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ISSN 0864-0572 Precio: 80 ctvos www.almamater.cu Octubre 2009 No. 480 © CULTURA sin fronteras

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ISSN 0864-0572 Precio: 80 ctvos www.almamater.cu Octubre 2009 No. 480 ©

CULTURAsin fronteras

EditorEditorEditorEditorEditor

...y no somos del Cerro

Hace solo un poco de tiempo veía yo alzar-se un mar de manos en un evento culturalgrandioso que tuvo como lema Concierto porla Paz, y pensaba entonces, ¿Qué es la pazsino la unión de la cultura, la eticidad, el civis-mo? Desde el mismo principio de nuestra for-mación como nación, los cubanos tenemos lahonra de contar con ejemplos claros de esto .La cultura no es una acumulación huera y vanade conocimientos si no está sustentada sobreesas bases.

Es hermoso ver a nuestra niñez y juventudllenando las aulas en las escuelas de ense-ñanzas tecnológica, preuniversitaria, de ar-tes de toda índole, nuestras universidadesinundan la Isla, en cualquiera de nuestrosrincones hay un profesor universitario ense-ñando a una nueva hornada de alumnos.

Pero no basta eso, si nos quedamos en lateoría, si no buscamos como dijera Martí “des-de el microbio hasta la nube”, si no intentamosamar y engrandecer lo creado, no seremos dig-nos discípulos de quienes fueron ejemplo deética y humanidad.

Antes de ser creada nuestra Real y PontificiaUniversidad de San Jerónimo de La Habanahubo un Seminario de San Carlos y SanAmbrosio en cuyas aulas fueron Maestros y,lo digo en mayúscula, hombres de la talla deJosé de La Luz y Caballero y el presbítero FélixVarela de quien De la Luz dijera «Varela fue elprimero que nos enseñó en pensar», y hombrescomo él ilustraron a la generación del 68.

El legado cultural de nuestra nación partedesde ahí, y hoy de ese crisol brillan seres depensamiento que como Cintio, Retamar ytantos otros , pues la cita se haría intermi-nable, nos hacen pensar en el mejoramien-to humano, nos hacen creer que la paz estácentrada en la libertad de juicio del hombre,en su libertad de actuar, en el cotidiano hacerpor un mundo mejor, en esa paz sin fronterasque significan, nuestros maestros, médicos,profesionales del arte en cualquier lugar delplaneta, haciéndolo cada vez más hermoso yvivible.

Hagamos de nuestra cotidianidad un cantoa la cultura de la integridad, a la concienciadel cuidado al medioambiente, al de nues-tras ciudades y campos, y a nuestras comu-nidades étnicas que hoy tienen el honor depertenecer al Patrimonio de la Humanidad,tanto tangible, como intangible y reflexio-nemos un poco acerca de esta frase de Varelaescrita en 1818: «El hombre será menos vi-cioso cuando sea menos ignorante. Se harámás rectamente apasionado cuando se hagamás exacto pensador».

Por DamepaDamepaDamepaDamepaDamepaFotos Elio MirandElio MirandElio MirandElio MirandElio Mirand

y cortesía de la entrevistaday cortesía de la entrevistaday cortesía de la entrevistaday cortesía de la entrevistaday cortesía de la entrevistada

«La mayor alegría que me dio el Che, fueseleccionar a la tropa donde estaba, y ordenar-nos ir de Placetas hasta Santa Clara», cuentaRafaela acomodada en su sillón. Se mece in-quieta, no le permite al fotógrafo atrapar suimagen con el lente. Y es que solo los ojospueden testificar sobre la juventud escondidaen sus 73 años.

Cuando habla de rebeldía, y de lo poco ymucho que vio en Ernesto Guevara durante losbreves momentos en los que lo tuvo cerca, lahermana de Cheo, Rafael y Manón, viaja en eltiempo.

«Al verlo caminar te dabas cuenta de quevivía para alguien más, no era de sí mismo…Mi hermano Cheo, quien estuvo con él en lacolumna ocho Ciro Redondo, nos lo presentóa toda la familia tras la toma dePlacetas. Luego lo vi en la Cabaña, yotras veces de pasada, pero nunca lohe podido olvidar…, una personasencilla, entregada…»

Las palabras llevan tanta emo-ción, que se quedan en el aire. Asícuenta esta mujer de sus años mo-zos, cuando hubiese podido estaren la universidad, pero era negra,pobre, y revolucionaria.

Nacida en Placetas, actual provinciade Villa Clara, Rafaela Esther HernándezCastillo tuvo una infancia marcada porla violencia y la lucha de clases.

«Mi madre era secretaria generalde las escogidas en nuestropueblito, una persona muy progre-sista. Me llevaba a todas sus activi-dades políticas, riesgosas, pues losgobiernos de turno mataban sinconsideración de sexo o edad, aquienes intentaran rebelarse contrael sistema. Entonces empiezan lashuelgas de tabaco, el alzamiento delos tabaqueros, los llevan presos parael ayuntamiento del pueblo, donderadicaba la Policía. Al frente estabael Parque de los Laureles, allí se reunían quie-nes estaban dispuestos a protestar por loshuelguistas el tiempo necesario. Como niña,mi función era salir hasta el parque, a unasdiez o doce cuadras de mi casa, para llevarlesagua y merienda. Luego, mi madre, para apoyarla situación, me dice: “Vete a la casa, corre, y dilea tus hermanos, y a quienes quieran unirse, quesalgan a la calle para interrumpir el tráfico”. Al-gunos vecinos, mis hermanos y yo, hicimos eso».

Desde entonces, su vida quedó marcada porel quehacer patriótico. Las reuniones diariasen casa, el movimiento 26 de Julio, el directo-rio 13 de Marzo, la discriminación al caminarpor el paseo para hombres y mujeres blancos, losahorcamientos de jóvenes en medio del poblado,fueron moldeando su carácter de luchadora y ledieron lo que llama «genes de revolucionaria».

«Llegó el momento en que no me quedómás alternativa que irme para el monte, conlos alzados. Fue cuando mataron a mi tío.

«Lo habían sacado de su casa, frente a loscuatro niños y la esposa con siete meses de

estado, a cada uno le pusieron una ametralla-dora en el pecho. Él, tan guapo que era a pesarde que casi no podía caminar, casualmente an-daba sin su revólver y lo balearon todo.

«Mis hermanos y tíos fueron a buscarlo aCaibarién. Finalmente lo trajeron desnudo, con loshuecos de las balas por todo el cuerpo. Entonces lafamilia y otros compañeros nos reunimos en elparque, donde uno de mis tíos dio un mitin derepudio. Hubo quiénes cerraron las casas y es-tablecimientos, pero otros se sumaron.

«Después de eso no pudimos vivir. Mi madreera santera y lo usaba para cubrir las reuniones.Al suceder esta desgracia, cogió los siete ma-chetes de sus Oggunes y los puso en un lugarcercano, por si llegaban los esbirros, no salierauno vivo de mi casa».

La decisión coaccionó su destino: cuandotuvo que abandonar a sus hijos de seis y sieteaños para no ser asesinada por la guardia dePlacetas; al llegar al monte, a un campamentodonde solo había hombres desconocidos; conel caso omiso al capitán que le ordenó no mon-

La revista brasileña O CruzeiroO CruzeiroO CruzeiroO CruzeiroO Cruzeiro, publicó, en 1959, un artículotitulado: «La Patria lanzó el grito de ¡a las armas!, y la mujer cubanano vaciló en empuñarlas». En el mismo, sale una foto de figurasfemeninas rebeldes, en la cual se incluye Rafaela Esther.

tara en el camión dirigido al combate; y ya enLa Habana, el arma erguida ante un barbudodesconfiado…

«Estando en el Alma Mater, cumpliendo conla orden de buscar a algunos enemigos es-condidos, me llama un hombre vestido deverde olivo. Por supuesto que yo llevaba mipertrecho a cuestas, mi arma, mi granada. Me

empieza a preguntar qué hacía porahí, de dónde había sacado las ar-mas. Le contesto de lejos, sin bajarel fusil, pues los esbirros podían dis-frazarse…

«Rápido le expliqué mi proceden-cia, la de las armas. Y me pregunta siquiero incorporarme a las Marianas,en Managua con Almeida. Como yoestaba loca por irme y que me dejaratranquila, le dije que sí. Imagínate,era mi primer viaje a La Habana, y elnerviosismo no me permitió decirleque no sabía, ni dónde estaba Ma-nagua, ni quién era Almeida…Luego el hombre me dio una notafirmada por él y salí corriendo.

«Al llegar al hotel Flamingo,donde estaba mi capitán, y con-tarle lo sucedido, revisa el papel ycuando ve la f irma, me dice:“Rafaela, ¿tú sabes quién te dioeste papel? Fidel Castro”.

«¡Ay! ¡ ¿Qué te cuento?! Al día si-guiente estaba en Managua».

Se mantuvo con el pelotón fe-menino hasta que este partió aOriente, pues aunque su inquietud

guerrillera persistía, necesitaba trabajar paracuidar de sus pequeños.

A pesar de no seguir un camino militar, susvínculos con la Defensa Civil, la Cruz Roja, laFederación de Mujeres Cubanas, el PartidoComunista y sus disímiles distinciones y re-conocimientos, han convertido a RafaelaEsther, en un ejemplo para abrazar, por lasnuevas generaciones.

Como toda fémina centro de familia, no sedetiene ante los once años de retiro y la plazade económica archivada en su expediente. Laartesanía ha llenado sus jornadas y la de tantasotras abuelas incorporadas a la universidad deladulto mayor y enseñadas por ella.

Sin despegarse del sillón desde el ini-cio de la plática, exhibe orgullosa suscreaciones plásticas en superficies textiles,las ramas secas cobrando vida bajo papelplateado, y para aderezar, poemas, unabiografía y una taza de café. Revelacio-nes todas, de una mujer imperfecta, perocompleta.

Por Dainerys Mesa Padrón

El Poema del RenunciamientoPoema del RenunciamientoPoema del RenunciamientoPoema del RenunciamientoPoema del Renunciamiento, de José Ángel Buesa, atribui-do por años a un amor oculto, reprimido, pareciera cobrar vidapor estos tiempos; solo que reencarnando en algo, y no enalguien precisamente.

Por casualidad lo he escuchado y cayó en mis pensamientos,¡como anillo al dedo! Y es que los resultados, al indagar lapostura de algunos universitarios hacia la enseñanza de la eco-nomía política en este nivel, no han quedado mejor descritosen otra frase.

Pasarás por mi vida sin saber que pasaste.Pasarás en silencio…

Aunque no parece ser la norma —según criterios, o anhelosde los profesores— sí es probable tropezar con realidades comola de Dayana Hernández Montalvo, de quinto año de Comuni-cación Social en una sede universitaria.

«Recibí Economía Política durante dos semestres, en segun-do año de la carrera. En el primero fue el capitalismo, y luego el

socialismo. Tengo conciencia de la crisis mundial y de otrassituaciones internacionales, los problemas que puede acarrear,sobre todo el desempleo. Puedo comprender a grandes ras-gos… ¿La Economía Política? … Pienso que no me ha ayudadoen los conocimientos que tengo. Te digo que la recibí hace tresaños, de manera que no puedo hablar de los contenidos, puesno me acuerdo.

«A lo mejor influyó, de alguna manera, en lo que sé ahora delos procesos actuales, pero no sabría explicarlo. Las clases fueronmuy teóricas. En Economía Política del Socialismo fue cuandomás nos aterrizaron los conocimientos en ejemplos concretos, apartir de Cuba y el Período Especial».

Ante tales argumentos, la Máster María del Carmen PérezGonzález, profesora titular del Instituto Superior de Cultura Fí-sica, Manuel Piti Fajardo, elabora sus conclusiones:

«La Economía Política aporta una herramienta metodológicapara hacer un análisis crítico de la realidad. Por supuesto, quienestudió la asignatura hace diez años no pudo analizar las carac-terísticas de la crisis actual, pero sí tiene el andamiajemetodológico, teórico, para interpretar los procesos vigentes».

Resulta que los estudiantes de hoy pretenden encontrar en lasaulas una inmediatez no siempre correspondida. En su desesperaciónpor aprender todo lo posible en cinco o seis cursos de altos estudios,menosprecian las disciplinas en las cuales la clave está en aprehender,para tiempos futuros.

Llegan entonces los períodos de memoria a corto plazo, cuan-do letra por letra puede ser reproducida en un examen; sinembargo, olvidada tras su evaluación.

Fingiré una sonrisa, como un dulce contrasteDel dolor de quererte... Y jamás lo sabrás.

No puede desligarse de la Economía Política, su carácter teó-rico, como tampoco debemos olvidar sus basamentosmetodológicos e ideológicos. Si bien no se trata de economíamundial, o cubana, es necesario, por parte de alumnos y maes-tros, comprender la magnitud de la complementación entre lasmaterias.

Una contextualización presente de los contenidos es tan im-prescindible, como una retrospectiva conceptual y práctica, delos acontecimientos políticos, económicos, históricos y cultura-les del mundo.

«El profesor de Economía Política y el estudiante que quieraadentrarse un poco en ella, tienen que exigirse un conocimien-to integral. Un alumno que no lee, no sabe historia universal, nide Cuba… no puede entender.

«Asimismo, un profesor que prescinda de esto, tampoco pue-de impartir una buena clase. El propio Marx decía que él apren-dió más de la sociedad francesa en los textos de Balzac, que encualquier otra obra, pues Honoré recreó científicamente unasociedad»— afirma la licenciada Verena Hernández Pérez, ase-sora de la Dirección de Marxismo en el Ministerio de EducaciónSuperior.

Quizás sea esta laguna en la instrucción de algunos educado-res, o la falta de maestría pedagógica de los mismos, la causadel rechazo del estudiantado hacia la asignatura, o la deficienteaprehensión de los saberes.

Como tal lo reconoció el doctor Rafael Antonio Sorhegui Or-tega, profesor auxiliar y jefe del departamento de DesarrolloEconómico, centro rector de la enseñanza de la economía polí-tica en el nivel superior. «El estudiante no es un depósito dondese lanza el conocimiento, hay que interactuar con él y motivarloa partir de la adecuación a la realidad. La principal tarea delprofesor es hacer pensar».

Y para hacer pensar existen ¡tantos trucos!

«Hay que leerse El Capital, es una obra densa, pero básica.Pero no solo leer a Marx y a Engels, también obras de la litera-tura universal, las cuales en su momento fueron reflejo de unaépoca.

«Cuando un profesor está en el aula y tiene estas herramientashistóricas, puede ilustrar con ejemplos de la vida cotidiana, sintener que forzarlos o inventarlos. No hay que inventar nada.Existen medios audiovisuales para usar en las clases, fuera de laslimitaciones materiales», apunta Verena Hernández.

Yo te amaré en silencio, como algo inaccesible,Como un sueño que nunca lograré realizar,Y el lejano perfume de mi amor imposibleRozará tus cabellos... Y jamás lo sabrás.

Los espacios de discusión propiciadospor los temas de esta ciencia, han sidomenospreciados y subestimados tanto por elclaustro, como por la masa estudiantil.

A pesar de mencionar y orientar el estu-dio de obras fundamentales para el aprendi-zaje, hay cabos que siempre quedan sueltos.Lo reafirma la joven Vanesa Lamar, de tercercurso de informática: «Estudié para la asignatura através de El Capital. Dimos el capitalismo, el so-cialismo. Pero eran clases muy conceptuales yteóricas, por eso prefiero remitirme a otraslecturas como el Granma, o a ver la te-levisión, así entiendo mejor la crisiseconómica mundial».

Un espacio privilegiado en laformación de la juventud cu-bana, ha sido cedido por lasclases de Economía Políticaen la universidad, a otrasfuentes de información,que, infelizmente, no son,cada vez, las más idóneas(manuales de veracidaddudosa, páginas Web conpoca calidad explicativa ointerpretaciones manipu-ladas).

«El resultado de una ense-ñanza dogmática, escolástica,condujo a una reproducción de

una pseudociencia materializada en manuales de escaso valorcientífico, y eso se transmitió de generaciones a generaciones,dando una imagen de la economía política convertida en suantítesis. Estamos enfrascados, hace tiempo, en el rescate delverdadero papel científico de la ciencia, tanto de esta, como deotras». Reflexionó la doctora Carmen Magaly León Segura,profesora titular de la Facultad de Economía y Contabilidad dela Universidad de La Habana. Mientras, Verena aseveró: «Creoque el tema, más que vincularse con los estudiantes, lo hace enocasiones con los profesores, quienes piensan que no es nece-sario, para determinadas carreras, impartir esta asignatura. Lamayoría de los alumnos se ocupa y preocupa, y muchas vecesplantea preguntas interesantes sobre la cotidianidad, las cualespasan por el enfoque de nuestra disciplina».

Vuelve Carmen Magaly sobre el tema, asegurando: «Los es-tudiantes de las ciencias exactas tienen la tendencia a adentrarsetanto en su mundo de números, y olvidan que forman parte deuna sociedad, muchas veces inentendible, y para la cual tieneninfinidad de cuestionamientos sin respuestas científicas. Ellosdeben estudiar economía política, pues son seres inmersos enel proceso de construcción y transformación de la humanidad.

«Evidentemente, los profesores no tenemos la solución alos problemas sociales; no obstante, ofrecemos claves paraencontrarla. También vivimos en esta sociedad, sufrimos ypadecemos un conjunto de problemáticas que escapan denuestras posibilidades. No somos los hacedores de políticaseconómicas. Y muchas veces, los educandos confunden elhacer ciencia, con el muro de las lamentaciones».

Desmotivación por encima del desconocimiento o una in-completa preparación de unos (catedráticos), y otros (discípu-los), marca el proceso educativo.

Se trabaja en la superación. Se incentiva a los jóvenes a tomarel magisterio. Miramos el futuro con el optimismo en la pupila.

Sin embargo, el contraste entre algunas revelaciones marcapautas.

Doctora Carmen Magaly: «El aprendizaje de esta ciencia es unelemento clave para comprender la realidad. No significa quesea un recetario, pero los componentes metodológicos, losmedulares, la brújula que indica cuál es el camino, la da la eco-nomía política».

Alain Martínez Milián, estudiante del Cultura Física en elFajardo: «Para un estudiante, sobre todo universitario, todoslas ideas son importantes y le aportan a su preparación. Aun-que en mi caso aparentemente no tiene mucho que ver con eldeporte, la Economía Política te instruye y ayuda a comprendersituaciones mundiales». ¿Entiendes algo de la crisis? ¿Entiendes algo de la crisis? ¿Entiendes algo de la crisis? ¿Entiendes algo de la crisis? ¿Entiendes algo de la crisis? «No, algomás o menos, pero no». ¿Y lo que te dieron en Economía¿Y lo que te dieron en Economía¿Y lo que te dieron en Economía¿Y lo que te dieron en Economía¿Y lo que te dieron en EconomíaPolítica no te ayuda a comprenderla? Política no te ayuda a comprenderla? Política no te ayuda a comprenderla? Política no te ayuda a comprenderla? Política no te ayuda a comprenderla? «Eso fue hace dosaños, yo más bien me inclino por la rehabilitación y el masaje,no hice mucho hincapié en esa asignatura, pues lo mío esrehabilitador, y me defiendo mejor en esa rama…»

Y si un día una lágrima denuncia mitormento,

el tormento infinito que te deboocultar,

Te diré sonriente: “No es nada...Ha sido el viento”.

Me enjugaré la lágrima...Y jamás lo sabrás.

La asignatura de Economía Política se imparte en todas las carreras universita-La asignatura de Economía Política se imparte en todas las carreras universita-La asignatura de Economía Política se imparte en todas las carreras universita-La asignatura de Economía Política se imparte en todas las carreras universita-La asignatura de Economía Política se imparte en todas las carreras universita-

rias, excepto en Medicina. Para las ciencias económicas están concebidos tresrias, excepto en Medicina. Para las ciencias económicas están concebidos tresrias, excepto en Medicina. Para las ciencias económicas están concebidos tresrias, excepto en Medicina. Para las ciencias económicas están concebidos tresrias, excepto en Medicina. Para las ciencias económicas están concebidos tres

semestres de la misma, mientras que para el resto, solo dos.semestres de la misma, mientras que para el resto, solo dos.semestres de la misma, mientras que para el resto, solo dos.semestres de la misma, mientras que para el resto, solo dos.semestres de la misma, mientras que para el resto, solo dos.

¿¿¿¿¿D E S O R I E N T A D A ?????

“…quisiera que olvidaras por este momento,las pequeñas cosas del día, las contrariedadesque te hicieron fruncir el ceño, la palabra duraque alguien dijo, la brusquedad de un gesto, lafatiga cotidiana y vulgar de las pequeñas injusti-cias de todos los días…”

Dulce María Loynaz

Este es un endemoniado libro por encargo.Me «asignaron» la tarea en mi Departamentode Sociología de coordinar un texto para laasignatura de Ética y Trabajo Social. Como todotrabajo pedido de «arriba», exigido para unafecha determinada, muchas veces lo empiezode mala gana. Odié los días de preparación;además de cuatro videos en los que tenía queponer mi cara ante una cámara. Me alteré conmi jefe, con la responsable del colectivo de Teo-ría Sociológica, al cual pertenezco, maldije lahora en que elegí esta profesión, y tuve denuevo la sensación fugitiva, los deseos de es-conderme en algún lugar, de no ver a nadie.

La gran amabilidad del equipo de realiza-ción, todas maravillosas personas, hicieron másangustiosa la tarea para mí; de pronto me en-contré deseosa de seguir, de introducirme enel mundo de la inmediatez y adiestrarme parahacer desaparecer de mí el discurso agónicoque poseo por la general; de convertirme enuna excelente comunicadora.

A través de la realización de lo «impuesto»confirmé de nuevo la idea de Goethe en Fausto,acerca de una especie de fuerza que siemprequiere el mal y siempre crea el bien, es decir, quede algo negativo se puede lograr lo positivo (yal revés), que la interpreta Max Weber comouna especie de paradoja de las consecuenciasimprevistas (o no queridas) de la acción de losindividuos, consecuencias que al final acabanimponiéndose sobre las intenciones originales.Pudiera tomar también como justificación a micambio de estado de ánimo, la dialécticaweberiana que tiene en cuenta lo posible soloobtenido si se procura lo imposible; lo queLezama Lima llamó —tal vez influenciado poreste autor— «la posibilidad infinita».

Como ya estoy calmada, ahora me ha dadopor pensar que la posibilidad infinita animó amis jefes a seleccionarme para que coordinaraeste compendio, no porque querían demos-trar su autoridad descargando sobre mí dolo-res de cabeza, sino porque se imaginaron queera la más indicada, digamos la «experta» parauna labor de hormiga y de lupa. Quiero creerque esta suerte no se me hubiera brindado dosveces y que pensaron en mí porque era una delas «pocas» personas capaces de lograr estaexperiencia. Gracias a ellos, he tenido quedesplazarme de una ética más o menos teó-rica y general al estudio de la ética de lasprofesiones y al interior de un mundo convida propia, impregnado de poesía y pensa-miento. Hasta ahora no había descubiertoque en un ejercicio como este, era necesariopasar del deseo de filosofar y manejar sím-bolos intelectualizados al oficio que viveoníricamente imágenes específicas.

Debo confesarles otro motivo mucho máspoderoso para animarme a escribiren tiempo récord un libro de tal en-vergadura. No se asusten, la preci-pitación de la entrega es solo unacuestión técnica, pues estoy muy de

acuerdo con Lezama, cuando expresó que «unose demora todos los años que tiene para escri-bir algo»2 y excepto una profesora joven, losdemás hace mucho tiempo que aprendimos aesperar despiertos las horas privilegiadas y noanunciadas de las palabras y los signos quellegan. Añade este escritor que «el métodocubano de trabajo intelectual es la suma de laspoquedades»3 y eso es lo que hemos hecho:sumar poquedades.

Resulta que tres o cuatro años atrás, cuandomi primera incursión en un curso de la carrerade Sociología, los estudiantes —a los que quieroentrañablemente— expresaron su descontentoo cierto malestar porque los trabajadores socia-les cubanos actualmente tenían privilegios queellos, siendo «auténticos universitarios», no po-seían. Tal fue el grado de inconformidades quellegaron a calificarlos de «marginales», y portanto, no concebían que al final alcanzaran untítulo académico con el mismo valor que el deellos en un futuro cercano. Me quedé conster-nada. Empecé tímidamente a intentar calmar-los explicándoles que esos muchachos, aunqueno hubieran alcanzado una alta calificación ensus vidas estudiantiles, tenían derecho a obte-ner un nivel de educación superior; que debidoa diferentes circunstancias , sobre todo perso-nales y familiares, esos jóvenes necesitaban otraoportunidad, y esta era una de ellas. Mi opacaintervención no fue suficiente para convencer-los de la justeza de tales medidas.

En el próximo encuentro, después de tres díasde relajamiento, decidí motivar la conferenciacon un poema de Rainer María Rilke. Antes deempezar a leer, comenté que el poemario me lohabía facilitado uno de esos trabajadores socialesque ellos prácticamente insultaron en el aula. Mi-radas extrañadas. Expliqué que ese «marginal»había leído libros de Federico Nietzsche, de EdgarAllan Poe, de Fernando Pessoa, de Rubén Darío,de Félix Varela, de Jorge Luis Borges, etcétera. Ca-ras de asombro. Aclaré que le había trasladado aese trabajador social que aspiraba a estudiar, comoellos lo están haciendo, la carrera de Sociología,

Una profesora que habla solaLas consecuencias imprevistas de un libro por encargo1

Por TTTTTerererereresa Díaz Cesa Díaz Cesa Díaz Cesa Díaz Cesa Díaz Canalsanalsanalsanalsanals

sus preocupaciones, pero que no se había aca-lorado, ni siquiera se había inmutado. Solo conuna expresión serena concluyó: «Sí, mami, talvez tengan razón tus estudiantes». risas, muchasrisas. No todo lo que se ve es lo esencial, lesenseñé con esa experiencia. Nunca se imagina-ron que eso pudiera pasar y, sin embargo, pasó.«¡Qué difícil es ser consecuente y no ser sino lovisible!» Después del incidente mis ex alumnos aveces me encuentran por algún pasillo de la Fa-cultad y preguntan sonriendo: «Profe, ¿y “elmarginal” cómo está?»

Con respecto a los títulos iguales que van arecibir al terminar los que supuestamente sondiferentes a los universitarios «clásicos» hayuna cuestión que desearía trasladarles, tanto alos trabajadores sociales, como a los que sesientan en La Colina. La rivalidad intelectual esmuy mezquina. Una persona no debiera de-mostrar que es superior a otra intentando dis-minuir el valor de los demás, denigrando suobra. Solo demostramos ser sobresalientescuando trabajamos. Suele ocurrir a veces quepara destacarnos suprimimos toda amabilidad.Triste destino esa especie de conspiración con-tra la inteligencia. Recuerdo las palabras deuna carta de Virgilio Piñera a Lezama Lima:

Lo que cuenta, lo único que cuenta (y creoque bastante nos fortalecíamos con tal idea,de sillón a sillón, en el reducido espacio de tucuarto) es trabajar en la obra.

[…] Qué sereno tiempo cuando este libro ytu libro; tus libros y mis libros se encuentrenen una librería cualquiera en un precioso tiem-po que formen cien años sobre tu muerte y lamía.4

Otra lección moral de estos dos intelectualeses la de dejar a un lado sus discrepancias per-sonales y colocar por encima los resultados dela creación. Cuando Lezama publicó su famo-sa novela Paradiso, Piñera lo llamó por teléfo-no para felicitarlo: «Oye, gordo, has escrito laobra más grande que se ha escrito en Cuba.Estoy contigo.»5 Al día siguiente le llevó dostabacos de regalo. Cada vez que un escritor

conocido alcanzaba un éxito importante, Piñeradaba una respuesta creadora, no criticaba, es-cribía también él.

La exacerbación de la significación del sa-bio platónico es expresión de esa actitud queen el fondo consiste en reclamar un pequeñopoder —diría mejor—, una equivocada y ton-ta creencia acerca de que los dones intelec-tuales son superiores. Llegar a acercarse a esaestatura de intelectual verdadero, es tener lacerteza de lo poco que sabemos y entenderque toda facultad crítica que logremos poseerse debe, en gran medida, al intercambio conotros intelectuales.

En esta aventura, me acerqué a alguien quetiene una amplia experiencia en incursionar enla teoría ética y a otra que domina el mundodel trabajo social, porque siempre se ha dedi-cado a la docencia de esta especialidad. Meparecieron ideales para la conformación de unequipo aspirante a trascender la pesadez deuna literatura de ladrillo. La primera tarea pordelante es hacer interesante la ética.

Me resta solo una pequeña aclaración, el re-sultado no concluyó en un manual que les per-mita guiarse en la preparación de un examen ymemorizar cuestiones técnicas en el vínculoética-trabajo social. Si alguien tenía esa expec-tativa en mente, esta no se cumplió.

Muchas veces las buenas intenciones suelencrear pésima literatura —señalaba Flaubert—tal vez pensando en las obras moralizantes,algo muy lejos de nuestras pretensiones. No sési es esto lo que exactamente pretendían missuperiores. El fruto del esfuerzo ha sido unaespecie de ola que hemos remontado paraencontrar varios caminos, señalarlos fue sudesignio; lo demás, debe ser emprendidopor quienes escojan la compleja profesiónde las iluminaciones, que es la del trabajosocial.

Una filosofía tan sutil como la ética no sepuede reducir a una fórmula de manual, poreso no logramos elaborar esa enojosa e inexis-tente petición. Saber distinguir entre lo visibley lo invisible que permanece en el oficio dealiviar necesidades, es cosa que harán aquelloscapaces de recorrer y sobre todo amar los ca-minos, eso lo dejamos de vuestra parte. Noexiste ningún libro que explique totalmenteuna realidad. En un principio pretendía lograr,no lecturas distraídas y parciales, una especiede manual diferente, después me di cuenta deque era pura vanidad, tanto como la de la perfec-ción. Las palabras contenidas aquí son apenasactos que pueden influir sobre los acontecimien-tos. Ellas esperan.

1 Introducción del libro Palabras que esperan:Ética y trabajo social, Editora Félix Varela, La Ha-bana, 2006, preparado para la carrera de Sociolo-gía en el contexto de la universalización de laenseñanza.

2 José Lezama Lima, Diarios 1939-1949/1956-1958, ediciones Unión, La Habana, 2001, p.152.

3 Carmen Berenguer Hernández y Víctor FowlerCalzada: Diccionario de citas, Casa Editora Abril,La Habana, 2000, p. 89.

4 Fernando Pessoa: 42 poemas, GrijalboMondadori, Madrid, 1998, p. 30.

5 Carlos Espinosa: Virgilio Piñera en persona,Unión, La Habana, 2003, pags.121-122, pag. 321.

…Carrazana Rosales, estudiante de 4to año de EstudiosSocioculturales en la Universidad de Granma, no está hoy enlos cabezones solo porque sea corresponsal de Alma Mater —yde los buenos—, ni porque movilice con entusiasmo divertido aunos cuantos de sus condiscípulos, ni porque sea popular confiltro y superfino. Está en el Parque por eso y por otras muchascosas más. «¿La carrera de Socioculturales? porque en reali-dad, intentando entrar en una escuela de arte —actuación—,el sueño se frustró y me fui a un Pre muy decepcionado. Unmes allí y ya era el presidente de la FEEM. Fueron tres glorio-sos años que me maduraron mucho, de modo que cuandoPeriodismo tampoco pudo ser, no se me cayó el mundo encima.Socioculturales era lo más parecido a mis sueños truncos. «Yresultó que sí, totalmente. La universidad me ha dado la dimen-sión que quería de la vida». Accedió a la radio por casualidad,como parte de la práctica de la carrera, para hacer lo quefuera, y a finales del primer año empezó a escribir para tresprogramas distintos de emisoras profesionales. «Y por ahí lle-gué al cuarto Festival Nacional de Radio Universitaria con ungran premio a la excelencia artística». Daniel fue la estrella delpasado Festival Nacional de Artistas Aficionados de la FEU

Fuente Planeta CuriosoPlaneta CuriosoPlaneta CuriosoPlaneta CuriosoPlaneta CuriosoPor Anabel Serrallonga HidalgoAnabel Serrallonga HidalgoAnabel Serrallonga HidalgoAnabel Serrallonga HidalgoAnabel Serrallonga Hidalgo

Ilustraciones Joseph RosJoseph RosJoseph RosJoseph RosJoseph Ros

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Daniel celebrado en Cienfuegos, como invitado, con una imitacióndel personaje Lindoro Incapaz, con buen sentido delhistrionismo, crítica oportuna y bocadillos inteligentes. ¿Peropor qué no te haces tu propio personaje? «Ya está pensado,pero será para el próximo festival, en que competiré. Para estede Cienfuegos no estaba preparado, así que no pasé por losfestivales de base previos; para el que viene sí». En la vertientedel humorismo empezó como muchos, para divertirse, con undúo de imitadores en la beca; luego de una parodia de unnoticiero de televisión fue tanto el éxito que empezó a trabajarel humor en serio hasta conformar un pequeño grupo que setransmuta en trío y las más de las veces en dúo. Empezaron allamarlos para actuar en un montón de lugares. El futuro: «meveo haciendo trabajo sociocultural en los medios. Apoyaría paraque se sigan haciendo radio universitaria y los festivales enHolguín. Que se conozca más a Alma Mater; mensualmentehago un programa de radio donde hablamos del número de larevista recién salido a la calle, y sobre todo aportar a la vidacultural de la Universidad de Granma. La corresponsalía deAlma Mater: «En una reunión de homólogos de cultura meseleccionaron por índice» (hace silencio significativo y caigoredondo en la trampa) «¿Académico?», pregunto. Daniel res-ponde con el rostro más inocente del mundo «No, no, meseñalaron con el dedo «Oye, tú serás el corresponsal granmenseen Alma Mater». Y después me da la estocada maestra: «Claroyo tenía experiencia de Periodismo en la radio y estaba ya tra-bajando en un proyecto que se llama La Mirada del Quijote elcual agrupa a estudiantes universitarios trovadores, teatreros,escritores y artistas de la plástica en función de la comunicaciónsocial». ¿A qué hora estudia Daniel? «Siempre, en cualquierminuto que tenga a la mano.» ¿Cómo es Daniel visto por Da-niel? «Soy muy impaciente, pero me siento orgulloso de la sen-sibilidad que asumo con las cosas que hago. Soy durocon la gente incumplidora y con los falsos.

«Y escribir es una de mis pasiones, poesía sobretodo».

Mi novio no me escuchaMi novio no me escuchaMi novio no me escuchaMi novio no me escuchaMi novio no me escuchaSegún el profesor Michael Hunter, de la Universidad de

Sheffield, Gran Bretaña, la voz femenina provoca agotamientoen el cerebro masculino. Expresa este investigador que el tonode la voz femenina posee sonidos más complejos que la mascu-lina, por eso ocupa toda el área auditiva del cerebro de loshombres; mientras que la voz del hombre solo ocupa el áreasubtalámica del cerebro de las mujeres, eso explicaría por quélos hombres, en ocasiones, no son capaces de escuchar lo que

las mujeres dicen. Seguroque la parte que no

escuchó era la de«mi vida, hoy tetoca cocinar».

¿Existen los dragones?¿Existen los dragones?¿Existen los dragones?¿Existen los dragones?¿Existen los dragones?En el año 1921 un piloto holandés dijo haber visto

un dragón en la pequeña isla de Comodo, situada enel archipiélago de Indonesia, investigaciones poste-

riores demostraron que estos supuestos dragones sonen realidad descendientes de los llamados varanos que

hace 60 millones de años vivieron en Australia; pero sedesconoce cómo llegaron a estas islas. Estos animales,

conocidos como los dragones de Comodo, de aproxima-damente 3 metros de largo, pesan 200 kilogramos y soncapaces de devorar 80 kilos de carne en minutos. En elestómago de uno de estos animales se encontró una ca-beza entera de jabalí. Curiosamente las hembras ponenhuevos del tamaño de un ganso. ¿Habría que pedirle lasartén a Gulliver para freirse un huevo?

Prohibido intentarlo en casaProhibido intentarlo en casaProhibido intentarlo en casaProhibido intentarlo en casaProhibido intentarlo en casaUn verdadero maestro fakir no solo puede

soportar los pinchazos tendido sobre una camade clavos. Puede hacer, además, que la mitad de lapalma de su mano se caliente diez grados más quela otra parte; puede detener su corazón duranteun tiempo determinado, o puede reducir susconstantes vitales al mínimo, entrando enun estado parecido al de la hibernaciónde algunos animales. Pareciera cosade películas de ciencia ficción.

Resulta tan fácil perderse dentro de uno mismo, como perderse por el bosque o en las ciudades.

Hemring Mankell

IIIIIRaspa el suelo. La Colonia se (re)escribe raspando el suelo.

I II II II II ILeemos: el sol o la línea del sol, avanza por debajo de la escritu-ra.

Sequedad, márgenes, negación.Leemos: una mancha o línea…y sobre todo solearnos.

I I II I II I II I II I IHerediatambién tengo yo la piel enfermay me oculto del soldel lirismo que acompaña el emigrante/ al Seratrapadoen una débil ráfaga de aireAunque erosionar quisieraal cuerpo del agua no puedo

A través del emigrante se despedazanimágenes del país

imágenes de la familiaque busca la libertadmás respirable

Herediael agua siempre erosionalos huesos

HerenciaHerenciaHerenciaHerenciaHerenciaNo pudo dejar que se asentaran los músculosLa verticalidad del cuerpo examina la verticalidad del

exiliadola ruina no se cree ruina cerca de Padillaque está fuera del juego por bajo rendimientopor retener con los dientes una estructurauna tangente una pobre armoníaque hasta el general Tacón podría trasmutarel que está fuera del juego puede regresar conHeredia

Rudy Mora apunta lejos. Y hondo. Sabe que la vida tiene másde un Doble juegoDoble juegoDoble juegoDoble juegoDoble juego y urge mirarle siempre La otra caraLa otra caraLa otra caraLa otra caraLa otra cara. Poreso no nos sorprende que su última teleserie haya sido víctimade los más enconados o amables «disparos» a un audiovisualdel patio desde hace algunos años.

Y tal vez por ahí comience su genialidad. No ha dejado anadie inmutable. Estos escribidores, desgastados en llamadastelefónicas para comentar cada nuevo capítulo, quisieran com-partir algunas de las motivaciones que les deja DianaDianaDianaDianaDiana. Sin serexpertos en temas culturales, pensamos que las chispas de laopinión, del acuerdo o del disenso, nunca sobran. Menos en unasunto que deriva tantas lecturas para la cotidianidad nacional.

Cubana. Ese es el primer adjetivo que nos viene a mano cuan-do pensamos en la serie. Cubana porque atrapó la esencia dela Cuba de hoy y la expuso con honestidad y belleza. Con arte.Cubana porque hizo de sus 35 entregas una encrucijada cons-tante de pasiones, angustias, esperanzas que ahora mismopueden estar ahogando o salvando a cualquiera de los televi-dentes.

El director y su equipo auscultaron la existencia al límite, «alborde de todo», como nos hemos acostumbrado a vivir los deaquí. Lo hicieron sin panfletarismos ni lugares comunes, deforma natural y valiente. Contaron y cantaron el día a día en laIsla. Oda a las virtudes de nuestra gente y crítica inteligente a lassinrazones.

En el vórtice estuvo la complejísima convivencia,con todos sus lastres y agonías. Rudy nos invitó acaminar por la cuerda floja y a obtener sitio entre losqueridos que nos rodean sin invadirnos mutuamen-

te. A encontrar espacios de alma, cuando los de mampostería ytejas escasean, pero a no descuidar estos últimos, porque nosolo de alma vive el hombre…

El recorrido audiovisual transitó desde la más estremecedoracarcajada de una madre oriental, hasta la lágrima sincera cuan-do, ante cualquier problema que tuviera un cubano de a pie,asomaba el brazo sensible de un viejo botero bonachón.

Los diálogos subieron la parada al encartonamientotelevisivo habitual, y la emoción —llevada al clímax en mu-chas ocasiones— se desinflaba magistralmente con la ocu-rrencia menos esperada. Como para decirnos que se puede sersolemne y profundo, jodedor y responsable. Flojo de lagrimaly hombre (o mujer) a todas.

Así, los personajes fueron delineados con mano maestra. Yahablarán los especialistas de las virtudes histriónicas de los Po-mares, las Lynn, las Broseliandas o los Fernandos. Para nosotrosencarnaron arquetipos admirables, redondos. Ni buenos-bue-nos, ni malos-malos: con mezquindades y grandezas, afanes pa-laciegos y gestos de tierra adentro.

Quizá una de las invitaciones más valederas de la serie es laque conduce al diálogo, a la tolerancia, al ingenio colectivopara encontrar soluciones. La convicción, en este Sur CaribeSur CaribeSur CaribeSur CaribeSur Caribe,de que «solo la vergüenza es más grande que la vida».

Oiga, cubano... cubano... cubano... cubano... cubano...

Original y coherente. Desde los diseños de presentación ydespedida hasta el movimiento perpetuo, vital, de los planos,la propuesta televisiva nos ha desnudado en nuestras humanasperspectivas. En nuestros ciclones atmosféricos y existenciales.También nos dijo, sobre todo, que lo más grande siempre es lafamilia. La estrecha y la mayor.

Oiga, cubano, Rudy Mora apunta lejos. Y esta vez, rompió laDianaDianaDianaDianaDiana.

No caigamos en lo del paraíso recobrado, que venimos deuna resistencia, que los hombres que venían apretujados enun barco que caminaba dentro de una resistencia, pudieronver un ramo de fuego que caía en el mar porque sentían lahistoria de muchos en una sola visión. Son las épocas de

salvación y su signo es una fogosa resistencia.

José Lezama Lima.

Leymen Pérez (Matanzas, 1976)Leymen Pérez (Matanzas, 1976)Leymen Pérez (Matanzas, 1976)Leymen Pérez (Matanzas, 1976)Leymen Pérez (Matanzas, 1976)

Poeta y editor. Miembro de la UNEAC y de la AHS.Su obra publicada la integran, entre otros, los títulos: Núme-

ros del escombro (2002), Pared con grabado de Pollock (2004),Hendiduras (2005), y Transiciones (2006). Ha obtenido los pre-mios: Regino Pedroso (2004), Cauce (2004 y 2006), HermanosLoynaz (2005), José Jacinto Milanés (2006) y Calendario (2006).

Obtuvo la Beca de Creación Prometeo (2006) que otorga LaGaceta de Cuba. Poemas suyos han sido incluidos en diversasantologías y revistas nacionales.

Por Jorge Luis Salas y Jesús Arencibia Lorenzo Jorge Luis Salas y Jesús Arencibia Lorenzo Jorge Luis Salas y Jesús Arencibia Lorenzo Jorge Luis Salas y Jesús Arencibia Lorenzo Jorge Luis Salas y Jesús Arencibia Lorenzo

Ilustraciones HanaHanaHanaHanaHana

La comediasilentePor Yuris Nórido

¿

Por JIOJIOJIOJIOJIO

Ahora mismo no sé cuándo murióArmando Calderón, no sé si los perió-dicos dieron la noticia, si la Televisiónle organizó algún homenaje, ahoramismo casi nadie habla de ArmandoCalderón, a pesar de que hubo untiempo en que fue un hombre muypopular; tiene que seguir siéndolo,porque la gente no olvida, lo quepasa es que vamos superponiendorecuerdos y un día, de repente, lanostalgia nos asalta.

Un amigo me ha facilitado dos otres viejísimas grabaciones de Lacomedia silente, el programa queCalderón hizo durante mucho tiempoen la televisión. Me he reído mucho ytambién he llorado un poco, porqueenseguida reviví una infancia muy felizque se va haciendo cada día más ideal,entrañable, pasto de ensoñaciones…

Armando Calderón le ponía voz,música y efecto a las viejas come-dias norteamericanas del cine silen-te, protagonizadas por Chaplin, porel Gordo y el Flaco, por una legiónmás o menos anónima de hombresy mujeres de una época de deslum-bramiento e inocencia.

Él mismo, tan simpático y desgar-bado, tan bonachón y ocurrente, pa-recía uno de esos personajes a losque cada mañana de domingo lesprestaba voz.

«Buenos días amiguitos, papaítosy abuelitos, bienvenidos a La come-dia silente…», que de silente no te-nía nada, porque él se encargaba dehacerla lo más vocinglera posible,con ese amplísimo espectro de vo-ces, que iba desde la ronquera de losvillanos hasta el falsete juguetón delos niños y las heroínas, pasando,cómo no, por el atildamiento de losjóvenes dandis, por la sensualidadtrasnochada de las vampiresas, porla candidez de un Charlot.

Y tocaba la armónica para recrearuna orquesta bailable, y hacía el efec-to de los golpes y porrazos, y narra-ba los acontecimientos con gracia ydesprejuicio…

Lo mejor de La comedia silente eraque Calderón no se atenía estricta-mente al argumento de las pelícu-las, él inventaba nuevas peripeciasy motivaciones, hasta el punto deque a veces entraba en contradic-ción con lo que se veía en pantalla,algo que resultaba sencillamentedesternillante.

Ya sé que el cine mudo tiene su ma-gia, pero esas dramatizaciones incor-poradas por Armando Calderón, lejosde banalizarlo lo dotaban de un nuevoencanto. He visto alguna que otra co-media silente en la Cinemateca y mequedo con las ganas de escuchar lospintorescos monólogos de Calderón:

«Hasta la próxima, queridos ami-guitos, papaítos y abuelitos».

Un sabotaje provocó que el Teatro AuditóriumAmadeo Roldán, cerrara sus puertas a la culturacubana por veinte años.

En 1999 fue reinaugurado por el Comandanteen Jefe Fidel Castro, y recuperó entonces su auge yesplendor como centro artístico nacional.

Fue fundado el dos de diciembre de 1928 con elfin de desarrollar diversas manifestaciones. En suinterior no solo se cultivó la música, sino que hizonacer al reconocido Ballet de Alicia Alonso y exhi-bió renombradas óperas.

Actualmente es la sede de la Orquesta SinfónicaNacional y abriga significativos certámenes cuba-nos y extranjeros.

PPPPPararararara subir al aula se necesita...a subir al aula se necesita...a subir al aula se necesita...a subir al aula se necesita...a subir al aula se necesita...

Rodolfo llegó a las 8:03 AM y la profesorade Pensamiento Económico Contemporáneono lo dejó entrar al aula. Ella es muuuuy recta,con ella hay que entrar por el aro, o bueno, porla puerta a las ocho en punto. Rodolfo lo sabey por eso es puntual, solo que hoy el P-1 lodejó en la entrada de la facultad (de Economía,por supuesto), a las 7:58 AM. Aunque corrióescaleras arriba con el corazón en la mano,cuando llegó ja-de-an-do al noveno piso, sedio cuenta de que ni Juantorena hubiera podi-do entrar temprano ese día.

¡Ah, pero qué distinto sería si tú supierasnadar!, pensó Rodolfo acordándose de Mato-jo. O mejor: ¡qué distinto sería si hubiera unelevador! Pero... ¡sí hay un elevador! ¿ Enton-ces…? El problema es el cartel, ese que Rodolfoy sus compañeros han querido quitar más deuna vez: EL ELEVADOR ES SOLO PARA LOSPROFESORES.

A veces algún pícaro o alguna muchachasonriente logran burlarlo, se hacen los suecos,y suben en un dos por tres. Sin embargo, cuan-do el dichoso letrero falla, está el ascensorista.A veces también él, que tal vez no fue quienpuso el cartel, se hace el sueco y deja que su-ban algunos «colados». Pero el deber llama, yen la mayoría de las ocasiones tiene que aso-marse a la puerta del elevador y decir: «Losprofesores, por favor…» Entonces suben to-dos (los profes, claro), o tal vez dos o tres, osolo uno.

Los muchachos se miran, niegan con la ca-beza como si estuvieran locos, suspiran, refun-fuñan, y al final enrumban sus pasos hacia laescalera. Ahí empieza, otra vez, el debate decada día acerca de las soluciones:

«¡Caballeros, es que somos muchos!», diceuno. «Sí, pero ahora mismo subió casi vacío»,argumenta otro. Una rubia ocurrente sugiere:«A lo mejor si pagamos 20 centavos como en

los baños de algunos lugares…» Y luegootro que estaba muy callado, concluyó: «Esoseguro que fue idea de la gente de la FEU dela facultad, sí, sí; ellos están loquitos porrecuperar la copa de los Caribe, ahora quie-ren que la gente entrene a la fuerza, y yadespués es más fácil que participen y queganen». La rubia puso su mejor cara de asom-bro y exclamó: «¡Vaya, apretaste, SherlockHolmes!» Las carcajadas resonaron en la es-calera como un trueno feliz.

El cartel siguió invicto en el mismo lugar. Elascensorista, cuando quiere, hace lo que pue-de. Rodolfo y su pandilla siguen haciendo ejer-cicios: escaleras pa´arriba, escaleraspa´abajo…Porque aunque el secretariado dela FEU sea inocente, todos coincidieron en quees un buen método para recuperar la ansiadaCopa de los Juegos Caribe. Lo único que que-da es apurar al chofer del P-1, porque la profe-sora de «Pensamiento» sí que no entiende deescaleritas.

Por Eileen Sosin MartínezEileen Sosin MartínezEileen Sosin MartínezEileen Sosin MartínezEileen Sosin Martínez

Jóvenes rapsodasJóvenes rapsodasJóvenes rapsodasJóvenes rapsodasJóvenes rapsodasConcluía la primera sesión del II Encuentro Juvenil Internacio-

nal de Solidaridad con los Cinco, y los partícipes, entrando en elcomedor de la Escuela de Trabajadores Sociales de Cojímar, re-cordábamos las palabras de Kenia Serrano, presidenta del ICAP:«Ojalá que este espacio nos permita seguirnos contestandouna pregunta que nos hacemos todos: qué más podemos hacerpor nuestros compañeros».

Marianela Samper, de Radio Habana Cuba, 1 Luis Espinosa,subdirector nacional de los Videoclubes juveniles, y Alma MaterAlma MaterAlma MaterAlma MaterAlma Mater,ocupamos una mesa. Las camareras no habían empezado aservirnos, cuando se nos sumó un joven africano. Kenia se ha-bía referido a los becarios extranjeros: «Ubicados en centrosuniversitarios, funcionan en la Isla 70 Comités de Solidaridadcon los Cinco; el ICAP tiene representaciones en 12 provincias,y en la Isla de la Juventud; las dos Habanas son atendidas desdela sede nacional; los jóvenes se apoyan en esas delegacionespara hacer su trabajo».

Adérito Amone Gove, natural de Xai-Xai, capital de la provin-cia de Gaza, al sur de Mozambique, era uno de ellos. Nacido enjunio de 1983, y estudiante, desde el 2005, de la carrera deSociología en la Facultad de Filosofía e Historia de la Universi-dad de La Habana (UH), también había intervenido en la sesiónmatutina del Encuentro.

Casi 32 mil extranjeros cursamos aquí gratuitamente nuestrascarreras —dijo el mozambicano—. Disfrutamos de alimentación,alojamiento, asistencia médica y acceso a las bibliotecas sincosto alguno…Cuba se convierte en patrimonio de los pueblos,escuela de formación de valores y laboratorio social…Los be-carios seguiríamos varias rutas para ayudar a la liberación delos Cinco: crear nexos con los Comités de Solidaridad en nues-tros países; sensibilizar a parlamentarios, políticos, y otras fi-guras nacionales; asegurar que quienes viajen de vacacioneslleven pequeños paquetes informativos; e implicar en inter-cambios a los norteamericanos que estudian en Cuba: ellospodrían convertirse en divulgadores del caso en las universi-dades de EE.UU.

En consecuenciaEn consecuenciaEn consecuenciaEn consecuenciaEn consecuenciaA propósito había sido claro Andrés Gómez, coordinador de la

Brigada Antonio Maceo, una de las organizaciones más antiguasde la emigración cubana en la patria de Lincoln que coincidenideológicamente con la Revolución. Para Gómez, luchar por losCinco es defender la existencia de nuestra nación y la viabilidadde su proyecto. Así saludó a la embajada juvenil estadounidense,compuesta, entre otros, por J. Perasso, T. Baumann y P. Pederson,de la Juventud Socialista, y A. Tenney, de la Liga Comunista.

De inicio quisimos conversar con los norteamericanos o con elmozambicano, por ende, nos alegró que Adérito viniera hacianosotros. Almuerzo y diálogo fueron lo mismo. Cerramos la en-trevista cuatro meses después, en la residencia estudiantil Bahía,de la UH, sita en el reparto Antonio Guiteras, en el municipiocapitalino de Habana del Este, justo cuando los Cinco cumplían11 años de arresto. El joven no había perdido detalle de lo ocurri-do con ellos desde aquel, nuestro encuentro en Cojímar.

Me he mantenido al tanto por la prensa —explicó Adérito—. Elperiódico Girón, de la provincia de Matanzas, publicó a media-dos de agosto el artículo «Otra batalla por los Cinco se librará el13 de octubre en Miami». Caí en la cuenta de que este messería crucial. El redactor (R. González Villalonga) fue pródigoen detalles. Recordó que la más evidente violación de las nor-mas jurídicas ocurrió el 15 de junio, cuando la Corte Supremade EE.UU. desatendió la solicitud de conocer el caso. El hechose produjo a pesar de la presentación de una docena deamicus de la Corte, extendidos por celebridades e institucio-nes parlamentarias y jurídicas, incluidos 10 Premios Nobel.Ahora quedaba claro cuán importante sería enfrentar lasnuevas sentencias que deberán imponerles en Miami a Fer-nando, Tony y Ramón. La Corte de Apelaciones del Distrito deAtlanta había anulado las del juicio inicial, e instruyó a lajueza Joan Lenard a proceder en consecuencia. La defensa haanticipado el mejoramiento de las condenas originales, sobretodo la eliminación de las cadenas perpetuas.

Custodia legítimaCustodia legítimaCustodia legítimaCustodia legítimaCustodia legítimaEn 1985, cuando Adérito tenía dos añitos, su papá emigró a

Sudáfrica. Su mamá, ama de casa, mujer de pocos recursos,intuyó que su esposo nunca regresaría y comenzó a buscaralternativas de subsistencia para ella y las cinco bocas que debíamantener. «Deja los niños con la familia de su padre y vuélvete», lepropusieron los abuelos de Adérito. «¡De ninguna manera», res-pondió Teresa, «ellos son mis hijos y estarán donde yo esté!» De

su esfuerzo personal todavía vive su familia. Queriday respetada por todos, es la que más dolor ha senti-do, la que más trabajos ha pasado. Por eso el jovenrepite que «madre hay una sola». Su madre es tam-bién una heroína.

Profundicé en los pormenores del «lado jurídico de la bata-lla» —dijo el africano—, por intermedio de otro trabajo que,con ese título, publicó la página 8 de noticias Internacionalesde Granma. Fue una periodista (D. Francis Mexidor) la quecontó sobre el encuentro que sostuvieron, ella y sus colegas,con los integrantes del equipo de la defensa. Aquí anoté susnombres: Joaquín Méndez, defensor de Fernando; LeonardWeinglass, abogado de Tony; Phillip Robert Horowitz, aboga-do de René; William Norris, abogado de Ramón; Tom Goldstein,lider del equipo de la defensa ante la Suprema; Richard Klugh,especialista en Apelación; y Rafael Anglada, integrante delequipo. El «no» de la Corte fue sin explicaciones; el tribunaldesoyó el clamor mundial y, fiel a los intereses políticos, siguióla guía del gobierno. Para la resentencia, la jueza consideraríalos años que han pasado en prisión, el sufrimiento que se lesha infligido a ellos y a sus familias, y el reconocimiento de lacomunidad internacional.

Hoy Adérito es miembro de la Organización de la JuventudMozambicana (OJM), y, además, secretario, en Cuba, del Frentede Liberación de Mozambique (FRELIMO), nacido de la alianzaresistente a la colonización portuguesa.

En excesoEn excesoEn excesoEn excesoEn excesoParticipó en intercambios entre la juventud y el Gobierno y el

Partido de su país. Asistió al Primer Encuentro de la JuventudMozambicana, celebrado en 2002 en Chokwé. Junto con elresto de los delegados viajó a Xilembene y visitó la casa natalde Samora Machel (1933-1986), primer presidente deMozambique (1975-1986).

Otro artículo esclarecedor —continuó— fue «En Miami es-tán encarcelados Ramón, Antonio y Fernando», publicado enCubadebate por el propio Andrés Gómez. Refiere que los Cincofueron arrestados el 12 de septiembre de 1998 por agentes delFBI; que el proceso ha venido demostrando la despreciableasociación del gobierno federal con los terroristas de la extre-ma derecha cubano americana, y que, once años después,tres de ellos vuelven a encontrarse en celdas de aislamiento enel Centro de Detención Federal de Miami. En estos, tristementecélebres, huecos, ya estuvieron los Cinco por más de tres años:hasta que a principios del 2002, después de su juicio, fueronenviados a distintas cárceles norteamericanas.

En marzo de 2004 Adérito leyó el anuncio que convocaba alos jóvenes de su país para ocupar 10 plazas de estudios enCuba. En su caso, podía concurrir a Derecho o Sociología. Sedirigió, por carta, al entonces Ministerio de Educación Superior,Ciencia y Tecnología de Mozambique. Pasó el examen. Le otor-garon una de las becas para la Licenciatura en Sociología. Hizolos trámites. Partió hacia el Caribe un 20 de septiembre. Siguióel itinerario Maputo-Johannesburgo-París-La Habana, adondeaterrizó al día siguiente, a las 5 de la tarde.

Gómez escribe —siguió Adérito— que tres de los Cinco estánahora en Miami porque en septiembre de 2008 el Pleno delTribunal de Apelaciones del Onceno Circuito unánimementeconcluyó que la Fiscalía no había presentado ninguna prueba

de que Gerardo, Ramón y Antonio hubieran obtenido o trans-mitido información secreta a nadie, o de que hubieran obradoen contra de la seguridad nacional de EE.UU. Así el Tribunalanuló sus condenas de cadena perpetua por el cargo de cons-piración para cometer espionaje, y ordenó al Tribunal del Dis-trito Federal en Miami que los resentenciara, que les redujeralas condenas. El Tribunal de Apelaciones también consideróexcesiva la condena de 19 años que se le impuso a Fernandopor los cargos de no haberse inscrito como agente de un go-bierno extranjero, y de falsa identificación. Admitió que elprocedimiento podría aplicársele a Gerardo por el cargo deconspiración para cometer espionaje, pero concluyó que notenía sentido reducirle la condena de cadena perpetua por eltal cargo —que es falso—, porque cumple otra por el de cons-piración para cometer asesinato: ¡qué cinismo! En un futuro ladefensa intentará reabrir el caso de Gerardo a través de laapelación indirecta.

SABAM

ES MUSA

Conjunción explicableConjunción explicableConjunción explicableConjunción explicableConjunción explicableLas primeras fuentes de información de Adérito sobre Cuba

habían sido un tío y un profesor que hicieron en la Isla, en eseorden, un técnico medio y una Licenciatura. Se acercó a ellospara saber cómo se vivía aquí. «Vas a aprender y crecer, te for-marás y te harás un hombre», le aseguraron. Así conoció a otrocompatriota, graduado en el 2003, que le contó maravillas,pero lamentó la crisis derivada del período especial. No obstan-te, ya Adérito se había decidido: «Cuba es un país del TercerMundo donde miles de jóvenes se han formado: ¿qué cosapodría impedir que regrese de allí con un título?»

Hablar del caso de los Cinco y no reconocer la labor deRicardo Alarcón, sería imperdonable —volvió a la carga—.A 11 años del arresto de los héroes, el presidente del Parla-mento publicó una serie de trabajos, primero en inglés, en elperiódico digital norteamericano CounterPunch, luego enCubadebate, y finalmente en la página 3 de Internacionalesde Granma. Por aquí la he seguido, día tras día, la semanapasada (del 7 al 12 de septiembre); tiene un epígrafe, «LaHistoria no contada de los Cinco», y hasta hoy vieron la luztodas estas partes (las muestras): I, «Héroes prohibidos»; II,«Justicia en el país de las maravillas»; III, «El rostro de laimpunidad»; IV, «En sus propias palabras»; V, «“Espías”, sinespiar»; y VI, «Acusación À La Carte».

Adérito opina que no se puede prescindir de la cultura yparticipación políticas, déficit de los jóvenes africanos en com-paración con los latinoamericanos, y conviene en que es pre-ciso intervenir en los espacios de intercambio, pues es allídonde se aprende. Ha integrado el grupo de trabajo que, co-ordinado por un miembro del Secretariado de la FEU Nacional,atiende las Relaciones Internacionales. Da fe de que Cuba seocupa de la inserción de los extranjeros en las organizacionesestudiantiles.

A sueldoA sueldoA sueldoA sueldoA sueldoAlarcón también participó en la Mesa Redonda Internacional

de Telesur «Los Cinco de Cuba y la Guerra al Terrorismo» —aña-dió el alumno de la UH—. Conducida por Arleen Rodríguez, la

Por Hilario Rosete Silva Hilario Rosete Silva Hilario Rosete Silva Hilario Rosete Silva Hilario Rosete SilvaFoto Elio Mirand Elio Mirand Elio Mirand Elio Mirand Elio Mirand

El hijo de TeresaCon Adérito Amone Gove, estudiante mozambicano

A 11 años del arrA 11 años del arrA 11 años del arrA 11 años del arrA 11 años del arresto de los Cinco,esto de los Cinco,esto de los Cinco,esto de los Cinco,esto de los Cinco,y en ocasión de las nuevasy en ocasión de las nuevasy en ocasión de las nuevasy en ocasión de las nuevasy en ocasión de las nuevas

inminentes sentenciasinminentes sentenciasinminentes sentenciasinminentes sentenciasinminentes sentenciasque deberán imponerlesque deberán imponerlesque deberán imponerlesque deberán imponerlesque deberán imponerles

a Fa Fa Fa Fa Fernando, Ternando, Ternando, Ternando, Ternando, Tony y Ramón.ony y Ramón.ony y Ramón.ony y Ramón.ony y Ramón.

ABERMARUCHOABER

Mesa se transmitió el 11 de septiembre en su horario habitual;la sintonicé por Cubavisión. Se supo que periodistas estadouni-denses estuvieron vinculados con la decisión que tomara eljurado para condenar a los Cinco por el cargo de espionaje.Estos «trabajadores» de los medios de comunicación america-nos, ejercieron presiones sobre los «decisores». Claro, recibíandinero del Gobierno para que, más que escribir objetivamente,crearan un ambiente hostil entre los pobladores de Miami.Alarcón comentó que, a pesar de que ese gobierno habla de laseparación de los poderes públicos, todos «cobran del mismosaco». A los redactores les convenía hacer cundir miedos y te-mores para recibir su paga de un establishment que en verdaddebía velar por la imparcialidad. La Asociación para la JusticiaCivil (Partnership for Civil Justice Fund) presentó una demandarelacionada con esto. El grupo actúa en nombre del ComitéNacional para la Libertad de los Cinco y oficializó la solicitudante la Corte del Distrito de Columbia. La demanda es contra la

Junta de Gobernadores de las Trans-misiones (BBG, siglas en inglés), porcuanto, ilegalmente, rehusó difun-dir contratos específicos pagadospor el gobierno de EE.UU. a esos«periodistas».

Es temprano para levantar expectati-vas sobre el futuro de Adérito. Conoce ala que deberá ser una de sus colegas, unamozambicana que también se graduó en laUH, trabajadora del actual Ministerio de Cien-cia y Tecnología de su país. Sabe de otro caso,un joven de Nampula que estudió la carrera enSantiago de Cuba. Quizás él, Adérito, sea el tercersociólogo mozambicano formado aquí. Haconcienciado que el perfil de su especialidad es am-plio. Con todo, subraya que en la Isla los sociólogos seforman como verdaderos investigadores sociales, y aseguraque no le faltará empleo: «Mozambique necesita hombres ca-pacitados en todas las esferas: tenemos pocos especialistas.»

Alta fidelidadAlta fidelidadAlta fidelidadAlta fidelidadAlta fidelidadAl propio Alarcón le tocó en suerte hacer las conclusiones

de la vigilia que, en el Monte de las Banderas, ante la Oficinade Intereses de EE.UU. en La Habana, se realizó en solidaridadcon los Cinco al cumplirse los 11 años de su arresto —concluyóel hijo de Teresa—. Desde ese lugar, el parlamentario cubanorepitió, con respeto del actual señor presidente de EE.UU., cosaque jamás se le ocurrió hacer cuando el inquilino de la CasaBlanca era un bandido (George W. Bush), que él, Barak Obama,hombre decente, que no tiene que ver con la infamia, pero queposee la autoridad, la capacidad para hacer justicia, podía,debía y tenía que poner en libertad a estos Cinco Héroes deCuba, Latinoamérica, EE.UU., de toda la humanidad. Solo asíserá creíble el mensaje de paz y reconciliación reiterado porObama. Alarcón convocó al pueblo a seguir en esta pelearecordando a Juan Almeida. Dijo que «aquí no se rinde nadie»por difícil que sea la batalla, y que la vigilia continuará «hastala victoria siempre».

En la despedida Adérito volvió a recordar el día en que nosconocimos:

Si hubiera estado solo en aquel comedor de la Escuela deTrabajadores Sociales de Cojímar, habría almorzado rápido,pero me habría perdido su compañía. Donde hay dos o tresreunidos, ese es un espacio de socialización. ¡De cuántas co-sas hablamos allí! Saber amar y compartir es mucho saber:¡eso es, por cierto, lo que nos enseñan los Cinco!

1 Dos meses después, Marianela Samper, periodista de RadioHabana Cuba, recibió el premio de entrevista, en la categoría deprensa radial, del Concurso Nacional de Periodismo 26 de Julio de laUPEC. Su trabajo, «Motín en Colorado», muestra la crueldad y los

peligros que enfrentan nuestros Cin-co Héroes en las prisiones donde seencuentran.

PPPPPAZAZAZAZAZ sin fronteras

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Mir

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Paz sin Fronteras, en su segunda edición,llenó la Plaza de la Revolución de la capital

cubana el domingo 20 de septiembre.Artistas de seis países y más de un millón

de personas cantaron durante más de 5intensas horas por la Paz.

Por La MagaLa MagaLa MagaLa MagaLa Maga

Alma MaterAlma MaterAlma MaterAlma MaterAlma Mater trae el alma llena de paz.Aún nos dura el blanco musical sin fron-

teras, del cual pudimos disfrutar (en vivo, opor televisión) en el pasado mes de sep-tiembre. Banderas de la FEU bailaron juntoa Juanes, los Van Van, Orishas… ¡Y cuán-tos universitarios no se dieron la manoen tan calurosa tarde de domingo! De se-guro, los mismos que celebran la jornadaCamilo-Che.

«La paciencia es un árbol de raíces amar-gas, pero sus frutos los da dulce», nos escribióDiosvany González, de la provincia de Pinardel Río, quien agradece la versión digital denuestra publicación. A él le gustaría intercam-biar, a través del club de amigos, con cualquierpersona dispuesta a sostener una conversacióninteligente sobre diversos temas. A este jovense le puede contactar en la dirección electróni-ca: [email protected]

Como ejemplo de la constante comunica-ción entre la revista y los dirigentes estu-diantiles, nos llegó un correo de Luis SanderLamber Pérez, natural de Imías,Guantánamo, y presidente de la FEU en lasede Pedagógica de su municipio. Nos cuen-ta cuán seguida por los estudiantes resultacada edición de Alma MaterAlma MaterAlma MaterAlma MaterAlma Mater.

Las fronteras no existen para las palabras,por eso, el flujo comunicativo con universi-tarios y profesionales de otras regiones, seha hecho habitual entre la correspondenciade la publicación. Desde Chile, el ingenieroagrónomo Hernán Muñoz, quien cursa unamaestría en Tecnología en Semillas, está inte-resado en mantener contacto con estudian-tes y profesores, alrededor del tema. Se lepuede escribir a: [email protected]

Una oportunidad para que los alumnosde este perfil conozcan las experiencias deotras regiones, y comenten las nacionales.

¡Y vaya experiencia la vivida en nuestrasúltimas presentaciones! Estuvimos por laFacultad de Biología de la Universidad deLa Habana y por el Instituto Internacionalde Periodismo José Martí. ¿Luego? Puesquizás toquemos la puerta de tu sede uni-versitaria, tu aula, la biblioteca…, así queve preparando una lista con los temas detu interés para tratarlos en próximos nú-meros, o escríbenos a nuestro email:[email protected]

DESDE MI RADESDE MI RADESDE MI RADESDE MI RADESDE MI RAYUELYUELYUELYUELYUELAAAAA

Soneto

Bueno es amar. Pues ¿cómo daña tanto?Gran gusto es querer bien. ¿Por qué entristece? Placer es desear. ¿Cómo aborrece?Amor es nuestro bien. ¿Cómo da llanto?

Da esfuerzo amor. Pues ¿cómo causaespanto?Por el amor el bien del alma crece,Pues ¿cómo así por él ella padece?¿Cómo tantos contrarios cubre un manto?

¿No es el amar el que dolor nos trae?La compaña que a su pesar él tieneTambién a su pesar nos hiere y mata.

El mal en él de nuestra parte cae;El solo en nuestro bando nos sostieneY nuestra paz continuamente trata.

Juan Boscán

Imagina por un instante que entras en uncarro expuesto por horas al sol. Seguramentesentirás un calor agobiante. Esto ocurre por-que el cristal de la ventana deja entrar los rayossolares al carro, pero evita que salga de nuevoel calor.

La situación anterior es un ejemplo sencillopara demostrarles la acción que realiza el efec-to invernadero en la Tierra, un fenómeno quese ha producido siempre en nuestro planeta yque, contrariamente a lo que se suele creer,nos es favorable, de no existir seríamos unplaneta frío como Marte ( clima inferior a 0°).Tanto así que gracias a él nuestro medio al-canzó el calor necesario para el surgimientode la vida.

Ahora bien, bueno es lo bueno, pero... enlos últimos años, en efecto, se ha incrementado,y la saturación de los gases de la atmósferaretiene la energía solar más de lo permisible,debido a la emisión excesiva de gases tóxicos ala atmósfera, como el dióxido de carbono y elmetano, entre los más dañinos, y la pobre re-población de árboles en el mundo, quienesproducen el oxígeno y nos favorecen.

Por el momento la forma inmediata en laque nos afecta es en el ascenso de las tempera-

¡Dale unchance

a la vida!Por Anabel Jiménez CervantesAnabel Jiménez CervantesAnabel Jiménez CervantesAnabel Jiménez CervantesAnabel Jiménez Cervantes

turas, de tres a cuatro grados en el último si-glo. Tal hecho provoca a su vez una cadena deperjuicios como la pérdida de la biodiversidad,la desertificación y la sequía, el aumento delnivel de los mares por el deshielo de losglaciares, por solo citar los más conocidos.

¿Responsables? Nosotros mismos que he-mos abusado tanto de nuestro medioambiente que ahora estamos pagan-do las consecuencias, a tal medida,que el desarrollo de la sociedad seha convertido en un envejeci-miento terrestre, un viraje de latan larga vida añorada paranuestro mundo.

¿Qué hacer? Fácil para quie-nes se lo proponen: promo-ver el amor a la naturaleza através de la labor cotidianay sobre todo en las jóve-nes generaciones, reciclarla basura siempre que sepueda, ahorrar energíaeléctrica, plantar muchosárboles, no arrojar dese-chos al mar y muchasotras que no por simplesdejan de ser importantes.

Si yo sé que amenaza elfuturo de nuestro planetay tú también, y si ambos co-nocemos las medidas quedebemos tomar para salvar-lo, entonces no dejemosmorir la Tierra. ¡Actuemosahora o lo lamentaremospor siempre!

Si la cuentaSi la cuentaSi la cuentaSi la cuentaSi la cuenta no da… no da… no da… no da… no da…

¿cambias ¿cambias ¿cambias ¿cambias ¿cambiasde calculadora?de calculadora?de calculadora?de calculadora?de calculadora?

Historia 1:Historia 1:Historia 1:Historia 1:Historia 1: Daniel dejó de frecuentar a susamistades. Casi siempre estaba ocupado y notenía tiempo para nada más. A sus amigos máscercanos les llamó mucho la atención el hechode que a cualquier actividad organizada martes,jueves y sábados por la tarde, Daniel faltara sinninguna explicación convincente. Entonces todoempezó a cambiar; por un lado adelgazó consi-derablemente, sus notas ahora no superabanlos 4 puntos y a veces se quedaba dormido enlos turnos de Cálculo. Por otro lado, dejó defumar cigarros Criollos y empezó a fumarHollywood verde. Ya no se le veía pidiendodinero prestado cuando iba a almorzar y en lasfiestas que organizaban en su aula,ahora era él quien impresionaba conlo último de la moda miki. Si biensus amigos lamentaban sus ausen-cias sistemáticas, por otra parte loveían más contento y ya la falta dedinero no era un tema tan cotidia-no en sus conversaciones diarias.Meses atrás, Daniel había decididosacrificar su tiempo libre para sermensajero de un banco de películasy tres veces a la semana recorría dearriba abajo las casas de sus clientesen San Miguel del Padrón.

Historia 2:Historia 2:Historia 2:Historia 2:Historia 2: Pedí una pizza de que-so y solo cuando la muchacha trajomi pedido reconocí su rostro. Leimahabía estudiado en mi escuela pri-maria, era dos años mayor que yo ycreo que coincidimos en su últimoaño de la Lenin. Ella había cogidoEstomatología y hacía cuatro años que yo nosabía de su paradero. La “paladar” cerrabacomo a las diez y eran ya las nueve y media, laesperé y de camino a su casa tuvimos un tiem-po para conversar. Hablamos de amigos, recuer-dos y metas de las que alguna vez habíamoscompartido. Pregunté por su mamá y supe quese había retirado por peritaje médico. Me dioun poco de pena preguntar por el cambio tanrepentino porque la noté apenada; ella tan in-teligente y bonita, ahora estaba sirviendo enuna cafetería particular. Por eso me sorprendícuando dos cuadras antes de su casa me dijo:

«Cuando tengas un tiempo pasa por la clínicapara hacerte una limpieza».—Pero… ¿tú no dejaste la carrera? —«No, no,-me respondió sonriendo— esto lo hago porlas noches cinco veces a la semana, tú sabes,no hay dinero, somos yo y mi mamá y de algohay que vivir».

Historia 3Historia 3Historia 3Historia 3Historia 3: A Pedro no le falta el dinero. Élsiempre va en carro a la facultad y aun cuandosubieron el precio de la gasolina, se las arreglacomo puede. Sus padres están de misión enBolivia y él ahora vive solo. Sus gastos son

desproporcionados con respecto a sus ingre-sos. Él estudia Economía y tiene una fórmulaque hace relucir su billetera. Desde primer año,Pedro vende ropa. Sus proveedores son «ami-gos», negociantes del barrio o conocidos de lafamilia que viajan y traen bastantes prendasde vestir. ¿Sus clientes? La mayoría estudiantesde su facultad. Me compran porque es ropa decalidad. Los precios son un poco caros pero notanto como en las tiendas. «Con cada camisa

por ejemplo, yome busco lo mis-mo tres queocho dólares yasí voy saliendodel bache», dicey después agre-ga: «Cuando nohay nada, boteo

de camino para la escuela. Hay quebuscar el dinero, eso sí, sin hacernada ilegal, que para algo estudioen la universidad».

Nuestra historia:Nuestra historia:Nuestra historia:Nuestra historia:Nuestra historia: Daniel, Leimay Pedro son buenos estudiantes eincluso participan en todas las acti-vidades que convoca la FEU. Han en-contrado una solución temporal auno de sus problemas. La subida delestipendio fue un aliviadero, perono representa una solución. Ahora,con los nuevos reglamentos legales,los universitarios tenemos la posibi-lidad de ser contratados a tiempoparcial en determinados centros de

trabajo. Como todo lo nuevo, son muchas lasinterrogantes. ¿Solucionará esta medida el pro-blema monetario de los universitarios? ¿Habráque trabajar obligatoriamente para poder re-crearnos en nuestro tiempo libre? ¿Daniel,Leima y Pedro pensarán en contratarse o se-guirán «luchando» lo suyo? Mientras un jovenreciba diez dólares por limpiar platos en un barnocturno una vez a la semana, ¿habrá contra-tas que le hagan competencia? Trabajo, y lue-go existo. Ahora una última pregunta: ¿cómohacer que la cuenta nos dé?

Por Rodolfo Romero Reyes, Rodolfo Romero Reyes, Rodolfo Romero Reyes, Rodolfo Romero Reyes, Rodolfo Romero Reyes,estudiante de Periodismoestudiante de Periodismoestudiante de Periodismoestudiante de Periodismoestudiante de Periodismo

l.q.q.d.

Cuando Facebook llegó a los 59 millones de miembros activos, unperiodista británico1 se preguntaba: « ¿Por qué necesitaría yo un or-denador para conectar con la gente que me rodea en esta Tierra deDios? ¿Qué hay de malo en el bar?». Para la fecha —principios de2009— la nave proa de la llamada Red Social andaba incorporandodos millones de internautas semanales, convocados por seis sencillaspalabras mágicas: ¡Regístrate! ¡Es gratis y cualquiera puede unirse!

Imposible resistirse.

Carmen Inés se muestra en Facebook, en algún litoral de estemundo, curvilínea y espléndida en su desnudez. Solo tecleo laspalabras mágicas y ya soy amigo de Carmen y de paso de sunano-hilo-dental.

Digan lo que digan Facebook es una maravilla.En principio, es ni más ni menos como cualquier cita social —la

playa, una fiesta, una cofradía de roqueros o filatélicos. Ademássirve para «establecer relaciones, enviar mensajes, realizar bús-quedas y consultas, planificar eventos, añadir aplicaciones y trans-mitir información a través de varios canales», con la variante deser divertido como solo lo puede su esencia multimedial. Ycongrega a medio mundo se esté donde se esté. Por ese carác-ter globalizador es inexorable su avance y sólida su conquista.

Para «conectar» no hay nada malo ni en el bar —si eres unbebedor social y no un alcohólico—, ni tampoco en Facebook,si quieres socializar; pero hacer amigos es un acto de amor querequiere más de cuatro cosas, que ni la taberna ni el universovirtual ni el tamagochi han podido sustituir.

Como la energía nuclear, un hacha o un supositorio, Facebookes un invento relevante; mal usado —usado con maldad, seentiende— puede ser, a escala, tan devastador como la energíanuclear, el hacha o el inocente supositorio.

¿Te ayuda a comunicarte y compartir tu vida con las personasque conoces? Sí. Significa compartir tu vida… en Internet, esdecir —para decirlo en chino diáfano—, poner quien eres en undazibao virtual, con datos varios—gustos, preferencias, ten-dencias, motivaciones— e imágenes incluidas.

Desde el inicio te invitan a crear una página para alguienfamoso, grupo de música o empresa; entonces la ola de fans —plagados de adolescentes mentales— del grupo DesnudosTotomoyos, hará gratis lo que ya la industria cultural haríaprofesionalmente —millones mediantes—, engordando en es-piral una campaña mediática. Pero esta es la parte inocente deFacebook. Igual funciona para una empresa que ni siquieraentretiene y te pide que hagas un trabajo voluntario a favor delas ganancias del dueño. Y ya eso no me parece tan cándido.

Un viejo graffiti del barrio habanero de Cayo Hueso, ad-vierte desde una pared a todo el que pasa cerca del parqueTrillo «Si no sabes, no te metas». En principio, tampoco esque Facebook sea tan inocente. Y no todos leen conatención las advertencias que la misma Web indica.

Errante me encontré por selva oscura Errante me encontré por selva oscura Errante me encontré por selva oscura Errante me encontré por selva oscura Errante me encontré por selva oscuraCuando te registras te piden nombre y apellidos,

correo-e y la edad, y como muestra de indulgencia sepreguntan —y responden a la vez por ti— «por qué ypara qué hacen falta estos datos»:…«requiere quetodos los usuarios proporcionen su fecha de nacimien-to verdadera para fomentar la autenticidad y permitirel acceso solamente a contenido apropiado a la edaddel usuario. Si quieres, puedes ocultarlos pues su uso serige por la política de privacidad de Facebook en tu perfil(…). Los menores de 13 años de edad no deben propor-cionar ningún dato personal a Facebook…». De perlascomo esta las hay a montones.

Es decir, «No, pero sí». Depende de cómo lo inter-pretes. En caso de reclamación, esta estrategia dePilatos permite lavarse las manos en la palangana dela ambigüedad más resbalosa que pueda haber en elmundo.

Soy el que soySoy el que soySoy el que soySoy el que soySoy el que soy, existo luego, existo luego, existo luego, existo luego, existo luegoEn Facebook, quien quiera puede reconstruirse de

una identidad con “fotico” incluida —fotoshop hace

maravillas—, y ser el que no eres o el que quisieras ser, o el queeste mundo estandarizado y cada vez más pequeño quiere queseas. Y además te permite ser muy popular en la red y promoveracciones, de izquierda a derecha, porque es rápida en la convocato-ria —aunque la derecha sea fascista y la otra, «izquierdosa eingenuota»—, lo que ha promovido una carrera para ver quiéntiene más amigos con quien socializar.

Tener muchos amigos no solo te hace famoso en Facebook.Te convierte en «influyente» incluso, y puede abrirte muchaspuertas de las almas virtuales. Lo que digas puede parecer filo-sofía, incomprensible pero atractiva, y de ahí a verdad absolutano hay más que un click.

Una empresa australiana llamada Unsocial, descubrió unamina de oro empresarial al comenzar a vender —no de modosimbólico ¡qué va!— paquetes de amigos, desde 1 000 por 124euros y hasta los 5 000 amigos por 457 euros; por supuesto,Facebook negó toda participación inmediatamente al sabersela noticia, y advirtió que bloquearía las cuentas implicadas «deforma permanente»; entonces uno se pregunta la razón de tan-to desatino.

Sin embargo, por algo será que Microsoft ha comprado el1,6% de Facebook por 240 millones de dólares. Se conocencifras de otro gigante de la red social: Twitter3: «el 1% de losusuarios realiza el 35 % de las visitas. El 5% de los emisoresescribe el 75% de los twits. Solo el 3,6% de ellos contiene infor-mación real, mientras más del 40% de los mensajes son del tipo“haciendo el sofrito“4.

Pero falta lo más complicado.

TTTTTop Secrop Secrop Secrop Secrop SecretetetetetEl análisis de las redes sociales es el deporte que más practi-

can los servicios secretos del Primer Mundo.Y la razón —muy buena— es la lucha contra el terrorismo. Pero

sospecho que los terroristas lo saben. Saben que la Inteligenciarecaba a diario un montón de datos de correos electrónicos yllamadas telefónicas celulares. Y que las redes ofrecen facilidadespara relacionar, mejor que cualquier otra tecnología.

Lo cierto es que en nombre de la guerra contra el terrorismo, sehacen guerras sencillamente imperiales, y antes del bombardeo delos aviones —y preferiblemente a estos—, planean con más intensi-dad los bombardeos mediáticos, que acuden sistemáticamente ala información de las redes sociales.

En los últimos tiempos se ha querido hacer campañas enFacebook contra los líderes populares latinoamericanos, mashan sido fallidas. Pero solo es el principio.

En el mundo virtual, en donde todo parece indicar que seharán las guerras del futuro, habrá guerreros y carne de ca-

ñón. Cuando la realidad supere la fantasía, La Matrix pare-cerá una anticipación, un tanto cándida, al estilo de Viajea la Luna de Georges Méliès.

Y puede que aun así, muchos no se den cuenta de quélado están.

1 Tom Hodgkinson, periodista de investigación del TheGuardian.

2 Existe una aplicación de malware para Facebook, queenvía avisos para acceder a una página fantasma (ophishing), que puede robarte datos de usuario y contra-

seña. Los hyperlinks de esta notificación, están di-rigidos a un dominio llamado fucabook.com, dondesu servidor cargará un código Javascript utilizando

meta-refresco de etiquetas HTTP para extraerla página real de Facebook e incitar a la víctimaa introducir su nombre de usuario y contraseña.

Si compruebas el destino de los links antes dehacer click en algunos de los campos de registro

de Facebook, cuando pongas el cursor encima deestos y observes la dirección a la que apunta en la

barra inferior del navegador, sabrás que alguien…¡fucabook contigo!

3Twitter permite a sus usuarios enviar microentradasbasadas en texto, denominadas «tweets», de una lon-gitud máxima de 140 caracteres. El envío de estosmensajes se puede realizar tanto por el propio sitioWeb, como por vía SMS (short message service) des-de un teléfono móvil, desde programas de mensajeríainstantánea, o incluso desde cualquier aplicación deterceros, como puede ser…¡Facebook!. La rapidez dela comunicación es sencillamente aplastante.

4 David de Ugarte, www.lasindias.com

Por J.S.J.S.J.S.J.S.J.S.

«…guardamos el tipo de navegador que usas y tudirección IP. Además, almacenamos cierta informa-ción de tu navegador usando cookies (…) puede quecompartamos información sobre una cuenta u otrotipo de información si consideramos que es necesa-rio para cumplir con la ley, para proteger nuestrosintereses o propiedad. Esto podría incluir el compar-tir la información con otras compañías, abogados,agentes o entidades públicas (…). Cuando usasFacebook, cierta información que publicas o com-partes con terceros (p. ej., un amigo o alguien de tured), como información personal, comentarios, men-sajes, fotos, vídeos, anuncios clasificados deMarketplace u otra información, puede ser com-partida con otros usuarios (…). Todo el proceso decompartir información se realiza bajo tu propioriesgo. Por favor, ten presente que si revelas in-formación —etc…etc…etc.— esta (…) puede apa-recer públicamente (…) Facebook puede contenerenlaces a otros sitios Web22222 . Obviamente, no somosresponsables de las prácticas de privacidad de otrossitios de Internet (…). Los anuncios que aparecen enFacebook en ocasiones son enviados directamente alos usuarios por anunciantes externos (…). Estosanunciantes también pueden descargar cookies entu ordenador o utilizar otras tecnologías comoJavaScript e insignias de páginas Web (también co-nocidas como «gifs 1x1») para medir la efectividadde sus anuncios y personalizar el contenido publici-tario (…) Facebook no tiene acceso ni control de lascookies que puedan ser instaladas por estosanunciantes...».

S i es cierto que el mundo ha abando-nado la sociedad basada en la pro-ducción y la política, para viviren la sociedad sustentadaen la comunicación y el

consumo, es comprensible la nece-sidad de saber qué, cómo y cuántoconsumimos culturalmente. Es de-cir, cuáles y para qué asimilamos lasexpresiones de la cultura popular, lasmanifestaciones artístico-literarias, losmedios de comunicación masiva y todoaquello que tenga en la vida un significadoespiritual para las personas, desde un parque,una calle, hasta una asociación por interesesgrupales, todos como parte de la realidad social.

Enunciada y definida por los pensadores dela Escuela de Frankfurt —fundada a principiosde 1923—, la industria cultural se interpretabacomo «un conjunto de ramas, segmentos y ac-tividades auxiliares, industriales, productorasy distribuidoras de mercancías con contenidossimbólicos, concebidas por un trabajo creativo,organizadas por un capital que se valoriza ydestinadas finalmente a los mercados deconsumo con una función de reproducciónideológica y social».

Con la expansión del mercado cultural apa-reció la llamada cultura de masas y en el afánde estudiar públicos, consumo y recepción debienes culturales, echaron manos también alos medios de comunicación buscando socia-lizar la mayor cantidad de información-conte-nido y de conseguir mayor rapidez y amplituden su difusión, aunque el objetivo fuera ma-nipulador.

Así, la imagen de Mikey Mouse, usar unacamiseta del Barça, comprarse un disco de laSinfónica de Nueva York, adorar las telenovelas—hasta confundir realidad con fantasía— o asu-mir como paradigma a un personaje tipo, comoYarini, son parte de un mismo fenómeno.

Aterrizaje forzosoAterrizaje forzosoAterrizaje forzosoAterrizaje forzosoAterrizaje forzosoEl paradigma cubano, siempre contrapuesto

a patrones culturales estandarizados del pri-mer mundo, hoy se resiente ante la invasión,más por razones económicas que por postula-dos estéticos. Algunos investigadores han lle-gado a preguntarse si el consumo cultural enla población cubana actual, implica diferencia-ción o desigualdad.

Si el Periodismo no ha sido precisamente ino-cente en este juego de poder, entonces por elPeriodismo debían comenzar las indagaciones.En un encuentro entre periodistas convocadopor Alma Mater las opiniones tomaron rum-bos divergentes: «Si vamos a dar lo que muchagente quiere, vamos a terminar por ofrecer pro-gramas con los elementos más epidérmicos delos shows de la televisión más comercialmentemorbosa» «Cuidado con poner en tercer lugarel entretenimiento aunque lo principal sea

repre-sentar aldestinatario». «Esfácil decir “hay que darjerarquización a la cul-tura de alto vuelo”, peroquién decide qué es y quéno es, y bajo qué criterios»«Si no debemos renunciar anada, tampoco podemos explo-tar los recursos de enganches fá-ciles» «No podemos pretender quetodo el mundo asimile Paradiso; el en-riquecimiento espiritual de las personases una aventura, donde cada quien tieneresponsabilidades individuales que cum-plir» «Tenemos una propuesta estéticamala» «Las mediaciones deben respetarel pensamiento creativo» «La manipulaciónexiste entre nosotros, y muchas veces mal he-cha» «No hay nada bueno ni nada malo, en tan-to no se llegue a esquematizar el pensamiento»«Desde los medios vemos todavía al receptorcasi reducido a un mero receptáculo; en la Webesto cambia. En Cuba precisamos recordar lastres misiones importantes del Periodismo:informar...educar...entretener» «Hoy muchosjóvenes no están preparados —no los hemospreparado— para ver cine, y TV mucho menos»«Educar para que aprendan a ver críticamente»«El Periodismo necesita buenos procesos de in-vestigación, eso nunca se debe obviar, pero hayque replantearse los modos; lo alternativo sí, noobstante es un concepto muy complicado y hayque definirlo para que no quede como palabrasbonitas».

¿Quién-dijo-qué-a-quién-por cuál canal?¿Quién-dijo-qué-a-quién-por cuál canal?¿Quién-dijo-qué-a-quién-por cuál canal?¿Quién-dijo-qué-a-quién-por cuál canal?¿Quién-dijo-qué-a-quién-por cuál canal?Esta ecuación cuasi perfecta de la comunica-

ción social —y, por consiguiente, del Periodis-mo— sirve para repensar los modos en el análisisdel consumo cultural.

En Cuba donde el concepto tuvo siempresentido no solo sociocultural, sino político, esdecir, estratégico, existe hoy un campo de ac-ción diferente; ante las desigualdades en lasoportunidades que hoy muestra el acceso a los

Una de las definiciones más aceptadas de «con-sumo cultural», es la que enfoca al consumo quese hace de los bienes y servicios cuya valía simbó-lica es mayor a su valor de uso. Ambos son esti-mados no por su capacidad de satisfacer necesi-dades materiales, sino por la evaluación quelos individuos hacen de los contenidos que pre-suponen los muchos formatos contemporáneos.Algunos han analizado al consumo cultural tam-bién como un proceso ritual.

En su asimilación intervienen muchos factores;en un extremo la industria cultural, y en el ínterin,la promoción.

El Periodismo es ese raro espécimen que a lavez es promotor y producto del consumo

cultural.

Por Jorge SariolJorge SariolJorge SariolJorge SariolJorge Sariol

productos de la industria cultural, y ante la im-posibilidad de ofrecer mayor variedad, hay quereforzar los modos, es decir, la táctica, no paramoldear gustos o promover aceptación, sinopara despertar sentido crítico a la hora de eva-

luar las propuestas a consumir.Los estudios han sido pocos y con visio-nes parciales, o no se socializan de modo

pertinente. Una investigación de 1998denotaba una preferencia ante la TV

de 87.5%; la radio, 82.7%; laspelículas, 63.4%, y leer la pren-

sa —revistas y periódi-cos—, de un 51.3%.

La mitad no es unacifra precisamen-

te desprecia-ble. Y el

Periodismo entra en el juego de la mayoría delos medios.....

Es, en consecuencia, una fuerza formidable.Pero si el Periodismo es algo demasiado seriopara dejarlo solo en manos de los periodistas,como gustan decir los que desde él toman de-cisiones extra-periodísticas, también es ciertoque en esta «guerra de pensamiento que senos hace», la solución es alcanzar primero lacultura del diálogo, para llegar al imprescindi-ble debate cultural, sustentado en el desarrolloa partir del análisis de las contradicciones.

Ciertamente, en el Periodismo y en los me-dios en general existe algo llamado responsa-bilidad social, y en el caso de su vertiente cul-tural no puede ser solo informativo; para elloprecisa de buen background cultural de quienlo hace, con el fin de no ofrecer opiniones delgusto personal como si fueran valoracionesestéticas.

Sin embargo, la responsabilidad individual decada uno es al fin y al cabo la definitiva.

Dime qué consumes culturalmente y tediré quién eres socialmente.

Dime cómo y cuánto lo consumesy te diré más; serás un ser ínte-

gro o solo un humanounidimensional en una

sociedad en 3D.

Las largas horas de trabajo pesan en los huesos del conductor,pero la noche está tranquila y la locomotora no ha fallado ni unavez. La madruga es fría y las luces del tren apenas alcanzan parailuminar la vía. Todo es tan parecido a los viajes anteriores que elconductor no se explica lo que acaba de ver: dos cuerpos a la velo-cidad de la luz atravesando la línea. El cansancio le hace creer en laexistencia de los OVNIS.

Pero no, son dos jóvenes con sus motos los que compiten. Elencuentro con el tren fue casual.

Cada fin de semana se dirigen al Ditú donde concurre parte de la«farándula habanera» para correr sus vehículos y presenciar el espec-táculo. La medianoche ha comenzado a llenarse de adrenalina por-que en las calles de La Habana transitan vehículos a alta velocidad; elsilencio desaparece por los escalofriantes chirridos de las gomas y laretumbante música. Los muchachos se divierten, parece no importar-les las horas de sueño de los demás ni el sosiego de sus familias.

Ya nadie recuerda exactamente cuándo surgieron estas activida-des, pero se ha hecho habitual escuchar y para algunos presenciar, lascarreras nocturnas de motos y todo tipo de automóviles «adaptados»para correr.

La historia nos la cuenta Jesús, un joven que gusta de lascarreras:

«Cuando yo empecé se corría en el Infotur de Boyeros, des-pués fue en el Dimar de Malecón, luego en Machurrucutu.Siempre estamos cambiando de lugar por la Policía, pero ahoranos estamos encontrando cuando las discotecas terminan, enel DiTú de Dolores y 21.

«Hay muchos tipos de competencias: en las motos, las másveloces y las más vistosas; casi todas las motos que aceleranestán feas. Los carros que más corren, más lindos están y másaudio tienen. También compite el que más feo está y el que másduro camina.

«Manolín es el de más historia, en el Sevillano él tiene unaJúpiter azul con llantas amarillas. Para mí ese es el motor másrápido actualmente, adonde él llega la gente no juega, ¿pa´qué? También en la Lisa hay un Júpiter que pasa a 210 km porhora… eso es una barbaridad.

«Si el carro o la moto tienen historia es fácil venderlos, comolos gallos de pelea, la historia se hace probándola y que lagente la conozca».

Velocidad y…Velocidad y…Velocidad y…Velocidad y…Velocidad y…Enmascaradas en ese tipo de «diversión» donde la música, las

bebidas alcohólicas y el flirteo abundan, existen las apuestas dedinero, ropas, joyas, comida, cervezas y hasta de las novias!!!

«Las apuestas dependen, hay personas que corren hasta por10 cervezas, —nos asegura Jesús— pero hay otros po-derosos que si no pones 250 dólares, no mueven elcarro o la moto. Viven de eso. También, hay quien salede una Disco con un motor rápido y se juega cualquiercosa. Por ahí empieza el espectáculo».

Pero para muchos probar que son los mejores y los más rápidosparece ser motivo suficiente para sumarse a la experiencia.

«Yo empecé a correr motos con 17 años —confiesa este co-rredor de 23— porque era lo que se usaba en ese tiempo. El quemás corriera era el que más chiquitas tenía y en el que más sefijaban. Al principio lo hacía porque no quería ser el peor ytodas las chicas hablaban de si ¡fulanito, el mejor! y yo queríaser fulanito también. Muchos corren por hobby. Es como el quevive para vestirse, que siempre quiere ponerse lo último, pasaigual con el que corre. Si el mes pasado corría 135 o 140 km,después quiere correr más».

Las edades de estos jóvenes oscilan entre 15 y 30 años; paraellos correr en sus vehículos no pasa de ser otra noche dediversión, pero desafortunadamente, no siempre ocurre deesa manera.

«El caso de Yasser “el Toca” que tenía más o menos mi edadahora —cuenta Jesús— él llegó una vez a las carreras cuandoeran en la Seis Vías y alguien le pidió que le probara el motorporque él era uno de los mejores; entonces se montó en lamoto, pero estaba acabada de armar y no lo sabía, se puso aacelerarla por toda la Seis Vías y se le trancó la unidad, de 120km bajó a cero. Él no sabía nada de ese motor, ni el que se lo diotampoco. Llegó muerto al hospital, le dieron dos paros y teníafractura en el cráneo, además de haber perdido un brazo y lamitad de una pierna en el impacto. Fue terrible. Yo recuerdoque podía ver, de lejos, la luz delantera y trasera como si fueraun intermitente.

«Yo también tuve una mala experiencia —rememora más ade-lante— me traicionaron los frenos. Venía de una fiesta y estabaen tragos, entonces se me olvidó una pared que habían cons-truido y le fajé, no la vi.… Iba a mucha velocidad y no estabausando el casco. Casi pierdo la vida, estuve varios meses enterapia intensiva y sin conocer a nadie.

«Algunos corren con casco, pero la mayoría no; por ejemplo:los que corren acostados, tirados en plancha, así no se puedeusar un casco. Se acuestan arriba del asiento y ponen la cara allado del tanque. Hay quien tiene su versión y piensa que correrasí es más aerodinámico».

Pensemos en voz alta, las carreras de velocidad de carros y demotos practicadas como deporte están concebidas en espacioscon requerimientos y medidas de seguridad específicas, aun asíson frecuentes los accidentes que, en muchas ocasiones, suelenser fatales.

Las carreras son ilegalesLas carreras son ilegalesLas carreras son ilegalesLas carreras son ilegalesLas carreras son ilegalesAunque el Código Penal no contempla sanción alguna que regu-

le las carreras de autos y motos —nos explica el Tte. Coronel ReinaldoBecerra Acosta, Jefe de Departamento de la Dirección Nacional deTránsito— se consideran una actividad ilegal, pues incurren en eldelito de exceso de velocidad y en el de desorden público.

La Ley 60 en su artículo 120 (Capítulo 11) refiere que «seprohíbe establecer competencias de velocidad en la vía, ex-cepto en los casos autorizados por el Ministerio del Interior.

Sin embargo, hemos señalado que no es la única violación enlas carreras, pues la mayor parte de los corredores manejanbajo el efecto de bebidas alcohólicas y algunos de estupefa-cientes.

Asimismo está estipulado en el decreto 96, donde se prohíbeal poseedor legal o persona encargada por cualquier conceptode un vehículo, conducir o permitir que otro conduzca:

-Cualquier vehículo de uso personal cuando haya ingeridobebidas alcohólicas en cualquier cantidad que afecte, aunquesea en forma mínima, su capacidad para conducir.

-Bajo los efectos de la ingestión, absorción o inyección dedrogas tóxicas o sustancias alucinógenas, hipnóticas, estupefa-cientes u otras de efectos similares.

La legislación vigente continúa estableciendo, en el artículo117, como límites máximos de velocidad para todos los vehícu-los de motor 50 m por hora en vías urbanas y para los automó-viles de hasta 3 500 kilogramos de peso máximo autorizado,100 m por hora en autopistas. De más está decir que estasmarcas son alcanzadas, si fuera el caso, solo en la arrancada deuna competencia de velocidad.

Incurrir en algunas de estas infracciones conlleva el retiro dela licencia de conducción, en el mejor de los casos, porque co-meterlas todas reiteradamente, como se suele hacer en estosespacios, les permite a las autoridades decomisar el vehículo.

El Tte. Coronel Ángel Díaz García, Jefe de divulgación de laDirección Nacional de la PNR, constata que «la sanción es se-gún lo que el Tribunal en su vista oral tenga en cuenta conrelación a las conductas de los ciudadanos.

«Ellos conocen que esto es un desafío a la ley, por eso lascarreras se desarrollan en la madrugada, cuando ya el sistemade tránsito terminó sus funciones a las 21:00 horas, y soloqueda en la calle el sistema de patrulla que pertenece a laPolicía.

«Hemos conocido de lugares como la Autopista Nacional,también la Autopista del Mediodía, cerca de la calle 26 y deotros espacios donde se han realizado operativos de las fuerzasde la Policía y se han neutralizado pero ellos se trasladan de unlugar a otro— comenta el Tte. Coronel Ángel Díaz.

«La sola presencia de una patrulla en un lugar donde existauna acumulación de autos o de motos, donde posiblemente sepueda efectuar una carrera, ya impide el hecho».

¿Continuar corriendo?¿Continuar corriendo?¿Continuar corriendo?¿Continuar corriendo?¿Continuar corriendo?Correr es un riesgo y estos jóvenes lo saben mejor que cual-

quiera. A estas alturas no encuentran nada más excitante. Paraellos un motor encendido significa velocidad, adrenalina, diver-sión. ¿Las noches en La Habana continuarán siendo el escenariodonde estos muchachos arriesguen su vida?

Afortunadamente hoy no fuimos testigos de ningún acci-dente. Cada noche de viernes y sábado ellos desafían las leyesde la física, a las autoridades y a la muerte. Y...¿Quiénes puedenacceder al «disfrute» de este deporte?

Reflexionemos en silencio…

RÁPIDO YYYYY FURIOSO FURIOSO FURIOSO FURIOSO FURIOSOPor Amelia C. Duarte de la Rosa, Ailín M. García Brunet y Maria L. Cabrera ChávezAmelia C. Duarte de la Rosa, Ailín M. García Brunet y Maria L. Cabrera ChávezAmelia C. Duarte de la Rosa, Ailín M. García Brunet y Maria L. Cabrera ChávezAmelia C. Duarte de la Rosa, Ailín M. García Brunet y Maria L. Cabrera ChávezAmelia C. Duarte de la Rosa, Ailín M. García Brunet y Maria L. Cabrera Chávez

¿DE DÓNDE SALIÓESA CRIATURA?

Capítulo II

EN EL CAPÍTULO ANTERIORRaquel despierta y por todos lados descubre un mensaje: «Hoy

comienza tu nueva vida». Cree que es un sueño, pero la visión serepite una y otra vez. Termina por seguir su rutina y olvidarse delasunto…

—Te digo que estás cambiada, que no eres la misma —dijo Yaquelín por quinta vez esa mañana.

—Está bueno ya, niña, me vas a acomplejar —Raquel yacomenzaba a cansarse de tanta insistencia.

—Pero es verdad. En mi vida he visto nada semejante.Ayer eras una y hoy eres otra. Y sin embargo la misma. Hayalgo nuevo en ti que no puedo describir… Algo mágico.

—O te levantaste con ganas de cogerme para tus cosas otu nivel habitual de bobería aumentó de la noche a la maña-na… Vamos para el aula, que no quiero que esa profesorase me encarne…

Raquel arrastró a Yaquelín por el pasillo y estaban ya apunto de entrar al aula cuando Jorge, el de tercer año, lessalió al paso.

—Tengo que decirte que estás preciosa, Raquel. Me tengoque contener para no darte un beso aquí mismo.

Raquel siempre había estado medio enamorada de Jorge,incluso más de una vez se lo había insinuado, pero hasta eldía de hoy Jorge la había ignorado olímpicamente. Hasta eldía de hoy:

—Por favor, dime algo. Nunca me había pasado nada igual.Es como un amor a primera vista. Como en las películas deldomingo por la tarde.

—No creas que vas a hacer el día conmigo —contestóRaquel—. Déjame pasar que ya comenzó la clase.

La clase era de Gramática Española, y a la profesora ledecían Doña Bárbara. Si llegabas cinco segundos despuésde que ella comenzara a hablar, lo más probable era que tedejara fuera.

Raquel no tenía demasiadas esperanzas:—Permiso, profe…Cundió el pánico. Los que estaban sentados en los pupi-

tres adivinaron la terrible escena. Doña Bárbara fulminaríacon su mirada a Raquel y a Yaquelín. Les cantaría las cuaren-ta y les cerraría la puerta en la cara.

—Buenos días, Raquel –dijo Doña Bárbara hecha unapascua.

—Disculpe la tardanza, es que nos entretuvimos unpoco…

—No hay problemas, son cosas que pasan, pueden pasar.—Gracias, profe –dijo Raquel algo incrédula.—Estamos para servirnos –sonrió Doña Bárbara.El auditorio lucía anonadado. Pero pronto todo el mun-

do se fijó en Raquel. Algo en ella ejercía un inefable poderde seducción.

—Siéntate al lado mío, Raquel —le rogó Adrián, que esta-ba considerado el muchacho más inteligente del grupo.

—No, siéntate conmigo —le pidió Maykel, que estabaconsiderado el muchacho más bonito de la facultad.

—Siéntate aquí, Raquel —casi le imploró Manuel, que niera inteligente ni era bonito, pero tenía un gran corazón.

Lo singular era que ninguno de los puestos que le ha-bían ofrecido estaba vacío. Esto, claro, no les hizo muchagracia a las ocupantes, pero tampoco tenían fuerzas paraprotestar, hechizadas como estaban con la magia de Raquel.

Raquel se encogió de hombros y se sentó en su puestohabitual, junto a su inseparable Yaquelín.

Doña Bárbara, toda sonrisas, iba a reanudar la clase cuan-do apareció en el aula la secretaria docente.

—Buenos días, con permiso. Vengo a presentarles a unestudiante nuevo.

Un aroma de manzanas inundó la habitación. Y de pron-to se completó el milagro: una criatura de belleza inimagi-nable se les plantó delante, sonriente.

—Mi nombre es Sebastián —los acarició con su voz.Doña Bárbara por poco se desmaya.—Siéntate donde quieras.—Quisiera sentarme con ella —Sebastián señaló a

Raquel.—Levántate —le dijo Raquel a Yaquelín.

EN EL PRÓXIMO CAPÍTULORaquel y Sebastián parecen hechos el uno para el otro. Es-

tán a todas horas juntos, comparten las mismas aficiones.Raquel se ha enamorado sin remedio. Pero Sebastián escondeun secreto…

Por Yuris Nórido

Para cinéfilos

TTTTTo do a Garbo: o do a Garbo: o do a Garbo: o do a Garbo: o do a Garbo: es una frase del argot cinematográ-fico norteamericano, que en español sería algo así comoevitar la publicidad, recordemos que esta actriz teníala característica de esquivar a admiradores y prensa,además de que no le gustaba ser fotografiada.....

Boo Boo: Boo Boo: Boo Boo: Boo Boo: Boo Boo: se llama así al descuido, error o anacronis-mo que pasó inadvertido a los ojos de eruditos, espe-cialistas o asesores, por ejemplo, en el Filme DulceLocura (1970), de Leonard Keigel, un buzo se lanza alagua para investigar un accidente automovilístico, alentrar su aqualón es de un color y al salir, es de otro.

DickDickDickDickDick: voz inglesa que se le aplica a la persona encar-gada de la censura.

Vigilanti CuraVigilanti CuraVigilanti CuraVigilanti CuraVigilanti Cura: voz del latín que significa con vigi-lante cuidado. Encíclica papal proclamada el 29 de ju-nio de 1936, por Pio XI, es la Carta magna de la IglesiaCatólica sobre cine.

AromaramaAromaramaAromaramaAromaramaAromarama: sistema de cine oloroso patentado en1958 por Charles Weiss. Se realizó un único filme, TheGreat Wall of China o Detrás de la Gran muralla, in-troducía 72 olores diferentes, y fue estrenado el 2 dediciembre de 1959, en el Mayfair theatre, de NuevaYork.

Cine negroCine negroCine negroCine negroCine negro: Etapa del cine muy creativa entre losaños 40 y 50; este es un periodo propio de los filmesque describían el submundo de calles urbanas oscu-ras, donde el crimen y la corrupción tenían su mejorescenario; lo caracterizó su atmósfera lúgubre: ejemplode este periodo es El halcón maltés, (1941), de JohnHuston, que consagrara a Humphrey Bogart.

Nuestra lengua

¿Quién inventó el término «agujero negro»?¿Quién inventó el término «agujero negro»?¿Quién inventó el término «agujero negro»?¿Quién inventó el término «agujero negro»?¿Quién inventó el término «agujero negro»?Fue el físico John Archibald Wheeler (1911-2008),

quien estuvo entre los últimos colaboradores de AlbertEinstein y trabajó en su juventud con el joven danés NielBohr, eso lo convirtió en uno de los pioneros de lafisión nuclear, también colaboró en el Proyecto Mania-tan, en la creación de los reactores que produjeron pluto-nio para alimentar las primeras bombas atómicas.

CervezaCervezaCervezaCervezaCerveza: En España se le llama caña o birra, mientrasque en México le dicen, con algunas variantes, chela.

TTTTTrrrrrabajoabajoabajoabajoabajo: En México se le denomina chamba, mientrasque en España le dicen el curro; y en Argentina, laburo.

¿Qué diferencia hay entre genético y congénito?¿Qué diferencia hay entre genético y congénito?¿Qué diferencia hay entre genético y congénito?¿Qué diferencia hay entre genético y congénito?¿Qué diferencia hay entre genético y congénito?Con el término genético nos referimos a las condi-

ciones hereditarias que son transferidas por el padre yla madre a sus hijos; los genes están compuestos porcélulas conocidas como cromosomas, a su vez inte-gradas por moléculas de ADN que contienen codifi-cadas estas características. Congénito (del latíncongenitus; de cum, con y genitus, engendrados y sig-nifica que se engendra y nace junto a la persona.

Curiosidades con Palabras

En el español, una terminación idéntica como es elcaso de -on-on-on-on-on, puede servir como aumentativo o dimi-nutivo. Por ejemplo, caserón aumenta el significado yel tamaño de casa, mientras que callejón disminuye elde calle.

SolubleSolubleSolubleSolubleSoluble: significa que se puede disolver, por ejem-plo, el azúcar es soluble. Pero también soluble es algoque se puede resolver: por ejemplo, un problema essoluble, o insoluble.

¿Cuál es el origen de la palabra chal?¿Cuál es el origen de la palabra chal?¿Cuál es el origen de la palabra chal?¿Cuál es el origen de la palabra chal?¿Cuál es el origen de la palabra chal?Se define al chal como paño de seda o lana, mucho

más largo que ancho, y que, puesto en los hombros,sirve a las mujeres como abrigo o adorno. Entre losshaliat, un pueblo indio, se usaba mucho una prendaque las mujeres se colaban sobre los hombros o cabeza,por los que los persas llamaron shal a esta especie depañuelo.

¿Sabías que las palabras Whiskey y Vodka sig-¿Sabías que las palabras Whiskey y Vodka sig-¿Sabías que las palabras Whiskey y Vodka sig-¿Sabías que las palabras Whiskey y Vodka sig-¿Sabías que las palabras Whiskey y Vodka sig-nifican agua?nifican agua?nifican agua?nifican agua?nifican agua?

Así es, la palabra whiskey viene del gaélico uiscebeatha, que significa agua de vida. Esta palabra evo-lucionó de uisge beatha a usge, y de esta a uski, y deesta al definitivo whiskey (whisky).

En el caso de Vodka (wódka en polaco, âîäêà enruso) es un aguardiente claro sin color, ni olor. Gene-ralmente de grano fermentado, aunque se ha llega-do a obtener de la cáscara de la papa. Es el aguardien-te nacional de Rusia y Polonia, y significa “agüita”(diminutivo de agua) (agua=woda en polaco, âîäá enruso).

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