Disfruta mientras dejas de fumar.

1“Conviértete en un ejem-plo y no en una adverten-cia.”

– H.J.H García -Casareigo

Respeto ante todo...Si no estas fumando ahora mismo, es posible que empieces a sentir una ganas inmensas de fumar, no te cortes, antes de seguir leyendo busca ese cigarro, enciéndelo y disfruta de la lec-tura... Pronto dejaras de hacerlo y para colmo disfrutaras del no fumar...

No pienses que voy a utilizar terapia de choque, no eres idiota, estás atrapado en un mecanismo infernal que ni tú mismo es-cogiste, sino que la sociedad, a través de la “influencia” te llevó a fumar.

Como la mayoría de los fumadores te sien-tes ante una sensación de frustración. Y la razón es por las veces que has intentado dejar de fumar sin obtener ningún resulta-do, o en el mejor de los casos, resultados a medias, es decir, cuando llevabas un

tiempo sin fumar has recaído, y todo esto te lleva a esa sensación de frustración.

Esta frustración, te hace sentirte mal ya que la mayoría de las personas que empe-zaron a fumar contigo ya no fuman, sintién-dote una persona marginada por la socie-dad, sin contar que cada día se hace más evidente el daño que hace el tabaco.

Cada día se hace más evidente con la crueldad que se trata a un fumador, siendo un persona que padece una adicción. Cual-

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quier persona con una minusvalía física inspira mucha mas compresión y compa-sión que un fumador.

Fíjate en este ejemplo, una persona que no conoces con la que estás compartien-do en una fiesta, pilla una sobredosis de alcohol, es atendido por los servicios de urgencia, todos los presentes están preo-cupados por su salud, tú has estado ayu-dando en todo el proceso. Cuando la am-bulancia se aleja, estás al lado de una per-sona que no fuma, que ha estado codo con codo contigo ayudando, enciendes en ese momento un cigarrillo, le llega el humo a su cara, te mira y te dice; que asco de ta-baco...

Todos esos momentos en tu vida de fuma-dor que te han reprochado directa o indi-rectamente, hacen que te sientas mal y es natural. Pero tranquilo, por ello estas aquí, dando este paso para dejar de fumar y yo para ayudarte a lograrlo

Estás viviendo en un infierno, por una par-te quieres dejarlo y por otra (de la que no tienes control), no te lo permite y vas vi-viendo en un mundo de contradicciones con respecto al tabaco.

Para poder dar respuesta a esas contradic-ciones creas constantemente tus “ES QUE,” los cuales te permiten seguir sobre-

viviendo con algo que realmente no quie-res pero necesitas justificar.

Estos ES QUE se convierten en una paten-te de corso que puede llegar a permitirte comportamientos indolentes que van en contra de aquellos que no fuman.

Estos comportamientos indolentes, faltos de empatía hacia lo no fumadores, los he-mos tenido la mayoría de los fumadores en un momento determinado y en mayor o menor grado pero siempre han estado pre-sentes. Yo también he sido indolente ante la evidente molestia del tabaco y los he pa-sado muy mal, de los cuales me arrepiento hoy en día, como el fumar en casa de un no fumador estando de visita, o delante de mis hijos en el coche, ignorando sus moles-tias, etc. Esto hoy suena fuerte pero eran otros tiempos, ni tan siquiera había cintu-rón de seguridad.

Por ello quiero que revisemos juntos todos estos ridículos ES QUE que nos hemos dicho alguna vez que y como podrás ver en algunos casos, es contradictorio con el siguiente ES QUE

Es que,.. Tengo que fumar para sopor-tar el estrés.

Es que... Me gusta fumar cuando estoy relajado.

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Como podrás ver fumas para soportar el estrés y también cuando estas relajado, fu-mas siempre.

Es que... Me ayuda a concentrarme

Es que... Alivia el aburrimientoEn este caso igual, te ayuda tanto para concentrarte como para dejar de aburrirte

Es que...Me gustan como saben ¿realmente los saboreas?

Es que...Me gusta como huele el tabaco

¿Perfumarías tu casa con humo de cigarri-llo, o con el olor de los ceniceros, que hue-len exactamente igual que tu ropa y tu ca-bello?.

Es que...Es una cuestión social, soy un fumador social.

No importa si hace frío, llueve o nieve, si quieres fumar en casa de un “no fumador”, o en un lugar cerrado, vas fuera, como un perro al hacer sus necesidades... Incluso si te pones fatal y hay perro se te quedará mirando como su homologo, pero en tu ca-so no será “una gracia”. No olvides que cuando el perro sale es una necesidad y cuando tú sales es una discriminación. Cuando regresas y observas las miradas ninguna aprueba tu ausencia.

Es que...Es elegante y moderno

Cierra los ojos observa a ese chico o chica totalmente elegante y atractiva que no fu-ma. ¿qué pasaría si te diera un beso?

Recuerdo una vez, en el Corte Inglés de Goya que me encontré a una chica que ha-bía estado hacia unos meses en mi consul-ta con su pareja la cual le acompañaba a realizar la terapia para dejar de fumar a tra-vés de hipnosis y me dijo, “ Han mejorado mis relaciones sexuales desde que deje de fumar” Si hubiera sido un hombre no me sería rara la mejoría, ya que el tabaco es una de las causas de la disfución erec-til, pero tratándose de una chica no pude dejar de preguntarle cómo fue posible esa mejora. Me contó que su pareja rehuía a los besos, ella nunca se lo preguntó por miedo a crear una situación. Pero cuando dejo de fumar empezaron a fundirse en be-sos que nunca se habían dado, ante tal si-tuación, ella me confesó que al inicio pen-saba que había estado en un desliz su pa-reja y que el tenia mala conciencia. Pero al final él le dijo que era porque su aliento olía a tabaco y no lo soportaba, pero como la quería, nunca le dijo nada.

Pronto vas a dejar de fumar disfrutando de ese cigarro que no fumarás, y verás como te va a sentar el aliento en las distancias cortas de un fumador.

Cuando lees el párrafo anterior tu mente salta y te dice:

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Es que... Es un apoyoEs que... Es un placerEs que... Me hace compañía, es como

un amigo.

Es que... Sin tabaco me deprimo.

Y ¿Qué pasa con aquellos que tienen un nivel económico alto? ¿Cúal es su “es que”

Es que... puedo permitírmeloRealmente ¿Crees que todos los meses se-rías capaz de quemar en caso que de fu-maras una cajetilla al día Marboro 150€ de manera consciente?. Observa la figura

Vamos, después de este billete que ves quemarse, 2 billetes más de 50€ a la ho-guera.

Y ahora vamos a ver que podemos hacer con todos estos ES QUE

Sólo hay una forma para preparar nuestra mente subconsciente para un cambio real que pueda producirnos esa emoción que nos va a llevar a la motivación para dejar de fumar y es sustituyendo todos estos ES QUE por PARA QUE.

Veamos algunos ejemplos que te pueden ser útil, cuando llegues a mi consulta te preguntaré por tu PARA QUE, si no lo tienes claro, volverás a tu casa, así que aquí van algunos ejemplos donde podrás encontrar el tuyo ...

Vas a dejar de fumar :

Para que... no me atormente más el estrés que me produce cada mañana cuando me fumo ese primer cigarro, y vienen a mi mente pensamientos de que un día que me pueden descubrir una enfermedad por el uso del tabaco, y yo sigo a día de hoy fumando, sin poder dejar el habito de fu-mar.

Para que... pueda relajarme después de vol-ver a hacer ese deporte que ahora no pue-do hacer por mi falta de fondo físico.

Para que... pueda ocupar el tiempo que per-día al salir a fumar en una cena, en disfru-tarlo con mis amigos.

Para que... mi aliento sea fresco y no sentir el rechazo en las distancias cortas.

Para qué... cuando me ponga perfume, hue-la a perfume y no se mezcle con el mal olor del tabaco donde al final siempre ter-mino oliendo a tabaco.

Para que... sea un ejemplo de lo que hay que hacer y no una advertencia de lo que no debemos hacer.

¿Qué puedes hacer hacer? ¿como puedes quitarte esta forma de hablarte o contestar a los demás cuando te preguntan porqué

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no dejas el tabaco... pues muy fácil vamos a convertir los ES QUE en PARA QUE

Y eso PARA QUE irán creando la motivación que necesitas para dejar de fumar, porque si vuelves a tirar de la fuerza de voluntad estas abocado al fracaso .

NOTA: ¿ como vas con ese cigarrillo? Si mientras sigues leyendo sientes la necesi-dad de encender otro no dejes de hacerlo, necesito que leas todo esto abriendo tu mente y no preocupándote porque tienes ganas de fumar...

¿Qué es lo que quieres ?

Ante esta pregunta la mayoría de las perso-nas dirán “dejar de fumar...”

Pero la verdadera pregunta debe ser

¿Para que lo quieres?

Como verás lo más importante es que tú identifiques claramente el para que lo quie-res creando una cadena de al menos 3 pa-ra qué.

Esto te va a permitir encontrar tu verdade-ra motivación, donde encontrarás las emo-ciones que te van a lanzar a dar este mara-villoso paso sin estrés.

Te pongo un ejemplo en forma de diálogo para que comprendas mejor qué quiero de-cir con que busques una cadena de tres para que o más

Yo: Juan ¿para qué quieres hacer la tera-pia de hipnosis clínica para dejar de fu-mar?

Juan: Para mejorar mi salud

Yo ¿Para qué quieres mejorar tu salud?

Juan: Porque tengo flemas por la mañana, tengo mucha tos, el pecho me suena.

Yo ¿Para qué quieres eliminar esas fle-mas?

Juan: Porque he ido al médico y me ha di-cho que tengo que dejar de fumar porque estoy a dos mañanas de tos para tener un EPOC ( Enfermedad Pulmonar obstructiva Crónica)

Yo: ¿Y para que quieres alejarte de esa en-fermedad.?

Juan: Para que desaparezca el miedo de morir como el abuelo.

Como puedes ver, a medida que te vas ha-ciendo preguntas de ¿para que?, aumenta la calidad y claridad de tus emociones, con lo que vas hacer que aparezca la ver-dadera motivación por la cual cogerás el teléfono y me llamarás para abandonar es-te habito.

Estas preguntas son las que hago en la consulta antes de empezar la sesión y es impresionante como las personas descu-bren las verdaderas razones por las que es-tán sentados frente a mí.

Encuentra tu motivación real y escríbela ahora aquí si imprimiste el e-book y sino es-críbela en un papel después de haberte preguntado tus 3 para que como pocos

Voy a dejar de fumar para que ______________________________________

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No pases a la siguiente fase sin tener esto claro.

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Lánzate a dejar de fumarFuerza de voluntad vs motivación

Las personas que una vez dejaron de fu-mar y lo vuelven a intentar, desconocen qué fue lo que pasó aquella vez que lo lo-graron con relativa facilidad y no se expli-cán que les pasa ahora que no pueden de-jar de fumar.

La palabra clave es motivación. Es por eso que te pedí que hicieras el ejercicio ante-rior para que encontrarás en esos “3 para qué”, con lo cual encontrarás la motiva-

ción. Todos tenemos esa motivación solo hay que ponerse a buscarla.

Porque si no encuentras esa motivación y te empeñas en dejar de fumar, vas a tener que tirar de la fuerza de voluntad. A los po-cos días de gran esfuerzo te vendrás abajo con tu castillo de arena. La motivación es el cemento que necesitas para que ese castillo no se te derrumbe.

Piensa que cuando empezaste a fumar no tuviste que tener fuerza de voluntad, al

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contrario, si fue en la primera adolescencia fue algo maravilloso.

¿Por qué fue tan fácil empezar a fumar?

Cuando es en la primera adolescencia to-do está lleno de misterio, rebeldía, realiza-ción y liderazgo, dentro de tu cerebro se activó el núcleo accumbens, y segregó do-pamina hacia la zona pre-frontal de tu cere-bro, no tardó mucho en aprender tu cere-bro que siempre que le dabas nicotina eras feliz con tus amigos y tampoco tardó en crear un reflejo condicionado, donde siempre que tu le dabas nicotina el te da-ba dopamina y tú te sentías el rey del mun-do.

La dopamina son neurotransmisores encar-gados, entre otra cosas, de que sientas y experimentes el placer; por ejemplo, cuan-do haces el amor, cuando fumar, cuando te bebes una bebida refrescante en vera-no, cuando disfrutas de tus amigos o sim-plemente cuando ríes, todo esto puedes hacerlo gracias a la dopamina. Si no tuvie-ras dopamina, serías como un árbol, cre-cerías y darías frutos, pero no podrías ma-nifestar tu agradecimiento ni sentirías satis-facción con ninguna de las acciones ante-riores.

Esta es la razón por la que cuando necesi-tas placer vuelves a fumar y por eso dices

que fumar para ti es un placer, pero en rea-lidad lo que sucede es que la nicotina es altamente adictiva y como tu experiencia con el tabaco ha sido relacionada desde el inicio con el placer y el poder que te per-mitía fumar. Cada dos horas el nivel de ni-cotina baja a la mitad y tu cerebro sabe que es lo que tienes que hacer, fumar

Es por eso que cuando tiras de la fuerza de voluntad no puedes, ya que no se trata de fuerza de voluntad, se trata de crear una motivación tan válida y poderosa co-mo la que te llevó a fumar por primera vez.

Para que lo entiendas mejor te voy a poner un ejemplo que viví.

A finales del siglo pasado mi hermano en-contró una muchacha de la cual quedó prendado, tenía todas las cualidades que él buscaba.

En aquel tiempo trabajábamos juntos y compartíamos despacho, los dos fumába-mos, y como no había prohibición aquello era Londres.

En muchas ocasiones le convidé a dejar el tabaco, y siempre se enfurecía diciendo que nunca lo dejaría, que él fumaba y que punto redondo. En realidad estaba atrapa-do y yo también porque en aquel tiempo yo también fumaba.

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Decidió irse a vivir con la muchacha que había conocido, pero ésta odiaba el taba-co, aquello no fue un problema ya que ella le regaló el librito de Deja de fumar si sa-bes como. Un best seller de la época.

Mi hermano es de esas personas que no había cogido un libro en su vida, pero te-nía un dilema y mucho que perder, por lo que se leyó el libro en enero de el año 2000 dejo de fumar, y yo también*.

¿Fue el libro el que lo hizo dejar de fumar? puede ser, pero ¿Hubiera tenido el mismo efecto si se lo hubiera regalado yo, siendo él una persona que no lee? Realmente no lo creo. Hubiera sido un insulto y una inje-rencia más del hermano mayor.

¿Donde está la magia?

La magia fue que en aquel momento él ex-perimentaba una serie de emociones positi-vas que no quería perder, por lo que encon-tró su verdadero para qué, es decir su motiva-ción ( de manera inconsciente) por lo que el libro fue el sistema vehicular para resol-ver aquel problema. Muchos han leído el libro y les ha funcionado y otros no.

El poder tener la posibilidad de encontrar esa necesidad de resolver el problema fue lo que hizo que la gente que lo conocía di-jera la palabra ¡¡milagro!!.

Fíjate que he puesto en negrita y subraya-da la palabra problema, la he puesto por-que muchas personas necesitan un proble-ma para plantearse dejar de fumar, y el pro-blema no es siempre la convivencia con la nueva novia. En muchos casos el proble-ma es negativo, como cáncer que es el más común, un infarto, un ictus, una enfer-medad pulmonar, etc.

Pero el gran problema es que todos estos problemas les pasan a otros, a nosotros no nos va a pasar nada, ¿verdad?.

No quiero que tomes consciencia de la en-fermedad,y luches por dejarlo, porque sien-do fumador no lo vas a poder hacer, por mucho que te esfuerces, no tienes capaci-dad para experimentar con los ojos cerra-dos una notica así. Tu mente no te va a de-jar hacerlo, por ello dejar de fumar por las razones anteriores no se sostiene como meta, y vuelves a fumar.

* Yo también dejé de fumar el día que mi hermano me hizo saber que no fumaba y , ¿Cual fue mi motivación? Quizás la compe-tencia de demostrarle que yo también pue-do,o el ser el ejemplo como hermano ma-yor, no lo sé, lo que si sé, es que estamos en 2018 y que desde entonces ni él ni yo fumamos, y creo que nos hemos manteni-do así, por no mostrarnos debilidad, en

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cualquier caso, bendita sea la causa, que a día de hoy llevamos 18 años sin tabaco.

¡¡Insisto!! tienes que encontrar una razón para hacerlo, es decir tienes que encontrar tu para qué.

Otro caso curioso...

Conozco una persona que llevaba años queriendo tener una moto, su mujer no se lo permitía por el peligro que eso tenia y quiso negociarlo con ella, él dejaba de fu-mar y se podía comprar la moto. Después de muchas negociaciones la mujer cedió, y fueron a mi consulta. A los tres años me los encuentro en El Corte Inglés, me costa-ba reconocerlos, pero me recordaron lo de la moto, estaba muy contento porque solo le faltaba un mes para comprársela. La mu-jer le había puesto una hucha donde lleva-ba 3 años poniendo dinero para la moto.

Con ello te digo que si no te es fácil encon-trar tu para que, puedes materializar el hu-mo, cambiarlo por aquella chorrada, u hor-terada, que no te compraste porque te de-cían que era un gasto tonto o un lujo.

La solución

Habrás oido hablar de la hipnosis clínica para dejar de fumar, pero no puedes expli-

carte como la hipnosis puede ayudarte a dejar de fumar.

La hipnosis trabaja sobre los sistemas de aprendizaje, y actúa de moderador de tu subconsciente bloqueando los deseos de fumar, son muchos los testimonios que te brindé en la pagina web cuando nos visi-taste por primera vez, personas que como tu un día decidieron dejar de fumar y no contaban con este ebook que hoy tú tie-nes tu para reforzar ese deseo de dejar de fumar.

Si vives en Madrid puedes llamarme al 653803478 y sacar tu cita.

Tendrás:

1. Una sesión de hipnosis clínica de una hora y media

2. Dos sesiones de audio hipnosis

a) Para el día después...( ayuda a evitar la confusión)

b) Para la Falacia de control

Esta ultima es muy útil para aquellas perso-nas que después de pasado un tiempo, empiezan a decirse que el control para vol-ver a fumar un cigarrillo con lo cual si lo ha-cen vuelven a caer, por ello esta sesión es

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una garantía para aquellos que ya llevan un tiempo sin fumar.

Espero tu llamada y no dejes de comentar-me en ella tu para qué...

Gente como tu que dudaron hoy dan las gracias por haber tomado aquellas deci-sión necesitas escucharlo haz clic aqui

Tu puedes... todos podemos...y todos ne-cesitamos hoy dejar de fumar porque todo son ventajas... si tu problema es porque desconoces que va a pasar con tu salud cuando dejes de fumar has clic aquí

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