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Socialistas en el Polo
explotación irracional y despótica de la
riqueza natural del país, patrimonio de los
colombianos. Las beneficiadas habituales,
multinacionales extranjeras, explotan los
recursos en condiciones demasiado
ventajosas, y las consecuencias, también
habituales, son el descalabro del erario
público, del desarrollo social y la
sostenibilidad ambiental.
La miseria de los pueblos, la destrucción del
aparato productivo nacional y el mercado
interno, la pauperización de la economía, y
los daños irreversibles que se ciernen sobre
los recursos hídricos, la biodiversidad, y el
paisaje, no son disparates de fanáticos
ambientalistas en contra de la extracción y
exportación de minerales; son realidades
documentadas a partir experiencias locales
y foráneas que no se deben ser ignoradas.
Adicionalmente, destacar y promover la
vocación minera del país en épocas como
las que se avecinan, signadas por la escases
de alimentos y recursos hídricos, no deja de
ser una providencia bastante miope, por
demás grotesca, que de materializarse,
colocará al país en una posición de
vulnerabilidad y dependencia extrema,
cercenando por completo sus posibilidades
de desarrollo.
Por ello no deja de ser satisfactorio el
ascenso de la movilización y la protesta
social que reclama, ya sea de forma
consciente o involuntaria, una vía alterna
para el desarrollo de Colombia, en donde se
deseche por completo el frenesí por los
indicadores y el fetiche del crecimiento
económico, y se anteponga, como
Las concentraciones cívicas del 25 de febrero
(cuyo epicentro fue Bucaramanga con cerca de
50.000 mil personas en las calles) y lo
acontecido en la audiencia pública realizada el
pasado 4 de marzo en la capital
santandereana, ambas a propósito del fallo que
en lo sucesivo debe proferir el Min. Ambiente,
con respecto a la viabilidad de la explotación
minera promovida por la multinacional
Greystar en el Páramo de Santurbán, proyecto
Angostura, evidencian un conveniente
reavivamiento de la movilización popular, ora
en Santander, ora en el resto del país, por
cuenta de la defensa de la vida, el agua y el
porvenir de los colombianos.
A su vez, estos ecos de inconformidad y
resistencia vienen erosionando, de manera
insalvable, la tan pretendida unidad nacional
invocada por el gobierno de Juan Manuel
Santos en torno a la gran minería como motor
de desarrollo.
Y aunque Angostura es solo una de las tantas
iniciativas mineras que se vienen apalancando
en Colombia (para el 2010, más de 7 mil
títulos mineros se habían expedido en todo el
país), la definición de su futuro es de
importancia suma, no solo por la magnitud del
proyecto, sino, además, por las nociones de
desarrollo que confronta.
En efecto, la decisión del Min. Ambiente con
respecto a Angostura decantará la senda que el
país deberá transitar en los próximos decenios
y, por consiguiente, la suerte de las futuras
generaciones.
Sobre el particular, dista de ser un secreto que
la clase dirigente nacional, proxeneta del
infortunio, promueve de manera soterrada la
El ascenso de la movilización popular por el
desmantelamiento de los rieles ominosos de la locomotora minera
Bogotá, 8 de Marzo de 2011
presupuesto insoslayable, la preservación de
la herencia ambiental como única garantía
del porvenir del país y la supervivencia de la
especie.
No es posible afirmar que se siente
preocupación por el futuro, y a la vez ignorar
los daños irreversibles que de la mega
minería resultan, por lo que cada colombiano
debe exigir al gobierno nacional el total
desmantelamiento de los rieles ominosos de
la locomotora minera, empezando por el
proyecto Angostura, y la inmediata
implementación de políticas que no
transfiguren la riqueza nacional en hambre y
miseria, tal como padecemos actualmente en
la alquimia neocolonial del libre mercado.
Socialistas en el Polo
Oscar Andrés Espitia
P O L I S E M I A Boletín N°8
Estimados Compañeras y Compañeros: Por iniciativa de un colega, el profesor Ramiro Gálvez de la Universidad del Tolima, he visto con mucha atención el video titulado "El Pueblo de Cajamarca y Anaime lucha contra la Mina", el que me ha permitido completar una mayor información y comprensión de la digna lucha de la comunidad de Cajamarca contra la intromisión depredadora de la empresa Anglo Gold Ashanti. La luchas que ustedes adelantan merece el apoyo de todas las gentes con conciencias sobre la importancia de la vida, la riqueza hidráulica, telúrica y alimentaria de Colombia. Ustedes están dando un ejemplo de conciencia ambiental radical. Reciban mi cordial saludo -- Ricardo Sánchez Ángel Abogado, Magíster en Filosofía, Doctor en Historia Profesor Universidad Nacional de Colombia
Notas
“Los empresarios están equivocados
porque al Dr. Angelino Garzón lo
nombraron por ser sindicalista, y lo
mandan a Europa y al mundo por ser
sindicalista y para hablar de Derechos
Humanos. Entonces no pretendan que en
la Carrera Séptima, el Vicepresidente se
quede callado”. Con esta declaración
publicada por el diario El País de Cali
(Febrero 22/11), el atropellado presidente
del Senado, Dr. Armando Benedetti, deja
en claro el papel que viene y seguirá
desempeñando el Vicepresidente de marras
dentro del gobierno de Juan Manuel
Santos. La suerte y el significado de sus
actuaciones están articulados al carácter
bonapartista y reaccionario que ostenta la
presidencia de este último. El mismo
Angelino Garzón lo ha dicho claramente
“yo no tengo autonomía para definir mis
funciones, porque las funciones que yo
cumplo las define el presidente de la
República” (El País, ídem). Presidente y
Vicepresidente dentro del actual régimen
político son las dos caras de una misma
moneda, así el uno pertenezca a la
oligarquía, y el otro tenga un origen
popular y un pasado de izquierda, los
cuales ha traicionado en todas sus
dimensiones. Además, Angelino expresa y
promueve no sólo sus ambiciones
arribistas, sino también las de esquiroles y
líderes sindicales vinculados a la patronal,
verbigracia, su carnal Julio Roberto Gómez,
presidente de la CGT.
Piensan mal quienes creen que el
protagonismo político del Vicepresidente,
que tiene tan alterados a los voraces
gremios del empresariado colombiano, está
en función de defender los intereses de los
de abajo y, particularmente, de los
trabajadores. No. El señor Angelino
“El bombero del régimen” Marino Canizales P.
Garzón, en términos populares, no es
más que un “bombero” del régimen.
Arbitra, sí, ante los tecnócratas del
Ministerio de Hacienda y Planeación
Nacional, ante el Ministro del Transporte
y el mismo Presidente Juan Manuel
Santos, ante voceros del Congreso y el
gobierno Norteamericano por la
aprobación del TLC, pero lo hace con el
único fin de legitimar a su Presidente -
jefe y al poder del gran capital en
nuestro país. Es obvio que su perfil no
guarda semejanza con el atolondrado
Francisco Santos, anterior
Vicepresidente. En este caso, estamos
ante un “animal político”. Su pasado, que
no vale la pena repetir y su nuevo cargo,
son prueba de ello. Sólo que esa pasión
política está al servicio de los de arriba,
de un gobierno continuista del régimen
de Uribe Vélez y al servicio de los
intereses y dictados del gobierno
Norteamericano. Con ese programa
fueron elegidos. Juan Manuel Santos y
Angelino Garzón no patean la mesa, ni
vociferan ante los áulicos medios de
comunicación, pero sus maneras y
decisiones de estado son igualmente
cipayas y defensoras de una aberrante
plutocracia, tanto nacional como
multinacional, que tienen postrado al
país y al punto de un desastre
humanitario. Pero lo anterior no queda
ahí. Sería un error afirmar que el
Vicepresidente sólo hace política para
beneficio del régimen. Este señor tiene al
Valle del Cauca como cabeza de playa de
su proyecto político, y desde allí piensa
consolidarse a nivel nacional con el
pomposo y recién fundado partido
“Unidad de Centro Izquierda”. Su
voracidad en materia de control de
cargos públicos y cooptación de
“Presidente y Vicepresidente dentro
del actual régimen político son las
dos caras de una misma moneda, así
el uno pertenezca a la oligarquía, y
el otro tenga un origen popular y un
pasado de izquierda, los cuales ha
traicionado en todas sus
dimensiones.”
dirigentes sindicales y líderes
populares en dicho departamento,
no tiene límites. Las elecciones de
Octubre próximo lo harán aparecer
ante propios y extraños como un
singular barón electoral, creando
ilusiones a los de abajo, para luego
pactar con los de arriba. Para tal
propósito, ya cuenta con el respaldo
de otro converso: el alcalde de Cali,
señor Jorge Iván Ospina.
Las elecciones de Octubre próximo lo
harán aparecer ante propios y
extraños como un singular barón
electoral, creando ilusiones a los de
abajo, para luego pactar con los de
arriba. Para tal propósito, ya cuenta
con el respaldo de otro converso: el
alcalde de Cali, señor Jorge Iván
Ospina.
Cali, Febrero 25 de 2011
Socialistas en el Polo
P O L I S E M I A N° 8, Marzo 8 de 2011—Bogotá, Colombia
Las protestas en el mundo árabe,
incluido el Norte de África, no cesan.
En Túnez, Ganouchi dimitió ante las
multitudinarias voces que así lo pedían,
por no ver en él un agente de las
t ransformac iones democrát i co -
populares que exige el pueblo tunecino
en materia económica, política y social.
En Yemen la oleada revolucionaria
sigue en ascenso. Entre tanto, en
Eg i p t o c i en t o s de m i l e s de
manifestantes volvieron a salir a la
Plaza Tarhir para exigirle al Consejo
Militar el inicio de un proceso de
transición inmediatamente.
No obstante la buena noticia que
significa que las masas conservan la
iniciativa de lucha por sus derechos, los
recientes sucesos en Libia con la
muerte de centenares de personas,
d e s p l a z a m i e n t o s y d e m á s
manifestaciones antidemocráticas del
régimen de Gadafi, han conducido a la
exacerbación de la violencia como
caldo de cultivo para una guerra civil.
En e s t e e s c en a r i o , a p a r e c e
nuevamente la mano larga del
imperialismo, en cabeza del presidente
de los Estados Unidos, el Nóbel de paz
(Pax?) Barak Obama. Las declaraciones
entregadas el 3 de marzo a la prensa
local e internacional así lo indican:
Obama está realizando una operación
militar en Libia.
Pero, aunque sectores de la oposición
c o n c a t a d u r a c l a r a m e n t e
proimperialista (esa misma oposición
que en las manifestaciones ondea la
Libia: contra el
intervencionismo y por la revolución
bandera Libia de la época monárquica)
han pedido a la OTAN y al gobierno
norteamericano su intervención con un
bombardeo, es importante tener claro
que si el gobierno norteamericano lleva
a cabo una operación de esta
naturaleza, el propósito sería la
sa lvaguarda de sus intereses
imperiales, ligados al control de la
producción petrolera, la neutralización
de gobiernos hostiles como Irán y de
paso, tranquilizar al gobierno israelí.
Allí, los intereses del pueblo libio poco o
nada importan en verdad. Los casos
dramáticos de Afganistán e Irak así lo
demuestran: luego de la invasión
no r teamer i cana , no hay más
democracia, más libertades ni más
desarrollo. Por el contrario, el estado de
sitio, la represión a opositores y la
escasez de alimentos son el pan de
cada día. Por ello hay que destacar la
declaración del Consejo Nacional de
Libia de oponerse a la intervención de
la OTAN.
Es cierto que Gadafi es el sátrapa líder
de un régimen dictatorial, opresor,
traidor de la causa del panarabismo,
que ha atacado violentamente a sus
opositores. Pero esto no significa que
de allí se siga el apoyo o la neutralidad
a la intervención militar norteamericana
en su país. Más allá del rechazo que
debe provocar el régimen de Gadafi, es
claro que la contradicción principal, el
gran obstáculo que hoy tiene el avance
de la revolución árabe, es la
intervención militar promovida por
Obama.
En este contexto, es oportuna la
propuesta del presidente de Venezuela,
Hugo Chávez, en el sentido de crear
una comisión internacional que no solo
verifique la situación real al interior del
país africano, sino que promueva
escenarios que desactiven el
dispositivo de guerra e intervención
militar extranjera. Esto no significa
aprobar a Gadafi y sus excesos, sino
ponerse a favor de la paz, del derecho
internacional y sobre todo, ponerse del
lado del pueblo libio y sus deseos de
libertades, democracia y mejoramiento
de su calidad de vida. ¿Y el futuro de
Gadafi? Sólo el pueblo libio debe
decidirlo. Construyamos un Frente
Único de los trabajadores del mundo y
de gobiernos que estén contra la
intervención, del cual forman parte
Fidel Castro y Hugo Chávez. Esta es la
mejor manera de impedir el bloqueo
de la revolución árabe en expansión.
Edwin Andrés Martínez Casas - Ricardo Sánchez ángel
“Es cierto que Gadafi es el sátrapa
líder de un régimen dictatorial,
opresor, traidor de la causa del
panarabismo, que ha atacado
violentamente a sus opositores.
Pero esto no significa que de allí se
siga el apoyo o la neutralidad a la
intervención militar
norteamericana en su país.”
Socialistas en el Polo
P O L I S E M I A N° 8, Marzo 8 de 2011—Bogotá, Colombia
La resistencia de la clase trabajadora y
de los sectores populares se ha
expresado principalmente en las
movilizaciones indígenas en su lucha por
la vida y la dignidad de sus pueblos; en
el movimiento de víctimas del terrorismo
de Estado, del paramilitarismo y las
guerrillas, quienes claman por la verdad,
justicia, reparación y no repetición y por
una salida política negociada del conflicto
armado. Igualmente, en la huelga de los
corteros de la caña en el Valle del Cauca
quienes vienen luchando por mejores
condiciones de trabajo y estabilidad
laboral; en las movilizaciones de los
maestros en defensa de su sistema de
salud y un estatuto único de la profesión
docente; en el mandato de mandatos del
Congreso de los pueblos. Sin embargo,
hay que señalar con claridad que la
lucha de resistencia es aún débil y
dispersa. Lo mismo puede afirmarse en
relación con la capacidad de
convocatoria de las centrales obreras y
el movimiento sindical en su conjunto,
afectados por la contrarreforma laboral
impuesta, la cual eliminó prácticamente
el contrato laboral y despojó del
derecho de asociación a la inmensa
mayoría de trabajadores y trabajadoras,
ahora sometidos a la informalidad, a la
tercerización y a los contratos
temporales y sin garantías de seguridad
social en salud y pensiones. Salvo
contadas excepciones, la convención
colectiva se viene convirtiendo en una
pieza de museo, añoranza del pasado.
La situación política de los trabajadores y las clases populares
Miguel Antonio Lasso Muñoz
La avanzada del neoliberalismo ha
profundizado la crisis del movimiento
sindical y su agonía se prolonga sin
perspectivas de recuperación a corto y
mediano plazo. Es sin duda un
componente de la crisis de dirección
política que arrastran el movimiento
obrero y los sectores populares. Las
prácticas del corporativismo, el
burocratismo, la conciliación de
clases, el entreguismo, la cooptación y
todos los vicios que arrastra el viejo
sindicalismo sólo favorece al gobierno
y los empresarios nacionales y
extranjeros. Sólo la organización, la
movilización y la lucha de los
trabajadores, ligada a un proyecto
político de democracia radical y de
lucha por la emancipación, cambiará
el destino y el futuro de nuestros
pueblos.
Se agrega a lo anterior el hecho de
que a pesar del evidente control que
los distintos sectores de la izquierda
ejercen sobre las cúpulas del cada vez
más disminuido movimiento sindical,
no han generado entusiasmo entre
sus afiliados y afiliadas. El mensaje es
claro: los sectores sociales que se
supone son objetivo de la actividad
política de la izquierda, todavía no
encuentran en ella propuestas claras
de solución a los graves problemas
que los aquejan.
A pesar de todo lo dicho antes,
consideramos que los distintos
sectores de la izquierda no han
agotado sus simbologías de
liberación y resistencia a la
sociedad capitalista y al régimen
político que nos gobierna. A pesar
de la aguda crisis de dirección por
que atraviesan las organizaciones
y el movimiento sindical, su
vigencia no está terminada.
Subsiste en los imaginarios
colectivos de amplios sectores de
la población, a pesar de sus
fisuras y equívocos, continúan
siendo símbolo de esperanza para
los trabajadores y los sectores
populares.
P O L I S E M I A N° 8, Marzo 8 de 2011—Bogotá, Colombia
“El mensaje es claro: los sectores
sociales que se supone son
objetivo de la actividad política de
la izquierda, todavía no
encuentran en ella propuestas
claras de solución a los graves
problemas que los aquejan.”
Socialistas en el Polo
Los cables de wikileaks publicados por “El
Espectador” han confirmado actos
deshonestos del gobierno del ex presidente
Uribe que eran secretos a voces encubiertos
por el tapen-tapen de los grandes medios
que trataban de ocultar a la opinión pública,
para proteger las actuaciones del corrupto
villano y los fieles servidores de su equipo
de gobierno. Sabíamos por ejemplo, que
gobierno que pretenda los favores de la
potencia imperial debe someterse a los
requerimientos de la embajada gringa,
consultarle previamente cada paso que han
de dar durante su gestión gubernamental
en todos los órdenes de la vida nacional, en
la economía, la política, las relaciones
internacionales, el manejo del orden público
… y, mantenerla minuciosamente
informada. Ningún gobierno subordinado a
los intereses del régimen imperial moverá
una hoja sin el visto bueno del “Señor
Embajador”.
La diferencia con gobiernos anteriores
radica en que el ex presidente Uribe
practicó su servilismo con la dignidad del
sátrapa. Nunca olvidó sus rodilleras para
asistir a las reuniones con el embajador
gringo y siempre cuidó de que los
ministros, los altos mandos militares,
parlamentarios, asesores, altos
comisionados, jefes políticos, que desfilaran
por el despacho del embajador también las
llevaran puestas. A estas frecuentes citas
acudían, no solo a informar sino a recibir
instrucciones y a pedir avales hasta para
configurar las listas de candidaturas al
Congreso.
El perfecto cipayo José Arnulfo Bayona
Lo que queda claro con los cables que se
han publicado es que el ex presidente Uribe
se comportó como un auténtico lacayo a la
hora de satisfacer las exigencias del
gobierno imperial para proteger sus
intereses coloniales tanto en Colombia,
como en toda la región. Por eso requirió el
consentimiento de Washington su política
internacional de doble moral, especialmente
al fingir cercanías con el gobierno del
Presidente Chávez, al
tiempo que realizaba operaciones
clandestinas contra las guerrillas
colombianas en territorio venezolano y
agredir militarmente al Ecuador, violando no
solo la soberanía de estos países hermanos,
sino el derecho internacional de la paz y,
colocando irresponsablemente a Colombia al
límite de una guerra regional que
seguramente facilitaría la intervención
militar de la potencia norteamericana.
Por tan servil actitud la embajada aplaudió
el incremento de las extradiciones, avaló su
primera reelección por considerarla útil para
su política “antiterrorista”, pero no le dieron
más helicópteros artillados, ni le autorizaron
seguir utilizando la extradición como
instrumento de negociación con
paramilitares y narcotraficantes.
Además, queda claro que Estados Unidos
proporcionó al DAS apoyo financiero y la
sofisticada “plataforma esperanza”, cuya
utilización quedó al descubierto en el
escandaloso episodio de las chuzadas del
DAS a magistrados de la Corte Suprema de
Justicia, periodistas y opositores del
gobierno. Cada avance en las declaraciones
de funcionarios de dicho organismo deja
fuertes indicios de que las ordenes de estas
acciones delincuenciales de espionaje
salieron del despacho del ex mandatario. La
solicitud de permiso para cerrar el DAS le
fue negada. En cambio, el embajador
amenazó con retirar el apoyo a este aparato
de espionaje si no se hacía un
reordenamiento tal que impidiera poner
en riesgo su política internacional.
Los cables dejan en evidencia, por boca del
ex comisionado Luis Carlos Restrepo, que
en la cacareada desmovilización de las
bandas paramilitares no se desmovilizaron
todos los que eran, ni todos los
desmovilizados eran paramilitares, que las
tales “Bacrim” no son mas que “una nueva
generación de organizaciones criminales” o
el resurgimiento de “nuevos grupos
criminales anticomunistas”, que con la
ruana de la desmovilización se arroparon
paramilitares y narcotraficantes contando
con el consentimiento del gobierno.
Queda demostrado que el gobierno y los
medios acudieron al tapen-tapen para
ocultar el fraude de la “desmovilización del
frente “Cacica la Gaitana” y “otros frentes”
de las Farc, y así mantener la popularidad
del sátrapa y su política.
Estas evidencias de vergonzoso servilismo
del ex presidente Uribe, su equipo de
gobierno y sus cómplices aliados, además
de maltratar la dignidad del pueblo
colombiano, dejan maltrecha la soberanía
nacional y ponen al descubierto que su
gobierno estaba efectivamente compuesto
por “perfectos hipócritas” que se
comportaron como perfectos cipayos del
gobierno imperial.
Tomado: Vladdo
“La diferencia con gobiernos anteriores
radica en que el ex presidente Uribe
practicó su servilismo con la dignidad
del sátrapa. Nunca olvidó sus rodilleras
para asistir a las reuniones con el
embajador gringo…”
Socialistas en el Polo
P O L I S E M I A N° 8, Marzo 8 de 2011—Bogotá, Colombia