caos en mierda xiudad

Colectivos, movimientos, organizaciones, agrupaciones, emisoras de radio, imprentas, sitios Web, bandas musicales, talleres, incluyendo textos, revistas, fotos, videos, entrevistas, etc., con alguna afán revolucionario, antifascista, activista, de izquierda ó contra el sistema, todos los que participaban directa e indirectamente en estas actividades, se vieron envueltos en una persecución sin precedente. El 1er paso fue la identificación y eliminación masiva o, como los medios lo llamaron “Limpieza delictiva por el futuro de MX”.

Había que regar el miedo hasta en el aire. Así que se programaron descargas de virus de infección rápida, que podía variar sus resultados en lapsos de una semana a un mes, según si era urgente anestesiar, adormecer o noquear el estado psicológico del pueblo después de la aprobación de alguna ley importante, provocando inseguridad y temor al momento de salir a las calles. “Mientras menos gente acumulada exista, es menor el alcance de sus acciones” y eso lo sabía a la perfección el mandatario nacional. Al paso de un año de ejercer el plan, las calles de la ciudad después de las horas de labores, eran tierra del policía o del mafioso que se multiplicaron como plaga. Se les miraban ir y venir con sus lujosas camionetas cada vez más caras y modernas. El paro laboral en mierda xiudad se triplicó, la inestabilidad monetaria del país estaba a punto de una nueva devaluación. A raíz de las reformas fiscales, legales y energéticas, las multinacionales crecieron en todo el territorio como un monstruo hambriento, dejando sin oportunidad de competencia a los pequeños negocios. Muchos tuvieron que cerrar e iniciar en el negocio informal. Otros volvieron a ser carne pa´ la picadora, llegaron a la boca de esas multinacionales que les hicieron cerrar su micro negocio. Los considerados viejos para la maquina laboral que no fueron aceptados para emplearse, se llenaron de un profundo odio y desilusión hacia el gobierno, que mas tarde se vio reflejado en negocios ilícitos…

La situación no podía ser peor. Los encabezados de periódicos internacionales tacharon rápidamente a MX dentro del TOP 50 de inseguridad, violencia, extorsión y corrupción en el globo terráqueo, comparando la zona fronteriza con EPA (Estados Podridos de América) con ciudades de extrema violencia como San Pedro se Sula en Honduras o la Ciudad de Caracas en Venezuela

Cuando todo parecía perdido… Cuando había quedado de lado la fe y las calles de MX guardaban en sus grietas, El eco anudado en la garganta de todo un pueblo… Surgió una luz… Un brote de esperanza, un grupo de opositores o, rebeldes como los llamo el estado, dispuestos a morir de pie y de cara al sol que vivir de rodillas, autonombrándose: “Libertad y Victoria” Actuando cuidadosamente, haciéndose sentir en las calles, y desapareciendo como si fueran solo un rumor, una leyenda…

Recuperaban sectores, desarmaban granaderos y mafiosos, organizaban agricultores. Si las aceptaban; les dejaban las armas que portaban y también las que le quitaban a la mili, mismas armas que les apuntaban en las sienes el día de ayer, ofrecían una opción. El pueblo decidía si la tomaba o no. Muchos se les unieron… Muchos los tacharon de ser una mafia más. La mayoría volvieron al vicio de ser sometidos y explotados…

Lo cierto es que se ha organizado un grupo de inconformes, desatando una guerrilla entre un gobierno fascista, que intenta someter y gobernar con el rigor de la violencia y el terror y estos guerrilleros, que entendieron que, en Mierda Xiudad… Solo duerme quien no quiere soñar.

MX (Mierda xiudad) tierra brava, combativa de raíces, guerrera por esa virtud universal de defender lo que uno ama, llena de cultura y tradición, y también a su vez de desgracias y abusos, de tristes sucesos que culminaron con sangre innecesariamente derramada por la cobardía y soberbia de unos cuantos que se hacían llamar revolucionarios, aunque la historia escrita proponga otra realidad. La historia la escriben los vencedores, pero en el caso de esta tierra no la escribieron los honorables. Y peor aún, lo que existió como verdad y victoria ante la opresión del brazo ajeno, hoy se revuelca en el escombro del pasado y el presente esconde y destruye toda evidencia del suceso más ruin y despreciable hacia su propio pueblo, los vende como baratija, se protegen con sus leyes, se defienden con sus armas. Augurando miseria y explotación, e ignorando la sed de libertad y hambre del xiudadano de vivir únicamente con lo que le corresponde y no con las miserias que se le ofrece casi en plan de burla y los arroja a una especie de esclavitud moderna, por la infeliz ambición de un puñado de hijos de puta. Espera el No. 2 de “Caos en Mierda Xiudad” ¡Corre la voz!