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CÓMO APRENDEN LOS MAESTROS. UNA
MIRADA DESDE LA FORMACIÓN DOCENTE
Alma Guadalupe Góngora magaña [email protected]
Genny Magaly Chulín Kantún [email protected]
María Gabriela Gutiérrez Cervera [email protected]
Escuela Normal de Educación preescolar
RESUMEN
La presente ponencia tiene como
propósito presentar el avance de un estudio
más amplio que tiene por título: Relación entre
los estilos de aprendizaje y los niveles de
creatividad de los futuros docentes de la
educación básica de la ciudad de Mérida,
Yucatán. El estudio se desarrolla en la Escuela
Normal de Educación Preescolar de Mérida,
Yucatán y se fundamenta en un estudio cuasi
experimental de tipo pre-post tratamiento con
base en dos tipos de cuestionarios uno para
maestros y otro para alumnos, pero ambos
elaborados con base a la adecuación del
Modelo de Cuadrantes Cerebrales de Ned
Herrmann. Para el desarrollo del estudio se
consideraron cuatro fases, pero esta ponencia
se delimita a la primera, la cual se trata de un
diagnóstico con el que se pretende conocer los
estilos de aprendizaje y de enseñanza de los
118 alumnos que cursan el quinto semestre, en
las licenciaturas que ofrece la Escuela Normal
de Educación Preescolar de Mérida, Yucatán
(Inicial, preescolar, y preescolar intercultural
bilingüe). En los primeros hallazgos se puede
observar que predomina el cortical izquierdo en
el estilo de aprendizaje y el límbico izquierdo en
el estilo de enseñanza.
PALABRAS CLAVE: Estilos de aprendizaje, estilos de enseñanza, modelo de cuadrantes, futuro docente.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
El proceso de formación docente que se realiza en las escuelas normales supone un
constructo complejo para los diferentes actores del sistema educativo, sobre todo porque, en
la actualidad, la educación plantea a los docentes la necesidad de adaptar el currículo con
enfoque universitario utilizado en su formación, a los requerimientos educativos de los
alumnos de la educación básica. Relacionado con lo anterior, a esta situación se le suman
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los constantes comentarios que los alumnos realizan a su regreso de los periodos de
observación y práctica docente, cuando aseguran que: “esos niños no aprenden, “más del
50% tiene problemas de aprendizaje” “nada quieren hacer” “no terminan la tarea, “no traen
sus materiales”, “no se pueden sentar y poner atención un rato” “sólo algunos entienden las
instrucciones o hacen bien la tarea” “parece que siempre tienen sueño”
Todas estas afirmaciones dan cuenta del total desconocimiento, por parte de los
futuros docentes, de los estilos o formas de aprender y de la importancia que tiene la
problemática. Es necesario aclarar, que las anteriores aseveraciones no sólo se reflejan en
la práctica escolar, sino que también afectan el desarrollo de las competencias de los otros
cursos de la malla curricular, porque les resulta difícil distinguir no sólo las posibilidades de
aprendizaje de sus alumnos sino también las propias. En este sentido, se parte de la idea de
que los estudiantes analizan y estructuran la información de diferentes maneras para
desarrollar las competencias profesionales y genéricas de su profesión, pero el
desconocimiento de sus propios procesos les dificulta la posibilidad de asumir la
responsabilidad de su aprendizaje y ajustarlo a las nuevas necesidades y al perfil que se
requiere para garantizar que la educación que reciban los niños y jóvenes cumpla con los
requisitos de proporcionar “los aprendizajes y conocimientos significativos, relevantes y útiles
para la vida, independientemente del entorno socioeconómico, origen étnico o género, como
se enuncia en el Plan y programas de educación básica” (SEP 2017:19). (Aprendizajes clave
para la educación integral)
Se aboga por introducir desde la formación docente una de las estrategias que resulta
crucial en la educación básica, esto es, que el aprendiz sea consciente de su proceso de
“aprender a aprender” así como de aprender a enseñar, porque al egresar como docente le
corresponderá la tarea de "enseñar a aprender". Entonces, cabe preguntar ¿los docentes
saben cómo aprenden? Y complementariamente ¿saben cómo enseñan? Ante estas
cuestiones un equipo de docentes de las escuelas normales de Yucatán se reunió para tratar
de dar respuestas a estas cuestiones y para analizar algunas teorías que tratan de explicar
este proceso.
MARCO TEÓRICO
El concepto estilo de aprendizaje no es común para todos los autores y es definido de
forma muy variada en las distintas investigaciones (Aragón García & Jiménez Galán, 2009;
Castro & Guzmán, 2005; Cazau, 2003). En el ámbito de la docencia que se realiza en las
escuelas normales, se concibe como las estrategias que utiliza el alumno para desarrollar
mejor sus habilidades y procesar la información que recibe, ya sea en las aulas de la escuela
normal o en sus actividades de observación y práctica docente. Aunque las estrategias varían
según lo que se pretende aprender, la experiencia docente conduce a pensar que los alumnos
en las escuelas normales tienden a desarrollar ciertas preferencias o tendencias que definen
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su estilo de aprendizaje y con ello su estilo de enseñanza. Utilizan diferentes estrategias y
aprenden con diferentes ritmos, incluso, aunque tengan las mismas motivaciones, la misma
edad, estén en el mismo salón o pertenezcan a la misma comunidad. Por ello, requieren tener
claro cómo aprende y qué hacer para facilitar el aprendizaje de sus alumnos.
Varios autores coinciden con la idea de que no existe una sola forma de aprender,
porque cada persona tiene una forma o estilo particular de establecer su relación con el
mundo y por lo tanto para aprender o enseñar (Castro & Guzmán, 2005) y (Aragón García &
Jiménez Galán, 2009).
En otras palabras, cada alumno presenta características muy diferentes en la forma de
aprender, es decir, posee un estilo de aprendizaje particular que le ayuda a interiorizar, de
forma simple y permanente, el conocimiento nuevo, haciéndolo significativo (Gardner, 2001).
Con respecto a este enfoque, a continuación, se presentan algunos conceptos que, desde la
teoría cognitiva, se aproximan a una conceptualización de las distintas formas de aprender
Una primera aproximación al concepto de estilos de aprendizaje, conduce a pensar
que son relativamente estables, aunque pueden cambiar y ser diferentes de acuerdo a la
situación y a las tareas que el alumno debe realizar. Por lo tanto, son susceptibles de
mejorarse; y cuando a los alumnos se les enseña según su propio estilo de aprendizaje
aprenden con mayor efectividad, (Camarero Suárez, Martín del Buey, & Herrero Diez, 2000),
(Cazau, 2003) y (Rivas, 2008).
En este sentido, si nos adentramos más en el campo de estudio de los estilos de
aprendizaje, veremos que existe una amplia bibliografía que lo aborda, tanto en su estructura
conceptual como en su aplicación. Así, para (Castro & Guzmán, 2005), un estilo de
aprendizaje va más allá de simples habilidades, enfatiza que se basa en características
biológicas, emocionales, sociológicas, fisiológicas y psicológicas. En particular, los rasgos
afectivos se vinculan con las motivaciones y expectativas que influyen en el aprendizaje,
mientras que los rasgos fisiológicos están relacionados con el biotipo y el biorritmo particular
del estudiante (Cazau, 2003).
Por otra parte, Rivas (2008), relaciona los estilos de aprendizaje con el funcionamiento
cerebral y asegura que la especie humana posee un cerebro inmaduro al nacer, esta
característica le provee de una gran plasticidad que posibilita el modelado de estructuras y
funciones del sistema nervioso a lo largo de la vida, y capacita al ser humano para adquirir
conocimientos durante un largo período de tiempo.
Al parecer, la plasticidad del cerebro, mencionada por el autor, sirve para adaptarnos
a las diversas circunstancias que debemos enfrentar a lo largo de la vida, lo cual se hace
posible debido a la capacidad de modificación estructural y funcional del cerebro, a partir de
los conocimientos y experiencias vividas. Todo esto parece confirmar que la adaptación al
medio, que incrementa la probabilidad de la supervivencia como especie, es más eficaz si
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somos capaces de extraer información veraz y útil. Para ello, lo ideal es que los mecanismos
receptores y los sistemas perceptuales funcionen correctamente.
Cazau (2003), clasifica las diferentes teorías sobre estilos de aprendizaje a partir de
tres criterios, el primero es la selección de la información (estilos visual, auditivo y
kinestésico), el segundo, lo denomina procesamiento de la información (estilos lógico y
holístico), y el tercero, forma de empleo de la información (estilos activo, reflexivo, teórico y
pragmático). Ejemplifica la vinculación de estos tres procesos, de acuerdo a la teoría cognitiva
con la manera en que se obtiene la información sensorialmente, lo cual influye en la forma de
organizarla o procesarla. También menciona de manera somera otros dos modelos, el que se
relaciona con el tipo de inteligencia de acuerdo a la concepción de inteligencias múltiples de
Gardner, y el de dominancia cerebral de acuerdo al modelo Herrmann (cuadrantes cortical
izquierdo y derecho, y límbico izquierdo y derecho). Es en éste último en el que se concentrará
el análisis del presente estudio.
Modelo de cuadrantes cerebrales
En general, los distintos modelos y teorías existentes sobre estilos de aprendizaje nos
ofrecen un marco conceptual que nos ayuda a entender las acciones que realizan los alumnos
en el salón de clases y cómo se relacionan con la forma en que están aprendiendo. Asimismo,
el tipo de acciones que pueden resultar más eficientes en un momento dado, pero en el que
nos interesa profundizar es en el modelo de cuadrantes de Ned Herrmann.
Según Cazau (2003), la teoría del cerebro total de Ned Herrmann, se expresa en un
modelo que integra la neocorteza con el sistema Límbico. Se trata de una totalidad orgánica
dividida en cuatro áreas o cuadrantes. A partir de esta división se pretende un estudio más
amplio y completo de la operatividad del cerebro y sus implicaciones para el aprendizaje y la
enseñanza en los futuros docentes para la educación básica.
En el modelo del cerebro total, el cuadrante A es el lóbulo superior izquierdo y se
especializa en el pensamiento lógico, cualitativo, analítico, crítico, matemático y basado en
hechos concretos. El Cuadrante B es el lóbulo inferior izquierdo y se caracteriza por un estilo
de pensamiento secuencial, organizado, planificado, detallado y controlado. El Cuadrante C
es el lóbulo inferior derecho, se caracteriza por un estilo de pensamiento emocional, sensorial,
humanístico, interpersonal, musical, simbólico y espiritual. El Cuadrante D es el lóbulo
superior derecho y se destaca por su estilo de pensamiento conceptual, Holistico, integrador,
global, sintético, creativo, artístico, espacial, visual y metafórico. Estas cuatro áreas se
recombinan y forman cuatro nuevas formas de pensamiento: A-B del hemisferio izquierdo con
pensamiento realista y del sentido común. C-D del hemisferio derecho idealista y kinéstico.
A-D pragmático. B-C instintivo y visceral que incluye el sistema Límbico.
En los estilos de aprendizaje de Ned Herrmann, se habla de preferencias en el uso y
desarrollo de los cuadrantes cerebrales. Dichas preferencias influyen en la forma en la que
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los alumnos realizan todas sus acciones, es decir, en la forma de relacionarse, analizar la
información, resolver los problemas y tomar decisiones en torno a las tareas que debe realizar
tanto en el salón de clases cómo en la práctica que realiza en el jardín de niños.
Los alumnos de las escuelas normales requieren reconocer el proceso que se sigue
para el desarrollo de actitudes y capacidades para pensar; ya sea en formas básicas como
discriminar o memorizar, o complejas como la de resolver los problemas de la práctica
docente. Razón por la cual, el profesor de cualquier nivel, visto como uno de los factores clave
para el aprovechamiento escolar del estudiante y, en consecuencia, para el logro de una
educación de calidad, requiere tomar en cuenta los estilos de aprendizaje como los
constructos que todos tenemos, los cuales afectan la forma de aprender y de enseñar, al
momento de planificar, ejecutar y evaluar las clases, (Castro & Guzmán, 2005).
Finalmente, los modelos existentes sobre estilos de aprendizaje ofrecen un marco
conceptual para entender los comportamientos observados en el aula, los cuales brindan una
explicación sobre la relación de esos comportamientos con la forma en que están aprendiendo
los alumnos y el tipo de estrategias de enseñanza que pueden resultar más eficaces en un
momento determinado, ya sea por el contendido temático en sí, o bien por las diversas
interacciones sociales que se desarrollan en el aula. Asimismo, son útiles para que los
alumnos comprendan cuáles son las mejores estrategias de aprendizaje que les conviene
seguir para que su rendimiento sea óptimo, (Aragón García & Jiménez Galán, 2009).
METODOLOGÍA
En el presente estudio se utilizó algunas técnicas cuantitativas, porque permiten una
aproximación mucho más exacta y al mismo tiempo más crítica del tema que se investiga.
Por lo tanto, el análisis de los datos se realizó desde un enfoque cuantitativo de tipo
descriptivo, siendo que en este primer estudio sólo se necesita conocer los estilos de
aprendizaje de los alumnos del quinto semestre de la generación 2016-2020 y su relación con
los estilos de enseñanza que tienden a adoptar en su práctica profesional.
Para la realización del estudio se solicitó el consentimiento informado de los
participantes del estudio. Después con los resultados obtenidos del pretest, el procesamiento
de resultados se realizó a partir del programa estadístico SPSS en su versión 18.0, aplicando
estadística descriptiva a través de tablas de y gráficas de barras.
Instrumento
Para la recolección de la información se utilizó el instrumento (DGB, 2004) elaborado
por Pablo Cazau (2005) el cual es una adaptación de Chalvin (2003), que tiene como objetivo
de identificar cuál es el estilo personal para aprender de los estudiantes, basado en el modelo
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cuadrantes cerebrales propuesto por Ned Herrmann en 1989. La aplicación del instrumento
se realizó durante la primera semana de clases en el semestre que inició en agosto de 2010.
El instrumento fue aplicado en forma grupal y presencial en un lapso de 50 a 60
minutos durante las horas de clases de los profesores que forman parte del equipo de esta
investigación. Para iniciar, se destinó veinte minutos para la explicación del modelo de
cuadrantes cerebrales y la forma en que se interpreta, para esto se utilizó una presentación
en power point. Después se aplicó el pretest con él, de manera personal, los alumnos
analizaron sus resultados a través de un esquema que les fue previamente entregado.
DESARROLLO, DISCUSIÓN Y RESULTADOS
Durante el primer año de vida nuestro cerebro duplica su peso y es hasta los siete años
cuando alcanza su tamaño adulto (Orlando Olaso & Launay, 2004), lo que incide en la
importancia de la formación de docentes que sean conscientes de su estilo de aprendizaje y
enseñanza para que sepa que debe aprender para promover la estimulación de los niños
durante sus primeros años de vida con el fin de aumentar sus posibilidades cerebrales,
hacerlos más inteligentes, creativos y que sean capaces de trabajar mejor así como de retener
la información necesaria. Todo esto es un viejo sueño de la humanidad, pero este sueño sólo
se puede hacer realidad en la medida en que los docentes comprendan como funciona su
cerebro y el de sus alumnos.
El funcionamiento cerebral tiene que ver con la dominancia o preferencia que
demuestran los alumnos al realizar las tareas o para entender y expresar algo. De ahí, que
se le llame también, “modos preferidos de conocimiento”, porque es la estrategia que utilizan
con mayor probabilidad al enfrentarse con la necesidad de resolver un problema o seleccionar
una experiencia de aprendizaje.
La selección de estrategias para resolver un problema, según Rojas, Salas, & Jiménez
(2006), está en función de cómo se utilice el cerebro, sí se realiza con el lado izquierdo (o
hemisferio lógico), se orientará hacia los detalles, las partes y los procesos del lenguaje y el
análisis lineal, pero si se realiza con el lado derecho (o hemisferio gestáltico), se concentrará
en las imágenes, ritmo, emoción e intuición, para sintetizarlo dentro de un sentido intuitivo del
todo.
El análisis de los resultados se realizó con el fin de determinar el grado de preferencia
que los futuros docentes le asignan a cada uno de los cuadrantes para determinar su estilo
de enseñanza y de aprendizaje.
El estudio es censal, porque se realizó a todos los alumnos que cursan el quinto
semestre en la Escuela Normal de Educación Preescolar. Para ello, fueron encuestados un
total de 118 alumnos, 77 Licenciados en Educación Preescolar secciones A y B (29.7% y 27.1
7
% respectivamente), 26 Licenciados en Educación Preescolar Intercultural Bilingüe (22%) y
25 Licenciados en Educación Inicial (21.2%), siendo un total de 118 encuestados.
Para determinar la dominancia o preferencia que demuestran los alumnos en relación
a sus estilos de aprendizaje y enseñanza el procesamiento de los datos se realizó tomando
como base la escala de medición propuesta en el propio instrumento, donde un puntaje
superior a 66 indica una alta preferencia por un estilo en específico, un puntaje entre 33 y 66,
preferencia media y un puntaje menor a 33 indica escasa preferencia.
Figura 1. Estilos de aprendizaje
En la gráfica 1, se puede observar que pocos alumnos tienen preferencia por el límbico
izquierdo, pero casi 90 alumnos tienen alta preferencia en el uso del cortical izquierdo para
guiar su propio aprendizaje. Siguiendo a Celis Guzmán, Sánchez Soto, Martínez Reyes,
Soberanes Martín, & Juárez Landin, (2014), podemos caracterizar a estos alumnos como fríos
y distantes, utilizan pocos gestos y una voz muy elaborada. Son intelectualmente brillantes y
cuentan con la capacidad necesaria para evaluar y criticar. Asimismo, tienden a la ironía,
competitividad e individualismo, entre los procesos cognitivos que desarrollan destacan el
análisis, razonamiento, lógica, rigor y claridad; así como una clara preferencia por los
modelos, teorías y la palabra precisa. Las competencias que poseen son la abstracción,
matemática, cuantitativa, finanzas, técnica y resolución de problemas.
0
10
20
30
40
50
60
70
80
90
100
Cortical izquierdo Límbico izquierdo Limbico derecho Cortical derecho
niv
el d
e p
refe
ren
cia
Título del eje
Escasa Moderada Alta
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Figura 2. Estilos de enseñanza
En la gráfica 2 se puede observar que más de 90 alumnos consideran tener alta
preferencia por el uso del límbico izquierdo en su estilo de enseñanza. Según Celis Guzmán,
Sánchez Soto, Martínez Reyes, Soberanes Martín, & Juárez Landin (2014), esto significa que,
como docentes algunas veces se caracterizan como introvertidos o emotivos y otras como
controlados, minuciosos, maniáticos y con especial gusto por los monólogos y las formulas.
Asimismo, tienden a ser conservadores y a defender su territorio, vinculan la experiencia y el
amor al poder. En cuanto a los procesos cognitivos que desarrollan se encuentran la
planificación, formalización, estructura y definición de procedimientos. Además de ser
secuenciales, verificadores, ritualistas y metódicos; las competencias que poseen son la
administración, el sentido de organización, la realización y puesta en marcha de
planeaciones, organización de eventos y trabajar de manera comprometida con sus alumnos.
Conviene subrayar que el dominio de un cuadrante nunca es bueno o malo. No hay
malas o buenas preferencias, lo que si hay son preferencias menos adaptadas a la situación.
Se debe agregar que, el perfil de preferencias cerebrales no mide la competencia o
inteligencia de una persona. Es decir, los alumnos con mayor preferencia del cortical
izquierdo, como se observan en la tabla 1, pueden muy bien resolver un problema
matemático, lo cual no significa que sea de su agrado (Celis Guzmán, Sánchez Soto, Martínez
Reyes, Soberanes Martín, & Juárez Landin, 2014).
0
20
40
60
80
100
120
Cortical izquierdo Límbico izquierdo Limbico derecho Cortical derecho
Escasa Moderada Alta
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Tabla 1: Estilo de aprendizaje según el modelo de preferencias cerebrales
Preferencias cerebrales Grupo y Sección
5°A 5°B 5°LEI 5°LEPIB Total
CD 6 7 1 1 15
CI 16 14 12 19 61
CI_CD 0 3 0 1 4
CI_CD_LD 2 0 0 0 2
CI_LD 1 0 0 0 1
CI_LI 1 0 3 2 6
LD 3 4 2 0 9
LD_CD 0 0 2 0 2
LI 6 1 4 3 14
LI_CD 0 2 0 0 2
LI_LD 0 1 1 0 2
Total 35 32 25 26 118
En la tabla 1 se puede observar que predomina el cortical izquierdo en las tres
licenciaturas analizadas, pero en mayor medida en los alumnos de la Licenciatura en
Educación Preescolar Intercultural Bilingüe. En cuanto a la combinación de los cuadrantes es
posible observar que se manifiestan con muy poca frecuencia en las tres licenciaturas.
Tabla 2 Estilos de enseñanza según el modelo de preferencias cerebrales
Dominancias Grupo y Sección Total
cerebrales 3°A 3°B 3°LEI 3°LEPIB
CD 4 5 1 1 7
CD_LD 1 0 0 0 1
CI 2 1 1 3 7
CI_CD 0 3 0 0 3
CI_LD 0 0 0 2 2
CI_LD_CD 1 0 0 0 1
CI_LI 0 0 1 0 1
CI_LI_LD 1 0 0 0 1
LD 22 20 19 11 72
LD_CD 1 1 0 0 2
LD_LI 0 0 0 1 1
LI 2 1 2 6 11
LI_LD 1 1 1 2 5
LI_LD_CD 1 0 0 0 1
35 32 25 26 118
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En la tabla 2 se puede apreciar que predomina el límbico derecho, lo cual significa
según Celis Guzmán, Sánchez Soto, Martínez Reyes, Soberanes Martín, & Juárez Landin
(2014) que predomina en las tres licenciaturas un estilo docente extrovertido, emotivo,
espontáneo, gesticulador, lúdico, hablador, espiritual, que reacciona mal ante las críticas. En
cuanto a los procesos cognitivos que desarrollan se encuentran la integración mediante la
experiencia; se mueven por el principio del placer; demuestran fuerte implicación afectiva;
trabajan con base en sentimientos; escuchan y preguntan y sienten la necesidad de compartir,
vivir en armonía y evaluar los comportamientos. Las competencias que posee son la
relacional, contacto humano, el diálogo, la enseñanza, trabajo en equipo y expresión oral y
escrita.
CONCLUSIONES
La adquisición del conocimiento, mediante aprendizaje significativo, puede ser
mejorada a partir de que los docentes reconozcan sus propios estilos tanto de aprendizaje
como de enseñanza, porque sólo se puede mejorar lo que se conoce.
La predominancia del Cortical Izquierdo en los estilos de aprendizaje es ideal para el
tipo de estudios que llevan a cabo los estudiantes de las escuelas normales, pues gracias a
ello pueden ser competentes en materias de abstracción, y resolución de problemas, temas
que están muy relacionados con las competencias que se requieren en la gestión escolar.
Al observar las puntuaciones en los estilos para la enseñanza por licenciatura se pudo
observar que los futuros docentes utilizan el cuadrante Límbico Izquierdo de manera
predominante con una frecuencia de 22 para el 5º A, 20 para el 5º B, 19 para LEI y 11 para
LEPIB, lo cual significa que las características contextuales que hacen la diferencia en cada
una de las licenciaturas no influye de manera relevante.
Finalmente, los modelos de estilos de aprendizaje que presentamos en esta ponencia
aportan información útil, porque además de que los futuros docentes reconocieron sus estilos
de aprendizaje y enseñanza, los formadores de docentes podrán identificar cómo sus
estudiantes adquieren nuevos conocimientos lo que les permitirá diseñar estrategias para
potenciar las habilidades de cada estudiante dentro y fuera del aula. En ocasiones, es posible
que los educadores no observen o escuchen los mensajes que los alumnos le están enviando,
pero cuando los alumnos son conscientes de sus estilos de aprendizaje pueden sugerir de
manera clara a sus maestros las actividades que los hagan desarrollar sus capacidades.
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