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ACTIVIDAD, EMPLEO Y PARO. SITUACIÓN DEL MERCADO DE TRABAJO EN EL NAVIA-PORCÍA

(Extraído del documento “Programa Comarcal de Desarrollo Rural Navia-Porcía 2007-2013 - Análisis de la situación actual” elaborado por el CEDER Navia-Porcía) Página 1

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La mejora de la calidad de vida de las zonas rurales, el fomento y diversificación de las actividades económicas, la conservación del medio ambiente, la revalorización de los hechos culturales rurales y la competitividad de los sectores económicos tradicionales, se muestran a priori como algunos de los objetivos a alcanzar con la articulación y puesta en marcha de un Plan de Desarrollo Rural Comarcal en el territorio que conforman las cuencas de los ríos Navia y Porcía, habida cuenta de la situación actual y su trayectoria económica y social, marcadas por una determinada idiosincrasia en la gestión de sus recursos y la existencia de un hábitat rural diferenciado y diferenciador. Una estrategia de desarrollo rural integrado implica como punto de partida un análisis somero de la estructura del empleo, desempleo y actividad de la Comarca. 3.1. Empleo comarcal Según datos del año 2005, la Comarca registra un total de 10.044 empleos, lo que supone exactamente el 2,5% del empleo de la Comunidad Autónoma, una proporción muy similar a la que supone la población comarcal sobre la regional. la población (tanto en el Navia-Porcía como en el conjunto de Asturias, hay un empleo por cada 2.6habitantes). Sin embargo, es ésta una de las pocas similitudes entre el empleo comarcal y el regional, como se verá al analizar con detalle las estadísticas laborales. 3.1.a. Distribución del empleo por sectores de actividad Asturias es una región con larga tradición rural, que forma parte de nuestra identidad más destacada, sin embargo, un análisis de la población ocupada actual por sectores en la región nos revela la progresiva importancia que va adquiriendo la diversificación de las actividades económicas tradicionales. La distribución del empleo por sectores en Asturias muestra un predominio actual de las actividades ligadas al sector terciario; considerada en su conjunto Asturias es una región tercializada, o fundamentada por lo que respecta al volumen de empleo y actividad en el sector terciario o de servicios. Un 67% del total de personas ocupadas en la región lo están en actividades de servicios, tratándose del sector de mayor crecimiento anual en cuanto a



porcentaje de empleo a que da lugar, en contrapartida a lo que ocurre en el resto de sectores económicos. Dentro del heterogéneo sector terciario o de servicios, las actividades de comercio, hostelería y comunicaciones registran el mayor porcentaje de empleo en el conjunto de la región (31%), seguidas de las actividades de servicios personales o a la comunidad (25%), en la que se enmarcan las actividades de educación, administración pública, sanidad y asistencia social, servicios sociales y personales y servicios domésticos; el resto de servicios (actividades financieras, servicios a empresas y actividades inmobiliarias) dan ocupación a un 11% del total de población activa del sector. Por contra, y pese a la raigambre social, a la trascendencia antrópica sobre el medio físico y al peso poblacional, se observa que Asturias es una región donde el empleo generado por el sector primario, en las actividades de agricultura, ganadería y pesca ocupa a un volumen de población no superior al 6% del total de activos. El sector industrial y la construcción poseen similar importancia por lo que respecta al empleo, dado el retroceso del primero y el desarrollo registrado en la construcción desde los últimos años de la pasada década. Sin embargo, la situación del empleo en la Comarca Navia-Porcía muestra una realidad bien diferente:

En el conjunto de la Comarca Navia-Porcía, si bien el sector servicios da lugar al mayor porcentaje de población ocupada, destaca la importancia en cuanto a volumen de empleo del sector primario, con porcentajes de ocupación entorno al 26% del empleo existente. El carácter rural de la Comarca se refleja por tanto no sólo en los indicadores sociodemográficos caso del índice de ruralidad, sino también en indicadores económicos, habida cuenta del volumen de empleo al que ocupa el sector primario. El peso del empleo recae sobre las actividades

de este sector: agricultura, ganadería y pesca. Se trata por tanto de una Comarca de ámbito no simplemente rural, sino también agrario. Como consecuencia y a pesar de las dificultades estructurales y conyunturales, el sostenimiento de la agricultura y la ganadería no puede sino convertirse en un objetivo estratégico irrenunciable para vertebrar la estructura



socioeconómica en el medio rural de nuestra Comarca, y como tal se entiende desde las políticas regionales de desarrollo rural. Un conjunto amenazante de factores negativos, cuya tendencia regresiva se muestra en muchos casos de difícil inversión, se ciñen sobre el sector agrario en la Comarca: alto grado de envejecimiento del capital humano ligado al sector primario, dificultades orográficas y obstáculos para la mecanización, altos costes de nueva instalación en el sector primario, principalmente ganadería y silvicultura, deficiencias en el sistema de formación profesional agraria y capacitación, consideración social negativa de la actividad agraria por parte del entorno semiurbano y de la población no rural.

Ello unido a unos bajos niveles de renta en comparación con los sectores de la industria, la construcción y los servicios, así como a la falta de alicientes y expectativas y la carencia de infraestructuras sociales, culturales y asistenciales básicas en el medio geográfico de carácter más eminentemente rural están produciendo un abandono de la actividad agraria. Una consecuencia de la elevada interrelación entre agricultura y economía rural existente en la Comarca, observable en los municipios más interiores, está agudizando el fenómeno de despoblamiento en amplias zonas, lo que refuerza la urgencia de asumir una estrategia global de desarrollo comarcal, que suponga una defensa de la estructura económica vinculada a la agricultura y la ganadería al tiempo que defienda y persiga una progresiva diversificación de las actividades económica, en el marco de un contexto social de defensa de las tradiciones y del reforzamiento de sus dotaciones de servicios para mejorar la habitabilidad.

Al margen del sector primario, una imagen comparativa global de la distribución del empleo por sectores en la Comarca muestra el escaso desarrollo que adquiere el comercio y la



hostelería en relación a la media regional. Mientras que el territorio de la Comarca de las cuencas del Navia y el Porcía un 22% de la población ocupada lo está en el desarrollo de actividades de hostelería y comercio, en el conjunto de Asturias el porcentaje de población ocupada ligado a estas actividades se sitúa a nueve puntos porcentuales, con valores superiores al 31%. En este mismo sentido, el resto el empleo en otros servicios a la población, de educación, Administración pública, sanidad, servicios sociales y personales y servicios domésticos ocupa en el territorio a un porcentaje de población del 20% del total, inferior asimismo a la medida regional, que cifra el porcentaje de ocupación en este tipo de servicios de proximidad en el 25%. El porcentaje de ocupación registrado en la Comarca en el sector de la construcción se sitúa muy próximo a la media regional, tan sólo un punto porcentual por debajo del 12% cifrado en Asturias; el sector industrial da ocupación en la Comarca a un 17% del total de activos, mientras que la media regional sitúa a este sector en el 15%. 3.1.b. Distribución territorial del empleo. Pese a los valores medios comarcales, existen diferencias intermunicipales por lo que respecta al peso de los distintos sectores económicos en el volumen de ocupación entre los nueve municipios que conforman el territorio. En los municipios costeros, Tapia de Casariego, El Franco, Coaña y Navia, nos encontramos un mundo rural clásico, con un sector primario básicamente ganadero vinculado a la producción de leche, donde las políticas de desarrollo rural del último quinquenio ha apostado por incidir tanto en el reajuste y modernización de las explotaciones potenciando su adaptación a la realidad del mercado, como en la necesidad de diversificar la actividad económica hacia nuevos sectores económicos emergentes, mediante un aprovechamiento racional de los recursos ociosos. Otra realidad es la que presentan los municipios interiores y de media montaña, donde conviven vestigios de una agricultura preindustrial con una gran variedad de recursos naturales y culturales. Se trata de los municipios de Villayón, Boal, Illano, Pesoz y Grandas de Salime; en su mayoría territorios frágiles, en los que la riqueza paisajística y etnográfica y la diversidad ecológica contrastan con el envejecimiento de la población, la emigración y el abandono.



Los municipios de Navia y Pesoz representan los límites de ocupación y población de la Comarca, tratándose de forma respectiva del más densamente poblado y con mayor población ocupada, caso de Navia, y del de menor número habitantes y de trabajadores, Pesoz. Una economía basada en una ganadería vacuna de montaña y una agricultura de subsistencia, seguida de la prestación de servicios asistenciales a las familias y a la personas en el seno de una estructura poblacional muy envejecida y con necesidades básicas insuficientemente cubiertas, ocupan prácticamente a toda la población activa del municipio de Pesoz, mientras que el comercio y a construcción poseen una escasa importancia cuantitativa en cuanto a porcentaje de empleo, y el sector industrial se muestra inexistente. Por contra, la importancia del sector industrial en Navia lo convierte en cabecera económica comarcal, tratándose del sector con mayor porcentaje (31,30%) y número absoluto de empleos del municipio (1.235). La agricultura, al contrario de lo que ocurría en el caso de Pesoz ocupa sólo al 14,47% de la población en activo, aunque se trata de una agricultura asentada sobre una ganadería intensiva, con elevados ratios de productividad y no equiparable a la hallada en el alto Navia. Destaca, frente a lo observado en el caso de Pesoz, la importancia del sector comercial y hostelero en el concejo de Navia con un 25,21% del volumen de empleo, y donde resulta reseñable desde un punto de vista cuantitativo la primacía de las actividades comerciales, con una red de establecimientos significativamente mayor, más diversificada y más moderna que observada en el resto de municipios que conforma la Comarca. La mayor policromía gráfica de la representación visual de la distribución por sectores del empleo en el municipio de Navia, tiene una lectura real muy significativa, y se traduce en todo caso en la existencia de una economía más diversificada, más plural y más competitiva y en un territorio con menor grado de fragilidad ante el despoblamiento, al no interrelacionar el empleo con el fortalecimiento de un único sector económico. Como se señalaba anteriormente, en términos generales se puede hablar de la existencia de significativas diferencias entre los municipios situados en la rasa costera y los municipios del interior por lo que respecta a la variable analizada. Así, en los concejos de Villayón, Pesoz e Illano el porcentaje de población ocupada en el sector primario registra porcentajes superiores al 55%, alcanzando las cotas máximas el municipio de Villayón, donde 67 de cada 100 personas ocupadas lo están supuestamente en actividades ligadas al sector primario, en este caso agricultura y selvicultura.



Los tres municipios señalados constituyen junto con Boal, en el que el porcentaje de ocupación del sector primario sin alcanzar valores tan elevados como en el caso de los anteriores se sitúa muy próximo al 40%, los concejos con mayor fragilidad poblacional, aquellos en los que la huella de la emigración se ha dejado sentir en los últimos años con mayor sangría, los de menor renta per cápita, con mayores carencias de servicios e infraestructuras para el empleo y aquellos de menor densidad de población. Estos datos no deben sin embargo inducir a error; el mayor peso del sector primario en cuanto a efectivos de población ocupada no es sinónimo de mayor rentabilidad económica, dado que en concejos como Navia o Tapia de Casariego se observan unos porcentajes de ocupación en agricultura y pesca sustancialmente inferiores y unos mayores ratios de rentabilidad. En Navia, Coaña y Tapia de Casariego el volumen de población ocupada en el sector primario no alcanza porcentajes superiores al tercio del total de ocupación. Destaca la importancia del sector industrial y de la energía en Navia, donde cabe recordar que se asientan importantes empresas vinculadas con la construcción naval, la industria agroalimentaria y la industria papelera. También es relevante la importancia de la actividad industrial en cuanto a volumen de ocupación en el municipio de Grandas de Salime, quien pese a hallarse situado en el vértice sur del territorio de las cuencas del Navia y el Porcía, en el extremo más interior de la Comarca, no muestra una dependencia vinculante de las actividades del sector primario por lo que respecta al empleo, sino que cuenta con unos sectores secundario y terciario igualmente significativos. La importancia de este sector se liga aquí a las actividades de producción energética, con la existencia en su territorio municipal del embalse y la prensa hidráulica más significativa del río Navia. La construcción muestra los mayores porcentajes de empleo en los municipios costeros de Coaña, El Franco y Tapia de Casariego, donde se hallan importantes pymes del ramo, ya se trate de aquellas vinculada a obras públicas, construcción civil o afines (carpintería de madera, carpintería metálica, industria de la piedra, aislamientos para construcción..). De hecho se trata de los municipios junto con Navia, también en la rasa costera, donde las nuevas edificaciones (tanto de primera residencia como segunda residencia) han registrado un crecimiento exponencial en los últimos años, circunstancias ambas que no de forma azarosa se muestran correlacionadas.



Por lo que respecta al sector servicios, cabe señalar que destaca su importancia en cuanto al volumen de empleo que representa en los municipios de Coaña, Boal y Tapia de Casariego. Mientras que en Coaña ello se explica principalmente por la ubicación en este término municipal del hospital cabecera del área territorial VI, en Tapia de Casariego la importancia del sector servicios en el empleo no descansa sobre la prestación de servicios sanitarios, sino sobre el desarrollo de actividades de hostelería, comercio y turismo. Por su parte, en el caso de Boal la importancia del sector servicios en el empleo se debe a un efecto estadístico, ante el escaso desarrollo e importancia cuantitativa de los sectores industrial y de la construcción por lo que respecta al grado de ocupación, reposando en todo caso el peso de este sector terciario en la prestación de servicios personales y a la comunidad y no en el desarrollo de servicios empresariales ni comerciales. 3.1.c. Evolución temporal del empleo

La evolución del empleo en los últimos 15 años, tomando como referencia periodos bianuales muestra un descenso del porcentaje de empleo comarcal respecto al total regional desde el año 1990 al año 2005. Si en 1990 los 11.077 empleos de la Comarca representaban el 2,85% del volumen total de empleos de Asturias, en el año 2005 los empleos de la cuenca del Navia y el Porcía significan el 2,50% el empleo de la región. También el número absoluto de empleos de la Comarca ha disminuido en el periodo valorado, al pasar, como antes se señalaba de los 11.007 registrados en el año 1990 a los 10.044 empleos con los que se cerraba el ejercicio natural 2005. Por contra, a nivel autonómico, en el último año evaluado se registran 16.044 personas en activo más que el año 1990 con el que se inicia la serie, tras el retroceso de empleo que se muestra en los años 1995 y 2000.



Del análisis del periodo temporal valorado se desprende que es en el año 1998 cuanto la Comarca Navia-Porcía represente el más elevado porcentaje de trabajadores respecto al total regional, con un valor del 3,11%. Este dato coincide con un sustancial incremento en el empleo de los municipios costeros de Coaña, El Franco y Tapia de Casariego. Además, sería 1998 el año en el que el municipio de Villayón registraría un volumen de empleo muy superior a la media de periodo 1990-2005, con un incremento del 29,10% en el número de trabajadores respecto al año 1996. Así pues, el número total de empleos de la Comarca Navia-Porcía es inferior en la actualidad al registrado a principios de 1990, si bien se observa una tendencia hacia la recuperación del descenso en el nivel de empleo registrado en el periodo 1995-2000. La recuperación en el empleo coincide con la puesta en marcha en la Comarca de las ayudas a las inversiones productivas para el fomento del turismo rural y el artesanado y la diversificación de las actividades en el ámbito agrario y ámbitos afines contempladas en el Programa de Desarrollo Rural (Proder II). No obstante, el incremento del empleo en la Comarca sigue un ritmo más decelerado que el registrado en Asturias, dado que aunque se observa en los últimos años un incremento en el nivel de empleo, se observa de forma paralela un descenso en el porcentaje que dicho nivel de empleo representa en el conjunto de la región. Por lo que respecta a la evolución del empleo en el seno de la Comarca, se observa que los municipios más interiores van perdiendo importancia por lo que respecta a su contribución a la generación y mantenimiento del empleo a favor de los concejos costeros. Boal, Grandas de Salime, Illano, Pesoz, Villayón, han visto disminuir progresivamente a lo largo del periodo temporal valorado el porcentaje de empleo en relación al total comarcal, probablemente de forma correlativa al modo en que han visto disminuir sus efectivos poblacionales, y de modo inversamente proporcional a la importancia de los resultados del Programa de Desarrollo Rural (Proder II) gestionado por el Grupo de Desarrollo Rural CEDER Navia-Porcía en la Comarca a lo largo del periodo 2000-2006 El peso relativo del municipio de Navia por lo que respecta al volumen de empleo del territorio se incrementa de forma progresiva a lo largo del periodo evaluado, mostrando una tendencia ascendente, que va desde el 33,91% del empleo comarcal que representa en el año 1990 al 39,29% del año 2005, con una desviación típica respecto al porcentaje medio comarcal cada vez mayor.



Solo los municipios de Coaña, El Franco, Navia y Tapia de Casariego superan en la actualidad, con datos referidos al pasado ejercicio 2005, la media comarcal de empleo, que se situaría en función del número total de empleos en 1.223 personas.

Se podría establecer un paralelismo entre la situación del empleo en la Comarca, su trayectoria en los últimos quince años, la importancia o peso relativo en el conjunto de la región y los cambios demográficos registrados en el territorio en el mismo periodo. En la actualidad la Comarca de las Cuencas del Navia y el Porcía aporta un censo demográfico del 2,50% del total de Asturias y representa o contribuye al tiempo con un 2,50% del empleo en el conjunto de la Región. La tendencia descendente en el nivel de empleo en la Comarca en relación a la media regional se detiene o, al menos se estabiliza, a partir del año 2000 y coincidiendo con la aplicación en el territorio de las ayudas del

Proder II hasta alcanzar un volumen que representa el 2,50% del empleo regional; sin duda este hecho resulta más relevante si se considera al tiempo la variable poblacional, dado que la recuperación en el nivel de empleo se produce en una Comarca que ha visto reducir progresivamente sus efectivos poblacionales y donde la población activa se ha visto reducida considerablemente, ya que la pérdida poblacional afecta de una forma sesgada a los cohortes de población más joven, aquellos en edad laboral.



Una rápida lectura de los resultados de la aplicación del Proder II en la Comarca Navia-Porcía, arrojaría el éxito logrado por este programa en el mantenimiento del nivel de empleo, aun cuando no se invirtiese la tendencia despobladora que acecha el medio.

Todos estos hechos apuntan a la necesidad de articular en el territorio estrategias específicas e imaginativas capaces de revalorizar la importancia del sector primario, primando no sólo la agricultura y ganadería tradicional, sino fomentando al tiempo nuevas funciones dentro de ese sector (actividades forestales, producciones agroalimentarias de calidad, producciones agrícolas para usos no alimentarios…) y potenciando el desarrollo de otras perspectivas económicas de diversificación, fuera ya del ámbito estrictamente agrario, capaces de aprovechar los recursos insuficientemente utilizados del mundo rural de la Comarca (artesanías, turismo, energías alternativas, prestación de servicios…). Apuntan asimismo a la necesidad de atender la creciente demanda de infraestructuras, clásicas y virtuales, servicios y medios que requiere el mundo rural, al planteamiento de medidas racionales e innovadoras que supongan la mejora de la calidad de vida en el medio rural, la conservación y valorización del patrimonio rural y natural y el descenso demográfico del medio. 3.2. Paro registrado comarcal El número de desempleados en la Comarca Navia-Porcía alcanza, en el año 2005 la cifra de 929 personas, con lo que la tasa de paro representa el 8,47% de la población activa.

Los datos ponen de manifiesto un claro predominio del paro femenino, con 530 mujeres paradas (57% del total), cantidad notablemente superior a los 399 hombres que se encuentran en análoga situación. Las mayores diferencias existentes entre ambos sexos se registran en el caso de Illano, Tapia de Casariego y Navia, donde el número de paradas se aleja significativamente del de parados, llegando a duplicarlo. Illano constituye un municipio donde las actividades económicas descansan sobre la importancia del sector primario, con



escasísimas posibilidades de empleo por cuenta ajena en actividades propias del sector industrial (prácticamente inexistente), construcción y sector servicios. No resulta sorprendente por ello que las mujeres en edad activa que aún habitan el municipio tras la sangría migratoria que ha asolado a éste en las últimas décadas hallen limitaciones para su inserción en el mercado laboral, constando como desempleadas. Con todo, el número de mujeres desempleadas en el municipio de Illano asciende según cifras oficiales a 11 personas, con lo que no resulta significativo a nivel comarcal, aunque si requiera una lectura pormenorizada cuando se pretendan articular propuestas de desarrollo local adaptadas a la realidad territorial.

Navia y Tapia de Casariego registran un significativo sesgo de desempleo femenino, que afecta principalmente a las mujeres jóvenes y adultas jóvenes, con edades comprendidas entre los 20 y los 39 años. En estos grupos de edad la proporción de mujeres también es superior a la de hombres en la pirámide poblacional, hecho que se une en el caso de Navia a un predominio de las actividades ligadas al sector industrial y una mayor oferta de empleo por cuenta ajena dirigido a hombres.

Aun así, las tasas de paro en estos municipios costeros son inferiores a la media comarcal, dado que la no dependencia del empleo de las actividades ligadas al sector primario, la diversificación económica y el mayor nivel de formación favorecen, junto a otros factores, una mayor posibilidad de inserción por cuenta ajena y un creciente índice de autoempleo para la mujeres de estos concejos. Las dificultades para conciliar vida familiar y actividad laboral son asimismo muy superiores y mucho más limitantes para las mujeres de los municipios más ruralizados que aquellas que aquejan a las habitantes en Navia, Tapia de Casariego u otros municipios costeros, ante la ausencia de servicios y plataformas de apoyo social. Así pues, con independencia del número absoluto de personas paradas existente en cada municipio, se observa en general un predominio de mujeres desempleadas respecto a hombres, con las salvedades de Boal, Pesoz y Villayón, donde el paro masculino es superior, aún cuando la distribución por sexos de la población en estos municipios es muy similar. Ante la escasa oferta de empleo y bajas posibilidades de inserción laboral por cuenta ajena



existentes en estos municipios para la población femenina, parece que en buena medida el

desempleo femenino en estos municipios se halla encubierto. En el conjunto de la Comarca el desempleo femenino es superior al masculino en las edades comprendidas entre los 20 y los 49 años; por contra, por debajo de los 20 años y en edad superior a los 50, se registra un mayor desempleo en hombres que en mujeres. 3.3. Tasas de actividad y ocupación. Tasa de paro La tasa de actividad para ambos sexos representa en la Comarca el 45,19% de la población de más de 16 años. La tasa de ocupación (porcentaje de población ocupada respecto a la

población de cada grupo de edad) se sitúa en el año 2005 en un 41,37%. Este indicador, a nivel regional alcanzaba en ese momento el 43,20%, siendo a su vez inferior a la media española situada en el 52,10%. Un análisis de las diferencias existentes en el seno de la Comarca muestra que las mayores tasas de actividad y ocupación se registran en los municipios costeros de Navia y Tapia de Casariego, seguidos de Coaña y Grandas de Salime. Por contra, Pesoz, El Franco y Boal e Illano poseen tasas de actividad y ocupación inferiores a la media comarcal

La tasa de paro de la Comarca que, como ya se ha indicado, se sitúa en el 8,47% de la población activa, no es uniforme a lo largo y ancho de la geografía comarcal. .



La tasa más elevada se registra en los municipios interiores de Pesoz (16,92%) y Boal (10,92%). En el primero de los municipios señalados se observan valores que prácticamente duplican a la media comarcal, aún cuando en términos absolutos el número de personas desempleadas es poco significativo al tratarse de un municipio muy poco poblado y con una población muy envejecida. Mayor relevancia poseen los valores observados en el municipio de Boal, donde el número de desempleados respecto a la población ocupada alcanza porcentajes de 10,92%, con 76 personas desempleadas, equivalente al 8,18% del desempleo comarcal total. En el caso de Navia, si bien aporta el mayor volumen de desempleo de la Comarca, con un paro registrado de 339 personas, posee una de las tasas de paro más bajas del territorio e inferior a la media comarcal. La misma interpretación resulta extrapolable al caso de Tapia de Casariego, con un número absoluto de personas desempleadas que representan el 16,79% del total comarcal y, por contra, una tasa de paro inferior a los valores medios obtenidos en el conjunto del territorio. La única valoración del número de personas desempleadas registradas en los distintos municipios que conforman la Comarca podría inducir a error, dado que existen concejos -Pesoz, Illano y Boal- cuyo número de desempleados representa valores muy bajos respecto al total de la Comarca y que, por contra, registran una elevada tasa de paro. Frente a ello, existen municipios con un elevado número de personas desempleadas respecto a otros concejos de la Comarca y donde la tasa de paro se sitúa sin embargo por debajo de la media comarcal. No obstante los valores anteriores, se constata empíricamente que los registros oficiales recogen sólo una muestra sesgada de la realidad, dado que las fuentes consultadas apuntan a una mayor fiabilidad de las muestras en el caso de los municipios costeros, Navia, Coaña, El Franco y Tapia de Casariego, y una mayor omisión de positivos en el caso de aquellos territorios más alejados de los órganos de los servicios públicos de empleo. Como consecuencia en estos municipios (Villayón, Illano, Boal..) un número nada despreciable de personas que aparecen engrosando las listas de inactivos podrían en realidad estar desempleadas, sin inscripción en censos o registros al efecto y sin reflejo en las estadísticas oficiales. Cabe señalar por último que las oscilaciones en el nivel de empleo a lo largo de distintos intervalos temporales resultan más observable en el caso de los municipios con una economía más tercializada, dada la estacionalidad de la generación de empleo ligada al sector servicios registrada en determinadas épocas del año y la alta dependencia entre este sector y la inserción laboral registrada en el colectivo femenino.

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