curso 2 foucault

7/26/2019 Curso 2 Foucault

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Biopoltica: de la soberana al gobierno

1. Las biopolticas foucaulteanas:

Desde hace algunos aos el concepto de biopoltica, entendida como la

forma de ejercicio del poder poltico que tiene por objeto la vida biolgica de los

hombres, se ha convertido en uno de los ejes dominantes de la filosofa poltica

contempornea. llo se debe en gran medida a los trabajos de !ichel "oucault #,

en particular, a la edicin pstuma de sus cursos en el $oll%ge de "rance.&

'a nocin de (biopoltica) aparece en "oucault por primera ve* en una

conferencia pronunciada en +o de aneiro en &-/, ('a naissance de la

1 0or cuanto sabemos, el origen del t1rmino (biopoltica) se remonta al sueco +udolf 2#ellen3Stormakterma. Konturer kring samtidens storpolitik, 4toc5hol, &-678. 9 partir de entonces, esposible distinguir, esquemticamente, dos diferentes conceptos de biopoltica. n un primersentido, el t1rmino biopoltica hace referencia a una concepcin de la sociedad, del stado # de lapoltica en t1rminos biolgicos #, ms precisamente, patolgicos: el stado es una realidadbiolgica, un organismo, #, puesto que este organismo vive en un continuo desorden, la polticatiene que basarse en la patologa. n un segundo sentido, # en un movimiento inverso al anterior,

aunque no sin relaciones con 1l, el t1rmino biopoltica es utili*ado para dar cuentas del modo enque l estado, la poltica, el gobierno se hace cargo, en sus clculos # mecanismos, de la vidabiolgica del hombre. l primer sentido es el que ha dominado la historia del t1rmino hasta los aossetenta del siglo ; el segundo se ha impuesto, en esos aos, a partir de los trabajos de !ichel"oucault. 0odemos dividir, as, la historia del concepto de biopoltica en dos grandes momentosque corresponden, respectivamente, al primer # al segundo sentido. l trabajo de !. "oucaultpuede considerarse como el punto de inflembre $orte,?667, pgs. &@A?7.

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m1decine sociale),?encuentran una formulacin ms articulada en la parte final de

La volont de savoir3&-@8 # un anlisis ms e


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la nocin de soberana 3Gobbes8 # servirse, en cambio, de las nociones de guerra

# lucha 3Fiet*sche8 para anali*ar el poder. n la ltima leccin de este curso, la del

& de mar*o de &-@, el tema de la biopoltica aparece, precisamente, como una

transformacin biologicista # estatal de la guerra de ra(as.

n Scurit" territoire et population # #aissance de la biopoliti$ue, la

cuestin de la biopoltica se inserta en el marco del anlisis de la racionalidad

poltica moderna, particularmente, en el estudio de la ra*n de stado # del

liberalismo.

(0ero me parece Isostiene "oucaultJ que no se puede hacer el anlisis

de la biopoltica hasta que se ha#a comprendido el r1gimen general de

esta ra*n gubernamental Iel liberalismoJ de la que les hablo, este

r1gimen general que se puede llamar la cuestin de la verdad. n

primer lugar, de la verdad econmica dentro de la ra*n gubernamental,

# por consiguiente hasta que no se comprenda bien de qu1 se trata este

r1gimen que es el liberalismo, que se opone a la ra*n de stado o,

ms bien, que la modifica fundamentalmente sin, qui*s, poner en

cuestin los fundamentos. 4lo cuando se ha#a comprendido qu1 era

este r1gimen gubernamental llamado liberalismo se podr, me parece,

comprender qu1 es la biopoltica.)7

5!ichel "oucault, #aissance de la biopoliti$ue, 0ars, HallimardA4euil, ?66/, p. ?/.


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$omo vemos, la cuestin de la biopoltica encuentra en "oucault cuatro

desarrollos no completamente integrados entre los aos &-@A&--. n primer

lugar, la cuestin de la biopoltica aparece planteada como consecuencia del

surgimiento de una medicina social. n segundo lugar, en l faut dfendre la

socit!, se presenta como una transformacin de la (guerra de ra*as). n tercer

lugar, en un te


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n segundo lugar, tambi1n ha# que tener en cuenta que no slo no nos

encontramos con una concepcin nica, sino que tampoco hallamos una teora

general al respecto. 9 diferencia de cuanto pueden sugerir algunos desarrollos

actuales sobre la biopoltica,para "oucault no se trata de una categora general,

de carcter historiogrfico, sino, ms bien, de un concepto que debe mostrar su

potencialidad analtica en la minuciosidad de los procesos histricos.

n tercer lugar, tambi1n contrariamente a algunos desarrollos

contemporneos sobre el tema, resulta necesario sealar que, para "oucault, la

aparicin de la biopoltica no puede ser leda en t1rminos histricos como la

superacin de una 1poca dominada por la soberana o por las disciplinas.

9 nuestro modo de ver, ms all de su justificacin o de su legitimidad, las

tendencias actuales a reducir la biopoltica a una concepcin nica, a pensarla

como una categora historiogrfica general # a concebirla como la ltima etapa del

desarrollo histricoApoltico de la modernidad han dejado de lado lo que en el

vocabulario de "oucault puede denominarse lapositividaddel discurso sobre la

biopoltica o, con otras palabras, el carcter metodolgico #, al mismo tiempo,

poltico que "oucault atribu#e a sus trabajos sobre el tema.

7'a tendencia a convertir el concepto de biopoltica, entendida en t1rminos de inmunidad, en unacategora historiogrfica general equivalente a la de modernidad la encontramos, por ejemplo, en

+oberto sposito. $f. +oberto sposito, Bos. Biopolitica e filosofia, Nurn, inaudi, ?66/, pp. /&A7/.8 sta interpretacin la encontramos, por ejemplo, en !ichel Gardt M 9ntonio Fegri, mperio,Buenos 9ires, 0aids, ?66?, pp. CAC. 4i bien algunos te


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Fuestro primer objetivo es, precisamente, sacar a la lu* la positividad del

discurso sobre la biopoltica. llo nos permitir, luego, mostrar el ne


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(n cuanto a la obra, los problemas que ella plantea son todava ms

difciles. O, sin embargo, al menos aparentemente, Pqu1 ha# de ms

simpleQ Kna suma de te


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podemos agregar las que surgen a partir del cambio del soporte material del

discurso. n efecto, nos encontramos, en primer lugar, con el paso de la escritura

a la oralidad #, luego, de la oralidad nuevamente a la escritura. $omo sabemos,

"oucault dispona de un te


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4egunda indicacin. 4i relacionamos estos cursos con la publicacin de sus

libros, los cursos en los que aparece la problemtica de la biopoltica se distinguen

de los restantes porque el material abordado en ellos, si e


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epistemolgicas # de las ciencias.&&9unque sostiene que, por el momento, no ha

avan*ado suficientemente en esta direccin, se imagina (de buena gana)

3volontiers8 otras orientaciones de la arqueologa: hacia la 1tica, hacia la pintura #

hacia la poltica. n L04sage des plaisirs# en Le Souci de soipodemos ver, #a no

el pro#ecto ms o menos imaginado, sino la realidad de una arqueologa orientada

hacia la 1tica. +especto de la segunda posibilidad, una arqueologa de la pintura,

est todava abierta la cuestin acerca de la e


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ella. ste saber, en lugar de anali*arlo M lo que siempre es posible M en

relacin con la epistemea la que puede dar lugar, se lo anali*ara en

relacin con los comportamientos, las luchas, los conflictos, las

decisiones # las tcticas. De este modo, se hara aparecer un saber

poltico que no es ni del orden de una teori*acin que vendra despu1s

de la prctica ni del orden de la aplicacin de la teora. 0uesto que 1l se

forma regularmente por una prctica discursiva que se despliega entre

otras prcticas # se articula sobre ellas, no es una e


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prcticas de gobierno de la modernidad ateni1ndose a lo que ellas tienen de

especfico. llo implica, por un lado, que no se trata de mostrar cmo estas

prcticas se deducen de una teora general, pero tampoco, por otro, cmo puede

llegarse a partir de ellas a una teora general. 'a (toma de conciencia), segn un

vocabulario comn de la 1poca sobre el que "oucault insiste en el te


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sugerida por el conte


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discontinuo, tambi1n lo han sido las luchas de estos aos que han sido eficaces:

contra la moral se


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sta nocin de genealoga es, al mismo tiempo, una descripcin precisa de

lo que ser el curso que inaugura esta leccin: un acoplamiento entre el trabajo

erudito de "oucault # la memoria de un saber sujetado por el saber que negaba a

la lucha su carcter poltico, el discurso de la soberana, que $lauseUit*

sinteti*aba con el dicho que "oucault se propone invertir: (la poltica es la

continuacin de la guerra por otros medios). +esulta necesario subra#arlo, el

saber sujetado hacia el cual "oucault orienta su trabajo de erudicin, es el saber

histrico en relacin con el cual se form la historiografa clsica francesa # el

vocabulario poltico de la +evolucin.

'a primera respuesta acerca de la positividad del discurso sobre la biopoltica

es, entonces, la siguiente: se trata de una descripcin de las formas de ejercicio

del poder en la que deben acoplarse la erudicin # la memoria de las luchas, de

modo que el anlisis pueda desprenderse de la (tirana de los discursos

englobantes).&-

n la primera leccin del curso siguiente, Scurit" territoire" population,

"oucault presenta una serie de indicaciones. Fo se trata, precisa, de (principios, ni

de reglas, ni de teoremas), sino de (opciones), indications de c&oi3.?6n la tercera

de estas indicaciones, sostiene:

(0ero, despu1s de todo, lo que #o hago, no digo aquello para lo que

esto# hecho, porque de ello no s1 nada, sino, en fin, lo que hago, no es,

despu1s de todo, ni historia, ni sociologa, ni economa; sino, ms bien,

19Ebid., p. -.20!ichel "oucault, Scurit" territoire" population, 0ars, HallimardA4euil, ?66/, p. C.

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algo que, de diferentes maneras # por ra*ones simplemente de hecho,

tiene que ver con la filosofa, es decir, con la poltica de la verdad. 0ues

no veo otra definicin del t1rmino RfilosofaS sino esta: se trata de la

poltica de la verdad.)?&

$onocemos la reticencia de "oucault a la hora de encuadrar sus trabajos

dentro de las etiquetas tradicionales ms o menos institucionali*adas del trabajo

intelectual. O tambi1n sus e


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debemos apo#ar o de lo que debemos desconfiar, la e


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verdad, que es la dimensin propia donde desde hace siglos se desarrolla la

filosofa) termina (teatrali*ndose).?@

0asemos, ahora, al ltimo de los cursos que nos interesa aqu, #aissance

de la biopoliti$ue. $omo en el curso precedente, tambi1n aqu nos encontramos

con ciertas opciones de m1todo. 9nali*ar la prctica gubernamental, objeto del

curso, implica dejar de lado (como objeto primero, primitivo) un determinado

nmero de nociones: (el soberano, la soberana, el pueblo, los sujetos, el stado,

la sociedad civil), es decir, determinados (universales).?n efecto, un posible

camino a seguir sera el de partir de estos universales para dar cuenta del modo

efectivo de la prctica gubernamental. 9hora bien, el camino que "oucault ha

seguido es el inverso: partir de las prcticas # del modo en que fueron objeto de

refle


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0odemos resumir como sigue las respuestas que encontramos en cada una

de las primeras tres lecciones de los cursos de los aos &-@A&-- acerca de la

positividaddel discurso biopoltico. n cuanto genealoga, no se trata de elaborar

una teora englobante o de conjunto, sino de acoplar el trabajo de la erudicin al

saber # a la memoria de las luchas. n cuanto filosofa, no se trata de teatrali*ar la

relacin entre verdad # lucha, sino de un compromiso personal # real planteado en

t1rminos concretos. n cuanto trabajo histrico, no se trata de aplicar un universal,

en este caso, la biopoltica, para describir sus diferentes declinaciones histricas;

sino de suponer que los universales no e


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soberana, pero tampoco e


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formacin de la individualidad a los mecanismos cientficoAdisciplinares,

donde lo normal relev a lo ancestral, # la medida al estatus,

substitu#endo as la individualidad del hombre memorable por la del

hombre calculable, 1ste es el momento en que fueron posibles las

ciencias del hombre, 1ste es el momento en el que se instauraron una

nueva tecnologa del poder # otra anatoma poltica del cuerpo.)CC

O, apenas tres aos ms tarde, en Scurit" territoire et population 3&-8,

encontramos otra e


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9hora bien, Pcmo leer estas tres diferentes e


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sus derechos pero sometido a las le#es de la naturale*a o a las reglas

de la sociedad8, la libertad fundamental 3interiormente soberana,

e, como lo e


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artes de gobernar, en un primer momento, del gobierno de los otros #, luego, del

gobierno de s mismo. 0or ello, en t1rminos mu# sucintos, se puede sostener que

la temtica de la biopoltica ha sido, para "oucault, el camino que lo llev a

plantear una nocin no humanista del sujeto, un sujeto entendido como el ejercicio

de una prctica refleja de libertad.4i lo que faltaba a Les ,ots et les c&osesera la cuestin del poder, lo que

faltaba a Surveiller et punir era la cuestin del gobierno. $omprendemos,

entonces, porqu1 era necesario ensa#ar una tercera respuesta a la cuestin del

surgimiento de las ciencias humanas # del humanismo a partir de la problemtica

de la poblacin. O comprendemos tambi1n por qu1 "oucault debe reformular la

cuestin de la norma, en torno a la cual haban girado gran parte de sus

investigaciones de estos aos, introduciendo la distincin entre normaci'n #

normali(aci'n para poder diferenciar los dispositivos disciplinarios de los

biopolticos.C n efecto, ha sido la cuestin de la poblacin la que permiti en

>ccidente el desbloqueo de las artes de gobernar#, de este modo, la formacin

de ese conjunto de prcticas # saberes que "oucault denomina

gubernamentalidad.C- n definitiva, la problemtica de la poblacin es la que

termin dndole a la poltica moderna uno de sus sentidos fundamentales: (la

poblacin aparece, entonces Isostiene nuestro autorJ, ms que la potencia del

soberano, como el fin # el instrumento del gobierno: sujeto de necesidades, de

38 'a distincin entre normaci'n # normali(aci'nes introducida, en efecto, para diferenciar losdispositivos disciplinarios de los dispositivos biopolticos. n la normaci'n, la aplicacin de lanorma es lo fundamental. n la normali(aci'n, en cambio, la norma no es anterior, sino posterior ala divisin en normal # anormal. $f., ibid., pp. 7A@&.39$f., ibid., pp. &67A&6.

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aspiraciones, pero tambi1n objeto en las manos del gobierno.)/6 $on otras

palabras, es en este momento que la poltica se convierte en biopoltica.

40Ebid., p. &6.

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dgardo $astroKF49! X $>FE$N

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