DIVISIÓN DE CIENCIAS FORESTALES
INGENIERÍA FORESTAL
TRANSFERENCIA DE SUELOS FORESTALES PARA
ESTABLECIMIENTO DE Pinus greggii Engelmann EN EL
SUELO SOLONCHAK DE LA REGIÓN DE TEXCOCO
TESIS PROFESIONAL
Que como requisito parcial Para obtener el Título de
INGENIERO FORESTAL
PRESENTAN
LUCÍA ENRÍQUEZ MATÍAS OCTAVIO PÉREZ PÉREZ
Chapingo, Texcoco, Estado de México
II
Esta tesis Transferencia de suelos forestales para el establecimiento de Pinus greggii
Engelm., en el suelo solonchak de la región de Texcoco fue realizado por Lucía Enríquez
Matías, Octavio Pérez Pérez bajo la dirección del Dr. José Amando Gil Vera Castillo y Dr.
Fernando Carrillo Anzures. Ha sido revisada y aprobada por el siguiente Comité Revisor y
Jurado Examinador, para obtener el Título de: Ingeniero Forestal.
Presidente: _________________________________
Dr. José Amando Gil Vera Castillo
Secretario: _________________________________
Dr. Fernando Carrillo Anzures
Vocal: _________________________________
Dr. Arturo Dante Rodríguez Trejo
Suplente: _________________________________
M.C. Ángel Leyva Ovalle
Suplente: _________________________________
Dr. Daniel Sepúlveda Jiménez
Chapingo, Texcoco, Estado de México, Abril de 2011.
III
AGRADECIMIENTO
A Dios, por estar conmigo en cada paso que doy, por fortalecer mi corazón e iluminar mi mente y por haber puesto en mi camino a aquellas personas que han sido mi soporte y compañía durante todo el periodo de estudio. A la Universidad Autónoma Chapingo, por brindarme la oportunidad de tener una carrera profesional y cumplir así uno de mis más grandes sueños. A la División de Ciencias Forestales y sus profesores, por formarme como Ingeniero Forestal. Al Dr. José Amando Gil Vera Castillo, por sus valiosas aportaciones y sabios consejos para la elaboración de la presente tesis. Al M.C. Ángel Leyva Ovalle, Dr. Fernando Carrillo Anzures, Dr. Dante Arturo Trejo Rodríguez y al Dr. Daniel Sepúlveda Jiménez, por su invaluable colaboración y sus acertados comentarios para la realización de este trabajo. A la Familia Cruz Reyes por su incondicional apoyo que siempre han mostrado para conmigo. A la Familia Pérez Ramírez por su apoyo en el momento de mi vida quienes le agradezco de todo corazón. A mi familia, por apoyarme en todo momento, y por su incansable espíritu de lucha, el cual me ha impulsado a terminar mi carrera profesional.
IV
DEDICATORIA A la memoria de mi padre, Darío Enríquez, se que te fuiste cuando aún era muy pequeña, pero
gracias por darme la vida a enseñarme que puedo lograr lo que me propongo... GRACIAS PADRE, y espero que donde quiera que estés te sientes orgulloso de mi, gracias por
acompañarme en este camino.
A la memoria de mi sobrina, Crispina Enríquez Luna, una gran persona, un ejemplo a seguir, tus recuerdos siempre estarán con nosotros.
A la familia Cruz Reyes, (Luis, Aleida, Lupita, Andy y el pequeño Luisito) le agradezco de todo corazón su cariño, su amistad incondicional, por aceptarme como si fuera parte de su familia,
por sus grandes consejos, su apoyo en todo momento, gracias mil gracias y que Dios los bendiga siempre.
A mis herman@s, Mary, Nino, Victor, Lencho, Ubaldo y mi Madre, por las circunstancias de la vida no compartimos muchas cosas en varios años, pero gracias, ya que siempre están cuando los necesito, Gracias hermanos. A ti Lencho te doy las gracias por ser el hombre de la casa, por tu apoyo siempre te estaré agradecido, gracias a todos por su apoyo, sus consejos, que Dios los
bendiga.
A mis sobrin@s Cecy, Yara, Uriel (el chiquitín) aun están pequeños pero espero que esta tesis los inspire de alguna forma a seguir estudiando y que sepan que tienen mi cariño y mi apoyo
para hacerlo, les deseo lo mejor y cuenten conmigo para todo.
A todos mis compañeros, sin excepciones, con los que compartí este valioso tiempo, porque de cada uno de ustedes aprendí lecciones importantes para mi vida, pero sobre todo a mis
amigos: Alma Luz, Cesar, Renata, José Arturo, Sandra, Sonia, Mayra, María y a mis amigos de la generación 2010 de ingeniería forestal.
Gracias a todos los que compartieron parte de su vida conmigo y porque de cada uno he
aprendido algo bueno. Gracias a los que me enseñaron que no importa lo difícil que sea la vida o los obstáculos que se nos presenten, siempre hay que enfrentarlo con la frente en alto de la mejor manera, gracias por enseñarme a no ser conformista, a buscar siempre ser mejor en lo que haga, en hacerme responsable, disciplinada y con dedicación y hacer las cosas con amor.
Gracias a todas aquellas personas que me han permitido conocerlos y quienes han estado a mi lado.
CON CARIÑO LUCY ENRIQUEZ
V
DEDICATORIA A mi abuelita Tomasa Criseria Luna Morales con quien pase la mayor parte de mi vida hasta
ahora y llego a ser mi padre y madre durante 14 años sin pedir nada a cambio GRACIAS ABUELITA por tu apoyo incondicional.
A mis padres Lourdes Pérez Luna y Felipe Pérez Pérez quienes me dieron vida y sustento
cuando no podía valerme por mi mismo su apoyo durante una buena parte de mi vida, les doy gracias.
A la memoria de mis abuelos Octavio Pérez Pérez, Josefina Pérez García y Felipe Pérez Pérez
a quienes no pude conocer y convivir con ellos ya que fallecieron antes de que yo naciera.
A mis tías Aida Pérez Luna, Elia Pérez luna y Juan Pérez Luna quienes me dieron ánimos y concejos para seguir estudiando.
A mis tíos Paulino Pérez Pérez, Panfilo Pérez Pérez, Agustin Pérez Pérez Crisoforo Pérez Pérez, Eduardo Pérez Pérez, Joaquin Pérez Pérez y a la memoria de Bitalico Pérez Pérez
gracias por los concejos sabios que me dieron para desarrollarme como persona.
A mis medios hermanos Karina, Javier, Daniel, Marcos, Adalberto por el apoyo moral que me hacían notar, gracias.
A mis prim@s que me dieron ánimos para seguir estudiando, a pesar de mi situación Gracias.
A mis sobrin@s les doy gracias por el apoyo moral que me hacían notar.
A todos mis compañeros, de la generación 2003-2007 de la carrera de ingeniero forestal sin excepción: Oliverio, Rubén, Misael, Norberto, Juan Carlos, Paloma, Selene, Evelia, Jasmin,
Yamili, etc. A todos mis compañeros, de la generación 2004-2008 de la carrera de ingeniero forestal sin
excepción: Delmar, Cirilo, Miguel Armando Landa Verde, Diana, Cristina, Ofelia, Adriana M, Adriana L etc.
También te doy gracias a ti Viros por los momentos que compartiste conmigo y esos recuerdos
que llevo dentro.
Doy gracias a todas las personas que contribuyeron en mi formación profesional y me dieron ánimos de seguir adelante.
MUCHAS GRACIAS.
CON CARIÑO Octavio pérez
VI
INDICE GENERAL
AGRADECIMIENTO ......................................................................................................... III
INDICE GENERAL ........................................................................................................... VI
ÍNDICE DE FOTOGRAFÍAS ........................................................................................... VIII
ÍNDICE DE FIGURAS ....................................................................................................... IX
ÍNDICE DE CUADROS ...................................................................................................... X
RESUMEN ........................................................................................................................ XI
SUMMARY ..................................................................................................................... XVI
INTRODUCCIÓN ............................................................................................................... 1
OBJETIVO GENERAL ....................................................................................................... 3
2.1 Objetivos específicos................................................................................................ 3
HIPÓTESIS ....................................................................................................................... 4
REVISIÓN DE LITERATURA............................................................................................. 5
4.1 Degradación del suelo .............................................................................................. 6
4.2 Antecedentes de reforestación en la región de Texcoco .......................................... 7
4.3 Transferencia de suelo ............................................................................................. 8
4.4 Micorrización .......................................................................................................... 10
4.5 Importancia del agua en las plantas ....................................................................... 12
4.6 Cuidados culturales después de establecer la plantación ....................................... 14
4.7 Características de la planta .................................................................................... 15
4.8 Altura ...................................................................................................................... 16
4.9 Diámetro................................................................................................................. 16
4.10 Descripción botánica y ecología de la especie ..................................................... 17
4.11 Especies asociadas .............................................................................................. 17
4.13 Estatus ................................................................................................................. 18
4.14 Clima .................................................................................................................... 18
4.15 Suelos .................................................................................................................. 18
4.16 Taxonomía ........................................................................................................... 19
4.17 Relaciones filogenéticas ...................................................................................... 19
4. 18 Descripción botánica ........................................................................................... 19
4.19 Importancia económica ........................................................................................ 21
4.20 Importancia para la investigación ......................................................................... 22
4. 21 Características de los suelos del área del experimento ....................................... 22
VII
4.21.1 Suelo de testigo o de migajón ....................................................................... 22
4. 21.2 Suelo de pino ............................................................................................. 22
4. 21. 3 Suelo de oyamel .......................................................................................... 23
MATERIALES Y MÉTODOS ............................................................................................ 24
5.1 Ubicación del experimento ..................................................................................... 24
5.2 Topografía .............................................................................................................. 24
5.3 Características climatológicas del lugar de la plantación ........................................ 24
5.3.1. Clima .............................................................................................................. 24
5.4 Preparación del terreno de la plantación ................................................................ 27
5.4.1 Desmalezado. .................................................................................................. 27
5.4.2 Preparación del sitio. ....................................................................................... 27
5.4.3. Material vegetal............................................................................................... 29
5.4.4. Trazado de líneas ........................................................................................... 30
5.4.5. Apertura de cepas ........................................................................................... 30
5.4.6 Asignación de tratamientos ............................................................................. 31
5.4.7 Diseño experimental ........................................................................................ 32
5.4.8 Análisis de los datos ........................................................................................ 33
5.4.9 Irrigación de cepas ........................................................................................... 34
5.4.10 Llenado de cepas ........................................................................................... 35
5.4.11 Establecimiento de la plantación .................................................................... 35
5.4.12 Crecimiento relativo ....................................................................................... 38
5.5 Variables evaluadas ............................................................................................... 38
5.6 Cuidado y mantenimiento de los brinzales ............................................................. 41
RESULTADOS Y DISCUSIÓN ........................................................................................ 45
6.1 Resultados a los tres meses de establecido el estudio ........................................... 45
6.1.2 Crecimiento en altura total y crecimiento relativo ............................................ 46
6.2 Resultados después de un año de establecido el estudio (segunda fase) .............. 55
6.3 Crecimiento en diámetro y altura (segunda fase) ................................................... 66
CONCLUSIONES ............................................................................................................ 71
LITERATURA CITADA .................................................................................................... 73
VIII
ÍNDICE DE FOTOGRAFÍAS
Fotografía Página
1. Tractor John Deere 6425 con 110 caballos de fuerza (INIFAP, CEVAMEX) ... 28
2. Maquinaria que se utiliza para el arrastre (INIFAP, CEVAMEX). ..................... 28
3. Pinus greggi, que se utilizaron para el experimento ......................................... 30
4. Establecimiento de las cepas de 1 m x 1 m en cada unidad experimental ...... 31
5. Humedeciendo las cepas un día antes de la plantación. .................................. 35
6. Llenado de las cepas con suelo de los tratamientos utilizados ......................... 35
7. Cortando la parte de las raíces dobladas de los brinzales. ............................... 36
8. Trasplantando los brinzales de Pinus greggii en las cepas. .............................. 36
9. Riego después del trasplante de los brinzales en las cepas. ........................... 37
10. Muestra las plántulas una semana después de establecimiento. .................... 37
11. Izquierda se toma la medida del crecimiento total del brinzal. Y foto de la
derecha la medida del crecimiento relativo del brinzal. ................................... 39
12. Medición de altura en (mm) de los brinzales con una cinta métrica. .............. 40
13. Mediciones del variable diámetro con Bernier a los 5 cm del suelo. ............... 41
14. Muestra el cuidado de las plantas, es decir mantener limpia la parcela. ......... 41
15. Por falta de humedad y el suelo muy arcilloso se agrieta, rompiendo las raíces
.............................................................................................................................. 42
16. Se realizo escarda a cada planta para evitar que se dañe las raíces de las
plantas ............................................................................................................ 42
17. Eliminaciones de ramas o hijuelos. ................................................................. 43
18. Eliminando las hierbas en la plantación con machete y azadón en la primera
semana de septiembre de 2010. .................................................................. 44
19. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de
pino. ................................................................................................................ 44
20. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de
oyamel y de testigo. ........................................................................................ 44
21. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de
pino. ................................................................................................................ 68
22. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de
oyamel. ........................................................................................................... 68
23. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de
arrastre o testigo. ............................................................................................ 69
24. Muestran el crecimiento en diámetro, a la izquierda es un brinzal en suelo de
oyamel y a la derecha un brinzal en el suelo de la región o testigo. .............. 69
IX
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura Página
1. Precipitación pluvial media mensual (mm) durante los últimos 10 años (2000 -
2009), en Chapingo, México. ............................................................................ 25
2. Temperaturas (ºC) mínimas mensuales a la intemperie en los últimos 10 años
(2000 – 2009) en Chapingo, México. ................................................................ 27
3. Distribución de las unidades experimentales y los brinzales. ............................ 32
4. Distribución de los brinzales en el sitio de plantación. ...................................... 33
5. Porcentaje de los brinzales que sobrevivieron en los primeros tres meses de
plantados. ......................................................................................................... 45
6. Muestra el crecimiento en altura (cm) de las plantas en cada semana durante
los primeros tres meses .................................................................................... 51
7. Muestra el crecimiento relativo (cm) de las plantas en cada semana durante
los primeros tres meses de plantados ............................................................... 54
8. Porcentaje de supervivencia de Pinus greggii después de un año de
establecido. ....................................................................................................... 56
9. Crecimiento en altura de los brinzales para cada mes y en cada tratamiento
desde agosto de 2009 hasta septiembre de 2010 ............................................ 63
10. Crecimiento en diámetro de los brinzales para cada mes y en cada tratamiento
desde agosto de 2009 hasta septiembre de 2010. ........................................... 65
11. Crecimiento promedio de los brinzales en cada uno de los tratamientos
después de un año de plantados ..................................................................... 67
X
ÍNDICE DE CUADROS
Cuadro Página 1. Precipitación media mensual (mm), en los últimos 10 años (2000 – 2009) en Chapingo
México ......................................................................................................................................... 25 2. Temperaturas medias (ºC) promedio mensuales para los últimos 10 años (2000 –
2009) en Chapingo, México. .................................................................................................... 26 3. Temperaturas mínimas (ºC) promedio mensuales para los últimos 10 años (2000 –
2009) en Chapingo, México. ................................................................................................. 26 4. Resultados de análisis de varianza para las variables altura total (cm) y crecimiento
relativo (cm)................................................................................................................................ 47 5. Resultados de la prueba Tukey para la variable altura relativa de los brinzales de Pinus
greggii .......................................................................................................................................... 49 6. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de crecimiento en cada
tratamiento. .............................................................................................................................. 50 7. Resultados de la prueba Tukey para la variable altura total de los brinzales de Pinus
greggii. ........................................................................................................................................ 52 8. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de la altura total en cada
tratamiento.................................................................................................................................. 53 9. Altura total (cm) medidos en cada semana, durante los primeros tres meses de
establecidos los brinzales ........................................................................................................ 55 10. Resultados de análisis de varianza para las variables altura (cm) y diámetro (cm),
medidos cada mes, durante un año de agosto de 2009 a septiembre de 2010. ........... 59 11. Resultados de la prueba Tukey para la variable altura de los brinzales de Pinus
greggii. ........................................................................................................................................ 61 12. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de crecimiento en cada
tratamiento.................................................................................................................................. 62 13. Resultados de la prueba Tukey para la variable diámetro de los brinzales de Pinus
greggii .......................................................................................................................................... 64 14. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de crecimiento en cada
tratamiento para el variable diámetro..................................................................................... 65 15. Promedio de altura y diámetro de los brinzales en un año, agosto de 2009 a
septiembre de 2010 .................................................................................................................. 66
XI
RESUMEN
El presente trabajo establece las bases para la toma de decisiones de una
plantación forestal con fines de reforestación con la especie Pinus greggii
Engelmann en la región de Texcoco. Se realizó una plantación con esta especie,
en las áreas de la División de Ciencias Forestales, Universidad Autónoma
Chapingo, en tres diferentes suelos (Tratamiento A, Testigo/Suelo de la región;
Tratamiento B, suelo de pino; y Tratamiento C, suelo de oyamel), con el fin de
conocer los efectos de la trasferencia de suelo. La plantación de los brinzales se
evaluó por fases que son: los primeros tres meses que comprenden de abril a
junio del 2009, midiendo las variables: altura total y crecimiento relativo (cm),
después de los tres meses comienza la segunda fase que duró un año,
comenzando en agosto de 2009 a septiembre de 2010, con las variables: altura
(cm), este se midió con una cinta métrica y diámetro (mm) utilizando un Vernier,
midiendo a 5 cm del suelo.
Los análisis estadísticos arrojaron que los brinzales que se establecieron en el
suelo de pino son los que tuvieron mayor crecimiento, alcanzando una altura de
160 cm después de un año, los brinzales del suelo de la región 146 cm; mientras
que aquellos que se establecieron en el suelo de oyamel 126 cm. El porcentaje de
supervivencia en los tres tratamientos fueron: suelo de la región 93%, y en el
tratamiento B o suelo de pino, 85%, y 70% de supervivencia en el tratamiento de
oyamel.
Estos resultados indican que la transferencia de suelo tiene un efecto positivo en
los brinzales de Pinus greggii Engelm., y también muestra que con esta especie se
puede realizar una reforestación de la región.
Palabras clave: Pinus greggii, trasferencia de suelo, micorrización, trasplante,
supervivencia, brinzales.
XVI
SUMMARY
This work establishes the basis to help the decision making process to plant od
Pinus greggii Engelmann in the region of Texcoco to reforest. A forestry plantation
was made on the Division de Ciencias Forestales, Universidad Autonoma
Chapingo in three different types of soils: local –treatment A, pine soil –treatment
B- and fir tree soil –treatment C- to study the effects of soil transfer. The planting of
seedlings was evaluated in two stages: In the first three months (april to june 2009)
the following variables were measured: total height and relative growth
(centimeters). After the first three months the second stage was carried out (august
2009 to September 2010) analyzing: height, measured using a tape measure and
diameter using a Bernier tool measuring at 5 cms from ground.
The study reports that those seedlings planted in the pine soil obtained the best
growth in at year (160 cms). Meanwhile in the local soil there was only 146 cms
and the ones that were in the fir tree soil 126 cms furthermore the lost plants were:
local soil 93%, pine soil 85% and fir tree soil 70%.
These results indicate that the soil transfer has a positive effect on the seedlings of
Pinus greggii Engelm., thus a reforestation in the region of Texcoco can be made.
Key words: Pinus greggii, soil transfer, mycorrhization, overlap, survival, brinzales.
1
INTRODUCCIÓN
Texcoco ha presentado un proceso de desertificación, el cual altera los procesos
agrícolas, pecuarios y forestales, así como el dinamismo de los sistemas
naturales. Un trabajo sobre los antecedentes importantes de esta situación, es el
de Ortiz (1986), citado por Estrada (1991), quien hace una retrospección histórica
de los recursos naturales y menciona los factores que inciden directamente en el
proceso educativo. Estrada (1991) refiere la acción directa de este fenómeno
sobre la vegetación y las tierras de cultivo; recomienda la reforestación, obras de
retención, educación ambiental, concientización, entre otras medidas para reducir
dicho proceso.
En el área del Ex lago de Texcoco se presentan fenómenos meteorológicos
extremos: sequias, heladas, variaciones altas de temperaturas en el día y vientos
muy fuertes e intensos que desecan y maltratan las plantas (Garzón, 1986). Si a
todo esto se le añade la alta concentración de sales presente en los suelos, es de
esperarse que al plantar una especie en tales condiciones, reciba un fuerte
impacto del que muchas veces no se recupere y muera o en el mejor de los casos
presente una apariencia raquítica y poco estable.
Tierras de barro y tierras cacahuatudos son términos que los campesinos utilizan
para identificar a los suelos arcillosos de la zona oriente del Estado de México
Luna y Martínez (1981). Las tierras de barro se ubican a las orillas del ex lago de
Texcoco, forman grietas y presentan agregados de consistencia firme, son
pegajosas y chiclosas (Luna, 1982). Los suelos cacahuatudos se encuentran en la
parte central del ex lago de Texcoco, cuando secan forman agregados con una
consistencia dura, se agrietan y no guardan humedad; la presencia de agregados
fuertemente desarrollados, fuerte resistencia a la destrucción, además de la
formación de costras gruesas que evitan la emergencia de las plántulas, son
problemas que influyen para que estos suelos sean abandonados por los
productores debido al trabajo que implica labrarlos y a la baja productividad que
tienen como resultado de la pobre germinación (Gutiérrez y Ortiz, 1999).
2
Esta gran área del ex - lago de Texcoco se encuentra desprovista de vegetación
por las características fisiográficas, meteorológicas y edáficas, que propician la
erosión de suelo aunque en menor grado que en los años anteriores (Garzón,
1986). Para combatir este problema, se presenta entre otras alternativas, cubrir los
suelos con vegetación como los trabajos del proyecto lago de Texcoco que surge
en 1971 como respuesta a la necesidad de resolver una serie de problemas que
se originaban dentro de la zona federal, como son: erradicar las tolvaneras que se
generaban en el lecho del ex lago de Texcoco, construir infraestructura necesaria
para llevar control y manejo hidrológico de la zona (Zamorano, 1994).
Por las características que presentan los suelos de arrastre de la región, se realiza
esta investigación con el fin de conocer si Pinus greggii Engelm., se adapta a
suelos de solonchak de la región de Texcoco. En otros trabajos se ha demostrado
que esta especie crece bien en lugares degradados (López, 1999), es por ello que
se pretende saber si es útil para realizar una reforestación en las áreas de
solonchak de Texcoco con dicha especie, es decir en los suelos de arrastre, y
para ello se realizó un experimento con tres clases de suelo para conocer el mejor
crecimiento tanto en altura como en diámetro de Pinus greggii Engelm., en la
región de Texcoco.
3
OBJETIVO GENERAL
Evaluar el efecto de la transferencia de suelo forestal en el crecimiento tanto en
altura como en diámetro de Pinus greggii Engelm., en las áreas de solonchak de
la región de Texcoco.
2.1 Objetivos específicos
a) realizar la evaluación de crecimiento de cada uno de las plantas (Pinus greggii
Engelm.), en tres tipos de suelo.
b) Evaluar el porcentaje de supervivencia de Pinus greggii Engelm., en tres tipos
de suelos.
c) Evaluar la efectividad de una plantación anticipada al periodo de lluvia de Pinus
greggi Engelm.
4
HIPÓTESIS
Ho. El suelo Forestal no favorece el crecimiento de los brinzales de Pinus greggii
Engelm., en suelos solonchak de la región de Texcoco para establecer la
plantación.
Ha. El sustrato Forestal favorece el crecimiento de los brinzales de Pinus greggii
Engelm., en suelos solonchak de la región de Texcoco para establecer la
plantación.
5
REVISIÓN DE LITERATURA
Con la desecación del ex – lago de Texcoco se dejó al descubierto una superficie
de alrededor de 150 km2 de terreno con elevados niveles de salinidad, sodicidad,
alcalinidad, mal drenaje y nivel freático salino a poca profundidad, factores que
impidieron la colonización natural de micorrizas en el área de Texcoco.
Todos los suelos contienen sales, muchas de las cuales son nutrimentos para las
plantas. Sin embargo, cuando las sales se acumulan en el suelo por arriba de
ciertos límites pueden causar diversos daños y alteraciones a las plantas, llegando
inclusive a impedir su crecimiento y desarrollo. Un suelo se considera salino si
presenta más de 4 mmhos/cm* en el extracto de saturación del suelo, y a este
nivel algunos cultivos ya presentan problemas para su desarrollo (Pedraza, 1988).
En la región de Texcoco la vegetación es un elemento importante, que caracteriza
el paisaje. Los trabajos más relevantes en la zona fueron los realizados por
Rzedowski (1954) citado por Palafox (1999) sobre las asociaciones vegetales de
los terrenos del Lago de Texcoco; así como el proyecto Plan Lago de Texcoco,
donde hace referencia a la situación del ex - lago en la década de los setenta.
Por el interés de este ecosistema se buscan elementos que permitan recuperar
esta zona, haciendo reforestación de especies tolerantes a suelos salinos y
sódicos.
González y López (1991) describen de forma general la vegetación del municipio y
para 1991, registran que la vegetación en Texcoco está alterada debido a la
proliferación de especies secundarias ruderales, las cuales han sustituido a la
vegetación primaria. Mencionan también que la tala, el pastoreo y la extracción
intensiva de productos no maderables han provocado la desertificación de la zona.
Uno de los problemas más serios a los que se enfrenta los ecosistemas forestales
de México, es la presencia de suelos degradados como producto de uso irracional
*Mmhos/cm: se define como milimhos por centímetro, es una medida de salinidad del suelo.
6
de los recursos. Las áreas forestales, por el crecimiento de la población urbana y
la expansión del área agrícola están siendo destruidas por ello es necesario el uso
de las plantaciones forestales para satisfacer las necesidades diversas como
materias primas no maderables y maderables, con objetivos de experimentación,
mejoramiento del ambiente o para control de la erosión, protección o la
recuperación de suelos (Martínez, 1948).
La recuperación de ecosistemas perturbados y suelos degradados por procesos
de erosión es uno de los principales objetivos de las plantaciones forestales
(López, 1999).
4.1 Degradación del suelo
La degradación del suelo es uno de los problemas ambientales más serios en el
mundo, debido a que este fenómeno amenaza seriamente a la agricultura y al
ambiente natural. Al mismo tiempo que los esfuerzos en la agricultura están
enfocados al incremento de la producción de alimentos, las dimensiones de las
tierras degradas en todo el mundo están creciendo de manera alarmante,
afectando del 30 al 50 % de la superficie de la tierra (Pimentel, 1993) citado por
López (1999).
Aunque todas las formas de degradación conducen a la disminución de la fertilidad
y la productividad del suelo, la FAO – PNUMA (1980) clasifica los diversos tipos de
procesos de degradación de la tierra como: a) degradación de la cubierta vegetal;
b) degradación por desplazamiento de partículas de suelo, que incluyen erosión
hídrica y eólica; c) degradación por deterioro interno del suelo, en el cual se
considera la salinización y la alcalinización, el deterioro químico, el físico y el
biológico.
La erosión es considerada como la remoción el suelo por agentes del medio físico,
en el ámbito mundial constituye uno de los problemas ambientales más severos,
80% de la superficie del planeta presenta este fenómeno. Se ha estimado que
hasta un 98% de la superficie territorial de México está afectada en distintos
niveles (Alvarado et al., 2007). Y en la región de Texcoco, (el diagnóstico
7
municipal 2000, gobierno del estado de México), reporta que el 17 % del
superficie es erosionada (Moreno, 2002).
En la cuenca del Valle de México una de las zonas más pobladas del país, se ha
propiciado que la agricultura de esta área emigre en las laderas, caracterizadas
por los suelos someros y susceptibles a la erosión, donde por el uso irracional de
este recurso y un sistema de monocultivo, se pierde la capa fértil, lo que trae como
consecuencia el afloramiento de un horizonte endurecido llamado por los
campesinos tepetate (López, 1999).
Existen trabajos elaborados por expertos, en donde se analizan las causas y los
efectos que propician la deforestación y posteriormente la erosión de los suelos.
Las medidas fundamentales que se proponen para abordar el problema son:
campañas educativas para enseñar a la población rural, las funciones que tiene el
bosque y la forma de aprovecharlo técnicamente; cuando la erosión ya está
presente, se recomienda emprender los trabajos de restauración necesarios.
Morgan (1997). La vegetación como una capa protectora del suelo; las hojas y
tallos absorben parte de la energía cinética de las gotas de lluvia, mientras que las
raíces, contribuyen a darle resistencia mecánica (Gutiérrez, 2002).
4.2 Antecedentes de reforestación en la región de Texcoco
La desecación del Lago de Texcoco trajo grandes problemas, por lo que se
requirieron de la intervención del Ejecutivo Federal, creando la Comisión de
Estudios del Lago de Texcoco (1971), de la cual se originó el Plan Lago Texcoco
(1972) y posteriormente la Comisión del Lago de Texcoco (1974) (Pedraza,
1988).
Sosa (1975) menciona que se han introducido herbáceas y arbustivas de los
géneros: Galenia, Salvia, Atriplex, Lycium, Sporobolus, Kovhia, Rhodes, Salicornia
y Sarcobactus, las cinco primeras procedentes de Riverside, California, y las
restantes de la Sauceda, Coahuila, de este ensayo sobre los bordos en suelo del
ex–lago el género Atriplax ssp. reporta un comportamiento sobresaliente.
8
En la parte media y alta de la cuenca, se han realizado una serie de plantaciones
forestales, con objeto de recuperar las áreas degradadas, desde 1981 hasta la
fecha se ha plantado una gran cantidad de especies de Pinus, Eucalyptus y otras
especies (Zamorano, 1994).
Garzón (1986); realizó una evaluación de metodologías para establecer la
vegetación en las condiciones de Texcoco, durante un periodo de 10 años,
utilizando especies como carrizo (Arundo donax L.) y el pasto salado (Distichlis
spicata), el cual ha sido mejor alternativa por su capacidad de adaptación (Luna y
Martínez, 1981).
Garzón (1986) evaluó nueve especies forestales en suelos del ex – lago de
Texcoco, utilizando la técnica del polietileno, con las siguientes especies: Tamarix
plumosa hort., Nicotiana glauca Graham, Populus alba L., Chilopsis linearis (Cav.)
Sweet., Salix bonplandiana HBK., Casuarina equisetifolia L., Eucalyptus globulus,
Labil., Tamarix aff. aphylla (L) Karst., Schinus molle L., se aplicaron riego durante
los primeros dos años, se observó un buen comportamiento, pero después se
suspende el riego y se perforó el plástico, sobrevino una mortandad casi total en la
mayoría de las especies, y ocho años después solo encuentran seis plantas de
Schinus molle L., siete de Tamarix plumosa hort. y una de Casuarina equisetifolia
L., presentando un desarrollo raquítico y que no rebasa los dos metros de altura.
4.3 Transferencia de suelo
La transferencia de suelo es una práctica que implica incorporar suelo procedente
de otro sitio cuyas características físicas (textura, porosidad, estructura y
capacidad de retención de humedad), químicas (principalmente contenido de
nutrientes, materia orgánica y pH) y biológicas (como la presencia y actividad de
micro y macro fauna) sean más favorables para el crecimiento de las plantas que
la de los suelos degradados en el que se establece una plantación (López, 1999).
Carrillo et al., (1991) mencionan que este tipo de prácticas se ha llevado a cabo
desde hace muchos años en lugares donde se ha perdido la capacidad
productividad. La incorporación de material orgánico como práctica para la
9
recuperación de áreas degradadas fue realizada por grupos como los
Tlaxcaltecas, que adquirieron un profundo conocimiento en su entorno ecológico.
Volk (1990) citado por López (1999). Evaluó diferentes sustratos: suelo de un
bosque maduro y de un pastizal, los cuales utilizó para siembra de semillas de
cuatro especies forestales en suelos degradados de África. El experimento mostró
diferentes resultados para cada especie, pero en general se presentó una
respuesta favorable en cuanto a peso seco de la parte aérea y de las raíces, en
los tratamientos con suelo transferido, sin embargo la supervivencia fue afectada
de manera considerable.
López (1999) reporta los efectos de transferencia de suelo para realizar
plantaciones de Pinus greggii en un área de suelos degradados o tepetates en
Texcoco, utilizando la transferencia de 4 tipos de suelos a) bosque maduro, b)
bosque quemado, c) pastizal y d) testigo; y después de dos años de
establecimiento se obtuvo que, los mejores resultados fueron los que se
establecieron en suelos de bosque maduro y bosque quemado, mostrando mayor
altura y sobrevivencia, estos resultados establecen que la transferencia de suelo
es una práctica recomendable que asegura el establecimiento de Pinus greggii en
un sitio crítico.
La producción agrícola en los Altos de Chiapas presenta diversos problemas entre
los que destacan la erosión y la pérdida de fertilidad de los suelos, la disminución
de los rendimientos, el abatimiento de la productividad del trabajo. Se realizó un
experimento con Maíz (Zea mays L. raza Olotón) con el propósito de contribuir a
mejorar la fertilidad de los suelos ácidos, se evaluó el efecto acumulativo de la
adición de abono orgánico, cal dolomítica y fertilizantes minerales, sólos y
combinados (Pool et al., 2000).
De manera general se puede establecer que la transferencia de suelo favorece la
supervivencia, el crecimiento y la formación de micorrizas en suelos pobres, sin
embargo, cada especie responde de manera diferente a cada sustrato
dependiendo de la variable, que se evalúa. Los estudios que se han realizado con
10
respecto a la transferencia de suelos, han utilizado sin excepción suelo procedente
de bosques maduros, los cuales han mostrado resultados favorables en cuanto a
incrementos de supervivencia, crecimiento y micorrización (López, 1999) .
4.4 Micorrización
El suelo es un medio natural para el crecimiento de las plantas y a su vez es el
hábitat de muchos microorganismos que desarrolla aspectos vitales de procesos
fisiológicos en los ecosistemas y los agroecosistemas (González et al., 1990).
Es importante tener en cuenta la micorrización de las plantas, este consiste en la
unión simbiótica entre las hifas de un hongo y la raíz de una planta superior
(Gómez, 2004).
Las micorrizas son la asociación simbiótica de un hongo del suelo con las raíces
de una planta. El hongo proporciona minerales, especialmente fósforo, a la planta
y a veces también a un nitrógeno fijado. La gran extensión del micelio del hongo
hace que pueda absorber estos compuestos en un área mucho mayor que la zona
que alcanzan las raíces de las plantas. Las plantas proporcionan al hongo materia
orgánica, en ocasiones hasta el 20% del producto de la fotosíntesis. La relación es
beneficiosa para la planta como demuestran algunos experimentos en los que las
plantas con micorrizas crecen más que si carecen de ellas (Cubas, 2007).
La importancia de las asociaciones micorrízicas se observó por primera vez en
algunos programas de reforestación realizados en diversas partes del mundo, en
los cuales se plantaron árboles exóticos en ausencia de hongos simbióticos
naturales en el lugar de origen de cada especie (Daniel et al., 1982).
En México se conocen 15 especies de Pinus que han demostrado su capacidad
de simbiosis con un hongo específico Marx (1975); Candelario (1983); Iglesias et
al., (1989), Iglesias (1986). Quienes trabajaron con inoculaciones de cultivos
puros de micelio y espora del hongo ectomicorrícico Pisolithus tinctorius
demostrando la obtención de beneficios amplios en el desarrollo y sobrevivencia
de las coníferas mexicanas.
11
La mayoría de las plantas desarrolladas en el medio natural tienen micorrizas, las
cuales contribuyen al desarrollo y crecimiento de las plantas; entre las especies
leñosas que suelen tener hongos micorrizógenos destacan las de los géneros de:
Abies, Betula, Fagus, Eucalytus, Pinus, Populus y Quercus. Las plantas
micorrizadas presentan una serie de ventajas como son:
Mayor desarrollo radicular en el primer año y en general una mayor altura.
Mayor resistencia frente a ciertos agentes bióticos y abióticos de deterioro
de suelo.
Esto sucede siempre que exista un alto grado de micorrización de las raíces con el
hongo óptimo en cada caso (Gómez, 2004).
Marx y Davey (1968) citados por Iglesias (1986), afirmaron que la micorriza
propicia un gran aumento en la longevidad de la raíz y en su resistencia a
patógenos; incrementa la tolerancia del árbol a toxinas del suelo, extremos de
acidez y temperaturas altas. Reid (1984) citado por Iglesias y Armendariz (1989)
público que aumenta considerablemente la superficie de la raíz y que la absorción
y acumulación de iones es más selecta. Por su parte Ford (1986), dio a conocer
que la micorriza facilita la solubilización de minerales y que la calidad y cantidad
de ectomicorrizas de las plantas en viveros, determina el éxito de una plantación.
La importancia de las micorrizas con los árboles forestales se hacía notar cuando
las plantaciones forestales introduciendo pinos exóticos en las diversas partes del
mundo, invariablemente fracasaban hasta que se introducían los hongos
micorriciales adecuados. También se menciona que en otros países y regiones
del mundo sin árboles, en donde importaron pinos de otras localidades
probablemente los hongos hayan llegado de manera casual en plántulas, macetas
u otros materiales Pritchett (1986).
Pritchett (1986); Iglesias (1986); Marx (1975) señalan que el beneficio de las
micorrizas en el crecimiento de los árboles se adjunta a varios factores:
12
1. Aumento en la absorción de agua y nutrientes en virtud de una mayor
superficie de absorción por la formación de raíces cortas bifurcadas o
ramificadas y por los micelios que penetran en el suelo cercano a las
raíces cortas.
2. Aumento en la movilización de los nutrientes por medio de la
intemperización biológica.
3. Aumento en la longevidad de las raíces alimentadoras proporcionando un
inhibidor biológico a la infección de las raíces por parte de los patógenos
del suelo.
La preparación del ambiente es muy importante porque por lo general se mejoran
las condiciones desfavorables del lugar, preparando el suelo o aplicando algún
otro tratamiento necesario. Donde se esté expuesto a grandes sequias o
temperaturas muy altas, será útil rodear los árboles con paja o materiales
vegetales inertes tan pronto se hayan plantado o poco después de hacerlo; lo
anterior es conveniente en terrenos sueltos o arenosos de materia orgánica
escasa, con lo que se obtendrá el beneficio de la fertilización, por lo que este
tratamiento también favorece la formación de las micorrizas lo que ayuda al
desarrollo de los pinos (Departamento de agricultura EE. UU. 1973).
Iglesias et al., (1989) citados por López (1990) señalan que en México se tiene
poca experiencia con los hongos simbiontes; y que se debe dar un mayor impulso
a la investigación sobre micorrizas en campo que es donde existe menos
experiencias y que en donde finalmente se pueden evaluar los resultados.
4.5 Importancia del agua en las plantas
El agua, juega un papel indispensable en diversos procesos fisiológicos de la
planta. Tales como la transpiración, la fotosíntesis y el transporte de minerales
para el crecimiento y desarrollo de las plantas (Aguilera y Martínez, 1986). Sin
embargo se sabe que se puede aumentar la longitud del período de plantación,
plantando en primavera con el apoyo de riego.
13
La plantación puede establecerse cuando el suelo esté libre de heladas, ya que
éstos pueden afectar efectivamente las plantas. Con el apoyo y los cuidados
necesarios en la iniciación del desarrollo de las plantas al finalizar la temporada
normal de lluvias, el sistema radicular de las plantas se encontrará perfectamente
establecida (Moreno, 2002).
En el valle de México, el periodo de lluvias comienza generalmente en el mes de
junio, finalizando en el mes de septiembre. Es por ello que se utiliza el riego para
establecer las plantas en primavera (Moreno, 2002). El agua afecta directa o
indirectamente cualquier proceso vegetal y en gran medida el nivel de actividad
metabólica de las células en las plantas, además de servir a las necesidades
metabólicas de la planta, el agua desempeña muchas otras funciones en el suelo.
Es disolvente y medio de trasporte para los nutrientes de las plantas, fuente de
nitrógeno, moderador de la temperatura del suelo y de la aireación, así como un
agente de disolución de sustancias toxicas de los suelos (Pritchett, 1986).
La cantidad, distribución y variación del agua disponible en el suelo, es tal vez el
factor que merece la mayor consideración para la elección de especies en
cualquier sitio. La calidad del sitio depende únicamente de la cantidad de un
disponible, dentro de lo que atañe a la plantación de especies maderables. Sin
embargo desde el punto de vista de la cantidad de agua requerida, hay una gran
variación entre las especies (Moreno, 2002).
Debe distinguirse entre el contenido físico del agua y el agua disponible, pues
solamente ésta última puede ser aprovechada por los árboles (Toumey y Korstian,
1954). La disponibilidad de agua está controlada por el potencial hídrico, la
distribución de las raíces y la temperatura. El agua queda a disposición de la
planta de dos maneras: la raíz crece hasta ella o la humedad llega hasta la raíz
(Daniel et al., 1982).
Las plantaciones anticipadas se llevan a cabo unos tres meses antes de la
temporada de lluvia y a menudo se les riegue periódicamente durante los primeros
días de establecimiento de crecimiento para poder lograr una tasa satisfactoria de
14
supervivencia. Las plantas son regadas con cantidades que van desde 4 a 8 litros
de agua en el momento de plantar para obtener una buena sobrevivencia con fin
de asegurar que las plantas se adapten al lugar de la plantación es necesario
comprobar la humedad del suelo periódicamente, esto se puede lograr cavando
encima del suelo cerca de la planta (Moreno, 2002).
Con el fin de adelantar el periodo de plantación, se aplica riego para asegurar la
sobrevivencia de la planta, en la plantación de Pinus greggii se aplicaron 10 litros
de agua a la semana, haciendo dos aplicaciones para cada planta (Vera, 2009,
com. Pers.) 1
4.6 Cuidados culturales después de establecer la plantación
Los cuidados culturales son necesarios para crear condiciones favorables para la
supervivencia de las plantas después de la plantación y para estimular un
crecimiento sano y vigoroso hasta que la plantación quede bien establecida.
Algunos casos puede ser necesaria también la poda o la conformación del árbol
(Chapman et al., 1978).
En la mayoría de los sitios de plantación, los cuidados culturales pretenden, sobre
todo, evitar que las plantas sean dominadas por la competencia de la vegetación
de maleza o “malas hierbas”.
La importancia de las malezas esta determinado principalmente por los daños que
ocasionan ya sea de forma directa o indirecta, que estos pueden ser: menor
desarrollo de las plantas, ser hospederos de plagas y agentes patógenos (Vivas,
2002).
El control de malezas es una de las claves para asegurar alta sobrevivencia, buen
crecimiento y homogeneidad de las plantaciones forestales. Para el control de
malezas: existen tres métodos, manual, mecánico y químico, siendo muy
frecuente que se utilicen combinaciones entre ellos.
1 (Dr. José Amando Gil Vera Castillo. Profesor de la División de Ciencias Forestales, Chapingo, México).
15
Si no se controla las especies no deseables los brinzales presentan una serie de
problemas como: respuesta fisiológica, una reducción de un 200% en la tasa de
fotosíntesis anual, respuesta morfológica son: no incrementa el diámetro,
reducción de la longitud del entrenudo, reducción del número de yemas, reducción
del tamaño de las hojas, reducción del área foliar, reducción del área basal (20 –
45%) y reducción del crecimiento en altura en un 60% (Vera, 2009).
La eliminación de la vegetación no deseable, permite tener una respuesta positiva
de los brinzales, es decir, se tienen: altos niveles de supervivencia, mantiene una
elevada tasa de fotosíntesis anual, favorece el establecimiento inicial del brinzal,
promueve el crecimiento inicial, mayor disponibilidad de agua en el suelo (Vera,
2009).
Otros trabajos culturales consisten en el humedecimiento o riego de las plantas en
zonas secas, en las plantaciones de primavera, o plantaciones anticipadas y una
de las sustancias necesarias para el crecimiento de la planta es el agua, sin duda,
la que se utiliza en mayor medida. Sin embargo, menos del 5% de la que penetra
en la planta es retenida en sus tejidos, ya que la mayor parte de ella pasa a la
atmósfera por la transpiración de las hojas. En tiempo cálido, el brinzal producido
en envase puede absorber hasta el doble de su peso de agua en un día (Daniel et
al. (1982); Foucar (1997).
El contenido del agua en los brinzales varía de acuerdo con la especie, pero éste
puede oscilar entre 80 y 90% de su peso fresco, se considera que los brinzales
pueden perder hasta un 20% de su agua, pero por encima de esta cifra el efecto
es irreversible Kramer (1974); Foucar (1997).
4.7 Características de la planta
Las características más citadas son la altura, el diámetro, peso o volumen del
sistema radicular, fibrocidad de la raíz, color del follaje, longitud de la parte
radicular (Pineda y Olivas, 2000).
16
La morfología también sirve como un indicador del estado fisiológico de las
plantas, ya que varias de las características morfológicas, tales como la condición
de la yema, color del follaje u hojas secundarias, se correlacionan con diferentes
estados de desarrollo fisiológico (Pineda y Olivas, 2000).
4.8 Altura
Es la característica morfológica más fácil de determinar en una planta. Tiene poco
valor como indicador único de la calidad de la planta, pero combinado con el
diámetro y la arquitectura del tallo adquiere mayor importancia. Una planta
pequeña tiene poca superficie fotosintética, esto pueden ocasionar que su
crecimiento y adaptabilidad sea lento, mientras que una planta grande tiene
mayores posibilidades de crecer más rápido; sin embargo tiene mayor
transpiración y en condiciones adversas de sitio tiene mayor riesgo de morir
(Cano, 1998) citado por Moreno (2002).
4.9 Diámetro
El diámetro puede reflejar el tamaño del sistema radicular y resistencia de la
planta. Plantas con diámetros grandes resisten las torceduras y toleran el daño
causado por insectos y animales; además la sobrevivencia y productividad en
crecimiento es mayor en plantas con diámetros más grandes (Pineda y Olivas,
2000). Encontraron que hay una fuerte correlación entre los variables diámetro y
supervivencia después de la plantación, estos mismos autores agregan que mayor
grosor inicial del tallo de la planta mejoró en un 17. 5% la producción en volumen
de madera a los 13 años la plantación. Por su parte Mexal y Landis, citado por
Moreno (2002) encontraron que el diámetro está correlacionado con altura de la
planta y con el peso seco total, más de 97% de la variación en el peso seco de
plantas es explicado por la variación en el diámetro.
17
4.10 Descripción botánica y ecología de la especie
4.10.1 Nombres comunes
A esta especie se le conoce con varios nombres comunes: pino prieto en
Coahuila, pino ocote en Hidalgo (Eguiluz, 1978; Farjon et al., 1997). También en
las poblaciones del Norte se le conoce con el nombre de pino garabato o pino
garabatillo y en las poblaciones del Centro como ocote u ocote chino (López,
1990).
4.10.2 Distribución natural
El Pinus greggii es un pino de cono serotino, con una distribución restringida a la
Sierra Madre Oriental del Centro y Norte de México; se le ha reportado por
diferentes autores desde la parte Norte del estado de Puebla, Hidalgo, Querétaro,
San Luis Potosí, Coahuila y Nuevo León, entre los paralelos 20º 00’ a 25º 40’ de
latitud Norte y meridianos 97º 40’ a 101º 20’ de longitud Oeste (Eguiluz, 1978;
Dvorak y Donahue, 1993; Santillán, 1990; Martínez, 1948; Farjon et al., 1997).
El rango de distribución altitudinal varía de acuerdo a los autores, que lo ubican de
1200 a 2700 msnm (Eguiluz, 1978; Dvorak y Donahue, 1993) cubriendo
condiciones subtropicales hasta templado frías en la carretera Zimapán-Jacala,
Hidalgo (Plancarte, 1988). Más específicamente Dvorak (1996) reporta que Pinus
greggii, se distribuye en dos distintas regiones geográficas de México: en los
estados de Coahuila y Nuevo León (24º a 25º de Latitud Norte) en la parte Noreste
del país; y en los estados de Querétaro, Hidalgo, Puebla, San Luis Potosí y
Veracruz (20º a 21º de Latitud Norte) en la región Central del país.
4.11 Especies asociadas
Cuando se asocia Pinus greggii, lo hace con Pinus patula, Pinus teocote, Pinus
cembroides, Pinus arizonica, Pseudotsuga flahaulti y Juniperus sp.,
ocasionalmente lo hace con Pinus pseudostrobus var. apulcensis, Liquidambar
styraciflua, Platanus sp., Cupressus sp. Y Quercus sp. (Eguiluz, 1978; Santillán,
1990; Dvorak, 1996; Perry, 1991). Cuando crece arriba de 3000 metros de altitud
se le ha visto asociado con Pinus ayacahuite var. brachyptera, Pinus rudis y Abies
18
vejari (Perry, 1991). Se le ha encontrado además, con Acacia sp., Arbutus sp.,
Crataegus mexicana, Alnus sp., Juglans sp. y matorrales espinosos subtropicales
(Plancarte, 1988).
4.13 Estatus
Aunque el Pinus greggii no está clasificado en ninguna Norma Oficial Mexicana en
algún grado de amenaza o en peligro de extinción. A través de Cooperativa de
Recursos Genéticos de México y América Central (CAMCORE) considera que sus
poblaciones tienen algún grado de amenaza, razón por la cual se le ha incluido en
programas actuales de preservación genética ex situ con alta prioridad.
4.14 Clima
Sin duda el Pinus greggii debido a su distribución amplia pero, muy discontinua
por la Sierra Madre Oriental presenta diferentes condiciones ambientales, por lo
mismo el clima es muy variable. Eguiluz (1978) menciona que se desarrolla en un
clima subtropical, con precipitación variable de 500 a 2900 milímetros, siendo más
frecuente de 700 a 1500 milímetros anuales. Repartidos de mayo a octubre,
siendo julio y agosto los meses más lluviosos y marzo el más seco. La
temperatura media anual del área, es de 16.8º C, con extremas máximas de 45º C
y mínimas de -9º C. Siendo los meses más cálidos de marzo a junio y los más
fríos en invierno, que es cuando pueden caer 0 a 74 heladas anuales más al Norte
y no más de 20 en el Sur de su área de distribución. Dvorak y Donahue (1993)
mencionan que los sitios de Pinus greggii en el Norte de México son secos con
una precipitación anual de 400 mm a 600 mm. Las heladas son frecuentes de
diciembre a febrero. Las procedencias del Centro de México tienen una
precipitación anual de 700 a 1600 milímetros.
4.15 Suelos
Habita suelos sobre delgados, de textura migajón areno-arcillosa, pedregosos,
café rojizos y calizos, normalmente pobres en materia orgánica; con pH casi
neutro (Eguiluz, 1978). Mientras que Dvorak y Donahue (1993) mencionan que los
suelos de las procedencias del Norte de México son ligeramente alcalinos de pH
19
7.0-8.0; en tanto que el del Centro de México con mayor frecuencia los suelos son
ácidos de pH 4.0 a 5.0.
4.16 Taxonomía
Pinus greggii fue descrito por el Dr. George Engelmann en 1868, denominándola
en honor de Josiah Gregg, súbdito alemán que residió casi 9 años en el Norte de
México, donde hizo importantes colecciones botánicas alrededor de 1844. Es una
especie parecida al Pinus patula, pero se diferencia de éste por sus hojas cortas,
derechas y gruesas, aunque pertenecen al mismo grupo botánico. A Pinus greggii,
Martínez (1948) lo ubica en la sección Serotinos, dentro del grupo Patula;
posteriormente Perry (1991) lo ubica dentro de la subgénero Diploxilon o pinos
duros, sección Serotinae y subsección Patula. Más recientemente según Farjon et
al., (1997) por poseer características más parecidas a los pinos serotinos de
California lo ubica dentro de la subsección Attennuatae.
4.17 Relaciones filogenéticas
Farjon et al., (1997) consignan que Pinus greggii está aparentemente relacionada
con los pinos de cono serotino de California: Pinus attenuata, Pinus muricata y
Pinus radiata.
4. 18 Descripción botánica
Árbol de tronco recto y copa amplia e irregularmente redonda de 10 a 25 metros
de alto y hasta 40 cm de diámetro (Eguiluz, 1978; Martínez, 1948; Perry, 1991).
Farjon et al., (1997) reportan una altura de 20-25 (-35) m y hasta 70-80 cm de
diámetro normal.
Cuando el árbol es maduro, la corteza de la parte inferior del tronco es gruesa,
áspera, de color café grisáceo y dividido por profundas fisuras verticales en largas
placas escamosas. En la parte superior del tronco la corteza es de color café
grisáceo y lisa; los árboles jóvenes tienen la corteza lisa y de color café grisácea
(Eguiluz, 1978; Martínez, 1948; Farjon et al., 1997; Perry, 1991).
20
Las hojas se presentan en grupos de tres, pudiéndose presentar raramente dos y
cuatro, alrededor de 7 a 15 centímetros de largo; de 1-1.2 mm de ancho; delgadas
a medianamente gruesas, anchamente trianguladas, derechas, rectas y rígidas de
color verde claro brillante, bordes aserrados con dientecillos muy cortos, sus
canales resiníferos medios, en número de 2 a 6; presenta estomas en la superficie
dorsal y ventral (Eguiluz, 1978; Martínez, 1948; Farjon, et al., 1997; Perry, 1991).
Ramas ascendentes, delgadas y colocadas irregularmente en el tallo; ramillas
erectas, flexibles de color rojizo, con tinte grisáceo, normalmente cubierta por el
follaje café grisáceo, a veces ceniciento, con la base de las brácteas no
decurrentes (Eguiluz, 1978; Perry, 1991). Con ramas bajas horizontales a
inclinadas. En árboles aislados las ramas son a menudo cercanas al suelo y la
copa es amplia (Perry, 1991). Así mismo Farjon, et al., (1997) mencionan que las
ramas frecuentemente con yemas (principales) multinodales, lisas, con pequeños
levantamientos en las bases de las hojas (de los fascículos)
Las vainas tienen una longitud de 5-14 mm, de color café pálido grisáceo, son
persistentes, pero cuando son viejas ocasionalmente son decíduas (Perry, 1991;
Martínez, 1948).
Los conillos son laterales y sostenidos sobre un pedúnculo delgado, morenos con
anchas escamas provistas de puntas triangulares y extendidas, en grupos de 3 a
6.
Los conos son fuertes y tenazmente persistentes, duros, casi sésiles, oblongos
cónicos, oblicuos, algo encorvados, de color ocre, lustrosos, agrupados por pares
de 3 a 8, rara vez más. Miden de 6 a 12 cm de largo, pudiendo llegar hasta 15 cm;
de 3 a 5 cm de ancho cuando están cerrados y su aspecto es muy parecido al
Pinus patula. Las escamas son duras y fuertes, de 4 a 4.5 cm de largo por 1.5 de
ancho; umbo es ensanchado, deprimido con una pequeña espina débil y quilla
21
transversal bien marcada, apófisis pequeña y aplastada (Eguiluz, 1978; López,
1990; Farjon et al., 1997; Martínez, 1948; Perry, 1991).
Las semillas son de color gris a café-negruzco, miden de 5-7 mm de largo, de 3.0
mm de ancho, 1.9 mm de grueso y de 12.9 mg de peso (Eguiluz, 1978; Martínez,
1948; Muñoz et al., 1986; Farjon et al., 1997; Perry, 1991; López, 1990).
El ala es articulada a la semilla, mide de 15 a 20 mm de largo por 6 a 8 mm de
ancho (Eguiluz, 1978; Farjon et al., 1997) y de 1.9 mg de peso (Muñoz et al.,
1986).
La madera no es muy resinosa, color amarillenta pálida; tiene una densidad
media; se usa localmente para leña, pilotes, madera labrada y para la
construcción, postes para cerca (Eguiluz, 1978, Perry, 1991; Dvorak, 1996).
4.19 Importancia económica
Normalmente Pinus greggii produce poca resina y normalmente no se explota. Se
le ha observado buena adaptación en suelos degradados del Valle de México,
donde se ha utilizado en reforestaciones para recuperar suelos erosionados. Es
una especie ornamental, recomendándose para parques y campos deportivos
abiertos. Actualmente se ha probado en plantaciones forestales fuera de su área
de distribución natural, donde ha demostrado buena adaptación a suelos
degradados, resistencia a plagas, enfermedades y sequías; así como buen
crecimiento durante sus primeros años de establecimiento (González, 1978;
Eguiluz, 1978; Saldívar, 1982; Vargas, 1985).
Esta especie tiene una gran importancia ya que, resultados de ensayos de Pinus
greggii en Argentina, Brasil, Colombia, India, Venezuela, Sudáfrica y Zimbabwe
entre otros indican que esta especie puede tener un potencial considerable para
plantaciones comerciales como alternativa a Pinus taeda, Pinus elliottii y Pinus
patula (Dvorak y Donahue, 1993).
22
4.20 Importancia para la investigación
Por su rusticidad, rápido crecimiento y precocidad en la floración, a Pinus greggii
lo hacen atractivo para realizar programas de mejoramiento genético y el
establecimiento de plantaciones forestales, ya sea con fines comerciales, de
recuperación de suelos, o de protección de cuencas (Eguiluz, 1978; Plancarte,
1988).
4. 21 Características de los suelos del área del experimento
A continuación se describen las características de los suelos que se utilizaron en
cada tratamiento.
4.21.1 Suelo de testigo o de migajón
Los suelos donde se estableció el experimento pertenecen a la serie horno, que se
describe con las siguientes características, son suelos profundos, con estratos
superficiales migajones arenosos o francos, pardo amarillento y un estrato
subyacente de textura migajón arenosa, pardo amarillento y consistencia suelta.
Estos suelos tienen una capacidad de retención de humedad media, son
ligeramente alcalinos y con contenidos medios de materia orgánica, altos
contenidos de sales y mal drenaje. Su uso está limitado fundamentalmente por las
altas concentraciones de sales y sodio en los horizontes periciales y por el suelo
imperfectamente drenado. Los suelos de estas series se encuentran en las partes
planas con pendientes muy ligeras, cercanas a los márgenes de los ríos de la
zona. Estos suelos son profundos con un horizonte “A” pardo amarillento, franco o
migajón arenoso y consistencia blanda o dura seguido de un horizonte “B” pardo
oscuro, franco y consistencia (Cachon et al., 1976).
4. 21.2 Suelo de pino
Los suelos en los bosques de pino son profundos con textura franco – arenosa,
tienen una plasticidad moderada en general, ricos en materia orgánica, favorece la
porosidad y por ende la aireación (Rey, 1975)
La mayor parte de las coníferas tolera mejor los suelos ácidos, en México las
rocas ígneas producen, en condiciones de clima subhúmedo, suelos cuyo pH varía
generalmente entre 5 y 7. El color del suelo, su textura y el contenido de
23
nutrientes presentan variaciones considerables de un lugar a otro; son bastante
frecuentes las tierras rojas, más o menos arcillosas, derivadas de basaltos, en
cambio, las andesitas producen a menudo coloraciones cafés y texturas más
livianas. Los suelos negros o muy oscuros también son frecuentes sobre todo a
más de 3000 m de altitud. Los pinares se desarrollan también en el suelo de
litosoles de corrientes de lava, los pinos crecen muy bien en suelos profundos; sin
embargo, no parecen tolerar deficiencias de drenaje. Los pinares se desarrollen
con frecuencia en suelos deficientes en varios componentes minerales es
probable que las micorrizas juega un papel significativo en la supervivencia y en el
potencial competitivo de estos bosques. Los suelos de los pinares se han
clasificado comúnmente como podsólicos cafés y rojos (Rey, 1975).
4. 21. 3 Suelo de oyamel
Los suelos de los bosques de áreas de oyamel sólo se han estudiado con cierto
detalle. Son suelos típicamente profundos y entrenados, pero húmedos durante
todo el año, presentan un perfil ABC, predominando coloraciones café oscuras,
textura de migajón arenoso y francas y estructura en bloques, los valores del pH
indica una reacción ligeramente ácida pues varía entre 5 y 7. La cantidad de
materia orgánica es abundante encontrándose hasta 35. 4% en el horizonte A. la
relación C/N varía alrededor de 20 y la capacidad de intercambio de canciones es
de 10 a 30 en la mayoría. Es suelo del grupo podsolico (López, 1993).
Estos suelos tienen una capacidad de retención de humedad, por lo regular con un
pH de 6.43 y con contenidos de materia orgánica de 8.01, conductividad eléctrica
de 0.13 mmhos cm-1, capacidad de intercambio cationico de 29.09 me 100g-1, por
lo regular presenta 0.40 % de nitrógeno total, 3.38 ppm de fosforo (P), 0.82 me
100 g-1 de potasio (K), y de calcio 11.10 me 100 g-1, y de magnesio de 1.62 me
100 g-1. Estos son los valores de las características primordiales del suelo de un
bosque de oyamel de una distribución natural de esta especie (López, 1993).
24
MATERIALES Y MÉTODOS
5.1 Ubicación del experimento
El trabajo de campo se hizo en los terrenos de la Universidad Autónoma
Chapingo, específicamente al oeste de la División de Ciencias Forestales,
ubicaba con las coordenadas geográficas de 19° 29´ 37” de latitud N y 98° 53´ 37”
de longitud W; y se encuentra a 2,240 msnm de altitud de 15.9°C de temperatura
media anual y precipitación pluvial promedio anual de 686.0 mm (INEGI, 1984)
citado por Moreno (2002).
5.2 Topografía
La zona de estudio presenta un terreno plano sin ondulaciones. Forma parte del
vaso del ex-lago de Texcoco, por lo que son terrenos que se han venido utilizando
generalmente en la agricultura (Cachón et al., 1976).
5.3 Características climatológicas del lugar de la plantación
5.3.1. Clima
Según la clasificación climática de Köppen, modificada por García (1978), el clima
de la zona pertenece al tipo C (wo) (w) b (i’), que significa que es: un clima
templado sub húmedo, con presencia de lluvias en verano y baja oscilación
térmica.
De acuerdo a los datos obtenidos de la estación meteorológica Chapingo, las
lluvias en esta zona se presentan a principios del mes de junio y terminan
aproximadamente en el mes de septiembre presentándose algunas otras lluvias
en otoño. Asimismo, de acuerdo a los datos de los últimos 10 años de (2000-
2009) en Chapingo la cantidad de precipitación pluvial que se presenta en el año
oscila entre 416 y 928 mm con un promedio anual de 635 mm (UACh - estación
meteorológica, 2010), cuadro 1.
25
Cuadro 1. Precipitación media mensual (mm), en los últimos 10 años (2000 – 2009) en Chapingo México.
Mes / año 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009
Ene. 0.0 1.3 7.8 0.0 13.6 2.6 1.6 9.5 0.3 10.9 3.6
Feb. 2.3 4.8 5.7 0.0 0.0 7.3 0.1 33.8 2.5 2.6 2.3
Mar. 25.8 5.1 3.0 21.5 28.3 1.4 13.2 38.6 8.2 0.0 10.0
Abr. 11.6 43.8 74.8 27.7 51.9 27.8 45.1 71.0 62.8 3.9 8.1
May. 76.5 58.0 36.0 17.9 56.7 40.8 93.8 51.5 25.3 80.3 53.8
Jun. 146.7 86.9 54.1 124.9 222.9 34.6 76.8 182.6 93.0 92.6 100.1
Jul. 82.2 122.2 101.0 106.7 123.8 178.5 88.2 192.3 91.4 132.2 111.9
Agos. 162.3 76.7 111.2 172.0 134.9 127.5 103.5 168.8 80.1 160.7 160.1
Sept. 105.3 120.8 105.3 120.8 110.5 42.9 73.2 143.0 29.6 154 112.2
Oct. 32.2 28.7 82.7 44.2 45.0 61.0 41.2 34.4 23.6 62.7 74.9
Nov. 7.8 8.6 7.9 11.7 23.6 37.0 35.1 2.8 0.0 3.4 3.1
Dic. 11.8 5.8 5.9 1.5 0.0 0.7 0.3 0.3 0.0 4.1 1.4
suma 664.5 562.7 595.4 648.9 811.2 562.1 572.1 928.6 416.8 707.4 635.6
Fuente: (Universidad Autónoma Chapingo – Estación meteorológica, 2010).
Figura 1. Precipitación media mensual (mm) durante los últimos 10 años (2000 - 2009), en
Chapingo, México.
Las temperaturas medias mensuales que se presentan en la zona, de acuerdo a
los datos de los últimos 10 años, son de entre 15.52 ºC a 21.24 ºC, dando como
un promedio anual de 18.27 ºC (cuadro 2), y los datos más relevantes para el
experimentos son las temperaturas mínimas. Estas se muestran en el cuadro 3,
alcanzando la media mínima en los meses de enero con 2.42 ºC.
26
Cuadro 2. Temperaturas medias (ºC) promedio mensuales para los últimos 10 años (2000
– 2009) en Chapingo, México.
M / año 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009
Ene. 15.0 15.7 15.9 14.4 14.7 15.6 15.8 16.6 15.6 15.9 15.52
Feb. 17.1 17.1 16.7 18.4 17.2 17.6 18.1 17.2 17.8 17.7 17.49
Mar. 19.3 19.2 20.5 19.8 18.8 19.9 19.7 19.2 19.3 0.00 17.57
Abr. 21.2 20.9 20.9 21.9 20.1 22.4 21.7 19.4 21.1 22.6 21.22
May. 20.6 20.4 21.7 23.0 20.2 21.7 20.8 21.0 21.6 21.4 21.24
Jun. 18.7 19.4 20.7 19.7 19.0 22.4 19.7 20.3 19.2 20.7 19.98
Jul. 19.0 18.9 18.0 19.0 18.7 19.8 19.2 19.4 18.7 20.2 19.09
Agos. 17.9 19.4 19.0 18.6 19.2 18.9 18.9 19.0 19.4 19.5 18.98
Sept. 18.2 18.3 18.4 18.8 18.4 18.4 19.2 17.9 18.4 18.9 18.49
Oct. 17.7 17.4 18.6 18.2 18.7 17.9 18.6 17.0 17.5 19.4 18.10
Nov. 18.0 16.1 15.8 17.5 17.4 11.0 16.1 16.6 16.0 16.3 16.08
Dic. 14.4 15.6 15.4 14.4 15.1 15.8 15.5 16.7 15.9 16.4 15.52
Fuente: (Universidad Autónoma Chapingo – Estación meteorológica, 2010).
Cuadro 3. Temperaturas mínimas (ºC) promedio mensuales para los últimos 10 años (2000
– 2009) en Chapingo, México.
mes/año 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009
Ene. 0 2.7 2.6 2.6 4.7 3.0 1.6 5.1 1.9 0 2.42
Feb. 2.3 3.8 4.3 3.4 3.4 5.7 4.0 `5.1 2.9 2.2 3.56
Mar. 5.1 4.1 5.8 6.0 6.9 7.5 4.7 5.7 4.9 0.0 5.07
Abr. 7.2 7.5 7.4 10 8.3 9.7 7.1 8.0 8.0 7.5 8.07
May. 9.6 8.5 9.0 11 10.3 9.5 9.0 9.6 9.3 0.0 8.58
Jun. 11.2 11.2 10.7 12.6 11.4 12.6 9.0 10.3 9.7 10.1 10.88
Jul. 9.0 10.1 11.3 10.9 10.1 11.4 9.7 10.1 9.9 10 10.25
Agos. 10.2 9.6 9.6 10.6 11 11.6 10.1 9.8 9.3 9.9 10.17
Sept. 13.8 9.4 11.1 12.2 11.2 10.1 11 9.4 10.1 11.5 10.98
Oct. 7.1 6.3 9.1 9.4 10 8.8 10.2 5.8 6.7 8.0 8.14
Nov. 6.3 3.2 4.7 6 4.3 4.3 5.1 2.7 2.0 4.0 4.26
Dic. 1.3 3.5 3.9 0.7 3.1 3.4 2.8 2.5 0.2 5.3 2.67 Fuente: (Universidad Autónoma Chapingo – Estación meteorológica, 2010).
27
Figura 2. Temperaturas (ºC) mínimas mensuales a la intemperie en los últimos 10 años
(2000 – 2009) en Chapingo, México.
5.4 Preparación del terreno de la plantación
5.4.1 Desmalezado.
Después de localizar el área, se realizó un desmalezado de forma manual,
utilizando un machete, en una superficie de 12 m por 12 m, aproximadamente con
la finalidad de tener 2 m más como protección para los brinzales.
5.4.2 Preparación del sitio.
Se realizó este trabajo de manera mecánica, ya que el terreno facilita el uso de
este implemento. Se barbechó utilizando un tractor agrícola (foto 1) con un
implemento para el rastreo de tres dientes tipo ripper (foto 2) con la finalidad de
roturar el suelo, debido a que se encontraba muy compactado por las actividades
de los años anteriores, el terreno quedó en mejores condiciones para establecer
las plantas de Pinus greggi, es decir el barbecho se realiza con la finalidad de
facilitar el desarrollo de las raíces de las plantas en el terreno y proporcionarles las
condiciones adecuadas de aireación y remoción de nutrientes.
28
Fotografía 1. Tractor John Deere 6425 con 110 caballos de fuerza (INIFAP, CEVAMEX).
Fotografía 2. Maquinaria que se utiliza para el arrastre (INIFAP, CEVAMEX).
Este implemento de arrastre se describe de la siguiente manera: Los dientes
pueden ser rectos o curvados. El diente recto tiene una buena penetración, eleva
poca tierra del subsuelo a la capa arable y voltea muy poco la superficie del suelo.
29
El diente curvado requiere menos esfuerzo de tracción que el diente recto y voltea
la superficie cuando el suelo tiene una consistencia dura.
En el extremo de los dientes se colocan rejas simples o con alerones. Estas
aumentan el volumen del suelo removido e incrementan el esfuerzo de tracción
necesario. La elección de uno u otro modelo debe hacerse en función de la
densidad de obstáculos encontrados. Por ser el trabajo muy costoso en energía y
tiempo, conviene analizar el interés de la operación y elegir adecuadamente la
profundidad de trabajo.
Su utilización es aconsejable en suelos duros y friables, si bien, con una bola
sujeta con cadena en la parte inferior del diente, se pueden usar en suelos
plásticos para drenaje del terreno. Un subsolador de tres brazos necesita una
potencia de unos 120 C.V. y tiene un rendimiento próximo a 0’75 ha/h.
5.4.3. Material vegetal
La semilla era procedente de Jacala Hidalgo, la cual se encuentra a una altura
promedio de 1300 msnm (Cuatepotso, 2005) por medio del proyecto de Acuerdo
Específico de colaboración para la producción de planta de la CONAFOR en el
cual participó la Universidad Autónoma Chapingo a cargo directo de la División de
Ciencias Forestales en su vivero.
La germinación fue a través de siembra directa en charolas de 50 cavidades y un
volumen de 110 mL con una proporción del sustrato del 25% de Vermiculita, 25%
de Agrolita, 26% Osmocote y 24% de Pigtmos; la siembra se llevó a cabo en las
siguientes fechas del 2 al 18 de Febrero del 2008.
En el mes de Febrero del 2009 se eligieron 90 individuos con las mismas
características: una altura de 35 cm y una buena coloración del follaje para ser
30
candidatos a la plantación y se trajo en charolas como se muestra en la foto 3.
(Vergara 2009, com. Pers.)2
Fotografía 3. Pinus greggi, que se utilizaron para el experimento
5.4.4. Trazado de líneas
Para esta actividad se utilizó un longímetro de 30 m para trazar las distancias
para cada bloque (2 metros) y distancia entre cada planta (1 metro). Los bloques
de cada experimento fueron a cada 5 m aproximadamente.
5.4.5. Apertura de cepas
Después del trazado de líneas se realizó de forma manual utilizando un pala
cucharuda, con una dimensión de 20 cm de profundidad, 30 cm ancho y con un
espaciamiento de un metro entre plantas y dos metros entre cada bloque (foto 4).
2 (Ing. Juan Ruperto Vergara González Encargado del vivero forestal de la División de ciencias Forestales).
31
Fotografía 4. Establecimiento de las cepas de 1 m x 1 m en cada unidad experimental
5.4.6 Asignación de tratamientos
El experimento consistió en establecer una plantación de Pinus greggii en tres
diferentes tipos de suelos, estos fueron traídos de la Estación Forestal
Experimental Zoquiapan (EFEZ). En total se tuvo 81 cepas distribuidos en bloques
de 9 cepas, con tres repeticiones en cada uno de los suelos (tres bloques de suelo
de pino, tres bloques de suelo de oyamel y tres bloques de suelo de testigo).
Ubicación de los suelos colectados en el área de la (EFEZ):
a) Suelo de bosque de pino. Este sustrato se extrajo de un área poblada de
árboles de Pinus de hartweggi de la EFEZ con orientación oeste y con una
pendiente 50 %, encontrándose en 3280 msnm con latitud 534586 y
longitud 2132833 en UTM.
b) Suelo de bosque de Abies religiosa sustrato que se extrajo de un área
poblada de oyamel (Abies religiosa) en la EFEZ con orientación norte y
pendiente del 60 % y altitud 3320 msnm, latitud 534722 y longitud 2132919
UTM.
32
c) El suelo de la región o testigo. se utilizo el suelo presente del lugar para el
establecimiento de la plantación.
En los tres diferentes tipos de suelos se tomó la parte superficial del suelo,
aproximadamente los primeros 20 cm de profundidad, se asume que éstos han
sufrido cambios en sus propiedades químicas y físicos lo que beneficia el
crecimiento de las plantas.
5.4.7 Diseño experimental
Se utilizó un diseño experimental de bloques al azar con tres repeticiones, los
tratamientos considerados fueron definidos en función a los tipos de suelo. Las
unidades experimentales se establecieron siendo tres tratamientos (dos sustratos
y el testigo), nueve bloques con 9 brinzales en cada uno de los sitios, cuales se
plantaron a 1.0 x 1.0 m, teniendo un total de 81 brinzales que fueron estudiados en
una superficie de 100 m2 aproximadamente como se muestra en la siguiente
figura 3.
Figura 3. Distribución de las unidades experimentales y los brinzales.
33
Donde:
I, II y III son los bloques
1 - 9 es el número de las unidades experimentales
A – Tratamiento A (testigo o suelo de la región)
B - Tratamiento B (suelo de pino)
C - Tratamiento C (suelo de oyamel)
En la siguiente figura (4) se muestra la distribución de los brinzales y las distancias
entre cada planta y entre cada bloque.
Figura 4. Distribución de los brinzales en el sitio de plantación.
5.4.8 Análisis de los datos
Los datos que se tomaron fueron la altura, crecimiento relativo y el diámetro de los
brinzales durante 15 meses, analizándolos en dos fases.
Los datos obtenidos fueron sometidos a un análisis de varianza bajo un diseño
experimental de bloques al azar al fin de determinar el efecto que tiene los tipos de
suelo para el crecimiento de los brinzales de Pinus greggii.
34
El modelo estadístico utilizado es el siguiente (Infante, 2008):
Yij = µ + זi + βj + εij; i = 1,…,b, i = 1,…, t.
Donde las componentes de la ecuación representan:
Yij = respuesta al j-ésimo bloque y al i-ésimo nivel del factor tipo de suelo.
µ= media general.
.i = efecto del i-ésimo nivel del factor tipo de sueloז
βj = efecto del j-ésimo bloque.
εij = error en el j-ésimo bloque y el i-ésimo nivel de factor tipo de suelo.
Las variables distribucionales pueden resumirse a través de las variables
aleatorias εij escribiendo.
εij ~ NI(O, σ2)
A todas las variables se les realizó un análisis de varianza con el programa
Statistical Analysis System (SAS, 1998) las variables con diferencia significativa (p
≤ 0.05) entre tratamientos son analizados con la prueba Tukey para obtener las
medias y el mejor tratamiento en cada una de las variables.
Cabe aclarar que las variables fueron evaluadas con un análisis de medidas
repetidas, debido a que en todos los casos se obtuvieron una serie de mediciones
sobre tiempo o espacio en cada unidad experimental.
5.4.9 Irrigación de cepas
Se humedeció con 19 L de agua en cada una de las cepas antes del llenado, con
el fin de evitar el estrés en los brinzales al momento del trasplante, como se
muestra en la foto 5.
35
Fotografía 5. Humedeciendo las cepas un día antes de la plantación.
5.4.10 Llenado de cepas
En las cepas realizadas se llevó a cabo la transferencia de suelo en las dos
terceras partes, se rellenó con el suelo de uno de los tratamientos (foto 6), una
capa de aproximadamente de 5 cm de grosor del suelo que se encuentra en el
lugar, la transferencia de suelo es con la finalidad de proporcionarles las
micorrizas que se encuentran en cada tipo de suelo para facilitar con mayor
porcentaje la sobrevivencia de la planta.
Fotografía 6. Llenado de las cepas con suelo de los tratamientos utilizados
5.4.11 Establecimiento de la plantación
El 6 de Abril de 2009 se llevó a cabo la plantación, este es conocido como una
“plantación anticipada”, con la finalidad de prevenir las heladas y sobre todo que
36
las plantas estén bien adaptadas para el inicio de la temporada de lluvias. Al
momento del trasplante se retiró cuidadosamente las plántulas de las charolas
para evitar que el cepellón se destruyera, además se cortó una pequeña parte de
las raíces en la parte inferior con una navaja (foto 7), con la finalidad de eliminar
raíces dobladas y evitar que se muera la planta.
Fotografía 7. Cortando la parte de las raíces dobladas de los brinzales.
Después de cortar una parte de las raíces, este se colocó en el centro de las
cepas, (foto 8) y apisonando el suelo para no tener bolsas de aire que pudieran
afectar al desarrollo de la raíz, para finalmente dejar establecida la plantación de
81 brinzales.
Fotografía 8. Trasplantando los brinzales de Pinus greggii en las cepas.
37
Después de la plantación se realizó un riego con 5 L de agua en cada una de las
cepas, (foto 9) para evitar el estrés de las plántulas y asegurar que se sobrevivan
los brinzales. Esta cantidad de agua es con base a los resultados obtenidos por
Moreno (2002), en una plantación de Quercus sp.
Fotografía 9. Riego después del trasplante de los brinzales.
Cuatro días después del establecimiento de los brinzales se aplicó otro riego y de
paso observar si las plantas logren sobrevivir en cada uno de los bloques de
tratamiento. Una semana después de establecer la plantación se observan en la
foto 10.
Fotografía 10. Muestra las plántulas una semana después de establecimiento.
38
5.4.12 Crecimiento relativo
Es el crecimiento de la yema principal de los brinzales, medida que es tomada
cada semana con una cinta métrica, esto fue cuando los brinzales aún no
presentaban ramas, después de que se les presentó la medida se tomó de la rama
al punto final del crecimiento.
5.5 Variables evaluadas
La toma de los datos se realizó en dos etapas: la primera fase son los primeros
tres meses donde se evalúa la sobrevivencia, la altura total de la planta (cm) y el
crecimiento relativo o crecimiento 2009 (cm), la primera solo consiste en observar
cómo se van desarrollando las plantas en cada uno de los sitios, y contabilizar las
que se mueren, y en las otras actividades se utilizan una cinta métrica con
unidades mínimas de milímetro y formato para la captura de los datos, las
medidas se tomaron cada semana durante los tres meses teniendo un total de 12
medidas que se analizaron en SAS (Statistical Analysis System, 2002).
La primera de las mediciones se realiza día después de la plantación, toma de las
medidas iniciales de la altura de la planta fotografía 11 (derecha) y la altura de la
yema apical fotografía 11 (izquierdo), a partir de ese momento el experimento se
evaluó cada semana tomando en cuenta el crecimiento total de la planta y el
crecimiento de la yema principal de todas las plantas.
39
Fotografía 11. Izquierda se toma la medida del crecimiento total del brinzal. Y foto de la derecha la
medida del crecimiento relativo del brinzal.
Debido que los brinzales se establecieron en temporada de secas, libre de
heladas y con el objetivo de realizar una plantación anticipada, se utilizó riego para
que las plantas sobrevivieran, esta actividad fue hecha en dos ocasiones a la
semana en los días martes y viernes con la cantidad de 5 litros por día para cada
individuo, dando un total de 10 litros a la semana en los primeros tres meses de
establecimiento de las plántulas. La cantidad es debido al resultado obtenido por
Moreno (2002).
Estas son las variables y las actividades que se realizaron los primeros tres meses
de establecimiento de los brinzales. Ya contando con la sobrevivencia de la
mayoría de los brinzales, se procede a la segunda etapa comenzando en el mes
de agosto de 2009. Los datos tomados, en este caso son: sobrevivencia, altura y
diámetro. La variable de altura total (cm) y el diámetro (mm) para conocer el
crecimiento de los brinzales es por ello que, para la altura se utiliza una cinta
métrica y para el diámetro (mm) un Vernier esta medida se realizó a los cinco cm
del suelo y la supervivencia de los brinzales, se dará en porcentaje (%).
40
Las mediciones de las variables se realizaban a mediados de cada mes,
empezando en el mes de agosto del 2009 hasta el mes de septiembre del 2010,
teniendo al final doce datos de cada uno de las plantas establecidas.
La altura se tomó desde el nivel del sustrato hasta la yema apical, utilizando una
cinta métrica graduada con aproximación de milímetros como se muestra en la
fotografía 12.
Fotografía 12. Medición de altura en (mm) de los brinzales con una cinta métrica.
La variable diámetro se realizó a 5 cm del ras del suelo, utilizando un Vernier con
aproximación a centésimas de milímetros como se muestra en la siguiente
fotografía 13.
41
Fotografía 13. Mediciones del variable diámetro con Bernier a los 5 cm del suelo.
5.6 Cuidado y mantenimiento de los brinzales
Para el mes de agosto de 2009, fue necesario limpiar el área de plantación de la
vegetación existente a fin de eliminar la competencia que impidiera el crecimiento
adecuado de las plantas, ya que se consideró que sería un factor que influiría en
el desarrollo de las plantas y notablemente en los resultados. El control de las
hierbas no deseables se realizó utilizando machete, azadón tratando de quitar
todas las malezas y mantener limpio el sitio como se muestra en la foto 14.
Fotografía 14. Muestra el cuidado de las plantas, es decir mantener limpia la parcela.
42
En el mes de diciembre de 2009 se llevó a cabo una escarda alrededor de cada
una de las plantas con el fin de remover el suelo superficial, esta actividad se
realizó con azadón, debido a que el suelo por las características que presentan los
suelos de Chapingo (suelos de arrastre), tienden a abrirse por falta de humedad
(foto. 15 y 16) provocando que las raíces se dañen, es por ello que esta actividad
se efectúa con cuidado para no lastimar el tallo de las plantas de los pinos.
Fotografía 15. Por falta de humedad, el suelo muy arcilloso se agrieta, rompiendo las raíces
Fotografía 16. Se realizó escarda a cada planta para evitar que se dañe las raíces de las plantas
por el agrietamiento del suelo.
43
Aunado al daño de las raíces, se provocó que las plantas tuvieran hijuelos (foto
17), por lo cual tuvo que eliminarse con una tijera podadora, para que los
nutrientes se utilizaran para el crecimiento de la planta, esta actividad se realizó en
diciembre de 2009.
Fotografía 17. Eliminaciones de ramas o hijuelos.
Otra de las actividades que se tenía contemplado era el riego cuando las
condiciones no son las adecuadas, es decir, en épocas de sequía por el mes de
Febrero – Abril, debido a que en esa fecha fue más lluvioso que en los años
posteriores, permitiendo un favorable crecimiento de los pinos. Por lo cual esta
actividad se canceló.
Para el mes de septiembre de 2010 se realizó un chaponeo del área de la
plantación, debido a que las ”malas hierbas“ crecieron bastante, impidiendo el
crecimiento de los brinzales de pinos como se muestra en la foto 18.
44
Fotografía 18. Eliminando las hierbas en la plantación con machete y azadón en la primera semana
de septiembre de 2010.
A la primera semana de septiembre se tomaron los últimos datos de crecimiento
en altura y diámetros de los brinzales como se muestra en las siguientes
fotografías (19 Y 20), mostrando las alturas de los brinzales en cada sustrato.
Fotografía 19. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de pino.
Fotografía 20. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de oyamel y testigo.
45
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
6.1 Resultados a los tres meses de establecido el estudio
Supervivencia, en la figura 5, se presenta información con respecto a la
supervivencia de los brinzales en cada uno de los suelos utilizados en el estudio,
y como se puede observar en el suelo del lugar y suelo de pino, se mantuvieron
vivos todos los brinzales establecidos y en el suelo de oyamel se murieron 4
quedando solo el 85 %.
Figura 5. Porcentaje de los brinzales que sobrevivieron en los primeros tres meses de plantados.
Cubas (2007), menciona que las micorrizas son la asociación simbiótica de hongo
del suelo con las raíces de una planta. El hongo proporciona minerales,
especialmente fósforo, a la planta y a veces también fijando nitrógeno. La relación
es beneficiosa para la planta como demuestran algunos experimentos en los que
las plantas con micorrizas crecen más que si carecen de ellas. Probablemente por
esta relación, los brinzales de Pinus greggii se adaptaron muy bien en los dos
tratamientos, en el suelo de pino y el suelo de la región, este último, quizá por el
46
arrastre de varios años de suelo de la región, se acumularon micorrizas que son
de gran importancia para el crecimiento de los brinzales.
6.1.2 Crecimiento en altura total y crecimiento relativo
En el cuadro 4 se muestra una síntesis de los resultados del análisis de varianza,
obtenidos para las variables altura total (cm) y crecimiento relativo de la yema
principal (cm), medidos semanalmente durante los primeros meses. Como se
puede observar a la semana 2, la variable altura total es menor a 0.05, significa
que existe una diferencia en crecimiento de altura para cada uno de los sitios,
dando mejor crecimiento en el suelo de pino. También para el crecimiento relativo
se encontraron diferencia significativa resultando como el mejor suelo el de pino.
En la semana 3 no hay diferencia significativa en crecimiento de altura total y
crecimiento de 2009 en los 3 tratamientos, ya que el valor calculado es mayor al α
utilizado (0.05), de igual forma se puede decir que en los diferentes suelos el
crecimiento fue similar para esta semana. Para la semana 4 existe una diferencia
significativa para ambas variables, para la altura total el crecimiento fue mayor en
el testigo/suelo de la región, y para el crecimiento relativo fue mayor en el suelo de
pino.
En la semana 5 hubo diferencia significativa para las dos variables, siendo mejor
el suelo de la región o el testigo. Para la semana 6 existen diferencias
significativas para las dos variables mostrando un mayor crecimiento en el suelo
de testigo o suelo de la región. Semana 7 existe una diferencia significativa para la
variable altura total, siendo mejor en el suelo de la región, también para la variable
crecimiento relativo existe diferencia significativa siendo mejor el suelo de la región
o testigo.
Semana 8 y 9 para las variables: altura total y crecimiento relativo, existe una
diferencia significativa, habiendo un mayor crecimiento en el suelo de pino.
Semana 10 para la variable altura total, no existe diferencia significativa, ya que el
valor calculado es de (0.094) este es mayor al valor utilizado (0.05), en cuanto
para la variable crecimiento relativo existe diferencia significativa siendo mejor el
47
suelo de la región. Semana 11 no existe diferencia significativa para los dos
variables, ya que ambos valores calculados fueron mayor al utilizado, también se
puede decir que el crecimiento de los brinzales fueron similares para todos los
tratamientos. Semana 12 existe diferencia significativa para la variable altura total,
siendo mejor el suelo de pino, y para el crecimiento relativo no existe diferencia
significativa, indicando que el crecimiento de los brinzales fueron similares en los
tres tratamientos.
Cuadro 4. Resultados de análisis de varianza para las variables altura total (cm) y crecimiento
relativo (cm).
semanas Variable Grados de Libertad
Suma de cuadrados
Media de cuadrados F Pr > F
1
Altura Total 2 0 0 - -
Crec. 2009 2 0 0 - -
2
Altura Total 2 2.083 1.040 4.32 0.0166
Crec. 2009 2 2.463 1.231 5.33 0.0068
3
Altura Total 2 0.030 0.015 0.06 0.9377
Crec. 2009 2 0.698 0.349 1.02 0.3659
4
Altura Total 2 11.357 5.679 12.29 <.0001
Crec. 2009 2 4.225 2.112 3.64 0.031
5
Altura Total 2 11.053 5.526 16.04 <,0001
Crec. 2009 2 7.343 3.672 10.53 <,0001
6
Altura Total 2 53.679 26.839 37.38 <,0001
Crec. 2009 2 16.875 8.437 23.43 <,0001
7
Altura Total 2 53.679 26.839 37.38 <,0001
Crec. 2009 2 6.990 3.495 9.62 0.0002
8
Altura Total 2 6.625 3.312 10.14 0.0001
Crec. 2009 2 8.108 4.054 10.97 <,0001
9
Altura Total 2 6.879 3.440 6.58 0.0023
Crec. 2009 2 5.738 2.869 5.23 0.0075
10
Altura Total 2 2.202 1.101 2.44 0.0937
Crec. 2009 2 3.108 1.554 3.35 0.0403
11
Altura Total 2 0.314 0.157 0.20 0.8223
Crec. 2009 2 0.779 0.389 0.77 0.4669
12
Altura Total 2 12.655 6.328 7.45 0.0011
Crec. 2009 2 2.467 1.233 2.41 0.0970
48
En el cuadro 5 se muestra los valores de la prueba Tukey de la variable altura
relativo cm, indicando que las medias con la misma letra (A, B, C) no son
significativamente diferentes, N es el número de los brinzales que se analizaron y
tratamiento son los tipos de suelo que se utilizaron siendo: 1 tratamiento A
(testigo/suelo de la región), 2 tratamiento B (suelo de pino) y 3 tratamiento C
(suelo de oyamel).
Se puede observar que en la semana 1 no hubo crecimiento, mientras que en la
semana 2 el crecimiento total de los suelos de la región y el suelo de pino fue casi
igual, tanto que el suelo de oyamel tuvo un crecimiento menor y en la tercera
semana el crecimiento total fue el mismo en los tres tipos de suelo. En el mismo
cuadro se señala que en las semanas 4, 5 y 6 el tratamiento con mayor
crecimiento total fue en el suelo de la región y el que le sigue es el suelo de pino,
también cabe señalar que en la semana 6 en él se registra mayor crecimiento total
en el suelo de la región.
En la semana 7 no tuvieron crecimiento total, ninguno de los tratamientos, en las
semanas 8 y 9 el suelo de pino sobresalta al tener un crecimiento total un poco
mejor que el suelo de la región y el suelo de oyamel, por otra parte cabe
mencionar que en la semana 9 el suelo de oyamel registra el mayor crecimiento
total durante la lectura de estas 12 semanas. Por último en las semanas 10 y 11
los crecimientos totales son muy similares en los suelos de la región y suelo de
pino, mientras que el suelo de oyamel permanece muy debajo de los otros dos
tratamientos y en la última semana el suelo de pino registra su mayor valor de
crecimiento total en todas las lecturas de las 12 semanas.
49
Cuadro 5. Resultados de la prueba Tukey para la variable altura relativa de los brinzales de Pinus
Semana Prueba Tukey Media N Tratamiento
1
A 0.00 27 1
A 0.00 27 2
A 0.00 27 3
2
A 0.50 27 2
BA 0.25 27 1
B 0.07 27 3
3
A 0.38 27 1
A 0.31 27 2
A 0.15 23 3
4
A 0.80 27 1
BA 0.40 27 2
B 0.23 23 3
5
A 0.77 27 1
A 0.48 27 2
B 0.02 23 3
6
A 1.22 27 1
A 1.00 27 2
B 0.10 23 3
7
A 0.81 27 1
BA 0.44 27 2
B 0.06 23 3
8
A 1.09 27 1
B 0.67 27 2
B 0.27 23 3
9
A 1.01 27 1
A 1.00 27 2
B 0.41 23 3
10
A 0.83 27 1
BA 0.77 27 2
A 0.36 23 3
11
A 0.61 27 1
A 0.55 27 2
A 0.36 23 3
12
A 0.75 27 1
A 0.64 27 2
A 0.32 23 3
50
Cuadro 6. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de crecimiento en cada tratamiento.
Semanas
Tratamiento A (Testigo/suelo de la región) cm
Tratamiento B (suelo de pino) cm
Tratamiento C (suelo de oyamel) cm
1 0.00 0.00 0.00
2 0.33 0.48 0.09
3 0.20 0.24 0.19
4 1.05 0.51 0.24
5 0.93 0.59 0.02
6 2.19 1.31 0.11
7 0.00 0.00 0.00
8 0.66 1.02 0.27
9 0.98 1.02 0.41
10 0.78 0.74 0.37
11 0.74 0.70 0.37
12 0.93 1.48 0.33
En la figura 6 se muestra el crecimiento de los brinzales en los primeros tres
meses de haber establecido y como se puede observar en el suelo de la región y
el de pino, fueron donde crecieron más rápidamente y en el suelo de oyamel los
brinzales no crecieron como los anteriores.
51
Figura 6. Muestra el crecimiento en altura (cm) de las plantas en cada semana durante los
primeros tres meses.
En el cuadro 7, se muestra los valores obtenidos de la prueba Tukey de la variable
de crecimiento 2009 o crecimiento relativo, y como se puede observar en este
cuadro, en la semana 1 no tuvieron crecimiento relativo los tres tratamientos.
Mientras que en la semana 2 el tratamiento que tuvo mayor crecimiento fue el
suelo de pino, en las semanas 3, 4 y 5 el tratamiento con mayor crecimiento
relativo fue el suelo de la región, y el suelo de pino es el que sigue y con menor
crecimiento relativo es el suelo de oyamel. En la semana 6 se registra el mayor
crecimiento en el suelo de la región y de pino, por otra parte el suelo de oyamel
tiene un crecimiento mucho menor al suelo de la región y de pino, en la semana 8
el suelo de pino registra mayor crecimiento relativo en todas las mediciones que
se tomaron seguidos por el suelo de la región y por último el de oyamel. En la
semana 9 el suelo de la región y de pino tienen el mayor crecimiento relativo y el
suelo de oyamel registra su mayor crecimiento en toda la toma de mediciones
anteriores. En las semanas 10, 11 y 12 el suelo de la región vuelve a tener el
mayor crecimiento de los tres tratamientos seguido por el suelo de pino y por
último es de oyamel.
52
Cuadro 7. Resultados de la prueba Tukey para la variable altura total de los brinzales de Pinus greggii.
Semana Prueba Tukey Media N Tratamiento
1
A 0.00 27 1
A 0.00 27 2
A 0.00 27 3
2
A 0.48 27 2
BA 0.33 27 1
B 0.09 27 3
3
A 0.24 27 2
A 0.20 27 1
A 0.19 23 3
4
A 1.05 27 1
B 0.50 27 2
B 0.10 23 3
5
A 0.92 27 1
A 0.58 27 2
B 0.00 23 3
6
A 2.18 27 1
B 1.31 27 2
C 0.10 23 3
7
A 1.22 27 1
A 1.00 27 2
A 0.10 23 3
8
A 0.00 27 1
BA 0.00 27 2
A 0.00 23 3
9
A 1.01 27 1
A 0.66 27 2
B 0.28 23 3
10
A 1.01 27 1
A 0.98 27 2
A 0.34 23 3
11
A 0.74 27 1
A 0.70 27 2
A 0.58 23 3
12
A 1.48 27 1
BA 0.92 27 2
A 0.47 23 3
53
Cuadro 8. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de la altura total en cada
tratamiento.
Semanas
Tratamiento A (Testigo/suelo de la región)
Tratamiento B (suelo de pino)
Tratamiento C (suelo de oyamel)
1 0.00 0.00 0.00
2 0.26 0.50 0.07
3 0.38 0.31 0.15
4 0.80 0.41 0.24
5 0.78 0.48 0.02
6 1.22 1.00 0.11
7 0.81 0.44 0.06
8 0.67 1.09 0.27
9 1.00 1.02 0.41
10 0.83 0.78 0.37
11 0.61 0.56 0.37
12 0.76 0.65 0.33
La figura 7, se observan gráficamente el crecimiento 2009 o crecimiento relativo
de los brinzales en cada uno de los tratamientos, pues en cuanto a la variable
crecimiento relativo el tratamiento A (suelo de la región) es donde hubo mayor
crecimiento.
54
Figura 7. Muestra el crecimiento relativo (cm) de las plantas en cada semana durante los
primeros tres meses.
En el cuadro 9 se puede observar la altura promedio de los brinzales de Pinus
greggii en los primeros tres meses, la altura inicial de los brinzales son las
siguientes: para el suelo de la región 40.80 cm, para el suelo de pino 44.70 cm y
para el suelo de oyamel 41.40 cm, después de tres meses los brinzales que se
establecieron en el suelo de la región alcanzaron una altura promedio de 49.57 cm
con un acumulado de 8.77 cm, los brinzales colocados en el suelo de pino
alcanzaron una altura de 53.02 cm. con un acumulado de 8.32 cm. y en el suelo
de oyamel solo crecieron 2 cm en estos tres meses, alcanzando 43.60 cm en
promedio, pero en este tratamiento se murieron 4 brinzales en la tercera de
semana de haber plantado.
55
Cuadro 9. Altura total (cm) medidos en cada semana, durante los primeros tres meses de
establecidos los brinzales
Semanas Tratamiento A (testigo/ suelo de la región
Tratamiento B (Suelo de pino)
Tratamiento C (suelo de oyamel)
1 40.80 44.70 41.40
2 41.13 45.28 41.44
3 41.33 45.59 41.60
4 42.39 46.10 41.60
5 43.31 46.69 41.60
6 45.50 48.02 41.70
7 45.50 48.02 41.70
8 46.15 49.04 42.00
9 47.13 50.09 42.30
10 47.91 50.83 42.60
11 49.57 53.02 43.10
12 49.57 53.02 43.60
6.2 Resultados después de un año de establecido el estudio (segunda fase)
Supervivencia en los tres tratamientos la preparación del terreno, manejo y
cuidado de los brinzales en campo fueron iguales para todos, sin embargo se
puede mostrar en la siguiente figura (8) que la supervivencia de los brinzales no
fue igual. En cada tratamiento se plantaron 27 brinzales que es el 100 %,
obteniendo mayor sobrevivencia en los sitios de testigo o suelo de la región con un
93 %, solo dos brinzales se murieron y en el suelo de pino fue el doble que el de
testigo, se murieron 4 brinzales, quedando un 85 % de sobrevivencia y por último
en el suelo de oyamel se murieron 8 brinzales, es casi una tercera parte de los
brinzales trasplantados, así solo quedaron el 70 %, es decir 19 brinzales vivos.
56
Figura 81. Porcentaje de supervivencia de los Pinus greggii después de un año de establecido.
En la figura anterior muestra que la especie Pinus greggii se adapta a suelos
erosionados, que es una especie útil para la reforestación y recuperación de las
áreas de los suelos de solonchak de Texcoco. Así mismo se comprueba una vez
más lo que han mencionado de esta especie, varios autores (González, 1978;
Eguiluz, 1978; Saldívar, 1982; Vargas, 1985).
El suelo de pino es el que ocupa el segundo lugar, indicando que la transferencia
de suelo es viable para realizar una plantación, esta práctica permite incorporar al
suelo, los agentes bióticos y abióticos para un mejor crecimiento de los brinzales,
así como lo menciona López (1999), este autor realizó una plantación con la
especie Pinus greggii en diferentes tipos de suelo, siendo mejor el suelo
procedente de un bosque maduro, donde obtuvo resultados favorables en cuanto
a los incrementos de supervivencia, incremento y micorrización.
En el cuadro 8 se muestra una síntesis de los resultados obtenidos en SAS para la
variable altura (cm) y diámetro (mm), medidos cada mes en un lapso de un año,
de agosto de 2009 a septiembre de 2010, los datos introducidos en el programa
fueron los incrementos que tuvieron las plantas de mes a mes en medidas
57
repetidas. Se tomó el mes de agosto como 1, indicando que este mes el aumento
tanto en altura como en diámetro de todas las plantas eran cero.
Como se muestra en el cuadro para el mes 2 la variable altura, el resultado es
menor a 0.05, que significa que hay diferencia significativa de crecimiento en
altura en cada uno de los sitios. Dando mejor crecimiento en el suelo de pino. Y
para el variable diámetro también existe una diferencia significativa en el
crecimiento de los brinzales en cada uno de los sitios dando como mejor resultado
en el suelo de pino. Para el mes 3 no hay diferencia significativa de crecimiento en
altura en los tres tipos de tratamiento de suelo ya que el valor calculado es mayor
al α utilizado (0.05), de igual forma se puede decir que en los diferentes suelos el
crecimiento fueron similares para este mes. Y la variable diámetro para este mes
hubo diferencia significativa dando como el mejor suelo el de la región o testigo,
en este los brinzales tuvieron un mayor crecimiento que los otros dos tratamientos.
Para el mes 4 la variable altura existe diferencia significativa en el crecimiento,
mostrando que la altura de los brinzales fue mayor en el suelo de pino. Para la
variable diámetro en este mes no hubo diferencia significativa, al parecer todos los
brinzales crecieron lo mismo.
Para el mes 5 el crecimiento en altura tuvo diferencia significativa entre los
diferentes tipos de tratamiento, mostrando mayor altura en suelo de testigo o de la
región. En cuanto al diámetro no hubo diferencia significativa en los tres tipos de
suelo, los brinzales crecieron de igual manera en este mes.
Para el mes 6 hay diferencia significativa en crecimiento en altura en cada uno de
los tratamientos de suelo, resultando mejor el suelo de pino. Para el diámetro los
brinzales crecieron igual en todos los tratamientos ya que no existe diferencia
significativa en los tres tratamientos para este mes.
Para el mes 7 existe diferencia significativa en el crecimiento en altura en los tres
tratamientos, los brinzales tuvieron mayor altura en el suelo de pino. De igual
manera existe diferencia significativa en diámetro para este mes creciendo mejor
en el suelo de pino.
58
Para el mes 8 el crecimiento de los brinzales en altura fue iguales para los tres
tratamientos ya que no hubo diferencia significativa. En cuanto la variable
diámetro de los brinzales si existe diferencia significativa en los diferentes
tratamientos, creciendo mejor en el suelo de pino.
Para el mes 9 no hubo diferencia significativa en la variable altura el crecimiento
de los brinzales, siendo iguales para todos los tratamientos. De igual manera en
el variable diámetro no hubo diferencia en los tres tratamientos, el crecimiento de
los brinzales fue igual en todos los sitios.
Para el mes 10 no hubo diferencia significativa en el crecimiento en altura en todos
los tratamientos, ya que los brinzales crecieron de igual manera en cada uno de
los tratamientos. Para el variable diámetro no existe diferencia significativa en los
tres tratamientos.
Para el mes 11, para las dos variables no hubo diferencia significativa en los tres
tratamientos, el crecimiento de los brinzales fue casi igual en todos los sitios.
Para el mes 12, para las dos variables no hubo diferencia significativa ya que los
valores calculados fueron mayores al α definido. Esto indica que el crecimiento de
los brinzales fue similar en los tres tratamientos.
59
Cuadro 10. Resultados de análisis de varianza para las variables altura (cm) y diámetro (cm),
medidos cada mes, durante un año de agosto de 2009 a septiembre de 2010.
Fuente de variación Variable
Grados de Libertad
Suma de cuadrados
Media de cuadrados F Pr > F
Agosto
Altura 2 0 0 - -
Diámetro 2 0 0 - -
Septiembre
Altura 2 482.038 241.019 4.11 0.0203
Diámetro 2 11.289 5.645 4.76 0.0114
Octubre
Altura 2 379.230 189.615 1.83 0.1674
Diámetro 2 32.093 16.047 4.00 0.0225
Noviembre
Altura 2 379.230 189.615 1.83 0.0069
Diámetro 2 32.093 16.047 4.00 0.0225
Diciembre
Altura 2 21.516 10.758 5.33 0.0001
Diámetro 2 32.093 16.047 4.00 0.8904
Enero
Altura 2 137.710 68.855 10.73 0.0008
Diámetro 2 0.0770 0.0390 0.12 0.9640
Febrero
Altura 2 289.184 144.592 7.94 0.0026
Diámetro 2 0.035 0.017 0.04 0.0123
Marzo
Altura 2 82.097 41.049 6.47 0.4963
Diámetro 2 22.316 11.158 4.68 0.0480
Abril
Altura 2 32.786 16.393 0.71 0.0553
Diámetro 2 25.047 12.523 3.17 0.1074
Mayo
Altura 2 466.002 233.001 3.01 0.9377
Diámetro 2 10.748 5.374 2.3 0.0025
Junio
Altura 2 2.515 1.257 0.06 0.9368
Diámetro 2 46.795 23.398 6.53 0.1492
Septiembre
Altura 2 0.989 0.495 0.07 0.2031
Diámetro 2 8.801 4.400 1.96 0.2285
El cuadro 10, se muestra los valores de la prueba Tukey de la variable altura cm,
indicando que las medias con la misma letra (A, B, C) no son significativamente
diferentes, N es el número de los brinzales que se analizaron y tratamiento son los
tipos de suelo que se utilizaron siendo: 1 tratamiento A (testigo/suelo de la región),
2 tratamiento B (suelo de pino) y 3 tratamiento C (suelo de oyamel).
En el mes de agosto existe una diferencia significativa en los tratamientos, en el
suelo de pino o tratamiento 2, fue mayor que el tratamiento 3 de oyamel, y el
60
tratamiento 1 o suelo de testigo el crecimiento fue en un término medio ya que en
la prueba de Tukey comparte letras A y B, de igual manera el crecimiento fue
similar en el mes de septiembre con el suelo de pino alcanzando una media de
10.41 cm y el suelo de testigo, alcanzó la media de 6.05 cm compartiendo las
letras A y B indicando que no es significativamente diferente y en el suelo de
oyamel tuvo un crecimiento medio de 4.39 cm siendo diferente con el suelo de
pino, y como se puede ver en el suelo de pino, los brinzales crecieron un poco
más que los otros dos, sin embargo en el suelo de la región no se queda atrás en
estos dos tratamientos ya que los brinzales crecieron más rápidamente.
Para el mes de octubre no hubo diferencia significativa, sin embargo en el
tratamiento 2 (suelo de pino), crecieron más los brinzales hasta 11.73 cm.
En noviembre si hay diferencia significativa entre suelo de pino y los otros
tratamientos, siendo mejor en el suelo de pino con tan solo 1.23 cm y en el
tratamiento 1 solo 0.23 cm y en el tratamiento 3 (suelo de oyamel) no tuvo
crecimiento para este mes.
En diciembre la diferencia significativa es para el suelo de la región con 3.19 cm y
en el suelo de pino con solo 0.81 cm de media para este mes.
En enero la diferencia significativa es el suelo de pino con una media de 5.67, y en
el suelo de oyamel la media es de 1.96 y en el suelo de la región con tan solo 1.14
cm de crecimiento para este mes.
Para febrero la media fue mayor en el suelo de pino con 3.12 cm y el suelo de la
región en la prueba Tukey indican que no son significativamente diferente los dos
tratamientos.
Para el mes de marzo la prueba Tukey indica que no tuvo diferencia significativa, ,
sin embargo el suelo de la región alcanzó 7.71 cm de media siendo mayor que los
otros.
En abril en el suelo de la región, tiene mayor media siendo 21.67 cm y el suelo de
pino no es significativamente con el suelo de la región y con el suelo de oyamel.
61
De mayo a septiembre no hubo diferencia significativa en las pruebas, sin
embargo para mayo la media fue mayor en el suelo de pino y en los meses
siguientes el suelo de oyamel.
Cuadro 11. Resultados de la prueba Tukey para la variable altura de los brinzales de Pinus greggii.
Mes Prueba Tukey Media N Tratamiento
Agosto
A 1.02 27 2
BA 0.66 27 1
B 0.28 23 3
Septiembre
A 10.41 26 2
BA 6.05 26 1
B 4.39 23 3
Octubre
A 11.73 26 2
A 10.14 26 1
A 6.27 23 3
Noviembre
A 1.23 26 2
B 0.23 26 1
B 0.00 23 3
Diciembre
A 3.19 26 1
B 0.81 26 2
B 0.00 23 3
Enero
A 5.64 25 2
B 1.96 23 3
B 1.14 26 1
Febrero
A 3.12 25 2
BA 1.90 26 1
B 0.52 23 3
Marzo
A 7.71 26 1
A 7.37 23 3
A 6.19 25 2
Abril
A 21.65 26 1
BA 17.73 25 2
B 15.61 23 3
Mayo
A 4.46 25 2
A 4.12 26 1
A 4.04 23 3
Junio
A 2.80 20 3
A 2.64 26 1
A 2.50 24 2
Septiembre
A 31.47 19 3
A 25.28 25 1
A 24.04 23 2
En el cuadro 11 se muestra los valores de las medias de la prueba de Tukey y
como se puede observar en el Testigo o suelo de la región, el primer mes (agosto)
62
tuvo mayor valor, en los meses de septiembre a noviembre el suelo de pino fueron
superiores a los otros tratamientos, cabe aclarar que el suelo de la región o
testigo son los segundos en los valores de media. Para diciembre los brinzales del
suelo de la región tuvieron mayor valor de media de Tukey, y así sucesivamente
los suelos de la región y suelo de pino son los que siempre mantuvieron mayores
crecimientos, se puede observar en la figura 9 que los brinzales del suelos de pino
fueron los que crecieron continuamente en cada mes, siendo más que los se
encontraron en los otros sitios, también en algunos meses crecían igual que los
brinzales del suelo de la región, en el caso de los brinzales que se ubicaron en los
suelos de oyamel siempre fueron a la baja excepto el mes de septiembre de 2010.
Cuadro 12. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de crecimiento en cada
tratamiento.
Mes
Tratamiento A (Testigo/suelo de la
región) Tratamiento B (Suelo
de Pino) Tratamiento C (Suelo de
oyamel)
Agosto 1.02 0.66 0.28
Septiembre 6.05 10.41 4.39
Octubre 10.14 11.73 6.27
Noviembre 0.23 1.23 0.00
Diciembre 3.19 0.81 0.00
Enero 1.14 5.64 1.14
Febrero 1.90 3.12 0.52
Marzo 7.71 6.19 7.71
Abril 21.65 17.73 15.61
Mayo 4.12 4.46 4.04
Junio 2.80 2.50 2.62
Septiembre 25.28 24.04 31.47
63
Figura 9. Crecimiento en altura de los brinzales para cada mes y en cada tratamiento desde agosto de 2009 hasta septiembre de 2010.
En el cuadro 11 se presenta el análisis de la prueba Tukey de la variable diámetro
de los brinzales de Pinus greggii, indicando que las medias con la misma letra no
son significativamente diferentes, se puede observar que los meses de septiembre
y octubre existe una pequeña diferencia significativa siendo los mejores suelos el
de la región y el suelo de pino, también los meses de febrero - marzo existe una
diferencia significativa en el crecimiento en diámetro en los mismos suelos
mencionados. Pues en la mayoría de los meses en la prueba Tukey no existe
diferencia significativa.
64
Cuadro 13. Resultados de la prueba Tukey para la variable diámetro de los brinzales de Pinus
greggii.
Mes Prueba Tukey Media N Tratamiento
Agosto
A 0.00 27 1
A 0.00 27 2
A 0.00 23 3
Septiembre
A 1.08 26 2
B 0.31 26 1
B 0.22 23 3
Octubre
A 3.23 26 1
BA 1.88 26 2
B 1.83 23 3
Noviembre
A 0.00 26 1
A 0.00 26 2
A 0.00 23 3
Diciembre
A 0.35 26 2
A 0.30 23 3
A 0.27 26 1
Enero
A 0.32 25 2
A 0.30 23 3
A 0.27 26 1
Febrero
A 1.88 25 2
BA 0.96 23 3
B 0.62 26 1
Marzo
A 3.42 25 2
BA 2.62 26 1
B 2.00 23 3
Abril
A 1.23 25 2
A 1.19 26 1
A 0.39 23 3
Mayo
A 2.65 23 3
A 2.23 25 2
B 0.81 26 1
Junio
A 0.92 26 1
A 0.52 20 3
A 0.08 24 2
Septiembre
A 5.96 23 2
A 5.92 25 1
A 4.26 19 3
En el cuadro 12 se muestra los valores de la prueba Tukey del variable diámetro
de los brinzales, aunque en el cuadro 11 muestra que en la mayoría de los meses
no existen diferencias significativas, sin embargo se puede ver que en el suelo de
65
pino se tuvo un crecimiento más rápido de los brinzales que en los otros
tratamientos.
Cuadro 14. Resumen del análisis de la prueba Tukey y los valores de crecimiento en cada
tratamiento para el variable diámetro.
Mes
Tratamiento A (Testigo/Suelo de la región)
Tratamiento B (Suelo de pino)
Tratamiento C (Suelo de oyamel)
Agosto 0.00 0.00 0.00
Septiembre 0.31 1.08 0.22
Octubre 3.23 1.88 1.83
Noviembre 0.00 0.00 0.00
Diciembre 0.27 0.35 0.30
Enero 0.27 0.32 0.30
Febrero 0.62 1.88 0.96
Marzo 2.62 3.42 2.00
Abril 1.19 1.23 0.39
Mayo 0.81 2.23 2.65
Junio 0.92 0.08 0.52
Septiembre 5.92 5.96 4.26
Figura 102. Crecimiento en diámetro de los brinzales para cada mes y en cada tratamiento desde
agosto de 2009 hasta septiembre de 2010.
66
6.3 Crecimiento en diámetro y altura (segunda fase)
En el cuadro 8 se muestra el crecimiento medio en altura y en diámetro que
alcanzaron los brinzales en cada mes, como se puede observar en testigo la
máxima altura en promedio fue de 145.9 cm y cuando se iniciaron las mediciones
en promedio tenía 60.8 cm esto significa que en promedio los brinzales crecieron
90.3 cm en un periodo de un año. En el suelo de pino al comienzo de las
mediciones los brinzales en promedio tenían 70.1 cm y después de un año
alcanzan una altura en promedio de 160.0 cm, es decir, los 27 brinzales crecieron
105.1 cm y en el suelo de oyamel los brinzales solo alcanzaban 43.8 cm en
promedio al principio y al finalizar las mediciones fue de 126.2 cm en altura en
promedio.
Cuadro 15. Promedio de altura y diámetro de los brinzales en un año, agosto de 2009 a
septiembre de 2010.
Tratamiento A (Testigo/
suelo de la región) Tratamiento B (suelo
de pino) Tratamiento C (suelo
de oyamel)
Mes Altura (cm) Diámetro (mm)
Altura (cm)
Diámetro (mm)
Altura (cm)
Diámetro (mm)
Agosto 60.8 13.3 70.1 14.2 43.8 9.1
Septiembre 64.9 13.4 79.4 15.2 46.5 9
Octubre 74.7 16.4 90.7 17.1 51.6 10.6
Noviembre 74.9 16.4 91.9 17.1 51.6 10.6
Diciembre 78.4 16.6 92.8 17.5 51.3 10.8
Enero 79.4 16.6 98.6 17.6 53.3 11.1
Febrero 81.1 17.1 100.3 19.4 52.2 11.7
Marzo 88.1 19.7 106.4 23 58.6 13.4
Abril 108.7 20.9 122.8 24 72.2 13.8
Mayo 112.3 21.7 127.1 24.6 75.1 16.5
Junio 114.7 21.7 120.7 24.6 69.7 15.9
Septiembre 145.9 21.1 160.0 24.4 126.2 17.0
En la siguiente figura (11) se observa el crecimiento en promedio tanto en altura
como en diámetro de los brinzales en cada uno de los tratamientos que se utilizó
en el experimento. En el suelo de la región se alcanza en promedio 90.3 cm de
altura y 21.1 mm en diámetro, en el suelo de pino alcanzando 105 cm de altura y
19.9 mm en diámetro y por ultimo en el suelo de oyamel los brinzales alcanzaron
67
en promedio 62.7 cm en altura y 12.5 mm en diámetro, este último siempre fue
baja en las dos variables, siendo mejor los suelos de la región y el suelo de pino.
Figura 11. Crecimiento promedio de los brinzales en cada uno de los tratamientos después de un año de plantados.
Los brinzales con menor altura fueron los que se establecieron en el suelo de
oyamel, debido a que las micorrizas no son los adecuados para el crecimiento de
Pinus greggii, así como lo menciona Gómez (2004), ya que los brinzales que se
establecieron en éste siempre fueron a la baja, este problema se le atribuye a la
falta de micorrizas, porque se trató de que los cuidados culturales y manejo de
riego fueron iguales para todos los bloques.
A la primera semana de septiembre se tomaron los últimos datos de crecimiento
en altura y diámetros de los brinzales, además de fotografías de los brinzales en
cada sitio, tratando de hacer la comparación de crecimiento con la altura de una
persona que mide 155 cm de altura, como se muestra en las siguientes fotografías
(21, 22 y 23). Como se muestra en la foto 21, los brinzales de Pinus greggii en el
tratamiento de suelo de pino, las plantas crecieron lo suficiente, alcanzando en
promedio 105 cm de altura y un diámetro medio de 20 mm, en algunos brinzales
68
alcanzaron hasta los 27 mm de diámetro, como se puede observar en la imagen
hay brinzales que crecieron arriba del promedio, donde el más alto alcanzó 260
cm.
Fotografía 21. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de pino.
En el suelo de oyamel, el promedio de altura de los brinzales fue 62.6 cm con tan
solo 12.5 mm de diámetro, en la imagen se puede apreciar el crecimiento de los
brinzales en este tratamiento, además donde se murieron más brinzales, y la
altura máxima que alcanzaron algunos es de 140 cm y el más pequeño de 50 cm
de alto (foto 22).
Fotografía 22. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de
oyamel.
En la foto 23 muestra el crecimiento de los brinzales en el suelo de testigo o de la
región, dando como resultado un crecimiento en altura promedio de 90 cm, el
brinzal más alto alcanzó 202 cm, también existen varios brinzales que crecieron
69
arriba del promedio como se muestra en la fotografía, se puede comparar la altura
de los brinzales con la altura de la persona (153 cm) en la foto.
Fotografía 23. Muestran la altura que presenta los brinzales que se encuentran en el suelo de
arrastre o testigo.
En la fotografía 24, muestra el crecimiento en diámetro de los brinzales, en el
suelo testigo, el diámetro promedio es de 18 mm, en el suelo de pino se alcanzó
en promedio 20 mm, y en el suelo de oyamel solo el 12.5 mm.
Fotografía 24. Muestran el crecimiento en diámetro, a la izquierda es un brinzal en suelo de oyamel
y a la derecha un brinzal en el suelo de la región o testigo.
Se ha probado en plantaciones forestales fuera de su área de distribución natural,
que hay buena adaptación a suelos degradados, resistencia a plagas,
70
enfermedades y sequías; así como buen crecimiento durante sus primeros años
de establecimiento (González, 1978; Eguiluz, 1978; Saldívar, 1982; Vargas, 1985).
Una vez más se demuestra esta plasticidad de la especie y tolerancia a climas
fríos, notándose que Pinus greggii soportó los meses de frío de diciembre y enero
de 2009 – 2010.
‘
71
CONCLUSIONES
La trasferencia de suelos forestales tiene un efecto positivo en la supervivencia,
crecimiento de las plantas y la relación de la formación de las micorrizas.
Se rechaza la hipótesis nula que dice “El sustrato Forestal no favorece el
crecimiento de los brinzales de Pinus greggii Engelm. en suelos solonchak de la
región de Texcoco para establecer una plantación”
Los individuos que se establecieron en el sustrato proveniente de un bosque de
pino, es decir, suelo de pino, el crecimiento en la altura como en diámetro fue
mucho mayor, esto significa que la hipótesis Ha se acepta, pero no se descarta la
otra hipótesis, debido a que no existe mucha diferencia entre los brinzales que se
encuentran en los sustratos de pinos y los que se encuentran en el suelo de
arrastre o testigo.
Es recomendable realizar actividades culturales antes del establecimiento de una
plantación forestal en el valle de Texcoco ya que esto permite que los brinzales
tengan un mejor desarrollo de la raíz y con ello una buena supervivencia de la
plantación.
Es posible llevar a cabo una reforestación en los suelos de solonchak de la región
de Texcoco, ya que el experimento mostró que se adapta esta especie en los
suelos de la región. Pero sería mejor si se utilizara la transferencia de suelo de
bosque de pino, dado que el establecimiento seria con mayor éxito.
En el suelo de oyamel probablemente la muerte de los brinzales se deba a que
antes del establecimiento de la plantación, el suelo se concentró una semana a la
intemperie en el vivero de la División de Ciencias Forestales y quizás las
micorrizas del suelo de oyamel no soportaron la radiación directa del sol, ya que
en bosques naturales esta especie está bajo una sombra permanente.
Sería recomendable seguir evaluando las mismas variables (diámetro y altura),
así como la colonización de las micorrizas utilizando el procedimiento de López
(1999). En el cual cuenta los nódulos de las raíces de la planta ya establecidas.
72
Esto se haría en 5 años después del establecimiento de los brinzales, para tener
suficiente información para saber si es viable una reforestación con la especie de
Pinus greggii.
Quizás es importante realizar un análisis de suelos (químico y biológico) de cada
suelo utilizado, con la finalidad de conocer el efecto negativo del suelo de oyamel
y saber la diferencia de nutrientes en los tres tratamientos: suelo de pino, suelo de
la región y suelo de oyamel). Para sí conocer a los fertilizantes necesarios para el
desarrollo de los brinzales.
Se puede observar que la densidad es alta en los tres tratamientos, ya que se
plantó a una distancia de un metro entre planta, cual no permite un buen
crecimiento, por lo que se recomienda una densidad de 2 a 2.5 m de distancia
entre brinzal, para establecer reforestaciones en la región de Texcoco.
73
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