el camino del líder

Líder puede ser cualquier persona, puedes ser tu mismo (a) y no te has dado cuenta, puede ser la señora que te hace el aseo, puede ser quién te trae el diario en las mañanas, o quién sale a pescar en horarios en

que todos dormimos plácidamente, pueden ser tus hijos, puede ser la dueña de casa del frente, puede ser quien protege tu seguridad sin que

te des cuenta, puede ser cualquiera!!!

Este primer libro está dedicado principalmente a toda mi familia que me han ayudado a salir adelante en momentos difíciles. Especial mención a

Mis más sinceros agradecimientos a:

[ CONTENIDOS ] LIBRO I

[ CONTENIDOS ]

LIBRO I

[ RECURSOS ]

RECURSOS QUE UTILIZAREMOS EN ESTE VIAJE AL LIDERAZGO

En este libro utilizaremos la mayor cantidad de ayudas audiovisuales que podamos, de manera de poder ayudarte a formarte una mejor idea de los temas tratados. Los distintos recursos que aparecerán en este libro son:

Imágenes: la mayoría de las personas aprendemos mejor viendo una imagen potente, que se nos quede grabada en la mente. Por esto, en muchos de los temas se utilizarán imágenes como símbolos, por ejemplo, los valores que se mencionarán serán representados por un animal específico. Creo que es mucho más realista y neutral utilizar un animal conocido en vez de un héroe o heroína o personajes públicos, ya que no siempre cumplen el propósito de ilustrar una idea, y además no todos los conocen.

Películas Recomendadas: haremos referencia a algunas películas o reportajes televisivos que puedan servir de fuente de inspiración para entender mejor el arte del liderazgo.

Bibliografía Recomendada: serán citados a lo largo de estas publicaciones algunos de los libros y autores que forman parte de la filosofía de liderazgo.

Análisis de Casos: cuando sea pertinente, citaremos algunos casos que servirán para ejemplificar situaciones. Actividades: al término de algunos capítulos, te propondremos algunas actividades para que puedas apreciar lo aprendido.

LIBRO I

[ PREFACIO ]

Esta serie compuesta de cuatro libros ha sido pensada principalmente para jóvenes y cualquier persona que quiera desarrollar o potenciar una cultura de liderazgo. Personas comunes y corrientes, como tú o como yo, personas que no necesariamente son jefes y que aún no tienen altos cargos gerenciales. Usualmente asociamos liderazgo con gerentes, jefes, políticos y empresarios exitosos, y la gran mayoría de los cursos de liderazgo giran en torno a esos cargos, excluyendo a muchas otras personas. Peor aún, algunos centros educacionales nacionales e internacionales insisten en homologar al líder con un administrador (conocido como jefe, gerente, CEO, big boss), sin embargo es una realidad innegable que NO todos van a llegar a ser jefes o gerentes, pero SI pueden llegar a ser líderes en lo que hagan. Quiero, a través de estas publicaciones, llegar a la gente que no ostenta esos cargos, a esa gente que es líder sin darse cuenta, a esa gente que día a día pone a prueba su liderazgo luchando contra la adversidad para salir adelante, a esa gente que solo necesita creerse el cuento de que son capaces de muchas cosas. Quizás, si tienes conocimientos teóricos de liderazgo, echarás de menos definiciones, teorías y modelos; echarás de menos los gráficos y las matrices que siempre tratan encasillar a las personas y decirles que tan líderes son. Pero te aseguro que verás una forma diferente de entender el liderazgo, una forma simple y accesible. Justamente por esa necesidad de simplificar el estudio y aplicación de un modelo de liderazgo en personas comunes y corrientes, trataré de no utilizar modelos anteriores, teorías e historia, qué, para el propósito de estas publicaciones, son innecesarios. Verás que los y las líderes nacen y también se hacen en el Camino. Siempre uso en mis clases una comparación: Yo soy malo para la pelota, pero si a mis treinta y tantos años comienzo a practicar fútbol, aprenderé y seré decentemente bueno. Pero una persona más joven, que juega todos los viernes al fútbol será indudablemente mejor que yo. Pero ninguno de los dos nos podríamos comparar con un Ronaldinho que “nació jugando a la pelota”. Ronaldinho tiene una habilidad

natural, el resto tendríamos que desarrollarla durante nuestras vidas para lograr ser futbolistas, aunque nos costaría más. En el liderazgo ocurre lo mismo, hay gente que nació con habilidades y cualidades que le facilitan atraer e influenciar personas, otros tienen que desarrollarlas. Aunque todo parte por:

LA VOLUNTAD DE QUERER SER LÍDER

Atrévete a ser líder en tu vida. No significa que vayas a ser jefe o gerente, ni siquiera te asegura ser exitoso, sólo significa que podrás alcanzar tus metas, influir sobre personas, sentir satisfacción por lo que haces y tener mayores posibilidades de ser una persona feliz, a diferencia de quienes deciden no ser líderes.

Y antes de continuar, tengo que advertirte que para ser líder deberás adoptar un camino de liderazgo que se construye día a día. Lamentablemente muchas personas toman cursos de liderazgo creyendo que al término del curso serán líderes, sin embargo este se desarrolla diariamente, desde que tienes conciencia en la vida.

John Maxwell en su libro “Las 21 Leyes Irrefutables de Liderazgo” dice: “Ser

un líder es como invertir en la bolsa de valores. Si usted espera hacer una

fortuna en un día, no tendrá éxito. Lo que más importa es lo que hace día a

día a largo plazo”.

Por ello, si realmente quieres ser líder en tu vida, adopta las recomendaciones que te presentaré en estos libros como una forma de vida, perfecciónalas, difúndelas e influye sobre más personas, ahí estarás siendo realmente un verdadero Líder.

LIBRO I

[ PARA QUE QUIERO SER LÍDER ]

Buena pregunta. Muchos cursos de liderazgo se dedican casi íntegramente a mostrar definiciones y esquemas para aplicar, pero muy pocos te instan a preguntarte ¿para que alguien querría ser líder? Y en esta ocasión quiero ser consecuente con la pregunta. Voy a partir con tres premisas que vives o vivirás pronto. Pero antes de comenzar voy a ser muy claro en decir que uno no elige ser líder por que quiera mandar, ser jefe o dar órdenes. Hay otras razones que veremos a continuación. Somos Seres Sociables En primer lugar hay una premisa inapelable. No estamos solos en este mundo y por ello debemos interactuar con mucha gente a lo largo de nuestra vida. Si pudiéramos hacer todo solo como un náufrago, no se necesitarían líderes. Para que exista liderazgo debe haber un o una líder y un equipo que le siga. Una persona solitaria, que no se relaciona con otras, nunca va a ser líder de nada o de nadie. Es decir, desde que el ser humano comenzó a relacionarse con sus pares, surge la necesidad de interactuar, trabajar en equipo y sociabilizar. Y es ineludible. La necesidad de lograr objetivos es lo que nos hace tener que interactuar con personas. Y esa interacción debe ser en una forma adecuada y eficiente y para eso está el Liderazgo. Somos Seres Influenciables En segundo lugar, al igual que un hermano (a) mayor, los padres esperamos que sea un ejemplo para sus hermanos menores. Y eso es así porque sí, y aunque muchas veces ese hermano mayor tratará de desafiar dicho “mandato” social, tarde o temprano se dará cuenta de que lo que haga o deje de hacer será imitado a cabalidad por los hermanos menores. Afortunadamente para muchos, o lamentablemente para otros, cuando una persona destaca por algo es mirada inmediatamente por otros, para bien o para mal. Y el

liderazgo es igual, es como un imán: cuando una persona reúne ciertas características que sobresalen del resto, empieza a haber un acercamiento e influencia. Aún cuando no quieras ser líder como tal, si tienes ideas claras y estás convencido (a) de algo, vas a tener seguidores, y detractores, pero al final estarás dando pie a que se ejerza la acción de liderar. La televisión normalmente muestra reportajes de alto impacto, historias desconocidas por la mayoría de los chilenos, historias de gente esforzada. Voy a citar algunas de esas historias reales y te pido que contestes las siguientes preguntas: - ¿Que piensas sobre las historias de niños en el sur de Chile que caminan varios kilómetros diariamente para ir al colegio, por caminos de tierra con frío y lluvia? - ¿Que opinas del empresario Felipe Cubillos, que decide salir a terreno con una fundación a ayudar a pequeños empresarios, pero lamentablemente fallece al ir a Juan Fernández? - ¿Que opinas de aquél supervisor que logra mantener la calma y ayudar a la supervivencia de 33 mineros atrapados bajo la superficie del Norte de Chile, por más de 60 días? - ¿Qué opinas de esa señora que camina 40 kilómetros diarios por caminos de tierra para vender ropa usada puerta a puerta, para poder lograr juntar dinero para un subsidio o simplemente alimentarse? - ¿Qué opinas de esa señora que posterior al terremoto 27/F, decía “hay que ponerse de pie y darle pa’ adelante no más”, habiendo perdido todos sus bienes, mientras otras personas pedían que el gobierno les repusiera todo lo que perdieron? - O ese pescador que perdió a su hijo en el mar producto del tsunami e igualmente salió a pescar a seguir trabajando y luchando por los que quedaron vivos? Más allá de que te dé pena y digas “pobre gente”: - ¿Sentiste admiración por esas personas? - ¿Sentiste una urgente necesidad por salir a la calle a ayudar a cambiar el mundo? - ¿Te cuesta creer que hayan personas que tengan que pasar por estas situaciones? - ¿O te dio lo mismo?

Si dices que SI a cualquiera de las tres primeras preguntas, es decir las personas mencionadas y sus respectivos esfuerzos te provocaron algún sentimiento, alguna simpatía, algún grado de admiración, entonces estás siendo “víctima” de la influencia de dichas personas. Y ahí comienza el liderazgo. Por supuesto no vas a ser parte del círculo de influencia que esas personas proyectan, quizás nunca conozcas a esas personas, pero quienes están cerca de ellas sí. Ellos están siendo objeto de la acción del liderazgo. Porque esos ejemplos los ven otras personas y los imitan, las siguen, las acompañan. Si te dio lo mismo, te insto a cambiar. Somos Parte de una Realidad que Exige ser Líder Y en tercer lugar, hay algunas verdades que debes saber sobre el mundo fuera del colegio o de la universidad o instituto: “NO SE PARECE EN NADA A LO QUE HAS VIVIDO!!!”: - Ahora tienes profesores que se dedican a que aprendas. Algunos se desvelan inventando nuevas formas de mantenerte atento (a) en clases. En la vida real, quizás nadie se molestará en tenerte paciencia ni la vocación para que aprendas, por el contrario, conocerás a cabalidad la palabra autodidacta. - No te harás millonario ni recibirás el tremendo sueldo que por mucho tiempo has esperado por el simple hecho de egresar de tu carrera. Te lo vas a tener que ganar a punta de esfuerzo y sacrificio. - En clases tienes semestres o trimestres; tienes posibilidades de repetir un mal examen; puedes justificar un examen con alguna licencia médica; la universidad, colegio o instituto hará lo posible para que permanezcas en clases. En la vida real, los errores le cuestan caro a la organización por ende no hay holgura para tus errores, así que si haces algo mal probablemente te despidan a la primera. - Nadie te ayudará en tus tareas ni tus compromisos; tu jornada laboral no terminará al toque de la campana ni tendrás recreos. Todo lo “extra laboral” lo tendrás que hacer en tu tiempo libre. - Apenas pises tu oficina, en cualquier organización, se esperará que entiendas y apliques Liderazgo, aunque quizás tu jefe ni siquiera sepa el verdadero significado. Y las personas que trabajarán contigo esperarán lo mismo.

Y aunque suene duro, es la cruda verdad. Por ello tienes que comprender que del Liderazgo, NADIE SE ESCAPA. En base a estas tres premisas, te puedo asegurar que TODOS estamos propensos al Liderazgo, de una forma u otra. Quiero ser muy enfático en decir que ser líder: - NO necesariamente se refiere a ser Jefe. - NO es una súper persona, ni la más inteligente, ni tampoco la más capaz. - NO es una persona que siempre es amable con todos, es un ser humano que tiene altos y bajos, aunque debe tratar de minimizar esos “bajos”. - NO es una persona que anda siempre con una sonrisa en la boca. - NO es una persona que vive y se desvive para otros, aunque en muchas ocasiones su equipo le exigirá su máxima dedicación por el objetivo final. - NO es una persona que le dice sí a todos. Debe saber decir que no. - NO es una persona que resuelve todos los conflictos. Como seres humanos hay cosas que escapan a nuestro control. - NO es una persona que lo sabe todo. Ojala supiera muchos temas, aunque siempre recomiendo saber un poco de muchos temas, como se dice “los títulos de las canciones y no la canción entera”. - NO es quién grita más fuerte o tiene una posición impuesta sobre otras personas. - NO es una persona líder en todo aspecto de la vida. El liderazgo es situacional, es decir puedo ser líder en el trabajo, pero en la casa… Sin embargo: - SI es una persona que cree en si misma. - SI es una persona que se atreve a hacer cosas. - SI es una persona que persigue objetivos y necesita complementarse con otros. - SI es una persona que delega y que permite que otros lo apoyen. - SI es una persona que tiene intenciones de lograr algo en la vida, para si mismo o para otros. - SI es una persona que se ha ganado el reconocimiento por parte de su equipo. - SI es una persona como TÚ o como yo.

Y de eso se trata el liderazgo, de tener una Actitud triunfadora, de creerse “el cuento” y de atreverse, de tener el Coraje suficiente para “tirarse a la piscina”.

Y si a eso le sumas tus Valores Personales y algún grado de Habilidad Comunicacional (habilidad para escuchar, hablar, trabajar con otros, negociar, etc.), ya tienes todo listo para liderar y lograr objetivos. Que simple!!! Sin embargo, si a todo lo anterior le quieres agregar Títulos Académicos, Posición en la Organización, Red de Contactos, Capacidad de hacer Gestión, Inteligencia Emocional, etc, entonces serás un tremendo (a) líder. Pero ojo, todos estos últimos atributos son opcionales y no son lo básico para empezar a ser líder.

Película: En Búsqueda de la Felicidad (Will Smith, 2006). Una película que

muestra un perfecto ejemplo de Actitud y Coraje para salir adelante,

incluso cuando todo se ve difícil e incierto, siempre luchando por un

objetivo.

A modo de comparación, el liderazgo básico lo comparo con un computador. Cuando compras un computador nuevo “de paquete” y lo enciendes, te va a funcionar muy bien y hará lo mínimo que esperas de este. Pero también lo puedes agrandar, “enchufándole” más aparatitos gracias a la tecnología plug-in y se transformará en un súper computador y al poco tiempo te olvidarás del básico y simple computador que fue cuando lo sacaste de la caja. En liderazgo pasa lo mismo, bastan Actitud, Coraje, Comunicación y Valores para comenzar el Camino del Líder. Y ese súper computador, puede estar formado por los Títulos Académicos, posición social, cargos, etc. Lamentablemente, la mayoría de los centros educacionales consideran que el líder debe ser ese súper computador, por ende queda reservado a las pocas personas que tienen acceso a eso. ¿¿¿Y el resto queda tristemente relegado a no poder aspirar a ser líderes???. Si quieres ser alguien en la vida, tienes tus propios ideales, te atreves a perseguir tus sueños, desafías la inercia, pretendes dejar huellas por donde pases, o simplemente quieres que tus hijos e hijas sean mejores que tu, tienes que aceptar que YA ERES LÍDER y no hay nada que puedas hacer al respecto, salvo perfeccionar tu liderazgo. ÉXITO EN ESTE CAMINO DEL LÍDER!!!

LIBRO I [ …DE LOS LIBROS ]

“Hay casi tantas definiciones de Liderazgo como teorías de liderazgo”.

Fiedler (1971a),

Y ahora que tengo tu atención vamos a ver muy brevemente que significa líder, según los libros. Existen en la actualidad un sinnúmero de teorías, estudios y análisis que intentan definir la “receta clave” que permita entender al líder y su formación. Hay por lo menos 10 teorías distintas sobre liderazgo, que van desde los rasgos personales hasta grids (coordenadas) administrativos, pasando por teorías que indagan la conducta humana y otras que indagan el comportamiento como administrador. ¿Pero por qué es tan difícil definir las condiciones necesarias para formar líderes? ¿Que hace que existan tantas teorías para explicar algo cuya definición práctica es tan simple? ¿Por qué, a pesar de ser una exigencia de los tiempos actuales, y habiendo tanta teoría al respecto, existe tal déficit de líderes en el mundo? ¿Por qué no todos son líderes? Son demasiadas preguntas para algo relativamente simple. Según el Diccionario de la Lengua Española (1986), liderazgo se define como “la dirección, jefatura o conducción de un partido político, de un grupo social o de otra colectividad”. ¿Estás de acuerdo o te estás cuestionando si esa definición se ajusta a lo que creías saber? Hay una marcada brecha entre la definición de diccionario y la definición “adaptada” de liderazgo, por ello las dificultades en entender el tema y definir una teoría que permita contar con una mayor cantidad de líderes. La concepción popular dice que ser jefe y ser líder no necesariamente son lo mismo. Mientras al primero lo definen como una persona que realiza una función dentro de

un equipo y logra resultados, el segundo goza de una relación con su equipo basada en otras características “blandas” poco medibles y difíciles de replicar. Llega a tal grado la deformación de la palabra que me atrevo a preguntarte: (tómate unos segundos para contestar): - ¿Jefe y Líder son lo mismo? - ¿Qué se te viene a la mente cuando hablamos de tu jefe? - ¿Qué esperarías ver en tu jefe para llamarlo un líder? - ¿Un líder debe saberlo todo? Fíjate que con la segunda pregunta he escuchado epítetos como “inhumano”, “desordenado”, “inmoral”, “no inspira nada” o “un $#@!”. Y por el contrario, mucha gente contesta que un líder es una “persona ejemplar”, “confiable”, “respetuosa”, etc. Actualmente, creo que la definición de líder se ha desvirtuado a tal nivel, que las teorías y cursos están casi todas exclusivamente orientadas a las jefaturas o gerencias, dejando de lado a cualquier persona que no tenga la posibilidad de ocupar dichos cargos. Es más, si desarmamos la definición de líder que aplican muchas escuelas verás que casi todas hablan de un administrador y no Líder. Otro ejemplo de deformación de la palabra Líder: Una vez un profesor con muchos “años de circo” me dijo: “Un líder debe saberlo todo”… ¿Estás de acuerdo o no con esa afirmación? Personalmente creo que NO. Creo que si una persona sabe mucho de muchos temas, generalmente no deja libertades de acción a su equipo, ya sabe lo que va a pasar, por ende se transforma directamente en un jefe más. Coarta a su equipo y no delega. Con estas simples palabras quiero mostrar que liderazgo que conocemos en la práctica es radicalmente diferente a lo que nos muestran los libros. ¿Por qué? Las diferentes teorías hablan de una persona que se encuentra a la cabeza de un equipo y que tiene características específicas. Cuesta encontrar el origen del líder y muchos expertos se centran en buscar una especie de “receta” para aplicar en una persona y moldear a un líder. Veamos algunas definiciones de liderazgo actualmente publicadas:

1. “El liderazgo es el proceso de influir en otros y apoyarlos para que trabajen con entusiasmo en el logro de objetivos comunes. Se entiende como la capacidad de tomar la iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar y evaluar a un grupo o equipo. Es el ejercicio de la actividad ejecutiva en un proyecto, de forma eficaz y eficiente, sea éste personal, gerencial o institucional. El liderazgo implica que haya una persona (líder) que pueda influir y motivar a los demás (seguidores). De ahí que en los estudios sobre liderazgo se haga énfasis en la capacidad de persuasión e influencia.” Fuente: Wikipedia, 2009.

2. “El líder es aquella persona que es capaz de influir en los demás.” Fuente:

www.aulafacil.com, 2009. 3. “Un líder es una persona que guía a otros hacia una meta común, mostrando el

camino por ejemplo, y creando un ambiente en el cual los otros miembros del equipo se sientan activamente involucrados en todo el proceso. Un líder no es el jefe del equipo sino la persona que esta comprometida a llevar adelante la misión del Proyecto.” Fuente: www.genv.net, 2009.

4. “Se entiende por Líder Militar a aquel Oficial que posee la capacidad de

motivar, entusiasmar, orientar y conducir a otras personas, en la realización de actividades comunes, orientado principalmente a la correcta y justa utilización de los bienes fiscales, administración del recurso humano, y por sobre todo, como integrante de las Fuerzas Armadas, la utilización de los recursos militares dispuestos para la Defensa Nacional.” Fuente The 21 irrefutable laws of leadership, Maxwell John.

5. Según el Diccionario de la Lengua Española, liderazgo se define como “la

dirección, jefatura o conducción de un partido político, de un grupo social o de otra colectividad.”

6. El Diccionario de Ciencias de la Conducta, lo define como “las cualidades de

personalidad y capacidad que favorecen la guía y el control de otros individuos”.

7. Y esta definición que parece sacada de una protesta, “El liderazgo es diferente

de la dirección. El liderazgo no tiene nada que ver con tener “carisma” u otras exóticas cualidades personales que en el pasado nos han hecho creer, no es un privilegio de unos pocos elegidos por los dioses y no es mejor que la dirección ni sustituto de ella”. La cito sólo para comparar.

Otras acepciones hablan de liderazgo a todo lo que va a la cabeza de algo, como por ejemplo una empresa Líder, un vendedor que va liderando el proceso de ventas, un atleta que lidera la carrera, líderes de los países, etc. Podemos apreciar diferencias entre las definiciones clásicas y las definiciones orientadas a las conductas; mientras unas hablan de un elemento netamente direccional (de dirigir) las otras hablan de influenciar. Si quieres ahondar más en esta búsqueda verás que a lo largo de la historia se han buscado cualidades y conductas que tienen ciertas personas. Se han creado tablas, gráficos, coordenadas y un sinnúmero de recursos para posicionar a una persona dentro de la habilidad para liderar. Te darás cuenta que en algún punto de la historia el líder pasó a llamarse administrador o manager y se perdió el origen del tema. Verás también que casi todas las teorías están enfocadas al jefe, al administrador, al CEO, al big boss, pero casi NINGUNA se enfoca en la gente común y corriente, aquella que mueve masas sin estar a la cabeza del grupo, aquella que derroca gobiernos por redes sociales como el Facebook o Twitter, aquella que saca la voz y es capaz de enfrentarse a todo, aquella que camina kilómetros bajo la lluvia para llevar a sus hijos al colegio. Y es ahí donde están los verdaderos líderes, en el día a día, generalmente fuera de la oficina y sin cargos formales. Líder puede ser cualquier persona, puedes ser tu mismo (a) y no te has dado cuenta, puede ser la señora que te hace el aseo, puede ser quién te trae el diario en las mañanas, o quién sale a pescar en horarios en que todos dormimos plácidamente, pueden ser tus hijos (as) o hermanos (as), puede ser la dueña de casa del frente, puede ser cualquiera!!!

LIBRO I [¿QUE DICE LA REALIDAD?]

¿QUE ENTIENDE LA GENTE COMÚN POR LÍDER? Y hasta aquí hemos visto un pequeño barniz de lo que dicen los libros, pero ¿qué pasa con la creencia popular? Para ahondar un poco más sobre el caos que existe al definir líder, te cuento que hace un tiempo realizamos un pequeño estudio a través de una breve encuesta a personas de diversos estratos sociales, diferentes niveles educacionales, diferentes edades y ambos géneros y de cualquier parte del país (no pertenecen a mismas empresas). Las preguntas fueron muy simples: 1.- ¿Que es para usted ser líder? 2.- ¿Conoce algún líder, nómbrelo? 3.- ¿Qué espera ver en un líder? Las respuestas fueron muy variadas pero muy concisas y dicen mucho, quizás demasiado para los modelos actuales de liderazgo. En estratos socio-económicos bajos, con niveles igualmente bajos de educación, a la primera pregunta respondieron, en su mayoría como una persona que les inspira algo, una persona que les da confianza, que los motiva, los escucha, pero por sobre todo, una persona que es un ejemplo para ellos. A mayores niveles de educación y de jerarquía en una empresa, las respuestas fueron muy similares, pero principalmente se orientaban a una persona que “predicara” con el ejemplo. A la segunda pregunta, en los niveles socio-culturales bajos y medios, las respuestas, increíblemente casi en unísono, fueron padre y madre o algún pariente cercano, mientras que en los niveles superiores, las respuestas iban orientadas a un personaje público, alguien poco accesible pero de relevancia nacional o internacional. Para el caso de la tercera pregunta, las respuestas variaron bastante, pero en general, ninguna respuesta se refería a algo relacionado a ser un buen administrador, por el contrario, se relacionaban con ser una buena persona, un buen ser humano, con

conocimientos, con ejemplo y algunos valores importantes como el coraje, la integridad, la actitud y la humildad. Y que conclusión podemos extraer: 1.- Que en general, la gente entiende al liderazgo como un tema social y no como una simple definición de “dirigir” a un grupo de personas. 2.- Que se esperan actitudes y valores en los líderes. 3.- A menores niveles de educación, los líderes se asocian a figuras paternales, que han afectado o influido en algún momento de sus vidas, mientras que a mayores niveles socio-culturales, el liderazgo lo asocian a personajes públicos que no han influido directamente sobre sus vidas. 4.- A niveles socio-culturales bajos o medios, el líder se asocia con una persona que ha sido ejemplo de vida, mientras que en niveles superiores, se ha asociado con personas que son ejemplo de éxito. 5.- Y aquí es donde me sorprende más el tema. Veo que hay una estrecha relación entre la definición de administrador y las personas que tienen mayor acceso a la educación, mientras que en el lado opuesto de la vereda, la definición se acerca más a líder. ¿Qué pasa entonces en los colegios, institutos y universidades que forman líderes que cuando se habla de líder se refieren a jefes, administradores, managers o personajes públicos? No entiendo la razón de porqué el o la líder dejó de ser una persona que influía sobre otros y pasó a ser una persona exitosa y pública, casi inalcanzable. Aquí está el principal problema del liderazgo, creo que los organismos educacionales, internacionalmente hablando, llevaron al líder a un plano netamente gerencial y se olvidaron de la gente que no es jefe, se olvidaron de las personas comunes y corrientes, se olvidaron de los jóvenes y la tercera edad y muchos otros grupos de personas. Por esta razón, estos libros pretenden rescatar el verdadero liderazgo, ese que no necesariamente resulta en éxito, que no necesariamente conduce a emprendimiento, ese liderazgo que se hace anónimamente y en silencio cuando una madre educa a sus hijos, cuando un alumno logra cosas que algunos profesores no pueden lograr en la sala de clases, cuando un microempresario debe batirse por si solo para salir

adelante, cuando una persona idealista (como yo) quiere hacer una diferencia en el mundo. ESO ES LIDERAZGO!!!

LIBRO I [ENTONCES, ¿QUÉ ES SER LÍDER?]

A estas alturas tenemos la información suficiente como para afirmar que:

“Líder es aquella persona que es capaz de influir sobre otras, para que en forma voluntaria, logren objetivos comunes”.

Donde Influenciar es la parte más importante de la definición. El primer obstáculo que tienen las relaciones humanas actuales es exactamente qué hacer para que las personas efectúen un trabajo por un convencimiento propio, más allá de la motivación salarial de por medio. Fíjate que siempre se destaca el término líder “negativo” y líder “positivo”, y ¿Cuál es la importancia de esto? Cuando hablamos de líder, idealmente buscamos a la persona que influya positivamente sobre otras, pero lo bueno y lo malo, desafortunadamente, es un punto de vista, ya que lo que es bueno para unos puede ser malo para otros y viceversa. Lo que realmente importa es que ese líder, ya sea “positivo” o “negativo”, ha podido influir sobre un grupo de personas, y para efectos de estudiar el liderazgo, no se deberían hacer excepciones, aún cuando muchos de los líderes “negativos” hayan causado una herida incalculable a la humanidad. Ahora, quiero presentarte algunos ejemplos de personas que son consideradas líderes (negativos y positivos) para ver algunas similitudes.

Adolf Hitler (Alemán, 1889-1945), fue una persona que lograba una escalofriante influencia sobre su pueblo, aunque siempre tenía el poder punitivo para “convencer” a detractores de su régimen. Aún así logró grandes cosas para su pueblo.

Para ellos pudo haber sido un tremendo líder, pero para Judíos, Polacos y otros pueblos es un ejemplo de liderazgo negativo. Tenía un tremendo poder de convencimiento dado por su alta capacidad de oratoria, lo que sumado a su actitud frente a los acontecimientos de la época, lo llevaron a lo más alto del poder Alemán. Otro ejemplo. El Papa Juan Pablo II (Polaco, 1920-2005), llegó a ser la autoridad máxima de la iglesia católica entre 1978 y 2005. Tenía un gran poder de la palabra y una extraordinaria capacidad para influir sobre sus creyentes. Y aunque él representaba un segmento entre las diferentes religiones, cuando viajaba por los países, estoy seguro de que en las calles salían a recibirlo, además de los católicos, otras miles de personas que no profesaban la religión católica y otras que ni siquiera profesaban religión alguna. Nuevamente debido a su convencimiento y su capacidad para comunicar su visión y sus objetivos.

Un último personaje para ilustrar liderazgo es Nelson Mandela (Sudafricano, nacido en 1918). Una persona que se autodefine como un líder impulsivo e idealista hasta antes de ser condenado a cadena perpetua, y luego, al ser liberado 27 años después, de define como una persona más madura, prudente y reservada. Reconocido líder mundial quién llegó a utilizar el medio armado (“El Legado de Mandela”, de Richard Stengel, 2010) y que luego de la prisión comprendió las cualidades que debía

tener un líder para lograr defender la paz que tanto añoraba por la vía pacífica. Otro ejemplo totalmente diferente. Hace un tiempo fui a buscar a mi hijo al jardín infantil y me puse a observar el comportamiento de los niños en el recreo, y me di cuenta de que siempre había un niño(a) que tomaba la pelota de fútbol, detenía todo el partido y ponía reglas especiales o armaba los equipos a su pinta. Y resulta que los demás niños lo seguían y lo apoyaban, aunque como niños, habían otros que solo querían jugar a la pelota por lo que perdían rápidamente la paciencia.

En todos estos ejemplos tenemos conductas extemporáneas, con diferentes capacidades intelectuales y conocimientos de cada líder, pero al final, todos son o fueron líderes para esa ocasión en particular. Muchos estudiosos dirán que lo que acabo de mencionar ya se había tratado en la primera Teoría de Liderazgo conocida como Teoría de los Rasgos o del Gran Hombre, donde se buscaban cualidades en las personas que hacían que la gente las siguiera. Yo lo único que veo es gente con un convencimiento tan grande de lo que creían correcto (Actitud), una fuerza de Voluntad (Coraje) tan impresionante que arrastraban a muchas personas, una capacidad de trasmitir sus ideales (Comunicación) y sus Valores claros y muy bien impregnados en su ser: Los Cuatro ingredientes del Liderazgo.

El liderazgo tiene, por sobre todo, un aspecto emocional. Tiene un vínculo afectivo con su gente, algo que hace que las personas aún cuando no estén de acuerdo con los métodos del líder, lleguen a consensos y logren los objetivos. Ese vínculo, que en las Fuerzas Armadas se conoce como “llegar al corazón de la tropa”, es el que permite diferenciarse de una jefatura.

El liderazgo es una actitud no solo del líder que la ejerce si no que del equipo que lo sigue y esa actitud está 100% basado en emociones y lazos afectivos (no se refiere a lazos afectivos como él amor o la atracción). He ahí la gran dificultad para ser un líder.

Un (a) líder no es más que una persona que influye sobre otras.

LIBRO I [ ¿QUIERES SER LÍDER? ]

Con todo lo que hemos mencionado previamente, asumiendo ahora que quieres ser o perfeccionarte como líder, te diré que solo necesitas potenciar cuatro aspectos fundamentales. Tal como mencioné previamente, un computador recién sacado de la caja, tiene que tener un lenguaje básico cargado y funcionará perfectamente. El liderazgo en su forma más básica parte de este lenguaje compuesto por cuatro pilares: El Coraje. La Actitud. Los Valores. La Comunicación. Nada más!!! El resto es accesorio. ¿Necesito saber de todo? NO, para eso desarrollo mi capacidad de influir sobre la gente que sepa y me ayude. ¿Necesito tener títulos? NO, la actitud y el coraje mueven muchas conciencias sin necesidad de ser eruditos en una materia específica. Aunque es preferible tener títulos para que te sea más fácil influir. Quiero volver a señalar que una de las cosas más complejas que existe es formar líderes. Las “habilidades blandas” como el liderazgo son complejas porque involucran muchos factores, entre ellos los emocionales, que varían en todas las personas. Ya había mencionado previamente que la necesidad de ser líder en la vida es ineludible, aunque puedes decidir no serlo, depende de ti y de tus ambiciones en la vida. Si decides ser líder, deberás trabajar en algunas dimensiones específicas en las cuales se incluyen los cuatro pilares que mencioné previamente:

1.- La Dimensión del Carácter de Líder: aquí entran tu Actitud, el Coraje para atreverte a hacer cosas y tus Valores Personales. Es la primera y segunda impresión que damos frente a los demás; potenciando esta dimensión empieza la influencia y el acercamiento. El Segundo Libro trata justamente de esta Dimensión. 2.- La Dimensión de las Relaciones de Líder: asumiendo que tienes una actitud y corajes tales que empiezas a influir en personas, al igual que un imán, te empezarás a rodear de gente que te creerá y te seguirá. Ahora debes entonces saber relacionarte con ellas, por lo que entra a jugar tu capacidad de trabajar en equipo, la forma en que te comunicas y la forma en que solucionas los conflictos. El Tercer Libro trata de esta dimensión. 3.- La Dimensión del Liderazgo: si tienes un carácter definido por tu actitud frente a la vida y el coraje necesario para darle sentido a tus ideas, y te manejas en equipos de trabajo, falta lo último, aprender a dirigir. Y aquí entran a jugar otros conceptos propios del administrador. El Cuarto Libro trata de esta dimensión. Recién en esta parte comparto la visión que tienen los centros educacionales nacionales e internacionales: un líder que quiera hacer rendir al máximo su capacidad de influir sobre las personas, debe saber administrarlas. Penosamente siempre se enfocan a esta última parte descuidando las dos dimensiones anteriores. 4.- La Dimensión “senior”: El quinto libro, totalmente opcional, está destinado a aquellas personas que quieran pasar de ser alumnos a instructores de este modelo de liderazgo. Una cosa importante es saber ser líder y otra absolutamente trascendental es saber enseñarlo. Esta división en dimensiones del estudio y aplicación de una filosofía de liderazgo es una forma esquematizada y jerarquizada de formar líderes y obedece a un Camino que hay que seguir. Lamentablemente, no hay curso que al término del mismo te diga, “ahora soy líder”. Por el contrario, este es un proceso voluntario que se va haciendo a lo largo de tu vida y se va puliendo con tus propias experiencias.

Finalmente, antes de ver las cualidades y características que tienes que desarrollar o potenciar para pulirte como líder, hay algunas premisas fundamentales que debes tener en cuenta sobre liderazgo.

LIBRO I [PREMISAS TRASCENDENTALES]

En este capítulo quiero desmitificar algunas creencias que tenemos sobre liderazgo, de manera de que tu estudio y desarrollo de la filosofía de liderazgo comience sobre una base firme y sin estigmas, que solo contribuyen a enturbiar la verdadera misión del líder. 1.- EL LIDERAZGO ES SITUACIONAL

Muchas personas esperan tomar un curso de capacitación o asistir a un seminario para adquirir un estilo de liderazgo particular con el cual se identifiquen. Buscan información y finalmente dan con lo que buscaban, sin embargo por alguna extraña razón no les funciona adecuadamente con todas las personas. ¿Porqué?. Por que el liderazgo es netamente SITUACIONAL, vale decir, el liderazgo está dado por LA AUDIENCIA o el RECEPTOR FINAL.

¿Interesante no? Esto significa que el estilo de liderazgo que deberás aplicar lo dictan las personas cercanas a ti y no al revés. Si bien es cierto que un líder tiene cualidades específicas, estás se deben amoldar a las personas receptoras (equipo) para que se pueda lograr el objetivo final buscado, por ello es que se habla de un liderazgo dependiente de las situaciones y personas con las cuales se relaciona. Si buscabas una definición diferente, mil disculpas, pero la realidad ha demostrado que la forma en que influimos en la gente varía de persona en persona y aunque hay características comunes, lo esencial es que las situaciones dictan mi estilo de liderazgo. Te estarás preguntando: ¿Estilos de Liderazgo? Sip, Estilos de Liderazgo. Un buen líder sabe que debe alternar por diferentes estilos de hacer liderazgo y todos esos estilos dependen de muchos factores, pero principalmente de: - Mi como persona con mi carácter y mi personalidad. - El equipo con sus propios caracteres y sus propias personalidades. - El objetivo común buscado. Y si no me crees, piensa: Si quieres lograr que un curso lleno de alumnos de diferentes géneros y edades aprenda una materia en específico, -A un niño de 4 años podré explicarle la materia y confiar en que, por su propia cuenta, estudiará sin supervisión? O debo estar muy encima de él? - Y si aplico esa misma forma de enseñar a un joven de 15 años, tendré el mismo resultado? O habrá una reacción opuesta a mi forma de enseñar? - Y será lo mismo hablarle o enseñarle a un hombre que una mujer? A un niño que a un adulto? Etc. Las respuestas son claramente NO, no da lo mismo y por ello es que existen los estilos de liderazgo. Si tienes hermanos o hermanas, ¿la forma en que tus padres te enseñaron, fue la misma que con tus hermanos o hermanas? Esto se debe a que quién debe amoldarse es el líder a su equipo y no al revés, por ello se utilizan diferentes estilos.

En el Cuarto Libro, cuando hablemos de cómo Liderar formalmente a un grupo de trabajo, citaremos algunos de estos estilos, los más comunes y veremos como se amolda a la situación y “público” receptor. Y todo esto es por una simple razón, se busca un objetivo al momento de hacer liderazgo, y ese objetivo lo deberá cumplir tu equipo y tú, en forma cohesionada y sincronizada, por ello es que deberás hacer lo que sea para que tu equipo logre el objetivo planteado. 3.- EL CENTRO DEL UNIVERSO, ¿QUIÉN GIRA ENTORNO A QUIÉN?

He aquí una de las preguntas más complejas de liderazgo, ¿Quién gira entorno a quién? Supongamos que el universo está compuesto por dos esferas: el sol y la tierra, y asumamos que uno de ellos es el líder y el otro el equipo. ¿Quién sería el sol y quien la tierra?

Antes de seguir: Si tú eres Líder, ¿quién sería tu Equipo? Como este libro trata de enfocar el liderazgo de una forma simple y accesible a todas las personas, te diré que un equipo puede ser: - Las Personas a mi cargo en el trabajo. - Mi curso de alumnos. - Mis hijos y familia. - Mi comunidad. - Cualquier otro grupo de personas. Continuando… En unísono las personas que más conocen de liderazgo dirían que el Sol es el líder ya que ilumina y guía al equipo, que en este caso sería la tierra. Pero la experiencia dice que cada vez que un líder se cree exclusivamente Sol, el equipo no hace nada más que girar a su alrededor sin sinergía, sin trabajo en EQUIPO. Y esto es un gravísimo error. Los jefes que no son líderes son esos Soles, gente que hace que todos giren a su alrededor coartando todo tipo de iniciativa o proactividad. Contrariamente a lo que se piensa, el líder debe ser sol y TIERRA al mismo tiempo. Debe guiar e “iluminar” el camino, pero también debe girar en torno a su equipo para que este pueda hacer su trabajo en forma proactiva. En otras palabras, para un buen líder, el equipo es por lejos lo más importante. El equipo será quien haga la mayor parte del trabajo y por ello es que el líder debe amoldarse para que todos trabajen e interactúen entre sí. Que triste es ver a esos pseudo líderes o jefes sin liderazgo dándole un trabajo al equipo y cuando este está terminado, el líder acaba revisando y corrigiendo cada una de las cosas que el equipo hizo, generalmente usando descalificativos y terminando por “adaptar” todo a su pinta. En vez, si se hubiese bajado del altar y se hubiese puesto en el lugar de Tierra también, se hubiera dado cuenta de que el trabajo iba a resultar malo desde un principio, así no tendría que desgastarse revisando y corrigiendo, para finalmente menospreciar todo el esfuerzo de su equipo.

¿Quieres ser líder? No te creas el centro del universo, por el contrario, para ti, el centro del universo debe ser tu equipo. Tu deberías ser un FACILITADOR de tu equipo. Ve lo que necesita tu equipo para lograr cumplir el objetivo planteado. Puede necesitar recursos, libertades, dinero, mayor información o simplemente apoyo moral y motivacional. Pero ojo, nuevamente esto no se trata de estar bien con todos. A veces tendrás que tomar decisiones impopulares, tendrás que usar un estilo de liderazgo participativo y luego un autoritario, lo que sea necesario para cumplir los objetivos. Generalmente creo que cada proyecto u objetivo debe comenzar por un estilo netamente autoritario y luego se va flexibilizando para incluir otros estilos, pero al final vuelve a un estilo autoritario. Y esto concuerda con que el líder debe ser sol (autoritario) al inicio y al final y entre medio deberá ser tierra (participativo, liberal, etc.)

Del Libro “El Legado de Mandela”, de Richard Stengel, Nelson

Mandela señalaba que: “Algunas veces es absolutamente

necesario que un líder tome medidas de manera independiente, sin

consultar a nadie, e informe a la organización de lo que ha hecho…

y él carga con las consecuencias.”

En cada proyecto en que seas líder, DEBES utilizar un estilo autoritario al inicio (lo que no significa gritar más fuerte o ser inflexible), solo quiere decir que debes delinear la “cancha”, trazar los objetivos, asignar los recursos, entregar tareas, etc. Luego flexibilizar. Y al final, cuando se está terminando el proyecto, deberás presentar conclusiones o resultados y eso lo tendrás que hacer tú y nadie más que tú, por lo que vuelves a ser autoritario. Si no me crees, comienza cualquier proyecto en un modelo participativo o liberal. Puede ser un proyecto de ventas, una tarea grupal, organizar un asado o lo que sea. Permite que el equipo, asumiendo que tú eres el líder del equipo, sea liberal o democrático al inicio y ve que pasa. Te darás cuenta que el caos es interminable,

hasta que un líder ponga orden y comience a hacer la pega que TÚ debiste haber hecho desde el inicio.

4.- LA FAMOSA INFLUENCIA

Hemos hablado extensamente de que liderazgo se basa en Influir sobre las personas para que logren los objetivos planteados. Pero ¿como influyo sobre ellas? Muy simple, con Actitud y Coraje, conociéndome a mi mismo, sabiendo lo que soy capaz de hacer. Eso produce influencia. Pero, al igual que la imagen, la gota de agua al chocar con el agua produce ondas, que viajan en todos los sentidos. Mientras más grande es la gota, las ondas serán mayores y abarcarán más superficie. La influencia funciona igual. No importa tu posición en la empresa, o tus recursos o tu educación, siempre estarás ejerciendo influencia sobre un círculo cercano a ti mismo.

Del Libro “Las 21 Leyes Irrefutables del Liderazgo”, de John

Maxwell, señala: “…, pero los títulos no tienen mucho valor cuando

se trata del liderazgo. El verdadero liderazgo no puede ser

otorgado, nombrado, ni asignado. Solo procede de la influencia y

esta no puede imponerse.”

Mientras más “alto” llegues en tu carrera o tu vida, más grande será ese círculo. Lo que hagas o dejes de hacer se propagará al igual que las ondas que produce la gota de agua. Habrá gente que ni te imaginas que te estará observando. Ese es el principal problema de un líder. Haga lo que haga, estará creando un círculo de influencia a su alrededor y eso es inevitable. Lo único que podemos hacer es que ese círculo sea grande y sólido para que influyamos positivamente en las personas que nos siguen. Si tú eres quien hace aseo en la empresa, ¿estarás influyendo sobre alguien? Si tú eres un mal alumno en el colegio, ¿estarás influyendo sobre alguien? Si tú eres dueña de casa, ¿estarás influyendo sobre alguien? A todas las preguntas, la respuesta es SI. Siempre influimos en alguien.

5.- LOS INGREDIENTES DEL LIDERAZGO Ya hemos mencionado en varias ocasiones cuales son los ingredientes necesarios para que exista liderazgo. Hablamos de la acción de liderar, y son sólo tres: - Un o una Líder. - Un equipo. - Un objetivo. Nada más. Si tienes estos tres ingredientes, tendrás todo lo necesario para empezar la acción de liderazgo. Así mismo, ante la ausencia de cualquiera de los tres ya no hay Liderazgo. Entrando en detalles:

- Líder: las características y cualidades las detallaremos a lo largo de los siguientes libros. Es la persona que generará todas las acciones tendientes a producir sinergía en el equipo, delineará los objetivos, asignará recursos y supervisará en el trayecto. Tiene una tremenda responsabilidad consigo mismo y con su equipo, y utilizando el círculo de influencia, tiene responsabilidades con sus jefes y sus pares.

- Equipo: tal como mencionamos previamente, el equipo puede ser cualquier grupo de personas que sean objeto de mi influencia. Pueden ser personas del trabajo, de la familia, del colegio, etc. Son quienes me apoyarán en el cumplimiento de los objetivos buscados.

Objetivo: es la meta por la cual trabajaremos como equipo. Sin objetivo no hay razón de que exista liderazgo. El objetivo nos dice qué estilo de liderazgo que aplicaremos, las acciones a seguir, los recursos, el tiempo, etc. Si tu objetivo es cumplir una meta de ventas en el trabajo, entonces tu equipo y tú girarán en torno a esa meta, y se esforzarán por cumplirla. Si tu objetivo es que sus hijos sean

profesionales, entonces todos girarán en torno a lo que sea necesario para que ellos lleguen a esa meta. Si tu objetivo es que tu curso de alumnos termine el año satisfactoriamente, entonces tendrás que hacer todos los pasos necesarios para que aprendan y lleguen a fin de año. Pero cuando un supuesto líder no tiene metas definidas, pierde tiempo, pierde recursos, la gente se desmotiva, el propio líder se desmotiva y se deprime. ¿En tu trabajo o actividad actual, estás motivado(a) o ya no tienes ganas de seguir en su oficina actual? Si no tienes ganas, ¿cual es su meta? ¿Cual es el objetivo por el cual llegaste a esa oficina o a esa actividad? ¿Para que llegaste ahí? ¿Te fue mal en un proyecto o crees que fracasaste? Busca otra meta, aprende de los errores anteriores. Siempre que escucho la frase “¿En que crees que fracasaste en la vida?”, contesto lo mismo: No he fracasado. Un fracasado es alguien que no se levanta después de una caída. Es una persona que se “echa a morir” después de una desilusión. Es una persona que pierde la fe en todo y maldice a cuanta persona se le cruza en el camino y no sale de su depresión.

Nosotros mismos fomentamos los antidepresivos y le damos pega a una serie de profesionales, siendo que somos los portadores de la cura: Buscar una meta en la vida, de corto plazo, de mediano plazo y de largo plazo, y pelear por ella.

6.- LOS INGREDIENTES DEL LIDER Y como hemos hablado de que la acción de liderazgo requiere de un líder, y a pesar de que ya lo hemos mencionado previamente, lo esbozaremos brevemente para recordar solamente. Para ser líder se requiere: - Las ganas de ser líder. - La Actitud Triunfadora: Creerse el Cuento. - El Coraje: Atreverse a hacer cosas. - Comunicación: algún grado de habilidad comunicacional, ya sea el don de la palabra oral o escrita, el don de la negociación, la habilidad para convencer, la capacidad para expresarme, etc. - Valores: todos los pilares formadores que nos definen como personas de bien.

7.- EL ESTILO DE LIDERAZGO ES TEMPORAL

Les diré que el estilo de Liderazgo que aplicamos es Temporal. Uno puede ser líder, creerse el cuento y atreverse, pero la acción de liderazgo al ser situacional, depende de la situación que se viva, y por ello es además, temporal. Volvamos al terremoto. Cuando el Ejército asumió el mando de catástrofe en la región del Bio Bio, específicamente en ciudades como Concepción, se requirió de un estilo de liderazgo Autoritario para controlar el caos que producía la desesperación de la gente, los saqueos y la violencia. Pero cuando se controló y la ciudad empezó a retomar su normalidad, el liderazgo debió evolucionar, dando paso a las autoridades políticas. Por esto el liderazgo militar del momento, fue justamente eso, del momento. Habiendo una meta u objetivo, que en este caso fue controlar el pánico y dar seguridad a la población, se ejerció un estilo de Liderazgo. Se cumplió ese objetivo y se terminó el liderazgo y se cambió por otro tipo con nuevos actores.

Siempre debes tener presente que los liderazgos como acción, tienen un inicio y un término, y están dados por el objetivo final buscado. A pesar que lo trataremos más profundamente en el Cuarto Libro, los estilos de liderazgo están dados por la situación y el público objetivo (equipo), y además se le debe agregar la variable tiempo. El liderazgo que utilizo para salir de una crisis no puede ser el mismo para tiempos más tranquilos, puede que funcione un liderazgo autoritario en tiempos de crisis, pero si intento mantenerme autoritario cuando la crisis haya pasado, te aseguro que solo lograrás formar barreras entre el equipo y tú, y tendrás que transformarte en jefe puro para poder hacerte respetar. Nuevamente, el estilo de liderazgo que aplicaré depende de cada objetivo y del público o equipo al cual estoy liderando, pero has el siguiente ejercicio:

Actividad: En una clase o en un grupo de varias personas, plantea un

objetivo difícil de lograr, aunque tú sepas como lograrlo, deja que el equipo

se ponga de acuerdo solo.

Si notas que hay caos en el equipo trata de ir ayudándolos a darse cuenta

de lo que tienen que hacer para cumplir con el objetivo.

Cuando veas que aún siguen complicados con el trabajo, plantea un

refuerzo motivacional diciéndoles los beneficios en la autoestima y en el

aprendizaje que cada uno ganaría terminando el trabajo. Te aseguro que

algunas personas comprenderán el aporte al crecimiento personal, pero a

otros tantos les dará lo mismo.

Te aseguro que generarás un conflicto en el equipo, entre los que les

interesa un premio versus los que les interesa el crecimiento personal. Eso

se da por que aplicaste un mismo estilo de liderazgo en tu equipo, usando

un liderazgo transformacional (crecimiento personal).

Pero, si a esos tantos que les dio lo mismo, les ofreces una pequeña

recompensa si terminan a tiempo el trabajo, una recompensa totalmente

superflua pero que simbolice un premio, aseguro que generarás otro

conflicto en el equipo, por que aplicaste diferentes estilos de liderazgo

haciendo divisiones y segmentación en tu equipo, usando un liderazgo

transformacional (crecimiento personal) y un liderazgo transaccional

(premios).

El tema de los Estilos de Liderazgo no es fácil, pero están ahí y hay que ocuparlos correctamente o si no generarán conflictos.

8.- PARA APRENDER A LIDERAR DEBES SABER SEGUIR

Muchas personas creen que ser líder es llegar y hacer un curso de liderazgo o llegar a un alto puesto en una organización y se pretenden saltar la fase de seguir a otros líderes. Tal como dice el viejo refrán: “Para correr hay que saber caminar”. En liderazgo ocurre lo mismo. Todos caemos en algún momento de nuestras vidas en la crítica desmedida contra nuestros jefes. Creemos que cuando nosotros seamos jefes la cosa será distinta. Otras personas están constantemente desafiando la autoridad, la “pelan” constantemente, la desautorizan directa o indirectamente ante otras personas, y muchas otras actitudes, sin embargo, ninguna de estas es razón suficiente para decir que contigo como líder las cosas serán diferentes. Veremos en el Segundo libro una cualidad llamada Ser Ejemplo. Esta cualidad es vital si uno quiere sembrar y cosechar confianza, y para que esto ocurra no podemos caer en las actitudes que acabo de mencionar, aún cuando tu jefe no sea líder y te des cuenta de que no “tiene dedos para el piano”. Toda esa gente que reclama y critica constantemente, cuando le toca ser jefe, hará exactamente lo mismo que le criticaban al antiguo jefe, y esto es simplemente por

que es mucho más fácil destruir que construir, y en nuestra cultura está impregnada esa tradición de criticar en vez de ayudar a mejorar el sistema. Una vez tuve una discusión con un Oficial que me decía que los procedimientos estaban malos y que no había que tomarlos en cuenta sino que hacer lo que la experiencia dictaba. No dejaba de tener razón su forma de pensar, pero le dije: “en vez de criticar, por que no ayudas a actualizar o hacer un nuevo manual de procedimientos?”. Sólo hubo silencio después de eso. Un buen líder hace exactamente eso, construye o mejora lo que ya está hecho o lo crea sino existe, pero siempre parte de la base de ver el “Vaso Medio Lleno”. En tu vida te encontrarás con buenos líderes, jefes buenos y malos, pero para llegar a ser tú un líder respetado debes saber seguir a tus jefes. Y esto no significa ser un “lamebotas”, por el contrario, significa aportar para mejorar el sistema. Muchas veces cuando se me acercaban personas de mi equipo a contarme un problema de cualquier tipo, les contestaba casi siempre lo mismo: “la próxima vez, tráeme el problema y algunas soluciones y juntos tomaremos una decisión”. Con esto no sólo hacía liderazgo sino que involucraba a las personas en las decisiones, aprendía yo sobre otros temas y les formaba una cultura de constructivismo en vez de destructivismo. Y funciona en la mayoría de los casos. De esta forma fomentábamos que hubiese más seguidores en el equipo. Este es el primer paso para llegar a ser líder: saber seguir a otros líderes. Y si su liderazgo no te gusta o no te acomoda, ayuda a mejorarlo, aporta tus ideas, o simplemente aprende de ello. Cualquier persona que se salte esta etapa y trate de irse directamente a liderar va a cometer muchos errores de aprendizaje que pueden costarle muy caro en todo sentido, pero principalmente en el aspecto relacional con su equipo, lo que puede llegar a ser irreparable.

Actividad: Para conocer tu aptitud para seguir a otros líderes, en un papel

anota en una columna todas los aspectos negativos que veas en tu actual

jefe o jefa o quién esté liderando tu equipo (puede ser hasta el profesor).

Un vez que termines, anota en la columna del lado, las virtudes o

cualidades positivas que veas en esa persona.

La mayor parte de las veces, la columna negativa excederá a la positiva, y

aunque no tiene nada de malo, ahora imagínate que ese jefe eres tú: te

gustaría que tu equipo pensara lo mismo que tu piensas de tu actual jefe?

Hay que tener en cuenta que si tú piensas bien o mal de tu jefe, probablemente haya otras personas que piensen igual que tú. Y ese pensamiento no va a desaparecer porque eres tú seas ahora el jefe, así que lo que creas de tu jefe es casi seguro que lo piensen de ti también. Por esto practica ser menos crítico destructivo y aporta a mejorar el liderazgo de tu jefe o poténcialo. Ve el lado positivo de las cosas y piensa que todo es mejorable (“perfectible” dirían algunas personas). Y como buen seguidor, aparte de ver a tu líder en una manera constructiva, tu misión es tratar de que tus pares dentro del equipo lo vean así también. No ganas nada con ser “la oveja negra del equipo” siendo el único que piensa distinto sino tratas de propagar esa forma de pensar. Habla con tus compañeros de equipo y hazles ver esa filosofía del Vaso Medio Lleno, te apuesto a que en poco tiempo el clima del equipo cambiará para bien. No hay nada más malo que trabajar con gente negativa y pesimista. Ayúdales a ver lo bueno, y a mejorar lo malo, a veces es un problema de desinformación, otras veces un problema de malos entendidos y otros un problema personal, pero todos son problemas solucionables y requieren de la voluntad de un líder, que aunque no esté a la cabeza del equipo, algún día lo estará.

8.- EL LÍDER ES UN NEGOCIADOR POR NATURALEZA

Otro concepto que quizás nadie menciona. Un buen líder es una persona que DEBE siempre estar negociando o mediando con su equipo. Aquella persona que no transa es simplemente un jefe. Mientras que el líder es una persona que no impone sus puntos de vista, sino que trata de hacer partícipes a todos los miembros del equipo. Por supuesto esto no implica que todo lo que ocurra en el equipo es negociable o mediable, tal como planteé anteriormente, un proyecto o cualquier cosa que implique liderar gente debe partir por un estilo autoritario para comenzar a hacer funcionar los engranajes. Pero todo lo que siga incluye conflictos entre personas. Y por conflicto simplemente diremos que es una diferencia de posturas entre dos partes. Por esto es que tu labor como líder, para poder alcanzar el objetivo final que te planteaste, será saber mediar entre esas partes para lograr acuerdos, de lo contrario el conflicto escalará y se hará incontrolable, lo que te llevará indudablemente a un quiebre en el equipo. Tu postura o idea de un proyecto normalmente va ser objetada por muchas personas, inclusive de tu equipo, pero tu misión no es insistir tozudamente hasta lograr ganar tu posición, por el contrario si quieres liderar y trabajar en equipo, vas a tener que ceder y conceder, siempre y cuando se cumpla igualmente el objetivo. Si en esa cesión se

pierde de vista el objetivo o se altera demasiado todo, obviamente que no vas a poder negociar mucho, pero en la mayor parte de los casos tendrás que ir cediendo. En el trabajo en equipo, tú como negociador deberás tener en cuenta lo siguiente: - Cuando hay dos o más posturas distintas y nadie cede, al final habrá SIEMPRE un ganador y un perdedor, y ese perdedor terminará siendo siempre un obstáculo en tu trabajo. - Cuando hay dos o más posturas distintas, y el negociador o Líder, va mediando y logrando consensos, TODOS ganaran, aunque menos, pero el grupo completo terminará ganando y el clima laboral se favorecerá. Debes buscar los consensos dentro de los márgenes que te dictan los objetivos que se plantearon como equipo, y esto va a ser abordado más profundamente cuando veamos estilos de liderazgo, en el cuarto libro. Obviamente en todo lo que no es negociable, debes tener presente que tarde o temprano se generará un conflicto y debes prepárate para enfrentarlo y resolverlo. No ganas nada con hacer como que no hay conflicto, está ahí, está latente. Y la mejor solución, considerando su categoría de no negociable, es mejorar la información disponible para reducir los conflictos por desconocimientos o malos entendidos. Aunque lo trataremos mejor en el Tercer y Cuarto Libro.

8.- DEBERÁS LUCHAR CONTRA EL “SIEMPRE SE HA HECHO ASÍ”

Esta es una de las frases más comunes en personas que no quieren ser líderes o que no les interesa ayudar a mejorar el sistema. No hay nada peor que encontrarse con un equipo o una persona que no quiere romper la inercia y busca siempre excusas para no resaltar en nada o no alterar nada. Los norteamericanos le llaman a “thinking out of the box”, o pensar saliéndose de la caja de hábitos y costumbres. Como líder te vas a encontrar con muchas personas así, pero lo realmente importante es saber si tú eres de ese tipo de personas. Para ser líder deberás siempre tener en mente que tu equipo y, obviamente tú mismo, esperan que sobresalgas y te impongas ante casi cualquier situación. Pero difícilmente podrás ser líder si no eres capaz o no te atreves a romper la inercia de aquellas cosas que “siempre se han hecho así”. Tampoco se trata de cambiar todo, pero si de mejorar lo que existe o cambiar lo malo, sin importar los obstáculos a que te enfrentaras. Tienes que tener presente eso si, que romper la inercia es un trabajo duro, que a veces es impopular y que genera más rechazo que aceptación, pero si tus intereses son superiores y estás convencido de que se lograrán mejores resultados, el tiempo te dará la razón, pero no debes desanimarte por que no serás inmediatamente comprendido.

Si vas a romper la inercia debes utilizar todas las habilidades comunicacionales ANTES, durante y DESPUÉS de hacerlo. No basta con hacer las cosas en forma diferente porque SI, hay que conversar con tu equipo, plantearles el objetivo que buscas, convencerlos de que todo cambio es para mejor y caminar con ellos en este nuevo camino, de lo contrario terminarás solo (a) y sin ningún apoyo. Y nunca se te olvide, pedir cambios en otros también te obliga a cambiar tú. Si en tu organización vas a hacer cambios radicales en la inercia de las cosas, debes tener en cuenta que mucha gente te preguntará ¿y que ganó yo con esto? y no podrás simplemente decir que ganará un crecimiento personal. La gente tiene necesidades fundamentales que no se satisfacen con buenas intenciones, por ello es que todo cambio debe ir de la mano con algún tipo de beneficio a cambio de… Si no es dinero, busca otros medios, pero jamás pretendas hacer cambios sin tener nada que ofrecer. Esta es una de las cosas más delicadas a la hora de hacer cambios y ejercer liderazgo. Mucha gente cree que el solo hecho de ofrecer dinero a cambio de trabajos, como los bonos, es más que suficiente para que la gente haga su trabajo contento y motivado, pero no podría estar más lejos de la realidad. Veremos en el Cuarto Libro algunas otras formas de intercambiar beneficios por trabajo, como salidas temprano, permisos especiales, celebraciones y muchas otras que deben ser usadas sabiamente para poder generar los cambios que buscas.

8.- EL LIDERAZGO ES AFECTADO POR LA LEY DE ACCIÓN Y REACCIÓN

Con toda acción ocurre siempre una reacción igual y contraria: o sea, las acciones

mutuas de dos cuerpos siempre son iguales y dirigidas en sentido opuesto.

Sir Isaac Newton, en el campo de la mecánica planteó hace bastante tiempo su famosa Tercera Ley de Newton, conocida como Ley de acción y reacción, donde planteó: “…por cada fuerza que actúa sobre un cuerpo (empuje), este realiza una fuerza de igual intensidad, pero de sentido contrario sobre el cuerpo que la produjo”. Dicho de otra forma, las fuerzas, situadas sobre la misma recta, siempre se presentan en pares de igual magnitud y de dirección, pero con sentido opuesto. ¿Qué importancia tiene esta ley sobre el liderazgo? Una importancia trascendental en las relaciones humanas. Muchas personas se olvidan de esta ley que aprendemos en enseñanza básica y que, por alguna razón, no hacemos el paralelo con la vida cotidiana. Debes saber que por cada acción que tu realizas, habrá una reacción con la misma fuerza o mayor, y en sentido contrario. Vale decir, si tratas mal a una persona, es muy probable que esta persona te trate mal de vuelta.

Inversamente, si tratas bien y con respeto a una persona, hay una alta probabilidad de que recibas el mismo trato de vuelta. Por esta razón, debes tener muy presente que tus acciones se van a reflejar en tu equipo y serán el puntapié de una serie de consecuencias posteriores, además influirán en el clima laboral o de trabajo, e influirán positiva o negativamente en el resultado final del trabajo. Hay gente que cree que su comportamiento no afectará a nadie, que es totalmente independiente del equipo o que, incluso sus emociones, no afectarán al trabajo en equipo, sin embargo están profundamente equivocados. Mis emociones, mi forma de llegar a la oficina o sala de clases, mi presentación personal, mi forma de dirigirme a otras personas, mi trato, y todo lo que se te venga a la cabeza, afectarán en mi equipo y tendrá una consecuencia de vuelta de la misma o superior magnitud. Si esperas liderar, tienes que tener muy presente esta ley. No se trata de no hacer nada para que no te hagan nada, solo se trata de saber que lo malo que hagas sobre una persona, a cualquier nivel, se reflejará en ti en algún momento. Y aunque no lo creas, hay ejemplos que casi nadie cree importantes pero son trascendentales. - Llamarle la atención en público a un miembro de tu equipo puede ser una solución transitoria a un problema en específico, pero haciendo eco de la Ley de Acción y Reacción, esta conducta hará que esta persona hable mal de ti, y quienes hayan presenciado dicho llamado de atención probablemente te tildarán de descriteriado. Lentamente irás perdiendo el respeto de la gente y te harán el “quite” cada vez que puedan, de manera de evitar otros posibles “descriterios”. Por el contrario, tratar correctamente a una persona produce los efectos más deseados en una organización. Pero ojo, cuando hablo de “correctamente” me refiero a tratar a las personas en forma respetuosa, valorando su posición en el equipo y su aporte al objetivo final, por muy pequeño que este sea.

9.- EL LIDERAZGO MÁSCULINO NO ES NI MEJOR NI PEOR QUE EL FEMENINO

Y para finalizar, te planteo uno de los mitos más grandes sobre liderazgo y géneros. Hay muchas personas, demasiadas diría yo, que consideran que el liderazgo masculino es mucho más eficaz que el femenino. Y por esta razón existe la creencia que para ser una buena líder hay que comportarse más como hombre que como mujer. En mis clases, muchas mujeres afirmaban que los hombres llegamos más fácilmente a nuestro equipo, a diferencia de las mujeres que tenían “que esforzarse” mucho más. Nada más lejos de la verdad. Peor aún, todo ha sido influenciado por la cultura del machismo y/o del feminismo. Ambos géneros somos totalmente distintos y complementarios, y por ello debemos explotar nuestras capacidades y virtudes, y evitar la comparación y la superposición de características.

Aquí me quiero detener un poco y decir que la principal razón de porqué no hay tantas mujeres líderes como hombres, es simplemente por una cuestión de Actitud. Hay una gran falta de convencimiento y de creerse capaces. Si bien es cierto, la mujer que decide ser mamá, muchas veces, pero no siempre, posterga su carrera laboral o profesional por dedicarse a la crianza de los hijos, lo que por supuesto es una desventaja en comparación con un hombre que no tenga esa responsabilidad, por lo que cuando la mujer quiere volver al mundo laboral lleva un desfase con respecto al hombre. Leí una vez un reportaje en que una mujer decía: “las mujeres tenemos que

esforzarnos el doble, para que nos reconozcan la mitad”, y me sorprendió mucho, pero más me sorprendió ver la reacción de otras mujeres a quienes les mostré esa frase. Al unísono todas dijeron que quién haya dicho esa frase no podía estar más equivocada y que solo mostraba una falta de actitud increíble. Y al hacer otro poco más de investigación encontré una publicación de una destacada líder norteamericana quién en su libro utilizó en la portada el siguiente título: “Nice

Girls don´t make it to the corner office (Mujeres buenas no llegan a la oficina de la

esquina)”, haciendo referencia que las mujeres buenas, o bonachonas, no van a llegar a ser jefas. Me sorprendió nuevamente la idea de encasillar la falta de actitud en el género femenino. Cualquier persona que sea bonachona, buena gente, inocente, probablemente nunca llegará a ser jefe y nunca podrá liderar equipos de trabajo. Con esto no digo que hay que ser “vaca”, pesado y mala persona, por el contrario. Pero aquellas personas con poco carácter jamás serán líderes. Quizás algunos recuerden a uno de los personajes más entrañables del Jappening con Ja, la Gerturdis, encarnado por Gloria Benavides. Una secretaria muy inteligente, que sabía mucho y era muy buena persona pero no tenía ni una pizca de carácter, por lo que la pasaban a llevar fácilmente. Ella es un perfecto ejemplo de una persona que nunca iba a poder liderar personas, a menos que cambiara su carácter. Si a esto se refiere el encabezado del libro, estoy de acuerdo. Pero si se refiere a que hay que comportarse como hombre para que una mujer sobresalga, muy desacuerdo.

Con este principio quiero reforzar el hecho de que cada persona tiene sus cualidades que la hacen única, y tienen caracteres de líderes igualmente únicos, y hay que explotarlos de manera de ir consiguiendo los objetivos planteados para ti y tu equipo, y siempre ir utilizando estilos de liderazgo para Influenciar sobre ellas. Ahora si tu problema es falta de personalidad, no importa si eres hombre o mujer, siempre podrás mejorarlo, creyéndote capaz, sabiendo que puedes lograr muchas cosas si te las propones, y que nadie puede pasarte a llevar. Eso se llama ACTITUD, y es el principio básico para comenzar a ser líder. Una alumna me decía: “pero yo he sido dueña de casa toda mi vida, y ahora si quisiera liderar, no podría hacerlo”. Y le hice ver su equivocación. Ella durante todo su tiempo como dueña de casa, ¿que hizo?, crió 3 hijos, mantuvo la casa funcionando y ordenada y le permitía a su marido trabajar tranquilo. ¿Y eso no es ser líder? El hecho de INFLUIR en 3 niños (o niñas), formarlos, mantenerlos sanos y bien alimentados, dentro de lo posible y llevar un hogar ¿no es ser líder? Claro que sí, es un perfecto ejemplo de liderazgo silencioso, que no tiene recompensa monetaria y no lleva desarrollo en la carrera, pero si tiene un premio mucho mayor, haber INFLUÍDO en otras personas muy cercanas para que ellas puedan sobresalir. Obviamente que si ahora esa persona quisiera competir con otra que se ha dedicado toda su vida a trabajar con equipos y recursos no propios, estará en desventaja. Pero ojo, un líder no lo debe saber todo, y para eso se rodea de gente (equipo) que le apoye en el cumplimiento de objetivos. Pero lo más importante, y perdona si soy majadero, es tener una ACTITUD triunfadora y el CORAJE para atreverte a lanzarte a la vida a lograr tus ideales y sueños. Agrégale tus valores personales y un grado de habilidad comunicacional y ya estarás siendo LÍDER. Quiero finalizar con una paradoja que me llama poderosamente la atención. Hay muchos reportajes de mujeres exitosas profesionalmente, pero muchas de ellas están separadas y son extremadamente autoritarias en su casa y trabajo, y esos ejemplos no son los mejores para hablar de liderazgo. Una persona autoritaria, aunque sea hombre o mujer, difícilmente podrá llamarse líder. Quizás será exitosa en su carrera profesional pero no será líder en el sentido que quiero tratar en estos libros.

Recién en estos últimos tiempos, están apareciendo historias de éxito profesional en que las mujeres (y hombres por igual) son profesionales exitosos pero además tienen una familia detrás y se nota que su forma de ser es bastante más accesible que los casos anteriores. Y eso si es ser líder.

[ CONCLUSIÓN ] LIBRO I

[ CONCLUSIÓN ] Hemos intentado plantear un nuevo modelo de liderazgo, basado en la Actitud y el Coraje para hacer cosas, una idea que pretende que cada día más y más personas entiendan que liderazgo no está reservado solo para algunos (as). Este es un modelo que incorpora Valores y Comunicación como pilares fundamentales para generar las confianzas necesarias para INFLUIR en las personas, por ende, propiciar todos los elementos para liderar. Estos cuatro pilares (Actitud, Coraje, Valores y Comunicación) no son nada nuevo, de hecho, no estamos “descubriendo la pólvora”, simplemente estamos rescatando algo que se ha ido perdiendo con el tiempo. Hoy en día, con todo lo conocido y aplicado en las teorías administrativas, juegos de negocios, estrategias comerciales y cualquier otra, nos damos cuenta de que vamos volviendo a las raíces de la conducta humana, estamos volviendo a las relaciones humanas por sobre las puramente relaciones comerciales en las empresas. Aparece el Cliente Interno. Ya no solo se habla del cliente externo, sino que se busca satisfacer también las expectativas de quienes trabajan en una organización, llamándolos Clientes Internos, de esta forma todo lo aprendido sobre marketing, fidelización de clientes, CRM (Customer Relationship Management), etc., es perfecta y obligatoriamente aplicable a la misma organización. Es decir volvemos a apreciar la importancia del trabajo en equipo, del clima laboral, de la existencia de líderes, no solo para satisfacer a nuestros propios clientes, sino que a nuestro propio personal. Cada día van quedando relegados aquellos jefes preocupados exclusivamente por resultados, dando paso a aquellos preocupados también por el bienestar de sus equipos. Las empresas premian los mejores equipos de trabajo no solo por sus números sino que por su ambiente de trabajo y clima laboral. Ya se comienza a hablar del término “Humanizar” las organizaciones, y esto no es nuevo, pero estaba un poco guardado en el cajón del escritorio. A través de estos libros, quiero volver a rescatar ese “humanizar” de las personas y organizaciones, ya que como mencioné en los principios anteriores, no estamos solos en este mundo y somos por naturaleza seres absolutamente sociables. Además somos, también por naturaleza, seres que requieren líderes y seguidores y no podemos darnos el lujo de hacer caso omiso de ese requerimiento.

El liderazgo busca influir en las personas, para llegar a objetivos comunes y por esta razón hago un fuerte hincapié en que no significa necesariamente ser jefe o gerente, ni siquiera ser ejemplo de éxito, tampoco requiere títulos profesionales o MBA o Doctorados, y mucho menos exclusivo de un género en particular. Solo necesito saberme capaz de lograr cosas, atreverme a ir por ellas, comunicarme con otras personas para complementarme, llevar a cabo mis objetivos y apegarme fuertemente a mis valores personales. El resto es opcional. Nos vemos en el segundo libro.

el camino del líder

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