eco tianguis la nueva corriente económica en guadalajara

"Eco tianguis" la nueva corriente económica en Guadalajara Una mirada a la región económica emergente evidenciada en los "eco tianguis" Un lugar propicio para evidenciar el buen juicio de las personas, sin lugar a dudas es el consumo. Este acto, comúnmente asociado a impulsos irracionales y gastos inútiles es puesto a prueba aquí; cuando compras pensando en el bienestar del mundo que te rodea ¿sigue siendo consumismo?

2015

O. Daniel Grajeda cortés Universidad de Guadalajara

25/05/2015

"Eco tianguis" la nueva corriente económica en Guadalajara 2

LA REGIÓN

Si bien el espacio que se pretende estudiar es reducido, no lo es su repercusión

en el día a día social, este trabajo trata de esbozar la importancia de una zona

geográfica que históricamente ha sido referente de riquezas, modernidad y arte, la

zona más afrancesada de Guadalajara sirve como telón de fondo para soportar la

nueva explosión económica que convoca toda una corriente. Los eco tianguis

tuvieron su inicio en el crecimiento de la preocupación global por frenar el

consumo desmedido y se han convertido en dos caras de la moneda, por un lado

en la rambla Cataluña a las afueras del expiatorio, se vive la experiencia en su

más pura esencia. Por otro en el corredor Chapultepec, se vive la experiencia una

boutique al aire libre, la mercantilización de un movimiento y a la vez, el

catalizador que hace de avenida Chapultepec y las colonias circundantes tales

como la americana, reforma, francesa, una región económica y cultural en auge.

Utilizo los eco tianguis a modo de hilo conductor para llegar al momento en que

sirven de puente para acercar a varios estratos sociales a una misma arena,

donde convergen y se recrean sus identidades, todo a partir del consumo.

Haría falta un estudio más extenso para apoyar esta tesis, misma que por

supuesto pongo a debate, sin embargo, como usuario regular de este espacio, me

es inevitable preguntarme ¿por qué sigo asistiendo a este lugar? Sobre todo

cuando es mucho más caro y en teoría asisto por los productos hechos a mano y

artesanalmente, aun cuando en enrique días de león se consiguen mucho pero

mucho más baratos, porque prefiero estar cerca de toda la majestuosidad

arquitectónica de Chapultepec. Por otro lado, la explosión económica que sucede

alrededor de este espacio es innegable, los precios de los locales comerciales en

5 años se han disparado un 400%1 y el flujo comercial ha ocasionado que este

espacio se convierta en destino obligado para el turismo nacional e internacional.

1 Dato personal derivado de un estudio de mercado que realicé, a través de este pretendía poner un café en la zona.


EL ORIGEN

Las imágenes de las primeras colonias tapatías se muestran calles tapizadas por

hojas o por flores de jacaranda; vecinos en bici o debajo de la sombra de un árbol;

algunos Ford antiguos, viviendas inmensas con suculentos jardines al frente y con

un toque europeo. A finales del siglo XIX y principios del XX, estas zonas se

consideraban lejanas a la ciudad y rompieron con la traza urbana cuadricular típica

de la ciudad colonial e impusieron el inicio de la arquitectura moderna en

Guadalajara.

La Francesa fue la primera colonia “higiénica” en la urbe y la diseñó Ernesto Fuchs

en1898. Luego diseñaron la Reforma, la Americana, la Moderna y la West End,

edificadas en distintas épocas y por ende con diferencias estilísticas, pero con la

común visión europea de crear espacios arbolados, casas luminosas, además de

vialidades amplias. Esta zona –desde avenida Federalismo hasta la Minerva- se

ha transformado con el paso de los años y hoy es uno de los lugares más vivos de

Guadalajara, donde cohabitan propietarios de la tercera edad, familias que pasean

por Avenida Chapultepec, oficinistas, ciclistas, artistas y jóvenes en todas sus

expresiones.

En un plano general de Guadalajara en 1908 están trazadas las primeras colonias

de la ciudad, algunas en construcción y otras en proyecto, y en el polígono donde

está el Parque Revolución aparecía aún la Penitenciaría de Escobedo, que se

derrumbó décadas

después para abrir

Avenida Vallarta y así

favorecer la conexión

vehicular entre

Oriente y Poniente.

Este fenómeno surge

en todo el mundo


como respuesta a la población con mayor poder adquisitivo que deseaba salir de

la ciudad, de lo que ahora son los Centros Históricos. Para muchos son normales

las colonias, pero hace 130 años se comenzaron a crear los primeros terrenos

urbanizados para que la gente comprara terrenos con agua, luz… algo que para la

mayoría es normal se dio por primera vez en estas colonias.

Avenida Lafayette en un inicio funciono como un eje para la recreación y el paseo

público de todos los que habitaban en los alrededores, donde comenzaron a

edificarse viviendas de figuras como Luis Barragán, Pedro Urzúa, Pedro

Castellanos, Ignacio Díaz Morales, Julio de la Peña y otros, pertenecientes a la

Escuela Tapatía de Arquitectura. A la calidad en el diseño de los inmuebles se le

agrega la de los árboles, pues en las colonias abundan especies como laurel de la

india, tabachín, eucalipto, galeana, hule, ceiba, primavera, jacaranda, magnolia,

pirul, fresno, guayabo.

“De la Americana lo que resalta son los árboles, especialmente en Avenida

Libertad. La Moderna me genera lo que a todos, la duda de por qué no cuajó, a

pesar de que fue a la que más le invirtieron y tiene glorietas padrísimas. Mi

hipótesis es que no cuajó porque la ciudad no creció hacia ese lugar y por la

industria que instalaron en la colonia. Pero justo aquí podría ser un eje para

repoblar el perímetro B de la ciudad. La colonia Reforma creo que es la estrella de

Lafayette, es la más cara, con las mejores casas y no sé por qué aquí están todas

las de Barragán, Díaz Morales, Pedro Castellanos, de arquitectos de la Escuela

Tapatía de Arquitectura. Y de la West End, no conozco lugar en el país que tenga

tanta riqueza funcionalista” (Cordero, 2011)


Zonas de privilegio

Terrenos de la Penitenciaría de Escobedo

Ocupa el espacio enmarcado por Avenida Niños Héroes y Juan Manuel, y

Federalismo y Enrique Díaz de León. En esta zona derrumbaron en 1933 la

Penitenciaría de Escobedo, un edificio neoclásico construido en los terrenos de la

huerta del antiguo Convento del Carmen. Ahí se construye el Parque de la

Revolución con algunas propuestas de arquitectura funcionalista.

Francesa y Americana

Son las dos primeras colonias de Guadalajara. En 1898, Ernesto Fuchs crea la

Francesa con 12 manzanas y una traza rectangular. La Americana es un proyecto

para la colonia Porfirio Díaz, en 23 manzanas en un predio irregular. En sus calles

incluía el nombre de los propietarios y futuros habitantes.

Moderna

Su origen es 1907, cuando la compañía Obras y Bienes Raíces de Guadalajara

decide urbanizar terrenos al sur, en el límite de Avenida Tolsá. Hay aportaciones

urbanísticas importantes como el ancho de más de 20 metros de todas sus calles,

todas trazadas en referencia a glorietas circulares que ordenaban la circulación.

Tiene principalmente arquitectura funcionalista y a un lado convive el tradicional

Barrio de San Antonio.

Reforma

En 1903 se crea esta colonia que se ubica entre la Francesa y la Americana. Su

eje es Avenida Vallarta. El promotor fue Sabino Orozco, quien incluyó el concepto

de jardín exterior rodeando a las fincas confinadas por una reja exterior. Donde se

ubicaba la Escuela de Artes y Oficios se realizó una avenida que llevaba el

nombre Azpeitia, pero por las ideas liberales de la época se le puso el nombre del

marques francés revolucionario, Lafayette.


West End

Esta colonia era el límite poniente de la ciudad y hasta 1900 no formaban parte de

Guadalajara. Su nombre deriva de la compañía que formaron sus propietarios;

West End Realty Company of Guadalajara. Se contempló como una continuación

de la colonia Reforma, con el esquema ortogonal del tejido de la ciudad. En 1930

eran terrenos sin edificar y en 1956 Agustín Yáñez comenzó la construcción de la

Minerva.

LOS ESPACIOS

Si bien el término "eco tianguis" no es aun bien conocido ni se puede considerar

del dominio popular, ya se encuentra en plena explotación por parte de algunos

grupos sociales, particularmente en la ciudad de Guadalajara, donde la Secretaria

de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) ha puesto en

marcha algunos proyectos para la comercialización de productos que reúnen las

características de "sustentables". Estos proyectos buscan activar el consumo de

bienes ecológicos en la ciudad, tales como alimentos orgánicos, artículos

reciclados, productos libres de químicos, etc., así como también promover el

"comercio justo2" entre productores y consumidores.

El presente trabajo intenta evidenciar algunas de las relaciones económicas, fruto

de la interacción entre comerciantes y clientes que asisten a estos eco tianguis.

Para hacerlo se eligieron dos plazas a observar:

2 El comercio justo es una forma alternativa de comercio promovida por varias organizaciones no

gubernamentales, por la Organización de las Naciones Unidas y por movimientos sociales y políticos (como el pacifismo y el ecologismo) que promueven una relación comercial voluntaria y justa entre productores y consumidores. En: Ramírez Treviño, Alfredo; Sánchez Núñez, Juan Manuel; García Camacho, Alejandro (2004). "El Desarrollo Sustentable: Interpretación y Análisis". Revista del Centro de Investigación. Universidad La Salle (En línea), vol. 6, julio-diciembre, Pp. 55-59, Distrito Federal, México. Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/pdf/342/34202107.pdf


Tianguis cultural Paseo Chapultepec

Corredor cultural Rambla Cataluña de explanada Expiatorio

-Corredor cultural de explanada Expiatorio

(sábados y domingos de 16:00 – 22:00 hrs.)

El proyecto "Corredor Cultural Expiatorio - Rambla Cataluña" nace gracias a la

iniciativa del comité de vecinos de la Colonia Americana. Se pretende crear un

espacio cultural alternativo de conciencia social, enclavado en la Explanada del

Templo Expiatorio, en donde se pueda generar alternativas de diversión,

esparcimiento e incluso de consumo, así como tomar conciencia de la

pluriculturalidad e interculturalidad de la Zona Metropolitana de Guadalajara.

Se propone reactivar este espacio público por medio de diversas actividades

culturales (música, teatro, danza, artesanía, cuenta cuentos, proyección de

documentales películas de conciencia, espacios de lectura, etc.), deportivas y

recreativas, así como la exposición y la venta de productos alternativos y

orgánicos. También se trata de incluir las cuestiones ecológicas, activar la

economía local y solidaria y fomentar los valores cívicos así como la cohesión y

convivencia de la población en general, de niños a ancianos.

Los horarios formales son sábados y domingos de 4 pm a 10 pm, usualmente los

vendedores/expositores llegan entre 4 y 5 pm para acomodar los puestos y a las

6 p.m. todos se encuentran totalmente instalados y por lo regular los puestos que

más tarde se quedan oscilan entre las 10:30-11pm.

Este tianguis se lleva a cabo a lo largo del atrio del templo Expiatorio, ubicado en

Avenida Enrique Díaz de León y López Cotilla. Es un tianguis muy sencillo, en el

que se exponen los productos sobre mesas situadas cerca de cada jardinera y son

muy pocos los puestos que cuentan con toldos. Gran parte de los expositores se


encuentran en la parte izquierda de la explanada, si se ve frente al templo

Expiatorio.

Casi todos los expositores involucrados se conocen entre sí, tienen una relación

de años y comparten una gran ideología con respecto al cuidado del ambiente, ya

que todos exponen sus productos, esperando que alguien vaya y escuche su

historia y el proceso necesario para llevar a cabo dicho producto.

Por otro lado, los productos que se pueden encontrar son los siguientes: comida

vegetariana y orgánica, toallas femeninas, y pañales reutilizables, carteras y

cuadernos reciclados, aretes y pulseras hechas con materiales orgánicos o

reciclados, café orgánico, libros usados, artesanías indígenas, collares de todo

tipo, obra teatral con marionetas, espacio para dar masajes, plantas, sombreros,

productos del nopal, chocolate artesanal, juguetes de madera, fertilizante, entre

otros.

La mayoría de los vendedores portan un gafete oficial que hace notar que son

parte del Corredor Cultural Expiatorio Rambla Cataluña, además de usar una

camisa blanca con el logotipo del lugar.

Las entrevistas informales se llevaron a cabo con una gran facilidad, ya que los

vendedores, que también son los creadores de sus productos, sienten una gran

pasión por el cuidado del ambiente, transmitiéndolo en los productos que hacen,

provocando que la conversación sea amena, e introduciendo a muchos que así lo

deseen al del cuidado del ambiente.

Una característica esencial de este tianguis es la dinámica del trueque. Según

varios de nuestros informantes, todos los expositores de este tianguis participan

en esta modalidad, es decir, que se lleva a cabo un intercambio que sea

equivalente o ajuste en el valor del producto que se desea adquirir; ambos sujetos

(tanto el expositor, como el consumidor) entran en un diálogo mediante el cual

establecen los valores para realizar el trueque justamente.


-Tianguis cultural Paseo Chapultepec-

(Sábados de 19:00 – 00:00 hrs.)

Este tianguis se realiza a lo largo del camellón de la Avenida Chapultepec,

llamado ahora, Paseo Chapultepec, desde la avenida Hidalgo hasta la calle José

Gpe. Montenegro, a lo largo de dicho paseo se encuentra dedicada una cuadra a

puestos de artesanías indígenas, y las demás distribuidas en productos muy

variados desde su función o utilidad, hasta tu rango de precios.

Cabe destacar que este tianguis no es considerado definitoriamente como “eco

tianguis”, y sin embargo es confundido con este término ya que cuenta con

algunos puestos dedicados a lo “ecológico” o lo “reciclado”. De igual manera, el

hecho de que sea considerado eco tianguis es un factor de publicidad implícita

para atraer a cierto tipo de consumidores.

Algunos de los productos que se pueden

encontrar son: bisutería, playeras

estampadas, piedras, cuadros, cuadernos,

lámparas, mochilas, alcancías, libros

usados, accesorios para el cabello, collares,

pulseras, entre otros.

Cabe destacar que este tianguis tiene una gran afluencia de gente, por diversas

razones observables: se ubica en un espacio mayor (en relación al de explanada

Expiatorio), cuenta con una gran cantidad de bares alrededor, lo cual promueve

que las personas que asistirán a éstos, antes

de entrar o como medio para llegar, pasen por

dicho Paseo y puedan adquirir cualquiera de

los diversos productos que allí se venden.

De igual manera, la tipología de asistentes

varía de acuerdo a las horas en las que se va

desenvolviendo la dinámica. En las horas de la


tarde-noche se ven familias jóvenes, con niños pequeños, que asisten a los

talleres que se dan entre López Cotilla y Libertad (sobre la calle, ya que ésta está

cerrada durante el tiempo que dura el tianguis) y conforme va avanzando la noche,

los jóvenes son quiénes se apropian del espacio.

LA DIMENSIÓN ECONOMICA Y PERTENENCIA SIMBOLICA

Se puede también criticar el que una gran parte de quienes se acercan al

Desarrollo Sostenible (a nivel gubernamental y empresarial) enarbolándolo en sus

discursos y en sus prácticas, lo hagan de una manera poco honesta, y con el

propósito de ganarse los favores de un público consumidor cada vez más

sensibilizado con la situación; como un “intento” de las empresas por satisfacer las

exigencias “ecológicas” de los consumidores, logrando de esa forma un consumo

mucho mayor aún (Rubio Ardanaz, 2006).

Sería imposible separar el concepto de negocio que rodea a los tianguis

ecológicos de los fundamentos bajo los cuales están sentados, tales como:

comercio justo, sustentabilidad, productos orgánicos, entre otros. Si bien,

encontramos que en muchos casos se ofrecen productos que encajan

perfectamente con el estereotipo "sustentable", habrá que ver cuán fácilmente se

puede abusar de esto para obtener mayores ingresos ya que al eliminar al

intermediario, y al ser ellos mismos los productores, diseñadores y distribuidores,

tenemos objetos que son identificados por sus propios creadores como "obras de

arte" y por consiguiente tienden a tener un costo subjetivo. Este fenómeno es

claramente evidente en el corredor Chapultepec, donde un collar de bisutería

puede llegar a costar hasta $100, (precio justificado por la labor de confección de

la que es producto por parte de la expositora), frente a su homólogo que en

Obregón costaría $20; donde la diferencia es, no el material del que están hechos,

sino la idea que predomina en los artículos hechos "no en serie" y que supone que

jamás se encontrará uno igual.


Ahora bien, si entendemos el consumo no solamente como un intercambio

monetario, sino ante todo como un intercambio cultural y simbólico, podemos

justificar el hecho de elegir los objetos no por su costo, sino por el valor del que es

dotado ya que el acto de consumir determinadas mercancías refleja un interés

implícito, ya sea por emitir algún significado socialmente relevante o por

pertenencia a un grupo social. Se puede entender cómo es que estas mercancías

se convierten en objetos portadores de significados, reforzados además por los

rituales de consumo.

Si las mercancías son socialmente significativas, y su utilidad no se limita a

garantizar la sola sobrevivencia, entonces las mercancías sirven para pensar si

tomamos en cuenta la serie de cálculos, consideraciones, mensajes y

repercusiones que tiene el hecho de mostrar una mercancía a la sociedad. Así

entendido, el consumo, se estructura a través de las mercancías y la sociedad,

como un sistema de información, y el principal objetivo del consumidor consiste en

ganar más control o conservar el que ya tiene, sobre las fuentes de información.

(Douglas, 1990)

Podemos decir que las mercancías u objetos considerados "de lujo" contienen

cualidades simbólicas complejas y que en muchos casos resultan mecanismos de

exclusión social, pero al mismo tiempo contienen mucha información sobre el

consumidor, ya que, al formar parte de un sistema estructural, las mercancías de

lujo funcionan dentro de un sistema cerrado al

que sólo se tiene acceso mediante el canal

correcto, es entonces cuando se vuelve de vital

importancia el control y la posibilidad de

acceder a ellos, ya que esto significaría mejor

información y más poder en todos los sentidos.

En este sentido, el individuo que adquiere un

artículo de lujo, se incluye dentro de un grupo específico, sin embargo, la

necesidad de adquisición del artículo en cuestión obedece a la necesidad de


diferenciación dentro del mismo; una dicotomía que vemos reflejada en la

dinámica de varios patrones de consumo estacional y de temporada.

El modelo de la distinción dice mucho sobre el papel de la diferenciación cultural

en la definición de la posición social, un proceso a través del cual un habitus

particular, determinado por la «clase», se distingue en el mercado cultural al

identificarse con un conjunto claramente definido de productos y actividades, un

estilo de vida (Friedman, 2001).

El individuo reafirma y/o construye su identidad en base a la adquisición de los

productos que compra en dichos tianguis; no es que su identidad la cimente por

completo en los artículos que adquiere, sino que éstos le proveen de herramientas

necesarias para desenvolverse dentro de su grupo.

Hay una dicotomía dentro de la dinámica del grupo, donde la identidad del

individuo como tal se vuelve fundamental. Mientras que por un lado el sujeto

busca pertenecer al grupo, por otro, se vuelve necesaria la búsqueda de su

individualidad dentro del mismo, para no perderse en él y así generar un estatus.

No tendría sentido dicho estatus si no es compartido en dicha colectividad

mediante la apropiación de dichos productos se genera bienestar,

proporcionándole poder y un lugar privilegiado dentro del grupo, ya que éste no

sólo es interno, es comunicación, que se está transmitiendo en todo momento, es

como un "cargamento".

La ropa es la expresión inmediata del grado de fuerza vital que una persona posee

(Friedman, 2001) por lo tanto cuando el individuo elige una prenda, no solo elige

un artículo, sino que elige toda la información que este carga (deseo, estatus,

poder), que al mismo tiempo rige su cosmovisión.

Propongo partir de una definición: el consumo es el conjunto de procesos

socioculturales en que se realizan la apropiación y los usos de los productos. Esta

caracterización ayuda a ver los actos a través de los cuales consumimos como

algo más que ejercicios de gustos y antojos, compras irreflexivas, según suponen


los juicios moralistas, o actitudes individuales, tal como suelen explorarse en

encuestas de mercado (García Canclini, 1991).

CONCLUSIÓN

El consumo sirve para pensar, ya que es una

carga que se lleva, que proyecta información; la

recibes, reciclas y proyectas de nuevo hacia los

demás.

A la cantidad de productos que se ofertan en

Chapultepec, sumándole la multiplicad de

personas, el aumento contextual de la oleada verde y de la modernidad de

consumo de productos diferentes, da como resultado el crecimiento económico de

manera exponencial, manejando grandes cantidades de dinero. Desde este

enfoque, no son las necesidades o los gustos individuales los que determinan qué,

cómo y quiénes consumen (García Canclini, 1991) sino que la oferta de los

productos y la manera en la que se ofertan, rige de una manera indirecta la

necesidad de consumo y la forma en la que dichos productos son adquiridos, ya

sea por iniciativa propia o como respuesta a estrategias publicitarias y a la

distribución de los bienes.

Mientras que en el Corredor de Expiatorio, el interés no reside en el factor

económico, sino en la transacción de la información, el compartir estas historias y

procesos que tienen que ver con el medio; ya que la mayor parte de los

consumidores opinan "es caro, pero a la larga sale más barato".

En el imaginario colectivo, no existe la diferenciación entre colonias, pocos saben

de donde a donde abarcan la americana, la francesa, reforma, etc… Por eso

propongo la región Chapultepec porque hay una gran amalgama de agentes

pluriculturales, que al converger en el mismo espacio y tiempo, todos se vuelven

coherentes, una vez que los individuos que se apropian del mismo, mezclándose

sin importar clases sociales e intereses. Esto se evidencia en la gran variedad de


productos, desde bisutería, cuadros bordados, libros usados, hasta piedras que

llegan a alcanzar miles de pesos. Estoy hablando de una zona donde todo es

válido y nada queda fuera de lugar, donde los actores sociales encuentran el

espacio de convergencia, podría decirse que también es una arena social, donde

por un momento todo tiene sentido y no hay nada extraño, todos encuentran y

apropian de una identidad allí presente.

“Para ser un agente uno debe estar en <<algún lugar>>. La experiencia de estar

ubicado es una parte fundamental de la vida e incluye el sentido de uno mismo en

cuanto a organismo inmerso en un entorno próximo” (Sack, R.D. 1988).

La conformación de la región Chapultepec no sería posible sin el gran crecimiento

económico comercial que se genera, sostengo, que el tianguis ecológico que se

desarrolla en el corredor de esta venida, fue un catalizador para atraer a cientos

personas a la convivencia social, al mismo tiempo, el nombre del mismo tianguis,

sirve para identificar la pertenencia al lugar en que se encuentra, mismo que tiene

fronteras muy lejas y ajenas a las colonias originales.


Bibliografía

Cordero, A. (2011). Manual de uso Lafayette. Guadalajara: Montenegro.

Douglas, M. (1990). El mundo de los bienes. México DF: Grijalbo.

Friedman, J. (2001). Identidad cultural y proceso global. Amorrortu.

García Canclini, E. (1991). El consumo sirve para pensar. Revista de la Federación Latinoamericana

de Asociaciones de Facultades de Comunicación Social, N°30, Perú, 6-9.

Rubio Ardanaz, E. (23 de 05 de 2006). http://www.euskomedia.org. Recuperado el 03 de 12 de

2012, de http://www.euskomedia.org/PDFAnlt/congresos/16/16261270.pdf

Sack R.D. (1988): "El lugar y su relación con los recientes debates interdisciplinarios", DOCUMENTS

D´ANÁLISI GEOGRÁFICA N°12, pp. 223-*241.

eco tianguis la nueva corriente económica en guadalajara

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