El humor sana, rompe barreras, y es un tremendo aporte para la comunicación básica.

Sonriamos y aprendamos a iluminar nuestra enseñanza de las escrituras.

La risa es un ejercicio terapéutico que despeja la cabeza y el corazón y despierta un gran interés.

El humor permite un contacto instantáneo con la

audiencia. Una simple historia divertida puede

lograr más que un mensaje y provee una excelente e

instantánea

retroalimentación al orador.

El riesgo del humor… Que mal chiste…

Que nadie se ría de tu chiste… y se estropee

tu mensaje.

Tips para usar el humor

Sé natural

Si eres serio, un humor satírico.

Tener sentido del humor no es lo mismo que ser comediantes (o entretenedores de jóvenes).

Aguas con las introducciones a las bromas

(les voy a contar algo chistoso, ahí les va un chiste muy bueno…)

Usemos historias graciosas para ilustrar un punto, no para entretener, entonces, si la audiencia se ría o no, la historia ha servido de algo.

Nunca permitamos que el humor endurezca el mensaje

No burlarnos

Evitar el humor cruel

Reírnos a expensas de otros

Volvernos adictos a las risas y dejar de lado el mensaje de Cristo.

EL HUMOR ES SÓLO UNA HERRAMIENTA PODEROSA QUE NOS ABRA LAS PUERTAS

PARA COMUNICAR ESTE MENSAJE.

Busquemos historias graciosas en el mundo que nos rodea

Descubramos qué es lo que hace a una idea divertida Los tres principales aspectos del humor son:

Sorpresa

Verdad

Exageración

La próxima vez que escuchemos una historia graciosa, disfrutémosla y luego preguntémonos

qué fue lo que nos hizo reír, cuando lo identifiquemos, estamos listos para crear ideas

graciosas.

Darle vida a los personajes de la historia bíblica

Usar versiones bíblicas actuales

La Biblia no está muerta, pero nosotros podríamos mostrarla así ante nuestros jóvenes si nos acercamos a ella de forma insensible , religiosa y pesada

Evitemos la tentación de espiritualizarlo todo

Proveamos aplicaciones de las verdades bíblicas

Jonny gzz

Paco Palafox