PI|\IIX?UCADOEL MUNDO DE LO EXTRAO,INSOLITO Y MISTEB,IOSO

Publicado por Editorial Delta, S.A.-Barcelonay comercializado en exclusiva porDistribuidora Olimpia, S.A. - Barcelona

Vol. lV - Fasc. 40

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Brian lnnesPeter BrookesmithClare Byatt

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MISTERI()S DE EGIPTOLa sobrecogedora grandeza de las

pirmides suscita todava las dos eternaspreguntas: cmo y por qu fueron

construidas?

ESTIGMATIZAD()SCul es el mecanismo que permite a losestigmatizados

"rvivir" la pasin deCristo?

Asesor para la edicin espaola: Julio Peradejordi

Realizacin grfica:Luis F. Balaguer, con la ayuda de C. Esteruelas

llustracin: Orbis. Atlas y agenciasBedaccin y administracin:

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LO INEXPLICADO, EL MUNDO DE LO EXTRAO, INSLITO YMISTERIOSO se publica en forma de 120 fascculos de apari-cin semanal, encuadernables en diez volmenes. Cada fasccu-lo consta de 20 pginas interiores y sus correspondientes cubier-tas. Con el fascculo que completa cada uno de los diez volme-nes de que se compone la obra, se pondrn a la venta las tapaspara su encuadernacin. Adems, coleccionando la tercera ycuarta pginas de cubierta, se obtendr un interesante dossiersobre |os MAESTROS DE LO INSLITO.

TECN()L()GN OVruIUn ingeniero aficionado residente enAntequera (Mlaga, Espaa) patent, en1978, una mquina-OVNI para viajar porel espacio.

SALTOS EN EL TIEMPODos mujeres que veraneaban cerca deDieppe (Normanda) en 1951, oyeron contoda claridad el ruido inequvoco delataque que los Aliados haban lanzadocontra aquella localidad... en 1942.

EXPL()S!N DE TUNGUSKALa enorme explosin que en 1908 devast una amplia zona

de Siberia, fue una explosin nuclear... antes de la eranuclear?

Foio cubrea: Biblioteca de Catalunya-Barceiona

fascculo

ffiE- -

@ @ffiffiffiffi ffiBBffi#ffiffiffi#ffiru

veneioales PIo cuando,los portavocs mili-tare.s' cornentn,el:,fenmeno, siernpre ex-

. c-luyen: la'posibilidad' de ique seanaeronaves

. cerrectamenfe observada, aeronaves-con posi-bilidades- .extraordinarias; que conviene

. oeultari a loq,o6 6tr' Oblico. ' l,' tas pbservaciones 'de OYNI, en rtiemp-o

. muf,,alliguos pudieron :haber sido, ferlrnenos:4at_urIes que desgqceton ll ateaoriza,ron a. geite,melos' degarolf ada' :teicamente' quer io.tfo,s:, f_enmeno como parelios, cometas;,.'Ir}eleoritosr:nubes fosforgscen&s; bolx de,fue.,$1,esp!j.i-smos';e&',Peio.:existqlmuciasprue-.!as q,udapolan la te oda'de qug,l4 rnoderna ola, dg.platillos:vqlafltes ptede ser, co-secuencia.,de u{ factor uevo: mquinas, volantes cons:'tryldas.aqul , e-n la.Tierto: ,

Las primeras observaciones mo:demas deOVNIS fueron las .aeronavesl misteriosas>>,que miles de personas,vieron en l-os'Estados'Unidos'entre novimbfe de 1896,y mayo de1897,' F.n aquella. pgca;,los inventores euro-'pecs,estaban lnucho rms,adelantados que sus.colegas noiteameliqaqs en.materia de experi-trnentain co:rr e{onave; perO ni lOs franCses'ihs

alemaueg haban lgrado disear un ae-:roiav.que pudiera lace mucho rn4s. que flo-'tar,inlilmente .en el aie, El,p-rimer d.iiigible

. e7: C,alifgraia Arrow, de Tltmq Baldwin-lno' vol :hasta'1904;, En-conseeencia- las,mis.teriosas aeronaves de 1896 y 1897 parecan en:tonces tan inexplicables y::terribles como-'losOVNIS en la actualidad..l .' , '' . equlta significalivo,que la, aeronayes m.is.Jeiosa,,{ueran ernp.re silndricas o et forma

Las predecesorasdg'los objeios volantes,no'' :'identificados de hoy.fueron misteriosas eronaves queaparecan con gran frecuencia a fines del,siglo xrx,'Hay,,:que sugiere que esas naves

-)r algunos OVNIS lposteriores...." eran creaciones de pioneros de la aviacin,Arriba: una aeronave no rgida , :construida por Santos Dumont enFrancia; afinales desiglo, E 'Estados Unidos no'eiia nada rtan avanzado como esto, almenos que supieia (fotoMary,EvnsP.L'i, ' "' ,'

: :..'A la derecha: un obieto volantevisto en California en 1896, talcomo apareci en un peridicoIocal. Los testigos vieron uncuerpo oscuro sobre una luzbrillante que pareca descender(foto Mary Evans P.L.).

LA EXPLICACIONES. ACERCA de ios ob.Jetos vo-lantes no identificados son numerosas y varia-das,' En pqcas, pasadas han sido' consideradosiisitantes o-,seales sobrenaturales. divinos odernoniacos. En nuesfra,edad tecnolgica seupoq, que. son visitante;r de lejanas eiviliza-c-io,es,{el espacio;.v4qrc. en.el tiqmpo o emi-srio,{e:sers que habitan e:el inteio delaTier.ra,.'Q.lings@esperqn,de' hallar pruebasp,ara esta--njetUag:qopqchan que lcs OV-NI puedelt,er,forms;entales,readas,porquienes logpercibqn,o ssultad-o de,manipula'eionqs,dla'psiilqga-,de,.rr4sis.r,Los:cienfi.cg: esiptieos insi,stqg .en' que, soo' fenmeno,naturaliss rq'al'l.i,tr1e,ip. tttito,,rao.ives :cn-

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OVNIS terrestres

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de puro y movidas por un motor que estabaconectado con una hlice...; en una palabra,eran exactamente como las que volaron des-pus. Y eran tripuladas por seres humanos, nopor criaturas de otro mundo.

Aterrizaje en una praderaEl Post de Houston (Texas) del 21 de abril de1897 public un relato del primer incidentecon Wilson. Haba ocurrido en Beaumont dosdas antes, cuando J. B. Ligon, representantelocal de las cerveceras Magnolia, y su hijo,vieron unas luces en la pradera de un vecino, apocos cientos de metros de distancia. Fueron ainvestigar y se encontraron con cuatro hom-bres, de pie junto a un objeto grande y oscu-ro, que ninguno de los testigos pudo ver conclaridad. Uno de los hombres pidi a Ligon uncubo de agua. Ligon se lo dio y el hombre sepresent como el seor Wilson. Despusdijo a Ligon que 1 y sus amigos estabanviajando en una mquina volante, que habanhecho una excursin por el Golfo y que aho-ra regresaban al tranquilo pueblecito de Io-wa donde se haba construido esa aeronave yotras cuatro ms. Interrogado, Wilson explicque las alas de la nave eran propulsadas porelectricidad. Despus, l y sus amigos volvie-ron a la cabina de pasajeros, en la parte infe-rior de la nave, y Ligon y su hijo los vieronascender y alejarse.

Al da siguien te, 20 de abril, el sheriff H. W .Baylor, de Uvalde, tambin en Texas, fue ainvestigar luces y voces extraas detrs de sucasa. Encontr una aeronave y tres hombres;uno de ellos dijo que era Wilson, de Goshen(Nueva York), y pregunt por-.un tal Akers,antiguo sheriff del condado de Zavalia, dicien-do que le haba conocido en Fort Worth en1877 v que deseaba verle de nuevo. El sheriff

Arriba: a principios de siglo laconcepcin de los transportesareos todava estaba dominadapor la imagen de la aeronave.Aquel artista imagin una naveacorazada del ao 2000, colgadade una vulnerable bolsa de gas,batallando con aeroplanos ybarcos (foto Mary Evans P.L.).

Abalo: uno de los aeroplanos sinpiloto de Samuel PierpontLangley; era impulsado por unpequeo motor de petrleo.Algunos de sus modelosfuncionaron, pero en 1 903 dos desus aviones se estrellaron (fotoMary Evans P.L.).

Baylor, sorprendido, replic que Akers estabaen Eagle Pass, y Wilson, al parecer desilusio-nado, pidi que Baylor le transmitiera sus sa-ludos la prxima vez que le visitara. Los hom-bres de la aeronave pidieron agua y rogaronque su visita no se hiciera pblica. Despustreparon a la barquilla,

hombres preguntando si podan sacar agua desu pozo. Nichols asinti y los hombres le invi-taron a que viera la aeronave. Observ quehaba entre seis y ocho tripulantes. Uno deellos le dijo que la fuerza moftiz de la nave eraelectricidad muy condensada, y que era unode los cinco ejemplares que haban sido cons-truidos en

OVNIS terrestres

:;1',:i:;::il]:rrr.:i:r

oriundo Wilson. En el Instituto Tecnolgicode Massachusetts (MIT) se impartan semina-rios sobre la propulsin y el comportamientode los fluidos, temas fundamentales en aerodi-nmica. En 1896, profesores y estudiantes delMIT construyeron un tnel de viento y estabanexperimentando con l para aumentar sus co-nocimientos prcticos de aerodinmica. Wil-son podra haber asistido a esos cursos y des-pus haber ido a la Universidad de Ithica,Nueva York. donde a mediados de los aosnoventa era posible obtener el ttulo de licen-ciado en aeronutica.

Los pioneros famososLa Universidad Cornell era famosa por suscursos de aerodinmica. Uno de los que dieronconferencias all, en 1897 y 1898, fue OctaveChanute, el mundialmente famoso ingeniero.En 1896 haba emulado las experiencias conplaneadores manuales del ingeniero alemnOtto Lilienthal. Los cursos abarcaban ingenie-ra experimental, ingeniera mecnica y elc-trica y diseo y construccin de mquinas. En-tre los libros de texto figuraban, seguramente,Experimentos en aerodinmica (1891) delSmithsonian Institute. los informes de sir Hi-ram Maxim acerca de sus experimentos conmquinas, hlices y diseos de aviones (1893),y el Aeronautical Annual, que publicaba art-culos innovadores de los principales hombresde ciencia dedicados a la aeronutica.

En 1896 tuvieron lugar los primeros vuelosde las mquinas de S. P. Langley en Washing-ton. Un ao despus haban sido registradasnumerosas patentes para otras mquinas vola-doras.

Los adelantos cientficos de la ltima dcadadel siglo xIx fueron de enorme magnitud, ysentaron las bases de la experimentacin aero-nutica avanzada. Si un equipo adelantado dehombres de ciencia estaba trabajando en se-creto en el proyecto de una aeronave, es muyposible que las observaciones realizadas en to-do el pas durante ese perodo hayan sido de

--:

Arriba: el F/yer, construido por loshermanos Wright, despega en subreve primer vuelo e inaugura unanueva poca. Ese da, el 1 7 dediciembre de 1903, realiz cuatrovuelos

-los primeros conmotor- reconocidos por lahistoria. Quiz otros inventores,trabajando en secreto, seanticiparan a los Wright y fueranlos responsables de lasobservaciones de

"aeronaves"anteriores-

A la derecha: Louis Blriot en lamquina voladora nmero Xlsobre los acantilados de Dover, alculminar el vuelo sobre el Canalde la Mancha, el 25 de julio de1909 (foto Mary Evans PictureLibrary).

mquinas volantes construidas en secreto porel hombre.

Nunca ms se oy hablar del misterioso se-or Wilson. Pero los aos siguientes vieronprogresar rpidamente la aeronutica. EnFrancia, en 1901, Santos Dumont vol en unaaeronave desde Saint-Cloud hasta Ia torre Eif-fel, y volvi en menos de 30 minutos. Dos aosdespus, en Kitty Hawk (Carolina del Norte),los hermanos Wright hicieron el primer vuelotripulado en un aparato ms pesado que el ai-re, y en 1906 el norteamericano Robert God-dard ya haba empezado sus experimentos decohetera. El ltimo da de diciembre de 1908.Wilbur Smith vol 123 km en dos horas treintaminutos. Siete meses despus, el aviador fran-cs Louis Blriot cruz volando el canal de laMancha, de Calais a Dover.

Todas estas hazaas recibieron mucha publi-cidad, pero es posible que adelantos anmayores tuvieran lugar de forma ms discreta?Las numerosas observaciones de OVNIS a co-

l"

mienzos del siglo xx y el veloz ritmo del desa-rrollo tecnolgico sugieren que bien pudo ha-ber sido as. En 1904 el teniente de la Armadade los Estados Unidos Frank H. Schofield-que lleg a ser comandante en jefe de laflota norteamericana del Pacfico- informoficialmente haber visto. desde la cubierta desu barco, tres luces brillantes que viajaban enformacin, se mantenan por encima de las nu-bes y ascendan antes de desaparecer. En 1909hubo numerosos informes acerca de aeronavesno identificadas en Massachusetts. El 30 deagosto de 1919, a eso de las 9 de la noche, unobjeto negro alargado vol a baja altura sobreMadison Square, en la ciudad de Nueva York,y fue observado por cientos de personas. Lanafuraleza y el origen de ese objeto nunca fue-ron determinados.

Aviones fantasma en EscandinavaEn 1933 y 1934 se produjo una ola de OVNISen Escandinavia. Los aviones fantasma apa-recan o eran odos con frecuencia volando encondiciones imposibles para las aeronavesde la poca. Fueron descritos como monopla-nos, generalmente de color gris. A veces resul-taba posible ver a la tripulacin. Con frecuen-cia apagaban los motores, y planeaban duranteperodos largos antes de volver a conectar elmotor... ; unahazaa improbable para avionesconvencionales. A veces dirigan brillantes fo-cos al terreno que tenan debajo.

En 1934, la Fuerza Area sueca comenzuna cuidadosa bsqueda por las zonas remotasdonde eran vistos esos aviones. Veinticuatroaviones tomaron parte en la investigacin, ydos se estrellaron en el transcurso de ella. Nose encontraron rastros de las bases que hubie-sen necesitado los intrusos para sus activida-des. En 1934 un oficial sueco de alta gradua-cin declar a la prensa:

El estudio de estos informes demuestrasin lugar a dudas la existencia de un trn-sito areo ilegal sobre nuestras reas mili-tares secretas. En todos los casos se hahecho la misma observacin: no haba in-signia ni marcas de identificacin en lasmquinas. (...) Resulta imposible explicarel fenmeno por la imaginacin. El pro-blema es: quines son? Por qu invadennuestro territorio areo?Las mismas preguntas se planteaban en No-

ruega y Finlandia, donde tambin se veanaviones desconocidos. Pero nunca se encontruna respuesta satisfactoria.

La edad aeronutica madur en unas po-cas dcadas. La aeronutica avanz desde losprimeros experimentos con tneles de viento,en Massachusetts, hasta la compleja investiga-cin sobre cohetes de Peenemnde, que lleva los V-2. Partiendo del principio de que lainvestigacin cientfica se parece a los icebergs-nueve

dcimas partes permanecen ocultas-surge la posibilidad de que en Amrica o enEuropa (o en ambos continentes) se hubiesenllevado .a cabo investigaciones encaminadas aconstruir mquinas mucho ms poderosas ymenos ortodoxas en su diseo que las lliza-

Slo 40 aos despus del primervuelo de los hermanos Wright, laguena area haba progresadohasta el punto que los primerosmisiles balsticos de largo alcanceestaban listos para atacarcudades. Aqu, tres V-2expermentales en Peenemnde,el centro de investigacionesaeronuticas de los nazis (fotoUllstein).

OVNIS terrestres

das oficialmente. Desde luego, se sabe quedesde la primera guerra mundial una parte ca-da vez mayor de la investigacin tecnolgica esfinanciada y controlada por los gobiernos, aquienes interesan sobre todo las aplicacionesmilitares de esa investigacin.

Ser posible que los ciudadanos de EstadosUnidos y algunos pases europeos hayan sidotestigos de experimentos aeronuticos clandes-tinos de sus propios gobiernos?

El ritmo del desarrollo de la aviacin se ace-ler durante la segunda guerra mundial. Avio-nes a reaccin, radares de navegaein y detec-cin, misiles balsticos y bombarderos de ta-mao sin precedentes aparecieron como res-puesta a las urgentes necesidades de los com-batientes. Y las observaciones de misteriosos alcanzaron a una nueva fase en loscielos alemanes.

En la pgina 822: platillos volantes con patentenazt.

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En el siglo xx, la ciencia ha convertido en realidad elsueo del alquimista; la transmutacin de los elementos.Sin embargo, a pesar de las decisivas aportacionesde la fsica nuclear, los modernos alquimistastodava utilizan mtodos tradicionales en susexperimentos.

rooo pance rREDECIR el final de la alquimia:la evolucin de la ciencia experimental duran-te los siglos xvrrr y xrx; la labor de qumicos dela talla de Lavoisier, Priestley y Davy; la de-mostracin de la teora atmica de Dalton, ylos descubrimientos subsiguientes de una le-gin de cientficos en todos los campos de lafsica y de la qumica. Y, sin embargo, la alqui-mia no ha desaparecido.

Ciertamente, durante el siglo xx y princi-pios del xx, los alquimistas se replegaron enlos aspectos msticos y espirituales de sus estu-dios. Se refugiaron en el ocultismo a lo Rosa-cruz de sociedades tales como la Golden Dawny la Ordo Templi Orientis (oro), que consi-guieron combinar retazos mal digeridos de fi-losofa oriental con la tradicin mgica de laEuropa occidental.

Despus, en 1919, el fsico britnico ErnestRutherford anunci que haba logrado latransmutacin de un elemento en otro: habaconvertido nitrgeno en oxgeno. Aunque latcnica empleada, basada en radiacin de altaenerga, no tena el menor parecido con losprocedimientos de los alquimistas, este experi-mento desmenta la insistente afirmacin de lamayora de los cientficos en cuanto a la impo-sibilidad de las transmutaciones.

En realidad, se saba ya que en la naturalezatenan lugar transmutaciones. Los elementosradiactivos se gastan gradualmente, al emitirradiacin y producir otros elementos radiacti-vos hijos, que a su vez se consumen tam-bin. Tras una serie de desgastes, se forma elproducto final: plomo.

Lo que hizo Rutherford fue invertir el pro-ceso. Haba bombardeado gas nitrgeno conuna radiacin consistente en ncleos de movi-miento rpido procedentes del gas helio, y ha-ba producido oxgeno e hidrgeno. El experi.mento puede ser expresado simplemente enfuncin de nmeros atmicos (las propiedadesde cada elemento vienen determinadas por sunmero atmico, que es el nmero de proto-nes de su ncleo):

N(7)+He(2):o(8)+H(1)Lo que entonces se pregunt todo alquimis-

ta fue si caba utilizar un tipo de suma similarcomo gua para la conversin de plomo (82) enoro (79). ,Y si haba otro elemento que fuesemejor punto de partida?

Uno de los que obtuvieron renovada inspi-

Al{uirnia atmicaT,os trabajos de Rutherford reforzaron laconviccin de los cientficos ortodoxos enel sentido de que los mtodos de los alqui-mistas jams podran conducir a la trans-mutacin de los elementos. Se averiguque el tomo posee un ncleo central con-sistente en partculas llamadas protones,con carga elctrica positiva, y un nmeroigual o'mayor de neutrones, carentes decarga. Unos electrones con ligera carganegativa orbitan alrededor del ncleo yfijan las propiedades qumicas del tomo.

El nmero de electrones es igual al nme-ro de protones del ncleo, de modo quelas cargas elctricas se equilibran.

Por tanto, para transformar un elemen-to en otro es necesario cambiar el nmerode protones en el ncleo de cada tomo.El ncleo debe ser bombardeado con par-tculas de movimiento rpido, ya sea paraintroducir protones adicionales, o pararomper el tomo a fin de que pierda pro-tones. Actualmente, los fsicos utilizanpartculas artificialmente aceleradas pormquinas trituradoras de tomos, e in-sisten en que los procesos qumicos sloafectan a los electrones exteriores.

nitrgeno oxgeno6,s

Arriba: un moderno aceleradorde partculas.

A la izquierda: Rutherfordbombarde tomos de nitrgeno(siete protones, siete electrgnes)con partculas alfa (dos protonesunidos a dos neutrones),formando tomos de flor (nueveprotones, nueve neutrones).stos perdieron un pTotn,formando un tipo de oxgeno(ocho protones, nueveneutrones).

En la pgina anterior, arriba: losdirectores de la SocitAlchimique et Astrologique deFrance en su laboratoro, en1 903. A pesar de losdescubrimientos de la qumica yla fsica en el siglo xtx, la alquimiase negaba a morir. La revista quepublic esta fotografa deca:"Convertir la astrologa en unaverdadera ciencia, en la que nohaya lugar para la fantasa, esoes lo que predican en superidico, rot, 4"6ea" (fotoJean-Loup Charmet).

En la pgina anterior, abalo: elioven Adolf Hitler (izquerda) consu jefe, Erich Ludendorff.Asociado con Franz Tausend(centro), Ludendorff cre laCompaa 164 para

"fabricar"oro; como resultado, pudieronengrosar con 400 000 marcos lasarcas del partido naz. Tausendinstal su laboratorio productor deoro en una cantera cerca deMunich (derecha) [fotos RobertHunt Library, SddeutscherVerlagl.

racin a partir de los resultados de este experi-mento fue un trabajador de una empresa qu-mica de Munich; tena 36 aos, y se llamabaFranz Tausend. Tena una teora sobre la es-tructura de los elementos que consista en unapeculiar mezcla entre las creencias de Pitgo-ras, quien haba considerado el Universo comouna combinacin de armonas musicales, y losdescubrimientos de la qumica moderna.

Tausend haba publicado un opsculo deno-minado 180 elementos, su peso atmico y suincorporacin a un sistema de perodos arm-nicos. Creia que todo tomo tena una fre-cuencia de vibracin caracterstica de un ele-mento, relacionada con el peso del ncleo deltomo y con la agrupacin de electrones enaros orbitales alrededor de 1. Ulteriores in-vestigaciones demostraran que esta parte, almenos, de su teora era bsicamente cierta. Sinembargo, Tausend sigui sugiriendo que lamateria poda ser orquestada, es decir, queaadiendo la sustancia apropiada a un elemen-to, era posible cambiar su frecuencia de vibra-cin y convertirla en la de otro elemento.

E 1924, Adolf Hitler fue encarcelado portratar de organizar un levantamiento armado;uno de los que conspiraron con 1, el generalErich Ludendorff, fue absuelto, y al ao si-guiente se present a las elecciones para lapresidencia de la Repblica alemana. Tras su-frir una resonante derrota ante Hindenburg,hroe nacional, dedic sus actividades a la re-caudacin de fondos para el partido nazi, dereciente formacin. En crculos gubernamen-tales circulaban rumores de que un tal Tau-

Alquimia

send haba conseguido obtener oro por trans-mutacin, y Ludedforff reuni un grupo de in-dustriales y hombres de negocios para investi-gar este asunto.

Siguiendo instrucciones de Tausend, unmiembro del grupo, el comerciante Stremmel,adquiri los materiales necesarios

-principal-mente xido de hierro y cuarzo- y stos fue-ron fundidos en un crisol que Stremmel ence-rr seguidamente en su habitacin de hotel pa-ra que nadie pudiera interferir en el proceso.Al da siguiente, por la maana, Tausend vol-vi a calentar el crisol en su horno elctrico, enpresencia de sus visitantes, y seguidamenteagreg una pequea cantidad de polvos blan-cos a la masa fundida. Cuando el crisol se en-fri, fue abierto, y en el interior apareci unapepita de oro que pesaba 7 gramos.

Fondos para los nazisLudendorff qued entusiasmado y procediinmediatamente a formar una sociedad a laque denomin Compaa 164. Las inversio-nes se multiplicaron, y al cabo de un ao elgeneral haba conseguido canalizar unos400 000 marcos hacia las cajas del partido nazi.Poco despus, en diciembre de 1926, dimiti ydej que Tausend se enfrentara con todas lasdeudas. No obstante, Tausend consigui re-caudar ms dinero y, segn se dice, el 16 dejunio de 1928 obtuvo 723 gramos de oro enuna sola colada, lo que le permiti emitir unaserie de acciones, cada una de ellas por el valorde 10 kilos de oro.

Sin embargo, cuando pasado un ao se cons-

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tat que no se haba producido ms oro, Tau-send fue detenido por fraude, y el 5 de febrerode 1931, tras un proceso escandaloso, fue sen-tenciado a cuatro aos de prisin. Mientrasesperaba la vista de su causa, haba conseguidoproducir oro bajo una supervisin estricta enla Casa de la Moneda de Munich, pero estaprueba fue refutada ante el tribunal y no pudosalvarle.

El mismo sino correra un ingeniero polacollamado Dunikovski que, el mismo ao en quefue condenado Tausend, anunci en Pars quehaba descubierto una nueva clase de radiacin

-los rayos Z>- eve podan transmutar elcuarzo en oro. El mineral, esparcido sobre pla-cas de cobre, era fundido mediante una des-carga de 110 000 voltios, y seguidamente erairradiado con los rayos Z.

El mundo empezaba a acostumbrarse a nue-vos tipos de radiacin poseedores de propieda-des notables. Los rayos X haban sido descu-biertos unas dcadas antes, y en las emisionesde las sustancias radiactivas se haban identifi-cado tres clases de emisiones: alfa, beta y gam-ma. Se saba tambin que la Tierra era bom-bardeada desde el espacio por intensas radia-ciones csmicas. El pblico estaba dispuestoa creer que podan existir rayos creadores deoro, aunque la naturaleza de stos la explicara

Dunikovski de una manera ms que dudosa, ylos inversores entregaron ms de dos millonesde francos para financiar el proyecto.

Sin embargo, al cabo de unos pocos meses,cuando el oro sigui brillando por su ausencia,tambin Dunikovski fue juzgado y considera-do culpable de fraude. Despus de pasar dosaos en la crcel, su abogado le consigui lalibertad y Dunikovski se march con su familiaa San Remo, en Italia, donde reanud sus ex-perimentos.

No tard en circular el rumor de que el in-ventor se ganaba la vida vendiendo ocasional-mente pepitas de oro, y su abogado, acompa-ado por el eminente qumico Albert Bonn, seperson en San Remo para ver por s mismoqu ocurra.

Se descubri entonces que el cuarzo utiliza-do por Dunikovski contena ya cantidades nfi-mas de oro, pero mientras que los mtodosusuales de extraccin producan oro en canti-dades de slo 10 partes por milln, el mtodode Dunikovski renda un centenar de vecesms. Con todo, en cada experimento slo in-tervenan pequeas cantidades de cuarzo, demodo que el oro producido era cuantitativa-mente muy escaso.

En octubre de 1936, Dunikovski hizo unademostracin ante un grupo de cientficos invi-tados. Se mostr muy reservado en cuanto asus aparatos, pero ofreci una explicacin te-rica que recordaba los orgenes de la alquimiaprimitiva. Segn 1, todos los minerales conte-nan .tomos embrionarios sometidos a unatransformacin que en estado natural requeramiles de aos para completarse. Y asegur quesu proceso no haca sino acelerar el crecimien-to natural del oro embrionario contenido en elcl.]arzo.

Oro a partir de arenaLa demostracin despert una atencin consi-derable y se constituy un sindicato anglofran-cs que deba importar arena de Africa y tra-tarla en un gran laboratorio nuevo en la costameridional de Inglaterra, pero estall la segun-da guerra mundial y poco ms se supo de Du-nikovski. Corrieron rumores de que haba ins-talado una fbrica en la frontera francosuiza, yse habl de que cuando los alemanes ocuparonFrancia fabricaron all oro para vigorizar sutambaleante economa, pero no existe pruebaalguna al respecto.

En el siglo xx ha habido -y sigue habien-do- otros muchos practicantes de la alquimia.

Un de ellos fue Archibald Cockren, que pere-ci al caer una bomba en su pequeo laborato-rio durante los ataques areos contra Londres.Era un prestigioso ostepata que practicaba laterapia con oro. Inici sus investigaciones apartir del antimonio, y despus dirigi su aten-cin hacia el hierro, el cobre, la plata, el mer-curio y el oro. Desgraciadamente, casi todossus descubrimientos se perdieron con la explo-sin que acab tambin con su vida. Un lqui-do al que l llamaba aceite de oro, sera utili-zado, sin embargo, aos despus con fines te-raputicos.

Arriba: grabado del tratado dealquimia Atalanta fugiens, delsiglo xvrr, que versa sobre lanaturaleza ubicua de la PiedraFilosofal. La forma de la Piedra,tal como se muestra aqu, sugierela de cristales de sal o arena (fotoThe British Library).

A la izquierda: el ingeniero polacoDunikovski, escoltado porinspectores de polica, sale delPolitcnico de Pars, dondedemostr su procedimiento dealquimia mientras esperaba quese le procesara por raude (fotoBoyer-Viollet).

En la pgina siguiente, a laderecha: Armand Barbault siguilas directrices del Mutus liber(Libro mudo) en su labor dealquimista del siglo xx (fotq Jean-Loup Charmet).

Arriba:escurrido de las telas delona previamente extendidas pararecoger el roco matinal. Estailustracin procede del tratado dealquimia titulado Mutus liber(Libro mudo).

La alquimia de la postguerraA partir de la segunda guerra mundial, Franciafue el principal foco de expansin de las activi-dades relacionadas con la alquimia. EugneCanseliet, que aseguraba haber sido discpulode Fulcanelli (vase pgina 862), lleg a apare-cer en la televisin entregado a su trabajo enel laboratorio. Tambin influy en numerososalquimistas extranjeros, entre ellos el annimopersonaje que se haca llamar Mago del Put-xet, en Barcelona, que era ingeniero qumi-co, ingeniero industrial, mago, astrlogo y al-quimista, y se dedic a estas actividades hastasu muerte en 1981. Pero el ms notorio de losalquimistas de postguerra es sin duda ArmandBarbault. Una parte esencial del proceso Bar-bault fue la recoleccin de roco en telas delona cada maana entre el 2l de marzo y el24de junio. No se trataba de una idea nueva, yaque apareca en el libro de grabados sin textoconocido como el Mutus liber (El libro mudo),y Salmon la recomendaba en su Polygraphica:Si eres de verdad artista, con ello puedes con-vertir todos los metales en su materia prima.Barbault describa su materia prima como un

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ignode sarrtdad?

Algunos cristianos profundamente religiosos compartenlos sufrimientos de Cristo de una forma muy extraa yliteral: en sus cuerpos aparecen huellas idnticas a lasheridas de un crucificado.uN vIERNES DE MARZo or 1901, mientras rezabafrente a un gran crucifijo, una joven italianaexperiment una visin que cambi su vidapor completo. Su nombre era Gemma Galga-ni, tena 23 aos y era hurfana. Gemma quisoser monja pasionista, pero fue rechazada por-que padeca de tuberculosis en la mdula espi-nal. Entonces esta joven sencilla, callada y pia-dosa se puso a trabajar como sirvienta en supueblo. Sin embargo, su visin lahizo conver-tirse en una persona fuera de lo comn, ya quese identific de tal forma con los sufrimientosde Jess que lleg a sentir cada uno de losgolpes de ltigo que azotaron a ste, y a expe-rimentar al mismo tiempo un sentimiento dedolor y xtasis.

Cuando su madre adoptiva la encontr en suhabitacin, sus brazos y su espalda estaban cu-biertos de heridas que mostraban las marcasde un ltigo, y su ropa estaba empapada desangre. Desde ese da hasta que muri, dosaos ms tarde, los estigmas continuaron apa-reciendo con asombrosa regularidad cada jue-ves. y desaparecan al da siguiente. El bigra-fo de Gemma, el padre Germano di Stanislao,

En estas fotografas, tomadas en1949, podemos ver los estigmassobre los pies y las manos deArthur Otto Moock,

"elestigmatizado de Hamburgo",heridas que aparecieron el 1 3 dediciembre de 1943. Su carnepareca haber sido horadada porgrandes clavos, y de los aguierosmanaba sangre fresca. Losescpticos que se enfrentan concasos de personasestigmatizadas tienden aacusarlas de fraude (dando aentender que las heridas se lasprovocan ellas mismas) ; sinembargo, en la mayora de loscasos que se conocen no se haencontrada ninguna prueba quepueda respaldar esta leora (fotosRen Dazy).

describi cmo sus heridas aparecan al princi-pio del xtasis y cmo las de la palma y eldorso de las dos manos iban enrojeciendo po-co a poco; ...poda verse cmo bajo la epider-mis la carne empezaba a abrirse poco a poco...despus la membrana se reventaba y entoncesse vean las seales de heridas sobre aquellasmanos inocentes.>> Estas heridas eran muyprofundas y parecan atravesar toda la mano.Estaban llenas de sangre que en parte flua yen parte permaneca coagulada. El padreGermano afirmaba que el lugar donde apare-can las marcas cambiaba de una semana aotra; algunas veces salan slo en las manos oen los pies, y otras veces sangraba una superfi-cie de la piel que no haba sido rasgada. Enotras ocasiones se formaban en las heridas loque parecan clavos de cabeza gruesa, consti-tuidos por una acumulacin de carne ennegre-cida y de sangre coagulada.

A pesar del desprecio que muestran los es-cpticos hacia este tema, no puede haber nin-guna duda acerca de la autenticidad de los es-tigmas. Han aparecido tantas veces ante lapresencia de mdicos, que resulta absurdo

considerarlos como una mera invencin. Ade-ms, no hay que olvidar que en los tiemposmodernos esas marcas han sido fotografiadas.

Pero, qu son estas seales? Popularmen-te, la palabra estigma se asocia con las heri-das que sufri Cristo durante su Pasin, lascuales se reproducen en el cuerpo del estigma-fizado. Tradicionalmente, estas heridas se hanidentificado con las que produjeron los clavosen las manos y los pies de Jess, y con la heridaen el pecho practicada por la lanza. Existentambin otros estigmas que a menudo han apa-recido por s solos. Entre ellos podemos citarseales de azotes sobre el cuerpo, heridas en lafrente causadas, aparentemente, por una coro-na de espinas, deformacin en el hombro-producida por el peso de la cruz- y la apari-cin, por extrao que parezca, de unos curio-sos smbolos que, segn se afirmaba, estabangrabados en el corazn y en otros rganos in-ternos.

Los verdaderos estigmas presentan unas in-teresantes caractersticas fisiolgicas que losdiferencian de las heridas superficiales corrien-tes. La sangre que fluye a travs de ellos es una

El padre Po Forgione, que murien 1 968, fue una de las personasestigmatizadas ms conocidas yveneradas. A partir del momentoen que aparecieron los estigmasen su cuerpo

-en 1915, cuandocontaba 28 aos-, este frailecapuchino intent siempreesconder las horribles herdas desus manos (izquierda), y sloapareca en pblico para decirmisa (arriba). No hay ningunaduda de que sus estigmas eranreales (fotos Popperfo\o).

Estigmatizados

sangre artqrial limpia, que no muestra indiciosde ninguna enfermedad. Las heridas puedenpermanecer abiertas durante largos perodosde tiempo

-a veces incluso aos- mante-nindose completamente al margen de los pro-cesos normales de curacin; y, sin embargo, endichas heridas no se produce ni infeccin niinflamacin. Aparecen y desaparecen espont-neamente, de forma incomprensible. Sin em-bargo, estas heridas estn normalmente aso-ciadas con un estado especial de conscienciaque se asemeja al xtasis y durante el cualel estigmatizado experimenta una unin con elsufrimiento de Cristo. A diferencia de cual-quier otro tipo de heridas (excpto, qriz, al-gunas de evidente origen psicosomtico), lamayora de los estigmas se repiten regularmen-te: algunos 1o hacen cada ao durante la Cua-resma y la Pascua; otros, slo en algunas fies-tas religiosas sealadas; otros, cada viernes,especialmente el Viernes Santo.

Los primeros estigmatizadosAunque San Pablo escribiera ... que nadieme moleste, que llevo en mi cuerpo las sealesde Jess Nuestro Seor (Glatas 6:17), no setuvo conocimiento de la aparicin de los estig-mas hasta 1224, ao en el cual san Francisco deAss fue estigmatizado mientras practicaba unretiro espiritual en el monte Alvernia, en losApeninos italianos. Mientras rezaba fuera desu cueva, vio un serafn alado en el cielo yentonces se desmay. Las versiones contem-porneas afirman que los estigmas aparecieroncuando el santo intentaba penosamente levan-tarse del suelo para pedir ayuda.

Toms Celano, bigrafo de san Francisco deAss, describa tres aos despus de la muertedel santo, en 1226, las extraas heridas:

Sus manos y sus pies parecan estar atra-vesados por clavos; las cabezas de stosaparecan en la palma de las manos y en laparte superior de los pies, y las puntas enel otro extremo de los miembros... Ade-ms, su costado derecho estaba sealadocon una cicatr2, como si hubiera sido pe-netrado por una lanza; dicha cicatriz amenude verta sangre y empapaba su tni-ca y sus prendas interiores con sangresagrada.

Merece la pena destacar que lo que Celanodescribe no es exactamente una herida, sinouna formacin de tejidos en forma de clavoque, aparentemente, se alojaba en la herida.Estas formaciones sobresalan tanto de lospies, que impedan que san Francisco pudieracaminar. A la muerte del santo, muchas perso-nas desfilaron ante su cuerpo, el cual mostrabatodava estas extraas formaciones.

Este dramtico suceso produjo una impre-sin profunda y duradera en la imaginacinmedieval. Muy pronto empezaron a surgir ca-sos de personas en cuyos cuerpos haban apa-recido estigmas reales y espontneos, fenme-nos acaecidos ante testigos y perfectamentedocumentados que siguen producindose ennuestros das quiz con ms frecuencia que an-tes. El doctor Imbert-Gourbeyre confeccion

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Estigmatizados

en 1894 una extensa lista de personas estigma-tizadas y recogi un total de 321 casos. Sinembargo, un estudio llevado a cabo en los aoscincuenta por el padre Herbert Thurston

-lamayor autoridad en el tema- indica que estacifra es muy moderada.

Otro dato curioso es la elevada proporcinde casos de mujeres estigmatizadas; segn larecopilacin que hizo el doctor Imbert-Gour-beyre, slo en 41 casos los protagonistas fue-ron hombres, y de stos, nicamente uno fueestigmatizado por completo (el propio sanFrancisco). El padre Thurston y tambin el es-critor de fenmenos sobrenaturales MontagueSummers mencionan otros casos ms de hom-bres que han sufrido las heridas de Cristo, pe-ro sus seales no son exactamente las mismas,no se desangran peridicamente o carecen deautentificacin.

Uno de los pocos hombres realmente estig-matizados, despus de san Francisco, fue elfraile capuchino conocido como el padrePo, quien pas la mayor parte de su humildevida en el monasterio de San Giovanni Roton-do, en Foggia (Italia), y muri en el ao 1968.En 1915, cuando el padre Po Forgione conta-ba 28 aos, sinti como una especie de pincha-zos en sus manos despus de haber estado me-ditando durante largo rato. Tres aos ms tar-de, se encontraba solo en el coro conmemo-rando la aparicin de los estigmas de san Fran-cisco, cuando, de pronto, profiri un grito pe-netrante. Sus hermanos le encontraron incons-ciente y sangrando en abundancia por las par-tes tradicionales donde aparecieron las cincoheridas de Cristo. Aunque el padre Po For-gione rog que este suceso se mantuviera ensecreto, pronto se corri lavoz. De forma re-gular, siempre que elevaba la sagrada formadurante la misa, entraba en estado de xtasis,y de sus heridas manaban cada da pequeosbrotes de sangre y suero. Se mova con grandolor y dificultad y trataba de permanecersiempre apartado de la gente y de esconder susmanos. Sin embargo, la adulacin del pblicoera tan grande que tuvo que vivir bajo unapersecucin casi constante, sin mencionar elserio examen al que fue sometido por el Va-ticano.

Estigmas en el Palmar de TroyaUno de los casos de estigmatizacin ms re-cientes y conocidos guarda una extraa rela-cin con el padre Po. Algunos de los principa-les protagonistas y artfices del polmico asun-to del Palmar de Troya (serie de apariciones yacontecimientos religiosos que se produjeroncerca de Sevilla a principios de los aos seten-ta, y que culminaron con la fundacin de laorden de los Carmelitas de la Santa Faz)tuvieron, ya desde los primeros tiempos delfenmeno, visiones del padre Po... y resulta-ron ellos mismos estigmatizados. Fueron sobretodo el famoso Clemente Domnguez, papapor decisin propia y excomulgado por la Igle-sia Catlica, y Mara Luisa Vila, una de lasvidentes en quienes se manifestaron ms pro-digios.

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corona de espinas, pero otras tenan ir:: -:', -

ca forma de cruz. Todos ellos de:aor. j:--: -durante algn tiempo. pero postcrio:-:..: :.volvieron a formarse por perodos tne:::..-tentes.

A pqsar de las dudas que ha suscitado e.fenmeno del Palmar de Troya (al que casi sepodra calificar de escndalo), no hay duda deque los testimonios de que disponemos respec-to a las estigmatizaciones no difieren en abso-lulto de otros casos admitidos por la Iglesiacomo autnticos.

El fenmeno de la estigmatizacin presentanumerosas variantes. Santa Catalina de Ricci(muerta en 1590), santa Gemma Galgani y al-

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Clemente Domnguez, el msticoespaol del siglo xx que se hanombrado a s mismo papa,,,mostraba regularmente, entreotros, estigmas en la frente(derecha) y en el costado (abajo),durante los momentos de xtasisque experiment en el transcursode los aos setenta. Clemente noera una persona humilde nimodesta, y, en vez de retirarse dela vista del pblico, hacaoslentacin de sus heridas (fotosPixfeatures).

Precisamente el mismo ao de la muerte delpadre Po (1968) se produjeron los primerosxtasis y estigmas de Mara Luisa Vila, que serepitieron al ao siguiente. En cambio, Cle-mente Domnguez no sufri marcas fsicas du-rante sus visiones hasta marzo de 1972. Exis-ten numerosos testimonios grficos de estasmortificaciones espontneas; al parecer, pre-sentaba diversos estigmas: en el costado (porel que manaba abundante sangre), en las pal-mas de las manos, y en la frente. Estos ltimosa veces parecan producidos por una invisible

al-l

iunas otras tenan a veces los hombros defor-:ados I'se quejaban del dolor que les produ-:ia el enorme peso de una cruz invisible. Hele-ra Brumsin, que vivi en el siglo xttt, llevabasobre su cuerpo unas marcas atroces de azotes,rl igual que Anne Catherine Emmerich casirr.l0 aos ms tarde. De un modo parecido su-:ri Archangela Tardera durante un visin en,608. la cual la dej ciega varios aos antes desu muerte, y sus estigmas y las seales de losazotes estuvieron risibles sobre su cuerpo in-corrupto durante muchos aos ms. Los estig-mas de santa Catalina de Siena eran invisibles,aunque ella sinti el dolor producido por losmismos durante cinco aos antes de su muerte

Abajo: Teresa Neumann, lamuchacha de Baviera que sande una misteriosa enfermedad altiempo que aparecan losestigmas en su cuerpo, en 1926.Cada viernes, hasta su muerte en1962, Teresa sufra la Pasin deCristo y aparecan heridas en susmanos, sus costados y su frente,que desaparecan al llegar eldomingo. Durante sus momentosde xtasis hablaba en arameo, yse dice tambin que durante 35aos no ingiri ningn tipo dealimento (foto Ren Dazy).

Estigmatizados

en 1380; fue entonces cuando los estigmas sehicieron visibles (vase pgina 604). Las heri-das de santa Maa Francisca de las Cinco He-ridas (que muri en 1791) traspasaban comple-tamente sus manos, y su confesor introdujoms de una vez su dedo por ellas. Santa Mag-dalena de la Cruz estuvo estigmatizada duran-te 39 aos hasta que muri en 1560, y, al igualque a otros estigmatizados, se la vio levitar.

Especialmente original es el caso de Tere-sa Neumann. Al igual que santa Gemma, Te-resa provena de una familia pobre, y trabajcomo criada hasta que unos misteriosos malesla dejaron imposibilitada. En1926, cuando con-taba28 aos, sus males fueron curados espon-tneamente tras una visin que la dej estig-mafizada. Durante 32 aos estuvo derramandosangre casi todos los viernes por las manos, lospies, el costado y la frente, perdiendo algunasveces hasta medio litro de sangre y casi cuatrokilos de peso. Sin embargo, cuando llegaba eldomingo, Teresa volva a su estado normal.Durante la mayor parte de este tiempo estuvobajo supervisin mdica en el pueblo bvarode Konnersreuth, y fue tambin observada conatencin por el obispo de Ratisbona. Los m-dicos la examinaron a fondo y describieron laaparicin de heridas con unas formaciones se-mejantes a clavos.

Todava se siguen relatando casos de apari-ciones de estigmas. De los muchos que podra-mos citar, hay dos que poseen un inters espe-cial. El primero de ellos es el de la pequeaCloretta Robinson: en 1972, a la edad de diezaos, le aparecieron en el cuerpo los estigmasdurante 19 das, durante la poca de Pascua.Dos psiquiatras estudiaron su caso, y en el n-mero de la revista General psychiatry de mayode 1974 publicaron un informe en el que sedeca que, cuando colocaron las manos de Clo-retta bajo el microscopio, observaron que so-bre sus palmas haba unas gotas de sangre quemanaba por una parte de la piel que estabadescolorida. Aunque estas seales no volvie-ron a aparecer, este caso es especialmente cu-rioso, ya que no slo es Cloretta una jovenamericana de lo ms corriente (no se trata enabsoluto dg una mstica), sino que tambin esla primera muchacha de color no catlica queha sufrido la aparicin de los estigmas.

El otro caso es el de Teresa Musco, que mu-ri en 7976. Tal y como se'afirma en la revistaNational enquirer de 11 de enero de 1977,Te-resa era una pobre costurera italiana que pro-fetiz con gran exactitud su propia muerte alos 33 aos (la misma edad que tena Cristo almorir). Los estigmas aparecieron en su cuerpodurante una visin que tuvo en 1969, y, aun-que era analfabeta y apenas haba recibidoeducacin, cuando entraba en xtasis hablabay escriba en arameo (la lengua semtica quehablaban Cristo y los Apstoles). Sus manosestaban completamente agujereadas, y se diceque una vez, en su presencia, una estatua em-pez a derramar lgrimas de sangre.

Son los estigmas un signo de la gracia divina?,Son quiz obra del diablo? Vase pgina 806.

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A la izquierda: san Francisco deAss fue estigmatizadoinmediatamente despus dehaber experimentado una visinen la que apareca un serafnalado. Este santo del siglo xttt fueel primer caso conocido deestigmatizacin, y las heridas desus pies mostraban unasprotuberancias semeiantes aclavos, aparentemente formadaspor tendones endurecidos (fotoMary Evans P.L.).

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En otoo de 1981 se produjo en gran parte de Europa unfenmeno sorprendente e inesperado: el espectacularboom de Michel de Nostradamus, profeta delsiglo xvrcuyo nombre, para mucha gente, resultaba hastaentonces slo vagamente fam iliar...

naba Jean-Charles de Fontbrune. si-.-r -

de Jean-Charles Pigeart de Gurbert. ;c,.:=-regional en Aix-en-Provence de un ir.n .-ratorio farmacutico. A finales de tSl. f,---.brune haba publicado una nueva tradu;.-:

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de las famosos profecas de Nostradamus. S._traduccin vena a sumarse a los cientos ;;intentos ms o menos fallidos de interpret.-cin que ha suscitado la obra de Nostradamusen 1o que llevamos de siglo. El propio padre deFontbrune, que escribi utilizando el seudnr-mo de doctor Max de Fontbrune, ya haba pu-blicado varias obras sobre las profecas del ri-dente provenzal. A qu se deba, pues, el ex-traordinario xito de l,{ostradamus historien etprophte (Nostradamus historiador y profeta,publicada en Espaa por Ediciones Barcano-va)? Una aventurada interpretacin de uncuarteto de la Quinta Centuria de Nostrada-mus fue, sin duda, la causa de la psicosis pro-vocada por el libro. El cuarteto en cuestindice 1o siguiente:

En medio del gran mundo la rosa,Por nuevos hechos sangre pblica de-rramadaA decir verdad se tendr la boca cerradaEntonces a la necesidad vendr tarde elesperado.

Las palabras de Nostradamus no podan ser

ms hermticas, pero su oscuridad impenetra-ble no asust al seor de Fontbrune, quien lastraducira as:

Cuando el socialismo est en el poder enmedio de los burgueses, la sangre del pue-blo ser derramada a causa de nuevoshechos.A decir verdad, la libertad d expresindesaparecer. Entonces el (Salvador) es-perado llegar tarde a causa de la penuria.A los pocos meses de publicarse el libro,

contra todas las predicciones de astrlogos, fu-turlogos y expertos en poltica (excepto, alparecer, Fontbrune), los socialistas accedan alpoder en Francia.

EL vERANo oe 1981 fue para los franceses unverano muy especial. En las playas, en loscampings, en el sosiego estival de los pueblos yen las acaloradas ciudades. miles de lectoresparecan haber sido atacados por una psicosiscolectiva. Una especie de delirio proftico ha-ra que un buen nmero de ellos hicieran apre-suradamente sus maletas, malvendieran suspertenencias y emigraran de su pas natal haciadiversos puntos del Nuevo Continente. No ca-ba la menor duda de que los rusos iban a aliar-se con los poderosos jeques del petrleo y unimportante ejrcito ruso-islmico invadiraMarsella. Pars sera destruido y el papa mori-a asesinado en Lyon. Al menos as lo vatici-

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Aniba: grabado antiguo querepresenta a Michel deNostradamus componiendo susCentu ri as bajo la inspiracindivina (foto Biblioteca deCatalunya-Barcelona).

Aniba a la derecha: el videnteprovenzal fue tambin un granmdico. Logr atajar unaespantosa epidemia de pestenegra que asolaba la ciudad deAix-en-Provence (en la foto,detalle de La peste de Ascod, dePoussin) [foto Scala/Salmer].

Cu-mo escribe Jean Robin, famoso esoteristai estudioso de Nostradamus, en su obra R-::,nse de Nostradamus d M. de FontbruneRespuesta de I'lostradamus al seor de Font-

:.ire, editorial Guy Trdaniel), ... en 10 que. la tictoria socialista se refiere, apenas si ha-:ia una posibilidad sobre dos de que el seor"le Fontbrune se equivocara, y se trata, pues,"le un riesgo calculado. Para este autor, elerito del libro de Fontbrune se debera. sobreIodo. a la publicidad que se le hizo. Cmo, sino. un pueblo esencialmente racionalista comoes el francs iba a alarmarse con tanta facilidadslo con leer las traducciones subjetivas queFontbrune haba hecho de las Centurias de\ostradamus? Sea como fuere, el pnico cun-di y, rpidamente, se fue propagando a lospases vecinos.

A1 poco tiempo, en lnglaterra todo el mun-do hablaba de Nostradamus; en Alemania sereeditaron sus obras y en Espaa aparecan si-multneamente, en otoo del mismo ao, seislibros sobre el tema. Una inquietud casi patti-ca se apoderaba de miles de personas que nun-ca haban odo hablar anteriormente de Michelde Nostradamus.

Sin embargo, haban sido muchas las edicio-nes de las Centurias y de otras obras de Nostra-damus antes de aquella fecha, y muchos tam-bin los que se haban interesado por ella. Porejemplo, un investigador ocultista y gran espe-cialista en temas esotricos, el peruano DanielRuzo

-fundador, junto con los famosos Louis

Pauwels y Jacques Bergier, de la revista Plan-te-, tiene recogidas unas 1 300 obras origina-les de Nostradamus o que versan sobre 1, y yaen 1975 public un interesante libro sobre eltema, titulado El testamento autntico de l{os-tradamus (Barcelona, editorial Plaza y Jans),del que hablaremos ms adelante.

A la izquierda: el libro quedesencaden la polmica entorno al autor de las Profecas amediados de 1981 . Su autor,Jean-Charles de Fontbrune(abajo), cuyo padre, el doctor Maxde Fontbrune, era ya especialistaen Nostradamus, llev a cabo enl una interpretacin muyatractiva pero muy discutible delas famosas profecas (fotosCortesa de EditorialBarcanova).

Nostradamus

Quin f ue Nostradamus?Resulta curioso pensar que de los miles de lec-tores de las Centurias de Nostradamus muy po-cos saben quin fue, qu hizo o dnde vivi.Michel de Nostradamus, mdico astrfilo,naci en Saint-Rmy-de-Provence, donde sufamilia resida haca aos, el jueves 14 de di-ciembre de 1503, hacia el medioda. Teniendoen cuenta el calendario de la poca, Jean Ro-bin deduce que el gran Nostradamus nacibajo el signo de Capricornio, con el ascenden-te en Aries, dato que le ser de gran utilidad ala hora de interpretar las Centurias y rechazarla exgesis de Jean-Charles de Fontbrune.

Segn otra interpretacin, NostradamLts, as-trlogo y profeta (Barcelona, editorial Obelis-co) de J. R. de Andreis y J. P. Salazar, Nostra-damus naci en el seno de una familia de ju-dos conversos y era nieto de un reputado m-dico y astrlogo llamado, antes de su conver-sin, Abraham Salomn. El gran vidente ha-bra heredado de su bisabrrelo una rica biblio-teca especializada en ciencias ocultas. Tras lamuerte de ste, que le haba iniciado en losmisterios de la Cbala y de la astrologa, el jo-ven Michel fue enviado a Avin a estudiarHumanidades.

No cabe la menor duda que Nostradamusfue un gran humanista y que su cultura fueharto superior a la de todos sus intrpretes ac-tuales. Para poder acceder al secreto de susCenturias no basta, pues, con ser astrlogos y

A la derecha: el investigadorperuano Daniel Ruzo,coleccionista de obras deNostradamus (foto @ MaritzaLpez, Mxico/Cortesa deM u n d o d e sco n oc i d o, B ar celona)

videntes. Es necesario conocer a fondo y dis-poner de las fuentes en que bebi el.maestroprovenzal. De Avin, el joven estudiante pa-s a Montpellier, donde frecuent la clebreUniversidad estudiando medicina en sus aulas.Ejerci esta profesin durante varios aos, ydespus de no pocas peripecias se establecien Salon-de-Crau, pequea ciudad cercana aAix-en-Provencel que ms tarde se llamaraSalon-en-Provence.

El renombre de Nostradamus como mdicofue extraordinario, sobre todo a partir del mo-mento en que consigui detener una terribleepidemia de peste negra que asol la ciudad deAix-en-Provence, gracias a un licor curativo

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Nostradamus

LES

A la izquierda: portada de laedicin princeps de las Profecasde Nostradamus (Lyon, 1555).Esta obra ha sido objeto demultlud de reediciones, tantoantiguas como modernas, peronadie ha sabido explicar hastaahora de dnde provena lainmensa sabidura del granmdico y vidente provenzal.

Abajo:varios de los cuartetos deNostradamus, segn algunosntrpretes, vaticinaban eladvenimiento de Juan Carlos Icomo rey de Espaa. Fontbruneasegura, adems, que se pondral frente de un ejrcito en guerraconlra los soviticos y los rabes(foto Salmer).

rlas. Nostradamus afirma haber lei.. .-...' -textos que haban sido ocultados iu:.r:. ,-glos. Contenan estos textos el secrelrr.i;--tivo de las Centurias?

La primera profeca comprobadaLa primera edicin de las Centurlas de Nostra-damus se public en Lyon en 1555. El libotuvo un xito relativo y, dos aos ms tarde.fue reeditado. En 1559, cuatro aos despusde su publicacin, se cumplira el primer vati-cinio de Nostradamus, que deca as:

El joven len dominar al viejo,En campo blico por duelo singular,En jaula de oro le reventar los ojos,Dos clases una, luego morir muerte cruel.

El 29 de junio de 1559 (o el 1 de julio, segnalgunos autores) en el transcurso de un torneoorganizado para festejar el matrimonio deMargarita, hermana del rey Enrique II deFrancia, con el duque Emmanuel-Filiberto deSaboya, el monarca result mortalmente heri-do por lalanza del joven conde de Montgome-ry, seor de Lorges, capitn de la Guardia Es-cocesa, doce aos menor que el rey. Comoescribi Nostradamus, el joven len domina-r al viejo: tanto en el escudo de armas deEnrique lI como en el de los Montgomery fi-guraba un len...

Segn las crnicas de la poca, al joven con-de se le rompi lalanza, y una astilla de stapenetr a travs de la calada del rey, clavndo-sele en el ojo. Es evidente que las coinciden-cias entre este cuarteto y el grave suceso del 29de junio son sorprendentes.

Otra de las profecas ms famosas de Nos-tradamus es la del destierro de Napolen a laisla de Santa Elena. El cuarteto en cuestindice as:

Sin pie ni mano, diente agudo y fuerte,Por globo al fuerte de puerto, y el primo-gnitoCerca del portal desleal transporteSileno reluce, pequeo grande conducido.

Segn la mayora de intrpretes, las palabrasque proporcionan la clave de este cuarteto sonpequeo grander, que, presumiblemente, serefieren a Napolen Bonaparte. pequeo porsu estatura fsica, pero grande por sus hechos yconquistas. Napolen es conducido; esto pa-rece extrao si pensamos que, generalmente,era l quien conduca. Se tratara, segn losautores de Nostradamus, astrlogo y profeta,de su destierro en el que fue conducido a la islade Santa Elena. Andreis y Salazar basan suinterpretacin en dos palabras: primognito ySileno.

Al negarle asilo, el responsable indirecto delexilio de Napolen fue el hijo primognito delrey Jorge IlI, por aquel entonces prncipe re-gente. La palabra Sileno se escribe en francsSilne, trmino fonticamente cercano a Hl-ne, Elena. Los dos autores mencionados inter-pretan que esto quiere decir que, mientras laluna brillaba (Selene, palabra fonticamentecasi idntica a Silne, era para los griegos laluna), Napolen fue confinado en Santa Elena(Hlne).

PROPHETIESDE M.MICHEL

NOSTRADAMV.*

A I,YON,Ch,2dc Bonhomme.

M. D. LV.La pcrmiGion cQ inGrrl Ia page ftiurnta

.rfl/EC PRIVTLEGE.que prepar a base de resina de ciprs y ex-tracto de ptalos de rosa.

Nostradamus haba conocido en Montpelliera Frangois Rabelais, el clebre autor de Panta-gruel y Garganta, hombre de amplia culturaque pasara a la posteridad como uno de loshumanistas ms insignes, pero cuyas activida-des como alquimista ocuparon una parte im-portante de su vida. En 1556, llamado por elrey, Nostradamus se desplaz al castillo deBlois para hacer los horscopos de la familiareal, y et 1564 recibi en su casa de Salon aCarlos IX, quien tambin le consult como as-trlogo. A pesar de que en ningn momentoFontbrune hable de Nostradamus como un as-trlogo, sino como de un historiador, no hayduda que la reputacin del gran vidente comointrprete de las estrellas fue extraordinaria.As lo asegura tambin Daniel Ruzo, quien, ensu obra ya citada, sostiene que Nostradamuscre su complicado sistema de claves con elobjeto de disfrazar una informacin sobre lacatstrofe apocalptica que os aguarda (Ruzola sita en el ao 3137), coincidente con el findel perodo zodacal de Piscis. i":

Una de las aplicaciones ms comunes de laastrologa era, en la poca, el diagnstico m-dico. Casi todos los galenos eran, al mismotiempo, mdicos y astrlogos; cuando no vi-van de sus sangras o sus elixires curativos, 1ohacan de sus horscopos. Es lcito, pues, pen-sar que Nostradamus fue tan buen mdico co-mo astrlogo. Sabemos que el vidente de Sa-lon-en-Provence tuvo, gracias a su bisabuelo,acceso a textos esotricos muy antiguos. Suprimer libro (pues adems de mdico y astr-logo Nostradamus fue un prolfico escritor) setitulaba La interpretacin de los jeroglficos deHorapolo, obra en la que el clebre simbolistafrancs Frdric du Portal basara su interpre-tacin de los smbolos egipcios. En la carta asu hijo Csar, publicada junto con las Centu-784

La historia de Espaa en profecasLeyendo con cierto detenimiento las Centuriasde Nostradamus hemos de admitir que su am-bigedad permite cualquier tipo de interpreta-cin. J. R. de Andreis, basndose en su propiaexperiencia como vidente, ha declarado:

Las profecas proceden de un plano o es-tado de conciencia en el cual las nocionesde espacio y tiempo no coinciden con lasque conocemos y utilizamos normalmenteen nuestra vida real. El vidente ve u oyesmbolos, no trminos de uso corriente, yuna de sus mayores diticultades consisteen traducirlos al idioma en el queescribe.

Amparndose en esta justificacin, Nostrada-mus, astrlogo y profeta interpreta varios cuar-tetos de las Centurias relacionndolos con di-versos aspectos de la reciente historia deEspaa.

Una de las interpretaciones ms destacadas,por su importancia y proximidad en el tiempo,es la que hace referencia al golpe de estado del23 de febrero de 1981. El texto dice as:

Un coronel mquina ambicinSe apoderar de la mayor armadaContra su prncipe se levantar,Y descubierto ser bajo su enramada.

El primer verso de este cuarteto alude al te-niente coronel Tejero, ejecutor (mquina) ycabeza visible de intento de golpe de estado.La mayor armada sera una alusin al gene-ral Armada, que tambin estaba implicado enel levantamiento, y el ltimo verso presagiacul sera el desenlace final del intento de gol-pe: Y descubierto ser bajo su enramada(encubierto por el ejrcito, ya que rame p:ue-de ser anagrama de arme, ejrcito).

Por su parte, el autor de Nostradamus histo-riador y profeta parece ms preocupado por eldestino de Europa que por el de Espaa. Se-gn 1, Durante dos aos, Europa ser ocu-

La ascensin, grandeza y cadade Napolen Bonaparte (estapintura de Gros le representa enla capitulacin de Madrid) fueron,al parecer, predichas porNostradamus. Concretamente, suconfinamiento en la isla de SantaElena apareca mencionado enuno de sus cuartetos (fotoBevilacqua/Salmer).

Nostradamus

pada por las tropas soviticas y sus aliados, losrabes... Ser un enorme Afganistn. La lti-ma batalla tendr lugar en los Pirineos espao-les. Un ejrcito compuesto por fuerzas arma-das espaolas y francesas ser dirigido porJuan Carlos I de Espaa y Enrique V deFrancia.

"

Oue no cunda el pnico!La humanidad actual est atravesando un pe-rodo de crisis y de inseguridad. La desapari-cin de los valores tradicionales y la grave si-tuacin econmica por la que pasan casi todaslas naciones occidentiles afectan forzosamentea un amplio sector del pblico, convirtindoloen el caldo de cultivo ms apropiado para quecundan el pnico, la desesperacin y la desi-lusin.

Estamos viviendo realmente el fin de la hu-manidad? Coincidir el final de nuestro siglocon el final de los tiempos del que nos hablantantas y tantas profecas, o se trata simplemen-te de un nuevo acceso de milenarismo queidentifica el ya prximo fin del siglo xx con eltemido Apocalipsis?

Nostradamus no parece ser de esta opinin,ni tampoco sus intrpretes. Daniel Ruzo sos-tiene que el cataclismo que se avecina

-dealcance planetario- representar slo uno delos jalones de la historia de la Tierra, de acuer-do con la cronologa de las cinco humanida-des por l elaborada: sta sera la quinta ca-tstrofe, que pondra fin a la quinta edad operodo csmico de la humanidad. Por su par-te, Andreis y Salazar prefieren hablar, msque del fin del mundo, del fin de un mundo,o

"el fin de una ilusin, apoyndose en las-tambin- casi profticas palabras del esote-rista Ren Gunon. Para ellos

Nuestro mundo se est desvaneciendo.Este desvanecimiento ser doloroso. san-griento incluso, pero es la nica esperan-za. la nica salida ante un impasse, wenigma vivencial que el hombre modernoes incapaz de resolver... Vamos a vivir noel fin del mundo>>, como nos dicen y repi-ten tantos pseudoprofetas, sino el fin deun mundor, un mundo caduco que se estautodestruyendo. . .Por su parte, el seor de Fontbrune, con la

tpica llaneza que caracteriza a los provincia-nos del sur de Francia. declara: Nostradamusno predijo el fin de la humanidad sobre la Tie-rra, simplemente predijo el fin de Europa, de1a civilizacin europea.

Tales afirmaciones han llegado a asustar ams de un periodista. Alguno le ha preguntadoal seor de Fontbrune: Ahora que usted esrico y famoso, qu har cuando llegue el findel mundo? No le da miedo?"

Pero el fin del mundo tantas veces predichono ha llegado an, pues, mal que nos pese, losprofetas tambin se equivocan. No olvidemosque quiz con cierta vanidad Fontbrune ha de-clarado: Mi interpretacin de Nostradamuses la nica autntica. Pero si es Nostrada-mus quien se ha equivocado, qu le vamosa hacer!,

785

El xrruchacho sin pasadoQuin era el joven aturdido y sin habla que fue halladoen Nremberg en 1828? De dnde vena? Cul habasido su vida hasta entonces? Elenigma de KasparHauser se mantiene vivo.

ffid(ffi

Kaspar Hauser, tal como aparecipor primera vez en las calles deNuremberg en mayo de 1828.Nadie le conoca ni saba dednde vena. Las dos cartas quellevaba parecan contener pstasacerca de sus orgenes, pero lasinvestgaciones subsiguientes nodieron resultados (foto BildarchivPreussischer Kulturbesitz).

NnpN.rsrnc, LA sEGUNDA cIUDAD del idlict =.-

tado alemn de Baviera, estaba en decaden;:,a comienzos del siglo xtx. El esplendor medie-val del tiempo de los Hohenzollern

-que ha-ban gobernado con mano de hierro desde sucastillo que dominaba la ciudad vieja- habadesaparecido. y el renacimiento que acarreanala revolucin industrial an no haba llegado.Nremberg era una aislada ciudad de provrn-cias y, sin embargo, durante cinco aos, fuepunto de mira de especulaciones para todaEuropa.

La causa fue un joven de unos 17 aos queapareci enlaplaza Unschlitt el26 de mayo de1828. Era lunes de Pentecosts y el da delAusflug anual: un da festivo. Un zapatero re-mendn que daba su paseo matutino observ aun muchacho que se mova vacilante en el cen-tro de la calle, se quejaba en voz baja y noparecia saber dnde se encontraba. Pensandoque poda estar enfermo, el zapafero se leacerc y le ofreci ayuda. La respuesta del mu-chacho fue ininteligible, pero aferraba un so-bre en la mano izquierda, y el zapalero vio queestaba dirigido al capitn del 4.o Escuadrn,6.o Regimiento de caballera". Intrigado. el za-patero llev a su nuevo amigo a casa del capi-tn, sostenindole cuando tropezaba y se tam-baleaba.

El capitn no estaba en casa. pero su sirvien-te les hizo pasar y les ofreci algo para comer.El zapatero y el sirviente observaron con cu-riosidad no disimulada cmo el muchacho de-voraba pan y beba agua, pero evitaba. como sile dieran asco, la carne y la cerveza, mientrasmiraba fijamente a su alrededor.

"Cuida de mi hiio,Cuando el capitn lleg a casa, su presenciaexcit al muchacho, que pareca encantadocon su uniforme y su espada y repeta las pala-bras Quiero ser soldado como padrerr, Nos y Caballo, caballor, que parecan consti-tuir todo su vocabulario. El sobre que llevabacontena dos cartas, ninguna de las cuales acla-r la situacin. Una era, supuestamente, de lamadre del muchacho; deca que haba nacidoel 30 de abril de 1812 y exhortaba al lector:"Cuida de mi hijo. Ha sido bautizado. Su pa-dre era soldado en el 6." de caballera. Laotra, al parecer era de un labrador a cuyasmanos haba sido entregado el nio en octubrede 1812, pero estaba escrita por la misma ma-no que la primera: afirmaba que el autor habasido castigado por Dios con 10 hijos y ya leresultaba imposible cuidar de ste. Contena laextraa informacin de que el chico haba sidocriado desde la infancia en un cuarto cerrado,sin ver ni or nada de su familia ni de1 mundoexterior.

El capitn interrog al muchacho pero. al norecibir respuestas inteligibles, termin por de-clarar que su visitante era

:1 o o un imbcil" y lo entreg a la policaJelrlo 3 un hudano. Pero la polica tampocolt sac ms que unas frases entrecortadas co-r]L-) respuesta a sus interrogatorios. Sin saberqu hacer, lo alojaron en una celda y lo ober-raron cuidadosamente. Pareca robusto, y un..cial de polica anot que tena un colormut sano; no pareca plido ni delicado. Lasplantas de sus pies y las palmas de sus manoseran blandas, y sus pies tenan ampollas quesangraban. Cuando lo encontraron, el mucha-cho llevaba un par de botas que estaban rotasen las costuras y reforzadas con herraduras yclavos. unos pantalones de montar muy gasta-dos. una chaqueta que pareca haber sido cor-tada de una levita y un sombrero. Ninguna deestas prendas suministraba pistas sobre suorigen.

El carcelero not pronto las caractersticasde la conducta de su prisionero:

Puede estar sentado durante horas sinmover un miembro. No anda por la celdani trata dq dormir. Se queda rgido y sen-tado, y no parece sentirse nada incmodo.Tambin prefiere la oscuridad a la luz y semueve en ella como un gato.

"Ni loco, nidbl mentalUn mdico que fue llamado para examinarlesugiri que la facilidad del joven para estarsentado inmvil durante horas se deba a unadistorsin en las articulaciones de las rodillas,causada por largos perodos sentado con laspiernas extendidas cuando era pequeo; esto,a su vez, explicaba su manera de andar insegu-ra. Pero el doctor afirm taxativamente: Estehombre no est loco ni es un dbil mental;aparentemente se le ha impedido por la fuer-za, de manera desastrosa, lograr un desarrollopersonal o social.

Finalmente, a alguien se le ocurri darle unlpizy un papel, con resultados sorprendentes.Cubri el papel con garabatos infantiles, de losque .slo emergieron tres palabras: Reiter (sol-dado de caballera) y 1o que pareca una firma:Kaspar Hauser. Inmediatamente se supusoque se era su nombre y, aunque al principiose negaba a responder a 1, as se le conocidesde entonces.

Kaspar Hauser se hizo famoso de la noche aIa maana en Nremberg. Nubes de curiososse reunan frente a su celda para verlo comer,dormir y defecar, sin que 1 pareciera incomo-darse. Uno de los policas le dio un caballito demadera para jugar, y pareca tan feliz con 1que le regalaron seis o siete ms. En contactocon un nmero abrumador de gente, Kasparempez a ampliar su vocabulario y, pocas se-manas ms tarde, pudo presentarse ante elburgomaestre Binder y los integrantes del con-sejo de la ciudad para explicar quin era. Elconsejo public el relato en forma de boletnoficial:

No sabe quin es ni de dnde viene, por-que no entr en el mundo hasta que llega Nremberg. Siempre vivi en un aguje-ro, donde se sentaba sobre paja, en el sue-1o; nunca oy un sonido ni vio una luz

Una vista de Nremberg aprincipios del siglo xtx.Fascinados e intrigados por elmisterioso Kaspar Hauser, losciudadanos adoptaron almuchacho y se lo confiaron alprofesor George Daumer, elmejor pedagogo de la ciudad (fotoBildarchiv PreussischerKulturbesitz).

La aparicin de Kaspar Hauser,que pareca llegar de ningunaparte, susct grandesespeculaciones en toda EuroPa, Ysurgieron abundantes rumoressobre sus orgenes. Una teoraafirmaba que era hiio ilegtimo deStephanie de Beauharnais, GranDuquesa de Baden (abajo), y quelo haban mantenido aislado Paraevitar un escndalo (fotoBildarchiv PreussischerKulturbesitz).

Kaspar Hauser

brillante. Despertaba, dorma y volva adespertar; cuando despertaba encontrabauna hogaza de pan y una jarra de aguajunto a 1. A veces el agua tena mal sabory volva a dormirse; cuando despertabatena puesta una camisa limpia. Nunca viola cara del hombre que vena. Tena doscaballos de madera y algunas cintas parajugar; nunca estuvo enfermo ni se sintidesgraciado en su agujero... Un da elhombre entr all y puso una tabla sobresus pies; haba algo blanco sobre la tabla,y el hombre hizo marcas negras sobre estocon un lpiz, que despus puso entre susdedos. El hombre hizo esto varias veces, ycuando se march, Kaspar imit lo quehaba hecho. Al final le ense a ponersede pie y a andar, y finalmente lo sac desu agujero. Kaspar no tena una idea clarade lo que sucedi despus hasta que seencontr en Nuremberg, con una carta enla mano.El boletn oficial transform a Kaspar en

una celebridad, y su fama sobrepas los confi-nes de Nremberg. Algunos dudaban de todo,crean que el muchacho era un bromista. Otrosargumentaban que, posiblemente, el hombreque 1o cuidaba iba enmascarado

-una idea

que, en alguna medida, se vio confirmada poracontecimientos posteriores-, y sealabanque Kaspar deba de padecer una singular faltade curiosidad, si no haba logrado ver ni unasola vez la cara de su guardin en los diecisisaos que estuvo encerrado.

El argumento que predominaba, no obstan-te, era que el muchacho era hijo ilegtimo deuna familia aristocrtica, que haba sido ocul-tado para impedir un escndalo, y liberadocuando los conspiradores estuvieron segurosde que no podra ser reconocido. Y, efectiva-mente, no lo fue; la polica efectu una ex-haustiva investigacin en Nremberg y sus al-rededores, intentando encontrar el

"agujerode Kaspar. No se descubri nada, y las pistasque lo vinculaban con el 6." Regimiento decaballera no llevaron a ninguna parte.

Orgullosas de su nuevo y cada vez ms re-

787

Kaspar Hauser

nombrado hurfano, las autoridades de N-remberg lo pusieron al cuidado del profesorGeorge Friedrich Daumer, un famoso pedago-go y filsofo. Para Daumer, Kaspar era unejemplo perfecto de nio.

t-fulaerssdE ln

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cin de los lectores: de la nochea la maana, Menitt se hizo c-lebre, y la lectura de sus librosdecidi la vocacin de numero-sos escritores de ciencia-ficcin.Su renombre no dej de acre-centarse hasta su muerte, y anms tarde.

A medio camino entre lo fan-tstico y la ciencia-ficcin, laobra de Merritt oscila continua-mente entre uno y otra, cayen-

E! arquelogode lo maravlloso

do a veces en lo maravilloso.Merritt descubri otro mundo,el de lo imaginario, y como unarquelogo de lo maravillosoemprendi pacientemente suexploracin. A pesar de que tra-bajaba en el American Weeklyseis das a la semana, desarro-ll, entre otras acvidades, unacarrera de escritor prestigioso.

Lo mismo que a Lovecraft,quien en su momento se con-gratul de ello, a Menitt le apa-sionaban las civilizaciones des-conocidas que en otro tiempopoblaron la Tierra. Por eso lamayora de sus novelas estnconstruidas sobre el mismo es-quema: en un lugar olvidado, elhroe descubre los vestigios deuna civilizacin, lo que da lugara incontables aventuras en las

A. MERRITTc-t Admiratio ns (Admiraciones)e. amoso escritor Jacques Ber-;er (autor de El retorno de los::ulos) confeccion la ficha des-;:rpva de Merritt uProfesin:incipal: periodista. Profesio-res secundarias: qumico org-:ico especializado en investiga-;tn biolgica; inventor, junto:on el profesor J. Weir-Mitchell,:e las drogas psicodlicas; ar-quelogo; novelista.,

Como vemos, Merritt parecehaber vivido varias vidas parale-las... pero su vida como escritorno es la menos importante.

Abraham Merritt naci enuna familia de religin cuquerael20 de enero de 1884 en Be-r,erley (Nueva Jersey, EstadosUnidos). Sigui cursos de dere-cho, pero tuvo que ponerse auabajar a la edad de diecinueveaos. Siendo reportero del Phi-ladelphia Inquirer asisti a unepisodio muy grave, segura-mente un asesinato poltico. pe-ro l se llev a la tumba su se-creto. Le enviaron al extranjerocon todos los gastos pagados.Fue a Amrica Central y a Mxi-co. Explor la ciudad maya deTulum, busc en Yucatn teso-ros que seran descubiertos pos-teriormente, y tras pasar por losritos de iniciacin se convirti enhermano de sangre de una tibuindgena.

Cuando hubo vuelto a Esta-dos Unidos fue nombrado re-dactor nocturno para las noti-cias locales: era un periodistaexcelente. Corresponsal de Mo-nill Goddard, redactor del Sun-day Supplement de la cadenade peridicos Hearst (que inspi-r la pelcula Ciudadano Kane,

de Orson Welles), en l9\2 fue aNueva York. Hizo toda su carre-ra en esa publicacin, que setransform en The AmeicanWeekly. A la muerte de God-dar, con quien haba colabora-do durante veinticinco aos, lle-g a ser su redactor jefe (7937\y sigui sindolo hasta que mu-ri fulminado por una crisis car-daca, en agosto de7943.

A Merritt le encantaba escri-bir, y escribi con toda libertad,sin ninguna preocupacin pecu-niaria. En efecto, como brazoderecho de Goddard estabamuy bien remunerado. Loprueba el hecho de que fuerapropietario de una segunda resi-dencia en la isla de Indian Rock,donde muri, en Florida; deuna granja experimental dondecultivaba aguacates, mangos ylichs, y de otra granja experi-mental donde plant los prime-ros olivos de Florida. Tambinposea un invernadero de plan-tas venenosas raras.

Al parecer, Merritt contabacon la bendicin de los dioses.Lo cierto es que prcticamentedesde el primer relato que pu-blic tuvo un gran xito: las car-tas de los lectores llovan exi-gindole una connuacin. Esemismo pblico sigui con fer-vor, casi con delirio, El abismode la luna, publicada por entre-gas en All-Story en 1919. Estefolletn hizo arder la imagina-

En la parte superior: AbrahamMerritt.

A la derecha: ilustracin de Borisoaa El rostro en el abismo.(editada en francs por la editorialJ'ai lu).

El erotismo y la exaltacin delpoder del Mal forman parte de lasmltlples facetas del talento delinspirador de lra Levin.

A la derecha: ilustracin deNicollet para Siete pasos haciaSafans (Nouvelles Ed itionsOswald); abajo: ilustracin deCaza para La nave de lshtar (J'ailu).

que suelen intervenir divinida-des inmemoriales. El abismo dela luna revela que bajo el Pacfi-co existen cavernas gigantescas,supervivencias del continenteMu. El hroe descubre al Ser dela Luz y a las sacerdotisas que seencargan de su culto.

El monstruo de metalnana eldescubrimiento de otra civiliza-cin subterrnea, pero esla vezse trata de seres metlicos. Mscercanos a lo maravilloso, unpoco a la manera de Arthur Ma-chen, E/ rostro en el abismo yLos habitantes del espejismo re-heren el descubrimiento de dossociedades misteriosas, una enlos Andes y otra en Mongolia.Quien haya ledo estas obras nopodr olvidar el pequeo pue-blo dorado, el kraken mons-tuoso, la hermosa y dulce Eva-lis, y Leif, por quien se peleands mujeres: Evalis y la brujamorena Lur.

Todas las novelas de Menittpresentan un constante enfren-tamiento entre la luz y las nie-blas, la lucha entre el bien y elmal. Esto no excluye la fascina-cin del mal, la magia de las ti-nieblas. Por ejemplo, en Sietepasos hacia Satans el explora-dor James Kirkham se enfrentacon el propio Satans, que co-lecciona las almas y labelleza",sin ocultar nunca su admiracinpor quien se presenta como eldueo del mundo. El juego delas siete marcas se convierte enuna gigantesca partida de aje-drez a escala planetaria.

Menitt abord tambin elerotismo en La nave de Ishtar,una novela donde un arquelo-go, por medios mgicos, resultatransportado 6 000 aos atrs.Se encuentra sobre el puente dela nave de Ishtar (la diosa delamor, llamada tambin Astarty Afrodita), frente a Sharane, lagran sacerdotisa, de belleza pa-gana y hechicera.

En sus ltimas obras Merrittabandon la ciencia-ficcin y loheroico-fantstico para escribirdos nove.las puramente fantsti-cas. Trabaj r;n tiempo en unanovela: La mujer zorro. No sa-sfecho con ella, la dej incon-clusa. Hannes Bok termin ypublic ese libro.

Arde, bruja arde tiene comotema la magia negra practicadaen el corazn de Nueva York,en 7932. La seora Mandilip,una sombra hechicera, anima amuecas diablicas y les ordenaque maten a sus vctimas conayuda de largas agujas. Como

haba hecho con Siete pasoshacia Satans, Hollywood seapoder de la novela paratransformarla en una pelcula:Las muecas del diablo.

Los lectores vieron recom-pensada su espera, porqueMenitt escribi la connuacinde Trepa, sombra, trepa. El re'cuerdo de la seora Mandilipimpregna las pginas de estanueva aventura, pero la verda-dera herona es la perturbadoraDahut, la doncella de Ys, reinade las sombras y del mito de Ys,la ciudad del Mal. Una vez msse enfrentan la)uz y las tinieblas,

presente: Alan Caranac se opo- : Ine a Dahut y a sus maleficios. 'ltanto en la moderna ciudad de .lNueva York como en Ys y enhe Ilas hileras megalticas de Car- , Inac. donde espera el inquietan- |te orecolector del Cairn,. I

Magia. brujera, sortilegios. 'Ierosmo... Dahut es la sacerdo- ' Itisa moderna det Mal eterno.

,lque siempre han praccado y . Ivenerado los pueblos de la

_lTierra. 1sta fue la ltima obra de I

Menitt, que en los nueve aos . 1que [e faltaban para morir no " r Jescribi nada ms, y se confor- ,t ,1m con revisar textos anguos. jEs verdad lo que se ha dicho de Il: dej de soar. Desde enton tlces. sus obras se han reimpreso lisin cesar, atrayendo una canti- lldad siempre creciente de lecto- . ,lres. En varios sondeos de opi- ]nin figur a la cabeza entre los i,^escritores preferidos por el p-blico, cuando ya haca muchotiempo que no haba publicadonada. Todos sus libros son otrastantas obras maestras. y cabe

.1

decir que invent la ciencia-fic- : rcin y lo fantstico en sus for- imas odernas. Desde Jack Wi- J Illiamson y Lovecraft hasta Ira ' ILevin, autor de La semilla del , Ediablo, su influencia ha sido ; Iconsiderable. i . ,

uArquelogo de lo marav!-lloso, Merritt no dej de espo-lear la imaginacin de los lecto-res fascinados por este otromundo donde se encuentran losmitos colecvos de la humani-dad. Merritt constuye un ejem-plo casi nico de autor vener.a-do y respetado desde el primerda... Merritt fue el udueo, delo maralloso. i

Crditos de ilustracin: J'ai lu-Boris,J'ai lu, J'ai lu-Caza, NO-Nicollet.

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