cifras 2012

CIFRAS SOBRE LA SITUACIÓN DE

MUJERES Y HOMBRES EN EUSKADI

2012

Noviembre 2012

Raquel Royo Prieto (dir.) Iratxe Arístegui Fradua

Maite Aurrekoetxea Casaús Ester Escudero Espinalt

Alberto Estefanía Hurtado Aranzazu Núñez Alcaide

ÍNDICE

INTRODUCCIÓN 5

1. ANÁLISIS DEMOGRÁFICO 7

1.1. Datos generales de la población 7

1.2. Nupcialidad 22

1.3. Natalidad 31

1.4. Mortalidad 37

2. ACCESO Y CONTROL DE LOS RECURSOS ECONÓMICOS 40

2.1. Trabajo productivo 40

2.1.1. Datos generales: tasas de actividad, tasas de ocupación, tasas de paro 40

2.1.2. Población activa ocupada: condiciones de trabajo 49

2.2. Autonomía económica 61

3. ACCESO Y CONTROL DE LOS RECURSOS SOCIALES 68

3.1. Educación 68

3.2. Salud 78

3.2.1. Estado de salud: autopercepción 78

3.2.2. Utilización de los recursos médicos 81

3.2.3. Indicadores de hospitalización 84

3.2.4. Riesgos en la salud y hábitos saludables 91

3.2.5. Salud reproductiva y toma de decisiones 100

3.3. Servicios Sociales 106

3.4. Accesibilidad y consumo de otros recursos: transporte, Internet, actividades culturales 110

4. PARTICIPACIÓN SOCIOPOLÍTICA E INFLUENCIA 116

4.1. Participación en las instituciones públicas 116

4.2. Participación en otros órganos de influencia 122

5. ORGANIZACIÓN SOCIAL CORRESPONSABLE 130

5.1. Corresponsabilidad y nuevos usos del tiempo 131

5.2. Conciliación corresponsable 147

6. VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES 154

6.1. Mujeres víctimas de la violencia de género: incidencia y características 155

6.2. Consecuencias de la violencia contra las mujeres 165

6.3. Percepción, creencias y mitos sobre la violencia contra las mujeres 167

INTRODUCCIÓN

El informe Cifras sobre la situación de las mujeres y los hombres en Euskadi se elabora con

una periodicidad anual con el objetivo de describir la realidad de mujeres y hombres en las

distintas esferas sociales, económicas y políticas de la sociedad vasca. Su realización

responde al cumplimiento de las disposiciones legales recogidas el artículo 4 de la Ley

2/1988 de 5 de febrero, de creación del Instituto Vasco de la Mujer, y en la Ley 4/2005, de

18 de febrero, para la Igualdad de Mujeres y Hombres, ya que los datos que contiene

permiten obtener un mayor conocimiento sobre los roles, las condiciones, las necesidades y,

en definitiva, el posicionamiento de mujeres y hombres en los distintos ámbitos de

intervención.

La finalidad fundamental de este informe es poner a disposición de la Administración Pública

un conjunto de indicadores sobre la situación de mujeres y hombres en Euskadi, de forma

que la descripción de las desigualdades de género aún latentes en nuestra sociedad

favorezca el diseño y planificación de programas públicos orientados a su eliminación. Pero

además, conscientes de que la construcción de la igualdad es una tarea que atañe a la

sociedad en su conjunto, este informe quiere servir para fomentar la sensibilización de los

diversos agentes sociales, económicos y educativos con relación a la equidad de género,

así como contribuir a las acciones que desarrollen en dicha dirección.

En la línea iniciada por la publicación Cifras sobre la situación de las mujeres y los hombres

en Euskadi 2010, el año del título del presente informe no hace referencia al periodo que se

diagnostica, sino a aquel en el que se elabora la recopilación, recogiendo así los últimos

datos disponibles en 2012. La presentación de dichos datos sobre la situación de mujeres y

hombres en la CAE conjuga el sistema de indicadores habitual (sobre población, educación,

trabajo, salud, inclusión social, participación o violencia) con la organización por áreas de las

medidas recogidas en el V Plan para la Igualdad de Mujeres y Hombres para la IX

Legislatura aprobado en junio de 2010. De esta forma, el informe se estructura en los seis

siguientes apartados: Análisis demográfico, Acceso y control de los recursos económicos,

Acceso y control de los recursos sociales, Participación sociopolítica e influencia,

Organización social corresponsable y, por último, Violencia contra las mujeres.

La metodología de este estudio se basa en el análisis de fuentes secundarias de carácter

cuantitativo, que ofrecen una información extrapolable sobre la situación de mujeres y

Cifras sobre la situación de mujeres y hombres en E uskadi 2012 6

hombres en los distintos ámbitos que componen la realidad socioeconómica de la sociedad

vasca. En particular, se ha recurrido a organismos autonómicos, estatales y europeos

especializados en la elaboración de estadísticas, como el Instituto de Estadística del

Euskadi (EUSTAT) o el Instituto Nacional de Estadística (INE), así como a estudios en

profundidad de temáticas concretas elaborados por diferentes departamentos

gubernamentales.

Entendiendo la importancia de mantener una perspectiva comparativa y evolutiva de la

situación de mujeres y hombres en Euskadi, se ha preservado, en la medida de lo posible, el

sistema de indicadores utilizado en ediciones anteriores, aunque incorporando nuevos

indicadores en función de su especial relevancia en cada área.

1. ANÁLISIS DEMOGRÁFICO

1.1. Datos generales de la población

La población de la Comunidad Autónoma de Euskadi se compone, según datos

correspondientes a 2011, de un total de 2.184.606 personas. Bizkaia es el Territorio

Histórico más poblado, con un número de habitantes que asciende a 1.155.772 personas,

frente a 319.227 en Álava y 709.607 en Gipuzkoa.

Tabla 1.1. Población según territorio histórico por sexo. CAE, 2011

Mujeres Hombres

Total abs. Abs. % Abs. %

Araba/Álava 319.227 160.186 50,2 159.041 49,8 Gipuzkoa 709.607 361.954 51,0 347.653 49,0 Bizkaia 1.155.772 595.594 51,5 560.178 48,5 CAE 2.184.606 1.117.734 51,2 1.066.872 48,8

Fuente: INE. Padrón Municipal.

En el conjunto de Euskadi residen 1.117.734 mujeres, lo que supone un 51,2% del total,

frente a un 48,8% de hombres. Esta tendencia se observa en los tres territorios históricos,

que guardan un cierto equilibrio en la composición por sexo de sus poblaciones.

Tabla 1.2. Evolución de la población según sexo. CAE, 1998-2011

Mujeres Hombres


2011 2.184.606 1.117.734 51,2 1.066.872 48,8 2010 2.178.339 1.113.631 51,1 1.064.708 48,9 2009 2.172.175 1.109.763 51,1 1.062.412 48,9 2008 2.157.112 1.101.962 51,1 1.055.150 48,9 2007 2.141.860 1.095.065 51,1 1.046.795 48,9 2006 2.133.684 1.089.835 51,1 1.043.849 48,9 2005 2.124.846 1.084.321 51,0 1.040.525 49,0 2004 2.115.279 1.079.416 51,0 1.035.863 49,0 2003 2.112.204 1.077.878 51,0 1.034.326 49,0 2002 2.108.281 1.076.072 51,0 1.032.209 49,0 2001 2.101.478 1.073.086 51,1 1.028.392 48,9 2000 2.098.596 1.071.945 51,1 1.026.651 48,9 1999 2.100.441 1.072.295 51,1 1.028.146 48,9 1998 2.098.628 1.071.713 51,1 1.026.915 48,9



El análisis diacrónico de los datos de la población de la CAE, muestra además que en los

últimos catorce años este peso demográfico de las mujeres y los hombres ha permanecido

relativamente constante, siendo la presencia de ellas ligeramente superior a la de ellos.

No obstante, cabe matizar que la proporción de mujeres en el conjunto de la CAE es

ligeramente inferior a la de los hombres hasta los 45 años y que a partir de esta edad la

tendencia se invierte, de forma que en los segmentos de más edad, mayor es el porcentaje

femenino. Esta distancia de género aumenta a partir de los 65 años –cuando las mujeres

pasan a ser el 52,8% de la población frente al 47,2% de los hombres– y se agudiza en los

tramos de edad superiores. Más de seis de cada diez personas mayores de 80 años son

mujeres (prácticamente siete, desde los 85). Asistimos, por tanto, a una manifiesta

feminización de la ancianidad.

Tabla 1.3. Población clasificada por grupos de edad y sexo. CAE, 2011

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Total 2.184.606 1.117.734 51,2 1.066.872 48,8

0 a 4 105.702 51.426 48,7 54.276 51,3

5 a 9 99.458 48.536 48,8 50.922 51,2

10 a 14 89.194 43.376 48,6 45.818 51,4

15 a 19 86.027 41.320 48,0 44.707 52,0

20 a 24 100.400 49.213 49,0 51.187 51,0

25 a 29 132.460 64.991 49,1 67.469 50,9

30 a 34 173.733 84.263 48,5 89.470 51,5

35 a 39 183.897 89.234 48,5 94.663 51,5

40 a 44 175.675 86.244 49,1 89.431 50,9

45 a 49 173.354 87.338 50,4 86.016 49,6

50 a 54 163.156 82.844 50,8 80.312 49,2

55 a 59 140.825 71.897 51,1 68.928 48,9

60 a 64 133.952 68.827 51,4 65.125 48,6

65 a 69 112.532 59.361 52,8 53.171 47,2

70 a 74 91.263 49.988 54,8 41.275 45,2

75 a 79 94.811 54.159 57,1 40.652 42,9

80 a 84 70.557 43.567 61,7 26.990 38,3

85 a 89 39.621 27.188 68,6 12.433 31,4

90 a 94 13.998 10.684 76,3 3.314 23,7

95 a 99 3.538 2.886 81,6 652 18,4

100 y más 453 392 86,5 61 13,5


En los diferentes territorios históricos también se constata la tendencia que acabamos de

mencionar. Así, tanto en Álava como en Gipuzkoa, el porcentaje de hombres es mayor que


el de las mujeres hasta los 50 años, mientras que en Bizkaia es a partir de los 45 años,

cuando las mujeres pasan a ser mayoría. Por otro lado, mientras la distancia de género en

Gipuzkoa y en Bizkaia aumenta a partir de los 65 años, en Álava existe un mayor equilibrio

hasta los 75 años, edad a partir de la cual en los tres territorios el porcentaje de mujeres

aumenta significativamente.

Tabla 1.4. Población clasificada por grupos de edad, territorio histórico y sexo. CAE, 2011

Araba/Álava Gipuzkoa Bizkaia

Total %M %H Total %M %H Total %M %H

Total 319.227 50,2 49,8 709.607 51,0 49,0 1.155.772 51,5 48,5

0 a 4 16.302 48,4 51,6 36.446 48,9 51,1 52.954 48,6 51,4

5 a 9 14.519 49,0 51,0 34.218 48,8 51,2 50.721 48,7 51,3

10 a 14 13.191 49,3 50,7 30.910 48,4 51,6 45.093 48,6 51,4

15 a 19 12.791 47,7 52,3 28.791 47,9 52,1 44.445 48,2 51,8

20 a 24 15.179 48,7 51,3 32.041 49,1 50,9 53.180 49,0 51,0

25 a 29 21.069 49,1 50,9 41.169 49,0 51,0 70.222 49,1 50,9

30 a 34 27.240 47,6 52,4 55.034 48,8 51,2 91.459 48,6 51,4

35 a 39 28.154 47,6 52,4 59.471 48,1 51,9 96.272 49,1 50,9

40 a 44 26.424 48,6 51,4 56.373 48,8 51,2 92.878 49,5 50,5

45 a 49 25.309 49,9 50,1 55.216 50,1 49,9 92.829 50,7 49,3

50 a 54 23.145 50,6 49,4 51.815 50,2 49,8 88.196 51,1 48,9

55 a 59 20.271 50,5 49,5 45.735 50,9 49,1 74.819 51,3 48,7

60 a 64 19.078 50,3 49,7 44.523 50,9 49,1 70.351 51,9 48,1

65 a 69 15.845 50,5 49,5 37.047 52,6 47,4 59.640 53,4 46,6

70 a 74 12.323 52,0 48,0 29.586 54,0 46,0 49.354 55,9 44,1

75 a 79 12.069 54,3 45,7 29.999 57,4 42,6 52.743 57,6 42,4

80 a 84 8.653 59,6 40,4 22.369 62,6 37,4 39.535 61,7 38,3

85 a 89 5.120 66,5 33,5 12.815 68,8 31,2 21.686 69,0 31,0

90 a 94 1.978 74,2 25,8 4.716 77,2 22,8 7.304 76,3 23,7

95 a 99 492 79,9 20,1 1.183 81,3 18,7 1.863 82,2 17,8

100 y más 75 78,7 21,3 150 87,3 12,7 228 88,6 11,4

Fuente: INE. Padrón Municipal. Nota: %M: porcentaje de mujeres, %H: porcentaje de hombres.

El análisis de la población de las comunidades autónomas del Estado por grupos de edad se

sitúa en la misma línea de lo afirmado para Euskadi. Genéricamente, a partir de los 65 años

la proporción de mujeres supera a la de los hombres en las diversas comunidades y esta

diferencia se acentúa conforme aumenta la edad. Esta tendencia general no impide detectar

ciertas disparidades entre comunidades. Así, en Madrid y Asturias las mujeres representan,

respectivamente, el 54,2 y el 53,3% de la población de 65 a 70 años, frente a comunidades

como Navarra y La Rioja donde dicha proporción se sitúa por debajo del 51%.


Tabla 1.5. Población según CC.AA. clasificada por grupos de edad y sexo. 2011

Total %M %H Total %M %H

Andalucía Aragón

Total 8.424.102 50,5 49,5 Total 1.346.293 50,1 49,9

0 a 4 474.899 48,5 51,5 0 a 4 65.361 48,4 51,6

5 a 9 460.166 48,7 51,3 5 a 9 61.644 48,8 51,2

10 a 14 438.095 48,4 51,6 10 a 14 57.663 48,3 51,7

15 a 19 474.295 48,5 51,5 15 a 19 59.518 48,8 51,2

20 a 24 523.326 48,8 51,2 20 a 24 70.288 49,0 51,0

25 a 29 609.927 49,0 51,0 25 a 29 86.990 47,9 52,1

30 a 34 714.238 48,7 51,3 30 a 34 109.578 47,3 52,7

35 a 39 707.887 49,0 51,0 35 a 39 111.890 47,2 52,8

40 a 44 687.499 49,5 50,5 40 a 44 107.106 47,9 52,1

45 a 49 641.112 50,0 50,0 45 a 49 102.150 48,3 51,7

50 a 54 555.914 50,2 49,8 50 a 54 93.653 49,1 50,9

55 a 59 451.777 50,7 49,3 55 a 59 78.859 50,0 50,0

60 a 64 403.929 51,5 48,5 60 a 64 72.784 50,8 49,2

65 a 69 357.340 52,4 47,6 65 a 69 63.638 51,8 48,2

70 a 74 302.922 54,8 45,2 70 a 74 53.794 53,9 46,1

75 a 79 282.057 57,2 42,8 75 a 79 60.292 55,8 44,2

80 a 84 194.345 61,3 38,7 80 a 84 47.851 59,3 40,7

85 a 89 101.296 66,1 33,9 85 a 89 29.457 63,6 36,4

90 a 94 33.315 71,5 28,5 90 a 94 10.706 71,1 28,9

95 a 99 8.378 75,0 25,0 95 a 99 2.694 75,5 24,5

100 y más 1.385 76,4 23,6 100 y más 377 75,3 24,7

Asturias Baleares

Total 1.081.487 52,1 47,9 Total 1.113.114 49,9 50,1

0 a 4 39.947 49,0 51,0 0 a 4 59.618 48,3 51,7

5 a 9 38.340 48,7 51,3 5 a 9 57.151 48,6 51,4

10 a 14 36.497 48,6 51,4 10 a 14 52.643 48,6 51,4

15 a 19 39.527 48,7 51,3 15 a 19 52.970 48,8 51,2

20 a 24 49.484 49,0 51,0 20 a 24 63.674 50,1 49,9

25 a 29 65.390 49,2 50,8 25 a 29 85.954 49,9 50,1

30 a 34 83.737 49,0 51,0 30 a 34 105.469 48,3 51,7

35 a 39 86.884 49,6 50,4 35 a 39 104.994 47,6 52,4

40 a 44 82.359 49,8 50,2 40 a 44 94.068 48,0 52,0

45 a 49 84.198 50,6 49,4 45 a 49 84.659 48,9 51,1

50 a 54 85.737 51,4 48,6 50 a 54 73.650 49,7 50,3

55 a 59 76.409 51,5 48,5 55 a 59 62.834 50,0 50,0

60 a 64 71.122 52,3 47,7 60 a 64 56.759 50,5 49,5

65 a 69 57.340 53,3 46,7 65 a 69 46.967 51,0 49,0

70 a 74 47.804 55,7 44,3 70 a 74 36.200 52,4 47,6

75 a 79 55.520 57,9 42,1 75 a 79 31.887 56,1 43,9

80 a 84 43.643 62,5 37,5 80 a 84 23.172 61,0 39,0

85 a 89 25.572 67,8 32,2 85 a 89 13.736 65,6 34,4

90 a 94 9.328 74,3 25,7 90 a 94 5.260 71,3 28,7

95 a 99 2.340 79,1 20,9 95 a 99 1.278 72,8 27,2

100 y más 309 83,2 16,8 100 y más 171 77,2 22,8



Canarias Cantabria

Total 2.126.769 50,1 49,9 Total 593.121 51,1 48,9

0 a 4 98.346 48,6 51,4 0 a 4 28.032 48,1 51,9

5 a 9 107.520 48,5 51,5 5 a 9 26.470 49,2 50,8

10 a 14 105.462 48,9 51,1 10 a 14 23.722 48,4 51,6

15 a 19 110.441 48,4 51,6 15 a 19 24.539 48,0 52,0

20 a 24 129.143 49,8 50,2 20 a 24 29.398 49,0 51,0

25 a 29 156.992 50,5 49,5 25 a 29 38.652 49,4 50,6

30 a 34 188.081 49,2 50,8 30 a 34 49.909 49,2 50,8

35 a 39 200.868 48,6 51,4 35 a 39 49.614 49,2 50,8

40 a 44 192.126 48,8 51,2 40 a 44 47.748 49,2 50,8

45 a 49 176.547 49,2 50,8 45 a 49 45.759 49,8 50,2

50 a 54 143.726 49,5 50,5 50 a 54 44.920 50,1 49,9

55 a 59 119.979 50,2 49,8 55 a 59 38.432 50,7 49,3

60 a 64 104.075 50,6 49,4 60 a 64 34.801 51,1 48,9

65 a 69 91.068 51,0 49,0 65 a 69 26.844 52,7 47,3

70 a 74 71.204 53,1 46,9 70 a 74 22.459 54,7 45,3

75 a 79 62.875 55,8 44,2 75 a 79 24.722 57,4 42,6

80 a 84 38.539 59,7 40,3 80 a 84 19.646 61,5 38,5

85 a 89 19.866 63,8 36,2 85 a 89 11.698 67,1 32,9

90 a 94 7.193 68,8 31,2 90 a 94 4.390 75,7 24,3

95 a 99 2.305 70,8 29,2 95 a 99 1.206 82,3 17,7

100 y más 413 75,1 24,9 100 y más 160 88,1 11,9

Castilla y León Castilla-La Mancha

Total 2.558.463 50,5 49,5 Total 2.115.334 49,6 50,4

0 a 4 102.915 48,5 51,5 0 a 4 111.916 48,3 51,7

5 a 9 102.512 48,7 51,3 5 a 9 108.143 48,5 51,5

10 a 14 101.094 48,7 51,3 10 a 14 105.663 48,7 51,3

15 a 19 109.817 48,4 51,6 15 a 19 113.711 48,6 51,4

20 a 24 130.633 48,9 51,1 20 a 24 130.529 48,8 51,2

25 a 29 156.950 48,2 51,8 25 a 29 151.840 47,8 52,2

30 a 34 187.993 48,1 51,9 30 a 34 178.981 46,9 53,1

35 a 39 193.455 48,3 51,7 35 a 39 175.039 47,3 52,7

40 a 44 196.978 48,8 51,2 40 a 44 169.507 47,9 52,1

45 a 49 200.052 48,9 51,1 45 a 49 158.756 48,1 51,9

50 a 54 188.770 48,6 51,4 50 a 54 137.696 48,0 52,0

55 a 59 157.651 48,1 51,9 55 a 59 105.382 48,8 51,2

60 a 64 145.759 49,7 50,3 60 a 64 95.591 50,4 49,6

65 a 69 132.488 51,3 48,7 65 a 69 83.729 51,9 48,1

70 a 74 116.689 53,7 46,3 70 a 74 80.725 54,3 45,7

75 a 79 129.535 55,8 44,2 75 a 79 83.987 55,1 44,9

80 a 84 105.731 59,3 40,7 80 a 84 68.028 57,6 42,4

85 a 89 66.694 63,4 36,6 85 a 89 39.080 62,0 38,0

90 a 94 24.402 70,4 29,6 90 a 94 13.238 69,0 31,0

95 a 99 7.149 75,7 24,3 95 a 99 3.333 73,4 26,6

100 y más 1.196 77,4 22,6 100 y más 460 76,5 23,5



Cataluña Comunitat Valenciana

Total 7.539.618 50,5 49,5 Total 5.117.190 50,3 49,7

0 a 4 427.204 48,3 51,7 0 a 4 267.507 48,4 51,6

5 a 9 391.722 48,6 51,4 5 a 9 258.385 48,6 51,4

10 a 14 348.904 48,4 51,6 10 a 14 238.950 48,7 51,3

15 a 19 341.574 48,3 51,7 15 a 19 246.326 48,5 51,5

20 a 24 391.124 49,3 50,7 20 a 24 280.342 49,1 50,9

25 a 29 522.166 49,3 50,7 25 a 29 348.626 49,1 50,9

30 a 34 678.132 48,1 51,9 30 a 34 445.127 48,0 52,0

35 a 39 685.280 47,7 52,3 35 a 39 443.253 47,8 52,2

40 a 44 614.412 48,1 51,9 40 a 44 416.886 48,5 51,5

45 a 49 553.752 49,3 50,7 45 a 49 382.321 49,3 50,7

50 a 54 494.228 50,5 49,5 50 a 54 341.622 50,3 49,7

55 a 59 428.129 51,1 48,9 55 a 59 291.725 51,2 48,8

60 a 64 397.532 51,9 48,1 60 a 64 279.029 52,0 48,0

65 a 69 334.156 52,6 47,4 65 a 69 245.246 52,3 47,7

70 a 74 274.492 54,2 45,8 70 a 74 210.920 53,2 46,8

75 a 79 271.258 57,3 42,7 75 a 79 183.628 55,7 44,3

80 a 84 205.890 61,4 38,6 80 a 84 132.989 60,3 39,7

85 a 89 122.492 66,5 33,5 85 a 89 73.351 65,4 34,6

90 a 94 44.319 73,8 26,2 90 a 94 24.347 71,6 28,4

95 a 99 11.308 78,0 22,0 95 a 99 5.788 74,2 25,8

100 y más 1.544 80,2 19,8 100 y más 822 77,6 22,4

Extremadura Galicia

Total 1.109.367 50,3 49,7 Total 2.795.422 51,7 48,3

0 a 4 51.950 48,5 51,5 0 a 4 111.702 48,3 51,7

5 a 9 53.000 48,8 51,2 5 a 9 108.525 48,6 51,4

10 a 14 54.858 48,7 51,3 10 a 14 103.892 48,5 51,5

15 a 19 62.679 48,8 51,2 15 a 19 115.896 48,6 51,4

20 a 24 70.376 48,4 51,6 20 a 24 137.977 49,2 50,8

25 a 29 73.657 48,2 51,8 25 a 29 176.999 49,3 50,7

30 a 34 80.507 49,0 51,0 30 a 34 224.592 49,7 50,3

35 a 39 82.980 48,7 51,3 35 a 39 225.157 49,7 50,3

40 a 44 86.282 49,4 50,6 40 a 44 215.850 50,2 49,8

45 a 49 87.920 48,7 51,3 45 a 49 203.467 50,5 49,5

50 a 54 77.194 47,9 52,1 50 a 54 195.969 50,6 49,4

55 a 59 60.863 48,2 51,8 55 a 59 174.265 50,8 49,2

60 a 64 54.281 50,4 49,6 60 a 64 171.654 51,6 48,4

65 a 69 50.248 52,1 47,9 65 a 69 156.697 52,7 47,3

70 a 74 46.656 54,6 45,4 70 a 74 132.353 55,0 45,0

75 a 79 50.899 56,8 43,2 75 a 79 143.304 57,7 42,3

80 a 84 36.233 60,5 39,5 80 a 84 103.524 61,3 38,7

85 a 89 20.066 64,6 35,4 85 a 89 61.221 66,5 33,5

90 a 94 6.751 70,7 29,3 90 a 94 24.820 72,5 27,5

95 a 99 1.655 75,5 24,5 95 a 99 6.545 76,9 23,1

100 y más 312 75,0 25,0 100 y más 1.013 78,1 21,9



Madrid Murcia

Total 6.489.680 51,7 48,3 Total 1.470.069 49,6 50,4

0 a 4 369.118 48,6 51,4 0 a 4 92.030 48,6 51,4

5 a 9 335.532 48,8 51,2 5 a 9 87.280 48,5 51,5

10 a 14 295.014 48,7 51,3 10 a 14 79.773 48,8 51,2

15 a 19 295.323 48,9 51,1 15 a 19 80.470 48,3 51,7

20 a 24 353.177 50,2 49,8 20 a 24 89.531 48,5 51,5

25 a 29 481.070 50,6 49,4 25 a 29 110.793 48,3 51,7

30 a 34 609.158 49,8 50,2 30 a 34 135.743 46,6 53,4

35 a 39 617.850 49,5 50,5 35 a 39 131.319 46,9 53,1

40 a 44 554.663 50,0 50,0 40 a 44 121.700 47,9 52,1

45 a 49 494.524 51,2 48,8 45 a 49 107.012 48,7 51,3

50 a 54 427.911 52,3 47,7 50 a 54 90.327 49,7 50,3

55 a 59 354.962 53,3 46,7 55 a 59 72.167 50,4 49,6

60 a 64 327.176 53,6 46,4 60 a 64 65.359 51,8 48,2

65 a 69 269.976 54,2 45,8 65 a 69 55.224 52,3 47,7

70 a 74 217.556 56,2 43,8 70 a 74 49.652 53,9 46,1

75 a 79 202.583 58,6 41,4 75 a 79 44.796 56,0 44,0

80 a 84 151.461 62,8 37,2 80 a 84 32.973 60,2 39,8

85 a 89 88.394 68,4 31,6 85 a 89 17.271 64,3 35,7

90 a 94 33.532 75,2 24,8 90 a 94 5.337 69,5 30,5

95 a 99 9.431 79,3 20,7 95 a 99 1.162 77,2 22,8

100 y más 1.269 83,1 16,9 100 y más 150 79,3 20,7

Navarra La Rioja

Total 642.051 50,1 49,9 Total 322.955 50,0 50,0

0 a 4 34.919 48,6 51,4 0 a 4 16.915 48,2 51,8

5 a 9 33.352 49,0 51,0 5 a 9 15.849 49,2 50,8

10 a 14 30.819 48,8 51,2 10 a 14 14.560 49,0 51,0

15 a 19 29.445 48,3 51,7 15 a 19 14.575 48,8 51,2

20 a 24 33.028 48,9 51,1 20 a 24 17.128 49,1 50,9

25 a 29 41.980 48,9 51,1 25 a 29 21.114 48,7 51,3

30 a 34 53.750 47,8 52,2 30 a 34 27.348 48,1 51,9

35 a 39 55.347 47,7 52,3 35 a 39 27.533 46,8 53,2

40 a 44 52.685 47,9 52,1 40 a 44 25.798 48,0 52,0

45 a 49 48.759 48,5 51,5 45 a 49 24.424 48,9 51,1

50 a 54 43.458 49,0 51,0 50 a 54 22.776 48,6 51,4

55 a 59 37.046 49,3 50,7 55 a 59 18.487 49,2 50,8

60 a 64 34.346 50,3 49,7 60 a 64 16.826 49,4 50,6

65 a 69 29.486 50,9 49,1 65 a 69 14.761 50,8 49,2

70 a 74 23.151 53,4 46,6 70 a 74 11.871 53,2 46,8

75 a 79 23.758 56,0 44,0 75 a 79 13.163 55,5 44,5

80 a 84 18.967 60,0 40,0 80 a 84 10.376 59,5 40,5

85 a 89 11.865 66,3 33,7 85 a 89 6.459 64,2 35,8

90 a 94 4.495 74,1 25,9 90 a 94 2.308 71,4 28,6

95 a 99 1.240 77,7 22,3 95 a 99 616 76,5 23,5

100 y más 155 86,5 13,5 100 y más 68 86,8 13,2



Ceuta Melilla

Total 82.376 48,8 51,2 Total 78.476 48,7 51,3

0 a 4 6.202 49,2 50,8 0 a 4 6.277 49,0 51,0

5 a 9 5.652 48,5 51,5 5 a 9 5.654 49,5 50,5

10 a 14 5.068 49,7 50,3 10 a 14 5.392 47,8 52,2

15 a 19 5.313 48,8 51,2 15 a 19 5.458 47,3 52,7

20 a 24 6.043 48,0 52,0 20 a 24 5.656 48,4 51,6

25 a 29 6.504 48,5 51,5 25 a 29 6.203 47,2 52,8

30 a 34 6.818 46,7 53,3 30 a 34 6.518 47,8 52,2

35 a 39 6.596 46,1 53,9 35 a 39 5.950 47,7 52,3

40 a 44 6.139 47,7 52,3 40 a 44 5.964 47,6 52,4

45 a 49 6.135 47,5 52,5 45 a 49 5.620 46,3 53,7

50 a 54 5.444 47,7 52,3 50 a 54 5.283 45,8 54,2

55 a 59 4.209 46,2 53,8 55 a 59 3.813 45,7 54,3

60 a 64 3.253 47,6 52,4 60 a 64 2.683 48,9 51,1

65 a 69 2.706 51,0 49,0 65 a 69 2.288 51,3 48,7

70 a 74 2.367 53,6 46,4 70 a 74 2.062 56,0 44,0

75 a 79 1.906 58,6 41,4 75 a 79 1.608 59,1 40,9

80 a 84 1.236 65,2 34,8 80 a 84 1.222 64,9 35,1

85 a 89 563 65,2 34,8 85 a 89 563 67,9 32,1

90 a 94 173 67,6 32,4 90 a 94 188 74,5 25,5

95 a 99 43 76,7 23,3 95 a 99 64 78,1 21,9

100 y más 6 83,3 16,7 100 y más 10 100 0,0

Fuente: INE. Explotación Estadística del Padrón. Nota: %M: porcentaje de mujeres, %H: porcentaje de hombres.

Otra similitud entre el panorama vasco y el conjunto del Estado es la madurez que

caracteriza a sus poblaciones como consecuencia del proceso de envejecimiento de la

población. Uno de los factores que subyace a dicho proceso es el incremento en la

esperanza de vida, que en 2010 fue de 82,4 años para el conjunto de la población vasca con

una diferencia de algo más de seis años entre mujeres y hombres (85,5 frente a 79,1,

respectivamente).

Según los últimos datos disponibles, correspondientes a 2010, en Navarra, Madrid y Castilla

La Mancha la esperanza de vida femenina es superior a la de las mujeres vascas,

alcanzando los 86 años. Sin embargo, únicamente en Asturias, Cantabria y Galicia la

distancia de género1 en la esperanza de vida es mayor que la existente en Euskadi.

1 Este indicador, que se utiliza a lo largo del informe, expresa la diferencia entre el dato referido a los hombres y el de las mujeres. Dependiendo de cada caso puede aplicarse a datos absolutos, medias o porcentajes. En las tablas aparece representado por "H-M".


Tabla 1.6. Esperanza de vida al nacimiento por CC.AA. y sexo. 2010

Total Mujeres Hombres H-M

Andalucía 80,7 83,7 77,7 -6,0 Aragón 82,2 85,1 79,2 -5,9 Asturias 80,9 84,5 77,3 -7,2 Balears 81,6 84,4 78,8 -5,6 C. Valenciana 81,4 84,2 78,6 -5,6 Canarias 81,7 84,6 78,7 -5,9 Cantabria 81,9 85,5 78,3 -7,2 Castilla y León 82,6 85,3 80,0 -5,3 Castilla-La Mancha 82,7 86,0 79,6 -6,4 Cataluña 82,2 85,2 79,2 -6,0 Euskadi 82,4 85,5 79,1 -6,4 Extremadura 81,0 84,1 78,0 -6,1 Galicia 81,8 85,1 78,4 -6,7 La Rioja 82,9 85,7 80,1 -5,6 Madrid 83,4 86,0 80,5 -5,5 Murcia 81,6 84,3 78,9 -5,4 Navarra 83,7 86,5 80,8 -5,7 Ceuta 78,9 82,0 75,8 -6,2 Melilla 82,3 85,1 79,3 -5,8

Fuente: INE. Indicadores Demográficos Básicos.

Por otra parte, la explotación estadística del Padrón según lugar de nacimiento en 2011

indica que en torno al 70% de las personas empadronadas en la CAE nacieron en su

territorio, mientras un 21% lo hizo en otras comunidades. El porcentaje restante corresponde

a personas que nacieron fuera del Estado. El análisis de estos datos por sexo no muestra

diferencias reseñables.

Tabla 1.7. Personas empadronadas en la CAE según lugar de nacimiento. 2011 Total Mujeres Hombres Abs. % Abs. % Abs. %

Total 2.184.606 1.117.734 1.066.872 CAE 1.556.829 71,3 785.266 70,3 771.563 72,3 Otra comunidad autónoma 452.276 20,7 244.288 21,9 207.988 19,5 Fuera del Estado 175.501 8,0 88.180 7,9 87.321 8,2

Fuente: INE. Explotación Estadística del Padrón.

Entre las personas empadronadas en Euskadi que nacieron en otras comunidades hay más

mujeres que hombres (54% versus 46%, respectivamente). Esta afirmación es válida,

asimismo, cuando analizamos cada comunidad de forma independiente, excepto en el caso

de la Ciudad Autónoma de Melilla. Son relevantes asimismo los datos referidos a las

mujeres empadronadas en la CAE y nacidas en las comunidades limítrofes como Navarra

(58,8% mujeres), Cantabria (57,1% mujeres) y La Rioja (56,1%).


Tabla 1.8. Personas empadronadas en la CAE según lugar de nacimiento y por CC.AA. 2011

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Total 2.184.606 1.117.734 51,2 1.066.872 48,8

Euskadi 1.556.829 785.266 50,4 771.563 49,6

Otra comunidad autónoma 452.738 244.520 54,0 208.158 46,0

Andalucía 34.907 18.351 52,6 16.556 47,4

Aragón 6.509 3.525 54,2 2.984 45,8

Asturias 6.917 3.825 55,3 3.092 44,7

Baleares 676 345 51,0 331 49,0

Canarias 1.475 765 51,9 710 48,1

Cantabria 22.942 13.093 57,1 9.849 42,9

Castilla y León 188.754 102.010 54,0 86.744 46,0

Castilla-La Mancha 12.159 6.256 51,5 5.903 48,5

Cataluña 7.521 3.912 52,0 3.609 48,0

C. Valenciana 3.630 1.982 54,6 1.648 45,4

Extremadura 57.292 30.319 52,9 26.973 47,1

Galicia 47.726 25.024 52,4 22.702 47,6

La Rioja 19.898 11.162 56,1 8.736 43,9

Madrid 13.102 6.957 53,1 6.145 46,9

Murcia 1.174 617 52,6 557 47,4

Navarra 26.764 15.725 58,8 11.039 41,2

Ceuta 329 170 51,7 159 48,3

Melilla 501 250 49,9 251 50,1

Fuera del Estado 175.501 88.180 50,2 87.321 49,8

Extranjero 175.039 87.948 50,2 87.091 49,8

Antiguos territorios españoles 462 232 50,2 230 49,8


Sin embargo, en la población extranjera de Euskadi la proporción de hombres supera

genéricamente a la de mujeres (51,4% versus 48,6%), lo cual no implica que esta diferencia

se mantenga en todos los países de origen. En este sentido, tal y como puede observarse

en la siguiente tabla, la proporción de mujeres inmigrantes procedentes de América Latina

supera a la de hombres. Los países latinos con mayor distancia de género en este sentido

son Nicaragua, Paraguay y Honduras. También existe un mayor porcentaje de mujeres en

otros colectivos como el originario de Rusia. En todos los casos mencionados, más de siete

de cada diez personas inmigrantes son mujeres. Sin embargo, en general, entre las

personas de origen africano empadronadas en la CAE predominan los hombres. Así, en la

población procedente de Senegal, Mali, Benin, Sierra Leona o Togo, más de ocho de cada

diez son hombres.


Tabla 1.9. Personas extranjeras empadronadas en la CAE según país de origen. 2011

Mujeres Hombres País de origen Total abs.

Abs. % Abs. % H-M

145.256 70.567 48,6 74.689 51,4 2,8

Rumania 16.231 7.885 48,6 8.346 51,4 2,8

Marruecos 15.823 5.359 33,9 10.464 66,1 32,2

Colombia 12.166 6.853 56,3 5.313 43,7 -12,6

Bolivia 11.855 7.197 60,7 4.658 39,3 -21,4

Portugal 8.676 2.976 34,3 5.700 65,7 31,4

Ecuador 6.700 3.520 52,5 3.180 47,5 -5,0

Brasil 5.782 3.924 67,9 1.858 32,1 -35,8

Argelia 5.448 1.958 35,9 3.490 64,1 28,2

Paraguay 5.173 3.717 71,9 1.456 28,1 -43,8

China 4.763 2.199 46,2 2.564 53,8 7,6

Perú 3.379 1.792 53,0 1.587 47,0 -6,0

Nicaragua 2.999 2.388 79,6 611 20,4 -59,2

Senegal 2.967 412 13,9 2.555 86,1 72,2

Pakistán 2.951 450 15,2 2.501 84,8 69,6

Argentina 2.890 1.462 50,6 1.428 49,4 -1,2

Italia 2.329 918 39,4 1.411 60,6 21,2

Francia 2.198 1.036 47,1 1.162 52,9 5,8

Venezuela 2.058 1.169 56,8 889 43,2 -13,6

República Dominicana 1.967 1.200 61,0 767 39,0 -22,0

Cuba 1.920 1.205 62,8 715 37,2 -25,6

Nigeria 1.766 827 46,8 939 53,2 6,4

Ucrania 1.710 973 56,9 737 43,1 -13,8

Honduras 1.655 1.239 74,9 416 25,1 -49,8

Reino Unido 1.506 552 36,7 954 63,3 26,6

Alemania 1.417 657 46,4 760 53,6 7,2

Chile 1.209 629 52,0 580 48,0 -4,0

Bulgaria 1.046 464 44,4 582 55,6 11,2

Guinea Ecuatorial 947 639 67,5 308 32,5 -35,0

México 892 556 62,3 336 37,7 -24,6

Estados Unidos de América 865 459 53,1 406 46,9 -6,2

Mauritania 825 321 38,9 504 61,1 22,2

Camerún 766 284 37,1 482 62,9 25,8

Rusia 749 536 71,6 213 28,4 -43,2

Polonia 719 368 51,2 351 48,8 -2,4

Ghana 719 146 20,3 573 79,7 59,4

Georgia 650 302 46,5 348 53,5 7,0

Mali 614 104 16,9 510 83,1 66,2

Uruguay 613 311 50,7 302 49,3 -1,4

Filipinas 543 354 65,2 189 34,8 -30,4

Moldavia 497 254 51,1 243 48,9 -2,2

República Democrática del Congo 443 144 32,5 299 67,5 35,0


Mujeres Hombres

País de origen Total abs. Abs. % Abs. %

H-M

Guinea 418 67 16,0 351 84,0 68,0

Resto de Asia 350 222 63,4 128 36,6 -26,8

Guinea-Bissau 345 128 37,1 217 62,9 25,8

Irlanda 343 120 35,0 223 65,0 30,0

Angola 324 157 48,5 167 51,5 3,0

Países Bajos 280 111 39,6 169 60,4 20,8

Bélgica 236 91 38,6 145 61,4 22,8

India 209 69 33,0 140 67,0 34,0

Congo 205 91 44,4 114 55,6 11,2

Guatemala 178 98 55,1 80 44,9 -10,2

Costa de Marfil 174 40 23,0 134 77,0 54,0

Bosnia y Herzegovina 153 60 39,2 93 60,8 21,6

República Eslovaca 149 70 47,0 79 53,0 6,0

Suecia 141 74 52,5 67 47,5 -5,0

Resto de África 141 54 38,3 87 61,7 23,4

Gambia 136 13 9,6 123 90,4 80,8

República Checa 134 70 52,2 64 47,8 -4,4

El Salvador 134 82 61,2 52 38,8 -22,4

Armenia 133 74 55,6 59 44,4 -11,2

Nepal 127 25 19,7 102 80,3 60,6

Lituania 121 57 47,1 64 52,9 5,8

Japón 120 78 65,0 42 35,0 -30,0

Túnez 112 28 25,0 84 75,0 50,0

Burkina Faso 104 36 34,6 68 65,4 30,8

Austria 97 48 49,5 49 50,5 1,0

Serbia 96 42 43,8 54 56,3 12,5

Bangladesh 95 24 25,3 71 74,7 49,4

Suiza 85 38 44,7 47 55,3 10,6

Bielorrusia 83 52 62,7 31 37,3 -25,4

Corea del Sur 80 43 53,8 37 46,3 -7,5

Letonia 79 45 57,0 34 43,0 -14,0

Canadá 78 36 46,2 42 53,8 7,6

Egipto 70 17 24,3 53 75,7 51,4

Grecia 69 27 39,1 42 60,9 21,8

Australia 69 31 44,9 38 55,1 10,2

Hungría 68 40 58,8 28 41,2 -17,6

Albania 63 26 41,3 37 58,7 17,4

Cabo Verde 57 30 52,6 27 47,4 -5,2

Dinamarca 56 24 42,9 32 57,1 14,2

Croacia 55 19 34,5 36 65,5 31,0

Finlandia 51 34 66,7 17 33,3 -33,4

Benín 49 8 16,3 41 83,7 67,4

Turquía 46 13 28,3 33 71,7 43,4


Mujeres Hombres País de origen Total abs.

Abs. % Abs. % H-M

Kenia 46 32 69,6 14 30,4 -39,2

Costa Rica 43 13 30,2 30 69,8 39,6

Siria 43 15 34,9 28 65,1 30,2

Etiopía 40 17 42,5 23 57,5 15,0

Panamá 39 24 61,5 15 38,5 -23,0

Noruega 33 15 45,5 18 54,5 9,0

Indonesia 33 19 57,6 14 42,4 -15,2

Irán 31 14 45,2 17 54,8 9,6

Vietnam 31 17 54,8 14 45,2 -9,6

Nueva Zelanda 31 9 29,0 22 71,0 42,0

Sierra Leona 30 4 13,3 26 86,7 73,4

Israel 26 8 30,8 18 69,2 38,4

Apátridas 26 10 38,5 16 61,5 23,0

Sudáfrica 23 9 39,1 14 60,9 21,8

Tailandia 23 20 87,0 3 13,0 -74,0

Liberia 22 6 27,3 16 72,7 45,4

Líbano 22 11 50,0 11 50,0 0,0

Eslovenia 20 10 50,0 10 50,0 0,0

Iraq 20 7 35,0 13 65,0 30,0

Resto de América Central y Caribe 19 9 47,4 10 52,6 5,2

Togo 16 3 18,8 13 81,3 62,5

Dominica 16 11 68,8 5 31,3 -37,5

Jordania 16 5 31,3 11 68,8 37,5

Kazajstán 13 9 69,2 4 30,8 -38,4

Resto de Oceanía 12 5 41,7 7 58,3 16,6

Resto de nacionalidades europeas 11 2 18,2 9 81,8 63,6

Estonia 8 3 37,5 5 62,5 25,0

Macedonia 8 3 37,5 5 62,5 25,0

Islandia 5 2 40,0 3 60,0 20,0

Andorra 4 3 75,0 1 25,0 -50,0

Luxemburgo 2 1 50,0 1 50,0 0,0

Arabia Saudí 2 0 0,0 2 100,0 100,0

Chipre 1 0 0,0 1 100,0 100,0

Malta 1 0 0,0 1 100,0 100,0

Resto de América del Sur 1 0 0,0 1 100,0 100,0


La mayoría de la población extranjera empadronada en la CAE tiene una edad comprendida

entre los 20 y 44 años, y es partir de los 45 cuando el número de personas extranjeras va

disminuyendo. En general, la presencia de población extranjera en función del sexo está

equilibrada hasta los 54 años y a partir de esta edad se aprecia un desequilibrio a favor del

contingente femenino.


Tabla 1.10. Población extranjera en la CAE por grupos de edad y sexo. 2011

Mujeres Hombres


Total 145.256 70.567 48,6 74.689 51,4 0 a 4 7.914 3.881 49,0 4.033 51,0 5 a 9 5.913 2.922 49,4 2.991 50,6 10 a 14 7.097 3.471 48,9 3.626 51,1 15 a 19 8.319 3.560 42,8 4.759 57,2 20 a 24 14.160 7.135 50,4 7.025 49,6 25 a 29 22.080 11.304 51,2 10.776 48,8 30 a 34 24.069 11.394 47,3 12.675 52,7 35 a 39 18.749 8.515 45,4 10.234 54,6 40 a 44 13.747 6.329 46,0 7.418 54,0 45 a 49 9.098 4.480 49,2 4.618 50,8 50 a 54 6.068 3.060 50,4 3.008 49,6 55 a 59 3.613 1.940 53,7 1.673 46,3 60 a 64 1.873 1.091 58,2 782 41,8 65 a 69 1.034 579 56,0 455 44,0 70 a 74 649 388 59,8 261 40,2 75 a 79 437 246 56,3 191 43,7 80 a 84 250 143 57,2 107 42,8 85 a 89 109 76 69,7 33 30,3 90 a 94 59 41 69,5 18 30,5 95 y más 18 12 66,7 6 33,3


Según los datos de procedencia por continentes, más del 40% de la población extranjera

empadronada en Euskadi proviene del continente americano, con una representatividad de

mujeres que se sitúa en torno al 60%. Es el único caso en el que el número de mujeres

supera al de hombres, ya que en el resto ellas están representadas en menor medida,

siendo el más bajo el caso africano con solo un 33,5% de mujeres.

Tabla 1.11. Población extranjera en la CAE por continente de nacionalidad y sexo. 2011

Mujeres Hombres


Extranjeras/os 145.256 70.567 48,6 74.689 51,4 América 62.631 37.894 60,5 24.737 39,5 Europa 40.359 18.095 44,8 22.264 55,2 Asia 9.498 3.589 37,8 5.909 62,2 Oceanía 112 45 40,2 67 59,8 África 32.630 10.934 33,5 21.696 66,5 Apátridas 26 10 38,5 16 61,5


En el conjunto del Estado el total de población extranjera es de 5.751.487 personas, siendo

las mujeres el 47,9%. Observando las diferencias entre comunidades, en la mayoría de ellas


se mantiene la tendencia a una representación ligeramente mayor de los hombres, excepto

en Madrid y Asturias que cuentan con más mujeres extranjeras.

Tabla 1.12. Población extranjera por CC.AA. y sexo. 2011

Mujeres Hombres


Total 5.751.487 2.752.780 47,9 2.998.707 52,1

Andalucía 730.155 349.872 47,9 380.283 52,1

Aragón 171.193 78.245 45,7 92.948 54,3

Asturias 50.399 25.606 50,8 24.793 49,2

Balears 242.812 118.265 48,7 124.547 51,3

C. Valenciana 880.782 420.094 47,7 460.688 52,3

Canarias 307.009 151.235 49,3 155.774 50,7

Cantabria 38.994 19.248 49,4 19.746 50,6

Castilla y León 172.816 82.338 47,6 90.478 52,4

Castilla-La Mancha 232.735 106.160 45,6 126.575 54,4

Cataluña 1.185.852 551.302 46,5 634.550 53,5

Euskadi 145.256 70.567 48,6 74.689 51,4

Extremadura 41.719 19.942 47,8 21.777 52,2

Galicia 110.468 54.862 49,7 55.606 50,3

La Rioja 46.288 21.512 46,5 24.776 53,5

Madrid 1.067.585 537.150 50,3 530.435 49,7

Murcia 240.863 106.273 44,1 134.590 55,9

Navarra 71.600 32.984 46,1 38.616 53,9

Ceuta 4.928 2.449 49,7 2.479 50,3

Melilla 10.033 4.676 46,6 5.357 53,4


Para finalizar este apartado sobre las características generales de la población, se recoge el

último dato publicado sobre el tamaño medio del hogar. En 2010, según la Encuesta de

Presupuestos Familiares, en la CAE había 854.114 hogares y, teniendo en cuenta la

población total de ese año (2.121.662), el tamaño medio del hogar era de 2,48.

Tabla 1.13. Tamaño medio del hogar. CAE, 2010*

Hogares 854.114

Personas 2.121.662

Tamaño medio del hogar 2,48

Fuente: INE. Encuesta de presupuestos familiares. Nota: (*) Último dato publicado a julio de 2012.

En cuanto a las comunidades autónomas, el tamaño medio en el conjunto del Estado es de

2,67 personas por hogar y son diez las comunidades que se sitúan por debajo de ese valor

medio, entre las que Euskadi refleja el valor más bajo.


Tabla 1.14. Tamaño medio del hogar según CC.AA. 2010

Hogares Personas Tamaño medio del hogar

Total 17.171.031 45.820.294 2,67 Andalucía 2.897.037 8.202.418 2,83 Aragón 507.403 1.300.954 2,56 Asturias 414.995 1.050.359 2,53 Balears 416.968 1.078.084 2,59 C. Valenciana 1.921.841 4.978.462 2,59 Canarias 757.728 2.086.241 2,75 Cantabria 215.937 574.503 2,66 Castilla - La Mancha 745.420 2.027.592 2,72 Castilla y León 987.094 2.466.469 2,50 Cataluña 2.776.914 7.279.598 2,62 Euskadi 854.114 2.121.662 2,48 Extremadura 399.912 1.075.350 2,69 Galicia 1.019.765 2.722.677 2,67 La Rioja 122.303 311.345 2,55 Madrid 2.352.163 6.324.649 2,69 Murcia 502.981 1.459.730 2,90 Navarra 234.827 613.010 2,61 Ceuta y Melilla 43.628 147.190 3,37

Fuente: INE. Encuesta de presupuestos familiares.

1.2. Nupcialidad

El análisis de la tasa de nupcialidad en Euskadi durante los últimos años muestra una

tendencia descendente, habiendo pasado de 8,4 matrimonios entre personas de distinto

sexo por 1.000 habitantes en 1975 a 3,8 en 2010. Esta caída en la tasa de nupcialidad

refleja una disminución en la celebración de nuevos matrimonios que puede observarse

también en la evolución del número total de matrimonios celebrados durante el periodo

mencionado.

Tabla 1.15. Evolución del número de matrimonios y tasa de nupcialidad. CAE, 1975-2010

Matrimonios Tasa

1975 17.336 8,4 1980 12.314 5,8 1985 9.436 4,4 1990 9.729 4,6 1995 9.587 4,6 2000 10.510 5,1 2005 9.575 4,5 2010* 8.377 3,8

Fuente: EUSTAT. Estadística de Matrimonios de la C. A. de Euskadi. Nota: (*) Tasas provisionales. (a) No incluye matrimonios homosexuales.


Según la forma de celebración, el matrimonio civil es el que representa un mayor porcentaje

en el conjunto de la CAE, casi un 64% de las uniones. El resto son matrimonios católicos,

junto con un porcentaje residual que refleja otros tipos de uniones religiosas.

Porcentualmente, Gipuzkoa es el territorio donde se celebran con mayor frecuencia las

uniones de tipo civil (67,5%) y Álava el territorio donde los matrimonios católicos tienen

mayor representación (38,6%).

Tabla 1.16. Matrimonios por lugar de celebración, de residencia y forma de celebración. CAE, 2010

Católico Civil Otra religión

Total abs. Abs. % Abs. % Abs. %

Lugar de celebración 8.933 3.205 35,9 5.710 63,9 18 0,2 CAE 8.106 2.778 34,3 5.314 65,6 14 0,2

Araba / Álava 1.208 466 38,6 736 60,9 6 0,5 Bizkaia 4.120 1.409 34,2 2.704 65,6 7 0,2 Gipuzkoa 2.778 903 32,5 1.874 67,5 1 0,0

Fuera de la CAE 827 427 51,6 396 47,9 4 0,5 Lugar de residencia 8.933 3.205 35,9 5.710 63,9 18 0,2

CAE 8.377 2.957 35,3 5.404 64,5 16 0,2 Araba / Álava 1.263 504 39,9 753 59,6 6 0,5 Bizkaia 4.292 1.525 35,5 2.760 64,3 7 0,2 Gipuzkoa 2.822 928 32,9 1.891 67,0 3 0,1

Fuera de la CAE 556 248 44,6 306 55,0 2 0,4

Fuente: EUSTAT. Estadística de Matrimonios de la C. A. de Euskadi. Nota: (a) No incluye matrimonios homosexuales.

La diferencia de edad entre mujeres y hombres al contraer nupcias se ha mantenido estable

desde 1980, de forma que las primeras se casan unos 2,6 años más jóvenes que los

segundos. Sin embargo, en los últimos treinta años, la edad tanto de unas como de otros ha

aumentado. En el caso de las esposas contrayentes se ha pasado de una edad media de

24,6 años en 1980 a 33,1 años en 2010, lo que supone un incremento de casi de 10 años en

la edad de acceso al matrimonio.

Tabla 1.17. Evolución de la edad media de las personas contrayentes por sexo. CAE, 1980-2010

Mujeres Hombres H-M

2010 33,1 35,7 2,6 2005 31,5 34,2 2,7 2000 30,2 32,8 2,6 1995 29,1 31,7 2,6 1990 27,4 30,1 2,7 1985 26,2 28,9 2,7 1980 24,6 27,0 2,4



Comparativamente con el resto de comunidades autónomas, tan solo en cuatro de ellas

−Canarias, Baleares, Cataluña y Madrid− las mujeres se casan con una edad superior a la

edad media de las mujeres contrayentes en la CAE en 2010. Las esposas más jóvenes se

encuentran Melilla y Ceuta, con 27,4 y 28,3 años de edad media respectivamente. Estas

ciudades autónomas presentan la mayor diferencia entre la edad de matrimonio de las

esposas y esposos (más de seis años) de todo el Estado, mientras que la menor disparidad

de género en la edad de acceso al matrimonio se produce en Euskadi.

Tabla 1.18. Edad media de las personas contrayentes por sexo y CC.AA. 2010

Mujeres Hombres H-M

Total 32,6 35,7 3,2

Andalucía 31,5 34,8 3,3

Aragón 32,5 35,6 3,1

Asturias 32,7 35,8 3,1

Baleares 34,0 37,6 3,6

C. Valenciana 32,6 36,1 3,5

Canarias 34,4 38,1 3,7

Cantabria 32,4 35,6 3,2

Castilla y León 32,6 35,4 2,8

Castilla-La Mancha 31,4 34,4 3,0

Cataluña 33,4 36,6 3,2

Euskadi 33,1 35,7 2,6

Extremadura 31,2 34,0 2,8

Galicia 32,4 35,4 3,0

La Rioja 32,5 35,6 3,1

Madrid 33,2 36,1 2,9

Murcia 31,4 34,9 3,5

Navarra 32,2 34,9 2,7

Ceuta 28,3 34,8 6,5

Melilla 27,4 34,0 6,6


Al analizar el estado civil previo al matrimonio, los datos muestran que la inmensa mayoría

de personas, tanto mujeres como hombres, estaban solteras. Desde 1986, cuando los datos

aparecen desagregados, el porcentaje de contrayentes cuyo estado civil anterior era la

soltería se mantiene por encima del 90%. Sin embargo, cabría matizar que en los últimos

veinticinco años se detecta una tendencia a un ligero descenso, debido al incremento de las

personas que contraen matrimonio tras divorciarse, entre las que no se aprecian apenas

diferencias por sexo.


Tabla 1.19. Evolución de las personas contrayentes según estado civil anterior al matrimonio por sexo (%). CAE, 1976-2010

Mujeres Hombres Abs. Soltera Viuda Divorciada Abs. Soltero Viudo Divorciado

1976 14.683 - - - 15.571 - - - 1980 11.411 - - - 11.765 - - - 1986 9.685 97,1 0,8 2,1 9.471 96,0 1,2 2,8 1990 9.989 96,7 0,5 2,8 9.793 95,4 0,9 3,7 1995 9.870 95,4 0,5 4,1 9.694 94,4 1,0 4,6 2000 10.839 94,8 0,5 4,7 10.735 94,1 0,8 5,1 2005 9.784 93,3 0,4 6,3 9.752 93,0 0,7 6,3 2010 8.463 90,5 0,4 9,1 8.474 89,4 0,6 9,9

Fuente: EUSTAT. Estadística de Matrimonios de la CAE. Datos desagregados a partir de 1986. Nota: (a) No incluye matrimonios homosexuales.

En 2010 en la CAE se casaron un total de 8.463 mujeres de las cuales nueve de cada diez

eran españolas. Por otra parte, la distancia de género entre las mujeres y hombres de

nacionalidad extranjera que contraen nupcias en Euskadi se ha ido incrementando a lo largo

del tiempo, hasta alcanzar una diferencia de más de tres puntos porcentuales en 2010.

Tabla 1.20. Evolución de las personas contrayentes según nacionalidad y sexo (%). CAE, 1996-2010

Mujeres Hombres

Total Española Extranjera Total Español Extranjero

H-M extranjera/o

1996 9.183 98,5 1,5 8.898 98,5 1,5 0,0

1997 9.816 98,3 1,7 9.665 98,7 1,3 -0,4

1998 10.393 97,7 2,3 10.237 98,6 1,4 -0,9

1999 10.089 97,0 3,0 9.983 98,5 1,5 -1,5

2000 10.839 97,1 2,9 10.735 98,5 1,5 -1,4

2001 10.145 96,7 3,3 10.011 98,0 2,0 -1,3

2002 10.327 95,5 4,5 10.258 97,1 2,9 -1,6

2003 10.395 93,8 6,2 10.347 95,8 4,2 -2,0

2004 10.275 93,1 6,9 10.238 95,6 4,4 -2,5

2005 9.784 93,1 6,9 9.752 95,7 4,3 -2,6

2006 9.355 92,9 7,1 9.371 95,1 4,9 -2,2

2007 9.224 92,5 7,5 9.202 94,1 5,9 -1,6

2008 9.243 91,4 8,6 9.233 94,0 6,0 -2,6

2009 8.614 90,6 9,4 8.638 93,1 6,9 -2,5

2010 8.463 89,9 10,1 8.474 93,0 7,0 -3,1

Fuente: EUSTAT. Estadística de Matrimonios de la CAE. Nota: (a) No incluye matrimonios homosexuales.

Asimismo, desde 2006 se han celebrado más de cien matrimonios al año entre personas del

mismo sexo residentes en Euskadi, siendo este año el que registró un mayor número de

dichos matrimonios, probablemente bajo la influencia de la legalización de este tipo de unión

el año anterior.


Tabla 1.21. Evolución de los matrimonios entre personas del mismo sexo de la CAE por territorio histórico. 2011

Araba/Álava Bizkaia Gipuzkoa Fuera de la CAE Total

2005* 9 34 26 5 74

2006 13 84 63 9 169

2007 13 43 38 7 101

2008 10 66 37 6 119

2009 12 60 46 10 128

2010 18 68 46 10 142

2011** 21 66 40 3 130

Fuente: EUSTAT. Estadística de Matrimonios de la C. A. de Euskadi. Nota: (*) A partir del 1 de julio de 2005. (**) Datos provisionales.

Los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística sobre matrimonios

homosexuales difieren de los del Eustat, dado que la primera entidad recoge únicamente

aquellos en los que la residencia del matrimonio es ubica en la CAE, mientras que la

segunda incluye también los casos en los que una de las personas contrayentes tiene como

residencia dicha comunidad. Así, según el INE, en 2010 hubo 113 matrimonios, de los

cuales 52 corresponden a mujeres y 61, a hombres. En las uniones entre mujeres, la mayor

parte de las contrayentes tenían entre 25 y 44 años. Únicamente tres de ellas eran menores

de 25 años y ocho, mayores de 50.

Tabla 1.22. Matrimonios entre mujeres por edad. CAE, 2010

Cónyuge 1 Cónyuge 2

Total 52 52

Menos de 15 - -

De 15 a 19 - -

De 20 a 24 1 2

De 25 a 29 12 10

De 30 a 34 11 7

De 35 a 39 10 13

De 40 a 44 8 9

De 45 a 49 6 7

De 50 a 54 3 3

De 55 a 59 1 -

De 60 y más - 1

Fuente: INE. Matrimonios.

Los matrimonios entre hombres parecen seguir una pauta similar, de forma que las edades

de los cónyuges al contraer nupcias se sitúan generalmente en el mismo tramo de edad que

en el caso anterior. Sin embargo, aquí el número de menores de 25 años que se casan

asciende a diez y los contrayentes mayores de 50 suman un total de dieciséis.


Tabla 1.23. Matrimonios entre hombres por edad. CAE, 2010

Cónyuge 1 Cónyuge 2

Total 61 61

Menos de 15 - -

De 15 a 19 1 -

De 20 a 24 5 4

De 25 a 29 8 11

De 30 a 34 14 9

De 35 a 39 12 10

De 40 a 44 6 15

De 45 a 49 5 6

De 50 a 54 5 1

De 55 a 59 - 2

De 60 y más 5 3

Fuente: INE. Matrimonios.

Otra dimensión relevante en el análisis del matrimonio es la ruptura de dicho vínculo. En

2010, el número total de sentencias de separación, divorcio y nulidad en la CAE fue de

4.224. De ellas, más del 90% en todos los territorios históricos corresponden a sentencias

de divorcio, mientras las separaciones no alcanzan el 7% y las sentencias de nulidad son

ínfimas.

Tabla 1.24. Sentencias de nulidad, divorcio y separación por territorio histórico. CAE, 2010*

Total % nulidades % separaciones Divorcios % divorcios

CAE 4.224 0,1 6,1 3.962 93,8

Araba/Álava 579 0,0 5,5 547 94,5

Gipuzkoa 1.362 0,1 5,7 1.284 94,3

Bizkaia 2.283 0,2 6,5 2.131 93,3

Fuente: INE. Estadística de nulidades, separaciones y divorcios. Nota: (*) Último dato publicado por el INE, julio 2012.

En Euskadi, la mayoría de las demandas de divorcio y separación provienen de ambos

cónyuges; tres de cada diez demandas son interpuestas únicamente por la esposa y menos

de dos de cada diez, por el esposo. Por territorios históricos, es Gipuzkoa donde más

demandas de divorcio y separación se presentan de forma conjunta (63,7%), a diferencia de

Bizkaia donde estos casos suponen en torno al 49%. En los tres territorios históricos las

demandas presentadas por las esposas superan a las interpuestas por los esposos.


Tabla 1.25. Sentencias de divorcio y separación por persona que presenta la demanda por territorio histórico. CAE, 2010*

Mujer Hombre Ambos

Total abs.

Abs. % Abs. % Abs. %

CAE 4.219 1.216 28,8 680 16,1 2.323 55,1

Araba/Álava 579 152 26,3 91 15,7 336 58,0

Gipuzkoa 1.361 310 22,8 184 13,5 867 63,7

Bizkaia 2.279 754 33,1 405 17,8 1.120 49,1


Las separaciones por mutuo acuerdo son mayoritarias en la CAE frente a las separaciones

de índole contenciosa y aglutinan a más de siete de cada diez casos. Este tipo de

separación predomina particularmente en Álava, siendo su incidencia algo menor –aunque

también mayoritaria– en Bizkaia.

Tabla 1.26. Separación por clase y territorio histórico. CAE, 2010*

Separación mutuo acuerdo Separación contenciosa

Total abs.

Abs. % Abs. %

CAE 257 188 73,2 69 26,8

Araba/Álava 32 28 87,5 4 12,5

Gipuzkoa 77 59 76,6 18 23,4

Bizkaia 148 101 68,2 47 31,8


Las resoluciones de divorcio presentan una tendencia similar, de forma que los divorcios

consensuados suponen cerca del 70% de los casos en Euskadi, porcentaje que asciende

hasta el 77,4% en Gipuzkoa, frente al 72,9% de Álava y el 66,4% de Bizkaia.

Tabla 1.27. Divorcio por clase y territorio histórico. CAE, 2010*

Divorcio consensuado Divorcio no consensuado

Total abs.

Abs. % Abs. %

CAE 3.962 2.808 70,9 1.154 29,1

Araba/Álava 547 399 72,9 148 27,1

Gipuzkoa 1.284 994 77,4 290 22,6

Bizkaia 2.131 1.415 66,4 716 33,6



Por otra parte, el análisis según sexo y edad de las sentencias de separación y divorcio que

tuvieron lugar en 2010 en los territorios históricos de la CAE, muestra que, genéricamente,

la franja de edad en la que es más habitual que se produzcan estas desuniones es la

comprendida entre los 40 y 49 años, tanto para mujeres como para hombres.

Tabla 1.28. Sentencias de divorcio y separación por sexo, grupos de edad y territorio histórico. CAE, 2010* (porcentajes verticales)

Araba/Álava Gipuzkoa Bizkaia Mujeres Hombres Mujeres Hombres Mujeres Hombres Abs. % Abs. % Abs. % Abs. % Abs. % Abs. %

Separaciones

Total 32 100,0 32 100,0 77 100,0 77 100,0 148 100,0 148 100,0

Hasta 18 0 0,0 0 0,0 0 0,0 0 0,0 0 0,0 0 0,0

19 a 24 0 0,0 0 0,0 0 0,0 0 0,0 3 2,0 0 0,0

25 a 29 2 6,3 1 3,1 3 3,9 1 1,3 6 4,1 3 2,0

30 a 34 9 28,1 6 18,8 11 14,3 6 7,8 6 4,1 12 8,1

35 a 39 6 18,8 10 31,3 17 22,1 14 18,2 14 9,5 20 13,5

40 a 49 11 34,4 9 28,1 32 41,6 33 42,9 64 43,2 45 30,4

50 a 59 1 3,1 2 6,3 8 10,4 15 19,5 40 27,0 46 31,1

60 a 69 2 6,3 1 3,1 3 3,9 4 5,2 11 7,4 18 12,2

70 y más 1 3,1 3 9,4 3 3,9 4 5,2 4 2,7 4 2,7

Divorcios

Total 547 100,0 547 100,0 1284 100,0 1284 100,0 2131 100,0 2131 100,0

Hasta 18 0 0,0 0 0,0 0 0,0 0 0,0 0 0,0 0 0,0

19 a 24 8 1,5 3 0,5 22 1,7 4 0,3 20 0,9 11 0,5

25 a 29 36 6,6 18 3,3 79 6,2 39 3,0 117 5,5 66 3,1

30 a 34 86 15,7 57 10,4 206 16,0 138 10,7 307 14,4 238 11,2

35 a 39 100 18,3 99 18,1 257 20,0 256 19,9 477 22,4 375 17,6

40 a 49 208 38,0 220 40,2 481 37,5 504 39,3 715 33,6 786 36,9

50 a 59 85 15,5 119 21,8 180 14,0 252 19,6 367 17,2 471 22,1

60 a 69 23 4,2 28 5,1 49 3,8 73 5,7 113 5,3 153 7,2

70 y más 1 0,2 3 0,5 10 0,8 18 1,4 15 0,7 31 1,5


Los matrimonios de Euskadi que finalizan en separación o divorcio han tenido generalmente

una duración superior a cinco años. En cuatro de cada diez casos las separaciones tienen

lugar en parejas que han estado casadas más de 20 años, lo que también sucede en tres de

cada diez divorcios. También las relaciones de entre 6 y 10 años de duración presentan

índices relativamente elevados de ruptura, dado que suponen casi el 15% del total de

separaciones y algo más del 20% de los divorcios.


Tabla 1.29. Separaciones y divorcios según duración del matrimonio. CAE, 2010* (porcentajes verticales)

Separaciones Divorcios Total Abs. % Abs. % Abs. %

Total 257 100,0 3.962 100,0 4.219 100,0 Menos de 1 año 0 0,0 33 0,8 33 0,8 1 a 2 años 21 8,2 275 6,9 296 7,0 3 a 5 años 33 12,8 574 14,5 607 14,4 6 a 10 años 38 14,8 836 21,1 874 20,7 11 a 15 años 29 11,3 615 15,5 644 15,3 16 a 19 años 33 12,8 467 11,8 500 11,9 20 y más años 103 40,1 1.162 29,3 1.265 30,0


Las sentencias de separación y divorcio pueden conllevar el pago de una pensión

alimenticia para la manutención de las hijas e hijos habidos en el matrimonio. En el 54,5%

de las separaciones y el 47,9% de los divorcios este pago recae en el padre, mientras que

los casos en los que dicha pensión corresponde a la madre constituyen una minoría.

Tabla 1.30. Separaciones y divorcios según cónyuge que paga la pensión alimenticia por territorio histórico. CAE, 2010*

Madres Padres Ambos No procede

Total abs. Abs. % Abs. % Abs. % Abs. %

Separaciones CAE 257 7 2,7 140 54,5 13 5,1 97 37,7 Araba/Álava 32 3 9,4 16 50,0 2 6,3 11 34,4 Gipuzkoa 77 3 3,9 43 55,8 10 13,0 21 27,3 Bizkaia 148 1 0,7 81 54,7 1 0,7 65 43,9

Divorcios CAE 3.962 128 3,2 1.898 47,9 179 4,5 1.757 44,3 Araba/Álava 547 30 5,5 252 46,1 22 4,0 243 44,4 Gipuzkoa 1.284 49 3,8 618 48,1 94 7,3 523 40,7 Bizkaia 2.131 49 2,3 1.028 48,2 63 3,0 991 46,5


En cuanto a la ruptura o disolución del matrimonio en el resto de las comunidades

autónomas, en todas ellas los divorcios suponen en torno al 90% o más del total de las

rupturas, mientras que las separaciones no llegan al 10% –excepto en Extremadura– y las

nulidades suponen un porcentaje ínfimo. La situación en el resto del Estado es, por tanto,

similar a la de Euskadi, cuyo índice de divorcios es solo ligeramente inferior al de Cantabria,

Canarias, Baleares, Madrid y Galicia.


Tabla 1.31. Sentencias de nulidad, divorcio y separación por CC.AA. 2010*

Total % nulidades % separaciones % divorcios

Total 110.076 0,13 6,6 93,3 Andalucía 19.899 0,15 7,7 92,2 Aragón 2.529 0,51 6,9 92,6 Asturias 2.764 0,36 7,8 91,9 Balears 2.845 0,07 5,7 94,2 C. Valenciana 12.918 0,15 6,3 93,6 Canarias 5.744 0,10 4,7 95,2 Cantabria 1.361 0,07 4,6 95,3 Castilla - La Mancha 3.806 0,08 7,8 92,1 Castilla y León 4.419 0,09 7,6 92,3 Cataluña 20.801 0,07 6,2 93,7 Euskadi 4.224 0,12 6,1 93,8 Extremadura 1.945 0,05 10,3 89,6 Galicia 6.024 0,08 6,0 93,9 La Rioja 604 0,00 6,5 93,5 Madrid 15.322 0,10 5,8 94,1 Murcia 3.227 0,12 7,0 92,9 Navarra 1.244 0,48 5,9 93,6 Ceuta 220 0,45 8,6 90,9 Melilla 180 0,00 9,4 90,6


1.3. Natalidad

En 2011 en Euskadi, la tasa bruta de natalidad −el número de nacimientos al año por cada

mil habitantes− fue 9,5. Por territorios históricos, la mayor tasa bruta de natalidad

correspondiente a dicho año se encuentra en Gipuzkoa (9,99) y la menor, en Bizkaia (9,11).

Estos datos, tal y como se recoge en informes anteriores, suponen una cierta recuperación

con relación a la tasa bruta de natalidad que hubo en Euskadi en 1995 (7,3), aunque

continúan muy alejados de los 19,1 nacimientos por 1000 habitantes que se registraron en

1975.

El Índice Sintético de Fecundidad (ISF), el número medio de hijos e hijas por mujer en edad

fértil (15 a 49 años), constituye otra perspectiva desde la que analizar la evolución de la

natalidad. Como puede observarse en la tabla siguiente, en 2007 este indicador era de 1,25

y desde dicho año se ha producido un aumento ligero pero sostenido. Atendiendo a las

estimaciones estadísticas sobre los movimientos naturales de la población, esta tendencia

continuará, ya que el ISF previsto para 2020 es 1,42.


Tabla 1.32. Indicadores de natalidad y fecundidad proyectados por territorio histórico y año. CAE, 2007-2020

CAE Araba/Álava Bizkaia Gipuzkoa

Nac. TB ISF Edad

media Nac. TB Nac. TB Nac. TB

2007 20,6 9,6 1,25 32,19 3,0 9,68 10,4 9,07 7,2 10,36 2008 20,9 9,6 1,27 32,20 3,1 9,73 10,6 9,15 7,2 10,36 2009 21,0 9,6 1,28 32,21 3,1 9,72 10,7 9,18 7,2 10,29 2010 21,0 9,6 1,30 32,22 3,1 9,67 10,7 9,17 7,1 10,17 2011 20,9 9,5 1,32 32,22 3,1 9,58 10,7 9,11 7,0 9,99 2012 20,6 9,3 1,33 32,23 3,1 9,45 10,6 9,02 6,9 9,78 2013 20,3 9,2 1,34 32,24 3,1 9,29 10,5 8,90 6,7 9,54 2014 19,9 9,0 1,36 32,24 3,0 9,11 10,3 8,75 6,6 9,28 2015 19,5 8,8 1,37 32,25 3,0 8,92 10,1 8,58 6,4 9,01 2016 19,1 8,6 1,38 32,25 2,9 8,73 9,9 8,41 6,2 8,76 2017 18,7 8,4 1,39 32,26 2,9 8,54 9,7 8,23 6,0 8,51 2018 18,3 8,2 1,40 32,26 2,8 8,36 9,5 8,07 5,9 8,29 2019 17,9 8,0 1,41 32,27 2,8 8,20 9,4 7,92 5,7 8,09 2020 17,6 7,9 1,42 32,27 2,8 8,05 9,2 7,78 5,6 7,93

Fuente: EUSTAT. Proyecciones de Población. Nota: Nac.: Nacimientos; ISF: Índice Sintético de Fecundidad, TB: Tasa Bruta de Natalidad.

Otra de las características relevantes en el análisis de la natalidad, que ha ido variando a lo

largo del tiempo, es la edad de las madres en el momento del nacimiento. La evolución de

los últimos treinta y cinco años muestra que se ha duplicado el contingente de madres que

tienen una edad comprendida entre los 30 y 34 años al nacer sus hijos e hijas. Así, el

42,50% de las mujeres que tuvieron descendencia en 2010 se situaban en esta franja de

edad, frente al 21,32% que se encontraban en situación análoga en 1975. El siguiente

segmento de edad más habitual entre las mujeres que tienen descendencia es el

comprendido entre los 35 y 39 años. Si en 1990 las mujeres de esta cohorte que tuvieron

hijos e hijas no llegaban al 10%, treinta y cinco años más tarde superan el 30%.

Tabla 1.33. Evolución de nacimientos de madres residentes en la CAE según edad de la madre. 1975-2010

1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010

Absolutos Total 39.646 28.812 20.970 16.456 15.345 17.316 19.698 21.170 < 14 años 9 6 4 2 1 3 2 3 De 15 a 19 1.294 1.480 825 408 213 175 224 263 De 20 a 24 9.601 7.322 3.968 2.130 1.006 842 851 1.035 De 25 a 29 15.060 10.203 8.697 6.384 4.483 3.618 3.528 3.194 De 30 a 34 8.451 6.467 5.109 5.768 7.085 8.218 8.982 8.998 De 35 a 39 3.718 2.603 1.889 1.515 2.357 4.010 5.292 6.424 De 40 a 44 1.399 657 434 237 194 443 791 1.152 De 45 a 49 107 70 41 12 6 4 28 97 > 50 años 7 4 3 - - 3 - 4


1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010

% verticales < 14 años 0,02 0,02 0,02 0,01 0,01 0,02 0,01 0,01 De 15 a 19 3,26 5,14 3,93 2,48 1,39 1,01 1,14 1,24 De 20 a 24 24,22 25,41 18,92 12,94 6,56 4,86 4,32 4,89 De 25 a 29 37,99 35,41 41,47 38,79 29,21 20,89 17,91 15,09 De 30 a 34 21,32 22,45 24,36 35,05 46,17 47,46 45,60 42,50 De 35 a 39 9,38 9,03 9,01 9,21 15,36 23,16 26,87 30,34 De 40 a 44 3,53 2,28 2,07 1,44 1,26 2,56 4,02 5,44 De 45 a 49 0,27 0,24 0,20 0,07 0,04 0,02 0,14 0,46 > 50 años 0,02 0,01 0,01 0,00 0,00 0,02 0,00 0,02

Fuente: INE. Movimiento Natural de Población.

Asimismo, en las últimas décadas se ha producido en Euskadi un retraso en la edad media

a la maternidad, que ha pasado de 28,8 años en 1975, a 32,4 en 2010. Este dato es el más

alto de todas las comunidades autónomas, superando en más de un año el promedio para el

conjunto del Estado y contrastando particularmente con las edades medias a la maternidad

de Ceuta y Melilla, las más bajas del marco estatal.

Tabla 1.34. Evolución de la edad media a la maternidad según CC.AA. 1975-2010

2010 2005 2000 1995 1990 1985 1980 1975

Total 31,2 30,9 30,7 30,0 28,9 28,5 28,2 28,8 Andalucía 30,7 30,4 30,1 29,5 28,6 28,5 28,4 29,2 Aragón 31,3 31,5 31,5 30,6 29,4 29,0 28,6 29,1 Asturias 31,7 31,4 30,7 29,5 28,1 27,5 27,3 27,6 Balears 30,8 30,3 30,3 29,7 28,5 28,1 27,6 28,0 Canarias 30,5 30,0 29,5 29,1 28,2 28,1 27,9 28,5 Cantabria 31,9 31,6 31,1 30,0 28,7 28,2 27,9 28,4 Castilla y León 31,8 31,7 31,4 30,3 29,2 28,8 28,7 29,6 Castilla-La Mancha 30,9 30,7 30,6 29,8 29,1 28,9 28,9 29,7 Cataluña 31,1 30,9 30,9 30,3 29,1 28,4 27,8 28,2 Comunitat Valenciana 31,1 30,7 30,7 30,0 28,9 28,5 28,2 28,8 Euskadi 32,4 32,4 32,1 31,1 29,7 29,0 28,5 28,8 Extremadura 31,2 30,9 30,2 29,3 28,7 28,7 28,7 29,8 Galicia 31,8 31,3 30,5 29,2 27,8 27,4 27,3 28,1 La Rioja 31,3 31,0 31,3 30,5 29,2 28,5 28,5 29,0 Madrid 31,9 31,4 31,5 30,8 29,5 28,9 28,5 28,9 Murcia 30,6 30,1 30,1 29,6 28,7 28,5 28,2 28,7 Navarra 31,6 31,8 31,7 31,0 29,9 29,6 29,3 29,7 Ceuta 29,8 29,7 29,3 29,5 28,6 28,4 27,8 28,2 Melilla 29,7 29,5 29,5 28,7 28,3 28,1 27,6 28,1

Fuente: INE. Indicadores demográficos básicos.

La mayor parte de los nacimientos en Euskadi tienen lugar dentro del matrimonio, aunque la

relación entre matrimonio y natalidad ha ido perdiendo peso progresivamente a lo largo de


los últimos años. Así, en el 32,8% de los nacimientos que se produjeron en 2010, la madre

no estaba casada, porcentaje que triplica el existente quince años atrás. Esta tendencia se

extiende, sin diferencias reseñables, a los tres territorios históricos.

Tabla 1.35. Evolución de nacimientos de madres residentes en la CAE según estado civil de la madre y territorio histórico. 1975 - 2010

Total Casadas No casadas % no casada

CAE 1975 39.646 39.085 561 1,4 1980 28.812 27.916 896 3,1 1985 20.970 19.549 1.421 6,8 1990 16.456 15.176 1.280 7,8 1995 15.345 13.806 1.539 10,0 2000 17.316 14.679 2.637 15,2 2005 19.698 15.126 4.572 23,2 2010 21.170 14.230 6.940 32,8

Araba/Álava 1975 4.833 4.794 39 0,8 1980 3.917 3.836 81 2,1 1985 3.008 2.691 317 10,5 1990 2.324 2.161 163 7,0 1995 2.083 1.859 224 10,8 2000 2.486 2.118 368 14,8 2005 2.791 2.121 670 24,0 2010 3.348 2.253 1.095 32,7

Bizkaia 1975 22.075 21.756 319 1,4 1980 16.569 16.008 561 3,4 1985 11.582 10.914 668 5,8 1990 8.760 8.103 657 7,5 1995 7.887 7.114 773 9,8 2000 8.819 7.497 1.322 15,0 2005 10.121 7.796 2.325 23,0 2010 10.601 7.076 3.525 33,3

Gipuzkoa 1975 12.738 12.535 203 1,6 1980 8.326 8.072 254 3,1 1985 6.380 5.944 436 6,8 1990 5.372 4.912 460 8,6 1995 5.375 4.833 542 10,1 2000 6.011 5.064 947 15,8 2005 6.786 5.209 1.577 23,2 2010 7.221 4.901 2.320 32,1

Fuente: INE. Movimiento Natural de Población.

En Euskadi la evolución de los nacimientos de madres de nacionalidad extranjera muestra

una tendencia creciente, ya que en 1996 apenas representaban el 2%, mientras que en

2011 superan el 14%.


Tabla 1.36. Evolución de nacimientos de madres residentes en la CAE según nacionalidad de la madre. 1996 - 2011

Total Española Extranjera % extranjeros

1996 15.831 15.526 305 1,9 1997 16.325 15.993 332 2,0 1998 16.113 15.777 336 2,1 1999 16.787 16.379 408 2,4 2000 17.316 16.820 496 2,9 2001 17.647 17.028 619 3,5 2002 18.133 17.286 847 4,7 2003 19.267 18.182 1.085 5,6 2004 19.594 18.296 1.298 6,6 2005 19.715 18.184 1.531 7,8 2006 20.043 18.209 1.834 9,2 2007 20.596 17.998 2.598 12,6 2008 21.315 18.275 3.040 14,3 2009 20.928 17.733 3.195 15,3 2010 21.159 17.803 3.356 15,9 2011* 20.861 17.884 2.977 14,3

Fuente: Eustat. Estadística de nacimientos de la CAE. Nota: (*) Dato provisional 2011.

Por último, se analiza el último dato publicado por el INE sobre los títulos concedidos a

familias numerosas en las distintas comunidades autónomas, como se observa en la tabla.

Tabla 1.37. Títulos concedidos a familias numerosas por CC.AA. y tipo de título. 2010

Títulos en vigor* Títulos nuevos Títulos renovados

Total 487.354 64.133 143.359 Andalucía 89.429 13.282 27.456 Aragón 12.837 1.634 2.945 Asturias - 600 2.169 Balears 12.921 1.562 1.657 Canarias 13.868 2.282 5.898 Cantabria 4.729 614 1.375 Castilla - La Mancha 29.547 3.774 19.109 Castilla y León 23.735 3.231 7.560 Cataluña 87.868 10.971 22.986 Comunitat Valenciana 46.842 6.293 6.407 Euskadi 19.294 2.541 3.354 Extremadura 12.903 1.255 6.751 Galicia 19.778 1.918 3.977 La Rioja 4.246 566 961 Madrid 81.656 9.164 15.129 Murcia 17.576 2.878 9.753 Navarra 7.977 989 3.727 Ceuta y Melilla 2.148 579 2.145

Fuente: INE. Familias numerosas. Nota: (*) Son los títulos vigentes a 31 de diciembre. La Ley 40/2003, de 18 de noviembre, de Protección a las familias numerosas ya no prevé la caducidad automática de los títulos cada dos años, por lo que no se requiere la renovación excepto cuando se produce un cambio en la situación familiar que implica el paso a otra categoría. No obstante, la mayoría de las CC.AA. ha seguido renovando los títulos caducados.


Según estos datos del 2010, en el conjunto del Estado existen oficialmente 487.354 familias

numerosas y se han concedido 64.133 títulos nuevos. Ese mismo año Euskadi contaba con

19.294 títulos en vigor, se concedieron 2.541 nuevos títulos y se renovaron 3.354.

El análisis de la composición de las familias numerosas que obtuvieron el título, muestra que

en el conjunto del estado, el 87,1% se concedió a familias que no tenían descendencia con

discapacidad, mientras el porcentaje restante correspondía a familias que tenían hijas o

hijos con algún tipo de discapacidad. En el caso de Euskadi los porcentajes son muy

similares, el 87,2% de las familias numerosas no tienen descendencia con discapacidad

frente a un 12,8% que sí.

Tabla 1.38. Títulos concedidos a familias numerosas por CC.AA. y composición. 2010

Total* % familias sin descendencia

con discapacidad % familias con descendencia

con discapacidad

Total 487.354 87,1 12,9

Andalucía 89.429 87,7 12,3

Aragón 12.837 87,5 12,5

Asturias - - -

Balears 12.921 89,2 10,8

Canarias 13.868 90,9 9,1

Cantabria 4.729 89,0 11,0

Castilla - La Mancha 29.547 87,6 12,4

Castilla y León 23.735 86,1 13,9

Cataluña 87.868 84,7 15,3

Comunitat Valenciana 46.842 86,2 13,8

Euskadi 19.294 87,2 12,8

Extremadura 12.903 87,7 12,3

Galicia 19.778 85,9 14,1

La Rioja 4.246 87,2 12,8

Madrid 81.656 88,6 11,4

Murcia 17.576 84,8 15,2

Navarra 7.977 91,9 8,1

Ceuta y Melilla 2.148 93,2 6,8

Fuente: INE. Familias numerosas. Nota: (*) Son los títulos vigentes a 31 de diciembre. La Ley 40/2003 de 18, de noviembre, de Protección a las familias numerosas ya no prevé la caducidad automática de los títulos cada dos años, por lo que no se requiere la renovación excepto cuando se produce un cambio en la situación familiar que implica el paso a otra categoría. No obstante, la mayoría de las CCAA han seguido renovando los títulos caducados.


1.4. Mortalidad

En 2010 se registraron un total de 19.357 defunciones en Euskadi, de las cuales algo más

de la mitad correspondió a hombres, tanto en el conjunto de la comunidad como en los tres

territorios históricos.

Tabla 1.39. Defunciones por territorio histórico y sexo. CAE, 2010

Mujeres Hombres


CAE 19.357 9.312 48,1 10.045 51,9 Araba/Álava 2.430 1.152 47,4 1.278 52,6 Bizkaia 10.797 5.161 47,8 5.636 52,2 Gipuzkoa 6.130 2.999 48,9 3.131 51,1

Fuente: EUSTAT. Estadística de defunciones de la CAE.

Esta tendencia también se aprecia en el resto de las comunidades autónomas, cuyos

porcentajes de defunciones femeninas son algo inferiores a las masculinas, con la

excepción de Madrid donde los fallecimientos de mujeres en 2011 supusieron el 50,1%.

Tabla 1.40. Defunciones por CC.AA. y sexo. 2010

Mujeres Hombres


Total 382.047 183.926 48,1 198.121 51,9 Andalucía 64.471 30.560 47,4 33.911 52,6 Aragón 13.194 6.319 47,9 6.875 52,1 Asturias 12.725 6.239 49,0 6.486 51,0 Balears 7.683 3.692 48,1 3.991 51,9 Canarias 12.801 5.736 44,8 7.065 55,2 Cantabria 5.466 2.608 47,7 2.858 52,3 Castilla y León 27.097 12.850 47,4 14.247 52,6 Castilla-La Mancha 17.457 8.402 48,1 9.055 51,9 Cataluña 59.700 29.043 48,6 30.657 51,4 Comunitat Valenciana 40.129 19.177 47,8 20.952 52,2 Euskadi 19.363 9.315 48,1 10.048 51,9 Extremadura 10.816 5.182 47,9 5.634 52,1 Galicia 29.749 14.763 49,6 14.986 50,4 La Rioja 2.855 1.398 49,0 1.457 51,0 Madrid 40.828 20.461 50,1 20.367 49,9 Murcia 9.976 4.763 47,7 5.213 52,3 Navarra 4.981 2.459 49,4 2.522 50,6 Ceuta 536 241 45,0 295 55,0 Melilla 407 194 47,7 213 52,3 Extranjero 1.813 524 28,9 1.289 71,1

Fuente: INE. Movimiento Natural de la Población.


En cualquier caso, las mayores diferencias entre mujeres y hombres con relación a la

mortalidad se aprecian al analizar los diversos grupos de edad. Así, en los tres territorios, las

defunciones femeninas superan a las masculinas a partir de los 80 años, mientras que en el

resto de las franjas de edad los fallecimientos son más entre los hombres, excepto en

Gipuzkoa en las edades inferiores a 20 años.

Tabla 1.41. Defunciones por grupos de edad, territorio histórico y sexo. CAE, 2010

Araba/Álava Gipuzkoa Bizkaia

Total M % H % Total M % H % Total M % H %

Total 2.430 47,4 52,6 6.130 48,9 51,1 10.803 47,8 52,2

menores de 1 5 20,0 80,0 13 61,5 38,5 37 48,6 51,4

De 1 a 10 8 50,0 50,0 9 77,8 22,2 12 41,7 58,3

De 11 a 20 4 25,0 75,0 12 58,3 41,7 16 18,8 81,3

De 21 a 30 6 16,7 83,3 22 22,7 77,3 44 27,3 72,7

De 31 a 40 28 35,7 64,3 69 39,1 60,9 118 36,4 63,6

De 41 a 50 70 37,1 62,9 220 33,2 66,8 357 35,0 65,0

De 51 a 60 154 31,2 68,8 398 31,7 68,3 746 31,5 68,5

De 61 a 70 277 28,5 71,5 623 27,9 72,1 1.158 28,9 71,1

De 71 a 80 560 34,1 65,9 1.404 35,1 64,9 2.562 37,0 63,0

De 81 a 90 898 53,8 46,2 2.351 55,5 44,5 4.161 53,8 46,2

De 91 a 100 411 73,2 26,8 973 76,4 23,6 1.540 75,0 25,0

De + de 100 9 77,8 22,2 36 86,1 13,9 52 86,5 13,5

Fuente: INE. Movimiento Natural de la Población.

En las últimas décadas, la tasa bruta de mortalidad −el número de defunciones por cada

1.000 habitantes− ha ido experimentando un aumento gradual en los tres territorios

históricos. En 2011 esta tasa alcanzó el valor de 9,7 en Bizkaia, 9,2 en Gipuzkoa y 8,2 en

Álava.

Tabla 1.42. Evolución de la tasa bruta de mortalidad por territorio histórico. CAE, 1975-2011

Araba/Álava Bizkaia Gipuzkoa

2011 8,2 9,7 9,2 2010 7,8 9,5 8,9 2005 8,4 9,6 9,0 2000 7,8 9,1 8,7 1995 7,4 8,7 8,4 1990 6,9 8,1 7,5 1985 6,1 7,4 7,2 1980 6,0 7,1 6,2 1975 6,8 7,6 7,2

Fuente: INE Indicadores demográficos básicos.


Desde una perspectiva comparativa con el resto de comunidades autónomas, la tasa bruta

de mortalidad de Euskadi se sitúa por encima de la media estatal (8,4), con una tasa de 9,3.

La comunidad autónoma con la tasa más alta es el Principado de Asturias, con un 12,1,

mientras que la más baja corresponde a la Ciudad Autónoma de Melilla.

Tabla 1.43. Tasa Bruta de Mortalidad por CC.AA. 2011

Total 8,4 Andalucía 8,0 Aragón 10,5 Asturias 12,1 Balears 7,2 Canarias 6,3 Cantabria 9,8 Castilla y León 10,9 Castilla-La Mancha 8,9 Cataluña 8,2 Comunitat Valenciana 8,1 Euskadi 9,3 Extremadura 9,8 Galicia 11,2 La Rioja 9,0 Madrid 6,5 Murcia 7,0 Navarra 8,1 Ceuta 6,5 Melilla 6,3

Fuente INE. Indicadores demográficos básicos (Período enero 2011 - diciembre 2011).

2. ACCESO Y CONTROL DE LOS RECURSOS ECONÓMICOS

2.1. Trabajo productivo

El término trabajo productivo hace referencia al trabajo asalariado (trabajo por cuenta ajena)

y al autoempleo (trabajo por cuenta propia). En este apartado se analizan los indicadores

sobre la situación de mujeres y hombres en el mercado laboral. La principal fuente de

información estadística que recoge esta realidad en la Comunidad Autónoma de Euskadi es

la Encuesta de la Población en Relación con la Actividad (PRA) del Instituto Vasco de

Estadística (EUSTAT) y la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de

Estadística (INE)1.

2.1.1. Datos generales: tasas de actividad, tasas de ocupación, tasas de paro

La tasa de actividad es el principal indicador de la fuerza laboral de una sociedad. Sin

embargo, hay que tener en cuenta que dentro de la población activa se incluye tanto a la

población ocupada como a la población parada. Por ello, comenzamos analizando las tasas

de actividad de la CAE, para estudiar posteriormente las tasas de ocupación y de paro.

Al considerar la evolución de la tasa de actividad de la población de 16 y más años en la

CAE se aprecia con claridad la gradual incorporación de la mujer al trabajo productivo. En

las últimas dos décadas, la tasa femenina ha aumentado en 11 puntos porcentuales −del

38,5 en 1991 al 49,5 en 2011−, mientras que la masculina ha disminuido en casi 5 puntos

−del 68 al 63,2%−. Se observa así que la distancia de género se ha reducido de manera

considerable, aunque se siga manteniendo una distancia de 13,7 puntos.

1 Veremos que en algunos casos las tasas globales no coinciden exactamente ya que pueden

calcularse sobre la población total de 16 y más años (PRA) o sobre la población en edad de trabajar de entre 16 y 64 años (EPA, CMT, EUROSTAT).

Cifras sobre la situación de mujeres y hombres en E uskadi 2012

41

Tabla 2.1. Evolución de la tasa de actividad de la población de 16 y más

años por sexo y periodo. CAE, 1991-2011


1991 52,9 38,5 68,0 29,5 1995 52,7 41,3 64,8 23,5 2001 53,6 42,2 65,7 23,5 2006 54,7 45,4 64,6 19,2 2011 56,2 49,5 63,2 13,7

Fuente: EUSTAT. PRA.

El análisis por grupos de edad revela una clara diferencia generacional en cuanto a la

distancia entre mujeres y hombres en las tasas de actividad. Los datos muestran que según

aumenta la edad del grupo analizado, también se incrementa la distancia de género. De

hecho, para el grupo de edad de entre 16 y 24 años la brecha de género ha desaparecido

en 2011, siendo esta ligeramente favorable a las mujeres (-0,4). Podemos afirmar entonces

que las mujeres y los hombres de las nuevas generaciones se incorporan al mercado laboral

en similar proporción.

Tabla 2.2. Tasa de actividad de la población de 16 y más años por grupo de edad y sexo. CAE, 2011


Total 56,2 49,5 63,2 13,7 16-24 años 30,3 30,5 30,1 -0,4 25-44 años 87,7 84,0 91,1 7,1 45 y más años 40,2 32,3 49,4 17,1


Junto con la edad, el nivel de instrucción constituye otra importante variable explicativa de la

situación de mujeres y hombres en el mercado de trabajo. De este modo, podemos observar

que la distancia de género en el grupo de personas con estudios superiores en cuanto a

tasa de actividad ha desaparecido en 2011 −inclinándose a favor de las mujeres -0,5%−. Por

el contrario, entre las personas con estudios primarios la tasa de actividad de los hombres

(25,2) es prácticamente el doble que el de las mujeres (12,8). Por tanto, un mayor nivel de

instrucción contribuye a reducir la desigualdad de género a la hora de incorporarse al

mercado laboral.

Tabla 2.3. Tasa de actividad de la población de 16 y más años por nivel

de instrucción y sexo. CAE, 2011


Total 56,2 49,5 63,2 13,7 Estudios primarios 17,8 12,8 25,2 12,4 Estudios medios 68,4 65,1 74,0 8,9 Estudios superiores 77,7 77,9 77,4 -0,5



42

El número de hijas e hijos a cargo es otra variable que afecta a la distancia de género en la

tasa de actividad. En general, aunque podemos apreciar que la tasa de actividad total −tanto

en mujeres como en hombres− aumenta progresivamente con el número de hijas e hijos,

también se debe destacar el hecho de que la diferencia de tasas entre mujeres y hombres

aumenta progresivamente a la par que la prole. Tenemos así una diferencia de 13 puntos

entre las personas sin hijas e hijos a cargo frente a los casi 18 puntos de distancia entre los

hombres y las mujeres con dos o más. Uno de los factores que probablemente subyace a

esta brecha de género es la mayor carga de trabajo reproductivo que siguen soportando las

mujeres en los hogares vascos.

Tabla 2.4. Tasa de actividad de la población de 16 y más años por número

de hijas/os a su cargo y sexo. CAE, 2011


Total 56,2 49,5 63,2 13,7 0 46,9 40,4 53,4 13,0 1 61,8 55,0 70,0 15,0 2 o más 78,3 69,8 87,6 17,8


Teniendo en cuenta la variable comunidad autónoma, observamos que en 2011 la CAE es la

comunidad con menor distancia de género en la tasa de actividad (10,6). Este dato ha sido

tomado de la Encuesta de Población Activa (EPA) del INE que recoge información de todas

las comunidades autónomas.

Tabla 2.5. Tasa de actividad de la población de entre 16 y 64 años por sexo y CC.AA. 2011

Mujeres Hombres H-M

Total 67,9 81,5 13,6 Andalucía 63,0 79,6 16,6 Aragón 68,6 82,3 13,7 Asturias 63,0 74,2 11,2 Balears 72,4 83,4 11,0 Canarias 67,8 80,7 12,9 Cantabria 63,9 78,5 14,6 Castilla - La Mancha 64,3 82,5 18,2 Castilla y León 66,2 80,9 14,8 Cataluña 72,7 84,5 11,7 Comunitat Valenciana 67,3 81,0 13,7 Euskadi 70,0 80,6 10,6

Extremadura 59,9 78,5 18,6 Galicia 67,8 78,5 10,7 La Rioja 69,3 82,6 13,3


43

Mujeres Hombres H-M

Madrid 72,4 84,2 11,8 Murcia 65,6 82,2 16,6 Navarra 70,2 81,7 11,5 Ceuta 53,3 75,4 22,1 Melilla 54,1 76,0 21,9

Fuente: INE. EPA.

Con respecto a la tasa de ocupación −población ocupada de 16 y más años−, la tendencia

es bastante similar a la de la tasa de actividad. Así, la tasa de ocupación muestra una

evolución favorable hacia la igualdad en el trabajo productivo de mujeres y hombres en los

últimos 20 años, habiéndose acortado la distancia de género 21 puntos porcentuales. En

este sentido, a partir de 1995 la tasa de ocupación de las mujeres ha ido aumentando

progresivamente hasta la actualidad, mientras que la de los hombres se ha visto reducida en

los últimos cinco años.

Tabla 2.6. Evolución de la tasa de ocupación de 16 y más años por sexo y período. CAE, 1991-2011


1991 43,7 27,7 60,6 32,9 1995 40,2 27,6 53,5 25,9 2001 47,7 35,3 60,7 25,4 2006 52,5 43,3 62,2 18,9 2011 50,1 44,3 56,1 11,8


Tal y como sucede con la tasa de actividad, las diferencias entre mujeres y hombres en la

ocupación varían en función de la edad, el nivel de instrucción y el número de hijas e hijos a

cargo. En la tasa de ocupación también hay una clara división generacional. En este sentido,

no existen prácticamente diferencias de género entre las personas menores de 35 años

(siendo incluso la tasa de ocupación femenina algo mayor que la masculina para el grupo de

16 a 24 años), mientras que a partir de los 35 años la distancia de género aumenta de

manera significativa (sobre todo en el grupo de edad de 45 a 54 años).

Tabla 2.7. Tasa de ocupación de población de 16 y más años por grupos de edad y sexo. CAE, 2011


Total 50,1 44,3 56,1 11,8 16-24 años 23,0 23,8 22,2 -1,6 25-34 años 75,0 75,0 75,0 0,0 35-44 años 78,8 73,6 83,7 10,1 45-54 años 75,7 68,0 83,6 15,6 55 y más años 18,6 13,4 25,0 11,6



44

En 2011, la tasa de ocupación de las mujeres con estudios primarios representa la mitad de

la de los hombres. Esta brecha de género se mantiene entre quienes poseen estudios

medios, pero desaparece entre quienes tienen estudios superiores. Las ocupaciones que

requieren menor cualificación marcan mayores diferencias de genero, mientras que un

mayor nivel de instrucción reduce de manera significativa las diferencias de género, ya que

–como puede observarse en la tabla siguiente– a mayor nivel de instrucción, mayor igualdad

entre las tasas de ocupación femenina y masculina. De hecho, la tasa de ocupación de las

mujeres con estudios superiores ha superado ligeramente a la de los hombres.

Tabla 2.8. Tasa de ocupación de población de 16 y más años por nivel de

instrucción y sexo. CAE, 2011


Total 50,1 44,3 56,1 11,8

Estudios primarios 16,0 11,9 22,2 10,3

Estudios medios 59,4 53,2 64,4 11,2

Estudios superiores 72,2 72,4 72,1 -0,3


De forma similar a lo que ocurría con la tasa de actividad, tasa de ocupación total −y

también la segregada por sexo− aumenta progresivamente con el número de hijas e hijos.

Pero según crece el número de menores en las familias vascas, también aumenta la

diferencia de género en esta tasa. De este modo, las personas con dos o más hijas e hijos

presentan la mayor tasa de ocupación independientemente de su sexo y, al mismo tiempo,

la mayor distancia entre mujeres y hombres (63,2 versus 82,6). En el grupo de personas sin

prole esta distancia es menor pero supera los nueve puntos porcentuales.

Tabla 2.9. Tasa de ocupación de la población de 16 y más años por número

de hijas/os a su cargo y sexo. CAE, 2011


Total 50,1 44,3 56,1 11,8

0 40,4 35,7 45,0 9,3

1 56,7 49,9 64,8 14,9

2 o más 72,5 63,2 82,6 19,4



45

Comparando las tasas de ocupación por comunidades autónomas, se aprecia que la brecha

de género en Euskadi se sitúa por debajo de la media estatal. Sin embargo, pese a ser la

comunidad con menor distancia en la tasa de actividad, no ocurre lo mismo al analizar la

ocupación. Así, las comunidades autónomas con menor distancia entre las tasas de

ocupación de mujeres y hombres son Galicia, Asturias, Cataluña, Navarra y Madrid; todas

ellas con diferencias porcentuales menores al 10%, seguidas de la CAE.

Tabla 2.10. Tasa de ocupación de 16 a 64 años según sexo y CC.AA. 2011


Total 58,5 52,8 64,1 11,3

Andalucía 61,3 53,8 68,4 14,6

Aragón 66,2 61,0 71,4 10,4

Asturias 63,4 59,1 67,6 8,5

Balears 55,3 48,7 61,4 12,6

Canarias 60,2 54,6 65,8 11,1

Cantabria 56,0 50,5 61,3 10,7

Castilla - La Mancha 51,9 42,8 60,6 17,8

Castilla y León 66,1 60,6 71,5 11,0

Cataluña 56,2 51,9 60,6 8,6

Comunitat Valenciana 62,6 56,5 68,5 12,0

Euskadi 60,3 55,3 65,3 10,0

Extremadura 56,8 47,5 65,5 18,0

Galicia 60,8 56,9 64,6 7,7

La Rioja 63,0 56,8 69,0 12,2

Madrid 65,0 60,2 70,0 9,8

Murcia 49,6 42,5 56,5 14,0

Navarra 52,1 47,5 56,6 9,1

Ceuta 45,7 32,3 57,9 25,6

Melilla 49,1 37,7 60,7 23,0

Fuente: INE. EPA.

Al comparar la CAE con el entorno europeo, se aprecia que las tasas vascas son muy

similares a la media europea. En 2010, el promedio de la distancia de género en Europa en

la tasa de ocupación era de 11,9 puntos y en Euskadi, ligeramente mayor (12,6). En 2011, la

brecha de género en la CAE se ha reducido a un 10,1%2. Por otra parte, es destacable la

diferencia tan significativa de países como Malta, Grecia o Italia que superan los 20 puntos

de distancia entre las tasas de ocupación de mujeres y de hombres.

2 Según fuentes del EUROSTAT consultadas en el EUSTAT (no se dispone de actualización para

el resto de países).


46

Tabla 2.11. Tasa de ocupación de 16 a 64 años según sexo y país de la UE. 2010


EU 27 64,1 58,2 70,1 11,9

Alemania 71,1 66,1 76,0 9,9

Austria 71,7 66,4 77,1 10,7

Bélgica 62,0 56,5 67,4 10,9

Bulgaria 59,7 56,4 63,0 6,6

C.A. de Euskadi 65,1 58,7 71,3 12,6

Chipre 69,7 63,0 76,6 13,6

Dinamarca 73,4 71,1 75,8 10,6

Eslovaquia 58,8 52,3 65,2 12,9

Eslovenia 66,2 62,6 69,6 4,9

España 58,6 52,3 64,7 12,4

Estonia 61,0 60,6 61,5 0,9

Finlandia 68,1 66,9 69,4 2,5

Francia 63,8 59,7 68,1 8,4

Grecia 59,6 48,1 70,9 22,8

Holanda 74,7 69,3 80,0 10,7

Hungría 55,4 50,6 60,4 9,8

Irlanda 60,0 56,0 63,9 7,9

Italia 56,9 46,1 67,7 21,6

Letonia 59,3 59,4 59,2 -0,2

Lituania 57,8 58,7 56,8 -1,9

Luxemburgo 65,2 57,2 73,1 15,9

Malta 56,1 39,3 72,4 33,1

Polonia 59,3 53,0 65,6 12,6

Portugal 65,6 61,1 70,1 9,0

Reino Unido 69,5 64,6 74,5 9,9

Republica Checa 65,0 56,3 73,5 17,2

Rumanía 58,8 52,0 65,7 13,7

Suecia 72,7 70,3 75,1 4,8

Fuente: EUROSTAT y EUSTAT.

Para comprender la evolución de la actividad en la sociedad vasca, conviene analizar junto

con las tasas de ocupación, las de paro. Desde 1991 hasta 2006 se ha producido un

decremento continuado de esta tasa tanto a nivel general como en el caso de los hombres y,

más aún, en el de las mujeres. Por el contrario, de 2006 a 2011 las tasas de paro han

aumentado para el total de la población, pero algo menos en el grupo de las mujeres que en

el de los hombres. En este sentido, en las dos últimas décadas se aprecia un descenso muy

significativo de la distancia de género en las tasas de paro, pasando de 17,1 puntos de

diferencia (a favor de los hombres) a la desaparición de esa diferencia e incluso a que en


47

2011 la tasa de paro femenino sea inferior a la masculina (1 punto por debajo). Cabe

señalar, por tanto, que con la actual coyuntura de recesión económica y su diferente

incidencia en los diversos sectores, se ha producido un efecto de equiparación de la

situación de mujeres y hombres en las tasas de paro.

Tabla 2.12. Evolución de la tasa de paro de la población de 16 y más

años por sexo y periodo. CAE, 1989-2011


1991 17,3 28,0 10,9 -17,1

1995 23,8 33,0 17,5 -15,5

2001 11,1 16,5 7,5 -9,0

2006 4,1 4,5 3,7 -0,8

2011 10,8 10,3 11,3 1,0


La tasa de paro va disminuyendo a medida que aumenta la edad. Así, para la franja de edad

de 16 a 24 años la tasa de paro supera el 24%, mientras que en las personas mayores de

45, dicha tasa no alcanza el 8%. Estas cifras reflejan la dificultad actual de acceso al

mercado laboral y la importante problemática del desempleo juvenil. Por otro lado, en 2011

la tasa de paro femenina es inferior a la masculina en todos los grupos de edad, lo que

denota una equiparación entre mujeres y hombres, habiéndose invertido la distancia de

género.

Tabla 2.13. Tasa de paro de la población de 16 y más años por grupos de edad y sexo. CAE, 2011


Total 10,8 10,3 11,3 1,0

16 a 24 años 24,1 23,0 25,2 2,2

25 a 44 años 12,1 11,5 12,7 1,1

45 o más años 7,5 7,2 7,8 0,7


El análisis del desempleo en las distintas comunidades autónomas revela que Euskadi es la

que presenta una menor tasa de paro general, y por ende, las menores tasas para mujeres

y hombres. En casi todas las comunidades −salvo en las Ciudades Autónomas de Ceuta y

Melilla− las tasas de paro femeninas son similares a las masculinas. Es decir, no hay

prácticamente distancia de género.


48

Tabla 2.14. Tasa de paro de la población de 16 a 64 años por sexo y CC.AA. 2011


Total 21,8 22,3 21,3 -1,0 Andalucía 30,5 32,5 29,0 -3,5 Aragón 17,2 17,7 16,8 -0,9 Asturias 18,0 17,5 18,3 0,8 Balears 22,0 21,4 22,6 1,2 Canarias 29,9 30,0 29,9 -0,1 Cantabria 15,4 14,4 16,2 1,8 Castilla - La Mancha 23,0 26,2 20,7 -5,5 Castilla y León 16,9 18,6 15,5 -3,1 Cataluña 19,4 18,7 20,0 1,3 Comunitat Valenciana 24,6 24,9 24,3 -0,6 Euskadi 12,1 12,8 11,4 -1,4

Extremadura 25,2 28,5 22,8 -5,7 Galicia 17,5 18,4 16,8 -1,6 La Rioja 17,1 18,0 16,5 -1,5 Madrid 16,8 16,9 16,8 -0,1 Murcia 25,5 25,7 25,4 -0,3 Navarra 13,0 13,7 12,4 -1,3 Ceuta 29,6 39,4 23,3 -16,1 Melilla 24,5 30,4 20,2 -10,2

Fuente: INE. EPA.

Esta tendencia se mantiene en el ámbito europeo, donde la brecha de género en la tasa de

paro es casi nula (-0,2). Esta afirmación es válida para la mayoría de los países, aunque

todavía quedan algunos estados como Irlanda o Lituania donde el desempleo femenino es

superior al masculino.

Tabla 2.15. Tasa de paro de la población de 16 a 64 años por sexo y por país de la U.E. 2011


EU 27 9,7 9,8 9,6 -0,2 Alemania 5,9 5,7 6,2 0,5 Austria - - - - Bélgica 7,2 7,2 7,2 0,0 Bulgaria 11,1 10,0 12,1 2,1 C.A. de Euskadi 10,8 10,3 11,3 1,0

Chipre 7,8 7,7 7,9 0,2 Dinamarca 7,6 7,5 7,7 0,2 Eslovaquia 13,4 13,3 13,4 0,1 Eslovenia 8,1 7,9 8,2 0,3 España 21,7 22,2 21,2 -1,0 Estonia 12,5 11,8 13,1 1,3 Finlandia 7,8 7,1 8,4 1,3 Francia 9,7 10,3 9,1 -1,2 Grecia - - - - Holanda 4,4 4,4 4,5 0,1


49


Hungría 10,9 10,8 11,0 0,2

Irlanda 14,4 10,7 17,4 6,7

Italia - - - -

Letonia - - - -

Lituania 15,4 13,0 17,8 4,8

Luxemburgo 4,8 6,4 3,6 -2,8

Malta 6,4 6,9 6,1 -0,8

Polonia 9,7 10,5 9,0 -1,5

Portugal 12,9 13,2 12,7 -0,5

Reino Unido - - - -

Republica Checa 6,8 7,9 5,9 -2,0

Rumanía 7,4 6,8 7,9 1,1

Suecia 7,5 7,5 7,6 0,1

Fuente: EUSTAT y EUROSTAT. Nota: (-) no hay datos.

La distancia de género tampoco resulta muy significativa según el tiempo de búsqueda de

empleo. Sin embargo, y como consecuencia de la crisis económica, cabe destacar el

elevado porcentaje de personas −tanto de mujeres como de hombres− que lleva más de un

año buscando un puesto de trabajo. En el caso de los hombres el dato para el 2011 es peor

ya que en torno al 26% de los mismos llevan dos o más años en búsqueda de empleo.

Tabla 2.16. Población de 16 y más años (miles) parada por tiempo de búsqueda y sexo. CAE, 2011

Mujeres Hombres

Total abs. Abs. %H %V Abs. %H %V

Menos de 1 mes 5,5 3,0 54,5 4,6 2,5 45,5 3,9 De 1 mes a menos de 3 meses 16,5 8,8 53,3 13,8 7,7 46,7 12,0 De 3 meses a menos de 6 meses 13,4 7,1 53,0 11,3 6,3 47,0 9,8 De 6 meses a menos de 1 año 21,3 9,3 43,7 14,7 12 56,3 18,8 De 1 año a menos de 2 años 31,4 16,3 51,9 25,8 15,1 48,1 23,6 2 años o más 31,3 14,5 46,3 23,0 16,8 53,7 26,3

Fuente: INE. EPA (%H: porcentajes horizontales / %V: porcentajes verticales). Nota: La suma de los porcentajes verticales no es 100, dado que el porcentaje restante corresponde a aquellas personas que en el momento de la realización de la encuesta habían encontrado empleo.

2.1.2. Población activa ocupada: condiciones de trabajo

Como ya se anticipó al comienzo de este apartado, en los últimos veinte años la presencia

de mujeres en el mercado laboral ha aumentado. Estas han pasado de suponer un 32,4%

de la población con actividad laboral en 1991 a un 45,6% en 2011. Asimismo, ha disminuido

el porcentaje femenino de la población con actividad no laboral −personas que no buscan


50

empleo y que realizan tareas del hogar o estudios−, tal y como se aprecia en la siguiente

tabla.

Tabla 2.17. Evolución de la población activa de 16 y más años (porcentajes de mujeres y hombres

sobre la población total) por su relación con la actividad y sexo. CAE, 1991-2011

1991 1995 2001 2006 2011

M H M H M H M H M H

Total 51,2 48,8 51,3 48,7 51,3 46,9 51,4 48,6 51,4 48,6

Población con actividad 55,8 44,2 58,2 41,8 57,0 39,9 56,6 43,4 56,8 43,2

Población con actividad laboral 32,4 67,5 35,2 64,8 38,0 56,8 42,4 57,6 45,6 54,4

Población con actividad no laboral 83,2 16,8 81,4 18,6 82,3 16,7 78,6 21,4 72,2 27,8


La creciente participación de las mujeres en el mercado de trabajo se refleja claramente al

observar la evolución de la población ocupada. Así, la cantidad de mujeres ocupadas ha

pasado de 203.500 en 1996 a 368.800 en 2011, lo que supone un incremento de más de 10

puntos porcentuales. El porcentaje de hombres ocupados respecto a la población ocupada

ha disminuido, a pesar de haber aumentado en números absolutos.

Tabla 2.18. Evolución de la población de 16 y más años ocupada (miles) por sexo. CAE, 1996-2011

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

1996 554,4 203,5 36,7 350,9 63,3

2001 691,1 273,0 39,5 418,2 60,5

2006 788,8 350,3 44,4 438,5 55,6

2011 775,9 368,8 47,5 407,1 52,5


La distancia de género entre la población ocupada aumenta conforme lo hace su edad

−sobre todo a partir de los 35 años−, siendo esta distancia menor en los grupos inferiores a

dicha edad y casi inexistente para la población de 25 a 34 años. Mientras que las mujeres

ocupadas representan prácticamente la mitad de la población ocupada en la franja de edad

de 25 a 34 años, descienden a casi un 41% a partir de los 55 años −descenso que se

percibe ya a partir de los 45 años−. Estas diferencias pueden deberse a las

transformaciones generacionales o a la influencia del trabajo reproductivo adoptado en

mayor medida por mujeres de esos segmentos de edad.


51

Tabla 2.19. Población de 16 y más años ocupada (miles) por edad. CAE, 2011

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Total 928,7 428,6 46,1 500,1 53,9

16-24 35,7 17,3 48,4 18,4 51,6

25-34 219,0 108,3 49,4 110,7 50,6

35-44 285,9 130,8 45,7 154,2 54,3

45-54 258,5 119,0 41,6 139,5 58,4

55 y más 130,6 53,2 40,7 77,4 59,3


Tras constatar la creciente incorporación de las mujeres a la esfera laboral en la CAE, es

necesario conocer cómo es su situación una vez ocupadas. Así, al analizar el sector de

actividad al que acceden las mujeres y los hombres, apreciamos grandes diferencias en

función del sexo. Existen ámbitos altamente masculinizados, como la construcción o la

industria, mientras que el sector servicios es ocupado preferentemente por la población

femenina. Según datos del INE, prácticamente seis de cada diez personas ocupadas en el

sector terciario son mujeres, mientras que nueve de cada diez personas que trabajan en la

construcción y ocho de cada diez de las que lo hacen en la industria, son hombres. Pese a

ser un ámbito feminizado, el sector servicios es el que mayor porcentaje de personas

ocupadas acoge en la CAE, en concreto al 88,3% de mujeres y al 54,4% de hombres.

Tabla 2.20. Población de 16 y más años ocupada (miles) por sector y sexo. CAE, 2011

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. %H %V Abs. %H %V

Total 931,6 431,1 46,3 100,0 500,5 53,7 100,0

Agricultura 9,8 3,1 31,6 0,7 6,7 68,4 1,3

Industria 205,7 42,2 20,5 9,8 163,6 79,5 32,7

Construcción 63,2 5,3 8,4 1,2 57,9 91,6 11,6

Servicios 652,9 380,6 58,3 88,3 272,3 41,7 54,4

Fuente: INE. EPA. Nota: %H: porcentajes horizontales; %V: porcentajes verticales.

La distribución de las personas ocupadas en las diferentes ramas de actividad muestra con

mayor detalle las brechas de género existentes. Las actividades artísticas y los puestos en

la Administración Pública −que incluyen la educación, la sanidad y los servicios sociales−

están mayormente ocupados por mujeres, mientras que la construcción y la industria se


52

nutren principalmente de hombres. Las ramas de actividad que más mujeres acogen son la

Administración Pública (31,9%) seguida del comercio (25,9%).

Tabla 2.21. Población de 16 y más años ocupada por rama de actividad y sexo. CAE, 2011.

Mujeres Hombres


Total 431,1 46,3 100,0 500,5 53,7 100,0

Agricultura 3,1 31,6 0,7 6,7 68,4 1,3

Total industria 42,2 20,5 9,8 163,6 79,5 32,7

Industrias (2) 1,3 16,7 0,3 6,5 83,3 1,3

Industria manufacturera 40,8 20,6 9,5 157,1 79,4 31,4

Construcción 5,3 8,4 1,2 57,9 91,6 11,6

Comercio (1) 111,7 50,4 25,9 110,1 49,6 22,0

Inform. y comunicaciones 12,5 42,7 2,9 16,8 57,3 3,4

Actividades financieras y de seguros 13,4 53,8 3,1 11,5 46,2 2,3

Actividades inmobiliarias 1,2 50,0 0,3 1,2 50,0 0,2

Actividades profesionales (3) 52,7 54,4 12,2 44,1 45,6 8,8

Administración pública (4) 137,6 65,1 31,9 73,9 34,9 14,8

Actividades artísticas (5) 51,5 77,8 11,9 14,7 22,2 2,9

Fuente: INE. EPA. Nota: (1) Comercio al por mayor y al por menor, reparación de vehículos de motor y motocicletas; transporte y almacenamiento; hostelería. (2) Industrias extractivas; suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado; suministro de agua, actividades de saneamiento, gestión de residuos y descontaminación. (3) Actividades profesionales, científicas y técnicas; actividades administrativas y servicios auxiliares. (4) Administración Pública y defensa, Seguridad Social obligatoria; educación; actividades sanitarias y de servicios sociales. (5) Actividades artísticas recreativas y de entretenimiento; hogares como empleadores domésticos y como productores de bienes y servicios para uso propio; actividades de organizaciones y organismos extraterritoriales; otros servicios.

Junto con los sectores y las ramas de actividad, el Eustat dispone de estadísticas sobre

actividades de investigación científica y desarrollo tecnológico en Euskadi. Según datos de

2010, el número de personas ocupadas equivalentes a dedicación plena en este campo ha

sido de 17.531 personas, de las cuales casi siete de cada diez son hombres. Salvo en el

caso de las ciencias médicas que disponen de más mujeres que hombres, en el resto de

áreas predominan los hombres, destacando en particular el campo de la ingeniería. La

presencia de mujeres es mayor en la categoría más baja, la de auxiliares, con especial

relevancia en las ciencias médicas, sociales o, incluso, en las exactas. Para concluir se

puede afirmar que la paridad entre mujeres y hombres en el campo de la investigación

todavía queda muy lejos.


53

Tabla 2.22. Personal E.D.P. por campo o disciplina científica, ocupación y sexo. CAE, 2010

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Total 17.531,9 5.862,6 33,4 11.669,3 66,6

CC. exactas 2.060,4 946,3 45,9 1.114,2 54,1

Ingeniería 12.205,4 3.189,9 26,1 9.015,4 73,9

CC. médicas 1.585,3 903,4 57,0 681,9 43,0

CC. agrarias 377,5 182,7 48,4 194,8 51,6

CC. sociales 1.303,3 640,3 49,1 663,0 50,9

Investigadoras/es 11.070,8 3.760,4 34,0 7.310,4 66,0

CC. exactas 1.717,7 762,7 44,4 955,0 55,6

Ingeniería 7.096,9 1.898,0 26,7 5.198,9 73,3

CC. médicas 1.020,8 532,4 52,2 488,4 47,8

CC. agrarias 277,0 105,2 38,0 121,7 43,9

CC. sociales 1.008,6 462,1 45,8 546,5 54,2

Técnicas/os 5.006,2 1.493,3 29,8 3.512,9 70,2

CC. exactas 238,0 117,8 49,5 120,2 50,5

Ingeniería 4.032,0 933,9 23,2 3.098,0 76,8

CC. médicas 455,4 283,2 62,2 172,1 37,8

CC. agrarias 94,8 63,8 67,3 31,0 32,7

CC. sociales 186,1 94,5 50,8 91,6 49,2

Auxiliares 1.454,9 609,0 41,9 845,9 58,1

CC. exactas 104,8 65,8 62,8 39,0 37,2

Ingeniería 1.076,5 358,0 33,3 718,5 66,7

CC. médicas 109,2 87,8 80,4 21,4 19,6

CC. agrarias 55,8 13,6 24,4 42,1 75,4

CC. sociales 108,6 83,7 77,1 24,9 22,9

Fuente: EUSTAT. Estadística sobre actividades de investigación científica y desarrollo tecnológico. Nota: E.D.P. (Equivalencia a Dedicación Plena) se obtiene sumando el personal de dedicación plena más las fracciones de tiempo que el personal de dedicación parcial dedica actividades de I+D.

En cuanto a las condiciones laborales de las personas ocupadas, la evidencia empírica

muestra que todavía existen grandes desigualdades entre mujeres y hombres. Aunque

desde 1996 la proporción de mujeres asalariadas ha ido aumentando progresivamente, su

situación de precariedad frente a los hombres se ha mantenido. De las 18.700 personas

asalariadas sin contrato contabilizadas en 2011, prácticamente nueve de cada diez (86,6%)

eran mujeres. Del mismo modo, las mujeres con contrato fijo o indefinido constituyen un

porcentaje inferior al de los hombres −a pesar de que este aspecto ha mejorado

notablemente en los últimos años− y, por el contrario, superan a estos en la categoría de

contratos temporales (53,7%).


54

Tabla 2.23. Evolución de la población ocupada asalariada de 16 y más años (en miles) por tipo de

contrato y sexo. CAE, 1996-2011

Mujeres Hombres

Total abs.


1996

Total 554,4 203,5 36,7 100,0 350,9 63,3 100,0

Indefinido-fijo 359,6 112,6 31,3 55,3 247,0 68,7 70,4

Temporal 157,7 58,7 37,2 28,8 98,9 62,7 28,2

Sin contrato y otros 37,1 32,1 86,5 15,8 5,0 13,5 1,4

2001

Total 691,1 273,0 39,5 100,0 418,2 60,5 100,0

Indefinido-fijo 473,7 166,2 35,1 60,9 307,5 64,9 73,5

Temporal 192,5 85,1 44,2 31,2 107,4 55,8 25,7


2006

Total 788,8 350,3 44,4 100,0 438,5 55,6 100,0

Indefinido-fijo 562,6 230,3 40,9 65,7 332,3 59,1 75,8

Temporal 199,6 97,3 48,7 27,8 102,3 51,3 23,3


2011

Total 775,9 368,8 47,5 100,0 407,1 52,5 100,0

Indefinido-fijo 601,5 269,1 44,7 73,0 332,5 55,3 81,7

Temporal 155,7 83,6 53,7 22,7 72,1 46,3 17,7


Fuente: EUSTAT. PRA. Nota: %H: porcentajes horizontales; %V: porcentajes verticales.

Uno de los retos de futuro es el estudio de los efectos de la ocupación parcial femenina. La

conciliación de la vida laboral y familiar no se ha traducido en corresponsabilidad. Las

medidas para incentivar la parcialidad y promover la conciliación y el cuidado impulsadas

desde la Administración Pública siguen adoptándose en su mayoría por mujeres y este

hecho tiene consecuencias en su autonomía económica, en sus opciones de promoción

profesional y en su acceso a las prestaciones por desempleo y jubilación.

El análisis de la jornada laboral por comunidad autónoma muestra claramente el

desequilibrio que persiste entre mujeres y hombres a la hora de asumir una jornada a tiempo

parcial, evidenciando una vez más la gran feminización de este tipo de jornada. Euskadi

supera la media estatal en cuanto al porcentaje de mujeres ocupadas a tiempo parcial,

mientras que en el caso de la jornada a tiempo completo su situación es análoga a la del

resto del Estado.


55

Tabla 2.24. Población ocupada (miles) según comunidad autónoma, tipo de jornada y sexo. 2011

Jornada a tiempo completo Jornada a tiempo parcial Total %M %H Total %M %H

Total 15.601,8 39,8 60,2 2.502,9 76,0 24,0 Andalucía 2.360,6 37,1 62,9 415,7 73,0 27,0 Aragón 463,7 38,8 61,2 74,2 77,8 22,2 Asturias 347,6 42,0 58,0 46,6 82,2 18,0 Balears 399,4 41,7 58,3 61,1 72,5 27,5 Canarias 674,9 41,5 58,5 103,3 69,0 30,9 Cantabria 208,4 40,1 59,8 27,0 84,8 15,2 Castilla - La Mancha 674,3 34,8 65,2 96,3 80,5 19,5 Castilla y León 853,6 37,5 62,5 130,9 78,7 21,3 Cataluña 2.661,4 41,6 58,4 418,2 77,7 22,3 Comunitat Valenciana 1.572,0 38,6 61,4 316,8 74,1 25,8 Euskadi 788,5 40,0 59,9 143,1 80,6 19,4

Extremadura 318,9 33,9 66,1 51,2 79,9 20,1 Galicia 951,0 41,9 58,1 132,0 76,8 23,2 La Rioja 110,0 37,3 62,7 20,0 83,0 17,0 Madrid 2.476,2 43,3 56,7 340,7 74,2 25,8 Murcia 470,0 37,1 62,9 80,1 74,2 25,7 Navarra 229,9 38,1 61,9 39,9 84,0 15,8 Ceuta 21,0 31,2 69,0 2,7 55,6 43,2 Melilla 20,4 32,4 67,6 3,1 80,6 19,4

Fuente: INE. EPA. Nota: M: porcentajes de mujeres; H: porcentajes de hombres.

Junto con el tipo de jornada, otra variable que refleja la desigualdad en las condiciones

laborales es la situación profesional. Así, por ejemplo, entre las personas que trabajan por

cuenta propia, las mujeres representan un 33% frente al 67% que alcanzan los hombres.

Una situación similar se da entre las personas empleadoras y las empresarias. La situación

se equipara algo más entre los miembros de las cooperativas, aunque las mujeres ocupadas

en este sector siguen suponiendo un porcentaje inferior al de los hombres. Únicamente

entre las personas que trabajan en ayuda familiar y las asalariadas del sector público las

mujeres superan a los hombres.

Tabla 2.25. Población de 16 y más años (miles) ocupada por situación profesional. CAE, 2011

Mujeres Hombres


Total 932,2 431,7 46,3 500,5 53,7 Trabajador/a por cuenta propia 145,5 48,2 33,1 97,3 66,9 Empleador/a 45,0 15,6 34,6 29,4 65,3 Empresaria/o sin asalariadas/os 85,8 29,3 34,1 56,4 65,7 Miembro de cooperativa 20,8 8,4 40,4 12,4 59,6 Ayuda familiar 4,5 3,1 68,9 1,4 31,1 Asalariadas/os 786,7 371,5 47,2 415,2 52,7 Asalariadas/os del sector público 143,6 83,5 58,1 60,1 41,8 Asalariadas/os del sector privado 643,1 293,0 45,6 350,1 54,4 Otra situación profesional 0,2 0,2 - - -

Fuente: INE. EPA. Nota: Porcentajes horizontales.


56

La Educación es uno de los ámbitos del sector público que mayor número de personas

emplea y, concretamente, el que ocupa a un mayor número de mujeres. La docencia

constituye un espacio muy feminizado, salvo en el caso de la Formación Profesional, las

enseñanzas universitarias y las relacionadas con las enseñanzas deportivas, donde

predominan los hombres. Por otra parte, como cabría esperar por su asociación con el

mandato de género referido al cuidado, el mayor porcentaje de mujeres ocupadas se da en

la educación infantil (91,5%).

Tabla 2.26. Personal docente total por sexo y nivel. CAE, 2010-11

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Enseñanzas de régimen general 40.837 27.694 67,8 13.143 32,2

Niveles no universitarios (1) 35.093 25.394 72,4 9.699 27,6

Educación infantil-primaria 17.752 15.112 85,1 2.640 14,9

Educación infantil 9.095 8.321 91,5 774 8,5

Educación primaria 11.248 8.947 79,5 2.301 20,5

Educación especial (2) 527 404 76,7 123 23,3

Educación secundaria 15.475 9.045 58,4 6.430 41,6

Educación secundaria obligatoria (ESO) 10.132 6.622 65,4 3.510 34,6

Programas de cualificación profesional inicial (PCPI) 681 341 50,1 340 49,9

Bachillerato (3) 5.037 3.005 59,7 2.032 40,3

Formación profesional (FP) 3.663 1.504 41,1 2.159 58,9

Educación de personas adultas (EPA) 765 546 71,4 219 28,6

Estudios universitarios 5.744 2.300 40,0 3.444 60,0

Enseñanzas de régimen especial 1.224 662 54,1 562 45,9

Artes plásticas y diseño (4) 86 42 48,8 44 51,2

Idiomas 378 294 77,8 84 22,2

Música 674 318 47,2 356 52,8

Danza 10 7 70,0 3 30,0

Deportivas 76 1 1,3 75 98,7

Fuente: EUSTAT. Estadística de la Enseñanza. Nota: (1) Cada docente aparece contabilizado tantas veces como niveles imparte, pero solo una vez en los

totales correspondientes; (2) Docente que imparte en aulas específicas de educación especial; (3) Docente

que imparte Bachillerato presencial y/o a distancia; (4) Incluye al personal docente que imparte enseñanzas

artísticas superiores.

Tal y como acabamos de mencionar, la distancia de género se mantiene en el ámbito

universitario, donde predomina el profesorado masculino, independientemente de que el

centro sea público o privado. Como se observa en la tabla, en el curso 2010-11 el 60% del

personal docente eran hombres.


57

Tabla 2.27. Profesorado en las universidades de la CAE por sexo. 2010-11

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Total 5.744 2.300 40,0 3.444 60,0

Universidad pública 4.543 1.838 40,5 2.705 59,5

Universidad privada 1.201 462 38,5 739 61,5

Fuente: EUSTAT. Estadística de la Enseñanza.

Entre el personal de administración y servicios de la universidad, la feminización es clara en

las universidades privadas (Universidad de Deusto y Universidad de Mondragón), donde

más de siete de cada diez personas ocupadas son mujeres. En la Universidad del País

Vasco el porcentaje de mujeres es superior al de los hombres entre el funcionariado,

relación que se invierte entre el personal con contrato temporal o indefinido.

Tabla 2.28. Personal de administración y servicios por universidad, tipo de relación contractual y

sexo. CAE, 2010-11

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Universidad del País Vasco

Total 1.827 1.149 62,9 678 37,1

Funcionarias/os 1.322 986 74,6 336 25,4

Contrato indefinido 110 36 32,7 74 67,3

Contrato temporal 395 127 32,2 268 67,8

Universidad de Deusto

Total 461 328 71,1 133 28,9



Universidad de Mondragón

Total 107 77 72,0 30 28,0



Fuente: INE. Enseñanza Universitaria.

Junto con la Educación, la Sanidad es otro campo importante de empleo dentro de la

Administración Pública. Según los datos de la Memoria de Osakidetza de 2010, el

porcentaje total de mujeres empleadas es superior al de hombres. En este ámbito, alrededor

de siete de cada diez personas ocupadas son mujeres.


58

El análisis de las categorías profesionales, muestra que este sector constituye un claro

ejemplo del mantenimiento de los roles tradicionales de género. Así, mientras que entre las

matronas y el personal de enfermería o auxiliar de enfermería, nueve de cada diez personas

son mujeres, entre el personal de mantenimiento nueve de cada diez son hombres. Ellos

constituyen asimismo en torno a las tres cuartas partes de las y los celadores. Cabe

destacar, no obstante, que en el sector sanitario se está logrando una paridad en las

categorías correspondientes al personal facultativo y a los cargos directivos. Entre estos

últimos, el porcentaje de mujeres es algo superior al de los hombres (52,5 y 47,5%

respectivamente).

Tabla 2.29. Personal de Osakidetza por colectivo profesional y sexo (%).CAE, 2010

Mujeres Hombres

Total 66,0 34,0

Cargos directivos 52,5 47,5

Facultativas/os médicas/os-técnicas/os 48,1 51,9

Matrona 97,6 2,4

Otras/os diplomadas/os sanitarios 75,1 24,9

Enfermera/o 92,0 8,0

Técnica/o especialista 89,3 10,7

Auxiliar de enfermería 95,0 5,0

Función administrativa 81,2 18,8

Personal de mantenimiento 6,8 93,2

Servicios generales 76,3 23,7

Celadoras/es 27,0 73,0

Administración general 50,8 49,2

Fuente: Memoria Osakidetza 2010.

En el gráfico de la página siguiente se aprecia nítidamente la feminización del trabajo en el

ámbito sanitario en general, así como las grandes brechas de género que persisten en

profesiones consideradas socialmente como típicamente femeninas (matronas) o

típicamente masculinas (mantenimiento).


59

Grafico 2.1. Distribución del personal de Osakidetza según colectivo profesional y sexo.

CAE, 2010

Fuente: Memoria Osakidetza 2010.

Por último, mostramos los datos del personal ocupado en los Servicios Sociales, que

constituye el ámbito laboral que muestra una mayor feminización. En prácticamente todas

las categorías analizadas en este campo, siete de cada diez personas son mujeres y esta

cifra asciende a nueve en casos como limpieza, auxiliares de clínica o profesionales del

Trabajo Social.

Tabla 2.30. Personal ocupado de los servicios sociales por cualificación y sexo. CAE, 2010

Mujeres Hombres


Total personal 26.220 18.321 69,8 7.899 30,2 Dirección-Administración 3.805 2.664 70,0 1.141 30,0 Personal de servicio 2.349 1.938 82,5 411 17,5

- Hostelería 709 599 84,4 110 15,6 - Limpieza 1.114 1.072 96,2 42 3,8 - Otros 526 267 50,8 259 49,2

Personal sanitario 6.851 6.223 90,8 628 9,2 - Médicas/os 246 128 52,0 118 48,0 - ATS y fisioterapia 882 769 87,2 113 12,8 - Auxiliares clínica 5.523 5.159 93,4 364 6,6 - Terapeuta ocupacional 200 167 83,5 33 16,5

52,5

47,5

48,1

51,9

97,6

2,4

76,1

23,9

91,9

8,1

89,3

10,7

95

5

81,2

18,8

6,9

93,1

76,3

23,727

73

50,849,2

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

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icio

s ge

nera

les

Cela

dor/

a

Adm

inis

trac

ión

gene

ral

Mujeres Hombres


60

Mujeres Hombres


Personal técnico 2.118 1.860 87,8 258 12,2 - Psicólogas/os y pedagogas/os 781 630 80,7 151 19,3 - Trabajador/a social 1.286 1.188 92,4 98 7,6 - Téc. prevención drogas 51 42 82,4 9 17,6

Personal educativo 3.205 2.070 64,6 1.135 35,4 - Educadoras/es y profesorado 1.454 1.009 69,4 445 30,6 - Monitoras/es CEE (1) 1.582 921 58,2 661 41,8 - Animadoras/es socioculturales 169 140 82,8 29 17,2

Otro personal 1.439 1.153 80,1 286 19,9 - Servicios personales (2) 952 801 84,1 151 15,9 - Otros 487 352 72,3 135 27,7

Personas trabajadoras usuarias CEE 6.453 4.040 62,6 2.413 37,4

Fuente: Eustat. Servicios Sociales y Acción Social. Nota: (1) Centros Especiales de Empleo; (2) cuidadoras/es, asistentas/es a domicilio.

Por otra parte, en cuanto al contexto laboral actual y la recesión económica, cabe señalar

que las mujeres se han visto menos afectadas que los hombres por los expedientes de

regulación de empleo (EREs). En 2010, el último año del que se dispone de datos, más del

80% de las personas afectadas por EREs eran hombres.

Tabla 2.31. Personas afectadas por EREs por sexo. CAE, 1991-2010

Mujeres Hombres


1991 61.983 4.923 7,9 57.060 92,1 1992 69.315 6.745 9,7 62.570 90,3 1993 86.166 9.901 11,5 76.265 88,5 1994 48.041 5.354 11,1 42.687 88,9 1995 20.599 2.799 13,6 17.800 86,4 1996 11.816 1.933 16,4 9.883 83,6 1997 17.480 2.427 13,9 15.053 86,1 1998 7.814 1.244 15,9 6.570 84,1 1999 7.043 1.342 19,1 5.701 80,9 2000 6.257 1.174 18,8 5.083 81,2 2001 5.792 1.077 18,6 4.715 81,4 2002 5.650 1.352 23,9 4.298 76,1 2003 12.035 1.911 15,9 10.124 84,1 2004 5.614 1.028 18,3 4.586 81,7 2005 6.158 988 16,0 5.170 84,0 2006 3.338 664 19,9 2.674 80,1 2007 4.815 786 16,3 4.029 83,7 2008 12.794 2.398 18,7 10.396 81,3 2009 68.812 11.875 17,3 56.937 82,7 2010 35.426 6.590 18,6 28,836 81,4 2011 22.072 - - - -

Fuente: EUSTAT. Panorama Laboral. Nota: (-) no se dispone de datos.


61

2.2. Autonomía económica

Para avanzar en el camino hacia la igualdad de género es imprescindible que las mujeres

dispongan de autonomía económica, lo que está estrechamente relacionado con su

situación laboral. La autonomía económica es una variable que refleja con claridad las

desigualdades de género. Para medirla nos fijaremos en el indicador de la renta media

personal, que mide la distancia de género, y en el índice de feminización de la renta, que

resulta de dividir la renta de las mujeres entre la de los hombres. Cuanto más se acerque

este índice a uno, mayor será el grado de paridad.

Si observamos la evolución de la renta en los últimos años, podemos apreciar claramente

que la renta media personal de las mujeres es notablemente inferior a la de los hombres (en

torno a 11.000 euros menos). El análisis diacrónico muestra que en los últimos años, la

brecha de género ha seguido una tendencia ascendente, aunque en el periodo 2006-2009

se ha producido una ligera disminución de la misma.

Tabla 2.32. Evolución de la renta media personal por sexo (euros). CAE, 2001-09

Mujeres Hombres H-M M/H

2001 7.840 17.820 9.980 0,44

2003 8.744 18.846 10.102 0,46

2006 11.857 23.224 11.367 0,51

2009 14.242 25.376 11.134 0,56

Fuente: EUSTAT. Renta Familiar. Nota: M/H: renta mujeres entre renta hombres (índice de feminización), Idem. en tablas siguientes.

Como podemos observar en la siguiente tabla, la disparidad de género en la renta media

personal se mantiene en todos los grupos de edad. En 2009, esta distancia es menor entre

la población menor de 35 años, especialmente en los segmentos de edad más jóvenes. Por

el contrario, la brecha de género se agudiza entre los 55 y los 65 años. Es decir, podemos

decir que la brecha económica entre mujeres y hombres aumenta conforme lo hace la edad

y vuelve a disminuir a partir de la edad de jubilación.


62

Tabla 2.33. Evolución de la renta media personal por sexo y edad. CAE, 2001-09

2001 2003 2006 2009

Mujeres Hombres H-M M/H Mujeres Hombres H-M M/H Mujeres Hombres H-M M/H Mujeres Hombres H-M M/H

Total 7.840 17.820 9.980 0,44 8.744 18.846 10.102 0,46 11.857 23.224 11.367 0,51 14.242 25.376 11.134 0,56

18-19 años 512 1.414 902 0,36 431 1.136 705 0,38 1.238 2.747 1.509 0,45 899 1.327 428 0,68

20-24 años 2.984 5.985 3.001 0,50 3.220 6.199 2.979 0,52 4.678 7.850 3.172 0,60 5.030 6.825 1.795 0,74

25-29 años 8.193 12.439 4.246 0,66 9.063 13.224 4.161 0,69 11.687 15.684 3.997 0,75 13.295 15.812 2.517 0,84

30-34 años 9.758 16.463 6.705 0,59 10.689 17.304 6.615 0,62 14.389 20.830 6.441 0,69 16.686 21.751 5.065 0,77

35-39 años 10.587 19.184 8.597 0,55 11.212 19.896 8.684 0,56 13.770 23.653 9.883 0,58 16.545 24.971 8.426 0,66

40-44 años 11.605 21.933 10.328 0,53 12.468 22.757 10.289 0,55 14.739 26.280 11.541 0,56 16.841 27.565 10.724 0,61

45-49 años 11.082 24.476 13.394 0,45 12.720 25.444 12.724 0,50 15.848 29.003 13.155 0,55 18.383 30.396 12.013 0,60

50-54 años 8.725 26.593 17.868 0,33 10.818 28.015 17.197 0,39 15.072 32.126 17.054 0,47 18.955 33.157 14.202 0,57

55-59 años 6.704 26.068 19.364 0,26 8.138 27.980 19.842 0,29 12.238 33.568 21.330 0,36 16.501 37.023 20.522 0,45

60-64 años 5.750 21.360 15.610 0,27 6.763 23.800 17.037 0,28 10.103 29.869 19.766 0,34 12.936 33.856 20.920 0,38

65-69 años 5.740 17.194 11.454 0,33 6.270 18.487 12.217 0,34 9.068 24.061 14.993 0,38 11.336 29.880 18.544 0,38

70-74 años 6.128 15.789 9.661 0,39 6.564 16.439 9.875 0,40 9.034 20.929 11.895 0,43 10.415 24.353 13.938 0,43

75-79 años 6.690 14.715 8.025 0,45 7.193 14.868 7.675 0,48 9.557 19.416 9.859 0,49 10.936 22.847 11.911 0,48

80-84 años 6.987 13.658 6.671 0,51 7.397 13.591 6.194 0,54 10.290 18.192 7.902 0,57 12.043 21.399 9.356 0,56

85-89 años 6.749 12.275 5.526 0,55 6.947 10.856 3.909 0,64 11.297 18.276 6.979 0,62 12.766 20.517 7.751 0,62

90-94 años 6.382 10.408 4.026 0,61 5.515 7.556 2.041 0,73 10.620 16.996 6.376 0,62 12.885 20.059 7.174 0,64

95 y más 5.538 9.572 4.034 0,58 2.783 2.977 194 0,93 9.289 13.147 3.858 0,71 12.411 17.730 5.319 0,70

Fuente: EUSTAT. Renta Familiar.


63

Teniendo en cuenta el territorio histórico, observamos que en todos ellos la renta media de

las mujeres es inferior a la de los hombres. Además, dicha renta ha aumentado algo más

entre los segundos que entre las primeras durante el periodo 2001-2009. La menor renta

media personal femenina corresponde a Bizkaia, aunque la distancia de género es

relativamente similar en los tres territorios. Con todo, en los últimos años se detecta una

mejoría en el índice de feminización de la renta media personal, que ha pasado de 0,44 en

2001 a 0,56 en 2009, lo que indica que parecen darse ciertos pasos hacia una mayor

equidad.

Tabla 2.34. Evolución de la renta media personal por sexo y territorio histórico. CAE, 2001-09

Total Mujeres Hombres H-M M/H

2001

Total 12.676 7.840 17.820 9.980 0,44

Araba/Álava 13.266 8.308 18.358 10.050 0,45

Gipuzkoa 13.022 8.301 18.007 9.706 0,46

Bizkaia 12.321 7.454 17.569 10.115 0,42

2009

Total 19.631 14.242 25.376 11.134 0,56

Araba/Álava 19.657 14.652 24.727 10.075 0,59

Gipuzkoa 20.270 14.811 26.049 11.238 0,57

Bizkaia 19.241 13.796 25.149 11.353 0,55

Fuente: EUSTAT. Estadística de Renta Personal y Familiar.

La renta de trabajo de las personas ocupadas es un indicador muy representativo de la

desigualdad salarial entre las mujeres y los hombres. Esta desigualdad ha aumentado en el

periodo 2001-2006, mientras que el índice de feminización se ha mantenido en un 0,66. Al

observar los datos en virtud de la situación profesional, se aprecia que la distancia de

género es aún muy significativa en todas ellas, en particular en las rentas de las personas

empresarias. Estas disparidades han aumentado en 2006 con respecto a 2001 en todos los

casos analizados.


64

Tabla 2.35. Evolución de la renta personal de trabajo de las personas

ocupadas según situación profesional y sexo. CAE, 2001-06

Mujeres Hombres H-M M/H

Total

2001 14.267 21.492 7.225 0,66

2003 16.833 23.859 7.026 0,71

2006 18.006 27.147 9.141 0,66

Empresaria/o

2001 16.699 27.487 10.788 0,61

2003 20.946 30.056 9.110 0,70

2006 20.865 35.288 14.423 0,59

Autónoma/o

2001 9.139 13.778 4.639 0,66

2003 11.773 15.331 3.558 0,77

2006 14.511 21.166 6.655 0,69

Cooperativista

2001 17.549 26.967 9.418 0,65

2003 19.587 28.445 8.858 0,69

2006 21.247 33.108 11.861 0,64

Asalariada/o

2001 17.172 24.511 7.339 0,70

2003 19.686 27.209 7.523 0,72

2006 20.804 30.239 9.435 0,69

Eventual

2001 9.611 13.179 3.568 0,73

2003 12.260 15.862 3.602 0,77

2006 12.897 17.625 4.728 0,73

Ayudas familiares

2001 3.432 7.148 3.716 0,48

2003 6.495 9.802 3.307 0,66

2006 7.420 13.969 6.549 0,53


En la misma línea que en la tabla anterior, al observar la profesión vemos que entre 2001 y

2003 se ha producido una ligera disminución de la distancia de género en las rentas de

trabajo, mientras que entre 2003 y 2006 dicha distancia aumenta sustancialmente, siendo

más acusada que en 2001. La desigualdad salarial se aprecia en todas la categorías

analizadas y se agudizan especialmente en los puestos de dirección y gerencia, y en el

personal profesional técnico.


65

Tabla 2.36. Evolución de la renta personal de trabajo de personas

ocupadas según profesión y sexo. CAE, 2001-06

Renta total Mujeres Hombres H-M

Total 2001 18.678 14.267 21.492 7.225 2003 21.160 16.833 23.859 7.026 2006 23.237 18.006 27.147 9.141

Director/a gerente 2001 28.836 16.596 34.161 17.565 2003 32.673 21.171 37.229 16.058 2006 26.684 17.149 35.229 18.080

Profesional técnico 2001 27.110 22.891 31.873 8.982 2003 30.901 26.338 36.000 9.662 2006 34.021 28.016 40.988 12.972

Técnica/o de apoyo 2001 20.452 16.525 23.358 6.833 2003 22.812 18.557 26.157 7.600 2006 25.482 20.093 30.047 9.954

Empleada/o administrativa/o 2001 18.667 15.416 23.081 7.665 2003 21.553 18.278 26.020 7.742 2006 24.554 19.529 29.847 10.318

Comerciante, camarera/o 2001 11.321 9.645 14.864 5.219 2003 13.378 11.622 16.982 5.360 2006 15.635 13.086 20.675 7.589

Agricultor/a, pescador/a 2001 10.728 6.179 11.878 5.699 2003 12.553 8.485 13.419 4.934 2006 15.448 10.563 16.828 6.265

Trabajador/a cualificada/o 2001 17.430 11.490 17.881 6.391 2003 19.470 12.710 19.992 7.282 2006 22.110 15.894 23.127 7.233

Operador/a maquinaria 2001 18.154 14.280 18.718 4.438 2003 20.190 15.528 20.898 5.370 2006 23.228 16.936 24.668 7.732

Trabajador/a no cualificada/o 2001 11.169 7.288 16.399 9.111 2003 13.506 9.828 17.609 7.781 2006 15.353 10.875 20.553 9.678


Por sectores de actividad se observa que, genéricamente, la distancia de género ha

aumentado en 2010 con respecto a 2009, pasando a suponer 7.003 euros frente a los 6.387

del año anterior. Las mayores disparidades se producen en el sector servicios, que es

precisamente el que ocupa a un mayor número de mujeres.


66

Tabla 2.37. Desigualdad salarial media anual por sexo, y sector de actividad. CAE, 2008-10


2008

Total 25.547 21.766 28.264 6.498

Industria 28.670 24.062 29.781 5.719

Construcción 25.376 -23.139 25.729 2.590

Servicios 24.248 21.377 27.785 6.409

2009

Total 26.162 22.502 28.890 6.388

Industria 28.585 24.502 29.469 4.967

Construcción 25.346 - 25.770 -

Servicios 25.324 22.260 29.213 6.953

2010

Total 26.594 22.706 29.709 7.003

Industria 29.626 25.351 30.592 5.241

Construcción 25.579 -25.125 25.646 521

Servicios 25.591 22.337 29.980 7.643

Fuente: INE. Encuesta de Estructura Salarial. Nota: Cuando un dato está precedido de un signo "-", indica que el número de observaciones muestrales está comprendido entre 100 y 500, lo que supone que la cifra es poco fiable. Cuando en la casilla aparece "-" significa que no se facilita el dato correspondiente porque el número de observaciones es inferior a 100.

Considerando el tipo de contrato, se constata que las mayores diferencias salariales se

producen entre las personas que tienen un contrato de duración indefinida, habiendo

aumentado en 2010 con respecto a los años anteriores. Los únicos datos que nos acercan a

la igualdad salarial sin llegar a lograrla son los relacionados con contratos de duración

determinada, en los cuales la distancia de género se sitúa en torno a los 1.500 euros

anuales.

Tabla 2.38. Desigualdad salarial media anual por sexo, y tipo de contrato. CAE, 2008-10


2008

Total 25.547 21.766 28.264 6.498 0,77

Duración indefinida 27.477 22.759 30.794 8.035 0,74

Duración determinada 19.234 18.684 19.658 974 0,95

2009

Total 26.162 22.502 28.890 6.388 0,78


Duración determinada 20.806 20.118 21.347 1.229 0,94

2010

Total 26.594 22.706 29.709 7.003 0,76


Duración determinada 19.451 18.636 20.176 1.540 0,92

Fuente: INE. Encuesta de Estructura Salarial.


67

La Encuesta de Estructura Salarial del INE ofrece datos similares a los publicados por el

Eustat sobre la renta media personal y que se han analizado previamente. Así, las

diferencias salariales aumentan conforme aumenta la edad hasta los 55 años y son menores

entre las personas más jóvenes.

Tabla 2.39. Desigualdad salarial media anual por sexo y edad. CAE, 2008-10


2008 Todas las edades 25.547 21.766 28.264 6.498 0,77 Menos de 25 años 15.406 -13.310 -16.687 3.377 0,80 De 25 a 34 años 22.233 19.567 24.654 5.087 0,79 De 35 a 44 años 25.649 21.507 28.864 7.357 0,75 De 45 a 54 años 29.262 25.297 31.997 6.700 0,79 55 y más años 28.102 23.960 29.821 5.861 0,80

2009 Todas las edades 26.162 22.502 28.890 6.388 0,78 Menos de 25 años -15.821 -14.686 -16.609 -1.923 0,88 De 25 a 34 años 22.590 20.247 24.699 4.452 0,82 De 35 a 44 años 26.149 22.496 29.169 6.673 0,77 De 45 a 54 años 29.480 25.342 32.367 7.025 0,78 55 y más años 28.167 23.439 30.562 7.123 0,77

2010 Todas las edades 26.594 22.706 29.709 7.003 0,76 Menos de 25 años -16.080 -13.691 -17.638 -3.947 0,78 De 25 a 34 años 22.785 20.550 24.963 4.413 0,82 De 35 a 44 años 26.550 22.721 29.919 7.198 0,76 De 45 a 54 años 30.716 25.339 34.670 9.331 0,73 55 y más años 28.861 25.007 30.995 5.988 0,81

Fuente: INE Encuesta de Estructura Salarial. Nota: Cuando la casilla está marcada con un signo "-" antes del dato, indica que el número de observaciones muestrales está comprendido entre 100 y 500, por lo que la cifra es poco fiable.


3. ACCESO Y CONTROL DE LOS RECURSOS SOCIALES

3.1. Educación

La educación formal o reglada se refiere al aprendizaje de carácter intencional, planificado y

estructurado que tiene lugar en un centro formativo e incluye diversas modalidades, desde la

educación infantil hasta la universitaria. Constituye, además, un indicador que condiciona,

en gran medida, el tipo de ocupación, el acceso a los ingresos y, por ende, el nivel de vida y

el bienestar de las personas. Por todo ello, resulta de gran interés su análisis desde la

perspectiva de género.

Los datos del alumnado total de Euskadi durante el curso 2010-11 muestran que existe una

presencia equilibrada de mujeres y hombres (50,5% versus 49,5%) en el sistema de

educación formal. Las chicas suponen una proporción algo mayor que los chicos en

bachillerato y en la universidad, disparidad que se agudiza en las enseñanzas de régimen

especial y en la educación de personas adultas. Por el contrario, en las etapas iniciales y

hasta llegar al bachillerato el porcentaje de chicos supera al de las chicas, aunque en

educación infantil, primaria y secundaria obligatoria (ESO) la distancia de género es muy

escasa. Los datos revelan que hay más mujeres que hombres que optan por la vía del

bachillerato y los estudios superiores, mientras que en la formación profesional y en los

Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI), ellos son una clara mayoría.

Tabla 3.1. Alumnado total por nivel según sexo en la CAE. Curso 2010-11

Mujeres Hombres


TOTAL 470.355 237.345 50,5 233.010 49,5 Educación infantil 94.818 45.707 48,2 49.111 51,8 Ecuación especial infantil 49 15 30,6 34 69,4 Educación primaria 117.193 56.800 48,5 60.393 51,5 Educación especial primaria 395 135 34,2 260 65,8 Educación secundaria obligatoria (ESO) 70.516 34.042 48,3 36.474 51,7 Educación especial ESO 208 84 40,4 124 59,6 PCPI 4.519 1.265 28,0 3.254 72,0 Bachillerato 28.769 15.135 52,6 13.634 47,4 FP grado medio 11.468 4.404 38,4 7.064 61,6 FP grado superior 17.401 7.073 40,6 10.328 59,4 Educación especial. Aprendizaje de tareas 398 160 40,2 238 59,8 Educación de personas adultas (EPA) 29.679 17.898 60,3 11.781 39,7 Estudios universitarios 65.607 35.348 53,9 30.259 46,1 Enseñanzas de régimen especial 29.335 19.279 65,7 10.056 34,3

Fuente: EUSTAT. Alumnos, profesores y centros. Estadística de la enseñanza.


La tasa de escolaridad muestra la relación entre los efectivos escolares de cada nivel

educativo y la población en edad teórica de cursar dicho nivel. Durante el curso 2010-11 la

distancia de género en la tasa bruta de escolaridad es exigua en la educación infantil,

primaria y secundaria. En bachillerato y estudios superiores es mayor en las mujeres y en

formación profesional, en los hombres.

Tabla 3.2. Tasas brutas de escolaridad de educación primaria, secundaria, formación profesional y bachillerato por sexo en la CAE. Curso 2010-11


Educación infantil 74,5 73,9 75,0 1,1

Educación primaria 102,0 101,4 102,5 1,1

E.S.O. 103,5 103,4 103,6 0,2

Bachillerato 84,6 92,0 77,7 -14,3

Formación profesional 33,6 26,2 40,4 14,2

Estudios superiores 57,8 61,9 53,9 -8,0

Fuente: EUSTAT. Indicadores de la enseñanza. Estadística de la enseñanza.

La tasa de idoneidad hace referencia a la relación entre los efectivos escolares que se

encuentran matriculados en el curso adecuado y la población de dicha edad. En otras

palabras, expresa qué porcentaje del alumnado está matriculado en el curso que le

corresponde por su edad. Dicha tasa es superior en las chicas que en los chicos en todos

los grupos de edad. Como puede observarse en la tabla, genéricamente, conforme aumenta

la edad, la distancia de género (a favor de las mujeres) también lo hace hasta llegar a casi

13 puntos porcentuales a los 17 años. Por tanto, el porcentaje de mujeres que están en el

curso adecuado y que, por ende, no han repetido curso es mayor que el de los hombres en

todos los grupos de edad.

Tabla 3.3. Tasa de idoneidad del alumnado por sexo y edad en la CAE. Curso 2010-11


7 años 99,9 100,3 99,6 -0,7

9 años 95,6 96,6 94,6 -2,0

11 años 91,0 92,0 90,1 -1,9

12 años 90,3 91,5 89,2 -2,3

13 años 85,2 88,8 81,8 -7,0

14 años 84,2 87,3 81,3 -6,0

15 años 72,4 76,9 68,3 -8,6

16 años 67,3 73,3 61,7 -11,6

17 años 60,9 67,6 54,7 -12,9



El rendimiento académico es otra perspectiva desde la que se pueden observar diferencias

de género. Así, durante el curso 2010-11, entre el alumnado repetidor en educación primaria

y secundaria, el porcentaje de chicas es inferior al de chicos en todas las etapas analizadas.

Tabla 3.4. Porcentaje de alumnado repetidor en educación primaria y secundaria por sexo en la CAE. Curso 2010-11


6º Educación Primaria 3,3 2,5 3,9 1,4 E.S.O. 7,1 5,7 8,4 2,7 1º E.S.O. 8,2 6,3 9,9 3,6 2º E.S.O. 7,5 6,1 8,9 2,8 3º E.S.O. 6,9 5,5 8,2 2,7 4º E.S.O. 5,4 4,7 6,2 1,5


Otro indicador del rendimiento académico es la proporción de alumnado promocionado, es

decir, la relación entre las personas que superan el curso con todo aprobado o con alguna

asignatura pendiente y las personas matriculadas en dicho curso. Como puede observarse

en la tabla, el porcentaje de chicas promocionadas es superior al de chicos en todos los

casos, siendo la distancia de género algo mayor en la ESO, especialmente en los dos

primeros cursos, que en educación primaria.

Tabla 3.5. Porcentaje de alumnado promocionado por periodo, nivel y sexo en la CAE. Curso 2010-11


Educación primaria 1er ciclo 95,7 96,5 94,9 -1,6 Educación primaria 2º ciclo 96,1 96,7 95,5 -1,2 Educación primaria 3er ciclo 96,6 97,3 96,0 -1,3 E.S.O. 90,3 92,3 88,4 -3,9 1º E.S.O. 90,8 93,1 88,7 -4,4 2º E.S.O. 90,0 92,3 87,8 -4,5 3º E.S.O. 89,7 91,7 87,9 -3,8 4º E.S.O. 90,8 92,1 89,5 -2,6


Sin embargo, las mayores diferencias de género se producen en los estudios que eligen tras

abandonar la etapa de escolaridad obligatoria. Así, en el caso de la Formación Profesional

de Grado Medio, más de seis de cada diez personas matriculadas durante el curso 2010-11

son hombres. Las diferencias se acentúan si observamos las ramas, mostrando una clara

segregación en el tipo de estudios en virtud de los roles de género, que no han desparecido

del imaginario. De esta forma, se siguen asociando determinadas profesiones con las


mujeres y otras, con los hombres. Las ramas más feminizadas son Imagen personal,

Sanidad, Servicios socio-culturales y Textil, confección y piel. Por el contrario, entre las más

masculinizadas se encuentran Edificación y obra civil, Electricidad y electrónica, Fabricación

mecánica, Instalación y mantenimiento, Madera, mueble y corcho, Marítima pesquera y

Transporte y mantenimiento de vehículos (en las que más de nueve personas de cada diez

matriculadas son hombres). Únicamente la rama de Imagen y sonido y Artes gráficas

cumplen el principio de paridad en la composición de sus aulas.

Tabla 3.6. Alumnado matriculado en FP de grado medio por rama y sexo en la CAE. Curso 2010-11

Mujeres Hombres


Total 11.468 4.404 38,4 7.064 61,6 Actividades físicas y deportivas 192 40 20,8 152 79,2 Administración y gestión 993 760 76,5 233 23,5 Agraria 198 36 18,2 162 81,8 Artes gráficas 178 86 48,3 92 51,7 Comercio y marketing 290 195 67,2 95 32,8 Edificación y obra civil 94 1 1,1 93 98,9 Electricidad y electrónica 1.275 30 2,4 1.245 97,6 Fabricación mecánica 1.595 81 5,1 1.514 94,9 Hostelería y turismo 569 168 29,5 401 70,5 Imagen personal 775 753 97,2 22 2,8 Imagen y sonido 94 46 48,9 48 51,1 Industrias alimentarias 111 45 40,5 66 59,5 Informática y comunicaciones 604 72 11,9 532 88,1 Instalación y mantenimiento 850 19 2,2 831 97,8 Madera, mueble y corcho 229 14 6,1 215 93,9 Marítima pesquera 79 4 5,1 75 94,9 Química 67 43 64,2 24 35,8 Sanidad 1.751 1.530 87,4 221 12,6 Servicios socioculturales y a la comunidad 476 417 87,6 59 12,4 Textil, confección y piel 32 27 84,4 5 15,6 Transporte y mantenimiento de vehículos 1.016 37 3,6 979 96,4


Los datos correspondientes a la Formación Profesional de Grado Superior no difieren

demasiado de los anteriores. Aunque el porcentaje total de mujeres es ligeramente superior

que en grado medio (40,6% versus 38,4%), únicamente tres de las ramas analizadas

mantienen una presencia equilibrada de mujeres y hombres: Comercio y marketing,

Hostelería y turismo, y Química. En el resto, predominan bien las mujeres, bien los hombres.

En particular, en ramas como Imagen personal y Textil, confección y piel, más de nueve de

cada diez personas matriculadas son mujeres, proporción que se invierte en estudios como

Transporte y mantenimiento de vehículos o Energía y agua.


Tabla 3.7. Alumnado matriculado en FP de grado superior por rama y sexo en la CAE. Curso 2010-11

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Total 17.401 7.073 40,6 10.328 59,4

Actividades físicas y deportivas 670 144 21,5 526 78,5

Administración y gestión 2.202 1.581 71,8 621 28,2

Agraria 159 29 18,2 130 81,8

Artes gráficas 295 167 56,6 128 43,4

Comercio y marketing 889 428 48,1 461 51,9

Comunicación, imagen y sonido / Imagen y sonido 401 131 32,7 270 67,3

Edificación y obra civil 673 187 27,8 486 72,2

Electricidad y electrónica 2.131 130 6,1 2.001 93,9

Energía y agua 163 8 4,9 155 95,1

Fabricación mecánica 1.724 160 9,3 1.564 90,7

Hostelería y turismo 639 336 52,6 303 47,4

Imagen personal 225 224 99,6 1 0,4

Industrias alimentarias 16 11 68,8 5 31,3

Informática y comunicaciones 1.258 226 18,0 1.032 82,0

Instalación y mantenimiento 1.213 91 7,5 1.122 92,5

Madera, mueble y corcho 48 7 14,6 41 85,4

Marítima pesquera 201 16 8,0 185 92,0

Química 493 261 52,9 232 47,1

Sanidad 1.243 987 79,4 256 20,6

Servicios socioculturales y a la comunidad 2.187 1.869 85,5 318 14,5

Textil, confección y piel 63 61 96,8 2 3,2

Transporte y mantenimiento de vehículos 508 19 3,7 489 96,3


La segregación de género en el tipo de estudios cursado queda también reflejada en los

niveles preuniversitario y universitario. De este modo, las mujeres parecen optar en mayor

medida que los hombres por las modalidades artística y de humanidades, mientras que en la

modalidad científico-tecnológica, la distancia de género es muy reducida.

Tabla 3.8. Personas matriculadas y que han aprobado la prueba de acceso a la universidad por modalidad y sexo en la CAE (%). 2011

Matriculadas/os Aprobadas/os

Abs. Mujeres Hombres Abs. Mujeres Hombres

Total 10.164 54,7 45,3 9.702 54,8 45,2

Artes 284 66,9 33,1 258 67,1 32,9

Ciencias y tecnología 5.807 48,4 51,6 5.614 48,6 51,4

Humanidades 4.073 63,0 37,0 3.830 63,1 36,9

Fuente: EUSTAT. Enseñanza universitaria. Estadística de la enseñanza.


En cuanto a la prueba de selectividad, la nota media de las alumnas es levemente mejor que

la de los alumnos. En cualquier caso, y aunque no hay diferencias notorias, el alumnado de

la especialidad de Ciencias y Tecnología, tanto mujeres como hombres, ha obtenido

mejores resultados que el de Humanidades o de Artes.

Tabla 3.9. Alumnado matriculado, nota media en Selectividad por modalidad y sexo en la CAE. 2011

Mujeres Hombres

Matriculadas Nota media Matriculados Nota media

H-M (nota media)

Total 5.564 6,9 4.600 6,7 -0,2

Artes 190 6,3 94 6,2 -0,1

Ciencias y tecnología 2.808 7,2 2.999 6,9 -0,3

Humanidades 2.566 6,6 1.507 6,4 -0,2


En la Universidad, casi el 54% del alumnado matriculado es mujer frente a un 46% de

hombres y la segregación por tipo de estudios cursados vuelve a hacerse patente.

Observando la composición por sexo de los diferentes grados podemos destacar, por

ejemplo, que en Ciencias de la Salud más de las tres cuartas partes del alumnado son

mujeres, mientras que en Ingenierías y Arquitectura son los hombres quienes representan

esa proporción del alumnado. Este es un fenómeno que se da independientemente de la

titularidad del centro.

Tabla 3.10. Alumnado matriculado en la universidad en grados por carreras según sexo. CAE, curso 2010-11

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

CAE

Total 65.607 35.348 53,9 30.260 46,1

Experimentales 2.003 1.268 63,3 735 36,7

Humanidades 3.407 2.153 63,2 1.254 36,8

Salud 2.951 2.321 78,6 630 22,4

Sociales Jurídicas 19.120 12.249 64,1 6.871 35,9

Técnicas 12.854 3.810 29,6 9.044 70,4

Artes y Humanidades 2.577 1.532 59,4 1.045 40,6

Ciencias 651 321 49,3 330 50,7

Ciencias de la Salud 2.420 1.837 75,9 583 24,1

Ciencias Sociales y Jurídicas 8.244 5.129 62,2 3.116 37,8

Ingeniería y Arquitectura 4.905 1.227 25,0 3.678 75,0

No consta 6.475 3.501 54,1 2.974 45,9


Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Público

Total 52.856 28.532 54,0 24.324 46,0

Experimentales 2.003 1.268 63,3 735 36,7

Humanidades 3.006 1.924 64,0 1.082 36,0

Salud 2.951 2.321 78,6 630 22,4


Técnicas 10.682 3.250 30,4 7.432 69,6

Artes y Humanidades 2.327 1.372 59,0 955 41,0

Ciencias 651 321 49,3 330 50,7

Ciencias de la Salud 2.177 1.642 75,4 535 24,6


Ingeniería y Arquitectura 3.301 811 24,6 2.490 75,4

No consta 4.733 2.506 52,9 2.227 47,1

Privado

Total 12.751 6.816 53,5 5.936 46,6

Humanidades 401 229 57,1 172 42,9


Técnicas 2.172 560 25,8 1.612 74,2

Artes y Humanidades 250 160 64,0 90 36,0

Ciencias de la Salud 243 195 80,2 48 19,8


Ingeniería y Arquitectura 1.604 416 25,9 1.188 74,1

No Consta 1.742 995 57,1 747 42,9

Fuente: EUSTAT. Enseñanza universitaria. Estadística de la enseñanza. Nota: El ámbito privado no ofrece Experimentales, Ciencias ni Salud.

Como hemos señalado anteriormente, en general, las enseñanzas técnicas –sobre todo,

Ingenierías y Arquitectura– constituyen ámbitos muy masculinizados. Sin embargo, esto no

es extensible a todas las ramas de la ingeniería y entre ellas hay algunas en las que el

porcentaje de alumnado masculino supera el 80% y otras en las que apenas existe

distancia de género. Entre estas últimas se encuentran la Ingeniería en Diseño Industrial,

Ingeniería Biomédica, Ingeniería en Edificación, Ingeniería Ambiental, Ingeniería Química y

Ingeniería en Telecomunicaciones.

Tabla 3.11. Alumnado matriculado en la universidad en ingenierías y arquitecturas según sexo en la CAE. Curso 2010-11

Mujeres Hombres


Ingeniería y Arquitectura (total) 4.578 1.119 24,4 3.459 75,6

Ing. Ambiental 39 17 43,6 22 56,4

Ing. Biomédica 60 32 53,3 28 46,7

Ing. Civil 150 46 30,7 104 69,3

Ing. de Energías Renovables 0 0 0,0 0 0,0


Mujeres Hombres


Ing. de Sistemas Audiovisuales 26 6 23,1 20 76,9

Ing. de Tecnología de Minas y Energía 81 18 22,2 63 77,8

Ing. Electrónica de Comunicaciones 8 2 25,0 6 75,0

Ing. Electrónica Industrial 21 4 19,0 17 81,0

Ing. Electrónica Industrial y Automática 473 68 14,4 405 85,6

Ing. en Diseño Industrial y Desarrollo de Producto 254 126 49,6 128 50,4

Ing. en Edificación 66 30 45,5 36 54,5

Ing. en Electrónica Industrial 102 16 15,7 86 84,3

Ing. en Electrónica Industrial y Automática 39 6 15,4 33 84,6

Ing. en Geomática y Topografía 54 17 31,5 37 68,5

Ing. en Informática 84 13 15,5 71 84,5

Ing. en Organización Industrial 245 97 39,6 148 60,4

Ing. en Sistemas de Telecomunicación 26 8 30,8 18 69,2

Ing. en Tecnología Industrial 298 90 30,2 208 69,8

Ing. en Tecnologías Industriales 78 17 21,8 61 78,2

Ing. en Telecomunicaciones 11 6 54,5 5 45,5

Ing. Informática 233 36 15,5 197 84,5

Ing. Informática de Gestión y Sistemas de Información 169 40 23,7 129 76,3

Ing. Eléctrica 248 23 9,3 225 90,7

Ing. Electrónica 48 15 31,3 33 68,8

Ing. Marina 86 8 9,3 78 90,7

Ing. Mecánica 1.059 135 12,7 924 87,3

Ing. Náutica y Transporte Marítimo 62 10 16,1 52 83,9

Ing. Organización Industrial 50 16 32,0 34 68,0

Ing. Química 252 136 54,0 116 46,0

Ing. Química Industrial 77 46 59,7 31 40,3

Ing. Tecnologías Industriales 147 31 21,1 116 78,9

Ing. Telemática 32 4 12,5 28 87,5


En la misma línea, exponemos a continuación dos tablas que recogen aquellos grados en

los que las tres cuartas partes o más del alumnado está constituido solo por mujeres o solo

por hombres. Genéricamente, los estudios en los que predominan las chicas están

asociados a elementos y roles considerados socialmente como femeninos, como la

educación o el cuidado en sus diversas vertientes –física, emocional, nutricia, social–. Esta

orientación hacia las demás personas que parece definir a los grados feminizados, se ve

desplazada por el carácter empresarial, industrial e instrumental –tradicionalmente

masculino– propio de aquellos grados en los que los chicos representan prácticamente la

totalidad del alumnado. Desde esta lectura de los datos en clave de género, cabe

interrogarse sobre los mecanismos invisibles que están contribuyendo a perpetuar los roles

de género y la segregación ocupacional.


Tabla 3.12. Grados en la CAE en los que hay más de un 75% de mujeres. Curso 2010-11

Mujeres Hombres


Asistencia en Dirección 130 128 98,5 2 1,5 Educación Infantil 688 613 89,1 75 10,9 Trabajo Social 369 309 83,7 60 16,4 Enfermería 385 322 83,6 63 16,4 Nutrición Humana y Dietética 53 43 81,1 10 18,9 Filología 78 61 78,2 17 21,8 Conservación y Restauración de Bienes Culturales 68 53 77,9 15 22,1 Traducción e Interpretación 62 48 77,4 14 22,6 Estudios Ingleses: Lengua, Literatura y Cultura 158 122 77,2 36 22,8 Turismo 261 201 77,0 60 23,0 Psicología 1.517 1.146 75,5 371 24,5 Lenguas Modernas y Gestión 57 43 75,4 14 24,6 Estudios Ingleses 130 98 75,4 32 24,6 Farmacia 153 115 75,2 38 24,8


Tabla 3.13. Grados en la CAE en los que hay más de un 75% de hombres. Curso 2010-11

Mujeres Hombres


Ing. Eléctrica 248 23 9,3 225 90,7 Ing. Marina 86 8 9,3 78 90,7 Ing. Telemática 32 4 12,5 28 87,5 Ing. Mecánica 1.059 135 12,7 924 87,3 Ing. Electrónica Industrial y Automática 473 68 14,4 405 85,6 Ing. en Electrónica Industrial y Automática 39 6 15,4 33 84,6 Ing. Informática 233 36 15,5 197 84,5 Ing. en Informática 84 13 15,5 71 84,5 Ing. en Electrónica Industrial 102 16 15,7 86 84,3 Ing. Náutica y Transporte Marítimo 62 10 16,1 52 83,9 Ing. Electrónica Industrial 21 4 19,0 17 81,0 Ing. Tecnologías Industriales 147 31 21,1 116 78,9 Ing. en Tecnologías Industriales 78 17 21,8 61 78,2 Ing. de Tecnología de Minas y Energía 81 18 22,2 63 77,8 Ing. de Sistemas Audiovisuales 26 6 23,1 20 76,9 Ing. Informática de Gestión y Sistemas de Información 169 40 23,7 129 76,3 Ciencias de la Actividad Física y Deporte 105 26 24,8 79 75,2 Ing. Electrónica de Comunicaciones 8 2 25,0 6 75,0


En lo que respecta al alumnado matriculado en Enseñanzas de Régimen Especial, casi siete

de cada diez personas matriculadas son mujeres. Ellas son mayoría en todas las

modalidades –especialmente en Danza–, a excepción de las Enseñanzas Deportivas, en las

que el 95,3% son hombres.


Tabla 3.14. Alumnado matriculado en enseñanza de régimen especial por modalidad, titularidad y sexo. CAE, curso 2010-11

Mujeres Hombres


Total (público y privado) Total 29.335 19.279 65,7 10.056 34,3 Artes plásticas y diseño 414 305 73,7 109 26,3 Idiomas 25.211 17.038 67,6 8.173 32,4 Música 2.928 1.669 57,0 1.259 43,0 Danza 101 87 86,1 14 13,9 Deportivas 468 22 4,7 446 95,3 Artísticas Superiores 213 158 74,2 55 25,8

Público Total 27.777 18.482 66,5 9.295 33,5 Artes plásticas y diseño 179 129 72,1 50 27,9 Idiomas 25.211 17.038 67,6 8.173 32,4 Música 1.815 1.051 57,9 764 42,1 Danza 101 87 86,1 14 13,9 Deportivas 258 19 7,4 239 92,6 Artísticas Superiores 213 158 74,2 55 25,8

Privado Total 1.558 797 51,2 761 48,8 Artes plásticas y diseño 235 176 74,9 59 25,1 Idiomas 0 0 0,0 0 0,0 Música 1.113 618 55,5 495 44,5 Danza 0 0 0,0 0 0,0 Deportivas 210 3 1,4 207 98,6 Artísticas Superiores 0 0 0,0 0 0,0


Finalmente, en la Educación para Personas Adultas (EPA) el número de alumnado se ha

incrementado sustancialmente en la última década. Actualmente seis de cada diez personas

que cursan estos estudios son mujeres.

Tabla 3.15. Alumnado matriculado en la EPA por sexo entre los cursos 2000-01 y 2010-11 en la CAE

Mujeres Hombres


2000-01 13.508 8.483 62,8 5.025 37,2 2001-02 16.543 10.287 62,2 6.256 37,8 2002-03 18.372 11.529 62,8 6.843 37,2 2003-04 21.833 13.159 60,3 8.674 39,7 2004-05 24.239 14.402 59,4 9.837 40,6 2005-06 25.737 15.401 59,8 10.336 40,2 2006-07 26.862 16.298 60,7 10.564 39,3 2007-08 28.684 17.009 59,3 11.675 40,7 2008-09 29.196 17.688 60,6 11.508 39,4 2009-10 29.654 17.833 60,1 11.821 39,9 2010-11 29.679 17.898 60,3 11.781 39,7

Fuente: EUSTAT. Enseñanza reglada. Estadística de la enseñanza.


3.2. Salud

La salud es un estado de bienestar físico, mental y social, y no la mera ausencia de

enfermedades o dolencias. Constituye, además, una variable con una amplia repercusión en

los diversos ámbitos de la vida de la persona, incluyendo su autonomía personal.

Genéricamente, las estadísticas sobre la salud no se aplican con una periodicidad anual.

Por ello, para la elaboración de este apartado se ha recurrido a estudios recientes como los

datos de la Encuesta de Salud de Gobierno Vasco, llevada a cabo en 2007, la encuesta de

Condiciones de Vida de 2009, así como otras fuentes de actualización más frecuente como

las memorias de Osakidetza, el Registro de Interrupciones Voluntarias del Embarazo o los

estudios sobre hábitos saludables.

A continuación se aborda la autopercepción de la salud, el uso de los recursos médicos y

hospitalarios, los hábitos saludables o nocivos vinculados al estilo de vida y, por último, la

salud reproductiva.

3.2.1. Estado de salud: autopercepción

La autopercepción de la salud es un indicador que no proporciona información exacta sobre

la misma. Sin embargo, es una de las preguntas más consolidadas de las encuestas de

salud por su relación con los estilos de vida y su capacidad predictiva sobre temáticas como

la calidad de vida y los estados de salud física y psicológica.

En este marco, cabe destacar que la percepción que tiene la población residente en la CAE

sobre su salud es, en general, positiva. El 91,6% de las mujeres y el 93,3% de los hombres

señala que no tiene problemas de salud.

Teniendo en cuenta los grupos de edad, como puede observarse en la tabla siguiente, hasta

los 60 años el porcentaje de mujeres y de hombres que declaran no tener problemas de

salud es muy similar y se sitúa por encima del 94%. Por el contrario, a partir de dicha edad,

la proporción de mujeres que no tiene problemas de salud desciende al 79,1%, seis puntos

porcentuales menos que en los hombres.


Tabla 3.16. Población sin problemas de salud según sexo y grupo de edad (miles y porcentajes verticales y horizontales). CAE, 2009

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. %V %H Abs. %V %H

Total 2.000,5 1.012,3 91,6 50,6 988,2 93,3 49,4

Menores de 35 773,7 377,8 97,5 48,8 395,9 97,2 51,2

Entre 35 y 59 778,6 387,5 95,7 49,8 391,1 94,3 50,2

Mayores de 60 448,2 247,0 79,1 55,1 201,3 84,9 44,9

Fuente: EUSTAT. Encuesta de Condiciones de Vida.

La evolución de los últimos veinte años muestra que el porcentaje de mujeres y de hombres

que no tiene problemas de salud se ha mantenido relativamente estable a lo largo del

tiempo. En 1989 dicha proporción era de 90% para las mujeres y 92,2% para los hombres,

mientras en 2009 aumenta ligeramente, casi dos puntos en el caso de las mujeres y un

punto en el caso de los hombres.

Tabla 3.17. Evolución de la población sin problemas de salud según sexo (miles y porcentajes verticales). CAE, 1989-2009

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

1989 1.916,1 975,4 90,0 940,7 92,2

1994 1.903,9 958,8 90,6 945,1 92,5

1999 1.885,7 943,1 89,2 942,6 93,1

2004 1.910,4 967,3 90,6 943,2 92,0

2009 2.000,5 1.012,3 91,6 988,2 93,3


A menudo, tener problemas de salud afecta al desarrollo de diversas actividades de la vida

cotidiana como mantener conversaciones, caminar, bajar o subir escaleras, moverse dentro

de casa, vestirse o comer de forma autónoma. Si consideramos las personas de la CAE con

dificultades para realizar alguna de estas acciones, como muestra la tabla siguiente,

podemos observar que la proporción de quienes tienen dificultad o imposibilidad para

realizar cada actividad se ha mantenido relativamente estable a lo largo de los últimos veinte

años. Con todo, la evolución de algunas de ellas −como moverse dentro de casa o vestirse,

desvestirse y asearse− presenta mayores diferencias. Por ejemplo, la proporción de mujeres

que tiene problemas o incapacidad para vestirse, desvestirse y asearse de manera

autónoma se ha incrementado en 20 puntos porcentuales en el periodo considerado, 27 en

el caso de los hombres.


Tabla 3.18. Evolución de la población que tiene alguna dificultad para la realización de sus tareas cotidianas por actividad, sexo y nivel de dificultad (%). CAE, 1989-2009

Sin dificultad Con cierta dificultad No puede Mujeres Hombres Mujeres Hombres Mujeres Hombres

1989 Mantener una conversación 80,2 78,8 13,0 18,8 6,8 2,4 Caminar 400 m sin fatiga 20,6 27,1 60,6 59,6 18,8 13,3 Bajar y subir una escalera 16,9 25,4 65,7 61,6 17,3 13,0 Moverse dentro de casa 68,0 71,2 24,1 26,5 8,0 2,3 Vestirse, desvestirse y asearse 75,6 78,6 18,4 20,5 6,0 0,9 Comer de manera autónoma 87,3 94,4 6,7 4,7 6,0 0,9






Por último, los problemas de salud generalmente aumentan con la edad. La siguiente tabla

muestra la parte de la población mayor de 60 años que presenta cierta dificultad en la

realización de alguna de las mencionadas actividades cotidianas. Para estas personas, las

acciones que entrañan mayor dificultad, entre las consideradas, parecen ser las

relacionadas con la movilidad, como andar 400 metros sin fatigarse o el bajar y subir

escaleras. En particular, según datos de 2009, más de nueve de cada diez de estas mujeres

(91,9%) –algo menos en el caso de los hombres (89,4%)– presentan dificultades o


incapacidad para realizar esta última actividad. Vestirse, desvestirse y asearse es,

asimismo, una acción que no pueden realizar el 8,5% de las mujeres consideradas y el

13,4% de los hombres en situación análoga. Por el contrario, el grado de autonomía es

mucho mayor en acciones como comer de forma autónoma o mantener una conversación.

Tabla 3.19. Personas mayores de 60 que tienen alguna dificultad en la realización de sus tareas cotidianas por actividad, sexo y nivel de dificultad (miles y porcentajes). CAE, 1989 y 2009

Sin Dificultad Con cierta dificultad No puede

Mujeres Hombres Mujeres Hombres Mujeres Hombres

Abs. % Abs. % Abs. % Abs. % Abs. % Abs. %

1989

Mantener una conversación 51,1 81,4 34,9 83,7 9,1 14,5 5,9 14,1 2,6 4,1 0,9 2,2

Caminar 400 m sin fatiga 8,7 13,8 10,2 24,5 37,9 60,3 26,5 63,5 16,3 25,9 5,0 12,0

Bajar y subir una escalera 7,3 11,6 8,6 20,6 40,9 65,1 28,9 69,3 14,6 23,2 4,2 10,1

Moverse dentro de casa 38,9 61,9 28,7 69,0 17,3 27,5 12,8 30,8 6,6 10,5 0,1 0,2

Vestirse, desvestirse y asearse 43,4 69,1 30,9 74,3 15,6 24,8 10,3 24,8 3,8 6,1 0,4 1,0

Comer de manera autónoma 52,3 83,3 38,6 92,6 6,7 10,7 2,7 6,5 3,8 6,1 0,4 1,0

2009

Mantener una conversación 51,4 78,5 27,1 75,5 10,4 15,9 5,4 15,0 3,7 5,6 3,4 9,5

Caminar 400 m sin fatiga 10,7 16,3 7,1 19,8 44,4 67,8 19,6 54,7 10,4 15,9 9,1 25,4

Bajar y subir una escalera 5,3 8,1 3,8 10,6 49,0 74,9 23,1 64,5 11,1 17,0 8,9 24,9

Moverse dentro de casa 29,3 44,7 16,4 45,8 30,7 46,9 15,0 41,9 5,5 8,4 4,4 12,3

Vestirse, desvestirse y asearse 35,7 54,5 19,0 53,2 24,2 36,9 11,9 33,3 5,6 8,5 4,8 13,4

Comer de manera autónoma 54,6 83,5 29,6 82,9 7,1 10,9 3,1 8,7 3,7 5,7 3,0 8,4

Fuente: EUSTAT. Encuesta de Condiciones de Vida 2009.

3.2.2. Utilización de los recursos médicos

Este apartado recoge el uso de recursos sanitarios medido a través de indicadores relativos

a la frecuencia y a los motivos de asistencia a diferentes consultas médicas.

Tabla 3.20. Personas que han realizado consultas médicas en el último año por sexo y edad (miles y porcentajes horizontales). CAE, 2009

Mujeres Hombres


Total 1.652,0 871,8 52,7 781,3 47,3 Menos de 35 579,1 293,1 50,6 286,0 49,4 Entre 35 y 59 595,1 303,6 51,0 291,5 49,0 Mayores de 60 478,8 274,1 57,4 203,9 42,7

Fuente: EUSTAT. Encuesta de Condiciones de Vida 2009.

En 2009, último año en el que se realizó la Encuesta de Condiciones de Vida, las personas

que acuden a consultas médicas son, por una ligera mayoría, mujeres. La distancia de


género en virtud de la edad es, en términos generales, reducida. Se acentúa en el grupo de

mayores de 60 años, donde casi seis de cada diez pacientes fueron mujeres. Estos datos

nos son ajenos a la distribución por edad de la población, donde las mujeres mayores de 60

superan a los hombres.

Tal y como se afirma en informes anteriores, entre las personas usuarias de los recursos

médicos hay más mujeres, especialmente en consultas al centro de salud o ambulatorio. Sin

embargo, su número disminuye o es inferior al de los hombres en los centros hospitalarios.

El análisis de la población que ha asistido a las consultas de medicina general durante el

periodo 1989-2009 evidencia un incremento en este tipo de consultas a lo largo de los años.

Así mismo, en todos los años considerados se da una mayor presencia femenina en las

mismas. En particular, el uso de este tipo de servicios más de tres veces al año muestra una

distancia de género que se sitúa en torno a 15 puntos porcentuales a favor de las mujeres

en 2009 y que se ha mantenido relativamente estable a lo largo del periodo analizado.

Tabla 3.21. Personas según frecuencia con la que acuden a la consulta de medicina general, por sexo (miles y porcentajes horizontales). CAE, 1989-2009

Mujeres Hombres Total Abs. % Abs. %

Total 1989 1.140,1 601,7 52,8 538,5 47,2 1994 1.141,6 619,8 54,3 521,8 45,7 1999 1.330,6 713,6 53,6 617,0 46,4 2004 1.350,8 721,4 53,4 629,4 46,6 2009 1.440,7 762,5 52,9 678,3 47,1

1 vez 1989 327,0 148,1 45,3 178,8 54,7 1994 235,2 116,7 49,6 118,5 50,4 1999 385,9 183,0 47,4 202,9 52,6 2004 385,5 194,2 50,4 191,3 49,6 2009 359,8 168,6 46,9 191,2 53,1

2 veces 1989 303,5 157,3 51,8 146,2 48,2 1994 358,5 191,7 53,5 166,8 46,5 1999 366,1 189,9 51,9 176,2 48,1 2004 352,6 178,4 50,6 174,2 49,4 2009 407,1 212,5 52,2 194,6 47,8

3 veces 1989 135,4 78,5 58,0 57,0 42,1 1994 152,1 84,1 55,3 68,0 44,7 1999 167,3 93,2 55,7 74,1 44,3 2004 179,8 97,0 53,9 82,9 46,1 2009 214,7 118,8 55,3 95,9 44,7


Mujeres Hombres Total

Abs. % Abs. %

Más de 3 veces 1989 374,2 217,8 58,2 156,4 41,8 1994 395,9 227,3 57,4 168,6 42,6 1999 411,3 247,5 60,2 163,8 39,8 2004 432,8 251,9 58,2 181,0 41,8 2009 459,1 262,6 57,2 196,5 42,8


Los datos recogidos en la tabla siguiente muestran que el uso de consultas especializadas

en la población vasca ha experimentado una tendencia creciente y sostenida desde 1989

hasta 2004. Sin embargo, en 2009 se percibe una disminución considerable en la asistencia

a dichas consultas. Este análisis es válido tanto para mujeres como para hombres. Como

ocurría en la medicina general, entre las personas que acuden a la especializada la

proporción de mujeres supera a la de hombres en todos los años analizados. Esto podría

relacionarse con diversos factores, entre ellos, la mayor esperanza de vida de las mujeres y

las consultas relacionadas con el ámbito reproductivo.

Tabla 3.22. Personas según frecuencia con la que acuden a la consulta médica especializada, por sexo (miles y porcentajes horizontales). CAE, 1989-2009

Mujeres Hombres Total Abs. % Abs. %

Total 1989 681,5 367,8 54,0 313,7 46,0 1994 808,7 465,4 57,5 343,3 42,5 1999 898,9 504,5 56,1 394,3 43,9 2004 936,3 535,5 57,2 400,8 42,8 2009 791,2 434,3 54,9 356,9 45,1

1 vez 1989 185,7 101,8 54,8 83,9 45,2 1994 203,3 128,1 63,0 75,2 37,0 1999 391,3 220,5 56,4 170,8 43,6 2004 337,0 190,8 56,6 146,2 43,4 2009 255,6 138,3 54,1 117,3 45,9

2 veces 1989 168,0 90,0 53,6 78,0 46,4 1994 225,0 126,2 56,1 98,8 43,9 1999 200,3 111,9 55,9 88,3 44,1 2004 240,0 137,1 57,1 102,9 42,9 2009 221,8 121,2 54,6 100,7 45,4

3 veces 1989 77,7 39,3 50,6 38,4 49,4 1994 106,6 60,9 57,1 45,7 42,9 1999 76,4 44,3 58,0 32,1 42,0 2004 109,2 64,1 58,7 45,1 41,3 2009 85,8 49,3 57,5 36,5 42,5


Mujeres Hombres Total

Abs. % Abs. %

Más de 3 veces 1989 250,2 136,8 54,7 113,4 45,3 1994 273,8 150,1 54,8 123,7 45,2 1999 230,9 127,8 55,3 103,1 44,7 2004 250,1 143,5 57,4 106,5 42,6 2009 228,1 125,6 55,1 102,4 44,9


3.2.3. Indicadores de hospitalización

A continuación se abordan los diagnósticos más habituales y la duración de las

hospitalizaciones en la CAE. Tal y como se afirma en informes anteriores, los datos

recogidos en este sentido constatan una vez más tendencias diferentes en mujeres y

hombres.

El análisis de las estadísticas hospitalarias de 2010 referidas a las personas dadas de alta

según diagnóstico permite detectar algunas diferencias entre los sexos. Entre las mujeres,

siguiendo la tendencia de años anteriores, el diagnóstico más habitual que ocasiona una

hospitalización es el embarazo y el parto, que aglutina a 23,2 hospitalizaciones por cada

1.000 mujeres de la CAE. El resto de los diagnósticos que afronta la población femenina

corresponde a tasas más bajas y relativamente más similares a las masculinas. Las

menores distancias de género al respecto se sitúan en las anomalías perinatales y

congénitas, las enfermedades endocrinas y metabólicas, las enfermedades de la piel o las

osteomusculares y locomotoras.

Dejando a un lado la circunstancia del embarazo y el parto, las hospitalizaciones más

usuales de mujeres tienen su origen en enfermedades del sistema nervioso y órganos de los

sentidos −especialmente de trastorno de ojos y cataratas−, enfermedades del aparato

circulatorio, digestivas, osteomusculares y locomotoras, del aparato genito-urinario y

respiratorias.

El diagnóstico más habitual entre los hombres se refiere a las enfermedades del aparato

circulatorio y las digestivas, con tasas que se acercan al 20%. En menor medida, pueden

señalarse también, por este orden, las enfermedades del sistema nervioso y órganos de

sentidos, los tumores, las enfermedades respiratorias, las osteomusculares y locomotoras y,

por último, las lesiones y envenenamientos.


Tabla 3.23. Personas enfermas dadas de alta y tasa por 1000 habitantes, por diagnóstico definitivo y sexo. CAE, 2010

Total Mujeres Hombres

Altas Altas/1000 hab. Altas Altas/1000 hab. Altas Altas/1000 hab.

Total 318.194 145,9 164.503 147,4 153.691 144,2

Enfermedades infecciosas 3.667 1,7 1.567 1,4 2.100 2,0

Tuberculosis pulmonar 154 0,1 54 0,0 100 0,1

SIDA 351 0,2 89 0,1 262 0,2

Hepatitis viral 156 0,1 58 0,1 98 0,1

Tumores 29.055 13,3 13.541 12,1 15.514 14,6

Neoplasia maligna de colon 1.917 0,9 708 0,6 1.209 1,1

Neoplasia maligna de tráquea, bronquios y pulmón 1.436 0,7 312 0,3 1.124 1,1

Neoplasia maligna mama mujer 1.818 1,6 1.818 1,6 - -

Neoplasia maligna de próstata 1.664 1,6 - - 1.664 1,6

Neoplasia maligna de vejiga 2.145 1,0 377 0,3 1.768 1,7

Enfermedades endocrinas y metabólicas 4.322 2,0 2.508 2,2 1.814 1,7

Diabetes mellitus 1.575 0,7 677 0,6 898 0,8

Enfermedades de la sangre 3.383 1,6 1.794 1,6 1.589 1,5

Enfermedades mentales 4.806 2,2 2.172 1,9 2.634 2,5

Enfermedades del sistema nervioso y órganos sentidos 38.385 17,6 22.067 19,8 16.318 15,3

Trastorno de ojo y anexos 27.905 12,8 16.003 14,3 11.902 11,2

Cataratas 21.471 9,8 12.613 11,3 8.858 8,3

Otitis 1.025 0,5 489 0,4 536 0,5

Enfermedades del aparato circulatorio 36.695 16,8 15.537 13,9 21.158 19,9

Hipertensión 1.625 0,7 888 0,8 737 0,7

Infarto agudo miocardio 2.420 1,1 670 0,6 1.750 1,6

Enfermedades respiratorias 25.881 11,9 10.370 9,3 15.511 14,6

Neumonía 4.627 2,1 1.794 1,6 2.833 2,7

Bronquitis 2.929 1,3 588 0,5 2.341 2,2

Asma 1.708 0,8 1.029 0,9 679 0,6

Neumoconiosis, otras 7.493 3,4 3.190 2,9 4.303 4,0



Altas Altas/1000 hab. Altas Altas/1000 hab. Altas Altas/1000 hab.

Enfermedades digestivas 35.321 16,2 14.867 13,3 20.454 19,2

Ulceras de estómago 686 0,3 213 0,2 473 0,4

Apendicitis 2.521 1,2 1.108 1,0 1.413 1,3

Hernia de la cavidad abdominal 8.242 3,8 2.238 2,0 6.004 5,6

Colelitiasis 5.085 2,3 2.957 2,7 2.128 2,0

Enfermedades del aparato genitourinario 18.635 8,5 10.757 9,6 7.878 7,4

Nefritis 941 0,4 380 0,3 561 0,5

Cálculo de riñón y uréter 1.405 0,6 516 0,5 889 0,8

Embarazo y parto 25.924 23,2 25.924 23,2 - -

Parto normal 1.961 1,8 1.961 1,8 - -

Infección puerperal grave 20 0,0 20 0,0 - -

Enfermedades de la piel y subcutáneo 4.551 2,1 1.971 1,8 2.580 2,4

Infecciones piel y subcutáneo 2.165 1,0 817 0,7 1.348 1,3

Otras inflamaciones piel y subcutáneo 196 0,1 99 0,1 97 0,1

Enfermedades osteomusculares y locomotoras 27.412 12,6 13.604 12,2 13.808 13,0

Osteoartrosis 5.426 2,5 3.146 2,8 2.280 2,1

Trastorno disco intervertebral 1.749 0,8 802 0,7 947 0,9

Anomalías congénitas 2.196 1,0 924 0,8 1.272 1,2

Anomalías perinatales 2.209 1,0 1.025 0,9 1.184 1,1

Enf. hemolítica feto/Ot. ictericia perinatal 509 0,2 236 0,2 273 0,3

Estados mórbidos mal definidos 13.242 6,1 5.797 5,2 7.445 7,0

Lesiones y envenenamientos 23.049 10,6 10.132 9,1 12.917 12,1

Fractura cuello de fémur 2.527 1,2 1.857 1,7 670 0,6

Códigos V 19.406 8,9 9.920 8,9 9.486 8,9

Sin codificar 55 - 26 - 29 -

Fuente: EUSTAT. Estadística de Morbilidad Hospitalaria.


Tabla 3.24. Altas de los procedimientos quirúrgicos más frecuentes por sexo (porcentajes verticales y horizontales). CAE, 2010

Mujeres Hombres

Total abs. Abs. %H %V Abs. %H %V

Operación sobre el cristalino 21.557 12.644 58,7 14,3 8.913 41,3 13,8 Otros procedimientos para inducción o asistencia al parto 13.447 13.447 100,0 15,3 - 0,0 0,0 Operación de reparación y plásticas sobre estructura articular 9.452 5.082 53,8 5,8 4.370 46,2 6,8 Incisión y escisión de estructuras de la articulación 8.960 3.193 35,6 3,6 5.767 64,4 8,9 Operación sobre piel y tejido subcutáneo 8.792 4.149 47,2 4,7 4.643 52,8 7,2 Reparación de hernia 7.647 1.916 25,1 2,2 5.731 74,9 8,9 Reducción de fractura y luxación 5.784 3.105 53,7 3,5 2.679 46,3 4,1 Incisión, escisión y oclusión de vasos 4.934 2.843 57,6 3,2 2.091 42,4 3,2 Operaciones sobre la mama 4.309 4.147 96,2 4,7 162 3,8 0,3 Operación sobre vesícula biliar y tracto biliar 4.280 2.452 57,3 2,8 1.828 42,7 2,8 Otras operaciones sobre corazón y pericardio 4.126 1.387 33,6 1,6 2.739 66,4 4,2 Procedimientos e intervenciones, no clasificados bajo otros conceptos 4.049 969 23,9 1,1 3.080 76,1 4,8 Fórceps, ventosa y presentación de nalgas 3.996 3.996 100,0 4,5 - 0,0 0,0 Operaciones sobre nervios craneales y periféricos 3.968 2.733 68,9 3,1 1.235 31,1 1,9 Otra incisión y escisión del útero 3.908 3.908 100,0 4,4 - 0,0 0,0 Incisión, escisión y división de otros huesos 3.775 2.775 73,5 3,1 1.000 26,5 1,5 Otras operaciones sobre útero y estructuras de soporte 3.504 3.504 100,0 4,0 - 0,0 0,0 Incisión, extirpación y anastomosis de intestino 3.339 1.402 42,0 1,6 1.937 58,0 3,0 Operaciones sobre próstata y vesículas seminales 3.299 - 0,0 0,0 3.299 100,0 5,1 Cesárea y extracción de feto 3.078 3.078 100,0 3,5 - 0,0 0,0 Operaciones sobre vejiga urinaria 2.999 689 23,0 0,8 2.310 77,0 3,6 Operaciones sobre músculo, tendón y fascia de mano 2.912 1.331 45,7 1,5 1.581 54,3 2,4 Operaciones sobre retina, coroides, cuerpo vítreo y cámara posterior 2.892 1.431 49,5 1,6 1.461 50,5 2,3 Operaciones sobre ano 2.741 920 33,6 1,0 1.821 66,4 2,8 Operaciones sobre apéndice 2.456 1.090 44,4 1,2 1.366 55,6 2,1 Operación sobre la nariz 2.255 745 33,0 0,8 1.510 67,0 2,3 Operaciones sobre músculo, tendón, fascia y bolsa sinovial salvo mano 2.188 875 40,0 1,0 1.313 60,0 2,0 Operaciones sobre amígdalas y adenoides 2.100 956 45,5 1,1 1.144 54,5 1,8 Otras operaciones sobre vasos 2.062 607 29,4 0,7 1.455 70,6 2,3 Otras operaciones sobre huesos, salvo huesos faciales 1.994 844 42,3 1,0 1.150 57,7 1,8 Operaciones sobre el ovario 1.956 1.956 100,0 2,2 - 0,0 0,0 Total 152.759 88.174 57,7 100,0 64.585 42,3 100,0

Fuente: EUSTAT. Estadística de Morbilidad Hospitalaria. Nota: Los datos corresponden a los hospitales de agudos (públicos y privados) de la CAE.


Otro indicador relevante que recogen las estadísticas hospitalarias de la CAE, tal y como se

aprecia en la tabla anterior, se refiere a las intervenciones quirúrgicas que se realizan

anualmente. Dichos datos se mantienen en la línea de las cifras mostradas en la tabla 3.23.

Así, con independencia de los procedimientos relacionados con el parto, las operaciones

más frecuentes en los dos sexos son las realizadas sobre el cristalino, a las que se

sometieron un 14,3% de las mujeres operadas en 2010 y un 13,8% de los hombres. Las

intervenciones del aparato digestivo y músculo-esquelético también se encuentran entre las

más usuales. Por otra parte, siguiendo la tendencia de años anteriores, existen ciertos tipos

de operaciones que resultan más habituales en alguno de los dos sexos. Es el caso, por

ejemplo, de las operaciones sobre el ovario o la mama y las realizadas sobre nervios

craneales y periféricos en las mujeres, mientras en los hombres destacan, entre otras, las

operaciones sobre vejiga urinaria y las reparaciones de hernia.

La perspectiva diacrónica revela que en la última década se ha producido una reducción

tanto en el número de estancias hospitalarias como en la duración de las mismas. En

particular, las hospitalizaciones han pasado de 1.550.084 en 2005 a 1.395.950 en 2010.

Asimismo, a lo largo del periodo analizado se constata una reducción general en los días de

estancia, lo que supone que se externaliza el coste de la recuperación total de las personas

al ámbito extra-hospitalario. Esta circunstancia afecta de forma importante no solo a las

personas enfermas, sino también a su entorno, y en particular a las mujeres, que son

quienes con mayor frecuencia asumen el trabajo de cuidados.

Al igual que en años anteriores, los indicadores para 2010 muestran que en términos

generales el número de hospitalizaciones y la estancia media de hospitalización es menor

en las mujeres que en los hombres.

Tabla 3.25. Estancias hospitalarias (miles) y estancia media en días por sexo. CAE, 2000-2010

Estancias Estancia media Total Mujeres Hombres Total Mujeres Hombres

2000 1.455,1 689,4 765,6 6 5 6 2001 1.491,4 689,6 801,2 6 5 6 2002 1.480,5 694,1 786,3 6 5 6 2003 1.472,1 697,1 775,0 5 5 6 2004 1.500,7 712,8 787,8 5 5 6 2005 1.550,1 730,5 819,6 6 5 6 2006 1.493,6 712,8 780,8 5 5 6 2007 1.521,5 716,9 804,6 5 5 6 2008 1.506,6 719,2 787,4 5 4 5 2009 1.461,2 697,7 763,5 5 4 5 2010 1.396,0 666,0 730,0 4 4 5

Fuente: EUSTAT. Estadística de Altas Hospitalarias.


Tabla 3.26. Días de estancia y tasa por 1.000 habitantes, por diagnóstico definitivo y sexo (1). CAE, 2010


C.I.E.-9 (2)

Estancias

Estancias/ 1000 hab.

Estancias Estancias/ 1000 hab.


Total 1.395.950 640 665.995 597 729.955 685

001-139 Enfermedades infecciosas 31.718 15 13.237 12 18.481 17

011 Tuberculosis pulmonar 1.464 1 441 0 1.023 1

042 SIDA 3.581 2 783 1 2.798 3

070 Hepatitis 1.112 1 487 0 625 1

140-239 Tumores 188.780 87 77.055 69 111.725 105

153 Neoplasia maligna de colon 20.981 10 7.584 7 13.397 13

162 Neoplasia maligna de tráquea, bronquios y pulmón 13.915 6 2.847 3 11.068 10

174 Neoplasia maligna mama mujer 7.152 6 7.152 6 - -

185 Neoplasia maligna de próstata 7.002 7 - - 7.002 7

188 Neoplasia maligna de vejiga 12.362 6 1.877 2 10.485 10

240-279 Enfermedades endocrinas y metabólicas 25.275 12 12.483 11 12.792 12

250 Diabetes mellitus 11.461 5 4.497 4 6.964 7

280-289 Enfermedades de la sangre 18.182 8 9.098 8 9.084 9

290-319 Enfermedades mentales 68.002 31 32.291 29 35.711 34

320-389 Enfermedades del sistema nervioso y órganos sentidos 34.121 16 16.183 15 17.938 17

360-379 Trastorno de ojo y anexos 3.503 2 1.619 2 1.884 2

366 Cataratas 192 0 81 0 111 0

380-382 Otitis 897 0 394 0 503 1

390-459 Enfermedades del aparato circulatorio 209.411 96 84.699 76 124.712 117

401-405 Hipertensión 11.541 5 5.908 5 5.633 5

410 Infarto miocardio agudo 15.870 7 4.547 4 11.323 11

460-519 Enfermedades respiratorias 136.541 63 54.346 49 82.195 77

480-486 Neumonía 33.709 16 13.264 12 20.445 19

490-491 Bronquitis 20.229 9 4.243 4 15.986 15

493 Asma 8.048 4 5.519 5 2.529 2

500-519 Neumoconiosis, otras 53.742 25 22.288 20 31.454 30



C.I.E.-9 (2)

Estancias

Estancias/ 1000 hab.



520-579 Enfermedades digestivas 173.657 80 77.399 69 96.258 90

531-534 Ulceras de estómago 5.683 3 1.769 2 3.914 4

540-543 Apendicitis 10.379 5 4.452 4 5.927 6

550-553 Hernia de la cavidad abdominal 15.610 7 6.447 6 9.163 9

574 Colelitiasis 26.130 12 14.021 13 12.109 11

580-629 Enfermedades del aparato genitourinario 63.392 29 30.074 27 33.318 31

580-584 Nefritis 8.593 4 3.241 3 5.352 5

592 Cálculo de riñón y uréter 5.379 3 2.103 2 3.276 3

630-679 Embarazo y parto 72.624 65 72.624 65 - -

650 Parto normal 5.027 5 5.027 5 - -

670 Infección puerperal grave 95 0 95 0 - -

680-709 Enfermedades de la piel y subcutáneo 14.175 7 6.793 6 7.382 7

680-686 Infecciones piel y subcutáneo 8.865 4 4.198 4 4.667 4

690-698 Otras inflamaciones piel y subcutáneo 1.127 1 618 1 509 1

710-739 Enfermedades osteomusculares y locomotoras 92.128 42 49.661 45 42.467 40

715 Osteoartrosis 40.051 18 23.871 21 16.180 15

722 Trastorno disco intervertebral 9.636 4 4.476 4 5.160 5

740-759 Anomalías congénitas 8.021 4 3.757 3 4.264 4

760-779 Anomalías perinatales 25.605 12 12.652 11 12.953 12

773-774 Enfermedad hemolítica feto/Ot. ictericia perinatal 1.512 1 697 1 815 1

780-799 Estados mórbidos mal definidos 55.368 25 24.973 22 30.395 29

800-999 Lesiones y envenenamientos 148.577 68 72.425 65 76.152 72

820 Fractura cuello de fémur 29.765 14 21.823 20 7.942 8

V01-V89 Códigos V 30.212 14 16.166 15 14.046 13

Sin codificar 161 - 79 - 82 -

Fuente: EUSTAT. Estadística de Morbilidad Hospitalaria. (1) Los datos corresponden a los hospitales de agudos (públicos y privados) de la CAE. (2) C.I.E.-9-M.C.: Clasificación Internacional de Enfermedades. 9ª edición. Modificación Clínica.


Como se observa en la tabla anterior, las enfermedades que en 2010 implicaron un mayor

número de estancias hospitalarias −tanto de mujeres como de hombres− fueron las del

aparato circulatorio. A su vez, este grupo de enfermedades es el que presenta una mayor

distancia de género en la tasa de estancias por 1.000 habitantes, seguido de los tumores.

Por el contrario, las mayores similitudes entre mujeres y hombres en las tasas de

hospitalización se encuentran en enfermedades como las endocrinas y metabólicas, las

enfermedades de la piel y las congénitas y perinatales.

3.2.4. Riesgos en la salud y hábitos saludables

Los estilos de vida están vinculados a hábitos beneficiosos o, por el contrario, a

comportamientos de riesgo que inciden en los niveles de bienestar y de salud general. Entre

las conductas de riesgo, destaca el consumo de drogas como el tabaco y el alcohol, que

está relativamente extendido entre la población, aunque sus pautas de consumo difieren en

virtud del género.

Según los últimos datos disponibles, correspondientes a 2007, en Euskadi ocho de cada

diez mujeres (76,4%) y siete de cada diez hombres (67,2%) no consumen tabaco. Por el

contrario, un cuarto de la población se declara fumadora, apreciándose en este sentido una

distancia de género que asciende a los ocho puntos porcentuales.

La proporción de personas fumadoras es mayor, tanto para mujeres como para hombres, en

el grupo de edad de 25 a 44 años –con porcentajes que ascienden al 31,8 y el 35,6%,

respectivamente–, mientras que a partir de los 65 años dicha proporción desciende

considerablemente hasta situarse en 3,3% para las primeras y 16,3% para los segundos.

Los datos sugieren que las variables género y edad contribuyen a trazar pautas

diferenciadas en el consumo del tabaco. Así, entre la población menor de 45 años, donde el

consumo de esta droga es mayor, apenas se detectan diferencias entre mujeres y hombres.

En particular, la distancia de género en la población fumadora de 16 a 24 años no llega a los

tres puntos porcentuales. Sin embargo, a partir de la divisoria de los 45 años, se acentúa

considerablemente esta diferencia, siendo la proporción de mujeres fumadoras

prácticamente diez puntos porcentuales menor a la de los hombres.

Finalmente, como puede apreciarse en la tabla siguiente, las personas mayores de 65 años

ostentan el menor consumo y, al mismo tiempo, la mayor diferencia entre mujeres y


hombres de todos los tramos de edad considerados: el 91,7% de las mujeres no fuma frente

al 42,2% de los hombres. Las diferencias generacionales en la distancia de género parecen

reflejar así los cambios que se han producido en nuestro contexto en los usos y costumbres

sociales con relación al consumo de tabaco.

Tabla 3.27. Consumo de tabaco (%) por sexo, edad y consumo. CAE, 2007


Total No fumador/a 54,6 63,2 45,4 Ex-fumador/a 17,4 13,2 21,8 Fumador/a ocasional 3,1 2,6 3,7 Fumador/a 25,0 21,1 29,1

16-24 No fumador/a 68,3 67,6 68,9 Ex fumador/a 3,4 3,5 3,4 Fumador/a ocasional 4,1 3,4 4,8 Fumador/a 24,2 25,5 22,9

25-44 No fumador/a 47,6 46,7 48,4 Ex-fumador/a 14,5 17,2 11,8 Fumador/a ocasional 4,2 4,3 4,2 Fumador/a 33,7 31,8 35,6

45-64 No fumador/a 47,2 59,0 35,0 Ex-fumador/a 24,9 18,1 31,9 Fumador/a ocasional 2,5 2,1 3,0 Fumador/a 25,4 20,8 30,2

65 y más No fumador/a 71,2 91,7 42,2 Ex-fumador/a 18,8 4,8 38,6 Fumador/a ocasional 1,3 0,2 2,9 Fumador/a 8,7 3,3 16,3

Fuente: EUSTAT. Banco de datos. Estado de Salud.

Como se ha anticipado, otra droga que goza de una amplia difusión en nuestro entorno

como consecuencia de las costumbres sociales es el alcohol. Según los datos de 2007, más

de ocho de cada diez personas en Euskadi (82,9%) consumen alcohol, de las cuales casi la

mitad se declaran bebedoras ocasionales. En el caso de las mujeres, tres cuartas partes

manifiestan beber alcohol en alguna medida, mientras que en los hombres dicha proporción

supera el 90%. Ellas se sitúan fundamentalmente en la categoría de bebedoras ocasionales,

mientras que ellos se consideran bebedores moderados más habitualmente.

La estadística muestra que entre 1992 y 2007 se ha producido en las personas menores de

45 años un aumento del consumo ocasional, en detrimento de los consumos más frecuentes


(moderado, grande y excesivo) tomados en conjunto, siendo esta afirmación válida para las

mujeres y, particularmente, para los hombres.

La distancia de género, que también caracteriza al consumo de esta sustancia, aumenta con

la edad, de forma que las mayores diferencias se encuentran entre las personas mayores de

65 años. Así, en 2007, en este tramo de edad el porcentaje de mujeres no bebedoras era

ocho veces mayor que el de los hombres.

Tabla 3.28. Evolución del consumo de alcohol (%) por sexo, edad y consumo. CAE, 1992-2007

Total Mujeres Hombres 1992 1997 2002 2007 1992 1997 2002 2007 1992 1997 2002 2007

Total No bebedor/a 15,3 14,1 13,3 14,2 24,5 21,2 21,3 22,3 5,7 6,3 4,9 5,7 Ex-bebedor/a 4,3 3,6 3,4 2,9 2,6 1,4 2,1 2,4 6,1 5,9 4,8 3,5 Bebedor/a ocasional 31,1 35,3 39,0 39,2 42,4 45,2 46,3 45,8 19,5 24,5 31,2 32,1 Bebedor/a moderado/a 34,2 35,5 34,0 35,5 21,9 26,0 23,5 24,7 46,9 45,8 45,2 47,0 Gran bebedor/a 9,9 7,9 7,4 6,2 6,9 4,9 4,9 3,9 12,9 11,3 10,0 8,6 Bebedor/a excesivo/a 5,2 3,6 2,8 2,0 1,6 1,2 1,7 0,9 8,8 6,3 4,0 3,1

16-24 No bebedor/a 14,7 9,1 11,8 14,4 20,8 8,0 12,8 16,9 9,4 10,1 10,8 12,0 Ex-bebedor/a 1,1 2,6 1,9 1,6 1,9 3,9 1,9 2,2 0,5 1,4 2,0 1,1 Bebedor/a ocasional 33,1 38,9 41,9 39,2 39,3 43,7 48,4 44,0 27,8 34,4 35,7 34,7 Bebedor/a moderado/a 45,2 44,1 38,9 40,3 33,8 40,5 32,7 33,1 55,1 47,5 44,7 47,1 Gran bebedor/a 2,9 3,5 3,5 3,7 3,1 2,3 2,1 3,1 2,6 4,9 4,9 4,2 Bebedor/a excesivo/a 3,0 1,7 2,0 0,8 1,1 1,7 2,2 0,8 4,6 1,7 1,9 0,8

25-44 No bebedor 11,0 9,7 7,8 9,2 17,9 14,3 12,0 12,4 4,4 5,0 3,7 6,1 Ex-bebedor 3,1 2,4 3,0 4,0 2,1 0,5 2,9 3,9 4,0 4,2 3,2 4,1 Bebedor ocasional 30,4 36,9 41,1 45,2 43,5 47,9 48,9 52,7 17,8 25,7 33,5 37,9 Bebedor moderado 37,6 39,7 38,7 37,2 25,1 30,0 29,2 26,5 49,6 49,5 48,0 47,5 Gran bebedor 11,6 8,1 6,8 3,3 9,0 5,6 5,6 3,4 14,0 10,6 7,9 3,2 Bebedor excesivo 6,3 3,3 2,6 1,1 2,4 1,7 1,5 1,1 10,1 5,0 3,8 1,1

45-64 No bebedor/a 15,9 16,2 13,1 12,4 26,5 26,2 23,0 21,4 5,2 5,6 2,9 3,1 Ex-bebedor/a 5,6 3,6 3,6 2,3 2,1 0,5 1,4 1,6 9,1 6,8 5,9 2,9 Bebedor/a ocasional 30,1 31,2 36,2 33,2 44,7 45,8 46,8 43,0 15,3 15,7 25,4 23,1 Bebedor/a moderado/a 29,8 30,6 32,2 37,9 16,8 19,1 20,2 27,2 43,0 42,8 44,5 48,9 Gran bebedor/a 13,5 11,6 10,5 10,8 8,4 7,4 6,1 5,9 18,7 16,1 15,1 15,9 Bebedor/a excesivo/a 5,1 6,9 4,4 3,4 1,5 1,1 2,6 0,9 8,7 12,9 6,2 6,0

65 y más No bebedor/a 24,6 24,9 25,5 26,0 37,2 37,6 39,6 40,7 5,7 6,3 5,7 5,0 Ex-bebedor/a 8,4 7,1 4,9 2,7 4,7 2,3 1,9 1,1 13,8 14,1 9,1 4,9 Bebedor/a ocasional 32,5 34,7 37,1 37,0 39,5 40,9 40,5 39,8 21,9 25,6 32,2 33,0 Bebedor/a moderado/a 22,6 26,0 24,2 26,4 13,7 16,7 12,9 15,1 36,1 39,7 40,1 42,5 Gran bebedor/a 6,9 6,1 6,7 6,0 3,9 2,2 4,2 2,5 11,3 11,9 10,3 10,8 Bebedor/a excesivo/a 5,1 1,1 1,6 2,0 0,9 0,2 0,9 0,7 11,2 2,5 2,6 3,7



Por otra parte, los últimos datos actualizados en 2010 sobre el consumo de drogas miden el

consumo de cannabis y de otras drogas ilegales. En la línea de lo analizado hasta ahora, el

consumo de cannabis está más extendido entre los hombres que entre las mujeres,

tendencia que se ha mantenido a lo largo de los últimos dieciocho años analizados. Durante

este periodo la distancia de género en el uso experimental –aquel que tiene lugar alguna vez

en la vida– se ha situado generalmente por encima de los diez puntos porcentuales.

Tabla 3.29. Evolución del consumo de cannabis según sexo (%). CAE, 1992-2010


Alguna vez en la vida 1992 21,9 15,5 28,6 13,1 1994 21,6 16,0 27,2 11,2 1996 27,5 19,8 35,2 15,4 1998 23,6 17,3 30,3 13,0 2000 25,8 21,2 30,6 9,4 2002 26,3 20,7 32,0 11,3 2004 31,7 24,3 39,1 14,8 2006 36,2 28,9 43,5 14,6 2008 33,8 25,5 42,2 16,7 2010 34,2 27,0 41,5 14,5

En el último año 1992 6,2 3,7 8,8 5,1 1994 5,3 2,4 8,2 5,8 1996 4,7 2,3 7,1 4,8 1998 - - - - 2000 8,2 5,4 10,9 5,5 2002 11,7 8,7 14,6 5,9 2004 12,0 7,4 16,7 9,3 2006 14,0 10,4 17,5 7,1 2008 12,0 7,6 16,5 8,9 2010 10,4 7,3 13,5 6,2

En el último mes 1992 3,0 1,1 5,1 4,0 1994 3,3 1,4 5,1 3,7 1996 3,6 1,9 5,4 3,5 1998 4,2 2,4 6,2 3,8 2000 5,3 3,5 7,2 3,7 2002 8,5 5,7 11,3 5,6 2004 9,0 5,0 13,0 8,0 2006 11,0 7,7 14,2 6,5 2008 8,7 4,6 12,9 8,3 2010 7,2 4,4 10,1 5,7

Fuente: EUSTAT. Estado de Salud. Consumo de drogas. Nota: (-) no se dispone de datos.

Las diferentes pautas de consumo de cannabis de mujeres y hombres también se aprecian

a lo largo del periodo considerado en los supuestos de consumo durante el último año y el

último mes, de forma que, en ocasiones, el porcentaje masculino duplica o triplica al


femenino. En cualquier caso, el análisis diacrónico mostrado en la tabla siguiente indica que

desde 2006 se ha producido un descenso en el consumo de esta sustancia por parte de

mujeres y hombres.

En sintonía con los datos sobre el consumo general, parece que los hombres consumen

cannabis más frecuentemente que las mujeres. Así, casi el 5% de los hombres declaran

consumir diariamente esta sustancia, mientras que en las mujeres dicha proporción no llega

al 1%. Con todo, cabe destacar que estos datos han de interpretarse con máxima cautela,

dado que un 75% de las mujeres y un 60% de los hombres optaron por no contestar a esta

cuestión. La reticencia a responder a esta pregunta podría relacionarse, al menos en parte,

con el carácter ilegal de esta droga.

Tabla 3.30. Porcentaje de frecuencia del consumo reciente de cannabis por sexo y edad. CAE, 2010

Sexo Edad

Total

Mujer Hombre 15-19 20-24 25-34 35-49 50-64 65-79

A diario 2,9 0,9 4,9 5,5 4,6 5,2 1,4 - -

4-6 días por semana 1,0 0,5 1,6 2,6 1,5 1,5 0,6 - -

1-3 días por semana 2,3 1,6 2,9 9,8 6,8 2,9 1,9 - -

1-3 días por mes 1,6 1,1 2,2 4,0 4,7 3,4 1,3 - -

6-11 días/año 1,2 1,3 1,2 2,0 4,2 1,3 1,1 - -

1-5 días/año 3,0 2,1 4,0 5,0 4,5 5,3 3,7 - -

No ha consumido 20,1 17,1 23,2 11,1 30,4 36,6 28,4 6,0 2,2

No sabe/no contesta 67,8 75,5 60,1 60,1 43,2 43,8 61,6 94,0 97,8


Otras drogas ilegales son las anfetaminas, la cocaína y el éxtasis. En las mujeres, el

consumo de estas sustancias sigue una progresión ascendente desde 1996 hasta 2004

–2002, en el caso de la cocaína–, descendiendo desde entonces hasta casi extinguirse esta

práctica en 2010. En el caso de los hombres se observa la misma tendencia general. El

consumo en la actualidad continúa siendo algo mayor en ellos que en ellas.

Tabla 3.31. Evolución consumo de drogas ilegales diferentes del cannabis en la CAE por sexo. CAE, 1996-2010

Consumo reciente * Anfetaminas o speed Cocaína Éxtasis Abs. Mujer Hombre Mujer Hombre Mujer Hombre

1996 19.283 0,3 1,8 0,0 1,6 0,3 0,7 2000 49.566 1,4 2,4 0,9 2,9 - - 2002 56.776 1,5 2,8 1,1 2,6 1,0 1,2 2004 76.353 1,4 4,2 1,7 5,1 0,6 2,0 2006 74.062 1,3 3,5 1,3 4,0 0,5 0,6 2008 63.103 1,1 3,6 0,7 4,5 0,2 1,3 2010 37.838 0,6 1,6 0,7 2,5 0,0 0,8

Fuente: EUSTAT. Estado de Salud. Consumo de drogas. Nota: (*) Consumo reciente: en los últimos doce meses.


Otra amenaza de nuestro tiempo viene de la mano de los malos hábitos de alimentación y el

sedentarismo, que pueden contribuir a la aparición de enfermedades graves. Según los

datos ofrecidos en la Encuesta de Salud del Eustat, más de la mitad de la población de la

CAE se considera sedentaria, lo que afecta a casi seis de cada diez mujeres y menos de

cinco de cada diez hombres. La distancia de género en la población sedentaria se agudiza

entre las personas de 16 a 24 años y en las mayores de 65, llegando casi hasta los 20

puntos porcentuales a favor de los hombres.

Por otro lado, resulta llamativa la escasa variación del porcentaje de mujeres sedentarias

con la edad. Así, entre el grupo de mujeres más jóvenes y más mayores solo hay una

diferencia porcentual de 1,7. La proporción de hombres sedentarios presenta una situación

similar, aunque ligeramente mayor, alcanzando los 3,4 puntos de diferencia entre el tramo

inferior y superior.

Tabla 3.32. Actividad física por edad, sexo y actividad (%). CAE, 2007


Total

Sedentaria/o 53,0 57,2 48,4 -8,8

Moderada/o 22,1 21,8 22,3 0,5

Activa/o 14,8 13,3 16,4 3,1

Muy activa/o 10,1 7,6 12,8 5,2

16-24

Sedentaria/o 48,7 58,5 39,3 -19,2

Moderada/o 23,9 23,7 24,2 0,5

Activa/o 15,7 11,8 19,4 7,6

Muy activa/o 11,7 6,0 17,0 11,0

25-44

Sedentaria/o 55,2 58,1 52,5 -5,6

Moderada/o 22,0 21,3 22,7 1,4

Activa/o 12,9 13,0 12,8 -0,2

Muy activa/o 9,8 7,6 12,0 4,4

45-64

Sedentaria/o 51,7 53,5 49,8 -3,7

Moderada/o 21,8 22,4 21,1 -1,3

Activa/o 16,0 15,0 17,0 2,0

Muy activa/o 10,6 9,1 12,1 3,0

65 y más

Sedentaria/o 53,0 60,2 42,7 -17,5

Moderada/o 21,5 21,0 22,3 1,3

Activa/o 16,2 12,3 21,7 9,4

Muy activa/o 9,3 6,5 13,4 6,9



Pasear, ir de excursión o realizar alguna práctica deportiva normalizada de forma regular

son acciones que pueden considerarse hábitos saludables. La encuesta de uso social del

tiempo del Eustat de 2008 examina el tiempo que se dedica a estas actividades en la CAE.

Como puede observarse en la tabla siguiente, las mujeres practican deporte 11 minutos

menos al día que los hombres y emplean 13 minutos menos en paseos y excursiones.

La distancia de género en el desempeño de estas actividades físicas no solo no se reduce

sino que, generalmente, se acentúa los fines de semana. Así, aunque las mujeres dedican

más tiempo a paseos y excursiones los días festivos que los laborables, los sábados

destinan casi media hora menos que los hombres a esta práctica. El ejercicio deportivo que

se realiza los fines de semana muestra también una brecha de género de 14 minutos los

sábados y domingos. En este caso las mujeres destinan más tiempo al deporte los días

laborables que los fines de semana. Este desigual acceso al tiempo de ocio y, en particular,

su incremento durante el fin de semana podría relacionarse, entre otros factores, con la

discriminación que persiste en la distribución del trabajo reproductivo en los hogares vascos.

Tabla 3.33. Tiempo medio por persona (hh:mm) dedicado a prácticas deportivas y a paseos y excursiones según día de la semana y sexo. CAE, 2008

Total Mujer Hombre H-M

Prácticas deportivas

Total 0:12 0:07 0:18 0:11

Laborables 0:13 0:09 0:17 0:08

Viernes 0:11 0:06 0:16 0:10

Sábados 0:13 0:06 0:20 0:14

Domingos 0:11 0:04 0:18 0:14

Paseos, excursiones

Total 0:55 0:49 1:02 0:13

Laborables 0:45 0:38 0:52 0:14

Viernes 0:52 0:49 0:56 0:07

Sábados 1:15 1:02 1:29 0:27

Domingos 1:21 1:17 1:25 0:08

Fuente: EUSTAT. Banco de datos. Uso social del tiempo.

Más allá del desigual tiempo invertido en el deporte, el desglose según el género muestra

que generalmente mujeres y hombres realizan prácticas deportivas distintas. Así, un

porcentaje notablemente mayor de las primeras hace gimnasia, aeróbic, fitness o yoga,

mientras que ellos optan en mayor medida por jugar a fútbol. Estas dos actividades

concentran las mayores distancias de género de los deportes analizados.


Andar y nadar son dos actividades deportivas que realizan ambos sexos, aunque la

proporción de mujeres que lo practica es más elevada. Otros ejercicios físicos como correr,

montañismo, escalada y ciclismo son más usuales entre los hombres que entre las mujeres.

Como en otras partes del informe, estos gustos en la práctica deportiva parecen estar

condicionados por la socialización de género, al tiempo que los distintos deportes se asocian

con diferentes niveles de presencia mediática y prestigio social.

Tabla 3.34. Actividad deportiva más practicada (%). CAE, 2008 (solo primera respuesta)

Mujeres Hombres H-M

Gimnasia, aeróbic, fitness, yoga 33 9 -24 Andar 17 13 -4 Natación 13 7 -6 Otros 11 19 8 Correr 6 8 2 Montañismo y escalada 4 8 4 Ciclismo, bicicleta, mountain bike 4 7 3 Baloncesto 4 3 -1 Baile o ballet 4 0 -4 Fútbol 3 16 13 Pelota vasca 0 6 6 Artes marciales, boxeo y lucha 0 3 3

Fuente: Encuesta de hábitos deportivos en la CAPV 2009. Dirección de Deportes - Departamento de Cultura, Gobierno Vasco.

Otro ángulo desde el que contemplar la práctica deportiva es la participación en alguna

federación. Según el Estudio de la situación de las federaciones vascas publicado en 2012,

únicamente el 21% de las personas federadas en Euskadi son mujeres. La proporción de

licencias femeninas es paritaria (40-60%) exclusivamente en cinco de las 48 modalidades

deportivas: voleibol, hípica, deportes de invierno, béisbol y softbol, y hockey. Exceptuando la

gimnasia, que es el único deporte feminizado, y los cinco anteriormente mencionados, la

práctica deportiva constituye un ámbito eminentemente masculinizado.

La presencia de mujeres es aun menor en las juntas directivas de las federaciones

deportivas, donde en conjunto suponen el 15% (75 mujeres frente a 440 hombres). En este

caso, en el 92,6% de las federaciones las mujeres en la directiva son menos del 30%. Llama

la atención que en el caso de la gimnasia, donde las mujeres son más de nueve de cada

diez personas federadas, la presencia de mujeres en la junta directiva no sea paritaria

(apenas sobrepasa el 30%).


Tabla 3.35. Federaciones deportivas de la CAE: licencias de mujeres y mujeres en la junta directiva (%). 2011

Licencias En la directiva

Total 21 15 Actividades subacuáticas 11 0 Ajedrez 11 20 Atletismo 28 27 Automovilismo 5 17 Bádminton 37 25 Baloncesto 34 8 Balonmano 36 31 Beisbol y softbol 49 0 Billar 18 0 Bolos 14 17 Boxeo 8 27 Caza 0 0 Ciclismo 4 9 Deporte adaptado 29 27 Deportes aéreos 4 8 Deportes de invierno 53 10 Esgrima 29 17 Fútbol 11 12 Gimnasia 97 32 Golf 35 27 Halterofilia 8 9 Herri kirolak 10 0 Hípica 61 22 Hockey 41 13 Judo 17 6 Karate 28 7 Lucha y Sambo 13 - Montaña 28 9 Motociclismo 0 0 Natación 37 7 Padel 33 9 Patinaje 22 29 Pelota Vasca 6 8 Pesca y casting 5 17 Petanca 28 40 Piragüismo 20 23 Remo 14 0 Rugby 10 8 Squash 5 0 Surf 12 25 Taekwondo 33 10 Tenis 23 6 Tenis de mesa 16 14 Tiro con arco 16 22 Tiro olímpico 6 0 Triatlón 9 40 Vela 17 0 Voleibol 61 20

Fuente: Elaboración propia a partir del Estudio de la situación de las federaciones vascas. Dirección de Deportes. Departamento de Cultura de Gobierno Vasco, 2012.


3.2.5. Salud reproductiva y toma de decisiones

Según estadísticas ofrecidas por Osakidetza y el Informe del Registro de Interrupciones

Voluntarias del Embarazo de Gobierno Vasco, durante el 2010 se realizaron en la CAE

3.947 interrupciones voluntarias de embarazo (IVEs), que corresponden a 3.266 mujeres de

la CAE y a 681 de otras comunidades autónomas. El total de mujeres residentes en la CAE

que se sometieron a una IVE durante dicho año, contabilizando aquellas que fueron

intervenidas en otra comunidad, asciende a 3.388.

Tabla 3.36. IVEs notificadas al Registro de la CAE y realizadas a mujeres residentes en la CAE. 2010

Abs. %

Nº de IVEs realizadas en la CAE 3.947 100,0

A mujeres residentes en la CAE 3.266 82,7

A mujeres residentes en otras CC.AA. 681 17,3

IVEs en residentes de la CAE 3.388 100,0

En centros de la CAE 3.266 96,4

En centros de otras CC.AA. 122 3,6

Fuente: Informe del Registro de Interrupciones Voluntarias del Embarazo en la CAE. 2010. Gobierno Vasco.

La estadística elaborada por el Registro de Interrupciones Voluntarias del Embarazo en la

CAE recoge también datos relacionados con la situación laboral y el nivel de instrucción de

las mujeres residentes en la CAE que se someten a IVEs. Casi seis de cada diez trabajaban

por cuenta ajena. El 16,2% estaba en situación de desempleo, el 13,7% era estudiante y el

resto se declaraba ama de casa. Por otra parte, la mayoría de estas mujeres había

terminado o se encontraba cursando estudios de segundo grado y solo dos de cada diez

tenía estudios universitarios.

Cabe señalar, además, que casi siete de cada diez mujeres de la CAE que decidieron

interrumpir voluntariamente su embarazo en 2010 tenían entre 20 y 34 años. Sin

embargo, los abortos voluntarios practicados a menores de 15 y mayores de 45 no

superaron el 1%.


Tabla 3.37. Características de las mujeres residentes en la CAE que se han sometido a la IVE y datos sobre la intervención, por grupos de edad. 2010

Abs. % <15 15-19 20-24 25-29 30-34 35-39 40-44 >45

Total 3.388 18 355 718 804 702 557 221 13 % 0,5 10,5 21,2 23,7 20,7 16,4 6,5 0,4 Situación laboral

Empresaria 55 1,7 0 0 4 4 16 18 13 0 Trabajadora a sueldo 1.972 58,2 2 47 365 551 468 372 159 8 Pensionista 5 0,1 0 0 0 0 1 2 2 0 Estudiante 464 13,7 14 245 149 43 9 4 0 0 Parada 550 16,2 0 49 147 139 110 83 19 3 Ama de casa 205 6,1 0 9 40 43 52 41 18 2 Otros 13 0,4 1 0 1 3 4 3 1 0 No consta 124 3,7 1 5 12 21 42 34 9 0

Nivel de instrucción Analfabeta o sin estudios 108 3,2 0 7 17 30 32 14 8 0 1º grado 593 17,5 7 70 151 133 110 85 34 3 2º grado. 1º ciclo 558 16,5 6 58 102 141 116 91 41 3 2º grado. 2º ciclo 1.278 37,7 5 177 287 301 254 200 49 5 3º grado (escuela) 460 13,6 0 32 99 109 99 82 39 0 3º grado (facultad) 292 8,6 0 4 48 67 62 65 44 2 No consta 99 2,9 0 7 14 23 29 20 6 0

Fuente: EUSTAT. Estado de Salud.

Como se observa en el gráfico siguiente, el 67% de las mujeres que realizaron una IVE no

había acudido previamente a un centro sanitario para la utilización de métodos

anticonceptivos. Este porcentaje se agudiza entre las más jóvenes, alcanzando el 93,3% en

las menores de 15 años y el 83,8% en las de 15 a 19.

Gráfico 3.1. Porcentaje de mujeres que se ha sometido a la IVE y no había acudido a centros sanitarios para la utilización de métodos anticonceptivos, según grupo de edad. CAE, 2010

Fuente: Osakidetza. Informe IVE 2010.

93,3

83,8

69,9 67,7

63,458 61,9 58,3

0

10

20

30

40

50

60

70

80

90

100

M e n o re s

d e 15

15-19 20-24 25-29 30-34 35-39 40-44 M ay o r d e

44

Total: 67,1


Según datos del Eustat, del total de mujeres residentes en la CAE que decidieron someterse

a una interrupción voluntaria de embarazo, casi el 60% había nacido en el Estado español,

mientras más del 40% había nacido en otro país. En ambos casos la media de edad es de

28 años y la mayor parte de ellas trabaja por cuenta ajena, si bien cuatro de cada diez no

dispone de ingresos propios. Una ligera mayoría de las extranjeras convivía en pareja

(52,2%), proporción que se invierte entre las nacidas en el Estado español.

Tabla 3.38. Características de las mujeres residentes en la CAE que se han sometido a la IVE según país de nacimiento. 2010

País de nacimiento España Extranjero

Total % 59,1 40,9

Edad media 28,9 28,0

Convive en pareja

Sí 43,1 52,2

No 52,2 43,5

Desconocido 4,7 4,3

Situación laboral

Empresaria 2,4 0,5

Trabaja a sueldo 56,2 61,1

Estudiante 16,8 9,3

Parada (o en busca de su primer empleo) 14,5 18,8

ama de casa 5,3 7,2

Otros o desconocida 4,9 3,2

Nivel de Instrucción

Sin estudios 1,3 5,9

1º grado 12,8 24,4

2º grado, 1º ciclo 12,9 21,7

2º grado, 2º ciclo 37,6 37,9

3º grado (escuela) 19,0 5,8

3º grado (facultad) 13,4 1,7

No clasificable o desconocido 3,1 2,7

Ingresos económicos propios

Sí 61,4 63,1

No 36,2 36,1

Desconocido 2,4 0,8


El análisis del país de nacimiento de las mujeres extranjeras residentes en la CAE que se

han sometido a una IVE en 2010, muestra que la mayor parte procedían de Bolivia,

Colombia, Paraguay y Rumanía. Más de la mitad de las bolivianas y colombianas llevaban

residiendo en España más de cinco años. En el caso de las oriundas de Paraguay y

Rumanía, en cambio, su llegada a España ha sido más reciente.


Tabla 3.39. Años de estancia en España de mujeres extranjeras de la CAE previos a la IVE. 2010

Mujeres País de nacimiento Abs. %

0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 o más

Desc.

Total 1.384 100,0 48 128 130 175 190 125 96 81 53 48 65 65 180

Bolivia 305 22,0 1 3 5 32 86 52 40 30 17 2 2 2 33

Colombia 146 10,5 4 10 5 15 10 9 9 7 4 19 21 7 26

Paraguay 130 9,4 5 22 24 29 17 10 3 3 - - 1 1 15

Rumanía 122 8,8 10 13 14 14 20 10 12 7 4 2 - 0 16

Ecuador 91 6,6 1 4 10 4 5 1 1 13 12 10 13 6 11

Marruecos 71 5,1 2 7 5 11 7 2 2 5 4 3 1 9 13

Nicaragua 71 5,1 2 21 17 17 7 1 - 3 - - 1 1 1

Brasil 57 4,1 2 6 4 5 7 5 7 2 1 1 3 7 7

Perú 45 3,3 3 4 6 7 8 4 2 - 1 - 1 3 6

Cuba 36 2,6 1 1 5 3 2 7 1 2 1 - - 4 9

Honduras 31 2,2 4 12 7 2 5 1 - - - - - 0 -

Nigeria 29 2,1 3 2 4 6 1 1 3 1 1 1 1 1 4

China 25 1,8 1 2 1 3 2 1 2 - 1 1 8 1 2 República Dominicana

22 1,6 - 1 3 2 - 4 1 - 2 1 1 4 3

Guinea 19 1,4 1 1 1 2 - 2 2 - 1 1 2 4 2

Venezuela 18 1,3 1 4 4 1 - 1 2 - - - 1 1 3 Guinea Ecuatorial

15 1,1 1 - 1 1 1 2 1 1 - 1 1 4 1

Camerún 14 1,0 - 1 1 1 2 - - 1 - 2 1 0 5

Argentina 13 0,9 - 1 1 2 1 2 3 1 1 1 - 0 -

Otros 124 9,0 6 13 12 18 9 10 5 5 3 3 7 10 23

Fuente. Osakidetza. Informe IVE 2010. Nota: (Desc.) Desconocido.

Los datos sobre el motivo para la realización de la IVE se han analizado en dos periodos

separados, tal y como figura en el informe sobre interrupciones voluntarias del embarazo de

2010 de Osakidetza. El primero de ellos comprende desde el uno de enero hasta el cuatro

de julio y el segundo comienza el cinco de julio, fecha en la que entró en vigor la nueva Ley

de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo. Tal y como se

observa en la tabla, en el primer periodo, en la práctica totalidad de los casos (92,9%) el

motivo alegado para la realización de la IVE fue la existencia de peligro para la salud física o

psíquica de la embarazada, mientras el riesgo fetal se aduce en el 7,1% de los casos. En el

segundo periodo (desde la entrada en vigor de la nueva ley) en el 92,8% de los casos la IVE

se practicó a petición de la mujer, en el 0,8% por grave riesgo para la salud de esta y en el

6,4% por existir anomalías graves o incompatibles con la vida del feto.


Tabla 3.40. Motivo de la interrupción del embarazo en mujeres residentes en la CAE que se han sometido a IVE. 2010

Abs. %

Hasta el 4 de julio (Ley 1985) Riesgo salud materna 1.473 92,9 Riesgo fetal 112 7,1 Violación 1 0,0

Desde el 5 de julio (Ley 2010) A petición de la mujer 1.672 92,8 Grave riesgo salud mujer 15 0,8 Riesgo de anomalías/graves incompatibilidades con la vida del feto 115 6,4


En cualquier caso, entre las 227 interrupciones del embarazo que se dieron bajo la

presunción de que el feto pudiese tener malformaciones, una gran mayoría de los casos

corresponde a anomalías congénitas y cromosomáticas. Las afecciones perinatales fueron

también causa de interrupción del embarazo pero en un porcentaje mucho menor.

Tabla 3.41. Causas de interrupción cuando el motivo ha sido “presunción de que el feto habrá de nacer con graves taras” en mujeres residentes en la CAE. 2010

Grupo CIE-9 MC Abs. %

I (0-139) Enfermedades infecciosas 1 0,4 II (140-239) Neoplasias 5 2,1 III (240-279) Enfermedades endocrinas y trastornos de la inmunidad 1 0,4 VI (320-326) Enfermedades del sistema nervioso 3 1,3 XIV (740-759) Anomalías congénitas 204 87,2 (740-742) Malformaciones congénitas del sistema nervioso 33 (745-747) Malformaciones congénitas del aparato circulatorio 20 748 Malformaciones congénitas del sistema respiratorio 2 753 Malformaciones congénitas del sistema urinario 7 (754-756) Malformaciones congénitas del sistema osteomuscular 10 758 Anomalías cromosómicas 120 (757-759) Otras malformaciones congénitas 12 XV (760-779) Afecciones perinatales 17 7,3 761 Oligoamnios con o sin RPM 14 XVI (780-799) Causas mal definidas 1 0,4 (E800-E999) Causas externas de lesiones e intoxicaciones 2 0,9 Total 234 100,0

Fuente: Osakidetza. Informe IVE 2010. Nota: A cada IVE le puede corresponder más de una causa. Los 234 diagnósticos corresponden a 227 casos.

Por otra parte, la evolución tanto en números absolutos como en la tasa de IVEs practicadas

a mujeres de 15 a 44 años residentes en la CAE, pone de manifiesto una tendencia general

ascendente durante los últimos años. La tasa de IVEs se ha triplicado desde 1993, y 2010,

último año de análisis, presenta el número y la tasa más alta de esos últimos diecisiete

años.


Tabla 3.42. Evolución del número y tasa de IVE. CAE, 1993-2010

Abs. Tasa

1993 1.283 2,60 1994 1.174 2,37 1995 1.256 2,55 1996 1.278 2,59 1997 1.301 2,64 1998 1.305 2,64 1999 1.435 2,91 2000 1.653 3,34 2001 1.646 3,33 2002 1.804 3,92 2003 1.798 3,93 2004 1.997 4,43 2005 2.383 5,34 2006 2.586 5,86 2007 2.955 6,89 2008 2.996 6,89 2009 3.023 7,03 2010 3.388 7,98

Fuente: Informe del Registro de IVE en la CAE. 2010. Gobierno Vasco.

Esta tendencia ascendente se aprecia asimismo en el análisis por territorios históricos.

Genéricamente, Gipuzkoa es el territorio que ha registrado desde 1997 las tasas de IVEs

más altas de la CAE. En la actualidad, siguiendo la tendencia existente durante el periodo

analizado, Álava presenta la tasa más baja (5,6), a distancia de Gipuzkoa y Bizkaia (8,6).

Con todo, el mayor aumento en la tasa de IVEs durante el periodo 1997-2010 corresponde a

Bizkaia.

Tabla 3.43. Tasa de interrupción voluntaria del embarazo en mujeres

residentes según territorio histórico de residencia. CAE, 1997-2010


1997 0,9 2,4 3,8 1998 0,7 2,6 3,6 1999 1,0 2,6 4,2 2000 1,0 3,3 4,5 2001 1,3 3,7 3,7 2002 1,5 4,0 4,8 2003 1,4 4,2 4,6 2004 1,7 4,4 5,8 2005 1,7 5,4 7,0 2006 1,7 6,2 7,3 2007 2,2 7,5 8,1 2008 2,7 7,4 8,0 2009 2,4 7,6 8,3 2010 5,6 8,6 8,6



Por último, la comparación con el resto de comunidades autónomas revela que la tasa de

abortividad de la CAE (8,3) es inferior a la media estatal (11,5). Cataluña, Madrid y Murcia

registran las mayores tasas del Estado, que se sitúan en torno al 15, mientras las menores

corresponden a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla (4,3), así como a Extremadura y

Galicia (6,5).

Tabla 3.44. Tasa de abortividad según CC.AA. 2010

Total 11,5 Andalucía 11,7 Aragón 10,7 Asturias 10,4 Balears 13,8 C. Valenciana 10,1 Canarias 10,5 Cantabria 9,1 Castilla-La Mancha 9,2 Castilla y León 6,6 Cataluña 15,2 Euskadi 8,3 Extremadura 6,5 Galicia 6,5 La Rioja 8,0 Madrid 14,8 Murcia 14,7 Navarra 6,9 Ceuta y Melilla 4,3

Fuente: Ministerio de Sanidad y Política Social. Interrupción Voluntaria del Embarazo.

3.3. Servicios Sociales

Como muestra el Cifras sobre la situación de mujeres y hombres en Euskadi 2010, la

feminización de la pobreza es un fenómeno creciente en Euskadi y, en consecuencia, las

mujeres se están convirtiendo en las principales usuarias y beneficiarias de los Servicios

Sociales.

Uno de los indicadores de la feminización de la pobreza es el análisis de las tasas de

pobreza de la persona principal del hogar. El riesgo de pobreza indica una insuficiencia de

ingresos para hacer frente a la cobertura de las necesidades básicas (alimentación,

vivienda, vestido y calzado). Según los últimos datos disponibles de la Encuesta de pobreza

y desigualdades sociales, correspondientes a 2008, la tasa de riesgo de pobreza en las


mujeres que eran la persona principal del hogar es más del doble que la de los hombres en

situación análoga (8,2 versus 3,3, respectivamente).

La pobreza de mantenimiento, además del riesgo de pobreza, incluye el riesgo de ausencia

de bienestar, que supone la imposibilidad de afrontar los gastos considerados necesarios

para mantener los niveles mínimos de bienestar y comodidad esperados en una

determinada sociedad y que permiten participar −aunque sea en condiciones mínimas− en la

forma de vida, las costumbres y las actividades comunes en dicha sociedad. La brecha de

género en el riesgo de ausencia de bienestar de las personas principales del hogar también

refleja que la pobreza en Euskadi tiene rostro de mujer. De nuevo, en este caso la tasa

femenina es más del doble que la masculina, con una diferencia que supera los 16 puntos

porcentuales.

La pobreza de mantenimiento puede cronificarse y dar lugar a una pobreza de acumulación,

que significa la incapacidad de acceder a los bienes y servicios necesarios para mantener a

largo plazo un nivel de vida digno, así como una ausencia generalizada de ahorros,

instalaciones y equipamientos. Es el tipo de pobreza más preocupante en una sociedad, ya

que refleja una situación extrema de precariedad y cambia muy lentamente. También aquí la

tasa correspondiente a las mujeres es superior a la de los hombres y casi la triplica.

Tabla 3.45. Tasas de pobreza de mantenimiento y acumulación de la persona principal del hogar por sexo. CAE, 2008

Total Mujer Hombre

Pobreza de mantenimiento

Riesgo de pobreza 4,1 8,2 3,3

Riesgo de ausencia de bienestar* 14,6 28,1 12,0

Pobreza de acumulación 0,7 1,4 0,5

Fuente: Departamento de Justicia, Empleo y Seguridad Social de Gobierno Vasco. Encuesta de Pobreza y Desigualdades Sociales (EPDS). (*) El indicador de ausencia de bienestar incluye el colectivo de pobres.

Los centros destinados a servicios sociales constituyen un elemento imprescindible para

asegurar el bienestar de los sectores más vulnerables. En 2010 la Comunidad Autónoma de

Euskadi contaba con 3.101 centros de este tipo, de los cuales seis de cada diez eran

privados. El nivel de privatización resulta particularmente elevado en los centros especiales

de empleo (C.E.E.) y en las residencias.


Tabla 3.46. Centros por tipo y titularidad. CAE, 2010

Público Privado

Total Abs. % Abs. %

Total 3.101 1.211 39,1 1.890 60,9 Asociaciones 445 - - 445 100,0 Servicios técnicos generales 431 399 92,6 32 7,4 Centros de orientación 4 3 75,0 1 25,0 Centros de día 682 380 55,7 302 44,3 Residencias 1.091 392 35,9 699 64,1 C.O.-C.E.E. 193 22 11,4 171 88,6 Otros 255 15 5,9 240 94,1

Fuente: EUSTAT. Estadística de Servicios Sociales.

Las residencias orientan su trabajo a la cobertura de diversas necesidades en el ámbito de

la intervención social. Según la clasificación realizada desde la Administración pública, estos

servicios orientan su actuación hacia cinco colectivos: infancia y juventud, mujeres víctimas

de violencia, personas mayores, personas con discapacidad y personas en situación de

exclusión social. En Euskadi existe un total de 1.091 centros con función residencial, de los

cuales casi siete de cada diez están dedicados a la atención de personas mayores o en

situación de exclusión social.

Tabla 3.47. Residencias: centros, plazas, personas usuarias, personal y gasto (miles de €) por tipo de colectivo. CAE, 2010

Total

Infancia-juventud

Mujeres Personas mayores

Personas con discapacidad

Exclusión social

Centros 1.091 99 61 431 169 331 Plazas 26.865 1.256 390 19.873 2.289 3.057 Personas usuarias 22.801 1.075 182 17.209 2.203 2.132 Total personal 11.789 625 65 8.670 1.721 708 Total gastos 696.719 64.485 4.716 507.386 90.488 29.644

Gastos corrientes 666.269 64.268 4.609 479.316 88.504 29.571 Gastos de capital 30.450 217 107 28.069 1.983 74

Total financiación 696.719 64.485 4.716 507.386 90.488 29.644 Financiación pública 444.912 64.734 4.610 267.584 81.799 26.186 Financiación privada 251.807 -248 106 239.802 8.689 3.459


Según datos de 2010, los centros que se destinan a mujeres que sufren la violencia

machista son 61 para el conjunto de la CAE –diez menos que en 2008– y ofrecen 390

plazas. Estos centros han atendido un total de 182 usuarias y han recibido un total de

4.716.000 euros que provienen casi íntegramente de la financiación pública. El gasto por

persona usuaria en los centros de mujeres supone 23.515 euros.


Tabla 3.48. Residencias: indicadores por tipo de población en euros. CAE, 2010

Total Infancia-juventud

Mujeres Personas mayores

Personas con discapacidad

Exclusión social

Gasto corriente/persona usuaria 29.345 57.959 23.515 27.840 40.900 14.504

Gasto corriente/plaza 25.456 50.005 13.088 24.370 39.508 11.064

Retribución media/trabajador/a 33.535 43.009 31.946 31.015 44.428 33.404

Cuota media/persona usuaria 11.120 223 477 12.213 4.856 2.410

Cuota media/plaza 9.793 223 221 10.681 4.706 1.957


Por otra parte, en los equipamientos residenciales orientados a las personas con

discapacidad, casi seis de cada diez personas usuarias son hombres. En los centros

públicos esta proporción asciende al 64,6%, mientras en las privadas es del 54,8%.

Asimismo, la edad más habitual del colectivo atendido en este tipo de residencias se sitúa

entre los 35 y 64 años, que aglutina en torno al 74% del mismo. El porcentaje de hombres

supera al de mujeres en todos los tramos de edad, excepto en el de menores de 15 y

mayores de 65.

Tabla 3.49. Personas con discapacidad usuarias de residencias según titularidad por grandes grupos de edad y sexo según territorio histórico y titularidad (%). CAE, 2010

CAE Araba/Álava Gipuzkoa Bizkaia

Total Púb. Priv. Total Púb. Priv. Total Púb. Priv. Total Púb. Priv.

Total 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0

Mujeres 41,7 35,4 45,2 44,6 40,6 50,9 40,4 34,7 45,0 41,3 28,4 44,1

Hombres 58,3 64,6 54,8 55,4 59,4 49,1 59,6 65,3 55,0 58,7 71,6 55,9

>64 años 2,7 4,0 1,9 6,9 9,0 3,5 2,0 0,6 3,1 1,3 3,0 0,9

Mujeres 1,6 2,1 1,3 3,4 5,3 0,6 1,9 0,3 3,1 0,4 0,6 0,4

Hombres 1,1 2,0 0,7 3,4 3,8 2,9 0,1 0,3 0,0 0,9 2,4 0,5

35-64 años 74,1 76,3 72,8 69,8 73,3 64,3 71,5 83,2 62,2 78,2 67,5 80,5

Mujeres 31,0 26,8 33,4 28,8 28,2 29,8 28,7 27,5 29,7 33,9 23,1 36,3

Hombres 43,1 49,5 39,4 41,0 45,1 34,5 42,8 55,7 32,5 44,3 44,4 44,3

25-34 años 16,9 13,1 19,0 18,3 13,2 26,3 18,9 11,7 24,6 14,7 16,0 14,4

Mujeres 7,3 4,4 8,9 10,1 6,4 15,8 7,7 3,9 10,8 5,7 2,4 6,4

Hombres 9,6 8,7 10,1 8,2 6,8 10,5 11,2 7,8 13,9 9,0 13,6 8,0

15-24 años 5,5 5,7 5,4 4,3 4,5 4,1 6,6 3,3 9,3 5,1 12,4 3,5

Mujeres 1,3 1,6 1,2 1,6 0,8 2,9 1,5 1,8 1,2 1,1 2,4 0,8

Hombres 4,2 4,2 4,2 2,7 3,8 1,2 5,2 1,5 8,1 4,1 10,1 2,7

<15 años 0,8 0,8 0,8 0,7 - 1,8 0,9 1,2 0,7 0,7 1,2 0,7

Mujeres 0,5 0,5 0,4 0,7 - 1,8 0,7 1,2 0,2 0,2 - 0,3

Hombres 0,3 0,3 0,4 0,0 - 0,0 0,3 0,0 0,5 0,5 1,2 0,4

Fuente: Eustat. Estadística de Servicios Sociales.


Al contrario de lo que sucede en el caso anterior, en los centros de día para mayores de la

CAE, la mayor parte de las personas usuarias son mujeres. Ellas representan más del 70%

de las atendidas, proporción que es válida tanto para los centros públicos como para los

privados. Por último, más de seis de cada diez personas usuarias de este tipo de servicios

(66,6%) tienen más de 80 años.

Tabla 3.50. Personas mayores usuarias de centros de día asistenciales por grandes grupos de edad y sexo, según territorio histórico y titularidad (%). CAE, 2010

CAE Araba/Álava Gipuzkoa Bizkaia

Total Púb. Priv. Total Púb. Priv. Total Púb. Priv. Total Púb. Priv.

Total 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 - 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0

Mujeres 71,2 71,1 71,5 64,5 64,5 - 72,7 71,9 73,5 71,9 73,4 66,4

Hombres 28,8 28,9 28,5 35,5 35,5 - 27,3 28,1 26,5 28,1 26,6 33,6

>89 años 12,3 12,7 11,5 15,9 15,9 - 13,9 14,6 13,2 9,5 10,1 7,1

Mujeres 9,9 10,0 9,7 12,4 12,4 - 11,2 11,7 10,8 7,7 8,0 6,8

Hombres 2,4 2,7 1,8 3,5 3,5 - 2,6 2,9 2,4 1,8 2,1 0,4

85-89 años 24,7 26,0 22,0 24,5 24,5 - 28,0 32,9 23,6 21,3 22,3 17,9

Mujeres 19,0 19,8 17,3 18,0 18,0 - 21,7 24,9 18,9 16,4 17,3 13,2

Hombres 5,7 6,2 4,7 6,5 6,5 - 6,3 8,0 4,7 4,9 5,0 4,6

80-84 años 29,6 29,8 29,2 26,4 26,4 - 27,8 28,0 27,6 32,5 32,4 33,2

Mujeres 20,9 21,1 20,5 17,1 17,1 - 20,3 20,4 20,1 22,8 23,2 21,4

Hombres 8,7 8,7 8,7 9,3 9,3 - 7,5 7,5 7,5 9,7 9,1 11,8

75-79 años 19,0 17,7 21,6 18,0 18,0 - 17,3 13,7 20,6 21,0 20,1 24,3

Mujeres 12,5 11,6 14,6 10,3 10,3 - 11,8 9,1 14,3 14,1 13,7 15,4

Hombres 6,4 6,1 7,0 7,7 7,7 - 5,5 4,6 6,3 7,0 6,4 8,9

<75 años 14,4 13,9 15,7 15,2 15,2 - 13,1 10,9 15,0 15,7 15,2 17,5

Mujeres 8,9 8,6 9,4 6,8 6,8 - 7,7 5,8 9,3 10,8 11,2 9,6

Hombres 5,6 5,2 6,3 8,4 8,4 - 5,4 5,1 5,7 4,8 4,0 7,9

Fuente: Eustat. Estadística de Servicios Sociales.

3.4. Accesibilidad y consumo de otros recursos: tra nsporte, Internet, actividades

culturales

Tradicionalmente la brecha de género se ha medido en base a una serie de indicadores

como el acceso a determinados recursos educativos, sanitarios, etc. En los últimos años, a

estos indicadores fundamentales, se están sumando otros que contribuyen a obtener una

imagen más completa y nítida de las desigualdades socialmente construidas entre mujeres y

hombres.


La accesibilidad a los medios de transporte es uno de estos nuevos indicadores utilizados

para describir nuevas dimensiones de la brecha de género. En este sentido, se constata la

persistencia del binomio hombre-coche (51,4%), frente a una mujer que utiliza en mayor

medida el transporte público, particularmente el autobús (19,8%) y que se desplaza a pie

(35%).

Tabla 3.51. Personas de 16 y más años (%) por medio de transporte utilizado. CAE, 2008

Transporte privado Transporte público A pie o en bici

Total Coche Total Autobús Total A pie

Mujeres 30,4 29,9 33,8 19,8 35,9 35,0

Hombres 52,8 51,4 21,9 12,5 25,4 24,1

Fuente: Eustat. Encuesta de Medio Ambiente-Familias. 2008.

Según la Encuesta de Medio Ambiente-Familias de 2008, entre las razones que aducen las

mujeres para explicar su empleo del transporte público, destacan la comodidad (48,9%) y la

proximidad (32,6%). Sin embargo, las mayores diferencias en los motivos señalados por

mujeres y hombres para utilizar dicho medio de trasporte se refieren a la falta de

disponibilidad de vehículo (23,7% frente a 21,1%) y de permiso de conducción (13,1% frente

a 8,4%).

Tabla 3.52. Razones de uso del transporte público (%). CAE, 2008

Total Comodidad Parada

próxima Seguridad Rapidez

Es más barato

No dispone de vehículo

No dispone de permiso

Mujeres 33,8 48,9 32,6 6,4 20,6 17,6 23,7 13,1

Hombres 21,9 50,0 30,7 7,6 18,0 16,7 21,1 8,4

Fuente: Eustat. Encuesta de Medio Ambiente-Familias. 2008.

La disponibilidad de permiso de conducción, por tanto, puede ser un condicionante a la hora

de comprender las disparidades existentes entre mujeres y hombres en la utilización de los

diversos modos de transporte. Según datos de 2010, en la CAE más de seis de cada diez

personas que poseen licencia de conducir son hombres. Álava es el territorio donde se

encuentran más mujeres con permiso de conducción, 43%, frente a Bizkaia donde este

porcentaje desciende hasta el 38%.


Tabla 3.53. Censo de conductoras/es*, lugar de expedición y sexo. CAE, 2010

Mujeres Hombres


CAE 1.251.639 493.713 39,4 757.926 60,6 Araba/Álava 173.237 73.874 42,6 99.363 57,4 Gipuzkoa 441.300 175.201 39,7 266.099 60,3 Bizkaia 637.102 244.638 38,4 392.464 61,6

Fuente: Anuario Dirección General de Tráfico. Nota: (*) Licencias de primera expedición.

En todo caso, el elevado uso del coche, fundamentalmente por parte de los hombres (con

una diferencia de más de veinte puntos porcentuales respecto a las mujeres), plantea

numerosos dilemas con relación a la sostenibilidad, que pueden resolverse de forma más

satisfactoria con un uso integrado del espacio que prime la accesibilidad frente a la

movilidad, favoreciendo la conciliación de la vida familiar y laboral. Por todo ello,

paralelamente a la reducción de la brecha de género en la utilización de las formas de

transporte, resulta fundamental fomentar las pautas femeninas en la realización de

desplazamientos, ya que resultan mucho más sostenibles que las masculinas.

Siguiendo con los indicadores de accesibilidad a otra serie de recursos, en la denominada

“sociedad de la información” la brecha de género en el uso de Internet resulta de obligada

presentación. En la CAE las mujeres que navegan por la red son el 53,8%, frente al 64,9%

de los hombres. En 2012 Gipuzkoa es el Territorio Histórico en el que más mujeres se

manifiestan usuarias de la red, con un 56,8% sobre el total de mujeres.

Tabla 3.54. Población de 15 y más años usuaria de Internet por sexo (%). CAE, 2012

Total (en miles) Mujeres Hombres H-M

CAE 1.089,10 53,8 64,9 11,1 Araba/Álava 163,9 55,4 61,7 6,3 Bizkaia 562,6 51,7 61,6 9,9 Gipuzkoa 362,7 56,8 59,7 2,9

Fuente: EUSTAT. Encuesta de la Sociedad de la Información. Familias. ESIF.

No obstante, resulta destacable la utilización de Internet de la población femenina en los

últimos años. Así, las mujeres vascas que usan dicho recurso han pasado del 38,2% en

2006 al 53,8% en 2012. Por territorios históricos, Gipuzkoa concentra un mayor número de

usuarias en 2012, pero el análisis por comarcas revela que es una comarca vizcaína,

Plentzia-Mungia, la que presenta un mayor porcentaje de mujeres usuarias (58,8%), seguida


de Urola Costa (58,5%) y de Donostialdea (58%) en el territorio guipuzcoano, y de las

Estribaciones del Gorbea, en el caso alavés (57,4%).

Tabla 3.55. Mujeres de 15 y más años usuarias de Internet por territorio histórico y comarca. Estimación y coeficiente de variación (%). CAE, 2006-2012

2006 2012 Estimación CV Estimación CV

CAE 38,2 2,4 53,8 3,0

Araba/Álava 39,5 5,0 55,4 6,4

Valles Alaveses 33,0 6,5 51,6 6,2

Llanada Alavesa 40,1 4,6 55,9 5,8

Montaña Alavesa 27,2 7,4 43,9 8,6

Rioja Alavesa 38,1 7,0 52,5 6,7

Estribaciones del Gorbea 37,6 5,7 57,4 10,0

Cantábrica Alavesa 37,4 5,1 53,9 6,5

Bizkaia 36,6 3,7 51,7 4,5

Arratia-Nervión 35,4 5,8 47,7 6,6

Gran Bilbao 36,4 3,6 51,5 4,0

Duranguesado 38,6 4,0 53,3 4,9

Encartaciones 37,0 6,4 49,1 6,0

Gernika-Bermeo 35,2 4,0 49,8 4,9

Markina-Ondarroa 35,6 5,8 49,8 5,6

Plentzia-Mungia 38,9 4,8 58,8 4,4

Gipuzkoa 40,4 3,9 56,8 4,9

Bajo Bidasoa 41,2 4,5 56,0 4,7

Bajo Deba 36,9 5,0 53,7 4,7

Alto Deba 38,4 4,5 55,2 4,7

Donostialdea 41,1 3,9 58,0 4,0

Goierri 40,0 4,3 54,1 5,4

Tolosa 38,1 5,1 55,8 5,3

Urola Costa 42,0 4,4 58,5 5,0

Fuente: EUSTAT. Encuesta de la Sociedad de la Información. Familias. ESIF.

Por último, los indicadores sobre preferencias y usos de diferentes recursos culturales

aportan información sobre ámbitos en los que las desigualdades de género no siempre

resultan fácilmente identificables. Las tablas siguientes recogen el grado de interés que

muestran mujeres y hombres por diversas actividades culturales, así como su asistencia a

las mismas.

En general, las mujeres muestran un grado mayor de interés que los hombres por todas las

actividades culturales, a excepción de la lectura de la prensa diaria, donde los hombres

señalan un grado de interés ligeramente mayor. Las actividades culturales que prefieren las


mujeres son la música y la lectura, mientras que la mayor distancia de género en las

actividades analizadas la poseen la danza y el teatro.

Tabla 3.56. Grado de interés en actividades culturales por sexo. CAE, 2007-08 (valor medio: 1-10)

Mujeres Hombres H-M

Música en general 7,5 7,2 -0,3 Lectura en general 7,3 6,7 -0,6 Libros 7,2 6,4 -0,8 Diarios 6,5 6,9 0,4 Cine 6,3 5,9 -0,4 Conciertos música actual 6,1 6,0 -0,1 Teatro 5,8 4,8 -1,0 Conciertos música clásica 5,4 4,8 -0,6 Bertsolarismo 5,3 5,0 -0,3 Museos 5,1 4,6 -0,5 Revistas 4,8 4,8 0,0 Salas de exposición 4,8 4,5 -0,3 Danza 4,7 3,2 -1,5 Galerías de arte 4,4 3,9 -0,5 Lírica 3,9 3,1 -0,8

Fuente: Gobierno Vasco. Dpto. Cultura. Estadística. Hábitos, Prácticas y Consumo en Cultura. 2007-08.

Las diferencias en el grado de interés manifestado por las actividades culturales perfilan un

consumo algo diferenciado. Por ejemplo, en el caso del teatro, la asistencia es ligeramente

mayor entre las mujeres. Por el contrario, el cine y los conciertos de música son actividades

que frecuentan algo más los hombres, aunque no puede decirse que se trate de un

comportamiento específicamente masculino, dada la escasa diferencia de género que existe

en la asistencia a estos espectáculos culturales.

Tabla 3.57. Asistencia habitual (%) a espectáculos culturales. CAE, 2007-08

Mujeres Hombres

Conciertos de música 15,0 18,0 Teatro 10,9 7,3 Cine 38,0 42,0 Museos 17,9 18,3

Fuente: Gobierno Vasco. Dpto. Cultura. Estadística. Hábitos, Prácticas y Consumo en Cultura.

Por último, se presentan una serie de indicadores respecto al consumo de la radio y la

televisión, analizando las preferencias de mujeres y hombres por los contenidos que ambos

medios difunden.

En el caso de la radio, las preferencias manifestadas por mujeres y hombres evidencian una

destacada distancia de género en los deportes, que supera los 20 puntos porcentuales a


favor de los hombres. En el resto de los contenidos, las diferencias de género son mucho

menores. Tanto mujeres como hombres escuchan sobre todo noticias y música.

Tabla 3.58. Preferencias (%) de programas de radio por sexo. CAE, 2007-08 (multirespuesta)

Mujeres Hombres H-M

Noticias 71,5 73,7 2,2 Música 62,0 59,5 -2,5 Reportajes de actualidad 37,9 31,2 -6,7 Otros 14,2 12,2 -2,0 Cultura 8,7 6,7 -2,0 Deportes 8,4 29,2 20,8 Viajes 2,5 1,7 -0,8


Respecto a los contenidos de la televisión, las mujeres vascas concentran sus preferencias

en tres grandes bloques: noticias (75,4%), series (50,9%) y películas (47,4%). Los hombres,

por su parte, se decantan por las noticias (78,7%), las películas (49,6%) y los deportes

(40%). Como puede observarse, la brecha de género es manifiestamente elevada en los

contenidos deportivos y las series televisivas, probablemente en respuesta a los mandatos

de género relacionados con la divisoria femenino-masculino culturalmente construida. En

suma, el análisis sugiere que el acceso y el uso de determinados recursos está

condicionado por preferencias y gustos modelados desde la estructura social.

Tabla 3.59. Preferencias (%) de programas de televisión por sexo. CAE, 2007-08 (multirespuesta)

Mujeres Hombres H-M

Noticias 75,4 78,7 3,3 Series 50,9 32,9 -18,0 Películas 47,4 49,6 2,2 Documentales 23,3 29,7 6,4 Concursos 17,7 6,5 -11,2 Programas con entrevistas 13,3 6,6 -6,7 Programas del corazón 7,5 0,9 -6,6 Deportes 7,1 40,0 32,9 Otros 6,8 5,9 -0,9 Dibujos animados 3,5 2,0 -1,5 Programas culturales 3,4 3,5 0,1 Reality shows 2,8 0,9 -1,9 Tertulias 2,3 2,3 0,0 Magazines 2,1 1,5 -0,6


4. PARTICIPACIÓN SOCIOPOLÍTICA E INFLUENCIA

El análisis de la presencia, participación e influencia de las mujeres en distintas

instituciones, entidades y órganos de toma de decisiones es un requisito para conocer la

cuota femenina de poder en nuestra sociedad o, en otras palabras, si nuestra sociedad

reparte el poder equitativamente entre mujeres y hombres. Como se observa en este

apartado, aunque la participación sociopolítica de las mujeres y su influencia han aumentado

en los últimos años, aún están lejos de equipararse a las de los hombres, especialmente en

algunos ámbitos.

En los cifras anteriores, se ha dado especial relevancia a la presencia de las mujeres en

instituciones políticas (Parlamento, Juntas Generales, ayuntamientos, alcaldías, altos cargos

del Gobierno Vasco), analizando también su participación en los altos cargos de los

principales sindicatos, entidades financieras y empresas. En esta ocasión, además de

actualizar dicha información para realizar un análisis diacrónico, se han añadido un aspecto

novedoso: la presencia de las mujeres en los cargos directivos de los medios de

comunicación.

4.1. Participación en las instituciones públicas

La presencia de las mujeres en el Parlamento Vasco se ha incrementado progresivamente

desde las primeras elecciones de 1980 hasta la octava legislatura, en la que el número de

parlamentarias superó por primera vez en la historia vasca al de parlamentarios. Este hecho

está relacionado con la Ley 4/2005, de 18 de febrero, para la Igualdad de Mujeres y

Hombres que el hemiciclo vasco aprobó en 2005, y que regula la obligación de que todas las

candidaturas estén integradas por, al menos, un cincuenta por ciento de mujeres, obligando

a mantener dicha proporción tanto en el conjunto de la lista como en cada tramo de seis

nombres.


En la siguiente legislatura (2009-2012) el número de mujeres en la cámara fue menor que el

de hombres, pero no bajó del 45% de representantes en ningún momento. A partir de las

elecciones de octubre de 2012, el Parlamento Vasco está constituido por 37 parlamentarias

y 38 parlamentarios.

Tabla 4.1. Evolución de la presencia de mujeres y hombres (%) en el Parlamento Vasco por legislatura. 1980-2012

Legislatura I II III IV V VI VII VIII IX X

Año 1980 1984 1986 1990 1994 1998 2001 2005 2009 2012

Mujeres 6,7 10,7 13,3 20 24 29,3 37,3 53,3 46,7 49,3

Hombres 93,3 89,3 86,7 80 76 70,7 62,7 46,7 53,3 50,7

Fuente: Elaboración propia a partir de Elizondo, Arantxa (1999): La presencia de las mujeres en los partidos

políticos de la Comunidad Autónoma de Euskadi. Gobierno Vasco, Vitoria-Gasteiz y Martínez Hernández, Eva y Elizondo Lopetegi, Arantxa (2005): “Luces y sombras del papel político de las mujeres en la Comunidad

Autónoma del País Vasco” en VII Congreso Español de Ciencia Política y de la Administración. Fuente:

Departamento de Interior del Gobierno Vasco. Dirección de Procesos Electorales y Documentación.

La representación de las mujeres en las Juntas Generales también ha ido aumentando

progresivamente a lo largo de los años, con la excepción del año 83 en el que baja. En

2011, con la influencia de la regulación de cuotas en la Ley Electoral, la representación

femenina se aproxima al 50% alcanzando su máximo histórico y superando en los tres

parlamentos el 47% de representación femenina. En Gipuzkoa incluso el número de junteras

supera por primera vez al de junteros.

Tabla 4.2. Evolución de la presencia de mujeres (%) en las Juntas Generales de los tres territorios históricos. CAE, 1979-2012

1979 1983 1987 1991 1995 1999 2003 2007 2011

Araba/Álava 10,5 1,9 13,7 15,7 13,7 15,1 25,5 45,1 47,1

Bizkaia 4,4 7,8 7,8 13,7 21,6 33,3 41,2 37,1 49,0

Gipuzkoa 4,9 3,9 3,9 9,8 15,7 29,4 25,5 41,2 52,9

Total 6,1 4,6 10,5 13,1 17,0 26,5 30,1 41,2 49,7

Fuente: Elaboración propia a partir de las páginas web de Juntas Generales de los tres territorios históricos (http://www.jjggalava.es; http://www.jjggbizkaia.net; http://www.jjgg-gipuzkoa.org; consulta: septiembre de 2012) y Cifras 2011.

Este aumento de la paridad en las instituciones públicas vascas también se ve reflejado en

los consistorios. La presencia de concejalas en los diferentes ayuntamientos de la CAE ha


ido incrementándose de forma constante en las últimas décadas. Tras las elecciones

municipales de mayo de 2011, el número de concejalas en los municipios de la CAE supera

por primera vez las mil mujeres y alcanza su máximo histórico (38,7%).

Tabla 4.3. Evolución del número de concejalas en los ayuntamientos. CAE, 1979-2011

1979 1983 1987 1991 1995 1999 2003 2007 2011

Total concejalías 2.428 2.452 2.505 2.539 2.262 2.540 2.511 2.587 2.621

Mujeres (abs.) 170 201 295 407 512 690 713 906 1.014

Mujeres (%) 7,0 8,2 11,8 16,0 22,6 27,2 28,4 35,0 38,7

Fuente: Elaboración propia a partir de http://www.eustat.es (consulta: septiembre de 2012) y Cifras 2011.

El Gobierno Vasco cuenta con once departamentos, incluyendo la Lehendakaritza, que es el

Departamento de Presidencia. Este departamento siempre ha estado encabezado por una

figura masculina. El resto está dirigido por cinco consejeras e igual número de consejeros.

Tabla 4.4. Altos cargos en el Gobierno Vasco por sexo. 2012

Mujeres Hombres

Total abs.

Abs. % Abs. %

Consejerías 10 5 50,0 5 50,0

Viceconsejerías/secretarías generales 35 14 40,0 21 60,0

Fuente: Elaboración propia a partir de http://www.euskadi.net (consulta: 28 de agosto de 2012).

El ejecutivo vasco cuenta además con 35 viceconsejerías y secretarías generales. El 40%

de ellas está dirigido por mujeres. En lo que se refiere a la dirección de estos órganos, los

departamentos más alejados del principio de paridad en detrimento de las mujeres son el de

Presidencia; el de Industria, Innovación, Comercio y Turismo; y el de Medio Ambiente,

Planificación Territorial, Agricultura y Pesca. Sin embargo, conviene tener presente que el

número de personas que ejercen esos cargos es muy bajo −oscila entre dos y cinco− y que

la diferencia entre número de hombres y mujeres no supera las tres en ninguno de los

departamentos. Por este motivo, el análisis de la paridad por departamentos no resulta

especialmente relevante y conviene centrarse en su conjunto.


Tabla 4.5. Viceconsejerías y secretarías generales en el Gobierno Vasco por sexo. 2012

Mujeres Hombres


Presidencia 5 1 20,0 4 80,0 Interior 3 1 33,3 2 66,7 Educación, Universidades e Investigación 4 2 50,0 2 50,0 Economía y Hacienda 2 1 50,0 1 50,0 Justicia y Administración Pública 4 3 75,0 1 25,0 Vivienda, Obras Públicas y Transportes 2 1 50,0 1 50,0 Industria, Innovación, Comercio y Turismo 4 1 25,0 3 75,0 Empleo y Asuntos Sociales 3 1 33,3 2 66,7 Sanidad y Consumo 2 1 50,0 1 50,0 Medio Ambiente, Planificación Territorial, Agricultura y Pesca 4 1 25,0 3 75,0 Cultura 2 1 50,0 1 50,0 Total 35 14 40,0 21 60,0

Fuente: Elaboración propia a partir de http://www.euskadi.net (consulta: 28 de agosto de 2012).

En lo que a grupos parlamentarios se refiere, en agosto de 2012 solo dos de los siete

grupos cumplen el principio de paridad en sus composiciones parlamentarias: Euzko

Abertzaleak-Nacionalistas Vascos y Aralar. Les sigue el grupo socialista con un 48% y, a

mayor distancia, el grupo popular con un 38,5%. Los tres partidos políticos que componen el

Grupo Mixto (Eusko Alkartasuna, Esker Anitza y Unión, Progreso y Democracia) solo tienen

una persona como representante en la cámara y en los tres casos se trata de un hombre.

Tabla 4.6. Parlamentarias/os por grupo parlamentario y sexo. CAE, 2012

Mujeres Hombres


Euzko Abertzaleak-Nacionalistas Vascos 30 17 56,7 13 43,3

Socialistas Vascos-Euskal Sozialistak 25 12 48,0 13 52,0

Popular Vasco-Euskal Talde Popularra 13 5 38,5 8 61,5

Aralar 4 2 50,0 2 50,0

Mixto-Eusko Alkartasuna 1 0 0,0 1 100,0

Mixto-Ezker Anitza-IU 1 0 0,0 1 100,0

Mixto-UPyD 1 0 0,0 1 100,0

Total 75 36 48,0 39 52,0

Fuente: Elaboración propia a partir de http://www.parlamento.euskadi.net (consulta: 28 de agosto de 2012).

En las diputaciones forales de los tres territorios históricos, los diputados generales son

hombres. Al igual que en el Gobierno Vasco, los cargos que ostentan más poder siempre

han correspondido a figuras masculinas. Sin embargo, según se desciende en el escalafón,

la paridad aumenta: entre los 23 cargos de diputada o diputado foral, casi la mitad son

ejercidos por mujeres. Así en las diputaciones forales de Bizkaia y de Álava la mitad de los


departamentos están dirigidos por mujeres. En la de Gipuzkoa, de siete, tres los presiden

mujeres.

Tabla 4.7. Composición de gobiernos forales por sexo. CAE, 2012

Diputado General Diputadas/os forales Mujeres Hombres

Mujer abs. Hombre abs.

Abs. % Abs. %

Araba/Álava 0 1 4 50,0 4 50,0

Bizkaia 0 1 4 50,0 4 50,0

Gipuzkoa 0 1 3 42,9 4 57,1

Fuente: Elaboración propia a partir del BOTHA, BOB y BOG.

En el ámbito municipal, menos de uno de cada cuatro consistorios vascos es presidido por

alcaldesas. Las mujeres gobiernan especialmente en municipios pequeños. De hecho, solo

siete de los 56 municipios gobernados por alcaldesas superan los 10.000 habitantes y, por

ende, ninguna de las capitales vascas se encuentra entre ellos. Así, los municipios con

mujeres al frente solo aglutinan el 11,4% de la población vasca. Esto es especialmente

notorio en Álava, donde solo el 6% de la población pertenece un ayuntamiento presidido por

una mujer. En los otros dos territorios, las y los habitantes que residen en municipios con

alcaldesa ascienden al 12%.

Tabla 4.8. Población y municipios donde gobiernan alcaldesas. CAE, 2012

Municipios Habitantes

Abs. % Abs. %

CAE 56 22,3 247.425 11,4

Araba/Álava 7 13,7 19.045 6,0

Bizkaia 25 22,3 138.845 12,0

Gipuzkoa 24 27,3 89.535 12,7

Fuente: Elaboración propia a partir de datos de EUDEL (consulta: septiembre de 2012).

Las únicas fuerzas políticas que tienen alcaldías dirigidas por mujeres en Euskadi, con la

excepción de cinco partidos municipales independientes, son Euskal Herria Bildu −con 35− y

el Partido Nacionalista Vasco −con 16−. En Gipuzkoa todas las alcaldesas, excepto las

representantes de cuatro partidos independientes, pertenecen a EH Bildu. En Álava y en

Bizkaia, los consistorios presididos por mujeres se reparten prácticamente a partes iguales

entre PNV y EH Bildu.


Tabla 4.9. Municipios gobernados por mujeres, por habitantes, partidos políticos y territorio histórico. CAE, 2012


Municipio Hab. Partido Municipio Hab. Partido Municipio Hab. Partido

Amurrio 10.050 EAJ-PNV Arantzazu 325 EAJ-PNV Altzo 398 EH Bildu

Artziniega 1.818 EAJ-PNV Arrankudiaga 920 EH Bildu Andoain 14.662 EH Bildu

Barrundia 910 EH Bildu Atxondo 1.433 EH Bildu Antzuola 2.161 EH Bildu

Bernedo 575 EAJ-PNV Berango 6.748 EAJ-PNV Aretxabaleta 6.700 EH Bildu

Elburgo/Burgelu 589 EAJ-PNV Bermeo 17.026 EH Bildu Asteasu 1.473 Ind. Asteasu (Asteasu Batuz)

Leza 236 EAJ-PNV Busturia 1.762 EH Bildu Beizama 183 Ind. Beizama (Aurrena Beizama)

Salvatierra/Agurain 4.867 EH Bildu Durango 28.261 EAJ-PNV Elduain 235 EH Bildu

Elorrio 7.252 EAJ-PNV Errezil 616 EH Bildu

Forua 1.012 EAJ-PNV Hernialde 348 Ind. Hernialde (HH)

Fruiz 450 EAJ-PNV Irura 1.577 EH Bildu

Gorliz 5.503 EAJ-PNV Itsasondo 661 EH Bildu

Larrabetzu 1.917 EH Bildu Leaburu 395 EH Bildu

Lekeitio 7.438 EH Bildu Legorreta 1.496 EH Bildu

Lemoa 3.226 EH Bildu Lezo 5.988 EH Bildu

Lezama 2.501 EAJ-PNV Mendaro 1.898 EH Bildu

Mallabia 1.182 EH Bildu Oiartzun 9.947 EH Bildu

Mungia 16.527 EAJ-PNV Ormaiztegi 1.319 EH Bildu

Nabarniz 234 EH Bildu Pasaia 15.977 EH Bildu

Ondarroa 8.856 EH Bildu Segura 1.455 EH Bildu

Plentzia 4.292

Ind. Plentzia (I.P.)

Soraluze-Placencia de las Armas

4.002 EH Bildu

Sopelana 12.527 EH Bildu Urretxu 6.957 EH Bildu

Ugao-Miraballes 4.050 EAJ-PNV Usurbil 6.013 EH Bildu

Zaldibar 3.041 EH Bildu Zegama 1.530 Ind. Zegama (Zegama Lantzen)

Zeanuri 1.302 EAJ-PNV Zestoa 3.544 EH Bildu

Zeberio 1.060 EH Bildu

Fuente: Elaboración propia a partir de datos de EUDEL (consulta: septiembre de 2012).


En las últimas elecciones municipales, que tuvieron lugar en 2011, el número de mujeres

electas que logran concejalías supone un 39% del total. Entre los partidos políticos, Euskal

Herria Bildu es el que mayor porcentaje tiene de concejalas, seguido por el Partido

Socialista y el Partido Nacionalista Vasco, todos ellos por encima del 35%. El partido con

menos concejalas es Aralar, con poco más del 20% entre sus filas.

Tabla 4.10. Concejalas y concejales elegidos en las elecciones municipales de 2011 por sexo y partido político. CAE

Total abs. Mujeres (%) Hombres (%)

Euskal Herria Bildu 955 44,0 56,0 Partido Nacionalista Vasco (EAJ/PNV) 871 38,3 61,7 Partido Socialista de Euskadi (PSE-EE/PSOE) 235 39,7 60,3 Partido Popular (PP) 164 31,5 68,5 Aralar 34 20,6 79,4 Ezker Batua-Berdeak (EB-B) 11 27,3 72,7 Otros 351 30,2 69,8 Total 2.621 38,7 61,3

Fuente: http://www.eustat.es (consulta: 29 de agosto de 2012).

4.2. Participación en otros órganos de influencia

Además de la incidencia en los partidos políticos y en las instituciones públicas, existen

otras vías de participación con gran relevancia en la sociedad. En este subapartado se

analizan algunos de estos ámbitos.

Tabla 4.11. Secretarías generales y comités ejecutivos de los sindicatos mayoritarios por sexo. CAE, 2012

Secretaria/o general Comité ejecutivo Mujeres Hombres


Abs. % Abs. % Total abs.

CCOO 0 1 7 30,4 16 69,6 23 ELA 0 1 4 36,4 7 63,6 11 LAB 1 0 7 53,8 6 46,2 13 UGT 0 1 3 30,0 7 70,0 10 Total 1 3 21 36,8 36 63,2 57

Fuente: Elaboración propia a partir de páginas web de sindicatos: http://www.ccoo-euskadi.net; http://www. ela-sindikatua.org; http://www.labsindikatua.org; http://www.ugt.es (consulta: septiembre de 2012). Nota: Los sindicatos seleccionados son los de mayor representación según los resultados de elecciones sindicales recogidos por el DJESS y publicados por Eustat).


Entre los sindicatos mayoritarios de Euskadi, solo LAB tiene una mujer como Secretaria

General. Así mismo, esta organización cuenta con más mujeres que hombres en su comité

ejecutivo. El resto de sindicatos tienen como secretario general a un hombre y en sus

comités ejecutivos la tasa de mujeres no alcanza el 37%.

Tabla 4.12. Presidencia y consejo de dirección de las entidades financieras con sede en la CAE por sexo. 2012

Presidencia Consejo de administración/dirección general Mujeres Hombres


Abs. % Abs. % Total abs.

BBVA 0 1 2 15,4 11 84,6 13 Caja Laboral 0 1 1 11,1 8 88,9 9 Fiare 0 1 4 30,8 9 69,2 13 Kutxabank 0 1 3 21,4 11 78,6 14 Ipar Kutxa 0 1 2 18,2 9 81,8 11 Totales 0 5 12 20,0 48 80,0 60

Fuente: Elaboración propia a partir de páginas web de entidades financieras: http://accionistaseinversores. bbva.com; https://www.cajalaboral.com; http://www.proyectofiare.com; http://www.kutxabank.es; https:// www.iparkutxa.com (consulta: septiembre de 2012).

Los ámbitos de decisión de las entidades financieras con sede en la CAE también están

muy masculinizados. Las cinco entidades vascas están presididas por un hombre y en sus

órganos de decisión más importantes, de media, solo una de cada cinco miembros es mujer.

La que tiene mayor representación femenina es Fiare1 con casi un 31% de mujeres en su

junta de personas asociadas, su órgano máximo de decisión. El BBVA, la Caja Laboral e

Ipar Kutxa no superan el 20%, siendo la segunda la que tiene menor presencia de mujeres

con un 11%. Kutxabank, un banco que surge del proceso de integración de las tres cajas

vascas −BBK, Kutxa y Vital− y que comienza su actividad en enero de 2012, tiene un 21,4%

de mujeres en su consejo de administración.

Tabla 4.13. Presidencia y consejo de administración de las empresas del IBEX 35 con sede en la CAE por sexo. 2012

Presidencia Consejo de administración/dirección general Mujeres Hombres

Mujer abs.

Hombre abs. Abs. % Abs. %

Total abs.

BBVA 0 1 2 15,4 11 84,6 13 Gamesa 0 1 2 25,0 6 75,0 8 Iberdrola 0 1 3 23,1 10 76,9 13 Total 0 3 7 20,6 27 79,4 34

Fuente: Elaboración propia a partir de páginas web de empresas vascas: http://accionistaseinversores. bbva.com; http://www.gamesacorp.com; https://www.iberdrola.es (consulta: septiembre de 2012).

1 Actualmente Fiare actúa como agente de Banca Popolare Etica.


En las empresas vascas del IBEX 35 el panorama es muy similar. Ninguna de las tres

empresas que cotizan en este índice bursátil tiene una mujer como presidenta y en sus

consejos de administración o en sus direcciones generales, el porcentaje medio de mujeres

es del 20,6%. El BBVA es la empresa que menor representación femenina tiene en su

Consejo de Administración con un 15,4%.

Tabla 4.14. Medios de comunicación con mayor cuota de audiencia en la CAE por sexo. 2012

Medio Cargo Mujeres Hombres

Cadena Ser/Los 40 Directora 1 - EITB radio Director-coordinador - 1 Onda Vasca Directora 1 - Radio Nacional de España Director - 1 Radio Nervión-Gorbea Director - 1

Radios

Onda cero Director - 1 Total 2 4

El Correo Español Director - 1 El Diario Vasco Director - 1 Deia Director - 1 Gara Director - 1 Berria Director - 1 El País (Ed. País Vasco) Delegado - 1

Periódicos

Noticias Gipuzkoa Directora 1 - Total 1 6

Telecinco/Cuatro Jefe de redacción - 1 ETB-2/ETB-1 Director - 1 TVE-1 Director - 1 Antena 3 Delegado CAE - 1

Televisiones

La Sexta Delegado CAE - 1 Total 0 5

Total medios de comunicación (cifras absolutas) 3 15 Total medios de comunicación (porcentajes) 16,7 83,3

Fuente: Elaboración propia a partir de consultas directas a los diferentes medios y visitas a sus páginas web (consulta: septiembre de 2012). Fuente para la elección de los medios: http://www.eustat.es (consulta: septiembre de 2012).

Para analizar el poder de decisión que detentan las mujeres en los medios de comunicación

se han seleccionado los cargos de dirección de los media con mayor cuota de audiencia en

la CAE: las siete radios más escuchadas, los siete periódicos no deportivos más leídos y las

siete televisiones más vistas2. Los resultados del análisis describen un escenario muy

2 Cuando una persona ejerce la dirección en dos medios de comunicación del mismo grupo, se ha

contabilizado una sola vez. Este es el caso de la Cadena Ser y Los 40, Telecinco y Cuatro y, finalmente, ETB-1 y ETB-2. Así mismo, cuando el medio es de ámbito estatal, se ha considerado el cargo correspondiente en Euskadi.


masculinizado: de los 18 cargos directivos considerados solo tres son ocupados por

mujeres. Aunque la emisora de radio más escuchada es dirigida por una mujer, todas las

cadenas de televisión consideradas tienen al frente a hombres y el único periódico con una

directora es el de menor tirada de los estudiados.

Para analizar la participación femenina en la judicatura vasca, se han considerado las

personas que forman el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, las audiencias

provinciales de los tres territorios históricos y todos los juzgados, considerando tanto a las

personas al cargo de las presidencias, como a magistradas y magistrados, y jueces

titulares3.

A diferencia de los ámbitos estudiados anteriormente en este epígrafe, en los órganos

judiciales hay una mayor presencia de mujeres que de hombres. En general, por cada cinco

cargos considerados, tres son ocupados por mujeres. Sin embargo, según se asciende en la

carrera judicial la presencia femenina es menor. Así, en los juzgados, el número de mujeres

jueces es más del doble que el de hombres. En las audiencias provinciales, el número de

magistradas es prácticamente igual que el de magistrados, incluyendo las presidencias. Y,

sin embargo, en el Tribunal Superior de Justicia el número de magistrados, triplica al de

magistradas, incluyendo las presidencias del Tribunal y de las salas.

Tabla 4.15. Órganos judiciales por sexo. CAE, 2012

Cargo Mujer Hombre

Presidente - 1 Sala de lo Civil y Penal Presidente - 1 Magistrados 1 3 Sala de lo Contencioso-Administrativo Presidente - 1 Magistrados 3 8 Sala de los Social Presidenta 1 -

Tribunal Superior de Justicia

Magistrados 2 8 Total 7 22

3 Durante la elaboración de este trabajo, había jueces titulares desempeñando servicios

especiales en otra comunidad y sus plazas estaban ocupadas por otras personas de la judicatura. En estos casos se han contabilizado a las y los titulares.


Cargo Mujer Hombre

Araba/Álava Presidenta 1 - Sección 1 Presidenta 1 - Magistrados - 3 Sección 2 Presidenta 1 - Magistrados - 4

Bizkaia Presidente - 1 Sección 1 Presidenta 1 - Magistrados - 3 Sección 2 Presidenta 1 - Magistrados 1 2 Sección 3 Presidenta 1 - Magistrados 2 - Sección 4 Presidente - 1 Magistrados 3 1 Sección 5 Presidenta 1 - Magistrados 2 - Sección 6 Presidente - 1 Magistrados 2 1

Gipuzkoa Presidente - 1 Sección 1 Presidente - 1 Magistrados 2 2 Sección 2 Presidenta 1 - Magistrados 2 1 Sección 3 Presidenta 1 -

Audiencias provinciales

Magistrados - 2 Total 23 24

Juzgado de lo Penal 11 4 Juzgado de lo Contencioso-Administrativo 5 7 Juzgado de lo Social 12 7 Juzgado de Vigilancia Penitenciaria 1 - Juzgado de Menores 3 1 Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 28 7 Juzgado de Primera Instancia 28 8 Juzgado de Instrucción 16 7 Registro Civil Exclusivo Único 1 - Juzgado Decano Exclusivo - 1 Juzgado de lo Mercantil - 3

Juzgados

Juzgado de Violencia sobre la Mujer 4 1 Total 109 46

Total órganos judiciales de la CAE (cifras absolutas) 139 92 Total órganos judiciales de la CAE (porcentajes) 60,2 39,8

Fuente: Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, consulta directa (consulta: octubre de 2012).

La pertenencia y el trabajo voluntario en entidades sociales, culturales y políticas es una

forma de influencia y de participación que quizá en la coyuntura actual de crisis está

adquiriendo una relevancia especial. Al introducir la variable sexo en los resultados de la

Encuesta Europea de Valores en su aplicación a la CAE, se observa que las mujeres


participan menos que los hombres, tanto en lo que se refiere a pertenencia como a trabajo

voluntario en general. Las diferencias más destacadas entre sexos se dan en sindicatos y

organizaciones deportivas, donde los hombres participan más, y en organizaciones

religiosas y entidades relacionadas con la mujer, donde las mujeres son más activas.

Tabla 4.16. Pertenencia y trabajo voluntario en entidades sociales y sociopolíticas (%) por sexo. CAE, 2008

Pertenencia Trabajo voluntario Mujeres Hombres H-M Mujeres Hombres H-M

Asistencia tercera edad, personas con discapacidad, personas necesitadas

2,2 2,2 0,0 1,7 2,0 0,3

Organizaciones religiosas o Iglesia 1,9 1,5 -0,4 2,8 1,0 -1,8

Actividades educativas, artísticas, musicales o culturales

4,3 4,5 0,2 2,1 2,3 0,2

Sindicatos 4,0 12,0 8,0 0,0 2,3 2,3

Partidos políticos 0,7 2,5 1,8 0,2 1,3 1,1

Acciones a nivel local en pobreza, vivienda, igualdad racial, empleo

0,5 0,5 0,0 0,2 0,5 0,3

Desarrollo Norte-Sur. Derechos humanos 1,9 1,5 -0,4 1,4 1,0 -0,4

Protección del medioambiente. Ecología. Derechos de los animales

0,0 0,3 0,3 0,0 0,0 0,0

Asociaciones profesionales 0,7 1,3 0,6 0,2 0,3 0,1

Trabajo con juventud 0,2 1,3 1,1 0,2 0,5 0,3

Deportes, actividades recreativas 1,4 8,0 6,6 1,2 3,0 1,8

Grupos relacionados con la mujer 0,7 0,0 -0,7 0,7 0,0 -0,7

Movimiento por la paz 0,7 0,5 -0,2 0,7 0,3 -0,4

Organizaciones de salud 2,1 3,5 1,4 1,9 2,8 0,9

Ninguno 79,0 66,0 -13,0 86,3 83,4 -2,9

Fuente: Elaboración propia a partir de la Encuesta Europea de Valores, 2008.

Sin embargo, si centramos el análisis en las organizaciones inscritas en el Censo General

de Organizaciones de Voluntariado de la CAE y en los registros internos de las tres

agencias vascas de voluntariado −Bolunta, Gizalde y Erdu−, según recoge el Informe Anual

de la Situación de las Organizaciones de Voluntariado en la CAPV 2009, la participación de

las mujeres aumenta. La mitad de las personas asociadas a estas entidades son mujeres,

proporción que en el caso de las voluntarias se incrementa hasta el 55%. Esto supone


−según se señala en el mencionado informe− que casi en siete de cada diez organizaciones

consideradas (67%) la presencia de mujeres voluntarias es mayoritaria.

Tabla 4.17. Personas asociadas y voluntarias en organizaciones inscritas en el Censo General de Organizaciones de Voluntariado o en los registros de las agencias vascas de voluntariado por sexo. CAE, 2009

Mujeres Hombres

Total Abs. % Abs. %

Personas asociadas 237.864 117.660 50,5 120.204 49,5 Personas voluntarias 29.689 16.465 55,0 13.224 45,0

Fuente: Elaboración propia a partir del Informe Anual de la Situación de las Organizaciones de Voluntariado en la CAPV 2009.

Analizando estas organizaciones por tipología, la participación voluntaria de las mujeres en

entidades de orientación social es mayor que la de los hombres. Entre ellas destacan, las

incluidas dentro de las categorías de cooperación entre personas y de educación, donde

más de siete de cada diez personas voluntarias son mujeres.

Tabla 4.18. Personas voluntarias en organizaciones inscritas en el Censo General de Organizaciones de Voluntariado o en los registros de las agencias vascas de volunta-riado según tipología de la entidad. CAE, 2009

Mujeres Hombres H-M

Cooperación entre personas 73,4 26,6 -46,8 Educación 70,6 29,4 -41,2 Salud 54,4 45,6 -8,8 Exclusión social 53,7 46,3 -7,4 Derechos humanos 53,2 46,8 -6,4 Empleo 52,5 47,5 -5,0 Cooperación al desarrollo 51,8 48,2 -3,6 Cultura y euskera 48,3 51,7 3,4 Deporte 48,1 51,9 3,8 Ocio y tiempo libre 45,9 54,1 8,2 Medioambiente 42,4 57,6 15,2 Protección civil y emergencias 40,9 59,1 18,2 Otros 49,6 50,4 0,8

Fuente: Elaboración propia a partir del Informe Anual de la Situación de las Organizaciones de Voluntariado en la CAPV 2009.

La presencia de las mujeres en el ámbito público y su participación e influencia

sociopolíticas han aumentado notablemente en las últimas décadas. Sin embargo, la

situación en muchos ámbitos dista aún de la paridad deseable, especialmente según se

asciende hacia los puestos de mayor responsabilidad y poder en la CAE. Así, puestos de

esta índole −como la Lehendakaritza; la diputada o diputado general de las diputaciones

forales; la alcaldía de las capitales vascas o de poblaciones de más de 50.000 habitantes; la

presidencia de los sindicatos mayoritarios, grandes empresas o entidades financieras; la


dirección de los medios de comunicación con mayor cuota de audiencia o la presidencia del

Tribunal Superior de Justicia del País Vasco− rara vez son ocupados por mujeres. De

hecho, de los cargos mencionados las mujeres solo ostentan la Secretaría General de LAB y

la dirección (no de ámbito estatal) de tres medios de comunicación. La paridad, en cambio,

es mayor en los puestos de menor responsabilidad. También se alcanzan mayores cotas de

paridad en las instituciones públicas, influidas por la Ley para la Igualdad de Mujeres y

Hombres aprobada por el Parlamento Vasco en 2005, que en las entidades privadas. La

brecha de género aún es grande y queda mucho camino por recorrer.

5. ORGANIZACIÓN SOCIAL CORRESPONSABLE

La división sexual del trabajo en virtud de la cual se atribuye a las mujeres el trabajo

doméstico y de cuidados, y a los hombres el sostenimiento económico de la familia y el

ejercicio de la autoridad, constituye sin duda uno de los pilares fundamentales de la

desigualdad de género. Precisamente la pervivencia de la falta de equidad en el reparto del

trabajo reproductivo es un factor fundamental que subyace a la débil o precaria inserción de

las mujeres en el mercado laboral, en los poderes fácticos y en aquellos espacios sociales

en los que se distribuyen los recursos.

Frente a este modelo del “varón proveedor”, que responsabiliza exclusivamente a las

mujeres del trabajo reproductivo, el V Plan para la Igualdad de Euskadi recoge como uno de

sus tres ejes la “organización social corresponsable”, término que subraya que el

sostenimiento de la vida compete a la sociedad en su conjunto. El equilibrio entre las

necesidades y responsabilidades derivadas de los espacios personal, social, familiar y

laboral requiere así la implicación de los hombres, de los organismos públicos y privados, y

de todos los agentes sociales con relación al trabajo reproductivo. Para caminar hacia este

modelo social dicho plan propone dos líneas. La primera consiste en fomentar la

corresponsabilidad y la ética del cuidado, promoviendo la equiparación de los permisos de

maternidad y paternidad –iguales e intransferibles–, el aumento del porcentaje de hombres

que se acoge a medidas de conciliación y la reducción de la brecha de género en los

tiempos destinados a las tareas domésticas y de cuidados. La segunda, incrementar el

tiempo que las mujeres destinan al ocio y a la consecución de la autonomía e independencia

económica.

La evidencia empírica analizada en este capítulo muestra que a pesar de los logros y

avances hacia la igualdad, en el siglo XXI en Euskadi la responsabilidad de las tareas

domésticas y de cuidado continúa recayendo en las mujeres y pone así de manifiesto el

largo camino que queda por recorrer en el avance hacia una sociedad sin discriminación de

género.


5.1. Corresponsabilidad y nuevos usos del tiempo

Según los datos de la Encuesta Europea de Valores en su aplicación a la CAE, una

abrumadora mayoría de sociedad vasca (96,5%), en consonancia con el entorno estatal y

europeo, defiende la participación paritaria de los hombres en el trabajo doméstico y la

crianza. Este ideal de corresponsabilidad en el trabajo reproductivo ha pasado así a formar

parte del imaginario social, cuestionando los referentes propios de la familia tradicional.

Tabla 5.1 "Los hombres deberían asumir tantas responsabilidades como las mujeres en el hogar y con los hijos"(%). Entorno europeo, 2008

Acuerdo Desacuerdo

Alemania 92,0 8,0 Francia 95,4 4,6 Reino Unido 93,7 6,3 Finlandia 96,5 3,5 Suecia 97,1 2,9 Dinamarca 97,5 2,5 Noruega 96,5 3,5 España 92,8 7,2 C. A. de Euskadi 96,5 3,4 Portugal 89,4 10,6 Italia 91,4 8,6 Grecia 84,4 15,6 Lituania 93,4 6,6 Ucrania 98,3 1,7 Rumanía 75,7 24,3 Estonia 86,4 13,6

Fuente: Elaboración propia a partir de datos de EVS-Universidad de Deusto. 2008.

Sin embargo, esta exaltación del papel activo de los hombres en el trabajo doméstico y la

crianza contrasta con las prácticas reales que tienen lugar en los hogares. En lo que se

refiere al cuidado temprano, los hombres que disfrutan de la prestación de maternidad

constituyen una rareza estadística, que no supera el 5% en ninguna comunidad autónoma, a

pesar de que únicamente 6 semanas se consideran de descanso obligatorio para la madre.

La CAE y Navarra, como puede apreciarse en la tabla siguiente, son las comunidades en las

que existe un mayor porcentaje de padres perceptores.


Tabla 5.2. Prestaciones por maternidad, por CC.AA., sexo de la persona perceptora e importe (euros). 2011*

Por la madre Por el padre Padres (%) Importe percibido

Total 318.607 5.798 1,8 1.824.182

Andalucía 57.007 652 1,1 277.786

Aragón 8.927 194 2,2 50.759

Asturias 5.497 141 2,6 30.006

Balears 7.593 122 1,6 43.718

Canarias 10.468 170 1,6 55.792

Cantabria 3.842 103 2,7 21.040

Castilla-La Mancha 12.273 163 1,3 64.719

Castilla y León 13.935 350 2,5 76.180

Cataluña 56.340 1.004 1,8 355.933

Comunitat Valenciana 32.113 419 1,3 171.382

Euskadi 16.930 798 4,7 111.560

Extremadura 6.434 61 0,9 30.205

Galicia 16.130 334 2,1 83.598

La Rioja 2.134 45 2,1 12.153

Madrid 52.832 956 1,8 348.693

Murcia 10.264 69 0,7 52.386

Navarra 5.112 199 3,9 34.120

Ceuta 370 6 1,6 2.056

Melilla 406 12 3,0 2.097

Fuente: Anuario de estadísticas del Ministerio de Empleo y Seguridad Social 2011. (*) Actualizado a 12 de septiembre de 2012.

Desde 2007 los hombres pueden acceder también al disfrute de 15 días de permiso no

transferibles con motivo del nacimiento de un hijo o hija. Según el anuario de estadística del

Ministerio de Empleo y Seguridad Social, en la CAE estas prestaciones por paternidad

ascendieron a 15.741 en 2011, frente a las 798 prestaciones de maternidad a las que se

acogieron los hombres en el mismo periodo, lo que ilustra la mayor incidencia en la

incorporación de los hombres al cuidado de los permisos intransferibles en este ámbito. Los

datos recogidos en la tabla siguiente muestran asimismo que Euskadi, seguida de Navarra,

destaca como la comunidad donde un mayor porcentaje de los nacimientos (73,7%) gozaron

de permiso paternal en 2009. En el mismo año en comunidades como Navarra, Aragón,

Cantabria, Castilla y León, Cataluña o La Rioja más de 6 de cada 10 nacimientos motivaron

el disfrute del permiso por paternidad.


Tabla 5.3. Prestaciones por paternidad, por CC.AA. y número de nacimientos. 2007-09

2007 2008 2009

Prestaciones Nacimientos % Prestaciones Nacimientos % Prestaciones Nacimientos %

Total 173.161 492.527 35,2 279.756 519.779 53,8 273.024 494.997 55,2

Andalucía 27.130 96.062 28,2 45.290 100.293 45,2 43.321 94.616 45,8

Aragón 4.785 12.859 37,2 9.191 13.675 67,2 8.297 13.062 63,5

Asturias 2.999 7.833 38,3 4.566 8.221 55,5 4.642 8.210 56,5

Balears 3.321 11.917 27,9 6.411 12.713 50,4 6.033 12.044 50,1

Canarias 6.504 19.740 32,9 10.261 20.672 49,6 9.322 18.952 49,2

Cantabria 2.290 5.379 42,6 3.552 5.886 60,3 3.509 5.619 62,4

Castilla y León 7.993 20.077 39,8 12.522 21.311 58,8 12.522 20.416 61,3

Castilla-La Mancha 6.740 20.875 32,3 11.944 23.038 51,8 11.704 22.322 52,4

Cataluña 33.252 84.037 39,6 52.778 89.249 59,1 52.661 85.204 61,8

Comunitat Valenciana 19.092 54.478 35,0 29.478 57.083 51,6 26.943 52.389 51,4

Euskadi 10.150 20.594 49,3 15.549 21.310 73,0 15.405 20.905 73,7

Extremadura 3.077 9.981 30,8 5.136 10.735 47,8 5.214 10.314 50,6

Galicia 7.478 21.752 34,4 12.099 23.175 52,2 12.788 22.537 56,7

La Rioja 1.356 3.272 41,4 2.157 3.518 61,3 2.150 3.330 64,6

Madrid 28.413 74.837 38,0 44.553 78.792 56,5 44.247 75.957 58,3

Murcia 5.159 18.602 27,7 8.809 19.386 45,4 8.660 18.571 46,6

Navarra 3.090 6.595 46,9 4.912 7.029 69,9 5.023 6.844 73,4

Ceuta 182 1.136 16,0 290 1.165 24,9 295 1.152 25,6

Melilla 150 1.112 13,5 258 1.252 20,6 288 1.273 22,6

Fuente: INE. Protección a las familias y conciliación laboral.


Más allá de esta prestación intransferible, el análisis del uso de otras ayudas orientadas a la

conciliación, como las excedencias para el cuidado de hijos e hijas muestra que se trata de

medidas fuertemente feminizadas. En todas las comunidades autónomas, más del 90% de

dichas prestaciones son disfrutadas por mujeres. La CAE se sitúa en la línea de lo afirmado

para el conjunto del Estado, de forma que únicamente el 5,2% de dichos permisos fueron

disfrutados por hombres en 2011. Canarias y Extremadura destacan como las comunidades

donde un porcentaje mayor de estas prestaciones fueron disfrutadas por hombres (9,5 y

8,5% respectivamente), frente a otras como La Rioja o Aragón donde dicha proporción no

superó el 3%.

Tabla 5.4. Excedencias por cuidado familiar por sexo de la persona perceptora, CC.AA. y tipo de cuidado. 2011*

Cuidado de hijas/os Cuidado de familiares Mujeres Hombres Mujeres Hombres



Total 34.128 32.599 95,5 1.529 4,5 6.202 5.276 85,1 926 14,9 Andalucía 3.479 3.324 95,5 155 4,5 641 523 81,6 118 18,4 Aragón 1.139 1.105 97,0 34 3,0 232 198 85,3 34 14,7 Asturias 326 304 93,3 22 6,7 51 44 86,3 7 13,7 Balears 834 792 95,0 42 5,0 122 98 80,3 24 19,7 Canarias 504 456 90,5 48 9,5 69 50 72,5 19 27,5 Cantabria 303 287 94,7 16 5,3 72 55 76,4 17 23,6 Castilla-La Mancha 1.531 1.476 96,4 55 3,6 263 217 82,5 46 17,5 Castilla y León 2.454 2.377 96,9 77 3,1 286 243 85,0 43 15,0 Cataluña 4.774 4.559 95,5 215 4,5 775 657 84,8 118 15,2 C. Valenciana 3.559 3.445 96,8 114 3,2 524 423 80,7 101 19,3 Euskadi 3.353 3.180 94,8 173 5,2 271 228 84,1 43 15,9 Extremadura 389 356 91,5 33 8,5 52 39 75,0 13 25,0 Galicia 555 520 93,7 35 6,3 140 117 83,6 23 16,4 La Rioja 304 298 98,0 6 2,0 62 53 85,5 9 14,5 Madrid 7.495 7.117 95,0 378 5,0 2.038 1.795 88,1 243 11,9 Murcia 1.487 1.437 96,6 50 3,4 440 402 91,4 38 8,6 Navarra 1.619 1.544 95,4 75 4,6 160 130 81,3 30 18,8 Ceuta 13 12 92,3 1 7,7 3 3 100,0 - 0,0 Melilla 10 10 100,0 - 0,0 1 1 100,0 - 0,0

Fuente: Anuario de estadísticas del Ministerio de Empleo y Seguridad Social 2011. (*) Actualizado a 12 de septiembre de 2012.

El disfrute masculino de excedencias orientadas al cuidado de familiares, que se sitúa en

torno al 15% para el conjunto del Estado, si bien es mayor que el referido a las excedencias

para el cuidado de hijos e hijas (4,5%), denota asimismo una distribución de las

responsabilidades reproductivas aún muy desigual.


En los últimos cinco años se detecta una continuidad y, en ocasiones, una profundización de

la tendencia a la feminización en el acceso a las excedencias orientadas al cuidado en

Euskadi. Mientras el uso femenino de aquellas orientadas al cuidado de hijos a hijas adolece

de un claro estancamiento, el de las dirigidas al cuidado de familiares ha pasado de

representar el 79,9% en 2007 al 84,1% en 2011.

Tabla 5.5. Evolución de excedencia por cuidado familiar por sexo de la persona perceptora y tipo de cuidado. CAE, 2007-11

2007 2011 Mujeres Hombres Mujeres Hombres



Total 2.398 2.248 93,7 150 6,3 3.624 3.408 94,0 216 6,0 Cuidado a hijas/os 2.229 2.113 94,8 116 5,2 3.353 3.180 94,8 173 5,2 Cuidado a familiares 169 135 79,9 34 20,1 271 228 84,1 43 15,9

Fuente: Anuarios de estadísticas del Ministerio de Empleo y Seguridad Social 2007 Y 2011.

La ruptura entre la extensión del discurso igualitario y la realidad cotidiana se hace asimismo

evidente mediante el análisis de las encuestas de usos del tiempo, que nos permite desvelar

cómo se organizan las sociedades, visibilizando la forma en que mujeres y hombres tejen la

vida social con sus actividades, trabajos –remunerados o no–, descansos y aficiones.

La Encuesta de Uso Social del Tiempo de 2008 realizada en Euskadi muestra que la división

sexual del trabajo está aún lejos de desaparecer. Según este estudio, el tiempo social medio

que las mujeres dedican a las tareas domésticas es más de dos horas mayor al día que el

de los hombres, mientras que ellos dedican en torno a una hora más que ellas al trabajo

productivo y la formación, y disfrutan de más tiempo de ocio, una hora más al día. Este

paisaje aún asimétrico y la consiguiente vivencia cotidiana de discriminación de las mujeres

en los hogares muestra que, aunque se ha producido un importante cambio de valores a

nivel consciente, este aún se plasma escasamente en las prácticas cotidianas del conjunto

de la población. La distribución del tiempo de mujeres y hombres es, por tanto, desigual.

Tabla 5.6. Tiempo medio social destinado a diferentes actividades según sexo (hh, mm). CAE, 2008

Mujer Hombre H-M

C.A. de Euskadi Necesidades fisiológicas 11:38 11:43 0:05 Trabajo y formación 2:49 4:00 1:11 Trabajos domésticos 3:25 1:19 -2:06 Cuidados a personas del hogar 0:36 0:19 -0:17 Vida social 0:36 0:41 0:05 Ocio activo y deportes 1:05 1:38 0:33 Ocio pasivo 2:48 3:10 0:22 Trayectos 1:03 1:09 0:06


Mujer Hombre H-M

Araba/Álava Necesidades fisiológicas 11:23 11:09 0:14 Trabajo y formación 3:10 4:31 1:21 Trabajos domésticos 3:02 1:12 -1:50 Cuidados a personas del hogar 0:35 0:16 -0:19 Vida social 0:40 0:43 0:03 Ocio activo y deportes 1:05 1:34 0:29 Ocio pasivo 3:05 3:30 0:25 Trayectos 0:58 1:05 0:07

Bizkaia Necesidades fisiológicas 11:29 11:38 0:09 Trabajo y formación 2:48 3:53 1:05 Trabajos domésticos 3:24 1:14 -2:10 Cuidados a personas del hogar 0:36 0:21 -0:15 Vida social 0:36 0:41 0:05 Ocio activo y deportes 1:08 1:46 0:38 Ocio pasivo 2:58 3:19 0:21 Trayectos 1:01 1:08 0:07

Gipuzkoa Necesidades fisiológicas 12:01 12:06 0:05 Trabajo y formación 2:43 3:56 1:13 Trabajos domésticos 3:37 1:30 -2:07 Cuidados a personas del hogar 0:36 0:18 -0:18 Vida social 0:33 0:40 0:07 Ocio activo y deportes 0:59 1:29 0:30 Ocio pasivo 2:21 2:46 0:25 Trayectos 1:09 1:14 0:05

Fuente: EUSTAT. Uso social del tiempo.

Una de las actividades que, sin embargo, presenta escasas diferencias entre el tiempo que

destinan a su realización mujeres y hombres es la que engloba las necesidades fisiológicas.

Se trata, además, del tipo de actividad que consume un mayor tiempo medio tanto para

unas como para otros, en particular el destinado al sueño, como se aprecia en la tabla

siguiente. Estas similitudes de género caracterizan también el reparto del tiempo destinado a

estas necesidades en los diferentes territorios históricos, a excepción de los 14 minutos más

destinados por los hombres en Bizkaia a las comidas fuera de casa y que está en

consonancia con la distancia de género de 10 minutos para el conjunto de la CAE. El

análisis comparativo en los tres territorios históricos muestra que en Gipuzkoa tanto las

mujeres como los hombres emplean en torno a media hora más que en Álava al capítulo de

cuidados personales. Por otra parte, la evolución de las brechas de género en el periodo

1993-2008 es particularmente reseñable en lo referido al sueño en Álava y Gipuzkoa, así

como en las comidas fuera de casa en Álava y Bizkaia.


Tabla 5.7. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a actividades fisiológicas por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008

1993 2008 Mujer Hombre H-M Mujer Hombre H-M

93-08

C.A. de Euskadi Sueño 8:37 8:37 0:00 8:47 8:46 -0:01 0:01 Cuidados personales 0:49 0:42 -0:07 0:56 0:52 -0:04 -0:03 Cuidados médicos 0:01 0:01 0:00 0:02 0:02 0:00 0:00 Comidas en el domicilio 1:30 1:31 0:01 1:11 1:12 0:01 0:00 Comidas fuera 0:21 0:25 0:04 0:37 0:47 0:10 -0:06 Recepciones 0:07 0:06 -0:01 0:05 0:03 -0:02 0:01

Araba/Álava Sueño 8:24 8:30 0:06 8:50 8:41 -0:09 0:15 Cuidados personales 0:54 0:45 -0:09 0:34 0:29 -0:05 -0:04 Cuidados médicos 0:01 0:01 0:00 0:01 0:02 0:01 -0,01 Comidas en el domicilio 1:28 1:30 0:02 1:17 1:16 -0:01 0:03 Comidas fuera 0:16 0:25 0:09 0:39 0:39 0:00 0:09 Recepciones 0:07 0:06 -0:01 0:03 0:02 -0:01 0:00

Bizkaia Sueño 8:34 8:39 0:05 8:43 8:42 -0:01 0:06 Cuidados personales 0:52 0:43 -0:09 0:56 0:54 -0:02 -0:07 Cuidados médicos 0:01 0:01 0:00 0:02 0:01 -0:01 -0:01 Comidas en el domicilio 1:28 1:30 0:02 1:06 1:06 0:00 0:02 Comidas fuera 0:22 0:25 0:03 0:37 0:51 0:14 -0:11 Recepciones 0:04 0:04 0:00 0:05 0:03 -0:02 0:02

Gipuzkoa Sueño 8:48 8:39 -0:09 8:53 8:56 0:03 -0:12 Cuidados personales 0:42 0:37 -0:05 1:06 0:59 -0:07 0:02 Cuidados médicos 0:01 0:01 0:00 0:03 0:04 0:01 -0,01 Comidas en el domicilio 1:31 1:34 0:03 1:17 1:18 0:01 0:02 Comidas fuera 0:19 0:22 0:03 0:36 0:44 0:08 -0:05 Recepciones 0:09 0:07 -0:02 0:06 0:05 -0:01 -0:01


Tradicionalmente el tiempo destinado al empleo, esto es, al trabajo remunerado y

desarrollado generalmente en la esfera pública, ha sido mayor en los hombres que en las

mujeres. Actualmente la mayor brecha de género con relación a la actividad laboral se

produce en el trabajo principal, al que los hombres dedican una hora y 15 minutos más que

las mujeres en Euskadi, diferencia que asciende a una hora y 33 minutos en el caso de

Álava. Esta desigualdad en el uso del tiempo es significativa en la medida en que este tipo

de trabajo no solo goza de mayor prestigio social, sino que constituye la principal vía de

acceso a los derechos sociales. Con todo, la evolución de los últimos años muestra la

transformación de roles en las mujeres, que cada vez dedican más tiempo a una actividad

otrora atribuida fundamentalmente a los hombres.


La formación es otro ángulo desde el que observar el cambio social. Frente a lo que sucedía

en un pasado aún cercano, en 1993 las mujeres vascas destinaban más tiempo que los

hombres a la formación reglada, aspecto que persiste en virtud de los resultados de la

encuesta de 2008, con la excepción de Gipuzkoa, donde la dedicación masculina a esta

actividad es ligeramente mayor que la femenina.

Tabla 5.8. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a trabajo y formación por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008


93-08

C.A. de Euskadi Trabajo principal 1:15 3:27 2:12 2:09 3:24 1:15 0:57 Trabajo secundario 0:07 0:15 0:08 0:02 0:02 0:00 0:08 Pausas en el trabajo 0:01 0:03 0:02 0:05 0:08 0:03 -0:01 Formación no reglada 0:03 0:04 0:01 0:02 0:01 -0:01 0:02 Formación reglada 0:31 0:22 -0:09 0:29 0:24 -0:05 -0:04 Otras actividades educativas 0:07 0:03 -0:04 0:04 0:01 -0:03 -0:01

Araba/Álava Trabajo principal 1:16 3:46 2:30 2:19 3:52 1:33 0:57 Trabajo secundario 0:04 0:16 0:12 0:01 0:05 0:04 0:08 Pausas en el trabajo 0:01 0:03 0:02 0:05 0:08 0:03 -0:01 Formación no reglada 0:04 0:03 -0:01 0:02 0:01 -0:01 0:00 Formación reglada 0:46 0:18 -0:28 0:37 0:24 -0:13 -0:15 Otras actividades educativas 0:07 0:01 -0:06 0:06 0:01 -0:05 -0:01

Gipuzkoa Trabajo principal 1:13 3:49 2:36 2:08 3:17 1:09 1:27 Trabajo secundario 0:04 0:16 0:12 0:01 0:03 0:02 0:10 Pausas en el trabajo 0:01 0:03 0:02 0:07 0:10 0:03 -0:01 Formación no reglada 0:01 0:03 0:02 0:01 0:02 0:01 0:01 Formación reglada 0:40 0:21 -0:19 0:20 0:23 0:03 -0:22 Otras actividades educativas 0:09 0:04 -0:05 0:05 0:01 -0:04 -0:01

Bizkaia Trabajo principal 1:16 3:09 1:53 2:07 3:20 1:13 0:40 Trabajo secundario 0:07 0:13 0:06 0:02 0:00 -0:02 0:08 Pausas en el trabajo 0:01 0:04 0:03 0:03 0:06 0:03 0:00 Formación no reglada 0:03 0:04 0:01 0:02 0:01 -0:01 0:02 Formación reglada 0:24 0:22 -0:02 0:31 0:24 -0:07 0:05 Otras actividades educativas 0:06 0:01 -0:05 0:03 0:01 -0:02 -0:03


El trabajo reproductivo constituye un trabajo indispensable para la vida que, sin embargo, ha

sido socialmente invisibilizado. Como mencionábamos anteriormente, las mujeres dedican

mayor tiempo social que los hombres a las tareas domésticas. En particular, según datos de

2008, destaca la distancia de género en el tiempo que unas y otros dedican a la preparación

de las comidas (56 minutos), la limpieza (39 minutos) y la ropa (20 minutos), es decir, en las

tareas más cotidianas. La única tarea en la que los vascos invierten más tiempo que las


vascas (1 minuto) son las gestiones, que constituye la tarea que consume menos tiempo

diario, es decir, que se realiza de forma más esporádica.

La evolución desde la primera aplicación de la encuesta de usos de tiempo en la CAE en

1993 hasta la última en 2008, muestra una tendencia a la disminución en el tiempo que las

mujeres dedican a estas tareas, que a la luz de los datos no es atribuible únicamente a la

incorporación masculina a estos trabajos, sino también al cambio de hábitos sociales, entre

los que cabría encontrarse la externalización de ciertas tareas o los cambios tecnológicos. A

diferencia del análisis que realizábamos respecto a la asunción femenina de roles

tradicionalmente masculinos, los hombres se están incorporando al trabajo de los interiores

domésticos más lentamente. Así, mientras en los últimos 15 años las mujeres han ampliado

el tiempo social medio dedicado al empleo en casi una hora en la CAE, los hombres han

aumentado su dedicación a las tareas de preparar la comida, limpieza y ropa en 11, 5 y 2

minutos respectivamente, mientras tareas como las compras y pequeños arreglos

permanecen sin variaciones.

Tabla 5.9. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a trabajo doméstico por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008


93-08

C.A. de Euskadi Preparar comidas 1:43 0:18 -1:25 1:25 0:29 -0:56 -0:29 Limpieza 1:04 0:07 -0:57 0:51 0:12 -0:39 -0:18 Ropa 0:28 0:01 -0:27 0:23 0:03 -0:20 -0:07 Otros arreglos 0:04 0:04 0:00 0:06 0:04 -0:02 0:02 Compras 0:37 0:13 -0:24 0:24 0:13 -0:11 -0:13 Gestiones 0:03 0:03 0:00 0:01 0:02 0:01 -0:01 Semi-ocios 0:16 0:13 -0:03 0:16 0:15 -0:01 -0:02

Araba/Álava Preparar comidas 1:46 0:16 -1:30 1:19 0:33 -0:46 -0:44 Limpieza 0:52 0:07 -0:45 0:47 0:12 -0:35 -0:10 Ropa 0:22 0:01 -0:21 0:18 0:01 -0:17 -0:04 Otros arreglos 0:04 0:03 -0:01 0:03 0:02 -0:01 0:00 Compras 0:37 0:13 -0:24 0:21 0:11 -0:10 -0:14 Gestiones 0:01 0:06 0:05 0:01 0:02 0:01 0:04 Semi-ocios 0:16 0:12 -0:04 0:13 0:11 -0:02 -0:02

Gipuzkoa Preparar comidas 1:40 0:19 -1:21 1:32 0:35 -0:57 -0:24 Limpieza 1:07 0:07 -1:00 0:46 0:11 -0:35 -0:25 Ropa 0:31 0:01 -0:30 0:25 0:04 -0:21 -0:09 Otros arreglos 0:04 0:04 0:00 0:08 0:04 -0:04 0:04 Compras 0:37 0:15 -0:22 0:26 0:16 -0:10 -0:12 Gestiones 0:01 0:01 0:00 0:01 0:02 0:01 -0:01 Semi-ocios 0:16 0:12 -0:04 0:19 0:19 0:00 -0:04



93-08

Bizkaia Preparar comidas 1:43 0:16 -1:27 1:22 0:25 -0:57 -0:36 Limpieza 1:04 0:07 -0:57 0:54 0:13 -0:41 -0:16 Ropa 0:28 0:01 -0:27 0:24 0:03 -0:21 0:28 Otros arreglos 0:04 0:06 0:02 0:06 0:05 -0:01 0:07 Compras 0:36 0:13 0:23 0:23 0:12 -0:11 0:24 Gestiones 0:04 0:03 -0:01 0:01 0:01 0:00 0:03 Semi-ocios 0:18 0:13 -0:05 0:14 0:15 0:01 0:12


En la misma línea, se ha producido una reducción del tiempo destinado por las mujeres a las

tareas de alimentación, que no se debe exclusivamente a un mayor desempeño masculino

de dichas tareas. Sin embargo, cabe señalar el aumento de 16 minutos en el tiempo

destinado por los vizcaínos a la preparación de alimentos en el periodo 1993-2008, si bien

las primeras continúan dedicando diariamente 35 minutos más a esta tarea que los

segundos.

Tabla 5.10. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a actividad relacionada con la alimentación por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008


93-08

C.A. de Euskadi Preparación de alimentos 1:04 0:12 -0:52 0:54 0:18 -0:36 -0:16 Pelado de frutas y verduras 0:01 0:00 -0:01 0:00 0:00 0:00 -0:01 Lavar la vajilla 0:22 0:03 -0:19 0:12 0:03 -0:09 -0:10 Recoger la vajilla 0:13 0:03 -0:10 0:17 0:08 -0:09 -0:01 Servir la comida 0:03 0:00 -0:03 0:00 0:00 0:00 -0:03

Araba/Álava Preparación de alimentos 1:01 0:10 -0:51 0:48 0:16 -0:32 -0:19 Pelado de frutas y verduras 0:01 0:00 -0:01 0:00 0:00 0:00 -0:01 Lavar la vajilla 0:27 0:03 -0:24 0:07 0:02 -0:05 -0:19 Recoger la vajilla 0:15 0:01 -0:14 0:22 0:13 -0:09 -0:05 Servir la comida 0:03 0:01 -0:02 0:00 0:01 0:01 -0:03

Gipuzkoa Preparación de alimentos 1:04 0:13 -0:51 1:00 0:22 -0:38 -0:13 Pelado de frutas y verduras 0:01 0:00 -0:01 0:01 0:00 -0:01 0:00 Lavar la vajilla 0:21 0:03 -0:18 0:07 0:02 -0:05 -0:13 Recoger la vajilla 0:13 0:03 -0:10 0:24 0:01 -0:23 0:13 Servir la comida 0:03 0:00 -0:03 0:00 0:00 0:00 -0:03

Bizkaia Preparación de alimentos 1:06 0:01 -1:05 0:52 0:17 -0:35 -0:30 Pelado de frutas y verduras 0:01 0:00 -0:01 0:00 0:00 0:00 -0:01 Lavar la vajilla 0:22 0:03 -0:19 0:17 0:03 -0:14 -0:05 Recoger la vajilla 0:12 0:03 -0:09 0:13 0:05 -0:08 -0:01 Servir la comida 0:03 0:00 -0:03 0:00 0:00 0:00 -0:03



El cuidado de personas constituye una parte fundamental del trabajo reproductivo, a la que

también destinan más tiempo las mujeres. Las mayores brechas de género se localizan en

el cuidado infantil, actividad a la que las mujeres dedican de media 13 minutos diarios más

que los hombres según datos de 2008. La perspectiva diacrónica muestra que en los últimos

15 años las mujeres no solo no han reducido su dedicación al cuidado de niños y niñas, sino

que la ampliado en 8 minutos (frente a los 7 minutos de los hombres), al igual que sucede

con el cuidado de personas adultas, actividad a la que destinan 4 minutos más que en 1993

(frente al aumento de 2 minutos por parte de los hombres). Si en vez del tiempo social

medio examinamos el tiempo por participante, que alude al tiempo que destinan a esta

actividad únicamente las personas que se dedican a ella, la desigual dedicación en virtud del

género se aprecia más claramente: las mujeres dedican al cuidado infantil en torno a 40

minutos más que los hombres (2:00 versus 1:19) y esta diferencia se mantiene también al

comparar la dedicación por participante de mujeres ocupadas y hombres ocupados (2:17

versus 1:37).

Tabla 5.11. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a cuidado a personas del hogar por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008

1993 2008

Mujer Hombre H-M Mujer Hombre H-M 93-08

C.A. de Euskadi

Cuidado infantil 0:16 0:04 -0:12 0:24 0:11 -0:13 0:01

Juegos e instrucción 0:07 0:04 -0:03 0:06 0:05 -0:01 -0:02

Cuidados a adultas/os 0:03 0:01 -0:02 0:07 0:03 -0:04 0:02

Araba/Álava


Juegos e instrucción 0:04 0:04 0:00 0:13 0:09 -0:04 0:04

Cuidados a adultas/os 0:01 0:01 0:00 0:05 0:02 -0:03 0:03

Gipuzkoa

Cuidado infantil 0:18 0:04 -0:14 0:22 0:11 -0:11 -0:03

Juegos e instrucción 0:07 0:04 -0:03 0:06 0:05 -0:01 -0:02


Bizkaia


Juegos e instrucción 0:07 0:06 -0:01 0:04 0:04 0:00 -0:01



El tiempo medio social destinado por las mujeres al cuidado de menores de 1 a 14 años ha

permanecido estable en los últimos 15 años, mientras que los hombres han aumentado su


dedicación en 3 minutos durante dicho periodo. Si examinamos el tiempo destinado al

cuidado de menores de un año por aquellas personas que realizan dicha actividad en 2008,

es decir, atendiendo al tiempo por participante, se aprecia con mayor claridad la brecha de

en el tiempo dedicado por unas y otros, que asciende a 2 horas y 30 minutos para las

mujeres frente a la hora y 2 minutos de los hombres.

Tabla 5.12. Evolución en el tiempo medio social destinado a cuidado por tipo de cuidado infantil, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008

1993 2008


C.A. de Euskadi

Cuidados a recién nacidas/os 0:04 0:01 -0:03 0:03 0:01 -0:02 -0:01

Cuidado infantil (1-14 años) 0:12 0:03 -0:09 0:12 0:06 -0:06 -0:03

Cuidados médicos 0:01 0:00 -0:01 0:00 0:01 0:01 -0:02

Otros cuidados 0:01 0:01 0:00 0:00 0:01 0:01 -0:01

Araba/Álava

Cuidados a recién nacidas/os 0:04 0:01 -0:03 0:05 0:00 -0:05 0:02

Cuidado infantil (1-14 años) 0:09 0:03 -0:06 0:10 0:04 -0:06 0:00


Otros cuidados 0:00 0:01 0:01 0:00 0:00 0:00 0:01

Gipuzkoa

Cuidados a recién nacidas/os 0:04 0:01 -0:03 0:03 0:01 -0:02 -0:01



Otros cuidados 0:00 0:00 0:00 0:00 0:00 0:00 0:00

Bizkaia

Cuidados a recién nacidas/os 0:03 0:01 -0:02 0:03 0:01 -0:02 0:00



Otros cuidados 0:01 0:01 0:00 0:00 0:01 0:01 -0:01


El análisis del tiempo libre y de ocio desde perspectiva de género nos descubre nuevas

dimensiones de la desigualdad. El tiempo medio social destinado por la población de

Euskadi a la vida social se ha reducido notablemente en los últimos 15 años, pasando de

una hora y 10 minutos en 1993 a 38 minutos en 2008. Asimismo, se ha producido un

descenso de la brecha de género referida a dicha actividad, que ha disminuido de 12 a 5

minutos en dicho periodo. Con todo, conviene apreciar que las mujeres disfrutan de media

de 10 minutos menos diarios que los hombres en la CAE en lo referido a recepciones y

salidas.


Tabla 5.13. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a vida relacional y social por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008

1993 2008


C.A. de Euskadi

Recepciones y salidas 0:24 0:42 0:18 0:11 0:21 0:10 0:08

Conversaciones 0:27 0:25 -0:02 0:19 0:16 -0:03 0:01

Prácticas religiosas 0:04 0:03 -0:01 0:03 0:01 -0:02 0:01

Participación civil desinteresada 0:07 0:06 -0:01 0:00 0:01 0:01 0:00

Trabajo desinteresado en organización - - - 0:01 0:00 -0:01 -

Trabajo a través de organización - - - 0:00 0:00 0:00 -

Ayudas informales a otros hogares - - - 0:01 0:02 0:01 -

Araba/Álava


Conversaciones 0:31 0:24 -0:07 0:19 0:15 -0:04 -0:03

Prácticas religiosas 0:06 0:01 -0:05 0:02 0:01 -0:01 -0:04

Participación civil desinteresada 0:06 0:06 0:00 0:00 0:00 0:00 0:00

Trabajo desinteresado en organización - - - 0:00 0:00 0:00 -



Gipuzkoa


Conversaciones 0:28 0:25 -0:03 0:18 0:13 -0:05 0:02


Participación civil desinteresada 0:09 0:06 -0:03 0:00 0:01 0:01 -0:04


Trabajo a través de organización - - - 0:01 0:00 -0:01 -


Bizkaia


Conversaciones 0:25 0:27 0:02 0:20 0:18 0:02 0:00


Participación civil desinteresada 0:07 0:06 -0:01 0:00 0:01 0:01 -0:02





Asimismo, los hombres destinan un mayor tiempo social medio que las mujeres a todas las

actividades en las que se desglosa el ocio activo, destacando particularmente según los

datos de 2008, los 13 minutos más que dedican en el conjunto de la CAE a paseos y

excursiones –que se elevan hasta 17 en Bizkaia– y los 11 minutos más que disfrutan de la

práctica deportiva. En Álava, territorio donde existen escasas diferencias de género en

cuanto a paseos y excursiones, se aprecia una mayor desigualdad en el uso de Internet.


Comparando los datos disponibles de 1993 y 2008, la distancia de género referida a estas

actividades en la CAE no solo no ha disminuido sino que se ha acentuado, con la salvedad

del tiempo dedicado por mujeres y hombres a paseos y excursiones en Bizkaia y,

particularmente, en Álava.

Tabla 5.14. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a ocio activo por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008

1993 2008


C.A. de Euskadi

Prácticas deportivas 0:04 0:13 0:09 0:07 0:18 0:11 -0:02

Paseos, excursiones 0:52 1:01 0:09 0:49 1:02 0:13 -0:04

Uso ordenador y otros informáticos - - - 0:02 0:05 0:03 -

Uso internet - - - 0:07 0:14 0:07 -

Araba/Álava


Paseos, excursiones 0:52 1:07 0:15 0:47 0:50 0:03 0:12


Uso internet - - - 0:08 0:18 0:10 -

Gipuzkoa


Paseos, excursiones 0:52 1:07 0:15 0:42 0:55 0:13 -0:02


Uso internet - - - 0:07 0:10 0:03 -

Bizkaia

Prácticas deportivas 0:04 0:13 0:09 0:06 0:15 0:09 0:00

Paseos, excursiones 0:52 1:12 0:20 0:53 1:10 0:17 0:03


Uso internet - - - 0:06 0:15 0:09 -


Al examinar el ocio pasivo, encontramos que los hombres dedican en promedio 20 minutos

más al día que las mujeres a disfrutar de la lectura, radio y televisión. Desde 1993 la

distancia en el tiempo social medio destinado a estas actividades por mujeres y hombres se

ha acortado 7 minutos en 15 años para el conjunto de la CAE, aunque esta cifra oculta

realidades distintas en los tres territorios históricos. Así, mientras en Gipuzkoa se mantienen

los 26 minutos de diferencia entre mujeres y hombres en la dedicación a la lectura, televisión

y radio durante los últimos 15 años, en Bizkaia la brecha de género en estas actividades ha

aumentado en 18 minutos y en Álava ha disminuido en 15.


Tabla 5.15. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) destinado a ocio pasivo por tipo de actividad, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008


93-08

C.A. de Euskadi Lectura, T.V. y radio 2:19 2:46 0:27 2:28 2:48 0:20 0:07 Sin actividad 0:19 0:10 -0:09 0:08 0:06 -0:02 -0:07 Espectáculos 0:04 0:06 0:02 0:03 0:04 0:01 0:01 Juegos 0:07 0:16 0:09 0:06 0:09 0:03 0:06 Aficiones artísticas y otras - - - 0:02 0:02 0:00 -

Araba/Álava Lectura, T.V. y radio 2:24 2:31 0:07 2:38 3:00 0:22 -0:15 Sin actividad 0:16 0:13 -0:03 0:14 0:15 0:01 -0:04 Espectáculos 0:07 0:07 0:00 0:03 0:03 0:00 0:00 Juegos 0:13 0:24 0:11 0:07 0:11 0:04 0:07 Aficiones artísticas y otras - - - 0:03 0:01 -0:02 -

Gipuzkoa Lectura, T.V. y radio 2:16 2:42 0:26 2:02 2:28 0:26 0:00 Sin actividad 0:16 0:13 -0:03 0:08 0:06 -0:02 -0:01 Espectáculos 0:07 0:06 -0:01 0:04 0:05 0:01 -0:02 Juegos 0:07 0:12 0:05 0:03 0:04 0:01 0:04 Aficiones artísticas y otras - - - 0:03 0:03 0:00 -

Bizkaia Lectura, T.V. y radio 2:19 2:55 0:36 2:40 2:58 0:18 0:18 Sin actividad 0:19 0:01 -0:18 0:07 0:04 -0:03 -0:15 Espectáculos 0:04 0:06 0:02 0:03 0:04 0:01 0:01 Juegos 0:07 0:19 0:12 0:07 0:12 0:05 0:07 Aficiones artísticas y otras - - - 0:02 0:02 0:00 -


Pese a las transformaciones que han tenido lugar en la sociedad y en las familias vascas,

las estadísticas de usos del tiempo nos muestran desde perspectivas diversas la vigencia de

los mandatos de género con relación a los diversos trabajos y actividades realizados por

mujeres y hombres. La dicotomía público-doméstico, aunque cuestionada por el acceso

masivo de las mujeres al mercado laboral, muestra permanencias no solo en el imaginario

social, donde se atribuyen diferentes cualidades a mujeres y hombres, sino en el mundo

físico. El uso que mujeres y hombres hacen de estos espacios evidencia que las primeras

permanecen de media dos horas más que los segundos en la vivienda, mientras ellos pasan

en torno a una hora más en el lugar de estudio o empleo. Del mismo modo, estos emplean

en torno a media hora más en el exterior de la vivienda y en establecimientos hoteleros. El

mayor uso diario femenino de determinados espacios únicamente alcanza a la vivienda y a

los edificios públicos. La evolución de los últimos 15 años muestra el cuestionamiento de la

división de esferas que viene de la mano de la creciente incorporación femenina al trabajo


remunerado y la educación, y que se plasma en una transformación importante del uso del

espacio. Así, el tiempo medio social que estas permanecen en el lugar de estudio o trabajo

en el hogar ha aumentado en torno a una hora en dicho periodo a la vez que se reduce

correlativamente aquel que pasan en el hogar. Con todo, la comparación de los datos de

1993 y 2008 muestra que el tiempo promedio que las mujeres dedican a estar fuera de la

vivienda o en lugares de esparcimiento no presenta prácticamente variaciones en dicho

periodo.

Tabla 5.16. Evolución del tiempo medio social (hh:mm) según lugares, sexo y territorio histórico. CAE, 1993-2008


93-08

C.A. de Euskadi

En la vivienda 18:16 15:11 -3:05 17:14 15:14 -2:00 -1:05 En lugar de estudio - trabajo 1:33 3:35 2:02 2:38 3:48 1:10 0:52 En el exterior de la vivienda 2:15 2:57 0:42 2:16 2:47 0:31 0:11 En edificios públicos 1:00 0:43 -0:17 0:48 0:32 -0:16 -0:01 En lugares de esparcimiento 0:14 0:22 0:08 0:14 0:21 0:07 0:01 En establecimientos hosteleros 0:36 1:03 0:27 0:44 1:08 0:24 0:03 En residencias secundarias 0:05 0:08 0:03 0:08 0:10 0:02 0:01

Araba/Álava En la vivienda 18:02 14:44 -3:58 17:03 15:08 -1:55 -2:03 En lugar de estudio - trabajo 1:38 3:52 2:14 2:52 4:12 1:20 0:54 En el exterior de la vivienda 2:17 2:57 0:40 2:08 2:26 0:18 0:22 En edificios públicos 1:04 0:45 -0:19 0:37 0:27 -0:10 -0:09 En lugares de esparcimiento 0:15 0:27 0:12 0:14 0:18 0:04 0:08 En establecimientos hosteleros 0:35 1:07 0:32 1:03 1:16 0:13 0:19 En residencias secundarias 0:08 0:08 0:00 0:04 0:13 0:09 -0:09

Gipuzkoa En la vivienda 18:16 15:08 -3:08 17:06 15:02 -2:04 -1:04 En lugar de estudio - trabajo 1:40 3:59 2:19 2:31 3:44 1:13 1:06 En el exterior de la vivienda 2:11 2:49 0:38 2:18 2:51 0:33 0:05 En edificios públicos 0:59 0:36 -0:23 1:02 0:40 -0:22 -0:01 En lugares de esparcimiento 0:12 0:24 0:12 0:13 0:22 0:09 0:03 En establecimientos hosteleros 0:35 0:58 0:23 0:38 1:04 0:26 -0:03 En residencias secundarias 0:06 0:05 -0:01 0:12 0:17 0:05 -0:06

Bizkaia En la vivienda 18:19 15:18 -3:01 17:21 15:23 -1:58 -1:03 En lugar de estudio - trabajo 1:28 3:17 1:49 2:38 3:44 1:06 0:43 En el exterior de la vivienda 2:17 3:02 0:45 2:16 2:50 0:34 0:11 En edificios públicos 0:59 0:47 -0:12 0:43 0:29 -0:14 0:02 En lugares de esparcimiento 0:15 0:19 0:04 0:14 0:22 0:08 -0:04 En establecimientos hosteleros 0:37 1:06 0:29 0:41 1:07 0:26 0:03 En residencias secundarias 0:03 0:10 0:07 0:07 0:06 -0:01 0:08



5.2. Conciliación corresponsable

La masiva incorporación femenina al mundo laboral ha sacado a la luz la oculta(da)

articulación estructural entre la familia y el empleo, que no constituyen dos esferas

independientes. La posición de las mujeres en el mercado de trabajo –en desventaja– no

puede explicarse sin tener en cuenta los condicionantes o determinantes que impone su rol

familiar, de la misma forma que la masculina se explica desde la elevada disponibilidad

laboral que le confiere su escasa participación doméstica.

A pesar de que el trabajo reproductivo, realizado fundamentalmente por mujeres, constituye

una condición imprescindible para la vida y para la propia existencia del mercado, su

contribución al bienestar humano permanece invisibilizada en una sociedad en la que a

menudo se niega su carácter de trabajo y su contribución a la economía. En la CAE, la

Cuenta Satélite de la Producción Doméstica –pionera en el ámbito estatal– trata de estimar

el valor económico aportado por las actividades realizadas en los hogares. Según los datos

correspondientes a 2008, la producción doméstica vasca no contabilizada en el PIB

asciende a 19.642 millones de euros, lo que supone un 28,7% del PIB. Como puede

observarse en la tabla siguiente, las mujeres desarrollan en torno al 72% de dicha

producción, frente al 28% realizado por los hombres.

La evolución de los últimos 15 años muestra que la distancia de género, que aún es muy

pronunciada, se ha recortado aproximadamente un 15%. La mayor parte de las funciones

domésticas son prestadas en mayor proporción por las mujeres, destacando la marcada

feminización de algunas de ellas como las relacionadas con la ropa y la limpieza. Los

servicios de mantenimiento, al igual que en 1993, constituyen una función realizada en su

totalidad por los hombres.


Tabla 5.17. Evolución del porcentaje de la producción doméstica no incluida en el SEC desarrollada por mujeres y hombres por funciones y periodo. CAE, 1993-2008

1993 2008

Mujeres Hombres H-M Mujeres Hombres H-M 93-08

Total producción doméstica 79,3 20,7 -58,7 71,9 28,1 -43,8 -14,9

Proporcionar alojamiento 75,3 24,7 -50,6 68,9 31,1 -37,8 -12,8

Gestiones 47,9 52,1 4,1 36,8 63,2 26,3 -22,2

Semiocios 58,4 41,6 -16,7 51,9 48,1 -3,7 -13,0

Trayectos 51,6 48,4 -3,2 49,6 50,4 0,7 -4,0

Limpieza 90,1 9,9 -80,3 81,9 18,1 -63,8 -16,5

Servicios de mantenimiento - 100,0 100,0 - 100,0 100,0 0,0

Otros arreglos 46,8 53,2 6,5 63,0 37,0 -26,0 32,5

Compra de bienes duraderos 59,6 40,4 -19,2 71,7 28,3 -43,4 24,2

Proporcionar cuidados y educación 70,1 29,9 -40,1 68,5 31,5 -36,9 -3,2

Cuidados y educación 71,6 28,4 -43,2 70,6 29,4 -41,3 -1,9

Trayectos (cuidados y educación) 65,2 34,8 -30,4 59,1 40,9 -18,2 -12,2

Proporcionar comida 82,9 17,1 -65,9 72,1 27,9 -44,2 -21,7

Preparar comida 86,1 13,9 -72,1 74,7 25,3 -49,5 -22,7

Compra diaria (comida) 76,0 24,0 -51,9 64,6 35,4 -29,3 -22,6

Trayectos (comida) 76,0 24,0 -51,9 64,6 35,4 -29,3 -22,6

Proporcionar ropa 89,9 10,1 -79,9 88,0 12,0 -75,9 -4,0

Ropa 94,2 5,8 -88,5 89,6 10,4 -79,2 -9,3

Compras diversas (ropa) 62,8 37,2 -25,6 80,2 19,8 -60,5 34,9

Trayectos (ropa) 62,8 37,2 -25,6 80,2 19,8 -60,5 34,9

Ayuda vecinal 67,5 32,5 -35,0 16,1 83,9 67,7 -102,7

Fuente: EUSTAT. Cuentas Satélites de la Producción doméstica.

Aunque la división sexual del trabajo se ha difuminado en las últimas décadas, los datos

revisados hasta ahora muestran las poderosas inercias de género que perviven en los

hogares vascos y que constituyen uno de los nudos fundamentales en los que se “atasca” el

avance hacia la igualdad. La conciliación corresponsable supone que mujeres y hombres

puedan compartir en igualdad de oportunidades los diversos trabajos, productivos y

reproductivos, necesarios para la vida y disfrutar asimismo de un tiempo propio y social.

Como recoge el V Plan para la Igualdad, para caminar en esta dirección es necesaria la

implicación de la sociedad en su conjunto, incluyendo las administraciones públicas y las

empresas.

La encuesta sobre la conciliación de la vida laboral, familiar y personal realizada por el

Eustat pretende profundizar sobre las posibilidades que las personas ocupadas residentes

en la CAE tienen para compatibilizar las facetas mencionadas. Gracias a dicha encuesta


conocemos las horas medias diarias dedicadas por la población ocupada al trabajo

doméstico, al cuidado de hijas e hijos menores de 15 años y al cuidado de personas

dependientes. Genéricamente, las mujeres ocupadas emplean casi el doble de horas al día

en estas tareas que los hombres en la misma situación. De estos trabajos reproductivos,

aquel al que las mujeres destinan un mayor tiempo diario es el cuidado de hijos e hijas

menores, actividad a la que dedican cotidianamente 4,7 horas frente a las 2,8 de los

hombres.

Tabla 5.18. Población ocupada por horas dedicadas a actividades de trabajo doméstico por sexo (media). CAE, 2011

Tareas del hogar Cuidado de hijas/os

menores Cuidado de personas

dependientes

Total 1,7 3,7 2,2

Mujeres 2,2 4,7 2,8

Hombres 1,3 2,8 1,6

H-M -0,9 -1,9 -1,2

Fuente: EUSTAT. Conciliación de la vida laboral, familiar y personal.

La tabla siguiente recoge el grado de satisfacción con el tiempo dedicado a algunos

aspectos relacionados con la conciliación. Se examinan desde esta perspectiva el tiempo

dedicado al cuidado de hijos e hijas menores, al cuidado de personas dependientes y a las

tareas domésticas, las tareas desempeñadas por su pareja y, por último, la vida personal.

Las puntuaciones medias del conjunto de la población ocupada de la CAE manifiestan una

moderada satisfacción global con estos aspectos relativos a la conciliación (6,3 puntos sobre

un máximo de 10), siendo el menos valorado el relativo al cuidado de personas

dependientes, con 5,6 puntos y el más valorado el tiempo que la pareja dedica a las tareas

de hogar, con 7 puntos. No obstante, el análisis desagregado en virtud del género revela

que esta última cifra oculta una mayor satisfacción masculina con el trabajo doméstico

realizado por la pareja (7,9 puntos) frente a una satisfacción femenina apreciablemente

menor (5,8 puntos). Esta brecha de género puede relacionarse con la asunción desigual del

trabajo reproductivo que mostraba la tabla anterior. Del mismo modo, la satisfacción global

de las mujeres con los aspectos analizados se sitúa por debajo de la media de la población

ocupada, lo que también ocurre con la satisfacción con la vida personal. En cambio, ellas

expresan una mayor satisfacción que ellos con el cuidado de la prole y de las personas

dependientes.


Tabla 5.19. Población ocupada según satisfacción con el tiempo dedicado a aspectos de conciliación por sexo (media). CAE, 2011

Cuidado de

hijas/os menores

Cuidado de personas

dependientes

Tareas del hogar

Tareas del hogar de

cónyuge/pareja

Vida personal

Globalmente

Total 6,2 5,6 6,2 7,0 5,9 6,3 Mujeres 6,5 5,8 6,2 5,8 5,7 6,0 Hombres 5,9 5,4 6,1 7,9 6,1 6,5 H-M -0,6 -0,4 -0,1 2,1 0,4 0,5


En cualquier caso, la armonización de las esferas familiar y laboral es una cuestión que en

nuestra sociedad presenta dificultades y perjuicios para aquellas personas,

fundamentalmente mujeres, que transitan entre estos dos mundos. Globalmente, el grado de

dificultad medio que la población ocupada de Euskadi percibe para compaginar la vida

laboral y familiar alcanza los 3,8 puntos sobre un máximo de 10, que representaría la

imposibilidad total para la conciliación, sin que existan diferencias al respecto entre mujeres

y hombres. Asimismo, tanto unas como otros perciben como aspectos menos problemáticos

las tareas domésticas y las gestiones burocráticas que lo relacionado con el cuidado. Sin

embargo, hay mayores diferencias de género en las dificultades asociadas al cuidado de

hijos e hijas menores y de personas dependientes, actividades que suponen una dificultad

de 4,6 puntos para los hombres y de 4,2 y 4,4, respectivamente, para las mujeres.

Tabla 5.20. Población ocupada según dificultad para compaginar aspectos de conciliación por sexo (media). CAE, 2011

Con cuidado de hijas/os menores

Con cuidado de personas

dependientes

Con tareas del hogar

Con gestiones

burocráticas

Con actividades personales

Globalmente

Total 4,4 4,5 3,6 3,6 4,2 3,8 Mujeres 4,2 4,4 3,5 3,7 4,2 3,8 Hombres 4,6 4,6 3,7 3,5 4,2 3,8 H-M 0,4 0,2 0,2 -0,2 0,0 0,0


La población ocupada de la CAE valora los potenciales perjuicios en la carrera laboral que

podrían derivarse del uso de las medidas de conciliación con una puntuación media de 2,4

puntos sobre un máximo de diez, siendo aquella que se percibe como más perjudicial para

la trayectoria profesional la solicitud de excedencia o de reducciones de jornada por motivos

familiares, cuya puntuación asciende a 3,1. El temor a solicitar este tipo de permisos incide

de forma muy similar en mujeres y en hombres, al contrario de lo que sucede con el disfrute

del permiso de maternidad, al que las mujeres otorgan un 2,4 frente al 1,0 de los hombres.

Curiosamente esta puntuación de las mujeres con relación a los perjuicios asociados al


permiso de maternidad coincide con la de los hombres sobre los perjuicios percibidos con

relación al permiso de paternidad. Con todo, la valoración del perjuicio global de las medidas

de conciliación es mayor para ellas que para ellos, lo que podría relacionarse con el mayor

uso que las mujeres hacen de este tipo de prestaciones.

Tabla 5.21. Población ocupada según perjuicios relacionados con otros aspectos relativos a la conciliación por sexo (media). CAE, 2011

Maternidad Permiso de paternidad

Excedencia-reducción por motivos familiares

Perjuicio global*

Total 1,6 2,4 3,1 2,4 Mujeres 2,4 - 3,1 2,7 Hombres 1,0 2,4 3,2 2,2 H-M -1,4 - 0,1 -0,5

Fuente: EUSTAT. Conciliación de la vida laboral, familiar y personal. (*) Perjuicio global está obtenido como media de las tres anteriores (maternidad/paternidad, permiso de paternidad y excedencia).

Por otra parte, la percepción del grado de dificultad global para solicitar permisos

relacionados con la conciliación es bastante similar en las mujeres vascas ocupadas y en los

hombres en situación análoga, si bien las primeras expresan menor dificultad que los

segundos para solicitar reducciones de jornada y, en menor medida, excedencias. Las

ausencias esporádicas son para unas y otros las medidas más factibles, en particular para

los hombres.

Tabla 5.22. Población ocupada según grado de dificultad para solicitar permisos por sexo (media). CAE, 2011

Días sin empleo

y sueldo Excedencias

Reducción de jornada

Ausencias esporádicas

Globalmente

Total 3,2 3,5 3,6 2,1 3,1 Mujeres 3,2 3,3 3,3 2,3 3,0 Hombres 3,2 3,6 3,8 2,0 3,1 H-M 0,0 0,3 0,5 -0,3 0,1


A pesar de las dificultades y dilemas que plantea la armonización de dos esferas con lógicas

contrapuestas como la laboral y la familiar, muchas personas en Euskadi tienen que

enfrentarse cotidianamente al reto de compaginar estos dos mundos para dar respuesta a

necesidades que no son solo personales o familiares, sino también sociales. A continuación

se abordan cuáles son las principales estrategias empleadas para ello.

El cuidado de la prole menor de 15 años durante la jornada laboral plantea especiales

dificultades. Al margen del uso de los centros escolares, en particular desde la edad de


escolaridad obligatoria, el cuidado materno constituye la estrategia prioritaria para la

conciliación en Euskadi –en abierto contraste con el paterno–, seguida del realizado por

familiares o personas sin remuneración y de las guarderías. Por territorios históricos,

destaca la situación peculiar de Gipuzkoa donde se recurre en mucha menor medida a la

figura materna en favor del uso de las guarderías. Por otra parte, el cuidado de menores de

dos años durante la jornada laboral es realizado en mayor medida por las madres y por

familiares o personas no remuneradas que en otros tramos de edad.

Tabla 5.23. Hijas/os menores de 15 años de la población ocupada según el cuidado diario durante la jornada laboral por territorio de residencia y edad (miles y porcentajes horizontales). CAE, 2011

Miles Madre Padre Ambos Familiares o personas sin

remuneración

Otra persona con

remuneración Guarderías

Centros escolares

C.A. de Euskadi 269,3 5,5 0,9 1,5 4,4 1,3 4,2 82,3 Araba/Álava 39,8 7,4 0,9 3,7 4,8 1,2 3,3 78,8 Gipuzkoa 97,3 2,2 0,2 0,6 3,0 0,7 8,0 85,3 Bizkaia 132,1 7,3 1,5 1,5 5,2 1,7 1,7 81,1 0 a 2 años 44,1 11,8 3,3 3,8 15,0 1,8 23,8 40,4 3 a 5 años 52,6 6,5 0,9 0,8 3,8 0,8 1,4 85,9 6 a 14 años 172,5 3,5 0,4 1,1 1,8 1,3 - 91,9


La consideración de la parte de la jornada laboral que tiene lugar fuera del horario escolar

dibuja un panorama diferente en el que cobran mayor protagonismo las personas familiares

o sin remuneración, las madres y el cuidado compartido por la figura materna y paterna. Sin

embargo, es exiguo el recurso a actividades en los centros escolares así como a los padres

en solitario. Cabe señalar asimismo que en el tramo de edad de 6 a 14 años un porcentaje

no desdeñable corresponde a menores que afrontan estas horas en solitario.

Tabla 5.24. Hijas/os menores de 15 años de la población ocupada según el cuidado diario durante la jornada laboral fuera del horario escolar por territorio de residencia y edad (miles y porcentajes horizontales). CAE, 2011

Miles Madre Padre Ambos Familiares o personas sin

remuneración

Otra persona con

remuneración

Centros escolares

Se queda sola/o

C.A. de Euskadi 269,3 20,2 4,9 15,9 41,6 10,6 1,0 5,9 Araba/Álava 39,8 22,8 7,7 18,6 34,1 10,9 - 5,9 Gipuzkoa 97,3 17,1 3,9 15,3 46,8 9,0 0,4 7,6 Bizkaia 132,1 21,8 4,7 15,6 39,9 11,6 1,7 4,7 0 a 2 años 44,1 20,7 6,7 17,7 49,7 5,1 - - 3 a 5 años 52,6 18,2 5,4 16,1 46,5 12,7 1,1 - 6 a 14 años 172,5 20,7 4,3 15,5 38,0 11,3 1,1 9,2



Cuando el cuidado infantil que se realiza durante la jornada laboral tiene un carácter

esporádico, diminuye la presencia de ayuda prestada por familiares y otras personas sin

remuneración y, en particular, la remuneración de los cuidados. En cambio, aumenta el

cuidado prestado por la madre y el padre, si bien cuando se recurre a una figura parental en

solitario destaca notablemente la opción por la materna.

Tabla 5.25. Hijas/os menores de 15 años de población ocupada según cuidado esporádico durante la jornada laboral por territorio de residencia y edad (miles y porcentajes horizontales). CAE, 2011

Miles Madre Padre Ambos Familiares o personas

sin remuneración Otra persona con

remuneración Se queda

sola/o

C.A. de Euskadi 269,3 28,6 3,6 44,2 19,8 3,0 0,8 Araba/Álava 39,8 20,9 6,2 57,6 11,8 0,7 3,0 Gipuzkoa 97,3 30,6 3,2 33,3 29,2 2,8 0,9 Bizkaia 132,1 29,5 3,0 48,2 15,3 3,9 - 0 a 2 años 44,1 27,7 1,3 43,1 26,0 1,9 - 3 a 5 años 52,6 30,4 3,5 38,6 24,6 2,8 - 6 a 14 años 172,5 28,3 4,1 46,2 16,8 3,4 1,2


Fuera de la jornada laboral el cuidado diario de hijos e hijas menores de 15 años muestra

una mayor implicación paterna que en los casos anteriores –generalmente compartida con

la madre–, lo que no significa que pueda hablarse de una distribución paritaria. De nuevo

aquí, cuando el cuidado se realiza en solitario es fundamentalmente asumido por la madre, y

esto se produce en mayor medida al aumentar el tramo de edad en el que se sitúa la prole.

La evidencia empírica que hemos revisado manifiesta un mayor protagonismo de la figura

materna frente a la paterna en el ámbito de la conciliación, lo que unido a los resultados de

las estadísticas sobre los permisos orientados a la conciliación y de los usos del tiempo

muestra que, a pesar de los cambios, aún queda un largo camino por recorrer hacia la

igualdad.

Tabla 5.26. Hijas/os menores de 15 años de la población ocupada según el cuidado diario fuera de la jornada laboral por territorio de residencia y edad (miles y porcentajes horizontales). CAE, 2011

Miles Madre Padre Ambos Familiares o personas

sin remuneración Otra persona con

remuneración

C.A. de Euskadi 269,3 15,7 1,6 74,2 6,8 1,6 Araba/Álava 39,8 14,5 3,4 80,3 1,8 - Gipuzkoa 97,3 18,8 1,5 68,7 9,8 1,3 Bizkaia 132,1 13,7 1,2 76,5 6,2 2,4 0 a 2 años 44,1 12,8 1,3 78,1 7,7 - 3 a 5 años 52,6 15,1 1,6 73,7 8,4 1,2 6 a 14 años 172,5 16,5 1,7 73,4 6,1 2,2


6. VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES

Uno de los tres programas principales del V Plan para la Igualdad de Mujeres y Hombres en

Euskadi aborda la violencia contra las mujeres, lo que hace necesario el mayor

conocimiento posible del alcance y las características de la misma dentro del ámbito de la

Comunidad Autónoma de Euskadi.

Si bien es innegable que una parte relevante de las diferentes formas de violencia contra las

mujeres sigue quedando invisibilizada y, por tanto, es necesario interpretar los indicadores

presentados con cautela, es importante analizar los datos disponibles para optimizar los

recursos de prevención y de atención a las víctimas dentro de las administraciones públicas.

Para ello, se requiere abordar diferentes dimensiones de la violencia contra las mujeres,

como los tipos que adopta o las características de quienes la sufren y la ejercen –por

ejemplo, en cuanto a grupos de edad–.

El II Acuerdo Interinstitucional para la Mejora en la Atención a Mujeres Víctimas de Maltrato

en el Ámbito Doméstico y de Violencia Sexual de la CAE recoge que "el maltrato en el

ámbito doméstico y la violencia sexual son dos formas concretas de violencia contra las

mujeres que se producen en todas las edades, grupos sociales, culturas y países, y

suponen un problema social de enorme magnitud, debido a su gran incidencia en nuestra

población, a la gravedad de las secuelas físicas, y psíquicas que producen (…), así como el

alto coste social y económico que supone para toda la sociedad".

Por un lado, el maltrato contra la mujer en el ámbito doméstico quedaría definido como "la

violencia física, psíquica, sexual o de otra índole que se ejerce contra una mujer adolescente

o adulta en el marco de una relación familiar y/o afectiva actual o previa, con el fin de

someterla, dominarla y mantener una posición de autoridad y poder en la relación, y que

tenga o pueda tener como resultado sufrimiento o daño en su salud física o psíquica".

La violencia sexual contra la mujer, por su parte, englobaría "cualquier comportamiento de

naturaleza sexual cometido contra una mujer adolescente o adulta sin su válido

consentimiento, no pudiéndose considerar válido, a efectos de lo anterior, el consentimiento

otorgado por menores de 13 años, por personas privadas de sentido o de cuya discapacidad


mental se abuse o el consentimiento obtenido prevaliéndose de una situación de

superioridad manifiesta que coarte la libertad de la víctima".

La definición de violencia contra las mujeres recogida en el artículo 50 de la Ley 4/2005 para

la Igualdad de Mujeres y Hombres es la siguiente: "cualquier acto violento por razón de sexo

que resulte, o pueda resultar, en daño físico, sexual o psicológico o en el sufrimiento de la

mujer, incluyendo las amenazas de realizar tales actos, la coacción o la privación arbitraria

de libertad que se produzcan en la vida pública o privada".

La fuente principal de datos sobre la incidencia, alcance y percepción de la violencia contra

las mujeres es la Dirección de Atención a Víctimas de la Violencia de Género (DAVVG) del

Departamento de Interior del Gobierno Vasco, ente que desde 2008 viene recogiendo,

analizando y publicando un informe anual con los datos recogidos en la CAE. Para la

elaboración de este apartado, en particular, se ha recurrido a los datos publicados por este

organismo en el Balance 2011 sobre mujeres víctimas de Violencia de Género, así como a

los resultados de la macroencuesta: La violencia machista contra las mujeres en la CAPV:

percepción, incidencia y seguridad, realizada en 2011.

6.1. Mujeres víctimas de la violencia de género: in cidencia y características

Tal como se ha señalado en la introducción de este capítulo, pese a los esfuerzos y avances

realizados en los últimos años en la CAE para un diagnóstico lo más real posible sobre la

incidencia y alcance de la violencia contra las mujeres, es necesario tener en cuenta que

gran parte de las situaciones no llegan al conocimiento de las autoridades policiales y

judiciales, siendo estas las fuentes primarias principales de recogida de datos.

En la CAE, la estadística contabiliza todas las ocasiones en las que las personas han sido

objeto de un ilícito penal, y como tales han quedado registradas por la Ertzaintza a través de

una denuncia ciudadana o de un atestado. Por lo tanto, cada denuncia por un mismo ilícito

penal (amenazas, lesiones, etc.) sufrido por una misma persona, es contabilizada como una

victimización. De esta manera, el número de victimizaciones es superior al número de

víctimas registradas. En Euskadi, durante 2011, se registraron 4.858 victimizaciones por

violencia de género, lo que supone un aumento respecto al año anterior, en el que se

contabilizaron 4.285 victimizaciones.


En la misma línea, desde 2002 hasta 2011 se observa una tendencia general al alza en el

número de victimizaciones, a excepción del periodo 2009-2010. El mayor número de

victimizaciones contabilizadas se refiere a la violencia ejercida por la pareja o ex-pareja. Al

contrario, los delitos contra la libertad sexual son los que menos victimizaciones han

registrado, y no se aprecia evolución al alza en este tipo de violencia. Conviene, en todo

caso, hacer una lectura especialmente cautelosa de las estadísticas sobre delitos contra la

libertad sexual ya que, siendo figuras delictivas que afectan de manera muy flagrante al

ámbito más intimo y personal, tienen un escaso índice de denuncia.

Gráfico 6.1. Evolución de victimizaciones de mujeres por violencia de género según tipo de

violencia. CAE, 2002-2011

Fuente: Área de Análisis. GVCS. Departamento de Interior Nota: La violencia intrafamiliar no incluye la ejercida por la pareja o expareja. Hasta el 2008 inclusive los datos de violencia intrafamiliar incluían a mujeres agresoras (hijas a madres, etc.). La libertad sexual engloba los delitos tipificados como tales en el Código Penal, cometidos por autores de fuera del ámbito familiar.

En términos porcentuales, de las 4.858 victimizaciones contabilizadas durante 2011, el 76%

correspondería a violencia ejercida por la pareja o ex-pareja, el 19% a violencia intrafamiliar

de género (excepto la ejercida por la pareja o ex-pareja) y el 5% se refiere a delitos contra la

libertad sexual. Se mantiene, pues, la tendencia al alza en las denuncias por violencia de

pareja o ex-pareja y el limitado porcentaje de victimizaciones registradas por delitos contra la

libertad sexual.

3238

3699

922

237

3490

33943233

28972629

22402009

1711

8359001007997835906735649563

212270316

2472252792652382030

500

1000

1500

2000

2500

3000

3500

4000

2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011

Pareja/ex-pareja Intrafamiliar Libertad sexual


Gráfico 6.2. Victimizaciones de mujeres por tipo de violencia. CAE, 2011.

Fuente: Área de Análisis. GVCS Dpto. de Interior. Nota: (*) Excepto la ejercida por la pareja o ex-pareja. La libertad sexual engloba los delitos tipificados como tales en el Código Penal, cometidos por autores de fuera del ámbito familiar.

Si se observa la evolución de las victimizaciones de mujeres por violencia de género según

territorio histórico, se puede apreciar que en todos ellos se ha producido un aumento desde

2002 hasta 2011 como tendencia general, con particularidades en algunos periodos. En

cualquier caso, como sucedía para el conjunto de la CAE, durante el periodo 2009-2010 en

los tres territorios se produce una disminución en el número de victimizaciones, siendo esta

una tendencia que se invierte el año siguiente.

Tal como muestra el gráfico, aunque en Bizkaia –el territorio más densamente poblado– se

produce el mayor registro de victimizaciones, es en Gipuzkoa donde el aumento

proporcional respecto a los datos de 2002 resulta más significativo, ya que en este caso el

número de victimizaciones asciende a más del doble al finalizar el periodo analizado. En

este último territorio, frente a las 615 victimizaciones de 2002, en 2011 se contabilizan

1.479.

76%

19%

5%

Violencia ejercida porpareja/expareja

Violencia intrafamiliar porgenero*

Libertad sexual


Gráfico 6.3. Evolución de victimizaciones de mujeres por violencia de género según territorio

histórico. CAE, 2002-11

Fuente: Área de Análisis. GVCS. Dpto. de Interior.

Además de la recogida del número de victimizaciones −que tal como se ha explicado

anteriormente, se definiría como cada ocasión en la que se ha sido objeto de un ilícito penal,

independientemente de que sea sobre la misma persona−, es esencial la contabilización de

las víctimas de violencia de género.

En 2011 en la CAE se registraron 4.858 victimizaciones correspondientes a 3.829 víctimas

de las diferentes formas de violencia de género definidas anteriormente: violencia ejercida

por la pareja o ex-pareja, violencia intrafamiliar de género y violencia contra la libertad

sexual. Durante 2011 se contabilizaron en Álava 632 victimizaciones que corresponden a

528 mujeres. En Bizkaia, por su parte, se registraron 2.747 victimizaciones, siendo 2.165

mujeres quienes las sufrieron y en Gipuzkoa 1.136 mujeres suponen el grueso de víctimas a

las que corresponderían 1.479 victimizaciones contabilizadas ese año.

La violencia ejercida por la pareja o ex-pareja es el tipo de violencia que concentra el mayor

número de victimizaciones y el mayor número de mujeres víctimas de las que se ha tenido

conocimiento. De hecho, el número de víctimas por violencia de pareja o ex-pareja

prácticamente triplica en los tres territorios históricos a la suma de las víctimas de violencia

intrafamiliar de género y de violencia contra la libertad sexual.

632

2747

612670685711583632

516458380

2366

26522723

2567

23682209

1880

16701476

14791307

13381309

11991006973

844768

615

0

500

1000

1500

2000

2500

3000

2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011



Tabla 6.1. Victimizaciones de mujeres por violencia de género y mujeres víctimas de violencia de

género por territorio histórico. CAE, 2011

Araba/Álava Bizkaia Gipuzkoa Tipo de violencia Victimiz. Mujeres Victimiz. Mujeres Victimiz. Mujeres

Violencia ejercida por pareja/ex-pareja 498 406 2.049 1.551 1.152 851 Violencia intrafamiliar por género* 96 84 558 476 268 227 Libertad sexual 38 38 140 138 59 58 Total 632 528 2.747 2.165 1.479 1.136

Fuente: Área de Análisis. GVCS. Dpto. de Interior. Nota: (*) Excepto la ejercida por pareja/ex-pareja. La libertad sexual engloba los delitos tipificados como tales en el Código Penal, cometidos por autores de fuera del ámbito familiar.

Del mismo modo que todas las victimizaciones recogidas no tienen su origen en una

denuncia, sino que puede provenir de un atestado policial, las denuncias por violencia de

género pueden ser interpuestas por la propia víctima o por otras personas denunciantes.

En cuanto al número de denuncias interpuestas por las víctimas u otras personas allegadas

por territorio histórico en 2011, la Ertzaintza de Álava habría recepcionado 466 denuncias,

403 de las cuales fueron interpuestas por las propias mujeres víctimas. En Bizkaia, por su

parte, 1.582 mujeres denunciaron violencia de género, a las que se sumarían otras 343

denuncias interpuestas por otras personas, haciendo un total de 1.925. En Gipuzkoa, se

presentaron 1.004 denuncias por violencia de género, 835 de las cuales fueron interpuestas

por las propias víctimas.

Tabla 6.2. Denuncias de mujeres y mujeres denunciantes por tipo de violencia de género y

territorio histórico. CAE, 2011

Araba/Álava Bizkaia Gipuzkoa Tipo de violencia Denu. M. denu. Denu. M. denu. Denu. M. denu.

Violencia ejercida por pareja/ex-pareja 362 307 1.414 1.112 752 604 Violencia intrafamiliar por género* 71 63 386 347 196 176 Libertad sexual 33 33 125 123 56 55 Total 466 403 1.925 1.582 1.004 835

Fuente: Área de Análisis. GVCS Dpto. de Interior. Nota: (*) Excepto la ejercida por pareja/ex-pareja. Denu: denuncia y M. denu: denuncia de mujeres. La libertad sexual engloba los delitos tipificados como tales en el Código Penal, cometidos por autores de fuera del ámbito familiar.

Para mejorar los recursos de prevención y abordaje de la violencia contra las mujeres, es

importante conocer no solo sus diversas modalidades y su incidencia, sino también las

características que ésta adquiere, por ejemplo, las temporales. En este sentido, se aportan

datos sobre la distribución temporal de las victimizaciones por violencia de género según

mes y día de la semana durante 2011.


Como puede observarse, en virtud del nivel total de victimizaciones –y del desglose por tipo

de violencia de género–, el segundo semestre ha sido ligeramente más violento que el

primero (51,5% frente a 48,5%), si bien esta tendencia ha sido mayor en años anteriores.

Realizando un análisis mensual, puede inferirse que los meses sitos en periodos

vacacionales acumulan un mayor número de agresiones, ya que aumenta el tiempo y el

riesgo de exposición a la violencia en cualquiera de sus formas. De hecho, Diciembre es el

mes de 2011 en el que se ha producido mayor número de victimizaciones por violencia de

género, con 455, seguido de junio, agosto y septiembre. Febrero vuelve a ser, como en

2010, el mes en el que se ha recogido un menor número de victimizaciones.

Gráfico 6.4. Victimizaciones de mujeres por violencia de género por mes. CAE, 2011

Fuente: Área de Análisis: DGRT (Dirección del Gabinete de Recursos Técnicos). Nota: La violencia intrafamiliar no incluye la ejercida por la pareja o expareja. La libertad sexual engloba los delitos tipificados como tales en el Código Penal, cometidos por autores de fuera del ámbito familiar.

Asimismo, el mayor número de victimizaciones se registra los fines de semana,

especialmente el domingo, seguido del sábado y viernes. Atendiendo a estos datos, las

386

291

341

89

25

455

413426424

399433

396

379

396

362

389

322329

319

298

331

293297

307

276295

806773

8478

848070677476

1524242123182312221218

0

50

100

150

200

250

300

350

400

450

500

Enero

Febre

ro

Marzo Abril

Mayo

Junio

Julio

Agosto

Septiem

bre

Octubre

Novie

mbre

Diciem

bre

Total Pareja/ex-pareja Intrafamiliar Sexual


mujeres sufrirían más violencia de género los días festivos que los días laborables. El lunes,

por ejemplo, ha sido durante 2011 el día menos violento en términos de victimizaciones por

violencia de género, al igual que sucedió en 2010.

Gráfico 6.5. Victimizaciones de mujeres por violencia de género por día de la semana. CAE, 2011

Fuente: Área de Análisis: DGRT (Dirección del Gabinete de Recursos Técnicos). Nota: La violencia intrafamiliar no incluye la ejercida por la pareja o expareja. La libertad sexual engloba los delitos tipificados como tales en el Código Penal, cometidos por autores de fuera del ámbito familiar.

La edad, tanto de las víctimas como de los agresores, constituye un factor relevante a la

hora de analizar la incidencia de la violencia contra las mujeres en la CAE y, por ende, al

planificar la prevención e intervención en esta materia.

Según datos de 2011, el grupo de edad mayoritario entre las víctimas es el de mujeres entre

31 y 40 años. Un significativo 28,6% de las mujeres tenía entre 18 y 30 años de edad en el

momento de la denuncia o atestado. El grueso disminuye a mayor edad, así como entre las

menores de 18 años, que suponen el 6,1%. Como puede observarse en el gráfico, un sector

significativo de las víctimas registradas en 2011 (59%) tenían una edad entre los 18 y 40

años, resultado similar al de 2010, donde el 59,6% se encontraba en este tramo de edad.

861

791

662648625

641610

697625

506465465476

465

126134126150130133

123

583230333032

220

100

200

300

400

500

600

700

800

900

1000

Lunes Martes Miercoles Jueves Viernes Sabado Domingo

Total Pareja/ex-pareja Intrafamiliar Sexual


Gráfico 6.6. Edad de las víctimas (%).CAE, 2011


Respecto a los agresores, el grupo de edad que representa un mayor porcentaje sobre el

total (32,1%) es el comprendido entre 31 y 40 años, seguido del inmediatamente inferior −de

18 a 30 años−. Entre ambos comprenden el 56,4% de los agresores. Este resultado es algo

inferior al que se obtenía en 2010 (60,6%), pero igualmente significativo. Al igual que en el

caso de las víctimas, el tramo de edad donde se concentran los agresores oscila entre 18 y

40 años.

Gráfico 6.7. Edad de los agresores (%).CAE, 2011


Para profundizar en la incidencia real de la violencia de género en la sociedad vasca, en

2011 la DAVVG elabora la primera macroencuesta en el ámbito de la CAE que trata de

medir la percepción, incidencia y seguridad en torno a la violencia machista contra las

0,46,1

28,6

30,4

20,3

7,56,7

Desconocida

Menor de 18

De 18 a 30

De 31 a 40

De 41 a 50

De 51 a 60

Más de 60

32,7

24,3

32,1

24,1

9,14,7

Desconocida

Menor de 18

De 18 a 30

De 31 a 40

De 41 a 50

De 51 a 60

Más de 60


mujeres. A continuación se presentan una serie de tablas de dicho estudio en las que se

plasma, según el ámbito y tipo de violencia de género (declarada o técnica), la incidencia de

la violencia contra las mujeres mayores de 16 años en Euskadi.

Por un lado, en cuanto a la violencia declarada, es decir, aquella que las mujeres admiten

haber sufrido, el 12,5% de las mujeres afirma en 2011 haber sido víctima de violencia

machista de algún tipo al menos alguna vez y el 2% sostiene padecerla en el momento de

realización de la encuesta. Considerando diferenciadamente la modalidad de violencia, un

7,5% de mujeres manifestaba haber sufrido violencia ejercida por parte de la pareja y ex-

pareja, mientras un 1% declaraba vivirla en aquel momento. En este análisis es necesario

tener en cuenta que los porcentajes del ámbito laboral se han calculado sobre el total de

población femenina ocupada. Un 1,8% de estas mujeres señalaban haber vivido alguna vez

violencia machista en su ámbito laboral, y un 0,2% habría reconocido sufrirla en el momento

de realización de la consulta.

Tabla 6.3. Mujeres que han sufrido o sufren violencia machista contra las mujeres según ámbito

(violencia declarada) (%).CAE, 2011

Alguna vez Actualmente

General: cualquiera de los ámbitos 12,5 2,0 Violencia ejercida por pareja/ex-pareja 7,5 1,2 Violencia intrafamiliar por género* 1,8 0,7 Ámbito laboral ** 1,8 0,4 Ámbito social/público 2,7 0,2

Fuente: Macroencuesta: violencia machista contra las mujeres en la CAPV: percepción, incidencia y seguridad. DAVVG-Dpto. de Interior. Nota: (*) Excepto la ejercida por pareja o ex-pareja. (**) Los porcentajes del ámbito laboral se calculan sobre el total de población femenina ocupada.

Independientemente de que las mujeres encuestadas manifiesten o no directamente haber

sido víctimas de violencia, se dedujeron casos a partir de una batería de preguntas que

reflejaban indicadores directos e indirectos de formas de violencia machista contra las

mujeres (violencia deducida o técnica). De la tabla expuesta a continuación se extrae que en

torno al 18% de mujeres en la CAE en 2011 ha vivido al menos una de estas situaciones

planteadas como violencia deducida o técnica de manera frecuente o a veces en el último

año, mientras que tres de cada diez la han sufrido alguna vez durante dicho periodo.

El análisis específico para cada ámbito arroja asimismo mayores porcentajes de violencia

deducida o técnica que de violencia declarada. Así, los resultados revelan que en 2011 una

de cinco mujeres ha sufrido violencia en el ámbito social alguna vez. Por otro lado, se

deduce que durante dicho periodo un 8,5% y un 6,1% habrían padecido violencia por parte

de su pareja o expareja y violencia intrafamiliar de género, respectivamente, al menos una


vez. En cuanto a la población femenina ocupada en la CAE, se dedujo que un 7% ha sufrido

con cierta frecuencia en el último año violencia dentro de su ámbito laboral, mientras casi el

20% la habría vivido al menos una vez.

Tabla 6.4. Mujeres que han vivido al menos una de las situaciones de violencia planteadas en el

último año según frecuencia y ámbito (violencia deducida o técnica) (%).CAE, 2011

Alguna

vez Frecuentemente

o a veces

General: cualquiera de los ámbitos 29,6 18,2 Violencia ejercida por la pareja o ex-pareja (1/23 o más) 8,5 6,3 Violencia intrafamiliar de género (excepto pareja o ex-pareja) (1/23 o más) 6,1 4,5 Ámbito laboral* (1/19 o más) 11,1 7,2 Ámbito social/público (1/17 o más) 19,9 9,3

Fuente: Macroencuesta: violencia machista contra las mujeres en la CAPV: percepción, incidencia y seguridad. DAVVG-Dpto. de Interior. Nota: (*) Porcentajes calculados sobre el total de población femenina ocupada.

Por último, se analiza el lugar de nacimiento de las víctimas recogido en las victimizaciones

por violencia de género. Tal como puede observarse en el siguiente gráfico, un 31% de las

victimizaciones corresponden a mujeres nacidas en Bizkaia, mientras las asociadas a

naturales de Gipuzkoa y Álava representan un 16% y un 6%, respectivamente. Cuando el

lugar de nacimiento está fuera de la CAE, se sitúa preponderantemente en Latinoamérica,

siendo 21% su peso dentro del total de victimizaciones recogidas.

Gráfico 6.8. Victimizaciones de mujeres por violencia de género en la CAE por lugar de nacimiento

de la víctima (%).CAE, 2011

Fuente: Área de Análisis: GVCS Dpto. de Interior.

6

1 6

3 1

1 4

5

03 2

2 1

01

01

0

5

1 0

1 5

2 0

2 5

3 0

3 5

Ara

ba/Á

lava

Gip

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AA

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a

Así

aO

cean

íaSi

n es

peci

ficar


6.2. Consecuencias de la violencia contra las mujer es

La violencia contra las mujeres es la expresión más cruenta de la desigualdad de género

estructural en nuestra sociedad. Esta lacra social supone una grave violación de los

derechos humanos y provoca secuelas físicas, psicológicas y sexuales de diferente

intensidad, llegando, en casos extremos, a provocar la muerte de la víctima. En este

apartado se exponen los datos sobre mujeres que han muerto a manos de sus agresores

contabilizadas hasta 2012, tanto en valores absolutos como en tasas, para facilitar la visión

de la incidencia de esta terrible consecuencia de la violencia contra las mujeres.

Según la DAVVG, entre 2002 y 2011, 29 mujeres fueron asesinadas por violencia de género

en la CAE (dos, en el último año), siendo la edad media de las víctimas 45 años. El 76% de

ellas tenían nacionalidad española. El 65% convivía con el autor del feminicidio y en el 76%

de los casos fueron asesinadas por su pareja o ex-pareja1.

Estos datos no coinciden con los recabados por el Instituto de la Mujer sobre el número de

víctimas mortales de la violencia de género en Euskadi, debido a que dicho organismo

solamente recoge bajo el supuesto de violencia de género las mujeres asesinadas por su

pareja o ex-pareja y no los casos perpetrados por un familiar (violencia intrafamiliar de

género). En este sentido más restringido, como puede observarse en la tabla siguiente,

durante el periodo comprendido entre 2000 y 2011 se han contabilizado 25 mujeres

asesinadas a manos de su pareja o ex-pareja en la CAE, dos de ellas en el último año.

Tabla 6.5. Evolución de las mujeres muertas por violencia de género a manos de su pareja o ex-

pareja. 2000-11

2011 2010 2009 2008 2007 2006 2005 2004 2003 2002 2001 2000

Andalucía 16 18 14 9 8 20 9 19 13 10 12 10 Aragón 2 2 0 1 2 1 4 2 2 3 1 0 Asturias 2 5 0 1 2 3 1 0 2 0 2 0 Baleares 1 2 1 1 1 3 4 2 4 4 2 1 Canarias 3 7 5 5 6 4 6 2 6 7 5 5 Cantabria 0 0 0 0 2 0 0 2 1 0 0 0 Castilla-La Mancha 1 3 1 3 5 4 2 4 2 0 2 3 Castilla-León 2 4 1 6 3 3 4 2 4 4 1 3 Cataluña 9 11 10 10 11 10 8 11 12 7 7 8 C. Valenciana 8 8 9 10 10 8 6 9 7 9 9 7

1 Datos no sistematizados en tablas ni gráficos, señalados por la DAVVG en el documento

"Mujeres víctimas de la Violencia de Género en la CAPV: Balance 2011" (pág.2).


2011 2010 2009 2008 2007 2006 2005 2004 2003 2002 2001 2000

Euskadi 2 2 2 3 2 3 3 4 0 1 1 2

Extremadura 0 1 1 0 0 1 0 2 1 1 0 1 Galicia 3 2 3 7 6 0 1 2 5 3 0 4 La Rioja 0 0 1 2 0 0 0 1 2 0 0 0 Madrid 9 7 0 11 9 5 4 5 5 4 6 17 Murcia 2 1 5 4 2 3 2 4 3 0 2 1 Navarra 1 0 2 2 1 0 2 1 1 1 0 1 Ceuta 0 0 1 0 0 0 0 0 1 0 0 0 Melilla 0 0 0 0 1 0 1 0 0 0 0 0 Total 61 73 56 75 71 68 57 72 71 54 50 63

Fuente: Elaboración propia a partir del Instituto de la Mujer.

Andalucía es la Comunidad Autónoma que registra un mayor número de mujeres fallecidas

a manos de sus agresores en 2011 (16), seguida de Cataluña y Madrid (9), y la Comunidad

Valenciana (8). Precisamente son estas y por este orden, las comunidades autónomas más

pobladas del Estado. Desde una perspectiva diacrónica, Andalucía y Cataluña, son las dos

comunidades que registran desde 2000 un mayor número de mujeres muertas por violencia

de género a manos de su pareja o ex-pareja, 158 y 114 mujeres respectivamente. Las cinco

comunidades autónomas menos pobladas −Cantabria, La Rioja, Extremadura, Navarra y

Asturias− y las dos ciudades autónomas de Ceuta y Melilla son los territorios donde menos

mujeres han muerto a consecuencia de esta violencia desde 2000, estando entre ellas todas

las que en 2011 no registraron ninguna muerte (Cantabria, Extremadura, La Rioja, Ceuta y

Melilla). El año 2003 ha sido el único desde 2000 en el que no se ha contabilizado ninguna

muerte por causa de la violencia de género en la CAE. Los años que más víctimas mortales

se registraron en Euskadi fueron 2004, con cuatro mujeres muertas, así como 2008, 2006 y

2005, con tres mujeres fallecidas.

Dado que las cifras absolutas de mujeres asesinadas por su pareja o ex-pareja no permiten

una comparación proporcionada a la diferente densidad poblacional de cada comunidad, es

interesante realizar este análisis en virtud de las tasas por millón de mujeres como indicador

comparativo. De esta manera, la comunidad autónoma con una mayor tasa de mujeres

muertas a manos de su pareja o ex-pareja durante 2011 sería Andalucía, seguida de

Asturias, Comunidad Valenciana y Navarra. Comunidades autónomas como Cantabria,

Ceuta, Melilla, Extremadura y la Rioja habrían cerrado 2011 con una tasa de 0 mujeres

muertas. Si observamos la evolución, resultan significativos los casos de Ceuta y Melilla, ya

que se puede apreciar que en años específicos como 2005 y 2007 en Melilla, y 2003 y 2009

en Ceuta, sus tasas de mujeres muertas a manos de sus parejas o exparejas superaron la


cifra de 25. La CAE se mantendría con una tasa de 1,8 durante 2011, al igual que en 2010 y

2009, habiendo sido 2004 el año con la mayor tasa de mujeres muertas (3,7).

Tabla 6.6. Evolución de las de mujeres muertas por violencia de género a manos de su pareja

o ex-pareja por CC.AA. Tasa por millón de mujeres. 2001-11

2011 2010 2009 2008 2007 2006 2005 2004 2003 2002 2001

Andalucía 3,8 4,3 3,3 2,2 2,0 5,0 2,3 4,9 3,4 2,6 3,2

Aragón 3,0 3,0 0,0 1,5 3,1 1,6 6,3 3,2 3,2 4,9 1,7

Asturias 3,6 8,9 0,0 1,8 3,6 5,4 1,8 0,0 3,6 0,0 3,6

Balears 1,8 3,6 1,8 1,9 2,0 6,0 8,2 4,2 8,5 8,7 4,5

Canarias 2,8 6,6 4,8 4,8 5,9 4,0 6,1 2,1 6,4 7,6 5,6

Cantabria 0,0 0,0 0,0 0,0 6,8 0,0 0,0 7,1 3,6 0,0 0,0

Castilla y León 1,0 2,9 1,0 3,0 3,9 4,2 1,6 4,3 2,2 0,0 2,3

Castilla-La Mancha 1,6 3,1 0,8 4,7 3,1 2,4 4,2 1,6 3,2 3,2 0,8

Cataluña 2,4 2,9 2,7 2,7 3,0 2,8 2,3 3,2 3,5 2,1 2,2

Comunitat Valenciana 3,1 3,1 3,5 4,0 4,1 3,3 3,0 3,9 3,1 4,1 4,2

Euskadi 1,8 1,8 1,8 2,7 1,8 2,8 2,8 3,7 0,0 0,9 0,9

Extremadura 0,0 1,8 1,8 0,0 0,0 1,8 0,0 3,7 1,9 1,9 0,0

Galicia 2,1 1,4 2,1 4,9 4,2 0,0 0,7 1,4 3,5 2,1 0,0

La Rioja 0,0 0,0 6,3 12,7 0,0 0,0 0,0 6,8 14,0 0,0 0,0

Madrid 2,7 2,1 1,5 3,4 2,9 1,6 1,3 1,7 1,7 1,4 2,2

Murcia 2,8 1,4 2,8 5,7 2,9 4,5 3,0 6,2 4,8 0,0 3,4

Navarra 3,1 0,0 0,0 9,7 3,3 0,0 6,7 3,4 3,5 3,5 0,0

Ceuta 0,0 0,0 25,9 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 27,4 0,0 0,0

Melilla 0,0 0,0 0,0 0,0 29,2 0,0 31,1 0,0 0,0 0,0 0,0

Total 2,6 3,1 2,4 3,3 3,1 3,0 2,6 3,3 3,3 2,5 2,4

Fuente: Instituto de la Mujer (2000-2005) y Delegación Especial del Gobierno contra la Violencia sobre la Mujer (2006-2011).

6.3. Percepción, creencias y mitos sobre la violenc ia contra las mujeres

Dentro de los diferentes programas públicos orientados a la sensibilización y la prevención

de la violencia contra las mujeres resulta de gran interés el conocimiento de la percepción

social de este fenómeno. De hecho, los avances logrados hasta el momento en este ámbito

parten, en gran medida, de la visibilización de esta violencia como un problema social, ya

que, históricamente, ha sido relegada al ámbito privado y tratada de manera aislada,

obviando la desigualdad de género que actúa como base para su legitimación.

Según la macroencuesta de la DAVVG a la que ya se ha hecho referencia, la gran mayoría

de las personas consultadas en la CAE (82,2%) sostiene que la violencia de género es un


problema social de primera magnitud, mientras que un 15,9% cree que es bastante grave, y

el resto opina que es poco (1,8%) o nada grave (0,2%). Según el mismo estudio, las mujeres

consideran más grave esta violencia que los hombres (85,1% versus 79,2%). Del mismo

modo, los hombres con pareja atribuyen una mayor gravedad a este fenómeno que los que

no la tienen (81,1 y 74,2%, respectivamente).

Gráfico 6.9. Percepción de la gravedad de la violencia contra las mujeres (%). CAE, 2011

Fuente: Macroencuesta: violencia machista contra las mujeres en la CAPV: percepción, incidencia y seguridad. DAVVG-Dpto. de Interior.

La percepción de la violencia contra las mujeres está asimismo mediada por una serie de

mitos presentes en el imaginario. Estas creencias falsas fomentan la culpabilización de la

víctima, la justificación de los comportamientos de los agresores, la banalización de la

magnitud y las consecuencias de esta violencia y la confusión sobre sus causas.

A continuación se analiza el nivel de incidencia en la CAE de los principales mitos asociados

a la violencia de género. Entre ellos, el referente a que “el alcohol y las drogas están detrás

de la mayoría de los actos de violencia machista contra las mujeres” es el que obtuvo un

mayor grado de acuerdo. El 51,6% de las personas consultadas estaba muy de acuerdo

(15,5%) o bastante de acuerdo (36,1%). La segunda creencia que despierta alto grado de

acuerdo en la sociedad vasca es la que considera que es habitual que los agresores

padezcan problemas psicológicos (47,8%). La tercera creencia más extendida hace

referencia a la momentaneidad y falta de autocontrol como desencadenantes de las

agresiones. Así, un 46,6% de la población encuestada se considera muy de acuerdo

(13,3%) o bastante de acuerdo (33,3%) con la afirmación que plantea que la mayoría de las

agresiones se producen en momentos de altos niveles de estrés o pérdidas de control

momentáneas.

82,2

15,91,80,2

Muy grave

Bastante grave

Poco grave

Nada grave


Tabla 6.7. Grado de acuerdo con algunas creencias vinculadas a la violencia machista contra las

mujeres (%).CAE, 2011

Mucho Bastante Poco Nada

- El abuso de alcohol y drogas está detrás de la mayoría de los actos de violencia machista contra las mujeres

15,5 36,1 26,2 22,2

- Una persona violenta en casa también lo será en el trabajo o con las amistades

14,5 24,3 26,3 34,9

- Es habitual que las personas que agreden padezcan problemas psicológicos

14,1 33,7 27,7 24,6

- La mayoría de las agresiones se dan en momentos de altos niveles de estrés o pérdidas de control momentáneas

13,3 33,3 27,1 26,4

- Hay mucha falsa denuncia en los casos de violencia de género

7,8 20,1 40,1 32,0

- La mayoría de mujeres víctimas de violencia de género son inmigrantes

5,8 16,5 22,2 55,5

- Hay casos de violencia de género que son provocados por las mujeres

5,2 16,8 35,3 42,7

- La violencia machista contra las mujeres es un fenómeno que solo ocurre en las clases más desfavorecidas

4,3 10,1 10,4 75,3

- La violencia en casa es un asunto privado y no debe salir de ese ámbito

1,8 2,2 9,4 86,6

- El maltrato psicológico no es tan grave como la violencia física

1,4 3,0 11,2 84,4

- La violencia de género no es un problema que afecta a la gente joven

1,1 3,2 9,4 86,4

Fuente: Macroencuesta: violencia machista contra las mujeres en la CAPV: percepción, incidencia y seguridad. DAVVG-Dpto. de Interior.

En el extremo contrario, los resultados analizados apuntan a que otros mitos han perdido

vigencia en la sociedad vasca. La creencias que plantean que “la violencia en casa es un

asunto privado”, que “el maltrato psicológico no es tan grave como la violencia física” y que

la violencia de género no es un problema que afecte a la gente joven, son los tres elementos

que mayor porcentaje de rechazo presentaban, con más de un 80% de personas en contra.

cifras 2012

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