HACIA LA CREACIÓN DE UNA ESCUELA DE CIUDADANOS RESPONSABLES Y PARTICIPATIVOS

EN EL COLEGIO ANGLO COLOMBIANO

Memorias y Agenda Propositiva del Ejercicio Taller Deliberativo: Construyendo Ciudadanía y Democracia en el Anglo

Bogotá, 13 de febrero de 2006

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CONTENIDO

PresentaciónMargarita María Sáenz

1. Conferencia: Construyendo Ciudadanía: El gran reto para el futuro del Anglo ColombianoGabriel Murilllo

2. Panel: Aportes a la construcción de una comunidad ciudadanaAna Bejarano, Ann Mason, Adriana Posada, Rusbel Martínez y Flaminio Castellanos

3. Ejercicio Taller Deliberativo: Construyendo Ciudadanía y Democracia en el Anglo

4. Agenda Propositiva: Sé Ciudadano! Sé Anglo!

5. Conclusiones y Recomendaciones

6. Acta de Compromiso

7. Bibliografia y Sitios de Internet de Interés

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ABREVIATURAS

MEN – Ministerio de Educación Nacional

ICFES – Instituto Colombiano para el Fomento de la Educación Superior

PYP – Primary Years Programme of the International Baccalaurate Organization

MYP – Middle Years Programme of the International Baccalaurate Organization

IBO – International Baccalaurate Organization

CAS – Programa de Creatividad, Acción y Servicio del IBO

FASAC – Fundación Acción Solidaria Anglo Colombiano

PSHE – Personal, Social and Health Education Department

Margarita María Sáenz GarcíaPolitóloga Magna Cum Laude Universidad de Los Andes (’06). Exalum-na y Head Girl del Colegio (’01). Coordinadora General Ejercicio Taller Deliberativo: Construyendo Ciudadanía y Democracia en el Anglo.

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PRESENTACIÓN

Como parte de la celebración de los 50 años de nuestro Colegio, el comité organizador Anglo 50 incluyó en su programa de actividades un evento que le ofreciera a la comunidad Anglo Colombiana la oportunidad de reflexio-nar sobre su compromiso y esfuerzos en la construcción de ciudadanía. Gabriel Murillo, exalumno de la Promoción 1964, ex Presidente de ASOPANGLO y profesor titular del Departamento de Ciencia Política de la Universidad de Los Andes, propuso al comité Anglo 50 realizar un ejercicio deliberativo que le permitiera a la comunidad reunir a sus diversos estamentos para construir de manera colec-tiva una agenda de propuestas para el desarrollo de un proyecto de ciudadanía y democracia en el Anglo. Como exalumna del Colegio y estudiante en ese momento del Departamento de Ciencia Política de la Universidad de Los Andes fui invitada a participar en el desarrollo del proyecto y encargada por el comité organizador del evento para coordinarlo. Este comité estuvo conformado por Gabriel Murillo, Jason Ward y Rusbel Martínez, director y subdirec-tor del departamento de Sociales respectivamente.

Desde 1991 todas las instituciones educativas en Colom-bia tienen como mandato constitucional formar al colom-biano “en el respeto a los derechos humanos, a la paz y a la democracia” (Artículo 75). La Ley General de Educa-ción de 1994 hace obligatoria la enseñanza de la Cons-titución Política y la educación para la justicia, la paz, la democracia, la solidaridad, la confraternidad, el coopera-tivismo y la formación en los valores humanos. El Minis-terio de Educación Nacional incluyó entre el conjunto de competencias básicas que debe desarrollar un estudiante colombiano, las competencias ciudadanas, entendiendo éstas como el conjunto de conocimientos y de habilidades cognitivas, emocionales y comunicativas que, articulados entre sí, hacen posible que el ciudadano actúe de manera constructiva en la sociedad democrática.

A pesar de la existencia de este marco institucional en el sistema educativo colombiano, el proyecto de ciudadanía y democracia en el Colegio Anglo Colombiano es una ta-rea pendiente. A lo largo de los años se han desarrollado diversas iniciativas y múltiples espacios de formación so-cial de los estudiantes. Sin embargo a la fecha, no existe un proyecto que establezca una política institucional sobre el tema, que busque hacer de la ciudadanía un elemento estratégico de la cultura escolar, que integre los esfuerzos que se han adelantado y que proponga nuevas iniciativas. La necesidad de contar con un proyecto de ciudadanía ha sido percibida por diversos sectores de la comunidad escolar en los últimos años. Tanto estudiantes como profe-sores y padres de familia han buscado impulsar iniciativas en esta línea.

Bajo este panorama, la propuesta de organizar un evento para que la comunidad escolar se reuniera a reflexionar sobre su compromiso ciudadano tuvo eco en diversos sec-tores del Colegio. Por este motivo el comité Anglo 50 no dudó en respaldar el desarrollo de esta iniciativa, enten-diendo que su resultado sería un regalo muy valioso para el Colegio en su aniversario.

El principal objetivo del Ejercicio Taller Deliberativo: Cons-truyendo Ciudadanía y Democracia en el Anglo fue crear conciencia acerca de la responsabilidad y la importancia que tiene para la comunidad anglo colombiana la forma-ción de ciudadanos integrales. A la vez buscó conocer lo que hasta el momento el Colegio hacía en relación a la formación ciudadana de sus estudiantes, identificar sus va-cíos y debilidades y sobre todo, proponer iniciativas para el desarrollo de un proyecto de ciudadanía en el Anglo. En

Por: Margarita María Sáenz García

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esta línea, el espíritu del Ejercicio no fue criticar destructi-vamente o hacer señalamientos. Por el contrario, el even-to buscó construir. Y construir de una manera particular: Construir colectivamente, construir entre todos.

El Colegio Anglo Colombiano tiene como misión formar “Mentes Abiertas, Mentes Alegres, Mentes Brillantes”. Con la adopción del programa completo del Bachillera-to Internacional busca que sus estudiantes sean activos en su aprendizaje, personas con una formación integral y ciudadanos globales comprometidos de manera acti-va y responsable con un mundo cambiante. Una de las frases trilladas de nuestros días es “piensa globalmente, actúa localmente”. Bajo esta mirada actual es pertinente e importante preguntarse ¿qué puede hacer el Anglo para construir mejores ciudadanos para Colombia? A la vez, ¿qué puede hacer para construir mejores ciudadanos para Bogotá, para nuestras localidades, para nuestros barrios y por qué no decirlo también, mejores ciudadanos para nuestro Colegio? ¿Cómo podemos hacer de la familia Anglo Colombiana una comunidad más solidaria, más responsable frente a sus derechos y deberes, más justa en el cumplimiento de sus reglas, más honesta, más transpa-rente, más incluyente y más respetuosa?

El evento buscó ante todo ser una oportunidad para que la comunidad reflexionara sobre lo que estaba haciendo. Por esto en ningún momento buscamos traer un grupo de expertos que nos ofrecieran miradas tal vez válidas e in-teresantes pero probablemente ajenas a nuestra realidad. Tomando esta reflexión como premisa, se realizó una con-vocatoria entre los diversos estamentos que conforman la comunidad, es decir padres de familia, exalumnos, em-pleados, profesores y alumnos y se definió utilizar la meto-dología jigzaw de deliberación que permitía tener espacios de diálogo donde alumnos, padres, exalumnos, profeso-res y empleados se iban a sentar juntos a discutir y a poner en perspectiva sus opiniones, y a la vez espacios donde cada estamento por aparte, iba a tener la oportunidad de definir una posición concreta y una serie de propuestas. Tuvimos el gusto de contar con 100 participantes quienes trabajaron con gran entusiasmo dando sus opiniones y haciendo propuestas concretas para el Colegio. Estas pro-puestas fueron presentadas en un plenario final por cada estamento y con ellas se armó una Agenda Propositiva que busca ofrecerle al Colegio los lineamientos para estruc-turar y desarrollar un programa de educación ciudada-na. De esta manera el Colegio y la comunidad educativa podrán cumplir de mejor manera con su responsabilidad de educar para la democracia y a la vez, fundamentar e impulsar su responsabilidad social.

El Ejercicio Taller Deliberativo se realizó el lunes 13 de febrero en las instalaciones del Centro Cultural William Shakespeare. Como antesala del ejercicio de deliberación tuvimos una conferencia dictada por Gabriel Murillo, quien nos ubicó en los avances que en materia de construcción de ciudadanía se están realizando en Inglaterra, en Amé-rica Latina y en Colombia y la importancia que para diver-sos actores internacionales, nacionales y locales tiene este tema. También contamos con un grupo de panelistas con-formado por diversos miembros de la comunidad que nos expresaron por qué consideran importante la construcción de ciudadanía en el Anglo y cómo podríamos aprovechar diversos espacios de nuestra vida escolar para impulsar-la. Nos acompañaron en el panel Ann Mason, madre de familia de dos niñas de tercero de primaria y un niño de quinto, politóloga con PHD de la Universidad de Yale y actualmente directora de la Comisión Fulbright en Colom-bia; Adriana Posada, exalumna de la promoción de 1989 y actualmente Gerente del Plan de Desarrollo de Bogotá; Flaminio Castellanos empleado del Colegio por más de 30 años y actualmente Jefe de Recursos y Mantenimiento; Rusbel Martínez subdirector y profesor del Departamento de Sociales de Bachillerato; y Ana Bejarano, alumna de once y representante de los estudiantes al Consejo Direc-tivo 2005 - 2006.

Carolina Hernández (promoción 1999), Rusbel Martínez (subdirector Departamento de Sociales), Jorge Delgado (2003), Gabriel Murillo (1965), James Walbran (rector), Margarita María Sáenz (2001), Luisa Suárez (2001) y Jaime Trujillo (presidente Consejo Directivo). Carolina, Jorge y Luisa apoyaron como facilitadores de las mesas de trabajo el desarrollo del ejercicio deliberativo; los tres además de exalumnos del Anglo son estudiantes y egresados del Departamento de Ciencia Política de Uniandes.

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Además de generar un espacio que motivara nuevas ex-pectativas e intereses frente al tema, nuestro segundo ob-jetivo principal era entregarle al Colegio un documento que integrara en una Agenda Propositiva las propuestas que hicieron en el plenario final los diversos estamentos de la comunidad y que le ofreciera al Colegio las bases para iniciar el proceso de desarrollo de su propio proyecto de ciudadanía y democracia. Desde un inicio se propuso que este documento sería un regalo para el Colegio en sus 50 años, esperando que sus frutos se constituyeran en un legado para el futuro del Anglo. También se buscaba que el documento guardara la memoria de la conferencia de Gabriel Murillo, las intervenciones de los panelistas y algunas conclusiones y recomendaciones.

¿Y ahora qué? Es importante aclarar que el Ejercicio fue un primer paso. Mucho hay que hacer, mucha conciencia frente al tema hay que generar, muchos compromisos se tienen que hacer para que el proyecto de ciudadanía y de-mocracia del Anglo sea una realidad y ante todo, para que llegue a ser un elemento fundamental en la cultura escolar.

De la activa y comprometida participación de todos los es-tamentos de la comunidad y en especial de sus directivas, depende que este tema cobre verdadera relevancia en el Colegio.

Como exalumna del Colegio considero que este es un tema pendiente para el Anglo, frente al cual tiene una enorme responsabilidad y en el cual convergen muchos otros temas de vital importancia para la formación social y personal de sus estudiantes. Valoro enormemente la ex-celente formación académica que nos ofrece el Colegio y los esfuerzos recientes adelantados porque esto sea una oportunidad aprovechada al máximo por todos los alum-nos. También los múltiples espacios que ofrece la comu-nidad para que sus estudiantes desarrollen su liderazgo y sus habilidades en la convivencia cotidiana. Sin embargo, aunque el mundo es cada vez más competitivo y la ciencia y la tecnología nos exigen cada vez mejores niveles acadé-micos, estos tiempos nos piden también mayores esfuerzos por formar personas con mayor conciencia sobre su inte-rrelación con la sociedad en la que viven. En últimas creo que este es el objetivo principal de la educación. En esta medida pensar en cómo se puede constituir una escuela de ciudadanos responsables y participativos es una res-ponsabilidad fundamental para el Anglo.

Esperamos que este documento sea ante todo un insumo para el proceso que se está desarrollando. Como señalé anteriormente, mucho se tiene todavía que discutir, que analizar y que interiorizar por parte de los diversos esta-mentos de la comunidad. En ningún momento se pretende que este documento sea la última palabra sobre lo que se de debe hacer en el Colegio. Simplemente queremos que su análisis y discusión sea una excusa para impulsar el proceso de desarrollo de una política institucional sobre construcción de ciudadanía y democracia en el Anglo.

James Walbran, rector del Colegio (2001-2006) en la instalación del evento.

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Gabriel Murillo Castaño, Exalumno de la Promoción 1964, ex Presi-dente de ASOPANGLO, profesor titular del Departamento de Ciencia Política de la Universidad de Los Andes y miembro fundador de la Red Interamericana para la democracia RID.

1. CONSTRUYENDO CIUDADANÍA: El gran reto para el futuro del Anglo Colombiano

Muy buenos días queridos alumnos de mi colegio, padres de familia, profesores, señor rector, exalumnos, miembros todos de la comunidad anglo colombiana.

Yo voy a hacer una conversación muy básica y muy sencilla con todos ustedes. Ahora hablando con el señor rector él me decía, hable con el corazón, y yo le dije, se lo aseguro, lo voy a hacer, no de la forma tan elocuente como usted lo acaba de hacer pero con todo el cariño que me significa a mí el Colegio Anglo Colombiano y el gran compromi-so que yo como colombiano siento con la temática de la construcción de ciudadanía. Este es el tema sobre el cual vamos a trabajar en la estupenda mañana de hoy.

Por: Gabriel Murillo Castaño Quisiera iniciar con un señalamiento de carácter históri-co, es decir cómo desde la ilustración el hombre ha sido consciente, ve que su entidad como ser viviente, de ma-nera analítica, se diferencia de su carácter de ciudada-no. También desde esa época los filósofos políticos, los pensadores han venido pensando en la importancia de establecer analíticamente la diferencia entre ser hombre y ser ciudadano. Pero miren ustedes lo paradójico; un autor ginebrino, Jacques Rousseau en su obra cumbre “El Emi-lio” dice: “Un hombre llega a ser hombre sólo cuando se ha hecho ciudadano”. Entonces estamos estableciendo esa diferencia entre estas dos condiciones, pero lo hace-mos para propósitos analíticos en la esperanza de que las podamos integrar en el esplendor de la madurez a la que queremos llegar y a la cual podemos llegar todos nosotros.

En Colombia y América Latina estamos acostumbrados a hablar sobre el ciudadano. Este término se constituye en un lugar común, en una voz que fácilmente incluimos como un comodín en nuestra conversación cotidiana. Pero muy pocos nos damos cuenta de que estamos aludiendo a un concepto que no está sustanciado en la realidad. Tal vez esto es el producto de la gran influencia que ha tenido so-bre nosotros la fundamentación liberal clásica de la ciuda-danía. El ciudadano según esta perspectiva, es visto como aquel sujeto que tiene ante la ley igualdad de derechos y de obligaciones. De alguna manera, esto tiene implicacio-nes que invitan al individuo a asumir una postura de pa-sividad, una postura de inactividad, una postura bastante perezosa diría yo, que lo distancia de la posibilidad de asumir esa fundamentación que acarrea una visión alter-nativa de ciudadanía que es la visión republicana. En ella el individuo no sólo sabe que él tiene igualdad con todos sus congéneres por la simple razón de ser ciudadano, sino que además está consciente que el orden social al cual pertenece no está dado, que esa realidad que lo rodea no es un hecho inamovible y además, en tanto individuo crítico, está dispuesto a propugnar por un cambio trans-formador un cambio que haga posible un desarrollo y una posibilidad para que todos los individuos nos apropiemos de la política. Por fortuna ese individuo republicano está luchando activamente para buscar un cambio muy signi-ficativo frente a todas las corrientes apáticas o incrédulas que se mueven bajo la desconfianza y el distanciamiento de lo que se considera nocivo, perverso y corrupto. Según estos “hombres de bien”, que son quienes no se quieren involucrar en la política, esa apatía es lo que nos hace

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dignos. Pero de qué dignidad estamos hablando cuando debemos reivindicar ese derecho básico, inalienable que todos tenemos para actuar políticamente, para incidir en el cambio y en la transformación que permita mejorar las condiciones de la sociedad de la que hacemos parte y me-jorar ese recurso sagrado que es el bien común y hacerlo realmente accesible a la totalidad de nuestra sociedad. Lo que hacemos entonces cuando decidimos alejarnos de la política es cometer el torpe error de dejar en las ma-nos de unos pocos el manejo de los recursos públicos, de los recursos que son de todos pero que no son de nadie como decía el filósofo alemán Heiddegger. En ese sentido lo importante es que reivindiquemos la política que nos la apropiemos, que la practiquemos de forma conscien-te, responsable, protagónica y convencidos de que lo que estamos haciendo tiene un beneficio que no subyace sólo en la dimensión individual sino que se extienda a toda la colectividad, a toda la sociedad.

Ese es el contexto que hace que el tema de la ciudadanía, de la construcción de ciudadanía, se constituya en un reto fundamental para que acabemos con ese sofisma, con ese distractivo que nos hace pensar que nosotros sí tenemos una base ciudadana por el hecho que podemos registrar unas cifras en la participación electoral. Vivimos en un país que ha proclamado una Constitución muy ambiciosa des-de el punto de vista formal, una Constitución de carácter participativo que ha consagrado una serie de mecanismos que van más allá del mero hecho de elegir y ser elegi-dos. Que trasciende la simple democracia electoral, como la llamaba el profesor Giovanni Sartori. Una democracia que hace que el individuo se involucre en una serie de instancias participativas, que interactúe, que practique la alteridad, el reconocimiento al otro, a la diferencia y que sea solidario con los demás, que sea tolerante, que valide ese significado de la participación en forma responsable. En ese orden de ideas, es muy importante que nos apro-piemos de esa retórica, de ese discurso tan lindo que tiene nuestra Carta Magna, y que la hagamos nuestra. Por for-

tuna el gobierno colombiano es reconocido por ser uno de los grandes promotores de la construcción de ciudadanía en el ámbito internacional. Las acciones que se están lle-vando a cabo en la vida política colombiana así lo indican y así se han reconocido por fuera del país. El programa que está promoviendo el Ministerio de Educación Nacio-nal (MEN) conocido como el programa de Competencias Ciudadanas parte de la base de que formar para la ciuda-danía sí es posible, parte de la base de que es necesario establecer unos estándares en habilidades comunicativas, de competencias que permitan que el individuo se exprese de manera oral y escrita en forma clara y sencilla con to-dos los otros seres con los que convive en la cotidianidad. Pero que además que complemente con sus destrezas en matemáticas, en ciencias y demás, una condición de ciu-dadano cabal que le permita ejercer sus derechos y sus deberes en una forma clara y que esto se irrigue en toda la comunidad educativa. Que implique a los estudiantes, a los profesores y a los padres de familia y a los demás miembros de la comunidad educativa como son los em-pleados y los exalumnos.

Este programa también ha tenido un reconocimiento muy importante en el país. Hoy por fortuna ya se contabilizan 35 proyectos metodológicos que responden a este llamado del MEN y a esta iniciativa tan importante. El MEN a través del ICFES acaba de aplicar las pruebas del SABER para medir el conocimiento y la familiaridad de los escolares frente a lo que es la democracia, el régimen democrático, el régimen político imperante en la vida nacional. Y lo que se está demostrando es, que si bien hay una valoración a esta forma de gobierno ideal, a esta forma de gobierno tan difícil de aprehender que es la democracia, que es tan frágil, que está rodeada de tantos y acechada por tantos peligros, los jóvenes colombianos valoran la democracia pero no la conocen a ciencia cierta, no la entienden a cabalidad, no conocen su fundamentación básica. Los elementos valorativos que la soportan, no están insertos en una práctica de interacción social cotidiana que les

A la ponencia y el panel asistieron todos los estudiantes de noveno, décimo y once, además de los padres de familia, exalumnos, profe-sores y empleados que participaron en el ejercicio deliberativo.

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permita conocer en realidad el significado de esos valores y aplicarlos al día a día. No están recibiendo suficiente información. Y este no es un problema ajeno a nuestro querido Anglo Colombiano, es un problema que trascien-de a la totalidad de la estructura del sistema educativo formal y no formal existente en nuestro país y en otros países latinoamericanos. En esa medida el MEN comienza a articular a los practicantes (practitioners) comprometidos con la construcción de la ciudadanía con las estructuras formales que tienen bajo su responsabilidad la práctica y el ejercicio de de las políticas educativas. Las Secretarías de Educación van a conocer a través de un gran portafolio que acaba de publicar el MEN toda esa gama de ofertas disponibles para que ellas alimentadas con la información de las pruebas SABER puedan identificar qué es lo más pertinente para sus propias comunidades educativas e iniciar programas en el corto plazo tendientes a construir más ciudadanos en nuestro país.

Esta no es una preocupación solamente del MEN. El país que se constituye en un modelo, en una inspiración para la comunidad Anglo Colombiana, la Gran Bretaña, se ha caracterizado por ser uno de los países que más ha veni-do impulsado la construcción de ciudadanía. Hace poco llegó a mis manos un documento maravilloso proveniente de una organización que se llama el National College for School Leadership y otra que se llama British Educational Communications and Technology Agency (BECTA). Estas dos organizaciones por llamado del gobierno británico han construido una matriz compuesta por una serie de va-riables que permite medir la vida escolar. Yo quisiera pro-moverla para que se utilice acá en el Colegio, para que se haga un mapeo sistemático del progreso en el desarrollo de la educación ciudadana en cada una de las secciones. Esta matriz permite tener un enfoque holístico, una visión integral de lo que es la educación ciudadana orientada en tres dimensiones principales que son precisamente las que hemos querido proponer al grupo de participantes sobre las que nos van a hacer propuestas, los distinguidos miem-bros del panel que más adelante van a hacer sus presenta-ciones en tres áreas. Nos enorgullece muchísimo registrar la coincidencia que salió del grupo focal que hicimos en el Colegio hace tres semanas, en donde quedó muy claro que las áreas de trabajo para construir un programa de construcción de ciudadanía eran totalmente coincidentes con estas que componen esta matriz a la que me estoy re-firiendo. Estas son: Primero, la ciudadanía en el currículo, es decir en la construcción del pénsum académico que se ofrece en los diversos niveles de educación. En segundo lugar, está lo atinente a la ciudadanía en la comunidad escolar que nosotros lo hemos definido como aquel con-junto de ejercicios prácticos que debe desarrollar el com-pendio de los estamentos de la comunidad Anglo en la

cotidianidad. Es decir, no sólo ustedes estudiantes sino us-tedes cuando se relacionan con sus profesores y ellos con ustedes. Los padres de familia cuando motivan a sus hijos para que se comporten adecuadamente, para hacerles ver que no pueden incurrir en contradicciones en la aplicación de conceptos políticos como la autoridad, la disciplina como el cumplimiento de los deberes. En esa medida, lo que se busca es que toda la comunidad educativa tenga una perspectiva clara en lo atinente al ejercicio práctico de una fundamentación valorativa consecuente con ese sentido central que conlleva la noción de democracia. Ter-cero, la ciudadanía en el entorno circundante a la escuela. Por eso Margarita hablaba en su presentación sobre la sensibilidad que debe tener el alumno del Anglo con su entorno circundante, con la comunidad, con el barrio, con la localidad, con la ciudad, con el país y obviamente con el mundo porque para nadie es un secreto que la pers-pectiva globalizante de la ciudadanía es la meta y lo más importante y es lo que permite articular lo supranacional con la dimensión de lo local, de lo cotidiano, de lo que es nuestro.

Las variables más importantes que contiene esta matriz, las quiero compartir con ustedes rápidamente porque to-can aspectos muy ilustrativos de lo que nosotros podemos pensar para el futuro de nuestro Colegio. Esta matriz está articulando variables como la misión y la visión institucio-nal, las políticas y las prácticas que resultan de un com-promiso por la construcción de ciudadanía por parte de la comunidad del Colegio. Cómo se formula esta visión del Colegio sobre la ciudadanía, cuál es el liderazgo que tienen las directivas del Colegio, no me refiero únicamente al rector si no también el Consejo Directivo y los miembros de Asopanglo. Y claro está, el profesorado se constituye en un insumo fundamental para definir la consecuencia de esta misión y de esta visión con el ejercicio de esta práctica a través de un programa de política y de acción concreta en el fortalecimiento de la ciudadanía. En tercer lugar se habla del desarrollo de la planificación en todo lo que tiene que ver con la práctica ciudadana. También es importante tener en cuenta cuáles son y cómo se expresan los enunciados formales de la política de ciudadanía en el Colegio, cómo es la coherencia que hay entre los mismos, cómo operan entre sí, cómo articulan el preescolar con la primaria y con la secundaria. Luego está lo relacionado con la coordinación de la actividad de construcción de ciudadanía a través de la decisión que puede tomar un colegio de nombrar a un miembro del staff para que co-ordine todas las actividades y el desarrollo del concepto de ciudadanía, una persona que sea creíble, que tenga una calificación profesional suficiente, que sea innovado-ra, y que tenga una capacidad de convocatoria efectiva de la comunidad del Colegio. Luego se toma en cuenta

el proceso de toma de decisiones, cómo ese proceso se basa en un Comité Intersectorial que esté compuesto por estos estamentos de la comunidad del Colegio y pueda efectivamente dinamizar y darle sostenibilidad al proceso de desarrollo de la ciudadanía en el Colegio.

Un segundo bloque de preguntas que contiene esta matriz es lo que tiene que ver con los recursos y el manejo de esa política requerida. Ahí estamos aludiendo a la gama de recursos cualitativos y cuantitativos que es necesario aunar para implementar esta política de ciudadanía: cuál es el uso adecuado, cuál es la equidad en el acceso a esos recursos, cuál es la selección de esos recursos desde una perspectiva de diversidad y de inclusión en la medida en que cada vez la sociedad es más heterogénea, más plural, más diversa, en fin. Luego viene un tercer bloque que habla de enseñanza y aprendizaje, cuáles son los esquemas de trabajo que de-ben desarrollarse para implementar esta política en el co-legio, cómo se configura el esquema de la participación por parte de todos los estamentos en la implementación de ese esquema de trabajo, cómo deben prepararse los profesores para impartir sus clases, no importa que tengan habilidades y destrezas en materias que uno diría poco tienen que ver con ciudadanía. Pero es que la química, la matemática, todas las disciplinas son y necesariamente tienen que estar articuladas con el elemento ciudadano porque al fin y al cabo se trata de actores, de seres huma-nos que tienen una perspectiva de interdependencia y de relacionamiento cívico. También cómo se aplica la ense-ñanza de los enfoques, cuáles son los contenidos, qué tan amplios son y qué tan participativos son.

Luego viene otro conjunto de variables que tienen que ver con la revisión y el seguimiento, es decir el “assesment”. Esto implica revisar la forma en que participan los estu-diantes en el programa, el reconocimiento que se le está haciendo a los logros, cuáles son las fallas y los obstáculos principales que están amenazando, cuáles son las necesi-dades y los recursos necesarios para fortalecer el proceso a futuro, cuál es la inclusión de los temas y los asuntos controvertibles. El Colegio tiene, por fortuna, un maravillo-so sistema de Casas. En esa medida una pregunta válida es cómo hacemos para que en el Inter House Competition se puedan tratar temas sensibles, temas importantes, que nos ayuden a aterrizar asuntos ciudadanos, que nos per-mitan sin tapujos, sin tonterías, enfrentar con responsabili-dad temas atinentes a nuestra condición ciudadana.

Por último está el tema del monitoreo y la evaluación. Se trata de estar evaluando permanentemente el progreso de este programa, de hacerlo incluyente, de involucrar a

todos los estamentos para que ellos se vean autocrática-mente, para que miren el desempeño de su pares y para que establezcan planteamientos constructivos y oportunos que permitan siempre mejorar. Lo que enfatizó Margarita al comienzo de la mañana hay que registrarlo con mucha fuerza, y es tener en cuenta que este es un proceso emi-nentemente constructivo, que es un proceso de cambio, de apertura, de apropiación colectiva

El desarrollo de programas de construcción de ciudadanía en instituciones educativas no se circunscribe única y ex-clusivamente a los esfuerzos que está adelantando el MEN o lo que está haciendo el gobierno de la Gran Bretaña. En la educación superior universitaria en EE.UU. existe un programa fascinante que se conoce como “New Direc-tions in Civil Education”. Está liderado por la Universidad de Pennsylvania; su presidenta emérita viene encausando este proceso. Está apoyado por la Universidad de Brown, la Universidad de Texas y otras escuelas que están em-peñadas en promover la construcción de ciudadanía en sus propios campus universitarios. Estas instituciones están convencidas de que las universidades no pueden seguir fomentando visiones individualistas y competitivas sino son conscientes de que tienen que crear ciudadanos sensibles al entorno. De esta manera sus egresados tendrán una perspectiva responsable y estarán dispuestos a incidir en la transformación del orden social en el desempeño de sus respectivas profesiones.

Finalmente quiero hacer una pequeña alusión a la meto-dología deliberativa que vamos a utilizar a continuación para que los diversos estamentos propongan sus iniciati-vas y las canalicen en una agenda propositiva que busca superar diagnósticos. El Rector una persona que con mu-cha tranquilidad y respeto nos confiesa que cuando vino a Colombia tenía grandes dudas, reconoce que este es un gran país, que está lleno de potencial, que no toca fondo, que no puede agachar su cabeza y resalta la importan-cia de que sean los estudiantes de los colegios públicos y privados, y concretamente los del Anglo Colombiano, los que se constituyan en agentes del cambio. Yo me gradué en este colegio hace muchos años. Mis dos hijos estudia-ron en el Colegio desde kinder hasta 11 y ningún solo día los ví preocupados, miedosos de venir al Colegio. Siempre se levantaron con la sonrisa a flor de boca. Esa experiencia de mi vida es lo que me ha hecho a mí pensar que el mejor regalo que le podemos dar al Colegio en la conmemora-ción de sus 50 años es un ejercicio en donde se reúna a toda la comunidad para que podamos hacer una serie de planteamientos propositivos sobre cómo podemos hacer del Anglo una plataforma para la construcción de ciudadanos.

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2. PANEL: Aportes a la construcción de una

comunidad ciudadana

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El panel “Aportes a la construcción de una comunidad ciu-dadana” tenía como propósito escuchar las opiniones de miembros de los diversos estamentos del Colegio sobre la importancia de la construcción de ciudadanía en el Anglo Colombiano. Además se invitó a los panelistas a presen-tar propuestas en tres áreas pertinentes para desarrollar el tema en la vida escolar: El currículo, la comunidad escolar y el entorno.

A continuación se presentan las intervenciones de los pa-nelistas. Algunas de ellas son transcripciones de la inter-vención original, mientras otras han sido revisadas y edita-das por los autores.

ANA BEJARANO

Estudiante de grado once y representante de los estudian-tes al Consejo Directivo Promoción 2006.

Es hoy el momento para proponer ideas con resonancia en lugar de plantear problemas interminables. Ante todo una parte esencial es la intervención de nuestros padres. Desde el principio de nuestra vida como estudiantes Anglo, no es sólo el deber de esta institución promover la democracia, sino también de nuestros padres. Sin la intervención activa de los padres cualquier intento por parte del Colegio será desperdiciado. Es necesario inculcar estos valores desde pequeños, aprendiendo a respetar, valorar y participar en estos esenciales procesos.

Es necesario plantear un espacio en que los estudiantes podamos conocer realmente nuestro entorno. Es necesa-rio establecer relaciones solidarias y cercanas entre todos los estamentos, ya que una comunidad fragmentada no tiene posibilidad de avanzar. Aunque nadie lo diga tene-mos grandes responsabilidades sociales al ser estudiantes Anglo, pero nos graduamos sin conocer o actuar frente a esta. No hemos entendido que tenemos no solamente responsabilidad frente a una comunidad escolar, sino que ante todo tenemos responsabilidad frente a un país. Es necesario que en los últimos años estos valores sean acen-tuados, por medio de conferencias, ejercicios pero ante todo se debe hacer de una manera proactiva que no se quede en papeles. Es importante promover la preparación de aquellos estudiantes que son elegidos en el Colegio, porque no es suficiente con ganar una mayoría, es esen-cial estar preparados para asumir las responsabilidades al máximo.

Ana Bejarano, en la mesa de panelistas.

Visión panoramica del panel.

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Ann Mason, en la mesa de panelistas.

Hoy más que nunca creo en la necesidad de construir ciudadanía. Para algún día lograr alejarnos de la apatía, del desinterés, de la tristeza efímera y momentánea, de las acciones que consideramos imperdurables pero termi-nan desechando sueños. Hoy antes que nada considero lo importante que puede ser la responsabilidad social, un término que espero, no quede confundido entre palabras sin resonancia. Si algo llegase a cambiar, que seamos no-sotros, sí, el futuro, los soñadores, los impredecibles, pero lamentablemente; los desinteresados. No es un grito de ayuda, es la última oportunidad, donde un documento nos otorga el derecho, pero el sentimiento no se obtiene con facilidad. Aquí, en este punto es más fácil mirar hacia el otro lado, vivir la vida a través de un noticiero, donde el dolor y la pena son superficiales y momentáneos. Es hoy o nunca, donde se explota la burbuja y debemos empa-parnos con el mundo, con la gente; con la realidad. No estamos construyendo una carrera, una hoja de vida, un futuro sin precedentes, hoy construimos seres humanos.

ANN MASON

Madre de familia de dos niñas de tercero de primaria y un niño de quinto de primaria. Phd de Ciencia Política de la Universidad de Yale. Vinculada al Departamento de Cien-cia Política de la Universidad de Los Andes por ocho de los cuales cuatro se desempeñó como directora. Desde enero de 2006 Ann asumió el cargo de Directora Ejecutiva de la Comisión Fulbright.

Como se ha dicho no pretendo hablar en nombre de toda la comunidad de padres de familia sino quiero compartir con ustedes unas reflexiones personales.

Yo creo que el Colegio ha hecho un gran énfasis en un elemento de la ciudadanía y la democracia que son los derechos: los derechos de los estudiantes, qué quiere decir tener derechos y en los currículos que he visto, el estudio de los derechos como un elemento básico de la democracia. Esta noción de la ciudadanía basada en los derechos se conforma en la revolución francesa cuando por primera vez en la historia se reconocen los derechos de los ciudadanos frente al estado, frente a la monarquía, frente a la aristocracia. En ese sentido el papel de los de-rechos ciudadanos en la democracia es fundamental. La democracia moderna está construida sobre esta base. Este modelo liberal se basa en los derechos legales y políticos de participar en el proceso democrático, los derechos cívi-cos asociados con la libertad de expresión y hoy en día se habla mucho de los derechos humanos.

Yo creo que todo esto está bien y que el Anglo Colombia-no ha hecho un trabajo muy importante sobre el recono-cimiento de este aspecto de la ciudadanía. Sin embargo, creo que nos hemos olvidado del otro aspecto crucial de la teoría de la ciudadanía que son los deberes y las obli-gaciones. Nuestros hijos tienen que aprender que no sólo tienen derechos en este mundo, sino que como miembros de sus familias, de su colegio, de sus equipos deportivos, de sus comunidades y de su país, también tienen deberes y obligaciones. Según esta teoría republicana de la demo-cracia, un individuo es un ciudadano no en virtud del ejer-cicio de sus derechos, sino en virtud del cumplimiento de sus deberes políticos y cívicos y de su participación activa en la vida pública. Porque es aquí en estos espacios públi-cos donde los ciudadanos aprenden la tolerancia, el res-peto, la responsabilidad, la convivencia, la moderación, el civismo y el espíritu público que son fundamentales para construir una comunidad de bien, sea a nivel del colegio o del país. Considero que es de suma importancia que el Anglo dedique esfuerzos a la formación de ciudadanos, pero según esta visión de la ciudadanía. Como madre de familia quiero que el colegio me ayude a formar hijos que piensen primero en sus responsabilidades y obligaciones con sus amigos, sus vecinos y el mundo y no siempre en sus derechos particulares e individuales.

Estas son mis propuestas concretas:

1. Propongo que se repiense la misión fundamental del Colegio. “Happy Minds, Open Minds, Brilliant Minds” sue-na muy bien. En principio nadie se opone a ella. Pero es un slogan que simboliza la prioridad que se da al logro de metas individuales, no a la construcción de ciudadanía en una comunidad. Creo que deben ser otros valores y princi-pios los que deberían guiar a nuestros hijos en el Colegio, que conlleven a la formación de un profundo sentido del

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deber frente al grupo. El conocimiento, el descubrimiento, los logros, la excelencia académica, sí claro, pero siempre para el bien de la sociedad. Que tengan algún efecto mul-tiplicador dentro de la sociedad.

2. También propongo diseñar un código de honor o un código de conducta que establezca las expectativas mí-nimas en cuanto al comportamiento, el tratamiento a los demás y el cumplimiento con los principios del Colegio por parte de todos los alumnos. Este código puede tomar la forma de un contrato muy simple entre cada estudiante de bachillerato y el Colegio, en el cual cada uno hace un compromiso explícito de aceptar las reglas, no sólo frente a la honestidad académica y al fair play en las aulas y en sus actividades deportivas, sino también en cuanto a su comportamiento individual como ciudadano del Colegio. De hecho este código podría formar parte del currículo de ECL. El código no sólo debería establecer las reglas de conducta sino también las consecuencias al incumplir, consecuencias que se aplicarían a todos los alumnos por igual. No soy idealista pensando que esto sería suficiente para acabar con el maltrato, la agresión y el abuso en-tre los estudiantes o inclusive hacia otros miembros de la comunidad, pero sí creo que podría ofrecer al Colegio una nueva herramienta para establecer un común deno-minador ético entre todos sus miembros, para enseñar las normas del colegio y los principios que también son el eje central de la ciudadanía.

3. Ampliar los programas deportivos y las actividades ex-tra curriculares. Hay pocos espacios, en mi opinión, más aptos para el desarrollo de un concepto del bien del gru-po, de la colectividad y de la participación que un equipo deportivo. Desafortunadamente yo creo que el record del Colegio es lamentable en este aspecto. Para dar sólo un ejemplo muy personal, después que el Colegio acabó con el equipo de Hockey hace un año, mi hijo que participó en este equipo pasó a un equipo de fútbol, pero a la mi-tad del semestre pasado lo echaron por ser demasiado grande para un grupo pero al mismo tiempo por ser muy joven para participar en el otro. Para mí es muy desafor-tunado que estudiantes del Colegio no tengan un espacio para integrarse a un equipo deportivo. Y yo creo que eso es una oportunidad desperdiciada para crear un sentido de pertenencia de los estudiantes y sus familias. Esto no quiere decir que hay que salir a formar nuevos equipos de UNCOLI. Talvez se podría pensar en organizar equipos deportivos por casas que participen en juegos amistosos después del Colegio.

4. Por último, propongo una reforma curricular con el fin de fortalecer en la educación los temas de ciudadanía, de-mocracia y responsabilidad social. Yo creo que el Colegio

no ha aprovechado la coyuntura colombiana para crear conciencia sobre el deber fundamental de participar en el proceso democrático con el voto. Consulté de manera informal con algunos de ustedes y me sorprendió que las próximas elecciones hasta ahora no han sido estudiadas con algún rigor o profundidad en las clases de sociales y ECL. Yo creo que hay mucho que se puede hacer. Orga-nizar debates sobre las plataformas de los candidatos a la presidencia y al congreso, discutir los temas más impor-tantes en las elecciones, analizar las implicaciones para la democracia y el país de los distintos resultados y también buscar formas de dar instrucciones sobre qué deben hacer ustedes para poder votar. Me imagino que algo como la mitad de los estudiantes que se van a graduar este año ya van a poder votar.

Seguramente hay muchas otras propuestas para la for-mación ciudadana en el Colegio, estas son sólo algunas ideas un punto de partida para abrir un espacio en el cual yo creo que los padres de familia conjuntamente con el Colegio pueden buscar la transformación de nuestros hijos y de todos ustedes en ciudadanos reales.

ADRIANA POSADA

Exalumna de la Promoción 1989, politóloga de la Uni-versidad de los Andes. Actualmente Gerente del Plan de Ordenamiento Territorial del Plan de Desarrollo Distrital del Departamento de Planeación Distrital.

Buenos días para todos y todas. Yo también quiero agra-decer el que me hayan invitado, no sólo porque pasé un poco más de la tercera parte de mi vida en este Colegio, sino también porque no sabía cuanto me encarretaba este

Adriana Posada, en la mesa de panelistas.

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tema hasta que me senté a tratar de escribir unas pocas líneas al respecto. En síntesis, creo que si yo tuviera la res-ponsabilidad de ofrecer herramientas para vivir en comu-nidad, para que un grupo de personas se pudieran con-vertir en buenos ciudadanos, yo me ocuparía de esta tarea en dos campos: uno en la democracia y otro en el campo del pensamiento, que es lo que quiero explicarles ahora.

Desde la perspectiva de la democracia, primero tengo que decir que entiendo la democracia como una cosmovisión, es decir como una forma de sentir, de pensar y de actuar. En ese sentido estoy sacando a la democracia un poco de la esfera del sistema político y la estoy poniendo en otras esferas como la de la cultura, la de la sociedad y la de la moral incluso. Ese concepto de la democracia tiene como cinco pilares claves: auto fundación, incertidumbre, com-plejidad, construcción de lo público y norte ético. Entiendo por auto fundación el formar personas con la disposición y la capacidad para construir y respetar un orden social; ello implica que cada uno de nosotros se sienta parte de un todo y como tal se sienta corresponsable de su cons-trucción, de su ajuste y de su respeto. Cuando hablo de in-certidumbre me refiero a la capacidad de construir con los insumos de que disponemos, de contextualizar y de reac-cionar frente a la contingencia. Ello implica que debemos considerar los diversos elementos, ponerlos en perspectiva y prever. Entender que la sociedad funciona como un siste-ma y que necesita que las estructuras que lo fundamentan sean lo suficientemente estables para garantizar el orden social pero también lo suficientemente flexibles para man-tenerse en un proceso continúo de auto ajuste y hacerse sostenible en el largo plazo. La complejidad habla de la capacidad de valorar la heterogeneidad y de construir a partir de la diferencia, no para ser políticamente correctos, sino para hacer realmente un esfuerzo por entender, ma-nejar y expresar la complejidad en cada acto de nuestras vidas. Por su parte, la construcción de lo público, busca formar personas que tengan la capacidad de valorar y dar prioridad a lo público sobre lo colectivo, darle prioridad a lo que nos es común a todos, de entender que lo pú-blico es el pegamento de ese orden social que debemos construir entre todos, y que en ese marco, los ciudadanos democráticos se ocupan de la dimensión tangible tanto como de la dimensión intangible de lo público, es decir, se ocupan del estado, de la cultura, de la ley pero tam-bién de los parques, del patrimonio cultural, del patrimo-nio arquitectónico, entre otros. Cuando hago referencia al norte ético lo que quiero decir es que tenemos que formar personas con capacidad para asumir la obligación que tenemos cada uno de nosotros de garantizar la vida digna para todos, incluso para aquellos que están por fuera del orden social que establecemos. En ese marco, para ejem-plificar, la pena de muerte no tiene sentido. De lo que se

trata, es de lograr que cada una de nuestras acciones en lo individual y en lo colectivo dignifiquen nuestra vida y la de los demás.

En síntesis creo que las competencias ciudadanas están asociadas a esas capacidades que he descrito. Es decir, un ciudadano democrático es aquel que está en capaci-dad de poner su ser al servicio de la participación y de la construcción colectiva, de auto regularse, de aprovechar su creatividad para innovar y proponer formas distintas de pensar y hacer las cosas, de planear y reconocer la nece-sidad y la virtud del auto ajuste, de hacer el transito de la tolerancia a la comprensión, de darle primacía al interés público sobre el particular, y de garantizar que sus accio-nes públicas y privadas dignifiquen la vida de todos, aún de aquellos con los que no está de acuerdo. Ahora creo que cada una de ellas por separado no basta. Precisamen-te el reto consiste en que necesitamos la conjunción de esas cinco o más competencias para ser verdaderamente democráticos.

Pero aún así creo que con eso no bastaría. Ahí es donde entro al otro campo que yo he denominado el campo del pensamiento porque creo que también tenemos que ser capaces de formar personas con una estructura mental sólida. Porque si la cosmovisión democrática es el fin, la estructura mental es el medio que tenemos para lograrlo. Cuando hablo de una estructura mental sólida hablo de formar personas con criterio, con capacidad de discernir, de categorizar, de hacer síntesis, de crear horizontes y de construir caminos que conduzcan a ellos.

Cuando estaba preguntándome ¿y entonces esto cómo se hace? Vino a mi memoria el Alcalde Antanas Mockus, de quien soy discípula desde varios puntos de vista, y él diría que esto se alcanza si logramos armonizar ley, moral y cultura. Lo que se trata es que esos tres sistemas de valores logren sintonizarse cuando debemos tomar una decisión, es decir actuar como uno solo. Les pongo un ejemplo : la pena de muerte en algunos contextos. La ley nos dice una cosa, está permitida la pena de muerte por ejemplo en Estados Unidos. La moral, si somos católicos, nos puede indicar que eso no está permitido, no matarás. Y la cul-tura puede de alguna manera ser flexible frente a ciertas agresiones a la vida y no parecerle tan terrible la pena de muerte. Lo que yo creo es que si logramos que estos tres sistemas se armonicen y logramos que las decisiones y las acciones que desarrollamos en el ejercicio de las compe-tencias ciudadanas se vean permeadas por esta armonía, vamos a lograr constituirnos realmente en ciudadanos de-mocráticos y poder decir orgullosamente que vivimos en una democracia. Y creo que esto no sólo aplica a nivel de la nación sino de igual manera para nuestra vida en

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comunidad, en nuestra familia, en el colegio, en la iglesia, en todos los espacios. La democracia yo la veo ante todo, como un prisma a través del cual tenemos todos la obliga-ción de educarnos los unos a los otros.

RUSBEL MARTÍNEZ RODRÍGUEZ

Subdirector del Departamento de Humanidades de Ba-chillerato y profesor de filosofía del Colegio durante siete años. Licenciado de Ciencias Sociales de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, con maestría en filo-sofía de la Pontificia Universidad Javeriana y candidato a doctorado en filosofía de la misma universidad.

En el marco de la celebración de los cincuenta años de nuestro Colegio, se desarrolló un valioso ejercicio delibe-rativo en el cual tuve la oportunidad de participar como organizador, panelista y deliberante. Debo confesar que la experiencia fue formidable y que sentí una gran emo-ción por la acogida que el evento tuvo entre padres, exa-lumnos, profesores, estudiantes, miembros de la adminis-tración y trabajadores. Cada uno, desde su perspectiva, aportó interesantes puntos de vista y experiencias acerca de lo que ha sido y debería ser la construcción de ciu-dadanía y la responsabilidad social de las generaciones que estamos formando. Pero el motivo del presente escrito no es exponer ni valorar la participación de los diferentes estamentos en el ejercicio. Antes bien, lo que me lleva a escribir es precisar algunas de las consideraciones que como panelista expuse en tan solo cinco minutos, y que como es de suponer, quedaron abordadas de forma exa-geradamente escueta.

Entrando al asunto, en realidad era el profesor Jason Ward quien debía exponer como panelista algunas considera-ciones sobre la práctica democrática en el colegio y sobre nuestra responsabilidad que, como docentes, tenemos en la formación de ciudadanos socialmente responsables. In-fortunadamente no se encontraba en esos días en el país, por lo que me correspondió el honor de ocupar su lugar. En un comienzo pensé que podría hablar en nombre de los docentes, pero pronto comprendí que en realidad solo podía hablar en nombre propio y, en algunos casos, en nombre del Departamento de Humanidades, pues ha sido al interior de éste que se han gestado algunos procesos tendientes a constituir un proyecto de democracia para el Anglo. En efecto, este trabajo que hemos venido realizan-do desde hace ya varios años, y que nos ha permitido consolidar algunos procesos democráticos en el Colegio, constituyó el punto de partida para la reflexión que hoy presento. En ese sentido, como se aprecia, no son sola-

mente ideas mías, sino que han emergido de varias dis-cusiones y charlas que hemos tenido en el Departamento. Ahora bien, por la limitación del presente escrito, lo que sigue será solamente un esbozo general, y no el reflejo de la complejidad de lo que pedagógica y disciplinariamente se ha debatido.

Desde un enfoque general, lo que hemos buscado con la promoción de un proyecto de democracia para el Colegio es aportar a la construcción y consolidación de una cultura democrática, a través de la formación de ciudadanos res-ponsables, solidarios y comprometidos con los procesos sociales y culturales de transformación. Sin embargo, el proceso se encuentra todavía en una fase embrionaria, por lo que es preciso darle una nueva dinámica a través de actitudes y acciones propositivas. En ese sentido, plantea-mos aquí lo que deberían ser los dos ejes que sustentarían dicho proyecto y que, en algún sentido, se relacionan con los postulados teóricos de Platón y Aristóteles, aclarando que no se postula aquí que estos dos filósofos griegos sean partidarios de los modelos democráticos, sino que sus perspectivas teóricas se entrelazan con las nuestras en lo concerniente a las dimensiones teórica y práctica de la vida de los seres humanos.

Mesa de panelistas: Rusbel Martínez representando a los profesores, Adriana Posada (exalumnos), Ann Mason (padres de familia), Gabriel Murillo (moderador), Ana Bejarano (estudiantes) y Flaminio Castellanos (empleados).

Tomando a Platón, para quien la vida moral de los seres humanos estaba relacionada con una dimensión episte-mológica, podríamos decir que las prácticas democráticas se relacionan con el conocimiento, es decir que en lo que se refiere a la consolidación de una cultura democrática existe una instancia cognoscitiva, de suerte que vivir la de-mocracia implica conocer y comprender las instituciones democráticas, así como el sentido mismo de las prácticas. Esto implica la necesidad de pensar contextos educativos por medio de los cuales profesores, padres, estudiantes, directivos, trabajadores, etc., conozcan y se apropien de los aspectos teóricos y conceptuales propios del andamia-je democrático en general, y de las especificidades propias de la democracia en Colombia, representadas en prácti-cas, instituciones, modos de ser y mecanismos de partici-pación ciudadana. Se hace, pues, urgente diseñar estos contextos que, a nuestro modo de ver, pueden resultar en asignaturas de clase, conferencias, talleres, foros, deba-tes, paneles, entre otros, en los que participe la comunidad educativa en general, y que tenga por objeto difundir los conocimientos democráticos que se consideran relevantes.

En el caso de Aristóteles, la vida moral de los seres huma-nos estaba relacionada con una dimensión eminentemente práctica, por lo que es preciso formamos en ejercicios de-mocráticos cotidianos, a partir de los cuales se consoliden las virtudes propias de la democracia. Desde la perspecti-va de la filósofa española, Victoria Camps, éstas pueden ser la responsabilidad, la tolerancia, la profesionalidad, entre otras. En ese sentido, la propuesta iría enfocada a construir ambientes de aprendizaje en los que la comuni-dad se vaya apropiando de los modos de ser que le resul-tan propios a una cultura democrática. Ello sobre la base de que el espíritu democrático se adquiere en el ejercicio recurrente de acciones libres y autónomas, a través de las cuales se forma el carácter ciudadano. Definir las prácticas y los contextos resulta, pues, una tarea prioritaria. Dicho esto, queda por pensar la estructura operativa de todo el andamiaje. Para nosotros en el Departamento de Humanidades es claro que la tarea de pensar la democra-cia en el Colegio no puede (ni debe) recaer en tal o cual profesor o departamento. La democracia (cultura demo-crática, práctica democrática) es una construcción colec-tiva en la que deben participar todos los estamentos que componen la comunidad educativa. En ese sentido, debe emerger de ejercicios deliberativos, consensos y acuerdos sobre lo fundamental. Sea esta, pues, la oportunidad para invitar a todos los miembros de nuestra comunidad a par-ticipar en este proceso.

FLAMINIO CASTELLANOS

Empleado del Colegio por más de 30 años y actualmente jefe de Recursos y Mantenimiento.

Yo quiero compartir algunas ideas a ver si con ellas aporto algo a esta reflexión. Todo funciona bajo la ley inmutable de causa y efecto. El tiempo no es más que la distancia en-tre la causa y el efecto de nuestras acciones. Hoy estamos aquí como resultado, como efecto de decisiones que se to-maron hace 50 años sobre este Colegio. El Colegio nació haciendo énfasis en formar jóvenes con firmeza de carácter para ser líderes. Luego en formar ciudadanos competentes para el mundo que es lo que estamos haciendo hoy en día. Pero además para el futuro el Colegio deberá hacer mucho énfasis en formar seres humanos con conciencia y compromiso social que se manifiesta en trabajo real. Pero compromiso y conciencia real, de comunidad, de país, de ciudad, de región y también global.

Debemos sintonizar el efecto mariposa, que dice que aún el aleteo de una mariposa aquí tendrá repercusiones en China o en África. ¿Eso qué quiere decir? Quiere decir que todos somos responsables de todos. El mundo se glo-balizó y esto es una realidad que es ya y es ahora.

Me gusta mucho el postulado del Bachillerato Internacio-nal que dice mente abierta y conciencia social. Pero otra vez conciencia social real, trabajo de verdad que pase por lo político y lo económico, y no limitar a asociar concien-cia social con caridad social.

El futuro depende de lo que hagamos nosotros hoy y aho-ra. Los que nos reemplacen tendrán la misma responsabi-lidad pero esa será la de ellos. La nuestra es hoy así como la que tuvieron hace cincuenta años los que fundaron el Colegio. Esa es mi reflexión. Todo es causa y efecto de nuestras acciones.

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3. EJERCICIO TALLER DELIBERATIVO: Construyendo Ciudadanía y Democracia en el Anglo

El momento central del Ejercicio Taller Deliberativo fue precisamente el espacio de deliberación que se le ofreció a la comunidad para reflexionar conjuntamente.

La deliberación consiste en una práctica colectiva y plural en la cual se accede a una visión consensuada para la transformación de una situación institucional compartida por todos. Se propuso adelantar la deliberación bajo la metodología jigsaw la cual tiene como objetivo ofrecer es-pacios alternativos de deliberación donde los participantes pueden poner en perspectiva sus propios puntos de vista, previo a la formulación de propuestas. En esta medida se adelantó una primera etapa donde se discutió en grupos heterogéneos que contaban con representantes de los di-versos estamentos de la comunidad y una segunda parte donde cada estamento reflexionó de manera particular.

En las inscripciones al evento, a cada asistente se le dio el número de la mesa en la cual iba a participar en la prime-ra etapa. Cada mesa debía establecer un moderador que estaba encargado de dar la palabra asegurándose que todas las personas participaran y que velaba porque el espíritu de trabajo fuera propositivo, incluyente, positivo y reflexivo. Esta sesión de trabajo tuvo una duración de una hora. La pregunta central de discusión fue ¿cuál es la im-portancia de la construcción de ciudadanía en el Anglo?

En la segunda parte cada estamento trabajó por separado du-rante una hora y tenía como objetivo formular un conjunto de propuestas a partir de las siguientes dimensiones de análisis:

• Curricular. Propuestas relacionadas con contenidos de cursos, pro-gramas, pensum, entre otros.• Comunidad Anglo. Propuestas relacionadas con la vida escolar y con todo lo referente a las interacciones, las normas, los valores y los principios. • Entorno. Propuestas relacionadas con la relación del Colegio con su entorno circundante.

El trabajo de las mesas fue acompañado por Luisa Suárez, Jorge Delgado y Carolina Hernández, exalumnos del Co-legio y estudiantes de ciencia política de la Universidad de Los Andes. Ellos actuaron como facilitadores de las discu-siones velando por guardar el espíritu del Ejercicio.

Los asistentes del Ejercicio Taller Deliberativo fueron con-vocados a través de los medios de comunicación tradi-cionales del Colegio. A los padres de familia se les envió una circular, a los exalumnos un correo electrónico, a los estudiantes de noveno, décimo y once se les invitó en una asamblea, a los empleados en una reunión general y a los profesores a través de comunicados de las direcciones de cada sección e invitaciones personalizadas. En total se inscribieron 150 personas de las cuales participaron 100. A pesar de la disminución en la asistencia de exalumnos y padres de familia, la cifra de inscritos refleja el interés y la importancia del tema entre la comunidad escolar.

21Primera Etapa del Ejercicio: Deliberación por mesas con participantes de los diversos estamentos de la comunidad escolar

Segunda Etapa del Ejercicio: Deliberación por mesas de cada uno de los estamentos escolares.

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LISTADO DE PARTICIPANTES AL EVENTO:

PADRES DE FAMILIA

Álvaro José ConversEduardo DuránCatalina LlerasAna María PupoJazmín ZaruthGloria Inés ZuluagaCamilo SernaGloria AlzateMyriam RodríguezAlejandra LiévanoBeatriz AparicioSandra CarranzaÁngela María EscobarMargarita GarcíaHugo Hernán Sáenz

EXALUMNOS

María Teresa BalenHilda LaverdeAstrid ÁlvarezJaime TrujilloMiguel SantaellaAdriana PosadaGabriel LlanoPatricia Morales

EMPLEADOS

Flaminio CastellanosMaría Clara ScarpettaConsuelo RodríguezHernando RamírezMaría Clara PosadaMirta KopkeMaría de los Ángeles CamargoAlexandra D’Alleman

ESTUDIANTES

Santiago AlviraDaniel AraujoJuan David BetancurAlfredo BonillaLaura CamargoDaniel CanalJulián CastilloSilvia CastroZulma CuadrosCarlos CuadrosDavid DucheneClaudia EcheverriMaria Antonia EcheverriEsteban GálvezCarolina GarcíaAgustín GodoyCarolina JaramilloMaría Fernanda La RotaJuan Pablo LasernaJuliana LondoñoPaloma MarínSilvia MartínezManuel MogollónJoaquín MosqueraMelisa MurciaCamilo ObregónMaría OrtizAlejandro PerdomoNicolás PérezLaura PérezAlejandro PérezLaura PrietoSylvia PrietoMartín RiveraVictoria RiveraNatalia RodríguezJosé Alejandro RojasLina Rosas

María Alejandra SáenzErika SánchezJuliana SteinerGeorge SymingtonSantiago VegaCamilo VélezEugenia WilliamsonBeatriz Wills

PROFESORES

Tom BurtonÁngela ArboledaAna María FonnegraRocía LondoñoSylvia DuránYamileth RodríguezHelvia SaavedraClaudia RodríguezJohn WellsJavier ParraAlastair Kankan María Victoria PalaciosJulián RodríguezAndrés Felipe GarcíaRusbel MartínezJuana Mora

Trabajo de las mesas en diferentes etapas del ejercicio.

4. AGENDA PROPOSITIVA: Sé Ciudadano! Sé Anglo!

Uno de los principales objetivos del Ejercicio Taller Deli-berativo: Construyendo Ciudadanía y Democracia en el Anglo era construir una agenda con propuestas formula-das por los diversos estamentos de la comunidad durante el desarrollo del evento. Estas propuestas surgieron luego del trabajo de deliberación que se desarrolló y fueron pre-sentadas en un plenario por representantes de los diversos estamentos. Al finalizar el plenario los representantes fir-maron un acta de compromiso simbolizando su determi-nación de trabajar por el desarrollo de la ciudadanía y la democracia en el Anglo.

A continuación se presentan las propuestas formuladas para cada una de las dimensiones de análisis planteadas.

DIMENSIÓN 1: CURRÍCULO

ESTUDIANTES• Crear un Comité de Democracia que lidere la fomación en ética y ciudadanía y los procesos de participación en la comunidad.• Organizar foros y conferencias en temas relacionados.

PROFESORES• Articular las nuevas iniciativas con lo que ya existe. • Ofrecer espacios y tiempos para hacer un trabajo vertical desde preescolar hasta bachillerato.• Convocar a la comunidad para la conformación de un comité de democracia.

PADRES Y MADRES DE FAMILIA• Proponer que la formación ciudadana atraviese todos los espacios del Colegio.• Construir ciudadanía con base en el ejemplo y la convivencia.• Revisar los mecanismos de selección de profesores para que no sólo se consideren sus conocimientos sino también su capacidad de liderazgo y de educar.• Capacitar a los profesores en los temas de ciudadanía y democracia.• Poner en práctica los principios de la formación ciudadana presentes en los programas del Bachillerato Internacional: PYP, MYP y IB. • Estructurar un programa de formación ciudadana para padres y profesores.• Incluir a los padres de familia en el trabajo a desarrollar y buscar mecanismos de acción conjunta.• Desarrollar una campaña del Buen Trato.• Incorporar en el currículo no sólo aspectos básicos de formación ciudadana sino también contenidos sobre el entorno

Rusbel Martínez, Andrés Garcés y Javier Parra organizando el papeló-grafo con las propuestas de los profesores.

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Plenario de presentación de propuestas de los estamentos.Papelógrafo con propuestas de los exalumnos.

(la ciudad, el país, la región, el mundo), el estado, el gobierno, el sistema y el régimen político, entre otros. • Formar desde preescolar para elegir y ser elegido.• Unificar y fortalecer la cátedra de historia de Colombia con conocimientos cívicos.

EMPLEADOS• Introducir y aplicar el tema de ciudadanía y democracia en los tres programas.• Asegurar la continuidad en la enseñanza de la ciudadanía y democracia en las tres secciones.

*Los exalumnos no hicieron propuestas concretas sobre este tema por lo cual no se incluyen.

DIMENSIÓN 2: COMUNIDAD ESCOLAR

PROFESORES• Aprovechar las herramientas del gobierno escolar como espacios reales de construcción de ciudadanía. • Revisar los procesos de elección del gobierno escolar.• Organizar de manera periódica ejercicios deliberativos al interior de la comunidad. • Desarrollar el ejercicio de la ciudadanía dentro de la vida escolar.• Asesorar, acompañar y hacer seguimiento a los alumnos con cargos de gobierno.• Formar capacitadores en el tema dentro de la comunidad.• Buscar espacios de encuentro, reflexión y participación entre los diversos estamentos.

PADRES Y MADRES DE FAMILIA• Realizar talleres integrales con diferentes estamentos. • Mejorar los procesos de comunicación entre los diversos estamentos de la comunidad. • Diferenciar la función disciplinaria de PSHE de la función de apoyo a los alumnos.• Contratar un grupo de personas expertas en resolución de conflictos y formación ciudadana.• Promover un curso de liderazgo para estudiantes. • Promover el sentido de pertenencia hacia el Colegio. • Evitar llegar a altos niveles de competitividad entre los alumnos fortaleciendo valores como la solidaridad, el respeto, la tolerancia, entre otros. • Reforzar el sentido del deber de los alumnos y sus responsabilidades con sus padres, sus profesores y el colegio, etc.• Reforzar las actividades culturales y deportivas y utilizarlas como oportunidades para formar en valores y promover el sentido de pertenencia hacia el Colegio. • Revisar el reglamento de elección de gobierno estudiantil.

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EXALUMNOS• Promover la interacción entre los diferentes estamentos de la comunidad escolar a través de la institucionalización del Ejercicio Deliberativo anualmente, la rendición de cuentas y la representatividad de los miembros del Consejo Directivo. • Institucionalizar la “Campaña del Buen Trato”: a) Valor de la justicia, b) Vocabulario, modales, actitudes.• Establecer un programa de Alumnos Padrinos.• Repensar para replantear el Departamento de PSHE.• Establecer “Escuela de Padres”.• Difundir y socializar los diversos órganos del gobierno escolar y sus responsabilidades.• Adelantar una educación basada en deberes y responsabilidades como generadoras de derechos

EMPLEADOS• Fortalecer el sentido de pertenencia en toda la comunidad.• Buscar mecanismos de compromiso y participación de los padres. • Divulgar a todos los estamentos el Manual de Convivencia.• Lograr mayor eficiencia en los espacios de participación estudiantil. • Ser coherentes. Enseñar con el ejemplo. • Promover campañas encaminadas a fortalecer los valores del CAC.• Crear un ente interdisciplinario que promueva la ciudadanía y la democracia. • Reorientar la filosofía de PSHE (punitivo vs. Oportunidad de aprendizaje y mejoramiento)

ESTUDIANTES• Promover un programa de convivencia y buen trato, encaminado aq desarrollar una actitud cívica al interior de la comunidad. • Promover la cooperación y la solidaridad por encima de la competencia.• Promover la rendición de cuentas de las personas elegidas.• Promover el fair play.• Socializar las iniciativas de los cargos de elección de todos los estamentos.• Usar mejor los medios de comunicación para promover una actividad participativa entre los estudiantes. • Adelantar una veeduría de las personas elegidas y socialización de sus programas e iniciativas en curso integrado

María Alejandra Sáenz designada por los estudiantes a firmar el acta de compromiso.

Mirtha de Kopke, representante de los empleados firmando el acta de compromiso. La acompañan en la mesa Yamileth Rodríguez, represent-ante de los profesores; María Clara Scarpetta, jefe del Departamento de Recursos Humanos; Gloria Alzate, representante de los padres de familia; y María Alejandra Sáenz, representante de los estudiantes.

María Clara Scarpetta, jefe del departamento de Recursos Humanos presentando las propuestas de los empleados.

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DIMENSIÓN 3: ENTORNO DEL COLEGIO

PROFESORES• Invitar expertos sobre temas de coyuntura nacional e internacional.• Ampliar vínculos de comunicación con otras IE con experiencia en este tema.• Participar de manera decidida en el desarrollo de soluciones efectivas a necesidades sociales.

PADRES Y MADRES DE FAMILIAEstructurar un programa de responsabilidad social para desarrollar en una comunidad específica.• Implementar un programa de educación en participación ciudadana y liderazgo.

EXALUMNOS• Reformar CAS para generar conciencia social y no asistencialismo.

EMPLEADOS• Fortalecer el programa de CAS (Cumplimiento de Horas vs. Conciencia y Responsabilidad Social)• Crear espacios intercolegiados para el debate y la generación de propuestas.• Fortalecer FASAC en el currículo y reorientar su filosofía hacia una mayor conciencia social.

ESTUDIANTES• Promover actividades CAS que no sean asistencialistas sino que estén enfocadas a ofrecer resultados de desarrollo a la comunidad con que se trabaja.

Gloria Alzate presentando propuestas de los padres de familia.

5. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

El desarrollo del Ejercicio Taller Deliberativo: Construyendo Ciudadanía y Democracia en el Anglo deja una serie de conclusiones valiosas para la comunidad Anglo Colom-biana y ofrece un espacio para plantear recomendaciones pertinentes para el desarrollo del tema en el Colegio. A continuación se presentan unas conclusiones generales de la realización del Ejercicio, las principales coincidencias de los estamentos en las propuestas que conforman la Agen-da Propositiva y algunas recomendaciones del comité or-ganizador del Ejercicio Taller.

En primer lugar la realización del evento, la asistencia de 100 miembros de la comunidad Anglo Colombiana y las intervenciones de los panelistas reflejan el interés de la comunidad por el tema y la importancia que reconocen que esto tiene para el Colegio. Aunque la asistencia no fue masiva, el entusiasmo de los asistentes y su participación activa son también una muestra del valor que encuentran tiene el tema para la comunidad escolar. Los diversos par-ticipantes convergieron en la necesidad de comprometerse en el desarrollo de una plataforma escolar de construcción de ciudadanía y democracia. Tanto los panelistas como los participantes del ejercicio de deliberación resaltaron la necesidad de desarrollar un proyecto de construcción ciu-dadana que permita articular temas de importancia para la comunidad como la convivencia, el servicio social, la gobernabilidad escolar, la promoción del sentido de per-tenencia, la disciplina y la integración de la comunidad, entre otros.

A continuación se van a señalar algunas de las coinciden-cias en las propuestas presentadas.

A nivel curricular coincidieron en la necesidad de confor-mar un Comité de Democracia que esté encargado de gestionar el diseño y el desarrollo del proyecto de educa-ción para la ciudadanía y la democracia del Colegio y que esté conformado por representantes de los diversos esta-mentos de la comunidad. A su vez proponen articular este proyecto con el trabajo que ya viene desarrollando cada una de las secciones (preescolar, primaria y bachillerato) y con los contenidos de los programas y los cursos del Ba-chillerato Internacional (PYP, MYP y Diploma IB). Sugieren que la formación no se debe limitar a los espacios curricu-lares sino que se deben diseñar actividades extracurricula-res en el tema, no sólo para estudiantes sino también para los demás estamentos.

A nivel de la comunidad varias de las propuestas se reali-zaron en torno al gobierno escolar. Sobre su elección se-ñalan la necesidad de revisar los reglamentos que contie-nen los diversos procesos de elección y socializar de una manera más efectiva los espacios de participación y las iniciativas y propuestas de las personas que se postulan para los cargos. Varios estamentos señalan la necesidad de promover una cultura de rendición de cuentas y de veeduría para los diversos órganos de participación. De manera particular, se expuso la necesidad de asesorar y acompañar a los estudiantes elegidos y hacerle un segui-miento a su trabajo a lo largo del año escolar para lograr mayores resultados. A nivel pedagógico proponen apro-vechar el gobierno escolar como una herramienta de for-mación para los estudiantes, en temas como, por ejemplo, las responsabilidades de elegir y ser elegidos. Igualmente proponen que esto se haga con las instituciones propias del Colegio como los capitanes de casas, los prefects, los representantes de FASAC, los miembros de VentanAbierta, entre otros.

Otro de los temas mencionados por varios de los estamen-tos es analizar la necesidad de un replanteamiento del De-partamento de PSHE a nivel de sus funciones disciplinarias.

A nivel de la convivencia se identifican propuestas en la línea de prevenir y tratar los casos de bullying (manoteo), desarrollar una campaña del Buen Trato y/o un progra-ma de convivencia y ampliar la divulgación del Manual de Convivencia. Varios estamentos coincidieron también en la necesidad de fortalecer la formación en el sentido del deber y la responsabilidad y su carácter generador de derechos. Otros temas recurrentes son la promoción del sentido de pertenencia hacia el Colegio y los valores institucionales apoyándose en las actividades deportivas y culturales, la disminución de los niveles de competitividad entre los estudiantes, la creación de espacios de encuen-tro, participación y reflexión de los diferentes estamentos del Colegio, el aumento en la participación de los padres de familia en espacios como la Escuela de Padres y el mejoramiento en las comunicaciones entre la comunidad Anglo Colombiana.

A nivel del entorno se identifican posiciones similares frente a FASAC, CAS y la relación con otros colegios. Se propone revisar el enfoque pedagógico de CAS para promover el desarrollo de un sentido de responsabilidad social y bus-

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car mayores alternativas de integración y aprovechamiento pedagógico de FASAC en la vida escolar y la formación ciudadana de los estudiantes. Por otro lado se considera valioso conocer experiencias de programas de construc-ción de ciudadanía desarrollados por otros colegios y bus-car espacios de intercambio y reflexión sobre el tema con otras instituciones educativas.

Vale la pena resaltar que la mayoría de los estamentos coincidieron en proponer la realización anual de ejercicios de deliberación que permitan la reflexión en conjunto. Esto refleja la necesidad que perciben los diversos estamentos de la comunidad de retroalimentarse los unos a los otros y construir reflexiones y propuestas de manera conjunta.

En general las propuestas planteadas son sencillas y re-quieren una mayor reflexión teórica y práctica para que pasen del papel a la vida escolar. Sin embargo, permiten identificar espacios de reflexión y de acción inmediatos. Además reflejan los esfuerzos que se han venido desarro-llando en la comunidad Anglo Colombiana y que necesi-tan articularse bajo un marco conceptual y teórico que se nutra de las reflexiones adelantadas por el Colegio y las propuestas por la normatividad colombiana y la organiza-ción del Bachillerato Internacional.

A la luz de las propuestas de los estamentos y las anteriores conclusiones se presentan las siguientes recomendaciones para el proceso en desarrrollo.

Es importante que el Colegio defina a través de un pro-ceso participativo los mecanismos y los criterios para la elección del Comité de Democracia y que además estos queden consignados en un reglamento que forme parte del Manual de Convivencia. Este reglamento también de-berá incluir su misión, objetivos y funciones garantizando así su institucionalización en la vida escolar.

El trabajo de este Comité será clave para continuar la sen-sibilización y la movilización de los diversos estamentos frente al tema, para conocer experiencias de otros cole-gios, para crear espacios para la reflexión nutriéndose del marco filosófico del Colegio, del PEI y de la filosofía del Bachillerato Internacional, para proponer las estrategias e iniciativas que le darán vida a los planteamientos del pro-yecto y para identificar y articular lo existente con lo nuevo.

A nivel del desarrollo del proyecto de ciudadanía en el Anglo es importante buscar un equilibrio entre un enfoque en las competencias y un enfoque en el conocimiento teó-rico y conceptual. Aunque la definición de competencias ciudadanas dada por el Ministerio de Educación Nacional incluye una dimensión cognitiva es importante no quedar-

se en proponer prácticas ciudadanas vacías sin generar espacios de discusión teórica. Así como la construcción de ciudadanía no puede limitarse a los contenidos en los cur-sos de ECL, tampoco se puede caer en el extremo opuesto, es decir, en una formación que excluya la reflexión teórica y crítica.

De igual manera este proyecto deberá articularse con el marco filosófico del Colegio para garantizar su institucio-nalización como un elemento estratégico del Anglo Co-lombiano. Además de esto el principal reto es lograr que los valores y principios ciudadanos sean parte fundamen-tal de la cultura institucional del Anglo. En esta medida el objetivo es lograr que parte fundamental del ser Anglo sea ser buen ciudadano.

V. ACTA DE COMPROMISO

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Como resultado del Ejercicio Taller Deliberativo: Construyendo Ciudadanía y Demo-cracia en el Anglo nos comprometemos como miembros de la comunidad anglo co-lombiana a liderar un proceso que lleve al desarrollo de un proyecto de ciudadanía y democracia para el Colegio.

María Alejandra SáenzEstudiante Promoción 2006. Representante de los estudiantes.

Yamileth Rodríguez.Profesora Español Bachillerato y Jefe PSHE Quinto Grado. Representante de los profesores.

Mirtha de KopkeGerente de FASAC (2006). Representante de los empleados.

Gloria AlzateRepresentante de los padres de familia.

María Teresa BalenRepresentante de los exalumnos.

6. BIBLIOGRAFIA Y SITIOS DE INTERÉS

EN INTERNET

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“Deliberación y Construcción de Ciudadanía una Apuesta a la Progresión Democrática a Comienzos del Nuevo Milenio”.Murillo Castaño, Gabriel y Pizano Rojas, Lariza. Universidad de los Andes, Facultad de Ciencias Sociales, Departamento de Ciencia Política. Con el Auspicio de la Fundación Kettering. Bogotá, abril de 2003.

“Public Deliberation and Economic Development. Ten Experiences of Community Decision Making in Latin America”.Murillo Castaño, Gabriel; Pizano Rojas, Lariza y Casas, Carolina (Compilers). Interamerican Foundation, Washington D.C. Usa, february 2005.

“Redefinición del Espacio Público”. Eslabonamiento Conceptual y Seguimiento de las Políticas Públicas en Colombia. Murillo, Gabriel y Victoria, Gómez (Compiladores). Universidad de los Andes, Facultad de Ciencias Sociales, Departamento de Ciencia Política. Bogotá, agosto de 2005.

“Competencias Ciudadanas y Construcción de Ciudadanía Juvenil”. en: Revista del Clad Reforma y Democracia No. 37, Murillo Castaño, Gabriel y Natalia Castañeda Aponte.

Quince Experiencias para Aprender Ciudadanía y Una Máshttp://www.fundacionexe.org.co/wps/portal/!ut/p/.cmd/cs/.ce/7_0_a/.s/7_0_5ra/_th/j_0_s5/_s.7_ 0_a/7_0_5od/_s.7_0_a/7_0_5ra

Este libro recoge 16 crónicas realizadas en otros tantos lugares de Colombia sobre propuestas creativas acerca de cómo enseñar la convivencia, La solidaridad, el bienestar y la construcción de Ciudadanía.

Estándares del Ministerio de Educación Nacional en Competencias Ciudadanas

Citizenship in Key Stage 3 en: http://matrix.becta.org.uk

This matrix has been developed by citizenship consultants at the dfes and enables school leaders to chart progress systematically in developing citizenship education in their own school.

www.colombiaaprende.edu.co

www.fundacionpresencia.com.co

www.civiced.org

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EQUIPO COORDINADORMargarita Maria SáenzRusbel Martínez Rodríguez Jason WardGabriel Murillo

REDACCION Y TRANSCRIPCION DE TEXTOSMargarita Maria Saenz

REVISION DE TEXTOS Margarita Maria SaenzRusbel Martínez Rodríguez Jason WardGabriel Murillo

DISEÑO, DIAGRAMACION E IMPRESIONAndrea Castñeda Rocha Idea Lab