. .'. ' . '.o Cruz María González di~o primero habervisto qu.e el sindicadocompró con un cóndor maíz y frijol á otra persona que no era 'TornasVilla; pero mas tarde expresa no poder afirmar qne la tal compra ~4u.hiera hecho á un individ uó distinto de éste. ., . Corno se ve, fá conjetura deducida de los hechos expli9áiti)~ nqasume el mas escaso mérito (Folios 13 y 14, O. 'l.''; ~9, 31 'y 34 del 5.;")-

. ' .•

· Sin 9w1a que son de escasa in}portanciq" como lo m~uifie~ael se-flor Fiscal I.o de este Circúito, las deducciones que pudieranhacerseaoer-éa de las pringues y manchas de sangre halladas en el corredor en nl)~pared de la ca-sa del indiciado, y en los restos de unos pantalóneesuyos.~utorizan para sostenerlo así los datos á que alude el expuesto señor .Fi:1-9al á las fojas 82 de su concepto ~1?veintidós ~d:nes .cle ab!,il d? '1,8741que en esta parte reproduzco (v canse los folios o, 13.,1.9Y 27 C. o.o!77, 157 Y 158 O. 3.0 y 23 yU a. 4.°, 126 Y 133 del nusmo). .• 0_,_,-- . El viérnes cinco ~e diciembre fueron vistas y recogidal'i v.n.ri~fpic~zas.de vestua.rio de propiedad de la casa ele la 'sonora Eeheverri, y comoá Una cuadra ele distancia de la de Manuel A. 'Escohar;' oo' .

. . Daniel, de este apellido, G~iceen su' coufesion haber sido él quienallí las pus~eI dos do dicho Dios; pero esto parece falso porque la róp~estaba seca, y en el día anterior había llovido algo,· y erdad es que el mismo Daniel señaló despuos t.'l parto precisa

donde sostiene que coloco las expresadas prendas ; mas debe-tenerse encuenta que segun el reconocimiento de Jos prácticos que la inspecclona>ron, dicho pun to se detcrm in-itpor jos 'linderos eliv isurius ypor otros ohrjetos caractoi-íst-icos cercanos, do suer-te que puedo iudlcarse bienen éJterreno por la sola circunstancia de haber oi.Io decir estascosas ..

. Pero sea de esto 10 que SO;I, el hecho es que dela tenencia de 10$objetos hurtados se desprenden presunciones fuertes contra su poseedor;si no comprueba los títulos válidos en cuya virtud tales objetos se )'(".en Su poder., ., ""

N o obstante esto, en el caso actual debe observarse-lo siguiento~. Si las expuestas piezas de Vestido se hubieran encontrado, sin Qal\~fija competente, en el interior 'de la vivienda de Manuél A.; es 091:\1'0 quelS'emejanteefuergencia eonstituiriaá su respecto' un indicio !1~:bast~nt~gravedad. ',' o. . ". '. . J ¡ , o'

¡ ~fits. como se las halló (lIgo apartadas de la casa, pueden aplicar,~eá ese hecho las siguientes consideraciones inflrmat.ivna: , . ''p Pudie;on ser tra~d;\~ ií- dicho puesto pOI! pura Cl!l?!l~l!.q.&d.

2.~ Ignorándolo el sindicado ; .3.a Por equivocacion ; y' ..:F Clundestinnmont« y con miras.<le c.ompl·QJ1,le,tlo1l'lQ; .

,

;' '.,,' Expo¿~eM~lágros,Correa ql1~~l sindicado i1~o!,>usoá que Fi·aúci~';co Parra (a; blanco) pusiera en noticia dc las n-u.oridudes el acontecí,miento en cuestion, á causa de que vi viendo ámbos en las inmediacionesdel punto donde pareció la: ropa, era fácil que le resultara algun perjui-eio. Escobar cont.radies 'á la, testigo, y, como se ve, ningún otro viene áeonfirmar las palabras de é1ita:, , ,'-,','" , . ' ", , , ' Heflexiónese, pOI' otro lado', qué {L dicho incidente se le elevó en elprincipio' de la causa á las mayores pl'óporeiones, y que por fruto de ello'la¡.¡-sospechas contra el sindicado en vez de amenguar crecian. Natural,era, pires, que Manuel 4. temiera las mas graves consecuencias par::t síÓ SH familin en el caso de que ese hecho S9 divulgase, ya',por estar cerca-11.0 al cerco del hallazgo, ó ya. porque le darla alas al casi general rl1mo~que contrn él habia empezado Ú sl1rgi!, (-Fojas 25 y 79, Y lOS á 110 C. 2;0,17, y"63 á 68 del cl.0).

,_. .., • ·'T . _ _

' t·o's motivos de indicios que resultan de la reun ion' del sindicado'é'Ol1suhel'marw}Jmiie1' y su lH'Ímo 'Sinforinno, en la primera- hom de la.aciaga noche del dos de diciembre, de las contradicciones en que incurre'á-Lexpli(~arel objeto, del viaje dé Francisco Parra (a'. blanco) á su casa en'

, la prápia noehe; y la.circunstancia ..de haber-tenido á éste de compañero'11:walos preparati vos de la inhumaciOl1 de los cadáveres en la tarde del,tres del-mes 'expuesto, ..son demasiado débiles y 10Í> aprecia' con buen cri-torio' ~l señor Fiscal.de l.a instancia, á los folios 83 y 84 del C. número'b;o 1J.ehen, verse aJlL ' .' .' . " ' .

, .

~ ¡ . ~ .'

. ',', Experimenta' in: mísma suerte el que se hace' consist.ir en las con-versaciones que después del. suceso tuvo Escobar con algunas personas;conducido,' sin duda, por su parlero é inconsistente gonio, Detallaba enellas, con mayor. Ó iírenor precision, el invcutario do los bienes que la se.'ñora Echeveri'Í poseía en inmuebles, dinero, alhajas y ganados, exponien-

_do'el-rumbo- general ele-susnegocios y contratos .. No se alcanza á eom-',prender qué objeto, so propusiera en esto, pues es evidenté que el ladi-oü'no-manifiesta jamas la preexistencia d'e las cosas arrebatadas (Fojas 84 y85 del, 5.o C.): "

---':i •. !. ,_, '_. ,

1 ,- '- R-c1ieré elséñor Luis l\fái'í,a Londoño que como un' mes ántes delhomicidio de' Id fa:milia de doña Juana, estn va Escobar en BU casa; con'un fin que no recuerda, y le preguntó si se encontraba rico. 'I'endria: al-' ,guna siguificacion dicha pregunta;' si' constase que en el pl~p para queÍué invitªd'o Francisco Bonet se contaba con el sindicado, y desde- ántes'del veintiocho denoviembre anterior al hecho.

, n'ice :María -IosefaRuda que vió á'la' oraeion del dos de diciembre'y, ya; oscura Ia-noche, que dos hombres. cubiertos con bayetones marcha",',ban J!or la-vía que' conduce á .la morada de la señora Echeverri desde lade: M'auuel :A: y otros vecinos. ~-esabe que precisamente en ese tiempo'se.énoontJ:l1ba el primero con. Daniel y Sinforiano Escobar. "

No ha podido determinarse de uu modo indudable si' el síndica-HU seencontró ó no-en: su hoga» e11 todo el curso de la expresada nochej

, ,

, !"lB:~-d -.. - ,

,pé'o dos testigos cleponen haberlo visto allí cuando empezaba apénas la,~afialla del tres de diciembre, y no dicen que le notaran signos de iutran-uuilidad ni de remordimiento." .---

'Réstameexponer alguna cosa acerca del indioio, qne no solo 'res-pecto, de Escobar sino del conjunto de los demas sindicados, nace de "lamala conducta, del peor carácter y de los pésimos precedentes dc t.odos :ellos, :AsÍ, pues, lo que ahora diga los comprende en comun.· ' , ,.

Desde luego que cuando dicho indicio resulta aislado y sin estaren armonía con OtI'OShechos prohados en 1:1 causa, es vago ó abst.ractopor su propia Eifturaleza, y puede aplicarse con igual rigor al erecidísimonúmero de p!'lrsonas en quienesconenrren idénticas eircunstancias., ., En negocios de la altísima magnitud -del que me ocupa, es nece-sario empezar presuponiendo la inocencia, pues que esta máxima no so~lamente és un bello sentimiento de, humanidad, sino tam bien una regla-de eterna justicia.' ' '., .' . ' ' '. ~',. . En' toda averiguacion eneaminac1a ác1escnbrir á.los autores de ·de-litas ya ejecutado,s, debe tratarsede conocer 110 apéuas los que hayan po-dido tener' estimulas para llevarlos á efecto, sino, á b vez, los objetosmateriales, los motivos y las ocasiones que: hayandado CUCJ:IlO á tales-de-seos.' .•

, Debe tenerse en mir?,con todo, que estas prcsnneionesson 'enga-ñosas, que tienen poca fuerza por abarcar mayor número de individuos;y que por haber sido despreciadas en la práctica, se han consumado laS-mas atroces violencias. '" Entro á 'eonsid~rar ahora las especies, los júicios y los. argumen-

, 1losque resultan del informativo en contra del señor

!FRANCISCO PARRA (a. blanco).-- . / " . , '. . . ,'" . -. - .

Este hombre es reputado en todas partes como de mala conduc-ta; amigo de riñas y pendencias y' ele costumbres licenciosa,s...• .En.la tarde-del dos de diciembre tantas veces referido, y corno áIa oracion, se presentó Parra en-la casa de Manuel A. Escobar con.el fin,dice, dé arreglar unos avías del señor doctor Pascasio Uribe. Añado que:rermaneciópocos momentos' ~IÍaquella habitación, y que despues de ha-berle avisado, ,á Manuel A. que DanielIo- buscabaee retiró, á la suya ádormir. Escohar no está de acuerdo col). él indiciado, pJe;s,exlJOne queel objeto c1l(,1consabido viaje (le Parra no fué otro que el.de l~varIe .unano.yen~, peroel doctor Uribe conñrma las palabras del flltimp(FolíQS del119 al 133 C. 3.°, c1el146 al 150 del mismoydel. 63:il 68de,I·4.~ y.40deI5.0). '/ .,' ,','" Segun expb:sael,señorFiseal ántes aludido, ''liay' dos-cosas qneIlaman la atencion sobre este punto: l.a La reunion de Parra y E~cobal'en .aquella tarde, la cual soria de importancia si despues qne;~scobaFY91~vio de donde lo llamaba Daniel, se hubiera [untado de nuevo coa.Parra;y2.a La falta de armonía entre éste y-Escobar' acerca del motivo del via-je-c1eL))riniero á la casadel segundo. Todo esto hace concebir una sos-pecha coutrá él", .lilas como el ,testíl!lonio:del: doctor, U ribe. concuerda

•

,-fjO-"';con el ele! siudicado debemos reconocer que esa sospecha es de muy po-ca valía.' '. .

---'-.. Son también muy frívolos, y no 'merecen por ello un detenido <trá-

men, los indicios que á cargo del propio sindicado se deducen por la CQn-dueta que guardó en el trabajo en que estuvo con el señor Gabriel Mon-toya, el! laJnallan:t del tres de diciembre, hasta las once; por la circuns-tancia de haberse puesto un vestido limpio en ese día, y por la tacha de .la ei{ra de 10s J1l uertos fijada por la testigo Bonet :,11 referir el suceso dela víspera. Tocios cambiamos ele traje á nuestro gusto y por razones,masó méuos caprichosas; yen las primeras horas del tres de diciembre en quese 8l!1~Oel, drama del dos, no había casi nadie que creyera ser posible queseis personas hubieran perecido á la vez á manos de traidores asesinos(Exposicion fiscal citada, folio 86).' ;

. ., • . 1

Si tuvo parte en <jI aseo do los cadáveres en el jugar de los hechos,y si despues los acompañó á esta. capital y en todas las ceremonias pre-,vías al entierro, nada quiere decir eROque S(;ladesfavorable, para Parra,pnc8 tal conducta revela acciones cadtativas, ó indiferentes al ménos, 1

-- _.- -__ o,- ,

, Segun el testimonio de María Josefa de Ossa el sindicado la estre-'chabn el cinco' de diciembre para que le dijera lo que habia expuestoan-tI} la autoridad en el asunto, añadiendo que lo mandaban adonde ella pa-ra que le 'diese una lucecita ó una cosita de sus palabras. José MaríaArango confirma todo esto. ' " . '. 1

, . . Parra ÍlO niegn. sus diálogos con la <leOssaó Londoño; pero expo-,ne que el móvil que lo guiaba era su mucho interes por la averiguaciondel crÍmen., .

. ' Ya se han calificado tales declaraciones al hablar de. Manuel .A.Escobar, y como lo l datos que deellns se derivan. son comunes á ámbos,lIO se necesitan mayores desarrollos,' Nótese, sí, que la casi conformidadde las palabras usadaa por liTIOy otro indican que Parra era tal vez sim-pIé: mensajero de su amigo Manuel A. (Folios 72 Y 73, IlO y III C. 2.0)~

En un all;natniento que se practicó en su casa de habitaci'bn fue-ron encontrados un "Silabario enciclopédico" con el nombre de "Sinfo .•rianeEecobar", y dos zurriagas al parecer' de vl31'J'aquillo. La inculpa-ble procedencia detales objetos resulta bien comprobada en los autos, ypor lo mismo no fillyen de dichas circunstancias cargos que perj udiq uen'ft Parra (Políos 87 Y 88 C. 5.°). '

• Pero de lo que sí nace uno, aunque leve, contra el mismo es de loque manifiesta el detenido José Horren á folios 55 del 4. o C., y es lo si-gnieute: expresa, el testigo que despues del acto en qne Francisco Bo-net reconoció á' Daniel Escobar, como quien lo había invitado para ro~bar unas casas y asesinar á sus moradores, Francisco Parra (blanco) seacercó á Francisco Parra (negro) y le dijo: "ahora sí estamos, en peligrode que nos cojan". Santiago Ortiz, citado por Herrón, como que pudohabereseuohado esas palabras, no las oyó; ·pemdice que sobre el asun-t'o puede saber al¡jllw\ cosa otro dete.iido, que no recuerda quién es,

. ,

;-80-- -"' . .Los dos Parras contradicen á Herron, y Boñet nada ha expuesto'

en con tra ele ellos. ,.. .Si el citado testigo fuera hombre de buenos precedentes, su testi-JiH.J'lJiotendria bastante fuerza contra los sospechados¡ pero como el con-.sabido Herron-es un presidiario y ladren habitual, sus conceptos pueder.apénas darle asidero á una iusignificante inferencia (Folios 56 'C. 4,° Ydel31 al 35 del 5.°): -- '

Acerca del mérito qne tengan el certificado del señor Prefecto deeste Departamento corriente á folios 42.y 43 del C. 5.9, y la indagatoriao,e Parra, que se ve á .los 10'[ y'113 del 4.°, no hago mas q~le referirme al-dictámen de 22' de abril último en sus fojas 89. "•

, . .. .Copio las siguientes palabras. del señor Fiscal)." de este Circñi-:to, porque las creo' de bastante iniportancia: "En)a indagatoria de 11 de:diciembte dice haber dormido en su casa en la noche del. dos de dichonres, y~'citaá Francisco Parra, sil primo hermano, come qne pernocta all í,pero nó afirma que en esa noche lo hubiera hecho" (Fo3aR 132 y 133 C. 3.°). ' Pana (el primo) manifiesta que realmente durmió en, la' casa delsindicadQ en. aquella noche, que éste ,se acossó como 'ú las ocho ó nueveyno '5inti6,qui'l jse levant3ra hasta el siguiente dia (Fojas 11' C. 5.°)., -. : ' _Gabriel Montoya .estu \'0 el tres por la mañana donde el sind ica-<10, Y'por su. fisonomía comprendió que acababa de·,lel'antari<e: de la ca','.sa,fliguieronftsus ocupaciones y sia que notara en él.dioe.sob resaltorte-:JI,nO); ó algo diferente del genio que le habia visto el di a, 1.0 que .trabajó-con él (Fojas 15 C. 50)' ',., . '."': '. Tal eS;'senoi' Ministro, el cúmulo de los diferentes' indicios que el'.sumario arroja contra Manuel A. Escobar y Francisco Parra (álias bla'n--eo), respecto de quienes sobreseyó en el procedimiento el señor J'uea-T.ode.lo criminal en este Circúito, en su auto de quince do mayo último,.{'onconvocatorla,' eso sí, de Jurado de aeusacion. No los juzgo bien acen-tuados, 'ni graves, ni con la condiciones precisas para que á virtud de.ellos pueda estimarse á los. indiciados como coqelicuen'tes en el espanto-./30 crimen del dos de diciembre de 1873. Empero: como el artículo 1831}-dlllíJódigo judicial, parece contentarse para que se abra juicio aun con.simplea -conjeturas, tal vez sea necesario, confirmar la citada providen--eia.' Puede.ser que la COllciencia pública, l'epresenta,la por treshorn bres -.buenos, gradúe los hechos de una manera distinta, ó que !,ncuentre en el'Proceso otros datos que.los que mi limitada inteligencia ha, podido des-:cubrir, ;', '., ,... . ' .,.'

. De propósito DO he quenidoexponer Hada acerca.de.Ias oosmopo-.litas presunciones que el iuformativo brinda á cada paso, como verbi-:<gl:a:cia,la qúe de'di.tcen'algmios,de los perros que la señora, Vasco yotra:

,.pgl'soná' oyeron ladrar en esa inolvidable 'noéhe. De seguro,' quese 1211habl'ápresentado el mismo f~n¿'meno,ántes -Ydespues del suceso ,en oues-'.í.ion, por cuanto sus habitaciones existen á lu vera de un eamiuoaccesi-ble para todos, , I .•a importancia del asunto domanda argumentos ménos:fútiles. ' _ . " ", .\.' . ' .Debo ocuparme tambieu de los deuias sindicados de qu,e..truJ,a etCauto. de quince de mayo, y respecto de los cuales el sobreseimicn,to es'(1,e oal'áctf;n~abtloluto., ,

-81-Lo lHLl'é ,('n el siguiente órden :

EiVlIGD!Q GALEANO.Este es, 1111 individuo-cotnpletumonto inculto, .dcmala couducta.y

"le 'prins.ipios morales y religiosos,' nulos.. . ,A distintas iwrBOnasles manifestó el deseo que tenia do que EITa-

l'isto su hermano enmudeciera instautaneamant.s para que no los dcnuu,ciara lÍ, todos, y explicando esos temores en la indagatoria de veintiunoele enero, dice qne los abrigaba porque ya Evarisro habia comprometi-•.10 Ú su 'otro herm "no Santiago, y lÍ, varios, más, .qno 6l creia inocentes: .Natural era eso, habida consideracion 'lÍ, las circunstaneias, al carácterdelexpresndo Evnristo y,al seutimieut» de los lULbitantcs de Agnueatal,que veinn en este hombre unpeligl"O.· (Folios 75, 70, 80 Y 82 C. 1.0 ynüy del 146 al 141)"<1014.°).

lÍl1 testlzo refierc haberle' oielo l!ulnif(~~tnl' 'alsiridieac1a onun,{','

con versncion, "qnc el miércoles tres de dici.un ln-o cuando la autoridadse cnt.ontraba' en el teatro de los huc1IOH, ",'~iRtiall Ó dcbiau existir aJE.irlg:l1n05 individuos d~ 10B lH~l't~tlOj:e,.;;t1e aqu~lln. f.unilia' . CF'uIiu~~¡gC- J..O): . o' oo. ""0

. Explicando 'la razon que tUYO pa¡-;],ha1;eI' <.m->plf'a<1o somojnntestérminoacxpono (IUO "fué Jio]'(jn;) le dijej'on qno cuando est.ab.m la vuu-1:1ó~)s cuerpos lloraban. sanare, y quele h:~bi:;l1I expresndo que cuandoma .an 6, :\lguién Y-está el asesino pl'es,;,nte siempre> sucede oso". oA oestepaso, y ",i so hubiera de encausar á todos los <1ueen el vulgo aceptantan gl'os~ra preocupaciou, la lista de procesados seria iuterminahle,

l{especto de los datos que pudieran co,legirse de laHoxpresioncs·que,o conexiounrlns con este negocio, dice Caleano le dirigi6 Herrncue-

. gil do Upegui, y de la .alusion que aquel mismo haco ·al senor 'romas. Banill, es indispensable reconocer llne el señor Fiscal 'ele la La instancialos decrimina con sti acostumbrado hu en criterio (Fajar! DO r 91 C. 5.").

,- -ElI las indugutorias de diez y seis y treinta y lino' de diciembre sos-

tiene Emigdio que pafio en su casa toda la noche del dos de dicho mes,aoompa iiudo por· su' familia, suuuera Fraucisca Bal'l'ié'üDS y su sobrinaMarf» de h Cruz 'I'órres. Añade que al dia sirpLÍcnte se fuó prra el mon- o

t,lJ, declonde regresó. por la tarde, y quo Lázaro 'Tápias es sabedor de'esto último, .,

T~;t Barriéntos confirma las aseveraciones ele su suegro, y la 1'6.rres no dice que aquel no durmiera en su casa en la expuesta noche.sinoque de!olio no tu va conocimiento pOl: la razou quo expresa.'

Titiaro Tápias dice que no fué compnnero de Galcano en RIl via-je al monte; pero que dicho sindicado sí se presentó allí. en ese diu Unyoco despues que el testigo .

. La coartada, segun se ve, no' es admisible p0\"(jue In única test.i-go que la apoya.debe reehnzurso como parcial en el asunto, auuque de,tu'! testimonio sí resulta una presuncion favorahlc:í Em·igdio.

Pero mm suponiendo qne est e haya mentido en lo <}lIe alega, JiOestá. probado que en la noche. del dos de dieiembrc se cneo,",!r~l:'a~ll

':~-82-:,J:1,'nnbitnei(Hi de 'la señorn Eehe\·(.rl'i, ni del informnt'ivo se dehT;1l(·ll~rúldatosqueiuuliuen el át.JilTlo á juxgarlo :18í( Polios l!Jo! C. :v',.-t;7 ú!WC,4.0y7,üy12del5.0). ,,~'

SANTIAGO GAlEANO.'

Nada se afirma en los autos coutraIa conducta de Santingo GR-lema, pero sí se conoce que eS un hombre torpe de espíritu y de des-cuidada educacion. N o se manifiesta tampoco qne Sea de malas costum-bres. - -

'. En el allanamiento (111e en la casa de este indiYic1no se praeticóen el nueve (le di('i~mh]"e,' pe encontraron unos trapos, unos pantalonesensangrentados y unos ,~e~.pojoscleros enteramente 'frescos' '. ' ,. . . En, su indrrgatOl'ia de doce del citado diciembre, dice "qne las

"mnnchas de los p:mtaJoues puovinicrou de la sangre de un men udo de 1;é.S9110 compró el ocho de dichomes, y de cabuya". .

, La existencia de los mencionados def'lJojos eu la casa .del sindi-cado, y el no haberse podido dl·termiuf\r la lolatnralC;I:t de la sangre ha-liada en ~os trapos, POL' el unúlisis qu íinic o , que do ellos hicieron algu-nos profesores ele mcdiciua, son circunstanciasque le quitan {, soieiojnn-te elato toelo'~11 \'::.101"(Fojas ',H C. 2.<J, 81 á 8:2 r 307 {~308 '?c1 3.") .

•- ,

_ - En lo tocante á ~"iS:mti~lgo durmióó no en su casa en la nochece! dos do diciembre, y ú las contmdieciones en que parece incurrió cil i:i

. indag:,tt6rb (le doce de diciembre, dchó verse lo q\~e con tanto acierto,aprecia el scñorF'iscal 1.0 de este. Circuito en las fojas 92 y 93 del C.número o.'u.. . . . , .

De todos modos, Y:l un dando, (1\,1111':1fo que el sindicado no pa-fió la noche de! (los de (Ericmbrc'en Si~propia habituciou, debe concluir-so de 1:1misma manera qile «u Jo r.-lnt ivo en est.a parte·n.,/m hermanoIúnigdio, esto es, q no no está prohado f)lW en esa .noche se eucont.raraenla do la 1'(']\01':1 Eel1e'.'(>rri, y qtle elel iuformat.ivo 110 ap.irocen argu-

incl 1 ,. ~ , 1 ' "rueutos lino mi.' rucn e· uuiuro a l'stlinal' o aSI.

FRANCISCO PARRA (negro.ó también zonzo).• _ .. 1

.Dicho sugcto no es de mala conducta, y gl'n(;l'almei1te se le creepacífico yhonrado. En 1:1indagnt')I'ia CInc se le h;iw 1'('11(1ir en la tarde<101once ele dicicmbro, se le prcgnilt6 "~isabin cunl fuó el hombre que enasocio de otros cntr6 en h S:I,,:1 (le la srño'¡'a Eeheverri en la noche del.mártes dos d~1 expresado mes, y le dió' muerte á ésta y á otras personasde Sil familia", dijo'; "qne eso 'sQlo Dios 10 puedo sabor", Excit'ndo p¡m\que se cxplicnra más, contcstó : "que esa pregunta no podía desatarla eltéstígo" (Folios del l')5a[ 128 del U. ;V). ' '

Tales coutestacioues.ique nacieron, sin duda, del apocamiento d<t·Ias facultades intple()tuaJes del sindicado, no pueden tenerse' como sig-nos do su culpabilidad en el- asnnto.· -

. .-,---. - En la expresada ill(1agatori:t añ':i:cle que en hnocne uet .LOSue di-

ct.;a~1Jrodurmió en la casu cou su familia, y. q~le en el sig~üe!ite diá Q~¡;

:.....-83~. - . - .

t.~vo tn1J);\.ianuo en un cerco con Atítonio ,~nge1,- Vicente Sál1chez" J.1~lié M." 'I'órres y otros,

Juan J li~amillo,' Martiu Graj{tles y Luciauo BelTÍli dicen haber. visto ú. Parra eri su casa en la exp!Jesta noche, como hasta las siete., . Vicente Sánche~, Antonio -Angel, José 1\1". Tórres i SinforiauoRestrepo confirman l'!tsegunda aseveraciou del indiciado, y agregan-que}\~)notaron en.étcosa alguna.que les hiciera concebir ideas de que hu-

. hiera tenido alguna ingerencia en el suceso á qlle sus declaraciones secontraen. ' ,

.' Corno se ve, estos fnlltlamentos n9 suministr.m oonjeturas de ma-la especie contra :Parra (negh1),y ántes bien le son propicios (Fojas 81y 82 C.. 1.6, y9, 10, 12 Y B del B.O). , ..:' .

He termlna!lo el plan que eu.csta parte me propnsc seguir., . 1;0 qne he v cnido sentando á Pl'opó,sito de Santiago y Bmigo.ioGaleano y Francisco Pnrrá(negro)jnstitica á todas luces que eractH.alinf(ll'l~uttivo no dem::tnc1ael enc::msamicnto directo de (:'80Shombres por198 delitosdel dos de diciembre, y que por ostos y por lo qne á aquellostoca debe' s6brl?seerse (le una manera plena. Lo resuelve así el auto SO"

bre que versa; en parte, la actual consulta. '•

VIII•

. 1;lego ya'al1l0mh¡'e que por carecer si'1nicl'<1sea de bmas elemon-tn1coneienchl" Ypor el apatieo egoi8mo de q~ledió muestras en los diasde esos desagradables sucesos, fué causa indirecta de la atroz mueitede seis personas de b n>spet,áblé familia de la señora Echeverri, "jI ele

.13 profunda alarnia que la coruision- 'de 'ese' típico crímen derramó en la.sociedad. Se comprendo que hablo de FRA~CI,~,COBONET, figm;a de se.•giindú término' en ellllctuoso cuadro que analizo., '

'Desde luego, que no puede ímputársele complicidad alguna eh elp.ensam\ento del delito ni- OH su ejecucion física; pero sí-debe' ser res- 'ponsable por la p~rtieipacion moral qllC en el scguúdo de e150shochos

'tuvo. . - .VeártlOslo así: .El articulo '123, del Código penal dice.qlie son encubridores, en-

tre otros, "Los que' sabiendo'qne va á cometerse un delito, ,y pudiendoa"-isarLo;no lo' nvissn á las autoridades públicas éon la oportunidad su-ficiente para que puedan impedirlo, siompre.que pOI' tal omision se lleven. efecto el delí to". . ' .:

Ahora bien: que el sindicado-tenia conocim:ento perfecto de las~;rversas.maquill~ci9ne~ q:üe Daniel ~scobar trarr~ab~ coutra la se~ol'aEcheverri y el senor Luis .1\1"'. Londoño, para el veiutmneve de IlOVlCm-

I bre último, es-una cosa indudable, pues lo confiesa todo en su declara-cion jurada y en la indagatoria que despues rindió (Fojas 41 á 52 C.,,;. Y 39 Y 40 deI5.0). ' . .'. ' ¿Estu vo en poder de ese horn bre dar tí las aüto\'idades con la OpOl·.

tunidad snficiente los avisos del onso, para que el horrendo crimen p<11'a,,9-ue .se le invitó no .s~ consuhlase? Si se at~ende á 'lIle el (~elit08e'lev(,a efecto el dos de dlClCmbre por la noche; a que Bouet sabia el plan des-U,tl cinco (lías ántes, {¡, cIue'vi ve en las lnmedi:wiones de -esta eapi tal y (,

- - . .qfte con frecuencia viene á ella, es de.rigor l6gico la respuesta a6'l"lllaU"va á tal pregunta. Y tanto es así cuanto quelas proposiciones Iusidio- .sas se le hicieron en esta misma capital y á las"inIlwc1iaciones de muchosdespachos públicos. . ," Sostiénese, empero, que este sindicado enrecia de testigos paraA-Jmprobar la verdad de su relato",por el hecho mismo de que las con-íia"n~~ISde Daniel fueron íntimas, Es efímer~ en verdad, semejante ale-6-aclOn - - " .' ,b( •. ._,. .

El' conocimiento que en tales casos debe e1ar¡;e"á las autoridaclc's.110 se refiere á hechos cr!minosos cuml')Iidos,. sino á los iquo se tienen enl)erspectiva" y siendo esto así, es evidente á la vez qqe la esfera de acion de la policía no es tan limitada como la del Poder judicial. Claíes que -los empleados del primero de tales órdenes hubieran podido, sinecesidad de ocurrir á vejaciones personales, y aun COndatos' anónimohacer 'rodear por gendarmes ocultos,la casa de la señora Echeverri s .del señor Londono, ó sujetar á Daniel á misteriosa vigilancia, óllama10 con franqueza, afearle su infame propósito y exig!de, fianza de gua:'Clal' el órden. ¿No hubiera sielo bastante sololo último para que ese ClIebl'e desalmado desistiera de sus dia'Q6licos intentos? Evidente es qne s

Se dice á la par -que Ballet no 'puso en 'conocimiento de 'los fUIcionarios públicos los planes de Daniel, por temor de las consecuenciagraves que de c1ic11aconducta hubieran podido scguírsels á aquel.

Si el funesto héroe del dos de diciembre le hubiera manifestad,á Bonet que'pertenecia á alguna sociedad secreta' y tenebrosa, como laque en otras partes suelen poner á prueba' la paz pública y la tranquilidad.ds 'los particulal'es, alguna disculpa tendria la pasividad del sindicado. ¿Pero, qué podía ternci- de un hombre solo? No le. había expuesto Escobar con repetidas In<'Ístencias que no' era conveniente lo,:f00m-p<1.í'.iase ningU!1 otro?' ,¿Y no le era dado solicitar y obtenel: par:

'si la protcecion de la autoridad, como ha sucedido en muchas ocasiones'' . Él, di::¡,en qüe nos persuadamos de -véras que es un deber mora

y regar para los hombros de bien, perseguir do todos modos á los malvados, so rcélucirá mucho la'impunidad de estos, y el pueblo dejará ehofrecer síntomas ele c1eenc1e-neiay muerte'.' , ~' ,'.' , . Los argulnentos ant.etiores prueban, pues, qna el crJmc,i1, di:A.glla.eatal S(t 1]CV() á efecto p¡'e~ismncnte' por las culpables omisiones de(ine he venido hucióndo!o, cttrgo á ,];'rancisco Bonet. '. _ ', y sin embargo ele ello, el señor Juez de 1.a instancia al profel'ir

BU auto del guineo de mayo próximo pasado no tnvo ,~' bien enjuiciarlocorno encubridor ele los delitos de, homicidio, robo y heridas, y apénas

. determina se coi\Voque Jurado de acusuoion contra ól,-y eomb:enGubl'i-dar elel de cuadrilla ele malhechores. '. ' " Ño obstante que las ideas emitidas desvanecen muchas delas- ele

Ia providencia en clle~tion,p'fso á ocuparme de las de que todavía.-un seha hecho mérito.' ' . '

, Sienta el auto citado que Fráneiso« Bonet no debe ser responsa.1:11ede ningún modo, por cuanto no aceptó las proposiciones de Escobar.

- Visto es que no so 1ní-t a (lE' LalcOf¡:1., 'Silla de sal?e!' ((lIÓ snerto, correr'á 88-'te iudivi'duo 'por el hecho de ¡IV haber dado noticia a In autorirlacl, elelos• •

-,-85-'-deH,to's queotro pensaba cometer, hubiera aceptado ó no la invitaciouque se le hizo, 6 desistido 6 no de su primer propósito. Estas son cues-tiones,'de otro-órden, ,',

Es. mas absurda, si cabe, la doetrina de que por no haberse eum-pfidolos crimenes del dos c1c€1iciembre en,la fecha para; que Bouct fuéInvitado, 'éste debe quedar de todo punto indemne, á pesar de que hizo,Caso omiso del deber que para evitalos le imponianla moral y el C6di-go arriba expuesto;' , .' .

, 'Su articulo 123, ·tántas veces mencionado, estableee dicho deberde unrt manera- absoluta, y es viste por ende que no lo ínodificnu de di-verso modo los accidentee delugar, tie~npo, per~onas i cosas, El objeto~de la ley en el presente caso es prevemr los delitos y contener 'la rqar-cha de los iflsigiJes criminales, siendovevidente que ni las previsionesdel Legisladolj ni el intcres soeial,eambian erl lo mínimo, porque aque-

, Ilos se. lleven a efecto mas tarde, o mas temprano. . _. Expresa, ademas, el señor Juez de 1." instancia qne nada habia

pédido hacerse en el particular, 'porque cuando Daniel Escobar conver-.saba con Francisco Banet él veintiocho de noviern bre, y exigia su -cola-boraeión para el crimen, de quc se hizo reo, no se habia cometido toda-vía ningun hecho pirnible.ni el primero habla manifestado eón actosexteriores Ia voluntad ó el designio de. vérificarlo, '

.' Otra cosa demuestran los autos,,,' '.' Eh lá memorable y aludida conversuciou del veintiocho de no-

viembre no quedaron ocultos en los limbos del cerebro de Dariiel su pen-snmiento- infame, su decidida voluntad de realizado, la' fljacíon del díay eldetalle de Ios medios ele que meditaba valerse, -Solmnente alteran-do Ia esencia de las cosas 6 forzando las palabras para quo Indiquen otra ,cosa de lo que siempre 'han significado, podrá sostenerse .que tales cir-ounstancias-no- constituYEH'011o-losactos preparatorios del aciago erímendel dosde diciembre. , "

.: :, No: se: trata, tampoco, de proceder contra Bonet porque hubieracntrado.é no an.eonjuraoiones para asesinnr á, la familia ele doña J uana,puesto g:üe no acogió-la exeitacion que en ese sentido se le hizo. Lo qUl;l

, sé tiene en mira no es otra cosa qne conocer si E)Sjusüioiahle por la letalihel'ifeienCia de que dió ejemplo en. ese grave asunto, no dando los pa-so,::oondncentes para impedirlo. ,',' ' .. ' , " , ' " '.," 'El cúmulo de las razones examinadas antcrionncntc, deja com-

prender que el informativo exhibe mérito bastante para' qUDse 'abra jui-cio á Francisco Bonet como encubridor de los delitos ele.homicidio, ro-boy heridas consumados en diciembre último en la casa de la señoraEcheverri.. - " "- ', , ' n-l~lisoRieula,gmt'á esperanza, de' que el Superior Tribunal lo de-

t91'min:1rá de tal modo, porque en el caso contrario, y si es que se sien-ti} el p!31igrosoproeedentede que podemos á nuestro capricho, y sin ries-go 'alguno, no dar cuenta á, las aútoridadeaide los críménes que sabe-mos van áoometerse, el órden público y los.intereses partioulnres se yo- 'rúu privados con frecuencia de I:1sgarantías á que tienen derecho: ',', El anto de quince dé mayo pagado expedido por vol señor Juez

J." de lq· criminal cu este Circúito, ordena que se convoque J urado de'

-813--'. scusacion contra Francisco Bonet, como encubridor del delito de oua-tirilla de malhechores. ' . . . ..

, !le parece qUfl en esta parte es tan insostenibla dicha providen-'cia,como la que acabo de analizar.·., , ' . . .,

, Véase si no qlW el-cuerpo dol expuesto delito no está bien com-probado en el sumario, y obsérvese en suguida que el sindicado nosupo queEscobar contaba con compañeros para la perpetracion de loshechos para que-lo convidaba, ni que aquellos, en sil caso, llegaran alnúmero indispensable para que se t'enga como .constituida legalmenteteda cuadrilla. Consta, por otro lado, que Daniel: recalcaba mucho ensus diálogos, con Bonet el veintiocho .de noviembre, 'sobre Ia necesidadde que solo ellos dos acometieran la consabida empresa.

Pronto se verá el resultado de semejante observación,

IX,

,

Por fruto .de lasideas hasta aquí, emitidas; y en ro que eo:nClemeá los puntos que del auto de quinoe de .mayo último han sidoconsul-.tados, solicito, ante vos lo siguiente: ', 1.o Que se enjuicie á'Francisco Bonet comoencubridorde los.de-litos de homicidio, heridas y robo ejecutados en' la casa de la señora,

',J uana Echeverri,en Aguacatal.en la noche del dos de diciem brc de 1873;2.o Que se sobresea, con declaratoria' de ser llegado el caso de

. convocar .Jurado de acusacion, contra Daniel Escobar y Evaristo Galea-110, por el delito de cuadrilla de malhechores; ,. ',' ',.. ' ,.

, 3,° Que, se sobresea absolutamente, por lo que hace á l!'ra-neiseoBonet, respecto del 9argode encubridor del delito de la expresada cua-drilla; , " ,',

, 4,· Que .se convoque J urado de acusación contra .l\'1anuel A. Es-cobar y,' F~'~neisco Parra [blanco ],:por los delitos de que tratan los nú-merosLv y 2.°; ,'. , , " "

5.° Q,ue Re sobresea de una manera absoluta en lo que dice rela-cion á Emigdio y Santiago Galeano y Francisco Parra (negro);s

, 6.° Que respecto de aquellos individuos que, COI!10 Hermenagil-do U pegui, Benigno Zapata, Juan Francisco Upegui y Daniel Moráles,fueron considerados como ,sindicados al principio, lo mismo que variosotros á quienes sindicó Galeano, y que ni siquiera se sabe si existen, 'to-40s los cuales figuran como los comparsas del drama" se isobresea tam-bien de un modo absoluto. ' ,,

- ' 'He solicitado que se convoque Turado de aousacion contra.Eva-risto Galeano.por el delito de onadrílla de malhechores, y ÚO obtante queestimo-imbécil á dicho sindicado" porque-no me he atrevido á descono-'cer el valor legal del reconocimiento de los médico-legistas :de gue hehablado en esta exposicion, ni tampoco las opiniones de los señores Fis-cal y Juez de L" instancia, quienes' conflérená 'dicha 'dilizenoia seme-

• , , 0'_ o .[ante carácter, , ,- . , " .'X

De la manera mas concienzudaníente posible .he puesto á vues-t,ra vista los hechos físicos, psicológicos, directos y circunstanciales cou-,. , ,

-81-tenidos en e\Slll11nl'Ío que se instruyó pOi' consecuencia dcl:('j,lmen eleAguacatal Tengo conviccion de no haber omitido! en elite punto, cosaalguna que sea de importancia." ' , ' - '

Cuanto íi.las aprecia'eiones de esos datos y á los prlneipios (n10 acer-(la de ellos me he,permitido diluóidar, es muy fácil que haya incurrido entn:rol'es,porque, como dice el eminente pnblicista Mr. Guizot, "solo Diosy los necios no se engañan nunca, esto es, la inteligencia 'suprema y lainteligencia nula, elJ}l'\mero porque lo sabe-tuda, y los segundos-por-que no comprenden nada".' , -¡

Empero: lo gnesi aseguro 'con la mano sobre clcorazon, es qneen este largo y fastidioso 'trnbajo no me han impulsado pasiones de malIinaje, y que en todo él he subordinado, como siempre, misscntirnientosá mis deberes. ,', , -. Á vuestras reconocidas 'dotes de ilustl:;wion y honradez, toca dar

á dichos hechos y apreciaciones su verdadero número, peso y medida.-:

Modellin, 31 de julio de 1874.

Señor lHagi strado .•

l{ 1 "116vO",''~0)1A1'i e el'".:'.

AUTO" ,

,DELTHIBUN AL StJPEHIOR DEI, ESTADO. ',Tribltncil SUjJC1'iO!'de Antioq~ia.-.2'fedellin, {¡;;stodie~ y eiete de mil

:ochocientos eetent» ,Ycuatro; , "

V[STOS~ .Ó; •••••••.• -•••..•••• .", •••••••••••••• _

- - '. - - . - . - .• ••••••• o' •• ~ ••••• - •• ~ ••.•••••••••••••••. ' •••••••••• "

XVI, ', . ,

FRANCISCO SONET., Desdeluego hay que-saber quefi-cste sinilicadono se le imputa

complicidad 'en la.ejecucion física del crhnen: perpetrado en AguaeataleuIa noche del ,dQSal ü:es ele, diciembre de 'mil ochocientos seteutaytres, Trátase solo de saber si por lo que tu vo lllgar entre F'rnncisco ;Bo-1101'; y Daniel Escobar el viérnes voint.ioclio de novicm b1'0del citado ano;:y p:orhaberse realizado dicho erímen, es Bonet encubridor conforme al':inciso 3.0 del urtículo 12;1 del Código peuul,

, El señor Procurador del Estado se ocupa do esto sindicado con'bastante detencion. Razonhay rbi'a ello', porque it primera vista -pareceqne ese hombre de conciencia poen ajustada, hubierasidocausa indirec--tade acontecimiento tandeplorable.N o obstante,pneden 8('1' errados losjuicios que se forman respecto de Bonet en vista de todo lo que ha pa-,sado. Ahora Be presentan las COSlÜ¡ claras y se allanan fácilmente los ca-minos que conduciau'á haber evitado los grandes males provenientes dela omisión imputada á Bonetr; y no es-este nn buen modio para juzgarcon acierto. Se, examinará, pues, 10 que realmente hubo el día veint.io-

, cho de noviembre citado, para saber si los hechos corresponden con Iaa'/5i~uiente,8 palabras .del artículo 12.3' mencj~I:a<:¡O:' ' " .

"::ion encubridores ..... ,Los que sabiendo que va 11 cornctcrse undelito y pudiendo avisarlo, no lo avisan á las, autoridades públicaa con laoportutiidad suficiente, para' que puedan impedirlo, siempre que por talomision se lleve á efecto el delito". ,:. " ,

, Acerca dolo que conversaron Dnnlel Escobar yFraucisco ,Banet,sobre cometer uno 6 masdolitos en la uoche del veintiocho .de uoviem-bre, no hay mas datos que los que arrojan .sus propias confesiones. Lostestigos apénas refieren lo que extrajudieialmente les dijo' Bonet, aun-que en algunos puntos, como es natural.huy adulteraciones.

Lo que se advierte como lllUY importante, es que ningun testigohabla respecto á'que Francisco Bonet dijera "que lo habian convidadopara matar y robar en la casa de .doña Juana Echeverri, sino en la delseñor Luis María Londoño";: Esto está pues do acuerdo con lo que sededuce de la declaracion de Bonet (]1"olio48 del C. 4.°). Esto es, que a10habia q1le pensar en el primer hecho expresado que le propuso DanielEscobnr.por lo cual Ioconvidópnra el segundo, en el qne aparentemen-te convino pal'a poderse escapar de él. . 12 '

--90-'•

Solfre si Francisco Ballet sabia realmente qne se iba á cometerun delito, no hay pues mas prueba que la qne resulte de la resolucioatornada entre ésto y Daniel Escobar, ó de la simple proposicioú qne elúltimo le hizo al primero, deducido todo de sus c9ufesiones, .

Ya se ha dicho qne cuando Escobar le hablaba á Ballet de lo 'que. hubian de hacer para robar 'en la casa de doña Juana Echeverri, le dijo

éste,"nó hay que pensar en ese caso".Entónces Escobar le propuso lo quehubian de hacer en la casa del señor-Luis l\faría Londoño, y Bouet COIl-testó "que esos hechos' era necesario -premeditarlos muy bien", á lo qnereplicó .Escobar "qne él plan ese estaba yri aemas de premeditado.porqueera una cosa á la fija esa noche, pues no había ninguu jmpedinieuto".Luego continuó el último animando al primero, y -éste manifestó temo-res diciendo que "eso debia pensarse mucho". En cierto punto se quedóEscobar aguan1anc10 á, Ballet, y fué entónees cuando éste pudo despren-derse de aquelmandándole razón con Valentin Lotero.para lo cual se in-ventó 'un pret.extoj.Lotero declara á' folios 37 del cuaderno 4."). Á. fojas'}(56 del cuaderno citado dice Escobar-que "convidó á Bonet para quefueran á mutar r robar á las casas de doña Juana Echeverri y don LuisJHaría Loudoño, aun cua.udo el testigo no tenia intencion. de.matar ni

"de robar eú esas casas, en las cuales estuvo después, pero no con Bonet,tú convidó á ninguna otra, persona'i.En las indagatorias dice Bouet (Fo~Iios 39 Y '40 C. 5:') ','que comprendió en Escobar verdadera rcsolucion.de-cometer el delito, siempre que lo acompauase (el declarante),pues así selo.manifeató, y se había fijado la noche de ese día. para cometerlo". Quele dijo "que hablan de ir, solos ála ejecucion del hecho, y no llegó e! com-:prendci' que l~übieJ'(t .alg'Una otra persona quc estuoiera de recuerdo con.¿:z en elprovecto: que Fe .le ocultó ::í.. Dnniol, jllC'gOque comprendió que uoera chanza, y porqne ledió miedode que lo asesinara",

. . De esto, y' de otras cosas más que ltparecen en las illdagntorias, yque-seria Iargo enumerar, es lícito deducir; ya que no hay otra clase de_pruebas, q\le entre Daniel Escobur y Francisco Ballet no se formó unaverdadera resolucion (}e cornot cr PI delito en la noche del veintiocho donoviembre, 'elÍ la casa del señor Lnís l\IarÍa Londoño, que era del queú ltimamente se trat.abu, pues 'delotro ya habian .dcaistido. No está 1)\"0·

bada. qne hubiera "conjuracion 6 conspiracion" para un delito. Bonetrechazó 1.0 que Escobar le dccia y fingió convenir con él miéntras tuvoocasion de desasirse de tan peligrosa compañía. Lo rnas que puede con-cederse es que existió una proposicion no aceptada pam cometer un de-lito. N ada mas natural, pues" que Bonet se ocultase estando persuadido(1('(illÓ sin óluuda haria Escobar, lo que .en verdad sucedió, pues tal 'de-lito no fué cometido.' '.' . . . . . '.' .

\ .De aquí resulta que ellos no ~e hicieron punibles, segun los art.í-culos 9, 10 Y 17.del Código penal. Uulcnruonto en los casos de sediciony rebelión, se castiga la proposieiou hecha á otra ú otras personas para~ollletel' estos delitos, aunque no SCg· aceptada por ellas, segun los artí-culos 222 y 229 del mismo CÓl1igO. Yen estos mismos casos" el que uo:

,del!unciare tal proposioion iuourrir.i en uuurnulta ; pel'o si se realizureu :, los-delitos, el jnc1i~'id'110qne no }I:; hecho el denuncio será castigado como

encubridor (.1.~rtículo~ 223 y 2BO del misme Código).-

.~l:JI--

Ri, pues, 1:1 coujurnciou Ó conepiracion, Y la proposii-ion para co-meter un delito no S011 punibles sino en los casosdeterminados por la le,",'y ellas no se encuentran castigadas mas que en. los expuestos de reheliony sedicion, en los cuales se distlnguo entro no denunciar esos actos y eldelito que de ellos resulta, es evidente que para los casos comunes no .establece la ley tal distinción, porque en ellos la conjnracion.y la propo-sicion para delinquir, no son de suyo actos punibles; luego no es el cono-cimiento que ele esos actos se tenga, sino la conviceion que de otro mo-do se forme de la voluntad decidida de cometer un delito que se lleva ttefecto, lo que constituye la falta que define el inciso 3.° del art.ículo 123delCódigo penal.. Es 1:1omision punible de un acto la que hace obliga-toria Sil ejecuciou, segun el artículo 3.° del propio Código. I .

El conocimieuto 6 noticia que tuvo Fraacisco Ballet de las crimi-nales maquinaciones de Daniel Escobar, pcrsundiéndolo de que elsegun-dodesistiria de ellaspor el hecho de .no- acom pañarlo,To obligó á huirhasta la ciudad de Autioqnia, y tal conocimiento no pudo en manera al-gUlla, trnerle la persuaoion de que se iba á cometer un delito, no ya enla casa del señor Luis liJaría Londoño, sino en la de la senara Juana Eche .•ycni, el día dos de diciembre, semejante [t los que proyectaba Daniel Es-cobar para el veintiocho de noviembre¡ y mucho ménos puede deducir-se. que el primero se Ilevara precisamente á efecto por omisiones culo.pables de parte de BOl~et.No·es culpable quien no impide laperpetra-cion de un crímcn ó delito cuando le' es imposible el impedirla. Tal im-posibilidad nace de qne Bonet no podia prever todas las cousecuenciasfatales á qU(3 seria conducido Escobar desde que fuó burlado \-,01' aquelen sus. primeras tentativas, y <leque, viendo que eu la noche del veintio-

I • - rÓ, . ¡.. . 1 .1:., " •cuo no tUVH:l'On-Ct;t¡18 eUlnp ...l~15~111Lo,lna~lUi.lJ1l..-fM:)JlH91' J~~Olft~tqlJB lo t.u- ..viorau el dia dos (le diciembre, á ruéuos que í::esuponga (pie é:;l-e.habI6sobre ~llo c()1¡.Eseoh~tr.c1e"}lut's· del \:ei¡¡tiocho; ·pe~() entónces, ya debiaS\~po~JCr8eleuna partIClpU{llOl: mas directa-y acerca ele eso no. hay el íne-1101' dato en los autos. ... Para' que se comprenda' mejor que J':hmeisco Bonet no tiene res-

. ·,l)o!lsabilidad ninguna legal, véase lo siguient e: á .Jesns María Bonet leh:ih16 aquel el sábado.voint.ieueve eh> noviembre sobro el convite que seh, habia hecho, v (lijo: "hnbor manifestado que no entraba I.'Íl ese delitotim horrible, ;1u{lque estaba muv' pobre, y que por eso se íba pam Antio-quia, para que no lo fueran á matar-á él". Dice el testigo que el dornin-¡1"o vió otra VP;-:"ÍI·RUhcrmano Francisoo :v qne le dijo "adioR", agi't'gán-.dolo que Re iba el lúnos, y qne no lo volvió 'á ver (Folios 36 y 37·0. 4.°).

F'rnncisco Bonet le .contó tamhien jo sucedido, á María .JosofnOohon. Est~le dió seis reales, comprometiéndolo Ú qne se fuera para An-tíoquia: dice la testigo, qU0 aquel se fué ese dia, ó al siguiente,.por e11-tre la posesión, pam donde Niéns Uribe, tin de él, que no sabe dondedurmió Frnnolsco el viérnes y elsábado, que (.1domingo estuvo dondeRnfael Lotero y elurmió ese dia donde Mercédes Bouct (Folios 40 á ·12C.4.0). . . .

Á Rosinda tTribc, madre de Frauoisoo, le habló éste del convitepara "ir donde Luis :;\Iaría Londoíío", yle manifestó qlW se iha para An-tioe¡tüa, ~"en efecto se fué el miércoles á las siete de la mañana) habien-

•

do estado desde el m{ll'tCBá las ocho en la casa de la primera, que es enla Palma, lIH.)loco J11a~allá de Sancristóbal (Folios 42 )',43 del C.. 4.°) .

. , De las dc'daraciones de Francisco Maya, Martina Bonet y Emi·Iiano TÓ1·res (Folios 183 á 186 del C. 4.°), resulta que Francisco Bonetllegó á la ea Ha 'del primero en Sancristóbal, el lúues primero de diciem-

. l.re como á las ocho ó nueve ele la mañana, y les dijo que se iba para An-tioquin, por lo cual se le dió bastimento, y al dia siguiente salió de allí.

" En Sopetran refirió Bonet á Ruben E. Gaviria (Folios 179 á 181)lo que habia sucedido referente á In iuvitacion que le hizo Daniel Esco-bar; y, en fin, está probado, segun se ha visto en la presente providencia,que.el último estuvo el sábado y ellúnes expresados, en la casa. de 'IlUhermano Pedro Antonio Escobar en "Palo blanco".' .. Á mérito de todo lo expuesto, ha formado ei Tribunal la cOIlvic- 'cion deque Franoisco Bonet no puede ser justiciable, y que no !'lele pUc-,,ele hacer responsable legalmente de la conducta que observó con moti-1'0 de lo que pudo saber acerca de los hechos materiade esta investiga-cion, aUl~qlle moralmente su deber era hacer mas público lo que le dijoDaniel Escobar, ó tratar ele impedir de algun modo que los perversos pen-samientos elc éste tuvieran un mal resultado. ,'", Largo seria entrar á combatir uno á uno todos los razonamientos

que para deducir lo contrario, expone el senor Procurador, .Á este fin'conduce en general lo que queda sentado, y se pasa á resolver lo que seconsidera legal y justo en este asunto, ,

• Grato es dar ya por cone;luic1o este largo y penosísimo -trabajo;despues de haber puesto todos los medios posibles para dejar tranquila'la conciencia, decidiendo en el terreno legal, y con equidad y jnsticia,

"los'graTcs y ,mriili1.mL.puntos 9.l1ü fueron sometidos á la consideracion. del Tribuual ; no sin temor de h,11)E¡f'iú'c-úrridoen errores que no haya e::¡:

tuda á su alcance pl'exer, Por esto, encarece á los empleados, y especial-mente á los J ueces (1~'hecho que en adelante intervendrán en este asun-.to, que Vje'u. esmeradamente su atención en los multiplicados pnntos deduda que, en la apreciack.n del verdadero mérito de cada.hecho se ofre-cen.al espíritu, puesel proceso aparece erizado, de.peligros, y ácadn pa-so se teme heril' al· que no sea vcrdadernmunteresponsnblo: puede acasohaberse señalado con~o indicio de culpabilidad-Io- que no tenga ese ca-rácter. La ley obliga alfuuciouario público á proceder, como en el casopresente, dgdos ciertos elementos, dctenniuadas condioiones, señaladaspruebas' de hechos, dejando á su arbitrio la. calificacion de la fuerza que

, tongau para indicar la existencia de otro hecho, ó de que alguna perso-na c'oterminada lo ha ejecutado.' Los Jueces de hecho tienen un, campo~nas vasto para buscar en los recónditos senos de su sonciencia, la per-suacion que debe traerles In lectura del proceso, examinado áIa luz de

. todos los criterios. Es por esto por lo que se ha 'procurado recoger cuan-,tos datos ha sido posible, para que sc pese, ya lo adverso, yal« favora-Lle á los sindicados, con verdadera concioncia y positiva justieia..' ,

. Por las consideraciones expuestas, el 'l'rib~nal Superior, de a'cner~'no en el fondo ele este asunto con el dictánien del senor Procurador, ad-ministrando justicia en nombre del Estado y por autoridad de la ley, fa-lla: eOÜfíl¡na8e en todas sus pf\l'te~ el ~obl'es~imiento que contiene la pi'01- "

-93-. .

videncia de quince ,de mayo del año en curso, dictada por el señor Juez1.· de lo criminal de este Circúito, Adviértese únicamente que respectode Francisco Bonet no se convocará Junido de acusacion ........•...•, ••• , • , •••••••••••••••••••• ! • , ••••••••• I • t- ••••••••••••••••••• e·

ELADIO :l\I. J\IQRENO.

Jos¿ S. Eecobar, Secretario., .

"

~.~--"'.fID ••••'~"><:C&"'",.-CI""'&_---

A UllrIMA lIÜR.A..El Jurado-de acusacion, compuesto ele los señores Ce-

Iedonio Restrepo, José María Misas y Eugenio Tórres, ha lla-mado á juicio -Lá todos los sindicados. cuya conducta estabaen tela de juicio, y por todos los cargos.

- El ruidoso proceso de Aguacatal queda, en consecuen-cia, reducido á estos precisos tórrninos: " .

Daniel.Escobar, Evaristo Galeano, Manuel A. Escobary Francisco Parra (blanco), enjnielados por el- séxtuplo delitode homicidio, por el de cuadrilla de mallíechores, VOl' el de ro-bo y por el ele heridas.

.Medellin. setiembre 16 ele 18i74.•

Los Enrrours.

ERR.ATAS.DICE:

En, la págir:a 2!l, linen 23, Cuando.Bn la id. 29, Iinen :31, Á virtud.En la' itJ. 2H, línca <±O, En su indagatoria.En la ieJ. 30, línea 14, Marlnnu Vasco.J~n la id. 30, línea 17, Los peritos.En la id. 59, línea 34, á complexos.JBn ·la -id, (ji, línea 2·7,heEn la id, 63, línea 18, sístesls.En la kt. 83, línea 3, Luciano.J~J1la id. 8:J, línea 3U, veintinueve.En bid. S;"¡,Iinoa 7, evitalos.Eu la i~1. 8ii, lincu lq,. ~h~l1Jia.~,:r¡,'''1'P,A

.~¡.~~COp~!.l~h!.1 t~",'D•..•i~,,:;

iJ!'\LiO'itCA LUiS ANGEL ARANC~,

C-A""" A -r r-«.....f'. ro ¡ry¡..;;¡ t.. .• J....,"-'l._. -,.*--" ..••...••• ~ .',.. {"~ .. -,

DEBE DECmSE:¡""j. o Cuando.

r.,o Á vhtnrl.7.o En BU indngutorin,S.Q J[a rian a Vasco.

U.o Los perito».y complexos.,

, (le~,ínte,siR.Lucianu,

vein tior-h».evltnrlos,Iialu lu •