duende verde

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Literatura TWIN PEAKS El Regreso Duendeverde Entrevista a Rodrigo Garrido Paniagua México: dos invitados inimitables René Morales Hernández y RAMA Puzzle de Poesía Febrero 2015 Número 01

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Ya está aquí la primera entrega de la revista, Duendeverde! Una revista de literatura en dónde se recogen textos de todo tipo, ya sean poemas, relatos, artículos de opinión, de actualidad, canciones, recetas de cocina, sueños... En fin, si tienes algo que contar tienes mucho que ver con duendeverde lit.

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Page 1: Duende verde

Literatura

TWIN PEAKSEl Regreso

Duendeverde

Entrevista a Rodrigo Garrido Paniagua

México: dos invitados inimitablesRené Morales Hernández y RAMA

Puzzle de Poesía

Febrero 2015

Número 01

Page 2: Duende verde
Page 3: Duende verde

nº1Sumario

Editorial5

PuzzledePoesía

10 11 12 13

El Tintero20 21

6 7 8 9

Relatos Asombrosos

DuendeVerdeCorreo Electrónico;[email protected]

Febrero2015

Entrevista aRodrigo G. Paniagua

y a René MoralesHernández

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EditorialDuendeverde

"Mira al pecado a la cara y dile que se vaya"

Las almas degluten experiencias no­natas.Las desdichas van de la mano guiñando ojos atranseúntes desquiciados. Todo está mil vecescansado y entre saliva los gastados corazonespalpitan a deshora, arrítmicos dentro del bullicio de lavida que resquebraja caminos sin preguntar si estáinvitada así como nosotros recibimos a malhechorescon bienvenidas que apenas caducan. Los perfiles delas caras semejan enfrentados. Puedo ver dosmiradas, dos gestos, dos personas maltratadas.Mildred y las campanas de oro, que resuenan a lolejos, como la luna golpeada por creencias.

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Duendeverde

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La aclamada serie de televisión emitidadurante los noventa vuelve en 2016.El reencuentro con los personajes trasveinticinco años emocionará a más deun telepecador al volver a la entrañableTwin Peaks, al Doble R a degustartarta de cereza o a repostarcombustible en la gasolinera de Big Edpero sobretodo a respirar ese aromade los abetos Douglas sentados comocopilotos de Dale Cooper, specialagent.¿Qué nuevas fuerzas se ocultarán enlos bosques, qué nos depararán losmisteriosos cobertizos, qué huéspedesarropará el Gran Hotel del Nortemientras los hermanos Horne nosimpresionan con sus grandilocuenteschanchullos? No sé vosotros, pero yono he vuelto a mirar la madera de lamisma forma desde que me adentré enesta escalofriante población deextraños personajes, ahora adelantadaun cuarto de siglo, así como tampocome deja indiferente el ulular delguardián de la noche.

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Page 8: Duende verde

La cabeza de David Lynchmeditando bajo la noche

Su pelo conectado al universoUna canción de amor y dolor

entre la brumaBrillante rayo en el fondo del

bosqueLos búhos no duermen y nadie

es inocente en este pueblo

Un búho recoge mediocorazón de plata de la tierra

atraído por su fulgor

'En la oscuridad de unfuturo pasado el mago quisover una posibilidad para salir

de entre dos mundos...'.

David Lynch nos manda unmensaje sobre el estado deltiempo mientras no para detomar café y cigarrillos

David Lynch conoce elterciopelo del amor comojuego místico de matar y

morir

David Lynch lee un poema enla oscuridad de pie mientras

escucha un piano

También sabe que nada es loque parece

Si las cabezas borraran almundo, el mundo sería lanada, me dijo un amigo al

salir del cine

David Lynch fue el culpabledel temporal que paró laserie de Twin Peaks, uno delos más fuertes registrados,lo que confirma que a Dios legustaba Twin Peaks

David Lynch

8Sebensuí A. Sánchez

David Lynch abre una secta demeditación a precios desorbitados

sobre una colonia, la “colonia deldiablo”, montaña construida a basede chatarra de la Segunda Guerra

Mundial

Ha visto como la noche se abrecomo una carretera que nos traga,la aguja del tocadiscos no para degirar sobre negros surcos, dando ydando vueltas…

La bruja del oeste vuela sobre suhija y se pinta con su pintalabios la

cara de rojo gritando

Él la besa con su chaqueta deserpiente, subidos encima del capódel coche parando toda lacirculación, la de ella, la deltráfico…

Bailan jazz los adolescentesenamorados perdidos en una

ciudad sin tiempo, comienza elmisterio del amor

Un caballo blanco frente a lamadre partida de dolor semuestra ante su nube tóxica denicotina embelesada

La decoración del suelo zigzaguea,como un rayo, como el pelo del

protagonista

Los semáforos tiemblan y la luzparpadea emitiendo un zumbidoAl final todo había sido por unaconjura cósmica

El agente especial oniromante ytelépata descifra sus

investigaciones con lecciones debudismo tibetano

“Debe ser cosa de los espíritus”dice el funcionario de prisiones alver que el preso ha desaparecidopor otro

VAMOS A CERRAR LOS OJOS YBESARNOS MIENTRAS

PENSAMOS EN UNA ESTRELLANEGRA

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Apenas heviajado.Viajado

físicamente.No megusta alejarme de mi

cama, ni de miescritorio o bañera.A la

gente le suele gustarviajar, o eso dicen, a mí

todos los sitios meparecen iguales; suelo,

tierra, aire, personas,perros, hierba, gallinas,angustia en mi pecho,caminos, tierra, lluvia,sol. Visto un grano de

arena, vistos todos.

¿Sabes a dónde síme gustaría viajar? A

la Antártida, paraconstruir castillos de

arena, o tal vezhacerme más

grande, respirar sinesta humedad que

me oprime el pecho.Darme un baño en

la playa y quizádesaparecer para

siempre.(Ágata)

Planeta rojo

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La cabeza de David Lynchmeditando bajo la noche

Su pelo conectado al universoUna canción de amor y dolor

entre la brumaBrillante rayo en el fondo del

bosqueLos búhos no duermen y nadie

es inocente en este pueblo

Un búho recoge mediocorazón de plata de la tierra

atraído por su fulgor

'En la oscuridad de unfuturo pasado el mago quisover una posibilidad para salir

de entre dos mundos...'.

David Lynch nos manda unmensaje sobre el estado deltiempo mientras no para detomar café y cigarrillos

David Lynch conoce elterciopelo del amor comojuego místico de matar y

morir

David Lynch lee un poema enla oscuridad de pie mientras

escucha un piano

También sabe que nada es loque parece

Si las cabezas borraran almundo, el mundo sería lanada, me dijo un amigo al

salir del cine

David Lynch fue el culpabledel temporal que paró laserie de Twin Peaks, uno delos más fuertes registrados,lo que confirma que a Dios legustaba Twin Peaks

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Aún tienes la brisa cósmicaimpregnada en tu ropa y tupiel.¡Mira!, aún tienes polvo lunar entus zapatitos de gamuza.Te veobronceada por alguna estrella, quizásfuera de esta galaxia.Tu lenguaje esdistinto y difuso para mi, es porquetus tonos de voz hacen melodía conlos signos extraños.Mis pensamientosno son seguros, creo que tu lo sabestodo.Tu anatomía no es humana,pero quizá no tenga que serlo, enserio, por aquí todo es convencional;que se necesita algo de afuera paradejarnos con la boca abierta.Tus ojostan grandes, hermosos, quizá son asípara que puedas mirar mi angustiaterrícola de necesitarte.Tu risaarmoniosa hace eco en eluniverso.Para llegar a tus labios esnecesario una visa terrestre ydisfrutar de una delicia marciana yvivaz.Imposible sonar cuerdocontigo, como el mejor abuso deconciencia.Comentan que tu mente ytus pensamientos no son de por aquí,tu memoria tiene lugares jamásantes vistos y tu decisión esexorbitante.....(RAMA)

Más allá de la materia

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P

o

e

s

í

a

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Arensha

Ahora, solo somos sombras de lo que hemos sido.

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Ya no nos conformamos como antaño,todo es mas difícil que un silbido.

No asesinamos los sueños de antes,aunque muriesen por lo vivido.

Le hemos dado a la faceta del dibujo en el airela importancia de un arte de antemano perdido,

mas cualquier hombre vivo que haya algo logradosabe que antes lo ha soñado, cuál instinto primitivo.

Ya no nos conformamos como antaño,será que ya de nadie dependemos,

será que, de realidad emborrachados,hemos dejado de soñar ¡Soñemos!

¿Dónde duermen los papeles que pintaronquienes que no temían manchar mas que los dedos?

Me niego a creer que hayan marchado,me niego a creer que yacen muertos.

Me río con las sombras de mis manos,me río con mis nubes y deseos,

El espíritu danza dentro, está animado,el niño de aquí adentro está despierto.

¡Soñemos!

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Rodrigo Garrido Paniagua se topó por casualidad con la poesía, o la poesía loencontró a él. La vida nos sorprende, y a Rodrigo el mosquito de la poesía le picóen 2010 y desde entonces vive arrebatado por ella. De carácter melancólico yreflexivo, el poeta vallisoletano se expresa a través del verso creando unaatmósfera tranquila y pausada, sintiendo al mundo girar más despacio.Esperaremos impacientes su próxima entrega;“La primera vez que vi un animal muerto”

Cuando te sientas frente a lahoja en blanco, ¿tienes algunaevocación inspiradora a la hora decomenzar a escribir tus poemas?

No tengo una fórmula concretaa la hora de ponerme a escribir.En ocasiones me dejo guiar poruna idea que me atrae y trabajoesa idea hasta que se convierteen un verso que me lleva a otrohasta formar un poema.En otras ocasiones tengo unverso y me dejo llevar por ellenguaje, que hace conmigo loque quiere. Muchas veces elpoema no lo escribe uno.

Si la poesía fuese una cura,¿contra qué nos inmunizaría?

La poesía nos ha de hacerconscientes del lugar queocupamos en el mundo y delpapel que podemos jugar en él.La poesía es una forma deactivismo. Y además es unaforma de aprehender la belleza.

Si la casa ardiese, ¿qué treslibros de tu biblioteca rescatarías delas llamas?

“Para nombrar una ciudad” deDavid Eloy Rodríguez“Arquitectura yo” de Josep M.Rodríguez“Travesía encendida” de JoséMaría Gómez Valero

Alguna vivencia que quierascompartir que haya dado cuerdaa algún poema...

A la hora de escribir intentoque los detalles concretos nosalgan a flote. No meinteresa el detalle si no unpensamiento o sentimientomás absoluto que porsupuesto nace de mí.Pretendo buscar laperspectiva suficiente conlos hechos o pensamientos ysacar de ellos una reflexiónmás global. ¿Por qué le iba ainteresar a la gente detallesde mi vida?

¿Qué función cumple lapoesía en el mundo?

No sé si la poesía cumpleuna función en el mundo,tampoco sé si la tiene quecumplir. El hecho de queconstantemente se preguntepor la función de la poesíaimplica su importancia. Nose suele preguntar quéfunción cumple la música oel cine o el teatro o la danzaen el mundo. El caso es quepara mí supone la búsquedade la belleza en el verso y laposibilidad de expresar ideasy sentimientos. Si esospoemas le sirven a alguienpara reflexionar o lo que sea,pues ya tenemos la utilidadde la poesía.

Entrevista a Rodrigo Garrido Paniagua

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¿Qué preguntas me he dejado en el tintero?¿Has publicado algún libro? Si, se titula “Los dormidos”editorial origami 2014. Es una reflexión sobre lapasividad de la sociedad ante asuntos tanto políticos ysociales que en la actualidad están muy presentes eneste país como asuntos personales.¿Algún otro proyecto en mente? Tengo otro poemariopendiente de publicación que se titula “La primera vezque vi un animal muerto”. Un poemario más personalpero sin perder nunca de vista un pensamiento globalsobre la existencia humana.

Entrevista a Rodrigo Garrido Paniagua

Fotografía; Jorge Lázaro

¿Cómo te sientes después de escribir?Cuando tengo una buena racha de escritura me invadeun sentimiento de euforia. El estar en faena, con unproyecto, ya sea poema o poemario me hace sentircomo si hubiera corrido 10 kilómetros.

Es esta la única oportunidad de tomarla voz y el sentido.

Es esta la gran aventura que ha depermanecer.

Todas las palabras decisivas pasanpor mi lado

y cada verso que callo,me hunde.

Los nombres que pronuncio son ellugar donde existo.

Lo que es la vida lo enseñala muerte

y este acto heroico de nombrar lo queperece.

El amplio instanteque habitamos

es nuestro último territorio vivo.

POÉTICA PARA MIRAR EL TIEMPO

Rodrigo Garrido Paniagua

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René nace al norte de México, pronto es trasladado a un pequeño y fríopueblo del sur. Serán sus abuelos, su padre, y en especial su madrequienes sumerjan al chico René en el hermoso mundo de lapoesía.Continuador de la tradicón de poetas mexicanos y chiapanecosRené escribe residuos infecciosos mientras come tacos de suadero juntocon Claudio y Neron, dos cockers spaniels bellísimos.

¿Qué es para ti un poema?Un poema es una aproximación a larealidad de las cosas, posiblementesea la respuesta más cercana quetiene el hombre para decir para queestá en esta tierra

Si el poema "Textos sobre residuosorgánicos infecciosos" ardiese, con quévapores nos impregnaría?Pues creo que con el dolor que puedesentir un hombre ante la falsapromesa de la medicina moderna yque en realidad no es tan lejano de loque puede sentir cualquier otro alotro lado del mundo

Si hay algo notorio que una a la culturagallega con la mexicana, tal vez podríaser "la muerte".¿Qué significa la muerte?No lo sé y para ser sincero es algoque me aterroriza; creo que ese porlo menos es el motivo por el queescribo, para que una pequeña partede mí sobreviva después de mimuerte, para no irme del todo

Si la poesía se disfrazase decomida, ¿qué comida sería? ¿ybebida?Sería algo picante que teayudara a no olvidar esemomento en tu vida y si fuerauna bebida seguro seríaalcohólica para ayudarte aolvidar algo imposible

¿Algún lugar recurrente opredilecto a la hora de escribir?En realidad todo el tiempo anotoen una libreta. Y en las nochesen casa, una vez que mi esposase ha dormido, en el silencio, ahíescribo, en la biblioteca de lacasa

Entrevista a René Morales HernándezAutor de “Espacio en disidencia” (Praxis, 2005), “Bestiario del perro”(Literal 2009) y “Radiografías” (Catafixia, 2010). Su trabajo se hatraducido al inglés para The Journal y al francés para la revista Estuaire.

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Un día antes del fin delmundo

nos levantaremostemprano

a ver a los pájarosy nos sorprenderemos

escuchando nuestrarespiración

a la mitad de la hierbafresca

en ese momento nosentiremos nada

sólo esa pequeña gotade lluvia que se estrella

en contra de algo que nopuedo definir

y la vida no será másque arena que cae

un fragmento de panviejo en la alacena

que comerán conpaciencia las ratas más

pequeñasen ese momento ya sólo

seremos un poco detiempo y sangre

en un lugar inadecuado

I

Notas sobre el fin del mundo

René Morales Hernández

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RdA

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Si la vida me permitiera hacerlo la calificaría de irónica.Porque al final te acaba sorprendiendo. Mas de una vezhas pensado... "Si lo hubiese sabido..." Y ahora que lo

sabes, te la tirarías otra vez. Porque dicen que elproblema no es tropezarte con la puta piedra, sino que te

guste el roce que te proporcionan sus labios en tuespalda, o sus uñas clavadas en tus antebrazos. Porque

la viste pura. Y mas puta que nunca. Y te encantó.Porque si eso no era amor, era vicio, nunca una bocahabía regresado tantas veces por un beso. Y el quería

dejarla, claro que quería. Si quieres dejar un vicio amigo,- le decía su padre - permite que te lleve a conocer la peorversión de ti mismo, si en ese instante no te suelta basta

con que sepas esto: de algo hay que morir.

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RdA

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Aunque me costó reconocerlo, me alegré al verlodespués de tantos años. Era el mismo de siempre perocompletamente distinto. Había engordado y tenía la ropahecha andrajos pero seguía llevando el pelo alborotadocomo un poeta y conservaba ese magnetismo que sóloposeen unos pocos, esa cosa que hace que, sin saberpor qué, sientes la necesidad de fijar la vista en ellos.Atraen tu mirada como si tus ojos fuesen dos polillas yellos seres iluminados construidos en neón.

Lo encontré sin buscarlo, un día cualquiera, decualquier mes sentado en la barra de un bar cualquiera.Un ser de colores fluorescentes rodeado de polillascuriosas, importunando con su cháchara de palabrasarrastradas y mal vocalizadas a un camarero aburrido deescucharlo. Estaba tan cansado de borrachos como tú,que en el tu neón no hacia efecto.

No me reconoció, y yo me aproveché de ello parasentarme a recordar en una mesa dándole la espalda.Fuera de su mirada que lo analizaba todo, perdida sinmirar nada en concreto, a salvo del alcance de sumagnetismo, a la sombra de su luz de neón.

Horacio, sí... si mal no recuerdo te llamabas Horacio.Habíamos estudiado juntos en primaria, y habíamosvivido en el mismo barrio. Tu familia era tan humildecomo la mía y eso era lo que mas me gustaba de tí. Tuspadres eran tan simplones, incultos, sucios, ruidosos yvomitivos como los del resto de chicos de nuestro barriode clónicos edificios grises. No tenían ningún interés masallá de lo material, lo visible, lo seguro, la nómina al finalde un duro mes. Recuerdo que tu padre leíacompulsivamente revistas de automovilismo y la mayorafición de tu madre era ojear y hojear catálogos de ventapor correo y que en sus conversaciones siemprerezumaba la palabra comprar. Como espuma aborbotones llena de babas caía el dichoso palabro de susbocas. Como perros rabiosos anhelando ese hueso quejamás tendrán. Y por ese mismo anhelo metían cada vezmás horas en sus respectivos curros de mierda y esa erala razón por la que, con ideas de otro siglo y la manomuy larga, a ti te criaran tus abuelos.

Siempre me preguntaba si por eso rompías cristalesvolviendo de clase a tu casa, vomitando piedras de durarabia sobre viejos cristales de edificios de postguerra, elduro hormigón del presente desgarrando los reflejos delpasado, ya obsoletos pero aun firmes burlándose de tujoven corazón ardiente, tu rebeldía preadolescente contralas regias normas de postguerra de tu abuelo el ex­militar. Y quizás no te sirvió de nada y por esocomenzaste a beber a los trece años. A ser lo que losdemás chicos queríamos ser pero no nos atrevíamos.

Piedra contra papel

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Relatos Asombrosos

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La piedra

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Quique

Trenco

Sorbiendo lentamente el café con leche que meacababan de servir y escuchándote balbucear a miespalda palabras ininteligibles (¿acaso aprendistearameo?) se me vino a la cabeza aquel día quecaminando sin rumbo, como hoy, me crucé contigo.Tendríamos 16 años, porque, sí... teníamos la mismaedad Horacio, si mal no recuerdo me llevas 6 meses, y¡cosas de chiquillos! eso me infundía un gran respeto.Tú ya trabajabas, no recuerdo en qué, y yo caminabasumido en mis pensamientos cuando me devolviste ala realidad con una colleja que aun me duele, mearrastraste contigo al primer antro que encontramosabierto a pesar de que tú ya siempre llevabas contigouna petaca, y acabamos borrachos. Dos perrosmojados ladrando a una luna que creíamos de hueso.Temerosos de un sol que creíamos de fuego.

Fue entonces cuando llamaste a una amiga, norecuerdo su nombre... Maribel, Carmen, Sandra... quémás da. Te recuerdo entrando en una de aquellasviejas cabinas grises que en aquella época adornabanunas aceras todavía mas grises y marcando un númerode memoria mientras yo apuraba tu petacaobservándote desde fuera. Estaba tan borracha comonosotros, y nos la acabamos tirando en los asientostraseros de un 124 rojo. Logro bastante admirable porla escasez de espacio y la cantidad de alcohol que fluíaen nuestro torrente sanguíneo. Recuerdo que te reíasa cada embestida y me mirabas fijamente a los ojos.Pero yo nunca fui de neones fluorescente como tú, pormuy iluminados que estuviéramos ambos aquellanoche. No recuerdo el nombre de ella, pero si que eravieja, gorda, fea, y olía al queso francés que traía mitío de Burdeos por navidad y mi madre dejaba en lanevera hasta que lo acabábamos tirando en reyes. Nopude olvidar jamás, a pesar de intentarlo, que esanoche la tal Sandra nos enseñó a fumar en plata. Larecuerdo manipulando el papel de aluminio, vertiendoel contenido de dos bolsas, una de caballo, otra decoca (de aquella yo no lo sabía, pero ahora sí Horacio)cubrirlo todo con amoníaco y empezar a seguir con elcasquillo vacío de un rotulador la gotita que seformaba al aplicarle con el mechero por debajo a laplata mientras Maribel mostraba una preciosa sonrisamellada. Unos niños jugando a ser adultos que juegana ser niños.. ¡Joder Horacio, realmente era vieja, fea yestaba acabada la tal Carmen! No recuerdo ni cuandoni cómo nos separamos esa noche pero sí que fue laúltima vez que te ví, hasta hoy. (CONTINUARÁ...)

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ALTO ASALTOPOW FRANK ICHI

Distrito 9, Coia (VIGO)31. 01. 2015a las 21.32 horas