caracterizaciÓn funcional del motivo ... - iib… · sistema de secreción tipo 3 (t3ss) de...
TRANSCRIPT
UNIVERSIDAD NACIONAL DE GENERAL SAN MARTÍN
Instituto de Investigaciones Biotecnológicas “Dr. Rodolfo A. Ugalde”
CARACTERIZACIÓN FUNCIONAL DEL MOTIVO CEST EN
LA PROTEÍNA TCLP1 DE TRYPANOSOMA CRUZI
Tesis para optar por el Título de Licenciado en Biotecnología de la Universidad Nacional de General San Martín.
Autor: Raúl Takada
Director: Carlos A. Buscaglia
Co-Director: Gabriel Briones
2017
Agradecimientos
Agradezco a Carlos (Dr. Carlos A. Buscaglia) por darme la oportunidad de trabajar en su
grupo de investigación, y formarme como profesional. Y por sobre todo la paciencia que tuvo
al trabajar juntos.
Al Dr. Gabriel Briones que ha colaborado con nosotros, siempre dispuesto a ayudarnos y
resolver nuestras dudas.
A toda mi familia que me ayudaron a terminar la carrera, a mi novia Silvia que siempre me
da fuerzas para seguir, y no abandonar.
A Mili que me enseñó que es un laboratorio y dar mis primeros pasos, me enseñó cómo
trabajar en la mesada y siempre me ayudó muchísimo.
A mis compañeros de mesadas que siempre estuvieron dispuestos a ayudarme: Vir,
Pablito, y Maite.
A todos los del laboratorio del piso 2 y también los del piso 1, que siempre les pedí ayuda y
me prestaron reactivos o me dieron una mano.
A todos mis amigos de la infancia, nuevos amigos, y todas las personas que me ayudaron a
terminar este trabajo.
ÍNDICE
Introducción Trypanosoma cruzi (T. cruzi) y enfermedad de Chagas 1 Tratamiento anti‐T.cruzi 2 Ciclo de vida de T.cruzi 2 El flagelo y el bolsillo flagelar de T. cruzi y tripanosomátidos 4 TCLP1 (Trypanosomatid CesT‐like Protein1) de T. cruzi 5 Sistema de secreción tipo 3 (T3SS) de enterobacterias 10
Hipótesis 15
Objetivos 16
Materiales y métodos 17 Soluciones generales y medios de cultivo 17 Técnicas de biología molecular 17
Preparación de Escherichia coli (E. coli) DH5αF' competentes 17 Transformación E. coli DH5αF' por el método de “shock térmico” 18 Minipreparación estándar de plásmidos 18 Minipreparación de plásmidos por precipitación con polietilenglicol 18
Reacción en cadena de la ADN polimerasa (PCR) 19 Electroforesis de ADN en geles de agarosa nativos 19 Digestión de ADN con enzimas de restricción y defosforilación 19 Cambio de buffer y purificación de fragmentos de ADN de geles de agarosa 19 Ligación de fragmentos de ADN 20 Técnicas de S. Typhimurium 20
Preparación y electroporación de S. Typhimurium LT2 electrocompetentes 20 Sistema λ-Red 20 Inducción del T3SS y precipitación de proteínas secretadas por método ácido 21 Técnicas analíticas para proteínas 21
Electroforesis de proteínas en geles de poliacrilamida desnaturalizante 21 Ensayos de Western-blot 21
Anticuerpos 22
Resultados 23 Generación de una S. Typhimurium genéticamente deficiente para el gen sicP 23 Evaluación genotípica de la bacteria mutante 28 Evaluación fenotípica de la bacteria mutante 30 Complementación de la cepa sicP KO con el motivo CEST de TCLP1 32
Discusión 36
ABREVIATURAS Y GLOSARIO
aa: Aminoácido. abs: Absorbancia. ADN: Ácido desoxirribonucleico. amp: Ampicilina. ARNm: Ácido ribonucleico mensajero. Bolsillo flagelar: superficie única que carece de microtúbulos, y región en donde se producen intercambios de nutrientes en el parásito. CAT: Cloranfenicol acetil transferasa. CEST: dominio del tipo CesT. CesT (Chaperone for E. Coli Secretion of Tir): Proteína pequeña con actividad chaperona sustrato-específica involucrada en la traslocación de efectores a través del T3SS. cm: Cloranfenicol. DMSO: Dimetilsulfóxido. DTT: Ditiotreitol. D.O.: Densidad óptica. EDTA: Ácido etilendiaminotetraacético. FLAG: Epitope basado en la secuencia DYKDDDK, usado para etiquetar proteínas. FLAGELO: estructura que posee nueve dobletes de microtúbulos periféricos y un par
central, además de un cuerpo basal, y responsable de la motilidad de los trypanosomátidos. HIS-tag: Epitope basado en la secuencia HHHHHH (His6), usado para etiquetar proteínas. HRP (Horseradish peroxidase): Peroxidasa de rábano picante. IgG: Inmunoglobulina G. IPTG: Isopropil-β-D-tiogalactopiranósido. kan: Kanamicina. kDa: KiloDalton. Kinetoplasto: estructura basófila que forma parte de la mitocondria y donde se concentra el DNA mitocondrial. Kpb: Kilo pares de bases. KO (knock out): Cepa mutada por deleción específica de un gen. LB: Medio de cultivo Luria-Bertani. MCS (multiple cloning site): Sitio múltiple de clonado. MS: Material suplementario. NES (Nuclear Exportation Signal): Señal de exportación nuclear. NLS (Nuclear Localization Signal): Señal de importación nuclear. ON (Over Night): Durante la noche. ORF (Open Reading Frame): Marco abierto de lectura. PAGE (polyacrylamide gel electrophoresis): Electroforesis en gel de poliacrilamida. Pb: Pares de bases. PBS: Buffer fosfato salino. PCR: (Polimerase Chain Reaction): Reacción en cadena de la polimerasa. PDZ: PSD95/Dlg1/zo-1, dominio presente en algunas proteínas de eucariotas. PIPES: piperazine-N,N′-bis(2-ethanesulfonic acid). RBS (Ribosome Binding Site): Sitio de unión al ribosoma. rpm: Revoluciones por minuto. SDS: Dodecil sulfato de sodio. SOB (Super Optimal Broth): Medio de cultivo bacteriano súper óptimo. SP (signal peptide): péptido señal de traslocación a vía secretoria en eucariotas. TBS: Tris buffer salino.
TCLP1 (Trypanosomatid CesT-like Protein 1): Proteína tipo CesT N°1 de tripanosomátidos. TEMED: N,N,N',N'-tetrametiletilendiamina. TPBS: PBS suplementado con Tween 20 al 0,05% (v/v). Tripanosomátidos: orden de protistas del filo Kinetoplastea que se caracterizan por tener un solo flagelo, todos sus miembros son exclusivamente parásitos. T3SS: Sistema de secreción tipo 3 de bacterias enteropatógenas. WB: Western-blot. WT (wild type): Cepa silvestre.
1
INTRODUCCIÓN
La Enfermedad de Chagas es una afección parasitaria causada por el protozoo flagelado
Trypanosoma cruzi, de gran impacto social y económico [1], para la cual no existen vacunas ni
drogas apropiadas para su tratamiento [2]. Esta enfermedad tiene una amplia distribución y
una elevada prevalencia en América Latina. Se estima que hay unas 8 millones de personas
infectadas y unas 120 millones más viviendo en zonas endémicas y por lo tanto, en riesgo de
contraer la infección [3]. Este parásito es usualmente transmitido hacia el hombre y otros
vertebrados susceptibles por insectos vectores hematófagos de la subfamilia Triatominae,
siendo el más frecuente en la Argentina Triatoma infestans [4, 5]. Tras la ingesta de sangre, el
insecto deposita los parásitos junto a sus deyecciones, los cuales invaden al hospedador
mamífero a través de microescoraciones en la piel o mucosas [6]. Por otra parte, la infección
puede ocurrir sin participación del insecto vector, ya sea por transfusión o trasplante con
sangre/tejidos contaminados con T. cruzi o de madre a hijo durante la preñez o al momento
del parto [7, 8]. Estudios epidemiológicos recientes indican que la transmisión congénita
ocurre en el 2 a 3% de los casos [9]. También se ha descripto la infección con T. cruzi por vía
oral, debido al consumo de bebidas y alimentos contaminados con el parásito y/o insectos
vectores y por manipulación de material contaminado [10].
La enfermedad de Chagas presenta en general tres fases: la fase aguda, la indeterminada y
la crónica. La fase aguda ocurre en un período corto (40 a 60 días) luego de la infección [11]. En
general, no se observan manifestaciones clínicas en esta etapa o si las hay no son distintivas, lo
cual dificulta el diagnóstico. Durante esta etapa se suele verificar altas parasitemia, por lo que
es frecuente encontrar parásitos en sangre periférica, sobre todo en niños y neonatos. Pasados
unos 2 meses del momento de la infección, el individuo ingresa en el período indeterminado,
que tampoco está asociado a síntomas evidentes, durante el cual el parásito se encuentra
localizado en distintos tejidos. Esta etapa se caracteriza por parasitemia muy baja o nula,
aunque la infección puede detectarse fácilmente por métodos serológicos [12]. Datos
epidemiológicos indican que años o décadas después de la infección original, un 30% de los
infectados progresan hacia una fase crónica sintomática, con un daño irreversible en el
corazón y/o el aparato digestivo y desórdenes en el sistema nervioso periférico, resultando en
unas 12000 muertes al año [13]. Estos síntomas pueden variar ampliamente dependiendo de
la(s) cepa(s) infectante(s) del parásito, el perfil inmuno-genético del individuo infectado, el
grado de exposición al vector, la vía de infección y el tiempo transcurrido desde el momento
de la infección.
2
Tratamiento anti-T. cruzi
Existen 2 drogas para el tratamiento de la Enfermedad de Chagas, el Nifurtimox y el
Benznidazol. Ambas son derivados nitroheterocíclicos que actúan inhibiendo la síntesis de
proteínas [14]. Cuando son administradas durante la fase aguda de la enfermedad, han
demostrado una eficiencia (cura parasitológica) del 50 al 70% de los pacientes, pero debido a
sus efectos adversos y a su limitada eficacia en las etapas más avanzadas de la enfermedad, la
utilización de estas drogas continúa siendo objeto de controversias [15]. Actualmente se
recomienda el tratamiento en todo paciente que se encuentre en la fase aguda, niños y
adolescentes en fase indeterminada, pacientes adultos en fase indeterminada o con
sintomatología incipiente y en casos de accidentes con material contaminado en laboratorio o
durante cirugías. Las reacciones adversas más frecuentes observadas en el uso del Nifurtimox
son: anorexia, pérdida de peso, alteraciones psíquicas, excitabilidad, insomnio,
manifestaciones digestivas tales como náusea, vómitos y ocasionalmente cólico intestinal y
diarrea [16]. En el caso del Benznidazol, las manifestaciones cutáneas son las más notorias
(hipersensibilidad, dermatitis con erupciones cutáneas), aunque también puede ocurrir edema
generalizado, fiebre, linfo-adenopatía, dolor articular y muscular. Esta droga también puede
provocar manifestaciones más severas como la depresión de la médula ósea, púrpura
trombocitopénica y agranulocitosis. Los estudios de toxicidad en animales de experimentación
tratados con Benznidazol evidenciaron neurotoxicidad, daño testicular, toxicidad ovárica y
efectos deletéreos en corazón, tejido mamario, adrenal, colon y esófago [17]. Peor aún, ambas
drogas exhibieron efectos mutagénicos significativos y se demostró en algunos estudios que
eran carcinogénicas o tumorigénicas [15]. En definitiva, la eficacia limitada, la imposibilidad de
ser aplicadas en ciertas poblaciones de pacientes (por ejemplo, embarazadas) y los efectos
colaterales de las drogas existentes indican que una de las prioridades en la investigación
aplicada en Enfermedad de Chagas debe ser la búsqueda de nuevas drogas y/o blancos
terapéuticos de intervención.
Ciclo de vida de T. cruzi
El ciclo de vida de T. cruzi alterna entre una amplia gama de vertebrados susceptibles,
incluyendo al humano, y una multiplicidad de insectos vectores (Fig.1), con 4 estadios de
desarrollo principales fácilmente diferenciables [11]. El epimastigote, con forma de huso con
flagelo visible, constituye la forma replicativa no infectiva del parásito y se lo encuentra en el
intestino medio del insecto. Los epimastigotes son alargados, el kinetoplasto
delante del núcleo central) y el flagelo queda libre hacia el extremo
se adhieren a la cutícula del epitelio rectal del insecto vector
trypomastigotes metacíclicos
alargada, con el kinetoplasto
se concentra el DNA mitocondrial
posterior del trypomastigote y permanece unido todo a lo largo del cuerpo del parásito hasta
quedar libre hacia el extremo anterior creando la im
Los trypomastigotes metacíclicos
aprovechando los mecanismos
Una vez en el citoplasma de la célula infectada,
caracterizan por su forma redondeada
no protruye fuera del bolsillo flagelar.
amastigotes se diferencian a
distintos de los trypomastigotes metacíclicos), los cuales representan la forma infectiva, no
replicativa en el torrente sanguíneo del mamífero
hospedador vertebrado y, si son captados durante la ingesta de sangre, pueden transmitir la
infección al insecto hematófago, completando así el ciclo de vida.
Los epimastigotes son alargados, el kinetoplasto
y el flagelo queda libre hacia el extremo anterior. Los epimastigotes
e adhieren a la cutícula del epitelio rectal del insecto vector, donde
clicos infectivos, no replicativos. Estos se caracterizan por su
alargada, con el kinetoplasto (estructura basófila que forma parte de la mitocondria y donde
el DNA mitocondrial) situado por detrás del núcleo. El flagelo emerge de
posterior del trypomastigote y permanece unido todo a lo largo del cuerpo del parásito hasta
a el extremo anterior creando la impresión de una “membrana ondulante
Los trypomastigotes metacíclicos son capaces de invadir una gran variedad de
aprovechando los mecanismos endógenos de reparación de membranas de las células blanco
vez en el citoplasma de la célula infectada, se diferencian a amastigote
forma redondeada y por presentar un flagelo extremadamente
uye fuera del bolsillo flagelar. Luego de una serie de divisiones binari
amastigotes se diferencian a trypomastigotes sanguíneos (bioquímica y morfológicamente
trypomastigotes metacíclicos), los cuales representan la forma infectiva, no
replicativa en el torrente sanguíneo del mamífero [12, 18]. Estos diseminan la in
hospedador vertebrado y, si son captados durante la ingesta de sangre, pueden transmitir la
infección al insecto hematófago, completando así el ciclo de vida.
3
(se encuentra por
Los epimastigotes
se diferencian a
. Estos se caracterizan por su forma
basófila que forma parte de la mitocondria y donde
El flagelo emerge de la parte
posterior del trypomastigote y permanece unido todo a lo largo del cuerpo del parásito hasta
de una “membrana ondulante”.
variedad de tipos celulares
de las células blanco.
amastigotes, los que se
flagelo extremadamente corto que
visiones binarias, los
sanguíneos (bioquímica y morfológicamente
trypomastigotes metacíclicos), los cuales representan la forma infectiva, no
. Estos diseminan la infección en el
hospedador vertebrado y, si son captados durante la ingesta de sangre, pueden transmitir la
4
Fig.1: Diagrama esquemático del ciclo de vida de T. cruzi. Adaptado de Center for Disease Control and
Prevention. (http://www.cdc.gov/parasites/chagas/biology.html).
El flagelo y el bolsillo flagelar de T. cruzi y tripanosomátidos
Una característica que define a T. cruzi y tripanosomátidos (grupo de protozoarios que
incluye a distintos Tripanosomas y Leishmanias, muchos de los cuales tienen gran relevancia
médica/veterinaria) en general, es la presencia de un flagelo único, crítico para su motilidad, el
cual emerge de una invaginación de la membrana plasmática llamada bolsillo flagelar [19]
(Fig.2). Este bolsillo flagelar no sólo representa una simple cavidad, sino que constituye un sitio
activo y estratégico del parásito, involucrado en diversos procesos como la polaridad celular, la
morfogénesis y la replicación. En particular, el bolsillo flagelar es el único sitio en el cual se
disrumpe la malla del citoesqueleto subcortical , que mantiene la forma y rigidez del parásito,
y por lo tanto es el único lugar por donde ocurren todos los mecanismos endo- y exocíticos,
incluyendo la importación de nutrientes, la exportación de glicoproteínas de cubierta y/o el
reciclado de anticuerpos potencialmente líticos unidos a sus moléculas de superficie [20]. Por
estos motivos, el bolsillo flagelar es una estructura clave para establecer las múltiples
interacciones del parásito con los hospedadores vertebrados e insectos. Hasta el momento,
sólo unas pocas proteínas asociadas al bolsillo flagelar han sido descriptas y caracterizadas. La
mayoría de ellas demostró ser esenciales, debido a que su pérdida o direccionamiento erróneo
llevaron a defectos morfológicos disruptivos de funciones celulares [21]. Además el hecho de
que la endocitosis está profundamente relacionada con la virulencia, diferenciación,
supervivencia en este grupo de parásitos, señala a esta estructura como un blanco terapéutico
particularmente valioso.
5
Fig.2: Imagen esquemática, en donde se detallan el bolsillo flagelar, kinetoplasto (estructura de ADN
mitocondrial), núcleo, microtúbulos y flagelo del epimastigote de T. cruzi. Adaptado de [19].
TCLP1 (Trypanosomatid CesT-like Protein1) de T. cruzi
Siguiendo una estrategia combinada de herramientas computacionales, bioquímicas y
genéticas identificamos recientemente en nuestro laboratorio una molécula en el proteoma
deducido de la cepa de referencia CL Brener, que estaría involucrada en la interacción con el
hospedador mamífero y/o el insecto vector [19]. Esta molécula, llamada TCLP1 (por
Trypanosomatid CesT‐like Protein1, TcCLB.510241.10), posee una estructura compleja, en la
que pueden delimitarse distintos motivos con anotación funcional y/o estructural, algunos de
ellos de características excepcionales (Fig.3A). Distintas aproximaciones experimentales nos
permitieron concluir que TCLP1 se expresa exclusivamente en los estadios replicativos de T.
cruzi (epimastigotes y amastigotes, Fig.1), localizándose en la fracción citoplasmática que
subyace al bolsillo flagelar [21]. Sugestivamente, epimastigotes sobre-expresando esta
molécula muestran afectada su capacidad endocítica y su crecimiento en condiciones de estrés
nutricional, por lo que postulamos que TCLP1 estaría involucrada en la captación de nutrientes
del medio extracelular para el desarrollo y crecimiento del parásito [22].
Entre los motivos con funcionalidad putativa de TCLP1, pudimos identificar 2 señales de
importación nuclear funcional (NLS), 1 señal de exportación nuclear (NES), 1 motivo de
homología de ligando a ubiquitina (UBL, [23]), 1 motivo llamado PDZ (por PSD95/Dlg1/zo-1)
que está usualmente involucrado en fenómenos de interacción proteína-proteína [24] y 1
putativo péptido señal (SP) en el extremo N-terminal, que fue posteriormente asignado a un
error de anotación [22] (Fig.3A). Más importante, también identificamos dentro de TCLP1 1
dominio al que denominamos 'CEST' (Fig.3A), ya que muestra homología marginal de
secuencia con proteínas del tipo CesT (Chaperone for E. coli secretion of Tir). Estas proteínas
configuran una familia de chaperonas pequeñas y sin actividad de binding y/o hidrólisis de
nucleótidos, que contribuyen a la secreción de factores de virulencia a través del sistema de
secreción tipo 3 (T3SS) de bacterias enteropatógenas [25, 26]. En particular, el motivo CEST de
TCLP1 muestra máxima identidad de secuencia (~38%) con proteínas CesT del grupo
procariota Chlamydiae/Verrucomicrobia, compuesto por patógenos intracelulares obligados
que expresan T3SS funcionales durante todo su ciclo infectivo [27, 28] (Fig.3B).
Distintos análisis filogenéticos nos permitieron identificar una familia de genes ortólogos
y/o parálogos a TCLP1 en distintas cepas de T. cruzi y en otros trypanosomátidos, pero no en
6
eucariontes por fuera de este grupo evolutivo (Fig.3C). A diferencia de las CesT bacterianas
que son pequeñas y muestran este único dominio funcional, las proteínas conteniendo
motivos CEST de trypanosomátidos, tal cual lo descripto para TCLP1, muestran estructuras
multi-modulares complejas (Fig.3C). Todas estas características nos permiten hipotetizar que la
familia de proteínas definidas por TCLP1 se originó por un evento de transferencia horizontal
de un gen codificante para una proteína tipo CesT de Chlamydiaceae a algún ancestro
evolutivo del grupo de los trypanosomátidos, y su posterior duplicación/diversificación dentro
del phylum (Fig.3C). La posible transferencia de material genético entre Chlamydias y
trypanosomátidos ya ha sido postulada en base a análisis genómicos comparativos [29]. Una
hipótesis alternativa para explicar el origen de los motivos CEST de trypanosomátidos sería
mediante convergencia evolutiva. En cualquier caso, análisis exhaustivos de bases de datos
sugieren la ausencia de otros componentes de la maquinaria T3SS de enterobacterias en el
genoma de los tripanosomátidos ([30], y datos sin publicar).
7
Fig.3: TCLP1 pertenece a una nueva familia de proteínas multi-dominio restringida a
trypanosomátidos. A) Predicciones in silico y motivos anotados identificados en TCLP1 de T. cruzi. El
asterisco indica el sitio de iniciación de la traducción identificado experimentalmente (Met 71), que
difiere del anotado en el genoma (Met 1). Abreviaciones: SP, péptido señal; UBL, motivo de homología a
ubiquitina; CEST, motivo tipo CesT; PDZ, dominio tipo PSD95/Dlg1/zo-1; NLS, señal de localización
nuclear; NES, señal de exportación nuclear. B) Alineamiento del motivo CEST de TCLP1 y proteínas CesT
bacterianas. Los residuos conservados están grisados y la identidad aminoacídica total (en %) se indica a
la derecha. C) Árbol filogenético de proteínas tipo CEST de trypanosomátidos (se indican los
8
identificadores de genes). La arquitectura de dominios de las proteínas CesT bacterianas y tipo CEST de
trypanosomátidos está indicada con código de colores. Adaptado de [22].
Para caracterizar en más detalle el motivo CEST de TCLP1, buscamos templados apropiados
en la base de estructuras tridimensionales PDB (Protein Data Bank) sobre los que realizar
experimentos de modelado. En ausencia de estructuras cristalinas para la CesT de Chlamydias,
seleccionamos dos templados de S. Typhimurium, llamados 3epuA y 1jyoD. La primera
corresponde a la estructura cristalina a una resolución de 2.5 Å de una chaperona tipo CesT,
mientras que la segunda corresponde a la estructura cristalográfica a una resolución de 1.9 Å
del complejo entre la chaperona tipo CesT llamada SicP y su efector específico SptP [31] (ver
debajo). A pesar de la baja identidad de secuencia (19% y 17%, respectivamente), los modelos
estructurales del motivo CEST de TCLP1 generados a partir de estos templados, mostraron un
significativo nivel de solapamiento, especialmente en la disposición de las α-hélices y hojas
plegadas β (Fig. 4A, 4B). La conservación de las estructuras α-hélices y hojas plegadas β es
clave para actuar como chaperona. Los valores QMEAN obtenidos fueron de 0.627 y 0.601,
respectivamente, los cuales son considerados aceptables [32]. Más importante, estos valores
son comparables al valor QMEAN obtenido al superponer ambas estructuras bacterianas (Fig.
4B), las cuales tampoco presentan altos valores de identidad de secuencia (no mostrado).
Todos estos resultados, en conjunto, sugieren una alta conservación estructural entre el
motivo CEST de TCLP1 y las proteínas CesT de origen bacteriano.
9
Fig.4: Conservación estructural entre el motivo CEST de TCLP1 y chaperonas tipo CesT de S.
Typhimurium. A) Las secuencias del motivo CEST derivado de TCLP1 y las secuencias completas de
3epuA y 1iyoD, fueron alineadas con el programa informático PROMALSD3D. Los motivos predichos en
donde se encontró consenso entre estas moléculas, son mostradas como bloques sólidos (hélices α) o
bloques vacíos negros (hojas β). Por otro lado se han predicho las estructuras secundarias de los motivo
con otro programa, Jpred3, en donde las hélices α se muestran como cajas sólidas y las hojas β como
cajas grises. B) Superposición de modelos del motivo CEST de TCLP1 con los templados 3epuA y 1jyoD.
Izquierda, modelo de CEST de TCLP1 basado en 3epuA (rojo) y 3epuA (verde). Centro, modelo de CEST
de TCLP1 basado en 1jyoD (rojo) y 1jyoD (azul). Derecha, modelo de 1jyoD basado en 3epuA (verde) y
3epuA (azul). Los valores QMEAN se indican debajo de cada panel [22].
10
Dada la similitud estructural encontrada entre la chaperona 1jyoD (SicP) de S. Typhimurium
y el motivo CEST de T. cruzi, así como la disponibilidad de conocimiento acerca de su modo de
acción e interactores, hemos optado por trabajar con dicha molécula. Además, debe
mencionarse que S. Typhimurium es un microorganismo muy utilizado en los laboratorios de
investigación biológica, y para el que se dispone de una variedad de herramientas bioquímicas,
moleculares y genéticas necesarias para realizar los diferentes ensayos propuestos en esta
Tesis. En nuestro caso deseamos generar y evaluar una cepa mutante por deleción del gen de
la chaperona sicP, a la cual utilizaremos como modelo experimental para testear la
complementación funcional mediada por el dominio CEST de TCLP1. A continuación se detallan
algunos aspectos del sistema de secreción T3SS de S. Typhimurium, relevantes para nuestro
trabajo.
Sistema de secreción tipo 3 (T3SS) de enterobacterias
Los T3SS de bacterias enteropatógenas son estructuras claves en la interacción con el
hospedador, capaces de exportar efectores hacia el interior de las células blanco. Una vez
traslocados, estos efectores se ocupan de remodelar ciertas estructuras y/o de cooptar ciertos
procesos celulares para favorecer la invasión, sobrevida y el crecimiento intracelular de la
bacteria, e incluso su eventual transmisión hacia otras células [33, 34] (Fig.5A). Los sistemas
T3SS están constituidos por aproximadamente 20 componentes cuya expresión se ve inducida
por ciertos estímulos ambientales (osmolaridad, pH, tensión de oxígeno, etc. [35] ) y que
conforman una maquinaria supramolecular compleja que se logró visualizar por experimentos
de microscopía electrónica de transmisión [36]. Esta consiste en anillos polipeptídicos en la
membrana interna y externa conectados por una estructura de tipo aguja o “inyectisoma” que
protruye por fuera de la bacteria, y que contiene un poro interno de ~20 Å. A través de este
poro son traslocados los efectores del citoplasma bacteriano al interior de la célula blanco, por
medio de la ayuda del translocón (Fig.5A) [36]. Además de las proteínas estructurales del
‘inyectisoma’ y de los efectores, los T3SS incluyen proteínas traslocadoras (SipB, SipC, SipD) y
proteínas adicionales que proveen energía al sistema (InvC), proteínas reguladoras (HilA, HilD)
o que asisten en la traslocación de los distintos efectores [37], tales como algunas chaperonas
ilustradas en la Fig.5. Todas estas moléculas se encuentran codificadas próximas entre sí en el
genoma de las distintas enterobacterias portadoras, en regiones denominadas “islas de
patogenia” [38], que se presume son transmitidas horizontalmente entre estas bacterias.
11
Fig.5: Estructuras y organización del T3SS de S. Typhimurium: A) Estructura y proteínas que constituyen
el aparato de secreción T3SS. B, C) Representación esquemática de la isla de patogenia SPI-1 en donde
se codifican las distintas proteínas del T3SS, coloreadas de acuerdo a que sean proteínas del aparato de
exportación, del complejo de la aguja, translocasas, reguladores, efectores y chaperonas. Adaptado de
[39].
En el caso de S. Typhimurium, la totalidad del T3SS está codificado en el centisoma 63 del
cromosoma bacteriano [40]. Los efectores secretados por S. Typhimurium provocan
alteraciones en las vías apoptóticas [41], la biogénesis , tráfico de vesículas [42], la
modificación post-traduccional de proteínas [43], la expresión genética y el citoesqueleto de la
célula blanco. Este último aspecto, la polimerización/ despolimerización regulada de
filamentos corticales de actina en la célula huésped, es esencial y recurrente para el proceso
de invasión de numerosos patógenos [37]. En el caso de S. Typhimurium, algunos de los
efectores del T3SS más importantes involucrados en el remodelado del citoesqueleto celular
12
son SipA y SipC los cuales actúan directamente, uniéndose a la actina y produciendo la rápida
enucleación y elongación de los filamentos.
Fig.6: Actividad intracelular de los efectores del T3SS: SipA y SipC se asocian directamente a los
filamentos de actina, y a la vez que están involucrados en reclutar vesículas exocíticas en el sitio de
entrada de la bacteria. SopE, SopE2, y SopB manipulan el citoesqueleto celular de manera indirecta,
activando las Rho GTPasas. SptP actúa de manera opuesta a SopE, SopE2 y SopB, inhibiendo la actividad
de Rho GTPasas, y permitiendo que la célula huésped retome la conformación inicial de su
citoesqueleto. Adaptado de [39].
Los efectores SopE y SopE2 (efectores no codificados en la isla de patogenecidad SPI-1),
mimetizan a GEF, un factor de intercambio de guanosina, lo que provocan la activación de las
Rho GTPasas. Al activarse las Rho GTPasas, se produce la activación de las N-WASP y WASP,
luego éstas activan al complejo nucleador Arp2/3, lo que promueve la polimerización de actina
(Fig.6). Por otro lado el efector SopB también activa las Rho GTPasas, y además promueve la
fisión de la membrana del huésped a través de la liberación de metabolitos de señalización
intermediarios [44] (Fig.6). Estos efectores en conjunto provocan la formación de ‘ruffles’ en la
membrana de la célula huésped, necesarios para la invasión de S. Typhimurium [39]. Una vez
verificada la invasión celular, la despolimerización de los filamentos de actina es necesaria para
la viabilidad de la célula huésped, y por ende para la sobrevida intracelular de la bacteria
(Fig.6). Este proceso compensatorio se verifica un tiempo después del contacto inicial bacteria-
célula (aproximadamente entre 1-3 horas) y es promovido mayoritariamente por el efector
13
SptP, una tirosina fosfatasa que inactiva las Rho GTPasas Rac-1 y Cdc42. Debido a sus
actividades antagónicas respecto de las de SopE, SptP conduce a la enucleación y
despolimerización de filamentos de actina e, indirectamente, al desarmado de los ‘ruffles’ de
membrana (Fig. 6). Inicialmente, S. Typhimurium inyecta ambos tipos de efectores en la célula
blanco en igual cantidad al momento del contacto inicial pero como SopE es ubiquitinilada y
rápidamente degradada en el proteosoma, la actividad ‘compensatoria’ de SptP se vuelve
dominante en etapas tardías de la infección (Fig. 7).
Fig. 7: Coordinación funcional entre SopE y SptP: Ambos efectores son translocados en cantidades
equivalentes y de manera simultánea en la célula huésped. SopE activa las Rho GTPasas Cdc42 y Rac
provocando la formación de ruffles de membrana para su internalización. En etapas más tardías, SopE
es ubiquitinilado y degradado por la maquinaria celular, pasando a ser ‘dominantes’ las actividades de
SptP (inactivación las Rho GTPasas, disolución de los ruffles de membrana, despolimerización de
filamentos de actina). Adaptado de [45].
Una característica distintiva de los efectores del T3SS es que están asociados, física y
funcionalmente, a chaperonas citoplasmáticas, entre ellas las proteínas del tipo CesT [46]
(Fig.5A), las cuales son necesarias para que los mismos sean translocados/secretados en la
célula blanco. A diferencia de otras chaperonas bien caracterizadas tipo GroEL o Hsp70 con un
amplio rango de sustratos, las chaperonas del tipo CesT muestran especificidad para un único
sustrato, con el cual establecen interacciones complejas e íntimas. En el caso de SptP, la
chaperona que cumple dicha función es SicP, un polipéptido ácido de 13 kDa, codificado
inmediatamente rio arriba de SptP y con el que constituye una única unidad transcripcional
[47] (Fig.5B). Se ha demostrado que la sobrevida de S. Typhimurium deficiente en el gen sicP es
muy baja, ya que como se mencionó SptP es importante para la reconstitución del
14
citoesqueleto y la membrana de la célula huésped. La co-estructura cristalográfica y otros
experimentos bioquímicos revelan que SicP se une a una región del extremo N-terminal de
SptP, manteniéndolo extendido y desplegado en el citoplasma de S. Typhimurium, en una
conformación apropiada para su traslocación [46]. Experimentos genéticos indicaron que
pérdida de función de la chaperona SicP por la inserción de una mutación en el gen sicP,
provoca una drástica reducción en los niveles citoplasmáticos (y por tanto también en la
fracción de secreción) de SptP [48]. Esta regulación se ejercería fundamentalmente a nivel
post-traduccional, incrementando la tasa de degradación de SptP ‘libre’ (no asociada a SicP).
Resultados más recientes indican que la disminución de SptP en ausencia de SicP también
podría estar regulada a nivel traduccional [48].
15
HIPÓTESIS
La identificación de un dominio 'bacteriano' en TCLP1 y en toda la familia de proteínas tipo
CEST de tripanosomátidos, que no poseen estructuras funcionalmente comparables al T3SS de
bacterias enteropatógenas [22], plantea interesantes preguntas evolutivas y mecanísticas
acerca del rol y funcionalidad de estas moléculas en T. cruzi y organismos relacionados. La
verificación de homología no sólo estructural sino también funcional entre el motivo CEST de
TCLP1 y las CesT bacterianas es fundamental para empezar a responder estas preguntas y, más
importante, podría abrir nuevas posibilidades para el desarrollo de terapias alternativas contra
estos patógenos.
16
OBJETIVOS
De acuerdo a los antecedentes expuestos previamente, durante la presente Tesina de
Licenciatura, lo que nos proponemos es evaluar la actividad chaperona del motivo CEST
presente en TCLP1 de T. cruzi, mediante ensayos de complementación funcional en un modelo
de S. Typhimurum.
Objetivos Específicos
- Generación de una cepa de S. Typhimurum genéticamente deficiente para
sicP.
- Evaluación genotípica y fenotípica de la cepa mutante.
- Evaluación fenotípica de la cepa mutante complementada con el motivo CesT
de TCLP1.
17
MATERIALES Y MÉTODOS
1) Soluciones generales y medios de cultivo
Azul de Coomassie: Coomassie R250 0,25% (p/v); metanol 30% (v/v); ácido acético 10% (v/v)
en agua.
Buffer TAE (1X): 40 mM tris; 20 mM ácido acético; 1 mM EDTA, PH 8,3.
Solución de transferencia: Tris 250 mM; glicina 25 mM; 20% (v/v) metanol, PH 8,3.
Solución de Rojo Ponceau: 0,1% (p/v); Rojo Ponceau; 5% (v/v) ácido acético.
PBS: 137 mM NaCl; 2,7 mM KCl; 10mM Na2HPO4; 2 mM KH2PO4; pH 7.
T-PBS: PBS; 0, 05 % (v/v) Tween 20.
PI: 25 mM Tris-HCl (pH8); 10 mM EDTA (pH8); 50 mM glucosa.
PII: 0,2 N NaOH; 1% (v/v) SDS.
PIII: 3 M acetato de potasio pH 4,8 o 3 M acetato de sodio pH 5,2.
TE: 10 mM Tris-HCl pH8; 1 mM EDTA.
Solución de siembra para muestras de ADN (LB6x): 0,025% (p/v) azul de bromofenol; 0,25%
(p/v) Xylen cyanol; 30 % (v/v) glicerol.
Solución de siembra para muestras de proteínas (CB5x): 50% (v/v) glicerol; 7,7% (p/v) DTT;
10% (p/v) SDS; 0,4 M Tris-HCl pH 6,8; 0,002% (p/v) azul de bromofenol.
Solución Inoue (1lt): 10.88 g MnCl2-4H2O; 2,2g CaCl2; 18,65 g KCl; 10 ml PIPES (0,5 M pH 6,7) a
un litro. Esterilizado por filtrado.
LB: se disuelven 10 g de triptona de caseína, 5 g de extracto de levadura y 5 g de NaCl en 1 l de
agua, y luego se autoclava a 121 °C por 20 minutos.
SOB: se disuelve triptona de caseína 20 g; extracto de levadura 5 g; NaCl 0,5 g, KCl 0,186 g en
950 ml de agua. Se ajusta el pH a 7 con una solución de NaOH 5 N. Se lleva a 1 litro. Se
autoclava a 121 °C por 20 minutos. Antes de utilizar se adicionan 5 ml de una solución MgCl2 2
M estéril.
2) Técnicas de biología molecular
Todas las técnicas de biología molecular que se detallan a continuación fueron realizadas
siguiendo los protocolos de Sambrook, J. & Russell, D. W. Molecular Cloning: A Laboratory
Manual. Detalles relevantes sobre los clonados de los distintos plásmidos/constructos
utilizados en este trabajo se indican en Resultados.
Preparación de Escherichia coli (E. coli) DH5αF' competentes
18
Se inocula un erlenmeyer conteniendo 250 ml de medio SOB respectivamente con 4 ml de un
cultivo de E. coli en fase estacionaria y se incuba a 18-22 °C con agitación moderada. Al
alcanzar una D.O. a 600 nm de 0.55, se lo transfiere a hielo por 10 minutos. Se cosechan las
células por centrifugación a 2500 x g durante 10 minutos a 4 °C, las que luego se resuspenden
suavemente en 80 ml de solución Inoue helada. Nuevamente se centrifugan a 2500 x g durante
10 minutos a 4 °C y se resuspende el pellet bacteriano suavemente en 20 ml de solución Inoue
helada. Se agrega 1,5 ml de DMSO, se divide la suspensión en alícuotas de 100 µl y se las
congela de manera rápida en nitrógeno líquido. Los tubos se almacenan a -70 °C hasta su
utilización.
Transformación E. coli DH5αF' por el método de “shock térmico”
Se incuba una alícuota de bacterias competentes con el ADN durante 15 minutos en hielo y
luego se las somete a un “shock térmico” a 42 °C durante 90 segundos. Rápidamente fueron
recuperadas a 37 °C en 1 ml de medio LB. Después de 45 minutos, fueron centrifugadas a baja
velocidad y plaqueadas en LB ágar conteniendo el antibiótico correspondiente.
Minipreparación estándar de plásmidos
A partir de 3 ml de cultivo de E. coli en fase estacionaria, se cosechan las bacterias por
centrifugación a 15000 x g durante 5 minutos. Se descarta el sobrenadante y se resuspende el
pellet bacteriano en 100 µl de solución PI. Se adicionan 200 µl de solución PII y se homogeniza
cuidadosamente, provocando la ruptura celular con la consiguiente liberación y
desnaturalización de ADN genómico y plasmídico. Luego de 5 minutos, se agregan 200 µl de la
solución PIII, se homogeniza cuidadosamente y se centrifuga a 16000 x g durante 10 minutos.
Se descarta el precipitado de ADN genómico y se recupera el sobrenadante, conteniendo el
ADN plasmídico. Se adicionan 500 µl de cloroformo: alcohol isoamilico (24:1 v/v), se
emulsionan las fases mediante fuerte agitación y se centrifuga a 16000 x g durante 1 minuto.
Se recupera la fase acuosa y se repite la extracción orgánica. Finalmente se precipita el ADN
plasmídico por el agregado de 500 µl de isopropanol seguido de centrifugación a 16000 x g por
15 minutos. El precipitado es lavado con 500 µl de etanol 70% (v/v) y secado a temperatura
ambiente. Finalmente, el ADN se resuspende en 32 µl de agua destilada.
Mini-preparación de plásmidos por precipitación con polietilenglicol
Similar al método estándar, este protocolo incluye un paso adicional que permite la obtención
de ADN plasmídico de la pureza necesaria para reacciones de secuenciación. Una vez
resuspendido el ADN plasmídico en 32 µl de agua tal cual se detalla arriba, se adicionan 8 µl de
19
una solución de NaCl 4 M y 40 µl de una solución de polietilenglicol-8000 13% (p/v)
previamente autoclavada. Se homogeniza y se incuba a -20 °C durante 20 minutos. Luego se
centrifuga a 16000 x g por 20 minutos a 4 °C y el precipitado se lava con 500 µl de etanol 70%
(v/v), se deja secar a temperatura ambiente y finalmente se resuspende en 20 µl de agua
destilada. Los plásmidos así purificados fueron cuantificados, diluidos a 200 ng/µl y enviados a
Macrogen Inc (Seul, Korea) para su secuenciación.
Reacción en cadena de la ADN polimerasa (PCR)
Las reacciones de PCR fueron llevadas a cabo con Taq ADN polimerasa (Promega), en las
soluciones provistas por los fabricantes con 100 - 10 ng de ADN como molde, 2 mM de MgCl2,
200 μM de dNTPs y 10 pmol de cada oligonucleótido (ver MS. 11) en un volumen final de 50 μl.
Las amplificaciones se realizaron de acuerdo al siguiente esquema:
Desnaturalización inicial: 5 minutos a 95 °C
35 ciclos:
Desnaturalización: 30 segundos a 95 °C
Hibridación de oligonucleótidos: 1 minuto a la temperatura indicada para cada reacción
Extensión: 1 minuto por cada Kpb a copiar a 72 °C
Extensión final: 10 minutos a 72 °C
Electroforesis de ADN en geles de agarosa nativos
Los geles de agarosa utilizados se prepararon en solución TAE 1X al 1% con 0,5 μg/ml de
bromuro de etidio. Las corridas electroforéticas se realizaron a 5-10 V/cm. Antes de la siembra
las muestras de ADN se adicionaron con el correspondiente volumen de solución de siembra
LB-6X. Los geles fueron visualizados en un transiluminador UV y fotografiados.
Digestión de ADN con enzimas de restricción y fosforilación
Se utilizaron 5 U de enzima por μg de ADN a digerir incubando en las condiciones sugeridos
por el fabricante, durante un mínimo de 3 horas. En el caso de plásmidos linealizados con una
sola enzima de restricción se los fosfataseó incubando con 1 U de SAP (shrimp alkaline
fosfatase, New England Biolabs) durante 1 h a 37 °C en el mismo buffer de restricción.
Cambio de buffer y purificación de fragmentos de ADN de geles de agarosa
Los plásmidos y/o fragmentos de ADN fueron cambiados de buffer y las bandas deseadas
fueron extraídas del gel manualmente y purificadas mediante los kits Ilustra GFXM-PCR DNA
and GEL BAND PURIFICATION KIT (GE), respectivamente.
20
Ligación de fragmentos de ADN
Las ligaciones se realizaron con una relación molar inserto: vector de 3:1 utilizando 50 ng de
vector en un volumen final de 20 μl con 100 U de T4 ADN ligasa (New England Biolabs). Las
incubaciones fueron a 4 °C durante toda la noche o alternativamente durante 4 horas a
temperatura ambiente. Para la ligación de productos de PCR al vector pGEM-T Easy (Promega)
se prosiguió de acuerdo a las recomendaciones del fabricante.
3) Técnicas de S. Typhimurium
Preparación y electroporación de S. Typhimurium LT2 electrocompetentes
Se inocularon 10ml de LB con colonias de S. Typhimurium del genotipo indicado, todas ellas
portando el vector pKD46 [49] (MS.1), a una concentración final de 0,2% (p/v) de L-arabinosa a
37 °C hasta llegar a una DO de 0,6 medido a 600nm. El cultivo se centrifugó a 10000 rpm a 4 °C
por 10 minutos, se descartó el sobrenadante, se lavó el pellet bacteriano con 25 ml de agua
mili-Q estéril y se lo resuspendió en 1 ml de agua estéril. Alícuotas de 50 ul de esta suspensión
se electroporaron con 200 ng del material genético de interés, en cubetas de 1 mm a 1,6 kV.
Inmediatamente después del pulso eléctrico, se agregó 1 ml de medio SOB y se dejó recuperar
las células por 1 hora, para luego plaquearlas en medio sólido con antibiótico.
Sistema λ-Red
Este método se basa en el sistema de recombinasas del bacteriófago λ, y fue optimizado (en E.
coli) de forma tal de permitir la recombinación homóloga de fragmentos lineales presentando
un mínimo de 40 pb de homología con la secuencia blanco (Fig.8). Se requieren 3 genes del
bacteriófago para la recombinación: gam, bet y exo. Gam inhibe las nucleasas RecBCD y
previene la degradación de los fragmentos lineales de ADN. Exo es una exonucleasa que
genera extremos 3´simple cadena a partir de los fragmentos lineales de ADN, y Bet cataliza la
alineación entre el fragmento insertado y la secuencia blanco [50]. Estos 3 genes están
clonados en el vector de expresión pKD46 (MS.1), bajo el promotor pAraBad inducible por
arabinosa. Este vector es replicativo en S. Typhimurium, posee resistencia a ampicilina y tiene
la cualidad de ser termosensible a 42 °C (MS.1).
21
Fig.8: Estrategia general de recombinación homóloga del sistema de λ-Red en S. Typhimurium. En este
ejemplo el cassette de resistencia a cloranfenicol está flanqueado por 40pb de homología al sitio blanco.
Las proteínas del sistema λ-Red (Gam, Bet, Exo) facilitan la recombinación homóloga del fragmento en el
cromosoma. En este caso las recombinantes se seleccionan en placas con cloranfenicol.
Inducción del T3SS y precipitación de proteínas secretadas por método ácido
Se inocularon las cepas indicadas de S. Typhimurium LT2 en medio LB 0,3M NaCl, y se las
creció a 37 °C y 50 rpm por 12 horas. Luego se hizo una dilución de 1:30 en medio LB NaCl
0,3M, y se las creció a 37 °C y 50 rpm hasta alcanzar una D.O. de 1, medido a 600nm.
Posteriormente se centrifugó las bacterias a 10000 rpm por 20 minutos [51]. El sobrenadante
se pasó por filtros de 0.45µm para retener bacterias o restos bacterianos, y luego se lo incubó
3 horas con el agregado de ácido tricloro acético a una concentración final de 10% (v/v) para la
precipitación de proteínas totales. Después de centrifugar el sobrenadante a 10000 rpm por 20
minutos a 4 °C, se lavó el pellet de proteínas en 1 ml de acetona, se lo dejó secar y finalmente
se lo resuspendió en 50 µl de una solución de 50 mM NaCl; 100 mM tris pH 8 en agua[52] .
4) Técnicas analíticas para proteínas
Electroforesis de proteínas en geles de poliacrilamida desnaturalizante (SDS-PAGE):
Las muestras se prepararon agregándoles los volúmenes correspondientes de solución de
siembra 5X y calentándolas por 5 minutos a 100 °C. Luego se sembraron en geles
desnaturalizantes discontinuos (0,1% SDS; 12-15% acrilamida) y se corrieron en solución de
Tris-Glicina-SD. Los marcadores de peso molecular utilizados cubrían los rangos de 17 a 200
kDa (PageRuler, ThermoFisher). Los geles fueron teñidos con azul de Coomassie [53] o
transferidos a membranas para ser ensayados por Western-blot.
Ensayos de Western-blot
Las proteínas presentes en los SDS-PAGE se transfirieron a membranas de nitrocelulosa
(Pierce) durante 2 horas a 100 V en solución de transferencia. La correcta transferencia se
verificó mediante la tinción de las proteínas con rojo Ponceau-S. Las membranas fueron
22
bloqueadas en solución de T-PBS con 5%(m/v) de leche en polvo descremada durante 1 hora a
temperatura ambiente en agitación e incubadas con el anticuerpo primario diluido en solución
de bloqueo por 12 horas a 4 °C. Posteriormente las membranas fueron lavadas tres veces con
T-PBS durante 10 minutos en agitación. Luego se las incubó con el anticuerpo secundario
diluido en solución de bloqueo durante 1 hora a temperatura ambiente con agitación. Las
membranas fueron lavadas tres veces con T-PBS. El revelado se llevó a cabo con el reactivo
para quimioluminiscencia Supersignal TM West Pico (Pierce) por exposición de placas
radiográficas (Agfa).
Anticuerpos
Anti-FLAG: Anticuerpo monoclonal de ratón (clon M2 Sigma) reactivo contra el epitope
“FLAG”. Anti-HIS: Anticuerpo monoclonal de ratón (Sigma) contra el epitope de poli-histidinas.
Anti-GroEl: suero policlonal de conejo inmunizado con la chaperona GroEl de Brucella sp,
expresado en E. coli y purificado. Estos anticuerpos primarios se usaron en ensayos de
Western-blot en dilución 1:4000, 1:3000 y 1:2000, respectivamente. Como anticuerpos
secundarios, se usaron un anti-IgG de ratón (Vector Labs) y un anti IgG de conejo (Sigma). En
ambos casos, los anticuerpos estaban realizados en cabra, purificados por afinidad y
conjugados a HRP. Las diluciones de uso fueron 1:5000 y 1:3000, respectivamente.
23
RESULTADOS
Como se mencionó en la introducción, la ausencia de expresión de la proteína SicP en S.
Typhimurium determina una reducción drástica de la estabilidad de SptP y la inhibición de su
translocación a la célula huésped a través del sistema T3SS. En la presente Tesina de
Licenciatura decidimos estudiar el fenotipo del mutante sicP utilizando técnicas moleculares,
bacteriológicas y bioquímicas sencillas. Más precisamente, se generó una cepa KO deficiente
para la expresión de SicP por recombinación homóloga de un alelo mutante. Esta cepa se
complementó con plásmidos expresando el gen wild type de sicP (como control positivo), el
motivo CEST de la proteína TCLP1, o con el mismo plásmido vacío (como control negativo).
Con todas estas cepas se realizaron ensayos de inducción del sistema T3SS in vitro y se
determinaron los niveles de un reportero SptP etiquetado molecularmente con un epitope
3xFLAG en el citosol y en el sobrenadante bacteriano.
Generación de una S. Typhimurium genéticamente deficiente para el gen sicP.
Ha sido demostrado que distintas cepas o aislamientos de S. Typhimurium muestran
distintas capacidades de secreción de SptP o de efectores del T3SS en general, lo que podría
estar relacionado a su virulencia diferencial [54]. Por esto, el primer paso que realizamos fue
seleccionar la cepa más adecuada de S. Typhimurium sobre las que realizar nuestros
estudios. Las cepas de S. Typhimurium de las que disponíamos en el laboratorio eran LT2 y
SL140. Para evaluar la secreción de SptP, generamos una construcción en donde el gen del
efector sptP se encuentra fusionado en su extremo C-terminal a un epitope 3xFLAG, en el
vector de expresión pSB3153 (MS.4). Para generar este constructo diseñamos un par de
oligonucleótidos (MS.11) que amplifican el Open Reading Frame (ORF) completo del efector
sptP (1632 pb). Dichos oligonucleótidos poseen sitios de restricción (HindIII y XbaI, MS.11), y
fueron utilizados para la amplificación del gen a partir de ADN genómico de S. Typhimurium, y
luego digeridos para permitir el clonado orientado del constructo en el vector pSB3153, que
provee fusión traduccional a un epitope 3xFLAG y resistencia a ampicilina.
Se verificó la correcta construcción e identidad de este vector (pSB3153-sptP::3xFLAG) por
ensayos de restricción con las mismas enzimas usadas para el clonado (HindIII y XbaI, datos no
mostrados) y secuenciación. Este plásmido pSB3153-sptP::3xFLAG lo utilizamos para
transformar por electroporación cepas de S. Typhimurium LT2 Y SL140, las cuales fueron
24
seleccionadas con ampicilina. Colonias de ambas cepas portando el vector pSB3153-
sptP::3xFLAG fueron usadas para ensayos de inducción del T3SS in vitro, fraccionamiento por
centrifugación de proteínas intracelulares, secretadas, y análisis del nivel de SptP en ambos
compartimientos por ensayos de Western-blot utilizando un anticuerpo monoclonal anti-
FLAG (materiales y métodos). Como se puede observar en la Fig.9, la cepa LT2 muestra una
más eficiente secreción de la proteína SptP al sobrenadante bacteriano y una consecuente
menor acumulación citoplasmática del mismo. Incluso pueden observarse unas bandas de
menor peso molecular aparente en la calle correspondiente al citoplasma de la cepa SL140,
las que podrían corresponder a productos de degradación parcial del reportero SptP. En base
a estos resultados elegimos la cepa de S. Typhimurium LT2 para realizar los ensayos de
inactivación del gen sicP.
Para poder obtener los resultados previamente mostrados, se realizaron distintos
ensayos hasta poner a punto la inducción óptima del sistema de secreción T3SS que
maximice la secreción de SptP a través de este sistema. En primer lugar utilizamos
solamente la secuencia señal mínima del efector sptP desde el residuo 1 (ATG) hasta el 100,
que según lo reportado es suficiente para poder unirse a SicP y ser translocado por el T3SS
[40, 46]. Con este efector reportero truncado, sin embargo nunca logramos obtener niveles
de secreción comparables a los obtenidos con el SptP completo (datos no mostrados).
Consecuentemente, utilizando el efector SptP completo se probaron distintas condiciones de
inducción del T3SS en S. Typhimurium LT2 (datos no mostrados). Las condiciones óptimas
resultaron ser: crecimiento a 37 ° C con 0,3 M de NaCl y a 50 rpm de rotación hasta que el
cultivo adquiriera una D.O. de 1 a 600 nm.
Fig.9: Acumulación del efector SptP::3xFLAG en citoplasma (pellets) y sobrenadante de las cepa LT2 y
SL144 de S. Typhimurium. Alícuotas (10 µl) del cultivo bacteriano y del precipitado de proteínas del
25
sobrenadante (10 µl, equivalentes a 10 ml del sobrenadante) se analizaron por SDS-PAGE seguido por
Western-blot utilizando anticuerpos anti-FLAG en una dilución 1:5000.
Una vez seleccionada la cepa LT2, lo siguiente fue la generación de una cepa genéticamente
deficiente en sicP. Para lograr este objetivo se generó primeramente una construcción
conteniendo al gen sicP interrumpido por un cassette conteniendo la enzima cloranfenicol acetil
transferasa (CAT), que confiere resistencia a cloranfenicol.
Para ello se realizó una reacción de PCR utilizando oligonucleótidos específicos SICP HIS FOR y
SICP REV (MS.11) que amplifican la secuencia completa del gen sicP (Fig.10A). Estos
oligonucleótidos poseen secuencias adicionales en sus extremos 5', útiles para el clonado y/o la
expresión del amplicón. Por ejemplo, el oligonucleótido forward posee un sitio de restricción
HindIII, un sitio de unión a ribosoma (RBS) que promueve su traducción, y un sitio iniciador de
la traducción (residuo de metionina) seguido por un tag de 6 residuos de histidinas en tándem
(HIS6x) y 20 pb de homología al extremo 5´del gen sicP. El oligonucleótido reverse, por otro lado,
posee un sitio de restricción EcoRI, y 20 pb de homología al extremo 3´del gen sicP, incluyendo
el sitio terminador de la traducción propio (codón TGA) de sicP. Todas estas secuencias
adicionales en el oligonucleótido forward fueron agregadas, ya que el mismo amplicón se utilizó
para inactivar el gen sicP, y también como control en la complementación funcional en el vector
pBBR1-MCS2 (ver debajo).
A
26
B
Fig.10: Amplificación de sicP. A) Diagrama de PCR realizado sobre el gen sicP para su amplificación,
utilizando los oligonucleótidos sicP HIS forward y sicP reverse (MS.11). B) Patrón de migración en
geles de agarosa 1% del amplicón con el peso esperado. La señal difusa que se observa debajo del
amplicón (~50 pb) podría corresponder a oligonucleótidos que no entraron en la reacción de PCR.
El amplicón obtenido presentó un tamaño aproximado de 500 pb, congruente con el
esperado (Fig.10B). El mismo fue clonado en el vector comercial pGEM-T Easy (MS.3) utilizando
protocolos rutinarios en el laboratorio y chequeada su identidad por análisis de restricción y
secuenciación (MS.12). Este plásmido (llamado pGEM-T Easy-sicP) fue digerido con la enzima
EcoRV, que presenta un sitio único de corte dentro de la secuencia sicP (Fig.10A).
Por otro lado se obtuvo el gen de la enzima CAT de Campylobacter spp, la cual posee su
propio promotor, por digestión del vector Pry-109 (MS.2) [55] con la enzima Smal. Los
productos de digestión fueron resueltos en geles de agarosa 1% y se procedió a la extracción y
purificación de la banda de ~900 pb (correspondiente al inserto cat) por resina de
intercambio iónico. Dado que tanto Smal como EcoRV dejan sitios romos y por lo tanto
compatibles, se ligó el inserto cat en el vector pGEM-T Easy-sicP digerido previamente. La
correcta construcción e identidad de este plásmido, llamado pGEM-T Easy-sicP::cat (MS.9) fueron
chequeadas por secuenciación utilizando los oligonucleótidos T7 y SP6, que hibridizan en las
regiones flanqueantes al MCS (múltiple cloning site) del vector pGEM-T Easy (MS.13). Los
resultados de la secuenciación muestran que el cassette cat se clonó correctamente, aunque en
sentido contrario al del gen sicP.
Para introducir el alelo mutante sicP::cat generado en la cepa S. Typhimurium LT2 y
maximizar las probabilidades de su recombinación con el alelo sicP wild type, se utilizó el
Sistema λ-Red [56]. Brevemente, la secuencia correspondiente a sicP::cat fue amplificada por
PCR utilizando los oligonucleótidos T7 y SP6 (Fig.11A). Se obtuvo un amplicón de 1300 pb,
27
tamaño esperado, ya que la secuencia sicP::cat es de 1217 pb, sumado a que los
oligonucleótidos amplifican unas 40 pb por fuera del MCS (Fig.11B).
A B
Fig.11: A)Patrón de migración en geles de agarosa 1% de la secuencia sicP::cat amplificada por PCR,
utilizando los oligonucleótidos T7 y SP6, y usando como templado el vector pGEM-T Easy-sicP::cat. B)
Detalle esquemático del producto de amplificación. En verde se indican las secuencias correspondientes
a sicP y en azul a cat.
Este producto de PCR sicP::cat, (200 ng totales) se introdujo por electroporación en S.
Typhimurium LT2 previamente transformadas con el vector pKD46 (MS.1), las que luego se
seleccionaron en medio sólido con cloranfenicol. Obtuvimos 54 colonias, que luego se
repicaron a otra placa de ágar con cloranfenicol la cual fue crecida a 42°C para eliminar el
vector termosensible pKD46. Para constatar la eliminación del vector pKD46, se crecieron
las 54 colonias en placas con ampicilina. Este paso, además, fue realizado para descartar que la
resistencia a cloranfenicol pudiese provenir de la contaminación con el templado utilizado para
la reacción de PCR (vector pGEM-T Easy-sicP::cat). De las 54 colonias plaqueadas, 32 mostraron
ser resistentes a ampicilina y fueron por tanto descartadas. Las colonias sensibles a ampicilina,
además resultaron negativas para un ensayo de PCR utilizando los oligonucleótidos T7 y SP6,
específicos del vector pGEM-T Easy (datos no mostrados). Un esquema de esta estrategia de
selección y chequeo de las colonias obtenidas se detalla en la Fig.12.
28
Fig.12: Esquema del proceso de selección y verificación de los clones mutantes para el gen sicP.
Para llegar a estos resultados hemos debido ajustar distintas condiciones experimentales
(ver arriba), e incluso cambiar nuestro protocolo de mutagénesis original. Como primer
abordaje, habíamos tratado de mutar el alelo del gen sicP utilizando un cassette de resistencia
a cloranfenicol, con apenas 30 pb de homología en sus extremos. Con el mismo, sin embargo,
realizamos 5 intentos, y en ninguno de ellos se han obtenido clones resistentes a cloranfenicol.
Posiblemente 30 pb no sean suficientes para forzar la recombinación homóloga en S.
Typhimurium; como sí ha sido reportado en E. coli [49].
Evaluación genotípica de la bacteria mutante
El genotipo de las posibles colonias mutantes de S. Typhimurium LT2 fue evaluado por
PCR. Para ello diseñamos 2 pares de oligonucleótidos; un primer par que hibridiza con
secuencias genómicas por fuera del ORF de sicP (y por tanto ausentes en el plásmido pGEM-T
Easy-sicP::cat) y un segundo par que hibridiza dentro del gen cat. Se realizaron distintas
reacciones de PCR sobre colonias WT (sensibles a Cm y amp) y posibles mutantes
(resistentes a Cm y sensibles a amp) utilizando combinaciones de estos oligonucleótidos
(Fig.13A).
29
La primera reacción de PCR, utilizando ambos oligonucleótidos complementarios a regiones
flanqueantes al ORF de sicP, mostró productos de amplificación de aproximadamente 1400 pb
para cada uno de los 4 mutantes analizadas y un amplicón de 500 pb para la WT. Estos
tamaños son concordantes con los predichos para el alelo sicP::cat y WT en el locus sicP,
respectivamente (Fig.13B). Cuando utilizamos los pares de oligonucleótidos; cat reverse + sicP
reverse; y sicP forward + cat forward, en cambio, sólo obtuvimos productos de amplificación, y
del tamaño esperado, en los clones mutantes (Fig.13B). Esto es congruente con lo esperado, ya
que los oligonucleótidos cat reverse y cat forward no poseen homología con la cepa WT.
En la combinación cat reverse y sicP reverse, observamos un amplicón de
aproximadamente 1000 pb, compatible con lo esperado, y en la combinación sicP forward +
cat forward observamos un amplicón de aproximadamente 1100 pb también como era de
esperarse (Fig.13B).
En el caso de la combinación sicP forward + cat forward, observamos además una banda
de tamaño levemente menor al esperado que está en todas las calles y que podría representar
un producto de reacción inespecífico.
El análisis integrado del tamaño diferencial y/o de la ausencia/presencia de amplicones en
las distintas PCRs nos permite concluir que los clones seleccionados son genotípicamente
deficientes para el gen sicP.
30
B
Fig.13: Análisis genotípico de las colonias mutantes de S. Typhimurium. A) Combinación de
oligonucleótidos para las distintas reacciones de PCR ensayadas y los correspondientes pesos
moleculares según el par utilizado y el genotipo. B) Reacción de PCR utilizando diferentes
combinaciones de oligonucleótidos sobre los distintos clones: Flecha negra y negra sólido
corresponden a los oligonucleótidos por fuera del gen sicP, forward sicP y reverse sicP. Flecha celeste
y flecha negra sólido, corresponden a los oligonucleótidos: reverse cat y reverse sicP. Flecha negra y
flecha celeste sólido, corresponden a los oligonucleótidos forward sicP y forward cat.
Evaluación fenotípica de la bacteria mutante
Para evaluar fenotípicamente a las colonias deficientes para SicP obtenidas realizamos
ensayos de Western-blot sobre fracciones de proteínas totales y secretadas luego de la
inducción del sistema T3SS, tal cual lo mostrado en la Fig.9. Para ello, seleccionamos un clon
KO y la cepa WT y las transformamos por electroporación con el vector pSB3153-sptP::3xFLAG.
La selección se hizo en placas de ágar con ampicilina y cloranfenicol para el clon KO y en
ampicilina para la cepa WT. Estas cepas luego fueron crecidas en paralelo en medio de
inducción de T3SS tal cual lo descripto anteriormente, no observándose un fenotipo de
crecimiento deficiente para la cepa KO en sicP (datos no mostrados).
Como podemos observar en la Fig. 14A, el clon KO es incapaz de secretar al efector SptP,
a diferencia del control WT, ya que no se observa una banda de un peso de 60 kDa
31
correspondiente al efector SptP en el sobrenadante. Esto se correlaciona con un aumento
aparente de los niveles de SptP en el citoplasma de la cepa KO en relación a la WT, lo que
podría interpretarse que al no ser secretado el efector, éste se acumula intracelularmente.
También se observan varias bandas de menor tamaño, en relación a la cepa WT, las que
podrían corresponder a especies parcialmente degradadas tal cual lo descripto [40].
Esas mismas fracciones fueron analizadas por Western-blot utilizando anticuerpos anti-
GroEl (Fig.14B), una chaperona de expresión constitutiva y muy prevalente en enterobacterias,
de localización exclusivamente citoplasmática [57]. Lamentablemente, la sensibilidad de este
anticuerpo mostró ser muy baja, lo que puede deberse a que estaba dirigido a la proteína
GroEl de Brucella spp y no de S. Typhimurium y sólo pueden observarse señales débiles y de
intensidad semejante en la fracción correspondiente a los pellets bacterianos. Este control, si
bien debe ser optimizado utilizando otro anticuerpo más apropiado, indicaría que las
diferencias de SptP extracelular entre las cepas WT y sicP KO no pueden atribuirse a
diferencias en la tasa de lisis celular espontánea (o inducida por el manipuleo posterior de las
muestras) durante el ensayo de inducción del T3SS.
Por último, para descartar que la deficiencia de la secreción del efector SptP no se debiera
a una alteración inespecífica del sistema T3SS en la bacteria mutante, llevamos a cabo la
cuantificación de secreción de otro efector del T3SS , SopE [58] (Fig.14C), en nuestras cepas
WT y KO. Para medir los niveles de secreción de SopE, utilizamos un protocolo equivalente al
descripto para SptP. Brevemente, transformamos cepas WT y KO con el efector SopE clonado
en el vector de expresión pWSK29 (que provee resistencia a ampicilina) en fase con el epitope
3xFLAG, previamente construido en el laboratorio del Dr. Gabriel Briones. Como muestra la
Fig.14C, en todos los casos se observa una banda de aproximadamente 35 KDa,
correspondiente al efector SopE, no observándose diferencias significativas en los niveles de
secreción entre las cepas WT y SicP KO. Esto es consistente con el hecho que el efector SopE
en vez de utilizar SicP utiliza otra chaperona (InvB) para ser secretado a través del T3SS. Un
SDS-PAGE de estas mismas muestras teñido con Coomassie-blue reveló un perfil de bandas
proteicas muy similar en el sobrenadante de las cepas WT y SicP KO (datos no mostrados), lo
que soporta aún más que la cepa SicP KO no muestra una deficiencia generalizada a nivel de
secreción T3SS-dependiente y/o independiente.
32
Fig.14: A) Ensayos de secreción del efector SptP en clones deficientes en el gen sicP y en cepas WT. En
las calles correspondientes a los sobrenadantes, se sembraron 10 µl de 50 µl totales de la resuspensión
de proteínas totales, del sobrenadante de 10 ml de cultivo. En las calles correspondientes a los pellets,
se sembraron 10 µl del cultivo bacteriano con una D.O. de 0,6 medido a 600 nm. B) Control de lisis
celular utilizando anticuerpos anti Gro-EL en una dilución 1:2000 C) Ensayos de secreción del efector
SopE en clones deficientes en el gen sicP (KO) y en cepas WT, mediante ensayos de Western-blot
utilizando anticuerpos anti-FLAG en una dilución 1:5000.
Complementación de la cepa sicP KO con el motivo CEST de TCLP1
Para evaluar la capacidad del motivo CEST de TCLP1 de complementar la función de SicP,
amplificamos el motivo CEST del gen TLCP1 utilizando los oligonucleótidos Tc-cesT HIS forward
y Tc-cesT reverse (MS.11), utilizando como templado ADN genómico de la cepa CL Brener de T.
cruzi. El oligonucleótido Tc-cesT HIS forward fue diseñado de forma tal que el producto de
amplificación (Fig.15A) tenga un sitio de unión a ribosoma (RBS) para promover su traducción,
una fusión de 6 histidinas en tándem en el extremo N-terminal que permite verificar y
cuantificar su expresión utilizando anticuerpos monoclonales anti-HIS (MS.11) y un codón
STOP inmediatamente después del motivo CEST definido en [22]. De manera análoga,
generamos un vector pBBR1-MCS2 conteniendo el gen sicP, para ser usado como control positivo
de complementación. Al igual que en el caso de CEST de TCLP1, el oligonucleótido sicP HIS forward
fue diseñado de forma tal que el producto de amplificación tenga un sitio de unión a ribosoma
(RBS) y una fusión de 6 histidinas en tándem en el extremo N-terminal. (Fig.15B).
33
Ambos amplicones (Fig.15C) fueron purificados y digeridos con las enzimas EcoRI y HindIII para
luego ligarlos en el vector de expresión pBBR1-MCS2 (MS.5), previamente digerido con las mismas
enzimas. Este vector posee resistencia a kanamicina, y se expresa constitutivamente en S.
Typhimurium. La correcta identidad de estos vectores (llamados pBBR1-cesT y pBBR1-sicP (MS.6,
7)) fue chequeada por restricción con las enzimas EcoRI y HindIII (datos no mostrados) y
secuenciación (MS.14, 15).
A C
B
Fig.15: Amplificación de los genes para la complementación. A y B) Diagrama del amplicón cesT (A) y
sicP (B) en donde se detalla la estructura molecular de los constructos y los sitios de restricción
relevantes para su construcción. C) Productos de amplificación del motivo CEST de TCLP1 y el gen sicP,
con los oligonucleótidos mencionados en texto. Los chorreados de bajo peso molecular observadas en
ambas reacciones se deban probablemente a oligonucleótidos que no entraron en reacción.
Para llevar a cabo los ensayos de la complementación funcional, se co-transformaron por
electroporación las cepas de S. Typhimurium WT y KO con los vectores
pSB3153::sptP::3xFLAG y con el vector de complementación pBBR1-cesT o pBBR1-sicP. Como
control adicional, co-transformamos los clones WT y KO con los vectores
pSB3153::sptP::3xFLAG y pBBR1-MCS2. Las cepas electroporadas, se seleccionaron con
ampicilina y kanamicina. Después de ensayos de inducción in vitro del T3SS, se analizaron
fracciones de bacterias totales y de sobrenadantes por Western-blot anti-FLAG.
Al evaluar los sobrenadantes, concluimos que el motivo CEST de TLCP1 restaura la
capacidad de secretar el efector SptP en las bacterias KO. Se observa una banda de
aproximadamente 60 kDa correspondiente al efector SptP (Fig.16A). Esta señal es de un nivel
de intensidad algo menor en comparación de la cepa KO complementada con sicP, que podría
correlacionar con el hecho que SicP es la chaperona original de S. Typhimurium. Como era de
esperarse en los sobrenadantes de las bacterias KO complementadas con el plásmido vacío no
se observa señal correspondiente a al efector, al igual que cuando se evaluó el fenotipo de la
bacteria mutante, lo que indicaría que el protocolo de secreción fue realizado correctamente y
34
que las diferencias de los niveles de SptP no puede explicarse por lisis celular espontánea o
debida a errores de manipuleo de las muestras.
En los pellets de las cepas KO analizados (Fig.16A), los niveles de expresión del efector son
similares al complementarlos con SicP y el motivo CEST de TCLP1, pero podemos observar
que cuando se complementa con el vector vacío, la intensidad de señal es menor respecto a
las otras 2 complementaciones y también en relación al pellet WT sin complementar. Esto
podría deberse a que a falta de la chaperona SicP, el efector SptP se esté degradando [48].
En los ensayos de los sobrenadantes de las cepas WT, se puede observar la banda de 60
KDa correspondiente al efector SptP, pero también se observan bandas de aproximadamente
40 kDa y 50 kDa en los sobrenadantes al complementarlo con el motivo CEST, y una banda de
40 kDa en el caso de la cepa WT complementada con el vector vacío, estas bandas podrían ser
productos de la degradación parcial del efector (Fig.16B). Interesantemente, en el caso de
complementar la cepa WT con el motivo CEST de TCLP1, la intensidad y cantidad de bandas
son mayores que en las observadas en la cepa WT sin complementar, lo cual nos hace pensar
que la chaperona SicP puede ser un limitante para la secreción del efector SptP. Algo similar
podemos observar si comparamos los sobrenadantes de la cepa WT y KO complementado con
el motivo CEST de TCLP1. Se observa una mayor señal en los sobrenadantes de las cepas WT a
comparación de la KO, esto puede ser debido a que la cepa KO sólo dispone del motivo CEST y
en cambio la cepa WT dispone de su propia chaperona SicP y además el motivo CEST, para
estabilizar y evitar la degradación del ARNm de sptP.
En los pellets WT complementado con el motivo CEST de TCLP1 se observa un mayor nivel
de expresión del efector en relación a la cepa sin complementar, ya que se observa una banda
de 60 KDa de mayor intensidad, y además de una banda adicional de 40 KDa. Esta banda
podría corresponder a productos de degradación intracelular debido a la sobreexpresión y
acumulación en el citoplasma bacteriano. Si comparamos los pellets de la cepa WT y KO
complementadas con el motivo CEST de TCLP1, observamos el mismo patrón, es decir que la
coexistencia de la chaperona SicP y CEST en la cepa WT incrementa la concentración del
efector dentro de la célula.
Para validar la correcta expresión del motivo CEST y de la chaperona SicP, llevamos a cabo
ensayos de Western-blot utilizando anticuerpos primarios anti-HIS, ya que estos constructos
poseen en su región N-terminal un marcador de 6 histidinas en tándem. Podemos observar la
correcta expresión de las chaperona SicP y del motivo CEST en las bacterias totales tanto al
complementarlos en las cepas KO y WT, ya que se visualizan bandas de similar intensidad de
aproximadamente de 25 KDa, correspondientes al motivo CEST y a la chaperona SicP (Fig.16C).
Por otro lado, como era de esperarse aquellas bacterias WT y KO que fueron complementadas
35
con el pBBR vacío, no muestran reactividad con el anticuerpo anti-HIS, lo cual verifica la la
especificidad de las señales obtenidas con este anticuerpo.
Para normalizar la carga, se sembraron 10 µl de cada muestra (células totales y
precipitación del sobrenadantes) en geles de poliacrilamida, y luego teñidas con Coomassie-
blue (Fig.16D). Podemos observar un perfil característico para los pellets, y otro perfil para los
sobrenadantes, más allá de la masa que se ha sembrado en cada calle. Sin embargo, se puede
observar que la cepa WT complementada con el vector pBBR1-sicP, posee un perfil de
secreción que difiere del resto de los clones. Esto, si bien no fue explorado en profundidad,
podría deberse a un control transcripcional/traduccional ejercido por sicP sobre SptP y algunos
otros mensajeros involucrados en el funcionamiento del T3SS, el cual no puede ser
recapitulado por el motivo CEST de TCLP1.
Fig.16: A) Ensayos de Western-blot sobre muestras de sobrenadantes y pellets del clon KO
transformados con cesT y sus respectivos controles. Se llevó a cabo utilizando anticuerpos primarios
anti-FLAG a una dilución 1:5000. pBBR= vector vacío; CesT: motivo CEST clonado en pBBR1-MCS2; SicP:
secuencia de la chaperona SicP clonado en el vector pBBR1-MCS2. B) Ensayos de Western-blot sobre
muestras de sobrenadantes y pellets del clon WT transformados con cesT y sus respectivos controles. C)
Ensayos de Western-blot utilizando anticuerpo anti-histidina para verificar la correcta expresión de los
constructos pBBR1-cesT y pBBR1-sicP. D) Sobrenadantes y pellets de los distintos clones, resueltos en
geles de poliacrilamida y teñidos con Coomassie-blue para normalizar las cargas en los ensayos de
Western-blot.
36
DISCUSIÓN
En esta Tesina demostramos que a pesar de la enorme divergencia de secuencias (Fig.3), el
motivo CEST de TCLP1 de T. cruzi es capaz de reemplazar funcionalmente a la chaperona SicP
de S. Typhimurium. Brevemente, utilizamos el Sistema λ-Red [56] para generar una cepa de S.
Typhimurium KO para el gen SicP por recombinación homóloga de un alelo mutante,
portando un marcador de resistencia a cloranfenicol. La confirmación de la correcta
obtención de la mutante sicP fue confirmada por PCR (Fig.13) indicando el reemplazo alélico
exitoso. Este genotipo fue confirmado mediante el estudio de la ausencia de expresión de la
proteína SptP (ver debajo). Si bien no realizamos una genotipificación exhaustiva de las
posibles cepas mutantes (por ejemplo, haciendo secuenciación de genoma completo),
experimentos posteriores de complementación con el vector pBBR-sicP mostraron una
reversión completa de los niveles de secreción de SptP, con lo cual puede descartarse la
posibilidad de un posible efecto ‘off-target’ durante la generación de la cepa sicP KO en este
fenotipo.
Para evaluar el fenotipo de esta mutante desarrollamos las herramientas necesarias y
optimizamos las condiciones para detectar los niveles de secreción de SptP in vitro (Figs. 9-
12). Al ser evaluada en ensayos de inducción y secreción de efectores vía T3SS, la cepa sicP KO
fue completamente incapaz de secretar al efector SptP al sobrenadante bacteriano tal cual lo
esperado. Esto se correlacionó con un aumento aparente de los niveles de acumulación
citoplasmática de SptP y la aparición de productos de degradación parcial (Fig.14),
coincidente con lo descripto [40]. Como se muestra en las Fig.14, la deficiencia en la
secreción de SptP de la cepa sicP KO es específica para el efector, y no se debe a una
alteración generalizada a nivel de secreción T3SS-dependiente y/o independiente. Más
importante, la falta de secreción de SptP también pudo ser revertida por la complementación
de la cepa sicP KO con el vector pBBR conteniendo el motivo CEST de TCLP1 de T. cruzi pero no
con el vector pBBR vacío. Las diferencias en los niveles de secreción de SptP entre las
bacterias complementadas con SicP o con el CEST de TCLP1 no puede atribuirse a diferencias
en los niveles de expresión de estas moléculas (Fig.16). Por el contrario, el perfil de secreción
atípico de la cepa WT complementada con el vector pBBR1-sicP (Fig.16) y distintas
evidencias reportadas en literatura [48, 59] sugieren que estas diferencias podrían deberse a
regulaciones transcripcionales/traduccionales ejercido por la proteína SicP, pero no
observables con la complementación con el motivo CEST de TCLP1, siendo esta una
característica diferencial entre ambas.
37
En definitiva, nuestros resultados en conjunto sugieren fuertemente que el motivo CEST
de TLCP1 de T. cruzi es capaz de complementar la función de SicP de S. Typhimurium para la
secreción de SptP dependiente del T3SS. Experimentos adicionales del laboratorio realizados
luego de la finalización de la parte experimental de esta Tesina refuerzan aún más esta
hipótesis, que muestran que el motivo CEST de TCLP1, además de complementar la función
de secreción de SptP a través del T3SS al sobrenadante bacteriano, es capaz de
complementar también su traslocación funcional del efector SptP al citosol de la célula
hospedadora.
Como se mencionó en la introducción, S. Typhimurium promueve modificaciones del
citoesqueleto de las células blanco induciendo la polimerización de actina y generando
estructuras de membrana denominadas ruffles, que favorecen la internalización de la bacteria
(Figs. 6 y 7). Este mecanismo inducible de entrada es el resultado de la acción coordinada de
distintos efectores del T3SS, que co-optan o manipulan distintos aspectos de la fisiología
celular. Mientras los efectores SopE, SopB y SopE2 provocan la activación de las Rho GTPasas,
la polimerización de actina y la fisión de la membrana del huésped a tiempos cortos [39], el
efector SptP promueve la reversión de todos estos procesos a tiempos más largos después del
contacto inicial bacteria-célula. Como se observa en la Fig.17, y utilizando un modelo de
células Vero en cultivo, el pico de rearreglos del citoesqueleto de actina de la célula huésped
inducido por S. Typhimurium WT ocurre 1 hora post-infección, revirtiendo a niveles similares a
los normales a las 3 horas. En ensayos de infección utilizando la cepa deficiente del gen sicP
generada en este trabajo, sin embargo, los eventos compensatorios tardíos no fueron
verificados (Fig.17). Esto indicaría que el efector SptP no es translocado al interior de las
células blanco, coincidente con la falta de secreción observada en nuestros ensayos in vitro
(Fig.16). Interesantemente la complementación de la sicP KO de S. Typhimurium con dominio
CesT de TCLP1 (o con la propia SicP, Fig.17) revirtió este fenotipo, observándose una cinética
de polimerización/despolimerización de filamentos de actina similar a la verificada en células
infectadas con bacterias WT.
38
Fig.17: Cinética de inducción/desensamblado de rearreglos en el citoesqueleto de actina de la célula
blanco durante la infección con S. Typhimurium. Infección de células Vero con diferentes clones de S.
Typhimurium expresando la proteína RFP en el citoplasma; ya sean WT, KO complementadas con el
motivo CEST, KO sin complementar y KO complementadas con la chaperona SicP. Las células fueron
fijadas a los tiempos post-infección indicados y procesadas para inmunofluorescencia indirecta usando
faloidina-Alexa 488 (señales verdes). Los preparados fueron también teñidos con DAPI (azul).
Desde un punto de vista evolutivo, estos resultados apoyan la hipótesis de que el dominio
CEST se adquirió en el linaje de los trypanosomátidos vía un evento de transferencia génica
horizontal a partir de un antecesor de las enterobacterias. Más aún, sugieren la existencia de
una presión de selección en trypanosomátidos tendiente a la conservación de la actividad
chaperona en el motivo CEST, la cual podría tener relevancia para la biología de estos
parásitos.
Teniendo en cuenta la localización en bolsillo flagelar y la función de TCLP1 en procesos
endo-exocíticos [22], podría postularse que la posible función tipo chaperona de esta molécula
estaría asociada al reciclado de algún tipo de receptor de superficie involucrado en la nutrición
39
del parásito [60, 61]. Alternativamente, esta actividad chaperona podría promover la
interacción de TCLP1 con alguna/s molécula/s que posibilitan su direccionamiento específico al
bolsillo flagelar (es decir no estar relacionada directamente con su aparente función en los
procesos de endo/exocitocis) o mediar la formación de agregados entre polipéptidos de la
propia TCLP1. En bacterias, las chaperonas del T3SS (como SicP) forman complejos con los
efectores proteicos (como SptP) destinados a ser inyectados al interior de la célula eucariota,
de manera de mantener a los efectores en un estado extendido o desplegado, un estado
competente para la secreción. Es interesante discutir que las chaperonas del T3SS son capaces
de distinguir entre diferentes efectores. Por ejemplo mientras SicP es especifica de SptP, la
chaperona InvB cumple un rol equivalente para la secreción del efector SopE, siendo esta
chaperona InvB incapaz de complementar la ausencia de SicP para la secreción de SptP como
observamos en esta tesina. Es interesante pensar que el dominio CEST pueda tener una
función más promiscua que SicP en cuanto al reconocimiento de efectores ya que aun
proviniendo de un organismo eucariota no relacionado es capaz de complementar una
chaperona efector-especifica como SicP. Estudios de secreción de SopE en mutantes InvB
complementados con CEST podrían responder esta cuestión.
La formación de agregados de alto peso molecular en chaperonas en general es un
fenómeno recurrente [62, 63] y evidencias preliminares del laboratorio indican la agregación
de TCLP1 in vivo en el parásito ([22], resultados sin publicar).
Experimentos futuros
Luego de los resultados obtenidos y la cantidad y variedad de técnicas aprendidas, queda
claro que logré cumplir con los objetivos de la Tesina. En el futuro, podría pensarse en ampliar
la caracterización funcional del motivo CEST de TCLP1 a otros motivos CEST de otras proteínas
de trypanosomátidos, tales como Leishmanias, Trypanosoma brucei [22] (Fig.3). Con todas las
herramientas ya generadas, la validación de estos dominios sólo implicaría el clonado del
motivo deseado en el vector pBBR y su evaluación en ensayos similares a los aquí descriptos.
Para optimizar esta validación, sería ideal obtener un anticuerpo monoclonal anti-SptP, para
observar los niveles de secreción de SptP endógenos de la bacteria. También sería
recomendable desarrollar anticuerpos específicos contra algún antígeno intracelular de S.
Typhimurium para verificar de manera más apropiada que los ensayos de secreción fueron
realizados correctamente, sin lisis celular en los productos de precipitación de proteínas del
sobrenadante.
40
Estos resultados también podrían contribuir al mejor entendimiento de los roles de TCLP1
in vivo, en T. cruzi. La hipótesis de que CesT actúe como chaperona en el parásito permite
sugerir la posibilidad de identificar a sus posibles interactores mediante criterios estructurales
(proteínas con dominios análogos cristalográficos al motivo de interacción con SicP de SptP).
Por último, y como aspecto más importante, nuestros resultados podrían abrir nuevas
posibilidades para el desarrollo de terapias alternativas contra T. cruzi y patógenos
relacionados.
41
MATERIAL SUPLEMENTARIO
MS.1: Vector pDK46; utilizado para favorecer la recombinación homóloga de fragmentos lineales
parcialmente homólogos. Tiene la particularidad de ser termosensible a 42°C, codifica los genes exo,
gam y bet, bajo el promotor pAraBAD inducible por arabinosa, los cuales facilitan la recombinación. Por
otro lado codifica la resistencia ampicilina como marcador de selección.
MS.2: Diagrama esquemático del vector pRY109, en la cual está clonado el cassette de resistencia
cloranfenicol. Utilizamos la enzima SmaI para digerir el vector y purificar el cassette. B= BamHI, Sm=
SmaI, K= KpnI, P= PstI, E= EcoRI, Pv= PvuII.
42
MS.3: Vector comercial pGEM-T Easy, este vector fue utilizado para clonar los productos de
amplificación de PCR del motivo CEST y el gen sicP. Por fuera del MCS posee sitios para poder ser
amplificada por diferentes oligonucleótidos tales como M13 forward, M13 reverse, SP6, T6 y entre
otros.
MS.4: Vector pSB3153; posee un marcador triple FLAG rio abajo del MCS como proteína de fusión,
resistencia a ampicilina, se expresa en S. Typhimurium constitutivamente, y es replicativo en la misma.
Se utilizó este vector para clonar el efector SptP en fase respecto al marcador triple FLAG, en los sitios
HindIII y XbaI.
43
MS.5: pBBR1-MCS2: Vector replicativo con expresión constitutiva en S. Typhimurium, fue utilizado para
la complementación funcional del motivo CEST y su control sicP. Ambos insertos fueron clonados por
digestión en los sitios EcoRI y HindIII. Este vector posee resistencia a kanamicina, y el MCS puede ser
amplificado con los oligonucleótidos M13 forward, M13 reverse, SP6, T6 y entre otros.
MS.6: pBBR1-sicP: Vector que fue utilizado para la complementación funcional de las cepas KO. Se clonó
el gen sicP en los sitios HindIII y EcoRI.
44
MS.7: pBBR1-cesT: Vector que fue utilizado para la complementación funcional de las cepas KO. Se
clonó el motivo CEST en los sitios HindIII y EcoRI.
MS.8: Vector comercial pGEM- T Easy en el cual se ligó el producto de amplificación sicP.
45
MS.9: Vector generado al cual llamamos pGEM-T Easy-sicP::cat. En este vector se encuentra clonado el
gen sicP, interrumpido por el cassette de resistencia a cloranfenicol. Utilizamos este vector como
templado para realizar las amplificaciones de PCR para obtener los fragmentos lineales, las cuales fueron
utilizadas para la inactivación del gen sicP por medio de la electroporación.
MS.10: Efector sptP clonado en pSB3153 en los sitios HindIII y XbaI.
46
Oligonucleótidos utilizados
Oligonucleótido Secuencia Sitio de
restricción Otros
Forward sptP GGCAAGCTTATGCTAAAGTATGAGGAGAG HindIII
Reverse sptP GGTCTAGAGCTTGCCGTCGTCATAAGCA XbaI
Primer forward sicP-flanqueantes AGACATTGTGTAACCAGATT
Primer reverse sicP-flanqueantes CTTTTGAAAACGAAGACAAC
Primer forward cat CTGCTCGGCGGTGTTCCTTT
Primer rev cat CAAACGGCATGATGCACTTG
Tc-cesT HIS forward CCAAGCTTCAAGAGGAAAGTAAAATGCATCATCATCATCATCATCGAGAAAATGCCATTGACACC HindIII
RBS+ HISx 6
Tc-cesT HIS reverse CGGAATTCTCATTGCGTATCTACAGTGTCCAGTAACTC EcoRI
sicP HIS forward CCAAGCTTCAAGAGGAAAGTAAAATGCATCATCATCATCATCATCATTTGCAAGCACACCAGGATATT HindIII
RBS+ HISx 6
sicP HIS reverse CCGAATTCTCATACTTTAGCATATTCCTGCAGTATGTT EcoRI
MS.11: Secuencias de oligonucleótidos utilizados y sus características
Muestras de ADN secuenciados
CAAGAGGAAAGTAAAATGCATCATCATCATCATCATTTGCAAGCACACCAGGATATTATCGCTAATATTGGTGAGAAATTGGGTTTACCGCTCAC
TTTTGACGACAACAATCAGTGCTTATTATTACTCGATAGCGATATTTTTACGTCTATTGAAGCTAAAGATGATATCTGGTTATTGAACGGTATGATT
ATACCGTTATCGCCTGTTTGTGGCGATTCTATCTGGCGGCAGATTATGGTGATTAATGGTGAACTGGCTGCGAATAATGAAGGTACGTTAGCGTA
TATTGATGCCGCAGAGACGTTGTTGCTTATACATGCAATTACCGATCTGACAAATACTTACCATATTATATCGCAGCTTGAGTCATTTGTGAATCA
GCAGGAAGCGCTCAAAAACATACTGCAGGAATATGCTAAAGTATGA
MS.12: Secuenciación del gen sicP clonado en el vector pGEM-T Easy con los oligonucleótido M13
forward. Amarillo: RBS, rojo: codón de inicio de traducción, verde: tag de histidinax6, negro: secuencia
de interés.
A
CAAGAGGAAAGTAAAATGCATCATCATCATCATCATTTGCAAGCACACCAGGATATTATCGCTAATATTGGTGAGAAATTGGGTTTACCGCTCACTTTTGACGACAACAATCAGTGCTTATTATTACTCGATAGCGATATTTTTACGTCTATTGAAGCTAAAGATGATGGGTACCTGCAGAATTCAGCTGCTCGGCGGTGTTCCTTTCCAAGTTAATTGCGTGATATAGATTGAAAAGTGGATAGATTTATGATATAGTGGATAGATTTATGATATAATGAGTTATCAACAAATCGGAATTTACGGAGGATAAATGATGCAATTCACAAAGATTGATATAAATAATTGGACACGAAAAGAGTATTTCGACCACTATTTTGGCAATACGCCCTGCACATATAGTATGACGGTAAAACTCGATATTTCTAAGTTGAAAAAGGATGGAAAAAAGTTATACCCAACTCTTTTATATGGAGTTACAACGATCATCAATCGACATGAAGAGTTCAGGACCGCATTAGATGAAAACGGACAGGTAGGCGTTTTTTCAGAAATGCTGCCTTGCTACACAGTTTTTCATAAGGAAACTGAAACCTTTTCGAGTATTTGGACTGAGTTTACAGCAGACTATACTGAGTTTCTTCAGAACTATCAAAAGGATATAGACGCTTTTGGTGAACGAATGGGAATGTCCGCAAAGCCTAATCCTCCGGAAAACACTTTCCCTGTTTCTATGATACCGTGGACAAGCTTTGAAGGCTTTAACTTAAATCTAAAAAAAGGATATGACTATCTACTGCCGATATTTACGTTTGGGAAGTATTATGAGGAGGGCGGAAAATACTATATTCCCTTATCGATTCAAGTGCATCATGCCGTTTGTGACGGCTTTCATGTTTGCCGTTTTTTGGATGAATTACAAGACTTGCTGAATAAATAAAATCCCAGTTTGTCGCACTGATAAAAACCCTTTAGGAACTAACGGGCGCAGCTGAATTCTGCAGCCGGGATCCCCACCCGGTTATTGAACGGTACGATTAAACCGTTATCGCCTGTTTGGGGCGATCCCATCTGGCGGCAGATTATGGGGATTAATGGGGAACTGGCTGCCAAAATCGACGGTCGTTACCGCAATTTGAGGCCATAAAAACGTTGTTGCTTAACAGGCAA
47
B
ATGGGGATCCCGGCTGCAGAATTCAGCTGCGCCCTTTAGTTCATAAAGGGTTTTTATCAGTGCGACAAACTGGGATTTTATTTATTCAGCAAGTCTTGTAATTCATCCAAAAAACGGCAAACATGAAAGCCGTCACAAACGGCATGATGCACTTGAATCGATAAGGGAATATAGTATTTTCCGCCCTCATCATAATACTTCCCAAACGTAAATATCGGCAGTAGATAGTCATATCCTTTTTTTAGATTTAAGTTAAAGCCTTCAAAGCTTGTCCACGGTATCATAGAAACAGGGAAAGTGTTTTCCGGAGGATTAGGCTTTGCGGACATTCCCATTCGTTCACCAAAAGCGTCTATATCCTTTTGATAGTTCTGAAGAAACTCAGTATAGTCTGCTGTAAACTCACTCCAAATACTCGAAAAGGTTTCAGTTTCCTTATGAACAACTGTGTAGCAAGGCAGCATTTCTGAAAAAACGCCTACCTGTCCGTTTTCATCTAATGCGGTCCTGAACTCTTCATGTCGATTGATGATCGTTGTAACTCCATATAAAAGAGTTGGGTATAACTTTTTTCCATCCTTTTTCAACTTAGAAATATCGAGTTTTACCGTCATACTATATGTGCAGGGCGTATTGCCAAAATAGTGGTCGAAATACTCTTTTCGGGGCCAATTATTTAAATCAATCCTTTGTGAATTGCATCATTTATCTTCCGTAAATTCCGAATTGGTTGAAAACTCATTTAAGTCTGTAATTCTAACCAATTTTAATTTTAAACCTAACCCCCTTTTTTGATTCAATGTG
MS.13: A) Secuenciación del constructo pGEM-T Easy-sicP::cat utilizando los oligonucleótidos M13
forward. B) Secuenciación del constructo pGEM-T Easy-sicP::cat utilizando los oligonucleótidos M13
reverse. Amarillo: RBS, rojo: codón de inicio de traducción, verde: tag de histidinax6, negro: secuencia
del gen sicP, violeta: secuencia del gen Acetil cloranfenicol transferasa de Campylobacter spp.
CAAGAGGAAAGTAAAATGCATCATCATCATCATCATCGAGAAAATGCCATTGACAACCTGGTTTGCATGGGGCGAGACCTTGGCCTGGAGAACACGCTAGAGTTTGATAATAACAATACTTGTGTCATAAGTGTTGACGGACAGTACAATTTAATAGTAACCTTTGATGCAGCAACAGAGCGGCTCTATATTTATTCTACCCTCATGACAAACATTCCACATGACCCGGTCTTACGACTGCGTGTCTACGAGTTTTTGATGGAGGGAGCATTACTGGGGCGTGAAATGTGTGGCGGTGGCGTTGGGGCTTCCATTAAGAATGACTTTATTCTTCTTTCTTCCAGCATATACTTGCCAACGAGTCTCCCCACAACCTTGAGCACTCTCGTACCCCAGTTTCTGTTTTCCCTTAATAAATGGCGAGAAAAACTGGGAGAGTTACTGAGC
MS.14: Secuenciación del constructo pBBR1-cesT utilizando el oligonucleótido T3. Amarillo: RBS, rojo:
codón de inicio de traducción, verde: tag de histidinax6, negro: secuencia de interés.
CAAGAGGAAAGTAAAATGCATCATCATCATCATCATTTGCAAGCACACCAGGATATTATCGCTAATATTGGTGAGAAATTGGGTTTACCGCTCAC
TTTTGACGACAACAATCAGTGCTTATTATTACTCGATAGCGATATTTTTACGTCTATTGAAGCTAAAGATGATATCTGGTTATTGAACGGTATGATT
ATACCGTTATCGCCTGTTTGTGGCGATTCTATCTGGCGGCAGATTATGGTGATTAATGGTGAACTGGCTGCGAATAATGAAGGTACGTTAGCGTA
TATTGATGCCGCAGAGACGTTGTTGCTTATACATGCAATTACCGATCTGACAAATACTTACCATATTATATCGCAGCTTGAGTCATTTGTGAATCA
GCAGGAAGCGCTCAAAAACATACTGCAGGAATATGCTAAAGTATGA
MS.15: Secuenciación del constructo pBBR1-sicP utilizando el oligonucleótido T3. Amarillo: RBS, rojo:
codón de inicio de traducción, verde: tag de histidinax6, negro: secuencia de interés.
48
BIBLIOGRAFÍA
1. Moncayo, A. and A.C. Silveira, Current epidemiological trends for Chagas disease in Latin America and future challenges in epidemiology, surveillance and health policy. Mem Inst Oswaldo Cruz, 2009. 104 Suppl 1: p. 17-30.
2. Paucar, R., E. Moreno-Viguri, and S. Perez-Silanes, Challenges in Chagas Disease Drug Discovery: A Review. Curr Med Chem, 2016. 23(28): p. 3154-3170.
3. Rassi, A., Jr., A. Rassi, and J.A. Marin-Neto, Chagas disease. Lancet, 2010. 375(9723): p. 1388-402.
4. Abrahan, L., D. Gorla, and S. Catala, Active dispersal of Triatoma infestans and other triatomines in the Argentinean arid Chaco before and after vector control interventions. J Vector Ecol, 2016. 41(1): p. 90-6.
5. Marti, G.A., et al., Prevalence and distribution of parasites and pathogens of triatominae from Argentina, with emphasis on Triatoma infestans and Triatoma virus TrV. J Invertebr Pathol, 2009. 102(3): p. 233-7.
6. Hemmige, V., H. Tanowitz, and A. Sethi, Trypanosoma cruzi infection: a review with emphasis on cutaneous manifestations. Int J Dermatol, 2012. 51(5): p. 501-8.
7. Angheben, A., et al., Chagas disease and transfusion medicine: a perspective from non‐endemic countries. Blood Transfus, 2015. 13(4): p. 540-50.
8. Kransdorf, E.P., P.C. Zakowski, and J.A. Kobashigawa, Chagas disease in solid organ and heart transplantation. Curr Opin Infect Dis, 2014. 27(5): p. 418-24.
9. Carlier, Y., et al., Congenital Chagas disease: an update. Mem Inst Oswaldo Cruz, 2015. 110(3): p. 363-8.
10. Toso, M.A., U.F. Vial, and N. Galanti, [Oral transmission of Chagas' disease]. Rev Med Chil, 2011. 139(2): p. 258-66.
11. Buscaglia, C., Trypanosoma cruzi clonal diversity and the epidemiology of Chagas' disease. Microbes and Infection, 2003. 5(5): p. 419-427.
12. WHO Report 1st Chagas BRP consultation 7-2007. 13. Costa de Albuquerque, M.A., et al., Mortality Trends for Neglected Tropical Diseases in
the State of Sergipe, Brazil, 1980‐2013. Infect Dis Poverty, 2017. 6(1): p. 20. 14. Salomon, C.J., First century of Chagas' disease: an overview on novel approaches to
nifurtimox and benzonidazole delivery systems. J Pharm Sci, 2012. 101(3): p. 888-94. 15. Rojo, G., et al., Toxic and therapeutic effects of Nifurtimox and Benznidazol on
Trypanosoma cruzi ex vivo infection of human placental chorionic villi explants. Acta Trop, 2014. 132: p. 112-8.
16. Murcia, L., et al., Nifurtimox chemotherapy: collateral effects in treated Trypanosoma cruzi infected patients. Rev Esp Quimioter, 2012. 25(1): p. 74-5.
17. Molina, I., et al., Toxic Profile of Benznidazole in Patients with Chronic Chagas Disease: Risk Factors and Comparison of the Product from Two Different Manufacturers. Antimicrob Agents Chemother, 2015. 59(10): p. 6125-31.
18. Rodrigues, J.C., J.L. Godinho, and W. de Souza, Biology of human pathogenic trypanosomatids: epidemiology, lifecycle and ultrastructure. Subcell Biochem, 2014. 74: p. 1-42.
19. Gull, K., Host‐parasite interactions and trypanosome morphogenesis: a flagellar pocketful of goodies. Curr Opin Microbiol, 2003. 6(4): p. 365-70.
20. Souza, W., Structural organization of Trypanosoma cruzi. Mem Inst Oswaldo Cruz, 2009. 104 Suppl 1: p. 89-100.
21. Field, M.C. and M. Carrington, The trypanosome flagellar pocket. Nat Rev Microbiol, 2009. 7(11): p. 775-86.
49
22. Durante, I.M., L. Camara Mde, and C.A. Buscaglia, A Novel Trypanosoma cruzi Protein Associated to the Flagellar Pocket of Replicative Stages and Involved in Parasite Growth. PLoS One, 2015. 10(6): p. e0130099.
23. Hung, A.Y. and M. Sheng, PDZ domains: structural modules for protein complex assembly. J Biol Chem, 2002. 277(8): p. 5699-702.
24. Creasey, E.A., et al., CesT is a bivalent enteropathogenic Escherichia coli chaperone required for translocation of both Tir and Map. Mol Microbiol, 2003. 47(1): p. 209-21.
25. Thomas, N.A., et al., CesT is a multi‐effector chaperone and recruitment factor required for the efficient type III secretion of both LEE‐ and non‐LEE‐encoded effectors of enteropathogenic Escherichia coli. Mol Microbiol, 2005. 57(6): p. 1762-79.
26. Cooper, C.A., et al., Structural and biochemical characterization of SrcA, a multi‐cargo type III secretion chaperone in Salmonella required for pathogenic association with a host. PLoS Pathog, 2010. 6(2): p. e1000751.
27. Fields, K.A., et al., Chlamydia trachomatis type III secretion: evidence for a functional apparatus during early‐cycle development. Mol Microbiol, 2003. 48(3): p. 671-83.
28. Beeckman, D.S., et al., Identification and characterization of a type III secretion system in Chlamydophila psittaci. Vet Res, 2008. 39(3): p. 27.
29. Gupta, R.S. and E. Griffiths, Chlamydiae‐specific proteins and indels: novel tools for studies. Trends Microbiol, 2006. 14(12): p. 527-35.
30. Silva, D.C., et al., Examining marginal sequence similarities between bacterial type III secretion system components and Trypanosoma cruzi surface proteins: horizontal gene transfer or convergent evolution? Front Genet, 2013. 4: p. 143.
31. Stebbins, C.E. and J.E. Galan, Maintenance of an unfolded polypeptide by a cognate chaperone in bacterial type III secretion. Nature, 2001. 414(6859): p. 77-81.
32. Benkert, P., M. Biasini, and T. Schwede, Toward the estimation of the absolute quality of individual protein structure models. Bioinformatics, 2011. 27(3): p. 343-50.
33. Du, J., et al., The type III secretion system apparatus determines the intracellular niche of bacterial pathogens. Proc Natl Acad Sci U S A, 2016. 113(17): p. 4794-9.
34. Hurley, D., et al., Salmonella‐host interactions ‐ modulation of the host innate immune system. Front Immunol, 2014. 5: p. 481.
35. Bajaj, V., et al., Co‐ordinate regulation of Salmonella typhimurium invasion genes by environmental and regulatory factors is mediated by control of hilA expression. Mol Microbiol, 1996. 22(4): p. 703-14.
36. Chatterjee, S., et al., Structure and biophysics of type III secretion in bacteria. Biochemistry, 2013. 52(15): p. 2508-17.
37. McGhie, E.J., et al., Salmonella takes control: effector‐driven manipulation of the host. Curr Opin Microbiol, 2009. 12(1): p. 117-24.
38. Coburn, B., et al., Salmonella enterica serovar Typhimurium pathogenicity island 2 is necessary for complete virulence in a mouse model of infectious enterocolitis. Infect Immun, 2005. 73(6): p. 3219-27.
39. Rosselin Manon, Abed Nadia, Namdari Fatémeh, Virlogeux-Payant Isabelle, Velge Philippe and Wiedemann Agnès, The Different Strategies Used by Salmonella to Invade Host Cells. INRA Centre de Tours, UR1282 Infectiologie Animale et Santé Publique, NouzillyIFR 136, Agents Transmissibles et Infectiologie, Nouzilly France.
40. Fu, Y. and J.E. Galan, Identification of a specific chaperone for SptP, a substrate of the centisome 63 type III secretion system of Salmonella typhimurium. J Bacteriol, 1998. 180(13): p. 3393-9.
41. Guiney, D.G., The role of host cell death in Salmonella infections. Curr Top Microbiol Immunol, 2005. 289: p. 131-50.
42. Humphreys, D., P.J. Hume, and V. Koronakis, The Salmonella effector SptP dephosphorylates host AAA+ ATPase VCP to promote development of its intracellular replicative niche. Cell Host Microbe, 2009. 5(3): p. 225-33.
50
43. Kubori, T. and J.E. Galan, Temporal regulation of salmonella virulence effector function by proteasome‐dependent protein degradation. Cell, 2003. 115(3): p. 333-42.
44. Patel, J.C. and J.E. Galan, Manipulation of the host actin cytoskeleton by Salmonella‐‐all in the name of entry. Curr Opin Microbiol, 2005. 8(1): p. 10-5.
45. Kubori, T. and H. Nagai, Bacterial effector‐involved temporal and spatial regulation by hijack of the host ubiquitin pathway. Front Microbiol, 2011. 2: p. 145.
46. C. Erec Stebbins & Jorge E. Galán, Maintenance of an unfolded polypeptide by a cognate chaperone in bacterial type III secretion. Letters to nature, 2001.48. Fu, Y. and J.E. Galan, Identification of a specific chaperone for SptP, a substrate of the centisome 63 type III secretion system of Salmonella typhimurium. J Bacteriol, 1998. 180(13): p. 3393-9.
47. Fu, Y. and J.E. Galan, Identification of a specific chaperone for SptP, a substrate of the centisome 63 type III secretion system of Salmonella typhimurium. J Bacteriol, 1998. 180(13): p. 3393-9.
48. Button, J.E. and J.E. Galan, Regulation of chaperone/effector complex synthesis in a bacterial type III secretion system. Mol Microbiol, 2011. 81(6): p. 1474-83.
49. Karlinsey, J.E., λ‐Red Genetic Engineering in Salmonella enterica serovar Typhimurium. 2007. 421: p. 199-209.
50. Sharan, S.K., et al., Recombineering: a homologous recombination‐based method of genetic engineering. Nat Protoc, 2009. 4(2): p. 206-23.
51. Cordero-Alba, M., J. Bernal-Bayard, and F. Ramos-Morales, SrfJ, a Salmonella type III secretion system effector regulated by PhoP, RcsB, and IolR. J Bacteriol, 2012. 194(16): p. 4226-36.
52. Caldwell, R.B. and C.T. Lattemann, Simple and reliable method to precipitate proteins from bacterial culture supernatant. Appl Environ Microbiol, 2004. 70(1): p. 610-2.
53. Lawrence, A.M. and H.U. Besir, Staining of proteins in gels with Coomassie G‐250 without organic solvent and acetic acid. J Vis Exp, 2009(30).
54. Swearingen, M.C., et al., Virulence of 32 Salmonella strains in mice. PLoS One, 2012. 7(4): p. e36043.
55. Yao, R., et al., Construction of new Campylobacter cloning vectors and a new mutational cat cassette. Gene, 1993. 130(1): p. 127-30.
56. Datsenko, K.A. and B.L. Wanner, One‐step inactivation of chromosomal genes in Escherichia coli K‐12 using PCR products. Proc Natl Acad Sci U S A, 2000. 97(12): p. 6640-5.
57. Zeilstra-Ryalls, J., O. Fayet, and C. Georgopoulos, The universally conserved GroE (Hsp60) chaperonins. Annu Rev Microbiol, 1991. 45: p. 301-25.
58. Boyle, E.C., N.F. Brown, and B.B. Finlay, Salmonella enterica serovar Typhimurium effectors SopB, SopE, SopE2 and SipA disrupt tight junction structure and function. Cell Microbiol, 2006. 8(12): p. 1946-57.
59. Feldman, M.F. and G.R. Cornelis, The multitalented type III chaperones: all you can do with 15 kDa. FEMS Microbiology Letters, 2003. 219(2): p. 151-158.
60. Seyfang, A., D. Mecke, and M. Duszenko, Degradation, Recycling, and Shedding ofTrypanosoma bruceiVariant Surface Glycoprotein. The Journal of Protozoology, 1990. 37(6): p. 546-552.
61. Gualdron-Lopez, M., et al., Ubiquitination of the glycosomal matrix protein receptor PEX5 in Trypanosoma brucei by PEX4 displays novel features. Biochim Biophys Acta, 2013. 1833(12): p. 3076-92.
62. Burgio, M.R., et al., Correlation between the chaperone‐like activity and aggregate size of alpha‐crystallin with increasing temperature. Biochem Biophys Res Commun, 2000. 268(2): p. 426-32.
51
63. Robyn A. LINDNER, Teresa M. TREWEEK and John A. C, The molecular chaperone a‐crystallin is in kinetic competition with aggregation to stabilize a monomeric molten‐globule form of a‐lactalbumin. Biochem. J. (2001) 354, 79–87.