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*~*~*~* Porque tú eres mi Roca y mi castillo;

y por amor a tu nombre me guiarás, y me encaminarás. Salmos 31:3

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*~* Dios Envió las Plagas a Egipto; Paso por Alto a Israel – Éxodo 5:6-4:31 *~*

Introducción: La lección de hoy comienza con los israelitas esclavizados en Egipto por un Faraón poderoso. Probablemente ninguno de nosotros estuvo esclavizado como los israelitas. Pero hemos sido esclavos del pecado. Veamos cómo Dios obró el rescate de los israelitas.

*Verdad #196: Faraón NEGÓ a obedecer el ORDEN de Dios:

Después entraron Moisés y Aarón ante Faraón, y le dijeron: Jehová, el Dios de Israel, dice así: Deja ir a mi pueblo a celebrarme fiesta en el desierto. Y Faraón respondió: ¿Quién es Jehová, para que yo oiga

su voz y deje ir a Israel? Yo no conozco a Jehová, ni tampoco dejaré ir a Israel. Éxodo 5:1-2

Dios usó a Moisés y Aarón para hablarle al rey de Egipto, pero Faraón se negó a obedecer la orden del Señor. (Faraón era el título que se les daba a todos los gobernadores de Egipto en esta época. La Biblia no nos dice qué Faraón estaba en el gobierno cuando Moisés se convirtió en líder de Israel.) Faraón no conocía al único Dios vivo y verdadero, y Creador de toda la tierra. Los egipcios no adoraban a Dios; adoraban las cosas que Dios había hecho.

� Adoraban el Nilo, el rió mas largo de su país. � También adoraban el sol, la luna y muchas clases diferentes de animales. � Tenían muchos, muchos dioses. � Además, los egipcios adoraban a Faraón, su rey, como un dios.

Gran parte de las personas del mundo se había apartado deliberadamente del verdadero conocimiento de Dios.

� Se habían vuelto necios con respecto al conocimiento de Él. � Como ellos no querían obedecer a Dios, Él permitía que adoraran dioses falsos.

Debido a que la mayoría de las personas del mundo se habían APARTADO para adorar ídolos y había perdido el verdadero conocimiento de Dios, Dios llamó a Abraham y convirtió en el padre de la nación de Israel.

� Dios hizo esto para preservar, a través de Israel, el verdadero conocimiento de Dios. � Por medio de este pueblo, Dios planeaba hacer conocer la verdad sobre Él. � La verdad sobre Dios está en la Biblia, libro que el Señor dio a través de los israelitas.

El Señor le habría ensenado al rey de Egipto que los ídolos son dioses falsos y que el Dios de Abraham e Israel es el único Dios vivo y verdadero, pero Faraón no quiso escuchar.

*Verdad #197: Por medio del la REBELIÓN de Faraón, el Señor se propuso mostrar a ISRAEL que Él era su Dios:

La generación de israelitas que vivía en Egipto cuando Moisés regreso, no había visto ninguna evidencia de la grandeza y el poder del Señor.

� Sólo habían escuchado hablar del Señor y lo que Él había hecho por Abraham, Isaac, Jacob y José. � Ahora el Señor iba a usar a este Faraón malvado y su rebelión para exhibir Su poder y la sabiduría a esta

generación de israelitas, para que ellos supieran que Él todavía era el Dios todopoderoso y protector de Israel.

*~* El Momento de Meditación *~*

Desde

Principio

El

LECCIÓN: 23 de 51

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Entonces Jehová respondió a Moisés: Ahora verás lo que yo haré a Faraón; porque con mano fuerte los ha de dejar ir; y con mano fuerte los ha de echar de su tierra. Habló todavía Dios a Moisés, y le dijo:

Yo soy JEHOVÁ; y aparecí a Abraham, a Isaac y a Jacob por el nombre de Dios Omnipotente, pues por mi nombre JEHOVÁ yo no era conocido de ellos. Y también establecí mi pacto con ellos,

de darles la tierra de Canaán, la tierra en que fueron extranjeros, y en la cual peregrinaron. Y asimismo yo he oído el gemido de los hijos de Israel, a quienes hacen servir los egipcios, y me he acordado

de mi pacto. Por tanto dirás a los hijos de Israel: YO JEHOVÁ; y yo os sacaré de debajo de las cargas de Egipto, y os libraré de su servidumbre, y os redimiré con brazo extendido, y con juicios grandes:

Y os tomaré por mi pueblo y seré vuestro Dios: y vosotros sabréis que yo soy Jehová vuestro Dios, que os saco de debajo de las cargas de Egipto: Y os meteré en la tierra, por la cual alcé mi mano que la daría a

Abraham, a Isaac y a Jacob: y yo os la daré por heredad. YO JEHOVÁ. Éxodo 6:1-8

*Verdad #198: Por medio del la REBELIÓN de Faraón, el Señor se planeaba mostrar a los EGIPCIOS que Él es el único Dios vivo y verdadero:

Dios también planeaba mostrarles a los egipcios que:

� Él es el único Dios vivo y verdadero con poder sobre toda la tierra. � Los dioses en quienes ellos confiaban eran incapaces de protegerlos del Dios de Israel.

Considere: Entre los egipcios había personas inteligentes, altamente calificadas: escritores, matemáticos, químicos, líderes militares y civiles, arquitectos, artistas, artesanos, etc., todos muy capaces. Pero desde el punto de vista espiritual eran ciegos y necios por completo. Aunque esclavizaban a Israel, los egipcios mismos eran los que estaban esclavizados sin esperanza: cautivos y subordinados totalmente a Satanás.

Pronto iban a saber que el Dios de Israel estaba vivo y que era poderoso y capaz de liberar a Su pueblo.

Considere: Es fácil para nosotros ver la locura de la adoración en Egipto. Pero recuerden, Satanás había decidido engañarlos utilizando una forma que ellos iban a aceptar en su época y cultura. Todavía hoy sigue haciéndole las mismas cosas a la gente. Al estar Faraón decidido a LUCHAR contra Dios, el Señor planeo usar a este rey malvado para exhibir Su gran poder y terrible juicio sobre aquellos que se rebelan en Su contra.

Y Faraón no os oirá; mas yo pondré mi mano sobre Egipto, y sacaré a mis ejércitos, mi pueblo, los hijos de Israel, de la tierra de Egipto, con grandes juicios. Y sabrán los egipcios que yo soy Jehová, cuando extienda mi

mano sobre Egipto, y saque los hijos de Israel de en medio de ellos. Éxodo 7:4-5

Esto debería ser una advertencia para todo nosotros. No podemos ignorar o luchar contra Dios y escapar a Su castigo. Nadie que lucha contra Dios puede ganar o escapar al castigo.

*Verdad #199: Dios envió NUEVE PLAGAS sobre Egipto:

Como el rey de Egipto se negó a liberar a los israelitas, el Señor comenzó a mostrar su gran poder. Por razones de tiempo, no vamos a leer todos los detalles de lo que ocurrió. Pero si usted quiere hacerlo por su cuenta, puede encontrar la historia en Éxodo 7:14-10:29.

� Primeramente, el Señor convirtió el agua del rió en sangre. � Después envió plagas de ranas, piojos y moscas. � Luego Dios hizo que los caballos, el ganado, las ovejas, los camellos y los asnos de los egipcios se

enfermaran. � Después el Señor hizo que los egipcios tuvieran un sarpullido terrible. � Siguió una tormenta de granizo devastadora, una plaga de langostas y tres días de oscuridad absoluta en

todos lugares donde vivían los egipcios. Faraón y el pueblo egipcio no pudieron salvarse a sí mismos de estas plagas terribles que el Señor envió. Ni tampoco pudieron salvarlos sus dioses falsos. (Es interesante notar que cada plaga apuntaba a la falsedad de

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un dios de los egipcios en particular: por ejemplo, el dios rana, el dios sol y el dios de la tormenta.) El Señor protegió a los israelitas para que no les ocurriera ninguna de estas cosas terribles, aunque vivían cerca en el mismo país. El Señor no protegió a los israelitas porque no tenían pecado o porque merecían Su cuidado. Los protegió a causa de Su amor, misericordia y gracia.

Otra razón por la que Dios protegió a los israelitas fue que Él no se había olvidado de las PROMESAS que les había hecho a Abraham, Isaac y Jacob. Dios eligió a Abraham y le prometió bendecirlo, hacer de sus descendientes una gran nación y ser Su Dios. Aunque habían pasado cientos de años y ahora los israelitas eran esclavos en Egipto, Dios aún afirmaba que ellos eran Su pueblo especial porque eran los descendientes que Él le había prometido a Abraham.

El Señor también protegió a Israel de las plagas para que el rey de Egipto se diera cuenta de que el Dios de Israel era el único Dios vivo y verdadero de toda la tierra. Dios es supremo y soberano. Él hace lo que quiere.

Con cada plaga, la respuesta era siempre la misma:

� Cada vez que el Señor enviaba una plaga sobre Egipto, Faraón lo llamaba a Moisés y le pedía que la quitara.

� Faraón declaraba que entonces dejaría ir a Israel. � Cuando Faraón decía que liberaría a Israel, el Señor quitaba la plaga. � Pero tan pronto como el Señor quitaba la plaga, Faraón endurecía su corazón y no permitía que los

israelitas se fueran de Egipto. � Cada vez que Faraón hacía esto, se endurecía y se enorgullecía más y más.

*Verdad #200: El DECIMO y ÚLTIMO JUICIO del Señor sobre los egipcios:

Aunque el Señor ya había enviado nueve plagas terribles sobre los rebeldes egipcios, el rey de Egipto aún se negaba a obedecer al Señor y liberar a los israelitas. Dios sabía muy bien que Faraón iba a ser obstinado e iba a negarse a liberar los israelitas. Aún antes de enviar a Moisés de regreso a Egipto, Dios le había dicho que esto iba a ocurrir. A Dios nunca le sorprende lo que la gente hace o lo que sucede. Dios siempre sabe todas las cosas antes de que ocurran y tiene Su plan resuelto para lograr siempre su objetivo, sin importar lo que la gente diga o haga. Este rey malvado no podía impedir que Dios rescatara a los descendientes de Abraham. El Señor sabía que, después de la última plaga, Faraón iba a liberar a los israelitas.

Y Jehová dijo a Moisés: Una plaga traeré aún sobre Faraón, y sobre Egipto; después de la cual él os dejará ir de aquí; y seguramente os echará de aquí del todo. Habla ahora al pueblo, y que cada uno demande a su vecino,

y cada una a su vecina, joyas de plata y de oro. Y Jehová dio gracia al pueblo en los ojos de los egipcios. También Moisés era un gran varón a los ojos de los siervos de Faraón, y a los ojos del pueblo,

en la tierra de Egipto. Y dijo Moisés: Así dice Jehová: A la media noche yo saldré por medio de Egipto, y morirá todo primogénito en tierra de Egipto, desde el primogénito de Faraón que se sienta en su trono,

hasta el primogénito de la sierva que está tras el molino; y todo primogénito de las bestias. Y habrá gran clamor por toda la tierra de Egipto, cual nunca hubo, ni jamás habrá.

Mas entre todos los hijos de Israel, desde el hombre hasta la bestia, ni un perro moverá su lengua: para que sepáis que Jehová hará diferencia entre los egipcios y los israelitas. Éxodo 11:1-7

*Verdad #201: Las INSTRUCCIONES de Dios a Moisés:

Dios le dijo a Moisés cómo los israelitas debían prepararse para la plaga final y más terrible de todas. Los israelitas también eran pecadores y merecían morir por sus pecados. También habrían sufrido este juicio último y terrible si no hubiera sido por la misericordia y la gracia de Dios. Dios se acordaba de las promesas que les había hecho a Abraham, Isaac y Jacob. Dios había prometido llevar a los descendientes de Abraham nuevamente a la tierra que Él les había dado. Ahora era el tiempo que Dios había elegido para cumplir Sus promesas. Esto es lo que el Señor le dijo a Moisés que los israelitas debían hacer para salvar a los primogénitos de la muerte.

*Verdad #202: Debían elegir UN CORDERO sin defecto:

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Y Jehová habló a Moisés y a Aarón en la tierra de Egipto, diciendo: Este mes os será principio de los meses; será para vosotros el primero en los meses del año.

Hablad a toda la congregación de Israel, diciendo: En el diez de este mes tómese cada uno un cordero por las familias de sus padres, un cordero por familia. Y si la familia fuere tan pequeña que no baste para comer el

cordero, entonces tomará a su vecino inmediato a su casa, y según el número de las personas, cada uno conforme a su comer, echaréis la cuenta sobre el cordero. Vuestro cordero será sin defecto,

macho de un año; lo tomaréis de las ovejas o de las cabras. Éxodo 12:1-5

El jefe de cada familia tenía que elegir un cordero o un cabrito. El cordero o el cabrito tenía que ser sin defecto.

Recuerde: ¿Se acuerdan del carnero que se ofreció en reemplazo de Isaac? Sus cuernos estaban enredados en un arbusto. ¿Por qué estaba atrapado por los cuernos? Dios es perfecto y todo lo que dice y hace es perfecto. Él nunca iba a aceptar como ofrenda un animal que estuviera enfermo o lastimado.

*Verdad #203: Debían MATAR el cordero y poner la sangre en un RECIPIENTE:

Y habéis de guardarlo hasta el día catorce de este mes; y lo inmolará toda la congregación del pueblo de Israel entre las dos tardes. Éxodo 12:6

Tenían que guardar el cordero hasta el día elegido por el Señor, que era el día catorce del mes. Tenían que matar el cordero en la tarde de ese día. El cordero debía morir. Su sangre, de la cual dependía su vida, debía derramarse. Esto servía para recordarles a los israelitas que el castigo por el pecado es la muerte.

Recuerde: Hasta el momento en que Adán y Eva pecaron, no hubo muerte en el mundo. Pero cuando quedaron separados de Dios a causa de su desobediencia, Dios dijo que sus cuerpos tenían que morir. Todos los descendientes de Adán y Eva nacieron pecadores, separados de Dios. Esa es la razón por la que la gente también tiene que morir físicamente, usted y yo inclusive. Si no hubiera pecado en el mundo, no habría muerte física. Si no hubiera pecado, no habría separación de Dios en el fuego eterno preparado para Satanás y sus seguidores.

Explique: Cuando los israelitas mataban los corderos y la sangre se derramaba, la gente se acordaba de que el castigo por el pecado es la muerte. Así como el carnero murió en lugar de Isaac, los corderos perfectos que los israelitas eligieron y mataron murieron en lugar de sus primogénitos.

*Verdad #204: Debían colocar LA SANGRE en los postes y en los dinteles de las PUERTAS:

Y tomarán de la sangre, y pondrán en los dos postes y en el dintel de las casas

en que lo han de comer. Éxodo 12:7

Dios les dijo a los israelitas que pusieran la sangre en un recipiente. Luego tenían que tomar una ramita de un cierto arbusto y mojarla en la sangre. Con esta rama tenían que pintar con sangre ambos lados de la puerta y el dintel de la casa donde iban a comer el cordero esa noche. Era la sangre del cordero en el marco de la puerta la que salvaría a los primogénitos del juicio de Dios.

*Verdad #205: Debían quedarse en la casa donde habían colocado LA SANGRE:

No debían salir de la casa hasta la mañana.

Y tomad un manojo de hisopo, y mojadle en la sangre que estará en una jofaina, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en la jofaina; y ninguno de vosotros salga de las puertas de

su casa hasta la mañana. Éxodo 12:22

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Explique: Los israelitas tenían que quedarse en las casas donde habían colocado la sangre. Era como si estuvieran escondidos detrás de la muerte y de la sangre del cordero que Dios les había dicho que mataran en lugar del primogénito. *Verdad #206: No debían QUEBRAR ningún hueso del cordero:

No tenían que quebrar los huesos del animal cuando lo mataran ni cuando lo comieran.

En una casa se comerá, y no llevarás de aquella carne fuera de casa, ni quebraréis hueso suyo. Éxodo 12:46

Estas fueron los MANDAMIENTOS para Israel. El pueblo tenía que hacer todo exactamente como el Señor le había dicho a Moisés.

Recuerde: Dios ha sido siempre el mismo. No permitirá que las personas se salven a sí mismos a su manera. ¿Se acuerdan de que Él se negó a aceptar la ropa que Adán y Eva habían hecho en el huerto de Edén? Dios también rechazó la ofrenda que trajo Caín, porque no concordaba con Sus instrucciones. Dios le dijo a Noé que hiciera el arca exactamente como Él había ordenado. De igual forma, los israelitas tenían que hacer todas las cosas tal cual Dios le había ordenado a Moisés.

Compare: Dios sigue siendo el mismo. No ha cambiado. Nosotros no podemos acercarnos a Él según nuestras propias ideas o las ideas de otra persona. Debemos hacerlo a Su manera. Si no nos acercarnos de la manera que Él dice, entonces nunca nos aceptará.

*Verdad #207: LA PROMESA del Señor a los israelitas:

Pues yo pasaré aquella noche por la tierra de Egipto, y heriré a todo primogénito en la tierra de Egipto, así en los hombres como en las bestias: y haré juicios en todos los dioses de Egipto. YO JEHOVÁ.

Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre, y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad,

cuando hiera la tierra de Egipto. Y este día os será en memoria, y habéis de celebrarlo como solemne a Jehová durante vuestras generaciones: por estatuto perpetuo lo celebraréis. Éxodo 12:12-14

Dios les prometió a los israelitas que, cuando viera la sangre en las casas, no iba a permitir que la plaga entrara y matara al primogénito.

*Verdad #208: La FE y la OBEDIENCIA de Israel:

Considere: ¿Cómo se sentirían si esto ocurriera aquí? Pueden imaginarse el tremendo temor de Dios que invadía a los israelitas. Ellos sabían que Él iba a hacer lo que había dicho, y creyeron y obedecieron al Señor.

Y los hijos de Israel se fueron, e hicieron puntualmente así; como Jehová había mandado a Moisés y a Aarón. Éxodo 12:28

Considere: ¿Qué creen que habría ocurrido si un israelita hubiera pensado: “No voy a matar uno de mis corderos sanos. Tengo uno enfermo. ¿Esa va a servir?” ¿Creen que Dios habría aceptado la sangre de un cordero enfermo?

¿Y si alguno hubiera dicho: “Es una pena matar este cordero sano. No lo voy a matar. Voy a atarlo junto a la puerta. Dios verá el cordero vivo y la plaga no matará a mi primogénito?” ¿Creen que Dios habría pasado por alto al primogénito de esa casa?

¡No! El cordero tenía que morir. La sangre tenía que derramarse. Ellos no debían olvidarse de que el castigo por el pecado es la muerte. Todo tenía que hacerse como Dios le había dicho a Moisés.

Los israelitas tenían que confiar en Dios, quien les había dicho que cuando viera la sangre en los postes de las puertas de las casas, no moriría el primogénito de la familia ni el de sus animales.

*Verdad #209: TODOS los PRIMOGÉNITOS de los egipcios MURIERON:

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Todo hijo primogénito egipcio y todo primogénito de los animales de los egipcios murieron.

Y aconteció que a la medianoche Jehová hirió a todo primogénito en la tierra de Egipto, desde el primogénito de Faraón que se sentaba sobre su trono, hasta el primogénito del cautivo que estaba en la cárcel,

y todo primogénito de los animales. Y se levantó aquella noche Faraón, él y todos sus siervos, y todos los egipcios; y había un gran clamor en Egipto, porque no había casa donde no hubiese muerto. Éxodo 12:29-30

El Señor pasó por Egipto tal cual lo dijo. Él siempre hace lo que dice. No hace simples amenazas y después no las lleva a cabo. Cuando Dios decide castigar a los pecadores, no hay manera de ESCAPAR. Debido a que los israelitas habían puesto la sangre en sus casas en obediencia al Señor, no murió ninguno de sus hijos ni de sus animales primogénitos.

� Dios siempre hace lo que dice. � Él dijo que iba a destruir al primogénito de las familias egipcias y lo hizo. � Él dijo que pasaría por alto cada casa en donde viera la sangre y lo hizo. � Se puede confiar que el Señor hace todo lo que dice.

Todo lo que Jehová quiso, ha hecho, en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos. Él hace subir las nubes de los extremos de la tierra; hace los relámpagos para la lluvia; saca los vientos de sus depósitos.

Él es el que hirió los primogénitos de Egipto, desde el hombre hasta la bestia. Envió señales y prodigios en medio de ti, oh Egipto, sobre Faraón,

y sobre todos sus siervos. Salmos 135:6-9

Considere: ¿Se le habían dado advertencias a Faraón? ¡Por supuesto que si! Todas las otras nueve plagas que el Señor había prometido enviar habían venido como Moisés las anunció. El hecho de que Faraón se negara a humillarse ante Dios le costó a Él y a todo Egipto no sólo sus animales y siembras, ¡sino también sus hijos primogénitos! A causa de que Faraón se negó a creer en Dios, Él y todo Egipto pagaron un precio terriblemente caro. Pero el precio eterno que iban a pagar por su incredulidad era aún más caro: la separación de Dios siempre en el Lago de Fuego.

*Verdad #210: Faraón MANDÓ a los israelitas que se fueran:

E hizo llamar a Moisés y a Aarón de noche, y les dijo: Salid de en medio de mi pueblo vosotros, y los hijos de Israel; e id, servid a Jehová, como habéis dicho. Tomad también vuestras ovejas y vuestras vacas,

como habéis dicho, e idos; y bendecidme también a mí. Y los egipcios apremiaban al pueblo, dándose prisa a echarlos de la tierra; porque decían: Todos somos muertos.

Y llevó el pueblo su masa antes que se leudase, sus masas envueltas en sus sábanas sobre sus hombros. E hicieron los hijos de Israel conforme al mandamiento de Moisés, demandando a los egipcios joyas de plata,

y joyas de oro, y vestiduras. Y Jehová dio gracia al pueblo delante de los egipcios, y les prestaron; y ellos despojaron a los egipcios. Éxodo 12:31-36

Faraón hizo llamar a Moisés esa misma noche y le dijo que sacara a los israelitas de Egipto. Faraón pensó que podía luchar contra Dios y que Dios no podía vencerlo, pero nadie puede luchar contra el Señor y ganar.

Conclusión: Es muy bueno que tengamos esta historia. No tenemos que rechazar a Dios como lo hizo Faraón. A partir de esta tragedia terrible podemos APRENDER a creer en Dios y en Su Palabra.

Dios no ha cambiado. Aún exige que le creamos. Aún juzga el pecado. Y aún guarda Sus promesas. El Señor rescató a Su pueblo tal cual lo había prometido. Dios castigará a los que luchan contra Él, pero mostrará Su misericordia y dará Su paz a los que confían en Él.

Si tiene algunas preguntas por favor escribanos por correo postal o correo electrónico y les responderemos lo más pronto posible y darle una respuesta bíblica.

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