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Revista Digital Masónica PUBLICACIÓN MENSUAL PARA TODOS LOS MASONES QUE CREAN EN LA FRATERNIDAD DE LA FRANCMASONERÍA UNIVERSAL Dirección Editorial y Diseño: QHAngel R. Medina [email protected] Año III - Número 33 Diciembre de 2012 (ev∴) ∴) ∴) ∴) ∴) QQHH, os deseamos ¡Feliz Navidad y venturoso 2013!

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Revista Digital Masónica

PUBLICACIÓN MENSUAL PARA TODOS LOS MASONES QUE CREANEN LA FRATERNIDAD DE LA FRANCMASONERÍA UNIVERSAL

Dirección Editorial y Diseño: Q∴ H∴ Angel R. [email protected]

Año III - Número 33Diciembre de 2012 (e∴∴∴∴∴ v∴)∴)∴)∴)∴)

QQ∴∴∴∴∴ HH∴∴∴∴∴, os deseamos¡Feliz Navidad y venturoso 2013!

2 VITRIOLVM

COLABORADORES EN EL EXTERIOR:Alirio J. Rojas (México), José Rubio Arvelo y Jacques Faucher(Francia), Josh Pérez B. (EE.UU), Víctor Guerra (España), IvánHerrera Michel (Colombia), Edsel Lourens (Curazao y el Caribe).

Revista Digital MasónicaAño III Número 33 - Diciembre de 2012 (e∴ v∴)

Vitriolvm es una publicación digital de distribución gratuita porInternet bajo el sistema de subscripción. La opiniones y conteni-dos de los trazados publicados son de la exclusiva responsabili-dad de sus autores y no representan, necesariamente, la opiniónde la Gran Logia de la República de Venezuela.

Bajo la jurisdicción de la Muy RespetableGran Logia de la República de Venezuela.

DIRECTOR EDITORIAL:Q∴ H∴ Angel R. [email protected]

EDITA:R∴ L∴ Sol de Aragua Nº 96

R∴ L∴ Leonardo Da Vinci Nº 244R∴ E∴A∴ A∴

Av. Ricaurte Nº 34. Maracay, Aragua, Venezuela.

A todos los masones repartidosen ambos hemisferios.

A todos quienes nos viereny leyeren.

Salud - Fuerza - Unión

AL∴ G∴ D∴ G∴ A∴ D∴ U∴

Símbolo (Goethe)Del albañil las andanzasa la vida se asemejan,y su esfuerzo es comparablea los afanes del hombresobre la faz de la tierra.El porvenir encubredolores y alegrías.paso a paso, marchamoshacia delante siempresin que el temor nos rinda.Aquí, en silencio perennetéjense bellas coronasque habrán de ceñir las sienesde quien por el bien labora.¡Animo, pues, y a la obra!.

Soy Masón (Anónimo)Soy masón porque soy libre,practico siempre la honradez,ciudadano de gran calibreantes, ahora y también después.De costumbres irreprochablesde muy sanas intenciones,hombre de los responsables,enemigo de las pasiones.Un enamorado de la razón,gladiador de la verdad...masón de gran emocióndentro de la fraternidad.

Tocad y os abrirán;pedid y os darán, buscad

y encontraréis.

Poemas masónicos

3 VITRIOLVM

EDITORIAL CONTENIDOLa traición del monstruo bicéfalo/4Q∴ H∴ Ángel R. Medina

Hermes Trimegistos /7Q∴ H∴ Luis Blanco Fuentes

La sal de la vida /9Q∴ H∴ José Rubio Arvelo

El indiscreto encanto de los tiranos, dictadoresy gorilas/13Q.. H∴ Ángel R. Medina

Dossier sobre El Tiempo y Albert Einstein:

¿Existe el tiempo? /20

Mi visión del mundo/22

10 lecciones sobre la vida/23

El ingenio del genio/25

Los masones, Jesús y la Navidad/ 26Q∴ H∴ Christian Gadea Saguier

Feliz Navidad y Año Nuevo paratodos los Hermanos esparcidos

por la faz de la tierra;hagamos nuestro esfuerzo para

que el 2013 sea un año con másLibertad, Igualdad y

Fraternidad.

Les enviamos a todos losQueridos

Hermanos, un Triple y FraternalAbrazo

entrelazando nuestros corazonesy pensamientos

en la gran Cadena de Unión querecorre el planeta.

4 VITRIOLVM

El diccionario de la Real Academia Española define alperjuro como la persona que jura en falso; quequebranta maliciosamente el juramento que ha hecho.

El perjuro en la Orden Masónica, al decir de Lorenzo FrauAbrines, es un traidor, un hombre sin conciencia, sin honory sin dignidad.

El 11 de septiembre de 1973, des-graciadamente, se repitió la leyenda ydrama del Maestro Hiram Abif cuandoel general Augusto Pinochet le dio ungolpe de Estado a su Hermano y Vene-rable Maestro de su Logia, el entoncespresidente de Chile, Salvador Allende.Obviamente, la traición de Pinochet altomar el poder por la fuerza hizo que serompiera la cadena de la Hermandad ypor ello fue expulsado de la Masonería.

En nuestra Orden, la fraternidad essagrada. Ésta, se perfila como una reglade oro: un Hermano no traiciona a otroHermano. El filósofo alemán JohannGottlieb Fichte en su libro Filosofía dela masonería: Cartas a Constant (en laséptima de sus esquelas) escribe: «LaLogia, herramienta de perfeccionamien-to personal y social, es también espejo yreflejo de humanidad y sociedad». Deeste modo, es normal –apunta Fichte– que es, incluso, de-seable que haya de todo en un Taller masónico».

En la Masonería también hay personas que, como mí-nimo, tildaríamos profanamente de impresentables. Para queninguno desentierre el hacha de guerra: Pinochet fue ma-són, su Venerable Maestro fue Salvador Allende. En la Ma-sonería, al decir de Fichte –y es triste señalarlo– pueden co-

larse ratas, chacales y gorilas como suce-dió con el general Augusto Pinochet.

Los perjuros, dice también el histo-riador de la Francmasonería, Frau Abrines,no caben en nuestra augusta institución y«un buen masón debe mirar con repugnan-cia y lástima a la vez, a esos infelices per-juros que variando continuamente suscreencias y principios, demuestran la fal-sedad de su espíritu y la abyección de sucaduca inteligencia». [1] Otro investiga-dor de la Masonería, Albert Mackey, indi-ca que el perjurio es la violación de los ju-ramentos solemnes y al referirse a Ciceróny al sentimiento romano, argumenta la fra-se: «perjuri poena divina exitium; humanadedecus» («el castigo divino del perjurioes la destrucción; el humano, es el opro-bio»). [2]La Cadena de Unión o la Cadena de la

Hermandad, es el círculo formado por to-dos los Hermanos de una Logia, unidos por

las manos y que simboliza la Fraternidad que los une. Sim-bólicamente, esta cadena «se coloca a lo largo de los muros

La traición del monstruo bicéfaloQ∴ H∴ ANGEL R. MEDINAR∴ L∴ Leonardo Da Vinci N° 244Or∴ de Maracay, Aragua, Venezuela.

5 VITRIOLVMperimetrales de la Logia, debajo del cielo rasoo a la altura de los dinteles, y que simbolizala unión fraternal entre los masones». [3]

Sin embargo, la Cadena puede romper-se por tres motivos: uno, cuando muere unHermano y ésta se abre para despedirlo en suviaje al Oriente Eterno; dos, cuando un Her-mano traiciona a sus propios Hermanos y laCadena se abre para expulsarlo porque nocumplió con los principios de la Orden; y tres,el motivo especial y más alegre: cuando reci-bimos a un nuevo miembro. La Cadena, sig-nifica la fuerza y la solidaridad que debe exis-tir entre los masones, porque como explica-mos anteriormente la fraternidad es sagraday los masones deben ser fieles defensores delas leyes, porque fuera de las leyes, nada existe.

Perjuro y tiranoEl caso de Augusto Pinochet es único. En su vida mi-

litar jamás tuvo una carrera sobresaliente. Se aprovechó dela bondad y confianza de Salvador Allende cuando lo nom-bró comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, tres sema-nas antes de derrocarlo. Juró como masón y luego ante laConstitución de su país. Como diría un célebre escritor chi-leno, Pinochet sembró confianza para luego cosechar trai-ciones. Se propuso –y lo logró– derrocar el gobierno de Allen-de y su «victoria» produjo más de 3 mil muertos, miles dedesaparecidos, una represión sangrienta y una repugnante yclara violación a los Derechos Humanos.

El traidor y perjuro Augusto Pinochet, como era lógi-co, se convirtió en tirano. A lo largo de su dictadura, demos-tró poco seso y mucha fuerza represiva por su ambición depoder.

Pinochet era un ser individualista. Él,como individualista, jamás llegó a ser un buenmasón, porque el individualismo junto a laignorancia, la codicia y la ambición, nunca lepermitirá a nadie construir su Templo Inte-rior para buscar la Verdad simbolizada en la«Palabra Perdida». Entendamos, que la Fra-ternidad que proyecta la Masonería es indi-vidual y la búsqueda de la Verdad, por lo tan-to, es individual. Pinochet, en consecuencia,poseía muy escaso tacto y un bajo coeficien-te intelectual atiborrado por las marchas, laengorrosa rutina castrense, las condecoracio-nes y las adulaciones de sus séquitos. Comoescribe el escritor mexicano Hugo Hiriart, «eltirano nace de la disociación de poder, por un

lado, y racionalidad, por otro. Es poder sin racionalidad. Noconvence, no explica, no persuade, manda en seco sin justi-ficar la orden; por eso los tiranos gritan, amenazan tanto,porque no emplean argumentos, sino imponen su arbitrarie-dad».

Pinochet demostró que era un fanático y obseso por elpoder. Los masones sabemos que el fanatismo es la pasiónexacerbada e irracional hacia algo. En otras palabras, el fa-natismo es la forma encolerizada de la intolerancia. Voltaire,en su Diccionario Filosófico califica el fanatismo como unaenfermedad del espíritu que se contrae como la viruela. Esel efecto de una conciencia falsa que somete la religión a loscaprichos de la fantasía y al desorden de las pasiones.

El filosofo Juan Nuño, por otra parte, apuntaba que elhombre es y seguirá siendo esencialmente el más salvaje delos mamíferos, dotado de la peor de las armas, la del pensa-miento organizado a través de la memoria, lo que le permite

6 VITRIOLVMvolver siempre a rematar sus enemigos con saña y crueldadúnicas.

Permítanme, además, recordarles que la historia deAmérica Latina está plagada desde los primeros deceniosdel siglo XIX de dictaduras militares y civiles. Un elementose destaca: el poder. Los dictadores y tiranos actúan comoposeídos por la conducta de un jabalí, de esaenfermedad malévola de la fuerza bruta y el poder, dondetambién se le da un golpe a la lógica y la razón.En la literatura latinoamericana hay numerosas novelas so-bre los dictadores y las dictaduras. Tomás Eloy Martínez, elescritor argentino autor de La novela de Perón, afirmabaque las novelas con la figura del dictador son recurrentes enla literatura porque éste es un tema recurrente en la vida delos latinoamericanos.

Los dos últimos dictadores que murieron en años re-cientes fueron Alfredo Stroessner, quien gobernó a Paraguaypor más de 30 años y murió en Brasil a los 93 años y Augus-to Pinochet, falleció a los 91 años. Ninguno de ellos, paga-ron sus numerosos crímenes de lesa humanidad. El críticoJulio Ortega afirmaba que felizmente, de algunos dictado-res de ferocidad y codicia criminales –como Stroessner yPinochet– no creo que pueda haber novelas: son de unamediocridad irredimible y sólo producen repugnancia mo-ral. Asimismo, el escritor mexicano Octavio Paz, escribe:«Toda dictadura, sea de un hombre o de un partido, desem-boca en las dos formas predilectas de la esquizofrenia: elmonólogo y el mausoleo».

NOTAS[1] FRAU ABRINES, Lorenzo, Diccionario enciclopédico dela masonería, II Vol., Ciudad de México, Editorial del Vallede México, 2006, p. 1075.

[2] GALLATIN MACKEY, Albert, Enciclopedia de laFrancmasonería, III Vol., México, Grijalbo, 1981, pp.1157-1158.[3] FERRO, José Francisco, Diccionario masónico entre co-lumnas, Buenos Aires, Lumen, 2007, p. 50.

OBRAS CONSULTADASANDERSON, John Lee, El dictador, los demonios y otras cró-nicas, Barcelona, Anagrama, 2009.FRAU ABRINES, Lorenzo, Diccionario enciclopédico de lamasonería, Ciudad de México, Editorial del Valle de Méxi-co, 2006.FERRO, José Francisco, Diccionario Masónico entre colum-nas, Buenos Aires, Lumen, 2007.GALLATIN MACKEY, Albert, Enciclopedia de la francmasonería,III Vol., México, Grijalbo, 1981.NUÑO, Juan, La veneración de las astucias, Caracas, MonteÁvila Editores, 1989.OVERY, Richard, Dictadores, Barcelona, Tousquets Edito-res, 2006.

Pinochet con Allende, antes de darle el golpe de Estado.

7 VITRIOLVM

QQ∴ HH∴Todos: Hoy quiero conversar con voso-tros, acerca del Q∴ H∴ Hermes Trimegistos, también co-nocido con los siguientes nombres:Caduceo: En cuanto a la Medicina, preside hasta hoy y através del Bastón de Esculapio (su hijo)todas aquellas ciencias, no solo vincula-das a ésta sino a la farmacopea.Dios de los que no tienen Dios.Dispensador de la reminiscencia.Dios Escritor: En la tradición Hermética,llamado escriba de los Dioses.Heraldo del Gran Arquitecto de las Logiasque Trabajan bajo la Bóveda Celeste.Hermes Atlante. Un Dios antediluviano.Hermes Nous (de mente divina) – H. Mer-curio Dios Mensajero) – Thot Egipcio) .Hermes Poimandrés (Pastor de hombres).Psicopompo: Vehículo de la enseñanza.Hermes, según Pitágoras, padre de la Arit-mética y la Geometría.

Una de sus mayores enseñanzas, fuela de Tallar la Piedra Bruta (nuestro Tem-plo Interior), y para esto, como H.Trimegistos, nos dice que los doce enemigos internos den-tro de cada uno de nosotros son: la ignorancia, la tristeza, laenvidia, el fraude, la injusticia, la inconstancia, el deseo, lalujuria, la decepción, la ira, la temeridad y la malicia. ComoPastor de hombres, los doce enemigos son: los 5 primeros y

la incontinencia, la concupiscencia, la codicia, el engaño, lacólera, la precipitación, la maldad. Estos enemigos los com-batimos con la belleza y la perseverancia.

Dentro de sus frases, las cuales son un compendio deSABIDURIA: están: “El mayor de losmales entre los hombres, es la ignoran-cia acerca de Dios”. –“La sabiduría deDios es: el bien y lo bello, la dicha y lavirtud total, la eternidad. La Eternidadque hace del mundo un orden, introdu-ciendo la inmortalidad y la duración enla materia”. –“Que ninguno de los seresperece y que es un error llamar a los cam-bios destrucciones y muertes.” –“Ado-remos a Dios con acciones de gracias,este es desde luego, el mejor incienso quepuede ofrecérsele”. –“Dios hace la eter-nidad, la Eternidad hace al cosmos, elcosmos hace el tiempo, el tiempo haceel devenir”.

“La física Hermética, depende de laciencia que hace consistir a todos los se-res sublunares de tres principios: Sal,

Azufre y Mercurio, relacionando todas las enfermedades conun defecto de equilibrio en la acción de estos tres princi-pios” – “Una interrogante que nos deja H. T. Sí la materiaes una y el alma una ¿A cuál de las dos corresponderá elcuidado de proveer la creación?.Y sí ese cuidado correspon-

Hermes TrimegistosQ∴ H∴ LUIS M. BLANCO FUENTESR∴ L∴ Jesús Enrique Lossada N° 146Or∴ H∴ de Ciudad Ojeda, Estado Zulia.

8 VITRIOLVMde conjuntamente a uno y otro, ¿Cuál de los dos tendrá en élmayor parte?”. – Dios no es inactivo, de lo contrario lo seríatambién todo el universo, por que todo está lleno de Dios” –“El hombre terrestre es un dios mortal, el Dios celeste unhombre inmortal; es entonces por intermedio de esa pareja,cosmos y hombre, que todas las cosas existen, si bien todashan sido producidas por el Uno” –“El intelecto es el Espíri-tu del Bien. Feliz el alma que ha sido colmada por completocon este intelecto, infortunada la que está totalmente vacíade él”.

“Allí donde la tristeza, no hay ningún lugar para elBien, y donde está el Bien, no hay lugar para ninguna pa-sión. Allá donde está el día, no hay lugar para la noche. Queel Bien existe sólo en Dios y en ninguna otra parte”. –“Siprimero no odias tu cuerpo, hijo mío, no puedes amarte a timismo. Pero si te amas a ti mismo, poseerás el intelecto, yposeyéndolo, tendrás también parte del Conocimiento, y allídonde no queda sino elegir, la derrota de uno manifiesta lapotencia activa del otro (Luc. 16-13; Mat. 6-24 ‘No se pue-de servir a dos señores a la vez’)”. –“Dios no es el intelecto,sino causa de que el intelecto exista; no es aliento, sino cau-sa de que el aliento exista, y no es luz, sino causa de que laluz exista”. –“Donde quiera que hay vida hay alma y dondequiera que hay alma hay mente” –“El alma está en el cuer-po, la mente en el alma, en la mente el verbo y de todo espadre Dios”. –“Dios anuncia al hombre las cosas futura porseis vías: Por los sueños, por los portentos, las aves, los in-testinos, los espíritus y la Sibila (En la antigüedad, pitonisa,sacerdotisa; la Sibila de Delfos )”.

El cuadro Logial, según Hermes: Azufre: el VenerableMaestro. Mercurio: Primer Vigilante. Sal: Segundo Vigilante.Fuego: Orador. Aire: Secretario. Agua: Hospitalario. Tierra:

Tesorero. Aquí se encuentran los tres principios y los cuatroelementos.

El escritor René Guénon (francés, 1886-1951), en larevista Símbolos N° 17 y 18 de 1999 con su trabajo “LaTumba de Hermes”, señala que en la tercera de las 3 Gran-des Pirámides Egipcias, está enterrado el cuerpo de Hermes.(El nombre griego de Hermes deriva de hermencia, que ellatín traduce de intérprete). Además, en dicha Pirámide, tam-bién yacen enterrados, o mejor, ocultos, los grandes miste-rios de la Ciencia Sagrada, sus misterios y revelaciones”.Cierro esta parte, con este verso de Proclo, (Himno IV):“¡Oídme, poderosos liberadores!Concededme, por la comprensión de los libros divinos y disipando la tiniebla que me rodea,una luz pura y santaa fin de que pueda comprendercon claridad al Dios incorruptible y tambiénal hombre que soy”.

Bibliografía“Hermetismo y Masonería”. Q∴ H∴ Federico González.Buenos Aires, 2001, Ed. Kier.Bibliografía recomendada (en español):“Ciencia del Hombre y Tradición”, Gilbert Durand. Ed.Paidós, Barcelona,1999.“Los siete capítulos de Hermes” Ed. Atalanta – Barcelona1995 –“Textos gnósticos, Biblioteca de Nag Hammadi” (Los ro-llos del Mar Muerto).“Contemplé a la ilustre y triple descendencia de Hermes”.Ed. Gredos. Madrid, 1987 por Apolunio de Rodas.“Corpus Hermeticum y Asclepio. Ed. Siruela, Madrid, 1999.“Proclo, himno a las Musas”. A. Bosch. Barcelona, 1980.

9 VITRIOLVM

Venerable Maestro y todos mis Queridos Hermanos en susgrados y calidad.Hay sal o cloruro de sodio en la naturaleza:a) El estado de la roca: sal de roca (o sal de la tierra, esbueno ver un estado puro)b) En solución en el agua de marLa sal es imperecedero como cualquier otro mineral, perodotado de una acción de limpieza.

Observamos el diccionario: Sal: nombre masculinoproviene del latín “sal”: sustancia incolora,cristalina, frágil, soluble y un sabor acre, quese utiliza como condimento.

Sal: marcó el inconsciente colectivo dela humanidad en la tierra un lugar a otro. Sucarácter sagrado explica su papel en la reli-gión, brujería, tradiciones, supersticiones ycreencias populares. Entre muchos pueblos(griegos, judíos, rusos, árabes, etc. ...) lamejor recepción estaba reservado para losviajeros, ofreciendo pan y la sal.

Todas las ciudades importantes de laantigüedad fueron construidas cerca de losdepósitos de sal. Por lo tanto, las cunas de lacivilización eran regiones donde abunda la sal: Egipto,Mesopotamia, a orillas del Mediterráneo. En el cristianis-mo, la sal se asocia con el agua bendita del bautismo.

El Islam reco. mienda la limpieza de la piel de losrecién nacidos con sal para protegerlos del mal.

En la masonería, la sal está en el gabinete de reflexión ysimboliza la sabiduría y el conocimiento.“La cristalización de la sal es la parte estable de ser”. (OswaldWirth)

El agua y el fuego, dos grandes principios de la vida,presiden el nacimiento de la sal:a) Porque la sal es solubleb) El fuego, ya que es necesario para evaporar la salmuerapara obtener la pureza del producto.

La sal en la economíaComo no era la ruta de la seda, las

especias, no había sal del camino. Laruta de la sal primera operación fue asig-nada por Roma: “Vía Salaria”.La primeras salinas (marismas) apare-cieron en la época galo-romana. Estassalinas fueron muy apreciadas por sunombre y su referencia a la nómina:“salarium”; es decir, era la cantidad desal que el soldado romano recibía comopago por sus servicios (más tarde fuetransformado en dinero).No se olvide que el masón recibe un

salario por el trabajo que realiza en la Logia, ello significaun aumento de salario a un grado superior.

La Francia de Luis XIV era el reino más grande en elmundo (occidental), con sus 23 millones de habitantes (Ru-sia: 11 millones, Inglaterra: 6000000), ya que tenía que apro-

La sal de la vidaQ∴ H∴ JOSÉ RUBIO ARVELO

Logia Joie et Sagesse, Draguignan, Francia.(Plancha original en francés Le sel de la vie. Traducción Q∴ H∴ Angel Medina)

10 VITRIOLVMvisionar a rodas las comunidades en las Islas Baleares ,Cerdeña, Venecia y la Toscana, al sur de Francia.

Las rutas de la sal pasaron por diferentes formas deexplotación. En 1340, mediante decreto, el rey Felipe VI deAnjeo crea el monopolio real de la venta de la sal: Gabelle(Tasa, impuesto o gravamen).

Gabelle proviene del árabe “alQabala” que significa impuesto o tributo(una denominación dada a un antiguo im-puesto que se cobraba sobre ciertos artícu-los de primera necesidad y, por extensión,parece que se utilizaba para designar a losalmacenes donde se guardaban estos pro-ductos, en este caso la sal).

En 1680, el rey Luis XIV publicó sugran decreto de la sal.

La revolución suprime en 1790 esedecreto, pero Napoleón lo restablece bajouna forma suavizada en 1805. ¡Definitiva-mente fue abolida sólo bajo la cuarta Re-pública francesa en 1945!

La sal no se utiliza solamente en lacocina o la comida, puesto que hay más de14.000 usos de la sal que incluyen, entre otros:• La purificación del agua.• Se emplea en la seguridad vial y en la construcción de lascarreteras para dar firmeza al terreno.• Los alimentos elaborados para alimentar a los animales.• Sirve como abono, fertilizante y herbicida.• Es utilizado en la capa que cubre los cubiertos de metal• Producto utilizado para fijar las tinturas en la elaboracióntextil.

• Sirve para la deshidratación de cueros y pieles para evitarla putrefacción.

Asimismo, se ha sido utilizado en la congelación,liofilización, en la industria láctea para la elaboración delqueso, en las charcuterías, elaboración industrial de sopas y

en las panaderías.En el Antiguo Testamento, la sal

constantemente está presente por sus usosprácticos y sus funciones simbólicas. Paralos hebreos, es un don del Creador, sinembargo, lo que distingue la sal de otrosen la Creación, son sus poderes singula-res benéficos (alimento, sabor, purifica-ción) y maléficos (secado y evaporación,destrucción de la vida).

La leyenda de la sal aparece simbo-lizada en la destrucción de Sodoma yGomorra (situados cerca del Mar muer-to, el mar con la más alta densidad desal, donde no se reproduce ningún servivo). La palabra Leyenda proviene delverbo latino “legere”, cuyo significadovariaba entre escoger (acepción de la que

proviene elegir) y leer. “La mujer de Lot miró para atrás y sehizo una columna de sal” (Génesis 19: 23-26). La mujer deLot se formó en la tradición popular judía y cristiana.

En el Nuevo Testamento, la referencia sobre la sal seencuentra en el Sermón de la Montaña. “…Vosotros sois lasal de la tierra…” (Mateo 5:13-16).

El Mar Muerto es un lago endorreico ubicado 416,5metros bajo el nivel del mar entre Israel y Jordania. Tieneuna longitud de 80 km, una anchura de 16 km y un área de810 km. El agua es rica en calcio, magnesio, potasio y bromo.

11 VITRIOLVM

La salinidad es extremadamente importante: el 30 %,e impide a un ser vivo fluir por las aguas naturalmente y lepermite flotar sin esfuerzo.

El desierto de sal (Salar de Uyuni)Está situado en 3.650 metros de altitud en el suroeste

de Bolivia, con una superficie de 12.000 km ², que contiene10 mil millones de toneladas de sal. 25.000 toneladas sonextraídas cada año.

Cuenta con 140 millones de toneladas de litio (metalblanco, alcalino, el más ligero de todos los sólidos con den-sidad 0,53), es el más grande en el mundo. Este mineral estáen el proceso de sustitución de los combustibles fósiles.Bolivia es el país más pobre de América Latina, el país notiene acceso al mar, se encuentra aislado.

Después de la guerra con los países vecinos (Argenti-na y Perú), perdió una parte del desierto de sal.

El litio es una extracción de recursos nuevos (y expor-tación) le permiten invertir en el desarrollo del país.La Salina Real de Arc-et-Senans se encuentra en el bosquede Chaux cerca de Besançon en el departamento de Doubs,fue incluida como Patrimonio Mundial de la UNESCO des-de 1982.

Esta fábrica, para la producción de sal, fue creado porla voluntad de Luis XV y construido entre 1775 a 1779 porel arquitecto visionario de la Ilustración: Claude NicolasLedoux (1736-1806) y fue destruida por un incendio en 1918.Esta obra maestra es un testimonio excepcional de la histo-ria de la arquitectura industrial. En la actualidad, funcionacomo un museo.

El 12 de marzo de 1930, Gandhi (el Mahatma) empie-za una marcha de la sal con el fin de arrancarles la indepen-dencia de la India a los británicos (en el marco de la campa-ña de désobeissance civil). Deja su “Ashram” de los alrede-dores de Ahmedabad, en el Noroeste del país, acompañadopor algunas decenas de discípulos y una cohorte de perio-distas.

Después de un viaje de 386 kilómetros a pie, a vecesel 6 de abril en el borde del Océano Índico.

Se mete en el agua y se acumula en sus manos un pocode sal. Con este gesto ridículo y altamente simbólico, Gandhianimó a sus compatriotas a romper el monopolio estatal so-bre la distribución de sal.

En efecto, este monopolio obliga a todos los consu-midores indios, incluido los más pobres, a pagar un impues-to sobre la sal y les prohíbe, además, cosecharlo ellos mis-mos. Es análogo al impuesto de la Gabella bajo el antiguorégimen en Francia. Su ejemplo es seguido por todas partes

12 VITRIOLVMen el país. Gandhi y varios millares de contraventores fue-ron encarcelados.

Pero al final, el virrey reconoce su incapacidad parahacer cumplir la ley británica. Se libera a los presos y dar alos indios el derecho a recoger la sal. Unos años más tarde,15 de agosto de 1947, India obtuvo su independencia a cos-ta de una partición con Pakistán y masacres religiosas. Lamarcha de la sal es el equivalente indio del “tea party” enBoston, que condujo a la independencia de los Estados Uni-dos.

Creencias popularesEn la creencia popular, la sal difundida por el umbral

de una vivienda o de un establo, o sobre el ganado conjura-ba la mala suerte o alejaba a los demonios y las enfermeda-des. Cerca de Bigorre (población y comuna francesa), seechaba sal en los bolsillos de los jóvenes novios para darlesbuena suerte. La sacralización de la sal influyó sobre lassupersticiones, como el temor provocado por un salero de-rribado sobre la mesa.

En el pasado, la sal estuvo considerada como unamedicina milagrosa: en ungüento, en polvo; los médicos loprescribían para tratar todo tipo de enfermedades: las pica-duras de avispas, las anginas, las caries, la tos. La sal es unamateria prima rica en historias, mitos y supersticiones.

La sal fue una suerte de estrategia política y de avancetecnológico. Se asocia su importancia con la economía y elpoder. Tanto la sal como el agua, puede ser fuente de gravesproblemas en un futuro cercano (conflicto del Medio Orien-te).

Mis Queridos Hermanos, concluyo invitándoles queen el momento oportuno de realizar nuestros ágapes o fies-tas no derramemos la sal sobre la mesa para evitarnos unamaldición. Acuérdense también de la escena del cuadro de

Leonardo de Vinci cuando al verterse la sal ésta se convierteen un signo del pacto roto.

En el Antiguo Testamento, la salconstantemente está presente por sus

usos prácticos y sus funcionessimbólicas.

Para los hebreos, es un don delCreador, sin embargo, lo que

distingue la sal de otrosen la Creación, son sus poderessingulares benéficos (alimento,

sabor, purificación)y maléficos (secado y evaporación,

destrucción de la vida).

13 VITRIOLVM

«Mañana, estoy seguro, muchos maldecirán mi nombre»,dijo el führer Adolfo Hitler, dictador del Tercer Reich,mientras caminaba y se movía como un desquiciado

mental dentro de su habitación en aquella fría mañana del30 abril de 1945 cuando había decidido poner fin a suvida. Antes de que los rusos entraran al bunker dela cancillería, Hitler llamó a Bormann yGunsche, sus dos séquitos personales y lesdijo: «Eva y yo nos vamos a suicidar. Que-men nuestros cuerpos para evitar quemi cadáver sea expuesto al escar-nio público como si se tratase deun circo». El führer no quería ter-minar en un museo de cera, como lesucedió a su colega y aliado Il DuceBenito Mussolini.

En las obras literarias referentes a dic-tadores, dictaduras y tiranías, ya sea narrativao textos ensayísticos, –especialmente en la na-rrativa de Latinoamérica– hay un elemento encomún y, por la tanto, invariable a destacar: el as-censo y la permanencia en el poder absoluto por partede cualquier dictador lo transporta a la soledad y a ladeshumanización.

Hitler, al igual que dictadores latinoamericanos comoRafael Leónidas Trujillo, Marcos Pérez Jiménez, Juan Vi-

cente Gómez, Alfredo Stroessner, Augusto Pinochet yAnastasio Somoza, por solo citar algunos, le tenían pavor aser convertidos en estatuas, quizás, por aquello, que éstassiempre suelen ser cagados por los pájaros y meados por los

perros.Etimológicamente, según los diccionarios y enciclo-pedias, la palabra Tiranía (del griego ôõñáííßá), en el

sentido que se dio al término en la Grecia antigua,era el régimen de poder absoluto, de ordinario

unipersonal, que con frecuencia instauraba el ti-rano, aquel o aquellos que habían derrocado

el gobierno de una ciudad-estado, normal-mente gracias al apoyo popular, pero tam-

bién mediante un golpe de estado mili-tar o una intervención extranjera, mien-

tras que Tirano, dícese del que abu-sa de su poder, superioridad o fuer-za en cualquier concepto o materia,

y también simplemente del que imponeese poder y superioridad en grado extraor-

dinario.Precisemos, entonces, que la tiranía es el nom-

bre que dieron los griegos al «gobierno de poder ab-soluto», que en ocasiones podía instaurar un solo hom-

bre, normalmente gracias al apoyo popular. El tirano ocupael poder, no por derecho, sino por la fuerza, y muy a menu-

El indiscreto encanto de los tiranos,dictadores y gorilas

Q∴ H∴ ANGEL R. MEDINAR∴ L∴ Leonardo Da Vinci N° 244Or∴ de Maracay, Aragua, Veneuela.

14 VITRIOLVMdo con el auxilio de la demagogia y el populismo. La dicta-dura, en cambio, fue una magistratura de la república roma-na y, quizás, el dictador más célebre fue Julio César, quedespués de convertirse —gracias a sus victorias militares—en el amo de la república de Roma, se hizo nombrar dictatorperpetuus (dictador vitalicio) e inició una transformaciónde la sociedad, hasta que cayó víctima de la conspiración delos «idus de marzo». Con todo, no escorrecto confundir dictador con tira-no, y la diferencia fundamental está enla legalidad de su origen.

Tal vez la mejor definición de loque es una tiranía se encuentra en laPolítica de Aristóteles cuando afirma:«El tirano sale del pueblo, y de la masa,en contra de los nobles, para que elpueblo no sufra ninguna injusticia porparte de aquellos. Casi la mayoría delos tiranos han sido demagogos que sehan ganado la confianza del pueblocalumniando a los notables».

Cuando las dictaduras militareslatinoamericanas asolaban nuestrospaíses, los lectores buscaban desenfre-nadamente libros que, de algún modo,fuesen similares al Tirano Banderasdel escritor español don Ramón delValle-Inclán, quien, estando de viajepor México, fue impactado por los movimientos insurgen-tes y sus poblaciones fascinantes, cuyas gentes y girosidiomáticos se reflejan en su producción literaria, con unadeformación grotesca de la realidad social y la personalidadhumana.

La historia de América Latina –contrariamente a loque muchos se imaginan– está plagada de dictadores, tira-nos y gorilas caribeños. Visto desde otra óptica, parecierecomo algo folclórico con ribetes de un maquiavelismo su-cinto o lacónico. La historia de las dictaduras civiles y mili-tares, que asaltaron el poder desde los primeros decenios

del siglo XIX sólo nos trajeron ignorancia,represión, miseria y dolor.

Dictadores: ficción y realidadEn efecto, la realidad es la realidad

y en muchos de los casos nos percatamosque a menudo, esa realidad supera a la fic-ción. La vida de un dictador, además deser un golpe a la lógica y la razón, comoen el caso de Juan Vicente Gómez y Mar-cos Pérez Jiménez, en Venezuela; Augus-to Pinochet, en Chile; José Rafael Videla,en la Argentina o Alfredo Stroessner, enParaguay es la demostración de lo que leocurre al hombre cuando sus relacionesno pueden desarrollarse de manera natu-ral; cuando, para sustituir a la unidad fa-miliar o a la fe religiosa, sólo es posible laadhesión al poder, encarnado en un per-sonaje que se mueve entre la luz y las ti-nieblas, entre el sueño y la pesadilla, en-tre la realidad y la fantasía.

El hecho de escribir esta planchasobre las tiranías y tiranos, obedece a que al cerrarse lostrabajos y antes de abandonar la Cámara de una Tenida, losmasones juramos –como lo hacía el Generalísimo Francis-co de Miranda en las Logias Lautaro– mantener los secretosde la Orden y decimos al unísono y a viva voz: Repudio

15 VITRIOLVMeterno a los tiranos y a las tiranías. ¿Por qué –como afirmaPedro Barboza de la Torre– en algunas Logias de nuestraObediencia se exige el repudio y no el odio a los tiranos y alas tiranías? Los masones, lamentablemente y en la mayoríade los casos –y puede que esto hiera sentimientos encontra-dos–, actuamos como timoratos o pávidos, y salimos con elcliché estereotipado y el lugar común de siempre: «a losmasones se nos enseña a amar y no aodiar». Evidentemente, más que en el as-pecto ético, los masones nos enredamosen la etimología y la sintaxis de los ver-bos amar y odiar. [1]

Barboza de la Torre escribe: «Repu-diar significa desechar o repeler un cón-yuge. Es un derecho muy antiguo […]. Re-pudiar es, también, negarse a aceptar unaherencia; rechazarla. Precisamente poreso, «repudiar» a los tiranos y a la tiraníasólo significa «renunciar» a los tiranos yluchar contra la tiranía». Por ello, Barbozade la Torre, enfatiza que «Odiar es otracosa. Significa tener antipatía y aversiónhacia una cosa o persona. Aversión es opo-sición y repugnancia. El odio obliga alfrancmasón a combatir al tirano y luchar contra la tiranía(subrayado en el original del autor). Este es un lenguaje di-ferente. [2]

Uno de los ámbitos más vulnerables y que presentamayores debilidades a la hora de modificar la sustancia delas cosas, es sin duda alguna el de los vocablos. Montesquieudecía que cuando se busca tanto el modo de hacerse temerse encuentra siempre primero el de hacerse odiar. Eso esta-blece la diferencia entre «repudiar» y «odiar», porque los

vocablos se van mutando hasta que podamos entender laimportancia del lenguaje.

Desde que ingresamos a la Orden se nos ha enseñadoque la Francmasonería no practica el odio; sin embargo,veamos al respecto lo que nos dice Barboza de la Torre ensu Monografía N° 3, Justificación del Juramento Odio eter-no a los tiranos y la tiranía:

La Orden enseña a amar. ¿Cómo, enton-ces, jurar odio eterno a los tiranos y la ti-ranía? Se responde: Porque laFrancmasonería ama la instrucción y odiala ignorancia; ama la libertad religiosa yde cultos, y odia el fanatismo y la supersti-ción. Si odia la ambición, la persecución,la falta de libertad y la traición, ello indi-ca que debe odiar a quien gobierna y nie-ga la libertad, la igualdad y la fraternidad[…] [3]Con toda la reticencia o diferencia que al-

gunos Queridos Hermanos pudiesen tenersobre la concepción de «Tirano» y «Tira-nía» expuesto por Barboza de la Torre, nohay dudas de que el «Tirano» nace de ladisociación de poder, por un lado, y racio-

nalidad, por otro. «Es poder sin racionalidad. No convence,no explica, no persuade, manda en seco, sin justificar la or-den; por eso los ‘tiranos’ gritan, amenazan tanto, porque noemplean argumentos, sino que imponen su arbitrariedad».[4] Decía el escritor checo, Franz Kafka: lo que caracterizaal tirano es la «arbitrariedad del capricho». Es decir, «cuan-do se manda en cualquier concepto o materia, sin leyes oreglas, sin explicar ni dar razones, por tanto sin respaldo

16 VITRIOLVM

racional ninguno, aparece la figura execrable y pintorescadel tirano». Por eso, Francisco Franco en España y AugustoPinochet en Chile, por ejemplo, apegados a las reglas de sushorrendos movimientos fascistas, fueron dictadores pero notiranos. Nerón y Hitler si fueron tiranos. Estos dos mons-truos, cosa singular, se creían artistas; pero la historia lesquita la careta a estos personajes y suelen durar poco porquela propia irracionalidad que generan alrededor de ellos losacaba destruyendo. Así es como la irracionalidad capricho-sa se vuelve sobre el tirano que la practica.

Si regresásemos a lo que plantea el Q∴ H∴ Barbozade la Torre cuando afirma que «el auténtico francmasón debeodiar a los tiranos y a todas las tiranías, y hacerlo eterna-mente» es que luchar contra una tiranía es algo que se puedehacer de varias maneras. No sólo con las armas se combateun tirano. Con la educación se combaten todos los tiranos,porque el ignorante, en ocasiones, espera que alguien le en-señe a odiar al tirano. [5]

Odio a las tiranías y tiranosPara nosotros los masones, sobre todo, quienes cree-

mos en una masonería sin dogmas ni cortapisas, debemosatestiguar claramente: Juremos odio eterno a la tiranía y alos tiranos, como debiese ser y diferenciando el abismo gra-matical existente entre «odio» y «repudio» –y esto incluyelas Tenidas de primer Grado– donde en una forma timoratahemos adoptado como un cliché, pronunciar la palabra «re-pudio» en vez de «odio» cuando juramos ante el Ara al con-cluir los trabajos.Efectivamente, el primer derecho del hombre es la Libertad.Ya el poeta y ensayista mexicano, Octavio Paz, en La tradi-ción liberal, decía que «sin libertad la democracia es despo-tismo, sin democracia la libertad es una quimera». Paz acu-

ñaba esa frase que posteriormente dejaría esculpida en suensayo América latina y la democracia: «durante más de unsiglo América Latina ha vivido entre el desorden y la tira-nía, la violencia anárquica y el despotismo». [6] Al respec-to, Paz habla sobre la legitimidad histórica de la democraciay contrapone que la dictadura es el régimen de excepción.«El conflicto entre la legitimidad ideal y las dictaduras dehecho es una expresión más –y una de las más dolorosas–de la rebeldía de la realidad histórica frente a los esquemasy geometrías que le impone la filosofía política». [7]

Precisamente, esto ratifica la posición de Barboza dela Torre cuando testifica que el auténtico francmasón debeodiar a los tiranos y a todas las tiranías y hacerlo eternamen-te. El Ilustre Hermano no nos exhorta a la insurrección; todolo contrario, nos señala otro camino, puesto que para lucharcontra la tiranía no hacen falta las armas, sino la educación,porque con ella «se combaten todos los tiranos, porque el

17 VITRIOLVMignorante, en ocasiones, espera que alguien le enseñe a odiaral tirano». [8]

El crítico Angel Rama, en su libro Los dictadores lati-noamericanos, al referirse a los caudillos latinoamericanos,decía que a pesar de que existían sociedades enLatinoamérica «ideológicamente modernizadas», hemos te-nido también exabruptos como los regímenes totalitarios ysanguinarios de José Rafael Videla en laArgentina, de Papa Doc Duvalier en Hai-tí, Rafael Leonidas Trujillo en Repúbli-ca Dominicana y Alfredo Stroessner enParaguay, por citar sólo algunos de estoscasos, quienes plagaron de tristeza y do-lor a sus pueblos por aquello de que «todoel poder quedaba en manos de un hom-bre providencial. Y que de allí extraía,como pensaba José Martí, el apoyo ne-cesario para mantenerse en el poder, másque del terror, del ejército o la iglesia».[9]

En resumen, Rama dice que reco-nocer esto es muy duro, quizás imposi-ble, «para los hombres cultos que hanluchado férreamente contra a sanguina-ria conducta de los dictadores, para quie-nes han padecido el desorden, la igno-rancia encaramada, la estulticia de los oficiantes del poder,el desprecio de las vidas humanas, la incapacidad para desa-rrollar las riquezas propias». [10]

La masonería simbólica, nos dota de conocimientoshistóricos y religiosos excepcionales que nos permite dis-cernir, notoriamente, sobre la conjura del despotismo de lospolíticos y la intolerancia eclesiástica. Ayer, fue el extermi-

nio de los Caballeros Templarios, que, como sabemos, nofue un hecho aislado, sino que resultó un complot de lamonarquía y del poder canónigo en los tiempos del SantoOficio y que, tristemente, todavía en este siglo, la iglesia harespaldado a dictadores y regímenes totalitarios, en actosque difieren de la fe y las enseñanzas cristianas.

Durante el siglo XX, gran parte de América Latina fueescenario de múltiples gobiernos dictato-riales. Expresados en sus distintas formas,primordialmente el militarismo. Esta cir-cunstancia, por su naturaleza política, al-teró todos los ámbitos: la economía, lacosmovisión de los ciudadanos, la cultu-ra. Un fenómeno interesante lo fue el augedel subgénero novela de la dictadura lati-noamericana a partir de 1974 y con ante-cedentes en 1926 y 1946. Los más impor-tantes escritores latinoamericanos tomaronla dictadura como temática de sus nove-las, bien sea por la necesidad de denunciao por lo explotable, desde el punto de vis-ta literario, de construir el personaje dic-tador latinoamericano, considerando sucomplejidad por su indivisible vínculo conel poder. En la novela El otoño del patriar-ca de Gabriel García Márquez, el escritor

relaciona tres criterios de naturaleza politológica: el mitopolítico, el culto a la personalidad y los mecanismos repre-sivos implementados en las dictaduras. Los tres elementosforman parte de la construcción de dictadura y dictador queGarcía Márquez desarrolla en la novela estudiada.Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura, dice, por ejemplo,que «el doble significado de la soledad –ruptura con un

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mundo y tentativa por crear otro– se manifiesta en nuestraconcepción de héroes, santos y redentores». Paz, es explíci-to cuando se refiere a este punto y escribe que:La soledad es ruptura con un mundo caduco y preparaciónpara el regreso y la lucha final. Arnold Toynbee ilustra es-tas ideas con numerosos ejemplos: el mito de la cueva dePlatón, las vidas de San Pablo, Buda, Mahoma, Maquiavelo,Dante. Y todos en nuestra propia vida y dentro de las limi-taciones de nuestra pequeñez, también hemos vivido en so-ledad y apartamiento, para purificarnos y luego regresarentre los nuestros. [11]

Sobre ello, el ensayista Angel Rama, con su sobradaerudición, en su libro Los dictadores latinoamericanos, hacereferencia que «el ascenso y permanencia en el poder abso-luto de un hombre era simultáneamente el proceso de la

deshumanización». Rama, para explicarnos el ascenso ydescenso de un dictador, subraya:El paradigma de este teorema fue establecido por WilliamShakespeare en la madurez de su carrera, cuando presen-ció, a lo largo de la conspiración de Essex, la sangrientadisputa por la corona, a la cual consagró su obra más auste-ra: Macbeth. Allí vemos a un hombre que va perdiendo todo–respeto, amigos, mujer, «la joya de la vida eterna», la hu-manidad misma– porque desde el principio clama que«nada existe para mi sino lo que no existe todavía», esacorona que cuando se ajuste sobre su cabeza certificará ,como un círculo mágico, la inhumanidad. [13]

Tomando en cuenta lo antes expuesto, recordemosque una de las características propias del Rito Escocés An-tiguo y Aceptado de la Masonería ha sido, desde siempre,la defensa que ha hecho –de forma activa– del derecho in-alienable del hombre a la libertad absoluta de conciencia yde pensamiento. Al decir de Barboza de la Torre, laFrancmasonería Universal desde el Grado de Aprendiz nosprepara para convertirnos en luchadores incansables con-tra «la ‘tiranía’, el absolutismo, el servilismo, la crueldad,la traición, la ambición y sus similares». La Masonería, através de los aspectos simbólicos de todos sus grados, nosaporta todas las herramientas disponibles para reflexionarsobre las dictaduras y las tiranías.

«Las dictaduras» –sentencia el escritor argentino Jor-ge Luis Borges– «podrían ser buenas, pero no lo son. Por-que la dictadura ilustrada es una utopía. Y las militares sonlas peores».

Notas[1] BARBOZA DE LA TORRE, Pedro A., Monografía N° 3: Jus-tificación del Juramento Odio eterno a los tiranos y la tira-

19 VITRIOLVMnía, Manual del Grado 30°, Maracaibo, Fondo EditorialMoral y Luces, 2002, p. 164.[2] Ibíd.[3] Ibíd., pp. 164-165.[4] HIRIART, Hugo, «Miniaturas: un tal Morell», en: LetrasLibres, México, 2001, p. 76.[5] BARBOZA DE LA TORRE, Op. Cit., p. 167.[6] PAZ, Octavio, Sueños en libertad, Barcelona, Seix Barral,2001, p. 377.[7] Ibíd., p. 399.[8] BARBOZA DE LA TORRE, Op. Cit., p. 167.[9] RAMA, Angel, Los dictadores latinoamericanos, Méxi-co, Fondo de Cultura Económica, 1976, p. 8.[10] Ibíd.[11] PAZ, Octavio, El laberinto de la soledad, México, 3a

ed., Fondo de Cultura Económica, 2004, p. 222.[12] Ibíd.[13] RAMA, Op. Cit., p. 52.

PRINCIPALES OBRAS CONSULTADASBARBOZA DE LA TORRE, Pedro A., Monografía N° 3: Justifi-cación del Juramento Odio eterno a los tiranos y la tiranía,Manual del Grado 30°, Maracaibo, Fondo Editorial Moral yLuces, 2002.BOBBIO, Norberto, Estado, gobierno y sociedad, México,Fondo de Cultura Económica, 1997.FRAU ABRINES, Lorenzo, Diccionario enciclopédico de lamasonería, I, II y III vols., México, Editorial del Valle deMéxico, 2006.GALLATIN MACKEY, Albert, Enciclopedia de la francmasonería,II y III vols., México, Grijalbo, 1981.

LAROUSSE, Diccionario enciclopédico, Bogotá, EdicionesLarousse, 2004.MAQUIAVELO, Nicolás, El príncipe, Caracas, Editorial Arte-El Nacional, 2002.OVERY, Richard, Dictadores, Barcelona, Tusquets, 2006.PAZ, Octavio, El laberinto de la soledad, 3ª ed., Fondo deCultura Económica, 2004.⎯⎯. El ogro filantrópico, México, Joaquín Mortiz, 1979.⎯⎯. Sueño en libertad, Barcelona, Seix Barral, 2001.RAMA, Ángel, Los dictadores latinoamericanos, México,Fondo de Cultura Económica, 1976.DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA, II vol., Madrid, Espasa-Calpe, 2000.VALLE-INCLÁN, Ramón de, Tirano Banderas, Madrid, Espasa-Calpe, 2006.

20 VITRIOLVM

El tiempo es la clave del modo en que lo percibimostodo. Es el tiempo lo que marca cada uno de los hechos, pensamientos y sucesos en nuestro viaje desde

que nacemos hasta que morimos. Nos podemos imaginarfácilmente un universo sin color o sin luz, pero es práctica-mente imposible imaginarnos un mundo sin tiempo. Sinembargo, hasta donde la física parece saber, puede que hayaque imaginarse un mundo sin tiempo.

En la antigüedad se afirmó quelos metales comunes se podían conver-tir en oro, y se asumió de forma natu-ral que debería existir una sustanciaque realizara ese proceso. Actualmen-te, asumimos que existe algo que mar-ca en transcurso de los acontecimien-tos. De igual modo que el espacio im-pide que todo suceda en el mismo si-tio, el tiempo impide que todo sucedaa la vez. Pero si lo pensamos más afondo, es fácil hacer un gesto a través del espacio, ¿pero esigual de fácil hacer un gesto a través del tiempo?I: Reloj al estilo Dalí en “La Persistencia de la Memoria”

La naturaleza real del tiempo, sigue siendo un con-cepto esquivo. Aunque a lo largo del siglo XX se realizarongrandes avances en este campo, en lo que concierne a qué esexactamente el tiempo, podríamos decir que no somos mássabios que los antiguos griegos. Platón, después de todo,creía que el tiempo era una ilusión.

Es muy común oír hablar que el tiempo fluye, pero¿fluye a través de qué? ¿A qué velocidad fluye? Tenemosclaro que la tierra se mueve a través del espacio, y su movi-

miento ha sido detalladamente descrito respecto a otros pun-tos de referencia tales como el sol. Sin embargo, el paso deltiempo no puede describirse más que con respecto a sí mis-mo.Si nos abstraemos de términos físicos, podemos llegar a laconclusión de que nuestra forma de considerar el tiempoestá ligada al modo en el que pensamos.

Después de todo, nosotros no vemosrealmente el paso del tiempo, si no que,simplemente, sufrimos una serie de ex-periencias distintas de las que tenemosalmacenadas en nuestros recuerdos y esesta diferencia o que nuestra mente cons-ciente percibe como tiempo.II: Reloj matemáticoAhora, si intentamos volvernos un pocomás racionales, podemos pensar que elpasado ya no existe, y no es más real quenuestra imaginación. Del mismo modo

podemos establecer que el futuro no existe, pues aún no hasucedido. Entonces, todo lo que es real es, simplemente unpunto infinitesimal que se sitúa entre el pasado y el futuro,que conocemos como presente.

Como el tiempo nunca se detiene, podemos determi-nar que la cantidad que define a esta rodaja infinitamentefina es cero. Así, el tiempo es real, pero nada más loes.Trasladándonos ahora a un entorno más científico, la cien-cia históricamente siempre ha perseguido el medir el tiem-po, otorgándolo un símbolo y situándolo en sus ecuacionesmediante la letra t, mientras que han intentado simultánea-mente ignorar los horrores filosóficos que crea su mera exis-

¿Existe el tiempo?

21 VITRIOLVMtencia. Pero con Michelson, Morley, Lorenzt o Einstein todoesto cambió.Albert Michelson y Edward Morley descubrieron que la ve-locidad de la luz medida por un observador es la misma conindependencia de la velocidad a la que se mueva dicho ob-servador con respecto a la fuente de luz. Más tarde, el físicoirlandés George FitzGerald y el físico holandés HendrikLorenzt sugirieron que este fenómeno se podía explicar si

suponemos que, en realidad,el tiempo transcurre más len-tamente para los objetos quese encuentran en movimien-to, introduciendo por prime-ra vez la posibilidad de queel tiempo fuera algo muy dis-tinto al concepto histórica-mente conocido.III: Albert EinsteinLa relatividad de Einstein tra-

jo el nuevo concepto del espacio-tiempo, demostrando queambas magnitudes no son más que dos caras de una mismamoneda. Según esta nueva teoría de Einstein cada punto delespacio pasa a poseer un tiempo personal, desapareciendoel concepto de tiempo absoluto. Con estas ideas, Einsteinllegó a la lógica conclusión de que el tiempo no fluye, y portanto el pasado, presente y futuro no existen como tal, vol-viendo a un concepto tan antiguo como el tiempo imagina-rio en el que creía Platón.

Siguiendo la revolución de la relatividad de Einstein,podemos representar gráficamente un objeto en movimien-to en el espacio-tiempo del mismo modo que lo hacemos enlas tres dimensiones espaciales. La física considera que eltiempo más bien como una etiqueta, un modo de pensar so-

bre los sucesos y, en concreto, una relación entre los suce-sos que puede ser descrita matemáticamente. Un punto porejemplo, sucede tanto en el espacio como en el tiempo. Sitomamos dos puntos, X e Y, aunque se puede establecer en-tre ambos una serie de relaciones tanto espaciales como tem-porales, la relación espacial es muy diferente de la tempo-ral.

Si X sucede antes que Y, entonces X puede afectar aY, pero Y no puede afectar a X. En otras palabras, podemoshablar del futuro causal, pero no de un pasado causal, o almenos, esto no concordaría con aquello que hasta ahora co-nocemos. De hecho, el espacio-tiempo de Einstein delineala geometría tanto del espacio como del orden de ocurrenciade los sucesos. A partir de una ocurrencia cualquiera, susefectos posteriores en el tiempo vienen representados comoun cono que se extiende hacia la dimensión temporal. En elinterior del cono, todos los sucesos son causales y lógicos,mientras que, en el exterior, la causalidad se pierde y reinala anarquía.

La idea de que el tiempo es un modo de decir que unacosa sigue a otra como resultado de esta otra, parece que esla clave de la verdadera naturaleza del tiempo.Fuente: http://recuerdosdepandora.com/filosofia/existe-el-tiempo/#ixzz2EVE0sTTf

º

22 VITRIOLVM

¡Qué extraños somos la mayoría de los mortales! Cadauno de nosotros estamos aquí durante un breve tiempo; ¿conqué propósito? no lo sabemos, aunque algunas veces pensa-mos que lo presentimos. Pero sin una reflexión más profun-da uno sabe, por la vida diaria, queexiste para otras personas — primeroque nada para todos aquellos cuyassonrisas y bienestar dependen total-mente de nuestra propia felicidad ydespués para los muchos, desconoci-dos para nosotros, a cuyos destinos es-tamos unidos por los lazos de simpa-tía. Cientos de veces al día me recuer-do a mí mismo que mi vida interior ymi vida exterior están basadas en laslabores de otros hombres, vivos omuertos, y que así mismo yo debo es-forzarme por dar en la misma medidaen que he recibido y aún estoy recibien-do…

Nunca me he fijado en el bien-estar o la felicidad como fines en símismos – esta base crítica yo la deno-mino el ideal de una pocilga. Los idea-les que han iluminado mi camino unay otra vez y que me han dado el coraje para afrontar la vidacon alegría han sido la Bondad, la Belleza y la Verdad. Sinel sentido del parentesco con hombres de la misma mentali-dad, sin la actividad con el mundo objetivo, los eternamenteinalcanzables esfuerzos en los campos de las artes y cien-

cias, la vida para mí estaría completamente vacía. Las cosastan trilladas de los esfuerzos humanos – posesiones, éxitoexterno, lujos – siempre me han parecido contemplativas.

Mi apasionado sentido de justicia y responsabilidadsocial han contrastado siempre, extra-ñamente, con mi pronunciada falta denecesidad de contacto directo con otrosseres humanos o comunidades. Yo soyverdaderamente un ‘solitario’ y nuncahe pertenecido a mi patria, mi casa, misamigos o aún a mi familia inmediatacon todo mi corazón; a la vista de to-das estas uniones, nunca he perdido elsentido de la distancia y la necesidadde la soledad…

Mi política ideal es la democracia.Dejar que cada hombre sea respetadocomo un individuo y que no se idolatrea ningún hombre. Es una ironía que yomismo haya sido el receptor de unaexcesiva admiración y reverencia porparte de mis semejantes, sin culpa niméritos propios. La causa de esto pue-de ser más bien el deseo, inalcanzablepara muchos, de comprender unas po-

cas ideas a las cuales yo, dentro de mis poco convincentespoderes, haya podido llegar en mi constante lucha.

Estoy muy al tanto que para que cualquier organiza-ción alcance sus metas, un hombre debe representar la ideay generalmente cargar con la responsabilidad. Pero esta guía

Mi visión del MundoALBERT EINSTEIN

23 VITRIOLVMno debe de ser forzada, ellos deben de escoger a su líder. Enmi opinión, un sistema autocrítico de coacción pronto dege-nera; la fuerza atrae a hombres de baja moral… Lo verdade-ramente valioso en el espectáculo de la vida humana, meparece a mí que no es el estado político, sino la creatividad,el sentido individual y la personalidad que por si sola crea alnoble y al sublime, mientras que las masas como tales per-manecen apagadas en sus pensamientos y sentimientos.

Este tópico me recuerda el peor afloramiento de la vidade las masas, el sistema militar, al cual aborrezco… Estaplaga de nuestra civilización debería de abolirse a la mayorvelocidad posible. Heroísmo a la orden, violencia sin senti-do, y todas esas tonterías que van unidas al nombre de pa-triotismo —¡cuán profundamente las odio!

La experiencia más hermosa que podemos tener es elmisterio. Es la emoción fundamental que está en la cuna delverdadero arte y la verdadera ciencia. Quien no la conoce yno puede maravillarse, está igual que muerto y sus ojos es-tán nublados.

Fue la experiencia de lo misterioso –aún mezclada contemor– lo que engendró la religión. El conocimiento de laexistencia de algo que no podemos penetrar, nuestras per-cepciones de la razón profunda y de la más radiante belleza,que solamente en sus formas más primitivas son accesiblesa nuestras mentes: es este conocimiento y esta emoción loque constituye la verdadera religiosidad.

En este sentido, y solamente en este sentido, yo soyun hombre profundamente religioso… Estoy satisfechocon el misterio de la eternidad de la vida y con un conoci-miento, un sentido, de la maravillosa estructura de laexistencia, al igual que del humilde intento por entenderuna pequeña porción de la Razón que se manifiesta a símisma en la naturaleza.

1. «Alguien que nunca ha cometido errores nunca trató dehacer algo nuevo.»En otras palabras, la mayoría de las personas nunca pruebacosas nuevas por temer a fracasar. El fracaso no es algo aque temer. Por lo general los perdedores aprenden más deganar que los mismos ganado-res. Nuestros errores nos danoportunidad de aprender y cre-cer.2. «La educación es lo que so-bra después que a uno se le olvi-da lo que aprendió en la escue-la.»Es decir, la educación es lo queuno aprende sobre la marcha dela vida, y no los simples detallesque uno memoriza en un mo-mento determinado.3. «Soy lo suficiente artista comopara dibujar de mi imaginación.La imaginación es más importante que el conocimiento. Elconocimiento es limitado. La imaginación envuelve al mun-do.»4. «El secreto de la creatividad es saber esconder tus fuen-tes.»En el contexto en donde Einstein dijo esto quiso decir queaunque somos influenciados por otras grandes personas, en

10 leccionessobre la vida

ALBERT EINSTEIN

24 VITRIOLVM

el momento de subir a un escenario debemos dejar atrás aesas personas y convertirnos en un individuo único y origi-nal, que aprende diferentes valores de diferentes personas.5. «El valor de un hombre debe medirse por lo que da y nopor lo que recibe. No trates de convertirte en un hombre deéxito sino en un hombre de valores.»6. «Existen dos maneras de vivir: Puedes vivir como si nadaes un milagro, o puedes vivir como si todo es un milagro.»Con esto quiso decir que cuando nada es un milagro que tuobtienes el poder de hacer lo que sea sin límites. Y cuandotodo es un milagro, te detienes a apreciar hasta la más pe-queña de todas las cosas bellas del mundo. El pensar deambas maneras te dará una vida productiva y feliz.7. «Cuando me examino a mí mismo y mis métodos de pen-sar, llego a la conclusión que el don de la fantasía ha signifi-cado mas para mí que cualquier otro talento para pensarpositivo y abstractamente.»Es decir, el soñar sobre todas las cosas que puedes lograr enla vida es la clave para una vida llena de positivismo. Dejaque tu imaginación te lleve por todo tipo de senderos y creaal mundo en el que desearías vivir.

9. «Debes aprender las reglas del juego. Y después debesjugar mejor que todo el mundo.»En otras palabras, haz el mejor trabajo posible que puedas,como si tu vida dependiera de ello, y después que no tengascontra quien competir, solo te tendrás a ti mismo contra quiencompetir. En ese momento, mejora lo mejor que hayas lo-grado.10. «Lo importante de todo es nunca dejar de hacerte pre-guntas. La curiosidad tiene su propia razón de existir.»Con esto Einstein quiso decir que las personas inteligentespreguntan. No dejes de hacer preguntas a ti mismo y a otrospara encontrar soluciones, pues esto te ayudará obtener co-nocimientos y analizar tu crecimiento en todos los caminosde la vida.

8. «Para ser un miembro inmaculado de un rebaño de ove-jas, uno debe, sobre todas las cosas, primero ser una oveja.»Con esto quiso decir que si deseas ser un empresario exitUn periodista le preguntó: -¿Me puede Ud. explicar la Leyde la Relatividad? Einstein le contestó: -¿Me puede Ud.explicar cómo se fríe un huevo? El periodista lo miróextrañado contestándole: -Pues sí, sí que puedo. A lo cualEinstein replicó: -Bien, pues ahora hágalo, peroimaginando que yo no sé lo que es un huevo, ni unasartén, ni el aceite, ni el fuego.

25 VITRIOLVM

Sólo hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidezhumana. Y no estoy tan seguro de la primera. Estagenialidad lingüística ha sido atribuida al premio Nobel

Albert Einstein (1879-1955), según algunos, el mayor genio dela historia. También, al parecer, dijo aquello de… «Dios nojuega a los dados», que tantos enemigos le granjeó. Pero haymás genialidades…Un periodista le preguntó: -¿Me puede Ud.explicar la Ley de la Relatividad? Einstein lecontestó: -¿Me puede Ud. explicar cómo sefríe un huevo? El periodista lo miró extrañadocontestándole: -Pues sí, sí que puedo. A locual Einstein replicó: -Bien, pues ahorahágalo, pero imaginando que yo no sé lo quees un huevo, ni una sartén, ni el aceite, ni elfuego.Durante el nazismo, Einstein, a causa de serjudío, debió de soportar una guerra en sucontra urdida con el fin de desprestigiar sus investigaciones.Uno de estos intentos se dio cuando se compilaron las opinionesde 100 científicos que contradecían las suyas, y que se editaronen un libro llamado «Cien autores en contra de Einstein».Cuando se enteró del hecho, Einstein comentó: -¿Por qué cien?Si estuviese errado haría falta sólo uno.En una conferencia que Einstein dio en un Colegio de Francia,el escritor Paul Valery le preguntó: -Profesor Einstein, cuandotiene una idea original, ¿qué hace? ¿La anota en un cuaderno oen una hoja suelta? A lo que Einstein respondió: -Cuando tengouna idea original… no se me olvida.Albert Einstein significó un punto de inflexión en la forma decontemplar el Universo y las leyes que lo gobiernan. Además

de sus conocidas teorías de la relatividad –general o especial–,sus trabajos sobre el efecto fotoeléctrico y sus numerosascontribuciones a la física teórica le supuso, en 1921 el PremioNobel de Física. Cada vez que entre en un ascensor, por ejemplo,con esas células fotosensibles que regulan la apertura o cierrede puertas… piense en Einstein…

Sin embargo, y dejando aparte un posiblecarácter a veces conflictivo también destacópor otras pinceladas dialécticas. Aquí van másde estas joyitas…En una reunión social, Marilyn Monroe secruzó con Einstein y ella le sugirió losiguiente: -¿Qué dice, profesor; deberíamoscasarnos y tener un hijo juntos? ¿Se imaginaun bebe con mi belleza y su inteligencia?Einstein, muy seriamente, le respondió: -Desafortunadamente temo que elexperimento salga a la inversa, y terminemos

con un hijo con mi belleza y su inteligencia.Se cuenta que en una reunión social Einstein coincidió con elactor Charles Chaplin. En el transcurso de la conversación,Einstein le dijo a Chaplin: -Lo que he admirado siempre deusted es que su arte es universal; todo el mundo le comprendey le admira. A lo que Chaplin respondió: -Lo suyo es muchomás digno de respeto: todo el mundo lo admira y prácticamentenadie lo comprende.Finalmente, podría mencionar aquella historia de su chófer, elcual se hizo pasar por él en una conferencia de física mientrasque Einstein, divertido, lo observaba todo desde las sombras;pero esto entra más en el terreno de los chistes ingeniosos yprefiero dejarlo para otra ocasión…

El ingenio del genio

26 VITRIOLVM

Durante la Navidad[1] se produce un fenómeno muyparticular en nuestro sistema solar. Desde el 21 dediciembre, en el hemisferio norte, el sol alcanza su

cenit en el punto más bajo y desde ese momento el día co-mienza a alargarse, progresivamente, en detrimento de susnoches. A este fenómeno se lo llama solsticio de invierno«sol inmóvil» ya que en esos momentos el solcambia muy poco su declinación de un día aotro y parece permanecer en un lugar fijo delecuador celeste[2].

Precisamente se produce el solsticio deinvierno, un acontecimiento cósmico que vivi-fica la Naturaleza con su luz y su calor, razónpor la cual, para todas las culturas antiguas, re-presentaba el auténtico nacimiento del sol y, conél, toda la Naturaleza comenzaba a despertarlentamente de su letargo y los humanos veíanrenovadas sus esperanzas de supervivencia gra-cias a la fertilidad de la tierra que garantizabala presencia del astro divino, del dios más ar-caico que la humanidad ha venerado.

En el solsticio de invierno todos los pue-blos antiguos, adoradores del sol, celebraban el nacimientodel astro rey mediante grandes festejos caracterizados por laalegría general y el protagonismo de las hogueras, alrededorde las cuales se concentraban los lugareños con el fin demanifestar su alborozo y esperanza mediante ceremoniascolectivas centradas en cantos y danzas rituales y en la reco-

gida de ciertas plantas mágicas como el muérdago. Los pue-blos prerromanos, durante los tres días anteriores al 24 y 25de diciembre, así como en los seis posteriores que llevabanhasta el Año Nuevo, festejaban el retorno del Nuevo Sol ylas fuerzas vegetativas de la Naturaleza. Las grandes hogue-ras, al margen de simbolizar el gran acontecimiento, tenían

la función de excitar el calor y la fuerzade los rayos de un sol recién nacido queencaraba su curso hacia la primavera inun-dando la tierra con su poderregenerador[3].

El avance de la iglesia católicaCon el inicio de la expansión de la

Iglesia católica por todo el continente eu-ropeo, los papas no siempre pudieron im-poner su fe por la fuerza y a menudo tu-vieron que obrar con astucia fingiendo to-lerar determinados ritos paganos aunqueen realidad los minaban y transformabanprogresivamente al entremezclarlos conelementos cristianos añadidos. Una mues-tra de ello nos la dejó el papa Gregorio I

El Grande (590-604) que, aunque siempre ordenó que lospaganos fuesen sometidos a castigos y prisión si no se con-vertían, tuvo que ser más cauteloso durante su conquistaevangélica de las almas de los anglosajones, aconsejándoleal abad Mellitus, jefe de los propagadores del cristianismoen Gran Bretaña, lo que sigue:

Los Masones, Jesús y la NavidadQ∴ H∴ CHRISTIAN GADEA SAGUIERLogia Concordia N° 15Gran Logia Simbólica del Paraguay.

27 VITRIOLVM«No hay que destruir los templos paganos de ese pue-

blo, sino únicamente los ídolos que hay en los mismos; des-pués de asperjar esos templos con agua bendita, erigir alta-res y depositar reliquias; porque si tales templos están bienconstruidos, perfectamente pueden transformarse de una mo-rada de los demonios en casas del Dios verdadero, de mane-ra que si el mismo pueblo no ve destruido sus templos, de-ponga de su corazón el error, reconozca el verdadero Dios yore y acuda a los lugares habituales según su vieja costum-bre...»

En los pueblos germánicos y galos -peroespecialmente entre los primeros, ya que fue-ron menos romanizados y su cristianizaciónfue más tardía, lenta, dificultosa e incomple-ta-, estas ceremonias solsticiales de adoraciónal Sol y a las fuerzas ocultas de la Naturalezaprosiguieron hasta bien entrada la Edad Me-dia; en sus formas originales y puras estuvie-ron vigentes hasta la primera mitad del sigloX, y tomando expresiones externas más omenos matizadas o mediatizadas por el cris-tianismo han podido sobrevivir hasta nuestrosdías, contagiando de paganismo la celebraciónde la Navidad actual hasta el punto de que losmitos solares ancestrales (conservados en su estructura in-terna aunque desvirtuados en su forma externa y en su sig-nificado) siguen siendo los verdaderos protagonistas de losfestejos navideños que se celebran en el mundo de hoy.

Desde hace miles de años, y para las culturas y socie-dades más diversas, la época de Navidad ha representado eladvenimiento del acontecimiento cósmico por excelencia,del hecho más fundamental de cuantos podían garantizar lasupervivencia del hombre pagano[4], del renacimiento anual

de la principal divinidad salvadora. No es ninguna casuali-dad, por tanto, que el natalicio de los principales dioses so-lares jóvenes de las culturas agrarias precristianas -comoOsiris, Horus, Apolo, Mitra, Dionisos/Baco, etc., fuese si-tuado durante el solsticio de invierno. Y es menos casualaún que el natalicio de Jesús-Cristo, el Salvador cristiano,se haya concretado en el 25 de diciembre, fecha en la quehasta finales del siglo IV de nuestra era se conmemoró elnacimiento del Sol Invictus en el Imperio Romano.

La navidad y los dioses solaresCon el desarrollo de las culturas urba-nas, los rituales solsticiales agrarios nodesaparecieron sino que se adaptaron alas nnuevas circunstancias y necesida-des, por eso las fiestas paganas más im-portantes «rebasaron el ámbito campe-sino y se convirtieron en ciudadanas, deforma que la fecundidad que en origensolicitaban para el campo y el ganado,pasó a comprenderse como prosperidady riqueza para la ciudad. Estas festivi-dades se concentran sobre todo en invier-no, pues la actividad humana sufría enestos meses una bajada en su ritmo, ya

que la guerra se detenía, nadie se atrevía a navegar y lasfaenas agrícolas eran entonces menos intensas. El inviernoes en consecuencia un periodo muy propicio para que lasrelaciones faenas agrícolas eran entonces menos intensas.El invierno es en consecuencia un periodo muy propicio paraque las relaciones que se entablan con el mundo sobrenatu-ral sean más estrechas, más íntimas»[5].

Entre las fiestas de los antiguos griegos y romanos quefueron precedentes de la Navidad cristiana debe destacarse,

28 VITRIOLVMpor su importancia social y trascendencia mítica y simbóli-ca, las dedicadas a Dionisos y Saturno. Dionisos, originadoen la fusión de mitos egipcios y helenos, fue un dios delvino, de la vegetación y de la fecundidad, pero también dela muerte, ya que los difuntos y las potencias subterráneas -«infernales», de inferus, inferior, puesto que se creía queel mundo de los muertos estaba por debajo de la tierra- erantenidas por controladoras la fertilidad. Su culto arrastrabamultitudes e inspiraba ideales de rebeldía quese enfrentaban con el orden establecido, tantoel político (oponiéndose a la clase aristocráticadominante) como el divino (amenazando la su-premacía de los dioses olímpicos clásicos). Yaen el siglo IV a.C., en el calendario de Bitinia elmes consagrado a Dionisos comenzaba el 24de diciembre y tenía 31 días.

En la antigua Atenas -y en el resto de Gre-cia, aunque con algunas variantes-, el culto po-pular a Dionisos estaba repartido en cuatro gran-des festividades: las Dionisíacas de los campos,las Leneas, las Antesterias y las GrandesDionisíacas. Las dos primeras se celebrabanalrededor del solsticio invernal, con carácterpropiciatorio de la fertilidad/prosperidad y en medio de fes-tejos caracterizados por la gran alegría general; las dos últi-mas tenían lugar en la primavera y festejaban la resurrec-ción de la naturaleza.

Las Antesterias, en particular, celebraban el vino nue-vo, de la última cosecha, conmemoraban la llegada deDionisos a Atenas y su hierogamia y, en su tercera jornada,el Chytroi («las marmitas»), se recordaba a los difuntos. Elciclo dionisíaco, como vemos, es el mismo que muchos si-glos después adoptará el cristianismo al situar la Navidad

en el solsticio de invierno y la Pascua de Resurrección enprimavera.

El Saturno romano -equivalente al griego Cronos- fueuna antigua divinidad agrícola cuyo nombre está relaciona-do con satur (saciado, harto) y sator (sembrador, creador),siendo sinónimo de abundancia. Fue un dios agricultor yplantador de vides (vitisator), un arte que enseñó a los hom-bres cuando, perseguido por su hijo Júpiter, tuvo que refu-

giarse en Italia; bajo el apelativo de Stercutiuspresidía el abono de los campos.

Los festejos romanos en honor de Saturno,las Saturnalia, fueron en su origen fiestascampestres sementivae feriae, consualialarentalia, paganalia-, pero adquirieron mu-cha importancia a partir del año 217 a.C., trasla derrota del ejército romano por el cartagi-nés Aníbal cerca del lago Trasimeno, prelu-dio del desastre de la batalla Cannas (216a.C.) que puso fin a la segunda guerra púnicay contribuyó a despertar el espíritu religiosode los romanos.

La celebración de las Saturnalia durabauna semana y tenía lugar entre el 17 y el 23

del mes de diciembre. Después de la ceremonia religiosahabía grandes festejos y banquetes, se abolía temporalmen-te las clases sociales y, en los ágapes, los señores servían asus esclavos -que podían burlarse impunemente de los amos-, cesaba toda actividad pública -en tribunales, escuelas, co-mercios, operaciones militares, etc.- y no se permitía ejercerningún arte ni oficio salvo el de la cocina, se imponía elhacerse regalos unos a otros, los ricos convidaban a sus mesasbien surtidas a los pobres que llamaban a sus puertas, sepracticaban juegos de azar..., en fin, los antiguos romanos

29 VITRIOLVMhacían ya más o menos lo mismo que aún se hace actual-mente para celebrar la Navidad cristiana.

Si nos remontamos mucho más atrás en la Historia,hasta la época en la que los hombres primitivos -que practi-caron cultos naturalistas y adoraron a la esfera solar comodeidad- comenzaron a desarrollar el concepto divino bajoformas antropomorfas, observaremos que todas las culturasde la Antigüedad pasaron a identificar a su dios principal, o

a alguno de los más impor-tantes de su panteón, con eldios Sol y, en lógica conse-cuencia, situaron la conme-moración y festejo de su ad-venimiento alrededor delprodigioso evento cósmicoque representaba el solsticiode invierno cada 21-22 dediciembre.

Caldeos, egipcios,cananeos, persas, sirios, fe-nicios, griegos, romanos,hindúes y la práctica totali-dad de los pueblos con cul-

turas desarrolladas, entre los cabe incluir los imperios, hancelebrado durante el solsticio hiemal el parto de la «Reinade los Cielos» y la llegada al mundo de su hijo, el joven diossolar. En los mitos solares ocupa un lugar central la presen-cia de un dios joven que cada año muere y resucita, encar-nando en sí los ciclos de la vida en la Naturaleza. En lasculturas de mitología astral, el Sol representaba el padre, laautoridad y también el principio generador masculino. Du-rante la Antigüedad, en todo el mundo civilizado, el sol fueel emblema de todos los grandes dioses, y los monarcas de

todos los imperios se hicieron adorar como hijos del Sol(identificado siempre con su divinidad principal). En estecontexto, la antropomorfización del Sol en un dios hijojoven presenta ejemplos tan conocidos como los de Horus,Mitra, Adonis, Dionisos, Krisna... o el propio Jesús-Cris-to[6]

En el Egipto Antiguo[7] se creía que Isis, la virgenReina de los Cielos, quedaba embarazada en el mes demarzo y daba a luz a su hijo Horus a finales de diciembre.El dios Horus, hijo de Osiris e Isis, era el «gran subyuga-dor del mundo», el que es la «substancia de su padre»,Osiris, de quien era una encarnación. Fue concebido mi-lagrosamente por Isis cuando el dios Osiris, su esposo, yahabía sido muerto y despedazado por su hermano Seth oTifón. Era una divinidad casta -sin amores- al igual queApolo, y su papel entre los humanos estaba relacionadocon el Juicio ya que presentaba las almas a su padre, elJuez. Era el Christos y simbolizaba el Sol.

Durante el solsticio de invierno, la imagen de Horus,en forma de niño recién nacido, era sacada del santuariopara ser expuesta a la adoración pública de las masas. Erarepresentado como un recién nacido (a menudo recostadoen un pesebre) con cabello dorado, que tenía un dedo enla boca y el disco solar sobre su cabeza. Los antiguos grie-gos y romanos lo adoraron también bajo el nombre deHarpócrates, el niño Horus, hijo de Isis. El dios Osiris,dios de la vegetación y de los muertos, padre de Horus,también había nacido de una virgen en el solsticio hiemal.

Mitra, uno de los principales dioses de la religiónirania anterior a Zaratustra, pervivió con fuerza en el Im-perio romano hasta el siglo IV d. C., era una divinidad detipo solar -tal como lo atestigua, entre otros, su cabeza deleón- que hizo salir del cielo a Ahrimán (el mal), tenía una

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función de deidad que cargaba con los pecados y expiabalas iniquidades de la humanidad, era el principio mediadorcolocado entre el bien (Ormuzd) y el mal (Ahrimán), el dis-pensador de luz y bienes, mantenedor de la armonía en elmundo y guardián y protector de todas las criaturas, y erauna especie de mesías que, según sus seguidores, debía vol-ver al mundo como juez de los hombres. Sin ser propiamen-te el Sol, representaba a éste y era invoca-do como tal. El dios Mitra hindú, como elpersa, era también una divinidad solar, talcomo lo demuestra el hecho de ser uno delos doce Adityas, hijos de Aditi, la perso-nificación del Sol.

Muchos siglos antes que Jesús-Cris-to, el dios Mitra, según su leyenda popu-lar, ya había nacido de virgen un 25 dediciembre, en una cueva o gruta, siendoadorado por pastores y magos, obró mila-gros, fue perseguido, acabó siendo muer-to, resucitó al tercer día... Todas las per-sonificaciones de dioses solares acabanpor ser víctimas propiciatorias que expíanlos pecados de los mortales, cargando con sus culpas, y sonmuertos violentamente y resucitados posteriormente. Así,Osiris nació en el mundo como un Salvador o Libertadorvenido para remediar la tribulación de los humanos, pero ensu lucha por el bien se topó con el mal (encarnado en supropio hermano Seth o Tifón, que acabaría identificándosecon Satán), que le venció temporalmente y le mató; deposi-tado en su tumba, resucitó y ascendió a los cielos al cabo detres días (o cuarenta, según otras leyendas).

Baco, otro dios solar destinado a cargar con las culpasde la humanidad, también fue asesinado -y su madre reco-

gió sus pedazos, tal como había hecho Isis con los trozos delcadáver de Osiris- para renacer resucitado. Ausonius, unaforma de Baco (y equivalente a Osiris), era muerto en elequinoccio de primavera (21 de marzo) y resucitaba a lostres días. Idéntica suerte le (y equivalente a Osiris), era muertoen el equinoccio de primavera (21 de marzo) y resucitaba alos tres días. Idéntica suerte le había estado reservada a Ado-

nis (equivalente al dios etrusco Atune oal sirio Tammuz), a Dionisos o al frigioAtis y a una larga lista de seres divinosque, como Krisna -muerto atado a un ár-bol y con su cuerpo atravesado por unaflecha- o como Jesús- Cristo -muerto enla cruz de madera y lanceado-, fueron to-dos ellos condenados a muerte, lloradosy restituidos a la vida. Son dioses que des-cendieron al Hades y regresaron otra vezllenos de vigor, tal como hace la Natura-leza con sus ciclos estacionales anuales.Todos ellos habían nacido, según el mito,durante el solsticio de invierno, fecha enla iglesia llamada Católica sitúa el adve-

nimiento de Jesús.El advenimiento del “Hijo de Dios”un 25 de diciembre

En el siglo II de nuestra era, los cristianos sólo con-memoraban la Pascua de Resurrección y su misterio, ya queconsideraban irrelevante el momento del nacimiento de Je-sús y, además, desconocían absolutamente cuando pudo ha-ber acontecido. Durante el siglo siguiente, al comenzar aaflorar el deseo de celebrar el natalicio de Jesús de una for-ma clara y diferenciada,

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algunos teólogos, basándose en los textos de los Evange-lios, propusieron datarlo en fechas tan distintas como el 6 y10 de enero, el 25 de marzo, el 15 y 20 de abril, el 20 demayo y algunas otras. El sabio Clemente de Alejandría (150-215) no quiso quedar al margen de la polémica y postuló eldía 25 de mayo. Pero el papa Fabian (236-250) decidió cor-tar por lo sano tanta especulación y calificó de sacrílegos aquienes intentaron determinar la fecha delnacimiento del nazareno.

A pesar de la disparidad de fechasapuntadas, todos coincidieron en pensar queel solsticio de invierno era la fecha menosprobable si se atendía a lo dicho por Lucasen su evangelio: «Había en la región unospastores que pernoctaban al raso, y de no-che se turnaban velando sobre el rebaño. Seles presentó un ángel del Señor, y la gloriadel Señor los envolvía con su luz...» (Lc.2,8-14)[8]

Si los pastores dormían al raso cui-dando de sus rebaños, para que el relato deLucas fuese cierto y/o coherente debía re-ferirse a una noche de primavera -de ahí lasfechas posteriores al día 21 de marzo, equi-noccio primaveral e inicio de esta estación-, ya que a finalesde diciembre, en la zona de Belén, imaginando el excesivofrío y las todavía abundantes lluvias invernales impedíancualquier posibilidad de pernoctar al raso con el ganado.Forzando la escena relatada por Lucas hasta el límite de lasutileza, otras Iglesias cristianas ajenas a la católica -comola Iglesia armenia- fijaron la conmemoración de la Nativi-dad en el día 6 de enero ya que, según su deducción, aunqueno es posible situar el relato de Lucas en la estación más fría

y lluviosa del año en las tierras de Judea, sí puede ser creíblesituando el nacimiento de Jesús un poco más tarde, en eneroy en el Oriente Medio, un tiempo y un lugar donde es muyprobable la existencia de cielos nocturnos claros y sin bo-rrascas, aunque todavía haga frío, eso sí. Con el mismo ar-gumento, en otras Iglesias orientales, egipcios, griegos y etío-pes propusieron fijar el natalicio en el día 8 de enero.

Eutiquio, patriarca de Alejandría, en elsiglo X aún defendía esta fecha como laúnica verdadera.

Basándose también en Lucas, laIglesia oriental empleó otro argumentotodavía más peculiar para defender la fe-cha del 6 de enero. Cogiendo al vuelo laafirmación de Lucas cuando escribió que«Jesús, al empezar, tenía unos treintaaños» (Lc. 3,23), dedujeron, de algunamanera sin duda milagrosa, que Jesúsmurió cuando tenía «exactamente» treintaaños, contados estos desde el día de suconcepción, y, dado que la fecha de lacrucifixión la habían fijado el 6 de abril(¡¿?!), sólo tuvieron que añadir los nue-ve meses exactos de gestación para lle-

gar hasta el tan celebrado 6 de enero.Dejando al margen la vía para calcular tan preciado

día, lo cierto es que la fecha del 6 u 8 de enero -la primeraque la cristiandad celebró- tenía mucho sentido ya que, en laAlejandría egipcia (cuna de aspectos fundamentales de ladoctrina cristiana), se festejaba con toda pompa el festivalde Core «la Doncella» -identificada con la diosa Isis- y elnacimiento de su nuevo Aion, que era una personificaciónsincrética de Osiris. San Epifanio, refiriéndose al festival de

32 VITRIOLVMCore, escribió en Penarion 51: «la víspera de aquel día eracostumbre pasar la noche cantando y atendiendo las imáge-nes de los dioses. Al amanecer se descendía a una cripta y sesacaba una imagen de madera, que tenía el signo de unacruz y una estrella de oro marcada en las manos, rodillas ycabeza. Se llevaba en procesión, y luego se devolvía a lacripta; se decía que esto se hacía porque la Doncella habíaalumbrado al Aion.»Entrado ya el siglo IV, cuando ya se había concluido losubstancial del proceso de trasvase de mitos desdelos dioses solares jóvenes precristianos hacia lafigura de Jesús-Cristo[9], se decidió fijar unafecha concreta -y acorde a su nueva con-cepción mítica- para el natalicio deJesús. Dado que al judío Jesús histó-rico se le había adjudicado toda la car-ga legendaria que caracterizaba a sumáximo competidor de esos días, el diosMitra, lo lógico fue hacerle nacer el mismodía en que se celebraba el advenimiento de esejoven dios.

A más abundamiento, cabe recordar que lafigura de Jesús no fue oficialmente declarada comoconsubstancial con Dios hasta el año 325, cuando elemperador Constantino convocó el concilio de Nicea yordenó a todos los obispos asistentes que acatasen el en-tonces muy discutido y discutible dogma de que el Padre yel Hijo compartían la misma substancia divina De esta for-ma, entre los años 354 y 360, durante el pontificado deLiberio (352-366), se tomó por fecha inmutable la de la no-che del 24 al 25 de diciembre, día en que los romanos cele-braban el Natalis Solis Invicti, el nacimiento del Sol Inven-cible –un culto muy popular y extendido al que los cristia-

nos no habían podido vencer o proscribir hasta entonces- y,claro está, la misma fecha en la que todos los pueblos con-temporáneos festejaban la llegada del solsticio de invierno.

Según algunos autores, en la elección del 25 de di-ciembre -hecho que sitúan en el año 345, bajo el papa Julio

I- tuvo una influencia decisiva Juan Crisóstomo (del quesabemos que defendió esta fecha, frente a la del 6 de

enero, en, al menos, escritos del año 375) y GregorioNacianceno -uno de los tres padres capadocios que

elaboraron la doctrina trinitaria clásica a finalesdel siglo IV-, pero lo más plausible es que am-

bos personajes no intervinieran en la datacióndel natalicio aunque sí actuasen como fer-

vientes defensores del 25 de diciembre aposteriori.

En cualquier caso, San Agustín(354-430) sí debía tener muy claroel verdadero origen de la Navidadcatólica, sobrepuesta al Natalis

Solis Invicti, cuando exhortó a los cre-yentes a que ese día no lo dedicasen «al

Sol, sino al Creador del Sol».Con la instauración de la Navidad también se re-

cuperó en occidente la celebración de los cumplea-ños, aunque las parroquias europeas no comenzaron a

registrar las fechas de nacimiento de sus feligreses hasta elsiglo XII. A pesar de haberse fijado ya como inmutable lafecha del 25 de diciembre -o quizá por esa misma razón-,las especulaciones en torno al natalicio de Jesús prosiguie-ron durante muchos siglos después. El papa Juan I (523-526), decidido a averiguar la verdad, le encargó una investi-gación al monje Dionysius Exiguus (Dionisio el Pequeño)que, tras un curioso proceso de razonamiento concluyó que

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el año de la Encarnación había sido el 754 dela fundación de Roma, y que la Encarnaciónmisma había tenido lugar el 25 de marzo y elnacimiento el 25 de diciembre, eso es despuésde una gestación matemáticamente exacta denueve meses.

La peculiar datación de Dionisio el Pe-queño también dejó en herencia otra fecha fa-mosa, la de los 33 años de Jesús en el momen-to de ser crucificado, pero hoy ya está bien de-mostrado que los cálculos del monje romanofueron errados hasta en el momento de ser cru-cificado, pero hoy ya está bien demostrado quelos cálculos del monje romano fueron errados hasta en lomás evidente y que Jesús tenía entre 41 y 45 años cuandofue ejecutado.

En el siglo XVI, un erudito como José Scaligero aúnse ocupó del asunto y afirmó que Jesús había nacido afinales de septiembre o principios de octubre. Más pru-dente, el gran sabio y teólogo Bynaeus (1654-1698), des-pués de analizar todo lo escrito al respecto, concluyó que«puesto que la Escritura calla sobre esto, callemos tam-bién nosotros»[10]. La fecha del 25 de diciembre, fijada afinales del siglo IV, ya era inamovible para el orbe católi-co (aunque no fuese aceptada por las Iglesias cristianasorientales que siguen celebrando el natalicio de Jesús enel 6 de enero).Los masones y la Navidad

Los hijos de la Luz, como se conoce a los masonestambién festejan su navidad, pero ha diferencia de otroscultos, se festeja al Culto de la Naturaleza, celebradas encuatro ocasiones: los dos equinoccios y en las dos etapas

del solsticio, de verano e invierno, de acuerdoal hemisferio en que uno se encuentra.

Aunque el verano sea considerado gene-ralmente como una estación alegre y el invier-no como una triste, por el hecho de que el pri-mero representa en cierto modo el triunfo de laluz y el segundo el de la oscuridad, los dossolsticios correspondientes tienen, sin embar-go, un carácter exactamente contrario. Por pa-radójico que parezca, es muy fácil comprenderlosi se posee algún conocimiento sobre los datostradicionales acerca del curso del ciclo anual.

En efecto, lo que ha alcanzado su máxi-mo no puede ya sino decrecer, y lo que ha llegado a su míni-mo no puede sino comenzar a crecer[11]. Así, el solsticio deverano marca el comienzo de la mitad descendente del año,y el solsticio de invierno, el de su mitad ascendente. Desdeel punto de vista de su significación cósmica, se compren-den mejor estas palabras de san Juan Bautista, cuyo naci-miento coincide con el solsticio estival (verano): “El (Jesús,nacido en el solsticio de invierno) conviene que crezca, y yoque disminuya”[12]. En realidad, el periodo “alegre”, esdecir, benéfico y favorable, es la mitad ascendente del cicloanual, y su periodo “triste”, es decir, maléfico o desfavora-ble, es su mitad descendente.

El solsticio de invierno, marca un momento en que eltiempo se detiene; el presente se manifiesta en un instantede eternidad. Es un tiempo de silencio, recogimiento inte-rior y meditación. La semilla se pudre en el interior de latierra esperando pacientemente a que llegue el tiempo apro-piado para crecer y manifestarse. Conocemos la experienciade la cámara de reflexiones, de este duro camino interiorhacia nuestro propio infierno, aislándonos hacia adentro,

penetrando el centro mismo de las cosas para entender cuales la esencia de las cosas y cual su apariencia, así en lo másprofundo de nuestra ser, en la noche más larga de nuestroviaje celeste, sólo nos queda una antorcha: nuestra razónresplandeciente, que apenas ilumina algunos restos óseos,que figuran otra realidad, la verdad brutal, privada del velode las ilusiones, en el fondo del VITRIOL alquímico “VisitaInteriora Térrea Rectificando Invenies Occultum lapidem”.

Entonces en la noche más larga descubrimos la piedrafilosofal, nuestra piedra cúbica francmasónica, sustento delas certezas que requiere el espíritu, roca firme, angular ycristalización salina de nuestro YO y de la construcción in-telectual y moral que constituye la gran obra. Bástenos re-cordar de nuevo los misterios de Eleúsis y Ceres, en dondeel recipiendario, el iniciado, era símbolo de la semilla en latierra, que sufriendo la putrefacción da origen al nacimientode la flor de oro y a su proceso de individuación nacido des-de sus propios sueños arquetípicos.

QQ∴ HH∴, ya preparados para los cantos del gallo,que anuncian el fin de la noche y el triunfo de la luz sobrelas tinieblas, se da cumplimiento al proceso, a la etapa as-cendente de nuestro propio invierno interior. Esto celebra-mos en nuestras fiestas solsticiales a pesar de que de la os-curidad nacemos una y otra vez en la circularidad intermi-nable de los días, los múltiples nacimientos y muertes quehemos de tener en nuestras vidas, sin más armisticio que eleterno retorno al uno todo.

Las fiestas solsticiales son el momento simbólico enque los masones nos recogemos hacia el interior de nuestromicrocosmo y advertimos nuevas verdades morales y nue-vas realidades espirituales, que nos permiten continuar conla gran obra. Así también se produce en el macrocosmo el áureoproceso de los movimientos celestes de las esferas y de la ar-

34 VITRIOLVMmonía con que se regenera el universo, armonía que esta enconsonancia con nuestros propios acordes interiores, que re-suenan en nuestro YO con la mística melodía de las esferas.

A medianoche en punto, en lo más profundo de la oscu-ridad del solsticio invernal, Hiram muere, el Templo es destrui-do; pero esto no es sino el anuncio del nacimiento del Maestroy la renovación de los trabajos del Templo.Notas[1] Del latín nativitas, significa: Día en que se celebra, Diccio-nario de la Real Academia Española, p. 1430[2] Es un círculo máximo perpendicular al eje del mundo. Es laproyección, sobre la esfera celeste, del Ecuador terrestre. Ver:www.zonagratuita.com/ZonaEsoterica/astrologia/nociones2.htmler[3] Pepe Rodríguez, Mitos y Ritos de la Navidad. pp. 9-21[4] Pagus significa aldea y paganus aldeano o rústico[5] Blázquez, J.M., Historia de las religiones antiguas. Oriente,Grecia y Roma, p. 311[6] A propósito de la continuidad mítica de la figura de Jesús-Cristo en relación a los modelos anteriores de dioses solaresjóvenes, puede consultarse el estudio publicado en Rodríguez,P. (1997). Mentiras fundamentales de la Iglesia católica. Barce-lona: Ediciones B., pp. 113- 151.[7] Plutarco, Isis y Osiris, pp. 65-98[8] Biblia de Jerusalén, año 1994, p. 77[9] Pepe Rodríguez, Mentiras fundamentales de la Iglesia cató-lica. pp. 137-151[10] Bynaei, De Natali J.C., libro I, capítulo IV, pp. 403-414.[11] Esta idea se encuentra expresada varias veces y en formasdiversas en el Tao-te King. En la tradición extremo –oriental,atañe a las vicisitudes del yin y el yang.[12] San Juan 3-30.Fuente:http://www.freemasons-freemasonry.com/gadea_navidad.html Página 1 de 5