boa

Upload: carmen-ochoa

Post on 08-Jan-2016

214 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Los bora

TRANSCRIPT

  • 110

    Los historiadores di-cen que a principios de la fiebre del caucho, al-rededor de 1886, haba entre 15,000 y 20,000 bora en el sureste de Colom-bia. Para 1926, debido a las enferme-dades y los abusos de los patrones del caucho, la poblacin haba disminuido mucho, y los archivos registran que en 1940 la poblacin se haba reducido a menos de mil personas. Unas trescien-tas cincuenta personas haban huido por el ro Caquet al Brasil. Casi al mis-mo tiempo un patrn trajo grupos de bora, huitoto y ocaina de Colombia al Per. Se establecieron a orillas de los ros Ampiyacu y Yaguasyacu. En 1995 uno de los jefes ancianos cont histo-rias tristes de su niez cuando muchos moran de viruela en todas las familias. Hoy en da, gracias a las vacunas y la medicina moderna, la poblacin bora est creciendo.

    El sistema de patrones los esclavi-z por muchos aos porque desco-nocan el valor del dinero y no po-dan manejar sus cuentas. Las escuelas bilinges les ayudaron a aprender ma-

    Poblacin: 3,000 - 4,000 en el Per y Colombia

    Autodenominacin: mamnaa gente

    Ubicacin: El departamento de Loreto. El mayor nmero vive a orillas de los ros Ampiyacu y Yaguasyacu, parte del sistema fluvial del Amazonas. Otros viven a orillas del ro Putumayo que es el lmite con Colombia, y a orillas de los ros Igara Paran y Caquet en Colombia.

    temticas, y a leer y escribir. Actual-mente comercian libremente sus pro-ductos y han establecido vnculos con los mestizos.

    En el pasado, los bora vi-van en grandes casas co-munales. Un clan ocupaba

    una casa con su jefe. Las casas esta-ban separadas por una distancia de por lo menos media hora de camino. Construan plataformas suficientemen-te grandes para que toda la familia pu-diera dormir sobre esteras, a una altura aproximada de un metro ochenta cen-tmetros del suelo. El jefe y su familia in-mediata ocupaban el fondo de la casa, que era considerado el lugar de ho-nor. Todas las casas comunales tenan un manguar que el jefe utilizaba para mandar mensajes a otras comunidades que quedaban a una distancia de cua-tro o cinco horas de camino. Aunque la forma de vida de los bora ha cambiado notablemente y muchos viven en casas unifamiliares, los manguars han sub-sistido y todava son un importante me-dio de comunicacin.

    Bora (familia lingstica: huitoto)

  • 111

    Tradicionalmente, sus creen-cias se basan en el mundo de los espritus. Hacan ceremo-

    nias de danza para apaciguar a los es-pritus; si no los apaciguaban, podan causar enfermedades y peleas entre la gente. El folklore bora dice que el dios maligno del trueno utiliz el rayo para partir rboles de arriba aba-jo y plant la vida de un nuevo animal en el suelo. De esa manera se crearon los animales salvajes y peligrosos de la selva. Se crea que muchos anima-les, especialmente el jaguar, eran dio-ses menores; por eso no los mataban ni coman su carne. Pero ahora algu-nos matan y comen la carne de jaguar. Tampoco se coma carne de venado, pero ahora no es as. Las mujeres em-barazadas no comen carne de anima-les grandes, especialmente la del tapir, para evitar que el nio crezca demasia-do y no pueda nacer.

    La yuca es parte esencial de la alimentacin y la utili-zan tambin para hacer una

    bebida que los loretanos lla-man cahua na y un tipo de pan llamado casabe. Tam-bin cultivan pias y plta-nos y muchas otras frutas. La caza y la pesca les pro-veen carne. La venta de ma-dera y de artesana, como hamacas y jicras, es la fuen-te de dinero en efec-tivo.

    Los primeros con tac tos del ILV con los bora se remontan a 1952,

    cuando los lingistas asigna-dos comenzaron a aprender el bora y participaron en el pro-grama de educacin bilinge y la capacitacin de maestros bilinges, la publicacin de materiales para las escuelas y otros programas de desarrollo. Eso fue posible gracias a la co-operacin de los bora.

    En 1982 se termin y se public el Nuevo Testamento en bora, lo cual ayud a establecer iglesias en va-rias comunidades dirigidas por pastores bora. Entre otras publicaciones que se usan en las escuelas secundarias estn la gramtica bora y el diccionario bora-castellano. Sin embargo, por la influen-cia de los mestizos y de otros grupos, los maestros bilinges, muy a su pesar, se han visto en la necesidad de ensear en castellano.

    padre cnimadre tsju tierra uj agua njpacyo fuego cjuwa sol nuhba luna pcejpi nuhba casa ja hombre wajpimujer wallenio tsmene

    Estoy viniendo.O tsjuc.

    1982

    diccionario

    Bora